Sentencia. Reconocimiento y disolución de una

Anuncio
SENTENCIA NÚMERO: Sesenta y cuatro.Marcos Juárez, 12 de Mayo de Dos mil quince.------------------------------------------------Y VISTOS: Estos autos caratulados “CRAVERO, Elsa Elida c/ SUCESORES DE
MIGUEL ANGEL MARTINI -Societario Contencioso - Disolución de sociedad de
hecho-” (Expte. N° 700106), de los que resulta que:
I.- A fs. 02/08 comparece la Sra. Elsa Elida Cravero, L.C. Nº 7.572.367,
demandando que, previa declaración de la existencia de la sociedad de hecho que
constituyó con el Sr. Miguel Angel Martini, se declare judicialmente la disolución de la
misma y se proceda a su liquidación, instaurando la demanda en contra de la Sucesión
de Miguel Angel Martini y/o su heredera Alicia Josefa Martini de Pirani.- Refiere que la
disolución de la sociedad de hecho denunciada se produjo por fallecimiento de Miguel
Angel Martini, acaecido el 3 de diciembre de 2009, debiéndose hacer lugar a la
demanda, ordenándose judicialmente la disolución de la sociedad de hecho por la causa
indicada y la pertinente publicación que corresponda, y su correspondiente liquidación
por el procedimiento de ley, distribuyéndose los bienes y ganancias quedados a la
finiquitación de la misma en una proporción del cincuenta por ciento (50 %) para la
compareciente en su carácter de socia y el restante 50 % para la sucesora del otro socio,
el fallecido Miguel Angel Martini. Subsidiariamente y para el caso de que se pretendiera
sentenciar que la sociedad de hecho denunciada no existió, y por ende que tampoco
correspondería su liquidación y que por ende no correspondería distribuirse a su favor
en la proporción indicada los bienes y ganancias de la misma, demanda que se
reconozca judicialmente su participación en condominio con Miguel Angel Martini existencia de un condominio con interposición de personas-, en una proporción de
derechos y acciones de propiedad indivisos del cincuenta por ciento (50 %), en cada uno
de los bienes inmuebles que, escriturados e inscriptos registralmente a nombre del
mismo y por lo tanto y como efecto que se inscriban a nombre de ambos, es decir de la
compareciente el 50 % y de la sucesión y/o su heredera el restante 50 %, y/o que se
ordene su partición en dichas proporciones. Que en tal reclamo subsidiario, por supuesto
que sus aportes para la compra de los bienes no fueron, bajo ningún punto de vista, con
animus donandi. Todo con costas.- Relata que en el año 1964, y al mismo tiempo que
comenzó a vivir en aparente matrimonio con Miguel Angel Martini, constituyeron con
éste una sociedad de hecho. Vivían en el campo del padre de su concubino, y allí
sededicaban a la cría de animales para su venta a terceros, entre ellos vacunos y
cerdos.Ambos hacían las tareas rurales y de cría de animales personalmente, ya que no
tenían empleado, y con el tiempo empezó a trabajar también junto con ellos su hijo
nacido de un matrimonio anterior y quien también vivía con ellos -Sr. Roberto Oscar
Cantoni, soltero, hoy de 56 años de edad-. Ese trabajo de su hijo se tornó habitual ya
desde aproximadamente 1967, y su trabajo era un aporte más que ella hacía a la
sociedad de hecho, y al mismo no se le pagaba sueldo sino que sus gastos para vivir
eran por ella proporcionados, siendo el mismo soltero. Adita que el objeto de esa
sociedad de hecho era, obviamente, la realización de producción especialmente
pecuaria, trátese de animales vacunos y cerdos, para que luego de criarlos se procedía a
su venta a terceros.La explotación conjunta funcionaba bien, tanto es así que en el año
1970, específicamente el 23 de octubre de 1970, procedieron a comprar, con el producto
de la rentabilidad de su explotación agropecuaria y del ahorro que de ella hacían, una
porción de campo equivalente a derechos y acciones de propiedad sobre Veintiuna
hectáreas novecientos veinticinco metros cuadrados (21,0925 has.), que en la escritura
de adquisición se detallan como “derechos y acciones equivalentes a la mitad indivisa
que tiene y le corresponden sobre el siguiente inmueble: una fracción de campo formada
por la concesión A. del lote noventa y ocho del plano de la Colonia Juárez Celman,
pedanía Cruz Alta, departamento Marcos Juárez, provincia de Córdoba, compuesta de
una superficie de CUARENTA Y DOS HECTAREAS, UN MIL OCHOCIENTOS
CINCUENTA METROS CUADRADOS; y que linda: al Norte, calle de por medio, con
el lote sesenta y tres; al Este, con la concesión letra C. del mismo lote noventa y ocho; al
Sud, con la concesión D. del lote noventa y ocho; y al Oeste, calle de por medio, con
parte del lote noventa y siete, todos de la expresada Colonia Juárez Celman”. Tal
escritura es la Escritura Pública Nº 159, del 23/10/70, labrada por ante el Escribano
Jorge Alfonso Passerini, Titular del Registro Notarial Nº 462 de Cruz Alta.Si bien
ambos socios teníaninjerencia en la dirección del negocio, por una relación asimétrica desde el punto de vista de la relación afectiva y convivencial- establecida por su
concubino con la compareciente, quien si bien era una excelente persona tenía rasgos de
entender superior o prevaleciente el sexo masculino respecto del femenino -pauta
cultural característica de su generación-, a lo que aducía además que era mejor para el
funcionamiento comercial de la explotación, ya sea con casas de comercio y entidades
bancarias, agregado a ello que existía una situación y ambiente de total confianza
recíproca a mérito de la vida en común y una, si se quiere, dependencia moral de la
compareciente hacia su socio por aquel elemento convivencial, el inmueble fue
escriturado sólo a nombre del mismo, y también así fue inscripto en el Registro General
de Propiedades -se halla inscripta al DOMINIO 22593, FOLIO 34225, TOMO 137,
AÑO 1970-. Que siguieron viviendo siempre en el mismo lugar.La explotación
agropecuaria funcionaba cada vez mejor, cimentada en el dato económico objetivo que
en los primeros años de la década del ´70 se dio una coyuntura internacional favorable
para los productos agrarios y pecuarios, de tal modo que es la época que registra
mejores precios relativos internacionales de los productos primarios que produce y
exporta Argentina, y entre los que se encontraban, obviamente, los que producían.
Quiere decir ello que por esos años la explotación que tenían era floreciente y muy
rentable; y eran muy ahorrativos y de ritmo de vida muy austero.Así las cosas, y de tal
modo, en el año 1973, específicamente el 29 de diciembre de 1973, compraron otra
fracción de campo, que se describe como “a) Una fracción de terreno con todo lo
edificado, clavado y plantado y demás adherido al suelo, comprendida en el lote sesenta
y cuatro de la Colonia Juárez Celman, Pedanía Cruz Alta, Departamento Marcos Juárez,
de esta Provincia de Córdoba, la que mide según el plano particular del topógrafo
nacional don Conrado L.Vicario agregado a la escritura de su adquisición por el
causante, en el costado Sur setecientos setenta y cuatro metros, treinta. centímetros; en
el costado Oeste mil seiscientos sesenta y dos metros, sesenta y ocho centímetros; en el
lado Este mil trescientos metros cincuenta centímetros; y en el costado Norte, a partir
del extremo Nor-Este de dicho lote hacia el Oeste, setecientos setenta y tres metros dos
centímetros, continuando luego una poligonal sobre el Río Tercero, cerrando la figura,
lo que hace una superficie total de CIEN HECTAREAS, TREINTA AREAS,
CUARENTA Y SEIS CENTIAREAS, lindando: Al Norte, en parte con el Río Tercero y
en parte, camino de por medio, con el lote cincuenta y siete; al Este, camino de por
medio, con el lote sesenta y tres; al Sud, camino de por medio, con el lote noventa y
siete; y al Oeste, con mas terreno del lote sesenta y cuatro adjudicado a Evaristo Juan
Valvesón (según realidad y plano citado al lado Oeste mide 1.272,68 metros). b) Una
fracción de campo con todo lo edificado, clavado, plantado y demás adherido al suelo,
ubicado en la concesión C. del lote número cincuenta y siete de la Colonia Juárez
Celman, Pedanía Cruz Alta, Departamento Marcos Juárez, de esta Provincia de
Córdoba, midiendo según el plano particular del topógrafo nacional don Conrado L.
Vicario agregado a la escritura de su adquisición por el causante a que ya se hiciera
referencia en el inmueble anterior, en el costado Sur seiscientos veinte y seis metros
siete centímetros; en el lado Este ciento veinte y cuatro metros; y al costado Norte y
Oeste lo forma una poligonal sobre el Río Tercero, encerrando una superficie de TRES
HECTAREAS, SESENTA Y TRES AREAS, SESENTA Y NUEVE CENTIAREAS,
lindando: al Norte y Oeste, con el Río Tercero; al Este, calle de por medio, con la
concesión d. del lote número cincuenta y ocho; y al Sud, camino de por medio, con
parte del lote sesenta y cuatro”. El negocio fue que el padre de su socio Don Gaspar
Nazareno Martini compró el 45 % y ellos, es decir la sociedad de hecho entre la
compareciente y Miguel Angel Martini, compraron el restante 55 % consistente en
derechos y acciones de propiedad sobre 57,20 hectáreas. La operación se llevó a cabo
mediante Escritura Pública Nº 99 del 29/12/73, celebrada por ante el Escribano Jorge
Alfonso Passerini preindicado. Por iguales circunstancias y comportamientos culturales
que lo apuntado anteriormente, el inmueble fue también escriturado sólo a nombre de su
socio y concubino Miguel Angel Martini, y también así fue inscripto en el Registro
General de Propiedades –se halla inscrita al DOMINIO 13578, FOLIO 19988, TOMO
80, AÑO 1974-.- Remarca que tan floreciente era la explotación conjunta, que a fines de
los años ´60 e incluso durante toda la década del ´70, su explotación agropecuaria
manejaba un stock de cría para posterior venta, en forma permanente, de unos 850
animales entre bovinos, porcinos y caprinos (aproximadamente 150 vacas, 500 cerdos y
200 chivos), a lo que se agregaba, obviamente, tareas de siembra de cultivos, en esos
años trigo y maíz (la introducción del cultivo de soja en el país es posterior, al menos en
forma generalizada y más allá de algún intento precursor). Que ella permanentemente
aportaba su trabajo y el de su hijo a la explotación conjunta que tenían, a lo que debe
agregarse que incluso, como ella era única hija, sus padres, que tenían también una
porción de campo, habitualmente le regalaban dinero de su explotación, y ella lo
volcaba en la sociedad de hecho que relata. Aportes económicos que, sin perjuicio de
los habituales y permanentes aportes en trabajo que efectuaba, que se incrementaron
luego de la muerte de sus padres, con todo lo que le redituaba la producción del campo
de los mismos y que ella recibió íntegramente como única heredera. Ese capital que
habían formado en la sociedad de hecho debió ser conservado de las diversas crisis
económicas acaecidas en el país desde la década de 1980 en adelante, que les llevó en
algunas oportunidades a vivir situaciones de ausencia de rentabilidad de su explotación
y también de contraimiento de deudas, y que gracias a los aportes dinerarios que ella
hacía pudieron evitar vender partes de los inmuebles rurales que habían comprado pues
podían pagar esas deudas con tales aportes (su inmueble propio, heredado de sus padres,
consiste en la cantidad de 42 has, y los heredó en 1982 el 50 % y en 1988 el otro 50 %).
