En la ciudad de Santa Fe, a los 25 días de marzo del año dos mil

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(Expte. N° 219-Año 2014)
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En la ciudad de Santa Fe, a los 25 días de marzo del año dos mil quince, se reúnen
en Acuerdo Ordinario los Señores Jueces de la Sala Segunda de la Cámara de
Apelación en lo Laboral, Dres. José Daniel Machado, Julio César Alzueta y
Sebastián César Coppoletta, para resolver el recurso de apelación puesto por la
actora, contra la sentencia dictada por la Señora Jueza de Distrito 1 de Primera
Instancia en lo Laboral de la Quinta Nominación de Santa Fe, en los autos
caratulados: “DISSER, S.R.L. C/BULACIO, Romina Ivana s/CONSIGNACIÓN
LABORAL” (Expte. 219 - Fo. 188 - Año 2014).
Acto seguido el Tribunal se plantea las siguientes cuestiones:
PRIMERA: ¿Se ajusta a derecho la sentencia apelada?
SEGUNDA: ¿Qué pronunciamiento corresponde dictar?
Dispuesto el orden de votación, resulta: Machado, Coppoletta,
Alzueta.
A la primera cuestión el Dr. Machado dice:
La parte actora (empleadora, también demandada por reconvención)
apeló la sentencia obrante entre fs. 246/262, expresando sus agravios contra la
misma según el memorial de fs. 278, que la demandada responde a f. 292.
Plantea el recurso en primer término la inconstitucionalidad del art. 66
C.P.L. en cuanto a los alcances que atribuye a la ficta confessio de las partes como
efecto de su eventual incomparecencia a la audiencia de trámite. La realización de
dicha audiencia se notificó a la recurrente hace ya tres años -fs. 139 y siguientes- sin
que desde entonces haya mediado ninguna articulación ni incidente al respecto. El
llamamiento de autos (f. 194) no ha sido cuestionado y, para más, el alegato que con
ulterioridad presenta la recurrente (f. 243) califica como “neutra” a la prueba
confesional, argumentando que es “irrelevante” ya que no contradice los hechos por
ella postulados en sus piezas sustantivas. Bajo tales circunstancias, es caso obvio
que la introducción de cuestión constitucional en este estado padece no solamente de
vicio de oportunidad, sino también de trascendencia. Tampoco el oficio aprecia que
la Sra. Jueza de la anterior instancia se haya basado para decidir exclusiva ni
principalmente en la presunción emergente de la norma impugnada.
En cualquier caso, que los efectos de la confesión ficta tengan en el
trámite laboral un alcance más amplio que en el rito civil es cuestión que el
legislador ha entendido razonable, teniendo en cuenta las dificultades probatorias
que usualmente afectan al trabajador como producto de la desigualdad de armas que
es inherente al estatus dependiente. Y las exigencias del debido proceso
constitucional quedan satisfechas con la previsión de la oportunidad de ser oído y
producir prueba, corriendo por cuenta de cada particular el utilizar o no esas
posibilidades, sin que su indolencia o negligencia le permita tachar el
funcionamiento de las instituciones procesales o pretender, como en el caso, que se
apliquen a la especie normas de otros ordenamientos en base a la exclusiva voluntad
de la parte interesada de considerarlas “más precisas y justas”.
El segundo agravio, para empezar, se basa en la falaz afirmación de
que la trabajadora no impugnó la calificación modal del vínculo al reconvenir, lo
cual resulta desmentido por cuanto se lee a fs. 71, último párrafo y fs.72 vta. (punto
II.01, párrafo 4). Por otra parte, como se trata precisamente de una calificación
jurídica, pertenece al campo de atribuciones comprendidas en el adagio iure curia
novit, sin que la valoración judicial de la concurrencia o no de las exigencias legales
para tener a un contrato como “de tiempo indeterminado” o “a plazo fijo”
constituya, tal como pretende el recurso, fallar ultra petita ni, como probablemente
quiso decir, extra petita.
En cualquier caso es clara la regla del art. 92 L.C.T. en cuanto impone
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al empleador la carga de probar que un vínculo laboral se aparta de la regla del
art.90, la que no encuentra en autos refutación alguna basada en necesidades
extraordinarias o transitorias de la empresa que hubieren habilitado la posibilidad de
utilizar la modalidad de excepción.
