Importancia de la microeconomía en

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Importancia de la microeconomía en
los Premios Nobel de Economía (*)
por Ana María Claramunt
Prof. Consulta Fac. C. Económicas
Universidad Nacional de Cuyo
I. Introducción
El objetivo de este trabajo es apreciar qué importancia se le ha dado al análisis
microeconómico en la obra de los Premios Nobel de Economía.
Para poder circunscribir el tema, hay que precisar primero qué se entiende por
microeconomía. En segundo lugar, examinar los motivos por los cuáles se premió a los
galardonados. De acuerdo a los resultados de esta investigación previa, destacar cuáles
son los principales aportes de los laureados a la microeconomía.
I.1. Concepto de microeconomía
“La teoría microeconómica se ocupa de la conducta de los actores económicos
individuales y de la agregación de sus acciones en contextos institucionales diversos”1.
Estudia el comportamiento de unidades económicas (un consumidor, una empresa, un
trabajador, etc.) en un marco institucional dado. Es decir, analiza la conducta del actor (por
ejemplo, la maximización de utilidad o de beneficio), dadas las alternativas que tiene a su
alcance, y los resultados de esas conductas se agregan dentro de un marco determinado,
tradicionalmente el análisis de equilibrio.
La macroeconomía, en cambio, se ocupa de los grandes agregados económicos,
como ser: el producto bruto, el consumo o la inversión de un país, el nivel de precios, etc.
Esto no quiere decir que en la microeconomía no haya agregaciones; también las hay, pero
surgen de elecciones individuales: por ejemplo, la demanda por naranjas o la oferta de maíz
(generalmente son productos homogéneos o similares). Mientras que en la microeconomía
juegan un rol importante los precios relativos (por eso también se la llama “teoría de
precios”), en la macroeconomía se estudian niveles de precios, o precios relativos de
sectores (i.e. precios industriales versus precios agrícolas).
Al entrar en combinación los millones de acciones microeconómicas se generan las
fuerzas macroeconómicas que, a su vez y en gran medida, conforman el esqueleto sobre el
que se apoyan las decisiones microeconómicas.2
El primer galardonado con el Premio Nobel de Economía, Ragnar Frisch (quien
compartió la distinción con Jan Tinbergen) fue quien acuñó los términos “microdinámica” y
“macrodinámica” en 1933, para señalar en forma aproximada lo que hoy se entiende por
“microeconomía” y “macroeconomía”3.
Como campo de estudio dentro del análisis económico, la microeconomía se
desarrolló en la segunda mitad del siglo XIX y comienzos del XX, “apareciendo como un
cuerpo orgánico de teoría en los Principios del economista inglés Alfred Marshall; en tanto
que la macroeconomía tuvo su nacimiento oficial cuando a comienzos de 1936 otro inglés,
John Maynard Keynes, publicara su Teoría general del interés, la ocupación y el dinero.”4
I.2. El Premio en relación con la obra de los laureados
Cabe preguntarse si el Premio se otorga por la trayectoria del economista o por un
trabajo en particular. En realidad no es ni una cosa ni la otra, ya que es un reconocimiento
2
por aportes importantes, los que se expresan en los motivos que se comunican al anunciar
quién (o quiénes) ha(n) sido agraciado(s) cada año. Por razones de espacio no se
transcribirán aquí los motivos aducidos en cada uno de los premios otorgados desde 1969,
ya que en total son cuarenta y seis los galardonados hasta la fecha5.
Tanto la microeconomía como la macroeconomía constituyen pilares básicos en la
formación de un economista. Tanto una como otra “desarrollan esquemas generales de
análisis, los cuales son modificados apropiadamente en los campos de estudio específicos”6.
Al brindar la micro y la macro conocimientos generales, es indudable que en la obra de los
economistas entren tanto elementos micro, como macroeconómicos, pero según la
disciplina específica abordada, el énfasis se pone más en una u otra.
Si se examina el listado de publicaciones de los galardonados con el Nobel, la
mayoría ha incursionado en algunos trabajos microeconómicos, pero el objetivo aquí no es
presentar todas las referencias bibliográficas de los laureados que tengan enfoque micro,
sino ver quiénes han hecho más aportes de esa índole.
Si se observan los motivos anunciados por la Real Academia Sueca al otorgar el
Premio, sólo en el caso de Gary S. Becker (1992) se menciona específicamente que la
decisión de adjudicárselo es por haber extendido el dominio del análisis microeconómico a
un amplio campo de actividad del comportamiento humano, incluyendo comportamiento que
no es de mercado (“non-market”), y a la interacción entre las conductas de los agentes.
Pero, interpretando un poco el espíritu de los motivos a la luz de los principales aportes de
cada economista laureado, puede afirmarse que, si bien al análisis microeconómico no se le
ha dado un lugar privilegiado en las decisiones de la Real Academia Sueca, no pueden
despreciarse las contribuciones que en ese campo han hecho varios de los premiados.
Puttaswamaiah, en su excelente libro sobre las vidas y contribuciones de los Premios
Nobel en Economía, intenta hacer una clasificación de los aportes en cinco grandes rubros,
pero reconoce que cualquier clasificación es arbitraria por la naturaleza multidimensional de
las contribuciones científicas y la imposibilidad de definir categorías que son lógicamente
paralelas y por las dificultades que se presentan si se quiere evitar superposiciones de
clases.7 Los cinco rubros son: 1) Teoría económica general (“básica”); 2) Contribuciones
teóricas referidas a aspectos específicos o sectores de la economía; 3) Poderosos métodos
de análisis económico: su desarrollo y aplicación; 4) Más cercanos a la investigación
empírica “pura”; 5) Pensamiento innovativo no formalizado.
Varios de los premiados entran en más de uno de los rubros citados. Por otro lado,
en varios casos se pasa de la frontera de la economía a otras áreas, como ser: historia,
problemas sociales de población y familia, decisiones políticas, ciencia de la administración,
etc. Asimismo hay trabajos que son interdisciplinarios.
Por lo expuesto anteriormente, aquí no se circunscribirá el análisis a los motivos
aducidos explícitamente por la Real Academia Sueca en ocasión de anunciar los Premios de
cada año, sino que se considerarán los principales aportes hechos en materia
microeconómica por los galardonados, sin intentar hacer una lista exhaustiva, pues ello
excedería el objetivo de este trabajo. Como ya se dijo, lo que se pretende señalar son las
contribuciones más destacadas en el área micro.
II. Principales aportes microeconómicos
de los premiados con el Nobel
De acuerdo a lo expresado en el acápite anterior, aquí se presentarán los principales
aportes microeconómicos de varios de los premiados con el Nobel. Se seguirá un orden
3
cronológico, pero no se incluirán todos los galardonados, sino aquéllos cuyas incursiones en
la microeconomía aparecen como más relevantes.8
II.1. Paul A. Samuelson (1970)
A Samuelson se le otorgó el Premio por su labor científica, a través de la cual
desarrolló la teoría económica estática y dinámica y contribuyó activamente a elevar el nivel
de análisis de la ciencia económica. Su principal contribución fue el aporte de nuevas y
refinadas herramientas analíticas.
Reescribió partes considerables de la teoría económica central. Demostró la similitud
formal entre áreas muy diversas, como: producción, comportamiento del consumidor,
comercio internacional, finanzas y análisis macro. El principal método aplicado fue el de
maximización o minimización con restricciones, dándole importancia a las condiciones de
segundo orden.
Reformuló los fundamentos de la teoría del consumo con su teoría de las
“preferencias reveladas”. Con ese enfoque intentó suplantar pedagógicamente al de curvas
de indiferencia. Postuló que comparando los costos de diferentes combinaciones de bienes
en distintas situaciones de precios, se puede inferir si un conjunto dado es preferido a otro.
Esa teoría tuvo implicancias para el estudio de elasticidades y la elaboración de índices de
costo de vida.
En teoría de la producción son importantes sus aportes en teoría dual. Si bien
Hotelling, en 1932, introdujo el enfoque dual, Samuelson en 1953 y luego Shepard
perfeccionaron la formulación de la teoría de la dualidad, permitiendo así superar las
limitaciones para las estimaciones econométricas que presentaba el enfoque tradicional.
Cabe mencionar también su exposición de la frontera de producción a precios de factores.
En 1947, cuando sólo contaba 26 años, escribió su libro Foundations of Economic
Analysis9, el que fue ampliado en 1983 y ha sido traducido a varios idiomas. En él estableció
los fundamentos matemáticos de la teoría económica.
