Asociación por la Dignidad de Mujeres y Niñ@s Paseo de las Palmeras, 7 - Galería Local 5 – C.P:51001 http://www.digmun.org E-mail: [email protected] e-mail: [email protected] 629 51 07 40 e-mail: [email protected] 629 51 07 40 DÍA INTERNACIONAL DE LA ELIMINACIÓN DE LA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER. Poca gente sabe que el 25 de noviembre de 1960 fueron asesinadas las tres hermanas Mirabal por orden del dictador dominicano Rafael Leonidas Trujillo. 39 años después este mismo país, República Dominicana propuso celebrar todos los años este día como Día Internacional contra la Violencia de Género. Si pensamos fríamente en el significado de un día como hoy, caemos en la cuenta de que es verdaderamente dramático que tengamos que “celebrarlo”, sin embargo esto será así mientras en el mundo una de cada cuatro mujeres sea violada en algún momento de su vida, la mutilación sexual sea habitual en algunas culturas y muchas mujeres en todo el mundo sigan siendo víctimas de malos tratos. A pesar de la Ley Orgánica de Protección contra la Violencia de Género, en nuestro país, el incesante goteo de muertes de mujeres asesinadas por hombres que han sido, o son, sus parejas es una información que ensombrece a la opinión pública cada día. Y es que para erradicar la violencia hacía las mujeres hace falta algo más que una ley, es necesario educar en igualdad, una igualdad no sólo de derecho sino también de hecho, una igualdad real, visible, tangible. La propia Ley reconoce que estamos ante un problema de raíces sociales y magnitud colectiva. Andrés Montero señala vivimos en una sociedad donde convive la modernidad con una importante proporción de genes machistoides, en las que las raíces de la violencia de género reside en una estructura social basada en la transmisión intergeneracional de roles y valores de dominación masculina sobre la mujer. Esta dominación tiene su máxima expresión en la violencia machista; pero quienes consideren que este tipo de violencia son restos del pasado deben analizar también la desigualdad en el acceso al mercado laboral, vean las cifras que publica el INEM o la EPA, quiénes son los que ocupan los puestos de poder, cómo nos decía Cristina del Valle, basta con observar por ejemplo, las fotografías de jefes de estado en cualquier cumbre mundial, quiénes sufren la doble y tripe jornada laboral, y tienen que conciliar la vida profesional y familiar, ¿y dónde se queda la vida personal?.... Asociación por la Dignidad de Mujeres y Niñ@s Paseo de las Palmeras, 7 - Galería Local 5 – C.P:51001 http://www.digmun.org E-mail: [email protected] e-mail: [email protected] 629 51 07 40 e-mail: [email protected] 629 51 07 40 Pero volvamos al tema que nos ocupa un día como hoy, 25 de noviembre, volvamos a la educación y a la trasmisión de roles sexistas, donde situamos la raíz de la desigualdad que genera la violencia machista. Durante el proceso de formación del niño/a como persona para integrarse en la sociedad, aprenden los roles y formas masculinas y femeninas ya establecidas socialmente; y deben de hacerlo bien si no quieren ser tachados por sus iguales, es decir amigos/as y compañeros/as de colegio, de “maricas” porque hacen cosas de niñas, o de “marimacho” porque hace cosas de niños. Y esta es la realidad y la educación que viven, y aunque haya algún que otro equipo femenino de niñas que juegan al fútbol, lo cierto es que los roles trasmitidos a ellas no sólo son diferentes que los concedidos a los chicos sino que son menos valorados socialmente y las colocan en un segundo plano a expensas de los hombres. Pero la mejor forma de visualizar una realidad como esta es a través de un ejemplo. Y que mejor muestra para ilustrar este hecho que el regeaton, un género musical muy popular entre nuestros/as adolescentes basado “en estereotipos que fortalecen las desigualdades en el que se produce la violencia de género”. La imagen de la mujer en las letras y los vídeos es la de una mujer objeto sexual, dependiente y al servicio del hombre, el cual adopta una actitud prepotente, dominante y violenta. Los vídeo clips presentan a un hombre en actitud chula que se dirige a la cámara mientras canta rodeado de mujeres bailando, dispuestas a someterse y a cumplir los deseos del hombre. Algunas letras hablan por sí solas “Castígala por detrás” “Súbete la falda”, y estas son de las más suaves. Un estudio realizado por la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU) ha analizado las siete revistas más leídas por chicas adolescentes. Ha concluido que se siguen perpetuando estereotipos sexistas que sitúan a la mujer en un contexto de subordinación con respecto al hombre, cuyo comportamiento gira en torno a él y para él y cuyo objetivo es gustar y complacerle. A través de mensajes y consejos como “los 25 mejores besos para derretir a cualquier chico”, “claves para evitar que salga corriendo (el chico)”, perpetúan la discriminación y la desigualdad entre los géneros al mostrar a una mujer que actúa y depende de él y cuyo objetivo es hacer lo posible por mantenerle y/o gustarle a Asociación por la Dignidad de Mujeres y Niñ@s Paseo de las Palmeras, 7 - Galería Local 5 – C.P:51001 http://www.digmun.org E-mail: [email protected] e-mail: [email protected] 629 51 07 40 e-mail: [email protected] 629 51 07 40 cualquier precio, aprendiendo los trucos necesarios para ello. Por su parte, ellos consumen revistas de deportes, coches y nuevas tecnologías... Múltiples ejemplos muestran esta realidad, y mientras esto siga siendo así, habrá hombres que se sientan con el derecho de someter a las mujeres y de humillarlas y maltrarlas cuando ellas no cumplan sus deseos, y aleccionarlas para que no vuelva a ocurrir, aunque se repita una y otra vez, cada vez con más frecuencia, con más dolor, con más miedo. Eduquemos para erradicar la violencia, para ello es necesario deconstruir una estructura social desigual que no trata de la misma forma a hombres y mujeres. Eduquemos en la trasmisión de unos valores más dignos para todos y todas. Asociación por la Dignidad de las Mujeres, los Niños y las Niñas DIGMUN