REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA JURISDICCIÓN DISCIPLINARIA JUDICIAL CORTE DISCIPLINARIA JUDICIAL JUEZ PONENTE: TULIO JIMÉNEZ RODRÍGUEZ Exp. AP61-R-2012-000024 Mediante oficio N° TDJ-1626-2012 del 26 de septiembre de 2012, el Tribunal Disciplinario Judicial remitió a esta Corte Disciplinaria Judicial el cuaderno separado de medidas cautelares signado bajo el número A161-I-2012-000007, contentivo del recurso de apelación interpuesto por el ciudadano JESET GARCÍA HERNÁNDEZ, titular de la cédula de identidad número V-12.189.829, actuando por delegación del Inspector General de Tribunales, según Resolución número 4, de fecha 8 de junio del 2012 , publicada en la Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela N° 39.942, de fecha 12 de junio de 2012, contra el auto dictado por el Tribunal Disciplinario Judicial el 12 de junio de 2012, mediante el cual, se ordenó a la Dirección Ejecutiva de la Magistratura la reincorporación del ciudadano FRANCISCO RAMON MOTA, titular de la cédula de identidad número V-3.283.937, al cargo de Juez Segundo y Sexto de Primera Instancia de la Circunscripción Judicial Penal del estado Aragua, y el pago de todos los salarios dejados de percibir durante el tiempo que se mantuvo en vigencia la medida de suspensión sin goce de sueldo, decretada por la Comisión Judicial del Tribunal Supremo de Justicia en reunión de fecha 23 de febrero de 2010, así como el reconocimiento de todos los bonos y demás beneficios laborales. El 27 de septiembre de 2012, la Unidad de Recepción y Distribución de Documentos de la Jurisdicción Disciplinaria Judicial dio entrada al expediente y le asignó el N° AP61-R-2012-000024, remitiéndolo a la Secretaría de la Corte Disciplinaria Judicial, a los fines de su distribución. En esa misma fecha, la Secretaría de esta Corte dio entrada a la causa y dejó constancia de su distribución, correspondiéndole la ponencia a la jueza Ana Cecilia Zulueta Rodríguez. REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Jurisdicción Disciplinaria Judicial Corte Disciplinaria Judicial 2 Exp. No. AP61-R-2012-000024 El 18 de octubre de 2012, la Secretaría de la Corte Disciplinaria Judicial dejó constancia de la redistribución de la causa ordenada mediante auto de fecha 17 del mismo mes y año, correspondiéndole la ponencia al juez Tulio Jiménez Rodríguez, quien con tal carácter suscribe el presente fallo. Corresponde a esta Corte Disciplinaria Judicial emitir pronunciamiento sobre los recursos interpuestos, previo el análisis de las siguientes consideraciones: ANTECEDENTES El presente procedimiento cautelar se inicia en virtud de la solicitud de fecha 22 de noviembre de 2011, que realizara el ciudadano Francisco Ramón Mota, antes identificado, con el objeto que se le reincorporara al cargo de Juez Titular de Primera Instancia en Funciones de Juicio del Circuito Penal del estado Aragua, del cual fue suspendido por la Comisión Judicial del Tribunal Supremo de Justicia en fecha 23 de febrero de 2010. El 02 de febrero de 2012, el Tribunal Disciplinario Judicial, dicta decisión N° TDJ-SDI2012-50, mediante la cual niega la solicitud de levantamiento de la medida, mantiene la suspensión provisional del ejercicio del cargo, pero la modifica, con goce de sueldo, niega la solicitud de nulidad del procedimiento y niega la solicitud del pago de los beneficios correspondientes a la relación de trabajo. El 23 de mayo de 2012, el Tribunal Disciplinario Judicial emite decisión en la cual se ordena darle continuidad al procedimiento e investigación en el procedimiento que se le sigue al referido funcionario; prorrogó por sesenta días la suspensión provisional con goce de sueldo. Finalmente el 12 de junio del año en curso, el Tribunal Disciplinario Judicial dicta la decisión objeto del presente recurso de apelación. REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Jurisdicción Disciplinaria Judicial Corte