INFO ORMEE INTRODUC CTORIO O DE BASE S SEMINA ARIO TTÉCNIC CO SOB BRE IN VERSIO ONES EN N TURISMO EN E LASS AMER RICAS Asunci ón (Paraguay) 17 7-18 de m mayo de e 2011 Adolfo Favieres Abril de 2011 Informe introductorio de base Índice 1. 2. Introducción ................................................................................................................................... 2 1.1. La nueva economía mundial .................................................................................................. 2 1.2. Las inversiones a nivel global. Cifras y tendencias ................................................................ 3 El turismo como captador de inversiones ...................................................................................... 4 2.1. Una mirada a la historia ......................................................................................................... 4 2.2. Turismo y Sociedad ............................................................................................................... 4 2.3. La creación de empleo ........................................................................................................... 5 2.4. El motor del desarrollo ............................................................................................................ 6 2.5. La sostenibilidad de los destinos turísticos .............................................................................. 6 3. 4. 5. El clima de inversión ...................................................................................................................... 7 3.1. Crecimiento y desequilibrios económicos después de la crisis .............................................. 7 3.2. La competitividad como factor influyente en la inversión ....................................................... 9 3.3. Las variables de una inversión turística sostenible ................................................................ 9 Influencia de los agentes en el proceso inversor ......................................................................... 10 4.1. Las entidades financieras .................................................................................................... 10 4.2. La inversión privada ............................................................................................................. 11 4.3. La aviación comercial y las infraestructuras aeroportuarias................................................. 11 4.4. Las redes de distribución ..................................................................................................... 12 4.5. Las Administraciones Públicas ............................................................................................ 13 Referencias .................................................................................................................................. 14 1 Informe introductorio de base 1. Introducción 1.1. La nueva economía mundial La muy grave crisis de los años 2008 y 2009, cuyas consecuencias se dejan sentir todavía hoy en no pocos países y sectores económicos puso de manifiesto las carencias de un orden económico mundial que pocos anticiparon. La comunidad internacional se ha prestado a crear, o reforzar, un conjunto de mecanismos supranacionales de análisis, discusión, control y apoyo financiero que vertebren y consoliden un nuevo orden económico mundial y que lo inmunicen frente a hechos y prácticas que pudieran situarlo de nuevo en unas circunstancias como las vividas recientemente. No obstante, conviene no dejar de lado advertencias como las que señala la Financial Crisis Inquiry Comission -conocida como la Comisión Angelides- en su informe final (Enero 2011) al afirmar que el sistema financiero de EE.UU.-origen de la crisis- no ha cambiado en muchos aspectos respecto al que existía en vísperas de la crisis y, lo que es más notable, está más concentrado que nunca en manos de unas pocas instituciones, sistémicamente muy significativas. Pero es innegable que la configuración de la economía mundial que ha surgido tras la crisis es muy diferente a la de la pre-crisis. Su centro de gravedad se ha desplazado hacia el Oriente y el Sur y, a la vez, desde los países de la OCDE –ese “club de los países ricos”, como lo describiera algún Jefe de Estado- hacia los países emergentes, que en la década 2000/ 2010 han aumentado su cuota de la economía mundial del 40% al 49%, según el Centro de Desarrollo de la OCDE, con tendencia clara al aumento. El comercio Sur-Sur crece imparablemente. En 2010, China se ha convertido en el primer socio comercial de Brasil, India y Sudáfrica, ha arrebatado a Japón el segundo puesto de la economía mundial y a España el tercer puesto en el número de llegadas de turistas internacionales. El 40% de los investigadores del mundo se encuentran en Asia y el