Deformación plástica - Raquel Serrano Lledó

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Deformación plástica
TEMA 2
DEFORMACIÓN PLÁSTICA
1. INTRODUCCIÓN
Ya hemos visto en temas anteriores el proceso de la deformación elástica, tanto a nivel
atómico y cristalino como macroscópicos.
La deformación elástica y las leyes que la regulan tiene gran importancia dado que es la
tensión máxima de trabajo en el diseño de cualquier elemento mecánico. Por tanto, el comportamiento de un elemento en servicio, generalmente será elástico, al menos a nivel global. Sin
embargo, en muchas ocasiones debido a la presencia de entallas o defectos en el material, pueden aparecer en algunas zonas locales tensiones que sobrepasan el límite elástico, produciéndose una nueva deformación que será permanente y que se conoce como deformación plástica.
Esta deformación, puede desembocar en la fractura final de la pieza. Un caso típico de deformación plástica localizada, ocurre en los procesos de fatiga. Por otra parte, la capacidad de deformación plástica es quizás la característica más importante de los metales y es la base fundamental de multitud de procesos de conformado.
El estudio de los procesos de deformación plástica y de rotura, son pues de gran importancia, tanto como base para el estudio de los procesos tecnológicos, como forja, laminación,
extrusión, etc., como necesarios para comprender la importancia
que pueden tener estos fenómenos en el funcionamiento de cualquier órgano mecánico para tratar de preverlos o para poder estimar y corregir el origen de un fallo en un análisis del mismo.
2. DEFORMACIÓN PLÁSTICA POR DESLIZAMIENTO
Si con la muestra (probeta) de un metal que se va a someter a un ensayo de tracción, se
pule y se observa micrográficamente el aspecto que va presentando al aumentar la carga, po-
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Deformación plástica
dremos seguir el proceso de deformación plástica del metal.
Figura 1
Conforme empieza la deformación plástica, aparece en la superficie pulida una serie de
líneas paralelas en diversas direcciones, cuanto
más aumenta la carga aparecen nuevas líneas
paralelas a las ya existentes, si aumenta más el
esfuerzo, aparecen más líneas que cortan incluso a las ya formadas.
Si examinamos el metal totalmente deformado, se observa la superficie del metal lle-
Figura 1.b
na de grupos de líneas paralelas llamadas bandas de deslizamiento, correspondiendo cada sistema de líneas paralelas a un grano distinto. La
naturaleza de estas líneas se ha estudiado cuidadosamente, encontrándose que son un desplazamiento relativo de planos cristalinos los cuales producen escalones en la superficie del metal
(figura 1b).
Si se presenta una sección transversal de la superficie pulida donde aparecen las líneas
antes de deformar, aparecerá según se presenta en la figura 2, y la luz incidente y reflejada del
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Deformación plástica
microscopio irán en la misma dirección no
observándose nada anormal. Sin embargo,
una vez deformada, los diversos escalones
dispersan la luz incidente apareciendo oscuro
en el microscopio. La forma de estas líneas es
muy distinta según la red cristalina del metal;
son muy rectas y paralelas en H.C y en
C.C.C, y onduladas e irregulares en redes
C.C.
Este desplazamiento de unos planos
sobre otros se llama deslizamiento y no ocurre sobre planos elegidos al azar, sino que se
produce sobre unos planos cristalográficos Figura 2
muy definidos llamados planos de deslizamiento activos que varían su orientación según el tipo de red cristalina.
Este deslizamiento de planos se produce debido a la acción de tensiones cortantes, es
decir, tangentes al plano. La tensión tangencial o cortante que se requiere para iniciar el deslizamiento en un monocristal sin defectos, se denomina tensión crítica de cizallamiento o tensión
tangencial crítica, y es una constante en el material. Este valor muestra grandes variaciones en
función de las impurezas, los tratamientos previos y la temperatura, en este caso fundamentalmente en los metales C.C. y H.C.
