UNIVERSIDAD DE JAÉN ESCUELA POLITÉCNICA SUPERIOR DE JAÉN DEPARTAMENTO DE INGENIERÍA ELÉCTRICA TESIS DOCTORAL VIABILIDAD DE LA INTEGRACIÓN DE UNA PLANTA DE GASIFICACIÓN DE BIOMASA PRESENTADA POR: JOSÉ ANTONIO LA CAL HERRERA DIRIGIDA POR: DR. D. FRANCISCO JURADO MELGUIZO DR. D. BLAS OGÁYAR FERNÁNDEZ JAÉN, 11 DE MARZO DE 2013 ISBN 978-84-8439-731-1 UNIVERSIDAD DE JAÉN ESCUELA POLITÉCNICA SUPERIOR DEPARTAMENTO DE INGENIERÍA ELÉCTRICA TESIS DOCTORAL Viabilidad de la integración de una planta de gasificación de biomasa José Antonio La Cal Herrera Directores Dr. D. Francisco Jurado Melguizo Dr. D. Blas Ogayar Fernández 2013 AGRADECIMIENTOS Quiero expresar mi más profundo agradecimiento a mis dos Directores de Tesis, el Catedrático Francisco Jurado Melguizo y el Doctor Blas Ogayar Fernández. El primero, Paco, por sus sabias orientaciones y consejos, siempre raudos y precisos. El segundo Blas, por su infatigable y constante estímulo y empuje, sin el cual este trabajo nunca habría concluido. También quiero manifestar la mayor de las gratitudes a mi familia. En primer lugar a mi mujer Isabel, que siempre estuvo a mi lado desde la discreción y el respeto, mostrándome en todo momento su total complicidad; y, en segundo lugar, a mis padres, los cuales siempre creyeron en mí y, me animaron y apoyaron para que nunca abandonara el camino del Estudio y de la Biomasa, a lo que por cierto, siempre he hecho caso. Hay también un conjunto de personas de distintos ámbitos (empresarial, institucional y universitario), que me han servido de guía y de referencia y que han contribuido a que mi interés por las energías renovables en general y por la biomasa en particular sea cada vez mayor. Quisiera citar a algunos como Paco Bas, referente andaluz desde la Sociedad para el Desarrollo Energético de Andalucía, primero y desde la Agencia Andaluza de la Energía después. Tampoco quisiera olvidarme de María José Colinet, otra firme “creyente” de la biomasa en Andalucía. En el ámbito empresarial me gustaría agradecer la experiencia de Emilio López Carmona, hoy Consejero Delegado de una multinacional dedicada a la ejecución, entre otras cosas, de proyectos de biomasa. Tampoco quisiera olivar a Agustín Aragón, con el que tuve el honor de trabajar en mi periplo por tierras manchegas, desde la Agencia de Gestión de la Energía de Castilla-La Mancha, AGECAM. 1 No quisiera tampoco olvidarme de dos profesores que me han acompañado en este largo viaje. Son el Catedrático de Ingeniería Química de la Universidad de Jaén Sebastián Sánchez Villasclaras con el que empecé esta andadura allá por el año 1999, el Doctor Jorge Aguilera Tejero, Profesor Titular del área de Ingeniería Electrónica y Automática de la Universidad de Jaén; y el Catedrático de Máquinas y Motores Térmicos de la Universidad de Castilla-La Mancha, Magín Lapuerta Amigo. A todos ellos dedico este trabajo, especialmente a mis hijos Román, que cuenta ahora con cuatro añitos, y Olivia que nació hace unos meses y, que como dicen, vino con un pan debajo del brazo, para que si es posible disfruten en un futuro no muy lejano de un sistema energético donde las energías renovables constituyan la base del mismo, y no quede residuo o subproducto agrario y forestal sin valorizar. Jaén, Enero de 2013 2 A mi padre, In Memorian 3 “La vida es un largo peregrinar por el sendero de la perfección. Tratamos de alcanzar el final y no nos damos cuenta de que lo importante se encuentra en el recorrido. He conocido a muchos que se sienten infelices por no haber alcanzado sus sueños. Su ambición les ha cegado tanto que ya no ven las bondades que el propio camino les ofrece” Gonzalo Giner “El sanador de caballos” “Biomasa, viento y corrientes de agua son como ruedas impulsadas por el motor del Sol, que pueden girar eternamente siempre y cuando el hombre no modifique el equilibrio global que viene de fábrica” Junta de Andalucía “Andalucía Renovable” 4 SUMARIO El objetivo de la presente Tesis Doctoral es proponer y validar un nuevo modelo de gestión de los subproductos del olivar basado en la conversión termoquímica de los restos de poda mediante la tecnología de gasificación; y en el secado del orujo graso y húmedo generado durante la producción del aceite de oliva en la almazara, aprovechando para ello la energía térmica generada en el proceso de cogeneración termoeléctrica utilizando como energía primaria el gas generado mediante la gasificación [1] [2]. De esta forma se consigue, por un lado, valorizar energéticamente una fuente de biomasa, como son los restos de la poda del olivar, la cual es o quemada a cielo abierto o fragmentada y depositada en el suelo como aporte orgánico; y, por otro, un incremento del valor añadido de un subproducto considerado como residuo para la almazara, y una materia prima para la extractora de aceite de orujo, como es el denominado “alperujo”. A nivel práctico, el modelo consiste en la integración en una almazara de una instalación de cogeneración termoeléctrica alimentada con el gas generado en una planta de gasificación de restos de poda de pequeña potencia (< 100 kWe). El calor generado por los motores, tanto en el escape como en la refrigeración de los mismos, será aprovechado para el secado del orujo producido o, para cualquier otra aplicación, siempre y cuando se aproveche la totalidad del mismo para incrementar la eficiencia energética global del proceso. Por otra parte, la energía eléctrica producida será inyectada a red y, en función de la legislación vigente, facturada a la compañía distribuidora, o consumida por la propia almazara. Para que dicho modelo sea aceptado por el sector oleícola e implementado en las almazaras, tiene que ser evaluado en términos técnico-energéticos, económico-financieros, estratégicos, ambientales y socio laborales. Esto es lo que se pretende con el desarrollo de la presente Tesis Doctoral. 5 Una vez evaluado tiene que ser validado por el sector, para ello se ha diseñado una encuesta que será distribuida entre las almazaras de la provincia de Jaén en colaboración con organismos de investigación, asociaciones profesionales, instituciones, etc. El actual modelo de gestión de estos subproductos se basa en la eliminación de los restos de podas mediante incineración a cielo abierto o, en el mejor de los casos, su fragmentación mecánica y deposición sobre el suelo como aporte orgánico y de nutrientes; y en el traslado del orujo húmedo y graso generado durante la elaboración del aceite de oliva hasta las industrias de extracción de aceite de orujo u orujeras para la obtención, previo secado, del denominado aceite de orujo de oliva crudo1, el cual posteriormente es enviado a la refinería para la obtención de aceite de orujo de oliva refinado. Este modelo de explotación conlleva unos costes para el agricultor derivados, por un lado, de las tareas de eliminación o astillado de los restos de las podas, y por otro, de la manipulación del orujo generado en las almazaras, principalmente transporte hasta la extractora. El precio de mercado para este orujo suele ser estipulado por el sector extractor en función de la cosecha de aceituna. Por tanto, este modelo que puede ser considerado como “tradicional” no solo contribuye de una manera negativa al precio final del aceite de oliva, sino que además otorga al sector una mala imagen en términos de sostenibilidad y eficiencia energética. El nuevo modelo, en cambio, presenta una serie de ventajas para el agricultor tales como las siguientes: Aceite obtenido a partir del orujo de oliva mediante tratamiento con disolventes o con medios físicos (Fuente: Agencia para el Aceite de Oliva. Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente) 1 6 • La supresión del coste de eliminación de los restos de poda y su transformación en un ingreso por la venta de la biomasa a la almazara donde se ubique la instalación. • La reducción de un coste de manipulación del orujo puesto que al contener menor humedad su manejo es más fácil y, por ende, más económico, incluso pudiendo llegar a obtener un ingreso por su venta al extractor. • La generación de un ingreso adicional por la venta de la energía eléctrica generada en virtud del denominado Régimen Especial según el Real Decreto 661/2007, de 25 de mayo (BOE núm. 126 de 26 de mayo de 2007); o, en su defecto, su autoconsumo en virtud del Real Decreto 1699/2011, de 18 de noviembre, por el que se regula la conexión a red de instalaciones de producción de energía eléctrica de pequeña potencia (BOE núm. 295 de 8 de diciembre de 2011). • La independencia del sector extractor, al disponer ahora la almazara de una fuente de calor para el secado del orujo. Este nuevo modelo innovador, además de contribuir a la competitividad del sector en términos económicos, también le proporciona una nueva imagen más comprometida con la sostenibilidad, puesto que no requiere de la utilización de ninguna fuente de energía de origen fósil, y de mejora de la eficiencia en términos energéticos, tal y como ya se ha apuntado. Otra premisa fundamental del modelo es que debe ser viable en términos económico-financieros, por lo que han de determinarse las condiciones de contorno que marcan su rentabilidad. Para ello, se analizará un caso base y se estudiaran una serie de casos alternativos modificando las variables que pueden ser consideradas críticas: el precio de la biomasa a pie de planta, el coste específico de inversión y el porcentaje de aprovechamiento del calor residual generado en el proceso. 7 Además de lo anterior, la Tesis contiene un desarrollo exhaustivo de la biomasa generada por el sector oleícola, un análisis del actual modelo energético de la provincia de Jaén, así como de las principales políticas y programas de impulso al sector de la biomasa a distintos niveles. Incorpora también un completo recorrido por las diferentes tecnologías de gasificación de biomasa de pequeña potencia, con sus ventajas e inconvenientes, para concluir con la propuesta final de modelo de gestión, desde las vertientes técnica, económica y financiera, incluyendo también todas las externalidades que puedan contribuir a potenciar el modelo, tales como grado de innovación tecnológica, la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, la generación de empleo inducido y la diversificación productiva, etc. En definitiva, la Tesis introduce un nuevo modelo de gestión basado en una tecnología como la gasificación, la cual presenta innumerables ventajas desde un punto de vista operativo y estratégico en relación a otras como la combustión, además de energético (generación distribuida) y medioambiental; y establece bajo qué circunstancias este modelo debe ser implementado por el sector oleícola para, de esta forma, contribuir a mejorar su competitividad y también la imagen del propio aceite de oliva, reforzando su posicionamiento en la mente de los consumidores como un producto obtenido de una manera completamente sostenible en su acepción más global, respetando en todo momento el entorno en el que se genera. Es, en definitiva, una propuesta para el sector oleícola basada en la tecnología y bajo un enfoque de sostenibilidad global. Palabras clave: gasificación, restos de poda de olivar, orujo graso y húmedo o alperujo, Secado, cogeneración 8 SUMMARY The current model for olive cultivation is based on the farmer picking the fruit, transport them to the mill to produce extra-virgin olive oil, burn or chip the pruning debris and send the olive pomace from the mill to the extractor to obtain olive pomace oil. A sustainable technological option is the model shown in this Ph.D. It is based on gasification technology for energy valorisation of pruning debris and the use of heat generated for drying olive pomace. The gasification at small scale is able to introduce improvements from both, economic profits and sustainability within the olive oil sector. For that purpose it is necessary to modify the current management model of by-products, such as pruning debris and olive pomace, generated during the process of olive oil production, which nowadays means a cost for farmers in the removal, drying and transport, and transform it into a new model which allows to recovery the energy from the solid biomass through gasification technology and, at the same time, reduce pomace moisture to optimise its handling obtaining, this way, an additional income by commercialising it to the pomace oil extractor sector. To be able to make this model be accepted and implemented by the olive oil sector, it has to be feasible in economic terms, as its means carrying out new investments such as installing gasification system, storing-reservoirs, and pruning debris pre-treatments. 9 ÍNDICE GENERAL Relación de Figuras …………………………………………………………………………… 14 Relación de Gráficos………………………………………………………………………… 17 Relación de Cuadros…………………………………………………………………………... 21 Relación de Fotografías ……………………………………………………………................. 26 1.- INTRODUCCIÓN .................................................................................................. 29 1.1.- Planteamiento inicial ...................................................................................... 29 1.2.- Motivación y contexto de la investigación .................................................. 45 1.3.- Objetivos de la investigación ......................................................................... 54 1.4.- Organización de la Tesis ................................................................................ 56 2.- EL OLIVAR COMO GENERADOR DE BIOMASA .......................................... 58 2.1.- Introducción ..................................................................................................... 58 2.2.- La importancia del sector oleícola ................................................................ 67 2.3.- La biomasa del olivar: potencial energético ................................................ 73 2.3.1.- Los restos de las podas de olivar ........................................................... 81 2.3.2.- Subproductos de la industria olivarera............................................... 107 2.4.- El actual modelo de gestión de subproductos: costes .............................. 116 2.5.- Conclusiones .................................................................................................. 123 3.- COYUNTURA ENERGÉTICA DE LA PROVINCIA DE JAÉN .................... 127 3.1.- Introducción ................................................................................................... 127 3.2.-Parque provincial de generación de energía eléctrica .............................. 130 3.3.- Balance de energía eléctrica de la provincia de Jaén ................................ 144 3.4.- Consumo energético final y primario......................................................... 146 3.4.1.-Consumos finales .................................................................................... 146 3.4.2.-Demanda de energía primaria............................................................... 152 3.5.- Producción interior y autoabastecimiento energético ............................. 155 3.6.- Intensidad energética .................................................................................... 162 3.7.- Generación térmica con renovables ............................................................ 163 3.8.- Otras infraestructuras energéticas .............................................................. 165 3.9.-Princiapales magnitudes energéticas .......................................................... 166 3.10.-Conclusiones y propuestas de actuación futuras .................................... 170 3.11.-Indicadores energéticos 2005-2011............................................................. 173 4.- SITUACIÓN ACTUAL Y POLÍTICAS DE APOYO A LA BIOMASA ......... 185 4.1.- Introdución ..................................................................................................... 185 4.2.- Situación de la biomasa a nivel mundial ................................................... 189 4.3.-Situación de la biomasa en la Unión Europea............................................ 191 4.4.-La biomasa en España ................................................................................... 198 10 4.5.- La biomasa en Andalucía ............................................................................. 207 4.6.-Instrumentos de carácter político................................................................. 222 4.7.-Instrumentos legislativos y normativos ...................................................... 226 4.8.-Instrumentos de carácter económico ........................................................... 235 5.- CONVERSIÓN ENERGÉTICA DE LA BIOMASA. LA GASIFICACIÓN ... 240 5.1.- Introducción ................................................................................................... 240 5.1.1.-Procesos de conversión física ................................................................ 246 5.1.2.-Procesos de conversión termoquímica ....................................................... 252 5.1.3.-Procesos de conversión biológica.......................................................... 257 5.1.4.-Procesos de conversión bioquímica ...................................................... 260 5.2.-La gasificación de la biomasa residual ........................................................ 264 5.3.- Tecnologías de gasificación.......................................................................... 272 5.3.1.- Gasificador en corrientes paralelas (“downdraft”) ........................... 272 5.3.2.- Gasificador en contracorriente (“updraft”) ........................................ 274 5.3.3.- Gasificadores de lecho fluidizado ........................................................ 275 5.3.4.- Gasificador de lecho arrastrado ........................................................... 276 5.4.-Condicionantes técnicos de la gasificación ................................................. 281 5.4.1.-Factores dependientes de la biomasa ................................................... 281 5.4.2.-Factores dependientes de las condiciones de operación ................... 283 5.4.3.-Factores dependientes del diseño de los equipos ............................... 284 5.5.-Sistemas de acondicionamiento del syngas................................................ 286 5.5.1.-Materia particulada ................................................................................. 286 5.5.2-Compuestos orgánicos............................................................................. 287 5.5.3-Compuestos de nitrógeno, azufre, cloro y metales alcalinos ............. 289 5.6.-Balances de masa y energía........................................................................... 291 6.- LA GASIFICACIÓN DE BIOMASA EN ESPAÑA .......................................... 295 6.1.- Introducción ................................................................................................... 295 6.2.- Principales tecnologías españolas ............................................................... 299 6.2.1.-Tecnología “ENAMORA-GUASCOR BIONERGÍA”......................... 299 6.2.2.-Tecnología “TAIM WESER”. ................................................................. 303 6.2.3.-Tecnología “INERCO”............................................................................ 307 6.2.4.-Tecnología “CIDAUT”. .......................................................................... 308 6.2.5.- Otras tecnologías. ................................................................................... 311 7.- EL NUEVO MODELO DE GESTIÓN DE SUBRPRODUCTOS ..................... 313 7.1.- Introducción ................................................................................................... 313 7.2.-Análisis comparativo de alternativas .......................................................... 316 7.2.1.-Secado tradicional ................................................................................... 316 7.2.2.-Secado con cogeneración ........................................................................ 318 7.2.3.-Secado con gasificación .......................................................................... 320 7.3.-Descripción y alcance del modelo. Caso base ............................................ 321 7.4.-Viabilidad económica. Condiciones de contorno ...................................... 324 7.4.1.-Análisis del caso base ............................................................................. 325 7.4.2.-Determinación de las condiciones de contorno .................................. 328 7.5.-Modelos de explotación................................................................................. 334 7.6.-Externalidades ................................................................................................ 336 11 8.- CONCLUSIONES ................................................................................................. 338 8.1.-Principales conclusiones................................................................................ 338 8.2.-Líneas de investigación futuras .................................................................... 345 9.- APORTACIONES CIENTÍFICAS ...................................................................... 346 9.1.- Aportación científica ..................................................................................... 346 10.- ANEXOS .............................................................................................................. 350 10.1.- Modelo de Encuesta .................................................................................... 350 10.2.- Direcciones webs de interés ....................................................................... 355 11.- CURRÍCULUM DEL AUTOR .......................................................................... 358 11.1.- Breve Currículum Vitae del Autor ........................................................... 358 12.- REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS................................................................. 361 12.1.- Referencias bibliográficas........................................................................... 361 12 RELACIÓN DE FIGURAS NUMERACIÓN DENOMINACIÓN PÁGINA 1.1. CICLO DE RANKINE 38 1.2. 1.3. ESQUEMA DE UNA INSTALACIÓN DE GASIFICACIÓN DE BIOMASA MODELOS DE EXPLOTACIÓN DEL OLIVAR TRADICIONAL Y PROPUESTO 41 47 2.1. BIOMASA GENERADA POR EL OLIVAR 66 2.2. ZONAS OLIVARERAS DE ESPAÑA 68 2.3. MAPA DEL OLIVAR DE ANDALUCÍA 71 2.4. 2.5. 2.6. 2.7. 2.8. 2.9. 2.10. 2.11. 2.12. PROCESOS DE CONVERSIÓN ENERGÉTICA DE LA BIOMASA DISTINTAS ETAPAS PARA LA EXTRACCIÓN DE LOS RESTOS DE LA PODA DEL OLIVAR DEL CAMPO RELACIÓN PCI, HUMEDAD Y PRECIO PARA LOS RESTOS DE PODAS DE OLIVAR MÉTODOS ACTUALES DE OBTENCIÓN DE BIOCOMBUSTIBLES PROCESOS DE 2ª GENERACIÓN ESQUEMA DE OBTENCIÓN DE ETANOL A PARTIR DE RESTOS DE PODA DE OLIVAR ESQUEMA DE OBTENCIÓN DE BIODIESEL DE 2ª GENERACIÓN DIAGRAMA PROCESO EXTRACTORA DE ACEITE DE ORUJO ESQUEMA DE SECADERO ROTATIVO DE ORUJO 13 80 86 94 99 101 102 103 109 112 2.13. 3.1. ESQUEMA DEL MODELO ACTUAL DE GESTIÓN DE LOS SUBPRODUCTOS DEL OLIVAR BALANCE DE GENERACIÓN DE ENERGIA ELÉCTRICA EN LA PROVINCIA DE JAÉN 117 145 PRODUCCIÓN PRIMARIA DE ENERGÍA, 4.1. GENERACIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA Y CALOR 197 CONSUMIDO. Año 2010 4.2. 5.1. 5.2. 5.3. 5.4. 5.5. MAPAS DE POTENCIAL DE BIOMASA DE ANDALUCÍA PROCESOS DE TRANSFORMACIÓN DE LA BIOMASA RESIDUAL ESQUEMA GENERAL DEL PROCESO DE PELETIZACIÓN IGNICIÓN DE UNA CERRILLA REPRESENTACIÓN GRÁFICA DE LOS CICLOS DE POTENCIA BASADOS EN TURBINAS DE VAPOR DIAGRAMA DE LAS FASES EXISTENTES EN LOS PROCESOS DE GASIFICACIÓN 111 242 252 253 254 256 5.6. CLASIFICACIÓN POR OBJETIVOS DE PIRÓLISIS 258 5.7. ESQUEMA DE LA PRODUCCIÓN DE BIOETANOL 261 5.8. ESQUEMA DE LA PRODUCCIÓN DE BIODIESEL 263 5.9. ETAPAS DEL PROCESO DE GASIFICACIÓN 265 5.10. 5.11. GASIFICADORES “UPDRAFT”, “LECHO FLUIDIZADO” y “DOWNDRAFT ESQUEMA GLOBAL DEL MODELO. BALANCE ENERGÉTICO 278 292 5.12. ESQUEMA DEL PROCESO DE GASIFICACIÓN 293 5.13. BALANCE ENERGÉTICO DEL PROCESO 294 14 6.1. 6.2. 7.1. 7.2. 7.3. 7.4. ESQUEMA DE UN GASÓGENO DE AUTOMOCIÓN ESQUEMA GENERAL DE LA INSTALACIÓN DE CIDAUT SISTEMA TRADICIONAL DE SECADO DE ORUJO SIN COGENERACIÓN SISTEMA TRADICIONAL DE SECADO DE ORUJO CON COGENERACIÓN SISTEMA TRADICIONAL DE SECADO DE ORUJO CON PLANTA DE GASIFICACIÓN DE BIOMASA DESCRIPCIÓN GENERAL DEL NUEVO MODELO DE GESTIÓN DE SUBPRODUCTOS DEL OLIVAR 15 296 309 318 319 320 323 RELACIÓN DE GRÁFICOS NUMERACIÓN DENOMINACIÓN PÁGINA 1.1. CONSUMO MUNDIAL DE ENERGÍA. Año 2011. 31 1.2. DISTRIBUCIÓN POR PAISES DEL CONSUMO 32 MUNDIAL DE ENERGÍA. Año 2011 1.3. 1.4. 1.5. 1.6. 1.7. 1.8. 2.1. INTENSIDAD ENERGÉTICA MUNDIAL. EVOLUCIÓN 1990-2010 EMISIONES MUNDIALES DE CO2. EVOLUCIÓN 11902011 ESTRUCTURA DE LAS EMISIONES DE CO2 EN 2011 CONSUMO DE ENERGÍA PRIMARIA EN ESPAÑA. Año 2011 CONSUMO DE ENERGÍA FINAL EN ESPAÑA. Año 2011 PRODUCCIÓN NACIONAL DE ENERGÍA. Año 2011 COMPOSICIÓN TÍPICA DE LOS RESTOS DE LAS PODAS DE OLIVAR 32 33 33 34 35 35 62 DISTRIBUCIÓN DE LA GENERACIÓN BRUTA DE 3.1. ENERGÍA ELÉCTRICA. RÉGIMEN ORIDINARIO Y RÉGIMEN ESPECIAL. JAÉN, ANDALUCÍA Y ESPAÑA. 131 AÑO 2011. DISTRIBUCIÓN DE LA GENERACIÓN BRUTA DE 3.2. ENERGÍA ELÉCTRICA. RÉGIMEN ORDINARIO. JAÉN 131 Y ANDALUCÍA. AÑO 2011. DISTRIBUCIÓN DE LA GENERACIÓN BRUTA DE 3.3. ENERGÍA ELÉCTRICA. RÉGIMEN ESPECIAL. JAÉN Y ANDALUCÍA. AÑO 2011. 16 132 DISTRIBUCIÓN DE LA POTENCIA ELÉCTRICA 3.4. INSTALADA EN LA PROVINCIA DE JAÉN POR 134 TECNOLOGÍAS DISTRIBUCIÓN DE LA POTENCIA INSTALADA CON 3.5. ENERGÍAS RENOVABLES EN LA PROVINCIA DE 135 JAÉN. AÑO 2012 3.6. CONSUMO DE ENERGÍA FINAL EN ANDALUCÍA. DISTRIBUCIÓN POR PROVINCIAS AÑO 2010 147 EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA FINAL EN 3.7. JAÉN DESDE EL AÑO 2005. DISTRIBUCIÓN POR 147 FUENTES CONSUMOS DE ENERGÍA FINAL. ESPAÑA, 3.8. ANDALUCÍA Y JAÉN. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES. 150 AÑO 2011 3.9. 3.10. CONSUMO DE ENERGÍA FINAL EN LA PROVINCIA DE JAÉN. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES. AÑO 2011 DISTRIBUCIÓN PROVINCIAL DEL CONSUMO SECTORIAL DE ENERGÍA FINAL. AÑO 2011 151 151 EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA FINAL EN 3.11. LA PROVINCIA DE JAÉN. DISTRIBUCIÓN POR 152 FUENTES 3.12. DEMANDA DE ENERGÍA PRIMARIA. ANDALUCÍA Y JAÉN. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES. AÑO 2011 154 EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA 3.13. PRIMARIA EN ANDALUCÍA Y JAÉN DESDE EL AÑO 154 2005 3.14. EVOLUCIÓN DE LA PRODUCCIÓN INTERIOR DE ENERGÍA EN ANDALUCÍA Y JAÉN DESDE 2000 155 EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍAS 3.15. RENOVABLES PARA PRODUCCIÓN INTERIOR EN ANDALUCÍA Y JAÉN DESDE 2000 17 156 EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA SOLAR 3.16. FOTOVOLTAICA PARA PRODUCCIÓN INTERIOR EN 157 ANDALUCÍA Y JAÉN DESDE 2000 EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA SOLAR 3.17. TERMICA PARA PRODUCCIÓN INTERIOR EN 157 ANDALUCÍA Y JAÉN DESDE 2000 EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA EÓLICA 3.18. PARA PRODUCCIÓN INTERIOR EN ANDALUCÍA Y 158 JAÉN DESDE 2000 EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA 3.19. HIDRÁULICA PARA PRODUCCIÓN INTERIOR EN 158 ANDALUCÍA Y JAÉN DESDE 2000 EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA DE LA 3.20. BIOMASA PARA PRODUCCIÓN INTERIOR EN 159 ANDALUCÍA Y JAÉN DESDE 2000 DISTRIBUCIÓN POR FUENTES DE LA PRODUCCIÓN 3.21. INTERIOR DE ENERGÍA EN ESPAÑA, ANDALUCÍA Y 161 JAÉN. AÑO 2011 3.22. 3.23. CONSUMO DE ENERGÍAS RENOVABLES POR PROVINCIAS. AÑO 2011 EVOLUCIÓN INTENSIDAD ENERGÉTICA FINAL. ESPAÑA, ANDALUCÍA Y JAÉN. 161 162 3.24. DEMANDA BRUTA DE ENERGÍA ELÉCTRICA 174 3.25. PRODUCCIÓN BRUTA TOTAL 174 3.26. 3.27. 3.28. PRODUCCIÓN BRUTA TOTAL. DISTRIBUCIÓN ENTRE REGIMEN ORDINARIO Y ESPECIAL REGIMEN ESPECIAL. EVOLUCIÓN POR TECNOLOGÍAS PRODUCCIÓN BRUTA CON ENERGÍAS RENOVABLES FRENTE A PRODUCCIÓN BRUTA TOTAL. 18 175 176 177 ANDALUCÍA Y JAÉN 3.29. POTENCIA ELÉCTRICA TOTAL 177 3.30. POTENCIA ELÉCTRICA DE ORIGEN RENOVABLE 178 3.31. CONSUMO DE ENERGÍA FINAL 179 3.32. CONSUMO DE ENERGÍA FINAL. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES 180 3.33. CONSUMO DE ENERGÍA FINAL PER CÁPITA 180 3.34. CONSUMO DE ENERGÍA FINAL POR SECTORES 181 3.35 CONSUMO PRIMARIO DE ENERGÍA 182 3.36 3.37 3.38 4.1. CONSUMO PRIMARIO DE ENERGÍA. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES APORTACIÓN DE LAS ENERGÍAS RENOVABLES AL CONSUMO PRIMARIO DE ENERGÍA GRADO DE AUTOABASTECIMIENTO ENERGÉTICO. ANDALUCÍA Y JAÉN DISTRIBUCIÓN DEL POTENCIAL DE BIOMASA DE ANDALUCÍA 183 184 184 210 DISTRIBUCIÓN PROVINCIAL DEL CONSUMO DE 4.2. BIOMASA PARA USOS FINALES TÉRMICOS. 221 Andalucía, 2010 7.1. 7.2. 7.3. FRENTE A HUMEDAD PARA RESTOS DE PODAS DE OLIVAR PRECIO DE LA BIOMASA FRENTE A HUMEDAD PARA RESTOS DE PODAS DE OLIVAR ANÁLISIS DE LA RENTABILIDAD (TIR) EN FUNCIÓN DEL COSTE DE LA BIOMASA 329 330 331 ANÁLISIS DE LA RENTABILIDAD (TIR) EN FUNCIÓN 7.4. DEL PORCENTAJE DE APROVECHAMIENTO DE CALOR 19 333 7.5. TIR EN FUNCIÓN DE LA INVERSIÓN ESPECÍFICA 20 333 RELACIÓN DE CUADROS NUMERACIÓN DENOMINACIÓN PÁGINA 1.1. CADENA S DE VALOR EN BIOENERGÍA 43 1.2. RETOS TECNOLÓGICOS DE LA GASIFICACIÓN 44 1.3. COSTES TOTALES DE CULTIVO DE OLIVAR 46 1.4. 2.1. AYUDAS PERCIBIDAS POR EL OLIVAR. PROVINCIA DE JAÉN Período 16/10/2011 al 15/10/2012. FEAGA PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS DEL HUESO DE ACEITUNA DE ALMAZARA 53 61 PRODUCCIÓN DE BIOMASA PROCEDENTE DE 2.2. RESTOS DE PODA DE OLIVAR EN FUNCIÓN DE LA 105 CAPACIDAD PRODUCTIVA DEL OLIVO 2.3. ÍNDICE DE RESIDUO (IR) PARA EL OLIVAR 105 POTENCIAL DE BIOMASA Y ENERGÉTICO DE LOS 2.4. RESTOS DE LAS PODAS DE OLIVAR EN ANDALUCÍA 107 Y JAÉN 2.5. 2.6. PRINCIPALES PARÁMETROS DE LOS RESTOS DE LAS PODAS DE OLIVAR (S/HÚMEDO). BALANCE DE MASAS EN UNA TONELADA DE ACEITUNA 108 114 2.7. POTENCIAL BIOMASA INDUSTRIA OLEÍCOLA 115 2.8. COSTES DE ELIMINACIÓN DE RESTOS DE PODA 119 2.9. EXTRACTORAS DE ACEITE DE ORUJO DE ESPAÑA 121 BIOMASA GENERADA POR EL OLIVAR EN 2.10. ANDALUCÍA Y JAÉN Y POTENCIAL ENERGÉTICO DE LA MISMA 21 125 DISTRIBUCIÓN POR TECNOLOGÍAS DE LA 3.1. POTENCIA TOTAL INSTALADA EN LA PROVINCIA 133 DE JAÉN. Año 2012 3.2. 3.3. 3.4. POTENCIA INSTALADA CON ENERGÍAS RENOVABLES EN LA PROVINCIA DE JAÉN. AÑO 2012 INSTALACIONES DE COGENERACIÓN EN LAPROVINICA DE JAÉN. MARZO DE 2012 PLANTAS DE BIOMASA DE LA PROVINCIA DE JAÉN 135 136 137 CONSUMOS DE ENERGÍA FINAL EN ESPAÑA, 3.5. ANDALUCÍA Y JAÉN. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES. 149 AÑO 2011 3.6. DISTRIBUCIÓN SECTORIAL DE ENERGÍA FINAL. ANDALUCÍA Y JAÉN. AÑO 2011 150 CONSUMOS DE ENERGÍA PRIMARIA EN ESPAÑA, 3.7. ANDALUCÍA Y JAÉN. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES. 153 AÑO 2011 3.8. 3.9. 3.10. 3.11. 3.12. 3.13. 3.14. PRODUCCIÓN INTERIOR DE ENERGÍA EN ESPAÑA, ANDALUCÍA Y JAÉN. AÑO 2011 GRADO DE AUTOABASTECIMIENTO ENERGÉTICO DE ESPAÑA, ANDALUCÍA Y JAÉN. AÑO 2011 SUPERFICIE TOTAL INSTALADA EN LA PROVINCIA DE JAÉN. EVOLUCIÓN ANUAL (m2) GENERACIÓN DE ENERGÍA TÉRMICA CON BIOMASA PLANTAS DE PRODUCCIÓN DE PÉLETS EN LAPROVINCIA DE JAÉN PRINCIPALES MAGNITUDES ENERGÉTICAS DE ESPAÑA, ANDALUCÍA Y JAÉN. AÑO 2011 PRINCIPALES MAGNITUDES ENERGÉTICAS DE ESPAÑA, ANDALUCÍA Y JAÉN. AÑO 2011. DATOS 22 160 160 163 164 165 166 169 POR HABITANTE 4.1. 4.2. 4.3 4.4. 4.5. 4.6. 4.7. 4.8. 4.9. 4.10. ENERGÍA PRIMARIA PRODUCIDA CON BIOMASA EN LOS ESTADOS D E LA UE (2009 y 2010). PRODUCCIÓN ELÉCTRICA CON BIOMASA EN LOS ESTADOS D E LA UE (2009 y 2010). CALOR CONSUMIDO CON BIOMASA EN LOS ESTADOS D E LA UE (2009 y 2010). DISTRIBUCIÓN DEL CONSUMO DE BIOMASA SEGÚN ORÍGENES Y APLICACIONES EVOLUCIÓN DE LA POTENCIA ELÉCTRICA INSTALADA EN ESPAÑA CON BIOMASA (MW) POTENCIA TOTAL INSTALADA EN ESPAÑA Y NÚMERO TOTAL DE PLANTAS EXISTENTES PLANTAS DE BIOMASA EXISTENTES EN ESPAÑA CON TECNOLOGÍA DE COMBUSTIÓN PLANTAS DE BIOMASA EXISTENTES EN ESPAÑA CON TECNOLOGÍA DE GASIFICACIÓN EVOLUCIÓN DE LA ENERGÍA CONSUMIDA EN APLICACIONES TÉRMICAS CON BIOMASA (ktep) BIOMASA POTENCIAL vs NECESARIA PARA EL CUMPLIMIENTO DE LOS OBJETIVOS (Tmño) 191 194 195 199 200 201 202 204 205 206 4.11. POTENCIAL DE BIOMASA DE ANDALUCÍA 207 4.12. OBJETIVOS DE BIOMASA PARA ANDALUCÍA 214 4.13. 4.14. GENERACIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA EN ANDALUCÍA PLANTAS DE BIOMASA EXISTENTES EN ANDALUCÍA 215 216 4.15. PLANTAS DE BIOGAS EXISTENTES EN ANDALUCÍA 217 4.16. CONSUMOS TÉRMICOS POR TIPOS DE BIOMASA EN 219 23 ANDALUCÍA. Datos de 2010 CONSUMOS TÉRMICOS DE BIOMASA EN 4.17. ANDALUCÍA POR SECTORES Y PROVINCIAS. Datos 219 de 2010 CONSUMOS TÉRMICOS DE BIOMASA EN 4.18. ANDALUCÍA POR SECTORES Y PROVINCIAS. Datos 220 de 2010 4.19. 4.20. 5.1. 5.2. 5.3. OBJETIVOS DE COGENERACIÓN Y GENERACIÓN PURA CON BIOMASA EN EL PERIODO 2011-2020 OBJETIVOS POR TECNOLOGÍAS RENOVABLES RECOGIDOS EN EL PASENER PARÁMETROS FÍSICOS, QUÍMICOS Y ENERGÉTICOS DE LA BIOMASA INTERVALOS DE HUMEDAD DE ALGUNOS TIPOS DE BIOMASA SÓLIDA COMPARATIVA ENTRE PODERES CALORÍFICOS DE DISTINTOS COMBUSTIBLES 223 225 243 243 259 COMPARACIÓN DE RENDIMIENTOS ENTRE LAS 5.4. DISTINTAS TECNOLOGÍAS DE CONVERSIÓN DE LA 263 BIOMASA 5.5. 5.6. 5.7. 6.1. 6.2. CARACTERÍSTICAS DE LOS DIFERENTES SISTEMAS DE GASIFICACIÓN CARACTERÍSTICAS DEL GAS PRODUCIDO CON LOS DIFERENTES SISTEMAS DE GASIFICACIÓN NIVELES DE PARTÍCULAS Y ALQUITRANES PARA DIFERENTES TIPOS DE GASIFICADORES PARÁMETROS BÁSICOS DE LA PLANTA DE GASIFICACIÓN DE ENAMORA-GUASCOR PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS DE LA BIOMASA UTILIZADA EN LA PLANTA DE ENAMORA- 24 279 280 287 302 302 GUASCOR 6.3. 6.4. 7.1. PARÁMETROS BÁSICOS DE LA PLANTA DE GASIFICACIÓN DE TAIM WESER PARÁMETROS BÁSICOS DE LA PLANTA DE GASIFICACIÓN DE PASCH REQUISITOS TÉCNICOS QUE DEBE CUMPLIR LA ALMAZARA. 304 312 322 7.2. CASO BASE. PARÁMETROS DE PARTIDA 326 7.3. RESULTADOS CASO BASE 327 7.4. DATOS FINANCIEROS DEL PROYECTO 328 7.5. CARACTERÍSTICAS DE LOS ORUJOS SEGÚN EL SISTEMA DE ELABORACIÓN 332 RESUMEN DE LAS VENTAJAS E INCONVENIENTES 8.1. QUE PRESENTA LA BIOMASA COMO FUENTE DE ENERGÍA RENOVABLE 25 341 RELACIÓN DE FOTOGRAFÍAS NUMERACIÓN 1 2 DENOMINACIÓN RESTOS DE PODA DE OLIVAR APILADOS EN LA EXPLOTACIÓN BALSA DE ALPERUJO PÁGINA 63 63 RESTOS DE PODA DE OLIVAR ASTILLADO Y SECO 3 PARA SU VALORIZACIÓN ENERGÉTICA EN PLANTA 64 DE PRODUCCIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 PARQUE DE ALMACENAMIENTO DE ORUJILLO EN PLANTA DE GENERACIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA HUESO DE ACEITUNA APILADO EN PATIO DE ALMAZARA HOJÍN GENERADO EN LA ALMAZARA DURANTE LA FASE DE LIMPIEZA DEL FRUTO EXTRACTORA DE ACEITE DE OUJO OPERACIÓN DE QUEMA DE RESTOS DE PODA EN CAMPO MAQUINARIA ASTILLADORA “MANUAL” Y “AUTOMÁTICA” DE RESTOS DE PODAS DE OLIVAR MAQUINARIA ASTILLADORA “AUTOMÁTICA” DE RESTOS DE PODAS DE OLIVAR PLANTA DE GENERACIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA CON BIOMASA DEL OLIVAR MAQUINARIA DE PRODUCCIÓN DE ASTILLA FORESTAL PLANTA DE PRODUCCIÓN DE PÉLETS CON BIOMASA DEL OLIVAR 26 64 65 65 70 90 92 93 95 96 97 14 15 16 SECADERO DE EXTRACTORA PLANTA DE PRODUCCIÓN DE PÉLETS (Aldeaquemada) PLANTA DE GENERACIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA A PARTIR DE BIOGÁS DE VERTEDERO (Fuerte del Rey) 112 138 139 PLANTA DE GENERACIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA 17 ALIMENTADA CON BIOMASA DEL OLIVAR 139 (Villanueva del Arzobispo) 18 PLANTA DE PRODUCCIÓN DE BIODIESEL. (Estación de Linares-Baeza) 140 PLANTA DE GENERACIÓN ELÉCTRICA 19 ALIMENTADA CON BIOMASA DEL OLIVAR (Estación 140 de Linares-Baeza) 20 21 22 23 24 25 SISTEMA DE CLIMATIZACIÓN CENTRALIZADA CON HUESO DE ACEITUNA DE GEOLIT (Mengíbar) INSTALACIÓN DE ENERGÍA SOLAR FOTOVOLTAICA CONECTADA A RED (Torres) INSTALACIÓN DE ENERGÍA SOLAR TÉRMICA EN POLIDEPORTIVO MUNICIPAL (Linares) PARQUE EÓLICO DE LA SIERRA DEL TRIGO (Campillo de Arenas, Noalejo y Valdepeñas de Jaén) CENTRAL MINIHIDRÁULICA DE CASAS NUEVAS (Marmolejo) CALDERA DE BIOMASA PARA USOS TÉRMICOS EN RESIDENCIA DE ANCIANOS (Alcaudete) 141 141 142 142 143 143 26 MUESTRA DE PÉLETS 250 27 BRIQUETA CILÍNDRICA HUECA 250 28 BRIQUETAS CILÍNDRICA MACIZAS 251 29 VEHÍCULO CON GASÓGENO 297 27 30 31 32 33 34 VISTA GENERAL DE LA INSTALACIÓN DE GASIFICACIÓN DE GUASCOR VISTA GENERAL DE LA INSTALACIÓN DE GASIFICACIÓN DE TAIM WESER VISTA GENERAL DEL GASIFICADOR DE TAIM WESER VISTA GENERAL DE LA PLANTA DE GASIFICACIÓN DE INERCO VISTA DE LA PLANTA DE GASIFICACIÓN DE CIDAUT 28 301 305 306 308 309 1.- INTRODUCCIÓN 1.1.- Planteamiento inicial La elevada dependencia energética de regiones como Andalucía, el 86,10% en 2011, con un potencial de recursos de origen biomásico cifrado en 3.958 ktep2, un 21% del consumo total de energía primaria en 2011, procedentes en última instancia del sol, debe constituir un punto de inflexión para someter a revisión el actual modelo energético, el cual es insostenible en términos energéticos, económicos y medioambientales, tal y como reconoce la Agencia Internacional de la Energía [1] donde se revisan las perspectivas energéticas hasta el año 2030. Esta especie de “encrucijada energética” está caracterizada por los siguientes aspectos: • El crecimiento de la demanda. El efecto de la eficiencia se ve sobrepasado por el crecimiento demográfico y el aumento de los niveles de vida. La demanda de energía primaria crecerá un 1,6% anual entre 2006 y 2030, lo que supone un aumento del 45% respecto de las cifras actuales. China e India representan la mitad de este crecimiento. 2 Kilo Tonelada Equivalente de Petróleo, 1 tep = 107 kcal. 29 • La utilización generalizada de combustibles fósiles. El petróleo se estima que seguirá siendo la principal fuente de energía al menos hasta el año 2030, creciendo un 1% anual pasando de 85 a 106 millones de barriles al día. El carbón será la fuente de energía que experimente un mayor crecimiento debido a su uso en las centrales térmicas de generación de energía eléctrica en China. • La incertidumbre respecto a la disponibilidad de recursos energéticos fósiles, si bien está asegurada hasta 2030; así como a costes de producción y precios. • La creciente dependencia energética del exterior de los grandes países consumidores de energía (EE.UU., UE-27, Japón y China). • El acceso del total de la población mundial a servicios energéticos modernos. • El cambio climático. Las emisiones de CO2 de origen energético aumentarán un 45% hasta 2030, de las cuales un 75% procederán de China, India y Oriente Medio. En los gráficos 1.1 y 1.2 se muestra el consumo mundial de energía en 2011 por fuentes y su distribución en el mundo, pudiendo corroborarse alguno de los aspectos anteriormente citados. La intensidad energética, medida por el ratio de consumo energético primario dividido por el PIB mejoró a nivel mundial de forma continua entre 1990 y 2001, entre otras razones por la existencia de periodos de recesión económica, así como unas favorables condiciones climáticas. Sin embargo después creció ligeramente entre 2001 y 2004, volviendo a mejorar a partir de 2005. La evolución de este parámetro en los principales países consumidores de energía del mundo se recoge en el gráfico 1.3. 30 Como consecuencia de lo anterior, las emisiones de CO2 procedentes del consumo de energía en el mundo fueron en 2011 un 50,6% superior a las de 1990, a pesar del fuerte descenso en el área de Rusia y en el este de Europa, justo en el periodo de crisis económica. En los países desarrollados se registraron solo suaves aumentos o periodos de estabilización desde 1990, mientras que en Asia el crecimiento fue significativo, especialmente China e India, tal y como se muestra en el gráfico 1.4. En Europa occidental se registró una práctica estabilización entre esos años, debido al uso de tecnologías renovables en el parque de generación en detrimento de otras de origen fósil como el carbón. Gráfico 1.1. CONSUMO MUNDIAL DE ENERGÍA. Año 2011. 12.275 MTEP. Fuente: Statistical Review of World Energy 2012 31 Gráfico 1.2. DISTRIBUCIÓN POR PAISES DEL CONSUMO MUNDIAL DE ENERGÍA. Año 2011 Fuente: Statistical Review of World Energy 2012 Gráfico 1.3. INTENSIDAD ENERGÉTICA MUNDIAL. EVOLUCIÓN 1990-2010 Fuente: Comisión Europea y OCDE3 3 Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico 32 Por países, en 2011 el más emisor fue China, seguida de Estados Unidos. El principal sector emisor es el de generación de energía eléctrica, con un 35% del total, mientras que en 1980 era del 28%. En cambio en la industria suponen un 17% frente al 26% en 1980. Gráfico 1.4. EMISIONES MUNDIAOLES DE CO2. EVOLUICÍN 1190-2011 Fuente: Comisión Europea, OCDE, Statistical Review of World Energy 2012 Gráfico 1.5. ESTRUCTURA DE LAS EMISIONES DE CO2 EN 2011 Fuente: Comisión Europea, OCDE, Statistical Review of World Energy 2012 33 España, al igual que el resto del mundo, se enfrenta al enorme desafío que supone el doble problema: el cambio climático y el agotamiento de los recursos de origen fósil. El modelo español se caracteriza por la gran dependencia de fuentes fósiles (petróleo, gas natural y carbón) con un 76,8% en términos de energía primaria tal y como se puede apreciar en el gráfico 1.6. La nuclear tiene un peso del orden del 12%. En términos de energía final, la situación es similar, con un 67,7% de consumo de fuentes de origen fósil, a lo que hay que sumar un 25,2% de energía eléctrica. Las fuentes renovables aún suponen porcentajes bajos respecto del total, situándose en 2011 en el 11,6% en términos de consumos finales y del 7,2% en primarios. En cuanto a la producción nacional de energía, como se puede observar en el gráfico 1.8., el mayor peso lo ostenta la energía nuclear con un 48,6% del total, seguida por las renovables. Esta situación provoca que el grado de autoabastecimiento energético4 de España en el año 2011 se situara en el 75,6%. Gráfico 1.6. CONSUMO DE ENERGÍA PRIMARIA EN ESPAÑA. Año 2011 Fuente: “La energía en España 2011”. Ministerio de Industria, Energía y Turismo 4 Relación entre el consumo y la producción interior de energía. 34 Para salir de esta “encrucijada energética” es necesario, entre otras muchas cuestiones, valorizar los subproductos generados por las actividades agrarias y forestales; y en el caso de una provincia como la de Jaén, los procedentes del sector oleícola, especialmente los restos de las podas de olivar, los cuales son, en su mayoría, o quemados a cielo abierto o astillados y depositados en el suelo como aporte orgánico; y, en ningún caso, valorizados energéticamente de una manera integral con los consiguientes beneficios para el sector, al menos en términos económicos y sociales. Gráfico 1.7. CONSUMO DE ENERGÍA FINAL EN ESPAÑA. Año 2011 Gráfico 1.8. PRODUCCIÓN NACIONAL DE ENERGÍA. Año 2011 Fuente: La energía en España 2011. Ministerio de Industria, Energía y Turismo 35 Esta valorización puede llevarse a cabo de varias formas. Un primer paso podría ser someter a la biomasa generada a procesos de tipo físico, es decir, que no modifiquen sus propiedades químicas. Los más comunes son el fragmentado mecánico en sus distintas formas (astillado, triturado, picado,…), el densificado y el secado, natural o forzado. Otra opción consistiría en captar la energía contenida en la biomasa mediante el empleo de tecnologías de tipo termo o bioquímico. Las más usuales son la fermentación alcohólica, la digestión anaerobia, la combustión y la gasificación. Ello permitiría obtener productos de mayor valor añadido y más útiles para la generación de energía térmica, eléctrica o, incluso, biocarburantes para el transporte. Una de las tecnologías que presenta unas mayores ventajas de carácter tanto estratégico como energético y medioambiental, y está menos desarrollada a escala comercial es la gasificación, que consiste en una oxidación parcial a elevada temperatura de la biomasa a partir de la cual se obtiene un gas sintético, denominado syngas, que puede ser utilizado, previo tratamiento, como combustible en un motor de combustión interna alternativo o en una turbina de gas, para la producción simultánea de energía eléctrica, que será inyectada a la red para su venta o consumida por la propia instalación fabril; y/o térmica, que podrá ser aprovechada para fines como calefacción o secado. Es muy importante modificar el paradigma tradicional de la biomasa para generación de energía eléctrica, basado en el lema “acercar la biomasa a la tecnología” por otro basado en lo contrario, es decir, en “acercar la tecnología a la biomasa”. El primero se caracteriza por lo siguiente: • La utilización de una fuente principal de biomasa que podría denominarse “fácil” como es el “orujillo” en tanto está concentrada y localizada en puntos de fácil acceso como son las industrias de extracción 36 del aceite de orujo u orujeras, y a unos precios de venta competitivos que contribuyen a la rentabilidad de las inversiones en virtud del marco jurídico existente en España, el llamado Régimen Especial5, el cual se encuentra actualmente suspendido6. • Empleo de un ciclo de potencia representativo del proceso termodinámico que tiene lugar en una central térmica de vapor convencional. Mediante la combustión de la biomasa, tecnología contrastada y conocida, se produce vapor de agua a alta presión que posteriormente se expande en una turbina de vapor generando un trabajo mecánico en un eje, el cual se encuentra solidariamente unido a un generador eléctrico que es el encargado de producir la energía eléctrica. El vapor de baja presión que sale de la turbina se introduce en un condensador, donde el vapor condensa y cambia de estado empleando para ello algún sistema de refrigeración, como agua o aire. Por último, una bomba se encarga de aumentar la presión del fluido en fase líquida para reintroducirlo de nuevo en la caldera. Si bien la eficiencia energética no es muy elevada (en el entorno del 40%), existen algunas técnicas que permiten mejorarla como por ejemplo el sobrecalentamiento del vapor a la entrada de la turbina, el recalentamiento entre etapas de turbinado o la regeneración del agua de alimentación. 5 Real Decreto 661/2007, de 25 de mayo, por el que se regula la actividad de producción de energía eléctrica en régimen especial. (BOE núm. 126 de 26 de mayo) 6 Real Decreto-Ley 1/2012, de 27 de enero, por el que se procede a la suspensión de los procedimientos de pre asignación de retribución y a la supresión de los incentivos económicos para nuevas instalaciones de producción de energía eléctrica a partir de cogeneración, fuentes renovables y residuos (BOE núm. 24 de 27 de enero). 37 Figura 1.1. CICLO DE RANKINE Fuente: Manual de Estadísticas Energéticas. Agencia Internacional de la Energía • Potencias eléctricas, de entre 10 y 25 MWe, elevadas para este tipo de aplicaciones tecnológicas, debido a las llamadas “economías de escala”. Por debajo de 10 MWe existen estudios de viabilidad que desaconsejan las inversiones para determinados tipos de biomasa. En cualquier caso, la potencia más comúnmente instalada se sitúa en el entorno de los 15 MWe. Además, este tipo de plantas se suelen asociar o vincular a instalaciones de secado térmico de alperujo, el cual, una vez secado y extractado el aceite residual, es utilizado como combustible. • El traslado de ingentes cantidades de biomasa desde los puntos de generación de la biomasa, normalmente extractoras de aceite de orujo, hasta las plantas de generación. Aproximadamente consumen, aunque depende del rendimiento, 7.000 Tm/MWe, es decir, aproximadamente 112.000 Tm anuales para una planta de 16 MWe [2]. 38 • La localización de las plantas en puntos cercanos a las infraestructuras de evacuación eléctricas para poder acceder al Régimen Especial, siendo éste además uno de los principales criterios de ubicación de estas plantas, junto a la existencia de recurso cercano, tal y como se ha apuntado anteriormente. En la presente Tesis se opta por invertir el modelo para aprovechar la principal ventaja de la gasificación que es la llamada “generación distribuida”7, es decir, “acercar la tecnología a la biomasa” y no al revés. Este nuevo concepto se caracteriza por lo siguiente: • Empleo de biomasas de tipo lignocelulósico como los restos de poda de olivar o los residuos forestales, hasta ahora considerados como “biomasas difíciles” debido a su baja densidad y su elevada dispersión y heterogeneidad, lo que conlleva unos costes de extracción y manipulación desde la explotación elevados. • Tecnologías menos contrastadas a nivel comercial en España, pero que funcionan perfectamente en el resto del mundo, como la gasificación, que es más versátil en tanto que permite obtener un gas en lugar de manejar un sólido. Además, con la ventaja adicional, en relación a la combustión, de utilizarse en un ciclo termodinámico de mayor eficiencia energética (superior al 60%), en tanto que se aprovecha el calor generado por las máquinas térmicas (motores o turbinas) incrementando así la eficiencia global del ciclo. Un esquema global de una instalación de gasificación se puede apreciar en el esquema de la figura 1.2. • Bajas potencias eléctricas, desde pocos kWe hasta 2 MWe, permitiendo además la modularidad. Esto es una enorme ventaja de carácter estratégico, puesto que su desarrollo ya no queda supeditado a infraestructuras energéticas o a la disponibilidad de recursos financieros. La que se conecta a la red de distribución en baja tensión y es asociada a tecnologías como motores, mini y micro turbinas, pilas de combustible y energía solar fotovoltaica. 7 39 • No es necesario movilizar ingentes cantidades de biomasa, todo lo contrario, una planta de unos 100 kWe puede consumir unas 1.000 Tm anuales. • El criterio principal de localización de este tipo de proyectos es la existencia de un demandante de calor, como por ejemplo una almazara, si bien no es el único, por dos razones. La primera porque dispone de espacio físico suficiente para llevar a cabo la instalación y la segunda porque demanda energía térmica, tanto para el proceso de elaboración del aceite de oliva, como para el secado del orujo generado. Además, las almazaras constituyen un punto clave en el medio rural, incluso en la mayoría de los municipios se trata de la única instalación industrial existente. Por todo lo anterior, es necesario profundizar y avanzar en el desarrollo de esta tecnología, vinculándola al principal sector productivo de la provincia, aunque el modelo sería perfectamente replicable para otras zonas de Andalucía y de España e incluso de otros países como Marruecos o Chile. Por último, es imprescindible citar dos documentos de ámbito nacional que recogen orientaciones en el campo de la investigación de la biomasa. El primero es una publicación titulada “Investigación e innovación en el sector del aceite de oliva en España. Problemas, oportunidades y prioridades en I+D+i” elaborada en el marco del Programa nacional de redes del Plan Nacional de I+D+i y la cooperación de ALENTA, Plataforma Tecnológica del Olivar. En su capítulo 3 “Investigación de las líneas de investigación e innovación”, dentro del apartado H correspondiente a “Aprovechamiento de residuos y subproductos de la cadena oleícola” se recoge una serie de cuestiones que son de relevancia para el desarrollo de la presente Tesis Doctoral y que se recogen a continuación. 40 Figura 1.2. ESQUEMA DE UNA INSTALACIÓN DE GASIFICACIÓN DE BIOMASA Fuente: Elaboración propia • Investigación en el uso de la biomasa del olivar como biocombustibles (biocarburantes, biogás y co-combustión8). Existen investigaciones sobre el uso de la poda del olivo para la obtención de biocombustibles, pero se encuentran en un estado inicial todavía. Debería seguir analizándose si este tipo de aprovechamiento puede producir una conversión energética 8 Combustión combinada de varios combustibles, generalmente carbón y biomasa, en una misma instalación. 41 más completa de la biomasa y un mayor rendimiento. También debería dedicarse un cierto esfuerzo al desarrollo de la adaptación de la tecnología de los biocarburantes a este tipo de biomasa. • Puesta a punto de la tecnología de aprovechamiento energético de la biomasa del olivar. Se debería apostar más por los procesos de gasificación de la biomasa para la obtención de biogás y para la generación de energía eléctrica. Se requiere desarrollar gasificadores y crear tecnologías propias de colaboración con las empresas. El otro documento, elaborado por la Plataforma Tecnológica de la Biomasa, BIOPLAT, citada anteriormente, se denomina “Plan de implementación a 2015 del sector español de la bioenergía” [2], y establece un conjunto de “cadenas de valor” divididas en dos bloques, termoeléctrico y transporte, y de retos tecnológicos que hacen referencia específica a la gasificación y que se muestran a continuación, los cuales se muestran en los cuadros 1.1. y 1.2. El último aspecto relevante de la presente Tesis Doctoral es el basado en la integración de procesos, es decir, en combinar tecnologías de valorización energética con instalaciones industriales. En este caso se pretende demostrar la viabilidad de la tecnología de gasificación, con una biomasa poco o nada experimentada, a través de una instalación de cogeneración termoeléctrica de elevada eficiencia energética, y todo ello integrado en la principal industria de la provincia, la almazara. Por todo lo anteriormente expuesto, es más que justificada cualquier iniciativa en pro de ahondar en la tecnología de gasificación y en su integración junto a otros procesos, así como profundizar en un mejor aprovechamiento energético de una de las fuentes de biomasa menos explotada y más abundante en Andalucía y España, como son los restos de las podas de olivar. 