En 1948 publicó su libro de texto Economics: An Introductory Analysis, el que cuenta
con numerosas ediciones (revisadas y ampliadas)10 y ha sido traducido a 40 idiomas.
Samuelson menciona que su cabello pasó de rubio a marrón y luego a gris, pero su libro de
texto permaneció teniendo la edad de 21 por siempre.11
II.2. Sir John R. Hicks (1972)
En el cuarto año en que se otorgó el Nobel de Economía, el Premio fue compartido
por Sir John R. Hicks y Kenneth J. Arrow. El motivo por el que se los galardonó fue por sus
contribuciones pioneras a la teoría del equilibrio general y a la teoría del bienestar.
Si bien a Hicks se lo referencia como un especialista en teoría del bienestar, sus
aportes a la teoría microeconómica son muy importantes. En realidad su fama en economía
reside en su trabajo teórico microeconómico, el que culminó con su libro Value and Capital12,
aparecido tres años después de la “General Theory” de Keynes, el cual marcó el hito inicial
de las teorías microeconómicas subsecuentes en Gran Bretaña y EE.UU. Se suele decir que
ese libro constituye un intento de establecer un puente entre las proposiciones de la micro y
de la macroeconomía, pero una interpretación más razonable sería considerarlo como una
aspiración de conectar la estática con la dinámica y, en particular por extender métodos
estáticos a casos dinámicos.13 Hicks mismo habla de ese intento en su comentario al
artículo de Roy Weintraub: “Microfoundations: The Compatibility of Microeconomics and
4
Macroeconomics”, en Journal of Economic Literature, publicado en 1979 y luego reimpreso
en Collected Essays on Economic Theory, Vol. III: Classics and Moderns (1983).
Su teoría del equilibrio se basa sobre teorías de consumidores y empresarios. Para
Hicks no hay proposiciones macro si no se fundamentan en conceptos micro. Ragnar
Bentzel, de la Real Academia Sueca, en su discurso pronunciado al otorgar el Premio Nobel
de 1972, dijo que el modelo de equilibrio de Hicks podría mostrar las consecuencias que
sobre el sistema económico como un todo, producirían, por ejemplo, cambios en los gustos
de los consumidores o en las expectativas de precios de las empresas.
Hicks resucitó el análisis de curvas de indiferencia, dándole importancia a la utilidad
ordinal. Aplicó curvas de indiferencia en sus famosos artículos sobre excedente del
consumidor: “Consumer’s Surplus and Index-numbers” y “Four Consumer’s Surpluses”,
publicados en 1942 y 1944, respectivamente, en Review of Economic Studies y reimpresos
en 1981 en Collected Essays on Economic Theory, Vol. I: Wealth and Welfare (1981). Entre
sus contribuciones destacadas a la teoría del bienestar, figura su revisión del concepto de
excedente del consumidor y la formulación de criterios para comparar entre distintas
situaciones económicas.
Desarrolló conceptos de la teoría del valor tratados por Edgeworth, Pareto y Slutsky.
Destacó el rol de la elasticidad de sustitución y de la elasticidad ingreso en la determinación
de la elasticidad de demanda. Hizo hincapié en conceptos tales como: efecto ingreso, efecto
sustitución y complementariedad. En la biografía de Hicks publicada en la revista Banca
Nazionale del Lavoro, Hicks decía: “Entre 1926 y 1935, en la Escuela de Economía de
Londres, pasé de la más absoluta ignorancia a mis primeros logros teóricos (la elasticidad
de sustitución, la distinción entre efecto ingreso y sustitución, etc.)”14. Dentro del estudio de
los factores de producción introdujo el concepto de factor regresivo, llamado posteriormente
factor inferior.15
Un aporte importante fue su libro A Revision of Demand Theory, publicado en 1956,
en donde explica que la ley de la demanda sirve tanto para comportamiento de grupos,
como de individuos. Cabe también mencionar su clásico The Theory of Wages, aparecido en
1932, reeditado en 1963, año en el que Hicks revisó la versión original, y traducido al
español en 1973. Su sistematización de las cuatro reglas de Marshall en materia de
demanda derivada, es un tema de estudio obligado en todo curso de microeconomía.
II.3. Kenneth J. Arrow (1972)
Como ya se dijo, Arrow compartió el Premio con Hicks, siendo sus aportes
principales en el área de la teoría del equilibrio general y del bienestar.
El teorema de la imposibilidad de Arrow ha tenido gran repercusión en la formulación
de las funciones de bienestar basadas sobre comportamiento de los individuos. En su libro
Social Choice and Individual Values, publicado por primera vez en 1951, formuló el teorema
según el cual es imposible construir una función de bienestar social partiendo de las
funciones de preferencias individuales.
Otro hito importante en la obra de Arrow es el modelo presentado en coautoría con
Gerard Debreu en 1954: “Existence of Equilibrium for a Competitive Economy”
(Econometrica, nº 22), en el que se probó la existencia de equilibrio general bajo ciertos
supuestos específicos, el cual fue precursor de abundante investigación sobre el particular.
Si bien Arrow no está mencionado por sus contribuciones a la microeconomía, cabe
dedicarle un párrafo por su participación en la formulación de la función de producción CES,
tan usada en la teoría de la producción. La autoría de esa función fue compartida con H.B.
5
Chenery, B.S. Minhas y R.M. Solow, por lo que también se la conoce por la sigla SMAC,
formada por las iniciales de cada uno de ellos.16
Otro punto que puede destacarse es su demostración de que la demanda de un bien
depende de los precios de todos los otros bienes, incluyendo precios del trabajo y del
capital. Así también, la oferta de cualquier producto, de trabajo o de capital, depende de los
precios de todos los bienes. En todos sus trabajos, utiliza matemáticas.
Sus principales trabajos se han publicado en Collected Papers, en 7 volúmenes. Por
su relación con la microeconomía, se puede mencionar el tercero, que se refiere a elección
individual, con y sin certidumbre.17
II.4. Tjalling Koopmans y Leonid Kantorovich (1975)
Koopmans y Kantorovich compartieron el Premio por sus contribuciones a la teoría
de la óptima asignación de recursos. Si bien sus aportes no corresponden estrictamente al
campo de la microeconomía, cabe citarlos, ya que los métodos desarrollados por ellos,
como la programación lineal, tienen aplicación en microeconomía. De hecho, en varios libros
sobre microeconomía aparecen uno o más capítulos dedicados a la programación lineal. Al
respecto, es interesante recordar que el método aplicado por Kantorovich fue precursor de lo
que luego se denominó programación lineal y surgió para determinar un plan óptimo de
producción de un aserradero cercano a Leningrado, que había solicitado la colaboración a la
Universidad.18
“En 1948/50 se iniciaron independientemente en EE.UU. una serie de
investigaciones sobre programación lineal. De ellas, cabe destacar la de Dantzig, que dio
como resultado el método simplex, de amplia difusión universal. Sin duda, si los trabajos de
Kantorovich se hubieran conocido en Occidente, los estudios sobre programación lineal
hubieran avanzado más rápidamente, ya que los norteamericanos descubrieron lo que
Kantorovich ya había encontrado varios años atrás”19.
Nemchinov en su Prólogo al libro La asignación óptima de los recursos económicos,
admite las propuestas de Kantorovich cuando se aplican a problemas microeconómicos,
pero las rechaza categóricamente cuando se las pretende generalizar para optimizar un plan
nacional.20 Por otra parte, entre los puntos fundamentales del pensamiento económico de
Kantorovich, hay que mencionar que considera que reformar un proceso de planeamiento,
incluye reforma de precios, y eso fue parte del contenido microeconómico de la
“perestroika”.21
T. Koopmans, por su parte, demostró que, sobre la base de ciertos criterios de
eficiencia, pueden hacerse directamente deducciones importantes respecto a sistemas
óptimos de precios. Se considera que sus aportes han sido importantes para los países en
vías de desarrollo, por el énfasis puesto en la minimización de costos y optimización de
recursos.22
En la conferencia pronunciada por Koopmans en ocasión de la entrega del Nobel,
hizo hincapié en varios puntos relacionados con el uso óptimo de los recursos: entre otros,
le dio mucha importancia a los “precios sombra”, los que son relevantes tanto en análisis
micro como macroeconómico.