Ley de Schmid
La mayoría de los ensayos que se realizan sobre metales son a tracción y no a cortadura,
no obstante se puede encontrar una ecuación que relacione la tensión de tracción aplicada con
el esfuerzo cortante sobre el plano de deslizamiento y en la dirección de deslizamiento. Veamos
sobre un monocristal las acciones producidas por una fuerza exterior F sobre un plano cualquiera inclinado con respecto a la dirección de estas fuerzas. Toda la tensión aplicada en un cuerpo
se puede descomponer en una sección cualquiera del mismo, en otras dos, una N normal a la
sección, que trataría de separar o juntar los átomos de esa sección con los de los planos paralelos próximos, y otra τ tangencial que trataría de cizallar esa sección.
19
Deformación plástica
Así pues, la fuerza F aplicada a un monocristal
produciría sobre un plano AB dos tensiones N y τ. Si
este monocristal se supone cilíndrico y la fuerza esta
φ
aplicada a las bases, fig. 3, y actúa axialmente, se encon-
θ
trará sobre cualquier plano perpendicular a la fuerza,
una tensión:
σ =
F
S
(1)
Siendo la tensión tangencial nula.
Si llamamos σ' al esfuerzo sobre una sección
Figura 3
inclinada B de área S' tendremos:
σ ′=
F
S′
(2)
Ahora bien, la superficie de los planos A y B esta relacionada por la expresión:
S = S ′ × cos θ
(3)
Siendo θ el ángulo que forma la dirección de la fuerza con la perpendicular al plano B.
La tensión normal sobre el plano B será:
σ ′=
F
F
= cos θ = σ × cos θ
S′ S
(4)
Este esfuerzo se puede descomponer en una tensión normal N y otra tangencial τ. Con
respecto a la sección B se considera que la dirección del deslizamiento forma un ángulo φ con
la dirección de la fuerza aplicada. Estas tensiones valdrán:
N = σ ′ × cos θ y τ = σ ′ × cos φ
Luego, sustituyendo σ' por su valor:
20
(5)
Deformación plástica
N = σ cos2 θ y τ = σ cos θ cos φ
(6)
Para determinar el valor máximo de τ, considérese que para un valor dado de θ el valor
de φ es (π/2-θ). Por tanto:
⎛π
⎞
- θ ⎟ = σ cos θ senθ
⎝2
⎠
τ = σ cos θ cos ⎜
(7)
El valor máximo de esta función se obtiene para θ = 45º, lo que equivale a que θ = φ =
45º. Luego τmax será:
τ max =
σ
2
(8)
El máximo valor que puede alcanzar la tensión cizallante es la mitad de la tensión de
tracción y se produce a 45º con respecto de ella. La tensión normal máxima corresponde para
θ= 0º, es decir en la sección normal a la fuerza, y es igual a la tensión que provoca la fuerza para esa sección.
3. MECANISMO DE DESLIZAMIENTO
Según lo visto anteriormente, el deslizamiento se produce por movimiento de planos
atómicos unos sobre otros y debido a la acción de una fuerza tangencial. Consideremos ahora
un monocristal perfecto y en él dos planos de átomos paralelos sobre los que actúa una tensión
cortante τ. fig. 4.
Debido a la acción de esta tensión cortante y considerando que el plano B está fijo y sólo se mueve el plano A, la tensión que se necesita para deslizar el plano superior una distancia
Figura 4
21
Deformación plástica
"b", será función de la posición que tenga en cada momento este plano con respecto al otro.
Para mantener los dos planos en la posición inicial de equilibrio, la tensión necesaria es
cero. Cuando el plano B se haya desplazado una distancia "b/2" los átomos de éste estarán colocados justamente sobre los átomos del plano A. En esta situación y debido a la fuerza de enlace, los átomos pueden moverse tanto a la izquierda como a la derecha por lo que puede tomarse τ= 0.
