PRIMERA CONFERENCIA MINISTERIAL MUNDIAL SOBRE MODOS DE VIDA SANOS Y LUCHA CONTRA LAS ENFERMEDADES NO TRANSMISIBLES (Moscú, 28 y 29 de abril de 2011) INFORME DE POLÍTICAS ALIMENTACIÓN Y NUTRICIÓN Jueves 28 de abril de 2011 16:30:00-18:00 | Mesa redonda 2 Alimentación y nutrición (Sala Amur, Torre 2) Objetivo: - Llegar a un acuerdo común sobre el alcance para reducir el riesgo de enfermedades no transmisibles a través del fomento de una dieta saludable. - Ilustrar políticas y programas efectivos que aborden el tema de dieta y nutrición, y presentar intervenciones costoeficaces y oportunidades de inversión excelentes. Mensajes clave: - Los países de ingresos bajos y medios deben afrontar el desafío de la doble carga de la desnutrición y la obesidad. - Los Gobiernos deberían eliminar los ácidos grasos trans y reducir la sal en la producción industrial de alimentos, regular la comercialización de alimentos y bebidas no alcohólicas para niños y aumentar la disponibilidad de frutas y verduras. - Acelerar los avances en la reducción de las enfermedades no transmisibles relacionadas con la dieta requiere del liderazgo de las autoridades nacionales, compromiso político, mecanismos de gobernanza eficaces e integrales y estructuras e inversiones adecuadas. - Es necesaria la participación de varios interesados, y el seguimiento y la evaluación son esenciales. Se tratarán las cuestiones siguientes: - ¿Cuáles son las repercusiones del aumento en la disponibilidad y la asequibilidad de dietas malsanas para la política pública? - ¿Cuáles son las intervenciones prioritarias? Contexto A medida que los países luchan por salir de los problemas de la desnutrición, la población es presa de la industrialización de la cadena alimentaria que conduce a la obesidad. Las últimas estimaciones sugieren que 1.700 millones de personas tienen problemas de sobrepeso, de los que Página 1 de 6 500 millones son obesos. En el mundo, la cantidad de niños preescolares con sobrepeso y obesos 1 se estimaba en 2010 en los 43 millones. Esto se observa cada vez más entre las poblaciones más pobres en países que Para lograr una dieta sana, las personas atraviesan una transición en cuanto a deben: nutrición. Se prevé que entre 1990 y 2015, el - Lograr el equilibrio entre la ingesta sobrepeso entre lactantes y niños pequeños energética que proviene de los tendrá un crecimiento mucho más abrupto alimentos y el gasto de energía en las en los países de bajos y medianos ingresos actividades físicas. que en todos los demás países. Este - Limitar la ingesta energética de las fenómeno, al que algunos han dado en grasas totales, y cambiar de las grasas llamar «la transición nutricional», significa saturadas a las insaturadas. que aquellos sistemas sanitarios nacionales - Aumentar el consumo de frutas, ahora deben lidiar con el manejo de las legumbres, granos enteros y fruta enfermedades no transmisibles (ENT) seca y relacionadas con la dieta, al mismo tiempo - Limitar la ingesta de azúcares libres que continúan luchando contra la y sodio. desnutrición y las enfermedades transmisibles tradicionales. En 2010, cerca de Los gobiernos deberían: 171 millones de niños sufrieron retraso en su - Asegurar la reducción de sal, grasas crecimiento. Muchos de estos niños con saturadas y ácidos grasos trans en la retraso en su crecimiento y malnutrición elaboración de alimentos. crónica tienen madres obesas o con exceso de peso y tienen mayor tendencia a sufrir de - Promover la sensibilización sobre la obesidad en el futuro, Es necesario que los dieta saludable. programas de nutrición integrados se ocupen - Regular la comercialización de los de esta doble carga. alimentos y bebidas no alcohólicas para niños. Nuevas dimensiones - Considerar el uso de herramientas económicas y tributarias para La industrialización de la cadena alimentaria facilitar el consumo de alimentos ha cambiado la composición de la dieta, que saludables. ahora es mucho más energética. Los patrones de consumo de alimentos se están volviendo más similares en todo el mundo, con tendencia hacia los productos de más calidad y más costosos, tales como la carne y los lácteos. Los complejos de carbohidratos, como los almidones, han disminuido y los azúcares refinados aumentaron. El consumo de azúcares se