Manual de riesgos laborales

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Autores:
- Dña. Cristina S. Carrión
Diplomada en relaciones laborales.
Técnico de grado medio en prevención de riesgos laborales.
- D. Iván R. Ornat
Diplomado en relaciones laborales.
Técnico superior en prevención de riesgos laborales.
- D. Alberto Fuente R.
Abogado
Técnico superior en prevención de riesgos laborales.
Coordinadores del Manual:
- D. Antonio Mateos C.
Tesorero de FENITEL
- D. Miguel Angel G. Argüelles
Director-Gerente de FENITEL.
Edita:
FENITEL
C/Orense 62 Local
28020 Madrid
www.fenitel.es
Imprime:
Gráficas Apel.
Depósito Legal:
AS-4663-2002
Produce, realiza y diseña:
Asturleader’s.
C/ Fray Ceferino, 4, 1º. 33001-Oviedo.
www.asturleaders.com
© FENITEL
"Este manual práctico se distribuye gratuitamente para promocionar la cultura de la prevención de riesgos en
el sector de la instalación de telecomunicaciones, queda totalmente prohibida la venta del mismo."
FENITEL
Índice General
1. INTRODUCCIÓN
2. ESTRUCTURA BÁSICA DE UN SISTEMA DE PREVENCIÓN DE
RIESGOS LABORALES
2.1. EL COMPROMISO DE LA DIRECCIÓN DE LA EMPRESA
2.2. ORGANIZACIÓN DE LA PREVENCIÓN
2.2.a. MODELOS DE ORGANIZACIÓN
2.2.b. ASPECTOS A VALORAR AL CONTRATAR UN
SERVICIO DE PREVENCIÓN AJENO
2.2.c. LA FIGURA DEL COORDINADOR INTERNO
2.3. DELEGADOS DE PREVENCIÓN Y COMITÉ DE SEGURIDAD
Y SALUD
2.3.a. DELEGADOS DE PREVENCIÓN
2.3.b. COMITÉ DE SEGURIDAD YSALUD
2.4. EVALUACIÓN DE RIESGOS LABORALES
2.4.a. INFORME DE EVALUACIÓN DE RIEGOS
2.5. FORMACIÓN E INFORMACIÓN DE LOS TRABAJADORES
2.5.a. INFORMACIÓN
2.5.b. FORMACIÓN
2.6. ESQUEMA DE IMPLANTACIÓN DE UN SISTEMA DE
GESTIÓN DE PREVENCIÓN DE RIESGOS LABORALES.
3. TÉCNICAS DE GESTIÓN DE PREVENCIÓN DE RIESGOS
LABORALES
3.1. INVESTIGACIÓN DE ACCIDENTES E INCIDENTES
3.1.a. INTRODUCCIÓN
3.1.b. DEFINICIONES
3.1.c. PROCEDIMIENTO
3.1.d. COMUNICACIÓN DE ACCIDENTES
3.1.e. PLANIFICACIÓN DE LAS ACCIONES CORRECTORAS
3.2. COMUNICADOS DE RIESGOS
3.3. COSTES ECONÓMICOS NO ASEGURADOS DE UN
ACCIDENTE DE TRABAJO
4. TÉCNICAS ESPECÍFICAS DE APLICACIÓN
4.1.COORDINACIÓN DE LAS ACTIVIDADES EMPRESARIALES.
SEGURIDAD EN OBRAS DE CONSTRUCCIÓN.
4.1.a. COORDINACIÓN DE ACTIVIDADES EMPRESARIALES
4.1.b. SEGURIDAD EN OBRAS DE CONSTRUCCIÓN
4.2. EQUIPOS DE PROTECCIÓN INDIVIDUAL (EPI)
4.2.a. ELECCIÓN DE LOS EPI
4.2.b. UTILIZACIÓN, MANTENIMIENTO Y REPOSICIÓN DE
LOS EPI
4.2.c. POLÍTICA DE IMPLANTACIÓN DE LOS EPI
4.2.d. OBLIGACIONES DEL EMPRESARIO SOBRE LOS EPI
4.2.e. OBLIGACIONES DE LOS TRABAJADORES SOBRE LOS EPI
4.2.f. EXIGENCIAS ESENCIALES DE SANIDAD Y SEGURIDAD
4.3. EQUIPOS DE TRABAJO
4.3.a. OBLIGACIONES EMPRESARIALES
4.3.b. UTILIZACIÓN DE LOS EQUIPOS DE TRABAJO
4.3.c. CONDICIONES DE SEGURIDAD DE LOS EQUIPOS
DE TRABAJO
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
4.3.d. MÁQUINAS
4.3.e. HERRAMIENTAS MANUALES
4.4. VIGILANCIA DE LA SALUD
4.5. EMPRESAS DE TRABAJO TEMPORAL (ETT)
4.5.a. EL CONTRATO DE PUESTA A DISPOSICIÓN
4.5.b. EL CONTRATO DE TRABAJO
4.5.c. OBLIGACIONES DE LA EMPRESA USUARIA
4.5.d. ORGANIZACIÓN DE LA PREVENCIÓN
4.5.e. DOCUMENTACIÓN
4.6. ERGONOMÍA
4.6.a. DISEÑO DEL PUESTO DE TRABAJO
4.6.b. LA CARGA FÍSICA DEL TRABAJO
4.6.c. CARGA MENTAL DEL TRABAJO
4.6.d. EL ESTRÉS LABORAL
4.6.e. PANTALLAS DE VISUALIZACIÓN DE DATOS
4.6.f. TRANSPORTE MANUAL DE CARGAS
4.7. LUGARES DE TRABAJO
4.7.a. LA ILUMINACIÓN
4.7.b. CONDICIONES AMBIENTALES
4.7.c. CARACTERÍSTICAS FÍSICAS DE LOS LUGARES DE
TRABAJO
4.7.d. ORDEN, LIMPIEZA Y MANTENIMIENTO
4.7.e. MATERIAL DE PRIMEROS AUXILIOS
4.8. SEÑALIZACIÓN EN EL TRABAJO
4.9. DOCUMENTACIÓN EN MATERIA DE PREVENCIÓN
4.9.a. OTROS REGISTROS DOCUMENTALES RELATIVOS AL
EMPRESARIO
4.10. COMUNICACIÓN Y PROMOCIÓN
5. PLAN DE EMERGENCIA
5.1. EVALUACIÓN DEL RIESGO
5.2. MEDIOS DE PROTECCIÓN
5.3. PLAN DE EMERGENCIA
5.4. IMPLANTACIÓN
6
6. ASPECTOS LEGALES
6.1. RESPONSABILIDADES DEL EMPRESARIO
6.1.a. RESPONSABILIDAD ADMINISTRATIVA
6.1.a.1. INFRACCIONES ADMINISTRATIVAS
6.1.a.2. TIPIFICACIÓN DE LAS INFRACCIONES
6.1.a.3. PRESCRIPCIÓN DE LAS INFRACCIONES
6.1.a.4. SANCIONES
6.1.b. RESPONSABILIDAD PENAL
6.1.c. RESPONSABILIDAD CIVIL
6.1.d. CONCURRENCIA DE SANCIONES
6.1.e. EJEMPLO DE RESPONSABILIDAD CIVIL DEL
EMPRESARIO (CASO REAL)
6.2. OBLIGACIONES DE LOS TRABAJADORES
6.2.a. OBLIGACIONES COLECTIVAS
6.3. DERECHOS DE LOS TRABAJADORES
7. AUDITORÍAS
8. LEGISLACIÓN DE REFERENCIA
1
D
Introducción
esde 1980 la legislación referente a la seguridad en el trabajo está evolucionando
de forma constante, desarrollada a través
de diferentes tipos de normas (leyes, reales decretos, reglamentos, órdenes, etc.)
pero sin una cohesión definida y absoluta. Con la aparición de la Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales y del Real Decreto 39/1997 por el que se
aprueba el Reglamento de los Servicios de Prevención,
así como con los posteriores reglamentos específicos,
se introdujo el concepto de Gestión de la Prevención
de Riesgos Laborales en la organización de la empresa, con la finalidad y propósito de darle cohesión, uniformidad y sentido.
En toda organización empresarial, en mayor o menor grado, se realiza una gestión y planificación de
recursos financieros, económicos, patrimoniales, productivos, humanos, etc. con la finalidad de optimizarlos y conseguir mayor beneficio empresarial que asegure la durabilidad de la organización en el tiempo y
en la sociedad. Por tanto, debemos plantearnos la aplicación de una gestión de la prevención de riesgos laborales adecuada a las necesidades y recursos de la
empresa.
Existen tres motivos o razones por los que la empresa debe aplicar una gestión íntegra y continuada de
los riesgos derivados de las condiciones de trabajo:
• Razones legales: la Ley de Prevención de Riesgos
Laborales (31/1995) y su consiguiente desarrollo
reglamentario, establece el deber del empresario
de proteger a los trabajadores frente a los riesgos
derivados de las condiciones de trabajo por lo
que deberá garantizar la seguridad y salud de los
trabajadores a su servicio, en todos los aspectos
relacionados con el trabajo, adoptando las medidas de protección necesarias. Para ello, la legislación establece una serie de mecanismos de
control, como los derechos de información, consulta y participación de los trabajadores, formación en materia preventiva, vigilancia de la salud, etc. con el objetivo de asegurar el cumplimiento del desarrollo normativo.
El incumplimiento de los preceptos legislativos
puede comportar para el empresario una serie de
responsabilidades administrativas, civiles, e incluso penales, en función de la gravedad de los
hechos.
• Razones económicas: los costes económicos de-
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PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
rivados de un accidente de trabajo pueden tener
más incidencia en la cuenta de resultados de la
empresa de lo que aparentemente apreciamos.
Con una adecuada planificación y gestión de la
prevención de riesgos laborales se persigue reducir al máximo el nivel de accidentes y, por tanto,
reducir los costes con el propósito de conseguir
un resultado económico más positivo. Además,
entendemos que la gestión de la seguridad y salud nos puede aportar una ventaja competitiva en
el mercado, al promocionar nuestra empresa como entidad que vela por la seguridad y salud de
sus trabajadores. Sin duda, este factor contribuye
a la mejora de la calidad en el servicio al cliente.
(Ver cuadro nº 1.1.)
• Razones humanas: en tiempos donde el capital
humano es el principal activo de la empresa, debemos poner todos los medios para conservarlo y
asegurar la permanencia de las personas en nuestra organización. Implantar una adecuada política de seguridad y salud contribuye a aumentar la
satisfacción de los trabajadores. Además, hemos
de considerar que las consecuencias de un accidente de trabajo reducen la calidad de vida de
los trabajadores (provocando dolor y sufrimiento
al afectado y a sus familiares, disminución de los
ingresos, gastos adicionales...) y que pueden
conllevar una serie de consecuencias sociales
como muertes, minusvalías, lesiones graves, indemnizaciones de Seguridad Social, pensiones,
etc. (Ver cuadro nº 1.2.)
8
■ Cuadro 1.1 Razones económicas
para la empresa:
■ Indemnizaciones.
■ Recargos por falta de medidas de protección.
■ Costes ocultos (deterioro de equipos, procesos
judiciales, etc.).
■ Paralización de trabajos.
Para el accidentado:
■ Disminución de ingresos temporal o definitivamente.
■ Gastos adicionales.
Para la sociedad:
■ Indemnizaciones de Seguridad Social.
■ Sustracción de recursos humanos para el trabajo.
■ Actuaciones obligadas (investigaciones, procesos, etc.).
■ Cuadro 1.2 Razones humanas para
la empresa:
■ Pérdida de capital humano.
■ Presiones sociales.
■ Pérdida de imagen.
Para el accidentado:
■ Dolor y sufrimiento físico.
■ Pérdida de capacidad de trabajo, e incluso de la
profesión.
■ Sufrimiento de la familia.
Para la sociedad:
■ Muertes, minusvalías, lesiones graves y leves.
■ Deterioro de la calidad de vida.
■ Actuaciones obligadas (investigaciones, procesos, etc.).
2
Estructura básica de un sistema de
prevención de riesgos laborales
2.1. El compromiso de la
dirección de la empresa
Es muy importante para poder desarrollar una adecuada gestión de la prevención de riesgos laborales,
que exista un compromiso adquirido por parte de la
Dirección o Gerencia de la empresa. Independientemente de las obligaciones legales derivadas de la Ley
de Prevención de Riesgos Laborales (31/1995) es fundamental la creencia y la voluntad de inversión en la
seguridad y salud como herramienta de gestión que
aporte un valor añadido a nuestra organización.
Dicho compromiso debe transformarse en medios
económicos y materiales para desarrollar un modelo
de gestión eficaz que cumpla con todas las exigencias
legales.
Debemos hacerlo efectivo mediante una declaración de Política de Seguridad y Salud de la empresa
(ver cuadro nº 2.1.), que será comunicada y promovida entre todos los empleados, presentes y futuros. La
declaración debe afirmar el compromiso firme de:
• Desarrollar unas condiciones de trabajo óptimas.
• Definir la gestión de la prevención de riesgos la-
borales respecto a las otras políticas de la empresa (calidad, medio ambiente, satisfacción del cliente, etc.).
• Asegurar la calidad de vida de los trabajadores.
• Definir las responsabilidades de cada nivel jerárquico en materia preventiva.
• Destacar la necesidad de aunar esfuerzos para
poder asegurar el cumplimiento de los objetivos.
• Garantizar el acceso a los recursos necesarios.
