REACCIONES ADVERSAS FRENTE A ALERGENOS ALIMENTARIOS EN LA INFANCIA. Entre el 6 y el 8% niños menores de 3 años presentan alergia a algún alimento y esa prevalencia va en aumento. Sin embargo, solo el 3.5% de los adultos presentan alergia a alimentos. Esto ocurre porque un alto porcentaje de niños alérgicos se desensibiliza del alergeno durante la infancia y la adolescencia. Las reacciones severas presentan mayor incidencia en adolescentes y adultos que en niños. TIPOS DE REACCIONES ADVERSAS A ALIMENTOS 1. TÓXICOS: por la ingesta de alimentos en mal estado (ej: diarrea por Salmonella). 2. NO TÓXICOS: o INTOLERANCIA: reacciones no mediadas por un mecanismo inmune Farmacológicos: reacciones a cafeína, tiramina (quesos), chocolates… Enzimáticos: por déficit total a parcial de enzimas (ej. Intolerancia a lactosa por déficit de lactasas) Irritantes: de la mucosa gástrica o intestinal, sobretodo si ya está dañada (ej. Alimentos picantes). Otros. o ALERGIA: reacción mediada por mecanismo inmune INMUNIDAD TIPO I (mediada por IgE): son las reacciones alérgicas más frecuentes y conocidas en las que la reacción ocurre al poco tiempo de la ingesta del alimento. INMUNIDAD TIPO IV (mediada por linfocitos T helper que activan la cascada inmunológica directamente, sin mediar IgE): COLITIS INDUCIDA POR PLV (colitis “alérgica” del lactante): deposiciones muco-sanguinolentas en lactantes alimentados con LM (aparece normalmente alrededor de los 2 meses de vida). Desaparece tras la exclusión de las PLVs de la dieta materna. Suele curarse en el primer año de vida. ENTEROCOLITIS INDUCIDA POR PROTEINAS ALIMENTARIAS: vómitos y diarrea (sanguinolenta) que producen fallo de medro y deshidratación. Pueden producir un cuadro de shock durante la ingesta de la proteína responsable (PLV, soja, semillas). ENTEROPATÍA INDUCIDA POR PROTEINAS ALIMENTARIAS: alteración del epitelio intestinal por mecanimo inmune desencadenado por proteínas alimentarias que conduce a la malabsorción intestinal. Enfermedad celiaca: enteropatía por gluten (cereales: trigo, avena, centeno…) mediada por Acs IgG e IgA contra proteínas del enterocito que conllevan la destrucción del 1 epitelio intestinal. Tto: exclusión del gluten de la dieta de por vida. ESOFAGITIS / GASTROENTERITIS EOSINOFÍLICA: síntomas gastrointestinales asociados a la presencia de un infiltrado eosinofílico en la mucosa del tracto digestivo. Puede presentarse con o sin aumento de IgE ¿CUÁLES SON LOS ALIMENTOS QUE PRODUCEN ALERGIA? Cualquier alimento es potencialmente capaz de producir una reacción alérgica. Sin embargo el 85% de las alergias en la infancia se deben exclusivamente a 3 alimentos: leche, huevos y trigo. Los frutos secos, pescados y mariscos son alergenos más frecuentes en la adolescencia y la edad adulta y junto con los 3 primeros son responsables de hasta el 90% de las reacciones alérgicas. Otros alimentos alergénicos son las legumbres y las frutas, aunque con mucha menor frecuencia. Los conservantes y colorantes artificiales de los alimentos preparados son responsables de menos del 1% de las alergias alimentarias. MANIFESTACIONES CLÍNICAS DE LA ALERGIA ALIMENTARIA • • • • • • URTICARIA AGUDA Y ANGIOEDEMA: habones pruriginosos de aparición súbita tras la ingesta o el contacto con el alergeno. Aparecen solos o acompañando a otros síntomas. El angioedema (inflamación de tejidos blandos) se puede acompañar de edema de glotis que empeora el pronóstico por la potencial obstrucción respiratoria que puede producir. DERMATITIS ATÓPICA: el 40% de pacientes con dermatitis atópica moderada-severa tiene al menos una alergia alimentaria asociada. Cuando crecen mejoran la alergia alimentaria y la dermatitis y aparecen las alergias a neumoalergenos con polinosis y asma (“marcha atópica”). SÍNTOMAS GASTROINTESTINALES: nauseas, vómitos, dolor abdominal, diarrea. Fallo de medro. El reflujo gastroesofágico y los cólicos del lactante podrían ser de alguna manera representación de alergias alimentarias aunque existe mucha controversia al respecto. SÍNDROME DE ALERGIA ORAL: picor oro-faringeo tras la ingesta de algunas frutas y verduras crudas. Es frecuente en enfermos polínicos por la alergia cruzada entre algunos pólenes y alergenos de las frutas. Desaparece si se ingieren las mismas frutas cocinadas. ASMA/SIBILANCIAS: el asma es poco frecuente en las reacciones alérgicas y aparece siempre asociada a un cuadro generalizado. Sin embrago, las sibilancias durante una reacción alérgica son relativamente frecuentes. ANAFILAXIA: cuadro generalizado de vómitos, diarrea, nauseas, urticaria, angioedema, disnea, cianosis, hipotensión, arritimias y shock. Se da en 1-3% de las reacciones alérgicas a alimentos (más frecuente en adultos). Los frutos secos, pescados y mariscos son los alimentos que mas frecuentemente producen reacciones anafilácticas. DIAGNÓSTICO DE LAS ALERGIAS ALIMENTARIAS Para el diagnóstico debemos demostrar: 1. Que la reacción adversa está provocada por un alimento determinado. 