mortis causa - Aracne editrice

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A
Studi in onore di Augusto Sinagra
Volume III
Diritto dell’Unione Europea
Comitato promotore
Paolo Bargiacchi
Raffaele Cadin
Claudia Regina Carchidi
Gian Luigi Cecchini
Paolo Gemelli
Salvatore Lombardo
Giovanni Michele Palmieri
Edoarda Sanci
Anna Lucia Valvo
Copyright © MMXIII
ARACNE editrice S.r.l.
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via Raffaele Garofalo, /A–B
 Roma
() 
 ----
I diritti di traduzione, di memorizzazione elettronica,
di riproduzione e di adattamento anche parziale,
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I edizione: ottobre 
VOLUME III
DIRITTO DELL’UNIONE EUROPEA
Indice

Algunas consideraciones sobre la sucesión mortis causa en el
derecho internacional privado de la Unión Europea: competencia judicial internacional y ley aplicable
Mª Dolores Adam Muñoz

EU Migration Policy and the Principle of «Sincere Cooperation»: Some Appraisals on the ECJ Judgment EC–C–/
PPU in the Light of the Italian Municipal Law on Immigration
Mariarosalba Angrisani

La politica artica dell’Unione europea dopo Lisbona tra innovazione e illusione
Ezio Benedetti

La política de inmigración en la Unión Europea: estado del
arte y perspectivas
Irene Blázquez Rodríguez

Giurisdizione e discrezionalità nello spazio giudiziario europeo: il forum necessitatis
Ruggiero Cafari Panico

Prime riflessioni sul Brevetto Europeo Unitario
Giandonato Caggiano

La valutazione delle performances operative dell’Unione europea nelle relazioni con le Nazioni Unite e le Organizzazioni
internazionali a vocazione economica
Cristiana Carletti

Studi in onore di Augusto Sinagra


Il controllo dell’attività d’impresa nell’ordinamento giuridico
internazionale ed europeo
Gian Luigi Cecchini

Stato di cittadinanza e consegna dei ricercati in Europa: le
problematiche relazioni tra Italia ed Albania
Sandro Cerini

La politica sanitaria ed ambientale dell’Unione europea: progressi ed evoluzioni di settori interconnessi
Claudio Costantino

Plaidoyer per il diritto di replica alle conclusioni degli avvocati
generali della Corte di Giustizia dell’Unione europea
Carlo Curti Gialdino

Immigrazione e integrazione: il contributo dell’Unione europea
Luigi Daniele

La coltivazione di organismi geneticamente modificati nell’Unione europea
Valentina Della Fina

La revisione degli Accordi di Schengen ed il ripristino dei
controlli alle frontiere interne
Lina Giuseppina Di Carlo

La difficile posizione degli stranieri familiari di cittadini di
Stati membri dell’Unione europea e le discriminazioni a rovescia: una questione ancora aperta?
Valeria Di Comite

Migrazioni cd. stanziali, cittadinanza e «cittadinanze»: il soggiornante di lungo periodo nell’Unione europea
Angela Di Stasi
Indice


Dall’armonizzazione all’unificazione dei diritti interni nell’Unione europea. Valutazione critica di una tendenza in atto
Paolo Fois

Riflessioni sulla governance dell’Unione europea dopo la riforma di Lisbona: Towards a Content–Based Approach?
Massimo Fragola

Limitazioni agli atti normativi ultra vires dell’UE. Osservazioni a proposito delle sentenze Lissabon e Mangold del BVG
Miriam Immediato

The European Union and the Protection of National Minorities. An Emerging System for the Protection of National
Minorities in the European Union?
Tamàs Korhecz

Il diritto di iniziativa dei cittadini europei: la disciplina del
Regolamento n. /
Rosanna La Rosa

La Direttiva //UE sulla tratta degli esseri umani in
rapporto con la legislazione italiana
Enrico Lanza

La sentenza della Corte Costituzionale n. / sulla mediazione italiana ed il rinnovato interesse ad una pronuncia della
Corte di Giustizia UE
Francesco Maiello

L’embrione e il diritto comunitario
Luca Marini

L’istituzione di una cooperazione rafforzata nel settore della
legge applicabile al divorzio e alla separazione personale: i
rapporti con le Convenzioni internazionali in vigore
Fabrizio Marongiu Buonaiuti
Studi in onore di Augusto Sinagra