• Asegurar la eficacia de la gestión mediante los
sistemas de control y seguimiento oportunos.
El fomento de este compromiso no debe permanecer como un hecho simbólico y abstracto que con el
paso del tiempo quede obsoleto y sin sentido, sino que
debe ser el punto de partida para conseguir una serie
de logros en materia de seguridad y salud.
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
2.2. Organización de la
prevención
■ Cuadro 2.1
Política de seguridad y salud de
Fenitel
2.2.a. Modelos de organización
La política de FENITEL es conseguir un cumplimiento total de la legislación promulgada en materia de seguridad y salud.
Debemos esforzarnos de forma continua para desarrollar conjuntamente un modelo de calidad y
seguridad que satisfaga las necesidades de nuestros asociados. Para ello esperamos de todos nuestros empleados un trabajo responsable y seguro
que busque el cumplimiento de las normas y procedimientos ya establecidos.
Se garantiza la divulgación de todo el desarrollo
normativo legal en materia de seguridad y salud
entre los miembros asociados, así como poner a
disposición todos los medios posibles a nuestro alcance.
Agradecemos la colaboración de todos para el correcto desarrollo de esta política.
FENITEL
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El Reglamento de los Servicios de Prevención (R.D.
39/1997) define los diferentes modelos de organización para la gestión de prevención de riesgos laborales
que puede adoptar una empresa en función de dos características: sector de actividad y número de trabajadores. Dependiendo de dichas características, el empresario cuenta con las siguientes modalidades organizativas para desarrollar la actividad preventiva (ver
anexo 2.2.a.):
• Asumir personalmente la actividad preventiva.
• Designar uno o varios trabajadores para llevarla a
cabo.
• Constituir un servicio de prevención propio.
• Recurrir a un servicio de prevención ajeno.
Entendemos que cualquiera de ellas es totalmente
válida, por lo que cada empresa es libre de elegir la
fórmula que mejor se adapte a sus necesidades, excepto para aquellas empresas legalmente obligadas a
adoptar un modelo concreto.
¿Qué requisitos deben cumplirse para aplicar cada
una de estas modalidades organizativas de prevención?
➠ Asunción personal de la actividad preventiva
por el empresario: el empresario podrá desarrollar
personalmente la actividad preventiva, excepto las ac-
tividades relativas a la vigilancia de la salud de los trabajadores cuando concurran las siguientes circunstancias:
- Que sea una empresa de menos de 6 trabajadores.
- Que la actividad desarrollada por la empresa no esté incluida en el Anexo I del Reglamento de los Servicios de Prevención (R.D.
39/1997) (ver cuadro nº 2.2.a.).
- Que el empresario desarrolle de forma habitual la actividad profesional en el centro de
trabajo.
- Que el empresario tenga capacidad para desarrollar las funciones preventivas correspondientes, de acuerdo con lo establecido
en el Capítulo VI del Reglamento de los Servicios de Prevención (R.D. 39/1997). Se requiere poseer unos conocimientos técnicos
acordes con los riesgos existentes, debiendo
acreditarse tal capacidad mediante certificación de formación específica en materia de
prevención de riesgos laborales, emitida por
un servicio de prevención o por una entidad
pública o privada con capacidad para desarrollar actividades formativas específicas en
esta materia. (Formación mínima no inferior
a 50 horas en el caso de empresas que desarrollen alguna de las actividades incluidas
en el anexo I, y de 30 horas en los demás
casos).
➠ Designación de uno o varios trabajadores: el
empresario tiene la facultad de designar a uno o varios
trabajadores para que desarrollen la actividad preven-
tiva de la empresa. En caso de que no sea suficiente
con la adopción del presente modelo, es necesario recurrir a un servicio de prevención propio o ajeno.
Para el desempeño de la actividad preventiva, los
trabajadores designados deben estar capacitados para
desarrollar las funciones correspondientes, de acuerdo
con el Capítulo VI del Reglamento de los Servicios de
Prevención (R.D. 39/1997), poseer la formación específica en materia de prevención y poder acreditarlo
mediante el correspondiente certificado de formación.
Los trabajadores designados deben disponer de los
medios materiales y del tiempo suficiente para llevar a
cabo la actividad preventiva. El número de trabajadores designados debe ser el adecuado conforme a las
necesidades.
➠ Servicio de Prevención Propio: el empresario
debe constituir un servicio de prevención propio cuando concurra alguno de los siguientes supuestos:
• Que se trate de empresas con más de 500
trabajadores.
• Que se trate de empresas entre 250 y 500
trabajadores que desarrollen alguna actividad incluida en el Anexo I del Reglamento
de los Servicios de Prevención (R.D.
39/1997).
• Cuando así lo decida la Autoridad Laboral,
y con independencia del número de trabajadores, en función de la peligrosidad de la
actividad desarrollada o de la frecuencia y
gravedad de la siniestralidad en la empresa,
salvo que el empresario haya optado por el
concierto de un servicio de prevención ajeno.
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PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
Un servicio de prevención propio debe contar con
al menos dos de las cuatro disciplinas previstas en el
artículo 34 del Reglamento de los Servicios de Prevención (R.D. 39/1997): Seguridad, Higiene Industrial, Ergonomía y Psicosociología Aplicada y/o Medicina del
Trabajo, y sus integrantes deben dedicarse de forma
exclusiva a la actividad preventiva de la empresa.
Aquellas actividades que no sean asumidas por el servicio de prevención propio deben ser concertadas con
uno o más servicios de prevención ajenos.
La empresa tiene la obligación de elaborar anualmente la memoria y programación del servicio de prevención y mantener estos documentos a disposición de
las autoridades laborales y sanitarias.
La dirección de la empresa, aún cuando no tenga
la obligación legal, puede optar por constituir un servicio de prevención propio.
➠ Servicio de Prevención Mancomunado: es una
variedad del servicio de prevención propio, cuya característica fundamental es que su campo de aplicación se refiere a distintas empresas.
Puede constituirse un servicio de prevención mancomunado entre aquellas empresas pertenecientes a
un mismo sector productivo o grupo empresarial, o
que desarrollen sus actividades en un polígono industrial o área geográfica limitada.
Antes de su constitución es necesaria la consulta
previa a los representantes de los trabajadores de cada
una de las empresas afectadas.
La actividad de estos servicios se limita a las empresas participantes. La información relativa a las empresas y su grado de participación debe estar a disposición de la Autoridad Laboral.
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➠ Servicio de Prevención Ajeno: el empresario debe recurrir a un servicio de prevención ajeno cuando
concurra alguna de las siguientes circunstancias:
- Que la designación de uno o varios trabajadores sea insuficiente para la actividad de
prevención y no exista la obligación de
constituir un servicio de prevención propio.
- Que sólo exista una asunción parcial personal por parte del empresario.
- Que el servicio de prevención propio no haya asumido la totalidad de la actividad preventiva.
- Que la Autoridad Laboral, en función de la
peligrosidad de la actividad desarrollada o
de la frecuencia y gravedad de la siniestralidad en la empresa, con independencia del
número de trabajadores, obligue a constituir
un servicio de prevención propio aunque la
empresa haya optado por un servicio de prevención ajeno.
■ Cuadro 2.2.a
Anexo 1 R.D.39/1997
Apartados que pueden afectar a la
actividad de las empresas
instaladoras de telecomunicaciones
h) Actividades en obras de construcción, excavaciones, movimientos de tierras y túneles, con riesgo de caída de altura o sepultamiento.
l) Trabajos con riesgos eléctricos en alta tensión.
■ Anexo 2.2.a
Modelos de Organización
OPCIONES
TIPO EMPRESAS
1
EMPRESARIO
ASUME
PERSONALMENTE
2
DESIGNACIÓN
DE
TRABAJADORES
3
4A
4B
SERVICIO
SERVICIO
SERVICIO
PREVENCIÓN CONCERTADO CONCERTADO
PROPIO
TOTAL
PARCIAL
MENOS DE 6 TRABAJADORES
OPCIONAL
OPCIONAL
OPCIONAL
OPCIONAL
OPCIONAL
MENOS DE 6 TRABAJADORES
EN ANEXO 1
NO
OPCIONAL
OPCIONAL
OPCIONAL
OPCIONAL
ENTRE 6 Y 500
TRABAJADORES
NO
OPCIONAL
OPCIONAL
OPCIONAL
OPCIONAL
ENTRE 6 Y 250
TRABAJADORES EN ANEXO 1
NO
OPCIONAL
OPCIONAL
OPCIONAL
OPCIONAL
ENTRE 250 Y 500
TRABAJADORES EN ANEXO 1
NO
NO
OBLIGATORIO
NO
OPCIONAL
MAS DE 500 TRABAJADORES
NO
NO
OBLIGATORIO
NO
OPCIONAL
OBSERVACIONES
ART.11
OBLIGATORIO
CONCERTAR LA
VIGILANCIA DE LA
SALUD
ART.12
OBLIGATORIO
CONCERTAR LA
VIGILANCIA DE
LA SALUD
ART.14
SERVICIO
PUEDE SER
PREVENCIÓN
MANCOMUNA
AJENO
DO (ART.21)
ACREDITADO
SIEMPRE
COMBINADO
CON 1, 2 Ó 3
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
2.2.b. Aspectos a valorar al contratar un
servicio de prevención ajeno
Cuando decidimos optar por concertar la actividad
preventiva con un servicio de prevención ajeno debemos considerar diferentes aspectos y factores en la
elección:
• Consultar a los trabajadores de nuestra empresa.
• Exigir la acreditación expedida por el Ministerio de Trabajo o por el órgano autonómico competente, comprobando tanto que
la empresa está acreditada para actuar como servicio de prevención ajeno, como su
ámbito territorial de actuación.
• Determinar las especialidades acreditadas
que concertamos.
• Valorar las diferentes actividades incluidas
en el contrato con el servicio de prevención, así como el tiempo de dedicación
efectiva al desarrollo de dichas actividades.
Estas actividades incluidas en el contrato deben
ser, al menos, las siguientes:
• Establecimiento de la programación anual
del servicio de prevención, de la política de
la empresa y de la organización en materia
de prevención de riesgos laborales. (Memoria al finalizar el año)
• Realización, revisión y actualización de la
evaluación de riesgos laborales.
• Diseño y elaboración del Plan de Preven-
14
ción colaborando con el seguimiento del
mismo.
• Análisis de las posibles situaciones de
emergencia y las medidas necesarias a
adoptar en materia de primeros auxilios, lucha contra incendios y evacuación de los
trabajadores.(Medidas de Emergencia)
• Formar a los trabajadores en materia preventiva.
• Asesoramiento en el control y gestión de la
seguridad en la contratación de empresas
de servicio, contratistas y subcontratistas
(PROMOTOR y/o CONTRATISTA). Modelización de los planes de seguridad y salud.
• Diseño del sistema necesario para realizar,
de modo adecuado, el registro y mantenimiento de la documentación en materia de
seguridad y salud que puede ser solicitada
por cualquier Administración según las obligaciones establecidas en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
• Asesoramiento para afrontar las inspecciones de la Administración competente.
• Asesoramiento sobre análisis, investigación
y registro de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales que hayan causado
al trabajador una incapacidad laboral superior a un día de trabajo.
• Asesoramiento para la integración de la prevención de riesgos laborales en el conjunto
de actividades y decisiones de la empresa.
• Asesoría y asistencia jurídica en el ámbito
administrativo sancionador.
• Vigilancia de la salud.
La actividad preventiva concertada con un servicio
de prevención ajeno, debe formalizarse por escrito
mediante un contrato, donde se recojan como mínimo
los siguientes aspectos:
• Identificación de la entidad especializada
que actúa como servicio de prevención ajeno a la empresa.
• Identificación de la empresa destinataria de
la actividad, es decir, nuestra empresa, así
como de los centros de trabajo que dependen de ella.
• Aspectos de la actividad preventiva a desarrollar en la empresa, especificando las actuaciones concretas, así como los medios
para llevarlas a cabo.
• Actividad de vigilancia de la salud de los
trabajadores, en su caso.
• Duración del concierto.
• Condiciones económicas del concierto.
2.2.c. La figura del coordinador interno
Una vez que hemos decidido organizar la actividad
preventiva con un servicio de prevención ajeno, adquiere importancia la figura del Coordinador Interno,
que se ocupará de que los programas de actuación
preventiva diseñados sean efectivos. Su misión principal consiste en mantener e informar sobre el funcionamiento de la actividad preventiva en todo momento,
además de realizar las funciones de:
• Presupuestar la dotación de recursos necesarios en materia de seguridad y salud.
• Aprobar los objetivos anuales.
• Coordinar los planes de acción preventiva.
• Determinar prioridades.
• Control y seguimiento de las acciones correctoras.
• Seguimiento de la actividad preventiva e información a los trabajadores.
• Participar en la investigación de accidentes.
• Controlar la implantación del plan de emergencia.
• Conseguir la integración de la actividad
preventiva en toda la estructura organizativa
de la empresa.
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
2.3. Delegados de Prevención y
Comité de Seguridad y
Salud
2.3.a. Delegados de Prevención
La Ley de Prevención de Riesgos Laborales
(31/1995) establece el derecho de los trabajadores a
ser consultados y participar en cualquier cuestión relacionada con la seguridad y salud en el trabajo. Debemos considerar este derecho como un aspecto positivo, dado que actúa como mecanismo de integración
de la prevención en toda la estructura de la empresa,
apoyando la consecución de una gestión eficaz y efectiva.