42 Cuadro 1.1.- CADENA S DE VALOR EN BIOENERGÍA BLOQUE ENERGÉTICO CADENA DE VALOR Utilización de biocombustibles sólidos mediante combustión directa Termoeléctrico Producción y utilización de biocombustibles sólidos para gasificación Producción y uso del biogás Conversión de azúcares y almidón en bioetanol Conversión de biomasa lignocelulósica por procesos bioquímicos en alcoholes Gasificación de biomasa y conversión catalítica o bioquímica en biocombustibles Digestión de biomasa para generación de biogás Transporte Conversión pirolítica térmica y catalítica de biomasa lignocelulósica y upgrading Conversión catalítica de azúcares en combustibles y químicos Plataforma aceites (conversión convencional + hidrotratamiento + pirólisis + tratamiento en otras unidades de refinería solo o conjuntamente con el combustible fósil) Fuente. Plataforma Tecnológica de la Biomasa, BIOPLAT 43 Cuadro 1.2.- RETOS TECNOLÓGICOS DE LA GASIFICACIÓN CADENA DE VALOR RETOS TECNOLÓGICOS RETOS DE USO FINAL Sistemas de limpieza del gas Desarrollo de gasificadores multicombustibles Mejora de los sistemas Integración del uso de biomasa para generación térmica y eléctrica en otras unidades industriales (refinerías, cementeras, almazaras, …) de parrilla Producción y utilización Hibridación con otras de biocombustibles tecnologías sólidos para gasificación Incremento de la fiabilidad de la Mejora de la viabilidad tecnología de del uso de la biomasa gasificación para mediante gasificación y generación eléctrica de los parámetros de emisiones Valorización del char Reducción y tratamiento de lixiviados Fuente. Plataforma Tecnológica de la Biomasa, BIOPLAT 44 1.2.- Motivación y contexto de la investigación La principal motivación que ha llevado a la realización de la presente Tesis es la necesidad de contribuir desde la tecnología a la mejora de la competitividad de un sector, como el del olivar, muy arraigado en la provincia de Jaén, tanto desde el punto de vista social como económico, y el cual está atravesando una situación difícil debido al bajo precio del aceite de oliva virgen extra. Uno de los motivos es el escaso margen que obtiene el agricultor una vez ha sometido al olivar al conjunto de operaciones necesarias para la obtención de la aceituna, en la mayoría de casos con bajos niveles de mecanización y elevados costes de explotación. Aunque depende del sistema de cultivo, para un olivar tradicional más o menos característico de la provincia de Jaén, los costes totales de cultivo se sitúan en el entorno de 1.448 €/ha en el caso de secano y 2.197 €/ha para regadío [4]. Si estos costes totales se expresan en términos de €/kg de aceite obtenido, suponiendo un rendimiento del 20%, los costes totales ascenderían a 2,20 €/kg y 1,97 €/kg para olivar de secano y regadío respectivamente. Considerando el precio medio del aceite de oliva virgen extra en el mercado, situado según el Sistema de Información de Precios en Origen del Aceite de Oliva POOL RED9 en diciembre de 2012 en 2,416 €/kg10, se pone de manifiesto la inviabilidad de la producción actual de aceite de oliva, o, dicho de otra manera, el poco o nulo margen con que cuenta el agricultor, que ni siquiera cubre costes, salvo para tipologías de olivar intensivo o superintensivo, que en la actualidad suponen porcentajes de cultivo inferiores a los tradicionales, especialmente la modalidad superintensivo11. 9 Es un procedimiento de recepción, almacenamiento, cálculo y difusión instantánea de datos relativos a precios, cantidades y características de las operaciones de compraventa a granel de aceite de oliva en el mercado de origen. Fuente: Fundación para la promoción y el desarrollo del olivar y el aceite de oliva. 10 Precio medio periodo desde 16-10-2012 hasta 22-10-2012 (Fuente: www.oliva.net) 11 Entre 1.000 y 2.000 árboles por hectárea, disposición lineal en seto, recolección mediante cosechadora, distancia entre calles no superior a 1.5 metros y vida útil probada hasta 14 años. 45 Cuadro 1.3. COSTES TOTALES DE CULTIVO DE OLIVAR SISTEMAS DE CULTIVO COSTE TOTAL POR HA (€) Olivar tradicional de secano no mecanizable12 1.023,20 Olivar tradicional de secano 1.448,20 Olivar tradicional de regadío 2.197,20 Olivar intensivo13 de secano 1.528,40 Olivar intensivo de regadío 2.305,40 Olivar superintensivo 2.366,20 Fuente: AEMO, Asociación Española de Municipios del Olivo El efecto de la subvención conlleva para el agricultor aproximadamente 1,05 €/kg de aceite que es lo que hace viable, hoy por hoy, la producción de aceite de oliva bajo la modalidad tradicional, tanto secano como regadío, excepto en olivar tradicional no mecanizable o de montaña. Para que el cultivo del olivar sea más rentable y el aceite de oliva virgen extra más competitivo en los cada vez más exigentes mercados globales, se deben de optimizar todos los costes asociados a la explotación. Para ello, se han de introducir modificaciones en las explotaciones agrícolas vía intensificación de cultivos y mejora de la mecanización de los procesos. También es necesario y fundamental diversificar los ingresos generados, hasta ahora provenientes única y exclusivamente de la comercialización del aceite de oliva virgen extra, generando productos de mayor valor añadido a través de la introducción de aspectos vinculados a la calidad y a la sostenibilidad. 12 13 Pendientes superiores al 20%. Corresponde al olivar de sierra. Entre 200 y 600 árboles por hectárea. 46 Una de las alternativas posibles que tiene el sector es un cambio de modelo en la gestión de los subproductos. Se trata de convertir los actuales costes de eliminación de los restos de las podas y de la manipulación del orujo en ingresos derivados de la valorización energética de la biomasa procedente de los restos de las podas y de la reducción de la humedad del orujo generado durante la elaboración del aceite de oliva en las almazaras. En la figura 1.3., se puede apreciar el cambio de modelo propuesto, en el cual se mejoran dos aspectos claves de la gestión de las explotaciones de olivar: la economía y la sostenibilidad. Esta nueva concepción de la relación agricultorexplotación-almazara puede suponer un cambio positivo en el sector si es aceptada por el mismo. La razón fundamental radica en la autonomía del agricultor para la gestión de los subproductos que genera su actividad, a nivel agrícola e industrial. En ambos casos es él mismo quien se puede ocupar de ellos mediante el empleo de una tecnología como la gasificación, y obteniendo unos ingresos económicos por ello, a la vez que evitando unos costes. Figura 1.3. MODELOS DE EXPLOTACIÓN DEL OLIVAR TRADICIONAL Y PROPUESTO Fuente: Elaboración propia 47 A esta independencia o autonomía hay que añadir las siguientes ventajas adicionales: • Una mejora de la competitividad del propio sector, la cual está en entredicho en la actualidad por el bajo precio del aceite de oliva y por el propio modelo de gestión y explotación del olivar tradicional. • Se trata de una solución sostenible y respetuosa con el medio ambiente, que puede afectar de una manera sensible a una gran parte de las almazaras de Andalucía y de los distintos países que se están incorporando a la producción del aceite de oliva. La valorización de estos subproductos permite reducir la elevada dependencia energética, como ya se ha comentado. • La evacuación eléctrica no conlleva especiales problemas para las empresas distribuidoras de energía, al poder conectar en baja tensión y tratarse de potencias relativamente bajas (100 kWe). • Los trámites administrativos para el desarrollo de este tipo de proyectos no son complejos, puesto que se trata de instalaciones de pequeñas dimensiones. • Es sencillo encontrar estructuras de operación y mantenimiento en los entornos rurales y de olivar, puesto que los motores son similares a los utilizados en automoción. • Desde el punto de vista económico, el periodo de recuperación de la inversión, como se verá más adelante, se sitúa en el entono a 4,30 años. En definitiva, este nuevo modelo de gestión de los subproductos del olivar puede ser una opción de futuro para mejorar la actual situación del aceite de oliva, el producto estrella de la dieta mediterránea, porque rompe con la clásica relación agricultor-almazara basada en el traslado de la aceituna a la almazara, la gestión de las podas por parte del agricultor y el envío del orujo húmedo a la extractora por parte de la almazara. 48 Con este modelo gana peso el agricultor porque se convierte en gestor de sus propios subproductos, a los cuales genera valor añadido por medio de una tecnología que presenta innumerables ventajas, como es la gasificación. Por otro lado, otro elemento impulsor es que la mayoría de los desarrollos teóricos y prácticos en el ámbito del aprovechamiento energético de la biomasa, llevados a cabo, tanto desde un punto de vista industrial como de investigación y desarrollo aplicado, se han centrado en tres aspectos fundamentalmente: • La generación de energía eléctrica mediante combustión de biomasa procedente de las industrias de transformación del aceite de oliva, principalmente extractoras de aceite de orujo u orujeras. Esta alternativa presenta altos riesgos derivados de la ingente cantidad de biomasa a movilizar como ya se ha citado, de las limitaciones técnicas para la evacuación de la energía eléctrica generada y de la elevada inversión requerida, aproximadamente 1,2 M€/MW instalado. Además, no aprovecha el calor generado ni tampoco permite valorizar los restos de las podas de olivar de una manera global, puesto que las plantas suelen estar diseñadas con caldera poli combustible para diversificar así el riesgo, consumiendo una parte de orujillo, otra de cultivos energéticos o residuos forestales y, una última, restos de podas de olivar. • La transformación física de la biomasa residual para la generación de energía térmica en usos finales (agua caliente sanitaria, calefacción y producción de frío mediante absorción). Aparte de tratarse de unos usos más limitados, en la mayoría de las ocasiones la finalidad de estos procesos es acondicionar la biomasa para un uso posterior. • La obtención de biocarburantes mediante hidrólisis y fermentación alcohólica de biomasa lignocelulósica como los restos de las podas de olivar. Se trata de proyectos en fase de investigación, lejos aún del desarrollo comercial. 49 Sin embargo, no existe ningún proyecto industrial de gasificación de biomasa de pequeña potencia como el propuesto en la presente Tesis. En cambio, sí que existen prototipos funcionando en distintas partes de España, a escala piloto, de potencias muy superiores, de entre 750 kWe y 2 MWe. Esto se debe a una falta de recursos financieros destinados a la I+D+i sobre este tipo de tecnología y también al débil impulso por parte de los Gobiernos para el desarrollo de este tipo de tecnología a través de instrumentos como el Régimen Especial. Los planes existentes a los distintos niveles contemplan escenarios favorables para el desarrollo de la biomasa, si bien no se acaban de alcanzar, a diferencia de otras tecnologías renovables como la solar fotovoltaica o la eólica. Esto es debido a la dificultad que entraña el manejo de la biomasa por sus especificidades en relación a otros recursos renovables, así como a la falta de conocimiento, por parte de promotores, del sector agrario y forestal. Para mitigar estas dificultades la tecnología de gasificación resulta muy atractiva porque no requiere grandes volúmenes de biomasa, ni tampoco elevadas inversiones económicas, ni dificultades técnicas para la evacuación de la energía eléctrica generada, por lo que se presenta como prácticamente la mejor alternativa para el cumplimiento de los planes energéticos en materia de generación de energía eléctrica con biomasa. Una generación eléctrica distribuida que permite acercar la producción al consumo, reduciendo así las pérdidas por transporte y distribución y, en general, siendo más sostenible. En cuanto al contexto en el que enmarca la presente Tesis Doctoral, cabe mencionar alguno de los marcos de apoyo y estímulo a la biomasa, si bien serán tratados en profundidad en el capítulo 4. A nivel europeo, el instrumento principal de impulso a la biomasa es el llamado Plan de Acción sobre la biomasa (COM 2005/628 final), el cual establece medidas para incrementar el desarrollo de la energía de biomasa a partir de madera, residuos y cultivos agrícolas. De esta forma Europa pretende reducir su dependencia de los combustibles fósiles, 50 disminuir sus emisiones de gases de efecto invernadero y estimular la actividad económica en las zonas rurales. Quizás el instrumento de carácter político más significativo y que más puede coadyuvar al impulso de la biomasa es la Directiva 2009/28/CE, de 23 de abril de 2009, relativa al fomento del uso de energía procedente de fuentes renovables, la cual fija como objetivos generales alcanzar una cuota del 20% del consumo de energía bruto para usos finales procedente de fuentes renovables para el año 2020 en la UE, y un 10% para el sector del transporte. Esta Directiva establece un conjunto de objetivos para cada uno de los Estados Miembros, entre ellos España. A nivel nacional el instrumento más potente, ya citado, de fomento de la biomasa es el Real Decreto 661/2007 de régimen especial, publicado en el Boletín Oficial del Estado el 26 de mayo de 2007 y el cual tiene por objeto el establecimiento de un marco jurídico y económico para la actividad de producción de energía eléctrica en el llamado “Régimen Especial”, que incluye la siguiente tipología de instalaciones: a. Cogeneraciones u otras formas de producción de energía a partir de calores residuales. b. Instalaciones que utilicen como energía primaria alguna de las energías renovables no consumibles (solar, eólica, hidráulica, mareomotriz,…), biomasa o cualquier tipo de biocarburante. c. Instalaciones que utilicen como energía primaria residuos con valorización energética no contemplados en la categoría anterior. En relación al olivar, lo más reciente a nivel de Andalucía es la Ley 5/2011, de 6 de octubre, del olivar de Andalucía (BOJA núm. 205, de 19 de octubre de 2011), la cual en su artículo 25 relativo a eficiencia energética y energías renovables incluye el aprovechamiento energético de la biomasa generada por el olivar. 51 Por último, otra motivación, esta de un carácter más secundario, es tratar de poner en una balanza o enfrentar dos cuestiones, a saber: • Las ayudas recibidas por el olivar que se situaron, en el periodo de octubre de 2011 a octubre de 2012, en el entorno de los 410 millones de € anuales según información facilitada por ASAJA JAÉN, tal y como se muestra en el cuadro 1.4. • Los potenciales ingresos generados por el nuevo modelo de gestión de subproductos que se propone con la presente Tesis Doctoral y que podrían, parcial o totalmente, compensar las ayudas citadas en el punto anterior cuando estas desaparezcan, algo que sucederá más temprano que tarde. Como se verá más adelante, en el apartado correspondiente a aspectos económicos, una instalación tipo de 100 kWe de potencia puede generar del orden de 130.000 € brutos anuales. Suponiendo que existen un total de 60 almazaras en la provincia susceptibles de implementar el modelo propuesto, la cifra de ingresos brutos ascendería a 7,8 M€. Si esta facturación bruta generase unos beneficios netos para el sector del 20% se podría concluir con que la implantación del modelo en la tipología correspondiente de almazaras, como también se verá más adelante, podría reportar para la provincia de Jaén un monto total de 1,56 M€, cifra muy superior a la correspondiente a las ayudas recibidas por la PAC. Y todo ello sin considerar el resto de beneficios en términos de empleo por ejemplo. A modo de corolario o resumen final se puede argumentar que se trata de un modelo, a priori, suficientemente atractivo como para, al menos, ser tenido en cuenta por el sector oleícola. 52 Cuadro 1.4.- AYUDAS PERCIBIDAS POR EL OLIVAR. PROVINCIA DE JAÉN Período 16/10/2011 al 15/10/2012. FEAGA DENOMINACIÓN IMPORTE (€) Régimen de pago único 403.321.581,53 Ayudas por superficie 53.250,52 Ayuda al olivar 43.142,41 Aceite de oliva 6.466.227,87 TOTAL 409.884.202,33 Fuente: ASAJA JAÉN 53 1.3.- Objetivos de la investigación El principal objetivo a alcanzar con la realización de la presente Tesis Doctoral es proponer al sector oleícola un nuevo modelo de gestión de subproductos del olivar que contribuya a la mejora de la competitividad y sostenibilidad del mismo. Este nuevo modelo está basado en una solución tecnológica innovadora, que consiste en instalar, en una determinada tipología de almazara, un sistema de cogeneración termoeléctrica en el cual la fuente primaria de energía que lo alimenta es gas de síntesis procedente de una planta de gasificación de restos de podas de olivar de pequeña potencia. La energía eléctrica generada por el sistema es inyectada a la red y la térmica puede ser aprovechada para el secado del orujo generado en el proceso de elaboración del aceite de oliva. Esto supone un cambio con respecto a la situación actual, en la que los restos de poda son eliminados de las explotaciones vía incineración o vía fragmentación mecánica, y el orujo es transportado hasta las extractoras de aceite de orujo donde se le extrae el aceite residual que contiene, el cual para su consumo ha de ser refinado. Por ello, el principal objetivo de la investigación es analizar este nuevo modelo de gestión de subproductos desde sus vertientes técnica, energética y estratégica y su repercusión en el sector oleícola. Como objetivos secundarios se citan los siguientes: • Analizar las ventajas e inconvenientes del actual modelo de gestión de los subproductos del olivar y su repercusión en términos económicos al precio final del aceite de oliva y a la imagen global del sector desde los puntos de vista de la sostenibilidad y del marketing. 54 • Estudiar las condiciones de contorno que hacen viable, en términos económicos y financieros, el nuevo modelo de gestión propuesto, analizando para ello criterios de rentabilidad de inversiones como el Valor Actual Neto o la Tasa Interna de Rentabilidad. • Incorporar todas las externalidades positivas asociadas con el nuevo modelo desde una vertiente multi-criterio: innovación, empleo, diversificación productiva, sostenibilidad, etc. • Validar el nuevo modelo desde un punto de vista sectorial y estratégico mediante la realización de una Encuesta, que se adjunta como Anexo, y su envío a organizaciones del sector. Aparte de lo anterior y de una manera transversal, se pretende recopilar la mayor cantidad de información posible de la provincia de Jaén en el ámbito energético y poner de manifiesto la enorme importancia que conlleva el aprovechamiento energético de la biomasa residual desde un punto de vista del desarrollo rural y como elemento de diversificación productiva, innovación y, en definitiva, calidad de vida de los ciudadanos y ciudadanas de la provincia de Jaén. 55 1.4.- Organización de la Tesis La Tesis se estructura en una serie de bloques, organizados por capítulos de acuerdo a la siguiente estructura: 1) El primer bloque, correspondiente al capítulo 1 aborda la introducción donde se incluye todo lo referente a la argumentación de la Tesis, es decir, su justificación y los principales objetivos a alcanzar con el desarrollo de la misma. 2) Un segundo bloque y capítulo está dedicado a la importancia del olivar como generador de biomasa, describiendo y analizando el actual modelo de gestión de los subproductos, principalmente restos de poda de olivar y orujo graso y húmedo o alperujo. 3) El tercer bloque está formado por dos capítulos, el correspondiente a la coyuntura energética actual de la provincia de Jaén y a la situación actual de la biomasa a nivel europeo, nacional y autonómico. También se incluye un apartado específico con los principales instrumentos (políticos, normativos y económicos) existentes en la actualidad de apoyo a la biomasa. 4) El cuarto bloque incluye un capítulo dedicado al desarrollo técnico de la tecnología de gasificación y al estado del arte de la tecnología a nivel nacional. 5) En el siguiente bloque y capítulo se presenta el nuevo modelo de gestión de subproductos del olivar así como todo lo que tiene que ver con aspectos técnicos y económicos. 6) El capítulo número 9 recoge la aportación científica en forma de artículos JCR, participación en congresos de ámbitos nacional e internacional, publicaciones en revistas especializadas, premios, etc. 56 7) Finalmente, se recogen las conclusiones y las futuras líneas de investigación, así como las publicaciones a las que ha dado pie la presente Tesis Doctoral. Además de todo ello se incluyen una serie de apéndices y/o anexos con la siguiente información: • La Encuesta diseñada por el Autor para la validación del modelo. • Un resumen del Currículum Vitae del Autor. • Direcciones webs de interés consultadas. • Principales Referencias bibliográficas. 57 2.- EL OLIVAR COMO GENERADOR DE BIOMASA 2.1.- Introducción El olivo es una especie arbórea originaria del Mediterráneo oriental (Asia Menor) donde empezó a cultivarse para aprovechar sus frutos, las aceitunas, y el zumo extraído de ellas, el aceite de oliva. Como especie botánica, el olivo cultivado procede de una variedad silvestre (Olea chrysophyla Lam.) que evolucionó a través del acebuche u oleastro (Olea oleaster L. u Olea europaea oleaster). Como genuino árbol mediterráneo, está muy adaptado a las condiciones climáticas muy duras, tales como sequías y altas temperaturas, y aunque vegeta muy bien, en suelos pobres, requiere de una buena aireación. En su zona de origen, el olivo florece al final de la primavera (abril-mayo), y sus frutos se desarrollan durante todo el verano hasta su maduración verde a comienzos del otoño (septiembre-octubre). A continuación continúa su cambio de color o envero hasta completar su madurez fisiológica en los primeros meses del invierno. Los primeros documentos escritos del olivo que se conocen son unas tablillas micénicas en barro procedentes del reinado del Rey Minos (2.500 a. C.) que dan testimonio de la importancia del aceite de oliva para la economía cretense. Por otra parte, los griegos recogieron en su legislación medidas para proteger los 58 olivos, disposiciones para favorecer su plantación y punitivas para quienes los arrancasen. Posteriormente, los romanos fueron grandes consumidores de aceitunas y de aceite de oliva procedente de Hispania, y más concretamente de la Bética, la actual Andalucía. Desde la antigüedad el olivo se ha considerado en toda la cuenca mediterránea como símbolo de paz y de amistad entre los pueblos, y de su aceite se han reconocido virtudes curativas, saludables y religiosas. No se conoce con exactitud el comienzo del cultivo del olivo en España, si bien se achaca a los fenicios y a los griegos como introductores el aceite de oliva en la Península Ibérica allá por el año 211 a. C. La dominación romana impulsó su cultivo y las técnicas de producción de aceite para su empleo en alimentación, en rituales religiosos, usos medicinales, en higiene y belleza, como combustible para lámparas, lubricante para herramientas y enseres del campo, impermeabilizante para fibras textiles, etc. Los árabes desarrollaron técnicas más eficientes de extracción de aceite que con el tiempo han convertido a España en líder mundial en el sector. El olivar ha ido progresivamente ampliando su función tradicional alimentaria para constituirse también en proveedor de recursos energéticos [4]. En este sentido es generador es un importante volumen de biomasa, desde la propia explotación olivarera hasta la almazara o la extractora de aceite de orujo. Por un lado, el propio cultivo del olivar es sometido a la denominada poda, la cual tiene como fin último la de producir más fruto [5]. Como consecuencia de la misma se generan restos lignocelulósicos compuestos por ramas, ramones y leñas los cuales han de ser eliminados y/o extraídos del campo para evitar la propagación de enfermedades tales como el temido “barrenillo”. La fracción más fina, formada por ramas y ramones, suele ser quemada “in situ” o astillada y depositada en el suelo como aporte orgánico y para mejorar sus propiedades físicas, y la más gruesa o leña aprovechada para fines de calefacción u otros usos domésticos tales como barbacoas o chimeneas. 59 Por otro lado, se encuentra la industria vinculada al olivar, fundamentalmente compuesta por almazaras o industrias de obtención del aceite de oliva, y extractoras de aceite de orujo. También existen las denominadas entamadoras, las cuales se dedican al procesado de la aceituna mediante fermentación o salazón para su consumo como aceituna de mesa. En las primeras se genera un subproducto denominado orujo de dos fases o alperujo el cual suele ser enviado a las segundas para someterlo a un proceso de secado y de extracción del aceite residual que contiene. La biomasa generada en estas industrias se denomina orujo extractado u orujillo [6]. Tanto en la almazara, como en la entamadora y en la extractora se puede extraer el hueso separándolo del resto de fracciones (piel y pulpa), puesto que presenta un mayor valor añadido como combustible para fines térmicos, tal y como se puede apreciar en cuadro siguiente, correspondiente a una biomasa (hueso) obtenida en la separación mediante lavado con agua de la pulpa de aceituna en almazara. En la gráfica 1.4. se puede apreciar la composición química de la fracción fina de la poda más conocida como “ramón” de olivo. En cualquier caso, en la presente Tesis solamente se considerarán las dos fuentes de biomasa primaria generadas por el olivar: los restos de la poda y el alperujo generado en la almazara. Tanto el hueso como el orujillo son extraordinarias fuentes de biomasa con numerosas aplicaciones energéticas pero que escapan al ámbito del presente trabajo, puesto que se obtienen como consecuencia de posteriores procesos, bien de separación, bien de extracción con disolventes orgánicos. 60 Cuadro 2.1.- PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS DEL HUESO DE ACEITUNA DE ALMAZARA ANALÍTICA RANGO REALIZADA CARACTERÍSTICO Tamaño < 5 mm 0-5 mm Humedad (CEN/TS 14774-2) 7,10% 6%-15% PARÁMETRO Poder calorífico Neto 4.190 kcal/kg 3.800 kcal/kg-4.250 (ISO 1928) kcal/kg Cenizas (ISO 1171) 0,55% 0,5%-2,5% Volátiles (ISO 562) 74,25% 70%-80% Azufre (AST D 4239) 0,04% < 0,15% Cloro 0,064% < 0,2% Carbono fijo (AST 3172) 19,49% < 30% Fuente: García-Munte Energía, S.L. Como se desprende del cuadro, y según se ha apuntado, el hueso de aceituna resulta un excelente combustible para su aplicación en calderas en el ámbito doméstico y en el sector terciario, especialmente; si bien es apto para los usos finales térmicos en general. Ello es debido a su elevado poder calorífico, su baja humedad, su elevado contenido en volátiles y la escasa cantidad de cenizas que genera su combustión. Como aspectos menos positivos cabría mencionar el contenido en Cloro, aunque con valores realmente bajos. 61 Gráfico 2.1.- COMPOSICIÓN TÍPICA DE LOS RESTOS DE LAS PODAS DE OLIVAR [7] Grupos acetilo 2,5 % Lignina soluble Lignina insoluble Hemicelulosas Xilanos 9,8 % Mananos 0,7 % Galactanos 1,4 % Arabinanos 2,1 % Cenizas 3,4 % Otros 2,2 % 7,4 % 16,6 % 31,4 % Extractos 14,4 % 22,5 % Glucosa no Celulosa estructural (7,9 %) A continuación se muestran una serie de imágenes, realizadas por el Autor, de las diferentes y variadas fuentes de biomasa generadas por el sector oleícola. • Los restos de poda de olivar en una explotación agrícola una vez realizada la operación de poda, • Una balsa de alperujo ubicada en una planta extractora de aceite de orujo, • El parque de almacenamiento de una planta de generación de energía eléctrica a partir de restos de poda de olivar y orujillo. • Una muestra de hueso de aceituna en el patio de una almazara. • Hojín generado en la almazara durante la limpieza del fruto. 62 Fotografía nº 1.- RESTOS DE PODA DE OLIVAR APILADOS EN LA EXPLOTACIÓN Fotografía nº 2. BALSA DE ALPERUJO 63 Fotografía nº 3. RESTOS DE PODA DE OLIVAR ASTILLADO Y SECO PARA SU VALORIZACIÓN ENERGÉTICA EN PLANTA DE PRODUCCIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA Fotografía nº 4. PARQUE DE ALMACENAMIENTO DE ORUJILLO EN PLANTA DE GENERACIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA 64 Fotografía nº 5. HUESO DE ACEITUNA APILADO EN PATIO DE ALMAZARA Fotografía nº 6. HOJÍN GENERADO EN LA ALMAZARA DURANTE LA FASE DE LIMPIEZA DEL FRUTO El esquema de la figura 2.1. muestra el origen de todas las fuentes de biomasa generadas por el olivar, distinguiendo en el mismo entre: 65 Figura 2.1.- BIOMASA GENERADA POR EL OLIVAR 70 Fuente: Elaboración propia 66 2.2.- La importancia del sector oleícola El olivar es el agro-sistema más representativo y simbólico de Andalucía, arraigado en la cultura milenaria andaluza desde su prehistoria y empezado a domesticar como bosque por el pueblo fenicio. La importancia de este cultivo en Andalucía ha estado impulsada por la acción antrópica, que han hecho de él un bosque ordenado perfectamente adaptado a muy diversas y pobladas zonas, contribuyendo al desarrollo económico y social y a la vertebración del territorio. En términos económicos Andalucía lidera la producción mundial de aceite de oliva, con un 40% del total, y constituye la principal actividad económica de más de 300 pueblos y 250.000 familias, proporcionando más de 22 millones de jornales anuales. Representa la tercera parte del olivar europeo y en su territorio se ubican más de 800 almazaras, 200 entamadoras, unas 35 extractoras de aceite de orujo y casi 600 envasadoras. En España se cultivan más de 100 variedades de olivo, muchas de ellas autóctonas y con extensión limitada, siendo las variedades más representativas las siguientes: arbequina, cornicabra, empeltre, hojiblanca, picual, blanqueta, cacereña, verdial de Badajoz, carrasqueña, lechín de Sevilla, manzanilla y gordal. La picual es la gran variedad dominante en la provincia de Jaén, su aceite tiene una gran estabilidad y personalidad, fuerza, frutosidad, un amargor intenso y claros tonos picantes. El vigor del árbol es bueno, con copas vigorosas y gran desarrollo foliáceo. La hoja es alargada y el fruto elipsoidal. El olivar español está presente en 34 provincias de 13 Comunidades Autónomas. El número total de olivos asciende a 282.696.000 distribuidos principalmente en Andalucía (61,83%), Castilla-La Mancha (12,83%) y Extremadura (10,47%). En el mapa siguiente se muestra las distintas zonas olivareras de España, correspondiendo a la provincia de Jaén la zona 1ª, en la que se incluyen las comarcas de Iznalloz (Granada) y Bujalance (Córdoba). 67 Figura nº 2.2. ZONAS OLIVARERAS DE ESPAÑA Fuente: Agencia para el Aceite de Oliva. Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. El olivar es el principal cultivo leñoso de Andalucía, ocupando más del 32% de la superficie agrícola andaluza y llegando a ser un monocultivo en provincias como la de Jaén, alcanzando el 85%. Su superficie ha ido aumentando progresivamente desde 1996 hasta la actualidad. Las nuevas explotaciones presentan una mayor densidad de pies por unidad de superficie y el regadío aumenta en detrimento del secano, debido tanto a la entrada en producción de las nuevas plantaciones como a la modernización de los olivares en producción mediante su puesta en riego. Según la “Encuesta sobre superficies y rendimientos de cultivos: Resultados 2011” elaborada por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, la superficie total de olivar en España asciende a 2.580.577 ha, de las cuales 68 1.552.733 ha se localizan en Andalucía, es decir, un 60,17% del total. Prácticamente la totalidad de la superficie corresponde a olivar de almazara 2.443.408 ha, un 94,68%. Este olivar, además, supone un 15,10% del total de las tierras de cultivo (17.095.449 ha). En el caso de Andalucía, 1.439.090 ha corresponden a olivar de almazara, un 92,68%. En relación a la superficie total de tierras de cultivo (3.558.291 ha), el olivar supone un 43,64%, lo que pone de manifiesto la importancia de este cultivo en la comunidad autónoma andaluza. La provincia de Jaén cuenta con 585.275 ha de olivar, es decir, un 98,76 % del total de cultivos leñosos (592.643 ha), por lo que se puede afirmar con rotundidad que se trata de un monocultivo. Del total, 287.900 ha corresponden a olivar de secano, y 297.375 ha a regadío, un 50,18%. Las hectáreas dedicadas a olivar de aceituna de mesa se reducen a 446, frente a las 60.779 ha de Andalucía y las 80.591 de España. En cuanto a la producción de aceite de oliva en la campaña 2011/2012, según la Agencia para el Aceite de Oliva, entidad dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente del Gobierno de España, en la provincia de Jaén operaron un total de 327 almazaras, de las 819 de Andalucía y de las 1.747 de España. Es decir, prácticamente un 40% de las almazaras de Andalucía se localizan en Jaén, lo que representa casi un 20% del total nacional. En esa campaña se produjeron 680.821,84 toneladas de aceite de oliva, un 50,06% de las que se produjeron en Andalucía (1.359.964,33 Tm) y un 42,28% en relación a España (1.610.188,69 Tm). Cifras que, de nuevo, ponen de manifiesto el peso específico del sector del olivar en Jaén y en Andalucía. En relación a la otra tipología de industrias, a nivel nacional operaban 63 extractoras de aceite de orujo u orujeras, las cuales produjeron un total de 7.407.653,98 Tm de orujo húmedo, y 1.344.37,25 Tm de orujo extractado seco u orujillo. En la fotografía número 7 se puede apreciar la imagen de una extractora de aceite de orujo de la provincia de Jaén. 69 Fotografía nº 7. EXTRACTORA DE ACEITE DE OUJO Fuente: ESPUNY CASTERLLAR, S.A. El consumo de aceite de oliva ha aumentado de manera notable en los últimos años y es previsible que esta tendencia se mantenga durante los próximos como consecuencia de los beneficios que tiene para la salud. Países como Argentina o Chile, Marruecos, Túnez o Argelia están incrementando sus producciones. En el caso de Andalucía, cuya producción es el 75% de España y el 30% de toda la UE. La provincia de Jaén produce el 50% de todo el aceite de oliva de Andalucía, el 38,31% de España y el 19,67% de toda la Unión Europea. En general se trata de un sector muy atomizado y disperso por toda la geografía española, formado, en su mayor parte por un olivar tradicional constituido por explotaciones de un escaso número de árboles (aproximadamente 100 por hectárea), pero de gran tamaño y varios pies. En torno al 54% de las explotaciones olivareras de aceituna de almazara de España tienen menos de 5 ha, con extensiones medias comprendidas entre 0,12 y 2,0 ha según comunidades autónomas. Esto condiciona en gran medida la rentabilidad, puesto que en las explotaciones de mayor tamaño suelen 70 predominar sistemas de cultivo más intensivos en relación a los tradicionales [8].I Figura 2.3.- MAPA DEL OLIVAR DE ANDALUCÍA Fuente: Agencia Andaluza de la Energía. El tamaño medio de las almazaras en España, medido en función de la cantidad de aceite que producen por campaña, es variable, siendo el tipo más frecuente el que opera en el rango que va de las 20 toneladas a las 100 toneladas (23,30%) del total. Sin embargo el mayor peso recae en las almazaras que se encuentran en el rango de producción que va de 1.000 toneladas a 2.500 toneladas (34,05% de la producción total nacional, a pesar de que en número no llega al 11%). En cuanto a la actividad de extracción de aceite de orujo, en España existen 63 industrias que producen alrededor de 56.000 Tm de aceite por campaña, 77% por medios químicos (disolventes) y el resto físicos (centrifugación). En Andalucía hay 39 extractoras de aceite de orujo, de las cuales 16 se localizan en la provincia de Jaén. Otra tipología de industrias vinculadas al sector oleícola 71 son las refinerías encargadas de modificar las propiedades de los aceites. En España existen 22, de las cuales 13 se sitúan en Andalucía, 2 de ellas en la provincia de Jaén. 72 2.3.- La biomasa del olivar: potencial energético El empleo de la madera como fuente de calor para mejorar la habitabilidad de refugios y edificaciones, y también para cocinar, se remonta a hace 400.000 años, cuando los rescoldos de un incendio provocado por un rayo o por una erupción volcánica, pacientemente avivados y transportados, permitieron al género Homo colonizar tierras más frías y hacer digeribles casi todas las partes de las piezas cazadas. No fue hasta hace 10.000 años cuando los humanos pudieron controlar a capricho esa operación aparentemente tan elemental, pero en la práctica tan compleja, de hacer fuego frotando dos palitos. Madera que, a lo largo de la historia, ha intervenido en procesos productivos de todo tipo, desde fabricar carbón vegetal hasta nutrir las rudimentarias máquinas de vapor que dieron el primer impulso a la Revolución Industrial. Sus usos principales apenas han variado con el paso del tiempo. Actualmente, se consumen al año cerca de 3.500 millones de metros cúbicos de madera en el mundo; de esa cantidad, algo más de la mitad se sigue destinando a calefacción y cocción de alimentos. Etimológicamente, biomasa es un término compuesto por el prefijo “bio” (del griego bios, vida) y “masa” (del latín massa, masa, bulto o volumen), es decir, hace referencia a la “masa biológica”. El Diccionario de la Real Academia de la Lengua define biomasa en su primera acepción como “materia total de los seres que viven en un lugar determinado expresada en peso por unidad de área o de volumen”. Otra acepción del término en el contexto energético es “materia orgánica fijada por la fotosíntesis y la materia derivada de las transformaciones naturales o artificiales de dichos compuestos orgánicos”. De forma resumida, el proceso fotosintético puede concretarse en la siguiente reacción química: 6 CO2 + 6 H2O + Energia solar → C6H12O6 + 6 O2 73 El mayor interés de este proceso reside en que la fuente de energía primaria, la energía solar, es una fuente de energía limpia y renovable, que por medio de esta reacción de fotosíntesis se almacena en los enlaces químicos de los componentes estructurales de la biomasa. Si esta biomasa es quemada de una manera eficiente, extrayendo la energía almacenada en esos enlaces, el oxígeno del aire se combina con el carbono de las plantas para producir dióxido de carbono y agua. El proceso es cíclico porque el dióxido de carbono queda disponible para producir nueva biomasa. Una segunda acepción, más apropiada en el contexto energético es “materia orgánica originada en un proceso biológico, espontáneo o provocado, utilizable como fuente de energía”, si bien una definición más completa sería la siguiente: “biomasa es la materia orgánica originada en un proceso biológico, espontáneo o provocado, utilizable como fuente de energía renovable, entendiendo como tal que, por lo menos se consume a un ritmo inferior o igual al que se produce”. De esta manera queda incluido el concepto de renovabilidad. El término biomasa en sentido amplio se refiere a “cualquier tipo de materia orgánica que haya tenido su origen inmediato como consecuencia de un proceso biológico” y comprende tanto productos de origen vegetal como animal, si bien existen acepciones diferentes para el término algunas de las cuales se citan a continuación. En el Estudio técnico titulado “Evaluación del potencial de energía de la biomasa”, realizado por el I.D.A.E. [9] se define biomasa como “cualquier sustancia orgánica de origen vegetal o animal, incluyendo los materiales que resultan de su transformación natural o artificial”. En esta definición se incluyen específicamente los residuos procedentes de las actividades agrícolas, ganaderas y forestales, así como los subproductos de las industrias agroalimentarias y de transformación de la madera. Además, se consideran como biomasa los llamados cultivos energéticos para la producción de biomasa lignocelulósica, orientada a su aplicación mediante combustión o gasificación. 74 La definición de la Especificación Técnica Europea CEN/TS 14588 indica que es biomasa “todo material de origen biológico, excluyendo aquellos que han sido englobados en formaciones geológicas sufriendo un proceso de mineralización”. Esta definición, por tanto, marca la diferencia fundamental que, en el campo energético, se establece entre los recursos de carácter fósil y los de carácter renovable. Por último, la Orden ITC/2877/2008, de 9 de octubre, por la que se establece un mecanismo de fomento del uso de biocarburantes y otros combustibles renovables con fines de transporte, define la biomasa como la “fracción biodegradable de los productos, desechos y residuos procedentes de la agricultura (incluidas las sustancias de origen vegetal y de origen animal), de la selvicultura y de las industrias conexas, así como la fracción biodegradable de los residuos industriales y municipales”. Finalmente, la Directiva 2009/28/CE, de 23 de abril, relativa al fomento del uso de la energía procedente de fuentes renovables define el término biomasa como la “fracción biodegradable de los productos, desechos y residuos de origen biológico procedentes de las actividades agrarias (incluidas las sustancias de origen vegetal y animal), de la selvicultura y de las industrias conexas, incluida la pesca y la acuicultura, así como la fracción biodegradable de los residuos industriales y municipales”. En cualquier caso, la biomasa se puede clasificar de acuerdo a diferentes criterios. En función de su naturaleza, se puede clasificar en: • Biomasa primaria o de calidad, constituida por las masas vegetales que se producen sin la intervención de la acción humana y que constituyen la flora terrestre. Por tanto, la resultante de la transformación directa de la energía solar por la acción de la fotosíntesis. • Biomasa residual, generada principalmente en los procesos productivos de los sectores agrícolas, forestales, industriales y ganaderos. También está incluida en este bloque la fracción orgánica de los residuos urbanos y los 75 lodos de estaciones depuradoras de aguas residuales urbanas. Ésta, a su vez, se puede clasificar en: o Biomasa secundaria, constituida fundamentalmente por los residuos de las actividades agrarias y forestales. o Biomasa terciaria, que incluye residuos orgánicos urbanos e industriales. Atendiendo a su origen, la clasificación que se va a utilizar en la presente Tesis Doctoral es la propuesta por la Agencia Andaluza de la Energía: • Residuos agrícolas: Se incluyen en esta denominación todos los residuos orgánicos y restos vegetales que se generan por los cultivos agrícolas directamente en el campo o en invernadero. Comprenden las podas de cultivos arbóreos y la paja y restos vegetales del resto de cultivos. En este grupo quedan incluidos los restos de las podas de olivar. • Residuos forestales: Los residuos de origen forestal comprenden todos los productos o subproductos resultantes de los aprovechamientos y tratamientos silvícolas que se realizan en las superficies forestales que no tengan como aprovechamiento principal los fines energéticos, y que pueden comprender otros tipos de aprovechamiento. Provienen de la necesidad de realizar tratamientos silvícolas para el mantenimiento y mejora de los montes y masas forestales mediante talas, podas, limpieza de matorrales, etc. Estos trabajos generan unos residuos (leñas, ramas y matorrales) que deben ser retirados del monte, pues son un factor de riesgo de grave importancia para la propagación de plagas y de incendios forestales. • Residuos Ganaderos: los residuos ganaderos son aquellos residuos orgánicos generados por las especies ganaderas en las explotaciones intensivas. Se trata principalmente de la mezcla de deyecciones y la 76 cama de ganado, denominándose comúnmente según la especie de la que proceden en estiércol, purines y gallinaza. • Residuos y subproductos industriales: son aquellos subproductos y desechos de origen orgánico generados por la industria. Principalmente de los sectores agroalimentario, maderero y textil. En este bloque se incluye el orujo de dos fases o alperujo. • Residuos urbanos: son aquellos generados en los domicilios particulares, comercios, oficinas y servicios, así como los residuos procedentes de la limpieza viaria, zonas verdes y áreas recreativas. Los residuos urbanos susceptibles de uso energético incluyen las aguas residuales, los residuos sólidos urbanos, los aceites de fritura y los residuos vegetales de zonas verdes. • Cultivos energéticos: biomasa producida expresamente con la finalidad de generar energía de una manera sostenible, es decir, con un balance energético y de emisiones de gases de efecto invernadero favorable y un equilibrio natural garantizados. En este grupo se encuentran las especies de plantas cultivadas específicamente para producir energía, ya sea a través de la obtención de biocarburantes (bioetanol y biodiesel) o de biomasa lignocelulósica para fines térmicos o eléctricos (Cynara Cardunculus, Brassica Carinata, Paulownia de corta rotación etc,), así como otros cultivos que tradicionalmente han tenido un uso alimentario, pero que pueden tener también una orientación energética (trigo, cebada, girasol,…). Según sea sus destino final estos cultivos se clasifican en alcoholígenos, oleaginosos y lignocelulósicos. o Cultivos alcoholígenos, se trata de cultivos cuyo destino principal es la obtención de bioetanol (alcohol etílico) que se utiliza fundamentalmente como combustible para el transporte (solo o mezclado con gasolina). Se puede obtener mediante la fermentación de la glucosa contenida en cultivos ricos en este 77 azúcar como la remolacha azucarera o la caña de azúcar, o a partir de cultivos de semillas ricas en almidón como el sorgo, el trigo o la cebada. o Cultivos oleaginosos, comprenden aquellas especies cuya semilla es rica en aceites que se utilizan directamente para producir energía, o que transformación sirven en como biodiesel materia mediante prima para procesos su de transesterificación (girasol, colza, …) o Cultivos lignocelulósicos: plantas y cultivos especializados en producir biomasa con fines térmicos o eléctricos, tales como la Cynara cardunculus (cardo), el eucalipto, el chopo, etc. Los componentes principales de la biomasa (hidratos de carbono, lípidos y prótidos) se encuentran en una proporción relativa variable según la naturaleza de dicha biomasa. En general, en los vegetales la materia orgánica está constituida en su mayoría por hidratos de carbono, principalmente en forma de compuesto lignocelulósicos, o amiláceos, y en menor proporción por lípidos y compuestos orgánicos nitrogenados, fundamentalmente proteínas. Según sea el compuesto o grupos de compuestos preponderantes en la biomasa vegetal, esta recibe varios calificativos. Por ser los hidratos de carbono los más abundantes de la biomasa vegetal (entorno a un 60%), la designación del tipo de biomasa se realiza principalmente atendiendo a la forma en la que estos compuestos se encuentran. Según esto la biomasa se puede clasificar en: • Biomasa lignocelulósica, aquella en la que predominan las celulosas (hemicelulosa y holocelulosa) y la lignina. Es el caso de los restos de las podas de olivar. • Biomasa amilácea, en la que los hidratos de carbono predominantes se encuentran en forma de polisacáridos de reserva, tales como almidón o 78 inulina. Los cereales o las patatas pueden ser ejemplos representativos de este tipo de biomasa. • Biomasa azucarada, aquella cuyo principal componente hidrocarbonado está constituido por azúcares, ya sean monosacáridos (glucosa o fructosa principalmente) o disacáridos tales como la sacarosa. La remolacha o el tallo de la caña de azúcar son ejemplos de biomasa azucarada. Según el contenido hídrico de la biomasa, cabe distinguir entre biomasa seca, que tiene una humedad por debajo del 13%, y biomasa semi-seca o fresca, con un mayor contenido en agua. Un tejido vegetal fresco puede llegar a un 90% de agua e incluso más. En definitiva, la amplia diversidad de fuentes englobadas bajo el término biomasa, así como la gran cantidad de procesos que pueden llevarse a cabo para transformar los compuestos químicos originales en otra fuente de energía (térmica, eléctrica, mecánica) o bien en nuevos productos con características diferentes a los iniciales que sean más aptos para su uso final, provocan que el estudio de la biomasa sea más complejo que otras fuentes de energía renovable como la solar o la eólica. El esquema de la figura 2.4. muestra la gran variedad de procesos y de aplicaciones a los que pueden ser sometidos los distintos tipos de biomasas. 79 Figura 2.4. PROCESOS DE CONVERSIÓN ENERGÉTICA DE LA BIOMASA Fuente: Elaboración propia Por último, un aspecto que le confiere especial interés, además del ya citado de la renovabilidad, es el asociado a las emisiones neutras de CO2, puesto que el aprovechamiento final de la biomasa suele conllevar la oxidación total de la materia orgánica o de los combustibles de ella derivados. El CO2 emitido en este proceso es equivalente al absorbido por la materia orgánica original y, por ello, el balance final es neutro. El grado de neutralidad vendrá marcado por la intensidad, tipo y cuantía de los medios utilizados para la producción, transporte, tratamiento y utilización de la misma. 80 2.3.1.- Los restos de las podas de olivar La biomasa procedente de la poda del olivar resulta de la operación que se aplica a los árboles tras la recolección de la aceituna, generalmente cada dos años, para contribuir a mantener las copas de los olivos perfectamente aireadas e iluminadas. La poda tiene además otra serie de beneficios como prolongar la vitalidad del árbol, mantener equilibradas las funciones productiva y reproductiva, etc. [5] En general, se entiende por poda la serie de operaciones realizadas sobre los árboles por las que se modifica la forma natural de su vegetación, vigorizando o restringiendo el desarrollo de las ramas con el fin de darles forma y conseguir la máxima productividad, e incluso restaurar o renovar parte o la totalidad del árbol [5]. La poda es, después de la recolección, la operación de cultivo que demanda mayor cantidad de mano de obra en el cultivo del olivo, pudiendo afirmarse que en las tareas relacionadas directamente con la poda (poda propiamente dicha, desvareto y eliminación de restos) se invierten anualmente unas 25 horas por hectárea, lo que representa, por término medio, el 16 % de los costes de cultivo. La Asociación Española de Municipios del Olivo, AEMO [3] establece un ratio similar de 28 horas por hectárea cada dos años para un olivar tradicional mecanizable de más de 30 años, tanto en secano como en regadío, que representa un 52% del total, frente al olivar de montaña (24%), intensivo (22%) y superintensivo (2%). Por tanto, para una hectárea de olivar se puede estimar un coste aproximado por hectárea de 123,2 €. Si a este coste se le añade el correspondiente al desvareto, el cual suele realizarse todos los años y que puede ascender a unos 53,4 €/ha, y el de eliminación o triturado (70,6 €) la operación total de poda de olivar puede suponer para el agricultor un coste total de 247,2 €/año. 81 Estos costes suponen, para la misma tipología de olivar, entre un 11 y un 17% del coste total por hectárea, pudiendo llegar al 18,4% en caso de olivares de montaña. Las condiciones agronómicas que debe cumplir la poda son las siguientes: • Equilibrar el crecimiento y la fructificación • Acortar al máximo el periodo improductivo • Alargar el periodo productivo • No desvitalizar o envejecer prematuramente el árbol • Ser competitiva en costes • Tener en cuenta el principal factor limitante de la producción en los secanos, que es el agua En España la poda del olivar suele comenzar una vez finalizada la recolección de la aceituna, correspondiendo a los meses de febrero, marzo y abril. En el caso de olivar de almazara, se trata de una operación bianual. Existen distintos tipos de poda, si bien la que interesa desde el punto de vista de subproductos es la primera categoría. • De producción • De renovación o rejuvenecimiento • Desvareto o poda en verde de verano • De adaptación a la recolección mecánica con vibrador • Poda del olivar de regadío • Poda de plantaciones superintensivas La poda de producción, llevada a cabo una vez concluida la fase de formación de los olivos, es realizada cuando estos mantienen una relación hoja-madera 82 alta. Tiene por objetivo aumentar la cantidad de radiación solar captada en el interior y en la zona externa de la copa, aumentando así las cosechas y mejorando la calidad de los frutos producidos, facilitando también las operaciones de recolección manual de las aceitunas. También, extender al máximo el periodo productivo del olivo, al término del cual se llevará a cabo la denominada poda de renovación o rejuvenecimiento. Es muy importante conseguir que los olivos alcancen en el menor periodo de tiempo posible, el volumen de copa óptimo productivo por hectárea característico del medio en el que vegeta la plantación. La expresión que determina el Volumen de copa medio (V) es la siguiente: V = N x (π x d2 x h)/6 d = (d1 + d2)/2 Siendo: • N, densidad de plantación (olivos/ha) • d1 y d2, diámetros de copa de los olivos • H, altura de copa de los olivos En el caso de Jaén, para un olivar de regadío, con un marco de plantación de 10 x 10 y una densidad de 100 olivos/ha, el volumen de copa es 154 m3/olivo y 15.400 m3/ha según los autores antes citados. Los cortes de la poda de producción deben tender a eliminar ramas completas, suprimiendo los llamados chupones grandes que tienden a dominar y arruinar vegetativamente la rama sobre la que han brotado, absorbiendo gran cantidad de savia y sombreando además las ramas inferiores. En cualquier caso siempre tiene que cumplirse la expresión procedente de los expertos podadores “la madera a la sombra y la hoja al sol”. 