1 9 – NOVIEMBRE – 2013 “EL LLAMADO MISIONAL DEL PAPA FRANCISCO Y NUESTRA REALIDAD” “Ustedes seguramente habrán leído o habrán oído por los noticieros algunos mensajes del Papa Francisco; es impresionante ver, como intenta de continuo lanzar la Iglesia a la misión”. “A mí me resulta emocionante advertir cómo a veces lo hace con expresiones tan típicamente argentinas. Por ejemplo, decir que la Iglesia tiene que salir de las sacristías o, como le ha dicho a los jóvenes, que tienen que hacer lío, es decir hacer presente a Cristo en toda circunstancia y no tener miedo de dar ese testimonio”. “Se trata de algo fundamental: lo que el Papa nos está diciendo es que la Iglesia tiene que estar presente allí donde se registran las grandes necesidades del hombre y la mujer de hoy. Especialmente en aquello sitios en los cuales la necesidad religiosa se hace sentir más fuertemente”. “Para mí como pastor es un estímulo extraordinario a lo que venimos haciendo en la Arquidiócesis de La Plata. Les cuento algo sobre esto. A mi me llama la atención como va creciendo la población, especialmente en las zonas periféricas, y por eso estamos tratando de erigir parroquias, de abrir capillas en los barrios”. “Ahora bien, estos centros tienen que ser centros integrales de evangelización y de misión. No basta solamente la catequesis, el culto, la asistencia; ahora tampoco es el roperito de Cáritas o algún paquetito de comida, hace falta interesarse por el bien integral de tantísima gente, por supuesto desde la perspectiva evangélica y tratando de llevarlos a Cristo, de hacerles descubrir a Dios”. “Nosotros vemos en nuestros barrios, por ejemplo, la necesidad de ayudar a tantas mamás a que puedan alimentar, nutrir bien a sus hijos y es éste un problema de educación muchas veces. También los problemas de los jóvenes, de los adolescentes que no tienen dónde ir: no saben dónde ir, ofrecerles ámbitos de inserción y tantas cosas más. ¡Colegios incluso!. Estamos abriendo jardines de infantes en sitios donde la matrícula no da abasto en las escuelas estatales, que luego se ampliarán al nivel primario”. “Se trata, entonces, de una presencia activa de la Iglesia allí donde hace falta estar, para presentar integralmente el mensaje de Cristo. Por no hablar de tantas áreas de nuestra sociedad: pienso en la Pastoral de la Cultura, en la Pastoral Social, en la vinculación con las organizaciones de la sociedad. En muchas ciudades, en muchos barrios, existen organizaciones locales que trabajan seriamente por los demás y que tienen una gran apertura a lo religioso. En La Plata, por ejemplo, Pastoral Social está haciendo una obra admirable, desde hace años, de presencia en estos ámbitos, incluso a través de ciclos de cine o de encuentros periódicos 2 convocando a las distintas ONG, etc. y transmitiendo la Doctrina Social de la Iglesia”. “Entonces, vuelvo a la figura del Papa Francisco, que nos es tan entrañable: nos está estimulando para que multipliquemos nuestros esfuerzos. Y yo veo también cómo nuestras comunidades responden y cómo tantos laicos generosamente se ofrecen a estos variados servicios eclesiales”. “Tenemos que acompañar todo esto con nuestro interés y con nuestra oración. Por eso se los comento para que ustedes, precisamente, nos acompañen con su afecto y con sus oraciones”.