Koopmans desarrolló lo que se llama “análisis de actividad”, enfoque que le presta
particular atención al análisis del aspecto productivo del sistema económico, a partir de las
“primeras causas”, como las dotaciones de factores y la tecnología conocida.23 Koopmans
consideró que lo que él llamaba actividades “moleculares” eran más realísticas que la
función de producción.24
6
II.5. Milton Friedman (1976)
A Friedman se le otorgó el Premio por sus logros en los campos de análisis del
consumo, teoría e historia monetaria y por su demostración de la complejidad de la política
de estabilización. De sus más de 300 aportes bibliográficos, la mayoría se refieren a
economía monetaria y a política económica. Pero no puede omitirse mencionar aquí su libro
sobre Teoría de los precios, publicado en Chicago en 1962 y revisado en 1976, el cual ha
servido de libro de texto a muchas camadas de estudiantes de microeconomía y ha sido
traducido a varios idiomas.25 De ese libro, cabe mencionar especialmente su capítulo 13
sobre teoría del capital y tasa de interés, como así también el capítulo destinado a la
demanda por factores (demanda derivada).
Entre sus trabajos referidos a microeconomía o relacionados con temas micro, cabe
citar, entre otros:
- “The Empirical Derivation of Indifference Functions”, escrito con W. Allen Wallis en
Studies in Mathematical Economics and Econometrics, ed. por O. Lange et al. (Chicago,
Univ. of Chicago Press, 1942).
- “The Marshallian Demand Curve” en Journal of Political Economy, nº 57 (dic. 1949).
- “The Expected Utility Hypothesis and the Measurebility of Utility”, escrito con L. J.
Savage, en Journal of Political Economy, nº 60 (dic. 1952).
- A Theory of the Consumption Function (Princeton Unvi. Press, 1957).
En su artículo sobre la curva de demanda “marshalliana”, reproducido en
FRIEDMAN, M., Essays in Positive Economics (Univ. of Chicago Press, 1953 y varias
reimpresiones), expresa su interpretación de la curva de demanda de Marshall, la que difiere
de la interpretación corriente. Según Friedman, corrientemente se toma en consideración el
precio de cada uno de los otros bienes individualmente, mientras que él toma en cuenta sólo
el precio promedio de todos los otros bienes fuera del bien en cuestión y de sus sustitutos
más cercanos. Por otro lado, en la interpretación corriente, el ingreso real varía a lo largo de
la curva de demanda con el precio del bien en cuestión, mientras que él considera que el
ingreso real permanece constante.
En el artículo escrito conjuntamente con Savage, queda demostrado cómo debe ser
la función de utilidad para que un individuo se asegure y, a la vez, juegue a la lotería. El
análisis de este artículo ha tenido diversas aplicaciones.
II.6. Herbert Simon (1978)
Herbert Simon (recientemente fallecido26) obtuvo su Premio por sus investigaciones
sobre el proceso de toma de decisiones en organizaciones económicas. Si bien sus aportes
fueron muy valiosos para las disciplinas asociadas a la administración y a la economía de
empresas, cabe citarlo en el presente trabajo, por su rechazo a la teoría de la maximización
de beneficios como objetivo principal, ya que él consideró que el empresario busca un nivel
satisfactorio de beneficios consistente con cierta participación en el mercado o cierto nivel
de ventas.
Revisó trabajos empíricos sobre funciones de costo y funciones de producción y llegó
a conclusiones importantes: 1) La curva de costo envolvente de largo plazo de Viner no
existe; los datos se explican mejor con la hipótesis de costos constantes. 2) Los datos de
funciones de producción son consistentes con el supuesto de rendimientos a escala
constantes de las funciones Cobb-Douglas y CES.27 Esto tiene implicancias para la teoría
tradicional de microeconomía.
7
Entre sus más de 400 publicaciones, pueden citarse algunas, por su relación más
estrecha con la microeconomía:
- “The Criteria of Efficiency”, escrito con C.E. Ridley en The Annals of the American
Academy of Political and Social Science, nº 199 (set. 1938).
“New Developments in the Theory of the Firm”, en American Economic Review, nº 52
(mayo 1962).
“A Note on the Cobb-Douglas Function”, escrito con F.K. Levy en The Review of
Economic Studies, nº 30 (junio 1963).
“Individual Behavior”, escrito con Allen Newell en International Encyclopaedia of the
Social Sciencies, ed. por David L. Sills (Macmillan, 1968), vol. 14, págs 262/268.
II.7. Theodore W. Schultz (1979)
Recibió el Premio por sus trabajos pioneros en investigación de desarrollo
económico, con particular consideración a los problemas de los países en desarrollo. Es el
decano de la economía agrícola y son importantes sus aportes en la economía de los
recursos humanos.
Se preocupó por los determinantes de la elasticidad de demanda por productos
agrícolas, la que siendo distinta a la de demanda por alimentos en los negocios minoristas,
es el resultado de la agregación de demandas individuales, pero está modificada por
operaciones y comportamiento de ese sector del mercado.
Le dio mucha importancia al capital humano, enfatizando la importancia de la
educación. Sus trabajos pioneros inspiraron a muchos otros posteriores, extendiendo el
análisis económico a áreas antes inexploradas.
Entre otras de sus numerosas publicaciones, cabe citar en este contexto:
-
“Economic Efficiency: Its meaning, Measurement and Application to Agricultural
Problems”, en Journal of Farm Economics, 33, (feb. 1951).
“Investment in Human Capital”, en American Economic Review, 51 (marzo 1961),
reimpreso y traducido a varios idiomas.
Transforming Traditional Agriculture (N. Haven, Yale Univ. Press, 1964), reimpreso y
traducido a varios idiomas.
Origins of Increasing Returns (Basil Blackwell, 1993).
II.8. George J. Stigler (1982)
Se le otorgó el Premio por sus estudios pioneros sobre estructuras industriales,
funcionamiento de los mercados y causas y efectos de la regulación pública. Se lo considera
el fundador de la economía de la información y de la economía de la regulación y pionero en
la interrelación entre la economía y el derecho.
Stigler adaptó y amplió la teoría microeconómica para analizar un vasto rango de
fenómenos reales. Tuvo la extraordinaria habilidad de clarificar importantes cuestiones y
exponerlas con penetración económica.28
Aunque sus aportes abarcan distintos campos, son importantes sus aplicaciones de
teoría microeconómica en lo que hoy constituyen especialidades. La economía de la
información ha pasado a tener identidad propia, aunque la mayoría de los libros actuales de
microeconomía contienen una parte destinada a esa especialización. Stigler consideró, él
mismo, que su contribución más relevante fue su aporte en materia de economía de la
información, ya que en general se suponía que los actores tenían perfecto conocimiento de
los mercados y de la tecnología, cuando en la realidad no es así. Según Stigler, la teoría
8
tradicional no le dio la importancia debida a los costos de información y de búsqueda (el
consumidor indaga precios antes de comprar, sobre todo cuando se trata de bienes
durables) dentro de los costos de transacción.
-
Con respecto a la economía de la información, cabe citar sus artículos:
“The Economics of Information”, en JPE (Journal of Political Economy), junio 1961.
“Information in the Labour Market”, en JPE, suplemento, oct. 1962.
En cuanto a estructuras de mercado son muchos y valiosos los artículos escritos por
Stigler sobre el particular; entre otros:
- “Extent and Basis of Monopoly” en AER (American Economic Review), Proceedings,
junio 1942.
“The Kinky-Oligopoly Demand Curve and Rigid Prices” en JPE, oct. 1947.
- Five Lectures on Economic Problems (N. York, Longmans Green Co., 1949).
“Monopoly and Oligopoly by Merger” en AER, mayo 1950.
“Discussion of Oligopoly” en AER, Proceedings, mayo 1950.
“A Theory of Oligopoly”, en JPE, junio 1964.
“The Dominant Firm and the Inverted Umbrella”, en JPE, oct. 1965.
“Price and Non-Price Competition”, en JPE, feb. 1968.
“The Economists and the Problem of Monopoly”, en AER, Proceedings, mayo 1982.
En su libro sobre Teoría de los precios29 volcó muchos de los conocimientos vertidos
en sus artículos. Fue el primer texto moderno de microeconomía en el que abrevaron miles
de estudiantes de economía.
Tanto en su libro sobre Teoría de los precios, como en algunos de sus artículos,
Stigler criticó la teoría de competencia monopolística de Chamberlin; consideró que un
grupo de productos heterogéneos no pueden “meterse en una misma bolsa” como si fuera
algo homogéneo. No aceptó el supuesto de uniformidad, ni el de curvas de demanda y de
costo idénticas dentro de un grupo.
Si bien se han mencionado supra algunos de sus aportes referentes a la estructura
de los mercados, cabe citar también algunas contribuciones que contienen temas
microeconómicos importantes, como ser:
- Production and Distribution Theories (N. York, Macmillan, 1941).
“A Survey of Contemporary Economics”, en JPE (abril 1949).