El Delegado de Prevención es el órgano de representación de los trabajadores con funciones específicas en materia de prevención de riesgos laborales.
Únicamente puede ser elegido entre los representantes
de personal ya existentes en la empresa o, en carencia
de éstos, entre y por los mismos trabajadores. No obstante, los convenios colectivos pueden establecer otros
mecanismos de designación siempre que se garantice
que dicha facultad de elección corresponde a los representantes de personal o a los propios trabajadores.
Respecto a la figura del Delegado de Prevención
deben especificarse algunos aspectos:
≤ La existencia de uno o varios Delegados de Prevención en la empresa, no exonera a la empresa de la
obligación de optar por uno de los modelos de organi-
16
zación de la prevención (ver apartado 2.2.a.).
≤ No debe confundirse el modelo de organización
de la prevención de “trabajador/es designado/s por el
empresario” con la existencia del Delegado de Prevención.
≤ La empresa no está facultada para obligar a elegir
la figura del Delegado de Prevención, sino que es un
derecho de los trabajadores y ellos pueden optar por
ejecutarlo o no.
El número de Delegados de Prevención en la empresa varía siempre en función del número de trabajadores de ésta, y legalmente está establecido el siguiente:
Nº de trabajadores
Delegados de Prevención
Menos de 30
El Delegado de Personal hará las funciones de Delegado de Prevención
Entre 31 y 49
1 Delegado de Prevención
elegido entre los Delegados
de Personal
Entre 50 y 100
2 Delegados de Prevención
Entre 101 y 500
3 Delegados de Prevención
Entre 501 y 1000
4 Delegados de Prevención
Entre 1001 y 2000
5 Delegados de Prevención
Entre 2001 y 3000
6 Delegados de Prevención
Entre 3001 y 4000
7 Delegados de Prevención
De 4001 en adelante 8 Delegados de Prevención
Para determinar el número de Delegados de Prevención que corresponde a cada empresa respecto al
cómputo de los trabajadores temporales, deben seguirse los siguientes criterios:
• Los trabajadores con contrato temporal, con
independencia de la modalidad contractual,
de duración superior a 1 año, se deben
computar como trabajadores fijos de plantilla en el momento de la elección.
• Los trabajadores con contrato temporal de
duración igual o inferior a un año, sea cual
fuere la modalidad contractual se computan
según el número de días trabajados en el
período de 1 año anterior a la fecha de designación o elección. Cada 200 días trabajados o fracción, se computa como 1 trabajador más, pero con el límite máximo de los
que realmente trabajen en el momento de la
designación.
Entre las competencias de los Delegados de Prevención cabría citar:
• Colaborar con la dirección de la empresa
en la mejora de la acción preventiva.
• Promover y fomentar la cooperación de los
trabajadores en la ejecución de la normativa sobre prevención de riesgos laborales.
• Ser consultados por el empresario, con carácter previo a la planificación y organización de las actividades preventivas, ejerciendo así el deber de consulta a los trabajadores, que se recoge en el artículo 33 de
la Ley de Prevención de Riesgos Laborales
(31/1995). (Ver cuadro nº 2.3.a.)
• Ejercer una labor de vigilancia y control sobre el cumplimiento de la normativa de seguridad y salud.
• Ejercer las competencias atribuidas al Comité de Seguridad y Salud cuando éste no
exista en la empresa.
■ Cuadro 2.3.a
CONSULTA DE LOS TRABAJADORES
ARTÍCULO 33 DE LA LEY 31/1995 DE 8 DE NOVIEMBRE DE
PREVENCIÓN DE RIESGOS LABORALES.
El empresario deberá consultar a los representantes
de los trabajadores, o en carencia de éstos a los
trabajadores, con la debida antelación, la adopción de las decisiones relativas a:
• La planificación y la organización del trabajo en
la empresa y la introducción de nuevas tecnologías, en todo lo relacionado con las consecuencias que éstas pudieran tener para la seguridad y
la salud de los trabajadores, derivadas de la elección de los equipos, la determinación y la adecuación de las condiciones de trabajo y el impacto de los factores ambientales en el trabajo.
• La organización y desarrollo de las actividades
de protección de la salud y prevención de los
riesgos profesionales en la empresa, incluida la
designación de los trabajadores encargados de
dichas actividades o el recurso a un servicio de
prevención ajeno.
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M A N UA L P R Á C T I C O
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
• La designación de los trabajadores encargados
de las medidas de emergencia.
• Los procedimientos de información, consulta y
participación de los trabajadores y de documentación a elaborar y conservar a disposición de la
Autoridad Laboral.
• El proyecto y la organización de la formación en
materia preventiva.
• Cualquier otra acción que pueda tener efectos
sustanciales sobre la seguridad y la salud de los
trabajadores.
Las facultades genéricas de los Delegados de Prevención las dividimos en cuatro grupos:
- Información: acceso a la documentación relativa a la seguridad y salud en la empresa,
ser informado de los daños a la salud sufridos por los trabajadores, acompaña a los
técnicos en las evaluaciones de carácter preventivo y a los Inspectores de Trabajo y Seguridad Social, en los términos previstos en
la ley.
- Comprobación: vigilancia y control del estado de las condiciones de trabajo, comunicación con los trabajadores durante la jornada
de trabajo pero sin alterar el normal desarrollo del proceso productivo.
- Participación: realización de propuestas para mejorar los niveles de seguridad y salud.
- Ejecutiva: paralización de actividades por
riesgo grave e inminente.
18
La empresa tiene la obligación de proporcionar a
los Delegados de Prevención los medios y la formación necesaria en materia preventiva para que puedan
desarrollar sus funciones. El tiempo dedicado a la formación se considera en todo caso como trabajo efectivo, por lo que su coste no puede recaer sobre los Delegados de Prevención que dispondrán de un crédito
de horas mensuales retribuidas para el desempeño de
éstas:
Nº DE TRABAJADORES
HORAS MENSUALES
Hasta 100 trabajadores
15
101 - 250 trabajadores
20
251 - 500 trabajadores
30
501 - 750 trabajadores
35
751 trabajadores en adelante.
40
Además tampoco se imputa como crédito de horas
mensuales retribuidas, sino que se considera trabajo
efectivo el tiempo destinado a:
- Reuniones del Comité de Seguridad y Salud.
- Cualquier otra reunión convocada por la empresa
en materia de prevención de riesgos.
- Acompañar a los técnicos en las evaluaciones de
carácter preventivo del medio ambiente de trabajo, así como a los Inspectores de Trabajo y Seguridad Social en las visitas y verificaciones que realicen en los centros de trabajo para comprobar el
cumplimiento de la normativa de prevención de
riesgos laborales.
- Visitas al lugar de los hechos cuando se haya producido una daño para la salud de los trabajadores
con el fin de conocer las circunstancias del mismo.
Para finalizar, los Delegados de Prevención tienen
el deber de sigilo profesional respecto a las informaciones a las que tengan acceso como consecuencia de
su actuación en la empresa. Además deben ser tratados con las garantías que establece el Estatuto de los
Trabajadores en condición de representantes de los
trabajadores, entre las que se encuentran:
• Prioridad de permanencia en la empresa o centro
de trabajo frente a los restantes trabajadores, en
los supuestos de suspensión por causas tecnológicas o económicas.
• No ser despedido o sancionado durante el ejercicio de sus funciones ni dentro del año siguiente a
la terminación de su mandato, siempre que el
despido o la sanción se fundamente en la acción
del trabajador en el ejercicio de su representación.
2.3.b. Comité de Seguridad y Salud
El Comité de Seguridad y Salud es aquel órgano de
participación y consulta de creación obligatoria en
empresas con 50 o más trabajadores. Está compuesto
por un número igual de Delegados de Prevención de
una parte, y el empresario y/o sus representantes de
otra. El funcionamiento del Comité se regirá por las
normas que adopten sus miembros. Deberá reunirse
con una periodicidad mínima trimestral y cuando al-
guna de las partes así lo solicite. Pueden participar
con voz pero sin voto:
• Delegados Sindicales.
• Técnicos de prevención que no formen parte de
la representación del empresario.
• Aquellos trabajadores que cuenten con una especial cualificación o información respecto de las
cuestiones a debate.
• Técnicos de prevención ajenos a la empresa
siempre que lo solicite alguna de las dos representaciones del Comité.
Las competencias del Comité de Seguridad y Salud
son dos:
• Participar en la elaboración, puesta en práctica y
evaluación de los planes y programas de prevención de riesgos en la empresa.
• Promover iniciativas sobre métodos y procedimientos para la efectiva prevención de los riesgos, proponiendo a la empresa la mejora de las
condiciones y la corrección de las deficiencias
existentes.
En el ejercicio de sus competencias el Comité está
facultado para conocer:
• La situación relativa a la prevención de riesgos,
realizando las visitas oportunas.
• Los documentos e informes relativos a las condiciones de trabajo que sean necesarios para el
cumplimiento de sus funciones.
• Los daños producidos en la salud de los trabajadores, así como analizar y valorar las causas y
proponer las medidas preventivas oportunas.
• La memoria y programación anual de servicios
19
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
de prevención e informar de todo ello.
En aquellas empresas menores de 50 trabajadores
donde no existe el Comité de Seguridad y Salud las
competencias de éste se atribuirán a los Delegados de
Prevención.
2.4. Evaluación de Riesgos
Laborales
La evaluación de los riesgos es una obligación ineludible del empresario, a partir de cuyos resultados debe planificar, desarrollar y organizar la actividad preventiva. Es el proceso dirigido a estimar la magnitud
de aquellos riesgos que no hayan podido evitarse, obteniendo la información necesaria para que el empresario pueda decidir si es preciso adoptar medidas preventivas y, en tal caso, qué tipo de medidas deben implantarse.
Por tanto, es erróneo pensar que con la sola realización de la evaluación de riesgos se cumple con los
requisitos establecidos en la legislación vigente de seguridad y salud en el trabajo. Si de la evaluación de
riesgos se deduce la necesidad de adoptar medidas
preventivas, se deberá:
• Eliminar o reducir el riesgo mediante medidas de
prevención en el origen, organizativas, de protección colectiva, de protección individual o de
formación e información a los trabajadores.
• Controlar periódicamente las condiciones, la or-
20
ganización y los métodos de trabajo y el estado
de salud de los trabajadores.
El empresario tiene la obligación de consultar a los
representantes de los trabajadores, o a los propios trabajadores en ausencia de representantes, acerca del
procedimiento de evaluación a utilizar en la empresa
o centro de trabajo.
La evaluación inicial de riesgos debe hacerse en todos y cada uno de los puestos de trabajo de la empresa, teniendo en cuenta:
• Las condiciones de trabajo existentes o previstas.
• La posibilidad de que el trabajador que lo ocupe
sea especialmente sensible a alguna de dichas
condiciones.
El empresario tiene también la obligación de realizar evaluaciones puntuales de los puestos de trabajo
que puedan verse afectados por:
• La existencia de equipos de trabajo, sustancias o
preparados químicos, la introducción de nuevas
tecnologías o la modificación en el acondicionamiento de los lugares de trabajo.
• El cambio de las condiciones de trabajo.
• La incorporación de un trabajador cuyas características personales le hagan especialmente sensible a las condiciones del puesto.
El procedimiento de la evaluación de riesgos se
puede dividir en seis fases:
• Recogida de información sobre la organización,
características y complejidad del trabajo, sobre
las materias primas y los equipos de trabajo exis-
tentes en la empresa y sobre el estado de salud
de los trabajadores.
• Determinación de los puestos de trabajo que van
a ser objeto de evaluación.
• Determinación de las condiciones de trabajo y
elementos peligrosos para la salud de los trabajadores.
• Identificación de los trabajadores expuestos a
riesgos, con el fin de valorar el posible grado de
incidencia en la salud de esas condiciones de
trabajo desfavorables.
• Identificación del riesgo ya sea a través de la simple apreciación de las condiciones peligrosas o
en virtud del resultado de mediciones, análisis o
ensayos.
• Valoración del riesgo en función de criterios objetivos de acuerdo con los conocimientos técnicos y el consenso con los trabajadores.
La evaluación de riesgos de los puestos de trabajo
exige revisiones que tienen que hacerse:
• Cuando así lo disponga una disposición específica.
• Cuando se hayan detectado daños en la salud de
los trabajadores.
• Cuando se haya comprobado que las actividades
de prevención empleadas no han sido las más
adecuadas o resultan insuficientes.
• Cuando lo hayan acordado la empresa y los representantes de los trabajadores, teniendo en
cuenta el posible deterioro de las instalaciones
por el transcurso del tiempo.
La evaluación de riesgos ha de quedar documenta-
da, debiendo reflejarse, para cada puesto de trabajo
cuya evaluación ponga de manifiesto la necesidad de
tomar una medida preventiva, los siguientes datos:
• Identificación del puesto de trabajo.
• El riesgo o riesgos existentes.
• La relación de trabajadores afectados.
• El resultado de la evaluación y medidas preventivas procedentes.
• La referencia a los criterios y procedimientos de
evaluación y de los métodos de medición, análisis o ensayo utilizados, cuando sea necesario.
2.4.a. Informe de Evaluación de Riesgos
El informe de evaluación de riesgos debe contener:
Introducción
- Objetivo de la evaluación de riesgos.
- Fundamentos legales que impulsan a realizar la
evaluación.
- Normativa de aplicación.
- Metodología y criterios de evaluación de los riesgos.
Identificación general
- Nombre de la empresa.
