RECEPTORES LEUCOCITARIOS PARA INMUNOGLOBULINAS Los receptores de la superficie celular para la porción Fc de las moléculas de Ig pertenecen a dos clases generales: específicos y no específicos. Los receptores no específicos incluyen las moléculas CD23 similares a lectina y la galectina 3 que se une a IgE; se desconoce la función de estas moléculas y no se comentarán de forma más amplia. Los receptores específicos incluyen los transportadores de Ig a través de epitelios, tales como el componente secretor (también llamado receptor de poliinmunoglobulina) y el receptor «neonatal» de Fc (FcRN) que se describen en el texto. Aquí se comentarán los recepto-res Fc específicos de los leucocitos que median las respuestas, funcionales y que se denominan FcγRI, FcγRII, FcγRIII, FCεRI y FcαR. Todos estos receptores tienen una sola cadena polipeptídica de unión a Fc que está plegada en dos o tres motivos de Ig. Muchos de estos receptores contienen cadenas polipeptídicas adicionales implicadas en la transducción de la señal. La subunidad de unión a la Ig de los FcγRI (CD64) es una proteína de 40 kD que se une a la IgGl e IgG3 humanas con la suficiente afinidad (Kd de 10-8 a 10-9 M) para permitir su ocupación por la IgG monomérica a concentraciones fisiol.- gicas de anticuerpo. Las interacciones con otros subtipos de IgG (IgG2 e IgG4) son mucho más débiles. (En los ratones, las interacciones de alta afinidad implican a IgG2a e IgG2b.) La región amino terminal extracelular del receptor polipeptí-. dico se pliega, en tres dominios en tándem similares a las Ig. La expresión de FcγRI depende de la asociación de la subunidad de unión de la Ig con un complejo disulfídico homodimé-rico de señalización, que inicialmente se identificó con las cadenas y de un receptor Fc diferente llamado FcεRI (véase más adelante); el polipéptido se denomina actualmente cade- na γ del FcR. La cadena γ del FcR es un polipéptido de 7 kD con un extremo amino terminal extracelular corto, una secuencia transmembrana y un extremo carboxi terminal intra-celular grande. Como se expone en el Capítulo 7, la cadena γ del FcR es estructuralmente homóloga a los componentes de la señal (cadenas ζ ) del complejo receptor de las células T (TCR). Tanto la cadena γ del FcR como las cadenas ζ del TCR contienen regiones específicas de señalización llamadas motivos del inmunoreceptor activados vía tirosina (ITAM, del inglés inmunoreceptor tyrosine activation motifs), que se emparejan con un receptor inducido y se agrupan con tirosina quinasas que no forman parte del receptor. El complejo FcyRI se expresa en los macrófagos activados, pero no en los monocitos en reposo; la transcripción del gen de FcyRI es regulada por la citoquina activadora de macrófagos llamada interferón-γ (IFNγ). Tanto los seres humanos como los ratones expresan dos tipos diferentes de receptores de baja afinidad para IgG, llamados FcγRII y FcγRIII. El FcγRII (CD32) es un polipéptido de 30 kD cuya gran región amino terminal extracelular se pliega en dos dominios Ig en tándem. El FcγRII se une a ciertos subtipos de IgG humana (IgGl e IgG3) con la suficiente baja afinidad (Kd de 10-6 M) para que las moléculas de IgG monoméricas sean incapaces de unirse a este receptor a las concentraciones fisiológicas del anticuerpo. Como consecuencia, la unión de la Ig al FcRII está muy restringida a los complejos inmunitarios, o a los microorganismos recubiertos (opsonizados) por IgG, o a las células que muestran agregados de regiones Fe. En los seres humanos existen tres genes diferentes que codifican las moléculas de FcγRII (llamados A, B y C), y cada gen codifica proteínas con variaciones estruc- turales a partir del procesamiento del RNA mensajero (p. ej., procesamiento alternativo). El FcγRIIA es expresado por las células fagocíticas (neutrófilos y fagocitos mononucleares) y probablemente participa en el proceso de fagocitosis. El FcγRIIA también es expresado por ciertos endotelios vasculares y otros tipos de células sin que se conozca su función, pero podría desempeñar un papel importante en la unión de otras moléculas que no sean Ig, como, por ejemplo, lipoproteinas. El extremo carboxi