Cuando el desplazamiento es igual a "b", se está en una posición de equilibrio igual a la
inicial, sólo que desplazado una distancia "b", en esta situación τ también será cero. En cualquier posición intermedia de estas, los átomos son atraídos hacia los vecinos más próximos con
una fuerza en función de la distancia a la que se encuentra. La variación de τ con el desplazamiento "x" se supone que se puede expresar mediante una función senoidal; siendo por tanto:
⎛ 2πx ⎞
⎟
⎝ b ⎠
τ = τ max sen ⎜
(9)
Para pequeños valores del desplazamiento, se puede aplicar la ley de Hooke, que en deformación cortante es:
τ =Gγ =
Gx
a
(10)
Dónde G es el módulo cortante y γ la deformación cortante. Además para pequeños
valores del desplazamiento la ecuación (9) se puede escribir como:
τ = τ max
2πx Gx
=
b
a
(11)
y combinando las ecuaciones (10 y 11) se obtiene:
τ max =
G b
2π a
(12)
como "a" y "b" tienen dimensiones muy parecidas se puede hacer la aproximación de que a=b,
resultando:
τ max =
22
G
2π
(13)
Deformación plástica
Este valor de τ es el valor teórico de la tensión crítica de cizallamiento. Este valor, se ha
encontrado que es del orden de 100 a 10000 veces superior al observado en los cristales reales.
Incluso utilizando técnicas de análisis más refinados, las discrepancias siguen siendo grandes.
Todo esto hace pensar, que la deformación en la red se encuentre favorecida por la existencia
de defectos en la misma que hacen que la deformación se produzca más fácilmente. Estos defectos, ya estudiados anteriormente son los que conocemos con el nombre de dislocación. Como se ve el valor de la resistencia teórica de un material, depende únicamente de su módulo de
elasticidad transversal, es decir cada material tiene una capacidad potencial de resistencia proporcional a el valor de G de este material. Valores de τ medidos para distinto materiales con y
sin dislocaciones se muestran en la tabla I.
TABLA I
τ MPa
Material
τ/G
Cd
483 x 10-3
2,5 x 10-5
Ag
586 x 10-3
2,3 x 10-5
Cu
579 x 10-3
1,4 x 10-5
Cu sin dislocaciones
610
1,5 x 10-2
14
1,7 x 10-4
6550
8,0 x 10-2
Fe
Fe sin dislocaciones
1.96
1,4 x 10-4
SiO2 sin dislocaciones
> 5860
2,1 x 10-1
Al2O3 sin dislocaciones
> 20700
1,3 x 10-1
ClNa
De todo lo anterior se deduce, que la deformación de un sólido cristalino se debe a el movimiento de deslizamiento de los distintos planos atómicos producidos por el movimiento de las
dislocaciones.
Este movimiento, es el movimiento progresivo del defecto a través de la red, Fig. 5, sin tener
que moverse todos los átomos del plano conjuntamente, produciéndose el movimiento con menor consumo de energía y necesitándose una tensión menor para hacerlo. Cuando la dislocación
pasa de la fila en la que se encuentra al plano de la derecha, Fig. 5, lo que ocurre es que hay un
pequeño movimiento de los átomos alrededor de la dislocación, el trabajo que se realiza para
23
Deformación plástica
mover los átomos hacia la derecha, hacia una posición de energía superior a la de equilibrio, se
compensa con la disminución de energía de los átomos a la izquierda de la dislocación que caen
nuevamente hacia una posición de equilibrio.
De esta forma difiere de la deformación elástica, en la que siempre todos los átomos se
desplazan de una forma continua y homogénea la misma cantidad de sus posiciones de equilibrio. La deformación plástica por el contrario, al estar asociada a las dislocaciones, hace que
solo se produzcan movimientos de algunos átomos durante la deformación, en vez de tener que
vencer la fuerza de enlace de todos lo átomos asociados al plano de deslizamiento, produce el
mismo efecto venciendo los enlaces de una línea de deslizamiento de forma progresiva. Esta
deformación esta asociada a las dislocaciones de tal manera que no puede ocurrir una sin la
otra.
Figura 5
La resistencia al movimiento de las dislocaciones, depende tanto del tipo y direccionalidad del enlace como de la estructura cristalográfica. El conocimiento de los mecanismos de
formación y movimiento de las dislocaciones, nos proporcionan las bases para poder aumentar
la resistencia de los materiales. Si las dislocaciones se bloquean, la resistencia elástica aumenta,
obteniéndose una mayor capacidad de soportar cargas del material.
