EL TEST DE PAREJA EDUCATIVA

EL TEST DE PAREJA EDUCATIVA
Raquel N. Pozzi
Es una técnica proyectiva de estimulación gráfica y verbal, aplicable a todas las
situaciones en relación al acto de enseñar y aprender. Brinda una generosa
información para detectar la relación vincular entre el que enseña y el que aprende.
Administrada con otras técnicas gráficas, verbales y perceptuales, a los fines de
obtener la presencia de indicadores recurrentes, permite determinar el diagnóstico
en los problemas de aprendizaje, dificultades en la continuación de estudios o
elección de carreras en orientación vocacional. Sus autoras las Lics. Oris y S. de
Ocampo, (Bs.As.1988) de la técnica Pareja Educativa, realizaron una adaptación
del test de las Dos Personas de J. Bernstein, específico para el ámbito educativo.
Agregamos, entre otras alternativas, el valor que sumaría el uso de la técnica de
Pareja Educativa en ámbito extraescolar, formando parte de un diseño psicotécnicolaboral, aprovechable
para la selección de postulantes
para el desempeño de
actividades docentes.
En la administración se solicitan los cuatro momentos del test De la Dos Personas,
con la diferencia de especificar roles precisos, en lugar de “dos personas
cualesquiera” y el agregado de la acción implicada en la consigna, de similar
manera que la técnica de Familia Kinética (Frank de Verthelyi).
Consigna: “Dibuja dos personas, una que enseña y la otra que aprende”
Momentos: 1- Cuando ha finalizado el dibujo, 2- Se indica colocar nombre y edad a
cada figura, 3- Escribir una historia sobre lo que sucede en el dibujo y 4- Finalmente
se le pide que le ponga un título al relato escrito.
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El análisis se propone investigar:
a- La posibilidad de acceder al objeto de aprendizaje
b- El modo en que dicho objeto circula entre ambos integrantes de la pareja
c- De qué manera se comporta “el que aprende” con los objetos y con “el que
enseña”
d- Cuáles son las posibilidades que ofrece el que enseña para poder tener acceso
a ese objeto.
Cómo en el Test de las Dos Personas se analizan los aspectos gráficos y verbales de
la producción, coincidencias y divergencias, sus criterios interpretativos. Se
integran, también las pautas formales y de contenido a las técnicas gráficas, en
general. Hasta aquí los aportes de las autoras citadas.
Transcribimos un ordenamiento de variables para el análisis, que pertenecen a los
aportes de Casullo, M.M., Cayssials A.N y otros (2000).
1. Capacidad para cumplir con la consigna
2. Análisis interfiguras (plano gráfico)
2.1 Si comparten un eje horizontal
2.2 Posturas, gestos
2.3 Edades y sexos asignados
3. Análisis del comportamiento verbal
3.1 Emplazamiento
3.2 Extensión
3.3 Características de la escritura
3.4 Características del lenguaje
3.5 Causalidad y coherencia
4. Integración general
4.1 Actitudes hacia el aprendizaje
2
4.2 Vínculos (inexistentes, mutuos, unipersonales, agresivos
4.3 Características asignadas a las tareas de enseñar y aprender
Es destacable el valor de eficiencia que adquiere el instrumental técnico del que
disponemos los psicólogos, aplicado a investigaciones que a su vez revierten en
nuevos conocimientos, enriqueciendo los fundamentos científicos que los avalan.
Desarrollo a continuación una investigación llevada a cabo con la técnica de Pareja
Educativa, enviada a Congresos y Simposios Internacionales.
III Simposio Internacional “Infancia, Educación, Derechos de niños, niñas y
adolescentes. Las prácticas profesionales en los límites de la experiencia y del
saber disciplinar".
Mar del Plata-Argentina. 11, 12 y 13 Agosto 2011
Facultad de Psicología, UNMDP. Argentina
Autora: Magister Pozzi Raquel Nélida – Profesora Titular Regular de la cátedra
Instrumentos de Exploración Psicológica II - Facultad de Psicología – UNMDP
Título: “La representación gráfica y verbal del enseñante y del aprendiente a
través de la técnica Pareja Educativa, administrada en diferentes etapas de
escolarización en la comunidad marplatense.
