Subido por Ana Maria Gracia Soto

Evaluación ABP.

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EL ABP EN LA ENSEÑANZA DE LA HISTORIA
La evaluación
continua en el ABP
Martha Cecilia Gutiérrez
Diana Marcela Arana
Universidad Tecnológica de Pereira (Colombia)
Este artículo presenta y analiza una experiencia de evaluación continua
mediante el aprendizaje basado en problemas (ABP) realizada por una
profesora que enseña la diversidad étnica a un grupo de grado cuarto de
básica primaria. Los resultados muestran que el ABP es una estrategia viable
para integrar la enseñanza, el aprendizaje y la
PALABRAS CLAVE
evaluación del conocimiento social, ya que permite
• APRENDIZAJE BASADO EN PROBLEMAS
a la docente el seguimiento del proceso y a los
• CONOCIMIENTO SOCIAL
estudiantes, dar sentido al aprendizaje y vincularlo
• EVALUACIÓN CONTINUA
con la vida cotidiana.
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Íber
Didáctica de las Ciencias Sociales, Geografía e Historia • núm. 88 • pp. 25-29 • julio 2017
EL ABP EN LA ENSEÑANZA DE LA HISTORIA
E
l ABP es una estrategia didáctica del
constructivismo que promueve la integración de la enseñanza, el aprendizaje
y la evaluación, con objeto de que los
estudiantes vinculen lo aprendido con situaciones
cotidianas relevantes y desarrollen competencias.
La importancia del ABP en la enseñanza de las
ciencias sociales radica en la relación con problemas
sociales significativos que ayudan a los estudiantes
a entender la complejidad del conocimiento social
y a desarrollar la competencia social y ciudadana
(López, 2011). De ahí la relevancia de trabajar esta
estrategia con niños de la educación básica, para que
aprendan desde edades tempranas a identificar causas y consecuencias, a explicar, interpretar y argumentar hechos que les permitan tomar decisiones
y participar en la vida social de manera informada.
Entender el proceso educativo de manera integrada
centra la evaluación en situaciones de aprendizaje
de la vida real que requieren un conjunto de conocimientos, habilidades y actitudes diferentes a los
exámenes orales o escritos tradicionales. En el ABP
la evaluación es continua, lo cual facilita al docente
el seguimiento permanente del proceso y de los
resultados del aprendizaje en los estudiantes.
El carácter pedagógico de la evaluación continua en el
ABP radica en la posibilidad de construir un sistema
real para conocer lo que los estudiantes aprenden, lo
que saben y lo que pueden aplicar del conocimiento
adquirido. Se trata de una finalidad formadora y formativa que potencia y mejora la enseñanza y el apren-
■
Entender el proceso educativo de
manera integrada centra la evaluación
en situaciones de la vida real
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Didáctica de las Ciencias Sociales, Geografía e Historia • núm. 88 • julio 2017
dizaje (Coll et al., 2007). La intención formadora se
relaciona con la posibilidad de reflexión y regulación
de los estudiantes sobre sus procesos de aprendizaje,
mientras que la formativa se refiere a la ayuda educativa docente para promover el aprendizaje.
En el contexto de la reflexión anterior, el propósito
de este artículo es presentar y analizar una experiencia de evaluación continua de una profesora
de educación básica con un grupo de niños de
grado cuarto de una escuela rural.
La experiencia corresponde a una unidad didáctica sobre la diversidad étnica, planeada mediante
el ABP, con el objetivo de que los estudiantes
reconozcan las diferencias étnicas existentes en el
entorno y que acepten y valoren las diferencias.
El problema social relevante (PSR) abordado en dicha
unidad didáctica es la discriminación entre los grupos
étnicos que conforman la comunidad a la que pertenecen los estudiantes (indígenas provenientes de la
comunidad Embera Chamí y mestizos). Esta situación
es aprovechada por la profesora con fines pedagógicos
para la elaboración del problema de aprendizaje.
La situación problema construida con el grupo se
sintetiza así: llega a la escuela un niño de la comunidad Embera Katío, quien se asombra al encontrarse con niños diferentes a los de su comunidad.
Esta situación origina una serie de preguntas para
la indagación, relacionadas con el origen étnico
de las familias, sus costumbres, tradiciones, organización social y leyes que los gobiernan, así como
las semejanzas y diferencias entre grupos y las
posibilidades de convivencia pacífica.
Para la búsqueda de soluciones a la situación problema se sigue el proceso del ABP descrito en el cuadro
1, con las correspondientes actividades y criterios de
valoración, que se presentan a continuación.