pasado año los países en vías de desarrollo poseían los dos tercios de las reservas mundiales de divisas. La definición simplista de Norte y Sur, de países desarrollados y países en desarrollo ha quedado obsoleta. Como afirmó el anterior Presidente del Banco Mundial, James Wolfensohn, estamos en un mundo de cuatro velocidades: países prósperos, convergentes, que luchan por abrirse paso y pobres. Hasta Goldman Sachs, que hace unos años acuñó el acrónimo B.R.I.C. (Brasil, Rusia, India y China) ha puesto en circulación un segundo, los países M.I.S.T. (México, Indonesia, Corea del Sur, Turquía) y no es aventurado suponer que pronto le seguirá algún otro. Todo lo anterior configura un escenario donde cobra creciente importancia la adopción de nuevos criterios, tanto geográficos como de actividad económica, para la toma de decisiones sobre el destino de las inversiones, que es algo enormemente sensible, donde los posibles errores se pagan muy caros, y donde su grado de reversibilidad es, casi siempre, bajísimo. Por ello es particularmente oportuno que la OMT haya organizado este Seminario, focalizado en un tema tan relevante como la inversión en turismo en las Américas. 2 Informe introductorio de base En particular, América Latina y Caribe ofrecen a la inversión turística unas inmensas posibilidades, que actualmente se evidencian con más fuerza, para que sean puestas en valor haciendo compatibles la rentabilidad de las inversiones, el desarrollo de las comunidades locales y la sostenibilidad social, medioambiental y cultural. La Región alberga un conjunto de recursos de difícil equiparación: recursos humanos, cada vez más motivados e instruidos, mejores infraestructuras, atractivos paisajísticos y culturales, recursos energéticos renovables y, por último y no por ello menos importante, ese recurso escaso hacia el que se vuelven cada vez más miradas: el agua, el “oro azul”. Por su carácter transversal, la actividad turística necesita el concurso de un conjunto considerable de agentes cuyo comportamiento influye de manera decisiva en la inversión turística. Los más relevantes tienen espacio propio en las cuatro sesiones del Seminario. 1.2. Las inversiones a nivel global. Cifras y tendencias Según UNCTAD (Conferencia de las NU sobre Comercio y Desarrollo), el panorama actual de la inversión extranjera directa (IED) muestra las características siguientes: Los flujos globales de IED se estancaron en 2010, creciendo apenas un 1%, como consecuencia de un fuerte repunte en Asia y América Latina y de la contracción que experimentaron las economías desarrolladas, con excepción de Estados Unidos, según el detalle siguiente. (Cifras en miles de millones de dólares USA). Mundial Economías desarrolladas Economías en desarrollo Europa Oriental y CIS Regiones / Países América Latina y Caribe Estados Unidos Unión Europea 2009 1.114,1 565,9 478,3 69,9 2010 1.122,0 526,6 524,8 70,5 Variación 0,7% 6,9% 9,7% 0,8% 116,1 129,9 361,9 141,4 186,1 289,8 21,4% 43,35% 19,9% En cuanto a los componentes de la IED, se comprueba un incremento importante de la reinversión de los beneficios de las filiales extranjeras en economías en desarrollo, a la vez que se registran tasas negativas en los préstamos matriz-filial y en las inversiones en acciones. 3 Informe introductorio de base Las previsiones de UNCTAD para 2011 se sitúan, a nivel global, entre 1,3 y 1,5 billones de dólares, superando los estimados 1,12 billones del año 2010, todavía alejados de la cifra récord de 1,77 billones que se alcanzó en 2008. Se vaticina que el aumento de la confianza de los empresarios empujará a mayores niveles de inversión, pero el grado de recuperación va a depender de conseguir un crecimiento económico sostenido y del comportamiento de la IED en las economías en desarrollo. En este sentido las previsiones de crecimiento económico facilitadas por el Fondo Monetario Internacional en Enero 2011 –que, con toda probabilidad serán revisadas muy pronto- dan lugar a las series siguientes para ciertas áreas geográficas: Mundial América Latina y Caribe Estados Unidos Canadá Unión Europea Japón 2009 0,6 1,8 2,6 2,5 4,1 6,3 2010 5,0 5,9 2,8 2,9 1,8 4,3 2011 4,4 4,3 3,0 2,3 1,7 1,6 2012 4,5 4,1 2,7 2,7 2,6 1,8 2. El turismo como captador de inversiones 2.1. Una mirada a la historia Los eruditos del turismo suelen hacer referencia a los orígenes del mismo, en diversas manifestaciones de los albores de nuestra era: turismo cultural en Babilonia (siglo VI A.C.), deportivo en los Juegos de Olimpia, religioso en La Meca. Los términos turista y turismo se originan en el Grand Tour al que las familias inglesas enviaban a sus hijos a recorrer Europa como parte de su formación (siglo XVII) y, posiblemente, el espaldarazo vital lo da la declaración Universal de Derechos Humanos al reconocer en su artículo 24 el derecho de todo trabajador a vacaciones pagadas en 1948, sin imaginar que el turismo se convertiría en uno de los principales motores, si no el mayor, del bienestar del ser humano. 