Luego, teóricamente la deformación plástica empezará cuando alguna tensión tangencial en
cualquier plano cristalográfico supere la tensión tangencial crítica. Sin embargo, para que el
deslizamiento no produzca la rotura sino sólo una deformación, es necesario que se restablezca
24
Deformación plástica
el enlace en el desplazamiento, que los enlaces no sean personales. También es necesario que
durante el desplazamiento los átomos no sobrepasen la distancia mínima necesaria para perder
la cohesión de un átomo con otro, y por último se necesita que la estructura resultante sea energéticamente admisible. Si estas condiciones no ocurrieran al efectuarse el deslizamiento de los
planos, se produciría la rotura por pérdida de cohesión.
4. ENERGÍA DE LAS DISLOCACIONES
Obviamente
la
presencia de dislocaciones
reduce grandemente la
resistencia de los materiales. Es importante saber
que tipo de dislocaciones
pueden estar presentes en
una estructura cristalina,
si son estables, por que
Figura 6
planos se pueden deslizar
y porque. Estos interrogantes se pueden contestar, determinando de que depende la energía asociada a una dislocación. Se sabe que el deslizamiento se produce únicamente en algunos planos,
que son los más compactos y dentro de estos en algunas direcciones determinadas que también
son las más compactas. Una justificación física de este comportamiento, se puede encontrar en
que estos planos y direcciones son los que están más separados entre sí, favoreciendo el deslizamiento por existir la mínima interferencia atómica en esas direcciones determinadas. Fig. 6. No obstante, existe
otra razón de tipo energético para justificar el deslizamiento por estos planos y
direcciones.
Debido a que los átomos en una
dislocación están fuera de su posición
Figura 7
de equilibrio, podemos decir que se tie-
25
Deformación plástica
ne un campo de tensiones o de deformaciones alrededor de la línea de dislocación. En esta zona
deformada habrá almacenada una cierta cantidad de energía elástica, denominada energía elástica de la dislocación. Supongamos una dislocación helicoidal como la representada en la figura
7, a lo largo de un cilindro de radio r.
Esta dislocación se puede haber producido por un corte de la mitad cilindro paralelo al eje, y
desplazando las caras cortadas una distancia b igual al espaciado interatómico de la red en esa
dirección. Calculemos la energía asociada a un elemento anular de radio r, espesor dr, y longitud unidad, centrado sobre la dislocación. El desplazamiento de este anillo, haciendo un circuito
completo alrededor del mismo, es igual a b, y la deformación cortante según se vio en el capitulo anterior será:
b
γ=
(14)
2π r
Una vez conocida la deformación cortante, se puede calcular la energía de deformación por
unidad de volumen. La variación de energía elástica por unidad de volumen de la tensión aplicada será: dW = τ dγ . La energía por unidad de volumen al deformarse desde cero a γ, se obtendrá integrando la expresión anterior entre estos límites. Por otra parte, según la ley de Hooke
τ = G γ . Sustituyendo en la expresión anterior e integrando se obtiene:
γ
γ
W = ∫ τdγ = ∫ G γ dγ =
0
0
Gγ2
2
(15)
donde G es el modulo cortante.
Sustituyendo la ecuación (14) en la (15) se obtiene:
1 ⎛ b
W= G⎜
2 ⎝ 2π
⎞
⎟
r⎠
2
(16)
La energía total por unidad de longitud a lo largo del cilindro se obtiene integrando la expresión
anterior sobre el volumen del cilindro.
1 ⎛ b
Wl= ∫ G ⎜
2 ⎝ 2π
r0
r1
26
2
G b2 r 1
⎞
ln
⎟ 2 π r dr =
r⎠
4π
r0
(17)
Deformación plástica
El empleo de un límite inferior es debido, a que para valores muy pequeños de r la deformación
γ (ver ecuación (14)) es muy grande, no cumpliéndose las leyes de la elasticidad, y no siendo
válido el planteamiento anterior, necesitándose teorías más complejas para calcular la energía
de la deformación en el núcleo de la dislocación, estos cálculos revelan que la energía de esta
zona próxima al núcleo de la dislocación, es pequeña comparada con la energía elástica del resto del campo de deformación. Para r > 2b es aplicable la teoría anterior. La relación ln(r1 / r0)
tiende a ser ≈ 4π, siendo por tanto la energía por unidad de longitud de dislocación:
Wl ≈G b
2
(18)
Haciendo un cálculo similar para las dislocaciones de borde se obtienen resultados idénticos.