“The Development of Utility Theory”, dividido en 2 partes, en JPE (agosto y oct. 1950).
“Perfect Competition, Historically Contemplated”, en JPE (feb. 1957).
“Price System”, en Encyclopedia Britannica, 15ª ed. (1974); etc.
Además están sus aportes a economía de la regulación, los que también contienen
elementos microeconómicos. Son asimismo valiosas sus contribuciones a la historia
económica, algunas vinculadas con la evolución de temas de microeconomía (como por
ejemplo algunos artículos mencionados en el párrafo anterior).
II.9. Franco Modigliani (1985)
Se le concedió el Premio Nobel por sus trabajos pioneros en materia de ahorro y
mercados financieros. Según Robert C. Merton30 es un gran macroeconomista, pero también
es un gran microeconomista.
Sus principales aportes son en los campos de teoría monetaria, política económica y
finanzas (sobre todo en finanzas de corporaciones). Su hipótesis de ciclo de vida es una
teoría puramente microeconómica, pero Modigliani, conjuntamente con otros, ha
demostrado que esa hipótesis tiene un mínimo de aplicaciones macroeconómicas.
9
Modigliani y Brumberg, al igual que Friedman, suponen que los consumidores maximizan la
utilidad del consumo futuro. Difieren en cuanto al plazo: para Friedman, el período es infinito
(o sea que ahorran para ellos y para sus descendientes), mientras Modigliani y Brumberg
toman un período finito (la gente sólo ahorra para sí). La idea de que se ahorra para los
últimos años de la vida de una persona ha influido en las investigaciones teóricas y
empíricas.
El modelo de Modigliani, Brumberg y Ando31, supone que el individuo maximiza su
función de utilidad sujeto a su riqueza neta actual y a los recursos disponibles para él en su
ciclo de vida. Por lo tanto, la maximización de su consumo actual puede expresarse como
una función de sus recursos y de la tasa de interés de su capital, cuyos parámetros
dependen de la edad (se agregan, además, otros supuestos).
Según Stephen Marglin32 los aportes de ciclo de vida y de ingreso permanente
tuvieron eco más bien por ser un nexo entre la macroeconomía keynesiana y la
microeconomía neoclásica, que por su éxito en explicar la evidencia empírica de consumo y
ahorro.
Su obra bibliográfica consta de más de 200 referencias, pero aquí se citarán sólo tres
(aparte de las mencionadas sobre ciclo de vida), por considerar que están más vinculadas
con la microeconomía (aunque no son estrictamente microeconómicas):
- “New Developments on the Oligopoly Front”, en Harvard Business Review, 36 (2),
marzo-abril 1958 (reimpreso en otras publicaciones).
“Firm Costs Structures and the Dynamic Responses of Inventories, Production, Work
Force and Orders to Sale Fluctuations”, en colaboración con Charles C. Holt, en
Inventory Fluctuations and Economic Stabilisation, Part II (Congress of the United States,
1961).
“Consumption Decisions Under Uncertainty”, en colaboración con Jacques Drèze, en
Journal of Economic Theory, 5 (3), dic. 1972 y reimpreso en 1983.
II.10. Maurice Allais (1988)
El galardón le fue otorgado por sus trabajos pioneros en la teoría de los mercados y
eficiente utilización de recursos. Proporcionó un análisis matemático riguroso de la teoría de
equilibrio de mercado. Continuó los desarrollos de Walras y de Pareto, pero no es tan
conocido porque escribió en francés.
Estudió también cómo manejar los grandes monopolios estatales o empresas
públicas, preocupándose de que su análisis teórico pudiera ser aplicado. Él consideró que
los monopolios naturales debían ser de propiedad estatal, con reglas estrictas de regulación.
En cuanto al equilibrio, Allais descartó el equilibrio espontáneo al que conduce la
libre competencia, porque sólo toma en cuenta las preferencias individuales en un punto del
tiempo y no considera otros puntos del tiempo, ni las preferencias de otras generaciones.
Asimismo, son importantes sus trabajos relativos a la elección bajo riesgo. Extendió
su teoría de comportamiento con incertidumbre a un modelo de equilibrio general.
En su haber figuran más de 200 publicaciones, de las cuales la mayoría están en
francés. Por su relación con la microeconomía, aquí se mencionarán las siguientes:
- “Le Comportement de l’Homme Rationnel devant le Risque. Critique des Postulats et
Axiomes de l’Ecole Americaine”, en Econometrica, Vol. 21, nº 4, oct. 1953.
“Il Significato Economico e Sociale dell Economia di Mercato”, en Rivista di Politica
Economica, Año LIX, julio 1969.
10
-
“The Foundations of the Theory of Utility and Risk”, en Progress in Decision Theory, ed.
por O. Hagen et. al (Publishing Company, Dordrecht, 1984), págs. 3/131.
II.11. Ronald H. Coase (1991)
Obtuvo el Premio por su descubrimiento y clarificación del significado de los costos
de transacción y los derechos de propiedad para la estructura institucional y el
funcionamiento de la economía. Antes de Coase, la estructura institucional se consideraba
dada; Coase hizo una extensión radical de la teoría microeconómica, contribuyendo a
mejorar el contexto interdisciplinario.
Consideró que la teoría microeconómica tradicional era incompleta, porque si bien
incluía costos de producción y de transporte, excluía costos contractuales y de manejo de
organizaciones. Al incluir los llamados “costos de transacción”, allanó el camino para el
análisis sistemático de las instituciones en el sistema económico y su significado.
También son importantes sus aportes respecto a los derechos a usar bienes y
factores (derechos de propiedad); demostró que estos derechos pueden reasignarse por
contratos entre los individuos, si se derivan ventajas. En su análisis, se distinguen dos
etapas: 1) La naturaleza de la firma; 2) El problema del costo social.33
Ante la pregunta de por qué se forman las firmas y por qué adoptan cierto tamaño,
Coase concluyó que una firma se origina y adquiere determinado tamaño, si las medidas de
asignación pueden llevarse a cabo dentro de ella a un costo total (de producción, de
contratación y administrativo) menor que si se hicieran con compras y ventas en el
mercado.34
Asimismo, postuló que las partes pueden convenir distribuir en forma diferente sus
derechos de propiedad, si de ello se derivan ventajas mutuas, sin necesidad de intervención
estatal. El llamado “teorema de Coase” en el tratamiento de casos cuando hay intereses
contrapuestos (como el del agricultor y su vecino el ganadero, etc.), ha dado lugar a muchos
escritos y ha influido en los principios legales de administración de justicia. La aplicación del
teorema es polémica en ciertos casos, especialmente cuando hay varias partes
involucradas, como por ejemplo, los problemas de polución.
Se suele decir que Coase escribió muy poco. Si bien eso puede ser cierto, si se
compara su obra con la de algunos otros laureados, lo importante es la trascendencia que
tuvo lo que publicó. Sus dos artículos más influyentes fueron escritos con 23 años de
separación uno de otro y sacudieron el ámbito académico; ellos son: “The Nature of the
Firm”, en Economica (1937), reproducido luego en varias publicaciones, y “The Problem of
Social Cost”, en Journal of Law and Economics, 2 (1959), reproducido en Readings in
Microeconomics, ed. por W. Breit y H. Hochman (1968). Este artículo, tan citado y tan
polémico, surgió (según cuenta Coase en su autobiografía) por la oposición que plantearon
sus colegas de la Universidad de Chicago por sus conceptos vertidos en un informe para la
Federal Communication Commission.
Además de esos dos artículos principales, pueden mencionarse, entre otras, las
siguientes publicaciones en el área microeconómica:
- “The Problem of Duopoly Reconsidered”, en Review of Economic Studies, 2 (1935).
“Monopoly Pricing with Interrelated Costs and Demands”, en Economica, 13 (1946).
“The Marginal Cost Controversy: Some Further Comments”, en Economica, 14 (1947).
British Broadcasting: A Study in Monopoly (London School y otros, 1950).
Comments on “Full Costs, Cost Changes and Prices” y “Characteristics and Types of
Price Dicrimination”, en Business Concentration and Price Policy (Univ.-Nat. Bureau
Committee for Economic Research, 1955).
11
-
“Consumer’s Surplus”, en International Encyclopaedia of the Social Sciences (1968).
“Durability and Monopoly”, en Journal of Law and Economics, 15 (1972).
“The Coase Theorem and the Empty Core: A Comment”, en Journal of Law and
Economics, 24 (1981).