2.2. Turismo y Sociedad El turismo es, ante todo, un fenómeno social. Y, en consecuencia, de una absoluta transversalidad, que le hace estar presente en multitud de actividades económicas en las que influye y por las que está influenciado. Y por ello es poliédrico como pocos, o ningún sector: se habla de numerosos segmentos turísticos: de ocio, de negocio, cultural, deportivo, religioso, gastronómico, ecológico, antropológico y muchos más. En definitiva, puede afirmarse que cualquier actividad humana genera, potencialmente, un nicho de mercado turístico. El hecho de que, en turismo, sea el consumidor el que viaje hacia el producto, y no al revés, como ocurre en la mayoría de otras actividades, confiere al sector turístico una característica especialmente 4 Informe introductorio de base señalada: la colaboración entre el sector público y el sector privado, que en cualquier otra actividad es siempre conveniente, en turismo es imprescindible. Cualquier análisis del hecho turístico es obligado se haga desde una doble perspectiva: países emisores y comunidades receptoras. Para los países emisores -al margen de la situación de su economía, que es obviamente determinante- su evolución socio-demográfica es de importancia capital, y esa evolución genera una mayor disponibilidad para viajar: a) Los “baby boomers”, que se están convirtiendo en “retired boomers”, con capacidad de gasto y mejor condición física. b) El mayor tiempo libre del que disponen los individuos. c) La incorporación de la mujer a puestos de mayor responsabilidad y salarios. d) El progresivo retraso del hombre y de la mujer para contraer su primer matrimonio y tener hijos. De otra parte, las comunidades receptoras de los turistas experimentan un impacto económico muy positivo - no siempre correspondido por impactos sociales, culturales y medioambientales del mismo tenor- especialmente sensibles en comunidades de bajo nivel de desarrollo. Por tanto, el turismo se percibe inicialmente como motor de un cambio que mejora el nivel de bienestar de las comunidades receptoras. Pero con demasiada frecuencia se llega a una segunda fase en que el turismo es, simplemente, tolerado y más tarde a una tercera, en la que se atribuye al turismo un conjunto de efectos negativos sobre la comunidad y su entorno, lo que no impide que el marco fiscal sea progresivamente más presionante. 2.3. La creación de empleo La atracción de inversiones turísticas es un objetivo prioritario para muchas economías, ya que una de las más relevantes señas de identidad del turismo es precisamente su capacidad de generación de empleo, tanto directo como inducido. Lo avala la cifra de 258 millones de puestos de trabajo, equivalente al 8.8% del empleo mundial, según el estudio de WTTC, que pronostica la creación de 65 millones de nuevos empleos para los próximos diez años. Pero lo más significativo de ello es la idoneidad del turismo para generar empleo femenino –primer empleo en muchos casos- y la relativa facilidad de capacitación de buena parte de los empleados ya que, con frecuencia, no es tanto un problema de aptitud, sino de actitud. Ocurre que, en turismo, y muy especialmente en el sector hotelero, son los empleados de salarios más bajos y de menor nivel de formación los que suelen tener más contacto con el cliente. Y es el nivel de satisfacción de ese cliente, consecuencia del trato recibido, lo que puede fidelizarlo a una determinada empresa. Esa interacción empleado-cliente es un pilar básico en la empresa turística, y de ahí la importancia capital del tratamiento de los recursos humanos y de la base de datos de los clientes. Estas dos colectividades, empleados y clientes, son los dos activos cuya atención prioritaria y gestión permanente marcarán sin duda las trayectorias de las empresas turísticas, más allá del activo físico donde esa relación empleado-cliente se desenvuelve. 5 Informe introductorio de base 2.4. El motor del desarrollo El modelo tradicional de desarrollo de las naciones que transformó antiguas economías de nivel bajo a modernas economías sólidas y diversificadas fue, secularmente, en la mayoría de los casos, el sector primario. Agricultura, ganadería y minería generaron los recursos, el trabajo y, en definitiva la riqueza que llevó a muchos pueblos a incorporarse a la revolución industrial primero y más tarde, a través de la investigación de algunos de ellos, a las tecnologías que hoy disfrutan. Ese modelo de desarrollo tiene algunas excepciones -probablemente España sea el ejemplo más contundente- en las que un país pueda encontrar en el turismo el generador de un grado de actividad económica, de riqueza, que permita, de una parte, dotar de los servicios sociales a sus comunidades que