EDICIÓN CONMEMORATIVA DE La ciudad y los perros, de Mario

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 EDICIÓN CONMEMORATIVA DE La ciudad y los perros, de Mario Vargas Llosa 768 páginas ‐ 12,90 € PRESENTACIÓN de la edición Al cumplirse el cincuentenario de La ciudad y los perros, la Real Academia Española y la Asociación de Academias de la Lengua Española rinden homenaje a Mario Vargas Llosa con una edición académica conmemorativa de su primera novela. La obra, que gozó de éxito y reconocimiento internacional desde su aparición, marcó una innovación de fondo y forma en la narrativa hispanoamericana. Sin duda, Vargas Llosa inaugura con esta novela el boom latinoamericano. La edición conmemorativa, revisada completamente por el autor, va acompañada de un conjunto de estudios sobre la novela y su autor que abre Marco Martos, presidente de la Academia Peruana de la Lengua. Extractos de los estudios que acompañan esta edición LA CIUDAD Y LOS PERROS: ÁSPERA BELLEZA, Marco Martos En su introducción «La ciudad y los perros: áspera belleza», Martos rememora la visita de Nathalie Sarraute, representante del nouveau roman, a la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y cómo Mario Vargas Llosa «tan diferente, por su manera de contar, a los novelistas de la nueva novela francesa, tiene en común con ellos la admiración por las formas, la necesidad de estructurar los relatos, exaltada con tanta precisión por Flaubert». Por esa época, a finales de los sesenta, «La ciudad y los perros de Mario Vargas Llosa ya estaba andando por el mundo. El paso de las décadas ha probado que con la aparición de ese libro, la primera novela de un joven autor, estábamos asistiendo a una segunda y más importante fundación de la novela peruana». Marco Martos destaca en su trabajo que «lo que resulta sorprendente, cuando leemos una y otra vez la primera novela de Mario Vargas Llosa, es que debajo de su rara belleza verbal, de sus estructuras percibidas con inteligencia por los críticos, no ha envejecido, conserva su encanto, su atracción absoluta para nuevos lectores. Leerla es la manera más eficaz de iniciarse en el conocimiento de la obra narrativa de Vargas Llosa». «Desde un punto de vista descriptivo, está ficción se refiere a las vidas de los cadetes en el colegio Leoncio Prado de Lima, a la relación de los jóvenes estudiantes con la estructura militarizada de la institución» y donde «según propia confesión» un joven Vargas Llosa «descubrió otra cara de la vida, la del horror. Los militares golpeaban a los jóvenes estudiantes y se golpeaban entre sí, siguiendo las estructuras jerarquizadas. Lo que contaba era la fuerza bruta y la astucia. Con esa experiencia, marcada a fuego en su propia biografía, Mario Vargas Llosa escribe una novela de áspera belleza, que no cabe sino llamar poética, simbólica, profunda, absolutamente humana». «Las múltiples perspectivas de la narración, la dosificación del suspenso, la alternancia narrativa, conducen al derrumbe de los ideales en el epílogo de la novela que funciona como un anticlímax de gran eficacia narrativa. Desde el punto de vista lingüístico, Mario Vargas Llosa, ahora que su verbo ha alcanzado una dimensión universal, entrega permanentemente al mundo la modalidad peruana de manejar el español, palpable en esta primera novela, más que en ninguna otra salida de su pluma». LA PRIMERA NOVELA DE VARGAS LLOSA, José Miguel Oviedo Cuando en 1963 apareció en Barcelona La ciudad y los perros, con la que Mario Vargas Llosa había ganado el Premio Biblioteca Breve de novela, era un autor prácticamente desconocido y del que, aun en su país, no muchos tenían noticia. La novela de Vargas Llosa era un material peligroso, casi subversivo: no solo contenía una feroz crítica al militarismo, sino que encerraba escenas de violencia sexual y muchas crudezas verbales que resultaban inaceptables para los celosos defensores del orden y las buenas costumbres. La justicia poética de Vargas Llosa es implacable: a nadie, justo o pecador, le será dada la oportunidad de una efectiva salvación. En un mundo atestado de actos, se siente la ausencia de una última «acción constructiva». Algo que sea, para ellos, una © Morgana Vargas Llosa y Jaime Travezán verdad realizada e incontaminada. No es nada extraño que a La ciudad y los perros se le haya adjudicado una serie bastante larga de antecedentes, influjos y semejanzas, encontrados en muchas literaturas; su temática característica del bildungsroman, el préstamo y la invención de heterogéneas técnicas modernas, su clásico dilema entre individuo y sociedad, son aspectos que, de una manera u otra, vinculan esta obra con las preocupaciones generales de la novela contemporánea. Quizá lo mejor que se pueda decir de La ciudad y los perros es que resulta digna de esta enorme herencia universal. UNA NOVELA EN CÍRCULO, Víctor García de la Concha En otra ocasión, a propósito de La casa verde, he recordado que Mario Vargas Llosa llegó a la literatura de mano de la poesía. Rubén Darío y Góngora fueron sus maestros preferidos y en ellos aprendió algo que iba a resultar fundamental para su teoría y práctica de la novela: «La sustitución de un mundo de realidades por uno de represen‐