Es decir, su aporte fue esencialmente de trabajo, pero también de capital para sostener y
conservar lo que habían adquirido.Al margen de lo expuesto, si bien nunca se casaron
con su socio Miguel Angel Martini, la relación concubinaria que tuvieron siempre fue
excelente, siendo un verdadero matrimonio, aunque no se hubiesen casado legalmente.Agrega que no todas las épocas fueron florecientes, sino que hubo algunas,
bastante después de la época en que compraron las dos propiedades inmuebles relatadas,
que fueron francamente desastrosas desde el punto de vista económico, entre ellas la
primera parte de la década del ´80, la época de la hiperinflación de finales de la década
de los ´80, la terrible experiencia de la convertibilidad –que hizo que decenas de miles
de productores agropecuarios desaparecieran-. En tales circunstancias de verdadero
quebranto de la producción que llevaban a cabo, ya que la rentabilidad directamente no
existía sino que a veces se trabajaba a pérdida, hubo períodos en que se endeudaron con
diversos acreedores, entre ellos con entidades bancarias. De tales circunstancias
embarazosas pudieron salir, en primer lugar con mucho sacrificio laborativo de ambos
socios, y en segundo lugar abonando, a duras penas y con mucho esfuerzo, las
obligaciones que habían contraído. Para abonar dichas deudas, como eran de la sociedad
de hecho y por ende correspondía soportarlas por ambos socios, no solamente vendieron
los planteles bovinos y porcinos, sino que además, en el caso particular de la
compareciente, aportó dinero de la renta del campo que heredó de sus padres. Que no
sólo la sociedad de hecho estaba constituida para disfrutar los buenos momentos
económicos, sino también, obvia y naturalmente, para soportar conjuntamente las
pérdidas y las deudas. Siempre operaron con una affectio societatis indestructible.A
posteriori, y ya en el nuevo siglo, siguiendo los pasos de la reconvención general del
sector agropecuario, empezaron a destinar el campo al cultivo de soja, si bien aún
conservaban algunos animales. Además, a fines del año 2007 decidieron ir a vivir al
pueblo, para lo cual compraron una casa, que según título se detalla como “Fracción de
terreno que es parte del solar “H” de la Quinta Treinta ubicado en Cruz Alta, pedanía
del mismo nombre, departamento Marcos Juárez, provincia de Córdoba que mide:
Catorce metros cincuenta centímetros de frente al Sur por Treinta y nueve metros de
fondo, encerrando una superficie de QUINIENTO SESENTA Y CINCO METROS
CINCUENTA DECÍMETROS CUADRADOS y linda: al Norte con mas terreno del
solar H; al Este con terreno de la misma Quinta de Elena Josset de Gorostegui; al Oeste,
con solar G y al Sur, con calle Moreno”. Dicha casa fue escriturada e inscripta
registralmente a su nombre, si bien fue también comprada con recursos de la sociedad
de hecho denunciada. El hecho que fuera puesta sólo a su nombre es porque su
concubino y socio había aplacado sus rasgos culturales precitados, y en esas nuevas
circunstancias existenciales y culturales entendía razonable que, si total era de la
sociedad de hecho, la casa figurara a su nombre, porque él también estaba haciendo
figurar a su nombre bienes inmuebles que también eran de la sociedad. Ultimamente
compraron una camioneta Dominio ELZ-434 y que fue inscrita únicamente a su
nombre, pero que también era de la sociedad de hecho.---------------------------------------Manifiesta que lamentablemente la sociedad de hecho concluyó por el
fallecimiento de su socio y concubino Miguel Angel Martini el día 3 de diciembre de
2009. Que los inmuebles quedados son de la sociedad de hecho, y producto del esfuerzo
común, el ahorro común y la affectio societatis con que llevaron a cabo esa sociedad.Por
ser los bienes inmuebles detallados de la sociedad de hecho, ante la muerte de su socio
está detentando la posesión de los mismos, encontrándose los inmuebles rurales
actualmente alquilados a terceras personas.Por todo lo expuesto es que viene a reclamar
judicialmente que, previa declaración de la existencia de la sociedad de hecho que
constituyó con el señor Miguel Angel Martini, se declare judicialmente la disolución de
la misma y se proceda a su liquidación; ordenándose las publicaciones que corresponda
y su correspondiente liquidación por el procedimiento de ley y con todos sus efectos
legales, distribuyéndose los bienes y ganancias quedados a la finiquitación de la misma
en una proporción del cincuenta por ciento (50 %) para la compareciente en su carácter
de socia y el restante 50 % para la sucesora del otro socio, el fallecido Miguel Angel
Martini. Subsidiariamente, y para el caso de que se pretendiera sentenciar que la
sociedad de hecho denunciada no existió, y por ende que tampoco correspondería su
liquidación y que por ende no correspondería distribuirse a su favor en la proporción
indicada los bienes y ganancias de la misma, demanda que se reconozca judicialmente
su participación en condominio con Miguel Ángel Martini -existencia de un condominio
con interposición de personas-, en una proporción de derechos y acciones de propiedad
indivisos del cincuenta por ciento (50 %), en cada uno de los bienes inmuebles que,
escriturados e inscriptos registralmente a nombre dela misma y por lo tanto y como
efecto que se inscriban a nombre de ambos, es decir de la compareciente el 50 % y de la
sucesión y/o su heredera el restante 50 %, y/o que se ordene su partición en dichas
proporciones. Hace reserva del Caso Federal, para la eventualidad de que en la litis se
configurara una cuestión del rubro, y en mérito de ella debiera recurrir a la vía
extraordinaria federal.------------------------------------------------------------------------------A fs. 18/18bis comparece el Dr. Daniel Elvio Lucangeli, apoderado de la
accionante, ampliando la demanda y/o a aclarar los términos de la misma, ya que en su
redacción se cometió un error involuntario.En efecto, al denunciar los bienes integrantes
de la sociedad de hecho denunciada, se consignó como existente en cabeza de la misma
una propiedad inmueble que se detalla a fs. 2vta./3 como “una porción de campo
equivalente a derechos y acciones de propiedad sobre Veintiuna hectáreas novecientos
veinticinco metros cuadrados (21,0925 has.), que en la escritura de adquisición se
detallan como “derechos y acciones equivalentes a la mitad indivisa que tiene y le
corresponden sobre el siguiente inmueble: una fracción de campo formada por la
concesión A. del lote noventa y ocho del plano de la Colonia Juárez Celman, pedanía
Cruz Alta, departamento Marcos Juárez, provincia de Córdoba, compuesta de una
superficie de CUARENTA Y DOS HECTAREAS, UN MIL OCHOCIENTOS
CINCUENTA METROS CUADRADOS; y que linda: al Norte, calle de por medio, con
el lote sesenta y tres; al Este, con la concesión letra C. del mismo lote noventa y ocho; al
Sud, con la concesión D. del lote noventa y ocho; y al Oeste, calle de por medio, con
parte del lote noventa y siete, todos de la expresada Colonia Juárez Celman”. Tal
escritura es la Escritura Pública Nº 159, del 23/10/70, labrada por ante el Escribano
Jorge Alfonso Passerini, Titular del Registro Notarial Nº 462 de Cruz Alta que fue
inscripto en el Registro General de Propiedades –se halla inscripta al DOMINIO 22593,
FOLIO 34225, TOMO 137, AÑO 1970-“; pero por error involuntario en la demanda no
se consignó que dicho bien fue luego vendido, aproximadamente entre mediados y
finales de la década de los ´70, y por tanto no integra actualmente, ni al momento de la
disolución de la sociedad de hecho por causa del fallecimiento de Miguel Angel
Martini, ni al momento de radicarse la demanda, los bienes de la misma.En
consecuencia deberá ser tenerse por ampliada la demanda y/o aclarados sus términos, y
en consecuencia tenidos como bienes inmuebles de la sociedad de hecho de la cual se
pide su disolución y liquidación, y se formula la petición subsidiaria, el indicado a fs.
3vta./4 (DOMINIO Nº 13578, FOLIO Nº 19988, TOMO Nº 80, AÑO 1974) y el de fs. 4
vta. (inmueble urbano).-----------------------------------------------------------------------------II.- A fs. 19 el Tribunal imprime a la presente causa el trámite de ley. A fs. 22
comparece la Sra. Alicia Josefa Martini, sucesora del Sr. Miguel Ángel Martini, y a fs.