mejoren su bienestar y, de otra, equipar sus áreas productivas y sus infraestructuras como elementos generadores de nuevas fuentes de crecimiento económico y desarrollo y cohesión social. Es absolutamente seguro que el turismo, adecuadamente gestionado, va a generar divisas, empleo, fuerza laboral entrenada y un grado de conocimiento del país más allá de sus fronteras que se traducirá en una confianza creciente de los potenciales inversores, dando lugar a una suerte de “círculo virtuoso” indispensable para el desarrollo de un país. 2.5. La sostenibilidad de los destinos turísticos Con frecuencia se achaca al turismo su contribución a la degradación de ciertos destinos por vía de actuaciones urbanísticas que han deteriorado el medio ambiente, los bienes culturales e incluso la estructura social de las comunidades locales. Sin negar la existencia de algunos casos en que haya podido ser así, lo cierto es que el hecho turístico se comporta, en la gran mayoría de los casos, de muy otra manera. El territorio de uso turístico, planificado o surgido por iniciativas inversoras individuales consecutivas, generalmente no ha tenido anteriormente ningún otro uso. El turismo no ha desplazado otras actividades previas. Véase el caso de Cancún en México, Cayo Coco en Cuba o Punta Cana en República Dominicana. No existe, por tanto, la posibilidad de darle a ese territorio otro uso alternativo al turístico, y una correcta planificación del territorio hará que el impacto por el uso turístico será muy inferior al que, eventualmente, pudiera ser alternativo. Es más, las inversiones turísticas en ese territorio cuidarán con atención que sus proyectos conserven el medio ambiente, porque suele ser éste el atractivo principal para hacer viable la inversión, ya que el turista valora crecientemente los destinos respetuosos con el entorno. Otro tanto puede afirmarse de la sostenibilidad cultural de los destinos. De nuevo aquí los objetivos de las administraciones públicas que representan los intereses de las comunidades locales y los objetivos de los inversores privados son coincidentes. La identidad cultural de los destinos es, nuevamente, uno de sus atractivos importantes para sus potenciales visitantes. Más complejo es el análisis de la sostenibilidad social de los destinos. En efecto, el flujo de fondos que el turismo inyecta en la comunidad local puede cambiar su morfología social. Puede darse una reversión de las capas sociales previas a la llegada del turismo por efecto de éste. Y los hábitos de comportamiento de los turistas van a afectar, inevitablemente en alguna medida, a las comunidades 6 Informe introductorio de base locales. Sobre todo si contamos con que, en no pocos casos, las pautas de comportamiento de los individuos como visitantes no son las mismas que siguen en su lugar de origen. Las administraciones públicas, como responsables de los administrados, deben prestar atención a este fenómeno. El turismo produce un efecto financiero saludable al hacer que flujos monetarios riqueza, en definitiva- se traslade de países “ricos” a países en algunos casos necesitados de esos flujos. Pero también transfiere hábitos y comportamientos para los que, posiblemente haya que preparar a la comunidad receptora, sin dejar de tener en cuenta que no todos los cambios pueden tacharse de negativos por el hecho de alumbrar situaciones y escenarios nuevos. Las administraciones públicas pueden reconducir en buena medida los cambios estructurales que puedan darse por medio del uso de políticas fiscales redistributivas. Pero, en todo caso, habrá que recordar que el desarrollo personal de las comunidades debe prevalecer sobre determinadas consideraciones sobre la sostenibilidad a ultranza -la intocabilidad- de los territorios. 3. El clima de inversión 3.1. Crecimiento y desequilibrios económicos después de la crisis Los efectos directos de la crisis global de los años 2008 y 2009 se dejaron sentir de manera irregular en la Región, como una muestra más de su bipolaridad. La sub-región América del Norte, especialmente EE UU, pudo sufrir efectos devastadores. Solamente la intervención de su gobierno, inyectando en el sistema financiero -y no solamente el financierosumas difícilmente imaginables, al amparo de la Ley de Estabilización Económica de Emergencia (2008), impidió el colapso de la economía. Esto no ha impedido que persistan determinados desequilibrios en la sub-región, cuyos efectos más visibles se dan en: (a) (b) (c) (d) Desequilibrio presupuestario y deuda externa crecientes. Inflación subyacente “agazapada”. Crecimiento no consolidado. Nivel de empleo insatisfactorio, que no alcanzará hasta 2012/2013 el nivel de principios de 2008. En cambio, en la subregión América Latina y Caribe los efectos de la crisis global fueron menores que en otras economías más desarrolladas. También su recuperación en 2010 y previsible para 2011 superan los del mal llamado “primer mundo”. Las economías de la región emergen de la crisis creciendo con vigor, impulsadas -como bien afirma Nicolás Eyzaguirre, Director para el hemisferio occidental del FMI- por ese “doble viento a favor” que suponen las condiciones favorables de financiamiento externo y la demanda y precios elevados de las materias primas. 