Disciplinaria Judicial 3 Exp. No. AP61-R-2012-000024 FUNDAMENTACIÓN DEL RECURSO DE APELACIÓN DE LA INSPECTORÍA GENERAL DE TRIBUNALES Mediante escrito presentado el 12 de julio de 2012, el ciudadano JESET GARCÍA HERNÁNDEZ, actuando por delegación del Inspector General de Tribunales, interpuso recurso de apelación contra la decisión dictada por el Tribunal Disciplinario Judicial en esa misma fecha, en los siguientes términos: Señaló el recurrente, que el a quo, en la decisión impugnada mediante al cual ordenó la reincorporación del ciudadano Francisco Mota al cargo de Juez titular de Primera Instancia en funciones de Juicio del Circuito Judicial Penal del estado Aragua, y al pago de todos los salarios dejados de percibir durante el tiempo que duró la medida de suspensión sin goce de sueldo decretada por la Comisión Judicial del Tribunal Supremo de Justicia, ello en virtud del vencimiento del lapso impuesto en la medida cautelar y su prórroga, “vulneró el debido proceso por cuanto la suspensión del cargo sin goce de sueldo (…) mantiene su vigencia hasta tanto fuese resuelta la investigación que dio origen a su imposición con base a la subordinación de dicha medida a la decisión definitiva”. Continuó el recurrente en su escrito señalando, “que el Tribunal Disciplinario Judicial no era competente para ordenar la reincorporación del Juez, puesto que no estaban dados los requisitos de procedibilidad ya que aun no se ha dictado la sentencia definitiva” Igualmente, manifestó que la decisión recurrida adolece de falta de motivación, “toda vez que no fueron expuestos los argumentos de hecho y derecho en los que se fundó” Finalmente solicita que sea declarada la nulidad de la recurrida por adolecer de los vicios que a su juicio contiene. REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Jurisdicción Disciplinaria Judicial Corte Disciplinaria Judicial 4 Exp. No. AP61-R-2012-000024 CONTESTACIÓN A LA FUNDAMENTACIÓN DE LAS APELACIONES En fecha 20 de septiembre del año en curso el ciudadano Francisco Mota, presenta su escrito de contestación a la apelación en los siguientes términos: Solicita “que se declare la inadmisibilidad de la apelación”, o “que la misma sea declarada improcedente por cuanto dicha apelación, no se encuentra ajustada a derecho, no tiene asidero jurídico, ni fundamentación legal que le permita al recurrente sostener la solicitud de nulidad…” DEL AUTO RECURRIDO El 12 de junio de 2012, el Tribunal Disciplinario Judicial dictó auto en el cuaderno de medidas N° A161-I-2012-00007, en el cual estableció lo siguiente: “A la fecha de hoy se encuentra vencido el lapso establecido, así como la prórroga de la medida cautelar de suspensión provisional del ejercicio del cargo con goce de sueldo, resultando innegable que el juez sometido a proceso tiene el derecho a ser reincorporado a su cargo, es por lo que se ORDENA a la Dirección Ejecutiva de la Magistratura reincorporar al ciudadano FRANCISCO RAMON MATA (…) al cargo de Juez Titular de Primera Instancia en Funciones de Juicio del Circuito Penal del Estado (sic) Aragua y el pago de todos los salarios dejados de percibir durante el tiempo que duró la medida de suspensión sin goce de sueldo decretada por la Comisión Judicial del Tribunal Supremo de Justicia, así como el reconocimiento de todos los bonos y demás beneficios laborales que gozaba a partir de dicha oportunidad hasta la fecha de la ejecución de la presente decisión ”. DE LA COMPETENCIA Esta Corte Disciplinaria Judicial debe establecer su competencia para conocer el asunto sometido a su consideración y, al respecto, observa: El artículo 42 del Código de Ética, publicado en la Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela N° 39.493 del 23 de agosto de 2010, establece la competencia de la Corte Disciplinaria Judicial para conocer las apelaciones REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Jurisdicción Disciplinaria Judicial Corte