multiplicó por cincuenta en los países industrializados y hasta un 15% de la ingesta de energéticos se recibe del azúcar refinado. La mayor parte de este azúcar está “oculto” en alimentos y bebidas procesados y no es agregado a la comida por el propio consumidor. En muchos países, el contenido graso de la dieta aumentó de un 20 a un 40%. Este aumento ha sido constante y particularmente rápido desde la década de los años 80 en los países de ingresos medianos y bajos. La ingesta de sal en la dieta actualmente es de 1 +2 desviaciones estándar o más sobre la media de los estándares de la OMS. Página 2 de 6 9 a 12 gramos diarios. El consumo de carnes y lácteos ha crecido en los países en desarrollo. Por otra parte, la producción de frutas y verduras no ha crecido lo suficiente, especialmente en África. A pesar de algún impacto positivo en la nutrición, estos cambios son responsables del aumento del riesgo de las enfermedades no transmisibles. Nuevos avances En respuesta a los desafíos mundiales en nutrición, la 63.ª Asamblea Mundial de la Salud solicitó a la OMS que desarrollara un plan integral de implementación sobre la nutrición materna, del lactante y del niño pequeño, que impulse la implementación de políticas y programas de alimentación y nutrición en todo el mundo. Para contrarrestar la extensa publicidad y otras formas de comercialización de alimentos para los niños, la 63.ª Asamblea Mundial de la Salud aprobó un conjunto de recomendaciones sobre la comercialización de alimentos y bebidas no alcohólicas para niños. El documento exhorta a la acción nacional e internacional para reducir el impacto sobre los niños de la comercialización de alimentos con alto contenido de grasas saturadas, ácidos grasos trans, azúcares libres y sal. Nuevas pruebas El provecho máximo del enfoque de toda una vida hacia el mejoramiento de la nutrición se logrará por medio de intervenciones dirigidas a las etapas tempranas de vida, así como de acciones hacia niños mayores y adolescentes. Existen pruebas de que la mala nutrición durante el embarazo y los primeros días de vida aumenta la predisposición hacia las enfermedades no transmisibles en el futuro. Para mejorar la alimentación de lactantes y niños pequeños se requiere una combinación de estrategias que incluyan protección de la maternidad en el ámbito laboral, mejoras en las prácticas de la familia y la comunidad y acciones en los sistemas de salud, tales como implementar la iniciativa “Hospitales amigos del niño” y mejorar la capacitación en los trabajadores de la salud. Existen soluciones eficaces y viables para encarar el riesgo alimentario. Hay pruebas suficientes que demuestran que la reducción de sal es una excelente opción para la prevención de las ENT. Se ha estimado que si se reduce la ingesta de sal a los niveles recomendados, se podría evitar potencialmente hasta dos millones y medio de muertes causadas por ataques cardiacos y accidentes vasculares cerebrales anuales en todo el mundo. Cinco países (Finlandia, Francia, Irlanda, Japón y el Reino Unido) han obtenido resultados mensurables positivos. La sustitución de los ácidos grasos trans por grasas no saturadas en la dieta puede reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares de forma inmediata. Los enfoques gubernamentales han incluido reglamentación obligatoria para las normas alimentarias, recomendaciones nutricionales, aumentar la sensibilización acerca de los efectos negativos de los ácidos grasos trans a través de alegaciones nutricionales y de salud, el etiquetado por voluntad propia u obligatorio de los contenidos de ácidos grasos trans en los alimentos y una reformulación voluntaria por parte de la industria. Las prohibiciones son las acciones más eficaces. La reducción en el mercado de alimentos y bebidas no alcohólicas para niños, con altos contenidos sódicos, grasos y de azúcar también es una medida costoeficaz para disminuir las ENT. La publicidad televisiva se asocia con un mayor consumo de refrigerios y bebidas con alto Página 3 de 6 contenido de azúcar, consumo de alimentos poco nutritivos y mayor ingesta calórica. Un estudio reciente demostró que desde 2003, veinte países han desarrollado o están desarrollando políticas que incluyen resoluciones legales, directrices oficiales