IP/08/1116 Bruselas, 8 de julio de 2008 La Comisión propone un plan de consumo de fruta en las escuelas por un valor anual de 90 millones de euros La Comisión Europea ha propuesto hoy crear un plan paneuropeo para la distribución gratuita de fruta y verdura a los escolares. Se trata de asignar fondos europeos por un valor anual de 90 millones de euros para comprar y distribuir fruta fresca y verdura en las escuelas. Este importe se completará con fondos nacionales de los Estados miembros que deseen acogerse al programa. Esta es la última fase de los esfuerzos de la Comisión por mejorar la salud y la alimentación, que expuso en la «Estrategia europea sobre problemas de salud relacionados con la alimentación, el sobrepeso y la obesidad». El objetivo del plan de consumo de fruta en las escuelas es fomentar buenos hábitos alimentarios entre los jóvenes, pues los estudios demuestran que los hábitos adquiridos en la infancia se mantienen más adelante. Además de la distribución gratuita de fruta y verdura, el plan solicitará de los Estados miembros participantes que elaboren estrategias nacionales (que incluyan iniciativas educativas y de concienciación) y que procedan a un intercambio de las mejores prácticas al respecto. Se calcula que el sobrepeso afecta en la Unión Europea a 22 millones de niños. Más de 5 millones de ellos son obesos y se espera que esta cifra aumente en 400 000 cada año. Una mejor alimentación puede desempeñar un papel importante en la lucha contra este problema. La propuesta se remitirá al Consejo y al Parlamento Europeo. «Esta propuesta demuestra que nos tomamos en serio la necesidad de adoptar medidas concretas para luchar contra la obesidad», según ha declarado Mariann Fischer Boel, Comisaria de Agricultura y Desarrollo Rural. «Es fundamental impulsar buenos hábitos entre los niños a una edad temprana, ya que los mantendrán en su vida adulta. Hay demasiados niños que apenas comen fruta y verdura. No saben lo buenas que son. Basta con recorrer las calles principales de Europa para percatarse de la magnitud del problema que suponen estos niños con sobrepeso. Ya va siendo hora de actuar.». La propuesta de un plan de consumo de fruta en las escuelas surgió a raíz del compromiso contraído en junio de 2007 durante las negociaciones para la reforma de la organización común de mercados en el sector de las frutas y hortalizas. Desde esa fecha, la Comisión ha realizado una amplia consulta pública y una evaluación de impacto minuciosa de las distintas opciones. Los expertos coinciden en que una dieta sana desempeña un papel fundamental en la reducción de los índices de obesidad y de los riesgos de enfermedades graves en la edad adulta, como las dolencias cardiovasculares y la diabetes de tipo 2. Para ello es imprescindible que la dieta incluya un consumo suficiente de frutas y verduras. La Organización Mundial de la Salud recomienda una ingesta diaria neta de 400 gramos de frutas y verduras por persona. La mayor parte de los europeos no cumplen esta meta y se observa claramente una tendencia a la baja entre los jóvenes. Los estudios hacen hincapié en que los hábitos alimentarios sanos se adquieren en la infancia. Los niños que comen mucha fruta y verdura siguen haciéndolo toda su vida. Los que no lo hacen tienden a no cambiar sus hábitos e incluso transmiten sus malos hábitos a sus hijos. Las investigaciones también han demostrado que las familias con un nivel inferior de ingresos tienden a consumir menos frutas y verduras. Así pues, la distribución gratuita en las escuelas de estos productos beneficiosos para la salud puede resultar determinante, especialmente en zonas menos favorecidas. El análisis por la Comisión de las políticas nacionales vigentes y las consultas a los expertos han puesto de manifiesto que aumentan los beneficios del plan escolar en la edad adulta si la distribución de fruta va acompañada de medidas educativas y de concienciación para enseñar a los niños la importancia de buenos hábitos alimentarios. Se fomentará asimismo la conexión en red de las distintas autoridades nacionales que apliquen con éxito este tipo de planes escolares. En algunos países de la UE ya existen, con formas variadas. Pero puede hacerse mucho más y este plan comunitario constituye una base ideal para que surjan nuevas iniciativas. La Comisión pondrá encima de la mesa 90 millones de euros anuales para la distribución de fruta y verdura en las escuelas. Corresponderá a los gobiernos decidir si desean participar. El programa será objeto de cofinanciación, con arreglo a las fórmulas siguientes: 50 %-50 % o 75 %-25 % en las «regiones de la convergencia», en que el PIB per capita es inferior. Este dinero no se utilizará para sustituir financiaciones nacionales donde ya existan medidas de este tipo, sino para alentar nuevas actividades, relacionadas con los programas existentes o con la creación de nuevas iniciativas. Huelga decir que los Estados miembros podrán añadir fondos suplementarios si así lo desean. Los autoridades nacionales deberán definir una estrategia nacional en colaboración con las autoridades educativas y sanitarias, la industria y los grupos de interés, teniendo siempre en cuenta las preferencias nacionales. Se espera la inauguración de los programas para el inicio del curso escolar 2009/10. La Comisaria Fischer Boel ha inaugurado hoy el plan de consumo de fruta en las escuelas en un acto celebrado en la Falkenhausschule, Gross-Herzog-FriedrichStrasse 23, de la localidad de Kehl (Alemania). Fotografías y vídeos en: http://ec.europa.eu/avservices/ebs/schedule.cfm Información y documentación en Internet sobre el plan de consumo de fruta en las escuelas: http://ec.europa.eu/agriculture/markets/fruitveg/sfs/index_en.htm 2