7 Informe introductorio de base Pero como recientemente señalaba el Director Gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, en Calgary, con ocasión de la reunión del Banco Interamericano de Desarrollo, están surgiendo señales inequívocas de calentamiento que resultan preocupantes: aumento de la inflación, rápido crecimiento del crédito y auge de los mercados de valores. La historia de la región muestra numerosos casos en los que una expansión económica excesiva –recuérdese el bien conocido término “plata dulce”- que desemboca en crisis profundas. La conclusión, si no queremos que el olvido de la historia nos lleve a su repetición, es que un mal manejo de las épocas de bonanza es el germen de graves problemas posteriores. Para las administraciones públicas, su principal reto a corto plazo es conseguir un aterrizaje suave de sus economías. Para ello, deberían tomarse en consideración un conjunto de medidas: a) b) c) d) Retiro de los estímulos macroeconómicos aplicados durante la crisis. Adopción de políticas fiscales rigurosas y aumento de los tipos de interés. Flexibilidad en el tipo de cambio que atenúe la entrada de capital. Implantación de medidas prudenciales que protejan la estabilidad del sistema financiero. Aunque la crisis financiera haya quedado atrás, la economía global es aún vulnerable a ciertos efectos y –siguiendo con la cita a Dominique Strauss-Kahn-es prudente la adopción de políticas contra-cíclicas que conduzcan, de una parte, a la creación de un “espacio fiscal” que pueda contrarrestar los efectos de la crisis y, de otra parte, mejoren los instrumentos de vigilancia de los riesgos financieros y, a la vez, fortalezcan su capacidad de regulación financiera macro-prudencial. En todo caso, el diseño de una estrategia que favorezca el crecimiento económico sostenible pasa, inevitablemente, por: a) b) c) d) Mayor dotación de infraestructuras. Mejoras en la educación y la capacitación. Mejora del clima empresarial. Fortalecimiento de la gobernabilidad. En definitiva, no se trata solamente de una cuestión de crecimiento. En la región subsiste una profunda desigualdad y las administraciones públicas deben priorizar sus actuaciones presupuestarias en materia de servicios sociales para poder asegurar los beneficios derivados del crecimiento en las capas más amplias de sus sociedades. Una de las asignaturas pendientes más complejas en los servicios sociales de la sub-región América Latina y Caribe es la cobertura de los regímenes de protección social. Según la OECD esta cobertura afecta a menos del 50% de los trabajadores (30% en el caso de las pensiones) y la explicación puede encontrarse en los factores siguientes: a) La elevada informalidad laboral. b) Una población laboral muy joven. c) Recursos fiscales limitados. 8 Informe introductorio de base Conseguir el objetivo de aumentar la cohesión social –y ello es aplicable a cualquiera de las sociedades de la sub-región- pasa por resolver, gradualmente pero con decisión, este manifiesto desequilibrio. Y la clave estará en la adecuada distribución de los mayores ingresos fiscales generados por el crecimiento, repartiendo los recursos presupuestarios, con una visión a medio y largo plazo, entre las inversiones directa o indirectamente productivas y las prestaciones sociales, con especial énfasis en las capas sociales más desfavorecidas. 3.2. La competitividad como factor influyente en la inversión La importancia de la captación de inversiones turísticas por parte de la práctica totalidad de los países ha convertido esta actividad en una verdadera competición. Han proliferado las Agencias gubernamentales de promoción de inversiones y en el caso de países de economía descentralizada, se suman un conjunto de agencias en un segundo nivel - provincial, estatal o autonómico, según denominaciones- o incluso a nivel local. Al hilo de esta competición han entrado en escena, afortunadamente, Universidades, Escuelas de Negocios, Lobbies y Asociaciones que elaboran sus propios análisis de competitividad como instrumentos para la toma de decisiones por parte de quien tiene la última palabra sobre la idoneidad de la inversión. Todos estos estudios deben ser bienvenidos y el mundo del turismo debe felicitarse por el hecho de que buena parte de esos estudios giren sobre la competitividad turística. El turismo necesita un aporte considerable de I+D+i, porque tradicionalmente fue una actividad muy pragmática, basada más en la intuición -y tantas