XII CONGRESO IBEROAMERICANO DE DERECHO E INFORMÁTICA EL DERECHO COMPARTIDO Vibert, H-J. École Nationale Supérieure des Mines de Paris No se tratará solo de informática jurídica sino, más globalmente, de Internet jurídico. Un conjunto que no solamente conecta las tecnologías al derecho sino también las emociones, las reacciones de los individuos y sus usos. En Internet, el derecho puede ser tan importante como lo es en la sociedad del mundo real. Es una evidencia, el individuo está en condiciones de difundir en igualdad de condiciones que los más potentes Estados, y si solo dispone de una suma limitada de información a compartir, se vuelve conectando con otros, en un protagonista de peso. Tomaremos un punto característico de Internet y le daremos un nombre: compartir. Observaremos que esta actitud puede considerarse para el conocimiento del derecho o más bien de los derechos. Comprenderemos pues las manifestaciones conectivas. En primer lugar apreciando el medio ambiente de la información jurídica global, en particular, en términos de difusión, de brecha digital. A continuación, mencionaremos las herramientas y sus usos para el acceso a los conocimientos de un derecho (o derechos). Por proyectos, veremos que es posible hacer la división y reutilizarla. Más allá de las realizaciones presentes, como el proyecto JurisPedia, abriremos otras perspectivas. Se tratará destacar, de un enfoque destinado a escala mundial, las múltiples fracturas más tecnológicas (servidores, banda de transmisión) que numéricas (información), pero también de los elementos políticos y geostratégicos. Y es naturalmente, separando simbólicamente la información jurídica del medio ambiente tecnológico de un Estado, que podemos prever permitir el acceso a las fuentes y de los derechos, para todos. Si, según la declaración de Montreal, la "información jurídica pública de los países e instituciones internacionales constituye una herencia común de la humanidad", y si las tecnologías están en condiciones de facilitar la entrega de esta herencia para algunos, ya pueden permitirlo para el beneficio de todos los temas de derecho, sin distinción del lugar de su nacimiento y, si no es para el presente cuando al acceso a Internet, por lo menos para el futuro favoreciendo, de ahora en adelante la infraestructura informacional. Al utilizar tecnologías, ya antiguas y en consecuencia controladas, como los pares, distribuyendo en varios puntos a través de una multitud de canales las fuentes del derecho y facilitando sus depósitos en un "más allá numérico", podríamos favorecer esta "ruptura de brecha " cuyas premisas presentaremos por el proyecto JusLex. Ver presentación en: http://www.juslex.org/fiadi.html 204