Disciplinaria Judicial 5 Exp. No. AP61-R-2012-000024 interpuestas contra las decisiones dictadas por el Tribunal Disciplinario Judicial, ya sean interlocutorias o definitivas, en los términos que a continuación se transcribe: “Artículo 42. Corresponde a la Corte Disciplinaria Judicial, como órgano de Alzada, conocer de las apelaciones interpuestas contra decisiones ya sean interlocutorias o definitivas, y garantizar la correcta interpretación y aplicación del presente Código y el resto de la normativa que guarde relación con la idoneidad judicial y el desempeño del Juez venezolano y la Jueza venezolana”. De la citada norma se desprende la competencia de este órgano jurisdiccional como alzada natural del Tribunal Disciplinario Judicial, para conocer de los recursos de apelación interpuestos contra las decisiones que de él emanan, cuyo deber es garantizar la correcta interpretación y aplicación de las normas disciplinarias y del ordenamiento jurídico vigente. Ahora bien, del análisis de los autos que integran el expediente disciplinario se advierte, que la apelación interpuesta por la representación del Inspector General de Tribunales, fue ejercida contra el auto dictado por el Tribunal Disciplinario Judicial el 12 de junio de 2012, en la incidencia de medidas cautelares, signada bajo el N° AP61-I-2012-000007, que guarda relación con la causa principal N° AP61-D-2011000090, la cual ordenó la reincorporación del ciudadano FRANCISCO RAMON MATA, al cargo de Juez Titular de Primera Instancia en Funciones de Juicio del Circuito Penal del Estado Aragua, y el pago de todos los salarios dejados de percibir durante el tiempo que duró la medida de suspensión sin goce de sueldo decretada por la Comisión Judicial del Tribunal Supremo de Justicia, así como el reconocimiento de todos los bonos y demás beneficios laborales que gozaba a partir de dicha oportunidad hasta la fecha de la ejecución de la decisión dictada por el Tribunal Disciplinario Judicial; razón por la cual esta Corte Disciplinaria Judicial se declara competente para conocer del recurso de apelación interpuesto. Así se decide. CONSIDERACIONES PARA DECIDIR Señalado lo anterior, esta Instancia Disciplinaria observa que el presente recurso de apelación lo ejerció la Inspectoría General de Tribunales, contra la decisión del 12 de junio del presente año, mediante el cual el Tribunal Disciplinario Judicial, ordenó a la Dirección Ejecutiva de la Magistratura reincorporar al ciudadano Francisco Mota, al REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Jurisdicción Disciplinaria Judicial Corte Disciplinaria Judicial 6 Exp. No. AP61-R-2012-000024 cargo de Juez titular de Primera Instancia en Funciones de Juicio del Circuito Judicial Penal del estado Aragua, y el pago de los salarios dejados de percibir durante todo el tiempo que duró la suspensión dictada por la Comisión Judicial del Tribunal Supremo de Justicia, así como el reconocimiento de los bonos y demás beneficios; el órgano inspector basó su recurso en dos argumentos fundamentales indicando que la misma violentó el debido proceso y adolecía del vicio de inmotivación. Ahora bien, por cuanto el auto recurrido constituye una sentencia interlocutoria que pone fin a la incidencia cautelar de suspensión del cargo del juez Francisco Mota, la cual, como toda sentencia, debe contener entre otros requisitos, los motivos de hecho y de derecho, es decir, las razones fácticas y jurídicas en las cuales el sentenciador fundamente su decisión que acuerde, niegue, suspenda, modifique o revoque una medida preventiva, así como también aquellas que diluciden la oposición a su derecho, cumpliendo lo exigido en ordinal 4° el artículo 243 del Código de Procedimiento Civil. Resulta evidente, que en el auto dictado el 12 de junio del año en curso, se desprende que el Tribunal Disciplinario Judicial decidió en virtud de la solicitud presentada en su oportunidad por el juez sometido a