Como se ve en la ecuación anterior, la energía de la dislocación varia con el cuadrado del vector
de Burgers. De acuerdo con estos resultados, es de esperar que debido a consideraciones energéticas las dislocaciones traten de tener un vector de Burgers lo más pequeño posible. Por
ejemplo una dislocación de 2b de vector de Burgers tiene una energía por unidad de longitud
igual a 4Gb2, mientras que dos dislocaciones individuales de vector b tienen en conjunto una
energía de Gb2 + Gb2 = 2Gb2. Una dislocación de vector 2b puede disminuir la energía total del
cristal si se desdobla en dos individuales. Dos dislocaciones de signo opuesto se anulan disminuyendo la energía de 2Gb2 a cero.
Con estas consideraciones, se puede suponer que las dislocaciones se formaran en las distintas
estructuras cristalinas en los planos y direcciones en los que ocurra que el vector de Burgers b
sea más pequeño. Es decir, los planos y direcciones más probables son aquellos en los que la
traslación de un punto a otro de la red sea la más corta, esto ocurre en los planos y direcciones
más compactos. La mayoría de las veces el vector de Burgers b coincide con el parámetro de la
red.
5. MOVIMIENTO Y GENERACIÓN DE DISLOCACIONES
La cantidad de dislocaciones presentes en un cristal, y su facilidad para formarse condicionan la
resistencia y el comportamiento mecánico de un material. Es un hecho evidente que la deformación plástica aumenta la densidad de dislocaciones, aumentando por tanto en principio la capacidad de deformación.
27
Deformación plástica
Veamos en principio que fuerza actúa sobre una dislocación, cuando se mueve por la acción de
una tensión cortante. La aplicación de una tensión cortante a un cristal que contenga una dislocación y que produce su movimiento, hace que al producirse una deformación se realice un trabajo, disminuyéndose la energía potencial del sistema. La fuerza sobre la dislocación podemos
definirla, como la derivada de la variación de energía con respecto a la posición de la dislocación.
Supongamos un cristal como el de la figura 8, en el
que por efecto de la tensión aplicada la dislocación se
mueve de un extremo a otro del cristal, desplazándose
la mitad superior una cantidad b con respecto a la mitad inferior. El trabajo producido por la tensión aplicada τ, será: (τl1l2)b. Al movimiento de la dislocación
se opone una fuerza por unidad de longitud igual a f.
Dado que la dislocación se ha movido a lo largo del
cristal (l2) el trabajo necesario para este movimiento
habrá sido: (fl1) l2, como el trabajo gastado por la dis- Figura 8
locación ha de provenir del trabajo exterior aplicado, ha de cumplirse que ambos sean iguales.
Luego igualando las dos expresiones, tenemos:
f =τ b
(19)
Luego la fuerza por unidad de longitud que actúa sobre una dislocación es simplemente el producto de la tensión aplicada por el
vector de Burgers. Esta fuerza actúa
en dirección perpendicular a la línea
de dislocación y paralela al movimiento. Este resultado es el mismo
para dislocaciones de borde como
helicoidales o mixtas.
Veamos ahora que ocurre
cuando en un cristal que contiene un
lazo de dislocación se le aplica una
tensión τ, Fig. 9. Al aplicar esta tensión cortante aparecen dos mecanismos opuestos sobre la dislocación.
Por una parte esta tiende a cerrarse
Figura 9
28
Deformación plástica
para disminuir la energía asociada, tratando de disminuir la longitud del lazo, comportándose
como una línea de tensión que trata de contraerla, la energía asociada a este lazo como vimos en
un apartado anterior es Gb2. Por otra parte la tensión aplicada tiende a expandir el lazo. Si la
fuerza de la línea de tensión es mayor que la debida a las tensiones aplicadas, el lazo se contraerá, en caso contrario se expande. Interesa saber que ocurrirá para una dislocación al aplicar una
tensión. Si la dislocación crece dr, se produce un aumento de la energía igual a: el aumento de
longitud, multiplicado por la energía por unidad de longitud, 2πGb2 dr. El trabajo producido
por la dislocación en este incremento, será el producto de la fuerza por unidad de longitud (τb)
por la longitud de la dislocación (2πr) y por el desplazamiento (dr). Igualando ambos trabajos,
se obtiene:
2 π G b 2 dr = τ b 2 π r dr
G b
τ=
r
(20)
Según la ecuación anterior, la tensión necesaria para expandir la dislocación es inversamente
proporcional al radio del lazo, si τ > Gb/r la dislocación se expande, si por el contrario τ <
Gb/r, la dislocación se contrae.