veces en el mimetismo- que en el análisis sosegado y riguroso de los mercados y sus tendencias. Posiblemente, el estudio de competitividad turística que más difusión consigue es el elaborado por el World Economic Forum. Es un trabajo que “mide los factores y políticas que hacen atractivo el desarrollo del sector turismo en diferentes países”. En 139 países, concretamente. La clasificación la encabezan Suiza, Alemania y Francia, y la cierran Burundi, Angola y Chad. Este trabajo del WEF no mide tanto la competitividad de los “jugadores” del sector, es decir, cuán competitivos son a la hora de atraer inversiones turísticas, sino más bien la facilidad relativa -casi la comodidad, si existiese- para llevar adelante el proceso, siempre arduo, de implantación de una inversión turística. Competitividad no es, en este caso, sinónimo de éxito. 3.3. Las variables de una inversión turística sostenible En definitiva, un inversor busca la maximización del valor de su inversión, que inevitablemente será medida por su capacidad, actual y futura, de generar beneficios. Debe generarlos para sus accionistas, empleados, financiadores, proveedores, clientes y recaudadores de impuestos. Y debe hacerlo en perfecta armonía con su entorno ambiental, social y cultural. Este cuadro presenta un gran ejemplo de responsabilidad social corporativa y de una inversión sostenible. Conseguirlo dependerá de cómo se gestione una serie de variables, endógenas y exógenas. Del cúmulo de variables que condicionarán la evolución de esa inversión modélica hay algunas que, por ser variables iniciales son determinantes en el proceso de toma de decisiones: el inversor evaluará con las administraciones públicas un conjunto de condiciones necesarias pero no suficientes para el éxito de su proyecto de inversión: 9 Informe introductorio de base a) Estabilidad macroeconómica, que creará un marco favorable para financiar su proyecto y no dañará su inversión. b) Seguridad jurídica y facilidad de arbitraje: el riesgo que se asume es solamente el lógico en toda actividad empresarial y las inevitables discrepancias que surjan se dirimirán con unas reglas de juego respetables y respetadas. c) Sistemas de protección de inversiones: Tratados de Protección, Tratados que eviten la doble imposición y libertad de repatriación de beneficios. d) Marco fiscal estable y predecible, que no se altere más allá de su estatus inicial. e) Grado de prioridad del turismo en las políticas públicas: Porcentaje de los impuestos que devenga la actividad turística que revierten sobre el turismo. Dos factores importantes quedan fuera del ámbito del Sector público: a) La proximidad geográfica del destino de la inversión turística respecto a los mercados emisores actuales y futuros, y b) La magnitud del mercado interno del país en cuestión. Este grupo de siete variables configuran la primera fase del proceso de decisión. 4. Influencia de los agentes en el proceso inversor 4.1. Las entidades financieras Las entidades financieras privadas de las Américas y las instituciones públicas plurinacionales desempeñan un papel esencial, como no podría ser de otra manera, en el proceso inversor, y ese rol estará influenciado por el marco macro-financiero en el que actúan: La recuperación de la mayoría de los países de la sub-región América Latina y Caribe, el crecimiento sustancial del crédito al consumo y el fortalecimiento de muchas monedas locales dio lugar en el año 2010 a un crecimiento de las importaciones del 23%, aumentando el déficit por cuenta corriente hasta el 1,5% del PIB regional, compensado por la IED, que hizo aumentar las reservas hasta USD 650 miles de millones. La deuda externa de la sub-región se situó en 1,100 mm, equivalente al 23% del PIB regional, tres puntos porcentuales por debajo del año 2009. Según los datos publicados por el Institute of International Finance (IIF), los bancos comerciales retomaron en 2010 su dinámica crediticia prestando un importe neto de USD 27mm, después de presentar un saldo neto negativo en 2009, pero todavía lejos de la cifra record de 53mm registrada en 2207. Las instituciones financieras internacionales prestaron en 2010 un importe neto de USD 7,1 mm. Simultáneamente, la prima de riesgo bajó ligeramente de los niveles de 2009, que a su vez fueron notablemente inferiores a los de 2008, abaratando los costos de la financiación internacional. Y el riesgo soberano, los diferenciales de CDS (Credit Default Swaps), siguió la misma línea. En el caso específico de la financiación de proyectos turísticos, los inversores tienen la opción de endeudarse en dólares, que es la unidad monetaria de cuenta en la que se nominan la mayoría de sus ventas, lo que les abre mayores posibilidades y a menor costo para cubrir sus necesidades de financiación a largo plazo. 