procedimiento disciplinario, ordenar a la Dirección Ejecutiva de la Magistratura reincorporar al ciudadano Juez al mencionado cargo, así como el pago de todos los salarios que dejó de percibir durante el tiempo que duró la medida de suspensión sin goce de sueldo decretada por la Comisión Judicial del Tribunal Supremo de Justicia, al considerar que el aludido Juez tenía el derecho a ser reincorporado a su cargo; lo cual evidencia que el a quo se limitó a responder la solicitud planteada, acordándole lo peticionado, sin establecer fundamento alguno de hecho y derecho que justificara su reincorporación y lo concerniente a la permanencia o no de la medida asegurativa en el caso en cuestión, ni considerar el estado procesal del juicio principal ni sus posibles resultas, las imputaciones formuladas contra la jueza, ni atender la finalidad de las medidas cautelares en sede disciplinaria que no es otro que materializar en el proceso disciplinario las garantías constitucionales y procesales para evitar alguna interferencia de los jueces denunciados en el curso de la investigación, la posible reiteración de las presuntas faltas disciplinarias o el desprestigio del Poder Judicial, lo cual pudiera generar desconfianza en el sistema de administración de justicia. REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Jurisdicción Disciplinaria Judicial Corte Disciplinaria Judicial 7 Exp. No. AP61-R-2012-000024 En ese sentido, mediante decisión N° 1 dictada por la Corte Disciplinaria Judicial en fecha 16 de febrero de 2012, estableció que al encontrarse ante una solicitud de levantamiento de medidas, no basta con señalar la norma legal en que se fundamente el dictamen, sino que debe justificarse tal procedencia en contraposición con los argumentos fácticos que subsistan en el tiempo y tengan vigencia en el proceso, debe revisar si los supuestos de hecho invocados y las pruebas aportadas son suficientes para enervar la medida que se encuentra en vigencia, así como evaluar aquellas situaciones que en determinado momento lleven a considerar necesario acordar, modificar, suspender, negar o revocar la protección cautelar, lo cual con un pronunciamiento sustentado otorgue la garantía de una sana administración de justicia. De modo pues, que el Tribunal Disciplinario Judicial al no justificar o fundamentar de forma alguna su pronunciamiento en el cual atendiera no solo lo peticionado por la solicitante, sino también los elementos aportados y las circunstancias fácticas y jurídicas que rodean el caso en particular, según se indicó precedentemente, de lo cual no dejó constancia en el auto dictado el 12 de junio de 2012, y siendo el asunto materia de estricto orden público, es por lo que a juicio de esta Alzada, se configuró la falta de motivación del aludido auto. Así se establece. Por los argumentos expuestos, y al resultar evidente que la decisión recurrida prescindió de motivación suficiente, conforme lo establece el artículo 244 del Código de Procedimiento Civil, el cual prevé la nulidad de la sentencia por faltar las determinaciones indicadas en el artículo anterior; por haber absuelto la instancia; por resultar la sentencia de tal modo contradictoria, que no pueda ejecutarse o no aparezca que sea lo decidido; y cuando sea condicional o contenga ultrapetita. En consecuencia, resulta forzoso para esta Instancia Disciplinaria, declarar la NULIDAD del auto dictado el 12 de junio de 2012 por el Tribunal Disciplinario Judicial. Así se decide. Efectuadas las anteriores consideraciones, esta Corte Disciplinaria Judicial considera inoficioso pronunciarse sobre los demás alegatos formulados por la representación de la Inspectoría General de Tribunales, en el presente proceso disciplinario. Ahora bien, el artículo 209 del Código de Procedimiento Civil, dispone que: REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Jurisdicción Disciplinaria Judicial Corte Disciplinaria Judicial 