83 Las intervenciones de poda deben aprovechar el máximo aprovechamiento de la luz, como ya se ha comentado. Para un determinado volumen de copa, la forma esférica que sería la natural de un olivo sin podar, proporcionaría la mínima superficie de fructificación. Como la cosecha se concentra anualmente en la superficie de copa iluminada, conviene crear formas lobuladas, con entrantes y salientes relativamente huecas en su interior, que a igual volumen teórico proporcionarían una mayor superficie de fructificación correctamente iluminada y, por tanto, una producción superior. Los frutos obtenidos en las zonas mejor iluminadas son los de mejor calidad, con un mayor tamaño y rendimiento graso. Finalmente, debe procurarse el equilibrio de ramas que forman el esqueleto del olivo, evitando la dominancia de unas sobre otras, procurando mediante los cortes de aclareo, la correcta iluminación interior de la copa. Igualmente, deben evitarse aclareos excesivamente intensos de ramas finas, ya que este tipo de podas severas disminuyen la relación hoja-madera, lo que trae consigo mermas de producción y desequilibrios en el árbol, con tendencia a la formación de ramos de madera y chupones muy vigorosos, lo que conduce finalmente al envejecimiento prematuro de la rama en la que se insertan. Los restos de poda de olivar se han destruido tradicionalmente mediante la quema de los mismos en el propio campo, suponiendo un coste aproximado de 53 €/ha tal y como ya se ha apuntado (escamujado + separación de fracciones fina y gruesa + quemado) y un riesgo para el agricultor si la operación no es realizada con meticulosidad; por lo que hay que tener en cuenta el viento existente en la zona así como el marco de plantación para no flamear los olivos, llegando incluso a plantear dificultades o incluso a imposibilitar dicha operación en marcos de plantación muy intensivos. La mecanización y su amontonado en puntos específicos de la explotación, habilitados para la quema (caminos, arroyos, zonas libres de olivar, lindes, etc.) han permitido un abaratamiento de la eliminación de los restos de poda. 84 La razón de esta quema radica en la problemática ocasionada por la plaga denominada “barrenillo”, pequeño escarabajo que necesita de las leñas gruesas para su reproducción durante la primavera y que una vez avivado (final de mayo y primeros de junio) realiza galerías de alimentación en las axilas de los brotes, lo que determina su seca y posterior caída, ejerciendo una fuerte acción depresiva sobre las plantaciones de olivar. Otra opción para la destrucción de estos restos es la trituración, reduciendo las ramas y leñas a trozos pequeños en los que no es posible la puesta de las hembras del barrenillo, pudiendo quedar los restos en el campo esparcidos sobre el terreno, algo que pude tener interés desde el punto de vista agronómico en tanto que enriquece el suelo de materia orgánica, recicla los nutrientes y lo protege de la erosión, entre otros. Esta alternativa también presenta algunos inconvenientes debido a que la descomposición de los restos de poda suele ser lenta y dificulta la realización de otras tareas agrícolas. Además su presencia en el suelo suele ser muy prolongada, puede contribuir al incremento de algunos problemas fitosanitarios y, sobre todo, conlleva un coste superior a la incineración para el agricultor, del orden de 70,6 €/ha como ya se ha apuntado. El proceso completo desde el comienzo de la poda hasta el almacenamiento final de la biomasa se muestra en la figura 2.5., donde se esquematizan el conjunto de operaciones que realiza el agricultor para poder extraer los restos de la poda del campo. El escamujado consiste en una separación de fracciones, por un lado la denominad fina (< 20 cm de grosor) compuesta por ramas y ramones, y por otro la gruesa o leña. Toda esta materia queda depositada debajo del olivo por lo que el siguiente paso consiste en, una vez separada la leña, colocar el resto en medio de las calles de los olivos, es lo que se denomina hilerado, y puede ser manual o automático. El resto de etapas son la fragmentación mecánica bajo sus diferentes vertientes (picado, astillado, triturado,…), la recogida de la astilla que 85 suele ser cargada en un remolque de un tractor para su posterior traslado hasta el punto de almacenamiento o de consumo. Figura 2.5-. DISTINTAS ETAPAS PARA LA EXTRACCIÓN DE LOS RESTOS DE LA PODA DEL OLIVAR DEL CAMPO [7] PODA RETIRADA DE LEÑA ESCAMUJADO ALMACENAMIENTO TRANSPORTE HILERADO ASTILLADO Las dos principales características de los restos de las podas de olivar son su baja densidad y su estacionalidad, puesto que, por problemas de propagación de plagas como ya se ha mencionado, han de ser extraídos del campo una vez recogida la cosecha de aceituna y en un periodo de tiempo no superior a 15 ó 20 días dependiendo de las condiciones climáticas. Por un lado, es bueno si el clima es soleado que la biomasa permanezca en el campo porque así se reducirá su humedad de una manera natural, por otro este 86 buen tiempo contribuye a la propagación del temido barrenillo lo que obligaría a extraer, quemar o picar los residuos de una manera rápida. Por tanto, las principales opciones con las que cuenta el agricultor en la actualidad para “gestionar” los restos de poda de olivar son las siguientes: • Quema controlada o incineración “in situ” • Fragmentación mecánica y aporte al terreno • Aprovechamiento energético • Producción de biocombustibles sólidos • Obtención de biocarburantes (“biorefinerías”) A continuación se analiza de una manera detallada cada una de las opciones planteadas. 2.3.1.1.- Quema de restos de podas de olivar La quema de residuos agrícolas en el campo ha sido una práctica habitual en Andalucía y en España en las últimas décadas. Sus consecuencias negativas son varias: • Aumento del riesgo de incendios y erosión • Pérdida de la posibilidad de incorporación al suelo de materia orgánica • Degradación estructural • Pérdida de fertilidad • Mayores riesgos de desertización 87 La normativa andaluza14 que regula las normas de condicionalidad que deben cumplir los agricultores y ganaderos que reciban pagos directos en el marco de la Política Agraria Común, PAC, establece, en relación a los restos de las podas de olivar lo siguiente: “debe realizarse siempre con arreglo a la normativa medioambiental vigente”. Como consecuencia de este marco normativo, cada vez más restrictivo, esta práctica ha ido experimentando un retroceso en los últimos años En el caso de Andalucía, la normativa medioambiental vigente es el Decreto 247/2001 por el que se aprueba el Reglamento de protección y lucha contra los incendios forestales15. En su Título III “Régimen de Usos y Actividades”, Capítulo I “Usos y Actividades en Terrenos Forestales y Zona de Influencia Forestal”, Sección 2ª “Empleo de Fuego en Actividades Agrarias”, artículo 14 se recoge “la quema de matorral, pastos y residuos procedentes de tratamientos silvícolas, fitosanitarios y otros trabajos forestales, así como la quema de rastrojos o residuos en labores agrícolas que se realicen en la Zona de Influencia Forestal requieren autorización administrativa debidamente motivada, en la que se fijarán las condiciones de ejecución de la quema y que será dictada previa solicitud del interesado”. Por tanto, se puede afirmar que la quema de restos de poda de olivar no está prohibida, pero sí reglada, es decir, bajo unas determinadas condiciones y previo, siempre, a la autorización por parte de la autoridad competente. Actualmente es muy difícil determinar el porcentaje de superficie de olivar en la que queman los restos de la poda, si bien es posible hablar de aproximadamente un 50% del total de la poda generada, aunque ello depende, Orden de 22 de junio de 2009 que establecen los requisitos legales de gestión y las buenas condiciones agrarias y medioambientales que deben cumplir los agricultores y ganaderos que reciban pagos directos en el marco de la Política Agraria Común, PAC, los beneficiarios de determinadas ayudas de desarrollo rural y los agricultores que reciban ayudas en virtud de programas de apoyo a la reestructuración y reconversión y a la prima por arranque del viñedo. Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, 7 de julio de 2009, núm. 92. 15 Decreto 247/2001, de 13 de noviembre, por el que se aprueba el Reglamento de protección y lucha contra los incendios forestales. Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, 15 de diciembre de 2001, núm. 144, modificado por el Decreto 371/2010, de 14 de septiembre, por el que se aprueba el plan de emergencia por incendios forestales de Andalucía. Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, 30 de septiembre de 2010, núm. 192. 14 88 entre otros factores, de la zona en cuestión. Por ejemplo en la comarca de la Sierra de Cazorla debido a la proximidad del Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y las Villas, las exigencias medioambientales y normativas están reduciendo esta práctica prácticamente al 100%. En determinadas ocasiones en las que se utilizan aperos acoplados al tractor para realizar el acopio, este coste puede ser superior. En cualquier caso, el coste final depende de varios factores como el marco de plantación, el número de pies por árbol o la orografía del terreno. En cuanto a los riesgos, cabe citar que el mayor es la quema, total o parcial, de olivos en función del viento existente en el momento de realizar la operación. Además, de la consiguiente emisión descontrolada de partículas y de emisiones de gases a la atmósfera. La tendencia natural de la quema de residuos en campo es, salvo excepciones, su desaparición por todos los inconvenientes mencionados, si bien existen determinados emplazamientos que por su orografía es mucho más costoso astillar los restos de poda que quemarlos, y lógicamente los agricultores se preocupan de la viabilidad de sus explotaciones. En la fotografía número 8 se puede apreciar un agricultor realizando la operación de quema en el campo. En esta ocasión amontonando los restos de poda en un punto de la finca mediante un apero acoplado al tractor. Como se puede apreciar la imagen no es positiva, y más si se generaliza tal y como sucede en la provincia de Jaén durante el periodo posterior a la recolección de la aceituna, donde se proyecta una imagen de innumerables focos de humo esparcidos a lo largo y ancho de toda la provincia. 89 Fotografía nº 8. OPERACIÓN DE QUEMA DE RESTOS DE PODA 2.3.1.2.- Fragmentación mecánica y aporte al terreno como enmienda orgánica Otra posibilidad para la destrucción de los restos de las podas de olivar es la trituración, reduciendo las ramas y leñas a trozos más pequeños en los que no es posible la puesta de las hembras del barrenillo, quedando esparcidos sobre el terreno, lo que puede conllevar importantes ventajas de tipo agronómico tales como reciclado de los nutrientes contenidos en los restos de poda, aporte de materia orgánica y protección del suelo frente a la erosión, entre otros. Es una alternativa que va tomando cada vez más fuerza debido también, aparte de las razones citadas, a la generalización en el sector de maquinaria astilladora. El principal inconveniente, además del coste para el agricultor es que su realización prolongada puede provocar, como ya se ha comentado, problemas de asimilación y acumulación de materia orgánica en el suelo que dificultan la realización de labores posteriores de mecanización. También, si su descomposición es lenta y su presencia prolongada pueden ocasionar problemas de tipo fitosanitario. 90 No obstante, algunos autores afirman que la incorporación continuada de los restos de poda en el olivar modifican notablemente las propiedades físicas del suelo (materia orgánica, P y K asimilables, N orgánico) y químicas (estructura, densidad aparente, resistencia a la penetración, infiltración y evaporación). Además presenta un efecto herbicida sobre las hierbas que emergen en la calle del olivar, lo que evita la incorporación de elementos de tipo químico. Por ello, las cubiertas vegetales son difíciles o imposibles de realizar cuando se opta por esta alternativa de gestión de los restos de las podas de olivar. El único inconveniente que puede suponer esta práctica, además de los ya reseñados, es la mezcla involuntaria de astillas con el fruto cuando se recoge la aceituna caída al suelo de forma natural, o cuando la recolección se realiza derribando previamente la aceituna sobre el suelo y los frutos se recogen posteriormente mediante máquinas barredoras. Estas astillas pueden llegar a ocasionar problemas en las almazaras, concretamente en la zona de molturación, de ahí la necesidad de instalar equipos despalilladores en el tren de lavado-limpieza. Algunos agricultores consultados manifiestan una reacción negativa a esta práctica, apuntando que en caso de no llevarla a cabo de una manera adecuada puede repercutir negativamente en la calidad de los aceites. Ello en función del tamaño de partícula producido por la máquina astilladora, que a su vez depende de las dos principales tecnologías empleadas: martillos o cuchillas. En general, cuando menor es éste mucho mejor desde el punto de vista de su asimilación por el suelo [10]. En la fotografías número 9 y 10 se pueden apreciar sendas máquinas de astillado de restos de poda de olivar, manual y automática, realizando la operación en el olivar. 91 Fotografías nº 9. MAQUINARIA ASTILLADORA “MANUAL” DE RESTOS DE PODAS DE OLIVAR 2.3.1.3.- Aprovechamiento energético Es realizado, normalmente, por grandes compañías del sector energético y/o agroalimentario, las cuales adquieren la biomasa a través de empresas de servicios agrícolas y forestales que se suelen encargar de realizar las tareas de astillado, recogida y transporte hasta las plantas de generación de energía eléctrica. En este caso el agricultor se evita el coste de tener que eliminarla y recibe un ingreso por la venta de su biomasa, que puede estimarse para una humedad inferior al 20% en 38€/Tm [11]. Esto se produce en un porcentaje pequeño todavía muy difícil de estimar. En el caso de la provincia de Jaén, existen dos plantas que consumen restos de podas de olivar, una de ellas el 100%, y otra junto a otros biocombustibles como orujillo, cultivos energéticos y residuos forestales). 92 Fotografía nº 10. MAQUINARIA ASTILLADORA “AUTOMÁTICA” DE RESTOS DE PODAS DE OLIVAR La figura 2.6., muestra la relación entre el PCI, la humedad y el precio de la biomasa a pie de planta para generación de energía eléctrica, que hasta hace poco ha constituido el único mercado para la biomasa del olivar. A medida que crece la humedad desciende el poder calorífico y también el precio recibido por los suministradores. Ello pone de manifiesto la importancia de disponer de una biomasa con un nivel de humedad aceptable, el cual puede situare alrededor del 12-15%. 93 Figura 2.6.- RELACIÓN PCI, HUMEDAD Y PRECIO PARA LOS RESTOS DE PODAS DE OLIVAR 22 45 20 P.C.I. (MJ/kg) 16 35 14 30 12 25 10 20 Centimos € 40 18 P.C.I. % Humedad Centimos € Lineal (Centimos €) 8 15 6 10 4 5 2 0 0 10 20 30 40 50 60 % Humedad 70 0 80 90 y = -0,4812x + 43,352 Fuente: Elaboración propia La fotografía número 11 muestra una imagen de una planta de generación de energía eléctrica alimentada con biomasa que consume, entre otros tipos de biomasa, restos de podas de olivar. Corresponde a la empresa VALORIZA ENERGÍA, S.L.U. y está ubicada en el municipio de la Estación de LinaresBaeza. Se trata de un complejo industrial en el que además de esta planta, hay una instalación de cogeneración termoeléctrica de 25 MW de potencia alimentada con gas natural. 94 Fotografía nº 11. PLANTA DE GENERACIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA CON BIOMASA DEL OLIVAR 2.3.1.4.- Fabricación de biocombustibles sólidos Esta es otra alternativa para proporcionar valor añadido a los restos de poda de olivar de cara a un aprovechamiento posterior, normalmente su uso en calderas automáticas para climatización de edificios o en plantas de generación de energía eléctrica como pre-tratamiento previo a su utilización. La producción de astillas es realizada normalmente por empresas de servicios agrícolas y forestales que suministran biomasa a las plantas de generación de energía eléctrica. Se lleva a cabo mediante sistemas de rotación rápida que transforman biomasa de tamaño intermedio, como ramas o troncos de pequeño diámetro, en astillas de pocos centímetros. Existen en el mercado una gran variedad de máquinas astilladoras, las cuales se componen básicamente de un sistema de alimentación (manual o automático), un conjunto de rodillos de sujeción para la introducción de la biomasa en la máquina y sistemas de corte mediante cuchillas o martillos. 95 Pueden clasificarse también en estáticas (para plantas industriales con capacidades de hasta 200 Tm/h), semi-móviles (similar a las anteriores pero que permiten su transporte en camión y capacidades de hasta 100 Tm/h) y móviles, con capacidad para moverse en las explotaciones agrícolas y forestales y con capacidades de hasta 20 Tm/h. La elevada humedad es un factor limitante a la hora de astillar. El precio de esta biomasa astillada puede situarse entre las 40 €/Tm para generación eléctrica, siempre dependiendo de la humedad y del PCI y las 70 €/Tm para los usos finales térmicos. En este último caso es un recurso poco empleado en relación al hueso o al pélet. En la fotografía 12 se puede apreciar la producción de astilla a partir de biomasa de origen forestal (chopo). Fotografía nº 12. MAQUINARIA DE PRODUCCIÓN DE ASTILLA FORESTAL En el proceso de peletización la biomasa es secada, triturada, homogeneizada y densificada, lo cual mejora sus características de almacenamiento, transporte y manipulación [12]. 96 Esto se logra mediante la aplicación de presión sobre una matriz perforada, que puede ser cilíndrica o plana, a través de la cual se hace pasar el material, el cual adopta la configuración de los orificios. La forma de los pélets suele ser cilíndrica con un diámetro de entre 6 y 20 mm y una longitud de 25 a 60 mm, que depende fundamentalmente de su uso posterior. El precio del pélet en el mercado, en función de sus características, puede alcanzar los 240 €/Tm. Sus ventajas radican en su elevada densidad en relación al hueso o la astilla (del orden de 650 kg/m3) y su bajo contenido en cenizas. De ahí que su destino principal sea para usos finales térmicos en el sector doméstico y de servicios [13]. La fotografía número 13 muestra una planta de producción de pélets a partir de biomasa del olivar. Fotografía nº 13. PLANTA DE PRODUCCIÓN DE PÉLETS CON BIOMASA DEL OLIVAR 97 Por último, el hueso de aceituna, que es un magnífico combustible como se apuntó anteriormente, se obtiene separando las distintas fracciones sólidas que componen el orujo de aceite (piel y pulpa fundamentalmente). La extracción del hueso se puede realizar en húmedo en la propia almazara o bien en seco en las extractoras de aceite de orujo o en instalaciones habilitadas al efecto, puesto que lo único que se requiere es espacio dado que el secado se suele realizar en la mayoría de los casos al sol, excepto en el caso de las extractoras, donde el secado es mediante un proceso industrial, incluida la cogeneración termoeléctrica. Posteriormente se le suele dar una serie de volteos mecánicos para continuar extrayéndole los restos de piel y pulpa que pueda contener y, mediante un ventilador, se reduce su humedad hasta valores del orden del 10-12%. El precio del hueso en el mercado puede alcanzar los 150 €/t en función de la pureza del mismo y de su humedad. También depende de la cosecha de aceituna y de la coyuntura del mercado. 2.3.1.5.- Obtención de biocarburantes (“Biorefinería) Las tecnologías actuales de producción de biocarburantes a nivel industrial se agrupan de acuerdo a los dos siguientes grupos: • Primera generación, que comprende tecnologías capaces de producir etanol a partir de azúcar y almidón, como por ejemplo caña, maíz o cereales, y para la obtención de biodiesel de semillas oleaginosas como la palma, la soja o el girasol. (Figura 2.7.). • La segunda generación, que la componen tecnologías capaces de transformar biomasa lignocelulósica en biocarburantes, a partir, por ejemplo, de restos de podas de olivar como está investigando la Universidad de Jaén (Figura 2.8). 98 Figura 2.7. MÉTODOS ACTUALES DE OBTENCIÓN DE BIOCOMBUSTIBLES Vía DIRECTA BIOETANOL (GASOLINA) Remolacha Caña de azúcar Cereales Vía INDIRECTA Etanol + ETBE BIOCARBURANTES Aceites vegetales (Colza, soja, palma,…) BIODIESEL (Esteres metílicos en gasóleo) Fuente: Elaboración propia Los biocarburantes tradicionales (biodiesel16 y bioetanol17), por distinguirlos de los de segunda generación, han estado sometidos a controversias de tipo social, la más importante de las cuales ha sido la de ser obtenidos a partir de materias primas que se utilizan para la alimentación (maíz, girasol, soja, palma,...). Ester metílico producido a partir de un aceite vegetal o animal y utilizado como carburante en motores de ciclo Otto o diésel 17 Etanol producido a partir de la fermentación de vegetales de elevado contenido en azúcar/almidón utilizado como carburante en motores de gasolina 16 99 En el caso de los de 2ª generación, esto no sucede; siendo lo más relevante que la materia prima de la que se parte es precisamente la biomasa residual, entre otras. Los biocombustibles de segunda generación presentan las siguientes ventajas respecto de los de primera, que los hacen más competitivos en un futuro cercano: • Mayor rango de materias primas para su producción • Minimización de la competencia con la producción de productos alimentarios • Mejora del ciclo de vida de la producción de biocarburante, pasando de una reducción de aproximadamente el 45% a valores estimados de hasta el 90% • Superiores rendimientos por hectárea (4.000 frente a 1.300) • Menores emisiones de CO2 • Mayores rendimientos energéticos • Elevada calidad del hidrocarburo obtenido (mayor número de cetano18, bajo contenido en aromático, cero azufre, ... Pero también presentan algunos inconvenientes, fundamentalmente que para su obtención se parte de procesos más complejos, como por ejemplo el conocido como síntesis de Fischer-Tropsch, y también más costosos. Esta síntesis es un proceso químico para la producción de hidrocarburos líquidos (gasolina, keroseno, gasóleo C y lubricantes) a partir de gas de síntesis (CO y H2). Fue inventado por los alemanes Franz Fischer y Hans Tropsch. Guarda relación con el tiempo que transcurre entre la inyección del carburante y el comienzo de su combustión. Cuanto más elevado sea este índice, menor es el retraso de la ignición y mejor es la calidad de la combustión 18 100 Figura 2.8. PROCESOS DE 2ª GENERACIÓN Fermentación BIOETANOL Syngas (CO + H2) GASIFICACIÓN GASÓLEO, BTL Síntesis de Fischer Tropsch BIOMASA PIRÓLISIS Ac. pirólisis GASOLINA Y GASÓLEO AUTO Procesos de refino (hidrogenación, cracking) PRETRATAMIENTO HIDRÓLISIS HEMICELULÓSICA HIDRÓLISIS CELULÓSICA FERMENTACIÓN AZÚCARES BIOETANOL Fuente: Elaboración propia Esta última aplicación, la cual se encuentra en fase de Investigación y Desarrollo, puede constituir una alternativa para los restos de poda de olivar. Consiste en transformar la biomasa lignocelulósica en un carburante apto para su uso en automoción, etanol en este caso, tal y como se muestra en el esquema de la figura 2.9. Es la línea de investigación seguida por el Departamento de Ingeniería Química, Ambiental y de los Materiales de la Universidad de Jaén. 101 Figura 2.9. ESQUEMA DE OBTENCIÓN DE ETANOL A PARTIR DE RESTOS DE PODA DE OLIVAR [7]. Biomasa Lignocelulósica Microorganismo fermentativo Celulasas Sólidos Pretratamiento Hidrólisis Enzimática Fermentación ETANOL Líquidos Sacarificación y Fermentación Simultáneas SFS Azúcares solubilizados (C5/C6) Fermentación Asociado a la obtención de biocarburantes de 2ª generación surge un nuevo concepto de biorrefinería, similar al de refinería convencional de petróleo. Se trata de una instalación industrial en la que partiendo de biomasa lignocelulósica se pueden obtener distintos productos (carburantes, plásticos, químicos,...) y energía. Desde una perspectiva estratégica las ventajas son significativas en términos cualitativos y cuantitativos: • Se trata de una instalación centralizada, lo que supone una optimización importante de recursos, tanto inputs como outputs. 102 • La variedad de productos resultantes pueden ser comercializados en el mercado por su elevado valor energético. • Se consigue un aprovechamiento de economías de escala. Se trata de inversiones cuantiosas, pero también con periodos de vida útil importantes. Deben ser diseñadas para utilizar un amplio rango de tipos de biomasa y para producir un amplio rango de productos en función de las demandas del mercado. El esquema de obtención del biodiesel de 2ª generación se puede apreciar en la figura 2.10. Figura 2.10. ESQUEMA DE OBTENCIÓN DE BIODIESEL DE 2ª GENERACIÓN SYNGAS BIOMASA Gasificación Síntesis Fischer Tropsch Hidroacabado PRODUCTOS XTL CERA FT DIESEL KEROSENO NAFTA CERA LUBRICANTES Fuente: elaboración propia Por tanto, partiendo de una biomasa del tipo lignocelulósico como los restos de podas de olivar, se somete a un proceso de gasificación a partir del cual se obtiene el denominado syngas o gas de síntesis y, a partir del mismo, mediante 103 la denominada síntesis de Fischer-Tropsch se genera el hidrocarburo líquido, diesel en este caso, que constituirá un sustituto directo del petróleo en la automoción. Por todo ello, las dos grandes ventajas estratégicas de los biocombustibles de 2ª generación son: • La posibilidad de utilizar como materia prima biomasa residual sin necesidad de competir con el sector primario y con la alimentación. • La obtención de un producto sustitutivo directo del petróleo para su uso en un sector como el transporte, gran consumidor de energía y responsable de un volumen importante de emisiones de gases de efecto invernadero. 2.3.1.6.- Generación y potencial energético Algunos autores establecen que la producción media de ramones (hoja + madera fina de diámetro inferior a 5 cm) y leñas en un olivar de secano está muy relacionado con su capacidad productiva, tal y como se puede apreciar en el cuadro 2.2. En olivares de tipo medio de las provincias de Jaén y de Córdoba cada hectárea de olivar puede generar en torno a 1,25 toneladas anuales de biomasa constituida por la fracción fina (por debajo de 5 cm. de diámetro) y 0,5 Tm/ha de fracción gruesa o leña [4]. Otras fuentes de información consultadas relacionan la generación de biomasa residual con la superficie de cultivo, arrojando los siguientes valores para el llamado Índice de Residuo (IR) expresado en kg de residuo por hectárea, y que para el caso del olivar se recoge en el cuadro 2.3., en función del rendimiento de aceituna por superficie. 104 Cuadro 2.2.- PRODUCCIÓN DE BIOMASA PROCEDENTE DE RESTOS DE PODA DE OLIVAR EN FUNCIÓN DE LA CAPACIDAD PRODUCTIVA DEL OLIVO [6] PRODUCCIÓN MEDIA DE ACEITUNAS (KG/OLIVO) Ramones 25 35 45 55 27 36 44 53 19 27 34 55 71 87 12 Leñas TOTAL 39 Cuadro 2.3.- ÍNDICE DE RESIDUO (IR) PARA EL OLIVAR IR (kg/ha) < 3.000 KG/HA > 3.000 KG/HA 1.400 1.700 Fuente: Agencia Andaluza de la Energía. Para la determinación de la cantidad de biomasa procedente de la poda del olivar se puede utilizar la siguiente expresión: Biomasa (kg/año) = S (ha) x IR (kg/ha x año) Donde: • S es la superficie de olivar considerada. • IR es el llamado “Índice de Residuo” expresado en kg/ha año 105 Para la estimación del potencial energético de la biomasa procedente de la poda del olivar, se puede utilizar la siguiente expresión: Energía (tep/año) = Biomasa (kg/año) x PCIh (kcal/kg) x 1/107 (tep/kcal) Considerando un Índice de Residuo (IR) de 1,75 Tm anuales, se puede estimar tanto el volumen de biomasa procedente de restos de podas de olivar generado en Andalucía, como en la provincia de Jaén; así como el potencial energético de los mismos. De acuerdo con el dato de superficie de olivar de almazara en Andalucía (1.499.896 hectáreas) se puede concluir que se producen del orden de 2.624.818 Tm anuales de esta fuente de biomasa, tanto de fracción fina (ramas y ramones) como de leña. En el caso concreto de la provincia de Jaén, la cantidad de biomasa procedente de los restos de poda de olivar considerando la superficie de olivar (571.604 hectáreas) es de 1.000.307 Tm anuales, un 38,11% del total generado en Andalucía. Partiendo de un poder calorífico inferior (PCI)19, para un humedad del 16%, de 3.190 kcal/kg, el potencial energético de esta fuente de energía renovable y autóctona es de 937.316,94 toneladas equivalentes de petróleo (tep) en el caso de Andalucía y de 319.097,93 tep en el caso de la provincia de Jaén. El potencial de la biomasa de los restos de la poda del olivar en Andalucía supondría en torno a un 7,69% del consumo total de energía final de Andalucía en 2011. En el caso de la provincia de Jaén, el dato es aún más contundente, situándose en el 25,32%. Cantidad de energía que se desprende en la combustión de una unidad de masa de un material combustible en la que el agua se libera en forma de vapor. Si esta agua se condensa desprendería calor y entonces se hablaría de Poder Calorífico Superior (PCS). Por tanto, el PCI es inferior al PCS y a mayor humedad del combustible, mayor resultará esta diferencia. 19 106 En el cuadro 2.4. se recoge un resumen del potencial de biomasa procedente de los restos de las podas de olivar en Andalucía y en Jaén, así como el potencial energético. El cuadro 2.5. muestra los principales parámetros de una muestra de restos de podas de olivar compuesta por una mezcla de leña, ramón y hojas. Cuadro 2.4.- POTENCIAL DE BIOMASA Y ENERGÉTICO DE LOS RESTOS DE LAS PODAS DE OLIVAR EN ANDALUCÍA Y JAÉN ANDALUCÍA JAÉN Superficie total (Ha) 1.499.896,00 571.604,00 IR (kg/Ha*año) 1.750,00 1.750,00 Total biomasa (t/año) 2.624.818,00 1.000.307,00 Potencial Energético (tep/año) 837.316,94 319.097,93 Fuente: Elaboración propia 2.3.2.- Subproductos de la industria olivarera Las agroindustrias del sector del olivar son las siguientes: • Almazaras, que son en las que se produce por medios físicos el aceite de oliva a partir de la aceituna. • Extractoras u orujeras, en las que se obtiene aceite de orujo de oliva crudo por medios físicos o químicos a partir del orujo graso procedente de las almazaras, tal y como se muestra en el siguiente gráfico. • Entamadoras, que son aquellas agroindustrias dedicadas al procesado de la aceituna mediante fermentación o salazón para su consumo como aceituna de mesa. 107 Cuadro 2.5.- PRINCIPALES PARÁMETROS DE LOS RESTOS DE LAS PODAS DE OLIVAR (S/HÚMEDO). PARÁMETRO UNIDAD RESULTADO Humedad total % 5.30 Cenizas 815 ºC % 2.86 Materias volátiles % 76.05 P.C.S. Kcal/kg 4,443 P.C.I. Kcal/kg 4,126 Carbono fijo % 15.80 Carbono % 45.92 Hidrógeno % 6.29 Nitrógeno % 0.45 Azufre % 0.09 Oxígeno % 44.40 Fuente: Fundación CIDAUT En la figura 2.11. se muestra un esquema del proceso industrial que tiene lugar en las extractoras de aceite de orujo, que tal y como ya se han apuntado, constituyen un elemento esencial del sector oleícola y sin cuya participación en el mismo hoy por hoy no sería factible producir aceite de olivar virgen extra en las almazaras. 108 Figura 2.11.- DIAGRAMA PROCESO EXTRACTORA DE ACEITE DE ORUJO Fuente: Asociación Nacional de Extractores de Aceite de Orujo, ANEO Los principales subproductos generados por estas agroindustrias incluyen: • Restos de hojas y ramas finas (hojín), • orujo húmedo y graso también conocido como alperujo, • Orujillo y 109 • Hueso de aceituna. Los restos de hojas y ramas finas, material comúnmente denominado hojín, se generan como resultado de la limpieza de la aceituna antes de su procesado, tanto en la almazara como en la entamadora. Tradicionalmente se han utilizado para alimentación animal (31%), y más recientemente para la producción de compost junto con otros restos orgánicos (35%); sin embargo en la mayor parte de los casos constituyen un auténtico residuo (16%) y, por tanto, carecen de valor comercial, además de ser necesarios una adecuada eliminación y/o tratamiento de los mismos (7%). Su elevado contenido en humedad, del orden del 40% los hacen inviables para su empleo en plantas de generación de energía eléctrica (10%). Su poder calorífico en base seca se sitúa en torno a 4.378 kcal/kg. El orujo o alperujo es el subproducto que se genera en las almazaras durante el proceso de elaboración del aceite de oliva. La totalidad de éste es empleado como materia prima para las industrias de extracción del aceite de orujo por lo que no puede considerarse como un subproducto como tal y sí como una materia prima. Existe una planta de generación de energía eléctrica en Andalucía que utiliza este tipo de biomasa directamente como combustible empleando una tecnología de combustión denominada “lecho fluido”. También se ha empleado, junto con hojín y otros residuos orgánicos, para la elaboración de compost y su aplicación a los suelos. Otra opción tecnológica de valorización de este producto pasan por la digestión anaeróbica previa extracción de polifenoles. Su elevado contenido en antioxidantes dificultan los procesos de fermentación, de ahí que sea necesaria su liberación para que la producción de biogás sea más eficiente. De la materia seca restante se puede obtener un fertilizante. Este biogás puede ser empleado en motores de combustión interna alternativos o en las llamadas pilas de 110 combustible para producir electricidad, con un mayor rendimiento energético y un menor volumen de emisiones a la atmósfera. De una hectárea de olivar, se pueden producir 1.500 kg de orujo, compuesto por un porcentaje elevado de agua (54,5%), restos de sólidos como piel, pulpa y hueso (42,50%) y algo de aceite (3%). Por tanto, se trata de una fuente de biomasa con un elevado contenido en agua (818,6 kg/ha) lo que dificulta su manejo y su traslado hasta la extractora En las extractoras, el alperujo procedente de las almazaras es sometido a un proceso químico en el que el aceite residual es capturado mediante el empleo de un disolvente orgánico (hexano). Esta operación se compone, a su vez, de dos pasos previos, el secado y la extracción propiamente dicha. La fase de secado se suele realizar en secaderos rotativos y continuos tipo trómel por los que se hace circular una corriente de aire caliente a alta temperatura (entre 400 y 800 ºC). El calor necesario puede ser obtenido directamente a partir de la combustión del orujillo generado en la misma extractora o mediante sistemas de cogeneración termoeléctrica mediante gas natural. En la figura 2.12, y en la fotografía número 14 se pueden apreciar respectivamente el esquema de funcionamiento de un secadero rotativo de orujo, y de un trómel de secado, ambos gentileza de la firma jiennense ESPUNY CASTELLAR, S.A, el cual emplea orujillo como combustible, en lo que, como se verá más adelante, podría denominarse “sistema tradicional de secado de alperujo” puesto que es la forma en la que tradicionalmente ha funcionado el sector extractor en España hasta la entrada en funcionamiento de los sistemas de secado mediante cogeneraciones termoeléctricas. 111 Figura 2.12.- ESQUEMA DE SECADERO ROTATIVO DE ORUJO Fuente: ESPUNY CASTELLAR, S.A. Fotografía nº 14.- SECADERO DE EXTRACTORA Fuente: ESPUNY CASTELLAR, S.A. 112 El hueso de aceituna es el principal componente sólido que contiene el orujo, pudiendo ser extraído del mismo mediante procedimientos físicos. Se trata de un combustible muy adecuado para usos térmicos debido a su reducida humedad (13%) y elevado poder calorífico, del orden de 4.440 kcal/kg en base seca. La extracción del hueso se realiza en gran parte de las almazaras de Andalucía con la finalidad de utilizarlo para la producción de la energía térmica necesaria en la propia almazara y también para comercializarlo para usos finales térmicos, pudiendo alcanzar un precio en el mercado, una vez limpio y seco (humedad entorno al 10%) de hasta de 150 €/Tm. El contenido en sólidos del orujo es del 41,49%, es decir, un 34,46% del total de la masa de la aceituna. Estos sólidos están compuestos, a su vez, por piel (22%), pulpa (40%) y hueso (38%). Se puede afirmar por tanto, que el porcentaje de hueso contenido en la aceituna es del 13,09%. Finalmente, el orujillo es el subproducto que se produce en las extractoras como resultado de los procesos de secado y extracción del orujo graso. Su fracción seca está compuesta por piel (15-30%), hueso (30-45%) y sólidos finos de pulpa (30-50%). Posee un porcentaje de humedad que varía entre el 9% y el 12% y un poder calorífico en torno a 4.100 kcal/kg en base seca, lo que le confiere un elevado valor como combustible. Parte del orujillo es consumido por las propias extractoras y el resto se consume en las plantas de generación de energía eléctrica alimentadas con biomasa. También se están dando situaciones paradójicas desde un punto de vista energético de exportación hacia países como Italia y Reino Unido [14]. En el cuadro 2.6. se muestra un balance de masa en una almazara partiendo de 1.000 kg de aceituna molturada, a los que se añade un 10% de agua de proceso. 113 Cuadro 2.6.- BALANCE DE MASAS EN UNA TONELADA DE ACEITUNA kg % ACEITUNA+AGUA 1.010,00 100% Aceite 176,00 17,43% Orujo 819,00 81,09% Agua 5,00 1,49% ORUJO 819,00 100,00% Agua 447,00 54,58% Sólidos 348,00 42,49% Aceite 24,00 2,93% SÓLIDOS/ACEITUNA 348,00 34,46% HUESO/ACEITUNA 132,24 13,09% SÓLIDOS 348,00 Piel 76,56 22% Pulpa 139,20 40% Hueso 132,24 38% Fuente: Instituto de la Grasa. Consejo Superior de Investigaciones Científicas, CSIC. Ministerio de 114 Del total de industrias extractoras existentes en España en 2011 (38), un 36,84 % disponen de sistemas de cogeneración. El resto siguen utilizando el tradicional trómel de secado, el cual está sometido a la legislación vigente en materia de emisión de partículas20. En resumen, la biomasa generada en las industrias vinculadas al sector del aceite de oliva se muestra en el cuadro 2.7. Cabe mencionar que en la estimación del orujillo producido se encuentra contenido el hueso, puesto que como ya se ha comentado, los sólidos que suponen un 42,49% del orujo, están compuestos por piel (22%), pulpa (40%) y hueso (38%). Además, en caso de extraer el hueso del orujillo, este subproducto dejaría de tener interés desde un punto de vista energético. Para la estimación de las cantidades se ha partido del ratio de producción de aceituna por hectárea de la campaña 2010/2011 calculado a partir de los datos de producción facilitados por la Delegación Provincial de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, y cifrado en 4.814,26 kg/ha. Cuadro 2.7.- POTENCIAL BIOMASA INDUSTRIA OLEÍCOLA Andalucía Jaén Orujo (Tm/año) 5.855.359,00 2.231.452,47 Hueso (Tm/año) 945.436,72 360.301,92 Orujillo (Tm/año) 2.487.991,37 948.162,95 Fuente: Elaboración propia 20 Orden de 12 de febrero de 1998 por la que se establecen límites de emisión a la atmósfera de determinados agentes contaminantes procedentes de instalaciones de combustión de biomasa sólida. Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, 2 de abril de 1998, núm. 192. 115 2.4.- El actual modelo de gestión de subproductos: costes El actual modelo de explotación del olivar se basa en la realización de un conjunto de operaciones llevadas a cabo por parte del agricultor: • Manejo del suelo, • Fertilización, • Control de plagas y enfermedades, • Riego, • Recolección, • Traslado de la aceituna a la almazara para la obtención del aceite de oliva, y su posterior comercialización a través de distintos canales de distribución, y • Poda Por tanto, el primer eslabón de la cadena de valor del aceite de oliva lo constituyen los agricultores, los cuales son los responsables de la producción de la materia prima de la cual se obtiene posteriormente el aceite de oliva. Una vez recolectada la aceituna, el agricultor entrega su producción a las almazaras, que son las encargadas del proceso industrial para la elaboración del aceite de oliva virgen extra. El tamaño más frecuente de este tipo de industrias es el que opera en el rango que va desde las 20 a las 100 toneladas de aceite producido por campañas (23% del total). El mayor peso productivo recae en las que se encuentra en el rango de producción de 1.000 a 2.500 toneladas (35% de la producción nacional, a pesar de que en número no llegan al 11%. La figura 2.13. esquematiza este modelo de gestión de subproductos, partiendo del agricultor, donde se muestran el conjunto de operaciones a las que somete al olivar, remarcando las dos que son generadoras de biomasa: la recolección y la poda. La primera de una manera indirecta, puesto que la biomasa 116 se genera en la almazara como consecuencia del proceso de producción del aceite de oliva virgen. También se indican los costes que tienen que sufragar los agricultores para gestionar sus subproductos con este modelo. Figura 2.13.- ESQUEMA DEL MODELO ACTUAL DE GESTIÓN DE LOS SUBPRODUCTOS DEL OLIVAR Manejo del suelo Fertilización Control de plagas y enfermedades AGRICULTOR Aceituna RECOLECCIÓN Orujo ALMAZARA 53 €/Ha Restos de poda 1,3 €/km EXTRACTORA Eliminación PODA Picado 71 €/Ha Riego Fuente: Elaboración propia Tal y como se apuntó en el capítulo correspondiente a la introducción, los costes totales de cultivo se sitúan en el entorno de 1.448 €/ha en el caso de secano y 2.197 €/ha para regadío [3]. Si se tiene en cuenta el precio medio del aceite de oliva virgen extra en el mercado, el cual era en diciembre de 2012 de 2,416 €/kg, se pone de manifiesto la inviabilidad de la producción actual de aceite de oliva, o, dicho de otra manera, el poco o nulo margen con que cuenta 117 el agricultor, que ni siquiera cubre costes, salvo para tipologías de olivar intensivo o superintensivo, que en la actualidad suponen porcentajes de cultivo inferiores a los tradicionales, especialmente la modalidad superintensivo. Los costes de eliminación o picado, aunque ya han sido tratados en el apartado anterior, suelen depender de los siguientes parámetros: • Tipo de olivar (tradicional, intensivo o superintensivo). En España entorno al 76% corresponde a olivar tradicional, el 22% a intensivo y un escaso 2% a superintensivo. • Grado de mecanización. El olivar tradicional no mecanizable o de Sierra supone a nivel nacional un porcentaje del 24%. • Secano o regadío. • El tamaño de la explotación. A mayor tamaño menores costes por hectárea. • La cantidad de restos de poda generada, puesto que no todas las podas suelen ser iguales. Para un olivar tradicional no mecanizable, los costes de eliminación pueden situarse en el entorno de los 53 €/ha, y corresponden a las labores de acopio manual y quema propiamente dicha. Los de picado para un olivar tradicional mecanizable ascienden a 71 € aproximadamente, y están formados por los correspondientes a la mano de obra y al coste del tractor con la picadora enganchada a la toma de fuerza. En el caso de olivar intensivo el coste asociado a la maquinaria es más elevado debido a las dificultades de movilidad dentro de la explotación, lo normal es disponer en la explotación de una calle ancha de al menos 6 metros. Por último, en el caso del superintensivo los costes son inferiores debido a la ausencia de mano de obra para la manipulación de los restos de poda, todo es maquinaria. 118 Cabe decir que la operación de poda, cuyos costes oscilan entre los 92,4 €/ha para un olivar de montaña y 378,4 €/ha para un superintensivo, no están considerados porque es una operación que el agricultor está obligado a realizar de todas formas, así como el denominado desvareto, el cual conlleva también unos costes que suelen situarse en el entorno de los 50 €/ha excepto para el olivar superintensivo, donde son nulos. Cuadro 2.8. COSTES DE ELIMINACIÓN DE RESTOS DE PODA SISTEMA DE CULTIVO Olivar tradicional mecanizable Olivar tradicional no mecanizable COSTE POR HA (€) 52,8 OBSERVACIONES 12 horas peón cada 2 años 14 horas peón + 0,7 horas 70,6 de tractor-picadora cada 2 años 14 horas peón + 1 hora Olivar intensivo 74,5 de tractor-picadora cada 2 años Olivar superintensivo 51,4 2 horas de tractorpicadora cada año Fuente: Asociación Española de Municipios del Olivo, AEMO Por lo que respecta a la otra fuente de biomasa considerada en la presente Tesis, el coste de gestión del alperujo suele oscilar entre 3 y 6 €/Tm en función de lo siguiente: • Distancia a la extractora. En el caso de la provincia de Jaén, tal y como ya se ha apuntado, hay un total de 38 extractoras de aceite de orujo para 327 119 almazaras operativas, de lo que se puede deducir que en algunos casos las distancias almazara/extractora van a ser significativas. En el cuadro 2.9. se recogen las extractoras de aceite de orujo de Andalucía. • Contenido en hueso. La mayor parte de las almazaras están extrayendo el hueso en húmedo previo a su envío a la extractora. Esta tendencia irá cada vez a más en tanto que el hueso, como ya se ha citado, es un excelente combustible destinado principalmente a usos finales térmicos en los sectores doméstico y terciario. • Riqueza grasa. Otro parámetro cuya evolución en los últimos años ha sido descendente, algo que es razonable si se tiene en cuenta la evolución tecnológica de los sistemas de separación de fases y la mayor calidad del aceite obtenido en almazara por medios única y exclusivamente mecánicos. No hace demasiados años era la propia extractora la que pagaba a la almazara por retirar el orujo. Eran tiempos donde no se le extraía el hueso y la riqueza grasa era suficiente como para hacer viable en términos económicos el proceso de extracción con disolventes. Ahora la situación se ha revertido, y es previsible que en los próximos años aún se agudice más. Se trata, por todo lo anteriormente expuesto, de un modelo insostenible desde los puntos de vista económico y ambiental, que contribuye a la falta de rentabilidad para el sector oleícola debido, entre otras cuestiones, a los bajos precios de mercado del aceite de oliva. Las razones a este modus operandi hay que buscarlas en lo siguiente: • La excesiva inercia que existe en el sector primario, es decir, el agricultor suele hacer lo que hacen los demás, más aún cuando la forma societaria de explotación de la almazara es, en su mayor parte, sociedad cooperativa. 120 Cuadro 2.9. EXTRACTORAS DE ACEITE DE ORUJO DE ESPAÑA Fuente: Asociación Nacional de Extractores de Aceite de Orujo, ANEO 121 • La falta de conocimiento en materia de aprovechamiento de subproductos, a veces debida a la inexistencia de iniciativas empresariales que permitan valorizar los subproductos de una manera rentable, o de una demanda estable de biomasa para usos energéticos, en general. • La carencia de una legislación en materia ambiental más rígida que evite la quema de los residuos en el campo así como el transporte de ingentes cantidades de agua durante los trasiegos de orujo desde las almazaras hasta las extractoras. • La falta de visión empresarial y de concienciación ambiental existente en el sector oleícola en general. • La existencia de un sector extractor tradicional el cual se ha encargado de utilizar el orujo de las almazaras como materia prima por lo que las almazaras no ha previsto realizar el secado en sus propias instalaciones. • La carencia de una visión estratégica y de negocio del sector oleícola que le hubiera permitido reducir su independencia del sector extractor. • Algunas experiencias fallidas impulsadas por elementos ajenos al sector que han buscado el oportunismo y el beneficio a corto plazo. 122 2.5.- Conclusiones A pesar de las innumerables ventajas que conlleva el aprovechamiento energético de la biomasa, cabe destacar su bajo grado de desarrollo en relación a otras tecnologías renovables como la eólica o la solar, las cuales han satisfecho o incluso superado los objetivos establecidos en las distintas planificaciones. En un principio, las razones hay que buscarlas en la existencia de múltiples condicionantes, principalmente de carácter económico que afectan a toda la cadena de producción y consumo de la biomasa. Según los tres niveles que conforman una cadena que vincula a los consumidores de biomasa con el sector agrario son: • El sector productor de materias primas (cultivos energéticos y subproductos de los sectores agrario y forestal). • Las empresas productoras de biocombustibles, tanto líquidos (biodiesel y bioetanol) como sólidos, centrado en la producción de pélet fundamentalmente. • Los consumidores de productos finales procedentes de la bioenergía, entendida ésta como la energía que procede de la biomasa, o también, como aquella que comprende todas las formas de energía derivadas de los combustibles orgánicos o biocombustibles. Entre ellos cabe citar al sector del transporte, al doméstico, al industrial, al de servicios o al público. Desde el punto de vista del sector productor, el olivar constituye un importante proveedor de recursos energéticos, tanto procedentes de las operaciones de poda como de la elaboración del aceite de oliva. Sin embargo, este potencial no está siendo aprovechado en la actualidad por razones de tipo económico fundamentalmente, como ya se ha citado. También, debido a la inexistencia de un auténtico sector de la biomasa, como sucede con otras 123 tecnologías como por ejemplo la eólica, cuyo desarrollo en España ha sido tomado como ejemplo en países como Estados Unidos. Y todo ello además, en una situación de bajos precios del aceite de oliva y con la amenaza de la reducción y/o eliminación de las ayudas al sector en el nuevo marco comunitario de 2013. Esto, indudablemente, debería constituir un acicate para que el sector del olivar se pusiese a trabajar, entre otras líneas, en la de valorización de residuos y subproductos, que al menos, le permitiría optimizar costes y generar ingresos adicionales que contribuyan a incrementar la rentabilidad del cultivo. En cuanto a la generación de biomasa, por un lado están los restos de poda, los cuales en el mejor de los casos son utilizados, previa fragmentación mecánica, como aporte orgánico al terreno; si bien incurriendo en una serie de costes por parte de los agricultores. Por otro lado, el orujo generado en las almazaras tampoco es aprovechado en tanto que es llevado hasta las extractoras de aceite de orujo, asumiendo los costes que ello conlleva por parte de los propios agricultores. En muchas almazaras, cada vez en más, le extraen el hueso en húmedo, el cual es vendido como combustibles para usos finales térmicos a precios que pueden alcanzar los 150 €/Tm, caso de la cosecha 20122013 por tratarse de una cosecha muy baja y por la existencia de un cada vez mayor mercado de usos finales térmicos. La única fuente de biomasa que sí es aprovechada con fines térmicos de una manera global es el orujo extractado u orujillo, destinado en su mayor parte a la generación de energía eléctrica en plantas con tecnología de combustión. Aún sigue exportándose a países como Reino Unido e Italia para ser empleado en cocombustión en centrales térmicas, debido a los diferentes sistemas de impulso a las energías renovables existentes (certificados verdes). En el cuadro 2.10. se muestra un resumen de la biomasa generada por el sector oleícola en Andalucía y en Jaén, así como el potencial energético en base 124 a los PCI considerados: 4.190 kcal/kg para el hueso de aceituna y 3.800 kcal/kg para el orujillo. Cuadro 2.10.- BIOMASA GENERADA POR EL OLIVAR EN ANDALUCÍA Y JAÉN Y POTENCIAL ENERGÉTICO DE LA MISMA ANDALUCÍA JAÉN Restos de poda (Tm/año) 2.624.818,00 1.000.307,00 Orujo (Tm/año) 5.855.359,00 2.231.452,47 Hueso de aceituna (Tm/año) 945.436,72 360.301,92 Orujillo (Tm/año) 2.487.991,37 948.162,95 Potencial energético restos poda (tep/año) 837.316,94 319.097,93 Potencial energético hueso (tep/año) 396.137,99 150.966,51 Potencial energético orujillo (tep/año) 945.436,72 360.301,92 Fuente: Elaboración propia En base a los datos del cuadro, y según a la superficie de olivar antes mencionada para Andalucía y Jaén, se puede concluir con que el ratio de generación de biomasa (restos de poda + orujo) se sitúa en 5,65 Tm/ha. Si se considera el orujillo en lugar del orujo, este ratio se coloca en 3,41 Tm/ha. En cuanto a la densidad energética, expresada en tep/ha en este segundo caso, la cifra asciende a 1,19 tep/ha. Se puede concluir pues con que una hectárea de olivar es capaz de generar 1,19 tep que pueden contribuir a reducir la elevada dependencia energética de Andalucía, como se verá en el capítulo siguiente. Se trata, como ya se ha comentado, de un modelo de gestión de subproductos del olivar insostenible en términos económicos y ambientales, 125 que acarrea sobre costes para los agricultores y que no produce mejoras ambientales en las explotaciones. Además, confiere al sector una imagen negativa en términos ambientales. 