LITERATURA MEDIEVAL LITERATURA

Anuncio
LITERATURA MEDIEVAL
2.1.3.
LITERATURA
Romancero.
Entendemos por “Romancero” el conjunto de “romances” o composiciones poéticas de género
híbrido (lírico-narrativo) que surgieron cuando los cantares de gesta entraron en decadencia y, a causa
de su excesiva longitud, comienzan a fragmentarse. Sobrevivirían así las partes de mayor interés para
el público, los momentos más intensos desde un punto de vista narrativo o emotivo. Por tanto, podemos
decir que en un principio los romances surgieron de los cantares de gesta, pero posteriormente autores
anónimos crearon otros romances con temas nuevos que se alejaron cada vez más de la épica.
Esta transición del cantar de gesta al romance tuvo lugar en el siglo XIV. La época de auge del
nuevo género fue el s. XV.
2.1.3.1. Romancero Viejo y Romancero Nuevo.
El conjunto de romances tradicionales de creación anónima, transmisión oral y compuestos para
el canto recibe el nombre de Romancero Viejo. Estos romances surgen en los siglos XIV y XV, y
perviven con numerosas versiones distintas de cada uno, ya que la mala memorización o la actualización
del romance a distintas épocas generaban cambios en palabras, personajes o episodios.
La popularidad alcanzada por los romances tras su recopilación en cancioneros, colecciones
impresas o pliegos sueltos desde el siglo XV hizo que en los siglos XVI-XVII todo tipo de escritores se
interesaran por ellos y compusieran infinidad de obras a imitación de las tradicionales, que reciben el
nombre de Romancero Nuevo o Artístico. Su transmisión es escrita, son de autor conocido y ya no
están sujetos a las variaciones propias de la transmisión oral. Como veremos, algunos de nuestros más
grandes poetas de los Siglos de Oro, cultivaron abundantemente y con gran acierto el romance.
Romancero Viejo
Romancero Nuevo
Siglos XIV-XV
Siglos XVI-XVII
Anónimos
Autor conocido
Popular
Culto
Transmisión oral
Transmisión escrita
Variantes
Versiones fijas
2.1.3.2. Características métricas y estilísticas
·
Métrica. El romance es un poema no estrófico, es decir, de extensión no fija, de versos
octosílabos con rima asonante en los versos pares y en el que quedan sueltos los impares:
8 -, 8 a, 8 -, 8 a, 8 -, 8 a, etc.
·
Estilo. encontramos varias características:
Oralidad: Varios recursos están relacionados con la transmisión oral y están dirigidos a actualizar los
acontecimientos y a llamar la atención del auditorio:
Dramatización de las escenas: diálogos, canciones puestas en boca de los personajes.
Apóstrofes dirigidos al espectador: viérades moros y moras/todos huir del castillo. La aparición
del narrador en la escena: Junto al muro de Zamora / vide un caballero erguido. Apelación al
protagonista del romance: Buen alcaide de Cañete/ mal consejo habéis tomado.
Repeticiones, recursos paralelísticos, etc. que refuerzan la memorización del poema: ¡Abenámar,
Abenámar, / moro de la morería!
Fragmentación: Esta característica es debida a su origen. Las escenas comienzan in media res,
IES M. CARDONA, Departament de llengua i literatura catellana
1r Batxillerat: unidad 5; Literatura Medieval
1
sin exponer los antecedentes de la acción. Sin apenas introducciones, se nos sitúa bruscamente en
mitad del hecho narrado. Basta el primer verso para dar el tono de la acción y crear la atmósfera del
poema: En Burgos está el buen rey / asentado a su yantar. Pero lo más significativo es que se truncan
también abruptamente en el momento de mayor intensidad
Capacidad de sugerencia: gran intensidad imaginativa debido al carácter fragmentario.
Lenguaje épico: Lo conserva de su origen épico. Epítetos épicos, léxico arcaizante, uso particular
de tiempos verbales, etc.
Naturaleza: la lírica popular se da básicamente en el contexto rural de la sociedad medieval; no es
extraño, por tanto, que en esta poesía se empleen con frecuencia los elementos de la naturaleza como
referentes simbólicos del amor. Así por ejemplo, el mes de mayo los almendros en flor, símbolos del
renacimiento primaveral de la naturaleza, lo son también del sentimiento amoroso. Estos poemas
también son ilustrativos de cómo y dónde se producían los encuentros amorosos: las romerías, la fuente
o el río (a dónde se iba a lavar) eran sitios para el amor. El vergel, la vega o la ribera del río, el bosque o
el monte eran también lugares propicios, aunque los segundos tenían la connotación de lugar salvaje en
donde la dama podía correr peligro.
En cuanto a la hora de la cita amorosa, acostumbraba a ser nocturna y la medianoche y el alba
solían ser los límites del encuentro amoroso. Las fechas más propicias estaban relacionadas con los
ritos sociales, naturales y culturales: la primavera (abril y mayo), San Juan (el solsticio de verano) o las
celebraciones eran una buena ocasión.
En la lírica tradicional también se reflejan los usos amorosos de la época: abundan los poemas de
“malcasada” o “malmaridada” o de muchachas que son inducidas a entrar al convento pese a su voluntad.
También se refleja el miedo a perder la virginidad y quedar deshonradas. La rosa, el jardín o los
cabellos (sueltos) son un símbolo de la virginidad que se pierde. Peinarse, bañarse, coger la flor, lavarse
o remover el agua son acciones que aluden a la entrega amorosa. La dama podía ser representada como
una garza o una cierva que resultaba cazada por el caballero. Aparecen también otros tópicos literarios
como el de los Oculos sicarii .
2.1.3.2.Clasificación
Se han propuesto varias clasificaciones. La más aceptada es la siguiente:
Romances históricos
Derivan directamente de un hecho histórica.
Romances épicos o literarios
Tienen como fuente una obra literaria.
Romances novelescos o de aventuras
Temática variada inventada (aventura, misterio, venganza, legendarios, etc.)