o formas aprobadas de autorregulación. En Fiji y en varios países del Pacífico Occidental, ante la presión de un aumento drástico de la obesidad y de las enfermedades no transmisibles relacionadas con la dieta, se tomaron medidas tributarias con respecto a los alimentos y bebidas, medidas relativas a las regulaciones de la importación y se realizaron restricciones en cuanto al uso de ingredientes de bajo valor nutricional. Para promover el consumo de alimentos que conduzcan a una dieta apropiada, otros países también han explorado la disminución de la carga tributaria, los subsidios de precios y los incentivos a la producción. Las estrategias de comunicación e información son esenciales para las campañas de promoción de las dietas saludables. También es necesaria una información nutricional adecuada, por medio del etiquetado de los productos, para que los consumidores puedan hacer la correcta elección de sus alimentos. Mejorar la oferta de alimentos en la escuela, en combinación con actividades educativas, puede modificar positivamente los hábitos alimentarios de los jóvenes. De modo similar, las intervenciones en los lugares de trabajo pueden afectar el peso corporal y el riesgo cardiovascular. El asesoramiento coherente y profesional por parte de profesionales de atención primaria sobre la dieta y el estilo de vida puede influir en las elecciones individuales. Hay pruebas que sugieren que las estrategias de intervención multidisciplinarias tienen el potencial de obtener mayores beneficios sanitarios que las intervenciones individuales, y con frecuencia con mayor costoeficacia, y que una combinación de acciones a nivel nacional y local en diferentes sectores propicia la implementación de políticas sobre alimentación y nutrición. Escala necesaria A pesar de que la mayoría de los Estados miembros tienen políticas y programas nutricionales, no siempre los han adoptado oficialmente, no abarcan integralmente todos los desafíos nutricionales o no articulan planes operativos y programas de trabajo. No se reconoce el desafío de la doble carga de la malnutrición y el sobrepeso en muchos países de ingresos medianos y bajos, a pesar del aumento abrupto en las tasas de sobrepeso infantil. El trabajo en red de los Estados miembros y otros actores clave en las iniciativas mundiales podría facilitar la implementación de acciones prioritarias, compartiendo la información y utilizando los recursos conjuntamente. Acelerar avances Acelerar los avances para reducir el riesgo de las ENT relacionadas con la dieta requiere del liderazgo de las autoridades nacionales, lo que comienza con compromiso político, mecanismos de gobernanza eficientes e integrales, una sólida infraestructura sanitaria y una inversión adecuada. Se necesitan medidas a nivel nacional y local, con el compromiso de diversas partes interesadas, y que incluyan evaluación de las necesidades, planificación adecuada, el establecimiento de buenos sistemas de seguimiento y que se aseguren las movilizaciones sociales Página 4 de 6 en apoyo de políticas y programas. Mayor eficacia se logra con implementaciones contundentes y sostenidas a nivel nacional y de la comunidad. Unión en torno a una agenda común Una combinación de medidas relativas al abastecimiento de alimentos y la información sobre alimentos para la población, a través de la participación de diversos sectores que incluyan el de la salud, la agricultura, el comercio, la educación y la asistencia social. Tales acciones de política son las que se recomiendan en la Estrategia Mundial OMS sobre Régimen Alimentario, Actividad Física y Salud, y en la Estrategia de Alimentación del Lactante y del Niño Pequeño. Las acciones incluyen medidas legislativas y otras, para facilitar la alimentación con leche materna de lactantes, entornos de nutrición saludable en las escuelas, la reducción de sal, los ácidos grasos trans, los ácidos grasos saturados y el azúcar en los alimentos procesados, la provisión de alimentos saludables en las instituciones públicas; medidas económicas que promuevan las opciones de alimentación saludable y desalienten las menos saludables, la provisión de información precisa y equilibrada para los consumidores, las restricciones en la comercialización de alimentos y bebidas no alcohólicas