«Ordine pubblico europeo» e cooperazione giudiziaria in
materia civile: brevi considerazioni
Angela Martone
Studi in onore di Augusto Sinagra
ISBN 978-88-548-6134-3
DOI 10.4399/97888548613431
pag. 9–31 (ottobre 2013)
Algunas consideraciones sobre la sucesión
mortis causa en el derecho internacional privado
de la Unión Europea
Competencia judicial internacional y ley aplicable
Mª D A M∗
S: . Introducción,  – . El Reglamento (UE) n. /: principios
y fundamentos en los que se sustenta el Reglamento,  – .. (Sigue:)
ámbito de aplicación material, espacial, temporal y personal,  – .. (Sigue:)
competencia judicial internacional en materia de sucesiones,  – .. (Sigue:)
ley aplicable al fondo de la sucesión: regla general (art. .) y excepción (art.
.),  – .. (Sigue:) autonomía de la voluntad y orden de prelación en la
determinación de la ley aplicable a la sucesión. Ámbito de la ley aplicable,  –
. Consideraciones finales, .
. Introducción
El día  de julio de  se publicó en el Diario Oficial de la Unión
Europea el Reglamento (UE) n. / del Parlamento Europeo y del
Consejo, de  de julio de , relativo a la competencia, ley aplicable, reconocimiento y la ejecución de las resoluciones, a la aceptación y la ejecución
de los documentos públicos en materia de sucesiones mortis causa y a la creación de un certificado sucesorio europeo . Este Reglamento tiene su origen
en el art.  del Tratado constitutivo de la Comunidad Europea el cual
prevé la adopción de medidas en el ámbito de la cooperación judicial
en materia civil, tendentes a «mejorar y simplificar el reconocimiento
y la ejecución de resoluciones en asuntos civiles y mercantiles, incluidos los extrajudiciales, así como fomentar la compatibilidad de las
∗
Profesora Titular de Derecho internacional privado, Universidad de Córdoba,
España.
. DOUE, L  de  de julio de 


Mª Dolores Adam Muñoz
normas aplicables en los Estados miembros sobre conflictos de leyes
y de jurisdicción». Así, en el Consejo Europeo reunido en Tampere,
los días  y  de octubre de  se aprobó el principio de reconocimiento mutuo de las sentencias y otras resoluciones emanadas de
las autoridades como piedra angular de la cooperación judicial en
materia civil, invitando al Consejo y a la Comisión a que adoptaran
un programa de medidas para aplicar dicho principio. Como consecuencia de estas indicaciones, la Comisión y el Consejo adoptaron el
 de noviembre de  un programa de medidas para la aplicación
del principio del reconocimiento mutuo en el cual se describen la
medidas relativas a la armonización de las normas de conflictos de
leyes como medidas destinadas a facilitar el reconocimiento mutuo y
se anuncia la elaboración de un instrumento en materia de sucesiones
y testamentos .
En el Programa de La Haya adoptado por el Consejo Europeo los
días  y  de noviembre de  se insta la necesidad de consolidar la
libertad, la seguridad y la justicia en la Unión Europea, subrayándose
la necesidad de adoptar un instrumento en materia de sucesiones que
abordara en particular cuestiones tales como los conflictos de leyes,
competencia judicial, reconocimiento mutuo y la ejecución de las
resoluciones en materia de sucesiones, así como el certificado sucesorio europeo. El Consejo Europeo se vuelve a reunir en Bruselas
los días  y  de diciembre de , adoptando un nuevo programa
plurianual denominado Programa de Estocolmo . En dicho programa el
Consejo Europeo considera que el reconocimiento mutuo debe ampliarse a ámbitos de la vida diaria que todavía no están cubiertos por la
legislación de la Unión, como lo son las sucesiones y los testamentos,
teniendo en cuenta al mismo tiempo los diferentes sistemas judiciales
de los Estados miembros, incluido el orden público y las tradiciones
nacionales en este ámbito. En este orden de cosas, es necesario facilitar el buen funcionamiento del mercado interior suprimiendo los
obstáculos a la libre circulación de aquellas personas que actualmente
cuentan con dificultades a la hora de ejercer sus derechos en situaciones de sucesiones mortis causa con repercusiones transfronterizas,
. DOUE, C  de  de enero de , p. .
. DOUE, C  de  de marzo de , p. .
. DOUE, C  de  de mayo de , p. .
Algunas consideraciones sobre la sucesión mortis causa [. . . ]

