El diagnóstico de la enfermedad Para conocer la enfermedad que afecta a un paciente, se ha de proceder a su diagnóstico, proceso que permite identificar una enfermedad y determinar cuál es su causa principal. Tras establecer el diagnóstico, el médico puede hacer un pronóstico, que es la predicción basada en la experiencia acerca del desarrollo de la enfermedad, su posible duración y las posibilidades de curación. Hay múltiples herramientas que son útiles para elaborar la historia clínica de un paciente y para hacer un diagnóstico preciso. Entre ellas están las siguientes: *Consulta médica. Tiene como finalidad la toma de los datos personales, de la historia familiar y de los síntomas referidos por el paciente. Mediante la exploración física, con maniobras como la inspección, la palpación y la auscultación, el médico puede detectar signos específicos de la enfermedad y, como resultado, hacer un diagnóstico diferencial que contempla todos aquellos trastornos que pueden ser la causa de la enfermedad. *Pruebas de laboratorio. Entre las más útiles están los análisis de sangre, principalmente el estudio de las células sanguíneas, los análisis bioquímicos y las pruebas inmunológicas que permiten detectar infecciones como el sida o la hepatitis vírica. Además existen distintas técnicas para realizar cultivos e identificar agentes bacterianos, hongos, protozoos y parásitos macroscópicos. *Análisis anatomopatológico. Consiste en el estudio microscópico de muestras de tejidos obtenidas mediante una intervención conocida como biopsia. Este tipo de análisis es determinante en el diagnóstico del cáncer. *Electrogramas y técnicas de análisis de imagen. El electrocardiograma y el electroencefalograma ofrecen información de la actividad eléctrica de las células musculares y nerviosas, mientras que las técnicas de análisis de imagen proporcionan imágenes de órganos. Entre estas destacan las radiografías, las ecografías, la tomografía axial computerizada (conocida como TAC o escáner), la resonancia magnética nuclear y la tomografía por emisión de positrones (PET) o por emisión de fotones (SPECT). *Técnicas endoscópicas. Sirven para obtener imágenes de órganos huecos y cavidades corporales mediante la introducción de un endoscopio (tubo dotado de luz y de un sistema óptico) a través de orificios naturales, como se hace en la gastroscopia, la colonoscopia, o la cistoscopia o la artroscopia. *Diagnóstico prenatal. Su objetivo es valorar el estado del feto y destacar la existencia de malformaciones congénitas. Además de técnicas comunes como la ecografía se usan otras más complejas, como el muestreo de sangre fetal o la amniocentesis.