8 Exp. No. AP61-R-2012-000024 “La nulidad de la sentencia definitiva dictada por el Tribunal de la instancia inferior que se haya viciada por los defectos que indique el artículo 244 sólo puede hacerse valer mediante el recurso de apelación, de acuerdo con las reglas propias de este medio de impugnación. La declaratoria del vicio de la sentencia por el Tribunal que conozca en grado de la causa no será motivo de reposición de ésta, y el Tribunal deberá resolver también sobre el fondo del litigio…”. Así pues, constatado el vicio de inmotivación del auto recurrido, esta Corte Disciplinaria Judicial deberá resolver también el fondo del asunto planteado en la incidencia cautelar que nos ocupa, lo cual pasa a hacer en los siguientes términos: Observa esta Corte, que en el escrito presentado el 30 de mayo de 2012, por el ciudadano Francisco Mota, plenamente identificado en autos, solicitó: “Que se deje sin efecto la medida de suspensión (…) que se tome en cuenta que llevo 2 años sancionado, por la suspensión, sin percibir, beneficios contractuales, mediante un acto írrito (…) que se (le) reincorpore a (su) lugar de trabajo como juez titular de la circunscripción judicial del estado Aragua, el archivo del expediente y consecuencialmente se restituyan todos los beneficios” Cabe resaltar que, en una oportunidad anterior el Tribunal Disciplinario Judicial dictó auto de fecha 02 de febrero de 2012 en el cual negó las solicitudes planteadas por el prenombrado juez en fechas 22 de noviembre y 14 de diciembre de 2011, referidas al levantamiento de medida cautelar de suspensión del cargo que le había sido impuesta, al expresar entre otras cosas que no existió cambio alguno en las circunstancias del caso por lo que se encontraba impedido de ordenar su reincorporación, y que tal medida debe estar destinada a facilitar la investigación de los hechos que motivaron la suspensión efectuada, con el único propósito de llegar a la conclusión de un procedimiento. Ahora bien, observa esta Corte Disciplinaria Judicial que los argumentos planteados por el ciudadano Francisco Mota, así como los elementos que reposan en el expediente, y las condiciones inicialmente evaluadas por el Tribunal Disciplinario Judicial para la imposición y mantenimiento de la medida cautelar dictada en su oportunidad, la cual tuvo lugar a los fines de evitar alguna obstaculización o interferencia por parte del ciudadano juez en la investigación del procedimiento disciplinario; que pudiera cometer una infracción disciplinaria; o que atentara contra las buenas costumbres o el orden público; los mismos de ninguna manera modifican REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Jurisdicción Disciplinaria Judicial Corte Disciplinaria Judicial 9 Exp. No. AP61-R-2012-000024 ni enervan las circunstancias que dieron lugar a la aludida cautela, como único mecanismo para salvaguardar el proceso disciplinario de posibles interferencias por parte de los jueces dirigidas a evitar alguna acción imputable en su contra, o que generen irregularidades o vicios que afecten la investigación y la correspondiente decisión. De modo que, al no resultar desvirtuadas las razones que conllevaron la imposición y mantenimiento de la medida cautelar de suspensión del cargo y, aunado a que el Tribunal Disciplinario Judicial está por celebrar la audiencia oral y pública para emitir la decisión correspondiente en la causa disciplinaria seguida contra el referido Juez, es por lo que esta Alzada NIEGA la solicitud planteada por al ciudadano FRANCISCO RAMON MOTA, titular de la cédula de identidad número V-3.283.937, al cargo de Juez Segundo y Sexto de Primera Instancia de la Circunscripción Judicial Penal del estado Aragua. Así se decide. En este estado, se anuncia el voto salvado de la Jueza Ana Cecilia Zulueta. DECISIÓN Con fundamento en los razonamientos expuestos, esta Corte Disciplinaria Judicial administrando justicia en nombre de la República Bolivariana de Venezuela y por autoridad de la Ley, declara: 1. CON LUGAR el recurso de apelación interpuesto por la Inspectoría General de Tribunales en fecha 12 de julio de 2012 por la representación de la Inspectoría General de Tribunales, contra el auto dictado por el Tribunal Disciplinario Judicial en fecha 12 de junio de 2012. 