GANGRENA DE LA BOCA

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FACULTAD
DE (:OLOMBfA
DENTAL
de Bogotá
CONTRIBtCION AL ESTUDIO
nE LA
GANGRENA DE LA E'OCA
TESIS
DE
DOCTORADO
Eudoro Romírcz O.
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s·:,u~~~A~0(;.\,~.;'J"'i
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.A mis q uer1d.os padres
En
testimcnlc de gratitud
.A.mis hern'lanos
En
~
prueba de canft.c
rru 'Presidente
de
cr esis.
Presidente de TESIS,
!IJoctO't 6J,ua'ído ffe~'t'íe'ta,
:Mf;DICO y CIRUJANO.
Jurado de CALIFICACION:
e/' octc't ()!(oae¡tun
,
e 6ana,
.,oom
.MÉDICO y CIR\JJ~Ó.
9)octO'í
f)70cwuel
¿¡;gc:teaga
ffG"
CIRUJANO DE~'fISTA.
g)octo't 8bafael ¡;óme~fl.
CÍRl"JANO DHN1'ISTA.
INFOlnIE DEL PRESIDE~TE DE TESIS
---•...•-..---
Presente.
¿,:t~ ú.,J
¡'¿a/c¿
.Bugotit., Mayo 27 de 1U07.
----_.--_. ----.--~---.Facultad
Publíquese.
Drliftl}
de JJ(l~/otá.
El Rector,
NOlARL
Y,\zr~lJE""
INTRODUCOION"
.-...•.-...
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(J0Il1]JI'I'WIP111()í!
llar en fRIe trfl!in}o,
J'lie.,; l)('r"~1te(;(' de
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(i uttet:t'/'os alr{(,1/('p'iI,
deredw 11UT.'<;{ripl/. (¡ la Mpdic'ina en
á una rama d(~ dh¿,. así romo landr/én
('.') slIp('r/{J)'
los poro,,; da/Oí> que 81¿1ninisl1·o}1. lo.~ dÚ·pnw.'t (f uto'u:s
q/(e lum (,S(,I i!v sulre la, matCi'ia?1 cuya.'! obra:.; hemos
cunslIltl/do.
no es pOf~ible tralal' de 1({. gnn,r¡ren(l, de la
prel"in idea de 1/1 7Zoful'a{¡'.:a y roracle1·e.~ dI; In (~/uí,,.m('dnd en yenej'fll,
)/1)8 ha Nlr/O 11('/'e8(1'rI0
l¿n,cN (119/111//8 Uf/tinI8 "jJllulacit-mn;
(/Ctrca
de rllo,
l'ora !~(riliif/'I' lI/11:811'U e~ll!diu lo "CI/Lo::; divÚlido
('()1?11l
lJOf:II,
sin
te.W'I·
de Z(¿ IIww;ra
si!J7!iellte :
CAPITULO
I
Generalidades sobre gangrena-Gangrena
de la boca.-Histo
l'ia-Etiología-Anatom
a patológica.
OAPITULO
II
Causas-E.'ectos de la gan:;rcna Sintomatolog~aMarcha. ctc,- Dií1gnóstico- Proncstico - Tratamiento
CONTRIBUGION AL ESTUDIO
Gi\NGRENi\. DE L~L\BOCA
•
CAPITULO
1
GENERALIDADES
La gang1'cna es la mortificaci()n de 108 tejidos
orgánicos, la detenciÓn de la circnlaciÓn y de In.inervació n en un plinto limitado
dd (,llerpo y seguida
de la pérdida de calor y de sensibilidad, la cosasión
del trabajo nutritivo y la transformación
de esta
parte en Hn tejido tlcsorganilado,
pt'ivado de la posibilidad de reellperitr los atribnt.os de la vida y destinnuo á ser eliminado del medio de los órganos vivientes.
Gangrena y e.'if(~celo son sinónimos, pero la palabra cHfacelo se aplica mas especialmente :í las gUD~renas
lIln,)' extcllSUti.
-10 .'1
Se llama escara el colgisjo mortificado que la inflamación separa de las partes vivas. En el tejido'
óseo, la gangrena se llama nec1'osís y la escara secuestre.
Cuando la cansa de la gangrena atrae nna gran
cantidad de líquido, el infarto precedeá la mortificación y luego ésta es seguida de laputrefa.cci6n,
y
lleva el nombre de gang1'ena hÚmeda.
Al contrario, si la causa obra cuagulando los líquidos y 801idificándolos, la parte mortificada disminuye de volumen y las escaras se vuelven duras,
ésta lleva entonces el nombre de gan[1rena seca.
Las gangrenas forman en la patología numerosos grupos, según sea la uniformidad de su aspecto,
de sus cansas, de su marcha y de su gr~vedad.
Las partes monineadás se pl'e8entan bajo el
aspecto de un tejido gris-oscuro, amarillo, negro ó
verde-oscuro cuando ellas están eu contacto con el
aire exterior y raras veces de gris-blanqueoino.
Cuando al contrario, éstas han sido conservadas al
abrigo del contac~o del aire, toman un color rojo
empañado claro ó vinoso; su consistencia es variable, tan pronto húmedas, blandas, putrilaginos8s que,
á la menor presión, se desgarran; tan pronto sólidas,
secas como apergaminauas, de olor característico,
dotado de una fetidez insoportable,espeoial
y distinta de la putrefacción.
Los tejidos gangrenados no conservan casi ninguna señal de organización; los diversos órganos se
confunden y tienden á hacerse homogéneos; las
membranas, el tejido celular, los músoulos, los vaaOR.la gr'asa, ate., no conservan su estruotura.
-11,-
Sin embargo, la mortifi~ación no invade tan rápidamente todos estos tejidos y veremos que en el
centro de las escara s se enCllentran ¡í menudo los
lóbulos grasosos qne han consenado su 3pal'ienei.-t,
]08 vasos con sus
talla vía d isti 11ta~ y eou te.
paredes
niendo en lugar de sangl'e un líquido
en
Ull
grado
más
avanzado,
todas
plÍtrido, pero
estas
señales
de
y los tejidos se vuelven
homogéneos.
La mortificacióll
puede 881' circunscrita 15 dffn3a, es decir, puede invadir una porción li-
organizaciÓn
desaparecen
mitada de los órganof; sin tender á invadir las ¡nI'tes vecinas, ó bien no tener límitB fijo y exteudel'so
en todo sen tido más
mellOS j l'l'egnlul'Ilwn te.
¿
La gangren:l es algnnas veces precedida de nn
proceso illtiamatorio de donde resulta el infarto y el
dolor de la parto q!le va ¡Í, sel' mortificada;
pero en
gener'al e:>.t;08 síntoma:;: son poco jntel\~Os y de }loca
duraci(Ju;
habitualmeute
la mOl'tincación
se estable-
dLts de
UD infarto
ceroso, 6 bien por la dcsc{110ración y desCCII1-;Ode la tempt:'ra.tura de los tejidos qlle van á sel'
ce pronto,
siendo precedida
durante
algunos
afectados.
gangrmw ocupa dPR:le luego un punto limitado, siendo, por ]0 gelleral, el centro de los infartas cerOSOR ¡) inflamatorios
y luego se extiend\',
Si es (:il'c/ws{Tilrt, conserva, por lo genel'n 1, ti Ha
forma ba8tantl~ regular, 'le; l'odea de un eÍt':ulo iuflamatorio originado t!lJ la~ partes vecinas y luego reemplazado por una S11hl1';wión eljminad;}ra; después
la paI'I e mortifica la cae cn SIl tOl ali!\¿ d ó por pedaLa
7.09,
y, e 'm"
una lueet'H.
(on;::c('lIenci;¡
d(,
l,q(·
pruc(';;", se forma
-12 Pero esta forma es la más rara, y ordintLriamen·
te la ganqrena esdifllsa; ella. in vade indistintam~nte
todos los tejidos cercanos hasta que lamuerté sea $\\
conl:leouenoia. Estoil tejidos mortificados se ablandan
y caen mientras que la ga·ngrena avanza.