La ecuación (19) es válida también para el caso de una dislocación recta que interaciona con
algunos obstáculos. Consideremos una dislocación de borde bloqueada en dos puntos A y B,
Fig. 10.
Inicialmente la línea de dislocación bloqueada es recta, como consecuencia de la tensión aplicada ésta puede curvarse sobre los extremos fijos, disminuyendo continuamente el radio de curvatura. La dislocación sigue curvándose hasta que la fuerza de empuje debido a la
tensión aplicada se equilibra con la línea de tensión, luego:
τ b l = 2T sen θ
(21)
donde T =Gb2. Cuando θ=90º, la
fuerza debido a la línea de tensión
es máxima, y la tensión necesaria
para que el segmento siga curvándose disminuye, en este caso tenemos:
Figura 10
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Deformación plástica
τ=
2G b2 2Gb Gb
=
=
r
bl
l
(22)
donde r=l/2. Como se ve la ecuación anterior es igual a la (19), por tanto se puede considerar
que una dislocación en línea de longitud l se comporta igual que un lazo de dislocaciones de
radio igual a l/2.
Cuando la tensión sigue aumentando, en el caso anterior, la dislocación sigue curvándose hasta
Figura 11
cerrar un lazo y aparece una nueva dislocación que comienza el mismo camino que la anterior,
esto se conoce como fuente de dislocaciones de Frank-Read, Fig. 11. Como se ve una tensión
puede producir una fuente de dislocaciones si existen estas previamente en el cristal. Se puede
decir que la plasticidad comenzará cuando la tensión alcance el valor suficiente para que la dislocación se curve completamente, en este caso τ = 2Gb/l. Los valores de l son aproximadamente igual a ρ-1/2, siendo ρ la densidad de dislocaciones. Valores típicos de ρ para metales recocidos, son del orden de 107 cm/cm3, lo que da valores de l = 3 x 10-4, los valores de b
son del orden de 2 x 10-8 cm. Substituyendo estos valores en τ = 2Gb/l se obtiene que el límite
elástico es del orden de 10-4G, lo que esta bastante de acuerdo con los valores medidos en ensa-
30
Deformación plástica
yos.
Cuando la resistencia al movimiento de las dislocaciones en la red es grande, por ejemplo por
existencia de enlaces covalentes, los cálculos son más complejos y habría que tener en cuenta
esta resistencia. Existen otras fuentes de dislocaciones además de la de Frank-Read, la propia
deformación plástica produce gran cantidad de dislocaciones en el cristal.
6. PLANOS Y SISTEMAS DE DESLIZAMIENTO
Al aplicar una fuerza de tracción sobre un monocristal, la tensión cortante máxima sobre un
plano de deslizamiento vendrá dada por la ecuación (4), y en una dirección de deslizamiento en
ese mismo plano será la ecuación (5). Luego el valor de la fuerza de tracción aplicada "F" para
producir el deslizamiento dependerá de la orientación del cristal con respecto a la fuerza. De
todas formas el deslizamiento se produce cuando la componente cortante en la dirección del
deslizamiento es capaz de vencer la resistencia al movimiento de las dislocaciones, este valor es
la tensión crítica de cizallamiento.
Durante la deformación, además, los planos de deslizamiento tienden a girar sobre dos ejes distintos
para tratar de ponerse paralelas a la dirección del
esfuerzo, Fig. 12.
Como se ha visto en el apartado anterior, los planos
y direcciones sobre los que ocurrirá la deformación
dependen de la estructura cristalina. Un plano y una
dirección de deslizamiento forman lo que se denomina un sistema de deslizamiento. Según la red cristalina, varían los sistemas de deslizamiento comportándose los materiales de distinta manera según sean
estos sistemas
Figura 12
Red hexagonal
Los planos de deslizamiento en esta red son las bases del hexágono y dentro de estos planos las
direcciones son las diagonales, luego, presenta un sólo plano de deslizamiento y tres direcciones.