ya que es preciso garantizar de manera eficaz los derechos de los
herederos y legatarios y de la personas próximas al causante, así como
de los acreedores de la herencia .
En efecto, se calcula que alrededor de .. de personas fallecen
al año en la Unión Europea y, estimando que alrededor de unas .
familias europeas se enfrentan al año a una sucesión internacional
en las que los costes económicos son significativamente superiores
a las sucesiones meramente internas (se calcula que alrededor de
. billones de euros están implicados anualmente en el fenómeno
sucesorio en el territorio de la ) , teniendo además presente que .
millones de ciudadanos de la  residen en otros países de la Unión, el
establecimiento de unas normas en materia de sucesión mortis causa
será de suma utilidad y eficacia y de gran interés atendiendo a la
seguridad jurídica que las mismas conllevarán.
El objetivo primordial de estas normas se sustentará en permitir
a las personas que residen en la Unión Europea que organicen por
anticipado su sucesión, garantizando de manera eficaz los derechos
de los herederos o legatarios y de las demás personas vinculadas al
difunto, así como de los acreedores de la sucesión.
No obstante, esta empresa no resulta en absoluto sencilla, debido
fundamentalmente a los diferentes sistemas hereditarios de los países miembros. La evidencia de la disparidad de sistemas, asentada
fundamentalmente en las divergencias existentes entre en el sistema
romano–germánico y el anglosajón, es notoria , pero a esto se añaden
otras dificultades de índole más profunda, ya que los principios que
presiden la regulación sucesoria están fuertemente arraigados en cada
sistema jurídico, unos de base patrimonial y otros de base personal,
siendo una pieza clave del derecho privado, ya que en ella confluyen
los principales ejes del sistema. La concepción personalista que se
tiene en el derecho continental, frente a la concepción patrimonialista
de la Common Law ponen de relieve la diferencia de tratamiento que
existe en relación con algunos aspectos de la sucesión, como, por ejem. D D, La sucesión y el fenómeno migratorio desde la perspectiva del Derecho
internacional privado español, en El Derecho Civil a  años del Código de Napoleón. El Derecho
Español y Europeo, Ciudad de México, , pp. –.
. Véase en www.lexdiario/noticias/.
. Sobre los diferentes sistemas sucesorios, vid. A M, Sucesiones
internacionales. Determinación de la ley aplicable, Valencia, , p.  y ss..

Mª Dolores Adam Muñoz
plo, la administración, liquidación y partición de la herencia (aspectos
procesales para este segundo sistema en los que interviene el juez
para habilitar al administrador) o la libertad de testar de este sistema
frente a la limitación de la misma en el sistema continental. Todos
estos elementos desembocan necesariamente en un conflicto de calificaciones, que el derecho de la Unión Europea ha de tener en cuenta,
los cuales se pusieron de manifiesto en el Libro Verde de  marzo de
 sobre sucesiones y testamentos en donde la Comisión insta a los
Estados y personas interesadas para que se pronuncien acerca de cuestiones tan dispares en los distintos sistemas jurídicos con la finalidad
de regular las sucesiones transnacionales en los tradicionales sectores
del Derecho internacional privado, tales como la competencia judicial
internacional, la ley aplicable y el reconocimiento y ejecución , ya
que, como reza el propio Libro, «la creciente movilidad de personas en
un espacio sin fronteras interiores, así como el aumento del número
de uniones entre nacionales de Estados miembros diferentes, acompañadas a menudo de la adquisición de bienes situados en territorios
de varios países de la Unión, complican enormemente la sucesión» .
De este modo, mediante el Libro Verde sobre sucesiones y testamentos la Comisión inicia una consulta pública a los Estados miembros
destinada a responder a los problemas concretos que, en materia de
sucesiones y testamentos, se plantean a los ciudadanos de la Unión.
La Comisión no prevé una armonización completa de las normas de
derecho nacional sobre sucesiones y testamentos de los Estados miembros, pero en el Libro Verde se pregunta fundamentalmente sobre la ley
aplicable y los criterios de vinculación así como sobre la competencia
de los tribunales y los aspectos administrativos de una sucesión por
medio de un certificado europeo de heredero y el registro de los
testamentos, con el fin de elaborar un instrumento comunitario.
. C E, Libro Verde sobre Sucesiones y Testamentos,  de marzo de ,
COM ()  final, p. . Véase también Document de travail des services de la Comisión,
Annexe au Livre Vert sur les Successions el Testaments,  de marzo de , SEC () , p.
.
. Las opiniones se leen en ec.europa.en/justice_home/news/consulting–
public/successions/news/contributions/–successions–en.htm.
. La valoración a algunas de estas respuestas se pueden consultar en F S,
Valoración de las respuestas al Libro Verde sobre sucesiones y testamentos relativas a la competencia
judicial, en V–G (coord.), Perspectivas del Derecho sucesorio en Europa, Madrid–
Barcelona–Buenos Aires, , pp. –.
Algunas consideraciones sobre la sucesión mortis causa [. . . ]