Los síntomas_generales que 8Compañan la gan .•
grena son bastante variados; algunas 'teceslos enfermos están profundamente debilitados y postrados,
BU rostro descompuesto, ofl'ece de un día-á otro, una
profunda alteración que les vuelve- algunas veces
muy desfigurados; otras' veces lo contrario, conser·
van alguuas fuerzas, se animan, Sé
de lo que'
1
les rodea y comen con apetito.
Este avance general de los síntómas de Iagan .•.
. grena se modifica según la especie y según- las: a fec·cionea concomitantes; estas últim388Qt¡Ias- qile pre ..
dominan siempre en la expresión sintomátka.
En efeoto, las gangrenas existen muy rt\ft\ vez
Bolas; enfermedades de diversa tmttf~~.~l~.~"~
palian generalmente; talea 80n, por-,ej-ertlpló;'los-cBtarros brónqui0'OS, pulrnon~\res é intestinales
y, frecuentemente, ·una. tuberculización
general ó local
que es la enÍenn<3datl dominante. En fin, no es raro
ver gangrenas complioarse entre sí, y varios 6rganos mortificarse simnltáneamente.
Las ganr;renas marchan en general con mucha
rapidez, pero su terminación depende más de las enfermedades que las acompañan que de ellas mismas.
Sin embargo, la. naturaleza del tejido y la .fol"ma de
la mortificaoitSn, influyet;\ evidentemente en la rapidez de la marcha, así la gangrena difusa de las
membranas mucnosas, se extiende más rápidamente
ocupan
ilu:~la ,le b piel
y la dL'
otr0s
()rgfl:1Od.
La
{!f711Qt'P:lHt
1:1 -
sexos y á· todas
en los niños y 80hre
afecta á ambos
ellades, siendo m:l~ especial
todo en los qne yj ven en médio
del desaseo;
el aire
infecto que respiran en piezas poco ventiladas,
donde duermen en g-ran m'nnero y el alimento malo é insuficiente,
son otras tanta~, camms predisponent,~i;.
Esta enfermetlad
es enoérnica
en ciertas
locali-
dades; puede, también, sobrevenir epi<lémicamente
;
mas no existe ninguna pl'ut'ba de qne sea contagiosa. La forma f'pil..lémica es muy notable por su tend~ncja á invadir varios Ór¡.ranos tí la vez.
Las grwgrenrt8, como la mayor pttrte ile las lesiones
orgánicas,
dl~ben ser dividicias
en dos clases
según que ellas sean locales 6 genemles.
Entr':l las primeras
es necesnl'io anotar;
Aquéllas
que resultan
de la aplical..'iÓn
2." Las IJ lIe sobrevimvm
cte.;
0
1.
de cáusticos,
corno consecuencia
de \lna coml.m~siÓll prolongada,
pudiendo
determillar también e¡.;ta ('¡H1Sauna gangrena general, y 3."
I..•as que
resultan
\lna oblitel'aei6n
lhl
arterial.
Una
condición parece indispensable
para qlle se pI'odu~ca
esta. l'íltima clase y es que la obliieracióu
vascular
sea completa y que las f\llu¡;tómosis no puedan
ministrar una circllla('ilín
suplementaria.
Las
gJ"fnas
generales,
bien diferentes
están ligadas á una modificación
la naturaleza
agente
local,
El punto
buscado
de la;; cansa3
bastan
para
de partida
en los estados
en ~l empobrecimiento
las cansas antihigiénicaB
su·
I){j,n-
de las precedeutes,
de toda la economía;
y la ausencia
justificar
de las !j(lngrenas
de debilidad
de un
esta opinión.
debe ser
ú de caquexia. y
de la sangre producido por
y patológicas.
-
14-
También se han investigado las lesiones de 108
aólidos y de los líquidas que determinan la gangrf3!lla.
Muchas han sido l~s teorías emit.idas ~ este
respecto por los autores. Algunos de éstos señalan
como cansa principal la disminuoión de la fibrina y
el aumento de los álcalis en la sangre.
En resumen, creemos qlle las gangrena8 ~nerales s~ desarrollan bajo dos influencias: l.· fll estado caquéctico ó es:x>rblÍtico en los niños, que resulta de las condicione" antihigiénicas en medio de
las cuales viven, y de la prolongación y BUO( si6n de
las enfermedades de que son víctimas, y 2: Un
estado especial determinado por ciertas enfermedades y espeeialmente por el sarampi6n.
GANGRENA
DE LA BOCA
Esta enfermedad es getleralmentemortal
y se
conoce con el nombre de noma, cáncer acuoso, afeec'ión gangrenosa. g(f'ngre1ut negrJ" el c.
Esta Última clase es la más común, consistente
en la mOl'tifi(:ación de los tejido~ de labo¡ a, prin:i·
piando por la mucuosa y eXlendiéndose
con rapidez
en todo el espesor de la pared bucal ocultada por
.una escara negra.
Como ya vimos, la gJ,n[;1"ena aparectl en ambos
sexs y á todas edades, pero más especialmente en
los niños, y es por esto que en el cnrso
nuestro
trabajo nos referiremos á ellos.
ee
_1:)_
HISTORIA
Annque la gangrena <le la h09a es nna enfermodad p(~rfectamente caracterir,ada y (listinta de otras
aft1cciones, es siempre difÍl:il constituír Sll historia
médica. Nosotros vamos, sin embargo, á dar una
ligera idea sobre asunto tan importante en Cirugía
Dental.
Algunos pasajes de ohras antignas permiten
cl'eer que tos padres de la me(licina conocían esta
ellf(~l'modad.
De los médi 'os de la antigiiodad, Galeno fue quien dio nociones más precisa::; acerca de
esta afección.
La primera noci()u exacta de esta enfermedad,
fue dada por el celehre m(~dico hol:mdés de nombre
Battus, al prineipio del siglo X"I/.
V ¡¡TI de Yoordo
fue q !lien la designó con el llonl!)l'e de c,:Í,nar acuoso,
nombre con que designan los holandeses alln esta
enfermedad.
Luego Van Swieten la denominó gangrena, que es el nombre que merece realmente.
En
Inglaterra fue Boot quien la describiÓ primero, observando que es mús frecucute en el labio superior
que en el inferior.
Ella cs hoy día extremadamBnte rara en Francia; se la encuentra sobre todo en el Norte de Europa, en las partes septentrionales do Alemania, en
Rusia, en la Filandia y en los países escandinavos.
Se observa má3 especialmente después de algunas
epidemias, tales corno en las fiebres graves, durante
. el curso del paludismo, y en algunos países so la ve
-16 -
aparecer
con mucha frecu(ncill
después de la re>-
scola.
Las investigaciones hechas para saber si el calomel produce la gangrena, BOl} muy oscurM.
Willam Moore ha ob3~rvl\do la- gan;¡re11/J, de la boca se·
guida de la salivaoión mercurial.
Otros autores como U nderwood, Simmonds, Pear·
son y Cooper están de acnerdo oon la naturaleza, ori·
gen, terminaL'ión y tratamiento de esta enfermedad.