2.2 Poesía medieval culta.
2.2.1. Mester de Clerecía.
Durante los siglos XIII y XIV, en pleno apogeo de la poesía juglaresca, se desarrolla
paralelamente una escuela poética que entiende la poesía como un oficio de hombres doctos y sabios. Es
el denominado mester de Clerecía (se desarrolla en España, fundamentalmente en el reino de Castilla),
al que se adhieren los clérigos y las personas cultas en general. La separación entre ambos mesteres
(oficios) no es radical, ya que compartían el mismo idioma y público, pero la finalidad era distinta.
Además, el carácter erudito del mester de clerecía correspondía al interés de estos intelectuales de
difundir entre el público el saber contenido en sus bibliotecas, por eso escribían en romance, mientras
que antiguamente lo hacían en latín.
IES M. CARDONA, Departament de llengua i literatura catellana
1r Batxillerat: unidad 5; Literatura Medieval
2
2.2.1.1. Características.
Temas eruditos y apego a las fuentes escritas: Para elaborar sus argumentos, el poeta de
clerecía se inspira en escritos literarios cultos, sobre todo latinos, tales como leyendas piadosas,
narraciones sobre hechos y personajes de la antigüedad clásica o tratados doctrinales. La Biblia y otras
literaturas, como la francesa o la árabe, también sirven como fuentes para componer las obras. De este
modo. A estos temas sólo se tenía acceso a través de la erudición y el estudio (surge toda la materia
clásica que había permanecido encerrada en los monasterios). Estas fuentes se citan constantemente
como autoridad (“dice la escritura”, etc). Este apego tiene como consecuencia una falta de originalidad
que, sin embargo, se ve compensada por una estilística muy cuidada.
Variedad temática: los temas dominantes son los religiosos, los históricos, los novelescos,
(Libro de Apolonio), e incluso amorosos (Libro de Buen Amor), siempre con una clara intención didáctica.
En esto se alejan del mester de juglaría: monotemático.
Didactismo: aunque sin excluir el entretenimiento, el Mester de Clerecía es, ante todo,
didáctico-moral: pretenden transmitir una enseñanza.
Público: amplio y de diversa condición social (comparte público con mester de juglaría)
Estilo: el tener un público variado tiene repercusiones en el lenguaje ya que, aunque se trata de
una poesía que no es popular, va dirigida también al pueblo por lo que adapta su estilo (llano, natural)
para que todo el mundo lo entienda.
Popular: uso de la lengua común (expresión sencilla, vocabulario de fácil comprensión)
Culto: intención, fuentes, técnica de expresión (también se puede escribir con estilo sencillo sin dejar
de ser culto)
2.2.1.2. Etapas.
Analizando las obras de este Mester es inevitable observar la diferencia que existe entre las
obras del siglo XIII y las del XIV. Encontramos, pues, dos etapas:
a. XIII; ESPLENDOR: Esta etapa se caracteriza por la fidelidad a la cuaderna vía (única
estrofa empleada). Las características de las obras de este período son más homogéneas (estilo, temas,
intención, cuaderna vía, etc)
Obras y autores: Libro de Alexandre, Libro de Apolonio, Poema de Fernán González. El autor
más representativo es Gonzalo de Berceo (lo veremos en próximo apartado).
b. A partir de la 1ª/2 XIV; EVOLUCIÓN y DECADENCIA: A medida que avanza la 2ª ½ del
s.XIII y se acerca el XIV, observamos un proceso de decadencia en el uso de la cuaderna vía pero no de
la calidad literaria. Este cambio tiene su origen en el desarrollo cultural del momento: fundación de
nuevas universidades y escuelas, avances tecnológicos (difusión papel, lentes), impulso alfonsí, etc. que
hacen que la literatura no esté monopolizada por la Iglesia y que aparezcan autores de otras
condiciones que aportan nuevas formas (un rabino, un político laico, etc) e incluyan temas más variados y
populares.
El siglo XIV aparecerá otro de los autores más importantes de la historia literaria española:
Juan Ruiz, Arcipreste de Hita y su obra Libro de Buen Amor. La última obra perteneciente a este tipo
de poesía es Rimado de Palacio de Pero López de Ayala (1403).
2.2.1.2. Autores
2.2.1.2.1. Gonzalo de Berceo.
a) Vida: Es el primer poeta castellano de nombre conocido. Nació a finales del s.XII en Berceo
(La Rioja). Recibió buena educación y se ha dicho que estudió en la Universidad de Palencia. Fue clérigo
secular (no de clausura) en el monasterio de San Millán de la Cogolla.
b) Obras: La mayoría de sus obras ha llegado hasta nosotros. Las podemos clasificar en los
siguientes grupos:
1)
Poemas hagiográficos (vidas de santos): Vida de Santo Domingo de Silos, Vida de San Millán de la
Cogolla.
IES M. CARDONA, Departament de llengua i literatura catellana
1r Batxillerat: unidad 5; Literatura Medieval
3
2)
Poemas marianos (dedicados a la Virgen): Loores de Nuestra Señora, Planto que hizo la Virgen el
día de la Pasión de su Hijo Jesucristo y Milagros de Nuestra Señora.
- Este tipo de obras surge de un contexto religioso concreto: el fervor mariano característico del
período gótico (que también dedica sus grandes obras arquitectónicas, catedrales, a la Virgen)
- Se observa un cambio de mentalidad en la época: del Románico, con su visión Dios justiciero que
provoca temor, figuras hieráticas, inexpresivas, etc. al Gótico, con su nueva sensibilidad que realza
sentimientos humanos (apóstoles sonriendo, Cristo sufriendo en la cruz, movimiento: madre (Virgen)
inclinada y sonriendo al niño).
- En este proceso la figura de la Virgen cobra una gran importancia. Se presenta como la persona más
cercana a Cristo y como intercesora del género humano.