74/84 contesta la demanda entablada en su contra solicitando su rechazo con costas.Afirma ab initio la inexistencia de sociedad de hecho entre su hermano Miguel Ángel
MARTINI y la actora Elsa Elida CRAVERO, al igual que afirma la inexistencia de un
condominio entre la actora y Miguel Ángel Martini; la inexistencia de participación
alguna por interposición de persona en ninguna proporción de derechos y acciones de
propiedad indivisos. Niega categóricamente todos y cada uno de los hechos invocados
por la accionante en su artificiosa y mendaz demanda, debiendo en consecuencia tenerse
por ciertos tan solo aquellos que fueren motivo de expreso reconocimiento de su parte y
por negados todos los demás.La simple lectura del líbelo de la actora permite inferir que
acciona con evidente malicia, de modo ilegítimo e ilícito, con conocimiento pleno de su
carencia de derecho alguno en su contra o sobre los bienes de su extinto hermano,
invocando un vínculo societario de hecho que jamás existió. Es evidente también que la
actora trata de valerse del estado de indefensión de Miguel Ángel Martini, habiendo
esperado que ocurriese su fallecimiento para tratar de obtener alguna parte de su acervo
hereditario, porque de hallarse en vida su hermano habría repelido personal y
enérgicamente tal ilícito accionar de su concubina.El permanente y fluido trato familiar
que siempre mantuvo con su hermano Miguel Ángel y mientras vivió mantuvieron entre
ambos con supadre Gaspar Nazareno Martini, le autorizan afirmar y reiterar que nunca
existió sociedad de hecho alguna entre Elsa Elida CRAVERO y Miguel Ángel Martini,
ni tampoco existieron bienes de ninguna naturaleza en condominio entre ellos.- Afirma
que la señora Elsa Elida nunca realizó aportes patrimoniales a la actividad agropecuaria
y patrimonial que realizaba en vida su extinto hermano Miguel Angel MARTINI, quién
actuó siempre en forma personal, individual y sin ninguna clase de sociedad con la
actora, siendo esta la única realidad. La evolución patrimonial de su hermano se
produce en el marco de la estrecha relación familiar mantenida con su padre y con ella,
en la que ninguna participación le cupo a la su concubina, hoy demandante de su
sucesión. De aquella relación paterno filial con Gaspar Nazareno MARTINI surgió la
adquisición de las fracciones de campo existentes en el acervo hereditario de su
hermano Miguel Ángel MARTINI. La manera en que cronológicamente se sucedieron
los acontecimientos familiares y patrimoniales en su familia ha de echar por tierra las
mendaces expresiones de la demandante, quien pretende engañar mediante relatos falsos
y tergiversación de hechos y acontecimientos.En efecto, legítimamente le pertenece la
totalidad del acervo hereditario de su extinto hermano, en razón de ser su única y
universal heredera, declarada tal tras un debido proceso legal mediante Auto Nº 247 de
fecha veintiocho de junio de dos mil diez, que obra a fs. 33 a 34 de los caratulados:
“MARTINI, Miguel Angel - Declaratoria de Herederos” (Expte.: Letra "M" - Nº 10 Año 2010), tramitados por ante este mismo Tribunal. Que existe evidente mala fe en la
actora al peticionar que se declare judicialmente la existencia de una sociedad de hecho
con el señor Miguel Angel Martini, sabiendo perfectamente que jamás existió tal
sociedad y que ella no efectuó ningún aporte personal ni material para ello y que
tampoco corresponde una declaración judicial de disolución de aquello que nunca se
constituyó.- Señala que miente la actora al expresar que por el fallecimiento de Miguel
Angel Martini acaecido el 3 de diciembre de 2009 se produjo la disolución de la
sociedad de hecho que falsamente denuncia. No existe sociedad de hecho y no
corresponde liquidación alguna, ni distribución de ninguna naturaleza ni proporción. No
existe en la actora el carácter de socia del fallecido Miguel Angel Martini. Nunca existió
participación alguna en condominio de la actora con Miguel Ángel Martini de ninguna
naturaleza ni proporción; por lo que ningún reconocimiento en tal sentido puede
válidamente pretender la demandante.Todos los bienes inmuebles que conforman el
acervo hereditario de su hermano Miguel Angel Martini, de quien fue declarada
judicialmente única y universal heredera, se hallan escriturados e inscriptos
registralmente a nombre del mismo porque así corresponder a la realidad histórica de su
adquisición, en la que ninguna participación le cupo a la actora.Por ello ningún derecho
le asiste a la actora sobre las fracciones inmuebles rurales, al igual que tampoco le asiste
derecho alguno sobre los bienes muebles, frutos y productos quedados al fallecer su
querido hermano.- Reitera y afirma una vez más, que ningún aporte para la compra de
bienes efectuadas en vida por Miguel Angel MARTINI realizó su concubina Elsa Elida
CRAVERO.La inexistencia de sociedad alguna con la actora también se desprende de la
posición tributaria e impositiva que revistió siempre su extinto hermano Miguel Angel,
desde su inscripción ante la AFIP y D.G.I. hasta en día de su muerte. Niega que en el
año 1964 al mismo tiempo que la actora comenzó a vivir en aparente matrimonio con
Miguel Angel Martini haya constituido con el mismo una sociedad de hecho. Lo único
cierto es que la actora y Miguel Angel Martini vivieron en concubinato en el campo de
su padre don Gaspar Nazareno MARTINI, pero no es cierto que allí la actora se
dedicara a la cría de animales para su venta a terceros, entre ellos vacunos y cerdos. No
es cierto y niega que ambos hacían las tareas rurales y de cría de animales
personalmente. Afirma que la concubina de su hermano nunca realizó las tareas rurales
a diario lo hacía su hermano Miguel Angel. No es cierto y niega que con el tiempo
empezara a trabajar un hijo nacido de un matrimonio anterior de la actora. Es cierto que
Roberto Oscar CANTONI, soltero, hoy de 56 años de edad- vivió con su madre en el
mismo lugar en que aquella convivió con su concubino Miguel Angel MARTINI, pero
solo eso es verdad. No es cierto y niegaque el hijo de la actora haya sido un trabajador
habitual desde aproximadamente 1967.Roberto Oscar CANTONI nunca tuvo apego por
el trabajo en ninguna de sus formas. No es cierto y niega que el trabajo del hijo de la
actora, si alguna vez existió, haya sido un aporte a una sociedad de hecho. No es cierto y
niega que al mismo no se le pagara sueldo y
que sus gastos para vivir fueran
proporcionados por la actora. No es cierto y niega la existencia de una sociedad de
hecho entre la actora y su hermano con objeto de realización de producción
especialmente pecuaria, de animales vacunos y cerdos, para su venta a terceros. No es
cierto y niega la existencia de una explotación conjunta. No es cierto y niega que en el
año 1970, específicamente el 23 de octubre de 1970, la actora haya tenido algo que ver
con la compra de una fracción de campo equivalente a derechos y acciones sobre
veintiuna hectáreas novecientos veinticinco metros cuadrados (21,0925 has.), que en la
escritura de adquisición se detallan como “derechos y acciones equivalentes a la mitad
indivisa que tiene y le corresponden sobre el siguiente inmueble: una fracción de campo
formada por la concesión A. del lote noventa y ocho del plano de la Colonia Juárez
Celman, pedanía Cruz Alta, departamento Marcos Juárez, provincia de Córdoba,
compuesta de una superficie de CUARENTA Y DOS HECTÁREAS, UN MIL
OCHOCIENTOS CINCUENTA METROS CUADRADOS; y que linda: al Norte, calle
de por medio, con el lote sesenta y tres: al Este, con la concesión letra C. del mismo lote
noventa y ocho; al Sud, con la concesión D. del lote noventa y ocho; y al Oeste, calle de
por medio, con parte del lote noventa y siete, todos de la expresada Colonia Juárez
Celman”.- Afirma que las fracciones de campo adquiridas y también las vendidas por su
hermano lo fueron siempre con la intervención de su padre don Gaspar Nazareno
Martini, en el marco de la una estrecha y estricta relación familiar, iniciada con la
explotación agropecuaria conjunta de la Familia Martini a través de su padre.
Explotación que efectuó su padre con su hermano Miguel Angel y la colaboración de la
suscripta; negocios en los cuales nunca intervinieron ni participaron la concubina de su
hermano Elsa Elida Cravero, ni personal ni materialmente. No es cierto y niega que
Miguel Angel Martini y la actora hayan sido socios. La actora nunca tuvo injerencia en
los negocios de su hermano Miguel Angel ni en su dirección.- Insiste que no es cierto y
niega que entre Miguel Angel Martini y la actora haya existido una relación asimétrica
desde el punto de vista de la relación afectiva y convivencial establecida por el
concubino con la actora. No es cierto y niega que Miguel Angel Martini tuviera rasgos
de entender superior o prevaleciente el sexo masculino respecto del femenino, que fuera
-pauta cultural características de su explotación-, ni que adujese nada de lo
mendazmente expresado por la actora. No es cierto y niega que existiera una situación y
ambiente de total confianza recíproca a mérito de la vida en común. No es cierto y niega
que existiera dependencia moral de la actora. Miguel Angel Martini nunca fue su socio.
No es cierto y niega que por un elemento convivencial el inmueble fue escriturado sólo
a nombre del mismo. Las fracciones de campo correspondientes a Miguel Ángel Martini
fueron escrituradas siempre respetando la realidad de los hechos y circunstancias de
cada momento histórico, en los que ninguna participación le cupo a la actora. No es
cierto y niega que la actora haya producido o tenido alguna explotación con Miguel
Angel MARTINI en la década del ´70, como tampoco la tuvo antes ni después. No es
cierto y niega que en el año 1973, específicamente el 29 de diciembre de 1973, la actora
haya comprado algo junto a Miguel Angel MARTINI. Afirma que la actora nada tuvo
que ver y ninguna participación de ninguna naturaleza le cupo en la compra de las
fracciones de campo que se describen como “a) Una fracción de terreno con todo lo
edificado, clavado y plantado y además adherido al suelo, comprendida en el lote
sesenta y cuatro de la Colonia Juárez Celman, Pedanía Cruz Alta, Departamento Marcos
Juárez, de esta Provincia de Córdoba, la que mide según el plano particular del
topógrafo nacional don Conrado L. Vicario agregado a la escritura de su adquisición por
el causante, en el costado Sur setecientos setenta y cuatro metros, treinta centímetros; en
el costado Oeste mil seiscientos sesenta y dos metros, sesenta y ocho centímetros; en el
lado Este mil trescientos metros cincuenta centímetros; y en el costado Norte, a partir
del extremo Nor-Este de dicho lote hacia el Oeste, setecientos setenta y tres metros dos
centímetros, continuando luego una poligonal sobre el Río Tercero, cerrando la figura,
lo que hace una superficie total de CIEN HECTÁREAS, TREINTA AÉREAS,
CINCUENTA Y SEIS CENTIAREAS, lindando: Al Norte, en parte con el Río Tercero
y en parte, camino de por medio, con el lote cincuenta y siete; al Este, camino de por
medio, con el lote sesenta y tres; al Sud, camino de por medio, con el lote noventa y
siete; y al Oeste, con mas terreno del lote sesenta y cuatro adjudicado a Evaristo Juan
Valvesón (según realidad y plano citado el lado Oeste mide 1.272,68 metros). b) Una
fracción de campo con todo lo edificado, clavado, plantado y demás adherido al suelo,
ubicado en la concesión C. del lote número cincuenta y siete de la Colonia Juárez
Celman, Pedanía Cruz Alta. Departamento Marcos Juárez, de esta Provincia de
Córdoba, midiendo según el plano particular del topógrafo nacional don Conrado L.