ETIOLOGIA
La. gang¡'enn es casi exclusivnment.e una enfel"medad de la infancia. gsta afecciÓn reconoce cierto
número de cansas distinta8, tales como IR. aplicaci(ln
de los diversos a~ente" químicos, la acumulación ó
sustracción de calórico, la inflamación violen~, las
compresiones excesivas, la. ligadura d~ 108 ~asbs Ó
BU oclusión expontánea y la acuión de ciertos
agentes deletéreos, como el virus de la pústula maligna;
pero como hemos dicho, esta enfermedad está. máióJ
sujeta á las causas g-eneralt's, tal como se observa
en el Cllrso de las fiebres graves 6 bien aún en 108
casos qne la ínervación es disminuída, como en la
ID'lyor p lrte do las enfermedades de la medula dondd se ob:'lerva á. menudo 11\ gang¡'ena de las partes
f'ometiJas á la presiÓn del ouerpo durante el decúbito,
La g"'n~ll'el1/:t e~ la afecci6n más común en 1118
per80n<lS débiles,
y se le obSt:l'va con
mayor
fre-
1; -.
cuencia en los ml10S y especialmente en aquellos
(lile pertenecen á la clase pobre; UlllY rara voz; (1rilllit,iva, y se declara siempre lcspués de las fiebres
~rll ptí vas.
La f}angrena, cuyo agente patógeno esbí. acín por
detel'minar,
es una infecciÓn secundaria,
sin duda
provocada en la mayoría do los caso;; por nna ó va.rias de las diversas clases qno existt'l1 en la boca;
en tiempos
anteriores
eran
UlUY
COll1unes las
gan-
Ul'cna,~, mientras
qno en nuestros elia,,;, gractas ¡ilos
prO~l'esos de la higiene y de la anti~cpsia,
esta enfl~nnedad e~ muy ,'ara. En sognitla enumeraremos
las causas más frecw:ntc.:3
á. la
lFW predisponeD.
gan-
1J1'ena.
,A:/mlfc8
qI!Z¡(/.¡(~(}g
y/[:;1('08.
Los diversos clÍllstioos
y lo,:; ácidos conecntflvl\)s
eje¡'l.:en
jidos
<¡no los d(~sorganiza
una acción
eH[Jeui,11
iSulJt'e
te-
nllestl'OS
y
pl'O-
(luce una verdadera (/(li!:.f!"i'ii
ei'edostfnálogos producen la acei¡)!1 del fllego y cl frío IIluy,~jjltenso; Ins
l/;
ht'Tidas causadas
pOl' los ag-entes físicos
determinan
de la misma manel'll la !jr7JIgrena. Esta lleva entonces el Don,bl'c de yall'jl'('i!tl
1'01' C!j:p,fusÚ5n.
e¡;;muy ~¡menudo bastante
L(~¿lIffamad¡jn
determinar
el csfacelu;
('st(~ fl'IlÓmeno
sobre todo en indivi(lnos
enferrneclad
Ó lns
ddJilita(103
¡>rivacionCl;,
para
ge~"IIHlIlilil:'::;(,1
In
por'ta#ocLd.
He leo!kcI'V;l
atín
ClHlll-
do ésta se n.csaJ'rolla l'l1 las partes qno pOI' Slll'st.l'ij~~
tura no pueden disteqdl'I's6 ~~yenientementl',
+~-
Los fcnórueuos
gar
Írd1am8tti'rios
ft una ef:;tagn:.1I:i(~¡. SU!'
t¡j;jLCm;[
C'i,ilc¡¡',
..
int.ansos
prglpng':!d:¡
dall luel!
i
¡
-18 -
Las 8118tancl:as delctererr,'I introdncidas en la sangre, determinan la gangrewt bajo lainflllenoia de la
menor causa ocasional. Estas alteraciones de la sangre pueden resultar de la alouminuria, la glico8uria,
ete.; otras veces son las sustancias vegetales, como
las papas da.ñadas, centeno, ete., que ingeridas, alteran el líquido sangníneo, y, por último,'los venenos
como el opio, los virus y particularménte
el virus
carbonoso, provocan la aparición de la gangre-na..
En resumen,pQdemos decir que los hechas fisio.
lógicos y patológicoS., no prueban la acción directa
una lesión nerviosa sobre la aparición, de la gangrena. Algunas veces parece muy probable que la
dificultad de la II utrici6n, como resllltado de la alteraci()n del sistema nervioso, predispone el desarrollo
de esta afecciÓn.
ne
ANATOMIA
PATOLOGlCA
Durante algun
9S las modificaciones íntimas sufridas por los 'o _ aós gangrenados, han sido
el objetod~investigaciolles
interesantes.
En~,'gángrena llamada seca, oí. hecho. más importante °eilla conservación completa de los tejidos
perfectamente conooidosal microscopio; algunas veces esta integridad nó-es:oabsoluta,
pues entre la
ga?'tf1?'ena seca y la hún.:iila se encuentran
los estados intermediarios. Los tegumentos presentan en su
textura, graDul,Ds negruscos, vesículas adiposas libres en la ~
de las celulas epiteliales y corpus-
--
1[; - ..
Cl\lós j¡·regnlares.
Estos líltimos parecen ser los restos epiteliales retefiidos por la materia coloranto de
la sangre,
lo demís, el color rojo, ~armín
POl'
Ó
rosa
111lO
ofrecen la mayo!' parte (le lo::! tejido~, aún los ¡UiSm03
te.iidos f1brosos, no tiendoll solamente fí una imbibición de la materia
modificación
especial
La.s facetas
estria(tas,
colorante
sino ,l una.
de la saugre,
en el color
pri miti vas d~ lo,;;
si no disociadas,
de estos tejidos,
ffitisClllos
no son
y los nervios mismos
oft'ecen granlllacioncs
gras0sas
y la clln.gula.ción Jd
la mit>lina; sin embnrgo, ellas parecen resistir bastante
tiempo
á la gan:/rei/Jl,
dolores persisten tes en
faceladas,
lU8
do dOll(lu resultan
partes
los
en a pariellcilL es-
Las gra'lulaciones
se mlwsLran, soht'o todo, en loa
elementos fibrosos y terminan !>o!·di.';fwi;trse; lo . , elomentad
celulMcs
se dest!'Llyen
lUl1.Ylig;.·l'o, la gra.sa
ó se l;cistaliza en
trasuda ft. travú¡¡ dé) su:; cellllas,
parte el1 sn interior.
En estos Últimos alios H. D,~mme
en los tejidu::; gangreu;\do':l n/H. serie de
pigmeu tarias (Oo-rjlusndos !!w/:í ¡'('¡¡081i.'!),
ser ospeci,tles, resultan dI) la infiltraciÓn
hrt seiialn.do
[orm:wiOllos
(lue, lejos de
de los ele-
mentos lJormales por la ma.teria l:olor¡tllte. de la saugre más Ó !llellOS modi1icada.
Se encuellt¡'u
cllerpos
alí.a en los kjidos esfuGohdo3,
pigmentados
formado::; ¡}'.l Jwm;ttosina,
cristales
de hematoiJina,
rro, gt'auulaciones
¡tU;)
los
lo;:;
ge;tlJl!lo,.; de snlfli!'O de hio-
animadas
lle movimientos
b¡Yii,í(l-
y, !Hll' líltilllO, cristales lh~c'.>l\.'·..:tei'Ín<l, :,,111'8, ('t("
Los gaces (lile se dC:;;'.JT! .•J¡.¡¡:ii·;,,· d "!llnJIL¡('p,
- 20el hidrJgúno fosforado y sulfnrado, etl3.;cnanto lí los
productos ol'ganizados, agentes esenciales de la fermentación, según Pastrnll", son los.bacterios, 108 algas,
vibriones, ete.
En la gangrena húmeda, los fen6menos de putrefacci6n son 103 que predominan; el páS, la serosidad, la liquefacción de los elementos- alterados im:biben los tejidos y facilitan la disociación de los elementos anatómieus. Entre ellos los tejidos fibro30s y
cartilaginos-os son los que resÍstenm;Ís largo tiempo •
. Eu la gangrena llamada seca, los matoriales llquidos se evaporan y son llevados por los vaS05 venosos y linfáticos, permaneciendo pormeables durante algún tiempo ..
Cualquiera que sea la forma de la ganrrrena, lagrasa contenida en los tejidos aumenta y probablemente es seguida de la descomposioión de las mate·
rías azoadas.
