Subido por Virginia Herrera

FUNDAMENTOS DE PRUEBAS DIAGNÓSTICAS

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FUNDAMENTOS DE PRUEBAS
DIAGNÓSTICAS
INTRODUCCIÓN
Los anticuerpos son glucoproteínas que se unen específicamente, tanto dentro del animal, como en distintos
materiales de laboratorio, a determinados epítopes (determinante antigénico constituido por 10-15 aa, que es reconocido por
un Ac). Estos anticuerpos se encuentran en los líquidos y secreciones orgánicas, como sangre, leche o secreciones vaginales, en
los que pueden establecerse su especificidad (determinación cualitativa) y/o concentración (reacción cuantitativa), mediante la
aplicación de las pruebas inmunológicas. Estas expresan indirectamente la respuesta inmune mediada por Ac, inducidos en el
organismo por sustancias o partículas extrañas al mismo.
Las reacciones Ag-Ac se desarrollan, in-vitro, en dos etapas. La primera comprende la unión específica entre el sitio
activo del Ac y los epítopes correspondientes del Ag. La segunda etapa, genera un fenómeno visible (precipitación o
aglutinación). La primera etapa no se detecta visualmente mientras que la segunda puede ser fácilmente revelada. En el caso
particular de los haptenos, la segunda etapa puede no ser completa y bajo ciertas condiciones, estar ausente. La velocidad de
las reacciones es diferente: ya que en la primera es rápida mientras que la segunda puede llegar a ser muy lenta en comparación
con la anterior.
Dada la especificidad de la reacción Ag-Ac, esta ha sido utilizada para la identificación de microorganismos o sus
productos y para la identificación de Ac séricos, principalmente con fines diagnósticos.
Toda prueba requiere de un medio con un medio con pH determinado. Generalmente el neutro favorece la mayoría de
las reacciones (7,3-7,5), aunque ciertos isotipos de IgG reaccionan mejor a pH ácido (ej: en brucelosis con Ag acidificados en que
la IgG1 se encuentra activa, mientras que la IgG2 y la IgM están inactivas.
La presencia de electrolitos es necesaria para la aglutinación de las bacterias, aunque la combinación del Ac con el Ag
puede efectuarse en su ausencia. Esta reacción es favorecida por el aumento de las concentraciones salinas, pero si son muy
elevadas inhiben la reacción.
La velocidad es directamente proporcional a la temperatura en el rango de 0º a 37º. Por encima, la velocidad de unión
puede aumentar muy poco, teniendo como límite los 46ºC donde comienzan a alterarse los Ac.
Las técnicas inmunoserológicas se pueden clasificar en 3 categorías:
1.
2.
3.
Pruebas primarias, que miden directamente la unión de Ag con Ac.
Pruebas secundarias, que miden el resultado de la unión Ag-Ac in-vitro, con menor
sensibilidad, pero más fácil de realizar.
Pruebas terciarias, que miden el efecto protector de los Ac en el animal, in-vivo
PRUEBAS PRIMARIAS
TÉCNICAS INMUNOHISTOQUÍMICAS
Aptos para determinar la presencia de Ag en la superficie de células, bacterias y parásitos o para la detección de
microorganismos en materiales infectados.
Se basan en la aplicación de reacciones Ag-Ac únicas o secuenciales, altamente sensibles y específicas, que se
evidencian con distintos métodos.
Para la determinación de IHQ en cortes de tejido, es necesario que sea cortado por congelación (para técnicas de
inmunofluorescencia) o incluidos en parafina. También pueden ser aplicadas a materiales de estudio citológico; improntas de
tejido, líquidos de cavidades, extendidos cérvico vaginales, cepillados prepuciales, lavados y aspirados.
INMUNOFLUORESCENCIA
Los fenómenos de fotoluminiscencia son aquellos en los que se produce la emisión de luz por efecto de distintos tipos
de radiaciones. En la fosforescencia, cuando cesa el estímulo, el cuerpo irradiado sigue emitiendo luz, mientras que en la
fluorescencia dicha emisión cesa con la excitación.
La radiación proviene de los rayos UV (originados en un microscopio de fluorescencia) y las sustancias que reaccionan
son la fluoresceína, rodamina y naranja de acridina.
El principio básico es utilizar un Ac marcado con una sustancia fluorescente para detectar la presencia de Ag en los
tejidos.
En la Inmunofluorescencia directa los anticuerpos marcados con la sustancia fluorescente reaccionan directamente
con el Ag presente el en tejido. En la inmunofluorescencia indirecta, el Ac primario no se conjuga con la sustancia
fluorescente, ya que esta se encuentra unida a un segundo Ac (anti anticuerpo marcado), que se halla dirigido contra las Ig’s del
animal del cual se obtuvo el Ac primario. Al aumenta la cantidad de sitios activos de los antisueros marcados, se amplifica la
reacción y por ende la sensibilidad del sistema.