- C.N.A.E de la empresa.
- Actividad empresarial desarrollada.
- Dirección de la empresa.
- Número de trabajadores.
- Centro de trabajo donde se realiza la evaluación.
- Persona o entidad acreditada que realiza la evaluación (firma y sello).
21
M A N UA L P R Á C T I C O
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
- Fecha de la evaluación.
- Identificación de los puestos de trabajo que se
van a evaluar.
Descripción de los puestos de trabajo
- Instalaciones donde se ubica el puesto de trabajo.
- Maquinaria, útiles y herramientas que se utilizan.
- Descripción de las actividades, y funciones específicas del puesto de trabajo.
Identificación de los riesgos
- Identificación de los riesgos de cada puesto de
trabajo en función de la descripción del puesto de
trabajo (Ver anexo 2.4.a.1.).
Estimación y Valoración de riesgos
Una vez identificado el riesgo, éste debe ser evaluado con el objeto de estimar su magnitud para, posteriormente, y en función de los valores preestablecidos en el método de valoración, determinar prioridades de actuación según su gravedad.
Actualmente, existen diversos métodos de evaluación elaborados o definidos por organismos públicos o
entidades privadas, pero todos ellos tienen en común
su carácter binario. Deben considerarse como mínimo
dos variables:
- Severidad o consecuencias humanas y/o materiales que podrían producirse en caso de accidente
de trabajo (Baja: lesiones leves, Media: lesiones
graves o Alta: lesiones muy graves y/o muerte).
- Probabilidad de que ocurra el accidente (Baja:
posible, Media: probable, Alta: inevitable).
La magnitud del riesgo se halla comparando los
22
grados que se atribuyan a cada una de las variables
(Ver anexo 2.4.a.2.).
Una vez evaluados los riesgos, deben proponerse
medidas correctoras para cada uno de ellos, con el objetivo de eliminarlos o evitarlos dentro de lo posible.
(Ver anexo 2.4.a.3.)
Identificación del personal expuesto
La identificación de los trabajadores por puesto de
trabajo sirve para de determinar las posibles exposiciones a cada riesgo. También permite identificar si existe
personal con especial sensibilidad, lo cual puede aumentar la probabilidad de que el riesgo se materialice.
Se entiende como personal especialmente sensible:
• Personas con minusvalías físicas, psíquicas o sensoriales.
• Trabajadores jóvenes o mayores.
• Mujeres embarazadas y madres en período de
lactancia
• Trabajadores con inmunodeficiencias.
• Trabajadores con problemas de salud crónicos.
• Trabajadores en tratamiento médico que pueda
aumentar su vulnerabilidad.
• Estados o situaciones transitorias que no respondan a las exigencias psicofísicas del puesto de trabajo.
■ Anexo 2.4.a.1
Identificación de los riesgos
IDENTIFICACIÓN GENERAL DE RIESGOS
EMPRESA
CNAE
DIRECCIÓN
CP
PUESTO DE TRABAJO
PELIGROS
Nº ID
CLASES
1 Caída de personas a distinto nivel
2 Caída de personas al mismo nivel
3 Caída de objetos por desplome
4 Caída de objetos por manipulación
5 Caída de objetos desprendidos
6 Pisadas sobre objetos
7 Choques y golpes contra objetos inmóviles
8 Choques y golpes contra objetos móviles
9 Golpes y cortes por objetos o herramientas
10 Proyección de fragmentos o partículas
11 Atrapamiento por o entre objetos
12 Atrapamiento por vuelco de máquinas o vehículos
13 Sobreesfuerzos, posturas inadecuadas
14 Exposición a temperaturas ambientales extremas
15 Contactos térmicos
16 Contactos eléctricos
17 Exposición a sustancias nocivas o tóxicas
18 Contacto con sustancias cáusticas o corrosivas
19 Exposición a radiaciones
20 Explosión
21 Incendio
22 Daños causados por seres vivos
23 Atropellos o choques contra vehículos
24 Exposición a ruido y/o vibraciones
25 Accidentes de tráfico
26 Iluminación
27 Carga mental
28 Peligro por factores psicosociales u organizativos
29 Causas naturales
30 Otros no especificados
EVALUACIÓN DE RIESGOS REALIZADA POR
ACTIVIDAD
LOCALIDAD
TRABAJADORES EXPUESTOS
APLICACIÓN
SI
NO
N/A
FECHA
PROVINCIA
EVALUACIÓN
DESCRIPCIÓN
Nº
ORDEN
FIRMA Y SELLO
23
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
■ Anexo 2.4.a.2
Ejemplo de método de valoración de riesgos
24
■ Anexo 2.4.a.3
Valoración de riesgos
EMPRESA
DIRECCIÓN
PUESTO DE TRABAJO
NºORDEN
NºORDEN
SE: SENSIBLE
MA: MATERNIDAD
ME: MENOR DE EDAD
VALORACIÓN DE RIESGOS
ACTIVIDAD
LOCALIDAD
TRABAJADORES EXPUESTOS
SE
MA
ME
PROBABILIDAD
CNAE
CP
IDENTIFICACIÓN DEL RIESGO
FECHA
PROVINCIA
SEVERIDAD
MEDIDAS CORRECTORAS / CONTROLES PERIÓDICOS
EVALUACIÓN DE RIESGOS REALIZADA POR
EVALUACIÓN
VALOR DEL RIESGO
PRIORIDAD
FIRMA Y SELLO
25
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
2.5. Formación e información de
los trabajadores
La mayor parte de los accidentes de trabajo se producen por actos inseguros cometidos por los trabajadores, mientras que una minoría son motivados por
condiciones de trabajo inseguras. Ante esta situación,
la formación e información que deben recibir los trabajadores toma importancia con el objetivo de evitar
cualquier acto imprudente e inseguro en la ejecución
del trabajo.
2.5.a. Información
La empresa, con la finalidad de garantizar la seguridad y salud de los trabajadores, debe informarles sobre:
≤ Los riesgos detectados en la empresa en su conjunto y/o en cada puesto de trabajo o función.
≤ Las medidas de protección adoptadas respecto a
los riesgos detectados.
≤ Las medidas de emergencia aplicadas en materia
de primeros auxilios, lucha contra incendios y evacuación de los trabajadores.
≤ Cualquier norma interna relativa a seguridad y
salud que afecte al desarrollo de las funciones de los
trabajadores.
26
2.5.b. Formación
El propósito de la formación en seguridad y salud
es conseguir que los trabajadores ejecuten sus funciones de forma segura, con la finalidad de evitar daños a
la salud y riesgos individuales o colectivos innecesarios. Para conseguirlo, esta formación debe adecuarse
específicamente a las características del puesto de trabajo, a la evolución de los riesgos y la aparición de
otros nuevos, debiendo repetirse periódicamente si
ello fuera necesario.
La Ley de Prevención de Riesgos Laborales
(31/1995) establece la obligación para el empresario
de garantizar a los componentes de su empresa una
formación teórica y práctica en materia preventiva.
Debe impartirse formación suficiente y adecuada a los
trabajadores en los siguientes casos:
• En el momento de su contratación, independientemente del tiempo de duración del contrato y de
la modalidad contractual.
• Cuando se produzcan cambios en las funciones
que desempeña el trabajador.
• Cuando se introduzcan nuevas tecnologías o
cambios en los equipos de trabajo.
También se debe garantizar la formación:
• A los Delegados de Prevención para que realicen
sus funciones.
• A los trabajadores designados para el correcto
desarrollo de la actividad preventiva de la empresa, en caso de haber optado por este modelo de
organización de la prevención.
• Al personal designado para desarrollar funciones
de medidas de emergencia (primeros auxilios, lucha contra incendios y evacuación de trabajadores).
su defecto, en otras horas pero descontando de aquélla
el tiempo invertido en la formación. El coste no recaerá nunca sobre los trabajadores.
Dado que la formación es un proceso dinámico podemos prever que las necesidades de los trabajadores
irán evolucionando paralelamente al crecimiento de la
empresa y las circunstancias del momento.
Para desarrollar una acción formativa eficaz debemos valorar diversas variables o aspectos:
• El trabajador debe conocer cuál es el objetivo,
contenido y aplicación de la formación.
• Debe sentirse cómodo y motivado para el aprendizaje, de manera que éste despierte su interés.
• La formación debe ser clara y práctica, aplicable
a las funciones del puesto de trabajo.
• El aprendizaje debe ser activo, con la participación tanto de quien imparte formación como de
quien la recibe; es decir, una puesta en común
de ambos con el propósito de corregir vicios adquiridos a lo largo del tiempo o, simplemente,
integrar nuevos conocimientos, actitudes y operaciones que no habían sido practicadas con anterioridad. Lo que se persigue es prevenir errores
y que el trabajador aprenda a ejecutar de la forma más adecuada las funciones que le corresponden.
¿Cómo podemos identificar las necesidades de formación en materia de seguridad y salud?
La empresa tiene a su disposición diversas herramientas para identificarlas:
• Consulta de la legislación en prevención de riesgos laborales.
• Operaciones que requieren una formación específica.
• Resultados de la evaluación de riesgos.
• Observación directa de los puestos de trabajo.
• Reciclaje de trabajos críticos que entrañen riesgos importantes.
• Análisis de accidentes o incidentes de trabajo.
• Consulta a los trabajadores mediante entrevistas,
encuestas, sesiones de grupo, comunicados de
riesgo, etc.
Para impartir las acciones formativas, la empresa
puede recurrir a medios propios o ajenos. Cuando
concertemos la formación con una entidad ajena, debemos asegurarnos que está acreditada por la Administración para realizar formación en materia de prevención de riesgos laborales. Además, siempre que sea
posible se realizará dentro de la jornada laboral o, en
27
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
2.6. Esquema de implantación de un sistema de gestión de
prevención de riesgos laborales
DEFINIR POLÍTICA DE
SEGURIDAD Y SALUD
DE LA EMPRESA
EVALUACIÓN Y
REVISIÓN DEL SISTEMA
POR PARTE DE LA
DIRECCIÓN
AUDITORÍA DEL
SISTEMA DE GESTIÓN
DE LA PREVENCIÓN
28
DEFINIR RECURSOS Y
ORGANIZACIÓN DEL
SISTEMA DE GESTIÓN
DE PREVENCIÓN
CONTROL DE LAS
ACTUACIONES
EVALUACIÓN DE
RIESGOS LABORALES
PLANIFICACIÓN,
OBJETIVOS Y METAS
DE LA ACTIVIDAD
PREVENTIVA
ACCIONES
CORRECTORAS
TÉCNICAS DE GESTIÓN
DE LA PREVENCIÓN
MANUAL Y
DOCUMENTACIÓN
3
Técnicas de gestión de prevención
de riesgos laborales
3.1. Investigación de accidentes
e incidentes
3.1.a. Introducción
La investigación de los accidentes de trabajo constituye uno de los pilares de la política preventiva. Investigar sus causas e incidencias, representa la mejor
práctica para evitar que se repitan.
Tal y como se encuentra previsto en la legislación
vigente, cuando se haya producido un daño para la salud de los trabajadores, o cuando, con ocasión de la
vigilancia de la salud aparezcan indicios de que las
medidas de prevención resultan insuficientes, el empresario llevará a cabo una investigación al respecto, a
fin de detectar las causas de los hechos.
Además, la empresa debe ser capaz de realizar la
notificación e investigación de los accidentes de trabajo y enfermedades profesionales que sufra un trabajador durante la prestación de sus servicios.
Hacemos hincapié en que la investigación de análisis de accidentes / incidentes es imprescindible para
reducir el número y la gravedad de los mismos, ya que
proporciona información relativa a las deficiencias del
sistema preventivo, y en consecuencia, permite corregirlas.
3.1.b. Definiciones
Accidente
Cualquier suceso que ocasione lesiones a los trabajadores, provoque daños a los equipos, a las instalaciones o al medio ambiente, disminuya la producción
o aumente las responsabilidades legales de la empresa.
Accidente de trabajo
Toda lesión corporal que el trabajador sufra con
ocasión o por consecuencia del trabajo que ejecuta
por cuenta ajena. Especial mención merecen los accidentes sufridos por el trabajador durante el desplazamiento hacia el centro de trabajo denominados “accidentes in itínere”.
29
M A N UA L P R Á C T I C O
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
No tienen la consideración de “accidentes de trabajo” aquéllos producidos por fuerza mayor o los que
tengan lugar como consecuencia de la imprudencia temeraria por parte del trabajador. Existe imprudencia
temeraria cuando el accidentado desobedece normas,
instrucciones u órdenes dadas por el empresario de
forma reiterada y notoria en materia de seguridad y salud.
El accidente de trabajo no lleva necesariamente
aparejada la baja del trabajador. Así, si el trabajador
accidentado se encuentra imposibilitado para prestar
sus servicios durante un tiempo igual o superior a un
día - sin incluir el del accidente -,hablaremos de “accidentes con baja laboral”. Si, por el contrario, el accidente no impide al trabajador prestar sus servicios o
desarrollar sus tareas habituales estaremos ante un caso de “accidente sin baja laboral”
Incidente
Todo suceso que sin ocasionar lesiones o pérdidas
materiales, en circunstancias parecidas podría haberlas provocado.
Enfermedad profesional
Para que una enfermedad sea calificada como “profesional” es imprescindible que aparezca recogida en
el cuadro establecido a tal efecto (R.D.1995/1978, de
12 de mayo) y relacionada, de forma específica, con
determinadas sustancias o elementos que puedan provocarla.