------CAPITULG
n
CAUSAS
Eom. La gangrena de la boca es más general
en la infancia; en la edad aJulta y en la vejez es
menos frecuente y más rara.
La frecuencia relativa de la gangrena de la boca en los niños es un hecho digno de interés.
Según M. Faurdes, la abundancia de tejido ce-
lular grasoso, la facilidad de las congestiones sanguí-
- 21-
y odcmatosos, el tra .•
ba.jo dfl la. den tioi6n, la frecuoncia de las úlceras, el
contacto do la saliva y Sil alteración, y la acción del
airo 'f los cuerpos extl'años, son las circunstancias
dependientes ue la ol'gani7.MiÓn y de las funciones
de la boca, que haoen mis fácil el desarrollo ue esta
nens, lag infartos infhmatorios
afec(~ióD .
CoxsTrfuClóx. Los niilos en los cnales se des·
arrolla la .qangrenz, SOll generalmente linfáticos y de
constitlwión débil; en ;1'1ne110::; bien organizados es
menos fl'CCUP-llte.
Hrl;
H:XI,:.
La gan:trena es
\lna
enfermedad
como
lo hemos dicho, más frecuente en los niños y más
general en aquellos que viven en condieiones antihi·
gién il:Hs.
Algunos autores creen que la estación correspondiente al tiempo, ej'~l'ce gran influencia
para su
desarrollo; siendo así, que es lU,ís precoz en la primavera y en otoño, y menos eu invierno y en estío.
Do la misma manera creen qne ella sea canta·
giosa, haciendo uso de los utensilios domesticos de
que ti menudo se f!il'ven los enfermos para tomar sus
alimentos.
EFECTOS DE LA GANGRENA
La ganYl'CiW de la boca in vél.de todos los elo·
mentos anat(ímicos que constituyen
los tejidos de
esa región; de aquí las le¡Úones que, aiHlque do la
misma naturaleza,
ofrecen, siu cmhal'g'o, ciertas difG~
- 22rencias según la clase de tejido. En seguida haremoB
una descripción de los efectos de la gangrena sobre
los órganos más suoeptibles dl3 8erata~dos pt)r,~l~J-_
tales como las mucosas, tejidos oonect.ivos, maxi-
lares, dientes, etc.
l\IucosAs.-
Si la superficie cntá~
es 4erida
de mortificación, la. mucvsa lo es t>\mbién, y,raros
son los oasos en que la dermÍBs~
heriday.mucosa no sea afectada.
Algunas veces la enfermedad se limita á la piel
y entonces se presenta bajo la forma de una ulceración de fondo gris .•..
verdoso, netamente ciroUfl8Crita ,y situada en el fondo del repliegue gengi\'o-bucal
inferior, ó, más á menudo, en 18. cara interna.:de la
mejilla al nivel de 18.:; arcadas dentarias.
Por otra parte, cuando la 'langre<na avanza oon
rapidez, invade tOda la cat'a int,erml de la mejilla,
después la oomisura labial y en algunos casos hasta
la rama de la mandíbula ..
-...
En estos oaS08, por lo general Se destruye en
todo su espesor la membrau~ nlllcosa, y las encías,
participando también, presentan pedazos flotantes
ó bien se destruyen completamente.
T.&.JIOOS
infartamiento
gangl'enoso
CONECTIVOS.
Estos tejidos forman un
que participa, mLlS Ó menos, del estado
de las Eluperficies mucosa y cutánea..
En el estado más simple y en el menos grave,
el tejidoj celular grasoso de h mejilla es infiltrado
,de serosidad, de la misma. manera los músculos; y,
siu emlHlrgo, todas í::stas partes conserv~. SQ. ol·ga·
ni:4ucióll.
· -
2~-
Pero en un grado más avanzado, la mortificación hiere t\)dos eRtos tejidos y de preferencia aquéllos vecinos ti la melllbmn:L mllcosa; á veces se en.
cuentra el tejido celll lal' grasoso y los mÚscn los infiltrados de un líquid.o sanioso tendiendo ~ivulverse
homogéneo y á perder todu carácter de org'l.ui;:ación.
Es, pues, bastante rara la lllortificac¡óu de todo
el espesor
de la mejilla
ó del labio, de manera
quo
las dos esearas, cutlÍnea. y IllUcosa, estén scptll'auas
por una porción de tejido infiltrado
y endurecido,
más no gangrenado.
Hin embargo, se observan casi
siempre en el espesor misIJl{) de la escara alguna:;;
porciones de tejido gl'ai·l()'.;U !lO g:mgl'elltldo é iat1lt;¡'ado de una serosidad amarillellta.
Luegu
llega. un mumento
de las parte,> es innldidu
pOI'
en quo todo el espe:;()l'
la !/,cJl;7I'ena;
ces, siguiendo
un tral):ljo ('liminado!',
desprende y queda una pel'foJ'llej()I1.
cutOllw
la. os<.:ara se
MAXILARES y DLl:\TF.8.
Cllando las encías hall
desaparecido de esta manera, y del mismo modo
cuando han sido mortificadas, los huesos maxilares
quedan desnudos y algunas veces necl'osados.
Esto
estado existe en nna extensiríll pl'oporcionada á la
desorganización de la m l!Cosa; de Sllorte q \lO, un
lado del cuerpo del maxilar inferior y una parto del
maxilar superior, quedan desllu(los y no se adhieren
á la gengiva y á la mucosa sino por fragmentos
delicados y fáciles de desgarrarse.
Los dientes á menudo dcscarnadoR y vacilantes,
basta el menor esfuerzo para levantarlos, pero lo
que más generalmento sucede, es que van cayendo
uno á uno principiando por los incisivos.
- 24En el aspecto de la piel gangrenada en
un caso mortal, lo primero que observamos Y vemos
. adelantar es la putrefac<?i6n que se apodera rápidamente de la superficie cutánea que rode¡\ h)s puntos hel'idos; se ve entonces la mejilla ó el labio inchado de color violeta. ó verdoso, tenso y lustroso,
duro al tocarlo, y el cual presenta un infarto proPIEL.
fundo y circunscrito.
A menudo en el punto culminante de la tumefacción, la piel ofrece una escara redonda \1 oval ada
regularmente limitada y de una extensión variable.
Otras vsees la escara es mlÍs conSiderable; la
mortificación invadereglllarmente
las diversas partes de la cal·a, extendiéndose en algunos caBo:jhasta el ment6n, el cuello, la nariz, los párpados Y
Cl1'ea d.jl oído y en otras, todo un lado de la
cara.
En estos casos la tumefacción no es más consi:"
derable que cuando la. escara es limitada; en todocaso aquélla siempre es negra, de ordinario seca.
y como apergaminada,
extendiéndose
siempre ~ :
uno ó dos milí metros de profundidad, ó á todo
espesor de la piel. En algunas circunstanoias, esta·
escara se desprende Y deja una perforación más6
menos granJe, á través de la cual puedt;ln verse'
el
lag arcadas dentarias.
SINíOMATOLOGIA
Sentados los preliminares
antcriores,
los ~ínt()rn:ts presenta-lo.3 por la iuspeoción
una de las par'tes descritas
veamo&
de cada
yÁ.
:MEMBRANA )fUCOS.\. Hemo15 visto
esta
membrana
presentar en los primeros días, ll!1,t lllcernciún
de
fondo gri~ sobre el borde alveolar dt~las cncías y sobre el repliegne gengibo-bucal Ó sobre la parte media.
de la mejilla.
Algunas veces desdd los primf.ll'l)s días, annqlw
pequeña
la u¡ceración,
y que apenas
mide alg-llnos
milímetros de extinción, la lllembraliu Sf' recnl)l'e do
un pntrílago
gris evidentemente
g¡wgl'enos').
Otras
veces se encnentra,
t[unuién, en los prime-
ros días en la cara int.l-'l'na dd lal)io illferior, una 11]ceraci6n circular profuutla,
sin exi:"tir uingiín Infarto en el exterior.