El contenido del Libro Verde lo podemos sintetizar sobre tres pilares
fundamentales:
 regular los conflictos de leyes en la Unión Europea. Dada la disparidad de los sistemas jurídicos nacionales, puede darse el caso
de que una misma materia no esté regulada necesariamente
por el derecho de sucesiones en todos los países. Por esta razón,
la armonización de las normas de conflicto de leyes debería
acompañarse de una definición del ámbito de aplicación de la
ley sucesoria, para, a continuación, determinarse uno o más
criterios de fijación. La Comisión consulta al público sobre las
cuestiones relativas a la ley sucesoria y, en particular, si las normas de conflicto de leyes deben limitarse a la determinación
de los herederos y de sus derechos, o cubrir también la liquidación o la partición de la herencia. La Comisión se pregunta
asimismo sobre el criterio de vinculación que hay que utilizar
para la ley aplicable: ¿conviene usar el mismo criterio para todo el ámbito cubierto por la ley aplicable o podrían utilizarse
distintos criterios para distintos aspectos de la sucesión?¿La norma comunitaria de conflicto debe distinguir entre muebles e
inmuebles?;
 regular la competencia de los tribunales. El derecho nacional de
los Estados miembros estipula diversos criterios para atribuir
la competencia a un tribunal en caso de litigio referente a una
sucesión: algunos consideran el último domicilio del difunto,
el domicilio del demandado o de una parte en el litigio, la ubicación de los bienes, etc. La Comisión aborda la posibilidad de
elegir un criterio de competencia judicial, los procedimientos
de transferencia de bienes inmuebles, la competencia de las
autoridades no judiciales y los fideicomisos;
 facilitar los aspectos administrativos de las sucesiones. Aparte
de facilitar las normas de reconocimiento y ejecución, la Comisión desea expedir un certificado europeo de heredero con
el fin de facilitar a los herederos que puedan probar fácilmente su condición de tales sin que se vean obligados a incoar un
procedimiento. Además, prevé el registro de los testamentos en
todos los Estados miembros con el fin de facilitar su búsqueda,
a menudo difícil si fueron redactados en el extranjero.