Victorio agregado a la escritura de su adquisición por el causante a que ya se hiciera
referencia en el inmueble anterior, en el costado Sur seiscientos veinte y seis metros
siete centímetros; en el lado Este ciento veinte y cuatro metros; y al costado Norte y
Oeste lo forma una poligonal sobre el Río Tercero, encerrando una superficie de TRES
HECTÁREAS, SESENTA Y TRES ÁREAS, SESENTA Y NUEVE CENTIÁREAS,
lindando: al Norte y Oeste, con el Río Tercero; al Este, calle de por medio, con la
concesión d. del lote número cincuenta y ocho; y al Sud, camino de por medio, con
parte del lote sesenta y cuatro”. Operación que en efecto se llevó a cabo mediante
Escritura Pública Nº 99 del 29/12/1973, celebrada por ante el Escribano Jorge Alfonso
Passerini y que se halla inscrita en el Registro General de Propiedades al DOMINIO N°
13578, FOLIO 19988, TOMO 80, AÑO 1974. No es cierto y niega que el negocio haya
sido realizado como maliciosa y mendazmente lo describe la actora.En forma reiterativa
la actora inventa y tergiversa hechos y circunstancias, con absoluta mala fe, intentando
con ello hacer parecer que algo tuvo que ver con los negocios de su hermano Miguel
Angel. No es cierto y niega que una sociedad de hecho entre la actora y Miguel Angel
Martini comprara el 55 % consistente en derechos y acciones de propiedad sobre 57,20
hectáreas. Lo cierto es que las dos fracciones, una de CIEN HECTÁREAS, TREINTA
AÉREAS, CINCUENTA Y SEIS CENTIÁREAS y otra de TRES HECTÁREAS,
SESENTA Y TRES ÁREAS, SESENTA Y NUEVE CENTIÁREAS de superficie
descriptas por la actora en su demanda, fueron compradas por su padre Gaspar
Nazareno MARTINI y su hermano Miguel Angel MARTINI en condominio, con el
producto la venta de las CUARENTA Y DOS HECTÁREAS, UN MIL
OCHOCIENTOS CINCUENTA METROS CUADRADOS que poseían ambos,
también en condominio, y que en el mismo momento efectuaron mediante Escritura
Pública Nº 100 del 29/12/73 labrada por el Escribano Jorge Alfonso Passerini e inscrita
en el Registro General de Propiedades al DOMINIO N° 5016, FOLIO 7636, TOMO 31,
AÑO 1974. Aplicaron también para tal operación el resultante de la venta de los frutos y
productos agropecuarios obtenidos de las explotaciones en conjunto por su padre y su
hermano de ese mismo campo de 104 has. y fracción, de las 42 Has. y de mayor
cantidad de tierra que arrendaban a la familia VALVESON. Y que ninguna injerencia
ni participación tuvo en estos negocios la concubina de su hermano Miguel Angel
MARTINI, quien nunca aportó dinero, ni bienes ni trabajo personal. No es cierto y
niega que la actora haya tenido alguna explotación agropecuaria conjunta con Miguel
Angel Martini que a fines de los años ’60 e incluso durante toda la década del ´70
manejara un stock de cría para posterior venta, en forma permanente, de unos 850
animales entre bovinos, porcinos y caprinos (aproximadamente 150 vacas, 500 cerdos y
200 chivos) y que se agregaran tareas de siembra de cultivos de trigo y maíz. Lo
expresado por ella además de falso es malicioso. No es cierto que la actora haya
aportado permanentemente su trabajo y el de su hijo a la explotación de Miguel Angel
Martini. No es cierto y niega que a la actora sus padres habitualmente le regalaban
dinero de su explotación. No es cierto y niega que la actora colocara dinero en la
explotación agropecuaria de Miguel Angel Martini. No es cierto y niega una vez más
que la actora haya efectuado aportes económicos o de trabajo
a la explotación
agropecuaria de Miguel Angel Martini. No es cierto y niega que luego de la muerte de
los padres de la actora, aquella haya efectuado algún aporte de todo lo que le redituaba
la producción del campo de los mismos No es cierto y niega que la actora haya formado
un capital de explotación con Miguel Angel Martini que llevara en algunas
oportunidades a vivir situaciones de ausencia de rentabilidad y también de
contraimiento de deudas. Las deudas contraídas por su hermano fueron siempre
personales e individuales y nunca participó de ellas la actora. No es cierto y niega que la
actora haya efectuado aportes dinerarios para pagar deudas contraídas por Miguel Angel
Martini en las diversas crisis económicas acaecidas en el país desde la década de 1980
en adelante. No es cierto y niega que la actora haya efectuado aportes de trabajo y
también de capital (inmueble propio, heredado de sus padres) para sostener y conservar
algo del patrimonio personal de Miguel Angel Martini. Todo lo contrario,lo describe,
fue la suscripta quien siempre ayudó y apoyó económicamente a Miguel Angel Martini
en las épocas en que contrajo deudas, garantizando realmente con su propio patrimonio
y con el campo que poseían en condominio un crédito con garantía hipotecaria (Cédulas
Hipotecarias) otorgado a su hermano por el Banco de la Nación Argentina, para superar
su abultado endeudamiento. Afirma que Elsa Elida Cravero nunca efectuó aportes
patrimoniales a la explotación agropecuaria de su hermano Miguel Ángel, y que lo
único que compartió con el fue su compañía de concubina, y nunca prestó su garantía
personal ni real en las épocas en que la explotación de su hermano lo necesitó para
afrontar el pago de deudas contraídas. No es cierto y niega que la relación concubinaria
que tuvo la actora con Miguel Angel Martini, siempre fue excelente. No es cierto y
niega que fuera un verdadero matrimonio, aunque no se hubiesen casado legalmente. No
es cierto y niega una vez que una sociedad de hecho entre la actora y Miguel Angel
Martini comprara las dos propiedades inmuebles relatadas por la actora. No es cierto y
niega que haya habido períodos desastrosos desde el punto de vista económico para la
actora. No es cierto y niegaque la actora haya llevado a cabo con Miguel Angel Martini
producción alguna. No es cierto y niegaque en algún momento la actora se haya
endeudado con diversos acreedores de Miguel Angel Martini y con entidades bancarias.
No es cierto y niega que la actora haya realizado mucho sacrificio laborativo. Afirma
que nunca fue socia de Miguel Angel Martini ni contrajo obligaciones, ni deudas
relacionadas con la explotación agropecuaria de su hermano; ningún quebranto llevó a
cabo la misma; ni trabajó a pérdida. No es cierto y niega que existieran deudas de una
sociedad de hecho entre la actora y su hermano, porque nunca existió tal sociedad, que
inventó la actora,
tampoco existieron socios. No es cierto y niega que existiesen
planteles bovinos y porcinos en que la actora tuviese alguna participación. No es cierto
y niega que la actora haya aportado dinero de la renta de un campo que heredó de sus
padres. No es cierto y niegaque la actora y su hermano hayan constituido una sociedad
para disfrutar de los buenos momentos económicos y para soportar conjuntamente las
pérdidas y las deudas. No es cierto y niega que entre la actora y Miguel Angel Martini
operara una affectio societatis indestructible. Afirma que jamás existió entre los
concubinos ni el más mínimo atisbo de affectio societatis. No es cierto y
niegaparticipación alguna de la actora en la reconvención general del sector
agropecuario. No es cierto y niega que la actora haya tenido algo que ver con el destino
del cultivo de soja dado por su hermano Miguel Angel al campo, o que pertenecieran a
la actora algunos de sus animales. Es cierto que a fines del año 2007 su hermano decidió
ir a vivir al pueblo, pero solo hasta allí verdad. Desconoce por no constarle, que una
casa, que según título se detalla como “Fracción de terreno que es parte del solar “H” de
la Quinta Treinta ubicado en Cruz Alta, pedanía del mismo nombre, departamento
Marcos Juárez, provincia de Córdoba que mide: Catorce metros cincuenta centímetros
de frente al Sur por Treinta y nueve metros de fondo, encerrando una superficie de
QUINIENTOS SESENTA Y CINCO METROS CINCUENTA DECÍMETROS
CUADRADOS y linda: al Norte con mas terreno del solar H; al Este con terreno de la
misma Quinta de Elena Josset de Gorostegui; al Oeste, con solar G y al Sur, con calle
Moreno” y está escriturada e inscripta registralmente a nombre de la actora, haya sido
comprada con recursos de una sociedad de hecho que la misma denuncia en su
artificiosa demanda. Desconoce por no constarle, que el inmueble de mención haya sido
puesto sólo a nombre de la actora por alguna razón. No es cierto y niega que su
concubino aplacara rasgos culturales que maliciosamente y de mala fe le atribuye la
actora, a sabiendas que su buen y querido hermano no podrá defenderse ni replicarle.