126 3.- COYUNTURA ENERGÉTICA DE LA PROVINCIA DE JAÉN 3.1.- Introducción En este apartado se presenta un compendio de información energética de la provincia de Jaén que concluye con una serie de ratios, un conjunto de indicadores y una batería de medidas tendentes a reducir el consumo de energía, mejorar la eficiencia energética e incrementar la producción y el consumo de energía a partir de fuentes de origen renovable. El análisis de la coyuntura energética de la provincia de Jaén se ha realizado desde varias vertientes. Por un lado, se ha analizado el parque provincial de generación de energía eléctrica (producción bruta, distribución por tecnologías, potencia total instalada, energías renovables, cogeneraciones, etc.). A continuación se ha realizado un balance de generación de energía eléctrica en la provincia en base a los datos existentes de consumo suministrados por las compañías eléctricas. También se han estudiado los consumos de energía, final y primaria, distribuidos por fuentes y por sectores, la producción interior de energía, 127 el grado de autoabastecimiento energético y la evolución de algunos parámetros como el consumo de energías renovables. Por último, se ha hecho una referencia a la intensidad energética final y a la generación de energía térmica con fuentes renovables. Se incluyen también un conjunto de propuestas de actuación y una serie de indicadores energéticos (demanda bruta de energía eléctrica, producción bruta total, producción bruta de energías renovables, potencia eléctrica total, potencia eléctrica de origen renovable, consumo final de energía y consumo final per cápita y por sectores, consumo primario de energía, aportación de las energías renovables al consumo energético primario y grado de autoabastecimiento energético) que han sido evaluados desde el año 2005 hasta 2011. Algunos datos están actualizados a marzo de 2012 y otros corresponden al año 2011, en concreto de la publicación “Datos energéticos de Andalucía 2011” elaborada por la Agencia Andaluza de la Energía. Los correspondientes a España han sido extraídos del documento ya citado “La energía en España 2011” elaborado por el Ministerio de Industria, Energía y Turismo. En un principio y como se verá más adelante, la provincia de Jaén presenta los siguientes rasgos específicos y diferenciadores en relación a las estructuras de consumo energético de Andalucía y de España. • La energía eléctrica generada en la provincia de Jaén procede de instalaciones acogidas al denominado “régimen especial”, es decir, se trata de instalaciones de cogeneración termoeléctrica21 y, por tanto, de elevada eficiencia energética, y de instalaciones de energías renovables: plantas de generación eléctrica con biomasa mediante tecnología de combustión, parques eólicos, centrales hidráulicas e instalaciones solares fotovoltaicas. La potencia total instalada en la provincia en marzo de 2012 ascendió a 534,79 MW, de los cuales 190,29 MW, un 35,58%, correspondía a energías renovables (no se incluye la hidráulica de más de 10 MW). 21 Producción combinada de calor y electricidad a partir de la misma fuente de energía primaria. 128 • La energía hidráulica está fuertemente implantada en la provincia, con un total de 23 instalaciones que totalizan una potencia de 212,22 MW. De ellas, un 25,76% corresponde a centrales de potencia inferior a 10 MW (54,66 MW), consideradas, por tanto, como mini hidráulicas. • El peso de las energías renovables en el mix de consumos para usos finales se situó en 2011 en un 15,99%, frente al 6,62% de España y el 7,03% de Andalucía. Esto es debido a la utilización de la biomasa en instalaciones del sector oleícola, fundamentalmente orujo extractado y seco (“orujillo”) en industrias extractoras de aceite de orujo para su utilización en secaderos, y en almazaras para la producción de agua caliente de proceso y calefacción de las bodegas y resto de dependencias. • La participación de las fuentes renovables en la producción interior de energía es del 100% en el caso de la provincia de Jaén. En los casos de España y Andalucía estos porcentajes se situaron en 2011 en un 43,24% y en un 98,09% respectivamente. • Jaén es la primera provincia consumidora de energía térmica procedente de la biomasa, con un 26% del total, debido al uso tradicional de la leña de olivo y del hueso de aceituna para calefacciones domésticas. 129 3.2.- Parque provincial de generación de energía eléctrica La producción total bruta de energía eléctrica en Andalucía en el año 2011 se situó en 39.943,30 GWh [15], de los cuales correspondió a la provincia de Jaén un 5,36% (2.143,3 GWh). Del total generado bruto en Andalucía, el 59,74% correspondió al llamado Régimen Ordinario (carbón, productos petrolíferos, gas natural, nuclear y centrales hidráulicas de más de 10 MW de potencia) y el resto, un 40,25%, a Régimen Especial (renovables y cogeneraciones). En la provincia de Jaén sucede al revés, la mayor parte, un 89,53%, corresponde a Régimen Especial y un 10,46% a Ordinario. A nivel nacional la producción total ascendió a 292.051 GWh, de los cuales un 66,57% correspondió a Régimen Ordinario y un 33,43% a Especial. Todo ello se recoge en el gráfico 3.1. La distribución por tecnologías del Régimen Ordinario se muestra en el gráfico 3.2., donde se puede apreciar, como dato más reseñable, que en la provincia de Jaén la única producción proviene de centrales hidráulicas, no existiendo ni centrales térmicas ni ciclos combinados. En el caso de Andalucía, el mayor porcentaje corresponde a centrales de ciclos combinados a gas natural, seguidas por centrales térmicas de carbón. En cuanto al Régimen Especial, la distribución se muestra en el gráfico 3.3., en el que se puede apreciar que en Andalucía el mayor peso lo ostenta la eólica, seguida de la cogeneración, la solar fotovoltaica y la solar termoeléctrica. En el caso de la provincia de Jaén, detrás de la cogeneración se sitúan la biomasa, la solar fotovoltaica y la mini hidráulica, quedando un porcentaje prácticamente insignificante para la eólica. 130 Gráfico 3.1. DISTRIBUCIÓN DE LA GENERACIÓN BRUTA DE ENERGÍA ELÉCTRICA. REGIMENES ORIDINARIO Y ESPECIAL. JAÉN, ANDALUCÍA Y ESPAÑA. AÑO 2011. Datos en GWh/año 100% 90% 80% 70% 60% 50% 40% 30% 20% 10% 0% Jaén Andalucía España Rég. Esp. 1.918,90 16.078,10 97.647,00 Rég. Ord. 224,40 23.865,20 194.404,00 Gráfico 3.2. DISTRIBUCIÓN DE LA GENERACIÓN BRUTA DE ENERGÍA ELÉCTRICA. RÉGIMEN ORDINARIO. JAÉN Y ANDALUCÍA. AÑO 2011. Datos en GWh/año 100% 90% 80% 70% 60% 50% 40% 30% 20% 10% 0% Jaén Andalucía 224,40 912,20 Ciclos Combinados - 14.032,00 C. Térmicas Carbón - 8.708,20 C. Térmicas Biocombustibles - - Bombeos - 212,80 Hidráulica Fuente: Agencia Andaluza de la Energía y elaboración propia 131 Gráfico 3.3. DISTRIBUCIÓN DE LA GENERACIÓN BRUTA DE ENERGÍA ELÉCTRICA. RÉGIMEN ESPECIAL. JAÉN Y ANDALUCÍA. AÑO 2011. Datos en GWh/año 7.000 6.000 5.000 GWh 4.000 3.000 2.000 1.000 - Minihidráulica Eólica Biomasa Cogeneración Jaén 87,50 26,00 319,00 1.326,00 Termosolar - Solar Fotovoltaica 163,30 Andalucía 293,50 6.256,30 1.460,00 5.739,50 921,80 1.407,00 Fuente: Agencia Andaluza de la Energía En relación a la potencia eléctrica, en el cuadro 3.1. se recoge la instalada en la provincia de Jaén con las distintas tecnologías de generación existentes, es lo que podría denominarse el “parque provincial de generación de energía eléctrica”. A 31 de marzo de 2012, la provincia de Jaén contaba con una potencia total instalada de 534,79 MW, un 3,53% del total de la instalada en Andalucía, la cual ascendía a 15.151 MW. Según se desprende del cuadro 3.1., y tal y como muestra el gráfico 3.4., la mayor potencia instalada corresponde a la cogeneración termoeléctrica y el tratamiento de residuos con un 34,96% del total, le sigue la tecnología hidráulica de más de 10 MW de potencia con un 29,46%, la energía solar 132 fotovoltaica con un 15,08%, la energía minihidráulica (P< 10 MW) con un 10,22%, la biomasa con un 7,29%, la eólica con un 2,84% y, finalmente, el biogás. Cuadro 3.1. DISTRIBUCIÓN POR TECNOLOGÍAS DE LA POTENCIA TOTAL INSTALADA EN LA PROVINCIA DE JAÉN. Año 2012 TECNOLOGÍA P (MW) % Biomasa 39,00 7,29% Minihidráulica 54,66 10,22% Gran hidráulica 157,56 29,46% Solar fotovoltaica 80,65 15,08% Eólica 15,18 2,84% Biogás 0,80 0,15% Cogeneración 186,94 34,96% TOTAL 534,79 100,00% Fuente: Agencia Andaluza de la Energía. y elaboración propia. 133 Gráfico 3.4. DISTRIBUCIÓN DE LA POTENCIA ELÉCTRICA INSTALADA EN LA PROVINCIA DE JAÉN POR TECNOLOGÍAS Biomasa 7,29% Minihidráulica 10,22% Cogeneración 34,96% Gran hidráulica 29,46% Biogás 0,15% Eólica 2,84% Solar fotovoltaica 15,08% En materia exclusiva de energías renovables, la provincia de Jaén cuenta con una potencia total instalada de 190,29 MW, un 35,58% del total, distribuidos tal y como se muestra en el cuadro 3.2. Destaca la tecnología fotovoltaica con un 42,83% del total, bien se trate de conexiones a red (79,60 MW) como aisladas (1,05 MW). A continuación se sitúa la energía minihidráulica con un 28,72% del total, seguida de la biomasa con un 20,50%, la eólica con un 7,98% y el biogás, con un insignificante 0,42%. Cabe destacar la enorme diferencia existente a favor de las instalaciones basadas en la tecnología solar fotovoltaica de conexión a red en relación a las aisladas. 134 Cuadro nº 3.2. POTENCIA INSTALADA CON ENERGÍAS RENOVABLES EN LA PROVINCIA DE JAÉN. AÑO 2012 POTENCIA DISTRIBUCIÓN (MW) (%) Biomasa 39,00 20,50% Minihidráulica 54,66 28,72% Solar fotovoltaica 80,65 42,38% Eólica 15,18 7,98% Biogás 0,80 0,42% TOTAL 190,29 100,00% TECNOLOGÍA Fuente: Agencia Andaluza de la Energía y elaboración propia. Gráfico 3.5. DISTRIBUCIÓN DE LA POTENCIA INSTALADA CON ENERGÍAS RENOVABLES EN LA PROVINCIA DE JAÉN. AÑO 2012 Eólica Biogás 7,98% 0,42% Biomasa 20,50% Solar fotovoltaica 42,38% Minihidráulica 28,72% Fuente: Agencia Andaluza de la Energía 135 En materia de instalaciones de cogeneración termoeléctrica, la provincia de Jaén dispone de 15 con una potencia total de 186,94 MW, la mayoría de las cuales emplean gas natural como combustible (12 en total), mientras que el resto usan gasóleo (2) o fuel oil (1). La cogeneración, como ya se ha comentado, es un proceso eficiente desde un punto de vista energético, pues consiste en la producción simultánea de energía mecánica, que será transformada en electricidad, y calor de proceso para su posterior aprovechamiento. En el cuadro 3.3., se recogen las instalaciones de cogeneración existentes en la provincia de Jaén a 31 de marzo de 2012 según la Agencia Andaluza de la Energía. Cuadro nº 3.3. INSTALACIONES DE COGENERACIÓN EN LAPROVINICA DE JAÉN. MARZO DE 2012 DENOMINACIÓN Cogeneración de Andújar C.E. Puente del Obispo Andaluza de cogeneración Cerámica Alcalá Villalta Cerámica La Unión Galey cogeneración Compañía energética de Jabalquinto Compañía energética Linares Becosa 2 Smurfitt Kappa Bioener Procesos ecológicos Vilches Aceites Coosur Cermámica Malpesa Energética Las Villas TOTAL LOCALIDAD Andújar Baeza Bailén Bailén Bailén Bailén Jabalquinto Linares Mengíbar Mengíbar Puente de Génave Vilches Vilches Villanueva de la Reina Villanueva del Arzobispo POTENCIA (MW 19,63 24,99 1,844 0,95 0,48 1,25 13,7 24,99 3,24 24,7 9,194 15 21 0,99 24,98 186,94 Fuente: Agencia Andaluza de la Energía En cuanto a la generación de energía a partir de fuentes renovables en la provincia de Jaén, cabe decir lo siguiente: 136 • La producción bruta con energías renovables frente a la producción bruta total supuso un 38,3% en 2011, y un 29% en relación al consumo final total de energía en ese mismo año. • La potencia eléctrica renovable, incluida toda la hidráulica, en relación a la potencia total supuso un 65% en 2011. • Jaén ocupa el segundo puesto de Andalucía en instalaciones de generación de energía eléctrica con biomasa, por detrás de Córdoba. Tiene 4 plantas de biomasa que totalizan una potencia de 39 MW, que es el 18,5% del total de Andalucía. De ellas, 3 utilizan biomasa procedente del olivar (orujillo y/o restos de podas), y, la otra, restos de industrias de la madera. El cuadro 3.4. recoge las instalaciones de biomasa para generación de energía eléctrica en la provincia de Jaén Cuadro nº 3.4. PLANTAS DE BIOMASA DE LA PROVINCIA DE JAÉN PLANTA Tradema Bioenergética de Linares La Loma Aldebarán energía del Guadalquivir TOTAL MUNICIPIO Linares Linares Villanueva del Arzobispo Andújar POTENCIA (MW) 2 15 16 6 39 Fuente: Agencia Andaluza de la Energía • La provincia de Jaén cuenta con una planta de aprovechamiento de biogás de vertedero con una potencia de 0,80 MW. Está situada en el municipio de Fuerte del Rey y ubicada en una planta de tratamiento de residuos urbanos. • En la provincia de Jaén existe un único parque eólico de 15,18 MW de potencia, localizado en la denominada Sierra del Trigo, en los términos municipales de Campillo de Arenas, Valdepeñas de Jaén y Noalejo. En 137 materia de instalaciones mini eólicas hay una potencia instalada de 4,68 kW. • En materia de energía solar fotovoltaica, la provincia de Jaén cuenta con una potencia instalada de 80,65 MW, de los cuales su mayor parte (un 98,70%) corresponde a instalaciones conectadas a la red. El resto, 1,05 MW, se trata de sistemas autónomos aislados de la red. Por último, se muestran una serie de fotografías, realizadas por el Autor, de instalaciones de energías renovables de la provincia de Jaén. Fotografía nº 15. PLANTA DE PRODUCCIÓN DE PÉLETS (Aldeaquemada) 138 Fotografía nº 16. PLANTA DE GENERACIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA A PARTIR DE BIOGÁS DE VERTEDERO (Fuerte del Rey) Fotografía nº 17. PLANTA DE GENERACIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA ALIMENTADA CON BIOMASA DEL OLIVAR (Villanueva del Arzobispo) 139 Fotografía nº 18. PLANTA DE PRODUCCIÓN DE BIODIESEL. (Estación de Linares-Baeza) Fotografía nº 19. PLANTA DE GENERACIÓN ELÉCTRICA ALIMENTADA CON BIOMASA DEL OLIVAR (Estación de Linares-Baeza) 140 Fotografía nº 20. SISTEMA DE CLIMATIZACIÓN CENTRALIZADA CON HUESO DE ACEITUNA DE GEOLIT (Mengíbar) Fotografía nº 21. INSTALACIÓN DE ENERGÍA SOLAR FOTOVOLTAICA CONECTADA A RED (Torres) 141 Fotografía nº 22. INSTALACIÓN DE ENERGÍA SOLAR TÉRMICA EN POLIDEPORTIVO MUNICIPAL (Linares) Fotografía nº 23. PARQUE EÓLICO DE LA SIERRA DEL TRIGO (Campillo de Arenas, Noalejo y Valdepeñas de Jaén) 142 Fotografía nº 24. CENTRAL MINIHIDRÁULICA DE CASAS NUEVAS (Marmolejo) Fotografía nº 25. CALDERA DE BIOMASA PARA USOS TÉRMICOS EN RESIDENCIA DE ANCIANOS (Alcaudete) 143 3.3.- Balance de energía eléctrica de la provincia de Jaén Este apartado tiene por objeto establecer un balance solo y exclusivamente de energía eléctrica en la provincia de Jaén a partir de los datos de las distintas compañías distribuidoras y recogidos en la publicación del Ministerio de Industria, Energía y Turismo “Estadística de la industria de la energía eléctrica en 2010”. Del total de energía eléctrica facturada por las compañías eléctricas en el año 2010 (último año del que se dispone de información oficial para este parámetro) en la provincia de Jaén (2.887.926 MWh), la mayor parte, un 84,22%, correspondió a los siguientes subsectores [16]: • Usos domésticos con un consumo de 1.217.712 MWh, un 42,16%. • Comercio y los servicios, con un consumo de 378.756 MWh, un 13,11%. • Administración y los servicios públicos con un total de 356.538 MWh consumidos, un 12,35%. • Alimentación, las bebidas y el tabaco con un consumo de 202.313 MWh anuales, un 7%. • Agricultura, ganadería, selvicultura, caza y pesca con un consumo de 141.161 MWh, un 4,89%. • Hostelería con 137.233 MWh de consumo eléctrico, un 4,75%. En base a esta información, a continuación, se muestra un balance de generación de energía eléctrica de la provincia de Jaén. En ella se muestra la producción bruta de energía eléctrica, las pérdidas, la producción neta, el volumen total de facturación de energía eléctrica en la provincia para, finalmente, obtener la energía eléctrica importada. 144 Figura 3.1. BALANCE DE GENERACIÓN DE ENERGIA ELÉCTRICA EN LA PROVINCIA DE JAÉN Producción bruta: 1.769.533 MWh Pérdidas: 49.443 MWh Producción neta: 1.720.090 MWh Facturación: 2.887.926 MWh Importación: 1.167.836 MWh Fuente: Elaboración propia 145 3.4.- Consumo energético final y primario Los consumos energéticos se suelen dividir en usos finales y primarios, además de por fuentes (carbón, productos petrolíferos, gas natural, electricidad, nuclear y renovables) y por sectores (industria, transporte, residencial, primario y servicios). A su vez, los sectoriales también se suelen expresar por fuentes. A continuación se realiza un análisis detallado de cada uno de ellos. 3.4.1.- Consumos finales Los consumos finales son los que se demandan para satisfacer las necesidades de los consumidores de los distintos sectores, públicos y privados, individuales y colectivos, y tanto para usos térmicos, calefacción y refrigeración, como eléctricos y de carburantes para el transporte. Se suelen estructurar además de por fuentes, como el resto de consumos, por sectores, tal y como se muestra en los cuadros y gráficos siguientes. Del total de energía para usos finales consumida en Andalucía en el año 2011 (13.349,30 ktep), la provincia de Jaén consumió el 8,71 % (1.162,50 ktep), tal y como se aprecia en el gráfico 3.6. En primer lugar si sitúa la provincia de Sevilla, seguida por las de Cádiz, Málaga, Huelva y Granada. Los últimos lugares, tras la de Jaén, los ocupan Córdoba y Almería. Tal y como se muestra en el gráfico 3.7., la evolución del consumo de energía final en Jaén ha experimentado un descenso significativo, más acusado en Andalucía, a partir de 2007 como consecuencia del comienzo de la crisis financiera internacional. Solamente han crecido el gas natural y las renovables, como posteriormente se verá al analizar la evolución de algunos parámetros energéticos 146 Gráfico 3.6. CONSUMO DE ENERGÍA FINAL EN ANDALUCÍA. DISTRIBUCIÓN POR PROVINCIAS AÑO 2011 Almería 7,33% Sevilla 19,54% Cádiz 18,16% Málaga 15,50% Córdoba 8,69% Granada 9,84% Jaén 8,71% Huelva 12,23% Gráfico 3.7. EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA FINAL EN JAÉN DESDE EL AÑO 2005. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES 800 700 600 ktep 500 400 300 200 100 0 2005 2006 2007 2008 2009 2010 Años Carbón P. Petrolíferos Gas Natural Renovables Fuente: Agencia Andaluza de la Energía 147 Energía eléctrica 2011 Comparando la situación provincial con Andalucía y con España, la distribución del consumo de energía final por fuentes se recoge en el cuadro 3.5., donde se observa que en España el mayor peso en la demanda energética para usos finales lo ostentan los productos petrolíferos con un 54,06%, seguidos, a mucha distancia, por la electricidad (23,32%) y el gas natural (14,29%). Las renovables, ocupan la penúltima posición, con un 6,62% del total y, finalmente, el carbón se mantiene en unos niveles muy bajos, prácticamente insignificantes. En Andalucía sucede exactamente lo mismo, siendo los productos petrolíferos y la electricidad los más demandados, con un 56,13% y 21,65% respectivamente. El gas natural se sitúa a continuación, con un 15,11% y menos presencia que a nivel nacional; después las energías renovables, con un peso algo superior al de España, un 7,03%. El carbón tiene una presencia testimonial, no alcanzando el 1%. La situación en Jaén es similar en lo que a productos petrolíferos se refiere, suponiendo la mitad del consumo total (49,91%). La electricidad es la segunda fuente de consumos finales con un 20,92%, seguida, a diferencia de España y de Andalucía, por las fuentes de origen renovable (15,99%), y el gas (13,18%), muy por debajo de los porcentajes a nivel autonómico y nacional. Es de destacar el peso tan elevado que suponen las fuentes renovables, con valores muy superiores a los de España y Andalucía, lo que es debido fundamentalmente a las aplicaciones térmicas de la biomasa en usos industriales para el sector oleícola, almazaras y extractoras de aceite de orujo básicamente. Lo anteriormente expuesto se muestra en el gráfico 3.8. En el gráfico 3.9. aparece la distribución del consumo de energía final en el año 2011 por fuentes para la provincia de Jaén, donde se pone de manifiesto el elevado consumo de energías renovables en comparación con España y Andalucía. 148 Cuadro 3.5. CONSUMOS DE ENERGÍA FINAL EN ESPAÑA, ANDALUCÍA Y JAÉN. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES. AÑO 2011 España Andalucía Jaén FUENTES ktep % Ktep % ktep % Carbón 1.613,70 1,73% 11,10 0,08% - 0,00% Productos Petrolíferos 50.379,40 54,03% 7.492,90 56,13% 580,20 49,91% Gas Natural 3.327,10 14,29% 2.016,70 15,11% 153,20 13,18% Electricidad 21.744,20 23,32% 2.889,70 21,65% 243,20 20,92% Renovables 6.173,60 6,62% 938,90 7,03% 185,90 15,99% TOTAL 93.238,00 100% 13.349,30 100,00% 1.162,50 100,00% Fuente: Agencia Andaluza de la Energía En el cuadro 3.6. y en el gráfico 3.10., se muestra la distribución del consumo sectorial en España, Andalucía y Jaén, siguiendo unas pautas muy similares en los tres casos, si bien es destacable el elevado peso del sector residencial, por encima del sector primario y el de servicios; así como el elevado consumo del sector transporte, muy por encima de la industria. Esto es debido fundamentalmente al mayor nivel de equipamiento de los hogares y a las cada vez más extremas temperaturas, con inviernos más fríos y veranos más cálidos. Además también se ha desplazado la curva de consumo hacia el verano, periodo del año en el que más cantidad de energía se consume. Finalmente, en el gráfico 3.11 se recoge una evolución del consumo final de energía, distribuido por fuentes, en la provincia de Jaén desde el año 2005. 149 Gráfico 3.8. CONSUMOS DE ENERGÍA FINAL. ESPAÑA, ANDALUCÍA Y JAÉN. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES. AÑO 2011 100% 90% 80% 70% 60% 50% 40% 30% 20% 10% 0% España Andalucía CARBÓN P.PETROLÍFEROS GAS Jaén ELECTRICIDAD RENOVABLES Cuadro 3.6. DISTRIBUCIÓN SECTORIAL DE ENERGÍA FINAL. ANDALUCÍA Y JAÉN. AÑO 2011 ANDALUCÍA JAÉN SECTORES Ktep % ktep % INDUSTRIA 4.343,30 32,54% 320,70 27,59% TRANSPORTE 4.801,60 35,97% 408,00 35,10% PRIMARIO 1.105,00 8,28% 149,80 12,89% SERVICIOS 205,10 9,03% 105,40 9,07% RESIDENCIAL 1.894,30 14,19% 178,60 15,36% TOTAL 13.349,30 100,00% 1.162,50 100,00% Fuente: Agencia Andaluza de la Energía 150 Gráfico 3.9. CONSUMO DE ENERGÍA FINAL EN LA PROVINCIA DE JAÉN. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES. AÑO 2011 RENOVABLES 15,99% CARBÓN 0,00% P.PETROLÍFEROS 49,91% ELECTRICIDAD 20,92% GAS 13,18% Gráfico 3.10. DISTRIBUCIÓN PROVINCIAL DEL CONSUMO SECTORIAL DE ENERGÍA FINAL. AÑO 2011 RESIDENCIAL 15,36% INDUSTRIA 27,59% SERVICIOS 9,07% PRIMARIO 12,89% TRANSPORTE 35,10% Fuente: Agencia Andaluza de la Energía y Elaboración propia 151 Gráfico 3.11. EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA FINAL EN LA PROVINCIA DE JAÉN. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES 1.600 1.400 1.200 1.000 800 600 400 200 0 2005 2006 Carbón 2007 P. Petrolíferos 2008 Gas Natural 2009 Renovables 2010 2011 Energía eléctrica Fuente: Agencia Andaluza de la Energía 3.4.2.- Demanda de energía primaria En términos de energía primaria la demanda se obtiene como resultado de sumar al consumo de energía final no eléctrico, el correspondiente a los sectores energéticos22 incluidas las pérdidas. La diferencia entre las estructuras energéticas primarias de España y Andalucía radica en la carencia de centrales nucleares en esta última. En el cuadro 3.7., se muestra la distribución por fuentes de los consumos de energía primaria en Andalucía y Jaén. En el caso de la provincia de Jaén el mayor peso corresponde a los productos petrolíferos, con un 45,03%, seguidos por las energías renovables, con un 24,95%, y el gas natural, con un 24,12%. La situación en Andalucía es similar, si bien el peso inferior de las energías 22 Consumos propios, en transformación y pérdidas en la generación eléctrica. 152 renovables es ocupado por el carbón. Todo ello se puede apreciar en el gráfico 3.12. Cuadro 3.7. CONSUMOS DE ENERGÍA PRIMARIA EN ESPAÑA, ANDALUCÍA Y JAÉN. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES. AÑO 2011 ESPAÑA ANDALUCÍA JAÉN FUENTES ktep % Ktep % ktep % CARBÓN 12.455,60 9,64% 2.038,90 10,70% - 0,00% P. PETROLÍFEROS 58.316,50 45,15% 8.756,00 45,96% 591,70 45,03% GAS NATURAL 28.930,40 22,40% 5.602,50 29,40% 317,00 24,12% NUCLEAR 15.023,60 11,63% - 0,00% - 0,00% RENOVABLES 14.962,00 11,58% 2.737,80 14,37% 327,90 24,95% SALDO ELÉCTRICO -523,80 -0,41% - 81,90 -0,43% 77,50 5,90% TOTAL 129.164,30 100% 19.053,30 100,00% 1.314,10 100,00% Fuente: Agencia Andaluza de la Energía La evolución de este parámetro desde el año 2005 se puede observar en el gráfico 3.13. La situación es totalmente similar a la acontecida con la energía para usos finales, donde se aprecia el descenso de consumo a partir del año 2007, año de comienzo de la crisis. Decrecen todas las fuentes excepto el gas natural, que es el único vector energético que experimenta un crecimiento. 153 Gráfico 3.12. DEMANDA DE ENERGÍA PRIMARIA. ANDALUCÍA Y JAÉN. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES. AÑO 2011 100% 80% 60% 40% 20% 0% España Andalucía Jaén -20% CARBÓN P.PETROLÍFEROS GAS NUCLEAR RENOVABLES SALDO ELÉCTRICO Gráfico 3.13. EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA PRIMARIA EN ANDALUCÍA Y JAÉN DESDE EL AÑO 2005 900 800 700 ktep 600 500 400 300 200 100 0 2005 2006 2007 2008 2009 2010 Años Carbon Gas natural 154 Petróleo Renovables Saldo eléctrico 2011 3.5.- Producción interior y autoabastecimiento energético Otro parámetro importante acerca de la situación energética de un territorio es la producción interior de energía, lo que permite conocer el grado de autoabastecimiento energético, que es el cociente entre la producción interior de energía y el consumo total de energía primaria. La evolución experimentada en Andalucía y Jaén se muestra en el gráfico 3.14, donde se aprecia el crecimiento experimentado en la región a partir del año 2006, debido al fuerte impulso del sector de las energías renovables como consecuencia de los programas de apoyo y fomento desde las distintas administraciones, tanto autonómica como nacional. Gráfico 3.14. EVOLUCIÓN DE LA PRODUCCIÓN INTERIOR DE ENERGÍA EN ANDALUCÍA Y JAÉN DESDE 2000 3.000 2.500 ktep 2.000 1.500 1.000 500 0 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 Años Andalucía Jaén Fuente: Agencia Andaluza de la Energía En los gráficos del 3.15. al 3.20., ambos inclusive, se puede apreciar esta evolución desde el año 2000, tanto para el total de energías renovables en 155 Andalucía y Jaén, como para cada una de las tecnologías: solar fotovoltaica, solar térmica, eólica, hidráulica y biomasa. Cabe destacar el fuerte crecimiento de la energía eólica y de la tecnología solar fotovoltaica. El resto han tenido un crecimiento más sostenido, incluso con algunas fluctuaciones. Gráfico 3.15. EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍAS RENOVABLES PARA PRODUCCIÓN INTERIOR EN ANDALUCÍA Y JAÉN DESDE 2000 2.500 2.000 ktep 1.500 1.000 500 0 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 Años Andalucía Jaén Fuente: Agencia Andaluza de la Energía 156 2008 2009 2010 Gráfico 3.16. EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA SOLAR FOTOVOLTAICA PARA PRODUCCIÓN INTERIOR EN ANDALUCÍA Y JAÉN DESDE 2000 140 120 100 ktep 80 60 40 20 0 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 Años Andalucía Jaén Gráfico 3.17. EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA SOLAR TERMICA PARA PRODUCCIÓN INTERIOR EN ANDALUCÍA Y JAÉN DESDE 2000 60 50 ktep 40 30 20 10 0 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 Años Andalucía 157 Jaén 2007 2008 2009 2010 Gráfico 3.18. EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA EÓLICA PARA PRODUCCIÓN INTERIOR EN ANDALUCÍA Y JAÉN DESDE 2000 600 500 ktep 400 300 200 100 0 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 Años Andalucía Jaén Gráfico 3.19. EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA HIDRÁULICA PARA PRODUCCIÓN INTERIOR EN ANDALUCÍA Y JAÉN DESDE 2000 140 120 100 ktep 80 60 40 20 0 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 Años Andalucía 158 Jaén 2007 2008 2009 2010 Gráfico 3.20. EVOLUCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA DE LA BIOMASA PARA PRODUCCIÓN INTERIOR EN ANDALUCÍA Y JAÉN DESDE 2000 1.400 1.200 1.000 ktep 800 600 400 200 0 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 Años Andalucía Jaén En el cuadro 3.8. se muestra la producción interior de energía para España, Andalucía y Jaén. Cabe destacar el caso de la provincia de Jaén en la que la única producción interior de energía procede de fuentes de origen renovable tal y como ya se ha apuntado. En el gráfico 3.21., se muestra la distribución por fuentes de la producción interior de energía, donde se puede apreciar el rasgo diferenciador que se citaba al principio relativo al abrumador peso de las fuentes renovables en la estructura energética de la provincia de Jaén. En el cuadro 3.9., se muestra el “grado de autoabastecimiento energético” para España, Andalucía y Jaén. Tal y como se puede apreciar en el mismo es bastante bajo, especialmente en el caso de Andalucía, poniéndose de manifiesto la 159 elevada dependencia energética del exterior, aspecto éste de una importancia estratégica crucial. Cuadro 3.8. PRODUCCIÓN INTERIOR DE ENERGÍA EN ESPAÑA, ANDALUCÍA Y JAÉN. AÑO 2011 ESPAÑA ANDALUCÍA JAÉN FUENTES ktep % ktep % ktep % CARBÓN 2.287,00 7,44% - 0,00% - 0,00 P. PETROLÍFEROS 100,90 0,33% - 0,00% - 0,00 GAS 45,50 0,15% 50,60 1,91% - 0,00 NUCLEAR 15.023,60 48,85% - 0,00% - 0,00 RENOVABLES 13.297,10 43,24% 2.602,10 98,09% 299,10 100,00 TOTAL 30.754,10 100% 2.652,70 100,00% 299,10 100,00 Fuente: Agencia Andaluza de la Energía y Ministerio de Industria, Energía y Turismo (“La energía en España 2011”) Cuadro 3.9. GRADO DE AUTOABASTECIMIENTO ENERGÉTICO DE ESPAÑA, ANDALUCÍA Y JAÉN. AÑO 2011 Grado de autoabastecimiento energético (%) España Andalucía Jaén 23,80 13,90 22,80 Fuente: Elaboración propia Por último, en el gráfico 3.22 se muestra la evolución del consumo final de energías renovables por provincias, donde destaca por encima de todas la provincia de Jaén con un 24,80% del total, seguida a mucha distancia por Córdoba. 160 Gráfico 3.21. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES DE LA PRODUCCIÓN INTERIOR DE ENERGÍA EN ESPAÑA, ANDALUCÍA Y JAÉN. AÑO 2011 100% 90% 80% 70% 60% 50% 40% 30% 20% 10% 0% ESPAÑA ANDALUCÍA CARBÓN P.PETROLÍFEROS GAS JAÉN NUCLEAR RENOVABLES Fuente: Agencia Andaluza de la Energía y Elaboración propia Gráfico 3.22. CONSUMO DE ENERGÍAS RENOVABLES PROVINCIAS. AÑO 2011 Almería 8,36% Sevilla 14,92% Cádiz 7,72% Málaga 10,86% Córdoba 12,43% Granada 16,66% Jaén 24,80% Huelva 4,25% Fuente: Agencia Andaluza de la Energía 161 POR 3.6.- Intensidad energética La intensidad energética es el indicador utilizado para evaluar la eficiencia energética de un territorio, y hace referencia al consumo energético necesario para generar una unidad de riqueza, por lo que se expresa en unidades de energía por unidades monetarias, concretamente se refiere a euros constantes del año 2000. Una tendencia decreciente de este parámetro está indicando que para producir la misma unidad de riqueza se está consumiendo menos energía, siendo, por tanto, más eficientes. En el gráfico 3.23. se puede apreciar la evolución de este parámetro en términos de usos finales para España, Andalucía y Jaén23. Se puede apreciar que la tendencia es a la baja, lo que es una buena señal en términos de eficiencia energética en el consumo de final de energía. Gráfico 3.23. EVOLUCIÓN INTENSIDAD ENERGÉTICA FINAL. ESPAÑA, ANDALUCÍA Y JAÉN. 190 180 170 tep/M€00 160 150 140 130 120 110 100 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 Años ESPAÑA ANDALUCIA JAÉN El dato correspondiente a la provincia de Jaén alcanza hasta 2008 debido a que esa es la fecha tope de la base del año 2000. 23 162 3.7.- Generación térmica con renovables Las tres principales tecnologías de generación de energía para usos térmicos tales como producción de agua caliente sanitaria o de proceso y/o climatización, son la solar térmica, la biomasa y la geotermia. A continuación se realiza un repaso de la incidencia de cada una de ellas en la provincia de Jaén. En materia de energía solar térmica Andalucía es la comunidad autónoma que dispone de la mayor superficie instalada de captadores solares térmicos a nivel nacional. A finales de 2010 la superficie total instalada en Andalucía representaba el 28% del total nacional. Actualmente se eleva a 733.071 m2, de los que el 2,3% corresponde a la provincia de Jaén, tal y como se muestra en el cuadro 3.10. Cuadro 3.10. SUPERFICIE TOTAL INSTALADA EN LA PROVINCIA DE JAÉN. EVOLUCIÓN ANUAL (m2) Fuente: Agencia Andaluza de la Energía En cuanto a la generación de energía térmica con biomasa, Andalucía cuenta con una tradición industrial muy significativa vinculada a la industria oleícola. Las principales aplicaciones de la biomasa para usos térmicos está en la climatización de edificios e instalaciones, si bien, como ya se ha apuntado, se ha usado tradicionalmente en almazaras y extractoras de aceite de orujo para producción de agua caliente, calefacción y también para el secado del orujo graso. En la actualidad se está produciendo un despegue en los sectores doméstico y de servicios, debido fundamentalmente al encarecimiento de los combustibles 163 de origen fósil y la electricidad y a la existencia de incentivos de la Agencia Andaluza de la Energía. Ello ha permitido alcanzar una cifra de consumo para usos térmicos de 607,16 ktep, si bien es una cifra inferior a la alcanzada en 2010 porque se trata de un sector que fluctúa en función de las variables antes citadas. El cuadro 3.11. muestra la evolución de la generación térmica con biomasa en Andalucía y en Jaén. Cuadro 3.11. GENERACIÓN DE ENERGÍA TÉRMICA CON BIOMASA Fuente: Agencia Andaluza de la Energía Por último, las instalaciones de geotermia aprovechan el nivel térmico del terreno, prácticamente constante a partir de una determinada profundidad, para la climatización de edificios y/o la producción de agua caliente sanitaria. En la provincia de Jaén la potencia instalada con este sistema se sitúa en 233,3 kW, prácticamente correspondientes a un único proyecto de una residencia de mayores en la capital. En Andalucía el valor alcanza los 8.508 kW según la Agencia Andaluza de la Energía. 164 3.8.- Otras infraestructuras energéticas La provincia de Jaén cuenta con otras infraestructuras energéticas, son las siguientes: • Dos plantas de producción de biodiesel, en Andújar y en la Estación de Linares-Baeza, que en la actualidad no están funcionando, con una capacidad de producción de 270 ktep/año, que representa el 27% de la capacidad total de Andalucía. • Una planta de producción centralizada de calor y frío alimentada con hueso de aceituna en el Parque Científico y Tecnológico, GEOLIT en la localidad de Mengíbar, Jaén. La potencia instalada en generación de energía térmica es 6 MWt, y otros tantos para producción de frío mediante la tecnología de absorción. • Cuatro plantas de producción de pélets que emplean como materia prima biomasa procedente de los sectores agrícola y forestal. Están ubicadas en los municipios de Jabalquinto, Cazorla, Mancha Real y Aldeaquemada, con una capacidad total de producción de 29.200 ktep/año, lo cual representa el 67% de la capacidad total instalada en Andalucía. Cuadro 3.12. PLANTAS DE PRODUCCIÓN DE PÉLETS EN LAPROVINCIA DE JAÉN Fuente: Agencia Andaluza de la Energía 165 3.9.- Princiapales magnitudes energéticas A continuación se resumen los principales parámetros energéticos de España, Andalucía y Jaén en el año 2011. Algunos datos están actualizados a marzo de 2012. Cuadro 3.13. PRINCIPALES MAGNITUDES ENERGÉTICAS DE ESPAÑA, ANDALUCÍA Y JAÉN. AÑO 201124,25 PARÁMETRO UD. JAÉN ANDALUCÍA ESPAÑA Producción bruta de energía eléctrica GWh 2.143,3 39.943,3 292.051,0 GWh 224,4 23.865,2 194.404,0 GWh 1.918,9 16.078,1 97.647,00 GWh 26 6.256,3 42.637,0 GWh 87,5 293,5 5.332,0 GWh 163,3 1.407 7.343,0 GWh 0,0 921,8 1.777,0 GWh 319,0 1.460,0 4.445,0 GWh 1.323,0 5.739,5 35.185 GWh 224,4 912,2 27.575 Producción bruta de energía eléctrica en Régimen Ordinario Producción bruta de energía eléctrica en Régimen Especial Generación bruta de energía eléctrica de origen eólico Generación bruta de energía eléctrica de origen hidroeléctrico Generación bruta de energía eléctrica de origen solar fotovoltaico Generación bruta de energía eléctrica de origen solar termoeléctrico Generación bruta de energía eléctrica con biomasa y residuos Generación bruta de energía eléctrica con cogeneración Producción bruta hidráulica Régimen Ordinario Los datos correspondientes a las potencias instaladas con energías renovables corresponden a 2012 25 Los datos de consumos finales sectoriales en España corresponden a 2010 24 166 Demanda bruta de energía eléctrica GWh 3.044,0 39.990,6 252.848,0 Potencia total eléctrica instalada MW 534,6 15.151,0 104.479 Potencia de origen renovable MW 347,7 5.386,7 46.486,0 Potencia instalada con tecnología eólica MW 15,18 3.170,7 21.520 Potencia instalada con tecnología minihidráulica MW 49,5 151,7 1.932 MW 86,6 831,0 4.281 Potencia instalada con biomasa y residuos MW 39,826 283,3 995 Potencia instalada con cogeneración MW 186,94 5.739,5 7.008 MW 0 947,5 1.149 Potencia eléctrica renovable frente a total % 65,0 35,6 40,8 Energía eléctrica generada frente a total % 38,3 28,2 32,4 Consumo de energía final ktep 1.162,5 13.349,3 93.238,0 Participación del carbón en el consumo final % 0,0 0,08 1,73 % 49,91 56,13 54,03 % 15,99 7,03 6,62 % 20,92 21,65 23,32 Participación del gas en el consumo final % 13,18 15,11 14,29 Consumo sector transporte ktep 408,0 4.801,6 36.868 Consumo sector industria ktep 320,7 4.343,3 30.986 Consumo resto sectores27 ktep 433,8 4.204,5 25.178 Consumo total de energía primaria ktep 1.314,0 19.053,3 129.339,3 Potencia instalada con tecnología solar fotovoltaica Potencia instalada con tecnología solar termoeléctrica Participación de los productos petrolíferos en el consumo final Participación de las energías renovables en el consumo final Participación de la energía eléctrica en el consumo final 26 27 Están incluidos el biogás y los residuos Primario, residencial y servicios 167 Participación del carbón en el consumo de energía primaria Participación de los productos petrolíferos en el consumo de energía primaria Participación del gas en el consumo de energía primaria Participación de la energía nuclear en el consumo de energía primaria Participación de las renovables en el consumo de energía primaria Producción interior de energía Participación del carbón en la producción interior de energía Participación de los productos petrolíferos en la producción interior de energía Participación del gas en la producción interior de energía Participación de la energía nuclear en la producción interior de energía Participación de las renovables en la producción interior de energía Grado de autoabastecimiento energético % 0 10,60 9,64 % 45,03 45,96 45,15 % 24,12 29,40 22,40 % 0 0 11,63 % 24,95 14,37 11,58 ktep 299,10 2.652,7 30.925,9 % 0,0 0,0 7,44 % 0,0 0,0 0,33 % 0,0 1,91 0,15 % 0,0 0,0 48,85 % 100,0 98,09 42,99 % 22,80 13,90 23,80 138,328 124,8 120,4 (tep/ Intensidad energética final M€. 2000) Fuente: Agencia Andaluza de la Energía, Ministerio de Industria, Energía y Turismo (“La energía en España, 2011”) y Elaboración propia 28 Dato correspondiente a 2008 168 A nivel per cápita, el cuadro 3.14. recoge un conjunto de magnitudes energéticas referidas también a España, Andalucía y Jaén. Cuadro 3.14. PRINCIPALES MAGNITUDES ENERGÉTICAS DE ESPAÑA, ANDALUCÍA Y JAÉN. AÑO 2011. DATOS POR HABITANTE JAÉN ANDALUCÍA ESPAÑA Consumo energía primaria (tep/hab) 2,1 2,3 2,8 Consumo energía final (tep/hab) 1,9 1,6 2,1 Consumo eléctrico final (tep/hab) 0,4 0,4 0,5 Consumo primario gas natural (tep/hab) 0,4 0,7 0,7 Consumo primario energía renovable 0,5 0,3 0,3 Consumo transporte (tep/hab) 0,7 0,6 0,8 Consumo industria (tep/hab) 0,6 0,5 0,7 Consumo otros sectores (tep/hab) 0,6 0,5 0,6 Potencia eléctrica instalada (kW/hab) 0,8 1,8 2,2 Potencia eléctrica no renovable (kW/hab) 0,3 1,2 1,3 Potencia eléctrica renovable (kW/hab) 0,5 0,6 0,9 Energía eléctrica generada bruta 2,9 4,7 6,4 1,1 1,2 2,1 (tep/hab) (MWh/hab) Energía eléctrica renovable bruta (MWh/hab) Fuente: Agencia Andaluza de la Energía, Ministerio de Industria, Energía y Turismo y Elaboración propia 169 3.10.- Conclusiones y propuestas de actuación futuras Las principales conclusiones que se pueden extraer de la situación energética de la provincia de Jaén se resumen a continuación: • Estructura energética basada en fuentes renovables y en instalaciones de cogeneración termoeléctrica, lo que resulta significativo desde el punto de vista ambiental y de eficiencia energética. • Carencia absoluta de infraestructuras de generación eléctrica tales como centrales térmicas de carbón o ciclos combinados a gas. • Elevado peso de la energía hidráulica en el parque de generación de energía eléctrica, con un 39,68% del total. • Referente en lo que a consumo de biomasa para usos finales térmicos se refiere, siendo la primera provincia de Andalucía. Aspecto éste asociado al cultivo milenario del olivar y a los subproductos generados en las industrias de transformación. • Importante contribución de los productos petrolíferos y el gas al consumo final y primario de energía, similar a lo que sucede con las estructuras energéticas de Andalucía y España. • Equitativo reparto del consumo sectorial de energía final, con un peso superior del sector transporte sobre la industria y los servicios. • Intensidad energética final cuya evolución es decreciente y, por tanto, positiva. No obstante, es necesario implementar actuaciones que mantengan una tendencia decreciente de la intensidad energética final, para lo cual es imprescindible acometer proyectos basados en el ahorro de energía y en el fomento de la eficiencia energética, tanto a nivel de alumbrado, como de climatización de edificios. • Elevada dependencia energética a pesar de disponer de recursos energéticos de origen renovable en abundancia, como solar o biomasa. 170 En relación a futuras propuestas de actuación en materia de ahorro, eficiencia energética y de energías renovables, cabe mencionar las siguientes: • Fomentar el ahorro y la eficiencia energética en todos los sectores productivos, y a todos los niveles, como herramienta de mejora de la competitividad de las empresas y la preservación del medio ambiente de la provincia de Jaén. • Introducir en los diferentes ámbitos educativos aspectos relacionados con la importancia de un uso racional de la energía en la sociedad. • Potenciar la formación del tejido productivo provincial en materia de gestión energética sostenible. • Consensuar con los responsables del transporte y la distribución de energía eléctrica así como con los del gas natural, una planificación energética que permita el desarrollo económico y social de la provincia de Jaén. Tanto desde el punto de vista de evacuación de energía procedente de instalaciones renovables como para la implantación de nuevas actividades industriales y de servicios. • Aprovechar el potencial de la energía minihidráulica de la provincia de Jaén, además de desde una vertiente energética, desde un punto de vista de recuperación del patrimonio industrial y cultural de la provincia. • Instar a todos los agentes implicados en la correcta aplicación de las normativas existentes en materia de construcción sostenible, no sólo por sus repercusiones ambientales, si no también por las oportunidades de generación de nuevos empleos que puede suponer. • Seguir impulsando el desarrollo de la biomasa, principalmente la procedente de los sectores oleícola y forestal y de sus industrias de transformación, en la provincia de Jaén, como elemento de desarrollo rural y de cohesión territorial. Principalmente, a través del concepto de “generación distribuida”, potenciando tecnologías como la gasificación. 171 • Implantar sistemas que mejoren la movilidad en los principales núcleos urbanos de la provincia, así como en las aglomeraciones y en los accesos a determinados espacios como Universidades, polígonos Industriales, colegios e institutos, etc. • Instalar en todos los edificios públicos sistemas basados en el uso eficiente de la energía para “predicar con el ejemplo” tanto en iluminación como en climatización. • Explotar de una manera racional el potencial eólico de la provincia de Jaén, para de esta manera contribuir a reducir la dependencia energética de fuentes de origen fósil. • Reorientar el desarrollo de la energía solar fotovoltaica hacia el denominado “balance neto” como estrategia de continuidad de un sector con un fuerte arraigo en la provincia de Jaén, tanto desde el punto de vista de la investigación como de la existencia de empresas instaladoras. • Dar un especial impulso a la biomasa para la climatización de edificios, prestando especial hincapié en los sistemas centralizados, tanto por su elevada eficiencia energética como por la creación de nuevas oportunidades de negocio. • Intentar atraer o desarrollar actividades industriales generadoras de valor añadido para la provincia de Jaén en los ámbitos de la eficiencia energética y de las energías renovables, como por ejemplo iluminación eficiente o calderas de biomasa, por citar un par de ejemplos. • Continuar con la colaboración entre las distintas administraciones (Diputación de Jaén, Junta de Andalucía, Universidad de Jaén, Ayuntamientos, etc.) para el desarrollo de una estrategia conjunta de sostenibilidad energética en la provincia de Jaén. 172 3.11.- Indicadores energéticos 2005-2011 Los principales indicadores que se han tenido en cuenta para poder realizar en un futuro un seguimiento de la situación energética de la provincia de Jaén han sido los siguientes: • Demanda bruta de energía eléctrica. • Producción bruta total: Régimen Ordinario y Régimen Especial. • Producción bruta de energías renovables frente a producción bruta total. • Potencia eléctrica total. • Potencia eléctrica de origen renovable. • Consumo final de energía y consumo final per cápita y por sectores • Consumo primario de energía. • Aportación de energías renovables al consumo energético primario. • Grado de autoabastecimiento energético. Demanda bruta de energía eléctrica En el gráfico 3.24. se muestra la evolución de este parámetro en la provincia de Jaén desde el año 2005 hasta el 2011, último año del que se dispone de contabilidad energética oficial. En el mismo se puede apreciar un descenso del 7,79% de este parámetro desde el año 2005, especialmente a partir del año 2007, como consecuencia de la crisis económica en la que actualmente se encuentra España y varios países de la Unión Europea. Producción bruta total: régimen ordinario y especial En el gráfico 3.25 se puede apreciar la evolución de este parámetro en la provincia de Jaén, tanto en Régimen Ordinario como Especial. 173 Gráfico 3.24. DEMANDA BRUTA DE ENERGÍA ELÉCTRICA 3.350 3.300 3.250 GWh 3.200 3.150 3.100 3.050 3.000 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 Años Gráfico 3.25. PRODUCCIÓN BRUTA TOTAL 2.500 2.000 GWh 1.500 1.000 500 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 Años Fuente: Agencia Andaluza de la Energía 174 2011 2012 En el gráfico 3.26. se muestra la distribución entre ambos regímenes, donde se pone de manifiesto que en la provincia de Jaén predomina la energía generada procede de instalaciones de cogeneración y por fuentes de origen renovable. Gráfico 3.26. PRODUCCIÓN BRUTA TOTAL. DISTRIBUCIÓN ENTRE REGIMEN ORDINARIO Y ESPECIAL 5.000 4.500 4.000 3.500 GWh 3.000 2.500 2.000 PRODUCCIÓN BRUTA TOTAL 1.500 1.000 REGIMEN ESPECIAL 500 RÉGIMEN ORDINARIO 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 Años Fuente: Agencia Andaluza de la Energía En el gráfico 3.27 se puede observar la evolución del Régimen Especial por tecnologías, donde cabe destacar el crecimiento experimentado por todas ellas a excepción de la eólica, la cual se ha mantenido. Sin duda alguna, es reseñable el espectacular crecimiento de la energía solar fotovoltaica, pasando de 0,9 GWh en 2005 a 163 GWh en 2011. También la creciente evolución de la energía procedente de la biomasa, por encima del 400%. La minihidráulica experimentó 175 un crecimiento de casi el 100% y algo más de la mitad la cogeneración termoeléctrica. Gráfico 3.27. REGIMEN ESPECIAL. EVOLUCIÓN POR TECNOLOGÍAS 1.400 1.200 1.000 GWh 800 600 400 200 0 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 Años Hidráulica Eólica Biomasa Cogeneración Termosolar Solar fotovoltaica Fuente: Agencia Andaluza de la Energía Producción bruta con renovables frente a producción bruta total Este parámetro ha evolucionado de forma creciente en los últimos años tanto en Andalucía como en la provincia de Jaén tal y como se recoge en el gráfico 3.28. La cifra promedio para el caso de Jaén ha sido del 28,63%. En Andalucía este valor promedio fue algo inferior (14,53%). Potencia eléctrica total La evolución de la potencia eléctrica total ha experimentado un crecimiento entre los años 2005 y 2012 del 57,05 %, tal y como se muestra en el gráfico 3.29 En el caso de Andalucía el crecimiento ha sido similar, un 50,44%. 176 Gráfico 3.28. PRODUCCIÓN BRUTA CON ENERGÍAS RENOVABLES FRENTE A PRODUCCIÓN BRUTA TOTAL. ANDALUCÍA Y JAÉN 45 40 35 30 % 25 20 15 10 5 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2011 2012 Años JAÉN ANDALUCÍA Fuente: Agencia Andaluza de la Energía Gráfico 3.29. POTENCIA ELÉCTRICA TOTAL 600 500 MW 400 300 200 100 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 Años Fuente: Agencia Andaluza de la Energía 177 Potencia eléctrica de origen renovable La potencia eléctrica instalada en la provincia de Jaén de origen renovable ha crecido un 53,10% desde el año 2005 hasta el 2011, aspecto éste congruente con la evolución también creciente de la producción energética en régimen especial, tal y como ya se ha apuntado, especialmente la energía solar fotovoltaica y la biomasa. Gráfico 3.30. POTENCIA ELÉCTRICA DE ORIGEN RENOVABLE 400 350 300 MW 250 200 150 100 50 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 Años Fuente: Agencia Andaluza de la Energía Consumo final de energía y consumo final per cápita Al igual que otras variables como la demanda bruta de energía eléctrica, el consumo final de energía ha descendido un 16,90% en los últimos años como consecuencia de la crisis económica y el decaimiento del consumo, tal y como se puede apreciar en el gráfico 3.31. 178 Gráfico 3.31. CONSUMO DE ENERGÍA FINAL 1.600 1.400 1.200 ktep 1.000 800 600 400 200 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 Años Fuente: Agencia Andaluza de la Energía Por fuentes energéticas, todas han experimentado un descenso excepto el gas natural, que ha crecido un 40,04%. Los productos petrolíferos han experimentado un descenso del 19,94%, las renovables del 32,42% y la electricidad del 11,31%. Todo ello se puede apreciar en el gráfico 3.32. Camino prácticamente paralelo ha experimentado el consumo final per cápita, el cual ha decrecido un 19,05% en el mismo período, tal y como se muestra en el gráfico 3.33. 179 Gráfico 3.32. CONSUMO DE ENERGÍA FINAL. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES 800 700 600 ktep 500 400 300 200 100 0 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 Años Carbón Petróleo Gas Natural Renovables Electricidad Fuente: Agencia Andaluza de la Energía Gráfico 3.33. CONSUMO DE ENERGÍA FINAL PER CÁPITA 2,50 tep/hab.año 2,00 1,50 1,00 0,50 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 Años Fuente: Agencia Andaluza de la Energía 180 2011 2012 A nivel sectorial la situación se muestra en el gráfico 3.34, donde se puede apreciar el descenso del consumo en los sectores del transporte un 8,89%, la industria, un 38,09% y el primario, un 14,01%. Por el contrario, los sectores servicios y residencial han experimentado crecimientos del 0,29% y del 16,12% respectivamente. Gráfico 3.34. CONSUMO DE ENERGÍA FINAL POR SECTORES 600 500 ktep 400 300 200 100 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 Años Industria Transporte Primario Servicios Residencial Fuente: Agencia Andaluza de la Energía Consumo primario de energía Al igual que para el caso de usos finales, los consumos primarios de energía han descendido en el periodo 2005-2011 un 13,70% tal y como se puede apreciar en el gráfico 3.35. 181 La evolución de las distintas fuentes de energía, incluido el saldo eléctrico, es decir, la diferencia entre la energía importada y exportada, se muestran en el gráfico 3.36. Se puede apreciar un descenso radical del consumo de carbón y una bajada de un 19,78% en el consumo de petróleo y del 13,76% en el de energías renovables. El único vector energético que crece es el gas natural, y lo hace en un porcentaje del 57,32%. Gráfico 3.35. CONSUMO PRIMARIO DE ENERGÍA 1.550 1.500 ktep 1.450 1.400 1.350 1.300 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 Años Fuente: Agencia Andaluza de la Energía Aportación de las renovables al consumo primario de energía La aportación de las energías renovables al consumo primario de energía se ha mantenido por encima del 20% en el periodo 2005-2011, tal y como se muestra en el gráfico 3.37 con un valor promedio del 23,93%. 