Las ulceraciones se extienden en segllid'L con
rápidez y se desangr;lll fáeilnl'~nte; ~,: vueh'cn primero gri~es, luego negras y se cuLr'en (le nn lí~
quido putrilaginoso; sus lado~, cn nlgulJos casos, son
abiertos y rodea~os <.leun bonle saliente .Yrojo Jí"i~
do; pero est.e estado rto persi~te y la ~/(liIJl'(,ila
bien
pronto traspasa ~se límite.
Ella se cOuIllnica, entonces, con la:; partes de la
mncosa
que están en contacto
COIl la pO!'ciÓn ya gal1-
grenada; así, de las encías pasa á la pared hucal y
l'(:c͡H'ocamenh',
y pro/IV. la nwrtifici1ej';!1 gana todo
un lCJdo de la boca, ,¡ bielJ el j;¡1.iÍc id/'!!;]'.
-
26-
Rllicmpo (lne la g(mgrl'Jut emplea. para iu\'adir
toda la mueosa es muy varia.ble, siendo, en general,
entre tres y seis días. En los graJos lOá~ avanz~dos,
los restos mortificados caen en la boca y algunas veces los pacientes 108 corbm estando aún adheridos sin
manifestar el menor dolor.
Estos son rápidamente descarnados y
pierden bien pronto Sil solidez y al menor esfuerzo
caen. pa la misma man~~l'alos maxilares, al quedar,
desnudos, se necrosan.
SALI\'A.
Esta se escapa ÍlÍcilmente de la cavidad bucal, ya porque ella sea secretada en mayor
abundancia Ó porql1e la lesión de la pared impida
la oclusiÓn de los labios. A.dem·ís, los líquidos meramente salivares eS sangninolentos, .om-m pronto nn
color negro-oscuro y éstos estlln mezclados, al mismo
tiempo, con los restos pntrilaginosos que existen en
la boca.
PAln'E
I"TERNA
DE LA BOCA. Los líquidos qne se
escapan de ella exalan un olor fétido,. y cuyo carácter
es suficiente, desde los primeros días, para que sea
posible reconocer la existencia de una gan;¡rena.
Dll<;:\TE:i.
El doctor H,ichter ha comparado el olor de la
gangrcn(¿ en los primeros días, con aque11ue exalan
los inJi viduos afectados de salivación mercurial.
E-;T.\DO DE LA PIEL
Y D8 LOS 1'1:.JIDOS SUBYACE~TE3.
La mejilla lS los labios se inchan antes del desarrollo de la gr:tngrena de la mucosa y el infarto que resulta, es blando y sin cambio .de color en la piel.
El principio de la ulceración, ó su paso á la gangrena, estt\ precedido de un infarto duro y central; algil nas veces falta éste, y la mejilla ó el labio presentan,
- 2ide nn día ,l. oko, nn endurecimiento
entonoes las partes se poncn tensás, como aceitosas y ¡í menndo de color viol:iceo; á la presi!ln se d,~seubre n n
bot<Ín duro
y eirenl1scrito.
profundo;
Oedínririarnente
e"to su-
cede ,lel primero al ter..:e¡'o día d,) la yanjrri/I¿ d(~ la
mucosa, otras veces uo tiene lllgal' sino d_'..:l sexto al
noveno.
Este
botÓn duro cst,l
de tejido celular
constit,uído
¡PID
fOl'Il1H'lo
por
un
pr'ccede fl b Tl\o[,tífieuci,in
por pot'cionl:s do tejidil;¡'asoslJ
é i::Jdurado. ~\ Illlmwlo se forma
infarto
;
C:-;tit
infittl'ado
una ei".:an-t sobre h
mejilla, y cltando aquella tiene lugar, la piel s,.: vueive
viohicea, luego negra; otra,; vecos Ull l1ietema apan;ce en la cima del tUlllor, ya :,;_\aen la Gam ,) en los la-
bias; bien pronto, y en la. misma é[hL.:a, eSLe fi¡~t\\llla,
cua.ndo existe, es reemplallado por llU<t mancha ga~lgrcnosa cuyas dimen,:iones son val'íabl\Ji3.
Cuando
la escara
es ¡imitada,
trabajo
UI1
\:Jimi-
nadar se cst,ilblece al rededor de ~lla ; torluíll<l pUl'
caer y lleva en ésta los tejidos vecinos hasta la
y. como consecuencia, la formaciÓn do llna
perforación oompletn, tí tr<lVCS de la GlIal saku inC'.:santemcIlte
la saliva y los ]í'luidos
C( utenidoR
('ti la
mUC08a
l
boca.
En los casos graves
permanecen
infm'tados,
los bordes de la pCI'rara:
duros, rojo,; y cllh:ert)"
i6.1
d (J
pedazos gangrenad08. Ell aqnellos qll~ la Clll'aci,ín
deba tener lugar, los bordes se ulceran y terminan
portomar
el aspecto de una Úlcera en sup ul'aei,!n ; des·
pués ellos se aproximan
J no :J.lleda, \'l)tonce~, ,;ill')
110 orificio
fistuloso, mí::; () menos L:3t¡'(Tho
(}lil-,
el1
.dgul1o:, cusee., c1ei3Hp:ll'C~C .Y en ()tl'()~ p,-¡,:,iste.
~. 28-
Cuando la enfermedad afecta los _.huesos m:uilares, lo que más comUllfQente snce~&nbonoe8 es
que el perÍostio se exfolia y luego, según- Hueter,
se recubren de botones carnOS08.
ROSTIW.
Su a8peot-> por lo general es- pálido poco
antes del desarrollo de la enfermedad;8specto
que
S6 conserva durante
el curso de ella. La nariz.
los plírpados y los labios toman un oolor rojo~ y se ponen al mismo tiempo gruesos y seeos; la parte
del rostrv gangrenado pierde tuda expresi()n.
ESTADO GENElB.L.
El enfermo se muestra ttanquilo, triste y á menudo abatido. Al mismo tiempo
sus fuerzas disminuyen notablemente.
Respecto al pulso, algunos autores b~n oOOem .•
- \
. do que es poco frecuonte y peqneño al principio-dé- .
la enfermedad, va creciendo paulatinamente
en su
cnrso y oscila entre 80, 100 Y 120 pulsaciones.
E.'J de olJí,e¡'/it:f,r que, apesar de ser la 9angr~w.
una enfermedad muy gra.ve, las funciones dige&ti,;;";
vas no se altel"an, y cnando ésto sucede, casi siem~
pre depende de ot¡,>as. afecciones.
También se
observa en algnnos casos de ella, una sed -intensa.
LB~.G¡;A. Esta se encuentl1l siempre
húmeda.
unas veces amarillenta, otras con un tinte negro dot.
lado de la gangl'ena,rara ve~ roja; parece que"ella
participe de la afección, y en algunos casos presenta '
aitas.
Los vómitos también suelen aparecer en"varios
enfermos, pero, en la mayor parte, este síntoma es
dependiente de una complicación intestinal.
Los síntomas presentados por la r¡angrena pare~en. también. afectar los 6l"ganos respiratorios, pues-
._
-
-20to qlle, en- mlleh()!'; enfermos, se ha observado, en el
curso de la enfermedad, el desarrollo de otras afec.
ciones, tales como la ncumonÍa,
bronconeumonÍR,
etc. Advertimos qne el sistema nervioso parece h~m~
bitSu afeutat'se.
MARCHA,
Vemos la
ga,ng¡'t?¡UL
DURACION,
ETC.
de la bllca avanzar
m:-ts ~e-
neralmente duraute la convalecencia de una enfermedad aguda ó c~ónica ; ya Sea por \lna ulceraeiÓll Ó pOI'
aftas, y~fiéis rara vez, por UT}edema de la parte don-
de se desarrolla la mortificación.