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Síntesis del estudio
Este trabajo tuvo su origen en una investigación teórico-empírica, con la aplicación de la técnica
proyectiva gráfica y verbal de la Pareja Educativa, con el objetivo de detectar el “Encuentro o
desencuentro del enseñante y el aprendiente en la cotidianidad del aula”. Su elaboración y
resultados fueron mi Tesis de Maestría en Ciencias Sociales, mención Educación. La idea para
escribir este texto se refiere a la desmotivación y ausencia de entusiasmo que, en términos
generales, se atribuye a niños, niñas y adolescentes incorporados al sistema educativo y, en las
distintas etapas de escolarización. Me propuse revisar los protocolos, nuevamente a los fines de
encontrar respuesta a las siguientes preguntas: ¿qué trasmiten las imágenes y qué significados
podrían atribuirse a las características físicas y expresiones anímicas de las figuras (enseñanteaprendiente) y qué tipo de calidad vincular proyectan a modo de representación?
Las autoras de la técnica proyectiva de la Pareja Educativa son las Lics. Malvina Oris y María
Luisa S. de Ocampo, (Bs.As.1988) quienes realizaron una adaptación del test de las Dos Personas
de J. Bernstein, específico para el ámbito educativo. El universo total del estudio estuvo
compuesto de 2.000 unidades de análisis, (1.300 protocolos de EGB, aplicado desde el 3ro. al
7mo. año, 600 en todos los años de Polimodal y 200 en las Facultades de Ciencias Exactas y
Psicología, correspondientes al 3er año de ambas carreras. La muestra, pertenece a la comunidad
marplatense y es representativa en un 90% de las instituciones educativas participantes de los
distintos niveles de escolarización. Abarca escuelas públicas urbanas y suburbanas, privadas,
municipales, provinciales y nacionales. La muestra universitaria de 200 estudiantes, no es
representativa de las carreras universitarias, aunque sí resulta significativa la producción obtenida.
Palabras Claves: Representación gráfica y verbal – Enseñante-aprendiente – Modalidad vincularEtapas de escolarización.
Breve reseña sobre el uso de la técnica proyectiva: Las autoras, de la técnica gráfica y verbal de
Pareja Educativa, Lics. Malvina Oris y María Luisa S. de Ocampo (Bs.As.1988), lo aplicaron para
evaluar preferencias vocacionales en jóvenes ingresantes al nivel medio educativo. Se extendió su
uso en niños de escuelas primarias con dificultades en el aprendizaje, probablemente asociadas a
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disfunciones en la interacción maestro-alumno y sus efectos en la motivación y comprensión de
los contenidos educativos.
Fundamentación teórica de la técnica gráfica:
La mayoría de los autores de test y técnicas proyectivas gráficas, coinciden en que el origen de las
representaciones, proyectadas en los dibujos y verbalizaciones, se halla en las primeras relaciones
de objeto internalizadas, (con un otro) primero en el ámbito familiar, a modo de matriz relacional,
y reforzadas durante el tránsito por las etapas de escolarización. Estos aprendizajes tempranos
tienden a reproducirse en los vínculos posteriores, con su repetición y diferencia, Participan en
ellas tanto las formas inconscientes, como las conscientes de representarse. En las técnicas
gráficas los sujetos proyectan la representación simbólica y cultural que han incorporado,
exteriorizándola a través del dibujo. La configuración espacial (espacio vital de la hoja en blanco)
está compuesta por la figura y el fondo. Ambas son las unidades de análisis para la interpretación
de los test proyectivos gráficos. La pragmática y la lingüística contribuyeron a la lectura del texto.
El fondo presentará la escenificación, (la situación espacio-temporal y el tipo de escenario). La
figura está compuesta por los personajes, la función que cumplen y las características que se le
atribuyen. Los términos que se aplican de enseñante y aprendiente aportan una amplitud de
representaciones posibles que, excede el ámbito escolar y los roles en la trasmisión y recepción de
diversos aprendizajes. A los fines de este estudio, el análisis e interpretación de las características
proyectadas en ambos personajes y formas de interacción, se incluyeron las pautas formales y de
contenido de las técnicas gráficas, en general, y las específicas de la técnica de la Pareja
Educativa.
Consignas y etapas de la administración:
1-Dibujar dos personas, una que enseña y otra que aprende.2- Ponerles nombre y edad.