La obra más famosa de Berceo es Milagros de Nuestra Señora que narra veinticinco milagros
de la Virgen. Todos incluyen una moraleja o enseñanza. Se inicia con una introducción alegórica en la
que Berceo se presenta a sí mismo en un locus amoenus, es decir, en una naturaleza fértil y paradisíaca
que simboliza las virtudes y perfecciones de la Virgen. A continuación se incluyen veinticinco
narraciones de milagros realizados por la Virgen en favor de personas devotas suyas. La fuente de
estos milagros es una colección de veintiocho narraciones latinas en prosa. Pero Berceo trata con
libertad los relatos originales: incluye elementos cotidianos de su región, emplea giros dialectales, un
tono humorístico en ocasiones, e introduce comparaciones y metáfora sugerentes y espontáneas.
Mediante procedimientos tomados del arte juglaresco consigue su objetivo de comunicar la devoción
por la Virgen a sus oyentes, sin renunciar por ello a mostrar su faceta de autor culto, conocedor de lo
que yaze en escripto.
En suma, Berceo constituye un buen ejemplo de las diferencias y similitudes entre el mester de
Clerecía y el de Juglaría. Aunque siempre menciona con orgullo el origen culto de sus poemas y los
compone en cuaderna vía, la naturalidad y la habilidad de su lenguaje, así como el empleo de técnicas
juglarescas hacen de él un poeta poco solemne y muy cercano al lector.
2.2.1.2.2. Arcipreste de Hita.
a) Vida: Es una de las figuras más enigmáticas que ofrece la historia de la literatura española.
Hasta 1985 no se supo nada de su existencia histórica, incluso se llegó a dudar de ella. De la vida de
Juan Ruiz, el Arcipreste de Hita, sólo se conocen los datos que el propio autor ofrece en su LBA, pero
aún esos son dudosos. No se conoce la fecha de su nacimiento ni la de su muerte (que debió ocurrir a
mediados del siglo XIV); se supone que nació en Alcalá y que estudió en Toledo. Desempeñó el cargo de
arcipreste en Hita (Guadalajara) y quizá sufrió prisión por orden del cardenal Gil de Albornoz. Los
rasgos de su personalidad que se desprenden del libro lo muestran como un hombre alegre, sensual,
festivo, amigo de gentes de toda condición, a quienes pretende agradar con sus escritos.
Este aspecto enlaza directamente con el libro ya que éste se presenta como una autobiografía.
El hecho de que esté narrada en primera persona no significa que el autor haya vivido todas las
vivencias que cuenta. Podemos concluir que el Libro de Buen Amor es una autobiografía ficticia
(literaria).
b) Libro de Buen Amor.
Argumento: Juan Ruiz sostiene que los dos estímulos principales del hombre son la búsqueda de
su sustento y el deseo erótico. Entonces empieza la narración (en verso) de sus aventuras, fallidas en un
principio, lo que causa la intervención de don Amor para aconsejarle acerca de cómo tener éxito (se dan
múltiples ejemplos de las desdichas que trae consigo el loco amor). Por medio de una vieja,
Trotaconventos, consigue los amores de la viuda doña Endrina. Después de esta aventura se sucederán
otras. Muere Trotaconventos, hecho que inspira un planto elegíaco sobrecogedor en el que el
Arcipreste se encara con la muerte. A continuación, siguen diversos poemas líricos, fábulas,
digresiones, etc. El Libro de Buen Amor es, pues, un tratado sobre aventuras amorosas, interrumpido
por composiciones de variadísima naturaleza como por ejemplo varios ejemplos, fábulas y cuentos, la
IES M. CARDONA, Departament de llengua i literatura catellana
1r Batxillerat: unidad 5; Literatura Medieval
4
narración de los amores de don Melón y doña Endrina o un relato de carácter alegórico, la batalla de
don Carnal y doña Cuaresma, con la exaltación de la llegada de la primavera.
Estilo: combina sabiamente lo culto (dominio de la retórica)y lo popular (refranes, vocabulario
popular, diálogos vivos y naturales)
Métrica: mezcla diferentes tipos de estrofa. Entre ellos se encuentra también la cuaderna vía.
Finalidad de la obra:
Acerca del verdadero sentido de la obra, hay diferentes opiniones entre críticos, nacidas de la
propia ambigüedad del arcipreste al hablar de sus intenciones. En el prólogo del libro se detecta, en
principio, una intención didáctica (distinguir entre el “buen amor” y el “loco amor”para que el lector se
decante hacia el primero). Pero a continuación, el autor da un giro total y nos sorprende diciendo que
como es humano pecar, si alguno quiere practicar el loco amor (cosa que no aconseja), en el libro
encontrará algunas maneras de hacerlo.
Desde el principio, por tanto, el autor confunde al lector, juega con él creando una ambigüedad
envuelta en la parodia que será el rasgo más característico del libro. Como ejemplo podemos poner el
“episodio de los griegos y los romanos”, cuya enseñanza es que cada una interpreta lo que quiera.
2.2.2. Lírica culta del siglo XV (Lírica cancioneril o cortesana)
2.2.2.1. Orígenes.
El origen es la lírica trovadoresca provenzal de los siglos XII-XIII.
Esta poesía se introdujo en la Península Ibérica por la ruta de Santiago y llegó a Galicia donde se
desarrolló de una forma brillante a partir del siglo XIII en lengua galaico-portuguesa. Ésta era la
lengua lírica de mayor prestigio (el castellano ganaba batallas en la prosa y en la poesía narrativa, pero
en la lírica culta hasta el mismísimo Alfonso X optaba por el gallego, lo mismo hicieron otros poetas
castellanos)
El paso del galaico-portugués al castellano se produjo por razones políticas: crisis de la cultura
galaico-portuguesa sufrida en la segunda mitad del siglo XIV agravada por la guerra entre Castilla y
Portugal que provocó la ruptura entre ambos reinos tras la batalla de Aljubarrota en 1385. A partir de
ese momento, Castilla tuvo la ocasión de cultivar la lírica en su propia lengua.