taciones». Lo descubrió ejemplificado en una novela de caballerías, el Tirant lo Blanc y, pasando por Victor Hugo, de la mano de Flaubert en Madame Bovary. Ahí estaba un «libro en círculo», un orbe cerrado como un poema. Y ahí, también, el ser humano en su mediocridad, con una tremenda carga de sexo y violencia. La lista de lecturas fundantes de la preparación de nuestro novelista es larga. Pero él mismo, en el prólogo que abre esta edición de La ciudad y los perros, recuerda la de Sartre, en cuya tesis sobre la literatura comprometida creyó durante algún tiempo, a la vez que devoraba las novelas de Malraux, sin dejar de admirar «sin límites a los novelistas norteamericanos de la generación perdida, a todos, pero, más que a todos, a Faulkner». Estructurada en dos partes, gemelas en extensión pero de tempo y tono muy diversos, y cerrada por una breve coda, La ciudad y los perros se va haciendo en una polifonía de voces, perspectivas y estilos manejados con sabio artificio. En la cuarta de sus Cartas a un joven novelista, al esbozar Vargas Llosa los tipos posibles de narrador, añade al narrador‐personaje y al narrador‐omnisciente la figura de un narrador ambiguo. Creo que ese narrador de continuidad del que vengo hablando tiene bastante de este último porque, en busca de la eficacia, se mueve con entera libertad en el espacio y en el tiempo, incorporando a trechos otras intervenciones y voces. La ciudad y los perros se muestra entonces, tal como he anticipado, como un poema donde un verso inicial solo encuentra su plenitud de sentido en otro final; un orbe cerrado lleno de juegos de simetrías y espejos en que las palabras reverberan en relaciones que multiplican sus significados. Exactamente, una formidable obra de arte del lenguaje, que hace medio siglo, contribuía a abrir un «camino no usado» en la novela en lengua española, el de la «síntesis crítica de la sociedad y de la imaginación». DE LA CIUDAD Y LOS PERROS AL NOBEL DE LITERATURA, Darío Villanueva En 1962, el entonces joven escritor peruano, nacido en Arequipa en 1936, obtenía en Barcelona, por unanimidad en todas las votaciones del jurado, el prestigioso Premio Biblioteca Breve, y la obra ganadora, La ciudad y los perros, publicada al año siguiente, recibió en seguida el Premio de la Crítica en narrativa castellana. En cierto modo, ello representó el comienzo de la recepción entusiasta que la novela hispanoamericana iba a merecer desde entonces en España y en Europa, pues La ciudad y los perros fue inmediatamente traducida al holandés y luego a otros catorce idiomas continentales, dándose la paradoja de que la punta de lanza de ese desembarco literario, que se ha dado en llamar boom, viniese de la mano del narrador más joven de cuantos lograron este pronto reconocimiento. Casi medio siglo después de aquel su primer éxito, a principio de octubre de 2010 el autor de La casa verde y de una novela que estaba a punto de salir, El sueño del celta, recibía la noticia de que le había sido otorgado el premio instituido por Alfred Nobel para que cada año se distinguiese a «la persona que hubiese producido en el campo de la literatura la obra más destacada en una dirección ideal». En primer lugar, sobresale la identificación profunda del escritor con los ideales de un universalismo humanista que está en los orígenes de esta institución fundada por Alfred Nobel hace ya más de un siglo. Vargas Llosa se considera un «ciudadano del mundo» pero no por ello cree haber perdido sus raíces peruanas más profundas, que alimentan sus historias aunque no ocurran en el Perú, y asoman en la mayoría de ellas. La novelística de Mario Vargas Llosa, esa veintena de títulos que van de Los jefes a El sueño del celta, representa todo un ejemplo de armoniosa alianza entre la riqueza de las historias contadas y la suntuosidad del discurso en el que se cuentan. Con él no tiene sentido la contradicción que Umberto Eco estableció, allá por los años de La ciudad y los perros, entre cultura popular y cultura de elite. Entre nuestros contemporáneos, nadie mejor que el premio nobel de 2010 ha sido capaz de seducir amablemente a una gran masa de lectores contándoles historias llenas de sentido con una prosa tan bella como eficaz. NOTA AL TEXTO, Marco Martos La historia de La ciudad y los perros ha sido contada muchas veces. Según refiere el propio Mario Vargas Llosa, empezó a pergeñar la novela en el otoño de 1958 en Ma‐