A este tiempo la
cara es pálida, el aliento fétido, la fiebre poco intensa, á menos que exista una enfermedad febril. Entonces el pulso se eleva cnnsiuerablemente,
el paciente acusa tristeza y rara vez. experimenta dolores vivos. La ul<.:eraci<'io, pequeña desde luego y
de fondo gris, situada en m(~rlio de la cara interna
de la boca eS en ell'ep1iegll0 g'i:mgi bu-bll cal Ó labial,
se cubre bien pronto de un despojo pntrilag-inoso grisáoeo, fétido y de olor caract~rí~tico. Al mismo tiempo tiene lugar una infiltracilín en la parte enferma;
éste edema primero eR blando, regularmente
circuns.
crito, y luego más intenso, y se forma en su centro
un botón duro.
Entonces la mejilla se pone tirante y pálida, de
color violáceo, más visiblo sobre la parte saliente del
tumor; en la parte iuterna la escara toma uu color
moreno, luego ella se extier.de.
- ~o En eRte período, el pacÍ<mte se pone triste y
abatido; una saliva sanguino'ltmta se desprende de
los labio3 entreabie:t03;
el apetito aún. se conserva, .
y el pl.Jiente devor:l. el alimen'J() qtlll scle suminis~
tra, junto con los restos putrilaginosos
qne se des~
prenden de las partes gangrenadas ..
Del tercero al sexto,dLl. de la efermedad la escena cambia: una es'~ara S(~ declara sobre el punto
más culminante y m~s violáceo del tumor situado en
cualquiera (le ltl.s pilrtes des!~r·it"'s; é"ta es peqneña y negra)', exten1.iéudO~8 elial'iarncll te, llega á. veces á ohtener dimensiones considerables, mientrns
que aqnólla de la mucosa se propag-a tin el int.erior.
En oRte período aunque la sa.lda rle un pus fétido,.
se continÚa, el enfermo conserva sns fuerzas.'
.
Este as pedo pueue mÍ!1 vol verse mlís repugnante cU:l.udo la escara se dMsprende en parte, dejando suspen(lido~ pedazos de carne mortifioada;.ó
bien cuando cae dejalldo á la vista la perforacióacde'
que hemo:'! hablado. Entonces apllreoen los dientesdescarnados y. vacilantes y los maxilares desnudos.
En este período el aliento se ~uelve má¡o fétido;
se conservan muy pocas fnerzas y, en este estadotle
postración, rehusa el paciente tOllo alimt-\uto,siendo,
entonoes, muy intensa y pel'sistente la sed; el enfla .• ·
qnecimiento soureviene r,ipidarnente ; la piel se vue-l- ..
ve seca; P,ICO caliente; el pul~o muy pequeño é iusensible, y, como consecuencia de este estado, sobre .•_
viene la muerte. Esta tiene lugar, algunas ve.Oes,
antes de .qno la deterioraoión sea profunda y aLlÍ¡eti
de que la perforación
so haya efcutw.\do.
- nLa curaciÓn por lo goneral
se verifica,
aunque
antes de la nUllifesy la. caídit de la por :iÓu
:FUI'a vez, en el prim:~r periodo,
tación de la CScar¿l cilt,lllea
de la mncosa
mortificada
en ellíltirno
períudo,
puedo también,
tener Jugar'
deslJués de la caiua de la escara
exterior.
Errel primer ca¡.;o la mortificaci6n
se limita; las
partes se deRprcmlen }JOCO ,Í, poco, y aunqno las nIoeraciones
per'sistall,
el infarto dísminllj'(~ y lllego
desapl'lrecc. Los sllltolDiS
getlel'ales se detienen y la
cllraciLÍn se estableeL'
rior son
FOCO
en el exte-
considerabIcs.
En el segundo
ción se debilitan,
ta. lo mismo
y la.') ddormidades
Cp.so los borcks
fle
limpian
do la perforay la y,¡ngrei/IL se lilUi~
en el in tel'iot, q Ile en el exterior.
U un.
supnraciún se establece! :i tioue lng;tr entonces iltHJ.
exfoliación de las partes (ísuas ueuI'osauus; hu·go la
'Úlcera se e8Lrocha ilj:':;eú::;iLJ10~n~ntu y la olll'<:lciún· tie-
despuéd
largo.
ne lugar
llOS
Bu resumen, In. mastic<lci()n
pueden
ser considel'ablcltlente
didas como
mti::; ó me-
de uu lapso do tiempo
consecucl1('j;¡ de
y la palabra misma.
murtifi.cadas
¡. impe-
la :ia );J
"C¡llt.
1, La
anto-
plastia en esto:; caso,; pr0,~ta ~t'aIltle::> sel'vieiu:-).
DIAGNOSTICO
Pudiera
creerse que ninguna
dadc::; de la infullcia Sé cOllfuudierau
(13
las enfol'nw-
..
eOn la 1/"
¡¡'/o'.la
- 32ue la boca, y, sin embal'go;hay
afecdoDes de natnraleza evidentemente gangrenos8li ql1eut')s parece
necesario dilltinguir; sientlo entre las másoomunes
la e¡¡tomatit·i8¡¿l~ero~(t y la pústula maligno,.·'
1..•
a extomatitis
se distingue de la gangrena en ql1eésta está caracterizada solamente por
una ulceración pultáooa de las encías, 6 bien por una
6 varias soluciones de continuidad negrusoas ó grisft •.
UlCerQ8o"
ceas en la cara. interna de lag mejillas, no aoompafiada del infarto edematoso qlle hemos notado en el
, nudo duro j' cent.ral de que ya hemos ha.blado, mlls
nunca se ve la escara propagarse en la piel. Por
otra parte, esta enfermedad sigue una mMóha lenta;
ella eíl esencialmente contagiosa y termina siempr8
por la curación rápida bajo la influencia de las me.
dicaciones.
De la misma manera la yang1'(?1ta se distingue
de la pústula maligna, en que édta. principia siempre
por el exterior, ejerciendo desde luego su ínfiueDei~
sobre la piel; luego af~ta sllcesi vam6Dt-eelc~pO
"
mucoso y las partes subyacentes; mientrl\$ qlle la gan(frena, como lo hemos anotado, ataca primero la membrana mncos:), de::;pués los músculos y termiua por la
piel.
Los síntomas de la gan:JI'ena snelen confundirse
con los síntomas de otras enfermedades con las éuales existe algnna analogía, pero no es ñ nosot.rOB IL
quien corresponde estableoer las semejanzas diag ..
nósticas y lo dejamos á. la ciencia del facultat.ivo.
-
:13 -
PRONOSTICO
La :Jan'Jl'en~ de la boca es una afe-.:ción genera 1mente morc-d, Las causas principales
que, seglí.n
'l'ourdes,
agraban
el pronc>:3tico, sou: primel'o,
segundo, las condiciones
antihigiéuicas,
y
el deoarrollo
de las comp1iJuciones,
princi-
fancia;
tercero,
palmente la neumonía.
La curaciÓn no tiene lugar
cientes
sino en aquellos
que no suFren afec~ion~3 con~omitanteg
ves y que conservan
el
la in-
el apetito
y las fuerzas
de la enfermedad,
Se pueda abrigar esperanz.a
pagl'a·
durante
Clll'Sl)
en los casos en que
las eseara~ ~e limitan; cllflwlo se efectlía
dimiento
de ellas;
citanh
y tenso", y, finalmente,
los bol' bs no son
y
en supuraCíl)ll.
Al contrario,
la postnwit.Ín
dureza
del pulso;
grLteSOS
euando ~c limpian de los restoman el color' de una lUcera
tos putrílaginosos
per¡twñez
el despren-
la extenSil)ll
de las fuerzas;
la
y la
de las cscaras,
y el color viohiceo de los bordc~ de la úlcera,
pronóstieos fatales.
son los signos
__
o.