2. Que el mecanismo de acción es de tipo inmunológico. 2 A. HISTORIA CLÍNICA: debe reflejar: Alimento “sospechoso”. Naturaleza y gravedad de los síntomas. Edad de comienzo. Relación temporal entre la ingesta y los síntomas. Calendario de introducción de alimentos. Historia familiar/personal de alergias alimentarias (reacciones cruzadas, carga genética) así como de asma o atopia. Repercusión de los síntomas: detención de crecimiento, ingresos hospitalarios… B. TEST IN VIVO: pruebas cutáneas (Prick test). Consiste en la exposición cutánea al alergeno sospechoso y la medición del habón que se forma si hay sensibilización (positivo si >3cm). Al igual que los tests in vitro, tienen muchos falsos positivos. C. TEST IN VITRO: IgE específica para antígenos alimentarios en suero (uniCAP). Tiene alta sensibilidad (>90%) y moderada especificidad (50%). Es decir, presenta muchos falsos positivos (individuos sensibilizados sin repercusión clínica) y pocos falsos negativos. Por tanto, se obtiene mejor rentabilidad si se hace para pocos alergenos (seleccionar los “sospechosos”). Se considera positivo si >0.35Ku/l de IgE específica. D. TEST DE PROVOCACIÓN ORAL: Pueden realizarse de manera “abierta” en niños pequeños o en ensayos “ciegos” en adolescentes o adultos. Se consideran el goldestándar diagnóstico. Esta prueba no se realiza cuando en un pasado reciente y en más de una oportunidad la relación causa-efecto ha sido muy clara y/o la reacción de hipersensibilidad inmediata ha sido de tipo anafiláctica. TRATAMIENTO DE LA ALERGIA ALIMENTARIA EXCLUSIÓN ALIMENTARIA: Debe ser estricta para evitar reacciones alérgicas así como la prolongación de la sensibilización (pequeñas transgresiones pueden no provocar una reacción clínica pero sí evitar la desensibilización al alergeno). Hay que prestar especial atención a las etiquetas de los alimentos porque alergenos como leche o huevo no siempre se presentan de manera obvia (caseína, lactoalbúmina, ovoalbúmina…). Ninguna vacuna está estrictamente contraindicada. TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO: la adrenalina es el fármaco de elección ya que mejora el pronóstico de la reacción alérgica moderada-severa. (dosis: 0.1ml/Kg de la dilución 1.1000 (máx 0.3-0.5ml; 0.3-0.5mg)) im. Pueden usarse otros tratamientos coadyuvantes según la sintomatología: Antihistamínicos: reacciones leve-moderadas. Corticoides: inhalados, vo, im o iv para evitar la segunda fase alérgica. Broncodilatadores: si síntomas respiratorio. Tratamiento de sostén en reacciones alérgicas severas: oxígeno, sueroterapia, drogas vasoactivas… Algunos pacientes deben llevar siempre consigo una dosis de adrenalina precargada y haber sido entrenados (también sus padres y profesores) para la autoinyección que se realiza en la cara lateral del muslo. Este grupo de pacientes son los que presentan: • Antecedentes de reacción alérgica severa. • Antecedente de urticaria severa con angioedema. • Alérgicos a alimentos con historia de asma/sibilancias. • Alérgicos a los cacahuetes, pescado y mariscos (producen reacciones severas frecuentemente). • Alérgicos a alimentos con historia familiar de reacciones alérgicas alimentarias severas. 3 No existe consenso claro sobre cuando deben autoinyectarse la adrenalina. Hay dos situaciones en que existe consenso: al presentar una reacción con síntomas respiratorios o cardiovasculares o tras ingerir un alimento que previamente había provocado una reacción alérgica severa. El resto de los casos deben ser valorados por un facultativo. FUTURO DE LA ALERGIA ALIMENTARIA EN LA INFANCIA. Tres puntos hacia los que camina el futuro de la investigación y el tratamiento de las alergias alimentarias. • Mejoras de los métodos diagnósticos. • Concienciación en el etiquetado de los productos. • Innovación en tratamientos: anticuerpos anti-IgE monoclonales. Eva Parra Cuadrado Área de Pediatría Fundación Hospital de Alcorcón 4