drid, en una tasca de Menéndez Pelayo llamada El Jute, que miraba al parque del Retiro, y la terminó de escribir en el invierno de 1961, en una buhardilla de París. La novela fue presentada al Premio Biblioteca Breve, obtuvo el premio y fue alabada por José María Valverde, uno de los miembros del jurado. Las palabras de Valverde, acompañan desde entonces a numerosas ediciones, incluida la nuestra. Finalmente la novela fue publicada en 1963 y obtuvo el Premio de la Crítica en narrativa castellana. La recepción del libro en España fue muy entusiasta. Transcurridos cincuenta años después de su escritura, la novela mantiene el secreto encanto que entusiasmó a los primeros lectores, esa magia de un libro clásico que trasciende las explicaciones de los críticos y se sustenta principalmente en las sucesivas generaciones de lectores que van encontrando placer y conocimiento en sus páginas. Un libro que podemos leer muchas veces y nos puede acompañar toda la vida como uno de los preferidos. Y no en vano es la primera gran novela de un premio nobel de literatura. Al publicar este libro en forma masiva, desde la perspectiva de la Asociación de Academias de la Lengua Española y de la Real Academia Española, los agradecimientos son numerosos. UN JUICIO DEL DR. JOSÉ MARÍA VALVERDE, MIEMBRO DEL JURADO DEL PREMIO BIBLIOTECA BREVE, José María Valverde Hoy día, cuando la adolescencia desplaza a la niñez como época ideal de divina plenitud paradisíaca —los teenagers dictan la moda, como «nueva clase ociosa», y son mimados y consentidos aunque hagan el gamberro o el blouson noir— esta magistral novela de Mario Vargas Llosa, sin agotar en ello su sentido, lanza un ataque frontal contra el mito de la adolescencia, aún a medio madurar. Tristemente parece decir: a mayor libertad, mayor malicia: la época más «pura», menos «socializada» es la que da lugar a más refinada y desinteresada perversidad en el hombre. Es probable —y deseable— que la mayoría de los lectores consideren exagerada la dureza del ambiente y las situaciones, y digan que esas cosas ya no pasan en su país: en todo caso, siempre siguen siendo verosímiles —y lo que importa en el arte, como dijo Aristóteles, es que una acción sea verosímil, aunque no sea real ni probable—. Pero el análisis de las cualidades de esta novela, una por una, no basta para razonar su valor impar, que el lector percibe en forma abrumadora, angustiosa, poco propicia para reflexiones teóricas. Por mi parte debo confesar que, aunque convencido en teoría de que el género novelístico está difunto, me hube de rendir en seguida a la evidencia de hallarme ante una obra excepcional. Al concedérsele —por rara unanimidad— el Premio Biblioteca Breve 1962, dije a un periodista: «Es la mejor novela de lengua española desde Don Segundo Sombra»; y, amigo de la puntualización pedante, añadí: «que se publicó el mismo año que nací yo, 1926». Ahora lo repito, ya en frío, diciendo también —como J. Middleton Murry cuando saludó en el Ulysses de Joyce una pieza maestra—: «Digámoslo claramente, para poder tener nuestra porción de desprecio o de gloria dentro de cien años». LA CIUDAD Y LOS PERROS: LA NOVELA HISPANOAMERICANA PARA LA LITERATURA DEL MUNDO Javier Cercas, Carlos Garayar, John King, Efraín Kristal LA PREGUNTA DE VARGAS LLOSA, Javier Cercas Leí por vez primera La ciudad y los perros en 1979. Por entonces tenía diecisiete años, más o menos los mismos que tienen el Jaguar, el Poeta, el Esclavo y sus demás com‐
pañeros del Leoncio Prado. La novela me conmocionó; nunca había leído un libro como aquel: un libro que parecía escrito a martillazos, donde se desvelaban, con una prosa incandescente y una furia, una ternura, una crueldad y una limpieza sobrecogedoras, las corrupciones y perplejidades de la adolescencia que yo todavía estaba viviendo (y que, solo ahora lo sé, no difieren mucho de las de la edad adulta). Antes dije que el propósito último de las novelas de Vargas Llosa consiste en levantar con palabras un mundo hermético, paralelo al real pero tan potente como el real, un mundo donde mantener encerrado a cal y canto al lector para hacerle vivir una experiencia vicaria y sin embargo tanto o más intensa que las más intensas ex‐