10 Informe introductorio de base Según advierte el FMI, se está produciendo un efecto de “des-dolarización” financiera en América Latina y Caribe, región que se caracterizó durante décadas por el efecto contrario. La causa hay que buscarla en la mayor confianza en las monedas locales, que han seguido una evolución alcista en su tasa cambiaria. La consecuente des-dolarización de los depósitos ha trasladado el mismo efecto a los créditos. En cualquier caso, el uso habitual del dólar en multitud de cotizaciones y transacciones auguran una larga vida a la dolarización del sistema financiero, aún con tendencia descendiente. 4.2. La inversión privada Los cambios que han sucedido en el orden económico mundial durante la crisis apoyan el vaticinio de que los inversores privados, nacionales y extranjeros, individual o colectivamente, tendrán más “apetito” inversor en las economías emergentes. Sin duda ocurrirá en la Región de las Américas, donde se da el paradigma Norte-Sur como en ningún otro continente, pero también desde Europa, donde, fundados o infundados, hay augurios poco entusiastas para países periféricos, sin excluir otros que no lo son. Los inversores analizan nuevas políticas de inversión que, particularmente en el turismo cuentan con una senda ya marcada, y, en general, transitada con éxito. China e India configuran otra sub-región, cerca ya de los 3,000 millones de habitantes, que será, a corto plazo, un inmenso mercado emisor de turistas, y las cadenas hoteleras de esos países tenderán a dar un salto cualitativo para estar presentes en los mercados que acojan a esos centenares de millones de potenciales visitantes, creando nuevas oportunidades de inversión. Se acentuará la tendencia a separar en las inversiones turísticas, particularmente en los hoteles, la propiedad de los activos y la gestión de la explotación de los mismos. Es una tendencia apoyada en la lógica, puesto que ambas actividades requieren habilidades e instrumentos distintos y suponen un grado de vulnerabilidad muy diferente. La capacidad de gestión de la explotación hotelera y la consolidación de la marca asociada requiere un proceso de afirmación en el mercado mucho más dilatado que el de la propiedad de un activo físico. Ello es una consecuencia más de las lecciones que ha dado la crisis. 4.3. La aviación comercial y las infraestructuras aeroportuarias Puesto que turismo y viajes son conceptos indisolubles, y la gran mayoría de los turistas internacionales usan el avión para hacer turismo, la aviación comercial es el agente clave en el mundo del turismo. Los enormes progresos que la industria aeronáutica ha conseguido en las últimas décadas, diseñando y construyendo aviones más rápidos, seguros y eficientes ha sido un estímulo extraordinario para el desarrollo del turismo. Especialmente los destinos muy alejados de las fuentes tradicionales de turistas han resultado económicamente accesibles gracias a esos progresos. 11 Informe introductorio de base La aviación comercial se mueve en un entorno especialmente difícil, oligopólico como pocos: existen solamente dos fabricantes mundiales de aviones de cabina ancha, tres fabricantes de motores adecuados a esos aviones, tres sistemas de reservas y –salvo excepciones- un único aeropuerto de origen/destino. Según IATA, el número de pasajeros internacionales aumentó en 2010 un 6,2%, que se reparte en un aumento del 9,1% en viajes “Premium” (primera clase y business) y un 5,9% en clase económica. Y lo hicieron volando en una flota, según datos de “Flight Global” a 31.12.2010, compuesta por 27.047 aeronaves (0,4% de aumento anual), de las que 10.661 están matriculados en las Américas, representando el 30,4% del total mundial. También en el caso de la aviación comercial es claro el desplazamiento del centro de gravedad hacia Asia. Las compañías de esta región tienen cursados pedidos por un total de 3.049 aviones, un 45% de la cartera total de la industria aeronáutica mundial, y este porcentaje es aún superior en el caso del mega-carrier A 380. Ninguna inversión turística será económicamente viable si no tiene resuelta su conectividad aérea, es decir, aeropuertos, vuelos y conexiones. Una vez más aparece aquí la necesaria colaboración entre las administraciones públicas y la iniciativa privada. Una colaboración que no admite líneas rojas de competencias pre-establecidas: hoy coexisten modelos de gestión aeroportuaria pública y privada, como igualmente líneas aéreas privadas y públicas. Dentro de la economía de mercado que rige en el mundo casi sin excepción, y como una de las consecuencias de la desregulación aérea, ha aparecido en los últimos años un fenómeno turbulento en la aviación comercial: las compañías “low cost”, o “punto a punto” que sería más apropiado, que especialmente en Europa- han crecido con rapidez, alcanzando en algunos países marcadamente turísticos cuotas de mercado superiores al 50%. Ello ha variado