Los agravios conexos, basados en la buena fe y en la seguridad
jurídica, como argumentos que pretenden derivar de la firma voluntaria por el
trabajador de los instrumentos el que su ajuste a derecho no puede luego ser
cuestionado, implica soslayar toda la dogmática laboral basada precisamente en la
protección al dependiente incluso contra los efectos antijurídicos de sus propias
decisiones libres. El Derecho del Trabajo no basa su sistema de nulidad de los actos
jurídicos en los vicios de la voluntad sino en la contravención de sus disposiciones
imperativas, entre las cuales la duración del vínculo ocupa un lugar decisivo.
El tercer agravio refiere al estatus que el fallo adjudica a Disser S.R.L.
como continuadora de la sociedad de hecho integrada por Boccolini y Martínez de
la cual, en realidad, no supuso sino un cambio de razón social, o sea la adecuación
de la situación de hecho preexistente a uno de los tipos societarios regulares de la
LSC. Para así decidir, la Sra.Jueza de la anterior instancia ponderó la identidad de
giro o ramo y de domicilio -conforme datos suministrados por la demandada a la
AFIP- y de socios, puesto que la SRL sobrevenida no conoce otros miembros que
los nombrados y sus esposas (f. 256 y siguientes). El interés práctico del asunto
radica en saber si el tiempo trabajado para los primeros devengó antigüedad
oponible a la segunda. Desde ese punto de vista -el único útil- aprecio que la a quo
bien pudo aplicar el art. 18 L.C.T. directamente ya que, a tenor del mismo y su
doctrina, lo que importa es que la identidad contractual se verifique con el
establecimiento, aunque el mismo hubiere cambiado de empleador. (Cfr.
VÁZQUEZ VIALARD, Antonio: LCT Comentada; Rubinzal, 2005, I-260,
TOSELLI, Carlos; en LCT Comentada, dirigida por Miguel Maza; La Ley 2012; I328; CONFALONIERI, Juan Angel; en LCT Comentada, dirigida por Jorge
Rodríguez Mancini; La Ley, 2007, I-618. MACHADO, José Daniel y OJEDA, Raúl
H.: Tratado de Derecho del Trabajo, dirigido por Mario Ackerman-Diego Tosca,
Rubinzal, IV-381.) De modo que, aunque coincido con su solución, en realidad no
es decisivo establecer si eran o no la misma persona, ya que ello no altera la
consecuencia jurídica. Desde luego, el diferente número de CUIT no altera la
realidad en la que se interesa el Derecho del Trabajo.
El cuarto agravio carece de autonomía y -rechazados los que le
preceden- es claro que la suma ofrecida a la trabajadora no la emplazaba en
situación de mora accipiens conforme a la regla según la cual nadie está obligado a
recibir un pago insuficiente. Otro tanto ocurre con el agravio “quinto”, el que
presupone una caracterización modal del vínculo que ya ha sido rechazada en cuanto
tal y con el denominado “sexto”, en tanto el recurso no ha modificado lo decidido en
anterior instancia.
Voto por la afirmativa. Costas de alzada a la recurrente.
A la misma cuestión el Dr. Coppoletta dice:
Que coincide con las conclusiones del preopinante, por lo que vota en
igual sentido.
A la misma cuestión el Dr. Alzueta dice:
Que expone las mismas razones vertidas por los preopinantes y, como
ellos, vota en igual sentido.
A la segunda cuestión los Dres. Machado, Coppoletta y Alzueta dicen:
Que atento el resultado de las votaciones precedentes corresponde: 1)
no hacer lugar a la apelación intentada por la actora; 2) imponer las costas de Alzada
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a la recurrente; 3) Los honorarios de esta Instancia se fijan en el cincuenta por ciento
(50%) de los que, en definitiva, corresponda regular en baja instancia por el trámite
principal.
Por los fundamentos y conclusiones del Acuerdo que antecede, la
SALA II DE LA CÁMARA DE APELACIÓN EN LO LABORAL
R E S U E L V E:
1) No hacer lugar a la apelación intentada por la
actora.
2) Imponer las costas de Alzada a la recurrente.
3) Los honorarios de esta Instancia se fijan en el
cincuenta por ciento (50%) de los que, en definitiva,
corresponda regular en baja instancia por el trámite
principal.
Resérvese el original, agréguese copia, hágase saber y oportunamente
bajen.
Concluido el Acuerdo, firman los Señores Jueces por ante mí, que doy
fe.
Dr. MACHADO
Dr. COPPOLETTA
Dr. ALZUETA
Dra. Claudia BARRILIS
Secretaria
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