3-Escribir una historia relacionando a ambas personas.4- Ponerle un título a la historia.
Metodología: es un estudio exploratorio en cuya descripción e interpretación se trabajó con los
paradigmas cuantitativo y cualitativo. La fuente de información es primaria, el instrumento
seleccionado fue la técnica gráfica y verbal de la Pareja Educativa sobre la representación de la
pareja internalizada, en relación al acto de enseñar y aprender. Las dos dimensiones de análisis
que se aplican se corresponden con los objetivos del estudio. Los indicadores son los específicos
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de la técnica proyectiva citada y de los test gráficos, en general. Su administración se llevo a cabo
con modalidad grupal contando con el consentimiento escrito de los padres en EGB, de
estudiantes del ciclo polimodal y universitario, de profesores y autoridades de las instituciones
educativas.
Objetivos:
1-Describir los aspectos manifiestos que revelan las imágenes gráficas y el contenido verbal de las
producciones obtenidas.
2- Identificar en el análisis descriptivo los observables comunes que comparten los participantes y
sus diferencias, según las etapas de escolarización.
3- Detectar la modalidad vincular predominante entre el que enseña y el que aprende.
4-Establecer relaciones de significado entre las dos dimensiones y los indicadores del trabajo.
Muestra: El universo total estuvo constituido por 2.000 unidades de análisis ((1.300 alumnos de
EGB, 600 alumnos de polimodal y 100 estudiantes de cada una de las carreras universitarias) de
instituciones educativas urbanas y suburbanas, municipales, provinciales, nacionales, estatales y
privadas de la comunidad marplatense. La muestra es representativa en un 90% de estas
instituciones. Fue solicitado el consentimiento escrito a los padres de los alumnos, a las
autoridades escolares y profesores de polimodal y cátedras universitarias. La investigación estuvo
radicada en la Facultad de Psicología de la Universidad de Mar del Plata.
Objetivos:
1-Describir los aspectos manifiestos que revelan las imágenes gráficas y el contenido verbal de las
producciones obtenidas.
2- Identificar en el análisis descriptivo los observables comunes que comparten los participantes y
sus diferencias.
3- Detectar que tipo de modalidad vincular se establece entre el que enseña y el que aprende.
4-Establecer relaciones de significado entre las dos dimensiones seleccionadas para este trabajo
Dimensiones de análisis:
A. Características de la representación gráfica y verbal del aprendiente, del enseñante y del
contexto. Esta dimensión busca identificar los atributos físicos y anímicos proyectados en las
imágenes de los personajes, a través de la representación del esquema corporal, tamaño,
ubicación espacial, simetría, proporcionalidad, trazo, presión del trazo, kinesia, perspectiva,
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completud, complejidad e integración del grado de humanización, rasgos faciales, posición de
las figuras, adicciones y omisiones. En lo referente al contexto: recurrencias y divergencias en
las características graficadas de los escenarios, (internos, externos, áulicos y extra-áulicos.)
B. Características del vínculo enseñante-aprendiente. Esta dimensión refiere a los aspectos
actitudinales y vinculares de ambas figuras: direccionalidad de la acción (unidireccional o
bidireccional), proximidad o distancia que presentan las figuras, espacios compartidos,
encuentro de miradas, dialogo o monólogo en la comunicación, posición y ubicación de las
figuras, “clima emocional” (expresiones faciales de los personajes, tipo de escenario, la
historia escrita sobre la escena dibujada y frases que intercambian los personajes, a modo de
diálogo, monólogo y pensamientos), expresados en forma escrita.
1-Análisis de la representación del aprendiente, aspectos comparativos con la figura del
enseñante, en alumnos de ( 3ro .4to. y 5to años) de EGB.