periencias de su biografía; añado ahora que, a pesar de ser apenas un sortilegio o embrujo o engaño —mejor dicho: precisamente porque lo es—, esa experiencia verbal debe permitirle al lector acceder a una verdad superior a la verdad de los hechos, una verdad ya no histórica ni factual sino moral y universal, que nos enriquece revolucionándonos por dentro y cambiando nuestra forma de ver las cosas. Eso es lo que hizo conmigo La ciudad y los perros; eso es lo que hace con el lector: sublevarlo, descolocarlo, poner en duda sus certezas, obligarlo a mirar la realidad de un modo distinto, obligarlo a sentir cosas que le incomoda sentir y a formularse molestas preguntas sin respuesta, obligarlo en fin a vivir la aventura del Jaguar y el Poeta y el Esclavo y los demás personajes de la novela como una aventura propia. LA CIUDAD Y LOS PERROS: LA CREACIÓN DE UN LECTOR, Carlos Garayar La novela de Mario Vargas Llosa traía tantas novedades que era evidente que con ella se iniciaba un nuevo curso, se señalaba un antes y un después. Naturalmente, el quiebre generó entusiasmo, pero también desconcierto, rechazo y aun insultos. La mayoría de sus detractores le reprochaba haber falseado la realidad […]. En numerosas ocasiones, Vargas Llosa ha declarado que el mundo de la ficción crea un orden que no existe en la realidad. Hay que puntualizar, sin embargo, que, por lo menos en La ciudad y los perros, no se busca imponer ese orden, porque él no es el único. El lector, con las mismas fichas, construirá inevitablemente el suyo, organizando las secuencias y llenando los vacíos entre ellas, según sus capacidades, y en ese proceso hará sus propios descubrimientos. UNA FICCIÓN INCENDIARIA: REFLEXIONES SOBRE LA RECEPCIÓN DE LA CIUDAD Y LOS PERROS EN ESTADOS UNIDOS Y EL REINO UNIDO, John King Cuando La ciudad y los perros fue publicada en los Estados Unidos en 1966, con el título The Time of the Hero («El tiempo del héroe»), fue recibida por lectores y críticos que ya tenían una visión más clara de América Latina y sus literaturas, aunque por supuesto, el mayor temor de los gobiernos sucesivos era, precisamente, que todo el continente se prendiera en llamas. En resumen, hacia finales de los años sesenta se estableció un nuevo espacio académico para la recepción de la literatura latinoamericana en los Estados Unidos con el protagonismo de los nuevos escritores. Se trataba de un campo relativamente nuevo y de un público con conocimientos limitados. A partir de La ciudad y los perros todas las novelas de Vargas Llosa se tradujeron casi inmediatamente al inglés. Fueron bien distribuidas, obtuvieron ventas considerables y recibieron reseñas extensas de un público cada vez mejor informado sobre América Latina. Pasarían dos años más antes de que la novela apareciera en inglés en el Reino Unido. Fue reseñada en las revistas especializadas, y también recibió alguna atención fugaz —pero positiva— en los periódicos y revistas más importantes del país. La mayoría de los críticos de los periódicos nacionales y provinciales comenzaban sus comentarios con alguna referencia a la famosa quema de los ejemplares en Lima y a sus preocupaciones sociales. En el Reino Unido se repitió el patrón de la creciente visibilidad de la obra de Vargas Llosa que habíamos notado en el caso de los Estados Unidos, tanto en los círculos académicos como en la amplia comunidad lectora. REFUNDICIONES LITERARIAS Y BIOGRÁFICAS EN LA CIUDAD Y LOS PERROS, Efraín Kristal Los antecedentes más importantes de La ciudad y los perros como una novela sobre el colegio internado para examinar el paso difícil de la adolescencia a la adultez son Las tribulaciones del estudiante Törless (1906) de Robert Musil, y Los ríos profundos de José María Arguedas (1961). En La ciudad y los perros Vargas Llosa parece asimilar y trascender aspectos importantes de ambas novelas. La ciudad y los perros es una novela que deslumbró a su público lector: su vitalidad literaria se revela en cada una de sus páginas por su maestría en la elaboración de am‐
bientes, personajes y la feliz aplicación de procedimientos faulknerianos. Cincuenta años después de su publicación se puede afirmar que había en La ciudad y los perros una visión moral que sobreviviría a sus convicciones políticas del momento y que estaba inspirada en una de sus influencias literarias más perdurables: Los Miserables de Victor Hugo. Según el narrador de Los Miserables la sociedad corrupta transforma a hombres de bien en delincuentes. Para más información pueden dirigirse a los departamentos de Comunicación de: ‐ Real Academia Española: Miguel Somovilla 91 4201470 | [email protected] ‐ Santillana: Rosa Junquera 91 7449269 [email protected] 
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