LA LECTURA LABIOFACIAL 1. Introducción Anteriormente, se asumía que la percepción del habla era un proceso unimodal, auditivo exclusivamente. Sin embargo, los lingüistas distinguieron entre modos de articulación y puntos de articulación; por ello, se hizo necesaria la creación de un sistema aumentativo que tuviera en cuenta la percepción bimodal del habla. Surge así el Modelo Oral Complementado (MOC), que integra 3 aspectos: - Percepción auditiva - Percepción visual - La orientación cognitiva en intervención logopédica El primero de los sistemas aumentativos de comunicación, en lo que a pragmática y redundancia se refiere, es sin duda la lectura Labiofacial. 2. Definición La lectura labiofacial es una técnica para la adquisición del conocimiento mediante la vista cuando pos distintas razones no se puede recibir ni analizar el mensaje oral mediante el oído. Se realiza de un modo inconsciente para facilitar la comprensión del mensaje oral. En la literatura se ha definido como una habilidad innata en todos los seres humanos que no se enseña sino que se entrena. La lectura labiofacial puede definirse como el arte de leer en los labios, aunque se trate más de un proceso cognitivo que se manifiesta casi desde el nacimiento. 3. Destinatarios de la LLF La LLF se utiliza tanto para personas con déficits auditivos innatos como para personas que han perdido la capacidad auditiva. Obviamente, el aprendizaje de ésta técnica es mas costoso para personas con sordera prelocutiva, que se supone que han tenido una relación limitada con el lenguaje hablado, que para un oyente que perdió la capacidad auditiva tras haber adquirido el lenguaje oral. Se pueden diferenciar dos tipos de labio lectores: - El de mente lógica: pretende ver cada una de las letras dibujadas en los labios del interlocutor, con lo cual difícilmente puede seguir una conversación ya que el tiempo lo dedica a juntar las distintas letras perdiendo el grueso del contenido del mensaje. - El de mente intuitiva: encuentra menos problemas para relacionarse puesto que tiene desarrolladas otras capacidades como la atención, observación, etc. 4. Cuestiones metodológicas - La distancia entre el alumno y el educador para el entrenamiento debe ser entre 1 y 4 metros. - La iluminación debe ser difusa, procurando que la luz proceda de un solo punto. - La duración de las sesiones no ha de ser muy larga, aproximadamente unos 40 minutos, aunque dependerá de la edad del sujeto. Además, a la hora de entrenar la LLF el logopeda debe tener en cuenta las siguientes reglas: 1. No hay que gritar, sino hablar claro y articulando bien 2. Conversar directamente con la persona deficiente auditiva 3. Proporcionar una palabra clave durante el episodio comunicativo 4. No hacer muecas 5. Iluminar bien la cara del que habla 6. Hablar fluidamente, no con palabras aisladas 7. No repetir una sola palabra sino repetir frases enteras 8. No repetir la misma palabra, sino cambiar el término 9. Recordar que los nombres propios son más difíciles. Otras recomendaciones metodológicas que pueden resultar útiles al terapeuta son: - Los ejercicios han de ser cortos, que permitan cambiar de tema y no fatigar al sujeto. - Se debe ir de lo simple a lo complejo. - Los ejercicios serán practicados por el logopeda de frente, de perfil y de medio perfil, ya que el deficiente auditivo debe estar habituado a entender a su interlocutor en cualquiera de estas posiciones. 5. Entrenamiento en LLF: modalidades sintética y analítica - LLF sintética: es aquella que recurre primero al entrenamiento de sonidos aislados, posteriormente se practican diversos sonidos unidos que conforman fonemas, y por último, se enseña palabra a palabra. Es un procedimiento cuyos resultados son pobres, ya que la correcta percepción del lenguaje oral no se puede fundamentar en los componentes discretos del mismo. - LLF analítica: parte de la idea de que los fonemas y las silabas asiladas son abstracciones no naturales, por lo que se fundamenta en el entrenamiento de frases completas, y se lleva a cabo atendiendo globalmente a los movimientos de los órganos fonadores que articulan. El resultado en una lectura más rápida. Desde el punto de vista de la intervención, es aconsejable emplear una modalidad intermedia. De esta forma, la LLF analítica se puede utilizar para enseñar palabras nuevas mientras que la modalidad sintética se debería emplear para el aprendizaje de oraciones más complejas. 