182 Gráfico 3.36. CONSUMO PRIMARIO DE ENERGÍA. DISTRIBUCIÓN POR FUENTES 900 800 700 ktep 600 500 400 300 200 100 0 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 Años Carbon Gas natural Petróleo Renovables Saldo eléctrico Fuente: Agencia Andaluza de la Energía Grado de autoabastecimiento energético Es el cociente entre la producción interior de energía y el consumo total de energía primaria. El valor de este parámetro es superior en la provincia de Jaén que el correspondiente a Andalucía, y su promedio en el periodo 2005-2011 se ha situado en el 21,70% frente al 9,74% de Andalucía, tal y como se puede ver en el gráfico 3.38. Ello es debido a que prácticamente la totalidad de la producción interior de energía en la provincia de Jaén procede de fuentes de origen renovable. 183 Gráfico 3.37. APORTACIÓN DE LAS ENERGÍAS RENOVABLES AL CONSUMO PRIMARIO DE ENERGÍA 30 25 % 20 15 10 5 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 Años Gráfico 3.38. GRADO DE AUTOABASTECIMIENTO ENERGÉTICO. ANDALUCÍA Y JAÉN 30 25 % 20 15 10 5 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 Años GRADO DE AUTOABASTECIMIENTO ENERGÉTICO JAÉN GRADO DE AUTOABASTECIMIENTO ENERGÉTICO ANDALUCÍA Fuente: Agencia Andaluza de la Energía 184 2011 2012 4.- SITUACIÓN ACTUAL Y POLÍTICAS DE APOYO A LA BIOMASA 4.1.- Introdución La biomasa es una fuente de energía clave para el cumplimiento de los objetivos recogidos en los diferentes planes de promoción y estímulo a las energías renovables, puesto que contribuye de una manera muy directa a las principales premisas de los mismos, a saber: • Diversificación energética, en tanto que amplía el rango de fuentes energéticas primarias para la generación de energía térmica y/o eléctrica, así como para la producción de biocarburantes. Y ello debido a la obtención de biocombustibles sólidos (astillas o pélets), líquidos (bioetanol o biodiesel) y gaseoso (biogás o syngas). • Disminución de la dependencia energética al sustituir directamente fuentes energéticas de origen fósil como gasóleo C o gas natural, las cuales son, en su mayor parte, importadas de otros países. 185 • Reducción de emisiones de gases de efecto invernadero puesto que el aprovechamiento final de la biomasa, cualquiera que sea su origen, suele conllevar la oxidación total de la materia orgánica o de los combustibles de ella derivados, como es el caso de la combustión de la biomasa sólida, del aprovechamiento de los biocarburantes o del biogás. Por ello, el CO2 emitido en ese proceso es equivalente al absorbido por la materia orgánica original y por ello el balance global del ciclo de CO2 resulta prácticamente nulo. El grado de neutralidad vendrá marcado por la intensidad, tipo y cuantía de los medios utilizados para la producción, transporte, tratamiento y utilización de la misma, es decir, por todos los procesos necesarios para llegar a la combustión final. La consecución de estos objetivos va a requerir un impulso decidido a favor de la biomasa, desde todos los ámbitos, europeo, nacional y autonómico. Para 2010 ya se recogía en el Plan de Acción de la Biomasa (COM 2005 (628) final) una contribución de la biomasa del 10% al consumo de energía primaria, y un 5,75% de participación de los biocarburantes en el sector del transporte29. Objetivos, que como se verá posteriormente, se ven incrementados para el año 2020. En realidad, y debido a una serie de factores, estos objetivos están lejos de alcanzarse. Las razones están, entre otras cuestiones, en una falta de desarrollo tecnológico y de mejora de la eficiencia energética para la mayor parte de las tecnologías, y en la ausencia de un auténtico sector de la biomasa que establezca un mercado estable y seguro de materias primas y con todos los eslabones de la cadena de valor perfectamente desarrollados (suministradores, ingenierías, instaladores, mantenedores, entidades financieras, etc.). Es por ello que se hacen necesarios una serie de mecanismos de apoyo y de estímulo así como un conjunto de acciones para conseguir que la biomasa se Directiva 2003/30/CE, de 8 de mayo de 2003, del Parlamento Europeo y del Consejo, relativa al fomento del uso de biocarburantes u otros combustibles renovables en el transporte. Diario Oficial de la Unión Europea, 17 de mayo de 2003, L 123/42. 29 186 sitúe, como mínimo, en los objetivos estipulados por las autoridades energéticas. Entre ellos cabe citar los siguientes: • Aseguramiento del suministro de biomasa en calidad (estandarización), cantidad y precio. • Desarrollo de la cadena de suministro (logística, pre-tratamiento, etc.). • Fomento de la producción de biocarburantes de 2ª generación a partir de fuentes de biomasa de tipo lignocelulósico como por ejemplo los restos de las podas de olivar, potenciando el concepto de las llamadas “biorefinerías”. • Incremento de la eficiencia de las tecnologías convencionales de generación eléctrica y desarrollo de otras alternativas como la cocombustión, la gasificación, etc. • Promoción de la biomasa para usos finales térmicos, tanto a nivel individual como colectivo y también en sistemas centralizados, lo que en inglés se conoce como District Heating and Cooling, tal y como se ha hecho en el Parque Científico y Tecnológico GEOLIT. Por otro lado, son numerosos y variados los instrumentos de apoyo a la biomasa, pudiendo estos clasificarse en los tres siguientes grupos: • Políticos. Los más importantes son el llamado “paquete verde” 20/20/20 y la Directiva 2009/728/CE relativa al fomento del uso de la energía procedente de fuentes renovables a nivel europeo; el Plan de Acción Nacional de Energías Renovables de España (PANER) 2011-2020 y el Plan Español de Energías Renovables (PER) 2011-2020 a escala nacional; y el Plan Andaluz de Sostenibilidad Energética (PASENER) 2007-2013 a nivel andaluz. • Legislativos y/o normativos. El más importante hasta la aparición del Real Decreto-ley 1/2012 varias veces citado, era el RD 661/2007 por el que se regula la actividad de producción de energía eléctrica en Régimen Especial. Otro 187 instrumento legislativo también ya citado, y que impulsará determinadas aplicaciones tecnológicas de la biomasa, entre ellas la gasificación, es el RD 1966/2011 por el que se regula la conexión a red de instalaciones de producción de energía eléctrica de pequeña potencia, lo que se conoce como “balance neto”. A nivel de biomasa para usos térmicos, la norma que puede contribuir al impulso de la biomasa en edificios es el llamado “Código Técnico de la Edificación”30 así como la Directiva 2010/31/UE relativa a la eficiencia energética en los edificios, en la cual se recoge un nuevo concepto: “edificios de consumo casi nulo”31. Por último, la Ley 5/2011 del olivar de Andalucía32 hace referencia al fomento del uso racional de los subproductos del olivar. • Económicos. Los más significativos son la Orden de 7 de diciembre de 2010 por la que se establece un programa de incentivos para el desarrollo energético sostenible de Andalucía33, y los fondos de inversión públicos a través de la Iniciativa denominada “JEREMIE” (Joint European Resources for Micro to Medium Enterprises) gestionada por la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía. Otras líneas de financiación pública impulsados por el I.D.A.E. para proyectos de biomasa en edificios a través de Empresas de Servicios Energéticos, ESE son la 2ª convocatoria del Programa denominado BIOMCASA (BOE núm. 12 de 14 de enero de 2012), y el GIT para grandes instalaciones térmicas en los edificios. Real Decreto 314/2006, de 17 de marzo, por el que se aprueba el Código Técnico de la Edificación. Boletín Oficial del Estado, 28 de marzo de 2007, núm. 74, p. 11816 31 Directiva 2010/31/UE, de 19 de mayo de 2010, del Parlamento Europeo y del Consejo, relativa a la eficiencia energética en los edificios. Diario Oficial de la Unión Europea, 18 de junio de 2010, L 153/13 32 Ley 5/2011, de 6 de octubre, del olivar de Andalucía. Boletín Ofincial de la Junta de Andalucía, 19 de octubre de 2011, núm. 205, p.6. 33 Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, núm. 244 de 10 de diciembre de 2010. 30 188 4.2.- Situación de la biomasa a nivel mundial Según datos del Fondo de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, FAO, algunos países pobres obtienen el 90% de su energía de la leña y otros biocombustibles. Esta fuente de energía supone un tercio del consumo energético en África, Asia y Latinoamérica, siendo la principal fuente de energía en los hogares de 2.000 millones de personas. El principal inconveniente es la falta de desarrollo tecnológico y la baja eficiencia energética en los procesos de transformación, situándose fuera de una planificación sostenible de su aprovechamiento, lo que conlleva deforestación de grandes áreas con el impacto ambiental que conlleva. Más del 10%, (1,5 Gha) de la superficie mundial se utiliza actualmente para cultivos y un 25% (3,54 Gha) para pastos de ganadería y otras producciones animales. Anualmente, alrededor de 7 u 8 Mha forestales se convierten en agrícolas. Las previsiones establecidas por el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático establecen que antes del año 2.100 la cuota de participación de la biomasa en la producción mundial de energía debería estar entre el 25 el 46%. Según la publicación “2010 Survey of Energy Resources” del World Energy Council en el año 2008 la contribución de la biomasa (incluyendo usos tradicionales no eficientes) a nivel mundial alcanzaba los 1.194 Mtep de energía primaria, lo que suponía un 10% del total mundial, prácticamente el mismo porcentaje que en el año 2006 donde la aportación de la biomasa fue de 1.186 Mtep. Del total en 2008, el 75% provenía de leñas, carbón vegetal o restos forestales, el 10% de biomasa agrícola (residuos animales, vegetales y cultivos energéticos), un 12% correspondía a residuos de industrias forestales, licores negros o madera recuperada, y el biogás suponía una contribución del 3%. 189 La Agencia Internacional de la Energía, AIE, dividía la contribución de la biomasa en 2006 según la siguiente división por aplicaciones: • Usos tradicionales (calefacción y cocina): 724 Mtep • Usos modernos: 462 Mtep o Biocarburantes: 24,4 Mtep o Calor utilizado directamente: 293 Mtep Usos industriales: 188,6 Mtep Edificios: 104,4 Mtep o Electricidad y redes de calefacción: 8,7 Mtep (239 TWh) o Pérdidas: 63,9 Mtep De los 239 TWh generados en 2006 aproximadamente el 44,4% correspondían a plantas de generación eléctrica exclusiva con un rendimiento del 20%. El resto correspondía a plantas de cogeneración con uso de la energía térmica tanto en la industria como en redes de calefacción centralizada. No obstante, en general las estadísticas de biomasa son poco fiables en todo el mundo debido a la gran variedad de aplicaciones y a la amplia gama de tipos existente. 190 4.3.- Situación de la biomasa en la Unión Europea En la UE cinco países aportan el 56,7% de la energía primaria producida con biomasa: Francia, Suecia, Alemania, Finlandia y Polonia. Los principales consumidores de biomasa (consumo “per cápita”) son los países nórdicos y bálticos, junto con Austria, encabezados por Finlandia. Según datos de Eurobserver [18] el crecimiento de la producción de energía primaria con biomasa en la UE entre 2009 y 2010 fue del 8%. En 2010 la UE consumió un total de 66 Mtep de calor procedente de biomasa, produjo 67 TWh de energía eléctrica y 79,3 Mtep de energía primaria, tal y como se muestra en el cuadro 4.1. España produjo en 2010 4,751 Mtep, un 5,71% más que en 2009 y se situó en sexto lugar por detrás de Alemania, Francia, Suecia, Finlandia y Polonia; y por delante de Austria. Cuadro 4.1.- ENERGÍA PRIMARIA PRODUCIDA CON BIOMASA EN LOS ESTADOS D E LA UE (2009 y 2010). Datos en ktep ESTADO 2009 2010 Alemania 11,217 12,230 Francia 9,368 10,481 Suecia 8,621 9,202 Finlandia 6,473 7,680 Polonia 5,190 5,865 España 4,494 4,751 Austria 4,097 4,529 191 Rumania 3,838 3,583 Italia 2,760 3,019 Portugal 2,856 2,582 República Checa 1,968 2,094 Letonia 1,737 1,739 Dinamarca 1,422 1,657 Hungría 1,469 1,489 Reino Unido 1,357 1,442 Holanda 1,014 1,033 Lituania 1,002 1,002 Estonia 0,843 0,924 Bélgica 0,722 0,858 Grecia 0,799 0,812 Bulgaria 0,766 0,788 Eslovaquia 0,647 0,740 Eslovenia 0,537 0,572 Irlanda 0,189 0,197 Luxemburgo 0,034 0,040 Chipre 0,009 0,010 Malta 0,000 0,000 TOTAL UE 73,430 79,318 Fuente: EurObser´ER 2011 192 El crecimiento experimentado en la evolución de la producción de energía primaria a partir de biomasa desde el año 2000 ha sido del 51,33%, pasando de 52,4 Mtep a las 79,3 Mtep respectivamente. Respecto a la producción de energía eléctrica con biomasa, Eurobser´ver presenta los siguientes datos para 2009 y 2010 en TWh. El crecimiento experimentado entre esos dos años ha sido del 8,26%. En el caso de España dicha cifra se situó en el 11,92%. En 2012 las previsiones de producción de energía eléctrica a partir de biomasa se sitúan en 115 TWh. Por su importancia cualitativa, merece la pena destacar que las aplicaciones para calefacción y ACS abastecidas con pélets son una práctica habitual en muchos países de la UE. En algunos de ellos el crecimiento del número de instalaciones de biomasa para usos finales térmicos ha sido muy significativo en los últimos años, ejemplo de ello es Austria donde se pasó de 28.000 instalaciones de potencia por debajo de 100 kW en 2004 a 47.000 en 2006. Estos desarrollos unidos a la creciente producción de biocombustibles sólidos, especialmente pélets, ha permitido la consolidación de un mercado europeo de biomasa térmica. En 2010 se consumieron 10 millones de toneladas de pélets en la UE. En el cuadro 4.3. se muestra el calor consumido en la UE a partir de biomasa, el cual ha experimentado un crecimiento entre 2009 y 2010 del 17,95%. En el caso de España este crecimiento ha sido del 4,37%. 193 Cuadro 4.2.- PRODUCCIÓN ELÉCTRICA CON BIOMASA EN LOS ESTADOS D E LA UE (2009 y 2010). Datos en TWh ESTADO 2009 2010 Alemania 10,881 10,730 Finlandia 8,402 9,385 Suecia 10,103 9,281 Polonia 4,907 5,906 Reino Unido 3,535 4,582 Holanda 3,550 4,197 Dinamarca 1,996 3,323 Austria 3,321 3,321 Bélgica 2,709 2,784 España 2,197 2,459 Italia 2,828 2,260 Portugal 1,713 2,223 Hungría 2,029 1,993 República Checa 1,396 1,493 Francia 1,234 1,360 Estonia 0,307 0,733 Eslovaquia 0,493 0,614 Eslovenia 0,120 0,120 194 Lituania 0,087 0,116 Irlanda 0,064 0,104 Rumanía 0,011 0,011 Letonia 0,004 0,007 Bulgaria 0,06 0,006 TOTAL UE 61,893 67,006 Fuente: EurObser´ER 2011 Cuadro 4.3.- CALOR CONSUMIDO CON BIOMASA EN LOS ESTADOS D E LA UE (2009 y 2010). Datos en Mtep ESTADO 2009 2010 Francia 9,019 10,105 Alemania 7,022 8,677 Suecia 7,108 8,039 Finlandia 5,245 6,107 Polonia 4,121 4,551 España 3,751 3,915 Austria 3,387 3,735 Rumanía 3,755 3,507 Italia 2,558 3,084 Portugal 2,542 2,151 195 Dinamarca 1,642 2,026 República Checa 1,503 1,640 Letonia 1,186 1,153 Hungría 0,928 0,939 Lituania 0,870 0,872 Grecia 0,797 0,810 Reino Unido 0,707 0,799 Bulgaria 0,735 0,757 Bélgica 0,755 0,755 Estonia 0,643 0,635 Eslovenia 0,509 0,547 Eslovaquia 0,494 01,511 Holanda 0,445 0,450 Irlanda 0,164 0,160 Luxemburgo 0,034 0,040 Chipre 0,013 0,013 Malta 0,000 0,000 TOTAL 59,934 65,974 Fuente: EurObser´ER 2011 196 En la figura 4.1. se muestra la producción primaria de energía, la producción de energía eléctrica y el calor consumido a partir de biomasa en 2010 en la Unión Europea según Eurobserver. Figura 4.1. PRODUCCIÓN PRIMARIA DE ENERGÍA, GENERACIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA Y CALOR CONSUMIDO. Año 2010 Fuente: EurObser´ER 2011 197 4.4.- La biomasa en España España, al igual que gran parte de los países desarrollados, sustituyó la mayoría de los consumos basados en biomasa, primero por carbón a finales del siglo XIX y luego por combustibles derivados del petróleo o aplicaciones eléctricas durante el siglo XX. De hecho, el consumo de biomasa en España quedó relegado a algunos sectores directamente vinculados a la producción del recurso como el maderero o el oleícola; o con demandas energéticas importantes como el cerámico. Aparte de estos sectores, el mayor consumo de biomasa se centró en sistemas tradicionales de calefacción, producción de ACS y cocina, como las clásicas chimeneas o las estufas de leña. La mayor parte del consumo de biomasa en España proviene del sector forestal, la cual ha sido utilizada tradicionalmente en los sectores doméstico e industrial. El cuadro 4.4. muestra la distribución del consumo de biomasa según orígenes y aplicaciones en el año 2006, reflejando la importancia de los usos de las leñas y maderas forestales, las podas de los olivos y otros subproductos del sector oleícola como el orujo extractado u orujillo. Asimismo, se puede comprobar la importancia de combustibles procedentes de las industrias del sector maderero, en especial papeleras (lejías negras y cortezas) en la producción de energía eléctrica a partir de biomasa. A pesar del descenso de las últimas décadas, las circunstancias han cambiado en la actualidad, y la subida de precios de los combustibles fósiles como el gasóleo C o el gas natural, las necesidades de autosuficiencia energética y los objetivos medioambientales de la sociedad están impulsado el desarrollo de nuevos proyectos y la puesta en marcha de iniciativas tanto de generación de energía eléctrica como de usos finales térmicos. 198 Cuadro 4.4.- DISTRIBUCIÓN DEL CONSUMO DE BIOMASA SEGÚN ORÍGENES Y APLICACIONES ENERGÍA ENERGÍA ELÉCTRICA TÉRMICA (KTEP) (KTEP) 3.800.000 0 950 0,25 1.000.000 0 250 400.000 0,25 1.600.000 0 400 Paja cereal 100.000 0,30 333.333 80 20 Lejías negras 600.000 0,30 2.000.000 600 0 450.000 0,30 1.500.000 0 450 Cortezas 550.000 0,32 1.718.000 170 380 Orujillo 700.000 0,40 1.750.000 250 450 200.000 0,32 625.000 0 200 14.326.333 1.100 3.100 BIOMASAS Leñas tallares Leñas podas Leñas olivos y c. agrícolas Serrines y virutas Otros alimentarios TOTAL PCI H TONELADAS (TEP/TM) (TM) 950.000 0,25 250.000 TEP 4.200.000 Fuente: Plan de Energías Renovables de España, PER 2011-2020 Este hecho, unido al desarrollo tecnológico de la biomasa así como a la existencia de un mercado de biocombustibles sólidos promovido por empresas de servicios agrícolas y forestales principalmente, está provocando unas expectativas halagüeñas de crecimiento del sector de la biomasa en España. 199 El periodo comprendido entre 2005 y 2009 ha supuesto en España el periodo de despegue de la biomasa, y ello debido más al conocimiento, sensibilización favorable y acercamiento del sector empresarial y de las administraciones públicas, que a los resultados realmente alcanzados. Son pocas las plantas de generación de energía eléctrica con biomasa existentes en España y la mayor parte de ellas están ubicadas al lado de industrias generadores de biomasa, principalmente extractoras de aceite de orujo u orujeras. La potencia instalada en España en 2010 se situaba en 533 MW tal y como se muestra en el cuadro 4.5. Cuadro 4.5.- EVOLUCIÓN DE LA POTENCIA ELÉCTRICA INSTALADA EN ESPAÑA CON BIOMASA (MW) Total EERR Biomasa 2005 2006 2007 2008 2009 2010 26.464 28.441 32.085 36.606 39.423 42.015 354 388 396 374 492 533 Fuente: Plan de Energías Renovables de España, PER 2011-2020 El desarrollo de este tipo de aplicaciones tecnológicas de la biomasa ha estado y está muy condicionado por el ya varias veces mencionado y referido Régimen Especial, por lo que es necesario para su correcta evolución, un marco retributivo estable, una mayor colaboración entre administraciones, empresas y compañías eléctricas a la hora de establecer la evacuación de la energía eléctrica; así como el fomento de otras tecnologías de generación distribuida como la gasificación o la co-combustión. Según la Asociación de Productores de Energías Renovables, APPA las plantas de biomasa existentes en España con las diferentes tecnologías se 200 muestran a continuación. La potencia total instalada a mediados de 2011 ascendía a 509,793 MW, distribuida según el cuadro 4.6. Cuadro 4.6.- POTENCIA TOTAL INSTALADA EN ESPAÑA Y NÚMERO TOTAL DE PLANTAS EXISTENTES TIPOLOGÍA NÚMERO POTENCIA (MW) Combustión 22 358,485 Gasificación 4 3,722 Biometanización 30 97,941 FORSU 4 49,645 60 509,793 Fuente: APPA [17] y Elaboración propia Del total de plantas, 60, la mayor parte corresponden a instalaciones de generación de biogás ubicadas en vertederos y estaciones depuradoras de aguas residuales. Se trata de plantas de pequeña potencia (3,2 MW de media). A continuación se sitúan las que emplean la tecnología de combustión con 22 plantas y 358,485 MW (16 MW de potencia media). En tercer lugar se sitúa la valorización energética de la Fracción Orgánica de Residuos Urbanos, FORSU, con 4 plantas que totalizan una potencia cercana a los 50 MW y en las cuales se utilizan, además de FORSU, otros tipos de combustibles de origen no biomásico. Finalmente, con 4 plantas y una potencia total de 3,722 MW se sitúa la gasificación, la cual, tal y como se viene diciendo, es la menos desarrollada de todas (cuadro 4.8.). 201 En los cuadros siguientes se recogen el listado de plantas de biomasa mediante combustión y de gasificación existentes en España en 2011 según datos de APPA. Cuadro 4.7. PLANTAS DE BIOMASA EXISTENTES EN ESPAÑA CON TECNOLOGÍA DE COMBUSTIÓN AÑO DENOMINACIÓN LOCALIZACIÓN PROMOTOR PUESTA POTENCIA EN (MW) MARCHA Planta de biomasa Sangüesa, Acciona de Sangüesa Navarra Energía Planta de biomasa de Briviesca Planta de biomasa de Miajadas Biomasa Briviesca, Burgos Briviesca Biomasa Miajadas, Cáceres Miajadas 2004 32 2010 16 2010 16 Pinasa biomasa Fuentes, Cuenca Cometa 2004 4,032 Talosa biomasa Foria Cometa 2004 4,032 Red de calor y frío Zona franca, Ecergies de Barcelona Barcelona Barcelona 2011 2 Biomasa Huelva Huelva ENCE - 40,95 Biomasa Navia Navia ENCE - 36,65 Huelva ENCE - 27,5 Navia ENCE - 40,33 Cogeneración licor negro Huelva Cogeneración Navia 202 Cogeneración Pontevedra CTB Corduente Bioenergía Santa María Pélets Asturias La Loma Enemansa Pontevedra Corduente, Guadalajara ENCE - 34,57 IBERDROLA 2009 2 2006 14,30 2011 1 ECyR 2002 16 ECyR 2002 16 1998 2,35 2004 7,80 2006 9,80 2003 9,15 1995 12,9 2010 15 Bioenergía Lucena, Córdoba Santa María Péletes Tineo, Asturias Asturias Villanueva del Arzobispo, Jaén Villarta de San Juan, Ciudad Real Norvento Allarluz Allariz, Orense Térmica AFAP Villacañas, Toledo Térmica AFAP Biomasa Puente Puente Genil, VALORIZA Genil Córdoba ENERGÍA Villanueva de VALORIZA Algaidas, Málaga ENERGÍA Palenciana, Oleícola el Córdoba Tejar Extragol Vetejar Bioeléctrica de Linares enerxia VALORIZA Linares, Jaén ENERGÍA TOTAL 360,364 Fuente: APPA y Elaboración propia 203 Cuadro 4.8. PLANTAS DE BIOMASA EXISTENTES EN ESPAÑA CON TECNOLOGÍA DE GASIFICACIÓN AÑO DE DENOMINACIÓN LOCALIZACIÓN PROMOTOR PUESTA POTENCIA EN (MW) MARCHA ENAMORA Energía Mora de Ebro, Natural de Tarragona 1997 0,75 Mora Planta Taim Weser Zaragoza Taim Weser 2005 0,65 Planta de Jundiz Vitoria-Gastéiz GUASCOR 2008 0,672 2010 1,65 Inversiones Biomasa Molla Xátiva, Valencia sebatenses Molla TOTAL 3,722 Fuente: APPA y Elaboración propia En el caso de aplicaciones térmicas puede apreciarse la disminución que han sufrido en los últimos años debido, entre otros factores, a inviernos cálidos que han provocado una menor demanda de energía para calefacción. Es por ello crucial fomentar los procesos de producción de frío mediante absorción, que difieren de los de compresión eléctrica en que la energía que acciona el generador de frío es calor en forma de agua caliente, la cual puede ser producida en una caldera de biomasa. El principio de funcionamiento de la absorción se basa en la afinidad que presentan ciertas sustancias entre sí. Una de las cuales, la más volátil actúa como refrigerante, y la otra como absorbente. 204 La máquina de absorción enfría el agua que circula por el circuito de distribución de frío hacia los ventiloconvectores, o fan coils en inglés, los climatizadores o el sistema emisor elegido. Emplea refrigerantes no tóxicos, lo que evita problemas en caso de fugas. Cuadro 4.9.- EVOLUCIÓN DE LA ENERGÍA CONSUMIDA EN APLICACIONES TÉRMICAS CON BIOMASA (ktep) Total EERR Biomasa 2005 2006 2007 2008 2009 2010 3.537 3.656 3.712 3.750 3.754 3.932 3.441 3.513 3.548 3.583 3.551 3.655 Fuente: Plan de Energías Renovables de España, PER 2011-2020 Finalmente, en el cuadro 4.10. se muestra el potencial de biomasa existente en España y la necesaria para el cumplimiento de los objetivos recogidos en el Plan de Energías Renovables, PER, 2011-2020. 205 Cuadro 4.10.- BIOMASA POTENCIAL34 vs NECESARIA PARA EL CUMPLIMIENTO DE LOS OBJETIVOS (Tm/año) PROCEDENCIA BIOMASA OBJETIVO INCREMENTO POTENCIAL PER 2020 2006-2020 9.639.176 4.093.889 5.908.116 3.518.059 2.518.563 2.518.563 18.065.855 10.130.511 Restos de Masas aprovechamientos forestales madereros existentes Aprovechamientos del árbol completo Restos Herbáceos agrícolas Leñosos 2.984.243 15.731.116 14.434.566 16.118.220 Masas herbáceas susceptibles de implantación en terreno 17.737.868 agrícola Masas leñosas susceptibles de implantación en terreno 6.598.861 agrícola Masas leñosas susceptibles de implantación en terreno forestal TOTAL BIOMASA POTENCIAL EN ESPAÑA 15.072.320 88.677.194 Fuente: PER 2011-2020 34 Datos en tonelada en verde con un 45% de humedad 206 4.5.- La biomasa en Andalucía Andalucía cuenta con un importante potencial de recursos de origen biomásico, en gran medida debido al cultivo del olivo y a las industrias de producción de aceites de oliva. En el cuadro 4.11. se recoge la biomasa existente en Andalucía, según un Informe elaborado en septiembre de 2011 por la Agencia Andaluza de la Energía titulado “La biomasa en Andalucía”. Dicho potencial asciende a 3.958 ktep. Si se tiene en cuenta el consumo de energía primaria en Andalucía en el año 2011 (19.053,30 ktep), este potencial supone un 21 % del total. Cuadro 4.11. POTENCIAL DE BIOMASA DE ANDALUCÍA TIPO DE BIOMASA SUBTIPO TONELADAS KTEP 4.606.473 1.321,29 OLIVAR 2.524.419 803,25 FRUTAL 112.611 23,09 CITRICO 58.381 11,82 SUBTROPICAL 17.441 4,29 VID 48.305 11,88 GIRASOL 524.533 152,39 INVERNADEROS 415.070 49,81 ARROZ 145.910 40,85 ALGODÓN 721.353 216,41 TOMATE 38.449 7,50 4.342.525 77 SUBTOTAL BIOMASA AGRÍCOLA RESIDUOS AGRICOLAS 33% RESIDUOS SUBTOTAL BIOMASA GANADEROS GANADERA 207 2% PORCINO 1.476.565 17 VACUNO 1.371.182 24 AVICOLA 361.355 18 OTRAS ESPECIES 1.133.424 18 5.070.029 1.025 HOJA OLIVO 345.108 86 HUESO ACEITUNA 552.434 215 3.011.462 422 58.693 20 123.083 2 100.203 14 10.600 4 16.811 5 17.500 7 41.097 9 220.410 59 6.000 2 14.824 1 SUBTOTAL BIOMASA INDUSTRIAL ORUJO HUMEDO GRASO OLIVA CASCARA ARROZ RESIDUOS INDUSTRIA CERVEZA RESIDUOS DE MATADERO Y RESIDUOS INDUSTRIALES CARNICAS RESIDUOS CORCHO 26% RESDUOS DESMOTADORA DE ALGODÓN CASCARA FRUTOS SECOS RESIDUOS INDUSTRIA VINO Y LICORES RESIDUOS MADERA DE MUEBLES, ENVASES Y ASERRADEROS RESIDUOS INDUSTRIA AZUCARERA RESIDUOS INDUSTRIA 208 PESCADO LICORES NEGROS 474.802 145 GLICERINA BRUTA 77.000 35 1.345.840 322 QUERCUS 283.237 76 EUCALIPTO 488.706 83 POPULUS 9.087 2 PINUS 564.994 161 SUBTOTAL 1.864.600 620 2.929.782 591 57.916 52 PARQUES Y JARDINES 208.000 56 FORSU 735.697 276 LODOS EDAR URBANOS 547.775 163 AGUAS RESIDUALES (M3) 1.380.394 44 20.159.249 3.958 SUBTOTAL BIOMASA FORESTAL FORESTALES 8% CULTIVOS ENERGÉTICOS 16% SUBTOTAL BIOMASA URBANA ACEITES VEGETALES RESIDUOS URBANOS USADOS 15% TOTAL POTENCIAL BIOMASA EN ANDALUCIA Fuente: Agencia Andaluza de la Energía. “La biomasa en Andalucía Como se puede apreciar en el gráfico 4.1., el peso lo ostentan los residuos agrícolas, seguido por los industriales. A continuación se sitúan los cultivos 209 energéticos, la fracción orgánica de los residuos urbanos, FORSU y, por último, los residuos forestales. Gráfico 4.1. DISTRIBUCIÓN DEL POTENCIAL DE BIOMASA DE ANDALUCÍA R. URBANOS 14.93% R. AGRÍCOLAS 33.39% C. ENERGÉTICOS 15.67% R. FORESTALES 8.14% R. INDUSTRIALES 25.93% R. GANADEROS 1.95% Fuente: Agencia Andaluza de la Energía. “La biomasa en Andalucía”. En los mapas siguientes se muestra, de una manera gráfica, el potencial de biomasa de Andalucía por tipos de biomasa y el total de acuerdo al cuadro anterior. 210 Figura 4.2. MAPAS DE POTENCIAL DE BIOMASA DE ANDALUCÍA 211 212 213 Los objetivos recogidos en el Plan Andaluz de Sostenibilidad Energética 2007-2013, PASENER en relación a la biomasa, se muestran en el cuadro 4.12. Cuadro 4.12. OBJETIVOS DE BIOMASA PARA ANDALUCÍA OBJETIVOS TECNOLOGÍA UNIDAD PASENER 2013 Biomasa Generación Eléctrica MW 256,00 Biogás Generación Eléctrica MW 20,10 Biomasa Térmica ktep 649,00 Biogás térmico ktep 3 ktep 2.300,00 ktep 460,00 Biocarburantes (capacidad de producción) Biocarburantes (consumo año 2010) Fuente: Agencia Andaluza de la Energía. “La biomasa en Andalucía”. 214 En cuanto a la situación de las distintas aplicaciones tecnológicas de la biomasa en Andalucía, ésta se recoge en los cuadros siguientes. En generación eléctrica con biomasa, la potencia total instalada asciende a 208,70 MW distribuidos según el cuadro 4.13. Además existen un total de 88,66 MW en fase de desarrollo en la comunidad autónoma. Además, cuenta con 15 plantas de generación de energía eléctrica con biogás, que suman un total de 21,50 MW, fundamentalmente de tratamiento de aguas residuales y de vertederos de residuos urbanos. Cuadro. 4.13. GENERACIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA EN ANDALUCÍA POTENCIA CON POTENCIA CON BIOGÁS BIOMAS (MW) (MW) ALMERÍA 1,7 CÁDIZ CÓRDOBA 4,12 82,86 GRANADA 3,05 1,22 HUELVA 67,95 0,25 JAÉN 39,00 0,80 MÁLAGA 17,19 3,54 SEVILLA ANDALUCIA 10,52 208,7 23,50 Fuente: Agencia Andaluza de la Energía. “La biomasa en Andalucía”. 215 Las plantas de biomasa existentes en Andalucía se muestran en el cuadro 4.14. Cuadro 4.14. PLANTAS DE BIOMASA EXISTENTES EN ANDALUCÍA DENOMINACIÓN Albaida Recursos Naturales 1 POTENCIA (MW) 1,7 TIPO BIOMASA PUESTA TIPO DE SERVICIO CENTRAL Almería 2004 Planta de biomasa MUNICIPIO PROVINCIA Níjar Restos invernaderos Cogeneración con Agroenergética Baena (1) 25 Orujo Baena Córdoba 2002 Bioenergética Egabrense 8 Orujillo Cabra Córdoba 2006 Planta de biomasa Severaes 0,1 Poda de Olivo Cañete de las Torres Córdoba 2009 Planta de biomasa Bioenergía Santamaría 14,3 Orujillo Lucena Córdoba 2006 Planta de biomasa 1,72 Orujillo Lucena Córdoba 2000 Planta de biomasa 5,37 Orujo Palenciana Córdoba 2007 El Tejar Autogeneración 5,65 Orujo Palenciana Córdoba 1999 Vetejar 12,9 Orujo Palenciana Córdoba 2000 Planta de biomasa Biomasa Puente Genil 9,82 Puente Genil Córdoba 2006 Planta de biomasa Ence I 40,95 Madera San Juan del Puerto Huelva 2009 Planta de biomasa Ence II 27 Madera San Juan del Puerto Huelva 2009 Tradema 2 Madera Linares Jaén 2001 Linares Jaén 2009 Planta de biomasa Jaén 2002 Planta de biomasa Jaén 2010 Planta de biomasa Hnos Santamaría Muñoz e Hijos Agroenergética de Palenciana (3) Orujillo, podas, cultivos energéticos biomasa Cogeneración con biomasa Cogeneración con biomasa Cogeneración con biomasa Cogeneración con biomasa Orujillo, residuos Bioenergética de Linares 15 agrícolas y forestales, y cultivos energéticos La Loma Aldebarán Energía del Gualdalquivir 16 Orujillo Villanueva del Arzobispo Poda de olivo, 6 residuos foretales, Andújar paja de cereal 216 Fuente de Piedra 8,04 Extragol 9,15 TOTAL MW 208,70 Orujillo Fuente de Piedra Orujillo, podas, Villanueva de cultivos energéticos Algaidas Málaga 2004 Planta de biomasa Málaga 2003 Planta de biomasa Fuente: Agencia Andaluza de la Energía. “La biomasa en Andalucía”. El cuadro 4.15. muestra la distribución de las plantas de biogás existentes en Andalucía. Cuadro 4.15. PLANTAS DE BIOGAS EXISTENTES EN ANDALUCÍA PLANTAS DE BIOGAS POTENCIA (MW) EDAR Guadalete 0,47 Vertedero Jerez de la Frontera 1,65 EDAR Golondrina 0,50 Vertedero de Montalbán 2,55 EDAR Churriana Sur 0,60 RSU Granada 0,62 EDAR Huelva 0,250 Biometanización “Sierra Sur” 0,80 EDAR del Guadalhorce 1,44 LIMASA III 2,10 TIPO RESIDUO MUNICIPIO Aguas Jerez de la residuales Frontera RSU Aguas residuales RSU Aguas residuales RSU Aguas residuales RSU Aguas residuales RSU PROVINCIA TIPO DE PUESTA EN CENTRAL35 SERVICIO Cádiz Conectada a red 2000 Cádiz Conectada a red 2010 Córdoba Córdoba Autoconsumo -- Montalbán Córdoba Conectada a red 2008 Granada Granada Autoconsumo -- Granada Granada Conectada a red 2003 Huelva Huelva Autoconsumo -- Jaén Jaén Conectada a red 2010 Málaga Málaga Autoconsumo -- Málaga Málaga Conectada a red 2006 Jerez de la. Frontera Las plantas de autoconsumo son plantas de biogás que utilizan la energía eléctrica y térmica para autoabastecimiento, por lo que no vierten electricidad a la red eléctrica 35 217 2000 (2,012 MW) 2003 (1,006 MW) RSU Cónica Montemarta 7,22 RSU Alcalá de Guadaira 2005 (1,048 MW) Sevilla Conectada a red 2006 (1,048 MW) 2009 (1,048 MW) 2010 (1,064 MW) EDAR Copero Sur 1,80 EDAR Ranilla Este 0,50 EDAR San Jerónimo Norte 0,50 EDAR Tablada Oeste 0,50 TOTAL MW 21,50 Aguas residuales Aguas residuales Aguas residuales Aguas residuales Sevilla Sevilla Autoconsumo -- Sevilla Sevilla Autoconsumo -- Sevilla Sevilla Autoconsumo -- Sevilla Sevilla Autoconsumo -- Fuente: Agencia Andaluza de la Energía. “La biomasa en Andalucía”. En relación a los usos finales térmicos de la biomasa, el cuadro 4.16., resume la situación en Andalucía distribuida por fuentes, donde se puede apreciar el peso del orujillo y del hueso de aceituna en relación a las demás fuentes de biomasa. Si esta información se desglosa por sectores y por provincias, la información se muestra en el cuadro 4.17., donde se puede comprobar como la provincia de Jaén se sitúa a la cabeza, seguidas de la de Granada y Córdoba, todas ellas de fuerte y arraiga tradición olivarera. También se puede comprobar como el sector industrial es el de mayor consumo, seguido a mucha distancia por el residencial. 218 Cuadro 4.16. CONSUMOS TÉRMICOS POR TIPOS DE BIOMASA EN ANDALUCÍA. Datos de 2010 Ktep Orujillo Hueso Leña forestal Leña Residuos Pélets, cultivos agro- briquetas, arbóreos industriales astilla Biogás Carbón TOTAL vegetal ALMERÍA 12,1 6,21 9,87 18,6 0,41 0,32 0,17 0,54 48,22 CÁDIZ 1,39 3,37 5,19 22,21 0,17 0,35 0,26 0,77 33,71 CÓRDOBA 37,38 39,65 1,68 3,03 0,75 4,9 0,05 0,27 87,71 GRANADA 21,11 32,65 18,6 44,32 1,58 3,72 0,28 0,67 122,93 HUELVA 2,2 6,2 1,7 6,02 0,68 0,31 0,13 0,48 17,72 JAEN 108,5 51,89 8,38 27,89 0,96 4,25 0,06 0,39 202,32 MÁLAGA 17,92 8,78 3,93 11,84 0,22 0,68 3,35 1,59 48,31 SEVILLA 15,8 25,08 5 15,01 4 1,69 1,7 0,49 68,77 ANDALUCÍA 216,40 173,83 54,35 148,92 8,77 16,22 6,00 5,20 629,69 Fuente: Agencia Andaluza de la Energía. “La biomasa en Andalucía”. Cuadro 4.17. CONSUMOS TÉRMICOS DE BIOMASA EN ANDALUCÍA POR SECTORES Y PROVINCIAS. Datos de 2010 PROVINCIA INDUSTRIA SERVICIOS RESIDENCIAL PRIMARIO TOTAL ALMERÍA 22,54 3,11 21,09 1,48 48,22 CÁDIZ 4,55 3,72 24,87 0,57 33,71 CÓRDOBA 60,05 4,66 21,18 1,82 87,71 GRANADA 51,42 8,82 57,15 5,54 122,93 HUELVA 5,30 1,52 7,01 3,89 17,72 JAEN 145,78 9,84 44,57 2,13 202,32 MÁLAGA 27,04 7,22 13,90 0,15 48,31 SEVILLA 39,29 3,99 18,53 6,96 68,77 ANDALUCÍA 355,97 42,88 208,30 22,54 629,69 219 El cuadro 4.18. muestra la potencia total para usos finales térmicos instalada en Andalucía, donde la provincia de Jaén ocupa el segundo lugar por detrás de Granada, con un 21,86% del total. Cuadro 4.18. CONSUMOS TÉRMICOS DE BIOMASA EN ANDALUCÍA POR SECTORES Y PROVINCIAS. Datos de 2010 PROVINCIA Potencia de biomasa térmica instalada en Andalucía 31/08/2011 (kW) ALMERÍA 28.107 CÁDIZ 14.932 CÓRDOBA 68.302 GRANADA 111.991 HUELVA 18.817 JAÉN 95.456 MÁLAGA 27.300 SEVILLA 71.811 Total 436.716 Fuente: Agencia Andaluza de la Energía. “La biomasa en Andalucía”. Finalmente, se muestra en el gráfico 4.2. la distribución provincial del consumo de biomasa en Andalucía, donde se puede corroborar la preponderancia de la provincia de Jaén. 220 Gráfico 4.2. DISTRIBUCIÓN PROVINCIAL DEL CONSUMO DE BIOMASA PARA USOS FINALES TÉRMICOS. Andalucía, 2010 Málaga 8% Almería 8% Sevilla 11% Cádiz 5% Córdoba 14% Jaén 31% Huelva 3% Granada 20% Fuente: Agencia Andaluza de la Energía. “La biomasa en Andalucía”. 221 4.6.- Instrumentos de carácter político El primero de ellos es el llamado “paquete verde” promovido por la Comisión Europea a través de la Comunicación “Energía 2020 una estrategia para una energía competitiva, sostenible y segura” (COM/2010/639). Sus principales objetivos son los tres siguientes: • Reducir un 20% la emisión de gases de efecto invernadero. • Elevar el 20% la proporción de energía procedente de fuentes renovables • Mejorar la eficiencia energética un 20% La Directiva 2009/28/CE, de 23 de abril de 2009, relativa al fomento del uso de energía procedente de fuentes renovables, se fija como objetivos generales alcanzar una cuota del 20% del consumo de energía bruto para usos finales procedente de fuentes renovables para el año 2020 en la UE, y un 10% para el sector del transporte. Esta Directiva establece un conjunto de objetivos para cada uno de los Estados Miembros. En el caso de España, los objetivos son idénticos a los recogidos en la Directiva, es decir, un 20%. También obliga a que cada Estado disponga de un plan específico para el periodo 2011-2020, que para el caso de España es el Plan Español de Energías Renovables (PER) 2011-2020, el cual recoge el objetivo para el área de biomasa, residuos y biogás, que pasa de 825 MW en 2010 a 1.350 en 2020. Además, este Plan también recoge una aportación de las energías renovables al consumo final bruto de energía del 22,70% en 2020. En 2012 esta participación sería del 15,50% y en 2016 del 18,80%. Y prevé que el mayor desarrollo de las energías renovables en España corresponda a la generación de energía eléctrica, con una previsión de aportación del 42,30% en 2020. 222 Cuadro 4.19. OBJETIVOS DE COGENERACIÓN Y GENERACIÓN PURA CON BIOMASA EN EL PERIODO 2011-2020 INCREMENTO DE POTENCIA 2011-2020 (MW) COGENERACIÓN GENERACIÓN PURAL TOTAL POTENCIA INCREMENTO TOTAL EN 2020 (MW) DE ENERGÍA 2011-2020 (MWH) ENERGÍA TOTAL EN 2020 (MWH) 299 541 1.965.546 3.247.699 518 809 3.314.351 4.852.301 817 1.350 5.279.897 8.100.000 Fuente: PER 2001-2020 El Plan Andaluz de Sostenibilidad Energética 2007-2013, PASENER, tiene dos objetivos fundamentales: • Acompasar el crecimiento económico con la cohesión social en todo el territorio, con la protección del patrimonio natural y cultural que posee Andalucía y sin generar desequilibrios en el sistema global, especialmente los asociados al gran reto que plantea el cambio climático. • Introducir en la sociedad una nueva “cultura energética” de forma que aflore una conciencia colectiva que valore la capacidad de acceso a las distintas fuentes de energía con elevados niveles de seguridad y calidad, y los efectos que ello ocasiona en el entorno, adaptando decisiones consecuentes con ello. Todo ello traducido en los siguientes objetivos de carácter energético: • Situar en el entorno del 39,1% la potencia eléctrica instalada con tecnologías renovables frente a la potencia eléctrica total. 223 • Contar con un aporte de las fuentes de energía renovable a la estructura de energía primaria, con fines exclusivamente energéticos, del 18,3%. • Situar la producción bruta de energía eléctrica con fuentes renovables en el 32,2% del consumo neto de energía eléctrica de los andaluces. • Reducir la intensidad energética primaria en un 1% respecto a la del año 2006. • Situar el consumo de biocarburantes respecto al consumo total de gasolinas y gasóleos en transporte en el 8,5%. • Reducir las emisiones de CO2 por unidad de generación eléctrica en un 20%. • Hacer que el aporte total de las fuentes de energía renovable represente el 27,7% de la energía final consumida por los andaluces Los objetivos cuantitativos por tecnologías se muestran en el cuadro 4.20., donde se puede apreciar que a la biomasa para generación de energía eléctrica le corresponden 256 MW en 2013, objetivo prácticamente alcanzado puesto que en junio de 2012 la potencia instalada en Andalucía se situaba en 209 MW según la Asociación de Promotores y Productores de Energías Renovables de Andalucía, APREAN. Para el caso de la energía eólica, la potencia instalada era de 3.129 MW, con fotovoltaica conectada a red 783 MW y la termosolar se situó en 650 MW. 224 Cuadro 4.20.- OBJETIVOS POR TECNOLOGÍAS RENOVABLES RECOGIDOS EN EL PASENER Energías renovables por tecnologías Unidad 2007 2010 2013 Hidráulica régimen especial MW 129,8 137,8 148,0 Hidráulica régimen ordinario MW 464,2 476,0 476,0 Eólica MW 1.284 4.000 4.800 Solar fotovoltaica MWp 36,2 220 400 Solar térmica M2 407.000 765.228 1.341.554 Solar termoeléctrica MW 60 250 800 Biomasa uso térmico Ktep 583,5 615,6 649,0 Biomasa generación eléctrica MW 169,9 209,9 256,0 Biomasa co-combustión MW 0 61 122 Biogás uso térmico Ktep 2,1 2,5 3,0 Biogás generación eléctrica MW 16,0 17,1 20,1 Biocarburantes consumo Ktep 50 220 460 Biocarburantes producción Ktep 263,7 2.000 2.300 Ktep 1.401 2.591 4.282 Energía primaria procedente de fuentes renovables Fuente: Plan Andaluz de Sostenibilidad Energética 2007-2013, PASENER 225 4.7.- Instrumentos legislativos y normativos El más reciente instrumento de carácter legislativo es el Real Decreto-ley 1/2012, de 27 de enero (BOE núm. 24 de 28 de enero de 2012), el cual ha supuesto un freno al desarrollo de los proyectos de energías renovables y cogeneración en general, y de biomasa para generación de energía eléctrica en particular, a pesar de no haber alcanzado los objetivos, a diferencia de otras tecnologías, especialmente la solar fotovoltaica. El marco jurídico y económico que realmente ha permitido el desarrollo de la biomasa para generación eléctrica en España, el cual emana de la Ley 54/1997, de 27 de noviembre, del sector eléctrico ha sido el RD 661/2007 varias veces citado. En su artículo 2 correspondiente al ámbito de aplicación establece una categoría denominada “instalaciones que utilicen como energía primaria alguna de las energías renovables no consumibles, biomasa o cualquier tipo de biocarburante, siempre y cuando su titular no realice actividades de producción en régimen ordinario. Esta categoría se clasifica a su vez en ocho grupos, que son los siguientes: 1. Grupo b.1. Instalaciones que utilicen como energía primaria la energía solar. Dicho grupo se subdivide en dos subgrupos: 1.1. Energía fotovoltaica 1.2. Termosolar o solar termoeléctrica 2. Grupo b.2. Instalaciones que únicamente utilicen como energía primaria la energía eólica. Al igual que el anterior se subdivide en dos subgrupos: 2.1. Ubicadas en tierra 2.2. Ubicadas en el mar territorial 3. Grupo b.3. Instalaciones que únicamente utilicen como energía primaria la geotérmica, la de las olas, la de las mareas, la de las rocas calientes y secas, la oceanotérmica y la energía de las corrientes marinas. 226 4. Grupo b.4. Centrales hidroeléctricas de potencia inferior a 10 MW. 5. Grupo b.5. Centrales hidroeléctricas de potencia superior a 10 MW pero inferior a 50 MW. 6. Grupo b.6. Centrales que utilicen como combustible principal biomasa procedente de cultivos energéticos, de residuos de las actividades agrícolas o de jardinería, o residuos de aprovechamientos forestales y otras operaciones selvícolas en las masas forestales y espacios verdes. Dicho grupo se subdivide en tres subgrupos: 6.1. Biomasa procedente de cultivos energéticos 6.2. Biomasa procedente de residuos de las actividades agrícolas o de jardinería 6.3. Biomasa procedente de residuos de aprovechamientos forestales y otras operaciones silvícolas en las masas forestales y espacios verdes 7. Grupo b.7. Centrales que utilicen como combustible principal biomasa procedente de estiércoles, biocombustibles o biogás procedente de la digestión anaeróbica de residuos agrícolas y ganaderos, de residuos biodegradables de instalaciones industriales o de lodos de depuración de aguas residuales, así como el recuperado en los vertederos controlados. Dicho grupo se subdivide en tres subgrupos: 7.1. Biogás de vertederos 7.2. Biogás generado en digestores empleando alguno de los siguientes residuos: residuos biodegradables industriales, lodos de depuradora de aguas urbanas o industriales, residuos sólidos urbanos, residuos ganaderos, agrícolas y otros para los cuales se aplique el proceso de digestión anaerobia, tanto individualmente como en co-digestión. 7.3. Estiércoles mediante combustión y biocombustibles líquidos. 227 8. Grupo b.8. Centrales que utilicen como combustible principal biomasa procedente de instalaciones industriales. Dicho grupo se subdivide en tres subgrupos: 8.1. Biomasa procedente de instalaciones industriales del sector agrícola 8.2. Biomasa procedente de instalaciones industriales del sector forestal 8.3. Licores negros de la industria papelera. Todas estas instalaciones deben cumplir con lo recogido en el Anexo II del citado Real Decreto, el cual incluye un listado de los diferentes tipos de biomasa recogidos en cada uno de los grupos anteriores. Los productos incluidos en el grupo b.6.1. se corresponden con cultivos energéticos agrícolas herbáceos o leñosos, es decir, biomasa de origen agrícola producida expresa y únicamente con fines energéticos, mediante las actividades de cultivo, cosecha, y, en caso necesario, procesado de materias primas recolectadas. También cultivos energéticos forestales, es decir, biomasa de origen forestal procedente del aprovechamiento principal de masas forestales, originadas mediante actividades de cultivo, cosecha y en caso necesario, procesado de las materias primas recolectadas y cuyo destino final sea energético. En el grupo b.6.2. quedan incluidos los residuos de actividades agrícolas, es decir, biomasa residual originada durante el cultivo y primera transformación de productos agrícolas, incluyendo la procedente de procesos de eliminación de la cáscara cuando corresponda. Se incluyen los siguientes: residuos agrícolas herbáceos, de cultivo de cereales (pajas y otros), de producciones hortícolas (residuos de cultivo de invernadero), de cultivos para fines agroindustriales tales como algodón o lino, de cultivos de legumbres y semillas oleaginosas y residuos agrícolas leñosos procedentes de las podas de especies agrícolas leñosas como olivar, vides y frutales. También están incluidos los residuos de 228 actividades de jardinería generada en la limpieza y mantenimiento de los jardines. En el grupo b.6.3. están incluidos los residuos de aprovechamientos forestales y otras operaciones silvícolas en las masas forestales y espacios verdes; y la biomasa residual producida durante la realización de cualquier tipo de tratamiento o aprovechamiento silvícola de masas forestales, incluidas cortezas, así como la generada en la limpieza y mantenimiento de los espacios verdes. Los productos incluidos en el grupo b.7. son el biogás de vertederos (b.7.1.) y el procedente de la digestión anaerobia en digestor de los siguientes residuos, tanto individualmente como en co-digestión (grupo b.7.2.): residuos biodegradables industriales, lodos de depuradora de aguas residuales urbanas o industriales, residuos sólidos urbanos, residuos ganaderos, residuos agrícolas y otros a los cuales sea aplicable dicho procedimiento de digestión anaeróbica. En el grupo b.7.3. están incluidos los estiércoles mediante combustión y los biocombustibles líquidos y subproductos derivados de su proceso productivo. En el grupo b.8. se incluye la biomasa procedente de instalaciones industriales del sector agrícola. En el subgrupo b.8.1. se incluyen los residuos de la producción de aceite de oliva y aceite de orujo de oliva, residuos de la producción de aceitunas, de la extracción de aceites de semillas, de la industria vinícola y alcoholera, de industrias conserveras, de la industria de la cerveza y la malta, de la producción de frutos secos, de la producción de arroz, del procesado de algas y otros residuos agroindustriales. En el b.8.2. la biomasa procedente de instalaciones industriales del sector forestal: residuos de industrias forestales de primera transformación, de las industrias forestales de segunda transformación (mueble, puertas, carpintería), otros residuos de industrias forestales y residuos procedentes de la recuperación de materiales lignocelulósicos materiales de construcción, etc.) 229 (envases, palets, muebles, Finalmente, en el subgrupo b.8.3. se incluyen los licores negros de la industria papelera. En las instalaciones de co-combustión se pueden incluir cualquiera de los residuos indicados en los grupos b.6, b.7 y b.8 anteriores cuando estos sean empleados en centrales térmicas convencionales mediante tecnologías de cocombustión. No se considera biomasa o biogás los combustibles fósiles, incluyendo la turba, y sus productos y subproductos, los residuos de madera tratados químicamente durante procesos industriales de producción, mezclados con productos químicos de origen inorgánico y de cualquier otro tipo si su uso térmico está prohibido por la legislación vigente. Tampoco cualquier tipo de biomasa o biogás contaminado con sustancias tóxicas o metales pesados, así como papel, cartón, textiles y cadáveres animales o partes de los mismos, cuando la legislación prevea una gestión de estos residuos diferente a la valorización energética. En relación a la eficiencia energética, los sistemas de generación de energía eléctrica a condensación con biomasa o biogás, deberán alcanzar los siguientes niveles de eficiencia energética para la generación bruta de energía eléctrica: • Un mínimo del 18% para potencias de hasta 5 MW • Un mínimo del 20% para potencias entre 5 y 10 MW • Un mínimo del 22% para potencias entre 10 y 20 MW • Un mínimo del 24% para potencias entre 20 y 50 MW El cálculo de la eficiencia se realizará con arreglo a la siguiente fórmula: Eficiencia = (PEB) x 0,086 /EPC 230 Donde: • PEB es la producción eléctrica bruta anual en MWh • EPC es la energía primaria consumida, en toneladas equivalentes de petróleo, contabilizando a PCI (Poder Calorífico Inferior) El RD 1966/2011 por el que se regula la conexión a red de instalaciones de producción de energía eléctrica de pequeña potencia (BOE núm. 295, de 8 de diciembre de 2011) establece un procedimiento abreviado para la conexión eléctrica a la red de instalaciones de menos de 10 kW de potencia. El punto de evacuación, además, se podrá realizar en baja tensión donde exista un suministro de potencia igual o superior (artículo 9). Está pendiente de publicación el procedimiento para la regulación de la energía eléctrica generada en el interior de la red del consumidor para consumo propio (“autoconsumo”) tal y como se establece en el artículo 18. Se trata, por tanto, de un sistema de compensación de saldos de energía de manera instantánea o diferida, que permite a los usuarios la producción individual de energía para su propio consumo, compatibilizando su curva de producción con su curva de demanda. Permite verter a la red el exceso de energía generado con la finalidad de poder hacer uso del mismo en otro momento. Este exceso podrá ser cedido por el usuario a la compañía distribuidora de energía eléctrica sin recibir contraprestación económica alguna, pero sí unos derechos de consumo diferido que podrán ser utilizados hasta 12 meses después de la generación. A modo de resumen, las principales características de esta nueva regulación son: • La potencia contratada deberá ser menor a 100 kW. • La tramitación administrativa y ante la compañía eléctrica será simple. 231 • Se utilizará la propia red del usuario para gestionar los excesos de energía sin existir posibilidad de almacenamiento. • Se reducirán las pérdidas. • Existe una compensación de excedentes y no un pago. • No existe tarifa regulada y el precio será pactado con la compañía distribuidora. • Los usuarios son considerados como consumidores y no como productores. Las principales tecnologías beneficiadas con este nuevo Real Decreto son: • Las contempladas en la categoría b) y c) del RD 661/2007 de potencia no superior a 100 kW (solar fotovoltaica y mini eólica) • Las de potencia no superior a 1.000 kW de las categorías a) y los subgrupos b.6, b.7 y b.8 (micro cogeneración y biomasa) Otra norma que puede potenciar el empleo de biomasa en los edificios, con las ventajas que ello conlleva, es el Código Técnico de la Edificación (RD 314/2006), que es el marco normativo que establece las exigencias que deben cumplir los edificios en relación con los requisitos básicos de seguridad y habitabilidad establecidos en la Ley de Ordenación de la Edificación, LOE36. Uno de los llamados Documentos Básicos, que contiene hace referencia al ahorro de energía y a la aplicación de energías renovables en los edificios es el denominado HE, el cual, a su vez, está compuesto por dos secciones, la HE 4 correspondiente a la contribución solar mínima de agua caliente sanitaria, compatible también con el uso de la biomasa; y la HE 5 referida a la contribución fotovoltaica mínima de energía eléctrica. 36 Ley 38/1999, de 5 de noviembre, BOE núm. 266 de 6 de noviembre de 1999. 