EL SEMBRADOR Doctrinal 15 DE DICIEMBRE DE 2013

EL SEMBRADOR
Doctrinal
15 DE DICIEMBRE DE 2013
IGLESIA BIBLICA ABUTISTA EL CAMINO
Pastor Héctor M. Pérez-galanena.
EL SEMBRADOR
L.B: Lucas 8:4-16.
INTRODUCCION:
Como ya habrá notado, Jesús mismo en persona nos
explica el significado de esta parábola. En sus palabras
hay una serie de verdades implícitas que son elementales
para nosotros si de veras queremos ser sembradores
según el modelo de Jesucristo. La primera verdad es que:
Hay una acción que realizar,
sembrar (Lucas 8:5).
A. Un sembrador salió a sembrar… la pregunta que
surge es ¿Quién es este sembrador? Y la
respuesta es muy sencilla, son todos aquellos
que tienen la responsabilidad de predicar la
palabra de Dios. En el ministerio cristiano esta la
predicación que va dirigida a los no convertidos,
esta es la predicación de las buenas nuevas de
salvación o evangelio. En Mateo 28:18-20 y en
los otros evangelios, se le asigna esta tarea a
todo discípulo de Cristo, por tanto cuando de
predicar el plan de salvación se trata, todo
creyente es un sembrador, en este sentido el
texto está hablando de ti y de mí. El otro tipo de
predicación está más vinculada con la enseñanza
o adoctrinamiento y va dirigida de manera más
específica a creyentes, y entiéndase por
creyentes aun a los nuevos convertidos. En este
Pastor. Héctor M. Pérez-galanena.
EL SEMBRADOR
caso el sembrador es el pastor de la iglesia y
todos aquellos que han recibido el don de la
enseñanza (1Timoteo 4:14; 1Timoteo 3:2) don
que es obligatorio en los pastores y don que
pueden tener algunos miembros de la iglesia
(1Corintios 12:28). Sin importar que tipo de
sembrador tu eres, las cosas que están por
decirse, se dicen de ti que eres un sembrador.
B. La otra palabra interesante en este versículo es
“salió” esto implica muchas cosas, la primera de
ellas es que
1) El sembrador sale, porque sabe que es su
responsabilidad salir a sembrar, de lo
contrario no puede esperar recibir ninguna
cosecha si no lo hace. Si no predicamos el
evangelio, las almas no se van a convertir
Romanos 10:17 dice que la fe viene por el
ori y el oír de la Palabra de Dios. Si no
enseñamos la Palabra de Dios, el pueblo va a
perecer en Oseas 4:6 Dios dice que su pueblo
había perecido por falta de conocimiento y
debido a su ignorancia habían incensado a
los Baales etc. (Oseas 4:1), ignorar la Palabra
de Dios hace al creyente vulnerable a caer en
el pecado, la blasfemia, la herejía y la
apostasía.
2) El sembrador sale, porque sembrar es parte
de su vida (1Corintios 9:16). La acción de
sembrar es un estilo de vida. No es algo
alternativo u opcional en aquellos que son
sembradores de la Palabra de Dios.
Pastor. Héctor M. Pérez-galanena.
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3) El sembrador sale, porque ha hecho ajustes
en su vida, en su calendario para salir y sabe
que si no hace uso de este tiempo, o sea del
tiempo de la siembra, después no va a
cosechar. Igual ocurre con nuestra siembra,
hay tiempos que son únicos, y si no
invertimos en la siembra haciendo los
arreglos que sean necesario hacer para
sembrar no vamos a cosechar nada, el final
será, la ruina, y la amargura y el hambre por
no haber sembrado. En cambio quien ajusta
su tiempo y sale y siembra tiene mayor
probabilidad de celebrar la cosecha del que
no lo hace.
4) El sembrador sale a sembrar porque espera
recoger cosecha y celebrar la cosecha.
C. Sembrar”, es la actividad a la que se dedica el
sembrador. “
1) La actividad de sembrar implica, dedicación,
o sea tiempo para aprender a sembrar, pues
si no sabemos cómo hacerlo, fracasaremos.
Los creyentes han de invertir tiempo en su
vida aprendiendo a como exponer el
evangelio, o sea, aprendiendo técnicas de
siembra, los discípulos estuvieron casi por
tres años con Jesús, aprendiendo, Timoteo
aprendió de Pablo y así sucesivamente. Los
que se dedican a enseñar la Palabra de Dios
deben dedicar tiempo a su preparación
personal. ¿Cómo? Asistiendo a seminarios,
conferencias, entrenamientos etc.
Pastor. Héctor M. Pérez-galanena.
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2) La actividad de sembrar implica, preparación
del terreno, de lo contrario la siembra será
un fracaso, un buen campesino, labra y
abona su tierra. Nosotros tenemos que
aprender a preparar nuestros terrenos, los
terrenos en esta parábola son los corazones
de la gente. Ellos necesitan ser abonados y
labrados antes de recibir la Palabra, ¿Cómo
se puede hacer esto? Ganándote su
confianza, dándole testimonio con tu vida,
estableciendo conversaciones intencionales,
en fin, El Espíritu de Dios te va a guiar.