No es cierto y niega nuevas circunstancias existenciales y culturales que alega la
actora.- Insiste que no es cierto y niega que Miguel Angel Martini entendiese razonable
que, si total era de la sociedad de hecho, la casa figurara a nombre de la actora. No es
cierto y niega que Miguel Angel Martini estuviera haciendo figurar a su nombre bienes
inmuebles que eran de una sociedad. No es cierto y niega que la actora haya tenido
alguna participación o aporte en la compra de la camioneta Dominio ELZ-434. No es
cierto y niega que la camioneta Dominio ELZ-434 fuera de una sociedad de hecho.
Afirma que la camioneta de mención, marca Chevrolet, modelo 321 – S10 2.8 DLX T.I.
(CABINA DOBLE) año 2004, pertenecía al momento de su muerte a su hermano
Miguel Angel Martini, por compra que el mismo realizó en vida, en su condición de
soltero, el 14/07/209, siendo el 100% de su exclusiva titularidad; al igual que afirma que
para adquirir esta última dispuso la venta otra pick-up marca Chevrolet, que tenía hasta
ese momento, modelo 44 – CONQUEST TURBO PLUS/1996, Dominio AYQ947, que
fue vendida a la señora Clelia Ramona BENITEZ. No es cierto y niega que por el
fallecimiento de Miguel Angel Martini, el día 3 de diciembre de 2009, haya concluido
alguna sociedad de hecho.- Señala que es lamentable que la actora, valiéndose de la
muerte de su hermano, ofenda su memoria con peyorativas descripciones sobre su
personalidad y conducta, y pretenda ir más allá de la relación concubinaria que
mantenían, aprovechándose del estado de indefensión que la desaparición física de una
persona trae aparejada, mintiendo alevosamente y tratando de engañar a sobre una
inexistente sociedad de hecho. Afirma que los inmuebles rurales quedados al
fallecimiento de su hermano Miguel Angel Martini nunca pertenecieron a ninguna
sociedad. Afirma una vez más la inexistencia de esfuerzo en común, ahorro en común y
affectio societatis entre la actora y su extinto y querido hermano Miguel Angel Martini.
No es cierto y niega que la actora esté detentando la posesión de los inmuebles rurales
descriptos supra. Los hechos inventados por la actora y las innumerables falsedades en
su relato hacen que se hallen ante un fraude procesal en grado de tentativa, ya que se
pretende atribuir a una persona fallecida actos y hechos inexistentes y falsos para
obtener de ello un beneficio patrimonial indebido. Los hechos y circunstancias
verdaderos sobre la evolución patrimonial de su hermano Miguel Angel MARTINI,
cuya historia se halla estrechamente ligada a la suscripta y a su “Familia”, es la
siguiente: en el año 1938 (17/09/1938) se casan sus padres Gaspar Nazareno MARTINI
y María Luisa SCARPETTA.En el año 1940 su padre y su hermano llamado José
Enrique Martini comienzan a trabajar en sociedad, haciéndolo ambos en el campo
durante diez años.En el año 1948 su padre Gaspar Nazareno Martini y su hermano José
Enrique Martini compran en condominio de iguales partes a los señores Luis FORAY y
otros, mediante escritura N° 112 de fecha 20/09/1948 labrada por el escribano Gustavo
H. Martínez Recabarren, una fracción de 42 HAS. 1.850 MTS.2, que se describen como
“Una fracción de campo con todo lo edificado, clavado y plantado, formada por la
concesión A. del lote noventa y ocho del plano de la Colonia Juárez Celman, pedanía
Cruz Alta, departamento Marcos Juárez, provincia de Córdoba, compuesta de una
superficie
de
CUARENTA
Y
DOS
HECTAREAS,
MIL
OCHOCIENTOS
CINCUENTA METROS CUADRADOS; y que linda: Al Norte, calle de por medio,
con el lote sesenta y tres; al Este, con la concesión letra C. del mismo lote noventa y
ocho; al Sud, con la concesión D. del lote noventa y ocho; y al Oeste, calle de por
medio, con parte del lote noventa y siete, todos de la expresada Colonia Juárez
Celman.” Que en ese mismo año alquilan a Guillermo VALVESON una fracción de
campo cercana a la adquirida y allí fuimos a vivir todos, en esa propiedad rural, ella
tenía solo 5 años y su hermano Miguel Angel 9 años de edad. En el año 1950, tras el
fracaso de las cosechas, su tío José Enrique Martini se retira del campo para radicarse
en el pueblo de Cruz Alta y se reparten con su padre Gaspar Nazareno Martini en
mitades el capital de explotación, es decir los bienes muebles y animales que poseían en
sociedad, entregándole su padre el cincuenta por ciento a su hermano y quedándose en
el campo en pésima situación económica, sin dinero para pagar empleados; que
comenzaron con su hermano a colaborar con su padre en las tareas del campo, yendo al
colegio medio día y el otro medio día boyereando los cerdos y vacunos.En el año 1954,
lograron comprar un tractor, porque la situación económica había mejorado en esos 4
años; ella con 11 años trabajaba en el campo con caballos y con el tractor, habiendo
aprendido junto a su padre y a su hermano Miguel Angel casi todas las tareas del
campo.En el año 1956 su padre Gaspar Nazareno Martini compra al señor Pedro
PIZZOLATO una fracción de campo de CUATRO HECTÁREAS, TRES AREAS Y
TREINTA Y OCHO CENTIAREAS, mediante escritura N° 31 de fecha 15/06/1956,
labrada por el escribano Jorge Alfonso Passerini; inscribiéndose el Dominio al N°
15.738, FOLIO 18.703, TOMO 75 del Año 1956,fracción que al fallecer su hermano
heredamos en condominio de iguales partes con su hermano.En el año 1959 con sus
padres emparvaban pasto y sacaban bolsas de maíz en espiga que luego se colocaban en
trojas; en ese tiempo tenía 15 años y esas tareas las realizaba porque su hermano estaba
afectado al servicio militar obligatorio, y ella debía continuar colaborando con sus
padres, siempre en absoluta armonía con su familia y con el solo afán de su bienestar.
En el año 1961 contrajo matrimonio con Nazareno PIRANI, el 14 de Enero de ese año,
teniendo ella 17 años.En el año 1970 con la ayuda de su padre y la anuencia como
hermana ya que su hermano no contaba con recursos propios suficientes, Miguel Angel
Martini compra a su tío José Enrique Martini la mitad indivisa de la facción de
CUARENTA Y DOS HECTÁREAS, UN MIL OCHOCIENTOS CINCUENTA
METROS CUADRADOS que poseía aquel en condominio con su padre; haciéndolo a
través de escritura N° 149 de fecha 23/10/1970, labrada por el escribano Jorge Alfonso
Passerini. En el año 1973 su padre Gaspar Nazareno Martini y su hermano Miguel
Angel venden a Ernesto Alejandro Zaniolo y Orlando Nazareno Zaniolo la facción de
CUARENTA Y DOS HECTÁREAS, UN MIL OCHOCIENTOS CINCUENTA
METROS CUADRADOS que poseía en condominio; haciéndolo a través de escritura
N° 100 de fecha 29/12/1973, labrada por el escribano Jorge Alfonso Passerini.
Concomitantemente en esa misma fecha (29/12/1973) su padre y su hermano Miguel
Angel compran a doña Lidia Iris VALVESON de FISSER y a doña Cleria Josefa
VALVESON de FRANCHINI en la proporción del 45% y 55% indiviso
respectivamente, dos fracciones de campo que anteriormente arrendaban sobre el lote
N° 64 de la Colonia Juárez Celman, pedanía Cruz Alta, departamento Marcos Juárez,
con una superficie de 100 Has. 30 As. 46 Cas. la primera y la otra fracción ubicada en la
concesión c. del lote N° 57 de la misma Colonia, que encierra una superficie de 3 Has.
63 As. 69 Cas., aplicando para dicha compra lo obtenido por la venta de las 42 Has. y
fracción y dinero aportado por sus padres Gaspar Nazareno MARTINI y su madre
María Luisa SCARPETA producto de la explotación agropecuaria que en forma
familiar venían realizando. Acota que la actora Elsa Elida CRAVERO comenzó a
cohabitar con su hermano Miguel Angel en el año 1964, pero jamás realizó trabajos de
campo ni efectuó ningún aporte material ni de ninguna otra naturaleza o especie para el
negocio y explotación de su hermano Miguel Angel. Su hermano Miguel Angel realizó
siempre la actividad agropecuaria a nivel familiar junto con su padre Gaspar Nazareno
Martini, y tras su fallecimiento lo continuó haciendo en forma individual y personal
hasta su muerte, contando siempre con su ayuda y colaboración económica. En el año
1979 fallece su padre e iniciaron su sucesión; a su madre se le adjudica el usufructo
vitalicio sobre dos inmuebles urbanos; correspondiéndole a su hermano Miguel Angel
Martini el 50% indiviso sobre los inmuebles rurales que en la proporción del 45%
indiviso le correspondía a su padre por la compra efectuada a doña Lidia Iris
VALVESON de FISSER y a doña Cleria Josefa VALVESON de FRANCHINI de las
dos fracciones de campo identificadas como lote N° 64 de la Colonia Juárez Celman,
pedanía Cruz Alta, departamento Marcos Juárez, con una superficie de 100 Has. 30 As.