2.2.2.2. Autor: trovador o poeta cortesano.
Es la versión castellana del trovador provenzal y su perfil es el siguiente: Hombre culto, con
gran educación y formación. Componía personalmente sus poemas y la música que los acompañaba. En
ocasiones era el intérprete también. Vivía en la corte y normalmente pertenecía a la nobleza. También
los había por oficio. Su público era cortesano (poesía elitista). La poesía cortesana del XV es
inseparable de la evolución que se produce en la nobleza. Ésta se refina en sus costumbres, se aficiona
al arte y las letras y reconoce en la poesía una función social como señal de nobleza ya que el noble,
además de valentía, ha de demostrar sensibilidad, cultura e ingenio (cada vez es menos guerrera).
2.2.2.3. Estilo.
Es una poesía de tipo culto, muy refinada y con una técnica formal muy complicada que sólo se
podía aprender con el estudio minucioso de los tratados poéticos o “Gaya ciencia” al alcance de una
minoría intelectual.
El elaborado artificio de esta poesía ha hecho que se la considere más una poesía de formas que
de contenidos profundos y, a la vez, se ha destacado su carácter lúdico, de lucimiento personal por
parte de unos nobles que se lanzaban desafíos de ingenio sustitutos de los enfrentamientos físicos
entre caballeros reemplazando las armas por las palabras.
Recursos: uso de las figuras retóricas, sobre todo ironía, antítesis, paradoja, derivación,
metáfora, etc.
IES M. CARDONA, Departament de llengua i literatura catellana
1r Batxillerat: unidad 5; Literatura Medieval
5
2.2.2.4. Temas.
La temática es variada (moral, religiosa, satírica, de circunstancias, etc.) aunque el grueso de la
poesía cortesana del siglo XV tiene como tema central el amor.
a)
Amor:
El tema del amor en la poesía cortesana se inspira en la teoría del amor cortés: amor del sujeto
poético enamorado de una dama idealizada que normalmente está casada y a la que el enamorado rinde
servidumbre. Se establece entre ambos un vínculo vasallático en el que la dama equivale al señor feudal
y el enamorado al vasallo. El enamorado se debate en un continuo sufrimiento provocado por la pasión
que siente y por el rechazo de la dama, cuya honestidad le impide corresponder al poeta. Motivos:
Religión de amor. Idealización dama. Motivos como la señal (seudónimo), la espera, la prenda, el
encuentro, lisonjeros, marido burlado, etc.
No es una poesía de anécdotas, sino que es una refinada técnica introspectiva de análisis de
sentimientos (herencia italiana de Dante y Petrarca) en el que el poeta se presenta como un enamorado
consumido por el fuego amoroso de una pasión no correspondida que origina una situación
inequívocamente dolorosa. Esta situación da paso al gran tópico de la relación amor/dolor.
Todo ello conduce a un deseo de muerte y, de nuevo, aparece otra paradoja: vida/muerte. El
enamorado es un muerto en vida (por su sufrimiento) y desea la muerte real para dejar de sufrir y
empezar a vivir, liberarse. Pero morir significa dejar de amar y eso es peor que sufrir (paradoja).
Algunos incluso anuncian el tema del amor más allá de la muerte, que siglos después inmortalizará
Quevedo, como el vizconde de Altamira: Porque muriendo se vea/ que no muere la fe.
De este tema general se desprenden otros subtemas o motivos:
La mirada,
los ojos
Los trovadores se enamoran de vista, oído o
pensamiento.
Con los ojos se capta la belleza de la amada y
a partir de ese momento el enamorado queda
cautivo y sólo sirve para amar a su amada.
La ausencia
En la ausencia el enamorado recupera la
imagen de su amada a través de la memoria.
El silencio del Doble motivo:
enamorado
1. discreción: ella normalmente está casada o
su honestidad no le permite corresponder.
2. Para no importunar a la dama con sus
quejas.
Si n'os viera mirado
Plugiera Dios que n'os viera
porque mi vida no fuera
Cativa de su cuydado
Yo hallo por esperiencia
Que'stó de vos, siendo ausente
Presente como presente
Pues memoria escusa ausencia
Yo callé males sufriendo
Y sufrí penas callando
Un aspecto importante a tener en cuenta al leer este tipo de poesía es la siguiente cuestión ¿Qué
correspondencia existe entre el amor cortés (plano literario) y la realidad medieval? ¿Hasta qué punto
los poemas de los poetas cortesanos reflejan, expresan las relaciones reales entre mujer/hombre? El
amor cortés es un ejercicio lúdico inventado por y para los hombres en el que la mujer es un señuelo
similar a esos maniquíes contra los cuales el caballero medieval se arrojaba para demostrar sus
aptitudes guerreras.
IES M. CARDONA, Departament de llengua i literatura catellana
1r Batxillerat: unidad 5; Literatura Medieval
6
b)
SÁTIRA
Se caracterizan por el realismo excesivo, llegando a la grosería y la obscenidad, a diferencia de
las sátira leve de tono aristocrático que podemos encontrar en los cancioneros. Encontramos dos
vertientes:
- SOCIAL: el tema es la corrupción de la sociedad cortesana decadente. La “Danza de la muerte” es una
de sus manifestaciones que refleja la crisis del mundo social y revela una nueva sensibilidad al
mostrarnos la democracia igualadora de la muerte que llama a todo el mundo a su danza.
- POLÍTICA: sobre todo en el reinado de Enrique IV. Estos ataques son alusiones violentas y directas
de escritores, nobles, damas, etc. En el siglo XVI no se cultivas, pero reaparecen con fuerza en el
barroco. Por ejemplo, Las coplas del Provincial, anónimo
C.