Entendemos, entonces, que es “enfermedad profesional” aquella contraída realizando las actividades
que se encuentran incluidas en dicho cuadro.
30
3.1.c. Procedimiento
No existe en la legislación vigente precepto alguno
que obligue a realizar la investigación de los accidentes e incidentes desde una metodología predeterminada. Como pauta para facilitar la investigación de accidentes, debe contestarse a las siguientes preguntas:
¿Por qué?
¿Quién?
¿Qué?
¿Cómo?
¿Cuándo?
¿Quién debe investigar?
La investigación de accidentes la comenzará el superior jerárquico del accidentado, con la participación
de este último siempre que sea posible. El empresario
también deberá participar en la investigación, solicitando la colaboración del accidentado, testigos, resto
de trabajadores, etc. y no debe pasar desapercibido
que al empresario siempre le alcanza la responsabilidad del accidente.
¿Qué se debe investigar?
Todos los accidentes e incidentes. Cuanto mayor
sea el número de accidentes que se investiguen, mayor
grado de información se obtendrá y mayor será el nivel
de prevención que se alcance.
¿Cómo se debe investigar?
Se recomienda partir de la elaboración de una relación de los hechos (accidentado, testigos, etc.), y posteriormente pormenorizar los fallos y deficiencias detectadas. Partiendo de las anomalías detectadas, se
pueden determinar las medidas y acciones correctivas.
¿Cuándo se debe iniciar la investigación?
Con el propósito de evitar que se
puedan perder detalles importantes, debe iniciarse con rapidez y a ser posible
antes de que transcurran veinticuatro horas desde que el accidente o incidencia
se produjo.
Para facilitar la investigación de accidentes e incidentes puede utilizarse la siguiente ficha:
FORMULARIO DE INVESTIGACIÓN DE ACCIDENTES
Empresa:
Sección:
Fecha accidente:
Fecha notificación:
DATOS RELATIVOS AL ACCIDENTE
Nombre Lesionado:
Edad:
Categoría Profesional:
Tiempo en puesto de trabajo:
Trabajo específico:
Parte cuerpo lesionada:
Clase de lesión:
Causa de la lesión:
Persona con más control sobre la
causa de la lesión:
DESCRIPCIÓN DEL ACCIDENTE:
3.1.d. Comunicación de
accidentes
Con el objeto de cumplir con la legalidad vigente en la materia, la empresa
debe disponer de una serie de documentos, convenientemente ordenados. Esta
obligación no cesa para el empresario
con la investigación interna del accidente, sino que debe completarse y complementarse con la notificación a la Autoridad Laboral correspondiente.
ANALISIS DEL ACCIDENTE (Actos, condiciones, razones, etc.):
Calificación de las lesiones sufridas:
Posibilidad de reincidencia:
Muy grave
Frecuente
Grave
Leve
Ocasional
Raro
PREVENCIÓN: Acciones o medidas dirigidas a evitar la repetición del accidente:
Investigador:
Fecha:
Revisor:
Fecha:
31
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
3.1.e. Planificación de acciones
correctoras
Deben investigarse los casos de no conformidad
con los requisitos especificados en el sistema de prevención, todas las deficiencias que puedan observarse
y, siempre, las que deriven de la investigación de accidentes de trabajo o incidencias.
Los fallos que se observen pueden tener su origen
en deficiencias de los equipos, de los materiales, de
las instalaciones, o en el error humano, o bien puede
tratarse de deficiencias del propio sistema de prevención de la empresa.
Como se indicó anteriormente, la investigación tiene como objetivo detectar deficiencias o fallos en el
sistema, a partir de la información obtenida en el curso de la misma, permitiendo así la adopción de la medida correctora apropiada. De esta manera, se evitarán
otros accidentes de trabajo que se encuentren directa
o indirectamente relacionados con el estudiado.
La investigación permite planificar la acción correctora para:
- Establecer un sistema de control.
- Impedir que vuelva a ocurrir el mismo tipo de incidente.
- Valorar y mitigar las consecuencias.
- Asegurar una interacción satisfactoria de todos los
componentes del sistema.
- Valorar la efectividad de las medidas.
32
La acción correctora puede considerarse el objetivo
de la investigación, es decir, mediante la adopción de
la correspondiente acción correctora se trata de evitar
que se produzcan nuevos accidentes laborales similares al investigado.
Para que una acción correctora pueda considerarse
terminada, resulta imprescindible que se haya demostrado la efectividad de la medida y se hayan llevado a
cabo los cambios pertinentes en los procedimientos,
instrucciones y registros.
3.2. Comunicados de riesgos
El riesgo laboral se define como la posibilidad de
que un trabajador sufra un determinado daño derivado
del trabajo. Para calificar un riesgo desde el punto de
vista de la gravedad, han de valorarse, de forma conjunta, la probabilidad de que se produzca el daño y la
severidad del mismo, calificándolo como “muy leve”,
“leve” “moderado”, “grave” o “muy grave”. (Ver anexo nº 2.4.a.2.)
Un punto importante a tener en cuenta es la necesidad de que la comunicación interna a la empresa sea
positiva y frecuente como medio para conocer la integración real de todas las actividades preventivas.
Es obligación de la empresa establecer y mantener
procedimientos documentados dirigidos a garantizar:
• Comunicación abierta y efectiva entre la dirección de la empresa y sus trabajadores sobre: los
riesgos para la seguridad y salud de estos últimos
en el trabajo, las medidas de protección y de prevención previstas, la adopción de medidas de
emergencia, y la relación entre los elementos integrantes del sistema de gestión de prevención de
riesgos laborales.
• Provisión de servicios y asesoramiento especiali-
zado.
• Derecho de participación y consulta de todos los
trabajadores.
Como mecanismo que permita comunicar los riesgos laborales detectados a los trabajadores, pueden
utilizarse las siguientes fichas:
■ Anexo 3.2.1.
Ficha informativa de riesgos
Empresa
Trabajador/es afectados
Puesto específico de trabajo
Medidas de control
Riesgo
Equipo, máquina o instalación
Causa Calificación
33
M A N UA L P R Á C T I C O
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
■ Anexo 3.2.2.
Ficha informativa de riesgos
Empresa
Trabajador/es afectados
Centro de trabajo
Medidas de control
34
Riesgo
Equipo, máquina o instalación
Causa Calificación
■ Anexo 3.2.1.
Tipos de riesgos
TIPOS DE RIESGOS
Nº
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
28
29
30
31
32
33
34
35
36
37
DESCRIPCIÓN
Caída de personas a distinto nivel.
Caída de personas a mismo nivel.
Caída de objetos por desplome o derrumbamiento.
Caída de objetos en manipulación.
Caída de objetos desprendidos.
Pisadas sobre objetos.
Choques contra objetos móviles.
Choques contra objetos inmóviles.
Golpes/cortes por objetos o herramientas.
Proyección de fragmentos o partículas.
Atrapamiento por o entre objetos.
Atrapamiento por vuelco de máquinas o vehículos.
Sobreesfuerzos.
Exposición a temperaturas ambientales extremas.
Contactos térmicos
Proyección de líquidos candentes o gases sobrecalentados.
Contactos eléctricos directos.
Contractos eléctricos indirectos.
Exposición a sustancias nocivas o tóxicas.
Contactos con sustancias cáusticas y/o corrosivas.
Explosiones.
Incendios. Factores de inicio y propagación.
Incendios. Medios de lucha y evacuación.
Accidentes causados por seres vivos.
Atropellos o golpes con vehículos.
Accidentes de tráfico.
Exposición a contaminantes biológicos.
Exposición al ruido excesivo.
Exposición a vibraciones.
Estrés térmico.
Exposición a radiaciones ionizantes.
Exposición a radiaciones no ionizantes.
Exposición a iluminación deficiente.
Fatiga física.
Fatiga mental.
Insatisfacción laboral.
Otros.
35
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
■ Anexo 3.2.4.
Hoja registro de entrega de fichas informativas de riesgos
EMPRESA:
D._________________________________, provisto de D.N.I. número ________________,
cuya categoría profesional es ______________, que ocupa el puesto de trabajo
_________________________________, ha recibido las fichas informativas de riesgos
correspondientes al centro de trabajo y al puesto específico de trabajo siguientes:
CENTRO DE TRABAJO / PUESTO DE TRABAJO
Tipo
Fecha:
Fdo.: El trabajador.
36
Nombre
3.5. Costes económicos no
asegurados de un accidente
de trabajo
EMPRESA 1
EMPRESA 2
BENEFICIO
BENEFICIO
COSTES A.T.
COSTES A.T.
COSTES GENERALES
El objetivo principal de cualquier empresa es obtener la mayor rentabilidad y beneficio económico. Por
este motivo, se busca reducir costes para obtener mayor beneficio en la actividad. Muchas veces se asocia
la prevención de riesgos laborales como un coste añadido a la empresa, pero no hay nada mas lejos de la
realidad. Buscar la seguridad es una inversión y no un
gasto, por tanto se convierte en una acción rentable.
Debemos conocer los costes ocultos de la falta de seguridad y su incidencia desfavorable en la productividad.
¿Sabemos cuánto suponen los COSTES ECONÓMICOS para la empresa derivados de un accidente de
trabajo?
Normalmente NO, porque de conocerlos utilizaríamos todos los medios a nuestro alcance para mejorar
las condiciones de trabajo y la formación de los trabajadores en seguridad y salud. Supongamos dos empresas de características similares o, incluso iguales (mismo número de trabajadores, actividad, facturación, recursos, etc.):
COSTES GENERALES
La empresa 2 puede MEJORAR su RENTABILIDAD
si disminuye el valor de los costes no asegurados de
los accidentes de trabajo.
Por tanto, entendemos que la prevención de riesgos
debe contemplarse como una inversión de la empresa
con la finalidad de reducir los costes no asegurados de
los accidentes de trabajo, ya sea porque la empresa
tiene un alto índice de siniestralidad, o bien para prevenir costes innecesarios.
¿Cuáles son algunas de las variables de costes no
asegurados derivados de un accidente de trabajo que
pueden afectar a la empresa?
COSTES MÉDICOS
- Primeros auxilios.
- Desplazamientos.
- Clínica y servicios médicos exteriores.
COSTES DE PERSONAL
- Horas perdidas por el accidentado.
- Horas perdidas por los compañeros de trabajo en
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
tareas de auxilio del accidentado.
- Tiempo dedicado a la investigación del accidente
(entrevistas, visitas al lugar del accidente, realización del informe interno, notificación, registro,
etc.)
- Horas extras necesarias para recuperar la realización del servicio.
- Complementos salariales de la prestación económica por incapacidad temporal no cubiertos por
la Seguridad Social (máximo 25%), en caso de
que así los establezca el convenio colectivo
- Coste de nuevo personal (reclutamiento, selección, contratación, formación, salario, etc.)
COSTES POR DAÑO A LA PROPIEDAD
- Costes de reparación o reposición de maquinaria,
herramientas o instalaciones.
- Coste de materiales o productos dañados.
COSTES POR RESPONSABILIDADES Y
SANCIONES
- Sanciones administrativas.
- Recargo de prestaciones por falta de medidas de
seguridad, el cual puede suponer entre un 30% y
un 50%. Estos costes corren siempre por cuenta
del empresario puesto que está prohibido su aseguramiento.
- Indemnizaciones debidas a la responsabilidad civil por daños y prejuicios causados al trabajador,
las cuáles serán fijadas por el juez.
Su cuantía puede alcanzar los 50 millones en caso de muerte, invalidez permanente absoluta o
gran invalidez y cantidades sensiblemente
38
menores en otros casos.
- Daños a terceros.
OTROS COSTES
- Posible pérdida de mercado, prestigio social y
fondo de comercio.
4
Técnicas específicas de aplicación
4.1. Coordinación de actividades
empresariales. Seguridad en
obras de construcción
4.1.a. Coordinación de actividades
empresariales
Las empresas instaladoras de telecomunicaciones,
como empresas de servicios, desarrollan gran parte de
su actividad fuera de las instalaciones propias, por lo
que es importante coordinar la prevención en aquellos
lugares donde se va a desarrollar el trabajo. Ante esta
situación, la legislación en seguridad y salud recoge
tres supuestos que pueden existir en la práctica:
• Coordinación horizontal: varias empresas desarrollan su actividad en un mismo centro de trabajo, pero entre ellas no existe ningún vínculo comercial o mercantil. Tienen la obligación de cooperar en la aplicación de la normativa sobre
prevención de riesgos laborales, la cual se debe
manifestar a través de Actas de Coordinación y la
aplicación de éstas. En este supuesto la responsabilidad por incumplimiento de la normativa es
individual a cada empresa.
Ejemplo: Todas las empresas que desarrollan su actividad en un centro comercial o en una gran superficie.
• Coordinación vertical: existe una empresa titular
del centro de trabajo y una o varias empresas
contratadas trabajando en el mismo centro. La
empresa titular debe informar y dar instrucciones
adecuadas sobre los riesgos existentes, sobre las
medidas de protección y prevención correspondientes y sobre las medidas de emergencia a
aplicar. Así mismo, la empresa contratada debe
trasladar toda la información que ha recibido a
sus trabajadores. En caso de incumplimiento la
responsabilidad es subsidiaria.
Ejemplo: En caso de sonorización de un teatro en
un colegio o instalación de una alarma en el centro de
trabajo de otra empresa, etc. los titulares de los centros de trabajo son el colegio o la empresa para la que
instalamos la alarma.