en no pocos casos la estrategia de compañías aéreas tradicionales, que se centran cada vez más en sus rutas de larga distancia, donde la penetración de las “low cost” es y será muy baja. 4.4. Las redes de distribución El desarrollo de las tecnologías de la información y, en particular, la eclosión de Internet revolucionó el panorama del turismo. El viajero, al estar muy bien informado sobre destinos, viajes, alojamientos y opciones, se ha emancipado de los tradicionales canales de distribución. De hecho, este fenómeno, que tiene por delante un gran recorrido vía la telefonía celular, ha hecho reconsiderar la idoneidad de la tradicional cadena de valor de los grandes grupos turísticos integrada verticalmente : mayoristaminorista-transporte aéreo-traslados-hotel-excursiones a través de la que el viajero transitaba, como en una virtual cadena de montaje, entregando su contribución económica en cada uno de los eslabones. Internet ha tenido la virtud de poner en contacto al cliente con los proveedores de servicios turísticos, con lo que la visibilidad del proveedor de tamaño medio, incluso pequeño, se coloca a un nivel no tan diferente del mega-proveedor. También Internet ha propiciado la divulgación de los índices de satisfacción de los clientes, con lo que ha colocado un techo de cristal en los otrora inviolables santuarios de servicios turísticos. 12 Informe introductorio de base No son las redes de distribución un elemento diferenciador a la hora de decidir dónde y cuándo llevar a cabo una inversión, porque, en todo caso y en cualquier destino hay que usarlas, pero es un agente que no debe estar ausente de ninguna aproximación rigurosa al hecho turístico. 4.5. Las Administraciones Públicas Para que las Administraciones públicas tengan éxito en su proceso de promoción de inversiones turísticas, tema extraordinariamente competido, es imprescindible cuenten con un plan estratégico bien definido, y esta definición debe ser consecuencia de un estudio llevado a cabo con una doble perspectiva. De una parte, se debe analizar y priorizar la propia oferta turística: conocer qué diferenciación puede ofrecer el país a los potenciales turistas respecto a otros destinos alternativos competidores. De otra, estudiar qué conjunto de condiciones, servicios e incentivos estarán a disposición de las empresas turísticas que se implanten en el país. El primer análisis parece sencillo de ejecutar, pero con frecuencia la elección es errónea. El segundo es sencillo de definir, pero su ejecución es compleja y plagada de dificultades. Un país puede resultar atractivo para el visitante, pero no tanto para el inversor, y viceversa. Se da el caso de algunos países de la región donde el índice de satisfacción es alto y, en cambio, el de repetición es muy bajo. La razón habrá que buscarla en el escaso número de recursos, de atracciones puestos de manifiesto al visitante. Siempre hay una “idea fuerza”, una motivación concreta, que hace que un turista decida conocer un país. Pero el deseo de volver –la fidelización del cliente, en definitiva- se consigue cuando el visitante percibe que hay otras muchas sensaciones que experimentar. Y el turista busca sensaciones. La segunda perspectiva obligada en el Plan estratégico va a ser determinante para el inversor, que va a investigar con el Gobierno un conjunto de atributos sobre los que sabe no tendrá oportunidad de influir más adelante: a) b) c) d) e) f) g) La seguridad ciudadana. Los servicios de salud. La fuerza laboral disponible y los centros de capacitación. La red de comunicaciones. La infraestructura aeroportuaria y de carreteras. La definición de las respectivas competencias administrativas. La transparencia de la función pública. En resumen, todo cuanto hasta aquí se ha escrito perdería valor y virtualidad si no se respetaran, como permanente telón de fondo de un hipotético escenario, dos condiciones indiscutibles: la sostenibilidad de todas y cada una de las actuaciones, y la redistribución socialmente equilibrada de las oportunidades y beneficios creados por el turismo. 13 Informe introductorio de base 5. Referencias Institute of International Finance (IIF) www.iif.com Financial Crisis Inquiry Commission www.Bookstore.gop.gov World Economic Forum (WEF) www.weforum.org International Development Research Center (IDRC) www.idrc.ca International Air Transport Association (IATA) www.iata.org United Nations Conference for Trade and Development - Global Investment Monitor (UNCTAD) www.unctad.org Financial Times www.fdiintelligence.com World Bank Investment Climate Assessment (ICA) www.worldbank.org Fondo Monetario Internacional (FMI) www.imf.org Asociación Latinoamericana de Entidades Financieras (ALIDE) www.alide.org.pe Comisión Económica para América Latina (CEPAL) www.eclac.org World Association of Investment Promotion Agencies (WAIPA) www.waipa.org 14