INFLUENCIA ITALIANA Y DE LOS CLÁSICOS GRECOLATINOS
Sin embargo, a medida que avanza el siglo, se deja sentir la progresiva influencia italiana de
Dante y Petrarca, y el gusto por la imitación de la literatura clásica latina, introducidos por los grandes
humanistas italianos en nuestro país a raíz de las intensas relaciones con Italia. A resultas de ello se
componen los decires o poemas de carácter didáctico y doctrinal, de desarrollo alegórico y frecuentes
alusiones mitológicas. Estaban escritos en un lenguaje culto, plagado de latinismos, y se destinaban a la
lectura o la recitación. Pero a pesar del refinamiento artificioso y culto de conceptos y formas, el
resultado es más bien frívolo e intrascendente. La forma métrica preferida fue la copla de arte mayor
con versos dodecasílabos, pero la influencia italiana pronto animó al uso del endecasílabo.
2.2.2.5. Métrica.
Predomina el verso octosílabo (regularidad) y la rima consonante siguiendo el esquema de la
“canción” (12 versos aprox. Tema/mudanza/vuelta)
2.2.2.6. Los cancioneros.
La lírica cortesana (culta) se ha conservado por medio de cancioneros que, a modo de antologías,
recogían la producción de los poetas, sin criterio ordenador ninguno. Los cancioneros más importantes
son el de Baena, que abarca poemas desde 1370 hasta 1445; el de Estúñiga, que recoge especialmente
las composiciones de la corte de Alfonso V de Nápoles; y el Cancionero general de Hernando del
Castillo, compuesto en 1511, el más importante de todos y que incluye también lírica popular, sobre todo
romances.
El mayor peso en esas recopilaciones lo tiene la lírica amorosa, aunque también encontramos
sátiras leves, poemas de circunstancias, adulaciones, etc.
2.2.2.7. Poetas más importantes.
Marqués de Santillana:
Íñigo López de Mendoza, marqués de Santillana, es el modelo del nuevo tipo de poeta del siglo
XV. De familia ilustre con un papel relevante en política, pasó su juventud en la corte aragonesa, donde
conoció en profundidad la poesía trovadoresca. Ya en la corte castellana, intervino en las luchas
internas y externas del reino hasta su retiro en Guadalajara, donde murió. Pero su vida palaciega no le
impidió adquirir una vasta cultura y reunir una biblioteca famosa en su época.
La literatura del Marqués suele clasificarse en:
a. Obras de influencia italiana y estilo alegórico. La comedieta de Ponza y los Sonetos fechos al
itálico modo son las más destacadas, la última por ser el primer intento de incorporar el soneto a la
poesía castellana.
b. Obras didáctico-morales. el Diálogo de Bías contra Fortuna y el Doctrinal de privados.
IES M. CARDONA, Departament de llengua i literatura catellana
1r Batxillerat: unidad 5; Literatura Medieval
7
c. Obras de origen trovadoresco. Aunque él las tuvo en escasa consideración, hoy son quizá sus
creaciones más interesante en las que integra con gracia y viveza lo popular y lo culto. Son sus
Canciones y decires, exhibición retórica y erudita destinada a la lectura, y sus Serranillas, que son una
estilización de las pastorelas (serranas), es decir, un diálogo ingenioso y refinado, de tono poético,
entre las serranas y los caballeros, pero que está alejado de las pedanterías y el virtuosismo vacío
anterior.
Juan de Mena
Secretario de Juan II (ambiente cortesano)
Su obra más importante es el Laberinto de Fortuna o Las trescientas. Es un extenso poema
formado por coplas de arte mayor en versos dodecasílabos, en el que el poeta, guiado por la Providencia,
visita el Palacio de la Fortuna y ve las ruedas del pasado, del presente y del futuro. Siguiendo el modelo
de la Divina Comedia, evoca en cada uno de sus círculos a grandes figuras de la antigüedad o de la
historia, deteniéndose especialmente en sus coetáneos.
Jorge Manrique.
Vida: Pertenece a la nobleza. Encarna, al igual que el Marqués de Santillana, el ideal de hombre
de letras y armas. Vivió una intensa actividad militar en la que destacó por su valor. Sin embargo, en la
intimidad parece ser que tenía un carácter introvertido, reflexivo, sensible y melancólico.
Su obra se clasifica en tres grupos:
a. Poesía amorosa (45 poemas): En muchas de sus composiciones destaca el tono, el vocabulario y las
metáforas e imágenes militares (castillos, armas, batallas, etc.). El amor es entendido como vencimiento
en la lucha contra la amada y contra él mismo, y la vida guerrera es la alegoría del enamoramiento, que
es presentado como el asalto a una fortaleza, por ejemplo “Castillo de amor” o “Escala de amor”.
b. Poesía burlesca (3 poemas)
c. Poesía moral (1 poema extenso: Coplas a la muerte de su padre)
Coplas a la muerte de su padre: esta obra está dentro de una importante corriente literaria
que refleja la preocupación medival
por el tema de la muerte. Está formada por 40 coplas de dos sextinas de pie quebrado que
proporcionan un ritmo solemne y sereno a la gravedad del asunto tratado: muerte de don Rodrigo
Manrique, padre del poeta.
En la estructura interna distinguimos tres partes: coplas I-XIV (reflexión general sobre la
fugacidad de la vida y la inestabilidad del mundo material), coplas XV-XXIV (ejemplos concretos de las
reflexiones anteriores a través del recurso del ubi sunt), coplas XXV-XL (se centran en la figura del
padre. Elogia su persona, relata la visita de la muerte y la aceptación resignada y confiada de don
Rodrigo)
Los temas principales (tópicos) inciden en el menosprecio de las vanidades mundanales, en la
fugacidad de la vida, en el poder igualatorio de la muerte y en los caprichos de la fortuna.
Manrique adopta una postura serena ante la muerte, llena de esperanza en la nueva vida. La vida
terrenal aparece condicionada por la vida eterna, por la necesidad de alcanzar el más allá.
Manrique adopta una postura muy original en el tratamiento que se le da a la muerte.
- Evita las descripciones macabras de los cuerpos corruptos.
- Personifica a la muerte, que aparece armada como un caballero y utiliza el lenguaje caballeresco.
- Al utilizar el tópico Ubi sunt, no hace alarde de erudición ni evoca glorias de personajes históricos,
sino que el pasado al que se refiere es inmediato (su padre) y por eso conmueve tanto.
