El aborto Aborto es la finalización de la gestación, antes de que el feto alcance la edad gestacional suficiente para sobrevivir fuera del vientre materno. Terminación inducida del embarazo para destruir al feto. OMS: Según la Organización Mundial de la Salud, con el objetivo de unificar criterios y no subestimar la muerte del feto, en 1977 definió el aborto como: “La expulsión o extracción uterina de un embrión o feto de 500 g o menos”. Más tarde, la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), estableció la edad gestacional de 22 semanas, que coincide aproximadamente con el peso establecido por la OMS. Clasificación del problema El aborto también se puede clasificar en: - - Aborto inducido, donde encontramos aborto terapéutico; que es cuando se interrumpe por razones médicas y el aborto electivo o voluntario que se realiza por elección de la madre bajo su criterio. Aborto espontaneo donde hay una expulsión espontánea de un embrión o de un feto de menos de 500 g o antes de las 20 semanas de gestación. Producido de forma natural. MÉTODOS DE INTERRUPCIÓN: El aborto puede ser inducido de diversas maneras. La elección va a depender de: – El tiempo de gestación o desarrollo del embrión o feto – La salud de la madre – Del contexto socioeconómico dónde se tome la decisión y se realice el acto – Del acceso a los servicios sanitarios – De los límites puestos por legislación. Existen dos posibilidades para realizar la interrupción voluntaria del embarazo (IVE): INDUCCIÓN MÉDICA: Se administran medicamentos que facilitan la expulsión. Esta es la forma menos traumática. En principio es la de elección, sobre todo en gestaciones del segundo trimestre dónde la evacuación quirúrgica conlleva sus riesgos. EVACUACIÓN QUIRÚRGICA: Se realiza mediante la dilatación cervical y la posterior evacuación mediante aspiración con bomba de vacío o legrado uterino. Problemas bioéticos del tema Desde el punto de vista de la bioética se sostiene que la persona humana existe desde el momento de la fecundación y por lo tanto el aborto seria considerado un homicidio y un infanticidio. Además, nos dice que reconocer a la persona humana desde la concepción implica aceptar la existencia de los derechos naturales. Los avances científicos han permitido diagnosticar enfermedades genéticas o mal formaciones, y gracias a esto se puede prevenir este tipo de enfermedades, pero aun así esto no nos autoriza a destruir una vida en su comienzo. Aborto y cristianismo La fe cristiana se opone al aborto porque considera que la vida humana, en todo su desarrollo, es un valor primero en toda escala de valores éticos, que debe ser salvaguardado; porque si existe una obligación de proteger y defender la vida humana, esta obligación es aún más urgente cuando se trata de una vida desamparada, que no puede hacer valer sus propios derechos. Porque piensa, finalmente, que el valor de la vida humana es tan fundamental que debe ser cuidadosamente protegido, aun en aquellas ocasiones en que no existe absoluta certeza, aunque sí argumentos serios, que abogan por la calidad humana del embrión (como puede ser el comienzo del embarazo). para el cristianismo, el nuevo ser que se está desarrollando en el seno de la madre no es un mero apéndice de aquélla, ni un mero proceso biológico, sino una realidad humana distinta, objeto ya de la providencia de Dios. Percepción personal