Universidad de La Serena Facultad de Ciencias Sociales y Económicas Departamento de Historia y Geografía Área de Geografía Guía de Geografía Física Regional La ausencia de volcanismo en la región de Coquimbo Objetivo general Comprender las principales teorías que explicarían la ausencia de volcanismo en la región de Coquimbo. Objetivos específicos -Proyectar la realidad geográfica regional, a través de la interacción con una maqueta, principal instrumento de carácter didáctico en este trabajo. -Asimilar la información entregada de manera que pueda ser interpretada en base a las actividades propuestas, y que estás a su vez, sea el reflejo del conocimiento logrado. Marco Teórico Capítulo I: Teoría de la Tectónica Placas. Durante siglos muchos especialistas se han preguntando la forma en cómo se compone y se comporta nuestro planeta, es por ello que este marco teórico está orientado a la exposición de las teorías más aceptadas a nivel científico (teorías que, hasta el día de hoy, son minuciosamente analizadas) acerca de la forma en cómo la tierra se estructura y manifiesta su dinámica en el espacio -el campo de estudio dedicado a estas cuestiones es denominado geomorfología. Partamos explicando la teoría de la Tectónica de Placas (o teoría de la Deriva Continental), elaborada por Alfred Wegener (científico alemán), en 1919 y que se basa, básicamente en la existencia de una docena de placas rígidas que se encuentran en continuo movimiento unos respecto de otros y que componen la corteza terrestre. Estas placas litosféricas o bloques descansan sobre una capa de roca caliente y flexible, llamada astenosfera, que fluye lentamente a modo de alquitrán caliente. El principio básico de esta teoría descansa en el hecho de que el aire caliente asciende por encima del aire frío y las corrientes de agua caliente flotan por encima de las de agua fría; lo mismo se aplica para las rocas calientes que están bajo la superficie terrestre: el material fundido de la astenosfera, o magma, sube hacia arriba, mientras que la materia fría y endurecida se hunde cada vez más hacia al fondo, dentro del manto; la roca que se hunde finalmente alcanza las elevadas temperaturas de la astenosfera inferior, se calienta y comienza a ascender otra vez. Este movimiento continuo y, en cierta forma circular, se denomina convección. En los bordes de la placa divergente y en las zonas calientes de la litosfera sólida, el material fundido fluye hacia la superficie, formando una nueva corteza1. Los continentes forman parte de esas placas y se mueven con ellas. En sus límites y bordes (placas adyacentes) es posible apreciar la mayoría de actividad sísmica y el vulcanismo que se da en el planeta. Nuestro país, se encuentra precisamente dentro de la Placa Sudamericana que precisamente colinda con la Placa de Nazca, lo que podría explicar su intensa presencia de terremotos y volcanes (Chile forma parte de una franja en donde se concentra una intensa actividad volcánica y sísmica que rodea el Océano Pacífico que se delimita como Cinturón de Fuego)2. Placas tectónicas. Fuente: http://www.lorem-ipsum.es/blogs/images/Placastectonicas.png (visto por última vez 15/06/10) 1 Tuzo, J., Deriva Continental, Deriva Continental y Tectónica de Placas, H. Blume ediciones, Madrid España 1976. 2 James, D., La evolución de Los Andes, H. Blume Ediciones, Madrid, España 1976. Cinturón de Fuego del Pacífico. Fuente: http://atlas.snet.gob.sv/atlas/files/sismos/imagenes/AnillodeFuego.JPG (visto por última vez 30/09/08) Capítulo II: Fenómeno de subducción y su relación con la actividad volcánica La existencia de vulcanismo activo en el planeta, como dijimos anteriormente, está estrechamente relacionada con la dinámica de las placas tectónicas y los procesos impulsados por las fuentes de energía al interior del mismo. Por lo mismo es conveniente delimitar los factores que originan la actividad volcánica, y a su vez reconocer cuál es de mayor preponderancia en nuestro relieve nacional. Se asimila en primera instancia, un vulcanismo causado por las dorsales oceánicas (volcanes submarinos), es decir, por la acción de placas divergentes. Por otro lado, tenemos al vulcanismo producido por el movimiento de placas convergentes o también denominado subducción, y comprende interacción de placas oceánicas y continentales3. 