6. Cómo hablar a los sordos En el terreno práctico, las intuiciones del psicólogo natural, que habita en cada profesional o persona próxima al sujeto con deficiencia auditiva, han ido siempre por delante de las investigaciones básicas. Fruto de estas intuiciones, se han establecido códigos de estilo para hablar a la persona afectada con sordera. Algunos de ellos son: 1. Muchos sordos no comprenderán más que leyendo los labios 2. Un sordo que lleva prótesis no es como un oyente 3. Seguir una conversación representa siempre un gran esfuerzo para la persona sorda. 4. Con frecuencia, al sordo le falta vocabulario, no conoce todos los giros de las frases y no reconoce todas las palabras. 7. Propuesta didáctica para la mejora de la LLF Este apartado recoge una propuesta didáctica de cómo se debería proceder para el entrenamiento de la LLF. 1. Entrenamiento sintético: con la finalidad de entrenar la percepción de palabras habladas de un modo discreto. El proceso iría desde los fonemas hasta las palabras y las frases. 2. Entrenamiento analítico: pretende la enseñanza de la lectura mediante el uso de frases y palabras completas, por medio de la decodificación “grafismo-sonido”. - Desarrollo de la suplencia mental: hace referencia a la capacidad del sujeto de asociar y sintetizar ideas, supliendo con la mente lo que los ojos no llegan a ver. La suplencia mental tiene tres niveles: selección léxica, sintética e ideológica. 3. Automatización: incremento de la fluidez lectora, adaptación a diferentes interlocutores, diferentes lecturas, diálogos, etc. 4. Actividades: a) Clases individuales b) Clases compartidas c) Ejercicios de frente, perfil y en espejo. Se partirá pues del aprendizaje de palabras aisladas para llegar a la comprensión global de la frase. Es decir, se planificará una evolución que va de lo sintético a lo analítico. La duración de estas sesiones ha de ser de unos 60 minutos y se impartirán en horario de mañana (reducido) y de tarde (completo) a lo largo de todo el curso académico. Los alumnos asistirán en días alternos. Las clases compartidas tienen como primera finalidad la consolidación y la práctica de la LLF. El papel del logopeda es introducir la sesión; coordinar y canalizar las intervenciones y corregir errores así como resolver dudas. Por su parte, los sujetos en situaciones de clases grupales actúan de monitores. Los ejercicios específicos se realizarán en las sesiones individuales aunque posteriormente se practicarán tanto en las clases compartidas como en otras situaciones sociales. 8. Implicación familiar en la LLF La finalidad última de la familia es la formación del individuo como ser singular y su inserción social. Y concretamente, en el caso de las personas con deficiencias auditivas, la familia debe hacer de puente entre éstas y la sociedad. El cambio de actitud en las familias de los sujetos es esencial para garantizar el equilibrio afectivo de los mismos. La familia hace, pues, de filtro y de transformador de las influencias exteriores, reforzando las aportaciones positivas y eliminando o suavizando las negativas. Por su parte, el sujeto con Da aprovecha las situaciones familiares para “poner en escena” lo que posteriormente realizará en grupos mas amplios. Lo que reclama a la familia el sujeto no es una atención especial sino una participación en las actividades familiares compartidas. Es conveniente que la familia conozca las reglas didácticas que el sujeto está practicando en las sesiones terapéuticas para, que de esa forma, no terminen perjudicando más que ayudando; por ejemplo, visibilidad de la boca durante la comunicación, hablar con tono y ritmos normales, expresarse con claridad… Conclusión Como conclusión, tras haber conocido los aspectos de los que consta la lectura labiofacial, podemos decir que se trata de una técnica que intenta conseguir un desarrollo de la lengua oral aunque también adolece de algunas limitaciones. En general, la lectura labial es una herramienta que necesita una gran dosis de suplencia mental, imaginación, agilidad visual, un extenso vocabulario y una buena vista. Desgraciadamente, no todo el mundo posee estas cualidades y aunque necesiten esta herramienta, nunca llegan a dominarla completamente. Referencias bibliográficas Calleja M., Santiago T. (1995) La lectura labiofacial (LLF). ALJIBE