232 La sección HE 4 obliga a que en los edificios nuevos o en los que se rehabiliten, cuando exista una demanda de agua caliente sanitaria, esta sea cubierta parcialmente mediante la incorporación de sistemas de captación, almacenamiento y utilización de energía solar térmica de baja temperatura. Esta obligación también se extiende a la climatización de piscinas. Esta contribución mínima para el caso de la provincia de Jaén es del 70%. Aunque no esté recogida explícitamente en el Código, la biomasa es aplicable donde lo sea la solar térmica para satisfacer parcial o totalmente la demanda de agua caliente sanitaria. Además, como ya se ha comentado, el uso de biomasa en los edificios puede suponer las siguientes ventajas para los mismos en relación a las fuentes fósiles o la electricidad: • Menor coste de explotación para el usuario final • Emisiones neutras de CO2 y, por ende, elevada calificación energética • Evita la instalación, si se quiere, del correspondiente sistema de energía solar térmica, con el que es compatible, puesto que puede satisfacer la demanda de agua caliente y de calefacción • La operación y el mantenimiento son relativamente sencillos • Es una tecnología versátil porque permite producir calor, frío e, incluso, electricidad. Una directiva que también puede contribuir al desarrollo de la biomasa en los edificios es la 2010/31/UE relativa a la eficiencia energética de los edificios, la cual define en su artículo número 2 a los llamados edificios de consumo energético casi nulo, como aquellos con un máximo nivel de eficiencia energética y una elevada contribución de fuentes de energía de origen renovable. Establece que para el 31 de diciembre de 2020 todos los nuevos edificios construidos en la UE deberán tener esa consideración, y adelanta el plazo a 2018 para los correspondientes a la administración pública. 233 Una normativa específica que afecta al olivar es la Ley 5/2011, de 6 de octubre, del olivar en Andalucía. (BOJA núm. 205, de 19 de octubre de 2011) tiene por objeto establecer el marco normativo para el mantenimiento y la mejora del cultivo del olivar en Andalucía, el desarrollo sostenible de sus territorios y el fomento de la calidad y promoción de sus productos. En su artículo 3, relativo a fines de la Ley, recoge lo siguiente: • Mantener la sostenibilidad ambiental del cultivo del olivar. • Fomentar el uso eficiente del agua y la energía y la utilización de energías renovables, en particular la biomasa, así como potenciar la consolidación en el sector olivarero de un modelo eficiente y competitivo de explotaciones agrarias e industrias de transformación. • Fomentar el uso racional de los subproductos del sector olivarero para el aumento de la renta en las zonas de cultivo. En su artículo 25, relativo a eficiencia energética y energías renovables, la Ley establece que se deberán fomentar las actuaciones tendentes a conseguir el ahorro y la mejora de la eficiencia energética en las explotaciones olivareras y en la industria de transformación, y se promoverán medidas que tengan por finalidad el aprovechamiento energético de los residuos agrícolas e industriales, la producción de energía a partir de la biomasa y la producción y uso de energías renovables, considerando particularmente la eficiencia de los ciclos de los recursos en las explotaciones olivareras. 234 4.8.- Instrumentos de carácter económico A nivel nacional cabe mencionar los instrumentos financieros impulsados por el Ministerio de Industria, Energía y Turismo a través del I.D.A.E., entre los que se encuentran la 2ª edición del BIOMCASA y el Programa GIT para la instalación de grandes instalaciones térmicas en la edificación (biomasa, solar y geotermia). A nivel andaluz, el principal instrumento de apoyo económico al desarrollo de las energías renovables en general, y a la biomasa en particular, es la Orden anteriormente citada para el desarrollo energético sostenible de Andalucía. En la cual se establecen diferentes categorías de proyectos energéticos susceptibles de ser incentivados: • Proyectos de ahorro y eficiencia energética en edificios y sus instalaciones: o Soluciones constructivas que reduzcan la demanda energética de los edificios existentes o Construcción de nuevos edificios con elevada calificación energética A ó B o Sustitución o mejora de equipos e instalaciones térmicas o de control de los edificios existentes por otras que permitan obtener una mayor eficiencia energética, incorporación de sistemas de enfriamiento gratuito por aire exterior, o de aplicación de TICs (Tecnologías de la Información y Comunicación) para el mejor control del gasto energético y que afecten a uno o varios edificios o Nuevas instalaciones de sistemas centralizados de calefacción y refrigeración urbana o de distrito que den servicio a varios edificios, así como la reforma y ampliación de los existentes o Mejora de la eficiencia energética de las instalaciones de iluminación interior de los edificios existentes 235 • Proyectos de ahorro y eficiencia en instalaciones de alumbrado exterior, incluido la señalización semafórica. • Proyectos de ahorro y eficiencia energética en transporte. • Sustitución de combustibles y energías tradicionales por otros menos contaminantes que vaya acompañada de una mejora de la eficiencia energética de al menos un 5%. En materia de generación de energía eléctrica con biomasa, los proyectos no pueden estar acogidos al régimen especial para poder optar al incentivo. Se incluye también una categoría nueva de proyectos que afectan a la biomasa y que es la instalación de sistemas híbridas biomasa, biogás o biocarburantes junto a termosolar. En relación a la producción térmica a partir de fuentes renovables, incluida la biomasa, se contemplan los siguientes tipos de proyectos: • Instalaciones de biomasa, biogás o biocarburantes para usos térmicos con una potencia superior a 5 kW térmicos cualquiera que sea su uso. Para instalaciones no acogidas al RITE (Reglamente de Instalaciones Térmicas de los Edificios) se distinguen los siguientes grupos: o Instalaciones de potencia igual o inferior a 1.158 kW con un rendimiento mínimo del 70% medido éste como cociente entre la energía útil producida expresada en Julios y el consumo de combustible medido por su PCI. o Instalaciones de potencia térmica superior a 1.158 kW con un rendimiento mínimo superior al 75%. o Para instalaciones de biomasa consistentes en generadores de aire caliente, hornos y secaderos, instalaciones de gasificación (gasificador y equipo de recuperación térmica) e instalaciones de mecanización (digestor anaerobio y equipo de aprovechamiento de biogás) no se exigirá un rendimiento mínimo. 236 • Instalaciones solares térmicas para calentamiento de un fluido • Instalaciones de intercambio geotérmico • Instalaciones mixtas • Sistemas de climatización (frío y calor) y agua caliente sanitaria para abastecimiento de energía térmica a los edificios. Otra categoría de proyectos es la producción conjunta de electricidad y calor a partir de renovables, incluida la biomasa. En este caso las instalaciones deberán cumplir con el llamado Rendimiento Eléctrico Equivalente (REE), el cual debe ser superior al 30%, salvo para aquellas que utilicen como combustible principal estiércoles, biocarburantes o biogás, en cuyo caso deberá superar el 50%. REE = E / (Q-(V/Ref H)) Donde: • Q es el consumo de energía primaria medio por el PCI de los combustibles utilizados • E es la energía eléctrica generada medida en bornes de alternador y expresada como energía térmica, con un equivalente de 1 kWh=860 kcal • V es la producción de calor útil • Ref H es el valor de referencia del rendimiento para la producción separada de calor que aparece publicado en el Anexo II de la Decisión de la Comisión de 21 de diciembre de 2006, por la que se establecen valores de referencia armonizados para la producción por separado de electricidad y calor, de conformidad con lo dispuesto en la Directiva 237 2004/8/CE del Parlamento Europeo y del Consejo o norma que lo trasponga. Finalmente, contempla una categoría específica para la biomasa que es la producción y logística de biomasa y biocombustibles, entre los que se encuentran los siguientes: • Plantas de fabricación de biocarburantes puros, siempre y cuando su capacidad sea superior a 5.000 tep/año y al menos un 15% de la materia prima sea cultivos energéticos. • Plantas de fabricación de biocarburantes puros de segunda generación de capacidad superior a 1.000 tep/año. • Plantas de producción de biocombustibles sólidos y para tratamiento de biomasa para uso energético de capacidad superior a 1.000 tep/año. • Proyectos de recogida, pretratamiento, transporte y distribución hasta el centro de transformación energética de la biomasa, biogás y aceites usados para su uso como biocarburantes. • Proyectos de infraestructuras móviles o fijas para la distribución hasta el usuario final de biocombustibles sólidos, líquidos o gaseosos. Por último, cabe destacar el Fondo para el impulso de las energías renovables y la eficiencia energética de la Junta de Andalucía destinado a financiar actuaciones viables en materia de energías renovables y eficiencia energética, apoyando, preferentemente, los siguientes tipos de proyectos: • Mejora de la eficiencia energética en procesos productivos o equipos • Reducción del consumo energético en los edificios y sus instalaciones • El ahorro energético en flotas de transporte de pasajeros o mercancías, incluyendo las inversiones en sistemas tecnológicos y aplicaciones 238 • La generación y uso de energía térmica mediante instalaciones de energías renovables • Los sistemas de cogeneración y trigeneración y las instalaciones para el aprovechamiento de los calores residuales • Los sistemas de producción de agua caliente sanitaria y climatización mediante energías renovables. • Las instalaciones de generación de energía eléctrica conectada a la red de hasta 2 MW de potencia • Los proyectos presentados por Empresas de Servicios Energéticos (ESEs) 239 5.- CONVERSIÓN ENERGÉTICA DE LA BIOMASA. LA GASIFICACIÓN 5.1.- Introducción La energía de la biomasa procede de la energía química acumulada en los enlaces atómicos intermoleculares de los compuestos que la constituyen, por tanto, se puede afirmar que la energía de la biomasa procede en última instancia del sol. Mediante la fotosíntesis, las células vegetales utilizan la radiación solar para formar sustancias orgánicas a partir de otras más simples, del agua y del dióxido de carbono (CO2) presente en el aire: hidratos de carbono, proteínas, lípidos, etc. [18]. El reino animal incorpora, transforma y modifica dicha energía, generando subproductos que carecen de valor para la cadena nutritiva o que sirven para la fabricación de productos comerciales, pero que constituyen una fuente de energía a través de valorizaciones físicas, químicas o biológicas. 240 El esquema de la figura 5.1. muestra los principales procesos de transformación de la biomasa residual, los cuales se pueden dividir en cuatro grandes bloques. Debido a la heterogeneidad de la biomasa como tal, su caracterización es necesaria para obtener una previsión de su comportamiento ante las diferentes etapas que tienen lugar durante su aprovechamiento energético. Las principales propiedades de la biomasa pueden dividirse en físicas, químicas y térmicas o energéticas, tal y como se muestra en el cuadro 5.1. Las principales propiedades físicas son: • Densidad aparente y real. La densidad real es la propia de la materia, mientras que la aparente tiene que ver con el modo en que cada biocombustible sólido tiende a llenar su volumen. En el caso de la madera, la densidad real es mucho mayor que la aparente. ρ aparente = Masa de materia / (volumen de materia + volumen de aire en huecos) ρ real = Masa de materia / volumen de materia • Humedad. Es la cantidad de agua contenida en la biomasa, tanto en la superficie como embebida en la misma. La primera se puede eliminar relativamente fácil mediante secado, la otra, llamada inherente, se define como el porcentaje de pérdida de peso que experimenta una muestra de biomasa secada al aire cuando se calienta a 105 º C hasta que alcanza un peso constante. En cualquier caso, y tal y como ya se ha apuntado, interesa utilizar biomasa seca, puesto que el coste de su transporte será menor, su molienda más sencilla y la energía disponible mayor. En el cuadro siguiente ser recogen algunos ejemplos de intervalos de humedad para diferentes tipos de biomasa. 241 Figura 5.1.- PROCESOS DE TRANSFORMACIÓN DE LA BIOMASA RESIDUAL [19] • Distribución granulométrica. De manera general, hace referencia al formato como se presenta la biomasa para su uso energético: ramas, astillas, polvo, pacas,… Esta caracterización se realiza por cribado sucesivo de la biomasa. Los resultados se suelen presentar como variables estadísticas (tamaño promedio y dispersión), como porcentajes en masa de cada uno de los intervalos de cribado o como frecuencia acumulada. 242 Cuadro 5.1.- PARÁMETROS FÍSICOS, QUÍMICOS Y ENERGÉTICOS DE LA BIOMASA [11] Influyen en la selección y Densidad real y aparente Humedad FÍSICOS el diseño de los equipos de manejo del material y la necesidad de Distribución granulométrica pretratamiento Análisis elemental Determinan el Análisis inmediato QUÍMICOS Componentes estructurales comportamiento de la biomasa durante los procesos de Composición de cenizas transformación Fusibilidad de cenizas ENERGÉTICOS Poder calorífico Determina la cantidad de energía aprovechable Cuadro 5.2.- INTERVALOS DE HUMEDAD DE ALGUNOS TIPOS DE BIOMASA SÓLIDA [11] TIPO DE BIOMASA CONTENIDO EN HUMEDAD (% EN PESO) Cortezas 25-75 Madera residual gruesa 30-60 Virutas 16-40 Serrín 25-40 Polvo de lijadora 2-8 Pasto empacado 10-15 243 Las propiedades químicas pueden referirse a la composición de los elementos que constituyen la biomasa, principalmente carbono, nitrógeno, hidrógeno, oxígeno y azufre; y/o componentes moleculares principales (lignina, hemicelulosa y celulosa). El contenido en cenizas (elementos inorgánicos) y su comportamiento también suele ser un parámetro importante. Las más usuales son: • Análisis elemental. Permite establecer el porcentaje en peso de los principales elementos con mayor presencia en la estructura molecular de la materia orgánica: carbono C, hidrógeno H, nitrógeno N, oxígeno O y azufre, S. • Análisis inmediato. Proporciona los contenidos de humedad, cenizas, materia volátil y carbono fijo de la biomasa, expresados como porcentaje en peso. Sirve para identificar la fracción de la biomasa en la que se encuentra almacenada su energía química (compuestos volátiles y carbono fijo) y la fracción inerte (humedad y cenizas). Este análisis permite estimar el comportamiento a prior de un combustible: o La materia volátil es la porción de combustible que se libera en forma de gases y vapores (hidrocarburos) al descomponerse térmicamente la materia orgánica. o El carbono fijo y las cenizas son las fracciones que restan una vez se ha desprendido la materia volátil. o Las cenizas son los residuos inorgánicos que quedan tras la combustión del carbono fijo y dependen de la fuente de biomasa y los métodos de recolección utilizados. • Componentes estructurales. Por lo general, la biomasa sólida está principalmente constituida por hidratos de carbono, si bien en función de la fracción predominante, o de interés para su utilización final, se suele distinguir la biomasa en: 244 o Biomasa lignocelulósica. Aquella en la que predominan la celulosa, hemicelulosa y lignina, principales componentes de la estructura de los vegetales. Por ejemplo los restos de poda de olivar. o Biomasa amilácea. En ella los hidratos de carbono se encuentran en forma de polisacáridos de reserva, como el almidón o la inulina. Es el caso del grano de cereal o la patata. o Biomasa azucarada. El componente hidrocarbonatazo predominante está constituido por azúcares, bien sean monosacáridos (glucosa o fructosa) o disacáridos (sacarosa). Caso de la remolacha o la caña de azúcar. o Biomasa oleaginosa. El componente principal, o al menos el más representativo para su uso final, son los lípidos, básicamente aceites o gomas. Las semillas de girasol, de colza o las aceitunas son casos representativos. • Composición y fusibilidad de las cenizas. La biomasa procede de tejidos vegetales, animales o materia orgánica transformada por ellos o por procesos artificiales posteriores. Los seres vivos, además de absorber los componentes principales (C, H, O y N) otra serie de elementos inorgánicos tales como calcio, sodio, potasio, hierro o silicio, entre otros. Además la biomasa al ser recolectada suele mezclarse con tierra y polvo del suelo. Al producirse la combustión parte de los compuestos inorgánicos volatilizan, mientras que otros pasan a formar parte de las cenizas sólidas, que pueden escaparse en la corriente de gas (cenizas volantes) o ser recogidas en el fondo del reactor o caldera. La materia inorgánica extrínseca queda generalmente como ceniza sólida, la cual contiene elementos inorgánicos en forma de minerales (carbonatos, silicatos, aluminosilicatos, etc.) o en formas vítreas con estructura amorfa. Las cenizas generadas durante la valorización energética de la biomasa pueden depositarse causando la obstrucción de los pasos de 245 gases, o sinterizar en forma de fundidos en paredes y sistemas de evacuación. En cualquier caso, suelen ser aprovechadas en agricultura o en obras públicas para taludes de carreteras. • Poder calorífico. Es la energía química del combustible que puede ser transformada directamente en energía térmica mediante un proceso de oxidación. Esta propiedad suele expresarse en unidades de energía por unidades de masa (generalmente kJ/kg, MJ/kg o kcal/kg). Su valor se determina experimentalmente mediante un equipo denominado bomba de calor. Existen dos formas de expresar el poder calorífico de un combustible. Si tras la combustión el agua formada en los gases, proveniente de la humedad o de la oxidación del hidrógeno, se encuentra en forma líquida, se obtiene el Poder Calorífico Superior, PCS. Si por el contrario esta agua permanece en forma de vapor se obtiene el Poder Calorífico Inferior, PCI. Pueden expresarse por unidad de combustible húmedo (a una determinada humedad) o seco (humedad cero). 5.1.1.- Procesos de conversión física En general, la biomasa sólida tal y como se suele presentar, no posee unas características idóneas para su valorización energética debido a su baja densidad, su variable contenido en humedad y su heterogeneidad. Es por ello, por lo que se suele someter a procesos de tipo físico que no varíen sus propiedades químicas y que pueden ser de los tres tipos siguientes: • Reducción granulométrica (astillado, picado, fragmentado, triturado, molienda,…), cuyo principal objetivo es reducir el tamaño final de las piezas, mayor para el triturado y menor para la molienda. En función del tipo de biomasa y de la aplicación final de la biomasa se empleará uno u otro proceso, pudiendo diferenciarse entre los cuatros siguientes: 246 o Disgregación. Permite desintegrar el material empacado en las piezas que lo conforman. Es el caso de algunas plantas de biomasa que utilizan paja de cereal como combustible, como por ejemplo la de Sangüesa, en Navarra, de la compañía ACCIONA. o Triturado. Consiste en transformar piezas de biomasa de grandes dimensiones, como troncos, tocones o ramas en otras más pequeñas. Puede clasificarse en de baja velocidad (máquinas rompedoras o desfibradoras) o de alta velocidad (trituradoras de martillos). o Astillado. Se lleva a cabo mediante sistemas de rotación rápida que transforman biomasa de tamaño intermedio, como ramas o troncos de pequeño diámetro, en astillas de pocos centímetros. Es el proceso utilizado con los restos de las podas de olivar. o Molienda. Es aplicable cuando se quieren fabricar productos tales como pélets o briquetas o cuando la tecnología de combustión así lo existe, como por ejemplo en algunas plantas de biomasa que utilizan quemadores pulverizados. La presencia de impurezas y elementos extraños en la biomasa tales como piedras, y una elevada humedad son contraproducentes. En cambio, si la humedad es demasiado baja (< 10%) se puede generar una gran cantidad de polvo que es necesario eliminar. • Secado. Los biocombustibles sólidos se caracterizan por poseer una humedad elevada que depende del momento en que sean extraídos de las explotaciones agrarias. En general, la humedad depende del clima, de la especie, de la estación del año, del momento de recolección, del tiempo de almacenamiento y de las condiciones del mismo. Por lo general una biomasa sólida debe mantener en un rango del 10% al 60% de humedad, si bien es recomendable que no supere el 20%. El secado de la biomasa puede realizarse de manera natural, amontonando la biomasa en pilas, o bien de manera forzada, con sistemas de secado industriales: 247 o El natural consiste en dejar que el material pierda humedad hacia el ambiente que le rodea, en función de unas determinadas condiciones climáticas (humedad relativa baja, ausencia de lluvias y elevada radiación solar). Se pueden alcanzar reducciones de humedad de hasta el 20-30% aproximadamente siempre y cuando se diseñen adecuadamente las pilas de material, que en el caso de la astillas pueden ser de tipo cónico o rectangular. En el caso de almacenamiento de material particulado, suele presentarse un fenómeno, denominado termogénesis que contribuye al secado debido al progresivo aumento de la temperatura y la evaporación del agua del montón. El proceso consiste en la degradación de la biomasa por la acción de microorganismos (bacterias y hongos) y por la oxidación química e hidrólisis ácida de los componentes de la celulosa. En caso de almacenamiento de material muy fino si el paso de aire resulta impedido, el incremento de temperatura puede llegar a provocar procesos de auto ignición en las pilas. o El secado forzado consiste en un aporte de energía externo suministrado normalmente en forma de calor. Según el método de transferencia de calor al material húmedo, los equipos se clasifican en: directos e indirectos. • Densificado. Este tipo de procesos suelen dotar a la biomasa de mejores propiedades para un uso posterior, aumentando la relación superficievolumen, la homogeneidad y la densidad aparente, reduciendo los costes de transporte y mejorando el manejo, si bien llevan asociados mayores costes energéticos [13]. Se puede hablar de tres tipos de procesos de densificación: o Empaquetado. Mediante este proceso se busca ahorrar costes en el transporte y en el almacenamiento. En el caso de residuos agrícolas la compactación se realiza mediante empacadoras similares a las utilizadas para la paja de cereal o el cañote de maíz. Para los residuos 248 forestales existe maquinaria que permite circular por el bosque, recoger, compactar y atar la biomasa en forma de pacas. o Peletizado y briquetado. Para la fabricación de pélets y briquetas se utilizan materiales tales como serrines, virutas o polvos de lijado, cáscaras de arroz, etc. Se requiere aplicar al material una serie de tratamientos previos tales como secado, astillado y molienda. Posteriormente, el material es calentado y comprimido, permitiendo así la aglomeración de las partículas. El conjunto de operaciones aplicadas implican que los costes de producción sean más elevados que en relación a las astillas, sin embargo los pélets son más valorados en el mercado por su mayor densidad y menor contenido en cenizas, pudiendo alcanzar valores del orden de 220 €/Tm, frente a los 100 €/Tm o incluso menos para las astillas. Las briquetas son similares a los pélets pero de mayor diámetro y longitud, y con una densidad del orden de 900 kg/m3. En cambio los pélets son cilindros de pequeñas dimensiones, de entre 6 a 30 mm de diámetro y de 10 a 70 cm de longitud, con densidades aparentes del orden de 600 kg/m3, frente a los 200 ó 300 kg/m3 de las astillas. Otra de las ventajas de la peletización es la posibilidad de automatizar los sistemas de alimentación. En el esquema de la figura 5.2. se puede apreciar una visión global del peletizado de biomasa [20]. A continuación se muestran unas fotografías de ambos biocombustibles sólidos. 249 Fotografía nº 26. MUESTRA DE PÉLETS Fotografía Nº 27.- BRIQUETA CILÍNDRICA HUECA 250 Fotografía nº 28.- BRIQUETAS CILÍNDRICA MACIZAS o Torrefacción. Es un proceso novedoso en el campo del aprovechamiento energético de los biocombustibles sólidos. Consiste en un calentamiento que busca generar cambios físico-químicos en el material tratado para dotarlo de mejores propiedades. El caso más conocido es el del café. Por ejemplo, la biomasa torrefactada pierde humedad y se convierte en higroscópica (no absorbe agua) pudiendo, por tanto, ser almacenada al aire libre. También el material obtenido resulta estable frente a la degradación de microorganismos. La densidad energética por unidad de volumen aumenta, disminuyendo como consecuencia el coste de transporte. En definitiva, se trata de una tecnología en fase de desarrollo pero que conlleva innumerables ventajas para la biomasa. 251 Figura 5.2.- ESQUEMA GENERAL DEL PROCESO DE PELETIZACIÓN [12] 5.1.2.- Procesos de conversión termoquímica En general, la biomasa presenta una composición química muy adecuada para ser sometida a un aprovechamiento termoquímico. Está formada básicamente por carbono (50-60%), oxígeno (30-40%), hidrógeno (5-7%), poco nitrógeno (< 0.5%) y carece prácticamente de azufre. Además presenta un elevado porcentaje en materia volátil (75-85%), y muy bajo en cenizas (< 5%), además de tener un elevado poder calorífico, como ya se ha visto. Se trata de procesos que tienen por finalidad someter a la biomasa a elevadas temperaturas (entre 300 y 1.500 ºC) en atmósferas controladas, siendo los más usuales la combustión, la gasificación y la pirólisis. Son procesos pues de la misma naturaleza e íntimamente relacionados, su principal diferencia radica en la atmósfera en la que se llevan a cabo. Los productos resultantes suelen ser líquidos (aceites pirolíticos), gases de combustión y syngas (gas sintético o de gasificación) y sólidos (residuo carbonoso o char y carbón). El siguiente ejemplo puede ilustrar perfectamente la relación entre los tres procesos. La ignición de una simple cerilla comienza con la generación de una muy alta temperatura en la cabeza de la misma, que hace que la madera más 252 cercana se caliente, descomponiéndose sus fracciones en lo que podría denominarse craqueo químico o pirólisis. Los compuestos siguen rompiéndose como consecuencia de la temperatura, formando productos cada vez de menor tamaño hasta que se hacen estables en forma de gas a la temperatura de la zona. Los gases escapan y queda un residuo carbonoso o char. Se puede afirmar que se ha producido la gasificación de la madera en tanto se han obtenido unos gases combustibles y un residuo constituido fundamentalmente por carbono. Finalmente, lo que realmente ocurre durante la combustión de una cerilla es que los gases volatilizados al entrar en contacto con el oxígeno del aire a una temperatura superior a la de su punto de inflamación se oxidan rápidamente. Los volátiles al quemarse son los que forman la llama. La madera de la cerilla se transforma en carbono y cenizas. Por tanto, y tal y como se ha comentado, la pirólisis, la gasificación y la combustión son procesos similares que difieren únicamente en función de la atmósfera en la que se llevan a cabo, la cual debe ser inerte, reactiva (sin generar la combustión completa) y oxidante respectivamente. En la figura 5.3. se ilustra lo anteriormente expuesto. Figura 5.3.- IGNICIÓN DE UNA CERRILLA Fuente: TAIM WESER 253 A continuación se describe someramente cada uno de ellos. La combustión es el proceso más desarrollado y difundido para el aprovechamiento energético de la biomasa, y consiste en su oxidación completa, a partir de una cierta temperatura, por medio del oxígeno contenido en el aire, liberando agua y dióxido de carbono. Como subproductos del proceso se obtienen cenizas formadas por componentes no combustibles y por productos de la combustión incompleta o inquemados. Mediante la combustión se puede obtener calor para usos finales domésticos o industriales (calefacción, secado, frío mediante absorción, agua caliente sanitaria y para procesos industriales, etc.), o generación de energía eléctrica mediante el calentamiento de un fluido de trabajo en una caldera, expandiendo el vapor generado en una turbina de vapor ya sea este en un Ciclo Ranking convencional u orgánico, también llamado ORC en terminología anglosajona (Organic Rankine Cicle). Figura 5. 4.- REPRESENTACIÓN GRÁFICA DE LOS CICLOS DE POTENCIA BASADOS EN TURBINAS DE VAPOR Fuente: Elaboración propia Las principales variables que intervienen en la combustión son la temperatura, el tiempo y la turbulencia. Las tecnologías de combustión más 254 empleadas son lecho fijo o parrilla (caso de la planta de biomasa de la firma Bioeléctrica de Linares en el municipio de Linares-Baeza, Jaén) y lecho fluidizado (primer proyecto de biomasa en Andalucía impulsado por la cooperativa de 2º grado Oleícola el Tejar, en Palenciana, provincia de Córdoba), si bien existe un tipo de quemadores que pulverizan el combustible, caso de la planta de biomasa de Energía La Loma en Villanueva del Arzobispo, Jaén. Por último, cabe citar una tecnología que se está implantando en España y es la llamada co-combustión de carbón y biomasa, la cual consiste en la sustitución parcial de carbón por biomasa en centrales térmicas ya en funcionamiento. La gasificación, como se verá más adelante, es una combustión incompleta que se produce al someter a la biomasa a una temperatura de unos 1.000 ºC en una atmósfera pobre de oxígeno. Como resultado de la misma se obtiene un gas sintético o syngas, compuesto básicamente por monóxido y dióxido de carbono, hidrógeno, metano y otros hidrocarburos, y un subproducto sólido carbonoso, además de alquitranes y agua. El syngas producido puede ser introducido, previo tratamiento y limpieza, en motores o turbinas de gas para la generación de energía térmica y eléctrica. Tras el calentamiento inicial que persigue el craqueo de los componentes de la biomasa (pirólisis) las fracciones orgánicas ligeras se escapan de la materia sólida y se recombinan, gracias a las altas temperaturas, con el agente gasificante, que puede ser aire, oxígeno, vapor de agua o hidrógeno. Existen distintos tipos de gasificadores, los cuales se clasifican en función de cómo se relacionan en el interior del gasificador el flujo del agente gasificante y los sólidos, con tres configuraciones típicas: updraft, downdraft y lecho fluidizado. En los últimos años esta tecnología ha evolucionado satisfactoriamente en plantas de pequeña potencia (< 2 MWe) sin embargo todavía no está en condiciones de competitividad económica, pudiendo afirmarse que se encuentra en fase pre-comercial. 255 La principal ventaja de esta tecnología frente a las demás es la obtención de un combustible versátil que puede ser usado en máquinas térmicas pudiendo sustituir, total o parcialmente, a combustibles fósiles tradicionales. Como mayor inconveniente de esta tecnología cabe citar la calidad del syngas obtenido de cara a su posterior aprovechamiento en motores o calderas, que obliga a ser sometido a procesos costosos que pueden hacer inviables las inversiones. Figura 5.5.-. DIAGRAMA DE LAS FASES EXISTENTES EN LOS PROCESOS DE GASIFICACIÓN BIOMASA Calentamiento Vapor de agua Subproducto seco Calentamiento Carbono fijo y cenizas Volátiles Combustión parcial Reducción Agente gasificante Cenizas Syngas Tars Fuente: Elaboración propia La pirólisis es una descomposición de la materia orgánica por medio de la aportación de energía en forma de calor en una atmósfera inerte o en el vacío. 256 Esta reacción lleva consigo la producción de un residuo carbonoso, gases condensables y productos gaseosos. En función de cómo se realice el proceso las fracciones de los productos obtenidos son diferentes. Las principales variables a considerar son: velocidad de calentamiento, tiempo de residencia, temperatura y presión. Mediante la pirólisis se busca obtener fracciones sólidas, líquidas o gaseosas a partir de la biomasa con el fin de poder utilizarlas posteriormente para fines térmicos, eléctricos o, incluso, de producción de biocarburantes o de productos de mayor valor añadido tal y como se muestra en el esquema de la figura 5.6. Actualmente, uno de los principales intereses de la pirólisis es la producción de aceites piroleñosos que reformados y refinados puedan tener propiedades similares a las de la gasolina y el gasoil. Estos procesos permiten el paso de la biomasa seca a biocarburantes llamados de 2ª generación, en tanto que, a diferencia de los de 1ª, no proceden de cultivos destinados a la alimentación. 5.1.3.- Procesos de conversión biológica La materia orgánica biodegradable está constituida fundamentalmente por compuestos hidrocarbonatos y nitrogenados, cuya naturaleza, composición y complejidad dependen de su origen. Cuando dichos compuestos evolucionan hacia formas más sencillas mediante su descomposición, la relación entre el carbono y el nitrógeno (C/N), así como entre el oxígeno y la humedad, son determinantes para conocer su comportamiento en el suelo, tanto en superficie como enterrados. En general, estos procesos son llevados a cabo mediante la acción de microorganismos o sus enzimas. Los más comunes son los dos siguientes: la digestión anaerobia y el compostaje. La digestión anaeróbica para la producción de biogás. La degradación biológica de la materia orgánica biodegradable es un proceso que tiene lugar en 257 el medio natural gracias a la acción de distintos tipos de microorganismos, que pueden ser aerobios, anaerobios o facultativos. Los primeros necesitan oxígeno para su supervivencia, los segundos se desarrollan en ausencia de aire, y los facultativos son aquellos que pueden sobrevivir en ambos ambientesi. La digestión anaerobia es un proceso biológico que se desarrolla en ausencia de aire y durante el cual la materia orgánica se degrada en productos como CO2, metano CH4 y otros gases. Es una buena alternativa para el tratamiento de biomasa residual húmeda como por ejemplo aguas de lavado de almazaras, lodos de depuradoras, fracción orgánica de residuos urbanos, etc. Figura 5.6-. CLASIFICACIÓN POR OBJETIVOS DE PIRÓLISIS Carbón vegetal Carbonización BIOMASA Productos de síntesis Pirólisis rápida o flash-líquido + Up-Grading Biocarburantes Pirólisis ultra rápida o flashgas Combustión directa Industria química Motores MCIA Motores o Turbinas Fuente: Elaboración propia El producto resultante del proceso es un gas, denominado biogás, con un elevado contenido energético y que puede ser empleado para su utilización en sistemas de cogeneración termoeléctrica para la producción conjunta de energía 258 térmica, que puede ser utilizada en el propio proceso para el mantenimiento de la temperatura del digestor, y/o eléctrica para autoconsumo o inyección a red. Además, se obtiene un producto final estabilizado, con bajo contenido en materia orgánica que puede ser utilizado como fertilizante por su elevado contenido en nitrógeno y fósforo. En el cuadro 5.3., se muestra un cuadro con una comparativa detallada del poder calorífico del biogás frente a otros combustibles de origen fósil y la electricidad. Cuadro 5.3.- COMPARATIVA ENTRE PODERES CALORÍFICOS DE DISTINTOS COMBUSTIBLES [21] PODER CANTIDAD EQUIVALENTE CALORÍFICO A 1.000 M3 DE BIOGÁS Biogás 5.335 kcal/Nm3 1.000 m3 Gas natural 9.185 kcal/Nm3 851 m3 Metano 8.847 kcal/Nm3 603 m3 Propano 22.052 kcal/Nm3 242 m3 Butano 28.588 kcal/Nm3 187 m3 Electricidad 860 kcal/kWh 6.203 kWh Carbón 6.870 kcal/Nm3 776 kg Petróleo 11.357 kcal/Nm3 470 kg COMBUSTIBLE El compostaje o fermentación aeróbica. Es un proceso aerobio que bajo determinadas condiciones de humedad, temperatura y aireación controladas y combinando una serie de etapas a diferentes temperaturas (mesófila y termófila), transforma los residuos orgánicos degradables en un producto 259 estable e higieneizado, denominado compost, el cual puede ser aplicable al terreno como abono o sustrato. Es, pues, un proceso de destrucción, transformación y reestructuración de la materia orgánica. El compost presenta una serie de ventajas como acondicionador del suelo mejorando sus propiedades físicas y químicas, y la actividad biológica, entre otras. Como desventajas presenta el poco interés del sector agrario por su uso y las elevadas superficies de tierra que necesita para su aplicación. Los principales parámetros de control durante el compostaje son la aireación, la humedad, la temperatura, el pH y la relación C/N. La biomasa más idónea para ser compostada es la húmeda y, por lo general, suelen mezclarse distintos tipos para alcanzar las condiciones óptimas y obtener así un compost de calidad y un proceso de compostaje eficaz. Los sistemas de compostaje más utilizados son los llamados de tipo abierto, en los cuales la biomasa residual a compostar se dispone en montones o pilas al aire libre o en naves, y donde la ventilación suele realizarse por volteo mecánico de la pila o mediante ventilación forzada. 5.1.4.- Procesos de conversión bioquímica Son procesos asociados a reacciones de degradación o digestión química en las que determinados componentes de la biomasa como poliazúcares son transformados en compuestos más simples como los monosacáridos, para dar lugar a la obtención de bioetanol (fermentación alcohólica). Otro ejemplo son las reacciones de trans esterificación de los aceites vegetales en las que reacción con alcoholes para dar lugar a productos finales aptos para ser usados como carburantes en motores de ciclo diésel (biodiesel). El bioetanol es el biocarburante más utilizado en el mundo. Se emplea en los motores de ciclo Otto, solo o mezclado con la gasolina en cantidades variables, o como aditivo para oxigenarla reemplazando al metil-ter-butil-éter (MTBE). 260 Puede obtenerse a partir de diversas materias primas que contengan azúcares o compuestos que puedan ser transformados en azúcares como el almidón, la inulina o la celulosa (caña de azúcar, maíz, cereales, remolacha, etc.). En la actualidad, el bioetanol se produce a partir de la fermentación mediante levaduras de los azúcares, principalmente glucosa, contenidos en la biomasa, directamente o tras un proceso de hidrólisis. Dependiendo de cómo se encuentren los azúcares en la materia prima, el proceso puede ser más o menos complejo, como se muestra en la siguiente figura. Un proyecto de investigación impulsado desde la Universidad de Jaén tiene por objetivo obtener bioetanol a partir de materias lignocelulósicas como los restos de la poda del olivar. Se trataría pues de un biocarburante llamado de segunda generación pues se obtendría a partir de materias primas que no competirían con la producción alimentaria, como sucede con los denominados de primera generación. Figura 5.7.- ESQUEMA DE LA PRODUCCIÓN DE BIOETANOL Fuente: Elaboración propia 261 En relación al biodiesel, la American Standar for Testing and Materials (ASTM) lo define como los “ésteres metílicos monoalquílicos de ácidos grasos de cadena larga derivados de lípidos renovables tales como los aceites vegetales, y que se emplean en los motores de ignición por compresión (MEC) o en calderas de calefacción”. En la mayor parte de los casos se emplea metanol para llevar a cabo la reacción de trans esterificación que acabará conduciendo a la obtención de biodiesel, por lo que también suele hablar de ésteres metílicos. A nivel de la UE se considera biodiesel a la mezcla de cualquier de los ésteres anteriormente mencionados, siempre y cuando dicha mezcla cumpla con los parámetros de calidad para su uso como combustible de automoción de acuerdo a la Norma pr-EN 14214 (2003). Una vez satisfechas esas propiedades, el biodiesel puede ser utilizado o comercializado con diferentes porcentajes de mezcla con diésel comercial, es decir, de origen fósil, según el usuario final. Las materias primas utilizadas han sido tradicionalmente los aceites de semillas oleaginosas como el girasol, la colza, la soja o la palma, entre otras. También se utilizan otras especies como la Brassica carinata, el ricino o la Jatropha curcas. En definitiva, como resultado de los diferentes procesos a los que puede ser sometida la biomasa residual se pueden obtener combustibles sólidos (astillas, briquetas, pélets, carbón vegetal,…), líquidos y gaseosos, los cuales pueden ser empleados para generar energía eléctrica o para usos finales térmicos (calor y/o frío). En el cuadro 5.4. se muestra una comparativa de rendimientos tanto para la generación de energía térmica como eléctrica, poniéndose de manifiesto que los procesos termoquímicos son más eficientes puesto que actúan sobre la totalidad de los componentes de la biomasa. 262 Figura 5.8.- ESQUEMA DE LA PRODUCCIÓN DE BIODIESEL 110 kg 1.000 kg ACEITE VEGETAL CATALIZADOR METANOL REACTOR 1.005 kg 110 kg ESTER METÍLICO BIOCOMBUSTIBLE GLICERINA ÁCIDOS GRASOS LIBRES REFINACIÓN DESTILACIÓN 0.5 % 100 kg ÁCIDOS GRASOS DESTILADOS RESIDUOS 95 % BIODEGRADABLES GLICERINA REFINADA Fuente: Elaboración propia Cuadro 5.4.- COMPARACIÓN DE RENDIMIENTOS ENTRE LAS DISTINTAS TECNOLOGÍAS DE CONVERSIÓN DE LA BIOMASA [21] CONTENIDO ENERGÉTICO RESPECTO AL DE LA BIOMASA DE PARTIDA (%) PROCESO Combustible Calor intermedio Electricidad o trabajo mecánico Combustión - 65-95 20-35 Pirólisis 70-80 60-70 22-30 Gasificación 65-80 60-75 22-28 Digestión anaeróbica 20-35 18-30 7-12 20-30 15-25 5-10 Fermentación alcohólica 263 5.2.- La gasificación de la biomasa residual Los procesos de gasificación han sido tradicionalmente utilizados para el aprovechamiento energético de la biomasa residual y otros materiales como el carbón (caso de la planta de ELGOGÁS en Puertollano, Ciudad Real)37; así como el tratamiento y/o la eliminación de determinados residuos. La gasificación de la biomasa se deriva de los antiguos gasógenos de carbón desarrollados en el siglo XIX. Durante la Segunda Guerra Mundial hubo en Europa alrededor de un millón de gasificadores instalados en automóviles, camiones, barcos, sistemas de generación de energía y otras aplicaciones. Actualmente, la gasificación de la biomasa para la producción de energía de origen renovable vuelve a recobrar importancia por su elevada versatilidad y posibilidades de aplicación, pudiendo sustituir total o parcialmente a combustibles de origen fósil. Sin embargo los problemas asociados a la limpieza y el tratamiento del gas generado y, en determinadas ocasiones y en menor medida, el suministro de biomasa, están limitando su desarrollo comercial. En función de la composición química de la materia prima y las condiciones del proceso, se obtiene una proporción variable de los productos gaseosos resultantes, fundamentalmente hidrógeno, monóxido de carbono, metano y vapor de agua. La entrada de oxígeno se limita entre un 10 y un 50% del teóricamente necesario para una combustión completa, y la temperatura de operación suele oscilar entre los 700 ºC y los 1.500 ºC. El proceso se compone de un conjunto de reacciones sólido-gas y gas-gas mayoritariamente endotérmicas, por medio de las cuales el sólido se convierte en gas, tal y como se muestra en la figura 5.9. 37 Central térmica de Gasificación Integrada en Ciclo Combinado (GICC) de 335 MWISO. 264 Figura 5.9.- ETAPAS DEL PROCESO DE GASIFICACIÓN Fuente: Elaboración propia El proceso se suele dividir en tres etapas: • Secado + pirólisis. Cuando la biomasa entra al gasificador, en primer lugar se calienta y se seca. Una vez que alcanza la temperatura de unos 400 ºC se inicia el proceso de pirólisis o descomposición térmica, dando lugar a un residuo carbonoso formado por carbón principalmente y denominado “char”, hidrocarburos ligeros y pesados conocidos como “tars” o alquitranes y gases tales como metano, vapor de agua, monóxido de carbono, hidrógeno y dióxido de carbono. • Oxidación (combustión). En esta etapa los residuos carbonosos que han alcanzado una temperatura superior a los 700 ºC se oxidan, y el calor desprendido hace que el proceso se mantenga por sí solo. 265 • Gasificación (reducción). En esta etapa tienen lugar una serie de reacciones gas-gas o sólido-gas, generalmente endotérmicas, reduciéndose el sólido remanente a gas. El dióxido de carbono formado en etapas anteriores se transforma en monóxido de carbono. Los principales factores de operación son los siguientes: • Temperatura. Las proporciones entre char, tars y syngas dependen estrechamente de la velocidad de calentamiento y de la temperatura final alcanzada. Como regla general, se puede decir que si ambos son elevados se obtiene mayoritariamente gas, mientras que sin son bajos se obtienen líquidos y sólidos. • Presión. En general un aumento de presión contribuye negativamente a las reacciones de gasificación, aumentando las proporciones de hidrocarburos y alquitranes. • Relación agente gasificante/biomasa. Es un parámetro especialmente importante cuando la gasificación se autoabastece mediante la oxidación parcial de la biomasa. Valores excesivamente bajos de esta relación pueden no generar la cantidad suficiente de energía como para mantener el proceso en las condiciones adecuadas, produciéndose una reducción de rendimiento. Cuando el agente gasificante es aire, como sucede en la mayoría de los casos, existe un efecto de dilución por parte del N2, por ello hay un valor óptimo de esta relación que depende de la composición química de la biomasa. Así por ejemplo cuando se trata de biomasa forestal, la relación óptima en peso aire/biomasa suele estar comprendida entre 0,5 y 1,6 para los gasificadores de lecho fluido; y alrededor de 1,5 para los de lecho móvil. En cuanto a los factores dependientes de la biomasa a gasificar, cabe citar los siguientes: 266 • Análisis elemental. El contenido en C, H2, N2, S, Cl y O2 influye en la proporción agente gasificante/biomasa óptima, además de delimitar la producción de contaminantes como óxidos de nitrógeno o azufre o cloruro de hidrógeno. • Análisis inmediato. El parámetro más importante es el contenido en cenizas, el cual no debe superar el 10%. También influye el punto de fusión de las misas, puesto que se pueden producir escorias que perjudiquen a los equipos. Por último, también pueden tener un efecto catalítico acelerando la gasificación de la biomasa. • PCI. • Tamaño de partícula. Influye en la duración del proceso, así como en el volumen del reactor. En el caso de los de lecho fluido, además, influye en la velocidad de fluidización. • Humedad. Influye sobre el balance térmico del proceso y la composición del gas de salida. El resultado final del proceso es un gas, formado principalmente por CO, H2, N2, CO2, H2O e hidrocarburos o alquitranes. La composición de este gas varía con las características de la biomasa, el agente gasificante utilizado (aire, oxígeno, vapor de agua o hidrógeno) y las condiciones del proceso, si bien el parámetro que más afecta a la composición final es la humedad de la biomasa. A mayor humedad, más cantidad de agente gasificante puesto que el agua se tiene que calentar y evaporar. Desde un punto de vista termoquímico, las principales reacciones que tienen lugar en un gasificador pueden resumirse como sigue: 1. Biomasa húmeda + calor ⇒ biomasa seca + vapor 2. Biomasa seca + calor ⇒ residuo carbonoso + líquidos + gases 3. Líquidos + calor ⇒ gases 267 4. C + 1/2 CO2 ⇒ CO H25º C = -26,4 kcal/mol 5. C + O2 ⇒ CO2 H25º C = -94 kcal/mol 6. CO + 1/2 O2 ⇒ CO2 H25º C = -67,6 kcal/mol 7. H2 + 1/2 O2 ⇒ H2O H25º C = -57,8 kcal/mol 8. CH4 + 2 O2 ⇒ CO2+2H2O H25º C = -191,8 kcal/mol 9. C + H2O ⇒ CO + H2 H25º C = 31,5 kcal/mol 10. C + 2H2O ⇒ CO2 + 2H2 H25º C = 21,7 kcal/mol 11. C + 2H2 ⇒ CH4 H25º C = -18 kcal/mol 12. C + CO2 ⇒ 2CO H25º C = 41,4 kcal/mol 13. CnH2n + H2 ⇒ CnH2n+2 14. CnHm + nH2O⇒ nCO + (n+m/2)H2 15. CH4 + H2O ⇒ CO + 3H2 H25º C = 48,5 kcal/mol 16. CH4 + 2H2O ⇒ CO2 + 4H2 H25º C = 39,6 kcal/mol 17. CO + H2O ⇔ CO2 + H2 H25º C = -9,8 kcal/mol Las reacciones (1) y (2) corresponden a la descomposición térmica o pirólisis. Mediante calor, la biomasa seca se descompone en una mezcla de sólido + líquido (vapor) + gas. Al sólido originado en esta etapa se le suele denominar char y a los líquidos, debido a la masiva presencia de alquitranes y vapores condensables, tars (del inglés). Las reacciones (3) a (8) tienen lugar en presencia de oxígeno, cuando el agente gasificante es dicho gas o aire. Todas son exotérmicas y, por tanto, se genera calor para calentar los materiales reaccionantes y producir las reacciones de gasificación propiamente dichas (9) a (14), que son en general endotérmicas. También suponen las reacciones de reducción, también denominada gasificación porque implica la conversión de un sólido en gas combustible. La 268 mayor parte de ellas son endotérmicas, lo que justifica el aporte energético al proceso que se realiza mediante la combustión de una parte de la biomasa procesada. Estas reacciones endotérmicas o algunas otras como la (15) y (16) pueden tener lugar en muy pequeña extensión o solamente ocurrir en determinadas condiciones. La reacción (17) es denominada genéricamente como reacción de equilibrio Shift y es de gran importancia en los procesos de gasificación. Los procesos de gasificación se pueden clasificar en base a dos criterios: el agente gasificante y el movimiento relativo entre agente gasificante y sólido. No obstante, también existen otros criterios como el suministro de energía, la presión de operación o la presencia o no de catalizador. En función del agente gasificante empleado en el proceso de gasificación, ésta se puede clasificar en: • Con aire. Se introduce un defecto de aire respecto del estequiométrico necesario para la combustión total de la biomasa, de manera que el oxígeno contenido en él queme una parte de la biomasa procesada, aportando la energía necesaria para el mantenimiento del proceso. Al utilizarse aire, el nitrógeno actúa como diluyente del gas producido, por lo que su poder calorífico será bajo (< 6 MJ/Nm3). Este syngas es apropiado para su utilización en calderas, turbinas de gas o motores de combustión interna alternativos. • Con oxígeno. El proceso es prácticamente idéntico al caso anterior, pero la calidad del syngas es mayor pues no se diluye en el nitrógeno del aire. El poder calorífico se sitúa entre 10 y 12 MJ/nm3. Las aplicaciones son las mismas que el caso anterior, además de permitir obtener gas de síntesis para la producción de metanol. • Con vapor de agua. Es un proceso endotérmico en el que se produce un gas de poder calorífico medio, similar al del caso anterior, enriquecido en hidrógeno y monóxido de carbono, por lo que se puede utilizar como gas 269 de síntesis para diversos compuestos como amoníaco, metanol, gasolinas, etc. • Con vapor de agua y oxígeno. Para aportar la energía necesaria al proceso de gasificación con vapor de agua puede introducirse conjuntamente con él una cierta cantidad de oxígeno, de manera que mediante la combustión parcial de la biomasa procesada se genera la cantidad de energía necesaria para mantener el proceso de gasificación con vapor. Las aplicaciones del syngas son las mismas que para el caso anterior. • Con otros agentes gasificantes, como por ejemplo el hidrógeno, es posible y permite obtener un syngas con unas propiedades muy variadas, pudiendo ser sustitutivo del gas natural. Considerando el movimiento relativo del agente gasificante y el sólido gasificado se establece otra posible clasificación: • Lecho móvil. El sólido se mueve muy lentamente. Existen dos posibilidades: o Corrientes paralelas: sólido y gas se mueven en sentido descendente o Contracorriente: sólido y gas se mueven en sentidos contrarios. • Lecho fluidizado. El sólido es mantenido en suspensión en el reactor mediante el gas. En función de la velocidad del gas existen distintas configuraciones, las más ampliamente utilizadas son los lechos fluidos burbujeantes y los circulantes. También existe procesos llamados de doble reactor. Otros criterios de clasificación son: • Según el suministro de energía pueden existir procesos autotérmicos o alotérmicos. En los primeros el aporte de calor se realiza mediante combustión in situ de una parte del combustible, suministrando una cantidad de oxígeno en defecto. En los alotérmicos el calor se genera en 270 una etapa independiente exterior al proceso y puede ser transferido al mismo mediante diversos medios portadores. • La presión de operación. Los procesos pueden ser a presión, donde el tamaño del reactor es menor y la eficiencia del proceso mayor, si bien son más complejos y costosos, por lo que solamente se justifican para procesos a gran escala. • La presencia de catalizador. Esta opción consiste en el empleo de catalizadores con el fin de orientar la distribución de productos hacia la composición buscada a costa de subproductos menos deseables o indeseables. Puede obtenerse así un gas más limpio, dependiendo de las condiciones de operación y del catalizador utilizado. 271 5.3.- Tecnologías de gasificación Las principales tecnologías de gasificación de biomasa se dividen en dos grupos: lecho móvil y lecho fluidizado. En los gasificadores de lecho móvil la biomasa circula lentamente en sentido descendente mientras es impulsada por el agente gasificante que se utilice. Se subdividen, a su vez, en función del movimiento relativo de la biomasa y del gas en de corrientes paralelas o “downdraft” y a contracorriente o “updraft”. En los gasificadores de lecho fluidizado la biomasa pasa a través de un lecho de material que fluidiza por la acción del agente gasificante en el que se produce el proceso de gasificación, no existiendo zonas definidas dentro del reactor donde se desarrollen las distintas etapas, sino que todas ellas tienen lugar simultáneamente en todos los puntos del gasificador. Esto hace que tanto la temperatura como el grado de conversión sean bastante uniformes. Coexisten los productos de la pirólisis, de la oxidación y los productos de las reacciones de reducción. La pirólisis se efectúa a una velocidad de calentamiento elevada, por lo que se reduce la formación de alquitranes. También se subdividen en función de las características del lecho en: burbujeantes y circulantes. Existen otro tipo de gasificadores como los rotatorios cuya principal aplicación se centra en el tratamiento de residuos sólidos urbanos e industriales, si bien también se suele utilizar la de lecho fluidizado. 