- Concibe la muerte como parte integrante de la vida. En las “danzas de la muerte”, la muerte es la
protagonista, mientras que en las Coplas, su concepción global es la afirmación de la vida: al
hablarnos de la fugacidad de la vida, no está incitando a vivir con más intensidad ela presente,
sino que nos está diciendo que la vida es bella precisamente por su fugacidad. De este modo, la
IES M. CARDONA, Departament de llengua i literatura catellana
1r Batxillerat: unidad 5; Literatura Medieval
8
vida terrenal y perecedera aparece condicionada por la vida eterna e imperecedera (la vida sin
la muerte no tendría sentido), por la necesidad de alcanzar el más allá. Y el modo de lograrlo
sería para el poeta el llevar una existencia honrosa, la vida de la fama, una vida austera y eficaz
que deje buena memoria entre los hombres venciendo así a la muerte.
3.
PROSA MEDIEVAL.
Mientras que la poesía en lengua romance del centro peninsular conseguía un cultivo cada vez
más amplio (Mester de clerecía, cantares de gesta, romancero oral, etc.), hay que esperar hasta el siglo
XIII para poder encontrar manifestaciones propiamente literarias en prosa. Hasta entonces, todos los
documentos, las historias, las leyes y los libros de ciencia, de religión y moral se escribían en latín más o
menos correcto.
Poco a poco, a lo largo del siglo XIII, el castellano va evolucionando y en los textos redactados
en romance se aprecia un mayor nivel de cohesión y de fijación normativa, sobre todo impulsado por la
labor de Alfonso X, quien regula los códigos lingüísticos y sus funciones: la lírica se cultivará en galaicoportugués, los asuntos de la iglesia se tratarán en latín y el resto de materias se expresarán en
castellano, que sustituye el latín tanto en la prosa literaria como en la no literaria. El conflicto surge al
intentar que unos contenidos (historia, leyes, ciencia, etc.), reservados siempre al latín, se difundieran
mediante el castellano. De este esfuerzo nacerán los primeros géneros prosísticos : la historiografía,
los textos jurídicos y la prosa didáctica-literaria principalmente.
Por tanto, se consolida la utilización del romance para la prosa tanto literaria como no literaria
gracias a la labor de Alfonso X, la Escuela de Traductores de Toledo y la aparición de los “exempla”
como modelo de prosa de ficción, y que veremos más tarde.
3.1.
Alfonso X (1221-1284) y la Escuela de traductores de Toledo.
Alfonso XII es Sabio es la máxima figura de las Ciencias y las Letras castellanas del s. XIII. Su
obra aspira a reunir y sintetizar en enciclopedias todo el saber de la época. Impulsa la utilización del
romance en todos los ámbitos (ciencias, religión, leyes, filosofía, literatura, etc) y debido a esto se
produce la fijación de la prosa romance. La supervisión de las obras por parte del rey puso un énfasis
especial en la corrección del lenguaje, en usar un castellano derecho: fijó la ortografía, creó diferentes
registros (jurídico, científico, etc.), flexibilizó y enriqueció la sintaxis oracional mediante la creación de
conjunciones, etc. que favorecieron la exposición de ideas, y amplió el léxico con neologismos que
designaban nuevos conceptos y objetos, labor que llevó a cabo adaptando palabras latinas a los rasgos
romances, etc.
Algunos críticos opinan que el interés del monarca por la lengua vulgar era fruto se su fuerte
sentido nacionalista al pretender que todos sus súbditos (cristianos, musulmanes y judíos) tuvieran una
lengua en común. Y todo esto sin olvidar su labor como mecenas de la Escuela de Traductores de
Toledo.
En realidad, Alfonso X no es el autor, sino el director y supervisor de una serie de obras
realizadas por equipos de sabios y traductores. Su obra no fue escrita de su puño y letra, pero sí marcó
las líneas de composición sobre las que trabajar
Su inmensa obra ha sido tradicionalmente clasificada en:
a. JURÍDICAS: Las partidas o Libro de las leyes.
b. HISTÓRICAS: - Crónica general de España y Grande e General Estoria; Pretendía se la historia de
todos los pueblos conocidos desde la Antigüedad hasta el siglo XIII buscando tanto la objetividad del
hecho histórico como la voluntad de estilo en la lengua.
c. CIENTÍFICAS: Libro del saber de Astronomía, Tablas alfonsíes: anotación de las observaciones
IES M. CARDONA, Departament de llengua i literatura catellana
1r Batxillerat: unidad 5; Literatura Medieval
9
llevadas a cabo en el observatorio de Toledo: eclipses, sol, luna, etc.
d. RECREO: Libro del ajedrez, dados y tablas.
e. LÍRICAS: como creador, curiosamente, el rey Sabio compuso en gallego las Cantigas de Santa María,
una colección de poemas y canciones inscritos dentro de la tradición mariana, con elogios a la
Virgen y relatos de sus milagros, que adoptan la forma del zéjel hispano-árabe.
Escuela de Traductores de Toledo: Toledo, capital del reino en donde convivían tres culturas:
árabe, cristiana y judía, se convirtió el gran centro de conservación, transmisión y difusión de la
sabiduría árabe-hebrea al mundo occidental. La importancia de este saber se debe a que tras la
destrucción del Imperio Romano Occidental se produce un enorme vacío en la cultura griega y latina
(sólo mantenida gracias a las recopilaciones de unos pocos sabios). En Toledo, gracias a sus grandes
bibliotecas y a la convivencia de intelectuales judíos y musulmanes, los cristianos encontraron todo un
mundo intelectual novedoso.
El fundador e impulsor de la ETT fue el canónigo Domingo Gonzalvo (conocido por Gundisalvo).
Su método de trabajo era el siguiente: un judío arabizado vertía oralmente en su romance castellano
vulgar el texto árabe y Gundisalvo lo transcribía al latín. Durante el reinado de Alfonso X, con el auge
de las lenguas romances, hubo un cambio en el método de trabajo: los textos árabes y los latinos son
traducidos al romance castellano.