31
Deformación plástica
Los materiales que presentan este tipo de red suelen ser frágiles pues poseen pocos sistemas de
deslizamiento. Únicamente se deforman fácilmente si la dirección del esfuerzo es apropiada,
comportándose frágilmente en orientaciones desventajosas.
Los planos de deslizamiento son los {0001}, y las direcciones de deslizamiento los < 1120 > .
Red cubica centrada en las caras
Esta red presenta cuatro planos compactos y dentro de cada uno de ellos tres direcciones de
deslizamiento, presentando por tanto 12 sistemas de deslizamiento. Al presentar un gran número de sistemas de deslizamiento los materiales que presentan este tipo de red son muy plásticos,
pues siempre hay posibilidad de que algún sistema esté orientado favorablemente con respecto
al cortante máximo. Los planos de deslizamiento en esta red son los {111}, y las direcciones los
<110>.
Red cubica centrada en el cuerpo
En este tipo de red al no poseer plano compacto, hace que el
deslizamiento no siempre se de en los planos de máxima
densidad. Este tipo de redes no suelen mostrar tan alto grado de plasticidad como la red CCC, pues no tienen sistemas
de deslizamiento definidos. Sin embargo, en algunos casos
el deslizamiento se realiza por planos menos compactos,
generalmente {110} y {112}, siendo en estos casos las líneas de deslizamiento onduladas e irregulares. El deslizamiento se puede producir sobre cualquier plano que tenga
una dirección compacta, que será de deslizamiento. Esta Figura 13
dirección es la <111>. En materiales con estas estructuras se
necesita una mayor fuerza para el movimiento de las dislocaciones, pues los planos no están tan
separados como en las CCC, y el movimiento es más difícil. En la figura 13 se muestra sistemas
de deslizamiento de esta estructura.
32
Deformación plástica
7. DEFORMACIÓN PLÁSTICA POR MACLADO
Este proceso de deformación como ya dijimos, influye menos que el deslizamiento en la deformación plástica. El maclado consiste en una deformación de la red por cizallamiento de diversos planos atómicos sucesivos, desplazándose cada plano una cantidad proporcional a su distancia al plano de maclado y en el que el último se ha desviado una cantidad múltiplo entero del
espaciado atómico, formando los átomos desplazados una imagen especular con respecto a los
no deformados, Fig.14.
Las diferencias entre el deslizamiento y el maclado son:
1.-
En el primero la zona desli-
zada es paralela a la red original,
mientras que en el maclado no.
2.-
En el deslizamiento se produ-
ce un desplazamiento de un bloque
entero del cristal, mientras que en el
maclado es una deformación cortante
uniforme.
3.-
El esfuerzo requerido para
producir la macla es mayor que para
Figura 8
el deslizamiento. Son también menos
sensibles a la temperatura.
El maclado por lo general se produce por la acción de gran
des esfuerzos, generalmente en redes H.C. y C.C.C, pero raramente en C.C.
Además de producir una deformación por sí sola, las maclas favorecen el deslizamiento por las
nuevas orientaciones que crean aumentando la posibilidad de que alguna de ellas sea favorable
al deslizamiento. En algunos metales H.C. es responsable de una gran parte de la deformación,
colocando más sistemas de deslizamiento en posición adecuada constituyendo el principal medio de deformación.
33
Deformación plástica
Existen dos tipos de maclas:
-
Las maclas de deformación, prevalecientes principalmente en metales H.C. (magnesio,
zinc, etc.) y en metales CC. (tungsteno, hierro α, etc.)
-
Las maclas de recocido producidas en el mecanismo de recristalización de un metal deformado previamente, que aparecen fundamentalmente en los metales CCC. (aluminio,
cobre, latón, etc.)