TÉCNICAS DE INMUNOPEROXIDASA
Conjunto de métodos de inmunoreacción que tienen en común la enzima peroxidasa (que puede ser reemplazada por
fosfatasa alcalina). Estas enzimas están acopladas a un Ac y otras sustancias y su revelado por medio de técnicas de
histoquímica enzimática, permite localizar Ag contra el cual se halla dirigido el Ac.
Al igual que el anterior hay métodos directos e indirectos. El directo, el Ac específico dirigido contra el Ag que se desea
encontrar se halla conjugado con peroxidasa. La reacción consiste en incubar el Ac marcado con el tejido que contiene el Ag
buscado. Se revela la enzima con soluciones de cualquier cianógeno, siguiendo el principio de la reacción E+S=ES= P+E.
En el indirecto, el Ac primario o específico no se halla marcado, sino el anti Ac al igual que en la inmunofluorescencia.
ENZIMOINMUNOENSAYOS
Los fundamentos son similares a los de la inmunofluorescencia, de los que se diferencia en que se emplean Ac para la
determinación directa y anti Ac para la indirecta marcados con una enzima capaz de desarrollar una reacción coloreada. La
enzima utilizada es la peroxidasa y el sustrato el agua oxigenada.
ELISA (“ENSAYO DE INMUNOABSORCIÓN CON LIGADURA DE ENZIMAS”)
Permite determinar en forma cuantitativa la concentración de Ac o Ag mediante el uso de uno de ellos en fase sólida y
otro en solución. Por lo general, el material fijado a la fase sólida es aquel cuya presencia o concentración se quiere determinar.
A este se fija un Ac específico marcado con una enzima (directo) o un complejo Ac-anti Ac marcado (indirecto) el cual puede
ser puesto en evidencia mediante la adición del sustrato.
El método competitivo es una variación del original que detecta Ac’s en las muestras. Se basa en el principio de la
unión de los Ac a los Ag presentes en los tejidos y posterior inhibición de un Ac ligado a una enzima que reacciona con el Ag
(competencia de unión). En este método la ausencia de color denota una reacción positiva. La cuantificación de la reacción se
realiza por medio de un lector de densidad óptica con el filtro adecuado a la enzima y el sustrato utilizados.
PRUEBAS SECUNDARIAS
PRECIPITACIÓN
La mayoría de los Ac tiene la capacidad de formar una malla que, al atrapar al Ag soluble, resulta muy pesada como
para mantenerse en solución. Sin embargo, no siempre se observará reacción cuando haya correspondencia de Ag-Ac. Este
efecto solo se logra cuando hay equivalencia en la concentración de ambos reactantes. Tanto el exceso de Ag como de Ac
inducen a una escasa precipitación. Los resultados pueden interpretarse por el hecho de que los Ac son divalentes, pudiendo
unirse solo a dos epítopes por vez, mientras que las proteínas antigénicas son generalmente multivalentes, presentando gran
cantidad de epítopes. En una mezcla que contiene exceso de Ac , cada molécula de Ag se cubre con un Ac, previniendo así la
precipitación. Ante el exceso de Ag, cada Ac se une solo a un par de Ag y por lo tanto no se forma la malla , los conjugados se
mantienen solubles y no se observa precipitación.
Se realizan en medios líquidos y semisólidos.
Para la precipitación en medios líquidos se deben mezclar volúmenes similares de Ag y Ac, interpretando la prueba
positiva, en aquella donde se observa turbidez. La misma prueba debe ser evidenciada con mayor claridad si se evita la mezcla
de ambos volúmenes, pudiendo observar un anillo en la interfase de los líquidos, cuando haya correspondencia inmune (prueba
Ascoli-Valente para Antrax).
Pueden ser cualitativas solo si se desea saber cual es el Ag contra el que reaccionan los Ac o cuantitativas, si se realizan
diluciones seriadas del suero o del Ag.
Para la precipitación en medios semisólidos se usan las pruebas de inmunodifusión e inmunoelectroforesis. La
inmunodifusión en agar se basa en el hecho de que la mayoría de las proteínas difunden a través de un gel. Si los Ac contactan
con el Ag mientras migran, se forma una banda de precipitado en el punto donde ambas concentraciones alcancen la
equivalencia (AIE o Leucemia bovina).
La inmunodifusión radial (variante de la precipitación en placa) que permite realizar determinaciones cuantitativas de
Ag o de Ac. El suero sembrado en la fase semisólida, al igual que el Ag sembrado en el pocillo, difunden radialmente. En la
reacción positiva se formará un halo de precipitación alrededor de un pocillo conteniendo una concentración conocida de Ag. El
diámetro del halo, en la zona de equivalencia, estará relacionado con la concentración del Ac.
La electroinmunodifusión es un método cuantitativo que permite que un Ag difunda en el agar que contiene el
antisuero. En este caso el Ag es dirigido dentro del gel por medio de la electroforesis. Las líneas de precipitación que se forman
entre el Ac y el Ag siguiendo la dirección de la corrida dan origen a la denominación de esta técnica (electroforesis de cohetes).
Se utiliza para detectar clases de inmunoglobulinas o proteínas del complemento en plasma. También para la detección de
inmunodeficiencias o excesos de inmunoglobulinas.