3) La actividad de sembrar implica inversión en
recursos materiales. Semillas, instrumentos
de labranza y siembra, salario para
jornaleros si los tienes y buenas ideas. Si
queremos ser buenos sembradores vamos a
tener que invertir dinero ya sea propio o
como iglesia en la actividad de sembrar la
palabra de Dios. O desarrollar ideas, cuando
un campesino no tiene suficiente dinero
para pagar a obreros, pide ayuda voluntaria,
busca recursos y alternativas para sembrar
pero nunca se queda sin sembrar.
4) La actividad de sembrar implica sacrificio y
sufrimiento. Quienes han trabajado o
trabajan en el campo saben que sembrar
implica madrugar, sufrir el sol, los embates
del clima, las plagas etc. Sembrar la Palabra
de Dios también implica sacrificio, dedicar
horas extra a la oración, tener oposición
satánica, mundanas, tentaciones, rechazo
Pastor. Héctor M. Pérez-galanena.
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de los amigos y familiares, las criticas juicios
de aquellos que no entienden el proceso de
sembrar el evangelio y la sana doctrina. Todo
en la vida implica sacrificios, pero pagar este
sacrificio vale la pena, Jesús lo hizo por
nosotros, nosotros debemos hacerlo por
otros.
5) La actividad de sembrar implica paciencia y
fe. Paciencia porque no siempre se hace
todo en un solo día, ni es un evento único de
la vida, sino que es repetitivo hasta que
estemos con el Señor. Y fe porque no
sabemos quiénes van a creer y quienes no,
pero un buen sembrador del evangelio
siempre espera cosechar frutos, no importa
que sean, cientos, o treinta o uno.
Hay una semilla específica que
sembrar, La Palabra de Dios. (Lucas
8:5; 11).
A.
B.
El sembrador salió a sembrar su semilla. Según
Lucas 8:11 la semilla es La Palabra de Dios,
quiere decir que el buen sembrador, o sea el
que sale a evangelizar y el que enseña a la
iglesia, ha de usar La Palabra de Dios y solo la
Palabra de Dios.
El sembrador salió a sembrar, “su semilla”
quiere decir que hay una semilla específica
que sembrar, no cualquier semilla, el texto
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dice “su” la de él. O sea la que ya tiene y le
pertenece que es la Palabra de Dios (Lucas
8:11), quien no tiene esta semilla no es un
auténtico sembrador sino un falso sembrador
y por tanto no puede salir a sembrar. Esto nos
muestra que solo han de predicar el evangelio,
La Palabra de Dios, aquellos que ya han tenido
una experiencia de salvación a través de la
Palabra y que son convertidos. La iglesia no
debe involucrar en actividades evangelistas,
misioneras o educativas a personas no salvas.
(Hay iglesias que para tener eventos
significativos de evangelismo contratan
músicos no creyentes, o se sirven de
ingenieros y expertos en comunicaciones para
hacer uso de tecnologías en su programa
educativo o de predicación).
Hay un estilo de siembra en
particular (Lucas 5:5-8; 11-15).
A. Probablemente Jesús tenía en mente la siembra
del trigo. El trigo se siembra con un método que
se llama boleo, o sea el sembrador una vez en el
campo que quiere sembrar, toma de un costal
un punado de semilla y la va regando por todas
partes en el campo que quiere sembrar.
Evidentemente hay un método, de igual manera
los creyentes cuando de sembrar el evangelio y
la palabra de Dios se trata hemos de usar
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métodos que sean propios y eficaces. La iglesia
ha de desarrollar estrategias y métodos que
permitan una buena siembra. El trigo y el frijol
se siembran de manera distinta, en el trigo se
usa el boleo porque la planta de trigo, así como
el arroz no son frondosas, en el frijol hay que
hacer surcos y sembrar solo dos o tres granos
cada ciertos pasos, porque como es una planta
más frondosa si se hace al boleo cuando estos
nazcan y crezcan ellos mismos se van ahogar y
matar. Todos los lugares son distintos para
sembrar la Palabra de Dios, la iglesia en su plan
de siembra debe saber identificar que método
va a usar y ser fiel a él si quiere recoger una
buena cosecha.
B. Con el método del boleo se está intentando
sembrar la mayor cantidad de semillas posibles
en la mayor cantidad de tierra posible. Los
creyentes hemos de tratar de sembrar la
Palabra de Dios en la mayor cantidad de gente
posible.
C. En el caso de la siembra de la Palabra de Dios,
los creyentes hemos de pedirle a Dios quien es
el dueño de la mies, que nos indique como
quiere que hagamos las cosas y ajustar nuestra
vida a sus órdenes, a sus planes y a sus métodos.
Digo esto porque tristemente con mucha
frecuencia hay gente que usa métodos que Dios
no les ha mandado a usar. El método de Dios es
la comunicación pública o personal de la Palabra
de Dios, cualquier otro método no es aprobado
por Dios.
Pastor. Héctor M. Pérez-galanena.
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Conclusiones:
Hemos visto que hay una acción que realizar, sembrar, o
sea predicar, una semilla especifica que sembrar, que es
la Palabra de Dios y métodos específicos que seguir para
obtener una buena cosecha. Estas tres verdades deben
de ser consideradas por cada uno de nosotros y buscar
ponerlas por practica de inmediato y de manera fiel.
Pastor. Héctor M. Pérez-galanena.