para niños, y la provisión de información y asesoramiento nutricional en la atención de la salud primaria y secundaria. Foco de atención de las partes Para la implementación de políticas de alimentación y nutrición se necesita el compromiso de todo el gobierno. El sector agrícola puede asegurar que la producción primaria, el procesamiento de los alimentos, la distribución y la venta minorista tenga en cuenta los objetivos de sanidad. Las autoridades de protección al consumidor pueden asegurar que se brinde la información adecuada a los consumidores. La educación puede asegurar que las escuelas sean orientadoras en cuanto a las preferencias y el consumo de alimentos, hacia lo saludable. La planificación urbana puede dar realce al acceso a la alimentación saludable y segura. El sector laboral puede permitir las licencias por maternidad y paternidad adecuadas, las pausas para amamantar y la flexibilidad para apoyar a las madres que trabajan durante la lactancia. La política social podría considerar como beneficio social la implementación de la seguridad alimentaria para los grupos vulnerables de la población. Las organizaciones de sensibilización frente a las ENT y de consumidores podrían ayudar a desarrollar una visión que conduzca el cambio y a realizar un seguimiento de la implementación de los compromisos contraídos por el sector público y por el sector privado. Los operadores de la alimentación pueden mejorar la disponibilidad de productos alimenticios saludables, incluidas las frutas y las verduras, los productos con menores niveles de grasas saturadas, azúcares agregados y sales. Los medios de comunicación pueden apoyar la sensibilización y promover campañas sobre la nutrición y la seguridad en la alimentación; los anunciantes y comerciantes deberían cumplir con las recomendaciones relativas a la comercialización de alimentos y bebidas no alcohólicas para niños. Página 5 de 6 Reconocimientos Este informe de políticas no representa la posición oficial de la Organización Mundial de la Salud. Es una herramienta para explorar las visiones de las partes interesadas en el tema en cuestión. Las referencias a socios internacionales son meras sugerencias y no constituyen ni implican refrendo alguno de este informe de políticas. La Organización Mundial de la Salud no garantiza que la información contenida en este informe de políticas sea completa ni correcta y no será responsable de los perjuicios en que se incurra como resultado de su utilización. Las denominaciones empleadas en la presentación del material de este informe de políticas no implica la expresión de ninguna opinión por parte de la Organización Mundial de la Salud en lo relativo a la situación legal de ningún país, territorio, ciudad o área, ni de sus autoridades, ni en lo concerniente a la delimitación de sus fronteras o límites territoriales. Las líneas punteadas en los mapas representan las líneas divisorias aproximadas, por lo que puede que allí no exista coincidencia total. La mención de empresas específicas o de ciertos productos de fabricantes no implica que la Organización Mundial de la Salud los apruebe o recomiende, dándoles preferencia ante otros de naturaleza similar que no se mencionan. Excepción hecha de errores y omisiones, los nombres de los productos de marca se distinguen por la mayúscula inicial. La Organización Mundial de la Salud ha tomado todas las precauciones razonables para verificar la información contenida en este resumen de políticas. No obstante, este informe de políticas se distribuye sin ningún tipo de garantías, ni expresas, ni explícitas. La responsabilidad sobre la interpretación y el uso de la presentación reside en el lector. La Organización Mundial de la Salud no será responsable en ninguna circunstancia por los perjuicios que surjan de su utilización. A menos que se especifique lo contrario, la información contenida en el presente documento para el debate está basado en la actualización de 2004 sobre la “Carga Mundial de Morbilidad”. Hay más información disponible en http://www.who.int/research/es/index.html. © Organización Mundial de la Salud, 2011. Todos los derechos reservados. El aviso sobre derechos de autor de aplicación es el siguiente: http://www.who.int/about/copyright/es/index.html Página 6 de 6