Conforme a las pautas expresivas formales (representación de sí mismo, tamaño y emplazamiento
en la hoja), las figuras del aprendiente son muy pequeñas, constrictivas, incompletas y presentan
características infantiles. Ocupan la parte inferior de la hoja, impresionan escondidas, detrás de
bancos, pupitres o fusionados con el asiento cuyo respaldo tapa el cuerpo. La cabeza se observa de
atrás o de perfil, la representación de frente está en el 40% de los protocolos, aunque no se
distinguen los rasgos faciales. La expresión es de seriedad y la cabeza está inclinada con la mirada
dirigida al piso. Se registra incompleto el torso y los miembros inferiores. Los brazos están
representados en mayor proporción que el resto del esquema corporal. La postura del aprendiente
es rígida, mayormente sentado, y en escasos protocolos, parado. En ambas posiciones la actitud
corporal es pasiva-receptiva. El cuerpo está inmovilizado (Figs. 1,2 y 3). La edad del alumno,
escrita, es pertinente al año que cursa, no así, la figura graficada que, representa a un niño de 6 o 7
años, en posición de espaldas al observador y en dirección al frente del aula. En este escenario se
sitúa al enseñante, próximo al escritorio, pizarrón, o mobiliario. En comparación, la figura del
enseñante tiene un tamaño mayor, completo el esquema corporal, posición de frente y expansión
en el espacio. En cuanto al emplazamiento, es dibujada en el centro del contexto áulico y en la
parte superior.
La historia escrita, las expresiones verbales y título: las historias poseen títulos y “nubecitas” que
encierran pensamientos o expresiones verbales de los personajes. En ellas está enfatizada la
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necesidad de estudiar y aprender para satisfacer al maestro, el temor de no obtener su aprobación,
el deseo de recibir su aprecio. Ilustran los títulos: “Un niño que está feliz porque sí aprende,
pondrá contenta a la maestra”. “Niño que no aprende y tiene miedo”. “La seño nos enseña en
pleno silencio”. “Aprender para pasar de grado”.” La seño está feliz, el niño aprende”. “La seño
dice no tardes tanto el niño no aprende”. “Quisiera aprender”. “El burrito”, entre otros. El
mensaje surge del enseñante, en forma de órdenes y observaciones desaprobatorias. El aprendiente
manifiesta no entender, aburrirse, hasta llegar al calificativo de burro. Prevalece la presencia de
sexo femenino, en la figura del que enseña, reflejando la realidad de la actividad docente, en la
Argentina. Se asigna una diferencia de alrededor de 30 años, en el enseñante, en relación con la
figura del aprendiente. El contexto que predomina en la muestra, (89%) es el escenario áulico, con
mobiliario y uniformes típicos de la escuela pública. Al ámbito cerrado del escenario clásico del
aula escolar, se agregan ventanas enrejadas en una altura que no le permite al aprendiente observar
el exterior, (Fig.4). En las paredes del aula, se destacan timbres de tamaño grande. Las frases
escritas dicen: “tocó el recreo”, “vamos al recreo, que suerte”, “Hora libre”. “El día más
divertido de todos”, etc. con gestos y actitudes corporales de alegría. La tecnología actual,
(computadoras, videograbadoras, televisión etc.) no figuran en la muestra.
B - Análisis interfiguras, representación de la modalidad vincular (espacio compartido,
posturas, gestos, actitudes y clima emocional).
Las figuras no comparten un mismo eje en el espacio, la ubicación y posición entre ambos indica
distancia y desconexión. En algunas representaciones, la distancia se expresa dibujando un
pizarrón o mesa, en el medio ambas figuras, separándolas hacia cada los extremos de la hoja,
(Figs. 2 y 3) En la totalidad de la muestra, las miradas, no se encuentran. Opuesto al personaje del
que aprende, la figura del que enseña, presenta tamaño, posturas, actitudes y una ubicación, que le
otorga un carácter dinámico y poseedor exclusivo de todos los objetos del aula. Sostiene punteros
o reglas de tamaño grande o, sustituido por un brazo extendido con el dedo índice indicando
órdenes o amenaza de sanción. Las actividades físicas están diseñadas en el pizarrón, siendo el
enseñante quien ejecuta las acciones. Cuando se representa la actividad física, el aprendiente no
produce movimiento alguno, no participa con su cuerpo, manifestando contrariedad a través de la
expresión corporal y facial. (Figs. 12 y 13) La lectura de esta dimensión de análisis se infiere la
atribución de superioridad al enseñante, con absoluto poder sobre el contexto, predominando la
evitación vincular y la distancia afectiva.