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M A N UA L P R Á C T I C O
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
• Contratas y subcontratas: es la misma situación
que el supuesto de coordinación vertical, pero
con la salvedad de que las empresas contratadas
realizan la misma actividad que la titular del
centro de trabajo. Por este motivo, además de
cumplir con los requisitos del anterior supuesto,
la empresa titular debe asegurarse del correcto
cumplimiento de las medidas de seguridad y salud previstas. En este supuesto la responsabilidad
por incumplimiento de la normativa es solidaria
entre las diferentes empresas que actúan en el
centro de trabajo.
Se entiende por “propia actividad” cuando la aportación de la empresa contratada es básica para el desarrollo normal de la producción de la empresa titular.
Ejemplo: En las obras de construcción es fundamental el desarrollo de la actividad de los industriales
contratados para finalizarla.
4.1.b. Seguridad en obras de
construcción
Las obras de construcción se caracterizan por la
cantidad y variedad de agentes que intervienen en su
ejecución, situación que dificulta la coordinación del
proceso. Veamos cuáles son esos agentes:
- Promotor: es la persona física o jurídica por
cuenta de la cual se realiza la obra.
- Dirección facultativa: el técnico o técnicos competentes, designados por el promotor, encargados
de la dirección, del control y de la ejecución de
la obra.
40
- Coordinador de Seguridad y Salud en la ejecución de la obra: técnico competente integrado en
la dirección facultativa, designado por el promotor para llevar a cabo las funciones de su responsabilidad.
- Contratista: persona física o jurídica que asume
contractualmente ante el promotor, con medios
humanos y materiales, propios o ajenos, el compromiso de ejecutar la totalidad o parte de las
obras con sujeción al proyecto y al contrato.
- Subcontratista: persona física o jurídica que asume contractualmente ante el contratista, empresario principal, el compromiso de realizar determinadas partes o instalaciones de la obra, con sujeción al proyecto por el que se rige su ejecución.
La actuación de una empresa instaladora de telecomunicaciones en una obra de construcción puede recaer sobre dos figuras o agentes, en función de si el
promotor de la obra decide contratar la totalidad de la
construcción con un único contratista o con varios:
• Actuación como contratista: situación donde la
promotora de la obra decide contratar la ejecución de ésta con diferentes empresas. En este caso, siempre y cuando hayamos sido contratados
directamente por la promotora, nuestra empresa
actúa como contratista, por lo que estamos obligados a realizar un plan de seguridad y salud relativo a nuestra actividad en la obra, que debe
ser aprobado con carácter previo por el coordinador de seguridad y salud en la fase de ejecución de la obra.
• Actuación como subcontratista: situación donde
la promotora de la obra decide contratar la ejecución de ésta con una o varias empresas que actúan como contratistas, y a la vez éstos subcontratan nuestra actividad, motivo por el cual actuamos como subcontratista, y debemos
acogernos al plan de seguridad y salud elaborado
por ellos.
Se entiende por:
• Estudio de Seguridad y Salud: aquel documento
donde se precisan las normas de seguridad y salud aplicables a las obras, donde se contempla la
identificación de los riesgos laborales - puedan
ser evitados o no - y las medidas preventivas y
protecciones técnicas que disminuyan o eliminen
dichos riesgos.
• Plan de Seguridad y Salud: documento donde se
analizan, estudian, desarrollan y complementan
las previsiones recogidas en el Estudio de Seguridad y Salud en función del sistema de ejecución
de la obra.
Obligaciones generales de los contratistas y
subcontratistas:
• Aplicar los principios de la actividad preventiva
del artículo 15 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales (31/1995).
• Cumplir y hacer cumplir a su personal con el
plan de seguridad y salud.
• Cumplir con la normativa de prevención de riesgos laborales.
• Atender las indicaciones e instrucciones del Coordinador de Seguridad y Salud o de la dirección
facultativa durante la ejecución de la obra.
• Ejecutar correctamente las medidas preventivas
fijadas en el Plan de Seguridad y Salud.
• Informar a los trabajadores sobre normas y medidas de seguridad de la obra.
• Velar por el cumplimiento de la correcta ejecución de las medidas preventivas de sus trabajadores.
• En caso de contratar a trabajadores autónomos,
informar y proporcionar las instrucciones adecuadas sobre las medidas adoptadas respecto de
su seguridad y salud en la obra.
La responsabilidad en las obras de construcción es
solidaria, es decir, que ante el incumplimiento de las
medidas de prevención, la Administración puede dirigirse a cualquiera de los agentes que intervienen en la
obra, motivo por el cual las empresas contratistas tienden a exigir a los subcontratistas la siguiente documentación:
• Informe de los riesgos propios de la actividad.
• Lista de los trabajadores que puedan participar
en el desarrollo de la actividad contratada (DNI,
nombre y apellidos, número de seguridad social).
• Documentos últimos de TC-1 y TC-2.
• Documento que acredita que se cumple con lo
establecido en la Ley de Prevención de Riesgos
Laborales (31/1995).
Obligaciones de los trabajadores autónomos:
• Cumplir las disposiciones mínimas de seguridad
y salud en las obras de construcción (anexo IV
del R.D. 1627/1997).
• Usar y utilizar adecuadamente los equipos de
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
trabajo y los equipos de protección individual.
• Cumplir las medidas de seguridad y salud adoptadas por el contratista y/o empresario.
• Informar sobre los riesgos que puedan concurrir
en su puesto de trabajo.
• Atender las indicaciones y cumplir las instruccio-
nes del coordinador en materia de seguridad y de
salud durante la ejecución de la obra o, en su caso, de la dirección facultativa.
• Cumplir lo establecido en el plan de seguridad y
salud.
■ Anexo 4.1.b.
Esquema general de la fase de ejecución de una obra de construcción
DIRECCIÓN
FACULTATIVA
PROMOTOR DE LA
OBRA DE
CONSTRUCCIÓN
1 CONTRATISTA
1 PLAN DE SEGURIDAD
Y SALUD
SUBCONTRATISTAS
VARIOS CONTRATISTAS
VARIOS PLANES DE
SEGURIDAD Y SALUD
SUBCONTRATISTAS
COORDINADOR
SEGURIDAD Y SALUD
EN FASE DE EJECUCIÓN
PROYECTO DE LA
OBRA
ESTUDIO DE
SEGURIDAD Y SALUD
42
APRUEBA
4.2. Equipos de protección
individual (EPI)
La protección personal es la técnica que tiene por
objeto proteger a un trabajador, o a un número reducido de ellos, de un daño específico consecuencia de su
actividad laboral.
La protección personal debe ser la ÚLTIMA MEDIDA de prevención que se debe emplear entre el riesgo
y el trabajador ya que no evita los accidentes, sino las
consecuencias que puedan producirse una vez desencadenados.
Debe utilizarse como complemento de la protección colectiva y siempre que no se haya podido eliminar o limitar el riesgo por otros medios o procedimientos de organización del trabajo.
Se entiende por equipo de protección individual
(EPI), cualquier equipo, complemento o accesorio destinado a ser llevado o sujetado por el trabajador para
que le proteja de los riesgos que puedan amenazar su
seguridad o salud, (cascos de seguridad, gafas protectoras, guantes contra las agresiones de origen eléctrico, calzado frente a la electricidad, arneses, mascarillas, etc.) Se excluyen de forma explícita de esta definición la ropa de trabajo corriente y los uniformes que
no estén específicamente destinados a proteger la salud o la integridad física del trabajador.
4.2.a. Elección de los EPI
La mayoría de los problemas que pueden surgir ante la implantación de un EPI en un puesto de trabajo
son consecuencia de una acertada o desacertada elección del equipo. Ésta no debe efectuarse al azar ni basándose en documentación ya existente sino que depende de tres factores principalmente:
- los riesgos o fuentes de peligro de las que deba
ser protegido el usuario
- las condiciones en que se va a realizar el trabajo
- las partes del cuerpo objeto de protección
Los EPI deben ser adecuados a los riesgos que pretendan proteger sin suponer un riesgo adicional, deben tener en cuenta las exigencias ergonómicas y de
salud del trabajador y adaptarse a él tras los necesarios
ajustes. Para que un EPI sea bien aceptado por el trabajador y sea utilizado de forma continuada, ha de ser
cómodo y fácil de llevar. No debe olvidarse que un
material de protección personal es un elemento extraño al cuerpo del usuario por lo que, inicialmente,
siempre crea cierto malestar hasta que transcurre un
tiempo mínimo de adaptación. Puede ocurrir que un
mismo trabajador tenga que utilizar diferentes tipos de
protección personal al mismo tiempo con el fin de ampararse de daños distintos, en cuyo caso éstos deberán
ser compatibles entre sí y mantener su eficacia en relación con los riesgos correspondientes.
43
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
4.2.b. Utilización, mantenimiento y
reposición de los EPI
La empresa debe elaborar NORMAS ESPECÍFICAS
sobre el USO de los EPI, así como llamar la atención
sobre el riesgo frente al cual actúa, y la necesidad de
su utilización para mantener la integridad física y la
salud. Siempre es más conveniente que el trabajador
sienta la necesidad de utilizar los equipos de protección como medida para proteger su salud, que recurrir
a la autoridad de la empresa.
La utilización, el almacenamiento, el mantenimiento, la limpieza, la desinfección cuando proceda y la
reparación de los EPI deberá efectuarse de acuerdo
con las INSTRUCCIONES DEL FABRICANTE. Las condiciones en que un equipo debe utilizarse, especialmente en lo que se refiere al tiempo de utilización, se
determinarán en función de:
- la gravedad del riesgo
- la frecuencia de la exposición
- las características del puesto de trabajo
- las prestaciones del equipo
- los riesgos adicionales derivados de la propia utilización del equipo que no hayan podido evitarse.
Todo equipo utilizado requiere un mantenimiento
adecuado para garantizar un correcto funcionamiento.
Entre las instrucciones generales básicas de mantenimiento cabe destacar las siguientes:
• Las ropas de trabajo deben ser lavadas a menudo.
• Los EPI que presenten cualquier defecto o daño
deben rechazarse.
44
• Cuando no se utilicen deben guardarse de forma
que queden protegidos ante posibles deterioros.
• Los EPI tienen que ser limpiados, desinfectados y
eventualmente descontaminados si por algún motivo tienen que cambiar de usuario.
Para facilitar las necesarias sustituciones y reposiciones de los EPI conforme a las indicaciones del fabricante es conveniente crear y mantener una Ficha de
Control de cada EPI (ver anexo 4.2.b.), la cual se debe
archivar junto con una copia de las “Instrucciones de
Uso” del fabricante, (ver cuadro nº 4.2.b.1 y 4.2.b.2) y
en la que se recojan datos tales como:
• Fecha de fabricación
• Fecha de adquisición
• Condiciones de uso
• Número de utilizaciones (en caso necesario)
• Fecha de caducidad
• Distribuidor autorizado
• Etc.
4.2.c. Política de implantación de
los EPI
Para una buena política de implantación de los EPI
en la empresa se debe recordar que:
• Es conveniente que los propios trabajadores sean
consultados y participen, siempre que sea posible, en la elección de los EPI utilizados en la empresa.
• Es necesario dotar a los trabajadores de normas
precisas para la utilización de los EPI en lo que
respecta a su colocación, manejo, mantenimiento y reposición.
• Periódicamente deben efectuarse campañas de
mentalización y recuerdo que hagan hincapié en
la existencia de peligros específicos para la salud, sobre todo en aquéllos que resulten menos
evidentes para el trabajador. En estas campañas
se recordarán también las normas de utilización
de los diversos EPI.
• El servicio de empresa a quien corresponda la
gestión interna de los EPI deberá controlar el material entregado a cada trabajador, conociendo el
que debe utilizar con arreglo a su puesto de trabajo.
• Con regularidad debe efectuarse un seguimiento
del uso de los EPI e insistir de forma individualizada a los trabajadores que se resistan a su utilización.
4.2.d. Obligaciones del empresario sobre
los EPI
• Determinar los puestos de trabajo en los que deba recurrirse a la protección individual y precisar, para cada uno de ellos, el riesgo o riesgos
existentes, las partes del cuerpo a proteger y el tipo de equipo o equipos que deberán utilizarse.
• Elegir los EPI facilitando información sobre cada
equipo, manteniendo disponible en la empresa la
información pertinente a este respecto.
• Proporcionar GRATUITAMENTE a los trabajadores los EPI que deban utilizar, asegurando su
buen funcionamiento y estado higiénico, y reponiéndolos cuando resulte necesario. En este punto conviene recordar que el empresario puede tener RESPONSABILIDAD PENAL si no proporciona al trabajador los medios necesarios para su
seguridad.
• Informar a los trabajadores previamente al uso de
los equipos, de los riesgos contra los que les protegen, así como de las actividades en las que deben utilizarse.
• Velar para que la utilización de los equipos se realice de forma correcta al igual que su mantenimiento, teniendo que proporcionar INSTRUCCIONES COMPRENSIBLES para los trabajadores,
preferentemente POR ESCRITO, sobre la forma
correcta de utilizarlos y mantenerlos. El manual
de instrucciones o la documentación informativa
EN CASTELLANO que el fabricante está obligado
a facilitar, también estará a disposición de los trabajadores.
• Garantizar la formación organizando, si fuese necesario, cursillos de entrenamiento para la utilización de los EPI.
4.2.e. Obligaciones de los trabajadores
sobre los EPI
• Utilizar y cuidar correctamente los EPI.