3.2. La prosa didáctica en el siglo XIV: Don Juan Manuel (1282-1348)
Vida: Noble de nacimiento y sobrino de Alfonso X (armas y letras). Le caracteriza su conciencia
y orgullo de escritor que le convierten en el primer autor de la literatura castellana que se preocupa
por la fijación y transmisión de sus obras, tratando de evitar los errores de los copistas.
El libro de Patronio o El conde Lucanor.
Consta de dos prólogos y cinco partes, de las cuales la más importante es la primera. Ésta
consta de cincuenta y un ejemplos o cuentos de carácter didáctico organizados siempre según la misma
estructura:
•
El conde Lucanor plantea un problema a su ayo Patronio.
•
Patronio, en vez de darle un consejo directo, le relata una historia.
•
Después se describe la manera de aplicar el relato al problema planteado, es decir, Patronio
aclara cuál es su consejo.
•
Finaliza con una referencia al propio autor, don Juan Manuel, que debe incluir el cuento en el
libro y que escribe unos veros finales que resumen la moraleja del relato.
El estilo de los cuentos pretende ser sencillo y natural ya que van dirigidos a todo tipo de
público y deben cumplir con su función didáctica.
Los temas son muy diversos. Los argumentos no son originales sino de otra procedencia
(fábulas de Esopo, Fedro, la Biblia, cuentos orientales, etc.), pero don Juan Manuel sabe rehacerlos con
eficacia y viveza.
3.3. La prosa de FICCIÓN
Libros de caballerías o de aventuras. La España medieval fue partícipe del fenómeno literario
que se extendió por toda la Europa occidental: la literatura artúrica.
A la vez que se traducían obras que narraban las aventuras del rey Arturo y sus caballeros, se escriben
otras autóctonas que reúnen todas las características de este tipo de literatura: idealismo, aventuras
caballerescas motivadas por el amor de un caballero andante hacia su dama, magia, etc.
IES M. CARDONA, Departament de llengua i literatura catellana
1r Batxillerat: unidad 5; Literatura Medieval
10
La conquista de ultramar en el siglo XIII.
Historia del Caballero de Dios que tenía por nombre Cifar, de Ferrant Martínez (XIV).
Garci Rodríguez de Montalvo, Amadís de Gaula. Es la obra más importante del género en España.
Novelas sentimentales. Son mucho más breves que los libros de caballerías. Tienen poca acción
ya que concentran toda la fuerza en el análisis emocional. El amor es el tema principal y único. También
es una novela idealista y de ambiente cortesano. El final siempre es desgraciado ya que el amor
desemboca en catástrofe. Es una prosa culta influida por los temas y estilo de la lírica cancioneril (amor
cortés)
Juan Rodríguez del Padrón, Siervo libre de amor.
Diego de San Pedro, Cárcel de amor.
3.3.
La Celestina.
3.3. 0. Introducción.
La Celestina es considerada por muchos como la cumbre de la literatura española de no existir
el Quijote y una aportación decisiva al desarrollo del realismo literario.
Es una obra que aparece en una época de cambios: el paso de la Edad Media al Renacimiento,
período enmarcado en el reino de los Reyes Católicos.
Durante el siglo XV las ciudades crecen. En ellas empieza a cobrar protagonismo la burguesía,
nuevo público lector de obras de ficción que necesitaba una literatura que hablase sinceramente de la
realidad urbana que estaban viviendo. La Celestina, como un género totalmente nuevo, responde a la
necesidad de satisfacer los gustos de ese nuevo público. Observamos cómo se mezclan temas
medievales (amor cortés) con nuevas realidades como ese bajo mundo urbano ( prostitutas, criados...)
movido por la codicia y la idea del dinero que cobra categoría central como motor de la acción.
La Celestina presenta varios problemas: autor, título, género.
3.3.1. Argumento y Tema
Este sería su argumento: Calisto, joven noble, entra en un jardín para recobrar su halcón
perdido, y allí conoce a la bella Melibea. Ella le rechaza inicialmente y Calisto recurre a Sempronio, su
criado, que avisa a la vieja Celestina. Ésta, con sus artes sinuosas, consigue una entrevista entre Calisto
y Melibea y entre ellos nace el amor. Calisto, agradecido, regala a la Celestina una cadena de oro. Para
arrebatársela, Sempronio y Pármeno asesinan a Celestina, y ahí comienza la tragedia. Los criados son
castigados por la justicia y sus compañeras Elicia y Areúsa deciden vengarse en la persona de los dos
amantes, contratando a Centurio. Una noche, estando Calisto con Melibea, al oír los ruidos provocados
por Centurio y sus acompañantes en la calle, el amante resbala de una estala y muere. Melibea,
desesperada, se arroja al vacío desde una torre de la casa de su padre, Pleberio, quien llora a su hija
muerta.
La obra no es en primera instancia sino la historia amorosa de Calisto y Melibea, por lo que se
inserta dentro de la tradición de la literatura amorosa del momento, es decir, del amor cortés: el amor
como una demencia enfermiza, y el amor como pasión ennoblecedora de acuerdo con los presupuestos
poéticos de la obra:
Pero en el caso de La Celestina es una visión paródica:
Calisto: Su idealización de Melibea, su religión de amor, su pasión que lo convierte en víctima de su
propio sentimiento, contrasta con el comportamiento grosero para con su amada después de poseerla,
su carencia de valores y su ridícula pedantería libresca a la hora de expresar lo que no es sino un
IES M. CARDONA, Departament de llengua i literatura catellana
1r Batxillerat: unidad 5; Literatura Medieval
11
desvergonzado apetito carnal (su amor es de carácter erótico y sexual). Además, mientras Calisto
prorrumpe en devaneos deificadores de su angelical amada, los criados tachan de locuras y herejías sus
palabras y lo traten como un demente durante toda la obra.