Mª Dolores Adam Muñoz
La Comisión se pregunta también sobre la posibilidad de suprimir
toda formalidad de legalización o apostilla de los documentos públicos
autorizados en un Estado miembro y relativos a una sucesión.
. El Reglamento (UE) n. /: principios y fundamentos en
los que se sustenta el Reglamento
Como ya hemos señalado en líneas anteriores, este Reglamento
tiene su origen en el art.  del  el cual prevé la adopción de medidas
en el ámbito de la cooperación judicial en materia civil, tendentes a
«mejorar y simplificar el reconocimiento y la ejecución de resoluciones
en asuntos civiles y mercantiles, incluidos los extrajudiciales, así como
fomentar la compatibilidad de las normas aplicables en los Estados
miembros sobre conflictos de leyes y de jurisdicción».
Su objetivo primordial es el de permitir a las personas que residen en la Unión Europea que organicen por anticipado su sucesión,
garantizando de manera eficaz los derechos de los herederos o legatarios y de las demás personas vinculadas al causante, así como de los
acreedores de la sucesión.
Asimismo persigue suprimir todos los obstáculos a la libre circulación de las personas resultantes de las diferencias entre las normativas
de los Estados miembros que regulan las sucesiones internacionales.
Como ya hemos señalado anteriormente, los sistemas sucesorios
de los Estados miembros de la Unión Europea son diversos y se basan
en principios diferentes, de ahí una de las dificultades principales
a la hora de elaborar este instrumento normativo. No obstante, el
Reglamento ha optado por el principio de unidad y universalidad de
la herencia y así lo plasma a lo largo de su articulado . La unidad se
predica, en tanto en cuanto, la autoridad que conozca de la sucesión
. En nuestro sistema sucesorio este es el principio que rige la sucesión. Vid. C R, Sucesión hereditaria, en C C–C G (dir.), Derecho
internacional privado, II, ª ed., Granada, –, p.  y ss.. No obstante la Autora indica
que el principio de universalidad que rige la sucesión en el derecho interno se corresponde
en Derecho internacional privado con el principio de unidad, esta afirmación puede ser
admitida en tanto en cuanto la sucesión formaría parte del estatuto personal y no del real,
como sucedería en el sistema germánico–feudal, en donde el interés patrimonial constituye
el fundamento jurídico de la sucesión; sin embargo, ambos principios (el de universalidad
y el de unidad) son distintos en el ámbito interno.
Algunas consideraciones sobre la sucesión mortis causa [. . . ]

va a decidir acerca de la totalidad de la misma y no sólo eso, sino
desde el principio hasta el final del proceso sucesorio . Así, la ley
que rija la sucesión debe regular la misma desde su apertura hasta
la transmisión a los beneficiarios de la propiedad de los bienes y
derechos que integran la herencia. Ha de incluir cuestiones relativas a
la administración de la herencia y a la responsabilidad por deudas y
cargas de la misma, así como la prelación de los acreedores. De esta
forma el Reglamento no considera eficaz la división entre los bienes
muebles e inmuebles del causante respecto a su conocimiento y ley
aplicable, como sucede en algunos sistemas estatales de la Unión
Europea .
No obstante, en situaciones concretas, la unidad quiebra en aras del
principio de efectividad, ya que, a tenor del art. , cuando el causante
posea bienes situados en terceros Estados el tribunal podrá, a instancia
de una de las partes, no pronunciarse sobre los mismos si cabe esperar
que su resolución no vaya a ser reconocida y, en su caso, declarada
ejecutiva en ese Estado. Pronunciamiento que resulta lógico si tenemos en cuenta que, en la mayoría de los Estados existe competencia
exclusiva para conocer de los litigios en relación a los inmuebles situados en su territorio. Es más, en nuestro sistema, para mantener el
principio de unidad de la sucesión, el sólo hecho de que el causante
posea bienes inmuebles en España otorga a los tribunales españoles
competencia judicial internacional para conocer de la totalidad de la
. Esta concepción es consecuente al sistema romano que inspira nuestro derecho
internacional privado sucesorio. Como dispone el art. . del Codigo Civil, será la ley
nacional la que regule la sucesión con independencia de la naturaleza y lugar de situación
de los bienes que compongan la herencia: la sucesión por entero ha de quedar regulada por
una sola y única ley, la ley nacional del causante. Esta concepción unitaria de la sucesión
evita importantes problemas en lo que a conflictos de calificaciones se refiere. En efecto, la no
distinción entre bienes muebles e inmuebles contribuye notablemente a esa finalidad en
tanto que las diferentes legislaciones estatales no siempre coinciden en que ha de entenderse
por tales. Hemos de tener presente que la sucesión puede presentarse a veces en casos
extremadamente sencillos en los que no existirán controversias sobre qué ha de entenderse
por muebles e inmuebles.
. El sistema territorial mixto se basa en la sumisión de los bienes inmuebles de la
sucesión a la lex rei sitae (criterio territorial), y de los muebles, por lo general, a la ley del
último domicilio del causante (criterio personal). De esta forma, el fraccionamiento se
produce en el tratamiento de los bienes inmuebles de la sucesión; por su parte, respecto de
los muebles, gozan de un tratamiento unitario. Algunos ejemplos de sistemas territoriales
mixtos en Europa los encontramos en países como Francia, Inglaterra, Luxemburgo y
Bélgica.