3 Stralher, A. Geografía Física. Ediciones Omega, Barcelona, España, 2005. Esquema de formación volcánica sobre la superficie terrestre. Fuente: http://www.igm.cl/47_Origen%20del%20Volcanismo.html (visto por última vez 07/10/08). Cuando dos placas volcánicas convergen, el borde de una se hunde por debajo de la otra y avanza hacia el manto, la capa semisólida situada por debajo de la litosfera. Esto provoca un movimiento de subducción o reincorporación al manto de las rocas de la litosfera. Ahora bien, cuando la corteza oceánica se funde como resultado de la subducción, el magma formado asciende a lo largo del plano de subducción y brota en forma de erupción en la corteza terrestre, normalmente marcado por fosas oceánicas. No es menor que casi todas las zonas de subducción de la Tierra se encuentran alrededor del océano Pacífico, al igual que más de las tres cuartas partes de todos los volcanes de superficie, activos, durmientes o extinguidos. Puesto que, Chile es considerado una “tierra de volcanes”, y en su territorio se concentran el 10% de los volcanes activos en el planeta (alrededor de 150 de los cuales 62 presentan registros históricos)4. Para entender la naturaleza volcánica de nuestro territorio, debemos reconocer que la mayoría de estos se da en un tipo de frontera de placa convergente, es decir, una placa penetra (es subducida) bajo otra, entonces la materia de la parte superior de la placa subducida es arrastrada en una trayectoria oblicua hacia el interior de la Tierra, hasta que alcanza una profundidad en la que se funde. Entonces asciende por fisuras verticales y es expulsada hacia la superficie por una chimenea volcánica. La actividad volcánica de nuestro país, se halla ligada al proceso de subducción de la placa de Nazca debajo de la placa de Sudamérica. Este proceso se inició durante el Triásico, con la formación de un arco volcánico a lo largo de la Cordillera Occidental, Actualmente, en los Andes centrales el ángulo de subducción es marcadamente variable; así, en el norte y centro del Perú, con ausencia de vulcanismo activo, el ángulo de subducción es subhorizontal (alrededor de 10°); mientras que en la zona sur del Perú y norte de Chile, con volcanismo activo, el ángulo va de 20° a 30°. Estos datos guardarán gran trascendencia 4 González- Ferrán, O., Volcanes de Chile, Instituto Geográfico Militar, Santiago, Chile, 1995. en el desarrollo de la hipótesis que explicaría la ausencia de vulcanismo en la región de Coquimbo5. Fenómeno de subducción y consecuente vulcanismo. Fuente: http://atlas.snet.gob.sv/atlas/files/volcanes/html/Amenaza_volcanica_CA.html (Vista por última vez 30/09/08). Capítulo III: Ausencia de vulcanismo en la IV región: -Ángulo de Subducción En nuestro país es posible apreciar la presencia de vulcanismo supeditada básicamente por tres causas: por efecto del movimiento de subducción desarrollado en la Cordillera de los Andes, las zonas rift (es decir, fosas de hundimiento que pueden ser oceánicas o continentales) que se desenvuelven en el estrecho de Bransfield (Antártica) y por manifestación de puntos calientes (hot spot)6. La formación de vulcanismo está estrechamente condicionada con la medida del ángulo de inclinación producido por la convergencia de las placas (subducción). La teoría postula que es necesario que el ángulo de subducción bordee los 25º sexagesimales, aproximadamente. En la región de Coquimbo ubicada en la zona de Chile semiárido del oeste de Sudamérica, al sur del desierto de Atacama y extendida desde los 29°00’S hasta los 32°10’S, no se presentaría esta realidad.7 5 Contexto geodinámico y vulcanismo cenozoico, http://www.igp.gob.pe/vulcanologia/Marco_Geologico_Geodinamico/HTML/MarcoGeologicoVolcanolo gico.htm (visto por última vez 07/10/08). 