5.3.1.- Gasificador en corrientes paralelas (“downdraft”) Este tipo de gasificador se caracteriza porque tanto la biomasa como el gas producido se dirigen ambos en un mismo sentido, normalmente descendente. La biomasa se introduce por la parte superior y según va descendiendo por el interior del gasificador experimenta las distintas etapas de secado y pirólisis, a medida que las temperaturas van siendo más elevadas. Este incremento de temperatura se debe a que en la parte inferior se está produciendo la 272 combustión de los productos de la pirólisis (char y tars o alquitranes), desprendiendo calor. Éstos se queman en la zona de combustión, quedando una parte de char sin quemar, la cual continúa su descenso hasta la etapa de reducción o gasificación al reaccionar con los productos de la combustión. Los gases producto se obtienen por la parte inferior del gasificador. Una de las principales características de esta tecnología, es la obtención de un gas producto o syngas de bajo contenido en alquitranes, puesto que éstos son obligados a atravesar la zona de altas temperaturas (oxidación) en la que son craqueados o quemados, reduciendo así su proporción final en el syngas. Generalmente, se suele reducir la sección del gasificador mediante la construcción de un estrechamiento llamado garganta en un lugar ligeramente inferior al punto de inyección del agente gasificante. De este modo se logra también que todos los tars generados atraviesen la zona de altas temperaturas. Se trata, sin duda, de una extraordinaria ventaja de cara a su posterior utilización en motores, los cuales son enemigos declarados de este tipo de compuestos químicos. Por lo general, además de los correspondientes sistemas de lavado y limpieza, los alquitranes se suelen recircular para evitar su presencia en el motor. Este tipo de gasificadores son de fácil construcción y operación y mantenimiento, permitiendo además gasificar una amplia variedad de biomasas relativamente secas (< 30 % humedad) y con diferentes granulometrías (hasta 10 cm. de longitud) y bajo contenido en cenizas (< 1% en peso). La necesidad de mantener una determinada relación entre el tamaño de partícula de la biomasa procesada y el diámetro del gasificador limitan la capacidad de procesamiento a un máximo del orden de 500 kg/h ó 500 kW de potencia eléctrica por lo que son adecuados para instalaciones de generación distribuida de pequeña potencia como la que se presenta en la presente Tesis. 273 Como inconveniente cabe reseñar la baja eficiencia global del proceso. Esto es debido a la elevada temperatura de salida del syngas (del orden de 400-700 ºC). Este tipo de gasificadores empleando aire como agente gasificante, suele ser el más utilizado para la generación de energía eléctrica a pequeña escala, puesto que debido a la escasa presencia de alquitranes en el syngas, los costes de inversión se reducen notablemente como consecuencia de las menores inversiones en limpieza y tratamiento. Otra justificación para su elección que se suma a la anteriormente citada del rango de potencia. El syngas producido en este tipo de gasificadores puede ser utilizado directamente en quemadores de calderas, en turbinas de gas o, previamente enfriado, en motores de combustión interna alternativos, caso de la presente Tesis Doctoral. 5.3.2.- Gasificador en contracorriente (“updraft”) Se trata de la forma más simple de lecho móvil. El sólido alimentado y el gas producido se mueven en el interior del lecho en sentidos opuestos, normalmente el sólido en sentido descendente y el gas en sentido ascendente. La biomasa entra por la parte superior donde se encuentra con los gases procedentes de la parte inferior originados en las fases de pirólisis y reducción. El sólido al ir descendiendo va encontrando cada vez temperaturas más altas, secándose inicialmente para posteriormente sufrir una pirólisis o descomposición térmica. Los gases generados ascienden con el resto de gases, escapándose también parte de los alquitranes y vapores condensables generados. El char obtenido en la pirólisis continúa descendiendo encontrándose con los gases de combustión y el propio agente gasificante, y en la zona central sufre un proceso de reducción. Al seguir descendiendo hasta la zona inferior, el sólido 274 remanente encuentra la corriente de agente gasificante (con oxígeno), llevándose a cabo la oxidación o combustión y elevando las temperaturas de la zona tal y como se muestra en la figura. El syngas producido contiene una elevada cantidad de alquitranes e hidrocarburos que contribuyen a elevar su poder calorífico. Como la temperatura del gas producto es baja, entre 70 y 300 ºC, los alquitranes se encuentran en forma de aerosoles en el gas. Esto no supone un problema importante si el gas es usado directamente en aplicaciones térmicas en las cuales los alquitranes son directamente quemados. Sin embargo, si el gas va a ser inyectado en un motor o una turbina será imprescindible la instalación de un sistema de limpieza. Las principales ventajas de este tipo de gasificadores radican en su relativa sencillez de construcción y operación y su elevada eficiencia térmica. El calor sensible del gas producido es recuperado mediante el calentamiento por contacto directo de la alimentación que es secada, calentada y pirolizada antes de alcanzar la zona de gasificación. Por otra parte, el gas contiene un bajo contenido en sólidos debido al tamaño de partícula de la biomasa empleada y a la baja velocidad del gas. En principio, aunque no existe una importante limitación de escala, esta tecnología es aplicable a pequeñas potencias. 5.3.3.- Gasificadores de lecho fluidizado En estos gasificadores no existen zonas definidas donde se lleven a cabo las distintas etapas, sino que el secado, la reducción (o gasificación), la oxidación y la pirólisis tienen lugar simultáneamente en todos los puntos del reactor. Cuando una partícula de biomasa entra en el reactor sufre consecutiva y simultáneamente todos los procesos, coexistiendo por tanto los productos de la pirólisis, oxidación y reducción en el reactor, lo que provoca que tanto la temperatura como el grado de conversión sean bastante homogéneos en todo el reactor. Se obtiene así un gas con bajos/medios contenidos en tars y grandes 275 cantidades de partículas y cenizas, a una temperatura que puede oscilar entre los 800 y 1.000 ºC. Esta tecnología, a diferencia de las anteriores, presenta una elevada velocidad de transferencia de calor y materia, y una buena mezcla de la fase sólida. Estas características conducen a elevadas velocidades de reacción y a una temperatura uniforme en todos los puntos del lecho. Otra ventaja de este tipo de gasificadores es la facilidad que presenta para absorber las variaciones en cuanto a caudal y composición de la biomasa procesada. Cuando emplea aire como agente gasificante se obtiene un gas con un contenido intermedio en alquitranes en relación a las anteriores dos tecnologías descritas. Las partículas de ceniza y de char sin reaccionar son arrastradas por la corriente gaseosa fuera del reactor, siendo separadas en la mayoría de los casos mediante ciclones. En este tipo de reactores, las emisiones de partículas son superiores a las de los dos anteriores. Los reactores de lecho fluidizado pueden ser de tipo burbujeante (LFB) o circulante (LFC). Los primeros permiten emplear elevadas capacidades de procesamiento, son simples en cuanto a operación y control, los costes de inversión no son muy elevados y su escalado es relativamente sencillo y fiable. En el LFC la velocidad de fluidización es lo suficientemente alta como para arrastrar grandes cantidades de sólidos con el gas. La fluidización es rápida, por lo que se mejora la transmisión del calor y la transferencia de materia y, por tanto, la rapidez del proceso de gasificación. 5.3.4.- Gasificador de lecho arrastrado En este tipo de gasificadores no se emplea ningún material inerte como coadyuvante, por lo que la alimentación debe ser finamente dividida. Las 276 temperaturas de operación suelen superar los 1.200 ºC dependiendo de si se usa aire u oxígeno. Las presiones de operación se sitúan por encima de los 20 bar. El gas generado contiene un bajo nivel de alquitranes y de materia condensable, sin embargo la alta temperatura de operación supone un problema en cuanto a la elección de materiales y a la posible fusión de cenizas. En la actualidad esta tecnología se encuentra muy desarrollada para el caso del carbón, no así para la biomasa, ya que requiere de un tamaño de partícula muy fino (del orden de 125-600 µm) lo que encarece enormemente el proceso. En los cuadros 5.5. y 5.6. se muestran los parámetros más característicos de los distintos tipos de gasificadores, así como las principales propiedades del gas obtenido. Se puede observar como los reactores de lecho fluidizado son adecuados para mayores capacidades de procesamiento, mientras que los tipo downdraft son los de menor capacidad. La eficiencia energética, definida como la relación entre la energía contenida en el gas y la de la biomasa procesada puede llegar incluso hasta valores próximos al 90%. En lo relativo al poder calorífico del gas, se aprecia como los mayores valores se obtienen al utilizar oxígeno como agente gasificante, puesto que como ya se apuntó, en este caso no se presenta el fenómeno de dilución del nitrógeno del aire. Por último, en lo referente a la presencia de alquitranes y partículas, se observa que en los downdraft es mínima, en los del tipo updraft, la presencia de alquitranes es significativa y con los de lecho fluido, el problema se centra en el contenido en partículas en suspensión. 277 Figura 5.10.- GASIFICADORES “UPDRAFT”, “LECHO FLUIDIZADO” y “DOWNDRAFT” Fuente: Elaboración propia 278 Cuadro 5.5.- CARACTERÍSTICAS DE LOS DIFERENTES SISTEMAS DE GASIFICACIÓN [23] EFICIENCIA TIPO DE REACTOR Tª CAPACIDAD ENERGÉTICA MÁXIMA (D.A.F. T/H)38 DEL GAS FRÍO (%) Downdraft aire Downdraft oxígeno Updraft aire Updraft oxígeno 38 1.000 1.200 1.000 1.200 900 - 1.200 1.000 1.500 0,01 – 0,75 70 - 90 0,03 – 5 80 – 90 0,2 – 10 60 – 86 0,2 – 10 75 – 90 LFB aire 700 – 900 0,3 – 15 69 – 87 LFB oxígeno 700 - 1.000 2 – 10 75 – 90 LFC aire 700 - 1.100 2 – 27 75 – 80 LFC oxígeno 800 - 1.300 0,25 - 20 75 - 90 d.a.f. (dry ash free): en base seca y libre de cenizas 279 Cuadro 5.6.- CARACTERÍSTICAS DEL GAS PRODUCIDO CON LOS DIFERENTES SISTEMAS DE GASIFICACIÓN [23] TIPO DE Tª DEL REACTOR GAS (ºC) Downdraft PCS DEL CONTENIDO CONTENIDO GAS EN EN (MJ/NM3) ALQUITRANES PARTÍCULAS 400 – 1.000 4–6 Muy bajo Moderado 700 – 1.100 9 – 11 Muy bajo Moderado 100 – 400 4–6 Muy alto Moderado 100 – 700 8 – 14 Muy alto Moderado LFB aire 500 – 900 4–6 Moderado Alto LFB oxígeno 700 – 1.100 8 – 14 Moderado Alto LFC aire 700 – 1.100 5 – 6,5 Bajo Muy alto LFC oxígeno 800 – 1.200 10 - 13 Bajo Muy alto aire Downdraft oxígeno Updraft aire Updraft oxígeno 280 5.4.- Condicionantes técnicos de la gasificación Antes de abordar el proceso de gasificación de la biomasa, es necesario tener en consideración una serie de factores que afectan a la biomasa como combustible, a las condiciones de operación del proceso y al diseño de los equipos. 5.4.1.- Factores dependientes de la biomasa Las propiedades de la biomasa son fundamentales, las cuales pueden determinar el tipo de gasificador a emplear e incluso pueden determinar la viabilidad del proceso. Hay que tener en cuenta las siguientes: • Análisis elemental: contenido en carbono, hidrógeno, nitrógeno, azufre y oxígeno. Influye de una manera directa en la proporción óptima de agente gasificante/biomasa a emplear. También determina, en gran medida, la proporción de posibles contaminantes tales como óxidos de nitrógeno y/o de azufre. • Análisis inmediato: contenido en cenizas, material volátil y carbono fijo. El contenido en cenizas de una biomasa determinará la cantidad de sólido residual que es necesario retirar del gasificador por unidad masa procesada. En general, debe ser lo más bajo posible, pues su aumento supone, además, una disminución de la biomasa realmente gasificable. Se puede aceptar como un límite máximo admisible un 10%. No obstante, las cenizas pueden actuar de catalizadores de la reacción de gasificación del residuo carbonoso. • Temperatura de fusibilidad de las cenizas. Es necesario conocer el valor de este parámetro a la hora de predecir posibles fenómenos de deposición y escorificación, tanto en el propio gasificador como en los sistemas de limpieza del gas. Igual sucede con los perfiles de temperatura del gas y de las superficies con las que se encuentra en contacto. 281 • Poder calorífico. Es el parámetro que determina la máxima cantidad de energía aprovechable. Depende de la composición de la biomasa, si bien puede verse modificado por factores como la humedad o las condiciones de almacenamiento, las cuales pueden provocar oxidaciones anaeróbicas. • Tamaño de partícula. Es otro de los factores decisivos a la hora de seleccionar un proceso de gasificación, pues cada tipo de reactor tiene unos límites más o menos flexibles respecto de esta variable. Influye de manera directa en el tiempo de contacto necesario para que las reacciones que tienen lugar durante la gasificación se completen, y por tanto, en el volumen del reactor. Los tamaños recomendables de partículas para las distintas tecnologías pueden ser los siguientes: < 15 cm para los updraft, entre 3 y 10 para los downdraft y desde unos pocos mm hasta unos 4 cm para procesos en lecho fluidizado. • Densidad, forma y dureza de las partículas. En general, los productos muy poco densos presentan una gran tendencia a la formación de canales preferenciales al circular un fluido a través de un lecho de partículas, lo que conlleva una disminución del volumen útil del reactor. Por ejemplo, la paja de cereal es extremadamente difícil de fluidizar, aunque la presencia de agentes sólidos coadyuvantes como la arena, mejoren las condiciones. En relación a la forma, hay que evitar la formación de bóvedas que puedan impedir el movimiento del sólido colapsando el lecho. Por ello que determinadas biomasas como ramas, sarmientos o algunos tipos de astillas presenten dificultades para ser gasificadas. Por último, hay que considerar también que las que están en la parte inferior del gasificador deben soportar el peso de las que están encima, sin disgregarse y aglomerarse, lo que provocaría un importante aumento de la pérdida de carga y posibles colapsos. • Humedad. Es otro factor de suma importancia, pues influye directamente en el balance térmico del proceso ya que parte del calor se destinará a evaporar el agua presente en la biomasa. En general, se puede afirmar 282 que la biomasa ha de estar lo más seca posible, si bien son aceptables valores para la humedad comprendidos entre el 7 y el 20%. Los procesos de lecho fluidizado permiten trabajar con humedades mayores. Se han realizado ensayos de gasificación en lecho móvil con biomasa con humedades cercanas al 30% si bien con unos rendimientos bajos (Usón, 1999). 5.4.2.- Factores dependientes de las condiciones de operación Los tres más importantes son la temperatura, la presión y la reacción agente gasificante/biomasa. • Temperatura. Es un parámetro importante en todas las etapas de la gasificación y afecta al rendimiento global del mismo. En concreto las proporciones entre char, trars y syngas en los productos de pirólisis dependen estrechamente de la velocidad de calentamiento y la temperatura final alcanzada. Normalmente, a elevadas velocidades de calentamiento (> 2 ºC/min) y alta temperatura final (> 650 ºC) se produce mayoritariamente gas. Si la temperatura final desciende o las velocidades de calentamiento son menores, aumenta la proporción de líquidos y también la de sólidos. • Presión. De forma general, el aumento de la presión favorece la formación de hidrocarburos y alquitranes. Los procesos a presión tienen la ventaja de que no es necesario comprimir el gas en el caso de utilizar turbina, además de incrementar la compacidad de las instalaciones y poder operar a mayores caudales. Por el contrario, el coste suele aumentar de manera importante. • Reacción agente gasificante/biomasa. Es probablemente el parámetro más importante de los que se pueden manipular directamente. Un aumento de la cantidad de oxígeno favorece la formación de dióxido de carbono, 283 además si el agente gasificante es aire, se produce un efecto de dilución por parte del nitrógeno presente en éste, como ya se ha visto. Por el contrario, valores excesivamente bajos de aire u oxígeno pueden no generar la energía suficiente para mantener el proceso en las condiciones adecuadas. Normalmente existe un valor óptimo de la relación aire/biomasa para cada proceso el cual depende de la composición de la biomasa. El aumento de esta relación produce dos consecuencias contrapuestas. Por un lado, un aumento de la temperatura que provoca una disminución de la proporción de residuo sólido y productos condensables; pero por otro lado, el aumento de la cantidad de oxígeno produce un avance de las reacciones de combustión, con la consiguiente disminución de la calidad del gas. Para gasificadores de lecho fluidizado esta relación suele ser del orden de 0,5 a 1,6 (en masa), para gasificadores de lecho móvil la proporción suele ser de alrededor de 1,5 (en masa). 5.4.3.- Factores dependientes del diseño de los equipos Deben considerarse los siguientes: • Geometría. El tamaño del gasificador es el que determina la capacidad de procesamiento. En el caso específico del tipo downdraft debe lograrse una perfecta distribución del agente gasificante en la zona de oxidación, de manera que ningún producto generado en la zona de pirólisis deje de pasar por la zona de alta temperatura. En el caso del lecho fluidizado sus dimensiones son vitales pues determinan la velocidad del gas y, por tanto, el régimen de fluidización y el tipo de contacto gas-sólido. • Sistemas de alimentación y retirada de sólidos. Debe asegurarse una alimentación lo más estable posible, un sistema eficaz de retirada de cenizas para asegurar una operación en continuo y que éstas ni se fundan ni se sintericen. También hay que asegurar un correcto funcionamiento de los sistemas de separación sólido-gas y de extracción 284 de sólidos, pues de ello dependerá en gran medida el correcto funcionamiento del proceso. Un incremento de presión dificulta las operaciones de alimentación y extracción de sólidos. 285 5.5.- Sistemas de acondicionamiento del syngas Los principales contaminantes presentes en el syngas, los cuales pueden provocar problemas posteriores de corrosión, erosión o medioambientales (emisiones) suelen ser: • Materia particulada arrastrada desde el gasificador • Compuestos orgánicos de bajo y alto peso molecular (tars) • NH3, HCN y otras impurezas conteniendo nitrógeno • H2S y otros gases conteniendo azufre • Otras impurezas gaseosas como HCl y metales en fase de vapor (pesados y alcalinos) Su concentración en el gas depende principalmente de varios de los factores enumerados previamente como por ejemplo el tipo de reactor, la composición de la biomasa, el agente gasificante, las temperaturas y tiempos de residencia, etc. La aplicación final del gas será la que marque el grado de limpieza requerido. 5.5.1.- Materia particulada Engloba a todos aquellos materiales en fase sólida que son arrastrados por la corriente gaseosa que sale del gasificador. Está formada principalmente por las cenizas contenidas en el sólido procesado, de la biomas no convertida en char y/o de los materiales procedentes del lecho, en caso de lechos fluidizados. Su cantidad dependerá de la tecnología de gasificación empleada y del contenido mineral de la biomasa procesada. En el cuadro 5.7., se muestran algunos valores orientativos para las distintas configuraciones. Generalmente los gasificadores de lecho móvil producen una menor cantidad de partículas y de menor tamaño que los de lecho fluidizado. 286 Cuadro 5.7.- NIVELES DE PARTÍCULAS Y ALQUITRANES PARA DIFERENTES TIPOS DE GASIFICADORES [24] PARTÍCULAS EN TIPO DE SUSPENSIÓN (G/NM3) ALQUITRANES (G/NM3) REACTOR Bajo Alto Intervalo Bajo Alto Intervalo Downdraft 0,01 10 0,1 – 0,2 0,04 6 0,1 – 1,2 Updraft 0,1 3 0,1 – 1,0 1 150 20 – 100 LFB 1 100 2 – 20 < 0,1 23 1 – 15 LFC 8 100 10 – 35 <1 30 1 - 15 Las partículas deben ser eliminadas de la corriente gaseosa para evitar problemas de abrasión en los equipos a los que atraviesen. Además, la normativa ambiental limita el contenido de éstas en el gas. Partículas por encima de 10 µm pueden ser eliminadas mediante el empleo de ciclones convencionales, siendo el material separado recirculado hacia el gasificador. La separación de partículas volantes más finas requiere el uso de equipos más eficaces como los filtros de mangas, los cerámicos o los precipitadores electrostáticos. Normalmente, estos equipos se sitúan a continuación de uno o varios ciclones consiguiendo una eficacia global de separación de hasta un 99,8 %. Para evitar problemas de sinterización de los materiales constituyentes de los filtros y prevenir posibles tensiones térmicas será necesario enfriar el gas hasta la temperatura de operación de cada tipo de separador. 5.5.2- Compuestos orgánicos La mezcla de compuestos orgánicos condensables generados durante la gasificación recibe el nombre, tal y como se ha visto, se alquitranes o tars. 287 Incluye una amplia gama de productos que va desde el benceno hasta hidrocarburos aromáticos. Los alquitranes contenidos en el gas están presentes debido a que no han podido ser totalmente convertidos a moléculas de menor tamaño en los procesos de pirólisis. La cantidad y composición de los mismos depende fundamentalmente del tipo de biomasa, de las condiciones del proceso y del tipo de reactor. El contenido de alquitranes se reduce al aumentar la temperatura y/o la relación agente gasificante/biomasa. Tiempos de residencia cortos y elevadas velocidades de calentamiento producen alquitranes de menor peso molecular. En relación al tipo de gasificador, en la tabla anterior se muestran valores orientativos de concentración de alquitranes. En el caso de los updraft, los alquitranes suelen ser compuestos oxigenados y éteres fenólicos ya que son producidos a baja temperatura. Por el contrario, los alquitranes formados en gasificadores de tipo downdraft suelen estar formados por éteres heterocíclicos o hidrocarburos poliaromáticos debido a la mayor temperatura. En la mayoría de las aplicaciones del syngas los alquitranes deben eliminarse para evitar problemas de ensuciamiento y taponamiento que se ocasionan debido a su enfriamiento. Además, resulta un proceso crítico en aquellos sistemas donde el gas debe ser comprimido antes de ser utilizado. Existen dos estrategias que pueden ser aplicadas para la reducción del contenido en alquitranes: • Mejorar la tecnología de gasificación, las condiciones de operación y la composición de la biomasa. Este suele resultar más económico y debe ser la primera opción a valorar. • Implementar sistemas de limpieza y lavado. Se engloban en este apartado los procesos de craqueo térmico o catalítico, así como la limpieza del gas mediante lavado en un scrubber. El craqueo de alquitranes mediante procesos térmicos o catalíticos permite obtener una serie de compuestos de bajo peso molecular. Mientras que la 288 temperatura del proceso térmico suele encontrarse entre 900 y 1.000 ºC, la del catalítico suele ser de 800-900 ºC. Un scrubber es un equipo de lavado de gas mediante una corriente líquida, que puede ser acuosa u orgánica, en la cual quedan retenidos los alquitranes. El llamado scrubbing húmedo suele ser el método más empleado para la eliminación de los alquitranes. Lo más habitual es enfriar primero el gas para facilitar la aglomeración y coalescencia de las partículas y tars en un scrubber situado a continuación. Este proceso, aunque simple, presenta un delicado problema de tratamiento de las aguas residuales contaminadas con sustancias orgánicas. Actualmente, para alcanzar los niveles de alquitranes requeridos, se suele emplear como solución el reformado catalítico del gas seguido de un filtrado antes de introducirlo en el scrubber. 5.5.3- Compuestos de nitrógeno, azufre, cloro y metales alcalinos En los procesos de gasificación, mientras una parte del nitrógeno contenido en la biomasa se desprende durante la pirólisis, la otra lo hace a través de las reacciones de gasificación y combustión del char. El nitrógeno gasificado pasa a formar principalmente amoníaco (NH3) y en menor medida cianuro de hidrógeno (HCN), lo que puede constituir un problema de tipo ambiental. Las bajas temperaturas de los procesos de gasificación y las condiciones reductoras limitan la producción de óxidos de nitrógeno (NOx). El amoníaco se puede eliminar mediante conversión catalítica o scrubbing húmedo. En relación al azufre, generalmente la biomasa suele tener un bajo contenido, del orden del 0,4% en peso. El sulfuro de hidrógeno (H2S) es el principal compuesto gaseoso de azufre, representando un 80-95% del azufre total en fase gas. En los procesos de combustión del syngas, la limpieza del azufre se puede realizar mediante un lecho de dolomita (CaO.MgO), el cual se 289 encargaría de absorber el azufre generando un nuevo residuo. A veces también se puede emplear un lecho fijo o fluidizado caliente de óxido de zinc. Algunos compuestos de biomasa como determinados residuos agrícolas, pueden llegar a contener hasta un 0,5% en peso de cloro, el cual pasa a cloruro de hidrógeno (HCl) durante la gasificación. Su concentración en el gas dependerá mayoritariamente de la temperatura, de cómo se encuentre el cloro en la biomasa y de la presencia de otros contaminantes. El cloro y sus compuestos pueden ser eliminados mediante su absorción en materiales activos, ya sea en el propio gasificador o en un reactor secundario, o también por disolución en scrubbers húmedos. Por último, la presencia de metales pesados en la biomasa es generalmente muy baja en comparación con el carbón. Sin embargo, algunos tipos de biomasa pueden tener un elevado contenido en metales alcalinos, los cuales representan, a elevada temperatura una fuente potencial de corrosión, así como una desactivación en el catalizador, si este es utilizado. Durante la gasificación, parte de los metales alcalinos contenidos en las cenizas de la biomasa se vaporiza para formar productos como KOH y KCl, los cuales atraviesan los sistemas de separación de partículas siempre que la temperatura del gas sea superior a 650 ºC. Un enfriamiento del gas por debajo de 500-600 ºC permitirá la condensación de la mayor parte de los metales alcalinos sobre las pequeñas partículas arrastradas por el gas, de manera que éstos podrán ser separados conjuntamente con ellas mediante un sistema de filtración convencional. 290 5.6.-Balances de masa y energía El funcionamiento de una instalación de gasificación de biomasa residual consta de 4 etapas básicas: 1. Pre-tratamiento, carga y alimentación de la biomasa al gasificador, que puede consistir en una molienda y/o en un secado previo, en función de las características de la biomasa recibida. 2. Gasificación propiamente dicha empleando la tecnología más adecuada para el destino final del gas generado. 3. Acondicionamiento del gas, en función de su uso posterior (caldera, motor o turbina). 4. Cogeneración termoeléctrica, producción de energía eléctrica y térmica simultáneamente. Todo ello se recoge en el esquema de la figura 5.11., donde se puede apreciar un diagrama de bloques del proceso, desde la entrada de la biomasa hasta la salida de energía eléctrica y térmica. En cuanto al balance energético del sistema de gasificación en su conjunto, éste se muestra en el esquema de la figura 5.12., donde quedan reflejadas de una manera esquemática las etapas anteriormente descritas. La eficiencia global del proceso, tal y como se comentó anteriormente, es de un 64,20%, de acuerdo a la siguiente expresión: η = (100+100+112) / 486 = 64,20 % El balance energético global del proceso se muestra en la figura 5.13. 291 Figura 5.11.- ESQUEMA GLOBAL DEL MODELO. BALANCE ENERGÉTICO Fuente: Elaboración propia 292 Figura 5.12.- ESQUEMA DEL PROCESO DE GASIFICACIÓN BIOMASA ALIMENTACIÓN (Pre-tratamiento, carga y alimentación) GASIFICACIÓN ACONDICIONAMIENTO DEL GAS (limpieza y enfriamiento) COGENERACIÓN TERMOELÉCTRICA (Generación conjunta de calor y electricidad) kWe y kWt Fuente: Elaboración propia 293 1 2 3 4 Figura 5.13.- BALANCE ENERGÉTICO DEL PROCESO RESTOS DE PODA 486 kW CALOR 20 kW PRESECADO AIRE 486 kW 10 kW GASIFICACIÓN 5 kW ALQUITRANES CENIZAS 50 kW 431 kW ACONDICIONAMIENTO SYNGAS 370 kW AGUA 2 kW AIRE CALOR 20 kW PARTÍCULAS CALOR DISIPADO 34 kW GRUPO MOTOGENERADOR GASES ESCAPE 100 kW ENERGÍA ELÉCTRICA 112 kW ENERGÍA TÉRMICA 100 kW Fuente: Elaboración propia 294 6.- LA GASIFICACIÓN DE BIOMASA EN ESPAÑA 6.1.- Introducción La gasificación no es una tecnología desarrollada recientemente, sino que ha sido ampliamente utilizada en periodos de carencia o carestía de combustibles de origen fósil, siendo empleada en los denominados “gasógenos” en aplicaciones para el transporte y maquinaria agrícola. En tiempos de la 2ª Guerra Mundial, en la ocupada Dinamarca y durante fuertes restricciones del suministro de petróleo, el 95% de los automóviles (tractores, coches, camiones, barcos, etc.) funcionaban gracias a estos gasógenos, que empleaban madera o carbón como combustible, y cuyo gas se quemada limpiamente en un motor de gasolina estándar que producía energía mecánica. Esta vieja tecnología fue también empleada en Sudáfrica durante el Apartheid como procedimiento de elaboración de hidrocarburos a partir de carbón mediante el proceso de Fischer-Tropsch, donde el gas obtenido por 295 gasificación a alta temperatura y presión y en contacto con catalizadores metálicos formaba hidrocarburos alifáticos (gasolina y gasóleo). En España esta aplicación tuvo un desarrollo muy extendido al terminar la Guerra Civil (1939) por las dificultades anteriormente citadas de abastecimiento mundial de petróleo. El sistema consistía en añadir a los vehículos una especie de carricoche en el cual se ubicaba el generador, tal y como se puede apreciar en la fotografía de la página siguiente. De esta forma se podían utilizar combustibles sólidos para impulsar motores de combustión interna. En la figura 6.1., y en la fotografía nº 29 se puede apreciar un esquema de un gasógeno de los que se empleaban en el sector del transporte y un vehículo. Figura 6.1. ESQUEMA DE UN GASÓGENO DE AUTOMOCIÓN 296 Fotografía nº 29. VEHÍCULO CON GASÓGENO Desde hace más de veinte años existen aplicaciones de aprovechamiento térmico en las que el gas de síntesis es utilizado en hornos de cementeras, papeleras, calderas a gas, etc. Sin embargo, nunca se había utilizado en procesos regulares de generación de energía eléctrica. Y ello, debido fundamentalmente a la inexistencia de tecnologías fiables o competitivas de limpieza y tratamiento del syngas, en concreto para la eliminación de los alquitranes generados durante el proceso de gasificación. Su presencia en la corriente de gas, como ya se ha visto en el capítulo anterior, dificulta o impide su empleo en motores de combustión interna alternativos. En los últimos años la tecnología de gasificación de biomasa ha sido demostrada satisfactoriamente a través de plantas de pequeña potencia, no pudiendo competir hoy por hoy con la tecnología de generación de energía eléctrica mediante combustión en cuanto a madurez tecnológica; y pudiendo afirmarse que se encuentra en el paso entre la fase de demostración y comercialización. 297 La mayoría de los desarrollos de la tecnología de gasificación de biomasa en España han sido con instalaciones de potencias eléctricas inferiores a 2 MW en virtud de lo establecido en el Régimen Especial, si bien no se ha conseguido el despegue de esta tecnología, más allá de proyectos “piloto” promovidos por empresas de ingeniería y del sector energético. Tampoco ha existido ni existe en la actualidad un programa específico que potencie el avance de esta tecnología en España, a diferencia de otros países como EE.UU. o Alemania donde sí se encuentra en un estadio más comercial. Son también varios los Grupos de Investigación de diversas Universidades en España los que están trabajando en el desarrollo de esta tecnología. Por citar algunos casos, las Universidades de Castilla-La Mancha, Sevilla o Zaragoza. 298 6.2.- Principales tecnologías españolas Los principales desarrollos tecnológicos nacionales son los siguientes: • Tecnología “ENAMORA” promovida por la empresa vasca GUASCOR BIOENERGÍA. • Tecnología “TAIM WESER”, compañía zaragozana. • Tecnología “INERCO”, empresa sevillana de ingeniería. • Tecnología “CIDAUT”, Fundación ubicada en Valladolid y muy vinculada al sector de la automoción y el transporte. A continuación se realiza una breve descripción de cada una de ellas. 6.2.1.- Tecnología “ENAMORA-GUASCOR BIONERGÍA”. El origen de esta tecnología se remonta al año 1.993 cuando la firma española Energía Natural de Mora, S.L. inicia la búsqueda de una solución energética para la valorización energética de la cáscara de almendra. Para ello se pone en marcha una instalación de gasificación con tecnología de lecho fluido burbujeante que está en funcionamiento continuado desde octubre de 1.997. La colaboración entre GUASCOR y ENAMORA se inicia en 2.005, con la instalación en la planta de Mora de Ebro (Tarragona) de un grupo cabinado de generación de energía eléctrica aprovechando el syngas generado en la planta de gasificación. La principal fortaleza de esta tecnología es la baja concentración de alquitranes presentes en el syngas, debido a que se encuentran tan craqueados que condensan a bajas temperaturas (por debajo de 200 ºC), de forma que pueden usarse tecnologías convencionales de extracción del material 299 particulado como ciclones o filtros de mangas, sin el problema asociado a la condensación de estos compuestos. Una vez eliminadas las cenizas en suspensión, se consigue condensar los alquitranes generados en el mismo punto en que se produce la condensación del vapor de agua que inevitablemente forma parte del proceso, arrastrando de esta forma la corriente de agua los alquitranes del syngas. Los principales parámetros de la planta se muestran en el cuadro 6.1. y las principales características de la biomasa utilizada se muestran en el cuadro 6.2. El sistema de gasificación se compone de los siguientes elementos: • Tolva de alimentación de biomasa seca al gasificador • Gasificador • Depuración y enfriamiento del gas • Soplante de gas de síntesis • Enfriamiento de cenizas • Almacenamiento de condensados • Antorcha de emergencia La capacidad del gasificador es de 1.700 kg/h y consiste básicamente en un cilindro de acero revestido interiormente con una capa de material aislante, para reducir las pérdidas de calor, y otra concéntrica de material refractario para soportar la temperatura y la fricción en el interior. Para lograr una mayor superficie de intercambio, se incorpora un material particulado, térmicamente estable, no abrasivo y que desempeña las funciones de catalizador y fluidificador. La alimentación de aire se realiza mediante inyectores que permiten una fluidificación uniforme del lecho dentro del reactor. El aire se inyecta a una temperatura de entre 500 y 600 ºC como resultado de su precalentamiento en el 300 intercambiador aire/gas, el cual sale del reactor a unos 800 ºC. El gasificador, como ya se ha apuntado, es de tecnología lecho fluido burbujeante y el agente gasificante es aire. La depuración y el enfriamiento del syngas se realizan en varias etapas. En una primera de enfriamiento un intercambiador gas-aire precalienta el aire hasta los 500-600 ºC. Un segundo intercambiador gas-aire enfría el gas hasta una temperatura máxima de 200 ºC. A continuación se produce un filtrado en seco separando la ceniza la cual, mediante un sistema de tornillo sinfín, es conducida hasta el sistema de enfriamiento de cenizas. Posteriormente dos intercambiadores gas-agua en serie enfrían el gas hasta una temperatura en torno a los 40-50 ºC, uno situado antes de la soplante de gas y otro después. En el situado antes de la soplante, la temperatura del gas desciende por debajo de la de rocío, por lo que condensa la humedad que contiene y es eliminada de forma líquida. En paralelo se eliminan también algunos hidrocarburos y alquitranes ligeros presentes en estado gaseoso, los cuales condensan al ser enfriados y son arrastrados por el agua de condensación, evitando que puedan llegar al motor. El sistema de generación está compuesto por tres motores GUASCOR FBLD 480 de 666 kW de potencia eléctrica nominal. (1.998 kWe en total). El autoconsumo de la planta es de aproximadamente 150 kW en la parte de generación y de 145 kW en la de gasificación. La tensión de generación es de 400 V. En la fotografía número 30 se muestra una visión general de la planta de gasificación basada en la tecnología GUASCOR-ENAMORA. 301 Cuadro 6.1.- PARÁMETROS BÁSICOS DE LA PLANTA DE GASIFICACIÓN DE ENAMORA-GUASCOR PARÁMETRO VALOR UNIDAD Energía eléctrica generada 14.985 MWh/año Autoconsumo eléctrico en gasificación 1.100 MWh/año Autoconsumo eléctrico en generación 1.140 MWh/año Consumo de biomasa (10% humedad) 13.036 t/año Energía térmica disponible en agua caliente (90º C) 12.668 MWh/año Energía térmica disponible en agua caliente (60º C) 4.410 MWh/año Energía térmica disponible en gases de escape (400º C) 8.460 MWh/año Cantidad de cenizas agotadas producidas 680 t/año Cantidad de condensados recogidos 680 t/año Cuadro 6.2.- PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS DE LA BIOMASA UTILIZADA EN LA PLANTA DE ENAMORA-GUASCOR TIPO DE BIOMASA MADERA Cantidad anual 13.300 (10 % Hr) Tm Forma de recepción Triturada (2-12 mm) Peletizada Grado de humedad < 10 % % B.H. Poder calorífico > 4.000 Kcal/kg al 10% Hr Densidad > 200 Kg/m3 al 10% Hr Contenido en cenizas <2 % másico B.S. Contenido en impropios < 0,01 % másico B.S. Fuente: GUASCOR BIOENERGÍA, S.L. 302 Fotografía nº 30. VISTA GENERAL DE LA INSTALACIÓN DE GASIFICACIÓN DE GUASCOR Fuente: Guascor Bioenergía, S.L. 6.2.2.- Tecnología “TAIM WESER”. TAIM WESER es una compañía, radicada en Zaragoza, líder mundial en los sectores de manutención, elevación, plantas de tratamiento de residuos y energías renovables, y que apuesta por la innovación y la tecnología. Ha desarrollado un sistema de gasificación para astillas de biomasa lignocelulósica basado en la tecnología de corrientes paralelas o “down draft”, de lecho móvil en corrientes descendentes. El syngas generado, con un PCI de 1.300 kcal/Nm3 alimenta un motor de General Electric de 750 kWe de potencia con un rendimiento eléctrico del 25% y un rendimiento global de la instalación del 75% (83 % con aprovechamiento del residuo carbonoso o char). 303 Las principales características de la planta se recogen en el cuadro 6.3. Cuadro 6.3.- PARÁMETROS BÁSICOS DE LA PLANTA DE GASIFICACIÓN DE TAIM WESER Capacidad de la planta (biomasa al 23% de humedad) 8.400 t/año Disponibilidad: 7.500 h/año Potencia eléctrica nominal: 1.224 kW Autoconsumo: 12 % Poder calorífico ramón olivo al 10% humedad 3.969 kcal/kg Energía eléctrica exportada: 8.078 MWh/año Energía térmica aprovechada en escapes para secado*: 4.914 MWh/año Rendimiento eléctrico equivalente planta*: 34,17% Fuente: TAIM WESER En las fotografías números 31 y 32 se pueden apreciar una vista general de la planta de gasificación ubicada en las instalaciones de la compañía en Zaragoza, así como del gasificador tipo “downdraft” de la compañía española. 304 Fotografía nº 31. VISTA GENERAL DE LA INSTALACIÓN DE GASIFICACIÓN DE TAIM WESER Fuente: TAIM WESER 305 Fotografía nº 32.- VISTA GENERAL DEL GASIFICADOR Fuente: TAIM WESER 306 6.2.3.- Tecnología “INERCO”. La empresa andaluza INERCO INGENIERÍA, TECNOLOGÍA Y CONSULTORÍA, radicada en Sevilla, ha desarrollado un gasificador de 3 MWt de potencia basado en la tecnología de lecho fluido burbujeante, para su empleo asociado a calderas de combustible de origen fósil, bien para usos térmicos bien para generación eléctrica, sustituyendo para del combustible por otro de origen renovable. La planta piloto desarrollada cuenta con las siguientes instalaciones: • Parque de almacenamiento • Sistema de alimentación • Reactor de lecho fluido burbujeante • Sistema de depuración de gases • Sistema de análisis de gases • Instrumentación y control Los distintos tipos de biomasa probados en la instalación han sido pélets de madera, hueso y orujillo de aceituna, fracción orgánica de residuos urbanos y lodos de depuradora. Las principales características de estas biomasas son un PCI superior a 14,50 MJ/kg, una humedad inferior al 10%, un tamaño de partícula inferior a 20 mm y un contenido en cenizas por debajo del 3%. A continuación se muestra una imagen de la planta de INERCO. 307 Fotografía nº 33. VISTA GENERAL DE LA PLANTA DE GASIFICACIÓN DE INERCO. Fuente: INERCO 6.2.4.- Tecnología “CIDAUT”. La Fundación CIDAUT es un Centro Tecnológico que desarrolla su actividad en los ámbitos del transporte y la energía. En el Área de Energía y Medio Ambiente ha desarrollado un compacto sistema para la valorización energética de la biomasa lignocelulósica aplicada a la cogeneración distribuida. Tanto por el tipo de tecnología como por su pequeño tamaño y concepción modular se puede afirmar que no existe nada igual en el mercado. El sistema desarrollado consiste en un módulo para la producción de energía eléctrica de 100 kW de potencia compuesto por una planta de 308 gasificación de biomasa con tecnología downdraft y por 4 motores de combustión interna alternativos de 25 kW cada uno alimentados con el syngas producido. El módulo integra además una plataforma transportable que incluye el sistema de gasificación, el de acondicionamiento de gas y el de generación de energía. El proceso de gasificación está basado en la tecnología de lecho fijo y corrientes paralelas y constituido por cuatro procesos básicos: secado, pirólisis, oxidación y reducción. El subsistema de limpieza permite eliminar todas las impurezas contenidas en la corriente de gas previo a su alimentación a los motores (partículas, agua y otros compuestos nocivos para los motores). Las principales características técnicas de la instalación son las siguientes: • Potencia eléctrica generada: 100 kWe • Potencia térmica generada: 200 kWt • Biomasa utilizada: lignocelulósica de tipo leñoso • Consumo anual de biomasa: 800-1.000 Tm/año (100-125 kg/h) • Dimensiones de la planta: 12 x 2,5 x 3,6 • Sistema de operación y control: automatizado • Peso total de la planta; 10 Tm • Autoconsumo: 12 kW A continuación se muestra una fotografía de la instalación y un esquema general de la planta. 309 Fotografía nº 34. VISTA DE LA PLANTA DE GASIFICACIÓN DE CIDAUT Fuente: CIDAUT Figura 6.2. ESQUEMA GENERAL DE LA INSTALACIÓN DE CIDAUT Fuente: CIDAUT 310 6.2.5.- Otras tecnologías. Aparte de las cuatro tecnologías anteriores que son las principales existentes en España, existen numerosas empresas que ofertan plantas de gasificación de biomasa bajo la modalidad “llave en mano”. También existe alguna planta en explotación como es el caso de la de gasificación de residuos vegetales de invernadero promovida por la firma ALBAIDA RECURSOS NATURALES Y MEDIOAMBIENTE, S.A., de 1,8 MWe de potencia ubicada en la localidad almeriense de Níjar. Otra compañía que ha promovido tecnologías vinculadas a la gasificación ha sido la firma JIMÉNEZ BELINCHÓN, S.A. la cual ha desarrollado un proceso de “pirogasificación” de biomasa, basada en la disociación molecular de la biomasa. La pirólisis, como ya se ha visto, se alcanza a temperaturas próximas a los 500 ºC y tiene lugar en un tambor rotatorio de velocidad variable con bocas y accesos para la carga, salida de cenizas y el denominado “pyrogas”. Por último, la firma PASCH dispone de un sistema de gasificación y cogeneración con biomasa forestal similar al de CIDAUT cuyas características se recogen en el cuadro 6.4. 311 Cuadro 6.4.- PARÁMETROS BÁSICOS DE LA PLANTA DE GASIFICACIÓN DE PASCH SISTEMA DE GASIFICACIÓN MÓDULO DE COGENERACIÓN Combustible: astillas de madera Potencia eléctrica: 150 kWe (130 kWe) Tamaño: 30-70 mm Potencia térmica: 230 kWt (agua caliente) Humedad: ≈ 15% Aporte de energía: 460 kWt PCI del gas: 1,38 kWh/m3 (Leña): 150 kg/h Composición del syngas: - Hidrógeno: ≈ 15% Motor de gas: - Monóxido de carbono: ≈ 20% MAN E 2842 R 312 - Dióxido de carbono: ≈ 20% 12 cilindros / V - Metano: ≈ 1% 21,93 l - Nitrógeno: ≈ 49% 1.500 rpm Fuente: PASCH Y CIA 312 7.- EL NUEVO MODELO DE GESTIÓN DE SUBRPRODUCTOS 7.1.- Introducción El actual modelo de gestión de subproductos del olivar tal y como ya se ha argumentado, es insostenible en términos económicos, en tanto que conlleva una serie de costes asociados a la gestión de los subproductos; y medioambientales puesto que desaprovecha una fuente importante de energía procedente de los restos de las podas de olivar y moviliza ingentes cantidades de un subproducto con una humedad elevada con las consecuentes emisiones de gases de efecto invernadero ocasionadas por su transporte en camión por carretera, entre otros. Todo ello, además, no contribuye a la calidad del aceite de oliva ni a su imagen en términos de marketing, aspectos que sin duda influyen en la política de marketing de las empresas productoras de aceite de olivar virgen. Esto es necesario transformarlo, es decir, convertir esos aspectos negativos en nuevas oportunidades de negocio para un sector atenazado constantemente por 313 los bajos precios del aceite de oliva y por la amenaza de la supresión de las subvenciones a partir del año 2013 con un nuevo marco comunitario de apoyo al olivar. Para ello hay que realizar, al menos, las siguientes tareas: • Suprimir el coste de eliminación (quemado o astillado) de los restos de poda transformándolo en un ingreso derivado de la venta de la biomasa a la sociedad gestora de la instalación de gasificación de biomasa, sea la propia almazara o bien una empresa de servicios energéticos. • Reducir el coste de manipulación del orujo convirtiéndolo en un ingreso como consecuencia de disponer de un subproducto con un menor grado de humedad, el cual puede ser enviado a la extractora de aceite de orujo para la extracción del aceite residual que contiene, o bien, empleado como biocombustibles en la propia almazara o comercializándolo para fines térmicos o para generación eléctrica. • Generar un ingreso adicional por la venta de la energía eléctrica generada en virtud del denominado Régimen Especial según el Real Decreto 661/2007, de 25 de mayo (BOE núm. 126 de 26 de mayo de 2007); o, en su defecto, su autoconsumo en virtud del Real Decreto 1699/2011, de 18 de noviembre, por el que se regula la conexión a red de instalaciones de producción de energía eléctrica de pequeña potencia (BOE núm. 295 de 8 de diciembre de 2011). • Independizar el sector productor de aceite de oliva del sector extractor de aceite de orujo, puesto que ahora la almazara dispone de una fuente de calor para el secado del orujo. Esto puede conllevar un cambio de modelo también en las industrias de extracción, las cuales deberán jugar un papel crucial como instalaciones gestoras de residuos de almazaras. Si esto se consigue, este nuevo modelo sería más innovador, más competitivo en términos económicos, y también más sostenible, puesto que no requiere de la 314 utilización de ninguna fuente de energía de origen fósil, y más eficiente desde el punto de vista energético. Ahora bien, para que este nuevo modelo sea aceptado por el sector y, por tanto, implementado por el mismo, debe ser viable en términos económicos, puesto que se trata de acometer inversiones además de la propia instalación de gasificación, como por ejemplo el sistema de almacenamiento, pre-tratamiento y alimentación de restos de podas al gasificador y la balsa y el secadero de orujo, las cuales deben de estar soportadas por sus correspondientes rentabilidades económicas y financieras. Para la determinación de esta viabilidad se va a construir un caso base, a partir de cual se determinaran las condiciones de contorno bajo las cuales el modelo podría ser rentable y, por tanto, implementado por el sector oleícola. 315 7.2.- Análisis comparativo de alternativas Son tres las opciones existentes para analizar desde un punto de vista técnico, energético y económico-financiero. A saber: a) Secado tradicional empleando parte del orujillo generado en el proceso, entorno al 53% (figura 7.1). b) Secado empleando el calor procedente de los gases de escape y de la refrigeración de máquinas térmicas (motores y/o turbinas) en instalaciones de cogeneración termoeléctrica alimentadas con gas natural. (figura 7.2.) c) Secado similar al caso b) pero en lugar de utilizar gas natural para alimentar las máquinas térmicas, emplear el syngas generado en una instalación de gasificación de biomasa de restos de podas de olivar. Este es el modelo propuesto por el autor en la presente Tesis Doctoral. (figura 7.3.) A continuación se va a describir cada una de las alternativas anteriores, realizando un balance de masas y energético, y analizando sus ventajas y sus inconvenientes. Para cada uno de los casos se parte de una cantidad de orujo húmedo y graso de 1.800 toneladas anuales, que corresponden con una almazara que molture unos 2.200.000 kg por campaña, la cual puede ser considerada como “tipo” como se verá en el siguiente apartado. 7.2.1.- Secado tradicional Esta opción es la convencional, es decir, así ha funcionado tradicionalmente el sector extractor de aceite de orujo. Es el encargado de recibir el orujo generado por las almazaras y de extraer, previo secado, el aceite residual que 316 contiene para la obtención de aceite de orujo de oliva crudo39. Posteriormente, y puesto que no es apto para el consumo humano, es sometido a un proceso químico de refinado y así obtener aceite de orujo de oliva refinado40 que sí es apto para el consumo. Como subproducto se obtiene el llamado orujo extractado y seco o, más comúnmente llamado, orujillo. Bajo esta alternativa, parte del orujillo se autoconsume para el secado del orujo húmedo y graso, también llamado alperujo (un 53 % en este caso), y el resto se podría destinar a la producción de energía eléctrica mediante tecnología de combustión, tal y como ya se ha explicado. Por tanto, del secado de las 1.800 toneladas anuales de orujo húmedo se generan 0,3 GWh de energía eléctrica a partir de biomasa que es inyectada a la red, sin depender de ningún tipo de energía de origen fósil, lo que puede ser considerado como la principal ventaja de este sistema tradicional. Como principal inconveniente cabe mencionar los aspectos medioambientales derivados de utilizar un combustible sólido (orujillo) para generar el calor demandado por el secado, especialmente en materia de emisión de partículas y de monóxido de carbono41. 39 Aceite obtenido a partir del orujo de oliva mediante tratamiento con disolvente o por medios físicos, o que corresponda, con excepción de algunas características determinadas, a un aceite de oliva lampante; con exclusión de los aceites obtenidos por procedimientos de reesterificación y de cualquier mezcla con aceites de otra naturaleza y cuyas otras características son conformes a las establecidas para esta categoría. 40 Aceite obtenido mediante refino de aceite de orujo de oliva crudo, cuya acidez libre, expresada en ácido oleico, no podrá ser superior a 0,3 g por 100 g y cuyas otras características son conformes a las establecidas para esta categoría. 41 BOJA núm. 37 de 2 de abril de 1998 317 Figura 7.1.- SISTEMA TRADICIONAL DE SECADO DE ORUJO SIN COGENERACIÓN ORUJO AGUA 1.800 t ACEITE DE ORUJO 1.140 t 42 t ORUJO SECO 326 t SECADERO ORUJILLO 292 t EXTRACCIÓN 660 t 618 t PLANTA DE BIOMASA E. ELÉCTRICA 0,3 GWh 326 t Fuente: Elaboración propia 7.2.2.