Mª Dolores Adam Muñoz
sucesión .
Por otra parte, las normas del Reglamento utilizan el método, que
no el sistema, unitario, ya que están dirigidas a garantizar que la
autoridad que sustancie la sucesión aplique su propio derecho; así la
regla general consiste en la coincidencia entre el forum y el ius , si
bien, el propio Reglamento prevé la posibilidad del quebrantamiento
de esta regla a favor de la autonomía de las partes, tanto en la elección
del tribunal, como en la determinación de la ley aplicable a la sucesión.
Cuestiones que serán analizadas más adelante.
El punto de conexión por excelencia adoptado por el Reglamento
para regir, tanto la autoridad competente, como la determinación de
la ley aplicable, es la residencia habitual del causante en el momento
del fallecimiento, si bien, en aras de consagrar la autonomía de la
voluntad, ésta puede quedar relegada si el causante determina como
ley aplicable a la sucesión la ley de su nacionalidad. En este caso,
no coincidirían foro e ius, si bien el Reglamento posé determinados
mecanismos para corregir esta dicotomía, basados fundamentalmente
en la autonomía de la voluntad de las partes en relación a la viabilidad
de celebrar un acuerdo de elección de foro, posibilidad que tendremos
oportunidad de analizar con más detalle más adelante. La autonomía
de la voluntad queda limitada única y exclusivamente a la elección de
la ley nacional para, según el Reglamento, garantizar que exista una
conexión entre el causante y la ley elegida y para evitar que se elija
una ley con la intención de frustrar las expectativas legítimas de los
herederos forzosos. Observamos así como el Reglamento se identifica
con otro principio básico del derecho continental, cual es la limitación
a la hora de testar en detrimento de la libertad de la misma imperante
en los Países de la Common Law.
La elección de la ley nacional ha de hacerse de forma explícita
o resultar de manera terminante de una disposición que tenga el
carácter de mortis causa. Esta ley determinará la validez material de
acto de elección. Asimismo, la determinación de la nacionalidad se
. Esta misma solución se adopta en el ordenamiento jurídico holandés. Vid. D N (en colaboración con L y D), Ètude de droit comparé sur
les règles de conflicts de juridictions et de conflicts de lois relatives aux testaments et successions
dans les États membres de l’Union Européenne.
. Sobre este método, G C, Las relaciones entre forum y ius en el Derecho
internacional privado, en An. der. int., n. , –, pp. –.
Algunas consideraciones sobre la sucesión mortis causa [. . . ]

