Teatro / Performance Miércoles, 08 de Enero de 2014 15:43 La actriz María José Contreras realizó la performance Habeas Corpus en el Palacio de Tribunales El pasado 16 de diciembre, por primera vez, el Palacio de Tribunales abrió sus puertas a una acción de arte relacionada con el rol de la justicia en dictadura. La actriz de la Universidad Católica y Doctora en Semiótica de la Universidad de Bolonia, María José Contreras realizó la performance “Habeas Corpus” en el marco del Seminario “Women Movilizing Memory, organizado por la Escuela de Teatro de la UC en conjunto con la Universidad de Columbia. “Hábeas corpus es un requerimiento judicial que busca evitar los arrestos y detenciones arbitrarias, así como proteger a aquellos que sienten su integridad física amenazada o temen ser arrestados sin motivo. Entre los años 1973 y 1983 durante la dictadura en Chile se 1/2 Teatro / Performance Miércoles, 08 de Enero de 2014 15:43 solicitaron 5 mil 400 recursos de amparo (Hábeas corpus) de los cuales sólo se confirieron 10. Mi performance explora el Palacio de Tribunales como emblema del rol de la justicia durante la dictadura en Chile. Entretejiendo datos históricos y notas autobiográficas interrogo la relación entre este lugar y las políticas de la memoria y el olvido” señaló Contreras antes de realizar su performance. En el acto performista se hizo alusión a los recursos de amparo solicitados en dictadura en los Tribunales de Justicia, pero también los espectadores vieron la destrucción de una carta firmada por un familiar de María José Contreras, vinculado a las fuerzas armadas, que intentaba exculpar su responsabilidad en la desaparición de cinco frentistas. Esta carta fue custodiada por el padre de la performer quien en su lecho de muerte, le pidió a Contreras que la destruyera. María José, quién está con un avanzado embarazo, completó la presentación aportando sonoridad al edificio con pelotas, la grabación de una niña y sus pasos. Finalmente, dicho acto generó una conversación entre los asistentes respecto a la memoria, la corporalización y el espacio simbólico-institucional. 2/2