6 Volcanismo en Chile, Instituto Geográfico Militar (IGM), http://www.igm.cl/49_Volcanismo%20en%20Chile.html (visto por última vez 07/10/09) 7 Stern, Charles R. Active Andean volcanism: its geologic and tectonic setting. Rev. geol. Chile, dic. 2004, vol.31, no.2, p.161-206. ISSN 0716-0208. http://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S071602082004000200001&script=sci_arttext (visto por última vez 07/10/08). Representación gráfica del vulcanismo chileno. Fuente: http://www.igm.cl/49_Volcanismo%20en%20Chile.html (visto por última vez 07/10/09). -Falla de Vicuña Es relevante tener en cuenta que la tierra también está rodeada por cinturones de actividad geológica en forma de volcanes, terremotos y alto flujo de calor, y se han observado movimientos por la existencia de rocas plegadas y de grandes desplazamientos conocidos como fallas8. Referente a esta cuestión, otra importante teoría que se argumenta sobre la ausencia de actividad volcánica, es que ésta ocurre por la presencia de la Falla de Vicuña que actúa de “piso” o sello magmático (Belousov, 1976) impidiendo y reteniendo los procesos volcánicos. La presencia de este accidente es fundamental dentro del contexto morfológico ya que separa un borde muy solevantado al Este y marcado por una profunda huella glaciaria (la Alta Cordillera) de un compartimento más bajo modelado solamente por la erosión torrencial (la Media Montaña). Por su prolongación y profundidad sería una de las grandes fracturas del Globo. En ella no existe manifestación volcánica reciente en las proximidades de su trayecto9. Ahora bien, una falla es entendida como el resultado de una rotura repentina debido a la diferencia de fuerzas. Está diferencia o línea de fractura es posible apreciarla superficialmente y a menudo ocupan una gran extensión territorial. La superficie sobre la que se ha producido un desplazamiento se llama superficie o plano de falla. La Falla de Vicuña corresponde a lo que los especialistas llaman falla inversa en que la 8 Hurley, P. La confirmación de la deriva continental, H. Blumes Ediciones, Madrid, España 1976. Paskoff, R., Geomorfología de Chile semiárido, Departamento de publicaciones Universidad de La Serena, La Serena, Chile 1993. 9 inclinación del plano de falla que los bloques que la componen cabalgan uno sobre otro, produciéndose una reducción de corteza. Estas fallas originan escarpes y superficies en forma de acantilado10. La principal característica morfológica de esta fractura es que posee un plano de fractura muy abrupto (60° y más) y por elevarse el labio superior. Si bien, presentan gran variedad de aspectos comunes a las fallas normales, es necesario delimitar sus diferencias, tanto en su rumbo la amplitud de las fallas varía, y la falla inversa no solo puede extinguirse, sino que también puede convertirse en la normal, cuando el labio superior no resulta estar elevado, sino hundido. Los solevantamientos paralelos, desplazados hacia un lado, forman el sistema de fallas inversas escalonadas. Igual que las fallas normales, las inversas pueden orlar los tramos elevados y las hondonadas de la corteza terrestre, que correspondientemente conservan las denominaciones de fosas y pilares tectónicos. En este caso los pilares tectónicos se ensanchan hacia arriba y penden abruptamente sobre las fosas tectónicas, mientras que durante las fallas normales las fracturas o bien son verticales o se inclinan de los pilares tectónicos hacia las fosas tectónicas11. Falla inversa. Fuente: http://www.educa.madrid.org/web/ies.rayuela.mostoles/deptos/dbiogeo/recursos/Mapas/ EsquemaFallaInversa.gif (visto por última vez 30/09/08). 10 11 Stralher, A. Geografía Física. Ediciones Omega, Barcelona, España, 2005. Belousov, V., Geología estructural, Editorial MIR. Moscú, Rusia 1974.