II.12. Gary S. Becker (1992)
Como se dijo en la Introducción, en el caso de Gary S. Becker, es la única vez que la
Real Academia Sueca mencionó expresamente a la microeconomía al anunciar el motivo
por el cual se adjudicó el Premio. Se le otorgó por haber extendido el dominio del análisis
microeconómico a un amplio campo de actividad del comportamiento humano, incluyendo
comportamiento que no es de mercado (“non-market”), y a la interacción entre las conductas
de los agentes.
Gary Becker, en su autobiografía35, afirma que había empezado a perder interés en
la economía porque le parecía que no se preocupaba de problemas sociales importantes,
cuando en 1951 tomó el curso de microeconomía que dictaba Milton Friedman en la
Universidad de Chicago, el que le hizo revivir su entusiasmo por la economía, ya que
Friedman enfatizaba que la teoría económica no era un juego de académicos talentosos,
sino una herramienta poderosa para analizar el mundo real. Posteriormente influyeron en él
Gregg Lewis, con su análisis de teoría económica de los mercados laborales, y T.W.
Schultz, pionero en la investigación de capital humano. Más adelante, se vinculó con George
Stigler, con quien publicó dos artículos.
Becker supone que el comportamiento del individuo es similar en distintas áreas y se
le puede aplicar un enfoque económico. Considera que los agentes individuales (ya sean
consumidores, firmas, organizaciones) se comportan racionalmente: maximizan una función
objetivo específica, como ser utilidad o riqueza.
En la obra de Becker pueden distinguirse cuatro áreas: 1) inversiones en capital
humano; 2) comportamiento de la familia (o consumidor), incluyendo distribución del trabajo
y asignación del tiempo en la familia; 3) crimen y castigo y 4) discriminación en los mercados
de trabajo y de bienes (por raza, sexo, etc).
Si bien la teoría de capital humano es anterior a Becker, su mérito es haber
formulado y formalizado los fundamentos microeconómicos de la teoría. Relaciona
funcionalmente los ingresos con el capital humano. Sus artículos empezaron al comienzo de
la década de los sesenta y culminaron con su libro Human Capital en 1964. Su estructura
analítica sirve, no sólo para estudiar los retornos a la educación y al entrenamiento en el
trabajo, sino también para analizar diferenciales de salario y perfiles de salario a través del
tiempo.
El enfoque del capital humano se ha aplicado en teoría del crecimiento, estudio de
migraciones, aplicaciones en el “sector salud” y también para explicar diferencias entre
naciones.
En su Treatise on the Family (1981) considera al hogar como “una pequeña fábrica”,
que produce bienes básicos, como: comidas, vivienda, entretenimiento, etc., utilizando
tiempo, insumos y bienes comprados en el mercado. Los precios de los bienes básicos
tienen dos componentes: 1) costos directos de la compra de bienes intermedios en el
mercado y 2) gastos de tiempo para producir y consumir un bien. El gasto de tiempo se
obtiene multiplicando el tiempo insumido en producir un bien en el hogar por salarios. Así, si
sube el salario de un individuo, no sólo tiene más incentivo para trabajar en el mercado, sino
que hay una sustitución de producción y consumo de bienes en el hogar, pasando de los
más intensivos en tiempo de producción a los menos intensivos. La asignación de tiempo en
12
los hogares ya había sido presentada en 1965 en su artículo “A Theory of the Allocation of
Time”.
Incursionó todavía más allá, llevando el enfoque económico a decisiones sobre
matrimonio, divorcio y cantidad deseada de hijos, temas éstos tratados en “Human Capital
and the Rise and Fall of Families”, en coautoría con N. Tomes (1986). Asimismo, extendió el
análisis económico a la fertilidad. En su artículo escrito con E.M. Landes y R.T. Michael “An
Economic Analysis of Marital Instability”, se expresa que un individuo tomará la decisión de
casarse si la ganancia esperada de su casamiento excede a los costos en términos de
alternativas perdidas (quedarse soltero o casarse con la esposa alternativa que sigue en
orden como mejor oportunidad). Debido a la información imperfecta, los individuos tienen
que investigar y esto es costoso: por eso, a veces se quedan con esposas con
características inferiores a las ideales.
Salvo el caso de psicópatas, el crimen es analizado como obedeciendo a un
comportamiento racional bajo incertidumbre.
Fue uno de los primeros economistas en estudiar discriminación; actualmente hay
muchos trabajos empíricos sobre discriminación por diferenciales de ingreso por sexo o
raza. También presenta aportes en el área de economía laboral y de distribución del ingreso.
Sus teorías son muy controvertidas, pero sin duda, ha sido uno de los economistas
más originales e influyentes, a tal punto que se dice que ha “colonizado” otras ciencias
sociales. Ha recibido muchas críticas, sobre todo por la dificultad de medir variables como
“cariño”, costos “no-materiales” del crimen, etc.
-
A continuación se presenta un listado de algunos de sus aportes:
The Economics of Discrimination (Univ. of Chicago Press, 1957; 2ª ed. 1971).
“An Economic Analysis of Fertility”, en Demographic and Economic Change in Developed
Countries (Princeton Univ. Press, 1960), págs. 209/240.
“Irrational Behaviour and Economic Theory”, en JPE (Journal of Political Economy), Vol.
60, nº 1 (feb. 1962), págs. 1/13.
Human Capital (Columbia Univ. Press, 1964; 2º ed. 1975); traducido a varios idiomas.
“A Theory of the Allocation of Time”, en Economic Journal, Vol 75, nº 299 (set. 1965),
págs. 493/508.
Human Capital and the Personal Distribution of Income: An Analytical Approach (Univ. of
Michigan, 1967).
“Crime and Punishment: An Economic Approach”, en JPE, Vol. 76, nº 2 (marzo-abril
1968), págs. 169/217.
Economic Theory, en colaboración con A. Knopf (A. Knopf, 1971).
“A Theory of Marriage, Part I”, en JPE, Vol. 81, nº4 (1973), págs. 813/846.
“On the New Theory of Consumer Behaviour”, con R.T. Michael, en Swedish Journal of
Economics, Vol. 75 (1973), págs. 378/396.
“A Theory of Marriage, Part II”, en JPE, Vol. 82, nº2 (1974), págs. 11/26.
Essays in Economics of Crime and Punishment, ed. con W. Landes (Columbia Univ.
Press, 1974).
The Economic Approach to Human Behaviour (Univ. of Chicago Press, 1976).
“An Economic Analysis of Marital Instability”, en colaboración con E.M. Landes y R.T.
Michael, en JPE, Vol. 85, nº6 (1974), págs. 1153/1189.
A Treatise on the Family (Harvard Univ. Press, 1981).
“Human Capital and the Rise and Fall of Families”, con Nigel Tomes, en Journal of
Labour Economics, Vol. 4, nº 3 (julio 1986), págs. 1/39.
“A Reformulation of the Economic Theory of Fertility”, con Robert J. Barro, en Quarterly
Journal of Economics, Vol. CIII, nº 1 (feb. 1988), págs. 1/25.
13
-
“A Note on Restaurant Pricing and Other Examples of Social Influence on Price”, en JPE,
Vol. 99, nº1 (oct. 1991), págs. 1109/1116.
“Fertility and the Economy”, en Journal of Population Economics, Vol 5, nº 3 (1992),
págs. 185/201.
“The Economic Way of Looking at Behavior”, en JPE, Vol 101, nº 3 (junio 1993), págs.
385/409.
II.13. James A. Mirrlees y William S. Vickrey (1996)
James A. Mirrlees compartió el Premio en 1996 con William S. Vickrey. Se les
concedió por sus contribuciones fundamentales a la teoría económica de incentivos bajo
información asimétrica.
En los últimos años se le ha dado mucha importancia al hecho de que los agentes
económicos enfrentan información incompleta y asimétrica. Las contribuciones pioneras de
Stigler han tenido continuación y nuevos enfoques. En la obra de Mirrlees se destaca el
tratamiento del riesgo moral. A mediados de los años setenta, presentó una reformulación
del análisis, aplicando probabilidades. Diseñó un esquema de incentivos, de modo que, por
ejemplo, un asegurado asuma por contrato parte de los costos de eventos indeseables y así
ponga cuidado en preservar de daños al objeto asegurado, como si no contara con seguro.
Vickrey, por su parte, ya a principios de los sesenta, trató el tema de las subastas,
demostrando que si un individuo ofrece una apuesta por encima de lo que está dispuesto a
pagar, corre el riesgo de que otro oferte en forma similar y, finalmente se vea forzado a
pagar con pérdida. Del mismo modo, si ofrece menos que lo que desea pagar, corre el
riesgo que otro compre a menor precio que lo que él deseaba pagar, por lo en su propio
interés debe ofrecer lo que está dispuesto a pagar. Este tipo de análisis se extendió luego a
proyectos públicos.