considera una cuestión prejudicial, de modo que ha de resolverse
previamente antes de entrar a conocer del fondo de la sucesión , si
bien la cuestión de considerar a una persona como nacional de un
determinado Estado ha de resolverse por las normas de ese Estado al
igual que su concreción en el caso en que el individuo ostente varias
nacionalidades .
Con respecto a la residencia habitual, el Reglamento adopta un
concepto autónomo dejando en manos de la autoridad que conozca
de la sucesión su determinación, teniendo en cuenta las circunstancias
de la vida del causante durante los años previos a su fallecimiento y, en
el momento del mismo, evaluando todos los hechos pertinentes, en
particular la duración y la regularidad de su presencia en el Estado de
que se trate, así como las condiciones y los motivos de dicha presencia.
Todas estas consideraciones ha de tomarlas en cuenta la autoridad con
la finalidad de que la residencia habitual se manifieste como el lugar
con el que el causante ha tenido un vínculo estrecho y estable.
El legislador de la Unión es consciente de que en numerosas ocasiones y, debido principalmente a la movilidad de las personas entre los
diferentes Estados, la concreción de la residencia habitual del causante
va a constituir una tarea difícil. Por este motivo señala algunos casos
a título de ejemplo en los cuales pone de manifiesto dicha dificultad:
tal sería el hecho en que el causante se ha trasladado a vivir a otro
Estado por motivos laborales, o cuando haya residido en diferentes
Estados de forma alternativa, o viajado de un Estado a otro sin residir
. Así, la acreditación de la nacionalidad española del causante se ha de llevar a cabo con
arreglo al derecho español de la nacionalidad y, sensu contrario, la precisión de la nacionalidad
extranjera del causante se efectuará, en esta misma línea, con arreglo al derecho extranjero
del país cuya nacionalidad se discute si ostentaba o no el causante. En caso de que el
causante sea apátrida hemos de acudir al art. . de la Convención sobre el estatuto de los
apátridas, firmada en Nueva York el  de septiembre de , que indicará cual es la ley
personal del causante, aplicando entonces la ley del país de su domicilio y, en su defecto, la
ley del país de su residencia (aunque esta sólo sea fáctica). En el supuesto de que causante
posea una nacionalidad indeterminada será de aplicación el art. . del Codigo Civil, que
nos lleva a la aplicación de la ley del país de residencia habitual del causante. Por último,
si se trata de un causante que ostenta varias nacionalidades, se ha de estar a los convenios
internacionales que sean de aplicación y, en defecto de éstos, al art. . del Codigo Civil
que nos indicará cual es la nacionalidad del causante que prevalece.
. C G, Dual Nationality and Community Law: The Micheletti Case, en
Tolley’s Immmigration and Nationality Law and Practice, vol. , , pp. –; L, Nota
a la STJCE de  de octubre de , García Avello, en Rev. crit. dr. int. privé, , pp. –.

Mª Dolores Adam Muñoz
permanentemente en ninguno de ellos, etc.. En estas circunstancias,
la nacionalidad o la tenencia de los bienes en alguno de estos Estados
en los que el causante se ha movido, podría ser un factor a tener en
cuenta a la hora de determinar su residencia habitual por la autoridad
competente, pero no los únicos.
.. (Sigue:) ámbito de aplicación material, espacial, temporal y personal
El Reglamento determina la ley aplicable al conjunto de la sucesión
por causa de muerte (art. .). Respecto a esta afirmación debemos
tener en cuenta que el Reglamento no define el concepto de sucesión;
no se trata, pues, de una definición propia del Reglamento sino que
éste habrá de ser interpretado de forma autónoma por los Estados
partes en el Reglamento, incluyendo todos los aspectos de una sucesión
y, en particular, «la adjudicación, administración y liquidación de la
herencia» . A efectos orientativos, el art. ., let. a, define la sucesión
como «la sucesión por causa de muerte, abarcando cualquier forma
de transmisión mortis causa de bienes, derechos y obligaciones, ya
derive de un acto voluntario en virtud de una disposición mortis causa
o de una sucesión ab intestato».
No obstante, el art. , pár. , excluye del ámbito de aplicación del
Reglamento las siguientes cuestiones: ) el Reglamento no será aplicable
a las cuestiones fiscales, aduaneras y administrativas (art. , inciso
segundo). Corresponde, por tanto, a los diferentes derechos internos
determinar las modalidades de cálculo y pago de los impuestos y otros
pasivos de derecho público, ya se trate de impuestos adeudados por
el difunto en el momento del fallecimiento o de cualquier tipo de
impuesto relacionado con la sucesión que deba ser abonado con cargo
a la herencia o por los beneficiarios; ) el estado civil de las personas
físicas, así como las relaciones familiares y las relaciones que, con
arreglo a la ley aplicable a las mismas, tengan efectos comparables (art.
., let. a); ) la capacidad jurídica de las personas físicas, sin perjuicio
de lo dispuesto en el art. , apartado , let. c), relativo a la capacidad
para suceder, la cual queda regida por la ley aplicable a la sucesión y
en el art.  (art. ., let. b), referido al conflicto móvil en materia de
. Así en nuestro derecho civil común, el concepto de sucesión y las diversas cuestiones
que se desprenden de la misma quedará regulado por los arts.  a .
Algunas consideraciones sobre la sucesión mortis causa [. . . ]