Melibea: aunque también esté pensada como negación de la dama cortés, el personaje aventaja mucho
en su comportamiento al de su pareja; evoluciona desde un rechazo rotundo (tópico) hasta la más
decidida defensa del amor libre y sincero, asumido con todas las consecuencias, pasando por un mar de
dudas y vacilaciones magníficamente trazadas por el autor.
Los sirvientes encarnan el mundo de la prostitución, de la lujuria, y del sexo.
3.3.2.Autor.
En un primer momento la obra aparece como anónima (edición de 1499). Pero en la edición de
1500 el corrector añade unas estrofas que revelan el acróstico que escondían las octavas que el autor
antepuso a la obra:
El bachiller Fernando de Rojas acabó la comedia de Calisto y Melibea e fue nascido en la puebla de Montalván.
Las razones de que ocultara su nombre pueden ser de dos tipos:
a)
Origen converso: Fernando de Rojas era converso en tercer grado, la sangre judía provenía en
realidad de su abuelo que fue el que se convirtió. Pero eso no importaba ya que en una época en
la que se había promulgado el decreto de expulsión de los judíos el mínimo parentesco en la
familia o sospecha podía acarrear problemas.
b)
Contenido de la obra: algunos temas transgredían la moral de la época (criados comparándose
con sus amos, personajes como Celestina encarnación del pecado, crítica social...)
3.3.3.Género y título.
Intentar clasificar La Celestina dentro de un género determinado fue otro problema.
Las primeras ediciones presentan la obra con el título de Comedia de Calisto y Melibea. Pero más
adelante Fernando de Rojas comenta que unos amigos le dijeron que había suficientes elementos
trágicos que imposibilitaban el clasificarla como comedia, por lo que el autor optó por titularla
Tragicomedia de Calisto y Melibea.
En un primer momento podemos caer en la tentación de considerarla dentro del género teatral
(por el título, división en actos, forma dialogada), pero al llevar ese intento a la práctica descartamos
tal posibilidad (excesiva longitud, movimientos escénicos rapidísimos, contenidos que hubiese sido
imposible representar públicamente)
Nos encontramos ante un género híbrido que no es ni teatro ni novela, pero que es ambas cosas y
algo nuevo, a la vez, que las supera. Está pensada para ser representada sino para ser leída en público.
Se ha optado por llamarla novela dialogada.
La fuente principal es la comedia humanística que surgió en Italia en el siglo XIV. Ésta a su vez
se inspira en la comedia latina clásica y presenta los temas en torno a la vida baja y la seducción. La
única diferencia es que la comedia humanística tenía final feliz y La Celestina no.
3.3.4. Personajes.
Es indudable que el gran acierto de la obra se halla en los personajes. Por su condición de novela
dialogada, nos encontramos con que los personajes juegan un papel importantísimo: son el motor de la
obra. Casi todos son presentados en toda su profundidad y con gran realismo. Destacan dos
características individualismo y la evolución psicológica.
IES M. CARDONA, Departament de llengua i literatura catellana
1r Batxillerat: unidad 5; Literatura Medieval
12
Todo esto se refleja en el uso del lenguaje por parte de los personajes: no sólo cada uno se
expresa en el registro característico de su estrato social, sino que son capaces de cambiarlo de
acuerdo con el interlocutor a quien se están dirigiendo.
Celestina.
Es, sin duda, el personaje más importante de la obra (hasta el punto de eclipsar el nombre de los
amantes en el título)
Es un personaje muy definido, individualizado. Sus rasgos externos son: aspecto grotesco, vieja,
bebedora, desempeña oficios escandalosos (restauradora de virgos, alcahueta, hechicera...)
Pero el rasgo más importante es el siguiente: es una gran conocedora de la psicología humana.
Enseguida detecta los puntos débiles y sabe cómo conquistarlos, persuadirlos hasta ejercer un pleno
dominio sobre las almas de sus personajes. Para ello se sirve de su destreza con el lenguaje, la
adulación, la energía cuando es necesaria y la fama de hechicera también le es útil.
Es un personaje fuerte, sabe lo que quiere y no cede hasta conseguirlo. Se mueve por la
codicia, pero al final será su perdición.
1.1
Lengua y estilo.
Obra totalmente dialogada, en los parlamentos se pueden distinguir dos niveles que se
corresponden con el estrato social de los hablantes
Nivel culto (Calisto, Pleberio...) lenguaje cultista y latinizante, tanto en el vocabulario como en la
sintaxis: paralelismos, antítesis, juegos de palabras, citas de autores clásicos, etc. en cambio, Melibea
se expresa en un estilo más claro y elegante.
Nivel popular (criados, Celestina, prostitutas...) frases breves, plagadas de coloquialismos y
refranes. El personaje de Celestina es capaz de adaptarse a diferentes registros y habla de modo
distinto a los nobles y a los criados.
1.2
Intención de la obra.
Antes de comenzar el primer acto, Rojas declara haber compuesto la obra “en reprehensión de
los locos enamorados, que, vencidos en su desordenado apetito, a sus amigas llaman y dicen ser su Dios.
Asismismo hecha en aviso de los engaños de las alcahuetas y malos y lisonjeros sirvientes”. El amor se
convierte así en una pasión sin freno que desencadena todos los males de la obra.
A lo largo del desarrollo de los hechos vemos que la moralidad actúa en forma de castigo para
los personajes: a Celestina la mata su codicia, y lo mismo les ocurre a Pármeno y Sempronio; Calisto y
Melibea mueren y se condenan por ser locos enamorados.
La visión del mundo que ofrece Rojas es una visión pesimista y terrible. El resquebrajamiento
de la sociedad y de la moral, la desaparición del elemento religioso, la urgencia por vivir de modo
placentero, el destructivo egoísmo individualista y el triunfo de la muerte sin consuelo se unen para
crear una atmósfera densa, oscura y opresiva.
IES M. CARDONA, Departament de llengua i literatura catellana
1r Batxillerat: unidad 5; Literatura Medieval
13
Descargar