46 Cas. la primera y la otra fracción ubicada en la concesión c. del lote N° 57 de la
misma Colonia, que encierra una superficie de 3 Has. 63 As. 69 Cas., y el 50%
indiviso sobre la fracción de campo de CUATRO HECTÁREAS, TRES AREAS Y
TREINTA Y OCHO CENTIÁREAS, anteriormente citadas. En cuanto a su parte le
correspondió también el 50% indiviso sobre los mismos inmuebles rurales descriptos
supra. Que continuó siempre colaborando económicamente con su hermano Miguel
Angel tanto con los honorarios de la sucesión como con los gastos que demandó la
construcción de la nueva casa, galpones, silos y todo lo clavado y plantado en el predio
de 104 Has. y facción. También le cedió íntegramente para que pudiera evolucionar lo
producido por las hectáreas de campo que le correspondieron por herencia, y que
continuó trabajándolas y usufructuándolas su hermano; también le cedió la totalidad de
los animales vacunos y porcinos existente al momento del fallecimiento de su padre. En
el año 1995, tendiente a superar el endeudamiento de su hermano con la Cooperativa
Agrícola Ganadera Cruz Alta Limitada, se gestiona un crédito en el Banco de la Nación
Argentina, sucursal Los Surgentes, obteniendo Miguel Angel un préstamo de cédulas
hipotecarias rúales serie 3 para lo cual y como garantía real y su propia garantía. De
modo tal que fueron hipotecadas las tres fracciones que en condominio poseían con su
hermano, poniendo en riesgo lo que le correspondía, pero haciéndolo con gusto por
tratarse de su querido hermano y para que no tuviese que vender parte de su capital y
pudiera saldar la deuda. Ninguna participación tuvo en todo aquello la concubina de su
hermano. De lo precedentemente expuesto da cuenta la Escritura N° 163 labrada en
fecha 15 de diciembre de 1995 por el escribano público Carlos Italo RIVA en la
localidad de Monte Buey, que en fotocopia se acompaña. La señora CRAVERO
mantuvo una relación concubinaria de muchos años con Miguel Ángel MARTINI, que
comenzó aproximadamente a los dos años de ocurrido el fallecimiento de su cónyuge
CANTONI, con quien tuvo dos hijos, pero nunca formó con su hermano una sociedad.
Es que de por sí la relación de concubinato no hace surgir una sociedad de hecho, ni la
presunción de que exista, siendo preciso que se hayan producido real y efectivamente
aportes patrimoniales, jamás realizados por la actora. En el ámbito de las relaciones
extrapatrimoniales o concubinarias no resultan de aplicación los fundamentos de orden
público que sustentan el régimen de bienes del matrimonio, como la comunidad de
ganancias. Afirma que tras ser declarada única y universal heredera de su hermano y
conferírsele judicialmente la posesión de la herencia tiene el derecho de detentar la
misma.Asimismo, respecto de la porción correspondiente a su hermano sobre los
inmuebles rurales descriptos supra, con su anuencia, conformidad y consentimiento
fueron arrendados en vida por Miguel Angel a los señores Jorge Carlos BIZET,
Federico GINEVRÓ y Rodolfo Oscar ZANIOLO, en fecha 24 de mayo del año 2007,
por el plazo de cinco años, excluidas sus 25 HAS.; haciéndolo mediante CONTRATO
DE ARRENDAMIENTO AGRÍCOLA QUE EN COPIA adjunto con el presente.Que
en el contrato de arrendamiento de mención se excluyeron también expresamente de la
totalidad de las mejoras consistentes en una casa-habitación, galpones, silos, molinos,
aguadas, corrales, pista de engorde, instalación de electrificación rural, etc., todo lo cual
ocupa una superficie aproximada de Tres hectáreas, cincuenta áreas (3,50 Has.),
incluido el camino interno de acceso al camino público rural, quedando las mismas
reservadas para el uso excesivo y excluyente del arrendador durante toda la vigencia del
contrato. Que con respecto a ese predio y mejoras descriptas supra que perteneciera a su
hermano en condominio con la suscripta, el día 10 de febrero de 2010 celebró un
contrato de comodato con el señor Victoriano ROJAS y la señora Ernestina
CONTRERA; instrumento que también acompaña.Trascurrido el plazo establecido en el
contrato de comodato, sus comodatarios le restituyeron el inmueble desocupado,
juntamente con las llaves de la vivienda, hallándose actualmente todo aquello ocupado
por su hijo Daniel Lucio PIRANI, sobrino de su hermano Miguel Angel. Que no le
caben dudas que los hechos falsamente relatados en la demanda por la actora nunca
ocurrieron y que el reclamo judicial de declaración de existencia de una sociedad de
hecho entre la actora y su hermano Miguel Angel Martini, la disolución y liquidación
merecen un enérgico y total rechazo con expresa imposición.Idéntica suerte deberá
correr el planteo subsidiario de la actora de que se reconozca judicialmente la existencia
de un condominio con interposición de persona y una participación en condominio con
Miguel Angel Martini en una proporción de derechos y acciones sobre cada uno de los
bienes inmuebles escriturados e inscriptos registralmente a nombre del mismo.----------III.-Diligenciada la prueba ofrecida y firme el decreto de autos dictado a fs. 399
queda la presente causa en estado de ser resuelta.----------------------------------------------Y CONSIDERANDO:
I.- LaLitis.- La Sra. Elsa Elida Cravero impetra demanda en contra de la
sucesión del Sr. Miguel Ángel Martini y/o su heredera Alicia Josefa Martini de Pirani
para que previa declaración de la existencia de la sociedad de hecho que constituyó con
el Sr. Miguel Angel Martini, se declare judicialmente la disolución de la misma y se
proceda a su liquidación. Por otro costado, al comparecer la demandada, Sra. Alicia
Josefa Martini, contradice enfáticamente la acción entablada en su contra solicitando su
rechazo.-----------------------------------------------------------------------------------------------Queda de este modo planteada la cuestión a resolver.--------------------------------II.- La sociedad cuya liquidación se pretende en autos, debe ser previamente
considerada en su existencia, puesto que no se puede pensar la disolución si
primeramente no se dilucida su génesis. El ente ideal que se trata, se encuadra en el art.
21 de la L.S. (es una sociedad de hecho), quedando comprendida en consecuencia, para
su tratamiento, en la sección IV del título Primero de la Ley Societaria. En primer lugar
se evidencia la inexistencia de un contrato social constitutivo, por lo que en definitiva
habrá de estarse a las constancias probatorias, las que podrán ser suficientemente
convictivas en tanto los elementos aportados traduzcan en la realidad la presencia de
hechos concretos y certeros sobre la existencia efectiva del ente ideal.---------------------Sabido es que las sociedades de hecho, son aquellas que no tienen instrumentado
su contrato constitutivo, pero cumplen con una actividad mercantil, que se traduce en la
formación del capital con el aporte de cada uno de los integrantes, y la participación en
los beneficios y las pérdidas (Conf. NISSEN, Ricardo Augusto, “Sociedades irregulares
y de hecho”, Ed. Hammurabi, Bs.As., 2ª. Reimpresión, pág. 24.). Así se ha resuelto que
“La prueba de la sociedad de hecho, si bien se halla regida por un criterio de amplitud
respecto de los medios de acreditación, encuentra limitación en lo que atañe al rigor en
la valoración de los hechos y circunstancias probatorias. Por ello, la prueba del
contrato debe ser no sólo convincente e idónea, sino inequívoca y concluyente y, en
caso de ser negada la sociedad, la carga probatoria de su existencia recae
incuestionablemente en el actor” (C.Nac.Com. Sala C, 1/12/92, JA 1996-III).-------------
Autorizada doctrina societaria y concordante jurisprudencia sostiene que la
acreditación de la personalidad precaria de una sociedad de hecho, constituye una
circunstancia que puede analizarse desde cualquier medio de prueba -en lo que implica
una amplitud de criterio en el ofrecimiento- pero su apreciación debe ser rigurosa,
meritándose si de su conjunto surge un serio poder de convicción que autorice a admitir
la existencia de la misma, por las gravosas consecuencias que puedan derivar de su
reconocimiento. (Conf. Ricardo A. Nissen, Ley de Sociedades Comerciales, Tomo I,
pág. 141, Ed. Abaco).-------------------------------------------------------------------------------No se puede sustentar válidamente que el cumplimiento o incumplimiento de
una obligación determinada o indeterminada en su nomenjuris devenga en una sociedad
de hecho, ello por cuanto el medio societario comercial no puede fijarse en las reglas
comunes a los contratos de cambio donde existen prestaciones reciprocas entre las
partes, puesto que en los contratos de organización plurilateral, las obligaciones de los
socios están dirigidas al ente común distinto de todos ellos. De esta inteligencia surge
que la existencia de la sociedad entre la Sra. Elsa Nélida Cravero y el Sr. Miguel Ángel
Martini, negada por la sucesora de éste último -Sra. Alicia Josefa Martini- puede ser
probada por cualquier medio de prueba (art. 25 Código de Comercio), con sujeción a las
normas del derecho común conforme su “exposición de motivos”, de las que “...debe
tratarse de una prueba convincente e idónea, imponiéndose analizar las probanzas
aportadas a fin de apreciar si de su conjunto surge un serio poder de convicción que
autorice a admitir la existencia de una sociedad de hecho” (Conf. NISSEN,
“Sociedades irregulares...”,pág. 133).-----------------------------------------------------------III.- Corresponde en efecto, analizar el material probatorio acompañado en
autos. En primer lugar la accionante ha ofrecido numerosos testigos de los que destaco
los siguientes conceptos: a) el Sr. Orlando Nazareno Zaniolo, quien tenía amistad con
ambas partes, indica que desde que se juntaron (“sesenta y pico”)la Sra. Cravero le
ayudaba a su marido a realizar las tareas relacionadas con el campo, atender los
animales, específicamente cerdos, chivos, corderos, con las vacas a veces también
cuanto tenía trabajos que se hacen, por ejemplo separación de animales, atención de
terneritos, los cerdos, chivos, cuando los mataba, ella le ayudaba. El testigo refiere que
le supo comprar. “Desde el momento que se juntaron fue así, antes la mujer de campo se
sabe como era, significa que le ayudaba al marido a realizar todas las tareas
relacionadas con las tareas del campo.” Siempre la veía trabajando. De la personalidad
de Elsa Cravero señala que era una persona normal, muy abocada a su familia, estuvo
siempre junto con Miguel, piensa que lo debió haber atendido muy bien; que cuando
Miguel salía a trabajar ella estaba ahí, siempre en el campo, atendiendo las cosas de la
chacra. Que tenían aproximadamente 100 chivos, 200 o 300 chanchos y 100 vacas,
también corderos y pollos (200 aves) y cuando el Sr. Martini efectuaba trabajo para
terceros la Sra. Cravero con su hijo quedaban a cargo de la atención a los animales. Que
Elsa Cravero tiene campo de herencia de su padre, desde la década del 80 lo trabajaba
Martini hasta el 2007 (fs.137/138); b) el Sr. Rodolfo Oscar Zaniolo, preguntado con
quien arreglaron el arrendamiento del campo que la Sra. Cravero tendría a su nombre,
ello a partir de 2007, señala que se arregló con el Sr. Martini el valor del arrendamiento
y condiciones contractuales pero que el contrato se firmó con Elsa Cravero, que el Sr.