2. ANULA el auto de fecha 12 de junio de 2012 dictado por el Tribunal Disciplinario Judicial, mediante el cual ordenó a la Dirección Ejecutiva de la Magistratura reincorporar al ciudadano FRANCISCO RAMON MOTA, titular de la cédula de identidad número V-3.283.937, al cargo de Juez Segundo y Sexto de Primera Instancia de la Circunscripción Judicial Penal del estado Aragua, y el pago de todos los salarios dejados de percibir durante el tiempo que se mantuvo en vigencia la medida de suspensión sin goce de sueldo, decretada por la Comisión Judicial del Tribunal Supremo de Justicia en reunión de fecha 23 de febrero de 2010, así como el reconocimiento de todos los bonos y demás beneficios laborales. REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Jurisdicción Disciplinaria Judicial Corte Disciplinaria Judicial 10 Exp. No. AP61-R-2012-000024 3. NIEGA la solicitud presentada por el ciudadano FRANCISCO RAMÓN MOTA, el 30 de mayo de 2012. Publíquese, Regístrese y Notifíquese. Cúmplase lo ordenado. Remítase copia certificada de la presente decisión a la Comisión Judicial del Tribunal Supremo de Justicia, a la Dirección Ejecutiva de la Magistratura y a la Inspectoría General de Tribunales. Devuélvase el expediente al Tribunal de origen. Dada, firmada y sellada en el salón de despacho de la Corte Disciplinaria Judicial en la ciudad de Caracas, a los seis (6) del mes de noviembre de 2012. Años 202° de la Independencia y 153° de la Federación. El Presidente-Ponente, TULIO JIMÉNEZ RODRÍGUEZ El Vicepresidente, ADELSO GUERRERO OMAÑA La Jueza, ANA CECILIA ZULUETA RODRÍGUEZ La Secretaria, MARIANELA GIL MARTÍNEZ Exp. No. AP61-R-2012-000024.- 1 REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Jurisdicción Disciplinaria Judicial Corte Disciplinaria Judicial Exp. No. AP61-R-2012-000024 . Quien suscribe, ANA CECILIA ZULUETA RODRÍGUEZ, Jueza de la Corte Disciplinaria Judicial, disiente de la mayoría sentenciadora en el fallo que antecede, en el que se declaró con lugar el recurso de apelación ejercido el 12 de julio de 2012 por la ciudadana Jeset García Hernández, actuando por delegación de la Inspectoría General de Tribunales, contra la sentencia dictada por el Tribunal Disciplinario Judicial en fecha 12 de junio y se anuló la referida decisión, en la que se ordenó la reincorporación del ciudadano FRANCISCO RAMÓN MOTA al cargo de Juez Segundo y Sexto de Primera Instancia de la Circunscripción Judicial del Estado Aragua y el pago de los salarios, bonos y demás beneficios laborales dejados de percibir desde la fecha en que se decretó la medida de suspensión del cargo sin goce de sueldo. La mayoría sentenciadora dictó su decisión sin la instrucción del procedimiento de segunda instancia previsto en los artículos 83 y siguientes del Código de Ética del Juez Venezolano y Jueza Venezolana (en lo sucesivo, el Código de Ética), por considerar que la decisión recurrida era “…una sentencia interlocutoria que pon[ía] fin a la incidencia cautelar de suspensión del ejercicio del cargo…”. Ahora bien, quien suscribe reitera la opinión expuesta en el Voto Salvado rendido en la Sentencia N° 01 de fecha 1° de marzo de 2012, en la que se decidió un recurso de apelación sin cumplir previamente el procedimiento de segunda instancia establecido en el referido Código. En esa oportunidad, manifesté que el Código de Ética disponía el procedimiento para el trámite de la apelación de las sentencias definitivas dictadas por el Tribunal Disciplinario Judicial, sin distinguir en cuanto a la posición de la sentencia en el proceso, entendiendo que la locución del legislador estaba referida a: i) la sentencia que resolvía el mérito de la causa; ii) la que resolvía alguna incidencia que se hubiese producido durante el proceso y que devenía en sentencia definitiva de esa incidencia autónomamente considerada y iii) la que al resolver alguna incidencia del proceso, impedía la continuación del juicio principal y adquiría el carácter de sentencia interlocutoria con fuerza de definitiva. 