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A - Análisis de la representación del aprendiente, aspectos comparativos con la figura del
enseñante, en alumnos del ciclo polimodal:
En el 6º,7º y 8º año, y en la población secundaria, se advierte un alto porcentaje (80%) de
representaciones similares a las del EGB, con nuevas imágenes, caricaturas que ridiculizan a
ambas figuras. Quedan deteriorados los rasgos humanos. Algunos se asemejan a animales o
personajes de ficción. Dibujan bocas con grandes dientes, grotescas narices, y distorsiones en la
simetría y proporcionalidad del cuerpo y sus partes (Figs. 6, 7, 8, 9 y 11). En los títulos que
acompañan estas imágenes, se lee: “Maestro sabelotodo, que enseñará durante 135 años, hasta
que el alumno ocupe su lugar”. “El retorno del infierno”. “La ignorancia de las personas
grandes”. “El elefante marino trata de enseñar”. “El roto y el descosido”. “Clases prácticas de
violencia”. “Lagarto enseña, cabeza aprende”. “La profesora loca”. “Jack el destripador”, etc.
Se destacan sentimientos hostiles (resentimiento, ironía, enojo, impotencia y violencia).
Identifican con nombre y apellido al enseñante aportando contenidos verbales que desvalorizan el
rol del profesor. (Fig.10)
Carreras universitarias. Síntesis del análisis de las dimensiones a y b (la representación del
aprendiente-enseñante y la modalidad vincular.
En un 70% de la muestra, existe recurrencia con las producciones de los ciclos anteriores, la
representación de las características de las figuras, el predominio del contexto áulico y permanece
la distancia vincular entre los personajes. El clima emocional es indiferente y hasta hostil. Los
protocolos de ambas carreras, no presentan diferencias, por el contrario, los dibujos tienen
semejanza. Los títulos son: “Rutina”. “Tradición”. “Dos enseñanzas”. “Llegó la hora fatal”, etc.
El 30% proyecta imágenes, que denotan una interacción dinámica, flexible y de amplia
participación de ambos personajes, escaso porcentaje de la muestra total, no obstante es
significativo. El grado de humanización está presente en todas las producciones. La distancia
vincular es próxima y las expresiones faciales-corporales manifiestan alegría, buena disposición y
estados anímicos placenteros. El contexto áulico carece de representación, aparecen nuevos
escenarios, en su mayoría, externos. (Figuras 14, 15,16 y 17). En el clima emocional los afectos
positivos predominan. A la figura del que enseña, se le asigna una edad que supera en cinco años
a la del aprendiente. En estos protocolos algunos títulos son: “Compartiendo”. “Un momento
agradable”. “Ambos aprenden”. “Qué divertido.
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Interpretación sobre las dimensiones de análisis de toda la muestra: Los elevados porcentajes
que presenta la muestra, total: 89% en EGB, 80% en el ciclo Polimodal y 70% en la muestra
universitaria, tanto las características físicas y expresiones anímicas de los personajes, como las
actitudes que representa la interacción entre ambos, evidencia la supremacía del enseñante en
relación con el aprendiente. La articulación de observables enfatiza, en el ciclo EGB, un estado de
indefensión en la figura del aprendiente, (inseguridad, inhibición, temor y sometimiento).
Predomina una modalidad vincular autoritaria, ejercida por el enseñante, en un clima emocional de
frialdad, distancia física y afectiva que produce inactividad, en el que aprende, ausencia de
reciprocidad en la comunicación con rechazo en la recepción de los aprendizajes. El acto de
aprender no es gratificante y en términos generales, se halla ligado al displacer. En el ciclo
Polimodal es reiterativa las expresiones de burlas, desprecio y descalificación, como actitud de
represalia dirigida al enseñante. El clima emocional denota impotencia, enojo, resentimiento,
desafío, hostilidad y hasta violencia sexual. Reactividad del aprendiente, y que retorna, desde el
enseñante en amenazas y sanciones. Se evidencia afectos negativos sobre el aprendizaje y
deterioro de la calidad vincular. Estimo que podrían haber aprovechado, estos participantes la
experiencia y el contacto con personas ajenas al ámbito educativo, para trasmitir una especie de
denuncia, ya que fueron escritos los nombres y apellidos de los profesores involucrados en las
escenas dibujadas. La producción se halla teñida de manifestaciones gráficas y verbales que
reflejan negatividad insatisfacción, agobio, desinterés y aburrimiento en el aprendiente.