_
T1{ATAMIE~TO
Las indicaciones
terapéuticas
depen<.lcn de la naturaleza
misma
.v de las cir'eunstancias
de la :7angreJ/(I.,
de la enFermcd¡1(}
en la;:; cllales
ella
se ot'sa-
n'olla,
3
_ 301-
1
Será, sin duda, de la m'Ls grande importancia
determinar Cll'íl es la naturaleza del estado particu~
lar de la economía bajo Sll influencia.
Este cou'Jcimiento nos suministrará,
sin duda,
los medios de prevenir la eufermelad ó de destruír
las influencias perniciosas que mantienen y aceleran
:m marcha cuando ella existe.
II
La mortificación tiene
TI na
tendencia extremada á la invasión, y es necesario poner límites que
ella no pueda franquear, y el medio consiste en sustituír la mortificación ffi6rbida por una mortificación
artificial que la limite siempre.
nI
Es necesario disminuír, lo más que sea posible,
la fetidez de las partes gangrenadas y favorecer la ,
eliminación de las escaras.
Dividiremos, por lo tanto, su tratamiento
en
profiláctico y curativo, y éste, á su vez, en local y
general.
-
0~
úa -
TRATAMIENTO fROFllJACTICO
Este tratamiento
comprende
todod los medio~
higi:nicos,
por m':JJio de h~ cnales so comhaten lo:,J
Ol'g"nisnw3
sép!;i00S q:1tl
)' (!'u ~melell SUl' d orig·m
JI
"Id allelanto
prCSenVHI1\h
nXl~tftn e:l la cavíd.1d bu;;al
del
ellfl'['med;l.d~R
algunas
s!;~ria!'l.
fórrnabs para este
objeto.
CAUSTICOS
l"l.l'a quo éatos produzcan
Df'cc:,al'io
qile la. canteJ'iz:'tC1IJu
bl1f\l10S re;;lllta\los,
es
vaya m:í.s allfl de la
sobre 108 tejidos f'.aU(l.,. 1~,;,pneR, convtjlliento llevH.r el Ci:íustico all'l~¡]~dor <le la f) 1iIgrena y
tratar
de circlloscriLil'la en una esfera de tejido
!jtLn'jf('if,I¿
1
cHuterizado.
ram qnela
efectos, es necesa.rio: l? Ataeal' la enfermedad
lo más
pronto p<Bible, antes Ile li<le los tejidos profundos de
la. mejilla SJftn invadid),;, y ~.() E3COg2t' un c,iustico
ba~tante enérgi..:o para el uo l1(~ve Sil acción sobre 103
tejidos sanos \lespné::l de babel' atravesado la escara.
C,in;;;tico3 de todas e1ai\CS han ~ido pl'Aconizados;
cauterizacilín
d(~ la misma manera
pl'odllzc'l buenos
se, h:l.U aconsej:vlo
lo~ diferen-
como los á.ci·
du.:) hidl'odÚl'lC<I, ~;!!\f~':l'¡~'" ¡l(:~tii~J,
('te., <" bien vI
tes ¡í.\.~idosminerales
y y,-':.(,~Lalc~;,tales
---36 -
nitrato ácillo de m'~l'cl1rio, el dlBtiJO de Viena. ó el
eauterio actual. Para aplicar los primeros, se hace
1180 de un pincel fino ypeqneño
ó de u'~-~ponja,
teniendo cuidado, al aplicarlos, de proserVarlas partes Banas con ayuda de 110a cuchara,6 ta:tnbién por
medio de un pedazo de cartón, par1\e.~tAr de esw
modo oauterizaciones inútil~s.
EXCITANTES
La mayor parte de los autores ag'l"ega.n al uso
de los cáustioo3 el de excitantes locales de diversa_
naturaleza.
Así, Billard re()omienda las friccion6$
secas 6 arvm ítica~J~ando no existe mingllll edema;
Cllando hay inEarto, aoongej¡~ 1a.3 friccionos con linimento amoniacal.
Hneter aconseja el uso de las compren~.~m"
bebidas de jUg3 delechug~, y agrega que esta-tópico tiene la ventaja d'e agotar 1,\ abundauI}ia de las
secresiones.
El empleo del clorllro de cal es el
agente que á menudo dR mejorea resultados, 8Íguien:do BU aplicación despuéS del cauterio y continu,n:dú~
lo hasta después de la. caída de las esearas y cu::\.n.do
el uso de los cáustioos no sea ya necesario.
Es útil agregar á esl;os m'3di09 las ablucione3
frecuentes con agua fl'Ía, á fin de retirar lo m1.s q~le
Bea pQsible los restos pútridos y disminuír el dolor.
37 ..;.
TONICOS
Se recomienda también el nso de los tónicos,
ya sea en aplicacionos locales, ó sea como tratamien to
gener¡\1. Así, el vino de :Mílaga y la qUiD a, SOOfe
todo en iufusion, hILn sido justamente recomen·
dados.
IJ:l marcha
r:ípi{h \h la gan;!/"ena impide que
l'stos medica.llHmto~ eje!'/. tll sobre ella una influoncia.
eapaz dl~ detener'la; pt~ro, por otra parte, como es
incontestable que Id mortifioaci6n es más á monudo
precedída de-!J,iJidBbilitacilÍ!l notable, es necesario
manten9r las-:f~:terzas dol paciente y corregir cuanto-sea posible el estado g-cnnra,l, ¡t fin de modificar la
tendencia. de la rl(/il:;i"~(/l[
¡í extenderse. Agregamos
qne el empleo de los tl.Jnieos, será su1>ordinado al estado de las vías digesti vas.
pU:ltaANTEs
y EM ETICOS
Estos medicamento:'> no están indicados SUlO
como accesorios, en caso:,; en (Ino el tubo digestivo
no presente niugúu l:\íntonu de iufhmación <> cuan·
do haya costipación.
L'\s lavativa::! Ile aceite (J los
pnrgantes salino5'ligeros bastan paeil casos do esta.
naturaleza. Creemos, tamui(~u, que los eméticos suaves, como 01 jarabe ó el polvo de hipep!loúana ti dosis fraccionadas, pueden ser lítiles, permitiendo la
salida de los pruductos plítl'iJos que se acumulan
(,~lt'll·~,-t ~2r~;~~·l·
- 38-
REGIMEN:
El régimen debe ayudar al trat.mnieuto generaL
Si el apetito se conserva, es nece¡;ario satisfi~cerlo,
pero no se debe poner al paciente á una dieta perjl1.
dioial. Los caldos y las sopas están permitilbs, lo
mismo que los alimentos Rustanciosos, si el euferal')
puede soportarlos; es uecedario preferir 10i! alimen.
tos semisólid.os que no exijan dennsia:lo esfuerzo en
la masticacÍón.
HIGIENE
Es de suma importancia que la habitacióu del
enfermo sea snficientemente ventilada.
Si la estación
lo permite, es necesario qne las ventanas parma·
nezcnn abiertas. En illvierno se renovar.t frecltentemen te el aire, después de haber tenido cuidado do
cubrir convenientemente al paciente.
RESUMEN
Todas las veces que un individuo se (lncnentre
en condiciones en que pueda desarrollarse una gan:fl'eIW,
se debercín inspeceiouar las paredes bucales
con cuidado y diariamenL0.
r:n los primeros sínto-
-
de una estomatitis
llll\S
3U-
ulccrosa
se debe emplear el
tratamiento
indicado pnl'a esa afecciÓn. Si las uIcoraciones toman aspe~to gaIlg~'enoso, se seguirán
las
pJ'escripcione8
siguientes:
1
8e llev¡mí sobre las Úl('ci'f\s p·nn.~!·erlo~as un pin-
nitl'ato ácido do
mercurio ó ¡teido hidrocl,ll'il.:o puro; S(~ ]:\ dejará du-
. cel
Ó
rante
un.:.tesponja
algunos
impl',~.(,,·Il~Hh de
insLlntl3s ea COllt,acto de las esuaras
y
se la.B~ará
al rededor de ellas. Se preser\'Mlt la
lengqa del e(lntaeto del medic¿lJ'1I0nto pUl' 108 medios
ya indiúauos.