2 REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Jurisdicción Disciplinaria Judicial Corte Disciplinaria Judicial Exp. No. AP61-R-2012-000024 . En este orden de ideas, el procedimiento de segunda instancia previsto está caracterizado por los principios de oralidad, celeridad y economía procesal, cuyo íter preserva el derecho al debido proceso de las partes previsto en el artículo 49 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, pudiendo adecuarse el mismo dependiendo del contenido específico de las decisiones impugnadas; es decir, distinguiendo el contenido de cada decisión y estableciendo un trámite procedimental de segunda instancia que preserve el derecho al debido proceso del justiciable y, además, garantice los principios de celeridad y economía procesal. La Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, en sentencia N°444 del 4 de abril de 2001, interpretó el dispositivo constitucional en referencia y sentó el criterio, ratificado en la decisión N° 24 del 13 de febrero de 2012, según el cual: “…El derecho al debido proceso, consagrado en el artículo 49 de la Constitución a favor de todo habitante de la República, comprende el derecho a defenderse ante los órganos competentes, que serán los tribunales o los órganos administrativos, según el caso. Este derecho implica notificación adecuada de los hechos imputados, disponibilidad de medios que permitan ejercer la defensa adecuadamente, acceso a los órganos de administración de justicia, acceso a pruebas, previsión legal de lapsos adecuados para ejercer la defensa, preestablecimiento de medios que permitan recurrir contra los fallos condenatorios (de conformidad con las previsiones legales), derecho a ser presumido inocente mientras no se demuestre lo contrario, derecho de ser oído, derecho de ser juzgado por el juez natural, derecho a no ser condenado por un hecho no previsto en la ley como delito o falta, derecho a no ser juzgado dos veces por los mismos hechos, derecho a no ser obligado a declararse culpable ni a declarar contra sí mismo, su cónyuge, ni sus parientes dentro del segundo grado de afinidad y cuarto de consanguinidad, entre otros…”. Así, interpreta quien suscribe, que el contenido del derecho al debido proceso debe ser garantizado al justiciable en todo el iter procesal, por cuanto el Constituyente atribuyó a su cumplimiento el carácter de garantía inherente a la persona humana. En consecuencia, soslayar la instrucción de un procedimiento para tramitar las causas en segunda instancia, comporta una lesión a los derechos a la defensa y al debido proceso y una infracción a la obligación de garantizar la integridad constitucional. 3 REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Jurisdicción Disciplinaria Judicial Corte Disciplinaria Judicial Exp. No. AP61-R-2012-000024 . Las circunstancias narradas determinan mi disidencia respecto a la postura de mis colegas sentenciadores, cuando decidieron el recurso de apelación ejercido por la delegación de la Inspectoría General de Tribunales, sin cumplir con un procedimiento que garantizara el desarrollo del correspondiente contradictorio. Queda así expresado el criterio de quien rinde este voto salvado. El Juez Ponente, TULIO JIMÉNEZ RODRÍGUEZ El Juez, ADELSO A. GUERRERO OMAÑA La Jueza Disidente, ANA CECILIA ZULUETA RODRÍGUEZ La Secretaria, MARIANELA GIL MARTÍNEZ Hoy 20 de noviembre de 2012, se publicó la anterior decisión quedando registrada bajo el N° 29. La Secretaria, MARIANELA GIL MARTÍNEZ