Informe de la situación productiva: Área de influencia

Nº 51, Abril de 2016
Informe de la situación productiva: Área de influencia
INTA AER San Francisco
Ings. Agrs. Centeno, A.; Cortés, E. y Gasparetti, G.
Las principales producciones agropecuarias del departamento San Justo (Córdoba) son: la soja y
la leche. Los cambios en el escenario económico afectaron negativamente al tambo pero a la
agricultura, la benefició. Ahora, las contingencias climáticas, están afectando negativamente a ambas
producciones.
De acuerdo a nuestras estimaciones, el aporte de la actual campaña de soja sumada al ingreso
generado por la producción de leche estaría, en conjunto, cerca de 700 millones de dólares. En el actual
contexto y en virtud de las importantes pérdidas que se están produciendo tanto a nivel de los tambos
como de la soja (aún no cosechada), se estima que, finalmente, el ingreso podría llegar a reducirse
drásticamente a la mitad.
Esta situación generaría un importante quebranto, primero a nivel del productor y luego, se
trasladaría a toda la cadena comercial (proveedora de servicios e insumos) e industrial de la zona,
poniendo en jaque a un gran número de puestos de trabajo vinculados directa e indirectamente al
sector. Esto afectará a todo el entramado productivo, social y comercial del Territorio y, por ende, al
motor de sus economías regionales.
El impacto de las medidas económicas y de las lluvias sobre el tambo
Los últimos acontecimientos económicos ocurridos (caída del precio de la leche al productor en
un 30 %, eliminación de retenciones al maíz, reducción de las mismas a la soja y por último la liberación
del dólar), están provocando un contexto muy perjudicial para el sector.
En un trabajo publicado recientemente, Centeno et al. (2016), presentaron resultados que
muestran cómo este nuevo escenario impactó sobre el tambo, destacándose lo siguiente:
• Debido a la caída en el precio de la leche, el ingreso de la empresa se redujo en un 25 %.
• El costo de los alimentos producidos (alfalfa y silo de maíz) estimado a precios corrientes aumentó un
35 %, mientras que el precio de los alimentos comprados (maíz grano y expeler de soja) lo hizo en el
orden del 90 % en el mismo periodo.
• El costo de la alimentación estimado a precios corrientes creció un 70 % entre diciembre de 2014 y
diciembre de 2015.
• El margen restante, luego de descontar el gasto de alimentación de la empresa, se redujo en un 34,6
% para el periodo analizado.
Las consecuencias de este cambio de escenario impactan en diferente medida de acuerdo a las
características productivas de cada empresa tambera. La diversificación productiva juega un rol
fundamental en este proceso.
Hasta aquí y haciendo un cálculo rápido, en el departamento San Justo de la provincia de
Córdoba, con cerca de 1500 tambos y con una producción de aproximada de 3,5 millones de litros de
leche por día, dejaron de ingresar a la región (desde agosto de 2015) alrededor de 520 millones de
pesos.
Las abundantes lluvias de Febrero (en varias localidades superaron los 300 mm mensuales y, en
algunos casos extremos, llegaron a los casi 600 mm como en Sastre, Santa Fe), sumadas a los casi 18
días de temporal de Abril, con valores de entre 150 a 350 mm, han “sumergido” a casi toda la cuenca
lechera de San Justo, afectando seriamente la producción. Esto hace suponer que el grado de afectación
en las diferentes zonas, estará en función del milimetraje caído.
De acuerdo a información recabada entre diferentes referentes y colaboradores del INTA AER
San Francisco, podemos hacer los siguientes comentarios:
 En términos generales, la recepción de leche por parte de la industria tuvo una reducción, que en
promedio, estaría comprendida entre el 30 al 40 % (en igual periodo del año anterior).
 Existe anegamiento de campos, tanto en los agrícolas como en los
destinados a la producción de leche en proporciones variables según
zonas. No escapa a este problema prácticamente ninguna localidad
del departamento San Justo.
 También, como consecuencia del temporal, hay un fuerte deterioro
en el estado corporal, sanitario y reproductivo de los animales
debido a las restricciones alimentarias, al barro que no les permite
echarse (Foto 1), a los problemas de patas, a la mayor incidencia de
mastitis y de enfermedades reproductivas. Además, se debe
consignar, que se han registrado muertes de animales.
Foto 1: Ternero rescatado del barro
Todo este panorama negativo se ve reflejado en una drástica caída de producción diaria, lo cual
complica aún más la situación pues, en un momento de bajos precios, facturar menos es ruinoso. Existe
una población de tambos (todavía no precisada) donde los niveles de afectación por anegamiento de
superficie llegan a valores cercanos del 100 % y están en estos momentos solicitando ayuda para
reubicar la hacienda en campos más altos. En varios lugares, la producción no ha podido retirarse y
debió ser tirada. Esto se debe a que, en muchos lugares, no se
han hecho mantenimiento de caminos y canales, lo que ha
imposibilitado el acceso de camiones para retirar la producción.