realización de una disposición mortis causa; ) las cuestiones relativas
a la desaparición, la ausencia o la presunción de muerte de una persona física (art. ., let. c); ) las cuestiones relativas a los regímenes
económicos matrimoniales, así como a los regímenes patrimoniales
resultantes de las relaciones que la ley aplicable a las mismas considere
que tienen efectos comparables al matrimonio (art. ., let. d) ; )
las obligaciones de alimentos distintas de las que tengan su causa en
la muerte (art. ., let. e) ; ) la validez formal de las disposiciones
mortis causa hechas oralmente (art. ., let. f ); ) los bienes, derechos
y acciones creados o transmitidos por título distinto de la sucesión,
por ejemplo mediante liberalidades, propiedad conjunta de varias
personas con reversión a favor del supérstite, planes de pensiones,
contratos de seguros y transacciones de naturaleza análoga, sin perjuicio de lo dispuesto en el art. , apartado , let. i (art. ., let. g); )
las cuestiones que se rijan por la normativa aplicable a las sociedades,
asociaciones y otras personas jurídicas, como las cláusulas contenidas en las escrituras fundacionales y en los estatutos de sociedades,
asociaciones y otras personas jurídicas, que especifican la suerte de
las participaciones sociales a la muerte de sus miembros (art. ., let.
h); ) la disolución, extinción y fusión de sociedades, asociaciones y
otras personas jurídicas (art. ., let. i); ) la creación, administración
y disolución de trusts (art. ., let. j); ) la naturaleza de los derechos
reales (art. ., let. k). Sobre este particular se pronuncia el art.  del
Reglamento, articulando, en la medida de lo posible, la adaptación
de los derechos reales, así cuando una persona invoque un derecho
real que le corresponda en virtud de la ley aplicable a la sucesión y
el derecho del Estado miembro en el que lo invoca no conozca ese
. En relación con esta cuestión se está realizando en la actualidad un Reglamento
relativo a la competencia, ley aplicable, el reconocimiento y la ejecución de resoluciones en
materia de regímenes económicos matrimoniales y, por otra parte, un Reglamento en materia de efectos patrimoniales de las uniones registradas. El proyecto de los mismos se puede
consultar en COM()  final, / (CNS) y / (CNS), respectivamente, 
de marzo de .
. Téngase en cuenta que sobre esta cuestión ya existen en la UE varios instrumentos
reguladores, principalmente el Reglamento / de  de diciembre de  del Consejo
que sustituye al Reglamento / que anteriormente también se aplicaba a las obligaciones alimenticias. Sobre los instrumentos internacionales que vinculan a España en materia
de alimentos, véase, por todos, C C–C G (dir.), op. cit., pp.
– y bibliografía allí citada.

Mª Dolores Adam Muñoz
derecho real en cuestión, este segundo Estado deberá adaptar ese, en
la medida de lo posible, al derecho real equivalente más cercano de
su derecho, teniendo en cuenta los objetivos y los intereses que el
derecho real invocado persiga y los efectos inherentes al mismo; )
cualquier inscripción de derechos sobre bienes muebles o inmuebles
en un registro, incluidos los requisitos legales para la práctica de los
asientos, y los efectos de la inscripción o de la omisión de inscripción
de tales derechos en el mismo (art. ., let. l), ya que en esta materia
los diferentes Estados suelen tener competencia exclusiva.
El Reglamento es aplicable en todos los Estados miembros de la
Unión a excepción de Dinamarca, Irlanda y Reino Unido y tiene carácter irretroactivo, es obligatorio en todos sus elementos y directamente
aplicable en los Estados miembros. Entra en vigor a los veinte días
de su publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea. Dicha
publicación se practicó el  de julio de ; no obstante, será aplicable
a partir del  de agosto de , excepto por lo que respecta a los arts.
 y , que serán aplicables a partir del  de enero de , y a los
arts. ,  y , que ya se aplican a partir del  de julio de  (art.
).
Se trata de un Reglamento de aplicación erga omnes o de carácter
universal, por lo que la ley designada en virtud de las disposiciones del
mismo se aplicará aun cuando no sea la de un Estado miembro (art.
). Así pues, además de ser aplicable a toda persona, es irrelevante
que la ley designada por el Reglamento para regir la sucesión sea la
ley de un Estado miembro participante, de un Estado miembro no
participante o de un tercer Estado no miembro de la .
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