Título: ELECCIONES GENERALES DE 2015: LA GRAN TRANSFORMACIÓN Prof. Dra. Carolina Bescansa Hernández. Universidad Complutense de Madrid. email: [email protected] Congreso de los Diputados, ampliación I, 4ª planta. Carrera de San Gerónimo s/n Madrid Tlfno: 00 34 630 313 927 Resumen: Las elecciones generales del pasado 20 de Diciembre de 2015 arrojaron la tasa de volatilidad electoral registrada más alta de nuestra historia desde las elecciones generales de 1982. Como mínimo, más de ocho millones de electores modificaron su comportamiento electoral en relación a las elecciones generales de 2011. Los viejos partidos sobre los que se construyó el sistema de partidos nacido de la transición obtuvieron los peores resultados de su historia y la XI legislatura ha nacido marcada por la llegada al Congreso de Podemos y sus confluencias con 69 diputados y Ciudadanos con 40. Esta ponencia analiza la gran transformación ocurrida en el comportamiento electoral de los y las españolas desde el análisis de las encuestas pre y post electorales elaboradas por el CIS, así como a partir de dos encuestas preelectorales elaboradas por Podemos en el marco previo a las elecciones del 20D. Como en todos los momentos de profundo cambio histórico, la compresión de lo ocurrido en el plano electoral no puede hacerse sin tener en cuenta el análisis del contexto de crisis social, económica e institucional que ha caracterizado las últimos ocho años de la vida política de nuestro país y, muy especialmente, el periodo comprendido desde el rescate a España en 2012 y la fecha de la celebración de los comicios objeto de análisis. En este sentido, esta ponencia prestará especial atención al análisis del desarrollo del marco de la precampaña y la campaña y la dimensión económica, social, política e institucional de la crisis global del régimen. Palabras clave: elecciones generales 2015, cambio político, Podemos, España. 1 EL CONTEXTO DE LAS ELECCIONES GENERALES DE 2015 La crisis financiera mundial de 2008 desató en la economía y la sociedad españolas un proceso acelerado de cambio todavía inconcluso, del que las elecciones del 20D forman parte. Primero, la restricción del crédito en el ámbito financiero desencadenó el estallido de la burbuja inmobiliaria, entendida como proceso de crecimiento económico especulativo alimentado desde las grandes entidades financieras del centro de la economía mundo. Los grandes bancos alemanes y holandeses, animados por un BCE empeñado en reducir a mínimos históricos el precio del dinero, abrieron líneas de crédito hacia las entidades financieras españolas públicas y privadas, desencadenando una crisis parcialmente similar a la de los bancos norteamericanos en términos de toxicidad de sus activos, pero radicalmente distinta en términos de alcance y vinculación con la corrupción política. Después, tras la primera restricción del crédito, la cascada de efectos se llevó por delante el sector de la construcción, en particular, y el sector inmobiliario español en general. Las consecuencias no se hicieron esperar: la tasa de paro se disparó, la inmigración comenzó a decaer y la desigualdad social inició una escalada que nos ha llevado, en 2015, a convertirnos en el segundo país más desigual de la UE. Entre 2008 y 2011, el cambio social en España fue espectacular. Las grandes clases medias españolas, tras dos décadas de naturalización en la idea de progreso, percibieron con nitidez en aliento del desclasamiento. La tenaza formada por la caída de la demanda interna y el fin del crédito llevaron a la quiebra a cientos de miles de trabajadores y trabajadoras autónomas, empresas y pequeños comercios de todas las ciudades y pueblos del país. El gobierno de J.L. Rodríguez Zapatero, atrapado en sus propias contradicciones, mientras con una mano trataba de paliar los efectos de la crisis incrementando la