La evaluación continua en el ABP
Momentos del ABP
Formas y secuencia
de la actividad educativa
Formas y secuencia
Evidencias para la evaluación
de la actividad educativa
Criterios para la valoración
del proceso
Identificación de la
situación problema
• Presentación en mesa
redonda de relatos con
situaciones de discriminación
social.
• Elaboración de dibujos y
mapas mentales con la
situación problema.
• Reflexión para la
identificación de saberes
previos.
• Formulación conjunta de
preguntas para la indagación.
• Relatos de los estudiantes con
situaciones de discriminación
social.
• Representación del problema
y de las preguntas en dibujos,
mapas mentales y relatos.
Se considera:
• La naturaleza y complejidad
del problema.
• La pertinencia de la situación
problema y la posibilidad de
dar respuestas a las preguntas
formuladas.
Elaboración
del plan
• Lluvia de ideas con posibilidades
de solución del problema.
• Conformación de grupos para
la elaboración de planes de
trabajo.
Esquemas con planes de trabajo
para la solución del problema.
• El respeto a las ideas o
aportes de otros.
• Secuencia lógica de la
programación para la solución
de la situación problema.
Seguimiento y tutorización de
cada grupo en la realización de:
• Entrevistas a miembros de la
comunidad.
• Elaboración de esquemas,
mapas conceptuales, cuadros
comparativos y árboles
genealógicos, entre otros.
• Socialización y
retroalimentación de
esquemas, cuadros y mapas
entre estudiantes y grupos de
trabajo.
• Cuadros comparativos con lo
común y las diferencias de los
grupos étnicos.
• Árboles genealógicos.
• Mapas conceptuales
individuales y grupales sobre
diversidad étnica.
• Cuestionarios para realización
de entrevistas.
• El respeto a las ideas o
aportes de otros.
• Explicaciones individuales
y grupales de los mapas,
esquemas, árboles
genealógicos…
• Mapas con los conceptos
fundamentales y relaciones
adecuadas.
• Participación asertiva en las
actividades grupales.
• Disposición y respeto a la
diferencia en el trabajo en
grupo y a los aportes de otros.
• Apoyo en la planeación de
«feria de la diversidad» para
socializar y compartir los
resultados con la comunidad
educativa.
• Planeación de estands con
socialización del material
elaborado durante la
experiencia.
• Socialización de la experiencia
a la comunidad y respuestas a
preguntas de los invitados.
• Información de los estands.
• Relación entre la situación
problema y las soluciones.
• Respuestas a las preguntas
formuladas.
• Respeto y tolerancia ante
ideas o conceptos de
miembros de otros grupos
étnicos.
Recolección
de datos
y comprensión
de la información
Planeación y
socialización de
resultados
Cuadro 1. Síntesis de una experiencia de enseñanza y evaluación con ABP en educación básica (Fuente: Adaptado de Reyes
y Cardona, 2016)
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Didáctica de las Ciencias Sociales, Geografía e Historia • núm. 88 • julio 2017
EL ABP EN LA ENSEÑANZA DE LA HISTORIA
ANÁLISIS Y REFLEXIÓN
DE LA EXPERIENCIA
•
Con respecto a los diversos momentos de la evaluación continua, la profesora inicia su cometido
con un diagnóstico cuyo fin es identificar los conocimientos previos y las necesidades de aprendizaje
(dibujos, mapas, relatos…). Del diagnóstico se
deriva la construcción de la situación problema,
así como la planeación y búsqueda de soluciones,
que se concreta en árboles genealógicos, mapas
conceptuales, entrevistas y otros documentos a los
cuales la profesora les hace seguimiento. Al finalizar
la unidad didáctica, la docente evalúa la compresión
del tema y la capacidad para relacionar el problema
con las soluciones a través de una actividad de
socialización (estands en la feria de la diversidad).
El proceso descrito coincide con el planteamiento
de Torp y Sage (1998, p. 142), quienes afirman que
el propósito de la evaluación en el ABP es «orientar
la enseñanza y mejorar el aprendizaje».
•
En la experiencia descrita se identifican los
siguientes momentos y características de la evaluación continua…
En cuanto a la intencionalidad formativa y formadora de la evaluación continua, en la experiencia descrita se observa que la profesora:
• Identifica necesidades de acompañamiento a
medida que revisa y retroalimenta esquemas,
cuadros, relatos, entre otros recursos, y ofrece
ayudas educativas durante el proceso de solución del problema en los pequeños grupos.
