1 ANTICOAGULACION Autores: Juan Nicolás Rodríguez Rodríguez, Antonio Amian Martínez. Servicio de Hematología. La anticoagulación se realiza mediante el uso de dos tipos de sustancias que no son excluyentes sino complementarias: 1.- HEPARINA: Es la sustancia de elección cuando se requiere una anticoagulación rápida ya que su efecto es inmediato cuando se administra por vía i.v.. La heparina que ejerce su efecto anticoagulante actuando como cofactor de la antitrombina III, lo que hace que ésta actúe de forma más efectiva sobre los factores de la coagulación trombina, X activado y IX activado, sobre todo el primero. Actualmente se dispone de dos tipos de heparina: - Heparina sódica: Constituida por un grupo heterogéneo de moléculas respecto a su peso molecular, efecto anticoagulante y propiedades farmacológicas. Su administración es i.v., preferiblemente en perfusión contínua (aunque pueda utilizarse un bolo inicial). Su vida media es de aproximadamente 60 minutos, aunque esto depende de la dosis aplicada, resultando superior en casos de insuficiencia renal o hepática, trombosis venosa profunda o tromboembolismo pulmonar. - Heparinas de bajo peso molecular (HBPM): Son un grupo heterogéneo de moléculas, pero todas ellas con un peso molecular inferior a 6500D. A diferencia de la anterior su acción se ejerce preferentemente sobre el factor X activado, no precisan bolo, su vía de administración es s.c. y presentan una vida media más larga (hasta 6 veces más larga) lo que permite su administración en 1 ó 2 dosis al día. El control de la actividad anticoagulante de la heparina sódica se realiza mediante el TTPA (tiempo de tromboplastina parcial activada). El objetivo es que la ratio del TTPA (tiempo del paciente/tiempo del control) esté entre 1,5-2,5, y lo ideal es que ese valor mínimo de 1,5 se alcance en las primeras 24 horas con objeto de evitar la recidiva del proceso que motivó la anticoagulación. El uso de HBPM ha permitido obviar la realización de controles ya que no modifica el ratio del TTPA (TTPAr) y por tanto esta determinación no resultaría de utilidad. No obstante, se recomienda hacer algún control a modo de orientación en pacientes con insuficiencia renal o muy obesos porque en ellos sí podría detectarse alargamiento de la TTPAr lo que implicaría sobredosificación. Existen muchas pautas de administración de heparina sódica, aunque sus diferencias reales suelen ser pocas, a continuación se exponen dos de ellas: a) Basada en el peso corporal: Dosis inicial: Bolo 80 U/Kg y seguir con 18 U/Kg/h. 2 1er Control: TTPAr<1,2 Bolo 80 U/Kg y aumentar 4 U/Kg/h. TTPAr: 1,2-1,5 Bolo 40 U/Kg y aumentar 2 U/Kg/h. TTPAr: 1,5-2,3 No modificar TTPAr: 2,3-3 Disminuir la infusión 2 U/Kg/h. TTPA >3 Suspender la infusión 1 hora y luego Disminuir la infusión 3 U/Kg/h. b) Pauta empírica: Bolo inicial: 5000 U. Seguir luego con 25000 U/24 h (en 500 ml de salino al 5%), esto es aproximadamente 28 ml/h y 1000 U/h. Modificación de dosis: TTPAr Modificación >5 Reducir 500 U/h 4,1-5 Reducir 300 U/h 3,1-4 Reducir 100 U/h 2,6-3 Reducir 1,5-2,5 No modificar 1,2-2,4 Aumentar 200 U/h <1,2 Aumentar 400 U/h 50 U/h Existe consenso sobre la realización de un primer control a las 6h de haber comenzado la perfusión, pero los controles posteriores no están tan consensuados. Parece recomendable realizarlos cada 6h hasta que se estabilice la TTPAr en los niveles deseados y luego bastaría con realizar un control diario (alternativamente puede hacerse un control intermedio cada 12 horas previo al diario). La dosificación de las HBPM es más complicada en el sentido de que algunas se dosifican en unidades anti-Factor X activado (Factor Xa), otras en miligramos y otras incluso en mililitros (aunque éstas tienen equivalencia en unidades anti-Factor Xa). Por tanto, sería recomendable seguir las instrucciones recomendadas por el fabricante respecto a las indicaciones para las que esté aprobado ese tipo concreto de heparina, la dosificación de cada HBPM en concreto o las recomendadas por la literatura para esos mismos casos. No obstante, y de forma que pudieran utilizarse como norma, podemos indicar las siguientes pautas: Nombre Genérico Nombre Comercial Dosis Profilácticas Dosis Profilácticas Riesgo Moderado Riesgo Alto de de Trombosis Trombosis 3 Dalteparina Fragmin 2500 U anti-Xa 5000 U anti-Xa 1 vez/día s.c. 1 vez/día s.c. Enoxaparina Clexane 20 mg 1vez/día s.c. 40 mg 1 vez/día s.c. Nadroparina Fraxiparina 0,3 ml 1 vez/día s.c. 0,6 ml 1 vez/día s.c. En el mercado existen otras HBPM como bemiparina, tinzaparina y fodaparina con las que se tiene una experiencia más limitada. El antídoto de las heparinas es el sulfato de protamina. En caso de tener que utilizarlo es conveniente tener en cuenta que: 1.- La equivalencia de heparina y sulfato de protamina es 1mg = 1mg. (1 mg de heparina = 100 U). 2.- Debe calcularse el tiempo que hace que se administró la heparina (vida media 60 minutos) para no administrarse un exceso de protamina. Ejemplo: Un paciente que reciba 1500 U/h de heparina en infusión continua (y que no hubiese recibido recientemente un bolo) requeriría suficiente cantidad de protamina para neutralizar toda la heparina recibida en la última hora, más la mitad de la recibida en la hora anterior, más un cuarto de la recibida en la hora previa, esto es: 1500 U + 750 U + 375 U = 2625 U de heparina, y por tanto 26,25 mg de protamina. 