inversión pública con el Plan E, con la otra mano claudicaba ante las presiones de la Troika aprobando la reforma laboral de 2010, desoyendo una huelga general y, sobre todo, tramitando la reforma del artículo 135 de la CE en agosto de 2011, para priorizar el pago de la deuda española y sus intereses a los tenedores básicamente, la gran banca centroeuropea-, frente a cualquier otro gasto público. En definitiva, el cierre constitucional de la soberanía presupuestaria española. En apenas tres años, la sociedad había cambiado profundamente. El crecimiento del desempleo y la precariedad supusieron un incremento de la morosidad y los impagos. De acuerdo con los datos ofrecidos por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, 2 entre 2007 y 2011 se produjeron medio millón de ejecuciones hipotecarias. Docenas de miles de familias se quedaron sin trabajo, sin hogar y, a través de una ley hipotecaria que hoy las autoridades europeas califican de ilegal, conservan la deuda de la vivienda hipotecada, puesto que ninguno de los bancos españoles (ni los públicos ni los privados) han admitido daciones en pago que no fueran el resultado de negociaciones individuales, desahuciado por desahuciado. Muchos inmigrantes ecuatorianos, peruanos y colombianos comenzaron a regresar a sus países, mientras movimientos sociales como Juventud Sin Futuro visibilizaban el horizonte migratorio que se empezaba a dibujar para buena parte de los jóvenes españoles. En 2011, la tasa de paro juvenil ya era superior al 50%. La deriva social de la crisis y la exclusión de las grandes mayorías en el proceso de toma de decisiones (tan característica de las formas de la democracia de partidos nacida del marco del 77) desencadenaron, en mayo de 2011, la mayor movilización europea de corte destituyente de las últimas tres décadas: el movimiento 15M. Cientos de miles de personas acamparon en las principales plazas de todas las ciudades del país reclamando más y mejor democracia, más y mejores procesos deliberativos, más y mejor libertad de información y comunicación, más y mejor acceso a la cultura, más y mejores derechos sociales y de ciudadanía. Presionado por la gente y por los acreedores europeos y sus portavoces de la Troika, y ante la incapacidad de poner en marcha un programa económico capaz de revertir los gravísimos efectos de la crisis, J.L. Rodríguez Zapatero puso fin a la legislatura anticipadamente y convocó elecciones generales el 20 de Noviembre de 2011. Estimado/a evaluador/a: estoy trabajando en esta ponencia y me haría mucha ilusión terminarla. Espero hacerlo en estos días. La subiré en su versión final antes del 11 de Mayo a las 15.00pm. Gracias de antemano por tu generosidad. EL VOLUMEN DEL CAMBIO EN LAS ELECCIONES DEL 20D LO SOCIODEMOGRÁFICAMENTE EMERGENTE Y DECLINANTE, O CÓMO ENCONTRAR EN LO SOCIAL LAS PISTAS PARA PREVER EL PRÓXIMO SISTEMA DE PARTIDOS 3 LOS RESULTADOS ELECTORALES DEL 20D. COSAS PARA PENSAR. PP Partido con más voto real que voto recordado Partidos de votantes avergonzados u olvidadizos Voto real Voto recordado Coeficiente 20.6% 18.5% 1.1 Partidos con el mismo volumen de voto recordado y voto real Voto real Voto recordado Coeficiente PSOE 15.8% 15.9% 1.0 Partidos con más voto recordado que voto real Partidos guays, con todos los riegos que ello comporta (tómese la historia de IU como botón) Voto real Voto recordado Coeficiente En Comú Podem 2.6% 3.9% 0.6 Compromís-Podem 1.9% 2.6% 0.7 ERC 1.7% 2.4% 0.7 IU 2.6% 3.4% 0.8 En Marea 1.2% 1.6% 0.8 Democracia i Libertat 1.6% 1.7% 0.9 Podemos 9.1% 10.2% 0.9 PP PSOE Podemos En Comú Podem Compromís-Podem En Marea Pod y confluencias Ciudadanos ERC DIL IU PNV Recuerdo de voto el 20D 18.5% 15.9% 10.2% 3.9% 2.6% 1.6% 18.3% 8.5% 2.4% 1.7% 3.4% -- 4 Intención de voto en nuevas elecciones 18.2% 14.5% 10.2% 4.2% 2.4% 1.6% 18.4% 8.3% 2.6% 1.2% 3.1% 0.8% = =