H
Después
tamente,
de esta cauterizaci,ín
una aplicación
de
se hará, lUllledia~
dOl'IlI'O
de cal como para
luego, después oe haber dejado el cloruro en cOlitacto de la escara durante al~
lIna csto'11n.litis simple;
gunos minutos,
sehar-J
una ablución
con agua.
IU
La cauterización y la al'licaci()11 dd cloruro serán hechas dos veces por d la. En los intervaloí;l, se
aplicaTIíu dos 6 tres abluciones con agua pnra b,
también, con agua de echada mezclada
snd:J, ó mpjor eOIl una l1ecoCC!,í!i fl\orto
~()n miel
de quina.
l'()-
-
40-
IY
L"I. tisana será una infusión de quina, 6 bien
. una infllsión de tilo y de hojas de naranjo, con la
adición de 60 gramos de jarabe de quina para medio
litro.
v
Cada dos h()ras se lo hará fómarlfl C!,iitigramos de sulfato de quinina.
También se puede reeplazar el
nína por la preparaeión siguiente:
sulfató~fj-~:qtl.i-
R,
Extracto de quina .. ,
¿ ". 3 grms
Agua de canela .................•
¡~~~60
"
Jarabe de corteza de naranja
~ 30
"
:M. Y R.
" Poción"
El alimento será sustancioso, comdc~l~o, sopas
y vinos
medicina.les.
VII
La habitación será gran/le y ventilada, se renovará el aire constantemente, cuidando de nÓ estable ..
cer al rededor del paciente eorrientes de aire que
puedan determinar una neumoní:~siempre inminente.
0So rnautendl,t
al
41
paciente
con el mayor
aseo,
frecuentemente
las
el cuidado de renuvade
teniendo
ropas sobte la3 cuales cae la saliva, los restos
Jaginosos,
dos
putri-
etc.
La mcdicn.ei6n p¡'ecedctlte sur;l continnada
(lías, hasta q 110 ~;(\ l~i;tablez\:a un cambio
!t)S
toIlO-
t,able I1sil}16gico ó p¡ttohígien.
En el primer
e:¡sr),
e.;;ca¡'¡lS se dcsp¡'cuJCi1,
cione" y se CO;lLilllt:t/';i
más meJ ieaciuuet;.
~¡ la
:finl:lr{'!!ll
las
S(~~ll-;pend<jll
(~l)ll
y la;
limita
SH
eClllt.e;,iz:l-
d dÚl'lu'o de· cal J bs de-
En 01 segnndo cnso, así qne s.~ haya formado la
('Sear;L t\ll el exteriol', SI: CiWUtl',t ('n l'I'IlZ, s(~ levantar,in
con
Ilnas -tijf\l';LS, In m io:; q:w sel
posible,
partes mortificadas,
y ~e Uequ·,í. al intel'ilJl'
col impregnado
de los C,liH',¡e l3 ya lh:::;crilo::;;
i
se pOllO en
tcndd
la abúrtnrn.
pnlvo
dt:
qllllla
IllJ
las
l'illllle~;o
(Ill,::)S!; ¡Wl.ll-
por medio tl~ la ayuda
snmergidas
d~ bolita" ,1<:)hila'3
en un~\ SOl11ci,ín do Óxidn de sodio.
Se cauterizamn
miento, y mis
de
llIWV(l. pOI'
las
prúfunJall1t.'ntc,
muco::;a ya. prontlls
el mismo pt'oeedi-
á !llo),tificarsc.
porcj'lTlt:s
de la
No se debo temer
el tocar los huesos uesIludos.
La medicación
Se
luego
g"cneralllo
contiual"d. así hai-ta
que é::;to haya tonido
los bordes
accesibles
de la úlcera
á la vista.
ser¡í cambiada.
l<L
caída
do la eS(':lrn ;
111gar, so cnntcrizarán
y todas las partes enfermas
_ 42-
Insertamos en seguida algunas fórmulas reco-.
mandadas por notables autores para. el tratamiento
de la gangrena da la huea.
R.
Agua destilada
Acido bórico
id fénico
Timol. ..•...........
,
,
750 grms.
20 "
, ........•
1 "
:.. 20 ctgr~ ..
"Gargarismo"
M. Y R.
(Beaurnel8) •
R.
Agua clorada
F enol. .....•..........
:M.
y R.
1000 grm~.
;
1
"
"Gargarismos"
..
R.
...
Acido bórico ......•..............
Fenol cri8~lizado
20 grms.
1"
Timol ..............•...............
Agua destilada ..•..............•
20 ctgrs.
750 grms.
M. y R.
"GargarisIDo8u
R.
4
100
CIorato depotasa. ..••..........•
Agua destilada .•.................•
M.iel rosa~a
:M. Y R.
.
gl'J.-
25
"Gargarismos"
,.
"
-
43-
R.
Clorato de pot.asa .........•••...
4 grms .
.Alcohol de menta ..............•
Agua d<'stilada
M. Y lt.
25
280
~,
"
"Gargarismos"
lL
Acino salicílico
1 grmo.
H-liserioa
Agua destilan.n. de menta
:M. Y R.
180
150
"
,.
"Gargarismos"
Hígase disolver caliente el ácido salicílico en
la gk:el'ína y agréguef:.e el agna de menta.
n..
Permanganato de pota.S3
~-\gua destilada
M. y R.
20 ctgrs.
20 grrns.
HGargarismos"
\' ¡i X gotas en un vaso de agua.
( VinH).
R.
.Miel rosada ..................•...
Acido clorhídricC> ........•......
M. Y R.
10 grms .
1
"
"Colutorio' ,
1\1ra tocar varias veces en el día las superficies
uJcel'adas.
( Cmnby).
-
44-
R.
60 grms.
Miell'osada ..•...................•
.farabe <le violetas ..........•..•
~O "
Acido clorhídrico
. XXX gota.s
"Colutarío' •
11. Y R.
R.
Naptol ........•...................•
10 grms.
Sulforocinato
~O
de soda ......•...
"
M. Y R.
R.
Ridoruro dq m~rcnrio
1 grmo.
Alcohol.
9
"M. Y R.
"
"Colutorio"
Para barnizar las partes enfermas muy ligeramente.
R.
Bromo puro ........•.............
Bromuro de potasio ...........•
Agua desti lada
M. Y R.
30 ctgrs.
1 grmo.
2
"
"Colutorio"
R.
Polvo de azafrán ...............•
Acido sulfúrico
M. Y R.
,
8 grms.
15
"Colut.orio"
"
-
4.') -
R.
CIorato
3 grms .
de pobsa ..............•
.Agua dest.ilada
.
180
Jugo de limÓn
.
30
n.
M. Y
"
"
"PociÓn"
de las de sopa ca.da dos horas.
Una cucharuda
(Viau).
R.
Extracto
de quina
2 grms.
.
Cognac VIeJo ...........••.....•••
Jarabe de cortezas de naranja
::0
Agua de meIi8::ts ................•
GO
:W
"Poción"
:M. Y H.
Cada tres horas
"
"
UIla
cucharada.
(Como!!).
n.
Sulfato
de quinina
Acido sulfllrico diluIdo
.
Azúcar
.
hlanca
30
.
120
Agua de caneLl ...•.............
"Poción"
M. Y H.
Una cach:lrada
ue
ctgrs.
X gotas
};) grms.
café cau;), tn s horas.
O)
l lo.
Clornro
30
ctgrs.
10
VIII
grms.
gotas
de caL
Jarabo simplo
Cloruro de soda líquida
l\I. y R.
Una cucharada postrera
"PociÓu"
eada tres buras .
•....------
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