La salud reproductiva y los servicios de aborto seguro

La salud reproductiva y los servicios de aborto seguro:
Defendiendo los derechos de las niñas y las mujeres jóvenes
foto © Richard Lord
Mundialmente, se han logrado avances significativos en
empoderar a las niñas y las mujeres jóvenes. En general,
permanecen en la escuela por más tiempo, entran en
la fuerza laboral en mayores números y se casan más
tarde. Sin embargo, aún se enfrentan con considerables
riesgos a su salud reproductiva: un inicio generalmente
más temprano de la pubertad, por lo cual el embarazo es
posible en niñas cada vez más jóvenes; la falta de acceso a
métodos anticonceptivos, anticoncepción de emergencia
y servicios de aborto seguro; y una alta prevalencia de
la violencia sexual, que puede producir embarazos no
deseados y abortos inseguros.
• Despenalizar el aborto. Eliminar todas las medidas
punitivas contra las mujeres que tienen abortos y
contra profesionales de la salud capacitados que
ofrecen servicios de aborto seguro.
Independientemente de su edad, estado civil o lugar de
residencia y empleo, es imperativo que las mujeres jóvenes
estén totalmente empoderadas para ejercer sus derechos
sexuales y reproductivos, entre estos sus derechos a tener
relaciones sexuales, a recibir servicios de anticoncepción,
incluida la anticoncepción de emergencia, y a recibir
servicios de aborto seguro.
• Fortalecer las habilidades de las y los profesionales
de la salud capacitándolos para ofrecer a las mujeres
jóvenes servicios correspondientes relacionados con
el aborto y desarrollando su capacidad para detectar
casos de violencia y tratar el abuso emocional, físico
y sexual.
Ipas insta a los gobiernos a tomar medidas inmediatas para:
• Desarrollar la capacidad de las personas jóvenes
para abogar por sus derechos y para participar de
manera significativa en la elaboración de políticas y
programas.
• Modificar las leyes y políticas que prohíben
o restringen el acceso a los servicios de salud
reproductiva recomendados por la OMS y otros
organismos de la ONU. Esto incluye revocar los
requisitos referentes a la participación de terceras
partes (por ejemplo, notificación o consentimiento de
la madre, el padre o el cónyuge) cuando las personas
jóvenes buscan servicios e insumos, tales como
pruebas de VIH, condones femeninos y masculinos,
métodos anticonceptivos y servicios de aborto.
• Cada año 14 millones de adolescentes de 15 a 19 años
de edad dan a luz; los datos de 51 países en desarrollo,
para el plazo desde mediados de la década de los noventa
hasta principios de la década del 2000, mostraron que casi
el 10% de las niñas ya eran madres antes de cumplir los
16 años.
• Las complicaciones relacionadas con el embarazo o el
parto son la principal causa de muerte entre mujeres de 15
a 19 años de edad.
• Mejorar el acceso a la información y los servicios
de salud sexual y reproductiva, especialmente para
las personas jóvenes pobres, rurales, discapacitadas,
refugiadas y desplazadas, y para las personas jóvenes
que viven con VIH y SIDA.
• Promover la responsabilidad del hombre en
cuanto a la salud sexual y reproductiva y el uso de
métodos anticonceptivos.
• Integrar y vincular programas relacionados con la
anticoncepción, el VIH y SIDA, otros servicios de salud
reproductiva y servicios de aborto seguro.
• Promover el uso más seguro de las tecnologías
de aborto, incluidos el aborto con medicamentos
y el instrumental de aspiración manual endouterina
(AMEU).
Durante casi 40 años, Ipas ha trabajado a nivel mundial
para disminuir las muertes y lesiones atribuibles al aborto
inseguro. Las mujeres jóvenes, en particular, se enfrentan
con enormes barreras cuando intentan obtener servicios de
aborto seguro y servicios de anticoncepción que podrían
prevenir embarazos no deseados. Además de las barreras
legislativas, financieras y logísticas, deben confrontar estigma
social, información errónea y mitos en torno al aborto.
• Las adolescentes (de 10 a 19 años de edad) en los países
en desarrollo tienen 2.2 a 4 millones de abortos inseguros
cada año (OMS 2004).
• Casi la mitad del cálculo aproximado de 47,000 muertes
anuales atribuibles al aborto inseguro ocurre entre mujeres
jóvenes de 10 a 24 años de edad (OMS 2004, 2011).
foto © Richard Lord
Millones de mujeres jóvenes en todo el mundo aún recurren al aborto inseguro. Las
consiguientes muertes y discapacidades son inaceptables y totalmente evitables.
En Etiopía, México, Nicaragua, Sudáfrica, Zambia y
otros países, Ipas forja alianzas con organizaciones
dirigidas por personas jóvenes, organizaciones tales
como Youth Vision (Zambia), Decidir (México) y Bhaktapur
Youth Information Forum (Nepal). En Nepal, por ejemplo,
Ipas está ayudando a crear un modelo orientado hacia la
juventud, mediante el cual personas jóvenes capacitadas
acompañan a las mujeres jóvenes que buscan servicios
de aborto. Esto ofrecerá un nivel de apoyo social
confiable, que anteriormente no estaba disponible en
sus comunidades. Tanto en Nepal como en otros países,
nuestro objetivo es asegurar que las mujeres jóvenes no
sean solo beneficiarias de los servicios sino también actoras
clave en sus propios servicios de salud.
En los programas de Ipas de capacitación, investigación,
extensión a la comunidad y promoción y defensa
(advocacy) se consideran e incluyen rutinariamente las
necesidades y los derechos de las mujeres jóvenes. Creemos
que ellas deben ser empoderadas y apoyadas para gozar
de sus derechos a información y servicios accesibles y
eficaces de salud sexual y reproductiva. Creemos también
que es importante incluir a los hombres jóvenes que son
los esposos, parejas sexuales, hermanos o amigos de las
mujeres jóvenes.
En nuestro recurso de capacitación titulado Servicios
de aborto para las mujeres jóvenes: Un juego de
herramientas para la capacitación, se hace hincapié
en los servicios accesibles y correspondientes para
las mujeres jóvenes, creados en alianzas con ellas. Se
refleja un enfoque basado en los derechos respecto a la
prestación de servicios que sean clínicamente seguros para
las mujeres jóvenes, y se examinan las maneras de forjar
alianzas entre personas adultas y jóvenes para asegurar
que los servicios de aborto sean participativos en todas las
etapas de la prestación de servicios.
‘El consenso internacional afirma
que las personas jóvenes tienen
derecho a ejercer sus derechos
humanos, como se consagra en
la Convención sobre los Derechos
del Niño (1989) y en la CIPD.
Estos acuerdos establecen una
base sólida para los programas
que abordan la salud sexual y
reproductiva en la adolescencia.’
Mediante los proyectos de Ipas centrados en la
juventud tendemos la mano a las personas jóvenes para
que participen educando a sus pares y abogando por los
derechos sexuales y reproductivos de la juventud. En estos
proyectos trabajamos con diferentes grupos y asociaciones,
tales como:
•
Asociaciones de estudiantes de medicina
•
Escuelas y universidades
•
Organizaciones comunitarias
•
Jóvenes que no van a la escuela
Fondo de población de las Naciones Unidas
www.unfpa.org/rights/youth.htm
Las fotografías utilizadas en esta publicación son para fines ilustrativos únicamente. No implican actitudes, comportamientos o acciones
específicas por parte de los sujetos.
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