terminal de los FcRIlA y C contienen ITAM y, tras ser agrupadas por IgGl y/o partículas o células recubiertas por IgG3, pueden servir de señal para la activación de los fagocitos. El FcγRIIB es expresado exclusivamente por los linfocitos, especialmente por células B. El extremo carboxi terminal intracelular de esta isoforma contiene una Secuencia corta de aminoácidos que puede liberar señales inhibitorias que contrarresten las señales positivas liberadas por los linfocitos B mediante la agrupación de las Ig de membrana. Así, la agrupación de los FcγRIIB, inducida por la ocupación con IgGl o IgG3 polivalentes, puede interrumpir la síntesis de inmunoglobulinas (véase Capítulo 9). Los ratones con déficit génico selectivo de FcγRII en las células B pueden desarrollar fenómenos de autoinmunidad (véase Capítulo 20). FcγRIII (CD16) es similar al FcγRIl en tamaño, estructura y afinidad por la IgG. En los seres humanos esta molécula está codificada por dos genes separados. La isoforma FcγRIIIA, producto del gen A, es una proteína transmembrana convencional expresada ampliamente por las células NK. Esta forma de la molécula se asocia, como el FcγRI, a homodímeros de la cadena y del FcR o a heterodímeros compuestos por la cadena y del FcR y la cadena ζ del complejo TCR, Esta asociación es necesaria para la expresión en la superficie celular y, a través de los ITAM de estas cadenas de señalización, pueden liberar señales activadoras intracelulares. La agrupación de los receptores mediante la ocupación con IgGl o IgG3 unidas a la superficie de una célula diana, activa las células NK para eliminar esta célula (véase Capítulo 13), mediando de esta manera en la citotoxicidad mediada por células dependiente de anticuerpos. La isoforma FcγRIIIB, producto del gen B, es una proteína ligada a fosfatidilinositol (PI) ampliamente expresada por los neutrófilos. Es posible que participe en la fagocitosis o en la activación de neutrófilos. Se ha observado que la agrupación de las proteínas ligadas a PI provoca la activación de ciertas tirosina quinasas no pertenecientes al receptor en una variedad de células, pero no se conocen las señales precisas activadas. La subunidad de FcεRI que se une a IgE es una proteína de 25 kD cuyo extremo amino terminal extracelular se, pliega en dos dominios en tándem similares a las Ig. Esta proteína es el producto de un solo gen y su afinidad es tan alta (Kd de 10-10 M) que se une a moléculas de IgE incluso a concentraciones fisiológicas muy bajas de este isotipo de anticuerpo. El complejo receptor en conjunto implica, además de la cadena α de unión a la IgE, una cadena β de 27 kD y dos cadenas y de FcR. La cadena β cruza la membrana plasmática cuatro veces; sus dos extremos carboxi terminal y amino terminal son intracelulares y el carboxi terminal contiene un ITAM. FcεRI es expresado constitutivamente por los mastocitos y basófilos, donde, en asociación con la IgE unida, sirve como receptor antigénico para iniciar la activación antígeno específica. La interleuquina-5 puede inducir la expresión de FCεRI en los eosinófilos. Una vez inducido; puede mediar la ADCC dirigida por IgE (véase Capítulo 14). El FcαR (CD89), el miembro más recientemente descrito de la familia FcR, es codificado por un solo gen en el ser humano. El polipéptido de unión a IgA es una proteína central de 30 kD que puede estar ampliamente glucosilada. La cadena de unión a IgA del FcαR forma dos dominios de Ig externos y se coexpresa con dos cadenas γ de señalización de FcR. FcαR es expresado por neutrófilos, monocitos y eosinófilos, en los que es posible que medie la ADCC dirigida por IgA. Como se ha dicho anteriormente, FcγRI, FcγRIIIA, FcεRI y FcαR dependen cada uno de la asociación con un complejo homodimérico (o heterodimérico) que implica a la cadena γ del FcR para su expresión y señalización. El,bloqueo de este polipéptido en ratones produce la falta de expresión de todas estas moléculas. Estos animales tienen dañada su capacidad para organizar reacciones inflamatorias en respuesta a los inmunocomplejos, lo que establece el papel de los receptores Fc como importantes mediadores de la función leucocitar