3.- Aunque la administración de un exceso de protamina asegura la inhibición completa del efecto anticoagulante de la heparina, esta circunstancia no está exenta de riesgos, entre ellos hemorragias. La administración de protamina debe hacerse lentamente (mínimo 10 minutos) ya que puede provocar hipotensión. 4.- La experiencia con el sulfato de protamina como antídoto de las HBPM es escasa y el cálculo de dosis remanente a neutralizar mucho más complicada, aunque debe mantenerse la regla de equivalencia miligramo-miligramo. Entre los efectos secundarios de las heparinas destacan: 1.- Hemorragias (sobre todo equimosis en el punto de punción). 2.- Trombocitopenia: de carácter inmune y, paradójicamente, asociada a fenómenos trombóticos. Se observa menos frecuentemente con las HBPM. Se recomienda realizar controles semanales de plaquetas. 3.- Lesiones dermatológicas: urticaria, pápulas y placas eritematosas, necrosis cutánea. 4.- Reacciones de hipersensibilidad. 5.- Osteoporosis: sólo cuando se usa a largo plazo. 2.- ANTICOAGULANTES ORALES (ACO): Son sustancias con actividad anti-vitamina K. La vitamina K interviene en la formación de los factores de coagulación II, VII, IX y X. 4 Son varios los ACO existentes en el mercado: Nombre Genérico Nombre Vida Media Efecto Máximo Duración Efecto Comercial (horas) (horas) (días) Acenocumarol Sintrom 5-9 36-48 1,5-2 Warfarina Aldocumar 30-40 36-72 4-5 Fenprocumon* Marcumar* 96-216 48-72 7-14 *Comercializado en Alemania. se incluye en la tabla por la posibilidad de atender a pacientes con esta nacionalidad. El control del efecto anticoagulante de los ACO se realiza mediante la determinación del INR: INR = (TP paciente/TP control)ISI Donde: INR = International Normalized Ratio ISI = International Sentivity Index del reactivo utilizado. El valor de cada determinación viene facilitado de forma automática por el coagulómetro. El nivel de anticoagulación deseado en cada patología o grupo de patologías es: - Válvulas cardíacas metálicas modernas y episodios trombóticos a pesar de ACO previa: 2,5-3,5. - Válvulas cardíacas metálicas antiguas: 3-4,5. - Resto de procesos: 2-3. Respecto a las dosis habitualmente utilizadas, suele comenzarse el tratamiento lo antes posible (en realidad y si no existe inconveniente puede hacerse al mismo tiempo que la heparina), la dosis inicial es de ½ comprimido/día y el primer control se realiza tres días después, no tiene sentido hacerlo antes (excepto clínica hemorrágica) dado cuándo se obtiene el efecto máximo de estos medicamentos. Si por cualquier circunstancia (p. ej. intervención quirúrgica) hubiese que suspender el tratamiento ACO, al comenzarlo de nuevo, convendría hacerlo con la misma dosis que el paciente tomaba previamente a la suspensión. La corrección de la dosis si el paciente presenta una infradosificación o la pauta para neutralizar el efecto del ACO la realiza el Servicio de Hematología. En este último sentido no existen pautas fijas de actuación pero conviene recordar varios puntos: 1.- El servicio que indicó la anticoagulación es el que mejor conoce el riesgo trombótico del paciente y por tanto hay que consultar con dicho servicio el posible riesgo trombótico que tendría dejar al paciente sin tratamiento ACO. 2.- La sobredosificación ocurre a veces no porque el paciente pueda tomar una dosis excesiva de medicación sino por circunstancias clínicas que concurren en ese momento (insuficiencia cardíaca, descompensación hepática, toma de nueva medicación que pueda alterar 5 el efecto ACO). Esto explica que en ocasiones no se hagan modificaciones de las dosis, sobre todo si el exceso en el INR es <=0,5 sobre el nivel de anticoagulación deseado. 3.- Cuando el paciente acude sobredosificado pero sin sintomatología hemorrágica o con hemorragia leve: - INR 5 a 6,5: suspender 1 día, nueva dosificación y control a la semana. - INR 6,6 a 8: Suspender 1 día, konakion 1 mg oral, control al día siguiente. - INR 8,1 a 12: Suspender 1 día, konakion 2 mg oral, control al día siguiente. - INR >12: Konakion 2 mg i.v., control a las 4 horas. 4.- Cuando el paciente acude sobredosificado con hemorragia grave: - Cualquier INR >1,2: Suspender ACO, konakion 10 mg i.v., control a las 4 horas. Si es urgente la corrección usar plasma fresco congelado 15 ml/Kg de peso. 5.- Cuando el paciente precisa intervención quirúrgica urgente: - Cualquier INR >1,2: Suspender ACO, konakion 10 mg i.v., control a las 4 horas. Si es urgente la corrección usar plasma fresco congelado 15 ml/Kg de peso. Finalmente señalar que, aunque anteriormente se ha apuntado una doble presentación de la vitamina K disponible en el mercado (nombre comercial: Konakion) como gotas o ampollas, esto se ha hecho así para facilitar el posible uso de ambas presentaciones. Recientemente, el laboratorio farmacéutico ha dejado de fabricar las gotas pudiendo utilizarse, la misma ampolla nueva, por cualquiera de las vías nombradas.