Vickrey enfatizó que en el análisis de impuestos progresivos hay que tener en cuenta
cómo influyen los incentivos en las acciones de los individuos. Reformuló el problema, en
términos de los incentivos y de la información asimétrica, ya que en la práctica el gobierno
no conoce la productividad de los individuos.
Tanto Mirrlees como Vickrey, hicieron importantes contribuciones en materia de
impuestos y en la determinación eficiente de precios de los servicios públicos.
En el prólogo a su libro sobre microeconomía (asignatura que dictaba en la
Universidad de Columbia), Vickrey se mostró como un defensor de la técnica de las curvas
de indiferencia.
Aquí sólo se detallarán sus principales aportes en materia de teoría de la
información, o temas de microeconomía, aunque la lista de referencias bibliográficas de
ambos economistas es extensa y variada en cuanto a temas considerados36:
-
MIRRLEES, J.A., “The Theory of Moral Hazard and Unobservable Behaviour I”, mimeo.
(Nuffield College, 1975).
MIRRLEES, J.A., “The Economic Uses of Utilitarianism”, en Utilitarianism and Beyond,
ed. Sen y Williams (C.U.R., 1982).
MIRRLEES, J.A., “The Implications of Moral Hazard for Optimal Insurance”, mimeo.
(Nuffield College, 1979).
MIRRLEES, J.A., “Welfare Economics and Economies of Scale”, en Japanese Economic
Review (abril, 1995).
VICKREY, W.S., “Measuring Marginal Utility by Reactions to Risks”, en Econometrica, 13
(1945), págs. 319/333.
14
-
VICKREY, W.S., “Some Objections to Marginal Cost Pricing”, en Journal of Political
Economy, 56 (1948), págs. 218/238.
VICKREY, W.S., “Counterspecultation, Auctions, and Competitive Sealed Tenders”, en
Journal of Finance, 16 (1961), págs. 8/37.
VICKREY, W.S., “Auctions and Bidding Games”, en Recent Advances in Game Theory
(Princeton Univ. Conference, 1962), págs. 15/27.
VICKREY, W.S., Microeconomía, trad. por R. Bopp (Buenos Aires, Amorrortu, 1969).
II.14. Amartya Sen (1998)
A Amartya Sen se le otorgó el Premio por sus aportes a la economía del bienestar.
Ha contribuido a clarificar las condiciones que permiten agregar valores individuales en
decisiones colectivas.
Mediante el análisis de información individual, ha mejorado los fundamentos teóricos
para comparar diferentes distribuciones de bienestar de una sociedad y ha definido nuevos y
más satisfactorios índices de pobreza. Su enfoque teórico ha ayudado a entender mejor los
mecanismos económicos subyacentes en el análisis de las hambrunas. Son importantes sus
enfoques para tratar la desigualdad en la distribución del ingreso, los que presentan
elementos micro y macroeconómicos.
Se ha planteado interrogantes cruciales, como ser, si las preferencias de una
sociedad en su conjunto pueden derivarse consistentemente de las preferencias de los
individuos que la componen. En la teoría de las elecciones sociales, Sen demostró que
diferentes supuestos respecto a las comparaciones interpersonales afectan la posibilidad de
encontrar una regla consistente, no-dictatorial, para las decisiones colectivas.
Aunque sus aportes no son estrictamente microeconómicos, cabe mencionarlo en
esta reseña especialmente por sus contribuciones importantes en materia de distribución del
ingreso, particularmente por sus indicadores que complementan los de Gini, Atkinson,
curvas de Lorenz, etc.
No se listarán aquí sus publicaciones, ya que escapan al tema central de este
trabajo; basta mencionar, relacionados con microeconomía, dos de sus quince libros
(además de numerosos artículos):
-
On Economic Inequality, en colaboración con James E. Foster, 2º ed. (Clarendon Press,
1997).
Inequality Reexamined (Harvard Univ. Press, 1995).
II.15. James J. Heckman y Daniel L. McFadden (2000)
Daniel L. McFadden y James J. Heckman compartieron el galardón en 2000 por su
desarrollo de la teoría y de los métodos para analizar muestras selectivas (en el caso de
Heckman) y elecciones discretas (en el caso de McFadden).
Sus contribuciones pertenecen al campo de la microeconometría, la cual está en la
frontera entre la economía y la estadística. La gran disponibilidad de datos a nivel micro y la
resolución poderosa de las modernas computadoras permiten realizar estudios empíricos en
muchas áreas. Ambos economistas han resuelto problemas fundamentales que se
presentan en el análisis estadístico de datos a nivel micro.
Heckman ha desarrollado métodos estadísticos para tratar muestras selectivas de
manera apropiada. Así, un investigador puede observar una muestra que puede presentar
15
sesgos de selección. Por ejemplo, si se analiza un determinado mercado de trabajo, se
contará con datos de salarios, horas trabajadas, educación, etc. de los que están
efectivamente trabajando en él, pero no se observan las características de quiénes no han
entrado a trabajar a ese mercado porque desearían un salario mayor (o sea que se han
autoexcluido de la muestra). Heckman ha contribuido al tratamiento de esos problemas. Sus
logros han generado un gran número de aplicaciones empíricas, tanto en economía como
en otras ciencias sociales.
La producción bibliográfica de Heckman incluye 3 libros y más de 190 artículos
publicados. Acá sólo se citan tres de ellos relacionados con microeconomía:
-
“Natural Monopoly”, con D. Evans (ed.), Breaking Up Bell: Essays on Industrial
Organization and Regulation (North Holland, 1983), págs. 127/156.
“Multiproduct Cost Function Estimates and Natural Monopoly Tests for the Bell System”,
con D. Evans (ed.), Breaking Up Bell…, op. cit., Cap. 10.
“Time Constraints and Households Demand Functions”, en Research in Population
Economics, T.P Schultz (ed.), Vol. 6, 1988.
McFadden se ha ocupado de elecciones discretas, o sea cuando hay que elegir entre
un conjunto finito de alternativas de decisión. Su teoría emana de la teoría microeconómica,
según la cual cada individuo elige una alternativa específica que maximiza su utilidad.
Cuenta en su haber con 8 libros y numerosos artículos, los cuales abarcan temas diversos
como: teoría de la producción, transporte, econometría, crecimiento económico y desarrollo,
teoría económica y economía matemática, energía, economía de la salud, economía
ambiental, etc. De esa extensa lista, se mencionan a continuación algunos vinculados con
microeconomía:
-
Essays on Economic Behavior under Uncertainty, con M. Balch y S. Wu (eds.)
(Amsterdam, North Holland, 1974).
Urban Travel Demand: a Behavioral Analysis, con T. Domencich (Amsterdam, North
Holland, 1975); reproducido por The Blackstone Co.: Mount Pleasant, MI, 1996.
Production Economics: a Dual Approach to Theory and Applications, en 2 vol., con M.
Fuss (eds.) (Cambridge, MIT Press, 1978).
Microeconomic Modeling and Policy Analysis: Studies in Residential Energy Demand,
con T: Cowing (N. York, Academic Press, 1984).
II.16. Otros aportes relacionados con microeconomía
Ya se dijo supra que no se haría una presentación exhaustiva de todo lo escrito por
los laureados que esté relacionado con microeconomía. En los acápites anteriores se ha
sintetizado lo referente a cada premiado indicado en el subtítulo, pero a algunos de los
premiados no se les ha dedicado un apartado especial. A continuación se presentará una
síntesis de algunas contribuciones de varios de los premiados no incluidos en las secciones
anteriores.
a) James E. Meade (1977)
Meade recibió el Nobel por sus contribuciones a la teoría del comercio internacional y
a los movimientos internacionales de capital. La mayoría de sus trabajos se refieren a
economía internacional, empleo, inflación, crecimiento, etc. Sin embargo, algunos de sus
artículos están relacionados con microeconomía, o bien tienen fundamentos
microeconómicos.
A título ilustrativo, se pueden citar:
16
-
“The Elasticity of Substitution and the Elasticity of Demand for One Factor of Production”,
en Review of economic Studies, Vol I (feb. 1934).
“The Equalization of Factor Prices: The Two-Country Two-Factor Three Product Case”,
en Metroeconomica, Vol 2 (dic. 1950).
“Determinants of Inequality in a Property-Owing Democracy”, reimpreso en Inequality
and Poverty, ed. por E.C. Budd (N. York, Norton, 1967).