• Colocar el EPI después de su utilización en el lugar indicado para ello.
45
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
• Informar de inmediato a su superior jerárquico
directo de cualquier defecto, anomalía o daño
apreciado en el EPI utilizado que pueda entrañar
una pérdida de su eficacia protectora.
4.2.f. Exigencias esenciales de Sanidad y
Seguridad
Los EPI han de cumplir todos los requisitos de sanidad y seguridad que exige la Ley y que van a permitir,
desde su diseño y fabricación hasta su comercialización y uso, preservar la salud y garantizar la seguridad
de los usuarios. Estos requisitos son:
• Ergonomía
• Grados de protección tan elevados como sea posible
• Clases de protección adecuadas a distintos niveles de riesgo
• Inocuidad
• Capacidad de adaptación de los EPI a la morfología del usuario
• Ligereza y solidez de fabricación
• Necesaria compatibilidad entre los EPI que el
usuario vaya a llevar al mismo tiempo
• Folleto informativo
Los EPI se clasifican en tres categorías siguiendo
procedimientos diferentes para asegurar el cumplimiento de dichos requisitos:
• Los equipos de CATEGORÍA I son los destinados
a proteger contra riesgos mínimos.
46
• Los equipos destinados a proteger contra riesgos
de grado medio o elevado, pero no de consecuencias mortales o irreversibles, se consideran
de CATEGORÍA II.
• Se clasifican en la CATEGORÍA III los equipos
pensados para proteger contra riesgos de consecuencias mortales o irreversibles, entre los que se
encuentran los destinados a proteger contra las
caídas desde determinada altura y contra los riesgos eléctricos en trabajos realizados bajo tensiones peligrosas o los que se utilicen como aislantes de alta tensión.
En cualquier caso no debe adquirirse ningún EPI
que no lleve el MARCADO CE (categorías I y II) o el
MARCADO CE seguido de un NÚMERO DE CUATRO
DÍGITOS (categoría III) que se colocará de forma visible, legible e indeleble durante el período de duración
previsible de dicho EPI y si no fuera posible debido a
sus características, se colocará en el embalaje y en el
FOLLETO INFORMATIVO del fabricante. Dicho folleto
debe ser entregado obligatoriamente por el fabricante
conjuntamente con el equipo suministrado y en él se
tienen que referenciar y explicar claramente los niveles de protección ofrecidos por el EPI, el mantenimiento y en su caso, las sustituciones necesarias. Si los
equipos se han adquirido en un lote para el que obligatoriamente ha de venir al menos un folleto, es responsabilidad del empresario fotocopiarlo y entregarlo
CON CADA UNIDAD DE PROTECCIÓN que se suministre a los trabajadores.
■ Cuadro 4.2.b.1.
Elementos obligatorios a facilitar al
ususario
■ Cuadro 4.2.b.2.
Ejemplo de folleto informativo
47
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
■ Anexo 4.2.b.
Modelo orientativo de ficha de control
de los EPI
4.3. Equipos de trabajo
Un equipo de trabajo es cualquier
máquina, aparato, instrumento o instalación utilizado en el trabajo.
Datos del trabajador
Nombre y apellidos
Nº matrícula/registro
Edad
Tarea
Antigüedad en el puesto
4.3.a Obligaciones
empresariales
Datos comerciales del equipo
Marca:
Modelo:
Nº de serie:
Distribuidor:
Datos relativos al uso del equipo
Condiciones de uso:
Vida útil / fecha de caducidad:
Datos relativos al mantenimiento del equipo 1
Descripción operación
Plazo
Responsable
1.
2.
Control de mantenimiento
Operación realizada
Fecha
Firma responsable
1 Describir alguna norma especial de mantenimiento o qué y cada cuánto tiempo se debe revisar según
las instrucciones del fabricante y quién es la persona encargada de hacerlo. Ejemplo: los guantes de
prevención mecánica y térmica deben lavarse industrialmente en seco.
48
El empresario tiene que adoptar las
medidas necesarias para que los equipos
de trabajo se adecuen perfectamente a
las características del trabajo que deba
realizarse de manera que, en la medida
de lo posible, garanticen totalmente la
seguridad y salud de los trabajadores,
eliminando los riesgos. Si ello no fuera
posible, tomará las medidas adecuadas
para reducir tales peligros al mínimo.
Para la ELECCIÓN de los equipos de
trabajo el empresario tendrá en cuenta:
• Las condiciones y características
específicas del trabajo a realizar.
• Los riesgos inherentes al lugar y
puesto de trabajo.
• Los riesgos que puedan derivarse
de la presencia o utilización de los
equipos o que puedan agravarse
por su uso.
• Las adaptaciones que haya que
efectuar para su utilización por tra-
bajadores discapacitados.
• Los principios ergonómicos preocupándose especialmente por el diseño físico de los espacios de
trabajo, de acuerdo con las capacidades del trabajador y la posición o fatiga postural durante la
utilización del equipo de trabajo.
Cuando la UTILIZACIÓN de un equipo de trabajo
deba realizarse en condiciones o formas determinadas,
con el fin de evitar un riesgo específico, el empresario
tiene que adoptar las medidas necesarias para que tal
utilización quede reservada a determinados trabajadores designados para ello.
Otra obligación primordial del empresario se refiere al MANTENIMIENTO y CONSERVACIÓN de los
equipos de trabajo, de modo que éstos se mantengan
durante todo el tiempo de utilización en unas condiciones óptimas, teniendo en cuenta:
• Las instrucciones del fabricante o, en su defecto,
las características de los equipos.
• Sus condiciones de utilización
• Cualquier otra circunstancia normal o excepcional que pueda influir en su deterioro o desajuste
Las operaciones de mantenimiento, reparación o
transformación que entrañen riesgos específicos para
los trabajadores sólo pueden realizarse por personal
especialmente capacitado.
Los equipos de trabajo deben ser objeto de COMPROBACIÓN, la cual se llevará a cabo:
• Inicialmente, con motivo de su instalación.
• Antes de la puesta en marcha por primera vez.
• Después de cada montaje en un nuevo lugar o
emplazamiento.
• Ocasionalmente, para detectar deterioros debido
al transcurso del tiempo o a la influencia de
agentes externos.
• Periódicamente, con objeto de asegurar el cumplimiento de las disposiciones de seguridad y salud aplicables.
• Adicionalmente, debido a transformaciones efectuadas, accidentes, fenómenos naturales o faltas
prolongadas de uso.
Las comprobaciones serán realizadas por personal
competente suficientemente adiestrado.
Los resultados deben registrarse, documentarse y
estar a disposición de la autoridad laboral competente
y se conservarán durante toda la vida útil de los equipos.
El empresario también tiene determinadas obligaciones en materia de FORMACIÓN, INFORMACIÓN,
PARTICIPACIÓN y CONSULTA a los trabajadores,
cuando ésta sea necesaria.
La formación se proporcionará preferentemente a
los trabajadores que utilizan los equipos de trabajo y a
los encargados del mantenimiento, conservación y revisión de los mismos, y versará fundamentalmente sobre los riesgos derivados de la utilización de los equipos de trabajo y de las medidas de prevención y protección.
La información se proporcionará, a ser posible, por
49
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
ESCRITO a través de folletos informativos comprensibles y será complementaria a la facilitada por el fabricante que estará, también, a disposición de los trabajadores. Dicha información debe referirse a:
• Los riesgos derivados de la utilización de los
equipos de trabajo.
• Las medidas correctoras.
• Las condiciones y forma correcta de utilización,
teniendo en cuenta las instrucciones del fabricante, así como las utilizaciones peligrosas o
anormales.
• Los resultados y conclusiones que se pueden corregir de la experiencia acumulada.
• Cualquier otra forma de utilidad preventiva.
4.3.b. Utilización de los equipos
de trabajo
Al hablar de utilización de un equipo de trabajo se
hace referencia a cualquier operación o actividad desarrollada sobre el mismo como la puesta en marcha,
la detención, el empleo, el transporte, la reparación, la
transformación, el mantenimiento y la conservación y
limpieza.
Entre las condiciones generales de utilización de
los equipos de trabajo se encuentran las siguientes:
• Los equipos de trabajo deben ser instalados y utilizados de manera que no puedan caer, volcar o
desplazarse de forma incontrolada poniendo en
peligro la seguridad de los trabajadores.
• No deben someterse a sobrecargas, sobrepresio-
50
nes, velocidades o tensiones excesivas que puedan poner en peligro la seguridad del trabajador
que los utiliza o a terceros.
• El mantenimiento, ajuste, desbloqueo, revisión o
reparación de los equipos de trabajo con peligro
para la seguridad de los trabajadores se realizará
después de parar o desconectar el equipo, comprobar la inexistencia de energías residuales peligrosas y tomar las medidas necesarias para evitar
su puesta en marcha o conexión accidental mientras se efectúe la operación,
• Los equipos retirados de servicio deberán conservar sus dispositivos de protección o imposibilitar
su uso.
4.3.c. Condiciones de seguridad de los
equipos de trabajo
Entre las condiciones generales de seguridad de los
equipos de trabajo se encuentran las siguientes:
• Los órganos de accionamiento deben ser visibles
e identificables, estar debidamente señalizados,
situados fuera de las zonas peligrosas y diseñados de forma que se eviten las manipulaciones
involuntarias.
• Cada equipo debe estar provisto de un órgano de
accionamiento que permita su parada total en
condiciones de seguridad. La orden de parada
tendrá prioridad sobre las órdenes de puesta en
marcha. Una vez parado el equipo se interrumpirá el suministro de energía. Si fuera necesario, el
equipo estará provisto de un dispositivo de parada de emergencia.
• Cualquier equipo de trabajo que entrañe un riesgo de accidente por contacto mecánico debe estar equipado con resguardos o dispositivos de
protección.
• Las zonas y puntos de trabajo o de mantenimiento de un equipo de trabajo deben estar adecuadamente iluminadas en función de las tareas que
deban realizarse.
• Todo equipo de trabajo debe ser adecuado para
proteger a los trabajadores expuestos contra el
riesgo de contacto directo o indirecto con la
electricidad, incendio o explosión, agentes físicos como el ruido, las vibraciones o radiaciones,
calentamiento del propio equipo, emanaciones
de gases, polvos, líquidos y vapores u otras sustancias producidas, utilizadas o almacenadas por
el equipo.
4.3.d. Máquinas
Se entiende por máquina cualquier medio técnico
con una o más partes móviles, capaz de transformar o
transferir energía, movido por una fuente de energía
que no sea la fuerza humana.
Los usuarios antes de adquirir máquinas con capacidad potencial de producir daño a las personas y/o
bienes deben exigir al vendedor una justificación de
que están debidamente HOMOLOGADAS. También
deben estar CERTIFICADAS con su correspondiente
marcado CE. Tendrán siempre a su disposición el manual de instrucciones, en CASTELLANO, con el que
obligatoriamente deben haber sido suministradas. Los
operarios mantendrán las máquinas que utilicen, y su
entorno, en buen estado de limpieza y libres de obstáculos y nunca emplearán las manos ni herramientas u
otros objetos, para detener o frenar el movimiento de
las máquinas.
4.3.e. Herramientas manuales
Las herramientas manuales se pueden definir como
aquellas herramientas que son sostenidas con las manos. Pueden ser accionadas exclusivamente con el esfuerzo físico del hombre o también por otros medios
(herramientas eléctricas, neumáticas, etc.).
La empresa suministrará a los trabajadores todas las
herramientas necesarias para la correcta y segura ejecución de los trabajos. Los trabajadores son responsables del buen trato y del mantenimiento y limpieza de
las herramientas que tengan asignadas.
Las herramientas de mano deben estar construidas
con materiales resistentes, ser las más apropiadas por
sus características y tamaño a la operación a realizar y
no tener defectos ni desgaste que dificulten su correcta
utilización. La unión entre sus elementos será firme,
para evitar cualquier rotura o proyección de los mismos. Los mangos o empuñaduras serán de dimensión
adecuada, estarán exentos de grietas y astillas, no tendrán bordes agudos ni superficies resbaladizas y serán
aislantes en caso necesario. Las cabezas metálicas deben carecer de rebabas. Las partes cortantes y punzan-
51
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
tes se mantendrán debidamente afiladas. Durante su
uso estarán libres de grasas, aceites y otras sustancias
deslizantes.
Para evitar caídas, cortes o riesgos análogos, se colocarán en portaherramientas o estantes adecuados. Se
prohíbe colocar herramientas manuales en pasillos
abiertos, escaleras u otros lugares elevados desde los
que puedan caer sobre los trabajadores. Las herramientas deben ser transportadas en cajas especiales,
bolsas o cinturones portaherramientas, pero nunca se
deben llevar alojadas en los bolsillos ya que ante una
caída o un golpe imprevisto se pueden clavar y producir una lesión grave. Cuando una herramienta no se esté utilizando se colocará siempre en su correspondiente portaherramientas.
Los trabajadores recibirán instrucciones precisas
sobre el uso correcto de las herramientas que hayan de
utilizar, a fin de prevenir accidentes, sin que en ningún caso puedan utilizarse para fines distintos a los
que están destinadas (destornilladores como palanca o
cincel; llaves, inglesas o fijas, para golpear; tenazas o
alicates para soltar o apretar tuercas o tornillos; cuchillos o navajas como destornilladores, etc.). En general,
se debe procurar utilizar las herramientas con corte o
punzantes con una trayectoria hacia fuera del cuerpo
para evitar lesiones.