Martini le daba los insumos y el valor de los trabajos; que el Sr. Martini se dedicaba a la
agricultura, tenia cerdos y chivos en el campo donde vivía con Elsa Cravero; que Elsa
Cravero participaba en esas actividades, sabe que renegaba mucho con las heladas
cuando se levantaban temprano, con el tema de los chanchos con los calores; que el Sr.
Martini le ofreció al testigo el alquiler de todo el campo que estaba trabajado él y el de
Elsa Cravero (fs. 142/143); c) el Sr. Miguel Ángel Carrascal, amigo desde pequeños de
la actora y el Sr. Martini, quien refiere que las tareas que efectuaba la Sra. Cravero eran
las de ama de casa nomás, ya que nunca a vio hacer otras; que los animales que tenía
Martini eran para la venta a terceros; agrega que la accionante tiene campo propio
herencia de su padre el que era trabajado por Martini pero cuando lo dejó de laborear se
lo alquiló a Zaniolo (fs. 178/179); d) el Sr. Eduardo José Santiago Vecchi, amigo íntimo
de las partes, testifica que cuando Martini y Cravero se juntaron se fue a vivir con ellos
el hijo de ésta última; que Martini cosechaba en campo propio y cree que lo hacía
también en el campo de su suegro, es decir al padre de Elsa Cravero; que Roberto Oscar
Cantoni, hijo de Elsa, trabajaba con Martini como cualquier empleado rural; agrega que
Elsa realizaba tareas en el campo en los momentos en que Martini no estaba, es decir
cuando salía a enfardar, sembrar o cosechar; daba agua o comida a los animales,
“…hacía las tareas de la casa y también barrer el patio, atender las gallinas, como toda
mujer de campo.”, que Martini a partir de 1970 decidió criar cerdos “porque era
rentable, una chacra chica había que hacerla media mixta, es decir tener cereal, cerdos,
ovejas, vacas…” (fs. 180/181); e) la Sra. Fabiana Dolores Fiorelli, de profesión asesora
impositiva, depone señalando que la Sra. Elsa Cravero tenía registración y movimiento
impositivo desde el año 2007 o 2008, momento en el que hizo contrato de alquiler de un
campo de su propiedad con el Sr. Zaniolo para lo cual tuvo que inscribirse; adita que
cree que la actora tiene cuenta en la Coop. Agrícola Ganadera de Cruz Alta desde que se
inscribió impositivamente, pero que ella no operaba con ningún banco ya que carece de
documentación que avale dicho manejo (fs. 195/196); f) el Sr. Ricardo Pedro Stremiz
testimonia que la Sra. Cravero atendía los animales (comida, bebida y veía si había
alguno enfermo) cuando el Sr. Martini salía por ejemplo con la enfardadora y que
dichas tareas también las realizaba el nieto de Cravero, es decir, cuando estaban los
hombres las labores las realizaban ellos; refiere que nunca la vio sola trabajando; que la
veía a la Sra. Cravero haciendo los trabajos con los animales junto con el nieto y con el
Sr. Martini, que hace más de cuarenta años que vió esto. (fs. 203/204); g) la Sra. Susana
Celina Voirrer indica que la Sra. Cravero colaboraba con las tareas del campo haciendo
cosas lógicas de una casa de familia, también colaboraba con la vacunación de los
animales; que tenían muchos animales y vendían; que la veía en el corral cuando había
animales chiquitos darles la mamadera, darle agua a los cerdos y cuando una cordera o
una chiva abandonaba a sus crías, Elsa Cravero los alimentaba para darle vida y
salvarlos, sabe que también ordeñaba vacas. (fs. 206/208); similar apreciación en
relación al trabajo conjunto de Cravero y Martini, con los animales formulan los testigos
José Eduardo Juan (fs. 210/211) y Hugo Eduardo Juan (fs. 213/214); h) el Sr. Horacio
Adolfo Vidoret, vecino de las partes, señala que en el campo vivían ahí “el Loli y la
Mirta que eran los hijos de Elsa”; que Elsa hacía los trabajos de la casa y que los
animales que criaba algunos los comían y el resto se vendía; que Cravero sabía atender
a las chanchas cuando estaban pariendo (fs. 215/216); i) Jorge Antonio Martiñena la
vio a Elsa Cravero en el corral apartar animales de un corral a otro para venderlos,
castrarlos o vacunarlos, que ayudaba como lo hacen las mujeres de campo (fs. 208/209);
j) la Sra. Rosa Gómez Viuda de Frutero, amiga de ambas partes, indica que el Sr.
Martini y la Sra. Cravero trabajaban conjuntamente, el primero en el campo y la
segunda en tareas de cuidado de la casa y algunas como ordeñar vacas; que tenía vacas
y cerdos, siendo algunas vacas de propiedad del padre de Elsa, pero los cerdos en su
mayoría eran de Miguel, mientras que los chivos los iban comprando juntos, teniendo
conocimiento de ello la testigo en virtud de los propios comentarios del Sr. Martini;
agrega que “en una oportunidad trajo una libreta o cuaderno con una anotación de los
animales del padre de Elsa y los animales de él… eso fue ni bien faltó el papá de Elsa
Cravero” (fs. 217/219).-----------------------------------------------------------------------------Por otro costado la heredera demandada ofreció sus testigos de los que se puede
detallar lo siguiente: a) la Sra. Ernestina Contreras y el Sr. Victoriano Gustavo Rojas
reconocen la firma y fecha del contrato de comodato obrante a fs. 70/71, donde el Sr.
Martini cedió en comodato un inmueble de aproximadamente 3 hectáreas situado en la
zona rural de Cruz Alta (fs. 305 y 341); b) el Sr. Jorge Alberto González refiere que la
Sra. Cravero trabajaba como ama de casa y que el “Loli” (hijo de otro matrimonio de la
Sra. Cravero) sembraba soja alrededor del campo y un pedazo del vecino porque Miguel
le prestaba las herramientas y le daba la semilla y los líquidos, que eso era para el Loli
(fs. 314/315) yc) el Sr. Guillermo Garuba de profesión martillero y corredor
inmobiliario por su parte señala que conoce al Sr. Martini por una venta de un terreno
que estaba a nombre de Alicia Martini por el año 2006, operatoria en la que la Sra.
Cravero no tuvo intervención alguna (fs. 322).-------------------------------------------------IV.- Ahora bien, no cabe duda alguna de la existencia de concubinato entre la
Sra. Cravero y el Sr. Martini, ello no ha sido controvertido y ha quedado
suficientemente acreditado con la prueba testimonial referida y especialmente con la
declaración jurada de fs. 108, de fecha 19 de setiembre de 2000, en la cual el Sr. Miguel
Angel Martini manifiesta encontrarse unido en concubinato con la Sra. Elsa Elida
Cravero, desde hace cuarenta y dos años. Se reafirma ello con la declaración efectuada
en similar sentido por la actora a fs. 161, dando cuenta del concubinato desde el año
1964 hasta el día 03 de diciembre de 2009, fecha de fallecimiento del Sr. Martini.
Sabido es que no por probarse la existencia de concubinato puede presumirse también
entre sus miembros la conformación de una sociedad de hecho. Esta “debe ser
demostrada mediante la prueba de aportes y de la participación en las utilidades y
pérdidas. Dice Graciela Medina que “la sociedad de hecho es un contrato por el cual
dos o más personas acuerdan poner en común alguna cosa con el objeto de repartirse
el beneficio que pueda obtenerse y deben existir tres elementos para que se considere
evidenciada, ellos son: 1) la existencia de aportes; 2) la participación en los beneficios
o en las pérdidas y 3) la intención de celebrar un contrato de sociedad”
(http://www.gracielamedina.com/proceso-de-las-uniones-de-hecho-y-concubinato/).Adelanta el suscripto la evidente existencia de estos elementos en la relación
convivencial de la Sra. Cravero y el Sr. Martini. En relación a los aportes comunes (de
trabajo o capital) todos los testigos son contestes en sus declaraciones sobre la labor
mutua y cooperativa desarrollada por la pareja. La crianza y cuidado de los animales era
realizada en forma común, por supuesto descontando que las tareas más rudimentarias o
pesadas quedaban a cargo del Sr. Martini. Aparte de ello realizaba también la actora las
tareas de la casa, y si bien señala Medina (artículo citado) que las tareas domésticas no
guardan relación de causalidad con la comunidad de trabajo originada por la sociedad
de hecho, no se puede compartir tal afirmación cuando de lo que se trata es de un hogar
rural, y más en el contexto cultural, histórico y geográfico en el cual se desarrolló la
unión convivencial, donde si bien las labores de la casa eran a cargo de la mujer, no
acababa su tarea en ello, sino que también realizaba trabajos en el mismo ámbito -la
casa y la chacra estaban en un mismo lugar- por fuera de lo que realiza cualquier ama
de casa de zona urbana. Señalan los testigos que el producido de los animales era
destinado a la venta, y evidentemente quien se encargaba del aspecto dinerario era el Sr.