“The Theory of Labour-Managed Firms and of Profit Sharing”, en Economic Journal, Vol
82 (marzo 1972).
b) Richard Stone (1984)
Obtuvo el Premio por sus contribuciones fundamentales al desarrollo de los sistemas
de cuentas nacionales y, en consecuencia, por haber mejorado la base del análisis
económico empírico.
Incursionó en el estudio de la teoría de la demanda e influyó en el análisis moderno
de la demanda en econometría aplicada.
De sus aproximadamente 200 publicaciones, por su relación con microeconomía,
cabe citar:
- “A Study of Costs”, con W.A. Tweddle, en Econometrica, Vol 4, nº 3 (1936).
- “The Analysis of Market Demand”, en Journal of the Royal Statistical Society, Vol 108
(1945), págs. 1/98.
- “The Market Demand for Durable Goods”, con D.A. Rowe, en Econometrica, Vol. 25, nº 3
(1957), reimpreso en Consumer Behaviour, eds. A. Ehrenberg y F. Pyatt (Middlesex,
Penguin Books, 1971).
c) James Buchanan (1986)
Buchanan se destacó en finanzas públicas y comportamiento económico del
gobierno. Empleó los fundamentos microeconómicos de teoría de juegos, pensando en un
Estado cuyas decisiones surgen de la maximización de utilidades individuales de políticos
y burócratas. Trató de explicar el comportamiento político en forma similar al análisis de
comportamiento de los mercados.
Tiene más de 370 publicaciones, la mayoría de ellas sobre finanzas públicas y
política económica. Se citarán algunas por considerar que están relacionadas con
microeconomía:
-
Cost and Choice: An Inquiry in Economic Theory (Chicago, Markham P., 1969 y
reimpreso por Univ. of Chicago Press en 1979).
“External Diseconomies in Competitive Supply”, con Charles Goetz, en American
Economic Review, LXI (dic. 1971), págs. 1883/1890.
“The Coase Theorem and the Theory of the State”, en National Resources Journal, 13
(oct. 1973), págs. 579/594.
“On Monopoly Price”, en Kyklos, 36 (dic. 1983), págs. 531/547.
d) Robert M. Solow (1987)
Obtuvo el Premio por su teoría de crecimiento económico. Son importantes sus
contribuciones en materia de cambios tecnológicos. Sus aportes en cuanto a funciones de
producción se refieren fundamentalmente a funciones de producción agregadas, pero no
puede dejar de mencionarse su participación en la elaboración de la función CES, muy
usada en estudios microeconómicos.37
17
Solow estimó la función de producción, o sea la relación matemática entre
producción e insumos. En cuanto al progreso técnico, o cambio tecnológico, publicó en 1957
el artículo “Technical Change and the Aggregate Production Function”, en Review of
Economics and Statistics, 39, págs. 12/20.38 En ese artículo estimó el cambio tecnológico
para EE.UU., en el período 1909/1948, tomando tres series: 1) producción por unidad de
trabajo; 2) capital por unidad de trabajo y 3) participación del capital. Analizó los
desplazamientos de la función de producción, utilizando un procedimiento para separar esos
traslados, de las variaciones a largo plazo de la función. Para ello, supuso que los factores
son remunerados de acuerdo a su productividad marginal, pero ese análisis puede
extenderse a mercados monopolísitcos de factores.
e) Harry M. Markowitz (1990)
Compartió el Premio con William F. Sharpe y Merton H. Miller por sus aportes en el
campo de los mercados financieros. Es considerado el padre de la teoría de selección de
portafolio.
Su modelo se basa sobre un análisis financiero microeconómico para la asignación
de inversiones entre diferentes activos. Es un problema de programación cuadrática, que
utiliza: una función de utilidad cuadrática, rendimientos esperados de distintos activos,
varianza y covarianza de los activos y restricción presupuestaria del inversor.
Con un trabajo pionero de la década de los cincuenta, procura minimizar riesgos y
maximizar rendimientos potenciales; lo importante es la correlación de riesgos entre activos,
sistematizando el principio de “no poner todos los huevos en la misma canasta”.
Cuando Markowitz defendió su tesis doctoral de selección de portafolio en la
Universidad de Chicago (1955), M. Friedman se mostró renuente a otorgarle el título de Ph.
D., por entender que “eso” no era “Economía”39. Luego esa área se convirtió en una parte
importante de la microeconomía: acción bajo incertidumbre.
f) John Harsanyi, John F. Nash y Reinhard Selten (1994)
Se otorgó el premio a estos tres economistas por su análisis pionero en la teoría de
juegos no cooperativos. Ellos no fueron los fundadores de la teoría de juegos, pero
contribuyeron a hacer entender temas económicos complejos, a través de la aplicación de
esa teoría. El trabajo precursor fue el de John von Neumann y Oskar Morgenstern40; los tres
galardonados en 1994, con sus aportes han permitido avanzar en la economía de la
información.
En varios campos de la economía, las acciones de unos provocan reacciones en
otros; en microeconomía esto se remonta al trabajo de Cournot de 1838. Una de las
características de la microeconomía de post-guerra es la extensión del uso de técnicas para
tratar la elección bajo incertidumbre. La toma de decisiones multilaterales es la esencia de
la teoría de juegos, la cual se usa en modelos como la determinación de precios en
oligopolio (es el caso del problema de duopolio de Cournot), modelos de negociación
tendientes a la colusión, etc.
En general, cuando se trata de decisiones de agentes que buscan su propia ventaja,
pero dependen de variables que no están bajo su control, puede aplicarse teoría de juegos,
por ejemplo: en estrategia militar, en política, en economía, etc. Aparte de los casos de
oligopolio mencionados, en economía puede aplicarse en economía del bienestar,
economía laboral, economía internacional, equilibrio general, etc.
18
Nash pasará a la inmortalidad por brindar su nombre a la situación en la que todos
los jugadores en un juego persiguen la mejor estrategia, dadas las estrategias de sus
rivales. El “equilibrio de Nash” forma parte de la galería de los famosos, como las tijeras de
Marshall, la descomposición de Slutsky, la caja de Edgeworth, entre otros.41
III. Consideraciones finales
Como se dijo en la Introducción, el objetivo de este trabajo es apreciar qué
importancia se le ha dado al análisis microeconómico en la obra de los Premios Nobel de
Economía.
Al examinar el listado de los anuncios de la Real Academia Sueca al otorgar los
cuarenta y seis premios entregados desde 1969, la primera impresión es que no se le ha
dado mucha relevancia a los estudios microeconómicos, ya que sólo en el caso de Gary S.
Becker se menciona expresamente este análisis.
Sin embargo, examinando las publicaciones de los galardonados y vinculándolas con
el espíritu del motivo aducido por la Real Academia Sueca al anunciar los Premios, puede
afirmarse que no son despreciables las contribuciones hechas por los laureados en el
campo de la microeconomía.
Es cierto que en muchos de los casos se han premiado las innovaciones en áreas
especializadas, pero varias de éstas contienen fundamentos microeconómicos o bien se
aplican a problemas microeconómicos. Como decía Stigler, “rara vez en economía una
teoría tiene un campo de aplicación bien definido”42.
Como se desprende de lo incluido en la Parte II de este trabajo, quizás los que más
se han dedicado a temas microeconómicos son: J.R. Hicks, G.J. Stigler y Gary S. Becker,
seguidos por R. Coase, P. Samuelson y M. Friedman. Cabe acotar, sin embargo, que
muchos de los aportes no se refieren a la “microeconomía pura”, sino que son extensiones a
áreas que han cobrado envergadura y han tomado identidad como disciplinas
especializadas.
Por otro lado, se ha visto que muchos de los premiados presentan algunos trabajos
referidos a la microeconomía, aunque no se hayan destacado en especial por ellos.
Cabe preguntarse, si se tratara de examinar la trascendencia dada a la
macroeconomía en la obra de los laureados, si se llegaría a conclusiones similares.
Probablemente, el listado sería algo más extenso, ya que podrían incluirse prima facie: J.
Tinbergen, R. Frisch, G. Myrdal, F. Von Hayek, M. Friedman, J. Tobin, F. Modigliani y R.
Lucas y quizás también entrarían los que han estudiado el equilibrio general, como P.
Samuelson, J. Hicks, K. Arrow y G. Debreu.
Se vio supra, en la Introducción, que K. Puttaswamaiah intenta hacer una
clasificación de los aportes de los premiados con el Nobel y llega a la conclusión que
cualquier clasificación es arbitraria por la naturaleza multidimensional de las contribuciones
científicas y por lo difícil que resulta evitar superposiciones cuando se definen categorías.