8. DEFORMACIÓN DEL SOLIDO
La deformación elástica terminará cuando la
separación entre los átomos se hubiera aumentado en una cantidad suficiente, como
para que la atracción entre los átomos deje de
tener efecto, en ese momento se producirá la
rotura del enlace y los átomos pueden separarse unos de otros. Una vez roto el enlace
primitivo, al aumentar la distancia entre sí
pueden ocurrir distintos casos, que los átomos
caigan dentro del campo de acción de otros Figura 9
nuevos, formando con ellos un nuevo enlace, posible en el enlace metálico debido a sus características particulares y empezando en ese momento la formación permanente del cristal o deformación plástica. En el caso que la rotura del enlace no permita que este se vuelva a formar, el
final de la deformación elástica es la rotura o separación del sólido en dos o más partes. Esta
deformación plástica ocurre sin embargo mucho antes de alcanzar un aumento de la distancia
de rotura del enlace, debido como ya se sabe a la existencia de dislocaciones.
El tipo de enlace y el tamaño y forma de las moléculas así como la fuerzas de interacción entre
estas, son las que determinan el comportamiento elástico. Al comenzar las deformaciones permanentes, si estas son factibles, las dislocaciones comienzan su movimiento y otros mecanismos entran en juego para controlar el comportamiento mecánico del material. En los metales, materiales con una gran capacidad plástica, su comportamiento es debido a la no direccio-
34
Deformación plástica
nalidad del enlace y a la no existencia de iones implicados en el movimiento de deformación.
En los materiales cerámicos habría que distinguir entre cristalinos y amorfos y entre los que tienen enlaces covalentes y iónicos. En los que tienen enlaces covalentes, al ser estos fuertemente
direccionales, no es posible la formación del mismo una vez roto. En los sólidos iónicos el
comportamiento es muy distinto, dependiendo en que plano cristalográfico se produzca la deformación, o si son monocristalinos o policristalinos. Así como se ve en la figura 15, el deslizamiento en ciertos planos no produce el emparejamiento de iones del mismo signo no produciéndose por tanto fuerzas de repulsión, mientras que en otros planos el deslizamiento enfrenta
átomos del mismo signo produciendo fuerzas de repulsión que rompen el enlace.
En los materiales poliméricos de cadena larga, el comportamiento está muy influenciado por la
temperatura y por el porcentaje de cristalinidad. si el polímero no cristaliza sigue la curva
ABCD, figura 16. En la región C de líquido subenfriado, las moléculas están vibrando constantemente y reagrupándose, como consecuencia el polímero es flexible. En la región por debajo
de Tg (temperatura de transición vítrea), la movilidad de las cadenas es despreciable y el polímero se comporta como un sólido rígido.
Si el polímero tiene
cierta cristalinidad, el comportamiento es también diferente
por encima y por debajo de la
temperatura de transición vítrea. Por debajo de Tg el polímero está formado por una masa de cristalitas embebidas en
una matriz vítrea, comportándose de una forma frágil debiFigura 10
do a la dificultad de movimien-
to de las moléculas. Por encima de Tg, las cristalitas están en una matriz flexible y el material
puede deformarse por deslizamiento de las moléculas.
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Deformación plástica
Esta variación de comportamiento en función de la temperatura, se puede describir representando la variación del modulo de elasticidad en función de la temperatura, en la figura 17 se representa esta variación. Para algunos rangos de temperatura el polímero se comporta de forma
viscoelástica, es decir la deformación depende del tiempo, por tanto los valores de E que se
muestran, son la constante de proporcionalidad entre las tensiones y las
deformaciones para un tiempo de ensayo fijado. Por debajo de Tg el material se comporta de forma elástica como un vidrio, para pequeñas tensiones
el comportamiento es elástico e independiente del tiempo. La deformación
es producida por el estiramiento y
flexión de los enlaces covalentes y
secundarios. Por encima de Tg la deFigura 12
formación depende del tiempo y las moléculas pueden moverse por efecto de la movilidad y de
la rotura de los enlaces secundarios que permiten a las cadenas que se deslicen unas sobre otras.
La variación del comportamiento mecánico en los polímeros depende mucho de su estructura
interna, el peso molecular, la cristalinidad, encadenamiento transversal y la rigidez de las cadenas, dificultan el deslizamiento de unas cadenas moleculares sobre otras aumentando por tanto su resistencia.
En la figura 18 a modo de ejemplo
se recoge la variación del modulo
de elasticidad con la temperatura
para el poliestireno amorfo y cristalino.
Figura 11
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