En las carreras universitarias, las características de las etapas anteriores se reiteran en el 70%, de
la muestra, si bien, existe una disminución en comparación con los ciclos anteriores, continúa
predominando la pasividad e inferioridad del aprendiente y el tipo de vínculo autoritario. De la
lectura interpretativa de la casi totalidad de los protocolos y los elevados porcentajes de los
gráficos y verbalizaciones asociadas, los actores del proceso de enseñanza-aprendizaje, no se
encuentran en el aula. Queda excluida la recepción-apropiación del conocimiento y en
consecuencia el sentido esencial de la pareja pedagógica y el proyecto educativo, en la trasmisión
de la cultura.
En total oposición a las representaciones anteriormente, un 30% de los estudiantes universitarios
dibujaron figuras, escenarios y, modos de relación que impresionan favorablemente. Ambas se
presentan completas, con rasgos faciales que indican interés y entusiasmo en las actividades que
realizan. Las imágenes reflejan una interacción próxima y dinámica. Realizan tareas compartidas,
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con desplazamiento espontáneo y ubicación centrada de las figuras con respecto al espacio de la
hoja. Se observa el encuentro de miradas y sonrisas. Está ausente el contexto áulico y aparecen
escenarios externos, de connotación familiar (madres enseñando a caminar al hijo, padres guiando
en el cruce de calles), y otros ámbitos: deportivos, artísticos, laborales y recreativos, en los cuales
tienen similar participación y protagonismo, tanto el que enseña, como el que aprende.
El “clima emocional” está representado por el afecto positivo, el interés en la comunicación y en
la actividad. Se percibe una paridad vincular que favorece la construcción, conjunta del
aprendizaje. A la figura del que enseña se le asigna una diferencia de 5 años, mayor al que
aprende. Proximidad generacional que promueve la idea de reciprocidad en el dar y recibir. El
estilo de enseñanza-aprendizaje, estimula actitudes placenteras y un intercambio democratizado
entre los personajes. La dimensión vincular carece de aspectos autoritarios. Estas producciones
podrían estar manifestando, tanto el deseo de transitar la “aventura” de aprender como también,
corresponder a un registro de imágenes internalizadas, gratificantes, realmente vividas.
Conclusiones
Numerosas teorizaciones sobre el desarrollo infantil coinciden con hipótesis que sostienen que, las
primeras experiencias vinculares a partir de la gestación, crianza y alimentación (biológica y
afectiva), se verán reactivadas en las posteriores relaciones que promuevan un intenso intercambio
afectivo. La relación enseñante-aprendiente que se inicia en las primeras etapas de la vida, en el
hogar, tienen su continuidad en el vínculo maestro-alumno. En ambas vinculaciones existen
intensos intercambios afectivos, de valencias positivas y negativas. El poder que reprime,
(Foucault) circula transversalmente en la multiplicidad de relaciones sociales: adulto-niño, padrehijo, hombre-mujer, maestro-alumno.
Es posible pensar entonces que, en la tarea educativa y especialmente, durante la educación básica
la indefensión y dependencia del cachorro humano promueve la reproducción de los terrores
arcaicos (miedo al abandono, a la desprotección, al rechazo, al hambre biológico y afectivo) a los
que se agrega, durante el desarrollo evolutivo, el temor a la discriminación, marginación,
exclusión, entre otros, con la experiencia de ser observados, comparados, elegidos, rechazados,
juzgados, calificados o devaluados por personas de alta significación emocional.
La ausencia de motivación y entusiasmo interfiere en el deseo de saber y aprender. Si la relación
entre maestro y alumno va de la mano del displacer, el control y/o la desaprobación,
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descalificación y el castigo, hace posible inferir que estas actitudes se convertirán en los mayores
enemigos del proceso enseñanza-aprendizaje.
Los aspectos representacionales analizados y los porcentajes obtenidos en el presente estudio
revelan que las actividades contemplativas, la falta de participación activa en el descubrimiento de
los saberes no es una dificultad menor en lo que respecto al acceso del conocimiento. Las
imágenes dibujadas y la correspondencia con las verbalizaciones, historias relatadas y títulos,
detallados en este texto representan indicadores de estados de insatisfacción y rechazo por la
modalidad vincular atribuida a la educación formal. La extensa etapa de escolarización de nuestro
sistema educativo requiere de condiciones que faciliten una conexión intelectual y afectiva entre
los actores. Supone, necesariamente, el respeto por el otro como ser pensante, poseedor del mismo
acervo neuronal y con las mismas posibilidades de accionar sobre las problemáticas que el
conocimiento presenta. La calidad en el trato, representado en la dimensión vincular implica
además, la existencia de una práctica interhumana, de innegable valor ético, que debería estar
presente en las investigaciones sobre las causas de la desmotivación del aprendiente, entre la
complejidad de factores que provocan la deserción y el fracaso escolar.