Aquí no se ha pretendido encasillar la obra de los premiados en la microeconomía o en la
macroeconomía, pues sería un planteo extremadamente simplista. El objetivo ha sido sólo
ver qué relevancia ha tenido la microeconomía en las decisiones de la Real Academia
Sueca. Puede afirmarse que si bien al análisis microeconómico no se le ha dado un lugar
privilegiado, tampoco ha sido menospreciado, pues al premiar varias áreas especializadas,
implícitamente se están reconociendo los fundamentos microeconómicos.
19
Notas de pie de página
(* ) La autora agradece las sugerencias y comentarios de: Claudia Botteon de Trapé, Nuri E.
Claramunt, Facundo Cuevas y María Elena Giner de Lara, quienes tuvieron la deferencia de
leer una versión preliminar del trabajo. Los errores que se puedan haber deslizado son de
exclusiva responsabilidad de la autora.
1
KREPS, David M., Curso de teoría microeconómica, trad. por E. Berenguer (Madrid,
McGraw Hill, 1995), pág. 1.
2
LAGO, Armando V., Microeconomía, 2ª ed. (Buenos Aires, Ed. Macchi, 1976), pág. 9.
3
MADDALA, G.S. y MILLER, Ellen, Microeconomía, trad. por J. Coro Pando (México,
McGraw Hill, 1990), pág. 4.
4
de PABLO, Juan Carlos, Incompletísimo Diccionario de Economía (Biografías y Términos),
Vol. I, 2ª ed. (Buenos Aires, El Cronista, 1993), pág. 246.
5
Se pueden consultar en “Nobel Prize in Economic Sciences Winners 2000-1969”, en la
página Web: http://almaz.com/nobel/economics/economics.html. También, hasta 1994,
pueden consultarse en PUTTASWAMAIAH, K., Nobel Economists – Lives and Contributions,
(New Delhi, Indus Publishing Company, 1995), Vol. 1, págs. 58/61.
6
de PABLO, op. cit., Vol. I, pág. 247.
7
PUTTASWAMAIAH, K., op. cit., Vol. 1, págs. 32/39.
8
Se aclara que el hecho de no incluir algunos en este listado no implica que no tengan en su
haber trabajos relacionados con microeconomía.
9
SAMUELSON, Paul A., Foundations of Economic Analysis, (Cambridge, Harvard Univ.
Press, 1947).
10
En 2000 se publicó la 17ª edición bajo el título de Economics, en colaboración con William
D. Nordhaus (McGraw Hills, 2000).
11
PUTTASWAMAIAH, K., op. cit., Vol. 1, pág. 193.
12
HICKS, John R., Value and Capital (Clarendon Press, 1939), editado por 2ª vez. en 1946 y
traducido a muchos idiomas.
13
PUTTASWAMAIAH, K., op. cit., Vol. 1, págs. 310/312. Véanse también págs. 322/323,
donde se citan los comentarios que sobre “Value and Capital” hizo Ragnar Bentzel, de la
Real Academia Sueca, al anunciar el Premio.
14
de PABLO, op. cit., Vol. I, pág. 98.
15
HICKS, J. R., Valor y capital, trad. por J. Márquez, 3ª. ed. (México, Fondo de Cultura
Económica), Cap. VII.
16
ARROW, K.J., CHENERY, H.B., MINHAS, B.S. y SOLOW, R.M., “Capital-Labor
Substitution and Economic Efficiency”, en The Review of Economics and Statistics, Vol.
XLIII, nº 3 (Cambridge, 1961), págs. 225/250.
17
Collected Papers of Kenneth J. Arrow…Vol. III: Individual Choice Under Certainty and
Uncertainty (Basil Blackwell Ltd., 1984).
18
DIEGUEZ, Héctor H., “L. V. Kantorovich” en Económica, Año XXVIII, nº 3 (La Plata, 1982),
págs. 183/195 y de PABLO, op. cit., Vol. I, págs. 106/107.
19
CLARAMUNT, Ana María, “Prebisch y Kantorovich”, en Revista de la Facultad de Ciencias
Económicas, Año XXXVIII, nº 93/94 (Mendoza, U.N Cuyo, 1986), pág. 39. Según de Pablo
“Las bases de la programación lineal habían sido ya establecidas por José Barral Souto,
quien lamentablemente dio a conocer sus ideas…en castellano” (de PABLO, J. C., “Diez
años de Nobel”, en Revista Mercado, 15/02/79).
20
NEMCHINOV, V.S., “Prólogo a la edición original”, en KANTOROVICH, Leonid V., La
asignación óptima de los recursos económicos, trad. por J.M. Bricall y otros (Barcelona,
Ariel, 1968).
21
GARDNER, Roy, “L. V. Kantorovich: The Price Implications of Optimal Planning” en
Journal of Economic Literature, Vol. 28, junio 1990, págs. 638/648.
22
PUTTASWAMAIAH, K., op. cit., Vol. 2, pág. 441.
20
23
de PABLO, Juan Carlos, Incompletísimo Diccionario de Economía (Biografías y Términos),
Vol. IV, (Buenos Aires, Ed. Macchi, 1998), pág. 83.
24
PUTTASWAMAIAH, K., op. cit., Vol. 2, pág. 441.
25
FRIEDMAN, Milton, Price Theory (a revised and enlarged version of Price Theory: A
Provisional Text) (Chicago, Aldine, 1976).
26
Falleció el 9 de febrero de 2001.
27
PUTTASWAMAIAH, K., op. cit., Vol. 2, pág. 601.
28
SCHMANLENSEE, Richard, en The New Palgrave – A Dictionary of Economics, ed. por
John Eatwell, M. Milgate y P. Newman (Macmillan Press, 1987, reimpreso en Hong Kong en
1996), Tomo 4, págs. 499/500.
29
STIGLER, George J., The Theory of Price (N. York, Macmillan, 1946). En 1952 apareció
una edición revisada y en 1966 se editó por 3ª vez. Hubo luego otras ediciones y
traducciones a varios idiomas.
30
MERTON, Robert C., “In Honour of Nobel Laureate, Franco Modigliani”, en Economic
Perspectives, Vol. 1, nº 2, otoño 1987, págs. 145/146.
31
MODIGLIANI, Franco y BRUMBERG, Richard, “Utility Analysis and the Consumption
Function: an Interpretation of Cross-section Data”, publicado en 1954 y reimpreso en The
Collected Papers of Franco Modigliani, Vol. 2, ed. A. Abel (Cambridge, M.I.T. Press, 1980);
MODIGLIANI, Franco y ANDO, A., “The ‘Life-cycle’ Hypothesis of Saving: Aggregate
Implications and Tests” en American Economic Review, Vol. 53, marzo 1963 y otros
artículos relacionados con el ciclo de vida.
32
Citado por PUTTASWAMAIAH, K., op. cit., Vol. 2, pág. 848.
33
Véase la pág. Web: www.nobel.se/economics/laureates/1991/press.html.
34
Las ideas al respecto surgieron de sus visitas a fábricas y negocios en EE.UU., a raíz de
una beca que obtuvo para estudiar por qué las industrias se organizaban en distinta forma.
Véase su autobiografía en: www.nobel.se/economics/laureates/1991/coase-autobio.html.
35
www.nobel.se/economics/laureates/1992/becker-autobio.html.
36
Con respecto a Mirrlees, véase: www.nobel.se/economics/laureates/1996/mirrlees-cv.html
y en cuanto a Vickrey: www.nap.edu/html/biomens/wvickrey.html, donde puede consultarse
la biografía de Vickrey, por Jacques H. Drèze.
37
Véase supra, punto II.3. y nota nº 16.
38
Este artículo está traducido al español y publicado en Lecturas de Macroeconomía,
recopiladas por M.G. MUELLER (México, Continental, 1971).
39
MARKOWITZ, Harry M., “Foundations of Portfolio Theory”, Nobel Lecture, Dic. 7, 1990,
citado por PUTTASWAMAIAH, K., op. cit., Vol. 3, pág. 1048.
40
von NEUMANN, John y MORGENSTERN, Oskar, Theory of Games and Economic
Behaviour (N.J., Princeton Univ. Press, 1944; reimpreso varias veces).
41
CHOTE, Norbert, “Games Theory Trio Share Nobel Prize”, en The Independent (oct 12,
1994), pág. 27, citado por PUTTASWAMAIAH, K., op. cit., Vol. 3, pág. 1258.
42
Citado por de PABLO, Juan Carlos, Incompletísimo Diccionario de Economía (Biografías y
Términos), Vol. II, (Buenos Aires, El Cronista, 1994), pág. 109.
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