Martini. La economía y finanza corría por cuenta del Sr. Martini, la pericia contable da
cuenta de ello (fs. 236/250), a él se le pagaba por los arrendamientos, era quien ponía
las condiciones de su campo y el de su conviviente y era él quien vendía los animales y
tenía registración y asistencia contable, como también movimiento bancario -fs. 173- y
cooperativo -fs. 189-, la Sra. Cravero recién registra movimiento en cooperativa a partir
del año 2000 -fs. 232- y si bien parte de los beneficios se destinaba a la subsistencia de
los convivientes, cabe entender que el excedente era reinvertido en bienes que no
ingresaban al patrimonio de la Sra. Cravero, (véase escrituras de fs. 92/94 vta. de 1970 y
98/101 de 1973) quien veía así afectada su economía, producto de una raigambre
cultural patriarcal, me permito concluir, evidenciando ésta una discriminación cruzada
de género, por ser mujer, ama de casa, conviviente, y trabajadora en el ámbito rural, en
décadas en que la perspectiva de género no se vislumbraba en nuestro país. Tal
discriminación no puede dejar de destacarse para entender si se quiere el porqué de la
inscripción registral de todos los bienes de importancia económica a nombre del
integrante masculino de la sociedad. En un contexto de igualdad de género no resulta
permisible tal proceder y el sentenciante como operador jurídico tiene el deber de
reparar tales conductas, bajo riesgo de inobservar los numerosos tratados
internacionales que propenden a una sociedad más justa e igualitaria. En su preámbulo
la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la
mujer, reconoce explícitamente que "las mujeres siguen siendo objeto de importantes
discriminaciones" y subraya que "esa discriminación viola los principios de la igualdad
de derechos y del respeto de la dignidad humana". Según el artículo 1, por
discriminación se entiende "toda distinción, exclusión o restricción basada en el sexo
[...] en las esferas política, económica, social, cultural y civil o en cualquier otra
esfera". La Convención afirma positivamente el principio de igualdad al pedir a los
Estados Partes que tomen "todas las medidas apropiadas, incluso de carácter
legislativo, para asegurar el pleno desarrollo y adelanto de la mujer, con el objeto de
garantizarle el ejercicio y el goce de los derechos humanos y las libertades
fundamentales en igualdad de condiciones con el hombre" (artículo 3). Por el Pacto
Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, en su artículo 3, Los
Estados Partes se comprometen a asegurar a los hombres y a las mujeres igual título a
gozar de todos los derechos económicos, sociales y culturales. La Ley 26.485, de
protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres
en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales, tiene por objeto entre
otros “a) La eliminación de la discriminación entre mujeres y varones en todos los
órdenes de la vida; […] e) La remoción de patrones socioculturales que promueven y
sostienen la desigualdad de género y las relaciones de poder sobre las mujeres”; esta
ley garantiza todos los derechos reconocidos por la Convención para la Eliminación de
todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, la Convención Interamericana para
Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer y en especial, los referidos
a: La integridad física, psicológica, sexual, económica o patrimonial.----------------------La clara afectación de la economía de la Sra. Cravero, que permaneciera oculta
durante la vida en común, en la cual se le asignara una función estereotipada,
subordinada a una relación de poder de género, aflora incuestionable a la muerte del
conviviente, por la disolución y liquidación de esa sociedad constituida bajo la
protección del amor familiar. Las conductas de las partes, el trabajo o esfuerzo conjunto
y en miras de un objetivo, crianza de animales para su venta y demás tareas agrícolas
con fines de lucro, reflejan sin dudarlo la affectio societatis existente entre las partes.
Tenemos en consecuencia probados los aportes, la participación en los beneficios (y
pérdidas) y la affectio societatis, con los cuales resulta que la pareja de convivientes
constituían además de una verdadera familia, una sociedad de hecho, sobreviniendo a
partir de la muerte de uno de los integrantes la necesaria partición de los bienes que la
componen.--------------------------------------------------------------------------------------------La conclusión arribada debe asentarse especialmente dentro de una perspectiva
de género (como forma de ver, conocer y aprehender la realidad) y a la luz de uno de los
más nobles principios del derecho como es la equidad. En este iter conceptual no cabe
dudas que a la accionante le asiste una verdadera “compensación económica”, entendida
ésta como una obligación surgida en la existencia de una sociedad de hecho a la par de
un concubinato debidamente consolidado, acarreada por la disolución del mismo -en el
caso bajo análisis por el fallecimiento de uno de los integrantes- cuya forma de
determinación yace en el desequilibrio ostensible existente durante la relación, pero
debe ser repartido en forma equitativa por ser ambos en partes iguales socios de hecho.
Los parámetros en que fundo la decisión y que se corroboran con la prueba incorporada
pueden resumirse de la siguiente manera: a) que se ha probado a más del concubinato la
sociedad de hecho constituida por los integrantes de aquel y b) que con motivo de la
ruptura de la relación concubinaria ha aflorado un desequilibrio manifiesto de la
situación por la que atravesaba la actora, por cuanto, apoyados en la confianza propia
del concubinato, la adquisición de bienes inmuebles durante dicho estado ha sido
realizada a título personal por el Sr. Martini cuando surge claro que éstas pertenecían a
la sociedad de hecho existente.--------------------------------------------------------------------Insisto, no se puede soslayar la verdadera solidaridad familiar sumada ello a una
verdadera “affectio societatis” que atravesó por muchos años el concubinato bajo
estudio, no pudiendo convertirse éste en un enriquecimiento para uno a costa del otro.
Es notable la constante dedicación de la Sra. Cravero para el sostenimiento de la
empresa familiar gestada, que redituaron en la faz laborativa del Sr. Martini, quien
gracias a ello, podía continuar con el desarrollo de sus actividades mercantiles y el
consecuente engrandecimiento de su patrimonio.----------------------------------------------V.- Como corolario, la correspondiente disolución de la sociedad de hecho debe
prosperar, debiendo adjudicar en partes iguales los bienes ingresados al patrimonio de
las partes durante la vigencia del concubinato y sociedad de hecho, lo que refleja una
justa compensación valorada a la luz de la conducta habida por los cónyuges a través de
casi una vida juntos (nótese que convivieron desde que ambos eran adolescentes),
embarcados en un proyecto de esfuerzo compartido y solidaridad familiar y cuya
inobservancia constituiría una falta de equidad manifiesta respecto de los aportes
producidos por cada conviviente.-----------------------------------------------------------------En similar sentido se expide la Excma. Cámara Civil, Comercial, de Trabajo y
Familia de la Sede, en autos “BAS, Santa Magdalena c/ SUCESIÓN DE JOSÉ ROQUE
GONZALEZ Y OTROS – Liquidación de Sociedad de Hecho – Apelación (Expte. N°
727747), por Sentencia N° 8, de fecha 09 de abril de 2015, considerando en atención
“al progreso contemporáneo de ambos socios conviviendo en aparente matrimonio,
producto del aporte en dinero y de trabajo de ambos […] por sobre la simple
colaboración de ambos para subvertir las necesidades comunes de la convivencia,
conclusión sostenida desde la sana crítica, en función de la prueba analizada aplicando
la normativa del art. 1.190 C.C. finiquitando por este camino que la sociedad de hecho
está probada, resultando ante el fallecimiento de González, conducente su
liquidación.”.-----------------------------------------------------------------------------------------
Disuelta entonces la sociedad corresponde ordenar su liquidación. El proceso
desintegrador de la liquidación de la sociedad, es una etapa de carácter obligatorio previsto
prioritariamente en beneficio de terceros. “La liquidación es el procedimiento establecido
por la ley mediante el cual el liquidador realiza los bienes que componen el activo de la
sociedad para pagar las deudas sociales, los gastos y honorarios de liquidación, y en caso
de remanente, distribuir el mismo entre los socios. Este procedimiento es obligatorio e
inderogable...” ( Código de Comercio - Comentado y Anotado - Rouillón, Adolfo A. N..
Tomo III -pag. 245 - La Ley, Año 2006). La disolución no importa por sí la extinción de la
sociedad, sino tan solo el pase a la fase liquidativa con sus correspondientes etapas, las que
no pueden ser obviadas, cualquiera sea el patrimonio existente en la sociedad.--------------Atento el tipo de sociedad de que se trata en autos, deberá designarse liquidador
por las partes dentro de los treinta días de la firmeza de la presente resolución. En defecto
de acuerdo, vencido dicho plazo, deberá designarse audiencia al efecto. El liquidador que
se designe deberá actuar de conformidad a lo previsto por los arts. 101, siguientes y
concordantes de la Ley de Sociedades Nº 19.550.-----------------------------------------------VI.- Costas y Honorarios.- Las costas se imponen por su orden, atento que la
divergencia jurisprudencial en la materia pudo generar en las partes el convencimiento
de razones favorables para litigar (art. 130 “in fine” del CPCC) y los honorarios de los
letrados intervinientes se difieren para cuando exista base económica en autos para ello
y los mismos lo soliciten (art. 26 Ley 9459).----------------------------------------------------Los honorarios de la perito contadora oficial Laura Serra se justiprecian en la
suma de quince (18) Jus y los del perito contador de control Sebastián Alberto Latanzi
en la suma de nueve (09) Jus, siendo éstos últimos a cargo de su proponente (art. 49 inc.
2° Ley 9459).-----------------------------------------------------------------------------------------
Dichos honorarios generarán desde la fecha de la presente regulación y hasta la
de su efectivo pago, un interés (art. 35 Ley 9459) igual al que resulta de adicionar la
tasa pasiva que publica el BCRA con más el 2 % nominal mensual.------------------------Por todo lo expuesto, normas citadas y haciendo presente que el resto de las
pruebas rendidas, debidamente valoradas, en nada modifican las conclusiones a las que
se arriba.----------------------------------------------------------------------------------------------RESUELVO:
I.- Hacer lugar a la demanda de declaración de disolución de sociedad de hecho
y respectiva liquidación entablada a fs. 02/06 por la Sra. Elsa Elida Cravero en contra de
la sucesión de Miguel Ángel Martini, todo en la forma expuesta en el considerando
pertinente.--------------------------------------------------------------------------------------------II.- Imponer las costas por su orden.----------------------------------------------------III.- Diferir la regulación de honorarios de los letrados intervinientes para
cuando exista base económica en autos para ello.----------------------------------------------IV.- Regular en forma definitiva (art. 28 Ley 9459) los honorarios profesionales
de la perito contadora oficial Laura Serra en la suma de Pesos Seis mil seiscientos
sesenta y nueve con 90/100 ($ 6.669,90).--------------------------------------------------------V.- Regular en forma definitiva (art. 28 Ley 9459) los honorarios profesionales
del perito contador de control Sebastián Alberto Latanzi en la suma de Pesos Tres mil
trescientos treinta y cuatro con 95/100 ($ 3.334,95) los que son a cargo de su
proponente (art. 49 inc. 2° Ley 9459). Protocolícese y hágase saber.-
Descargar