■
Del diagnóstico se deriva
la construcción de la situación
problema y la búsqueda
de soluciones
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Vincula el conocimiento social (diversidad
étnica) con un problema social relevante
(discriminación racial), para relacionar teoría
y práctica, que son dos componentes inseparables en la formación de la competencia
ciudadana y social (López, 2011).
Respeta los ritmos y estilos de aprendizaje
al brindar apoyo y tutoría en función de los
avances, dificultades y ritmos de los pequeños
grupos que se conformaron para la solución
del problema. De acuerdo con Álvarez (2011),
la evaluación debe constituir una oportunidad para conocer no solo lo que los estudiantes saben, sino lo que pueden aprender y
hacer con el conocimiento adquirido.
En la intencionalidad formadora de la evaluación
se observa que los estudiantes:
• Se responsabilizan del aprendizaje, puesto
que hacen sus propias rutas para la solución
del problema y para la socialización de la
experiencia a la comunidad.
• No solo comprenden contenidos, sino que
también los relacionan con situaciones de
la vida cotidiana (entrevistan a gente de la
comunidad) y con la vida personal cuando
expresan respeto para con ideas o conceptos
de otros compañeros.
• Aprenden a dialogar, compartir, debatir, comparar, interpretar, argumentar ideas o conceptos relacionados con la diversidad étnica, que
los involucran en las dimensiones cognitiva,
emocional y relacional del aprendizaje del
conocimiento social; según Newman (1990),
citado por Torp y Sage (1998), estas dimensiones son inseparables. El desarrollo de habilidades de orden superior como las observadas en
los estudiantes no se dan en la enseñanza tradicional, sino mediante la solución de problemas
de la realidad social (Torp y Sage, 1998).
La evaluación continua en el ABP
El propósito de la evaluación en
el ABP es «orientar la enseñanza
y mejorar el aprendizaje»
coherente con los objetivos propuestos para que
facilite a los niños la comprensión crítica de la
realidad social.
■
Referencias bibliográficas
En esencia, tanto los momentos de la evaluación
continua en el ABP como el cumplimiento de la
intencionalidad formativa y formadora evidencian que la integración de esta con la enseñanza
y el aprendizaje del conocimiento social es un
camino posible para un cambio en la enseñanza
de las ciencias sociales en la educación básica
que permita a los estudiantes la comprensión y
transformación de la realidad social.
ÁLVAREZ, J.: Evaluar para conocer, examinar para
excluir. Barcelona. Graó, 2011.
COLL, C. et al.: «Evaluación continua y ayuda al aprendizaje. Análisis de una experiencia de innovación con
apoyo de TIC». Revista Electrónica de Innovación
Psicoeducativa, vol. 13(5), 2007, pp. 783-804.
LÓPEZ, R.: «Los conflictos sociales candentes en el
aula», en PAGÉS, J.; SANTISTEBAN, A. (coords.): Las
cuestiones socialmente vivas y la enseñanza de las
ciencias sociales. Barcelona. Universidad Autónoma
de Barcelona, 2011, pp. 65-91.
CONCLUSIONES
REYES, A.; CARDONA, D.: El reconocimiento de la
El análisis de la experiencia muestra que la evaluación continua en el ABP contribuye a la
formación del pensamiento social y al desarrollo
de la competencia social y ciudadana como finalidades de la enseñanza de las ciencias sociales en
la educación básica.
La integración y coherencia entre la evaluación
continua y la enseñanza facilitó a la profesora de
la experiencia analizada la elaboración de criterios de valoración del proceso de aprendizaje
individual y grupal de los estudiantes.
El trabajo en grupos pequeños donde los estudiantes socializan y retroalimentan los avances
individuales y grupales para la solución de la
situación problema muestra, por un lado, que
la evaluación es un elemento inherente al proceso de enseñanza que permite a la profesora hacer
un seguimiento del aprendizaje del conocimiento
social. Y, por otro, evidencia que cada actividad
realizada en la experiencia didáctica debe ser
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diversidad étnica en una experiencia educativa rural.
Pereira. Universidad Tecnológica de Pereira, 2016.
TORP, L.; SAGE, S.: El aprendizaje basado en problemas:
Desde el jardín de infantes hasta la escuela secundaria. Buenos Aires. Amorrortu, 1998.
Direcciones de contacto
Martha Cecilia Gutiérrez Giraldo
Diana Marcela Arana Hernández
Universidad Tecnológica de Pereira (Colombia)
[email protected]
[email protected]
Este artículo fue solicitado por Íber. Didáctica
de las
Ciencias Sociales,
Geografía e Historia en diciembre de 2016 y aceptado en abril de 2017
para su publicación.
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