Baquero, R. Fontagnol, M.B. y C. Marano, sobre el fracaso escolar y las “condiciones de
educabilidad”, escriben:
Cuando el fracaso escolar es concebido como fenómeno educativo, es decir efecto de
un desencuentro entre sujetos y escuela, comienzan a hacerse visibles aspectos que, a
a menudo los discursos educativos y psicoeducativos han dejado en la sombra en sus
procesos de análisis e intervención: diferencias socio-culturales, quiebre entre la cultura
del alumno y la de la escuela, escasa flexibilidad del dispositivo escolar, sus pautas,
formas de trasmisión del conocimiento, contenidos a trasmitir, modos de vincularse entre
los actores institucionales etc. Continúan manifestando: (…) “repensar estrategias de
enseñanza, modos de organización institucional y nuevos vínculos entre actores
institucionales que desarticulen el fracaso. (El subrayado es mío)
Es indudable que el fenómeno del fracaso escolar incluye a todos los actores de las instituciones
educativas y a las condiciones generales de la escolarización. No obstante, ha quedado
responsabilizado el alumno como el único causante de su déficit en el desempeño escolar. Se ha
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aludido a trastornos intelectuales, emocionales y conductuales, referidos a síndromes
hiperkinéticos, problemas atencionales, al origen familiar, cultural, étnico, entre otros.
Resulta atractivo pensar un proyecto de investigación que, indague con la técnica de Pareja
Educativa a los enseñantes. Podría otorgar conocimiento valioso sobre actitudes y necesidades que
se desconocen sobre el educador y sus propias representaciones de la labor cotidiana en el aula,
“su vocación”, la relación con la infancia, hoy.
Finalmente, a nuestra sociedad que pretende ser democrática, le corresponde estimular la práctica
de la democracia en las instituciones educativas, promoviendo el diálogo, la contrastación de
ideas, la participación activa y creativa, (la incorporación de recursos lúdicos, literarios, artísticos,
entre otros) que acompañen las maneras de pensar, sentir y actuar, de cada subjetividad.
La tolerancia en las diferencias permite potenciar el desarrollo de habilidades del pensamiento, de
la afectividad, la autonomía y el pleno desarrollo de la singularidad de cada niño/a y adolescente.
Todo ello, además de ser un legítimo derecho, cumpliría con el objetivo de contribuir a la
formación de ciudadanos libres, que es, y seguirá siendo una invaluable meta educativa.
Referencias bibliográficas
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Frank, Hirsch, Braude, y cbs. (1978) Identidad y vínculo en el test de Las Dos Personas. Bs.As:
Paidós.
Giroux, H. (1993) La escuela y la lucha por la ciudadanía. México: Siglo XXI
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Figuras
Fig.1
Fig.3
Fig.2
Fig.4
14
Fig.5
Fig.7
Fig.6
Fig.8
15
Fig.9
Fig.10
Fig.11
16
Fig.12
Fig.14
Fig.13
Fig.15
17
Fig.16
Fig.17
18
Referencias bibliográficas
Casullo, M.M., Cayssials, A.N., Liporace, M., De Diuk, L.W., Arce Michel, J., Alvarez, L.
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Oliveros, M. E. & Palacios, C. (1985) El test de la pareja educativa. Rev. Aprendizaje Hoy.
Año 6 Nº10
Pozzi, Raquel N. (2010) Las Relaciones de poder entre el Enseñante y el Aprendiente.
¿Encuentro o desencuentro cotidiano en el aula? Trabajo presentado en el V Congreso Argentino
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Pozzi, Raquel N. (2004) Las Relaciones de poder entre el Enseñante y el Aprendiente. Tesis
para obtener el título de Magister Scientiae en Ciencias Sociales - Mención Educación. Convenio
FLACSO- Facultad de Ciencias Económicas y Sociales. UNMDP (inédito).
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20