Pero también, productores debieron tirar la leche porque se les
descompuso por desperfectos técnicos de los equipos de frío
debido a la tormenta.
Foto 2: Camión de la leche enterrado
El anegamiento de lotes hizo que se perdieron las alfalfas y los pocos verdeos que se pudieron
haber implantado. Eso es un golpe muy duro a la estrategia de producir leche “más pastoril” para
compensar los altos precios de los concentrados. Ahora el productor se ve obligado a mantener los
animales con silo, rollos y concentrados ante la ausencia del pasto por varios meses.
Desde el punto de vista financiero, las empresas registrarán un menor ingreso por la baja de la
producción debida a la contingencia climática pero deberán afrontar el pago de las reservas de forraje
(silajes de planta entera de maíz y/o sorgo) y los insumos utilizados en la siembra de verdeos de invierno
y pasturas. Esto servirá para complementar la dieta de las vacas lecheras en los próximos meses.
Otra consecuencia nefasta del temporal es la pérdida de lotes de soja que, en muchos casos, son
de productores lecheros que tenían la esperanza de cosecharlos para cubrir las pérdidas que les originó
el tambo en este año de precios bajos, para canjear la soja por maíz o por expeller de soja para
alimentación.
La agricultura en la zona, otra vez afectada.
La situación de la agricultura en la Región también es muy preocupante. Se estima que a la fecha
no se cosechó más allá del 25% de la superficie de soja (datos de la zona de influencia de la Agencia de
Extensión del INTA San Francisco), que, en condiciones normales, a esta altura del año, ya estaría
cosechado cerca del 90 % de la superficie. Mientras que del total del maíz, resta una parte muy pequeña
de maíces de siembra de primera y la totalidad de los maíces de segunda o tardíos para cosechar.
Un gran porcentaje de esos lotes permanecen con
agua en superficie y los que no, presentan falta de piso. La
situación de desmejoramiento de los cultivos obligará a
cosecharlos con esta situación, con el consecuente “pisoteo”
(Foto 3). Esto obligará a trabajarlos mecánicamente,
incrementando los costos por hectárea de la próxima
campaña.
Foto 3: Soja sin cosechar brotada
Foto 3: Pisoteo producido por la falta de piso
Por la información que disponemos, en lotes de soja cosechados
antes de la lluvia del último fin de semana (17-04-16), se estimó que los
rendimientos sufrieron una merma entre el 30 y 40%. Pero lo más
preocupante es la calidad de la mercadería obtenida. Por los datos
analizados, se determinó un 70% de granos dañados (brotados, podridos,
manchados, etc) (Foto 4), situación que afecta fuertemente la calidad del
producto y el precio que se obtendrá por el mismo. Situación que deberá
considerarse previamente para decidir la cosecha del lote, ya que entre el
costo de la cosecha y los fletes, es muy probable que se tendrá que
desembolsar más dinero.
Foto 4: Soja sin cosechar brotada
En cuanto a la condición de entrega para la soja, los niveles
de tolerancia (Foto 5) respecto de granos dañados son de 5%, el cual
podría elevarse a 8 %, según los casos, sin tener descuentos en la
liquidación. Algunas empresas están analizando la posibilidad de
elevar la tolerancia al 30% con el descuento correspondiente como
límite máximo (no confirmado por el momento). Esto hará que se
tenga mucho cuidado con quién comercializar la producción.
Foto 5: Soja con el 70 % de grano afectado
Comentario final
La situación es grave. Está generando problemas económicos pero también anímicos, en el
productor y su entorno. Los productores dejan de invertir, compran lo mínimo e indispensable y
empiezan a estirar los plazos de pago. Por otro lado, los comerciantes comienzan a sentir el peso de los
gastos fijos, como consecuencia de los menores ingresos, debido a la reducción en las ventas y a la
demora en la cobranza. Esta situación se extenderá a todo el sector comercial del Territorio, no
solamente a los vinculados a la actividad agropecuaria.
Creemos que las autoridades de todos niveles (Comunas, Municipios, Provincia y Nación) más
los representantes legislativos (legisladores, senadores y diputados provinciales y nacionales) deberían
estar preocupados y ocupados en arbitrar las medidas necesarias para sostener esta actividad. Ya no es
más un problema sectorial sino una tema que involucra a todo el País.
Para más información
Ing. Agr. Alejandro Centeno. Jefe de INTA AER San Francisco. Email: [email protected]
Ing. Agr. Eduardo Cortes. Profesional de INTA AER San Francisco. Email: [email protected]
Ing. Agr. Graciela Gasparetti. Profesional de INTA AER San Francisco. Email: [email protected]
Informe realizado dentro del marco de los proyectos: Proyecto Regional con Enfoque Territorial, Centro-este.
EEA INTA Manfredi y Proyecto Específico: Sustentabilidad de los Sistemas de Producción de Leche.
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