- Secado con cogeneración El secado es el mayor coste para la industria extractora de aceite de orujo, de ahí la constante búsqueda de alternativas energéticas que permitan optimizar el proceso industrial compatibles con el medio ambiente. Una solución tecnológica que está siendo adoptada por el sector extractor de aceite de orujo, como consecuencia de las cada vez mayores exigencias de tipo ambiental en lo que a emisión de partículas se refiere y para optimizar económicamente el proceso de producción, es la instalación de sistemas de cogeneración termoeléctrica alimentados con gas natural. Con ello se obtiene la energía térmica para el secado del orujo y se genera energía eléctrica, al igual que en el caso anterior, que es inyectada a la red. De esta manera se libera el 100% del orujillo producido y, por tanto, se genera más cantidad de energía eléctrica a partir de biomasa tal y como se muestra en el esquema de la figura 7.2. El principal inconveniente es la inexistencia de infraestructuras de suministro de este combustible fósil en muchos de los emplazamientos en los que se ubican 318 las extractoras, lo que provoca que tenga que trasladarse el gas licuado para posteriormente gasificarse, con los sobre costes que ello supone. Figura 7.2. SISTEMA TRADICIONAL DE SECADO DE ORUJO CON COGENERACIÓN ORUJO 1.800 t AGUA 1.140 t CALOR CHP ACEITE DE ORUJO 42 t ORUJO SECO SECADERO 1,5 GWh ORUJILLO EXTRACCION 660 t 618 t PLANTA DE BIOMASA E. ELÉCTRICA 0,6 GWh E. ELÉCTRICA GAS NATURAL 2,2 GWh E. ELÉCTRICA 1,0 GWh 1,6 GWh Fuente: Elaboración propia Del total de extractoras de aceite de orujo de España (38) 15 de las cuales están en la provincia de Jaén, solamente 14 disponen de sistemas de cogeneración termoeléctrica, el resto siguen utilizando el sistema tradicional de secado según la Asociación Nacional de Extractores de Aceite de Orujo, ANEO. Esta solución presenta un inconveniente importante frente a la anterior y es la dependencia de la misma a los combustibles de origen fósil, puesto que se necesitan 2,2 GWh de gas natural. Como aspecto positivo es la generación de 1,6 GWh de energía eléctrica frente a los 0,3 GWh del caso anterior, 0,6 a partir de biomasa (el doble que en el caso anterior) y 1,0 GWh a partir del gas natural en la instalación de cogeneración. 319 7.2.3.- Secado con gasificación En la presente Tesis Doctoral se propone la sustitución de éste por syngas procedente de una planta de gasificación de biomasa tal y como se muestra en la figura 7.3. En este caso se genera la misma cantidad de energía 1,6 GWh pero sin depender de combustibles de origen fósil, tratándose por tanto de una solución sostenible desde el punto de vista ambiental y energético; y también muy valorada por el sector desde un punto de vista estratégico por la independencia que supone de las extractoras de aceite de orujo, las cuales ejercen una posición dominante en el sector oleícola, si bien su función es clave e imprescindible para el funcionamiento del mismo, dado que las almazaras en su mayor parte no tienen recursos para realizar el secado en sus propias instalaciones. Con esta solución la almazara envía a la extractora un producto seco, por el que no se ve obligada a pagar para su retirada y por el que percibe un ingreso debido a su todavía contenido graso y su valor energético. Es la razón principal por la que este tipo de instalaciones deben ubicarse en las almazaras. Figura 7.3.- SISTEMA TRADICIONAL DE SECADO DE ORUJO CON PLANTA DE GASIFICACIÓN DE BIOMASA ORUJO 1.800 t SYNGAS GASIFICACIÓN ACEITE DE ORUJO 42 t ORUJO SECO HEAT CHP 2,2 GWh AGUA 1.140 t SECADERO 1,5 GWh ORUJILLO EXTRACCION 660 t PLANTA DE BIOMASA E. ELÉCTRICA 0,6 GWh E. ELÉCTRICA BIOMASA 1,000 t/año 618 t E. ELÉCTRICA 1,0 GWh 1,6 GWh Fuente: Elaboración propia 320 7.3.- Descripción y alcance del modelo. Caso base El modelo parte de una superficie de olivar de aproximadamente 1.000 ha, las cuales pueden producir del orden de 3.000 Tm anuales de aceituna y 1.000 Tm anuales de restos de poda [21]. A partir de ahí, es capaz de generar 750 MWh de energía eléctrica anuales, que pueden ser inyectados a la red para su comercialización o también autoconsumidos; y energía térmica suficiente para el secado de las 2.400 Tm anuales de alperujo, teniendo en cuenta una reducción de la humedad del 30% y un rendimiento del secado del 50%. En total 1.467.000 kWh de energía térmica que permitirían obtener del orden de 700 Tm de orujillo al 25-30% de humedad. Todo ello se puede apreciar en el esquema de la figura 7.4. Tal y como ya se ha comentado, este modelo puede ser aplicable en cualquier ubicación en la que exista un demandante de energía térmica, a diferencia del tradicional en el cual las plantas de biomasa se suelen localizar cerca del punto de evacuación de energía eléctrica proporcionado por la compañía distribuidora de electricidad. No obstante, en la presente Tesis Doctoral se propone a la almazara como punto estratégico en el medio rural, porque dispone de espacio suficiente y porque presenta demandas de energía térmica, en concreto para el secado del orujo generado en el proceso productivo. Para ello, tendría que construir una balsa donde almacenarlo y secarlo durante todo el año, puesto que es bien sabido que la actividad de la almazara es estacional. Las principales características que deben reunir las almazaras se recogen en el cuadro 7.1. Según la información facilitada por la Delegación Provincial de la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía, en la provincia de Jaén hay un total de 70 almazaras que molturan entre 1,5 y 3 millones de kg, lo que supone un 21,41% del total de la provincia. Por ello, el mercado potencial en la 321 provincia de Jaén para este tipo de aplicación tecnológica descrita en la presente Tesis Doctoral es más que significativo. Cuadro 7.1.- REQUISITOS TÉCNICOS QUE DEBE CUMPLIR LA ALMAZARA. Cantidad máxima de aceituna molturada por campaña Biomasa requerida anualmente, con una humedad del 15%, para la alimentación del gasificador 2.200 TM 1.000 Tm Cantidad de orujo húmedo o alperujo operando 7.000 horas anuales y considerando unos rendimientos del intercambio y 1.800 Tm trómel del 50% Superficie aproximada de olivar ubicado en el entorno de la almazara Distancia mínima a la extractora de aceite de orujo más próxima Fuente: Elaboración propia 322 750 ha 20 km Figura 7.4.- DESCRIPCIÓN GENERAL DEL NUEVO MODELO DE GESTIÓN DE SUBPRODUCTOS DEL OLIVAR ACEITE DE OLIVA (600 t/año) ALMAZARA OLIVAR (1.000 Ha) ACEITUNAS (3.000 t/año) ORUJO (2.400 t/año) ENERGÍA TÉRMICA PLANTA DE GASIFICACIÓN DE BIOMASA SECADERO RESTOS DE PODA (1.000 t/año) (660 Ha) ENERGÍA ELÉCTRICA (750 MWh/año) Fuente: Elaboración propia 323 ORUJILLO (700 t/año) EXTRACTORA DE ACEITE DE ORUJO 7.4.- Viabilidad económica. Condiciones de contorno Un proyecto de inversión ha de ofrecer unas rentas superiores al desembolso requerido para su ejecución, es decir, debe generar más recursos económicos que los invertidos. La evaluación económica de un proyecto permite analizar su rentabilidad, estimada a partir de este movimiento de fondos. Los criterios más utilizados son el Valor Actual Neto (VAN) y la Tasa Interna de Rentabilidad (TIR). El VAN estima el valor que se espera que genere el proyecto y se obtiene restando a los ingresos actualizados los desembolsos también actualizados. La fórmula genérica para su cálculo, es VAN = ∑ CF/(1+k)i Donde: • k es la tasa de descuento equivalente a la rentabilidad mínima exigida • CF son los flujos de caja generados por el proyecto, entendidos como el beneficio (Entradas – Salidas) más la amortización. Para aceptar una inversión, su VAN ha de ser positivo, es decir, los fondos generados han de superar a los absorbidos por la inversión. La TIR mide el tipo de interés compuesto que se obtiene sobre el desembolso de la inversión, es decir, es el rendimiento promedio del capital invertido durante toda la vida del proyecto. Es el valor de k que hace que el VAN sea nulo, por tanto, se calcula a partir de la siguiente expresión: 0 = ∑ CF/(1+TIR)i Para aceptar un proyecto su TIR ha de ser superior a la rentabilidad mínima exigida, k. 324 Tanto en el análisis del caso base como en el resto se van a utilizar ambos parámetros, especialmente la TIR para determinar la rentabilidad del proyecto de inversión y también la del accionista. 7.4.1.- Análisis del caso base Para el análisis de viabilidad económica del modelo se va a partir de un “caso base” caracterizado por los parámetros recogidos en el cuadro siguiente. Se trata de una instalación incluida en el subgrupo a.1.3 del RD 661/2007 por el que se regula la actividad de producción de energía eléctrica en el llamado Régimen Especial. El valor de los principales parámetros del mismo procede de un caso real analizado para un proyecto de inversión y han sido cotejados por la Fundación CIDAUT que es el Centro de Investigación que ha desarrollado el gasificador descrito en la presente Tesis Doctoral. Los parámetros económicos han sido obtenidos de la legislación vigente suponiendo la existencia del Régimen Especial como se ha apuntado anteriormente; si bien se trata solamente de una hipótesis puesto que, como ya se ha explicado en la actualidad, este régimen está suspendido y a la espera por parte del Gobierno de que se vuelva a reactivar. Otra opción podría ser analizar el consumo energético de una almazara y comparar el coste de ese consumo con el ahorro obtenido como consecuencia de la energía producida por el sistema. A los precios actuales de la energía eléctrica es más que previsible que la rentabilidad fuese más que aceptable. 325 Cuadro 7.2.- CASO BASE. PARÁMETROS DE PARTIDA PARÁMETRO UNIDAD VALOR Potencia eléctrica nominal kWe 100,00 Horas anuales de funcionamiento h/año 7.500 PCI biomasa con el 20% de humedad kJ/kg 14.190 Autoconsumo kW 12,00 Potencia térmica disponible kW 200,00 Precio venta energía eléctrica42 c€/kWh 13,8233 Complemento por eficiencia energética43 c€/kWh 3,598 Rendimiento eléctrico bruto % 23,00 Porcentaje de potencia térmica aprovechable % 100,00 Precio de venta del calor c€/kWh 2,00 Inversión bruta44 € 550.000 Coste biomasa con un 20% de humedad €/Tm 30,507 Costes de O&M c€/kWh 4,00 Incentivos a la inversión % 0,00 Rendimiento Eléctrico Equivalente mínimo45 % 27,00 Amortización Años 10,00 Fuente: Elaboración propia 42 ORDEN ITC/3353/2010, de 28 de diciembre por la que se establecen los peajes de acceso a partir del 1 de enero de 2011 y las tarifas y primas de las instalaciones del régimen especial. BOE núm. 316. Ministerio de Industria, Turismo y Comercio. 43 Recogido en el artículo 28 del RD 661/2007 (BOE núm. 126) y estipulado para aquellas instalaciones que acrediten un rendimiento eléctrico equivalente superior al mínimo por tipo de tecnología (0.27 en este caso). 44 Se incluyen el secadero y la instalación de pre tratamiento de la biomasa. 45 El Rendimiento Eléctrico Equivalente viene expresado por la fórmula (E+V)/Q donde E es la energía eléctrica generada, V la producción de calor útil y Q el consumo de energía primaria. 326 En base a estos parámetros de partida se obtienen los resultados contemplados en el cuadro 7.3. Los dos parámetros fundamentales para la determinación de la viabilidad económica de la inversión, como ya se ha indicado, son el Valor Actual Neto (VAN) y la Tasa Interna de Retorno (TIR). Por tanto y en base a los datos de partida, se puede concluir con que se trata de una inversión rentable desde un punto de vista económico, con una rentabilidad aceptable a pesar de la coyuntura financiera y el elevado riesgo tecnológico. Cuadro 7.3.- RESULTADOS CASO BASE PARÁMETRO UNIDAD VALOR Ingresos por venta de energía eléctrica €/año 130,656.59 Ingresos por venta de energía térmica €/año 30,000.00 Total INPUTS €/año 160,656.60 Coste anual biomasa €/año 28,266.44 Coste anual O&M €/año 22,500.00 Total OUTPUTS €/año 58,266.44 VAN a 15 años € 372,803.96 TIR del proyecto a 15 años % 18.00 Fuente: Elaboración propia Si se tiene en cuenta la financiación, con una estructura 20% fondos propios y 80% fondos ajenos, el valor del TIR para el accionista se sitúa en el 47%. Los datos de la financiación se recogen en el cuadro 7.4. 327 Cuadro 7.4.- DATOS FINANCIEROS DEL PROYECTO Amortización anual 55.000,00 IPC medio (%) 3,00 Precio del crédito (%) 5,00 % Autofinanciación 20,00 Años devolución préstamo 10,00 Volumen del crédito 440.000,00 Devolución anual 44.000,00 Fuente: Elaboración propia 7.4.2.- Determinación de las condiciones de contorno Los tres parámetros que a priori más pueden afectar a la rentabilidad del proyecto de inversión son el coste de la biomasa a pie de planta, el porcentaje de aprovechamiento del calor residual y el coste específico de la inversión. A continuación se analiza en detalle cada uno de ellos. El primero es el coste de la biomasa a pie de planta y en las condiciones idóneas para ser alimentada al gasificador (humedad inferior al 30% y tamaño máximo de astilla 10 cm). Aunque no existe un mercado regulado para la biomasa con fines energéticos, ésta se suele adquirir en función de dos parámetros que son la humedad y el Poder Calorífico Inferior (PCI). En los gráficos 7.1. y 7.2. se puede apreciar la relación humedad-PCI y precio-humedad para una muestra de restos de poda de olivar, pudiendo observarse la relación lineal decreciente existente entre ambos. 328 Por ejemplo, para una biomasa con un 20% de humedad su PCI puede situarse en 14 MJ/kg, mientras que si su humedad se duplica hasta el 40%, el valor del PCI desciende hasta 10 MJ/kg, es decir, un 28% menos. Gráfico 7.1.- PCI FRENTE A HUMEDAD PARA RESTOS DE PODAS DE OLIVAR 20 18 16 PCI (MJ/kg) 14 12 10 8 6 4 2 0 0,00 10,00 20,00 30,00 40,00 50,00 60,00 70,00 80,00 90,00 100,00 HUMEDAD (%) Fuente: Elaboración propia La relación del precio de la biomasa con la humedad se puede apreciar en el gráfico 7.2. Para un valor de la humedad del orden del 20% el precio a pagar por la biomasa puede situarse en el entorno de los 30 €/Tm. 329 Gráfico 7.2.- PRECIO DE LA BIOMASA FRENTE A HUMEDAD PARA RESTOS DE PODAS DE OLIVAR 45 40 35 PRECIO (€/t) 30 25 20 15 10 5 0 0,00 10,00 20,00 30,00 40,00 50,00 60,00 70,00 80,00 90,00 100,00 HUMEDAD (%) Fuente: Elaboración propia Desde el punto de vista de la Tasa Interna de Rentabilidad (TIR) hasta un coste aproximado de biomasa de 5,5 €/Tm es posible obtener rentabilidades aceptables, por encima del 10%. Es evidente que cuanto más barato se consiga la biomasa mayor rentabilidad tendrá el proyecto, alcanzando valores superiores al 25%. En la gráfica 7.3. se puede apreciar lo anteriormente expuesto. 330 Gráfico 7.3.- ANÁLISIS DE LA RENTABILIDAD (TIR) EN FUNCIÓN DEL COSTE DE LA BIOMASA 30,00 25,00 TIR (%) 20,00 15,00 10,00 5,00 - 1,00 2,00 3,00 4,00 5,00 6,00 7,00 8,00 9,00 10,00 COSTE BIOMASA (c€/kg) Fuente: Elaboración propia El segundo parámetro es el llamado complemento por eficiencia que está directamente relacionado con el porcentaje del calor útil aprovechado. Por tratarse de una instalación de cogeneración termoeléctrica, debe de aprovecharse al máximo la energía térmica generada para que la eficiencia energética sea mayor. En el cuadro 7.5. se recogen las principales características de los orujos producidos en las almazaras en función del sistema de separación de fases utilizado, si bien el más usual, al menos en Andalucía, corresponde al llamado de 2 fases o ecológico. 331 Cuadro 7.5.- CARACTERÍSTICAS DE LOS ORUJOS SEGÚN EL SISTEMA DE ELABORACIÓN SISTEMAS DE CENTRIFUGACIÓN DE MASAS SISTEMA DE PRENSAS 3 FASES H (%) 28.16 RG/seco RG/hdo. (%) (%) 7.17 5.15 H (%) 48.33 2 FASES RG/seco RG/hdo. (%) (%) 5.08 2.62 H (%) 53.57 RG/seco RG/hdo. (%) (%) 6.28 2.92 Fuente: Instituto de la Grasa de Sevilla. CSIC De la lectura del mismo se deducen dos consecuencias directas y negativas desde un punto de vista de gestión del subproducto orujo: un incremento de la humedad de casi el doble al pasar del sistema de prensas, en desuso en España, al de 2 fases, el mayoritario; y una disminución de la riqueza grasa que implica un menor atractivo comercial por parte del sector extractor. Desde un punto de vista de rentabilidad económica, para que ésta se sitúe por encima del 10% es necesario aprovechar el calor generado por la gasificación más allá del 85%, tal y como se muestra en el gráfico 7.4. Por último, la inversión específica de la planta expresada en €/kWe. Las referencias existentes son escasas puesto que es una tecnología muy innovadora y con un muy bajo desarrollo comercial en España como ya se ha comentado. Otras tecnologías como la combustión o la gasificación de potencias del entorno de los 2 MW o superiores presentan unos valores de inversión inferiores, del orden de 2.000 €/kWe instalado, ratio influenciado por las economías de escala. Aún así, se pueden obtener rentabilidades superiores al 10% con costes específicos de hasta casi 7.000 €/kW instalado según el gráfico 7.5., valores muy superiores al del resto de tecnologías de generación de energía eléctrica existentes a nivel comercial [30]. 332 Gráfico 7.4.- ANÁLISIS DE LA RENTABILIDAD (TIR) EN FUNCIÓN DEL PORCENTAJE DE APROVECHAMIENTO DE CALOR 16,00 14,00 12,00 TIR (%) 10,00 8,00 6,00 4,00 2,00 0% 20% 40% 60% 80% 100% 120% COMPLEMENTO EFICIENCIA (%) Fuente: Elaboración propia Gráfico 7.5.- TIR EN FUNCIÓN DE LA INVERSIÓN ESPECÍFICA 40,00 35,00 30,00 TIR (%) 25,00 20,00 15,00 10,00 5,00 0 1.000 2.000 3.000 4.000 5.000 INVERSIÓN ESPECÍFICA (€/kWe) Fuente: Elaboración propia 333 6.000 7.000 8.000 7.5.- Modelos de explotación Las dos principales modalidades de gestión del negocio pueden ser directa, a través de los propietarios de las almazaras, o indirecta bajo la modalidad de los llamados “Servicios Energéticos”. A continuación se explica cada uno de ellos. En el caso de que la inversión sea ejecutada por los propietarios de la almazara, ellos mismos, bien sean los propios agricultores bajo la fórmula de sociedad cooperativa, bien una sociedad mercantil; asumirían la inversión y la explotación de la planta con las ventajas e inconvenientes que ello conlleva, especialmente en un momento de dificultades financieras como el actual. A ello también habría que unir el desconocimiento de la tecnología, por lo que podría ser una solución arriesgada desde los puntos de vista técnico y financiero. En este caso dispondrían de una fuente de calor a coste “0”, el coste de la biomasa también sería muy bajo por ser los propietarios de la misma, facturarían toda la energía eléctrica producida a la compañía eléctrica según el Régimen Especial y acometerían la totalidad de la inversión, buscando la financiación así como los posibles incentivos. Bajo el modelo de servicios energéticos se trata de un enfoque absolutamente distinto del negocio basado en lo que la Directiva 2006/32/CE de 5 de abril sobre la eficiencia en el uso final de la energía y los servicios energéticos entiende por Empresas de Servicios Energéticos, que son aquellas que proporcionan soluciones de eficiencia energética en las instalaciones del cliente afrontando cierto riesgo económico. Por tanto, en este caso es una empresa especializada la que acomete la inversión, la financia y presta un servicio de venta de calor a la almazara, 334 recibiendo aquella un pago estipulado en un contrato firmado durante un periodo de tiempo suficiente para recuperar la inversión. En este caso, el coste de la biomasa sería elevado al tener que acudir al mercado, facturarían la totalidad de la energía eléctrica y el calor cedido a la almazara y acometerían la inversión, previsiblemente con menores dificultades que en el caso anterior. 335 7.6.- Externalidades Además de demostrar la viabilidad económica del modelo, se deben considerar otras variables externas, no menos importantes y que contribuyen a potenciarlo, como las siguientes: • Generación de empleo directo e inducido. No existen datos para este tipo de tecnología por la novedad que supone. Extrapolando para el caso de plantas de combustión de biomasa, se puede afirmar que se generan unos 18 empleos por MW instalado en todo el ciclo de vida del proyecto: ingeniería y promoción, obra civil, explotación y logística y acopio de biomasa (Fuente: VALORIZA ENERGÍA) • Reducción de gases de efecto invernadero desde un punto de vista de la sostenibilidad del modelo. La no utilización de combustibles de origen fósil en el proceso supone una reducción de emisiones a la atmósfera de gases como el CO2, cuyo balance es neutro para el caso de la biomasa, e incluso negativo en el olivar puesto que lo único que se valorizan son los restos de las podas y no todo el árbol. • Grado de diversificación productiva para el sector oleícola. La introducción de este modelo supone la aparición de nuevas actividades productivas en el medio rural, como por ejemplo todas las asociadas a la logística y el tratamiento de la biomasa y a la operación y mantenimiento de nuevas tecnologías, como es en este caso la gasificación o el secado del orujo. • Reducción de la dependencia energética. Andalucía presenta un grado de autoabastecimiento energético del 13,90 % en 2011 según la Agencia Andaluza de la Energía, y en cambio es una región con un potencial de biomasa del orden de 3,958 ktep/año según la misma fuente, del cual el 33.39% corresponde a residuos agrícolas, y de éstos el 61% (803.25 ktep) procede exclusivamente del olivar. 336 • Innovación, tanto de proceso, puesto que se trata de un modelo único que no existe en ninguna otra región productora de aceite de oliva, como desde el punto de vista de las tecnologías de gasificación y de secado. • Contribución a la generación distribuida. El modelo contribuye a fomentar la generación distribuida, acercando la generación de energía a los puntos de consumo lo que supone una reducción de pérdidas de energía por transporte y distribución haciendo más eficiente el modelo desde un punto de vistas energético y ambiental. • Ahorro de energía primaria de 869,789.91 tep y del 20.49% en términos porcentuales. • Reducción de la dependencia del sector extractor de aceite de orujo, que supone una ventaja estratégica y garantiza unos mayores niveles de autonomía para las almazaras, algunas de las cuales construyen balsas de almacenamiento de orujo para poder desarrollar la campaña con normalidad. 337 8.- CONCLUSIONES 8.1.- Principales conclusiones En general, puede afirmarse que entre las ventajas que presenta la utilización de la biomasa con fines energéticos cabe citar las siguientes: • En el caso de residuos o subproductos de carácter orgánico, su eliminación presenta aspectos beneficiosos para la economía (evita incendios, plagas y enfermedades, etc.), la salud (limita la proliferación de agentes causantes o transmisores de enfermedades) y el entorno paisajístico. • El bajo contenido en azufre de la biomasa hace que, en su combustión, el nivel de producción de óxidos de azufre sea muy bajo, evitándose así las llamadas “lluvias ácidas” que se derivan de la combustión de carbones y derivados del petróleo. • Crea puestos de trabajo locales en las zonas de producción y consumo, en mayor proporción por unidad energética que las energías fósiles. • Disminuye la dependencia energética del exterior. 338 • Se reducen los costes de transporte de la energía por tratarse de una energía distribuida. • Se ahorran divisas por reducción de importaciones de combustibles fósiles. • Se incrementan los ingresos vía IRPF así como el IVA En relación al uso de la biomasa en edificios en sustitución de combustibles de origen fósil como el gasóleo C o la electricidad presenta un conjunto de ventajas, las cuales conviene tener en consideración, si bien algunas de ellas son independientes del uso que finalmente se le dé. Algunas de ellas se recogen a continuación: • Un menor coste (€/MWh) en relación a los combustibles de origen fósil como el gasóleo C o el gas natural y la electricidad, lo que redunda directamente en el período de recuperación de la sobre-inversión necesaria, el cual puede situarse, en función de la existencia o no de incentivos, en el entorno de los 4 años. • Menor impacto ambiental puesto que presentan unos valores inferiores de misiones de CO2 lo que eleva la calificación energética del edificio y prácticamente nulas de SO2. El grado de sostenibilidad dependerá del conjunto de operaciones a los que haya sido sometida la biomasa, es decir, de su producción, transporte y manipulación. • Es compatible con el Código Técnico de la Edificación y además puede ir acompañada, o no, de la correspondiente instalación de energía solar térmica para Agua Caliente Sanitaria. • Los costes de operación y mantenimiento son relativamente sencillos y las cenizas suelen tener un valor agronómico o emplearse en taludes de carreteras. 339 • Los valores de la eficiencia energética de las calderas son elevados, y pueden alcanzar valores del 92%, así como elevados niveles de control y automatización. • Versatilidad. Con la biomasa como fuente primaria de energía se puede obtener calor para la climatización y para el ACS, producir frío mediante sistemas de absorción e, incluso, generar energía eléctrica (trigeneración). También, y como no podría ser de otra forma, presenta inconvenientes, la mayoría de los cuales ya han sido abordados en la presente Tesis y centrados en el gran desconocimiento que existe, a todos los niveles, de la biomasa como recurso energético. Además, por supuesto, de su heterogeneidad, baja densidad y estacionalidad. En el cuadro 8.1., se recogen las principales ventajas así como los inconvenientes de la biomasa como fuente renovable de energía. En relación a las condiciones de contorno que hacen viable desde el punto de vista económico y financiero al nuevo modelo de gestión de subproductos del olivar planteado por el Autor en la presente Tesis Doctoral, cabe citar lo siguiente: permite obtener rentabilidades económicas, medidas en términos de TIR, por encima del 10%, con costes de biomasa a pie de planta de hasta un máximo de 6 c€/kg, porcentajes de aprovechamientos térmicos superiores al 85% e inversiones específicas de hasta 6.500 €/kWe sin necesidad de ningún incentivo. En cuanto a las opciones para la gestión del mismo, ésta puede ser llevada a cabo desde las propias almazaras, bien privadas, bien cooperativas; o también a través del modelo de servicios energéticos. Quizás para las almazaras denominadas “privadas” el modelo más conveniente sea el primero. Paras las Sociedades Cooperativas la opción de los Servicios Energéticos podría resultar más interesante. 340 Cuadro 8.1.- RESUMEN DE LAS VENTAJAS E INCONVENIENTES QUE PRESENTA LA BIOMASA COMO FUENTE DE ENERGÍA RENOVABLE VENTAJAS INCONVENIENTES • Energía renovable • Amplia gama de • Dispersión aplicaciones tecnológicas • Heterogeneidad • Baja densidad energética • Necesidades de (calor, frío, energía eléctrica, biocarburantes, …) • Emisiones neutras de CO2 acondicionamiento para su • Generadora de empleo neto • Reduce la dependencia • utilización • Costes de recolección, energética transporte y Ahorra divisas y genera almacenamiento ingresos fiscales Fuente: Elaboración propia En general, entre las ventajas más destacables de este nuevo modelo, cabe citar las siguientes: • Es un modelo basado en la generación eléctrica distribuida, lo que supone ventajas ambientales, energéticas y sociales. • La eficiencia energética global del proceso de obtención del aceite de oliva es mayor puesto que se aprovecha un residuo, que de no ser así sería quemado o astillado, para generar la energía térmica necesaria para el secado y también para inyectar energía limpia y renovable en la red eléctrica. 341 • La rentabilidad económica de las inversiones son aceptables, lo que garantiza un interés por parte del propio sector y también de empresas de servicios energéticos. • La captación de recursos financieros para el sector a través del Régimen Especial es significativa, lo que repercute en la estructura socioeconómica de la provincia de Jaén, la mayor productora de aceite de oliva del mundo. • En el caso del autoconsumo se podrían conseguir ahorros energéticos y económicos importantes en la factura de la energía eléctrica de las almazaras. • La mejora de la imagen del sector en términos de sostenibilidad es mayor, lo que también contribuye a la estrategia de marketing. • Se genera empleo en la cadena de valor de la biomasa: recogida, transporte y tratamiento. Y también en labores industriales asociadas al mantenimiento, operación, etc. Por tanto, se puede concluir con que se trata de un modelo rentable en términos económicos, y sostenible desde los puntos de vista energético y ambiental. De ser aceptado e implementado puede introducir una mejora en la competitividad global de un sector, como el oleícola, atenazado por los bajos precios del aceite de oliva y necesitado de una fuerte estrategia de marketing que permita posicionar al producto en la mente de los consumidores con atributos tales como la salud y la calidad de vida. Por otra parte, es fundamental que los propios agricultores y los gestores de cooperativas y almazaras, interioricen todas las ventajas antes reseñadas del modelo y que den un paso más en la gestión de sus explotaciones olivareras, introduciendo aspectos como la innovación, las nuevas tecnologías de valorización energética, la gestión sostenible de los subproductos, etc. En definitiva, que sean conscientes de que no solamente producen el llamado “oro 342 líquido” de excepcional calidad, sino que están contribuyendo a la mejora de la calidad de vida de los que lo consumen. En este sentido y en base a la Encuesta diseñada por el Autor y distribuida en el sector, las principales conclusiones que se pueden extraer de las Encuestas recibidas son las siguientes: • Prácticamente la totalidad de los encuestados pican y depositan los restos de poda en el suelo como aporte orgánico. En muy pocas ocasiones son quemados. • Ninguna almazara dispone de balsas para el secado del orujo, lo que permitiría el correcto desarrollo de la cosecha en caso de que hubiese alguna incidencia en el sector extractor. • Todos estarían dispuestos a que empresas de servicios agrícolas accedieran a sus explotaciones para la extracción de la biomasa del campo y también aceptarían el precio de liquidación por el aprovechamiento de los restos de poda recogido en la Encuesta de 15 €/ha. • La mayor parte de las almazaras extraen el hueso en la propia instalación previo a su envío a la extractora. • Todos coinciden en la ventaja de poder secar el orujo en la propia almazara. • La posibilidad de que la inversión fuese llevada a cabo por la propia sociedad gestora de la almazara no la ven factible la mayor parte de los entrevistados. La razón estriba en la dificultad para el acceso al crédito en las entidades financieras. En resumen, la respuesta mayoritaria de los encuestados es que el modelo les resulta interesante siempre y cuando las rentabilidades sean aceptables. Todos coinciden en que están en manos del sector extractor y, por tanto, sujetos a los precios y limitaciones que éste marque cada campaña. En un único caso se 343 plantea el modelo de agrupación tipo “El Tejar” basado en lo que el Autor ha llamado “modelo tradicional” bajo la premisa de “acercar la biomasa a las plantas” y no al revés, que es justo lo que se propugna con la presente Tesis Doctoral. La justificación a esta respuesta hay que buscarla en la falta de iniciativa del sector hacia nuevos proyectos, y la elevada inercia en relación a modelos existentes que funcionan y que según ellos “es mejor no tocarlos”. Además, para la difusión de la Encuesta se realizó una reseña en la sección de Actualidad de la Newsletter de la Revista especializa en aceites y grasas MERCACEI, concretamente en el semanal del 29 de octubre al 4 de noviembre de 2012. 344 8.2.- Líneas de investigación futuras Las dos principales líneas de investigación que deberían desarrollarse en el ámbito de la presente Tesis Doctoral y según el Autor son las siguientes: • Sistemas de secado de pequeña potencia para su instalación en las almazaras. Sería conveniente analizar diferentes tecnologías, sus costes de implantación, la eficiencia energética de las mismas, su adaptación al alperujo, puesto que es un subproducto con unas especificidades muy concretas, etc. • Posibilidades del autoconsumo de la electricidad generada por el sistema, lo que podría redundar en importantes ahorros para los propietarios de las almazaras. Para ello es fundamental que la legislación definiera con claridad el papel de los llamados “autoconsumidores” de energía eléctrica. Otras posibles líneas de investigación se centrarían en la mezcla de diferentes tipos de biomasa como residuos forestales y agrícolas o, incluso, distintos tipos de residuos forestales como pino o chopo. En cuanto a posibles aplicaciones, además de las almazaras se podrían ensayar otros emplazamientos como aserraderos, mataderos, o, incluso, sistemas de climatización de edificios. 345 9.- APORTACIONES CIENTÍFICAS 9.1.- Aportación científica A continuación se recogen las publicaciones generadas por la Tesis, tanto artículos de impacto JCR como artículos en revistas especializadas y capítulos de libro; así como la participación en Congresos y Conferencias de ámbito nacional e internacional y en proyectos de investigación. También se incluye un proyecto europeo del que Autor fue coordinador y, por último, se incluye un Premio del Instituto de Estudios Giennenses recibido por el Autor. ARTÍCULOS JCR La Cal J.A., Jurado F., Ogayar B. “A new model of energetic valuation for olive grove by-products based on the gasification technology integrated in an olive-oil mill”. International Journal for Green Energy 9:7, 661-672. 346 PUBLICACIONES EN REVISTAS ESPECIALIZADAS “Biomasa del olivar: oportunidades para el sector oleícola y apuesta por la sostenibilidad de Jaén”. ENERGÉTICA XXI, nº 62. Enero-Febrero 2007. “La creación de un auténtico sector de la biomasa en España es clave para la reducción de la dependencia energética y las emisiones de efecto invernadero”. NUEVAS TECNOLOGÍAS, nº 7. Febrero 2007. “Aprovechamiento de la biomasa del olivar”. CV ENERGÍA, nº 113. Marzo 2007. “Jaén, capital de la biomasa”. ENERGÍAS RENOVABLES 3 (92-84). Abril 2010. “Actuaciones de promoción de la biomasa para usos térmicos”. BE ENERGY, nº 7. Septiembre-Octubre 2011. CAPÍTULOS DE LIBRO “Biomasa del olivar: oportunidades de aprovechamiento energético”. El patrimonio oleícola. Análisis de la diversidad de conocimiento”. Depósito Legal J 137-2010. ISBN 978-84-613-6459-4 “Sistema de climatización centralizada con biomasa en un parque científico y tecnológico”. I Congreso de Servicios Energéticos. Comunicaciones. ISBN 978-8486313-10-4. CONFERENCIAS INTERNACIONALES 18th European Biomass Conference and Exhibition. “Application of biomass gasification system in the olive oil sector”. Lyon, Francia. Mayo de 2010. European Bioenergy Conference. Workshop “Emerging biomass resources”. “The great biomass potential from olive grove sector in the Mediterranean Area”. Bruselas, Bélgica. Junio de 2010. 347 3ª Conferencia Internacional sobre la obtención de energía a partir de residuos y biomasa. “Producción de energía a partir de biomasa residual del olivar: alternativas”.Madrid, octubre de 2010. 5º Congreso Internacional de Bioenergía: ideas para la innovación. “El sistema de climatización con biomasa del Parque Científico y Tecnológico GEOLIT”. Valladolid, octubre de 2010. 5ª Conferencia sobre el olivar mediterráneo. “Estrategias de comercialización e innovaciones tecnológicas para la producción de aceite de oliva de calidad y la valorización de los subproductos para la producción de energía”. Meknes, Marruecos. Marzo de 2011. World Engineers’ Convention. “Integrated biomass gasification system in an olive oil sector industry”. Geneva, 4-9 September 2011. CONFERENCIAS NACIONALES Congreso “Desarrollo local en tiempos de crisis. ¿El retorno a los recursos endógenos? Ponencia “La biomasa: un recurso estratégico para el desarrollo local”. Universidad Internacional de Andalucía, UNIA. Baeza, Jaén, del 28 al 30 de junio de 2011. Congreso Nacional de Medio Ambiente, CONAMA 2012. Comunicación técnica “Instalación de gasificación de restos de poda de olivar integrada en una almazara” (ISBN 978-84-695-6377-9) Conferencia Bioenergía 2013. GENERA, Feria Internacional de Energía y Medio Ambiente. Ponencia “Valorización energética de residuos de olivar mediante gasificación integrada en almazara”. PROYECTOS INVESTIGACIÓN RELACIONADOS CON LA TESIS 348 “Valorización energética de residuos de poda de olivar mediante procesos de combustión termoquímica: gasificación”. Universidad de Jaén. Enero de 2004. PROYECTOS EUROPEOS Project: Market of Olive Residues for Energy, MORE. Contract number EIE/07/273/SI2.466853. Intelligent Energy Europe Programme. 2003-2006 PREMIOS Investigación Agraria y Medio Ambiental. Convocatoria 2012 (B.O.P. de 27 de abril de 2012). Instituto de Estudios Giennenses. Diputación de Jaén. Título: “Nuevo modelo de gestión de subproductos del olivar basado en la tecnología de gasificación integrada en almazaras”. 349 10.- ANEXOS 10.1.- Modelo de Encuesta A continuación se muestra la Encuesta diseñada por el Autor y enviada a diferentes colectivos vinculados al sector oleícola para la validación del modelo propuesto en la presente Tesis Doctoral. Tal y como se apuntó en el capítulo correspondiente a INTRODUCCIÓN, la Encuesta ha sido enviada a las siguientes empresas y organizaciones: • Asaja Jaén. • Infaoliva. • Interprofesional del aceite de oliva. • Patrimonio Comunal Olivarero. • Asociación Profesional de Almazaras de Jaén, APAJ. • Fundación CITOLIVA. 350 • Aceites Cazorla Sociedad Cooperativa Andaluza. • Grupo Oleocampo Sociedad Cooperativa Andaluza, • Consejo Regulador de la Denominación de Origen Sierra de Cazorla. • Cooperativa Nuestro Padre Jesús de Jabalquinto. • Sociedad Cooperativa Andaluza Virgen del Carmen, Monte Lope Álvarez, Martos. La Encuesta, tal y como se envió a los gestores y responsables de almazaras y de las distintas organizaciones aparece a continuación. 351 “NUEVO MODELO DE GESTIÓN DE SUBPRODUCTOS DEL OLIVAR BASADO EN LA TECNOLOGÍA DE GASIFICACIÓN DE BIOMASA DE PEQUEÑA POTENCIA INTEGRADA EN ALMAZARAS” Breve descripción y objetivos del nuevo modelo El modelo que se pretende validar por parte del sector oleícola contempla la valorización energética de los restos de las podas de olivar mediante la tecnología de gasificación de pequeña potencia (< 300 kWe) integrada en las almazaras. De esta manera se genera energía eléctrica que puede ser inyectada a la red o autoconsumida, y se aprovecha el calor residual generado para el secado del orujo o de la hoja. Con este nuevo modelo se pretende conseguir: 1) Aprovechar energéticamente los restos de la poda del olivar que genere ingresos adicionales para los agricultores. 2) Introducir en las almazaras la actividad de secado del alperujo obtenido con el objetivo de producir un alperujo seco que pueda ser vendido a las extractoras o a otros posibles compradores. 3) Independizar, para un determinado tipo de almazaras (< 9.000 t/año de aceituna molturada), su actividad de las extractoras, pudiendo diferir en el tiempo el proceso de extracción de aceite y la gestión del alperujo obtenido. Cuestiones para responder: En relación a los restos de poda de olivar, los cuales se ve obligado a extraer de las explotaciones para evitar la propagación del barrenillo: 1) ¿Qué hacen con ellos? Se queman Se trituran y se depositan en el terreno como aporte orgánico Se destinan a la generación de energía eléctrica en plantas de biomasa: Los tritura y los lleva a la planta Los alinea y los retiran las empresas de servicios agrícolas Otras: 2) ¿Cuánto le cuesta o ingresa la opción que haya marcado en €/Ha o €/t? 352 3) ¿Permitiría que una empresa de servicios agrícolas entrara en su explotación y le retirara los restos de la poda una vez realizada ésta? Sí No o ¿Por qué? 4) ¿Ve factible que los restos de la poda puedan ser trasladados del campo a la almazara a la que lleva el aceite y recibir por ellos una liquidación anual del orden de 15 €/t? Sí No o ¿Por qué? o ¿Qué precio le parecería razonable? En relación a la almazara como industria: 5) ¿Disponen de balsas para el caso de que no puedan enviar el orujo a las orujeras no tener que detener la producción? Sí No 6) ¿Cree que la sociedad gestora de la almazara podría acometer o realizar este tipo de inversiones (aproximadamente 500.000 € por cada 100 kWe) siempre y cuando la rentabilidad fuese superior al 10%? Sí No o ¿Por qué? 7) ¿Qué inconvenientes encuentra a lo planteado hasta ahora? 353 En relación al orujo generado en la almazara como consecuencia de la obtención del aceite de oliva: 8) ¿Qué hace su almazara con el orujo? Es trasladado hasta la extractora de aceite de orujo Se seca en las propias instalaciones y después se lleva a la orujera Se le extrae el hueso y después se lleva a la orejera 9) ¿Cuánto le cuesta esta gestión del orujo, €/t? ¿De qué depende? 10) ¿Considera que si lo secara en sus propias instalaciones sería una ventaja estratégica, en tanto que no dependería del sector extractor, y también económica puesto que podrían cobrar al extractor en lugar de pagar? Sí No 11) ¿Consideran que este nuevo modelo podría llegar a implementarse en una determinada tipología de almazaras, consideradas pequeñas (< 9.000 toneladas anuales de molturación) y alejadas de las extractoras? Sí No o ¿Por qué? 12) ¿De qué factores cree que dependería? De la inversión requerida De la rentabilidad obtenida De cuestiones técnicas. ¿Cuáles? De cuestiones económico financieras Otros: 13) ¿Qué le parece el nuevo modelo en general? 354 10.2.- Direcciones webs de interés Las principales direcciones webs consultadas por el Autor para la realización de la presente Tesis Doctoral han sido las siguientes: • Agencia Andaluza de la Energía. www.agenciaandaluzadelaenergia.es • Agencia de Desarrollo e Innovación de Andalucía, IDEA. www.agenciaidea.es • American Standard for Testing and Materials, ASTM. www.astm.org • Asociación de Jóvenes Agricultores, ASAJA. www.asajajaen.com • Asociación Española de la Industria Eléctrica, UNESA. www.unesa.es • Asociación Nacional de Empresas de Servicios Energéticos, ANESE. www.anese. • Asociación de Promotores y Productores de Energías Renovables, APPA. www.appa.es • Asociación de Promotores y Productores de Energías Renovables de Andalucía, APREAN. www.aprean.com • Boletín Oficial del Estado. www.boe.es • Centro Tecnológico del Olivar y del Aceite de Oliva. www.citoliva.es • Comisión Nacional de la Energía. www.cne.es • Comisión Europea. www.europa.eu • Consejo Oleícola Internacional. www.internationaloliveoil.org • Club Español de la Energía, ENERCLUB. www.enerclub.es • Elcogas. www.elcogas. • European Renewable Energy Council, EREC. www.erec-renewables.org • Fundación Centro Tecnológico CIDAUT. www.cidaut.es • Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas, FIAB. www.fiab.es • Federación Española de Industriales Fabricantes de Aceite de Oliva, INFAOLIVA. www.infaoliva.es 355 • Federación Europea de Agencias de la Energía. www.fedarene.org • Fundación del Olivar. www.oliva.net • Ingeniería Energética y Contaminación, INERCO. www.inerco.es • Instituto Nacional de Estadística. www.ine.es • Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentación, INIA. www.inia.es • Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía, IDAE. www.idae.es • Interprofesional del Aceite de Oliva. www.interprofesionaldelaceitedeoliva.com • Ministerio de Industria, Energía y Turismo. www.minetur.gob.es • Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. www.magrama.gob.es • Observatorio Europeo de Energías Renovables, EUROBSERVER. www.erurobserv-er.org • Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, FAO. www.fao.org • Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, OCDE. www.oecd.org • Operador del Mercado Eléctrico Español (OMEL). www.omel.es • Pasch y Cía. www.pasch.es • Patrimonio Comunal Olivarero. www.pco.es • Portal de la Junta de Andalucía. www.juntadeandalucia.es • Red Eléctrica de España, REE. www.ree.es • Revista MERCACEI. www.mercacei.com • Sistema de Información de Precios en Origen del Aceite de Oliva, POOLRED. www.oliva.net • Statistical Review of World Energy 2012. www.bp.com • Taim Weser. www.taimweser.com • U.S. Department of Energy, DOE. www.energy.gov 356 • World Energy Council. www.worldenergy.org 357 11.- CURRÍCULUM DEL AUTOR 11.1.- Breve Currículum Vitae del Autor José Antonio La Cal Herrera es Ingeniero Industrial, Especialidad Mecánica, Intensificación Máquinas, por la Universidad Politécnica de Madrid (septiembre de 1994). En 1995 entra a trabajar en la Diputación Provincial de Jaén como Técnico de Desarrollo Local y en mayo de 1998 pasa a ocupar el puesto de Director de AGENER, la Agencia de Gestión Energética de la provincia de Jaén, proyecto creado y promovido desde la Administración Provincial. Durante los cursos 1995-1996 y 1996-1997 realiza los Estudios de Doctorado en la Universidad de Jaén correspondientes al Programa “Biotecnología e Ingeniería Agroalimentaria” del Departamento de Ingeniería Química, Ambiental y de los Materiales, obteniendo la Suficiencia Investigadora en el año 1998. En diciembre del año 2000 es contratado por la Agencia de Gestión de la Energía de Castilla-La Mancha, AGECAM hasta mayo de 2004, donde regresa de nuevo a AGENER, S.A., como Gerente, cargo que desempeña hasta el 30 de 358 mayo de 2012, fecha en la que se decide liquidar a la sociedad, dependiente de la Diputación Provincial, pasando como Técnico al Área de Agricultura y Medio Ambiente. En el curso 2003-2004 es aceptado como alumno del Curso de Doctorado “Técnicas de Modelado y Análisis en Ingeniería” de la Universidad de Castilla-La Mancha. En septiembre de 2005 obtiene una plaza como Profesor Asociado Laboral en el Departamento de Organización de Empresas, Marketing y Sociología de la Universidad de Jaén, puesto que sigue desempeñando en la actualidad. En 2010, y una vez cambiado el expediente a la Universidad de Jaén, decide retomar los estudios de doctorado en el Departamento de Ingeniería Eléctrica y presenta la solicitud de Tesis, siendo ésta admitida a trámite por la Comisión de Doctorado el 19 de marzo de 2010. A lo largo del año 2011 realiza un MBA (Master en Gestión y Administración de Empresas) en la Escuela Internacional de Gerencia de Granada, impartido por la Escuela de Gestión Comercial y Marketing, ESIC. En relación a su actividad docente e investigadora, cabe destacar lo siguiente: • Es Profesor Homologado de las áreas de energía y energías renovables de la Escuela de Organización Industrial, EOI. • Participa en el Proyecto de Investigación “Valorización energética de residuos de la poda del olivar mediante procesos de combustión termoquímica. • Es Profesor en diferentes Cursos y Seminarios sobre energías renovables, y en los Masters de Energías Renovables de las Universidades de Jaén, Córdoba y Castilla-La Mancha. • Ha dirigido 3 Cursos de Verano en la Universidad Internacional de Andalucía y en la actualidad es Codirector de la 2ª edición del Curso 359 de “Experto universitario en soluciones energéticas sostenibles” que se imparte en la sede de Baeza de la UNIA. • Ha escrito numerosos artículos relacionados con la biomasa en revistas especializadas y participa en foros nacionales e internacionales relacionados con la energía y el medio ambiente. En la actualidad compatibiliza las labores de Técnico del Área de Agricultura y Medio Ambiente de la Diputación de Jaén con las de Profesor Asociado de la Universidad de Jaén. 360 12.- REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 12.1.- Referencias bibliográficas [1] F. Jurado, M. Ortega y J. Carpio, «Biomass gasification, gas turbine and diesel engine,» Energy sources, vol. 23, nº 10, pp. 897-905, 2001. [2] F. Jurado y A. Cano, «Optimal placement of biomass fuelled gas turbines for reduced losses,» Energy conversion and management, vol. 47, nº 15-16, pp. 2673-2681, 2006. [3] I. International Energy Agency, «World Energy Outlook 2012,» 2012. [4] J. A. La Cal Herrera, «Coyuntura energética de la provincia de Jaén,» de Observatorio Económico de la Provincia de Jaén, nº 162. Monográfico nº 46, Jaén, Diputación de Jaén y Universidad de Jaén, 2010. [5] BIOPLAT, Plan de implementación a 2015 del sector español de la bioenergía, Madrid, 2012. [6] AEMO, «Aproximación a los costes del cultivo del olivo,» Córdoba (España), 2010. [7] Consejería de Agricultura y Pesca, Potencial energético de la biomasa residual agrícola y ganadera en Andalucía, Sevilla: Junta de Andalucía, 2010. [8] M. Pastor Muñoz-Cobo y J. Humanes Guillén, La poda del olivo. Moderna olivicultura, Sevilla: Agrícola Española, S.A., 2010. [9] J. A. La Cal Herrera, «El orujo de dos fases: soluciones para un futuro 361 residuo,» Residuos, nº 43, pp. 79-84, 1998. [10] E. Castro Galiano, «Obtención de biocarburantes a partir de residuos del olivar.,» de Bióptima 2012, Jaén, 2012. [11] v. M. Pérez Serrano, «Observatorio Económico de la Provincia de Jaén. Boletín núm. 74. Monografía núm. 50. Cadena de valor y viabilidad del olivar andaluz,» Diputación de Jaén, Jaén, 2011. [12] IDAE, «Plan de Energías Renovables 2011-2020,» Ministerio de Industria, Energía y Turismo, Madrid, 2010. [13] F. Nogués Sebastián, D. García Galindo y A. Rezeau, «Energías renovables. Energía de la biomasa. Volúmenes I y II.,» Prensas Universitarias de Zaragoza. Ochoa, Zaragoza, 2010. [14] AGENER, «Estudio de análisis de costes y potencial de la biomasa del olivar en la provincia de Jaén,» Universidad de Jaén, Jaén, 2000. [15] A. García-Maraver, «Biomass based gasifier for providing electricity and thermal energy to off-grid locations in Cuba. Conceptual design,» Energy for Sustainable Development, nº 16, pp. 98-102, 2012. [16] I. García Maroto y F. Muñoz Leiva, Estudio del sector de la biomasa. Especial referencia al caso de la industria de pellets de residuos forestales, Granada: Tleo, 2012. [17] J. A. La Cal Herrera, «La exportación de la biomasa: el incumplimiento de los planes energéticos,» Residuos, nº 90, pp. 148-150, 2006. [18] Agencia Andaluza de la Energía, «Informe de infraestructuras energéticas de la provincia de Jaén,» Junta de Andalucía, Sevilla, 2012. [19] Ministerio de Industria, Energía y Turismo, Estadística de la industria de la energía eléctrica 2010, Madrid, 2012. [20] Eurobserver, «Solid biomass barometer,» 2011. [21] APPA, «Estudio del impacto macroeconómico de las energías renovables en España,» Madrid, 2012. [22] P. Puigdomènech Rosell y D. Caparrós Ruiz, La energía de los vegetales, Barcelona: Fundación Gas Natural, 2011. [23] M. Moya Vilar, Procesos de conversión de la biomasa, Jaén: Universidad de Jaén, 2011. [24] A. García-Maraver, «Influence of the cellulose, hemi cellulose and lignin content on the thermal behaviour of residual biomass from olive trees,» 2012. [25] A. Madrid Vicente, La biomasa y sus aplicaciones energéticas, Madrid: AMV Ediciones, 2012. [26] J. M. y. L. G. L. M. Sala Lizárraga, Plantas de valorización energética de biomasa, Madrid: Ochoa, 2002. [27] A. Damien, "La biomasa: fundamentos, tecnologías y aplicaciones", Madrid: AMV y Mundi Prensa, 2010. [28] J. M. Fernández Salgado, Guía completa de la biomasa y los 362 biocombustibles, Madrid: AMV Ediciones, 2010. [29] J. A. La Cal Herrera, F. Jurado Melguizo y B. Ogayar Fernández, «A new model of energy valorisation for olive grove by-products based on the gasification technology integrated in an olive-oil mill,» International Journal of Green Energy, vol. 9, nº 7, pp. 661-672, 2012. [30] P. Reche López, S. García Galán, N. Ruiz Reyes y F. Jurado, «A method for particle swarm optimization and tis application in location of biomass power plants,» International Journal of Green Energy, vol. 3, nº 5, pp. 199-211, 2008. [31] A. y. M. A. Ministerio de Agricultura, «Estudio de la cadena de valor y formación de precios en España,» Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Madrid, 2010. [32] J. M. De Juana, Energías renovables para el desarrollo, Madrid: ThomsonParaninfo, 2003. [33] J. Vilar Hernández, El patrimonio oleícla. Análisis desde la diversidad del conocimiento., Jaén: Asociación para el Desarrollo Rural de Sierra Mágina, 2010. [34] J. Vilar Hernández y R. Cárdenas, El sector internacional de elaboración de aceite de oliva. Un estudio descriptivo desde los distintos paises productores., Jaén: Gea Westfalia Separator Ibérica, S.A. Centro de Desarrollo y Competencia para el Aceite de Oliva., 2012. [35] J. A. La Cal Herrera, «Los residuos de la poda del olivar,» Residuos, nº 48, pp. 78-82, 1999. [36] Agencia Andaluza de la Energía, «La biomasa en Andalucía,» Junta de Andalucía, Sevilla, 2011. [37] Agencia Andaluza de la Energía, Plan Andaluz de Sostenibilidad Energética, PASENER, Sevilla: Junta de Andalucía, 2007. [38] Consejería de Agricultura y Pesca, «Analisis de la incidencia de la supresión de la quema de los residuos agrícolas sobre la emisión de gases de efecto invernadero en Andalucía,» Junta de Andalucía, Sevilla, 2009. [39] Consejería de Agricultura y Pesca, Potencial energético de la biomasa residual agrícola y ganadera en Andalucía, Sevilla: Junta de Andalucía, 2008. [40] Consejería de Agricultura y Pesca, «Potencial energético de los subproductos de la industria olivarera en Andalucía,» Junta de Andalucía, Sevilla, 2010. [41] C. Higman y M. Van der Burgt, Gasification. Second Edition, Oxford (UK): Elsevier, 2008. [42] IDAE, Biomasa. Gasificación, Madrid: IDAE, 2007. [43] IDAE, Optimización del consumo de energía en el sector del aceite de oliva. Aprovechamiento energético de residuos, Madrid: IDAE, 2001. [44] Ministerio de Industria, Energía y Turismo, "La energía en España 2011", Madrid: Ministerio de Industria, Energía y Turismo, 2012. 363 [45] AEBIOM, «Anual Statistical Report on the contribution of biomass to the energy systeme in the EU 27,» Bruselas, 2011. [46] J. Sanz Cañada, Investigación e innovación en el sector del aceite de oliva en España. Problemas, oportunidades y prioridades de I+D+i., Madrid: Instituto de Economía, Geografía y Demografía. Centro de Ciencias Humanas y Sociales. Consejo Superior de Investigaciones Científicas. Ministerio de Economía y Competitividad, 2012. 364