AGLUTINACIÓN
Cuando un Ac reacciona con un Ag particulado (GR, bacterias, células). Los mismos Ac que presentan la capacidad de
precipitar, también pueden inducir la aglutinación, hecho que depende exclusivamente del estado del Ag (en solución o en
suspensión).
Los principios son los mismos que para la precipitación (formación de mallas). En la aglutinación, la presencia de
electrolitos de carga opuesta en la solución de reacción o en los líquidos corporales, neutralizaría en parte las cargas
superficiales de las partículas antigénicas, evitando el rechazo entre ellas y asegurando la aproximación indispensable para que
una molécula bivalente de Ac pueda iniciar la formación de grumos, que llevaría a la aglutinación específica.
Los métodos cualitativos permiten determinar la presencia de bacterias en el suero, si se dispone de sueros
monoespecíficos. Los métodos semicuantitativos determinan cual es la máxima dilución del suero capaz de aglutinar al Ag
específico. La variación del título de Ac puede ser muy útil para seguir la evolución de una infección. La IgM aparece en forma
temprana (con mayor capacidad aglutinante) seguido por la IgG y la IgA.
La cuantificación de Ac por aglutinación puede realizarse mediante reacciones de lectura lenta o rápida, siendo esta
última mas usada en serología diagnóstica de la brucelosis o salmonelosis.
En forma similar a la precipitación, el exceso de Ac induce la inhibición de la aglutinación (prozona). También se puede
observar cuando un Ac se une específicamente al Ag no pueden inducir la aglutinación (Ac asimétricos). Posiblemente la
presentación de epítopes en la porción profunda de la superficie de la partícula antigénica impida el entrecruzamiento Ag-Ac.
Para ello se recurre a la aglutinación indirecta, donde el suero e es incubado con partículas antigénicas, las cuales adsoben los
Ac asimétricos. Luego de remover los Ac no ligados, las partículas restantes se miden con suero antigamaglobulina. Cuando
esta reacciona con los Ac adheridos , induce la aglutinación de las partículas.
Esta técnica es mas sensible que la precipitación.
Algunos virus tienen la particularidad de combinarse con receptores presentes en la superficie de GR y aglutinarlos. En
este principio se basa la prueba de hemaglutinación. La prueba de inhibición de la hemaglutinación expresa la capacidad que
presentan ciertos Ac antivirales específicos para impedir la combinación del virus con los hematíes.
FIJACIÓN DEL COMPLEMENTO
El complemento, en su fase final puede inducir la lisis del Ag particulado (bacteria, GR, etc) a través de su unión con el
Ac específico (generalmente IgG). Permite valorar tanto la presencia de Ac como de Ag, mediante un sistema indicador
específico hematíe-hemolisina (sistema revelador) que puede fijar el complemento.
Si hay correspondencia entre la cepa viral a identificar y un Ac específico conocido, el complemento agregado al
sistema se unirá al inmunocomplejo. La posterior incorporación del sistema hemolítico inducirá la sedimentación del mismo
(positivo). Si por el contrario, no existe correspondencia inmune entre el Ag y el Ac, el complemento se fijará al sistema
revelador produciendo la hemólisis (negativo).
PUEBAS TERCIARIAS
Si un organismo o Ag posee actividad biológica, es posible experimentar con Ac para neutralizar dicha actividad. Estas
reacciones incluyen la hemólisis de eritrocitos, lisis de células nucleadas y la posibilidad de inducir la enfermedad y la muerte de
animales.
NEUTRALIZACIÓN
Estima, in-vitro, la capacidad de un Ac, en contacto con un Ag, para neutralizar su actividad biológica. Son utilizadas
para identificar toxinas bacterianas.
Las pruebas son altamente específicas y extremadamente sensibles. Consisten en la incubación de un Ag y un Ac y su
posterior valoración biológica. Si se conoce la capacidad infectiva de un virus se pueden realizar dos tipos de pruebas de
neutralización. En la primera, la concentración viral se mantiene constante, realizando diluciones seriadas del antisuero. Asi es
posible determinar la capacidad neutralizante de un suero. Inversamente se puede mantener constante la concentración sérica
y diluir el Ag viral.
La valoración biológica de la efectividad se puede realizar sobre cultivos celulares o sobre animales vivos. En los
primeros se puede determinar la capacidad de inhibir el efecto citopático, la capacidad de hemólisis o la incapacidad para
dividirse medido por la acidez del medio de cultivo. En los segundos se medirá la inhibición de los procesos mórbidos y hasta la
muerte del individuo.
PROTECCIÓN
Las pruebas son semejantes a las de neutralización solo que realizadas in-vivo. La capacidad de protección que posee
un suero puede ser valorada mediante su inoculación en diluciones seriadas en un grupo de animales de laboratorio, para luego
desafiarlo con el Ag. El valor de protección de los sueros se expresa como Dosis Protectiva 50% (DP50) que es aquella que
protege al 50% de los animales inoculados.
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