Camino de perfección Proverbios 4:18 Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, Que va en aumento hasta que el día es perfecto. Este proverbio habla de los caminos de los malos, sobre cómo son las acciones de los malos, las actitudes y de cómo sus cerebros se preparan para hacer el mal. Dice que ni duermen, si no le han hecho mal a alguien, o si no han hecho caer a alguno. Así son los malos. Pero… ¿Cómo son los caminos del cristiano? La senda, esto quiere decir, el caminar, el actuar del diario vivir, las conductas de los creyentes, son como la aurora. La aurora es la luz rosada, que aparece justo antes de la salida del sol, es el rayo final del espectro de la luz blanca. Nuestro caminar es como esa luz. Antes de conocer a Cristo, estábamos en tinieblas, caminábamos en tinieblas, como muchos que aman más las tinieblas que la luz, por eso siguen en tinieblas, pero nosotros al aceptar a Cristo, comenzamos a dejar las tinieblas, porque la luz de Cristo comienza a resplandecer sobre nosotros, es decir, comenzamos a dejar de estar en oscuridad, la noche comienza a pasar, y comienza nuestra mañana, por eso somos como la aurora. Juan 8:12 Jesús les habló otra vez, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida. Juan 12:46 Yo, la luz, he venido al mundo, para que todo el que cree en mí no permanezca en tinieblas. Juan 1:9 Existía la luz verdadera que, al venir al mundo, alumbra a todo hombre. Al venir Cristo a nuestras vidas, comenzamos un camino de iluminación de nuestras vidas, nuestras viejas y malas actitudes, comienzan a dejarnos, nuestras tinieblas se comienzan a ir, o por lo menos, esa es la idea, así debiera de ser. 2. Que va en aumento, hasta que el día es perfecto. Todos los que estamos aquí, hemos sido ya alumbrados con la luz de Cristo, es decir, ya fuimos aurora, ahora debemos esforzarnos por comenzar a llegar al día perfecto. Esto se hace con ayunos, oraciones, consagraciones, alejándonos de malas amistades etc. Pero lo que hagamos, debemos preocuparnos con urgencia, como si fuera el último día Dios cuando nos llama, estamos totalmente imperfectos, pero esto lo hace, no porque le sirvamos así, sino que como dice el salmo 101:6. El que ande en camino de perfección, éste me servirá, es decir, debemos estar constantemente perfeccionándonos en la fe, en nuestro caminar. Salmos 101:6 Mis ojos pondré en los fieles de la tierra, para que estén conmigo; El que ande en el camino de la perfección, éste me servirá. Efesios 4:12 a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo, 4:13 hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo; 4:14 para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error, 4:15 sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo, 4:16 de quien todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir edificándose en amor. Dios quiere cambiar nuestro estado actual, para llevarnos a un nivel espiritual superior, pero… ¿Ud quiere?