4.4. Vigilancia de la salud
La vigilancia de la salud en el ámbito laboral puede definirse como el conjunto de actuaciones cuyo ob-
52
jetivo es llegar a conocer el estado de salud de los trabajadores y así poder instaurar medidas encaminadas
a la prevención de los posibles daños y poner en marcha medidas de promoción.
Se trata de una obligación del empresario de carácter sanitario, por lo que necesariamente debe dársele
respuesta con actuaciones médicas, las cuales serán
llevadas a cabo por personal sanitario capacitado y
acreditado. Es, además, una obligación INCONDICIONAL del empresario, quien garantizará la vigilancia
periódica del estado de salud de sus trabajadores en
función de los propios riesgos del trabajo que se ejecute, no pudiendo establecerse planteamientos generales de actuación, sino específicos para cada caso. Actualmente el RECONOCIMIENTO MÉDICO es la medida más apropiada para garantizar la vigilancia del
estado de salud de los trabajadores aunque, en ningún
momento la normativa vigente especifica de qué manera debe llevarse a cabo la vigilancia ni tampoco indica cuál es el instrumento más apropiado para ejecutarla. Lo que sí concreta es que el incumplimiento del
deber de realizar dichos reconocimientos y pruebas de
vigilancia periódica del estado de salud de los trabajadores se considera infracción grave.
La práctica de la vigilancia de la salud puede abarcar distintas evaluaciones:
• Inicial, con ocasión del ingreso en la empresa.
• Adicional, con motivo de síntomas de empeoramiento, cuando se asuman tareas en las que existan nuevos riesgos específicos o cuando se reanude el trabajo tras ausencias prolongadas por
motivos de salud.
• Periódica, la que se realiza cada cierto tiempo
previamente determinado por la normativa vigente o por acuerdo entre empresa y trabajadores.
• Post ocupacional, la que se realiza después de
extinguida la relación laboral, en aquellos supuestos en que la naturaleza de los riesgos del
trabajo así lo aconseje.
Todos los exámenes de salud deben reflejarse en
una historia clínico-laboral que incluya los datos personales, familiares y hereditarios del trabajador, la exploración clínica, el control biológico, los estudios
complementarios en función de los riesgos propios del
trabajo, una descripción detallada del puesto de trabajo, el tiempo de permanencia en el mismo, los riesgos
detectados y las medidas de prevención adoptadas.
La obligación del empresario respecto a la vigilancia de la salud termina cuando el trabajador no presta
su consentimiento, esto es, el trabajador puede optar
por someterse o no a los reconocimientos, liberando
en este último caso al empresario de responsabilidad.
No obstante, este carácter VOLUNTARIO está limitado, previo informe de los representantes de los trabajadores, en los siguientes casos:
• Cuando los reconocimientos sean imprescindibles para evaluar los efectos de las condiciones
de trabajo sobre la salud de los trabajadores.
• Cuando sea preciso para verificar si el estado de
salud del trabajador puede entrañar peligro para
él, para sus compañeros o para otras personas relacionadas con la empresa.
• Cuando así esté establecido en una disposición
legal, debido a riesgos específicos o a actividades de especial peligrosidad.
En relación a los reconocimientos médicos y controles de salud siempre hay que tener presente que:
• Se realizarán aquellos que causen las menores
molestias posibles al trabajador y sean proporcionales al riesgo.
• Deben respetar siempre la INTIMIDAD y DIGNIDAD de la persona y ser CONFIDENCIALES, teniendo en cuenta que el incumplimiento del deber de confidencialidad es constitutivo de infracción muy grave.
• Los resultados serán comunicados a los trabajadores afectados, los cuales tienen derecho a conocer el resultado de todas las pruebas que les
han sido practicadas. En caso contrario, el empresario incurre en infracción grave.
• No podrán ser usados con fines discriminatorios
ni en perjuicio del trabajador, sino que tendrán
como finalidad exclusiva su utilización en la prevención y protección de la salud.
• La información personal de carácter médico es
exclusiva del personal sanitario sin que pueda facilitarse al empresario o a otras personas sin consentimiento expreso del trabajador.
• El empresario solamente será informado de las
conclusiones extraídas en relación con la aptitud
del trabajador para el desempeño del puesto de
trabajo.
53
M A N UA L P R Á C T I C O
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
4.5. Empresas de trabajo
temporal (ETT)
to de puesta a disposición. La no realización de dicha
evaluación de riesgos se considera una infracción grave.
Se denomina “empresa de trabajo temporal” (ETT)
aquélla cuya actividad consiste en la cesión de trabajadores contratados temporalmente a otra empresa denominada “usuaria”, mediante el Contrato de Puesta a
Disposición. De esta forma, el trabajador puesto a disposición presta servicios en el ámbito organizativo de
una empresa distinta.
No se pueden celebrar contratos de puesta a disposición para la realización de trabajos de especial peligrosidad entre los que se incluyen: trabajos en obras
de CONSTRUCCIÓN, trabajos con riesgo de caída de
ALTURA y trabajos con riesgos eléctricos en ALTA
TENSIÓN, de lo contrario tanto la empresa usuaria como la ETT cometerían una infracción muy grave.
4.5.a. El contrato de puesta a
disposición
4.5.b. El contrato de trabajo
El Contrato de Puesta Disposición es el celebrado
entre la ETT y la EMPRESA USUARIA. Previamente a la
celebración de dicho contrato, la empresa usuaria tiene la obligación de informar a la ETT sobre:
• las características propias del puesto de trabajo y
de las tareas a desarrollar
• sus riesgos profesionales
• las aptitudes, capacidades y cualificaciones profesionales requeridas desde el punto de vista de
la protección de la salud y la seguridad del trabajador que posteriormente vaya a ser cedido.
Por ello la celebración de un Contrato de Puesta a
Disposición SOLAMENTE es posible si la empresa
usuaria ha llevado a cabo la evaluación de los riesgos
del puesto de trabajo objeto de cobertura. Toda esta
información, incluidos los resultados de la evaluación
de riesgos, debe incorporarse, en todo caso, al contra-
54
El Contrato de Trabajo es el celebrado entre la ETT
y el TRABAJADOR. A la hora de contratar a un trabajador para ponerlo a disposición de otra empresa, la ETT
tiene ciertas obligaciones:
• Contratar a un trabajador que reúna en ese momento o, a través de la correspondiente formación, los requisitos exigidos en materia de prevención de riesgos laborales. La ETT debe asegurarse de que el trabajador, antes de su puesta a
disposición, posee la formación teórica y práctica en materia de prevención de riesgos laborales
que exige el desempeño seguro del puesto de trabajo. En caso contrario, debe facilitar previamente dicha formación.
• Dar a sus trabajadores la información recibida de
la empresa usuaria. Dicha información debe ser
incluida tanto en el contrato de puesta a disposición como en el contrato de trabajo.
• Llevar a cabo la vigilancia periódica de la salud
de los trabajadores cedidos a cargo de la ETT.
• Certificar y acreditar documentalmente a la empresa usuaria que el trabajador puesto a disposición ha recibido las informaciones relativas a los
riesgos y medidas preventivas, posee la suficiente
formación específica y cuenta con el estado de
salud necesario para desarrollar con la debida seguridad el puesto de trabajo.
4.5.c. Obligaciones de la empresa
usuaria
Entre las obligaciones de la empresa usuaria antes
y desde el inicio de la prestación de servicios del trabajador puesto a disposición citaremos:
• Recabar la información necesaria de la ETT para
cerciorarse de que el trabajador puesto a su disposición reúne los requisitos a los que se ha aludido anteriormente; es decir, que ha sido considerado apto para el trabajo mediante el correspondiente reconocimiento médico, que posee las
cualificaciones y capacidades requeridas para el
desempeño de las tareas inherentes al puesto de
trabajo y que ha recibido las informaciones a que
se refiere el apartado 4.5.a.
• Informar al trabajador puesto a su disposición de
los riesgos para la salud y seguridad existentes de
modo general en la empresa y particularmente en
su puesto de trabajo, así como de las medidas y
acciones preventivas que es necesario adoptar,
sobre todo en lo relativo a las posibles situaciones de emergencia. En caso de omisión se considera infracción grave.
• No permitir el comienzo de la prestación de servicios del trabajador hasta que no tenga constancia del cumplimiento de las obligaciones precedentes.
• Informar a los representantes de los trabajadores
de todas las incorporaciones producidas, especificando el puesto de trabajo, los riesgos, las medidas preventivas y la formación e información
requerida y recibida por el trabajador cedido. A
su vez, el trabajador puede dirigirse a estos representantes en el ejercicio de sus derechos laborales reconocidos.
• Una vez iniciada la prestación de servicios, la
empresa usuaria es la responsable directa de la
seguridad y salud en la ejecución del trabajo, debiendo prestar el mismo nivel de protección a todos los trabajadores de la empresa.
• Informar a la ETT de los resultados de la evaluación de riesgos del puesto de trabajo, así como
de los agentes, procedimientos o condiciones de
trabajo que pueden influir negativamente en la
salud, con el fin de que la ETT pueda cumplir
con la obligación de la vigilancia periódica de la
salud de sus trabajadores.
4.5.d. Organización de la prevención
Las ETT, como cualquier otra empresa, deben
adoptar la modalidad organizativa de la prevención
que les corresponda mediante la designación de uno o
55
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
varios trabajadores, el recurso a uno o más servicios
de prevención externos o mediante la constitución de
un servicio de prevención propio. A tal fin, tanto las
empresas usuarias como las ETT, deben contabilizar el
promedio mensual de trabajadores puestos a disposición en los últimos doce meses.
Sin perjuicio de las funciones y responsabilidades
en la organización de las actividades preventivas de la
ETT, los trabajadores puestos a disposición pueden dirigirse en todo momento a los trabajadores designados
o a los servicios de prevención existentes en la empresa usuaria en igualdad de condiciones que los restantes de ésta.
Obligaciones de la ETT con el trabajador
• Exponerle la información cedida por la empresa usuaria
en materia preventiva.
• Formarle teórica y prácticamente en materia preventiva.
• Realizar vigilancia de la salud (reconocimientos médicos).
TRABAJADOR
56
TRA
B
DE
ICIÓN
ISPOS
TA A D
PUES
Obligaciones del trabajador con la
ETT
• Entregar puntualmente el parte de
trabajo
• Preavisar en caso de rescisión
voluntaria del contrato.
• Comunicar los cambios de funciones
o centro de trabajo ordenados por la
empresa usuaria.
AJO
ETT
4.5.e. Documentación
Siempre que se produzca
un daño para la salud del trabajador puesto a disposición
con motivo del desarrollo de
Obligaciones de la ETT con la empresa usuaria
• Asignar a un trabajador con las
aptitudes/cualificaciones requeridas.
• Acreditar documentalmente:
-estado de salud del trabajador.
- formación en prevención de riesgos del trabajador.
-recepción por el trabajador de la información en
materia preventiva facilitada por la empresa usuaria.
DE
RATO
CONT
Los trabajadores designados o, en su caso los servicios de prevención de la ETT
y de la empresa usuaria deben coordinar sus actividades
preventivas y transmitirse recíprocamente las informaciones que sean precisas con el
fin de garantizar una protección más eficaz a los trabajadores puestos a disposición.
su trabajo, la empresa usuaria tiene la obligación de
informar por ESCRITO a la ETT para que ésta proceda
a la correspondiente notificación del accidente de trabajo o enfermedad profesional. Si se incumple esta
obligación de información, la empresa usuaria es la
responsable de los efectos que se deriven de la falta de
notificación por parte de la ETT.
Toda la documentación relativa a las informaciones
y datos a los que se hace referencia en los diferentes
apartados de este epígrafe, debe ser REGISTRADA y
CONSERVADA tanto por la ETT como por la empresa
usuaria.
TRA
TO
DE
CON
M A N UA L P R Á C T I C O
PRESTACIÓN DE SERVICIOS
Obligaciones del trabajador con la empresa usuaria
• Correcta utilización de los EPI’s.
• Cumplir con sus normas internas.
• Velar por la propia seguridad y salud.
• Correcta utilización de equipos y materiales.
Obligaciones de la empresa usuaria
con la ETT
• Informar de:
- características del puesto de trabajo.
- características de las tareas a desarrollar.
- aptitudes/cualificaciones requeridas.
- resultado de la evaluación de riesgos.
- formación en prevención que debe
poseer el trabajador asignado.
- medidas de vigilancia de la salud.
- accidente de trabajo.
EMPRESA USUARIA
Obligaciones de la empresa usuaria con el trabajador
• Informar de:
- riesgos del puesto de trabajo
- medidas de prevención para dicho puesto.
• Responsabilizarse del uso de las medidas preventivas.
• Proporcionar los EPI’s
4.6. Ergonomía
La prevención de riesgos laborales no se limita solamente a evitar los accidentes de trabajo y las enfermedades profesionales sino que contempla también
otros factores como la carga física, carga mental, estrés y todo aquello que afecta a la calidad de vida laboral, a la satisfacción en el trabajo y al confort.
4.6.a. Diseño del puesto de trabajo
El diseño del puesto de trabajo ha de hacerse a la
medida del hombre.
Para diseñar un ESPACIO DE TRABAJO se tendrán
en cuenta las dimensiones corporales y los diversos
movimientos que el trabajador lleva a cabo a causa
del funcionamiento del sistema hombre-máquina. Hay
que diseñar distancias y áreas de trabajo, determinando las zonas de alcance óptimas tanto en el plano vertical como en las superficies horizontales.
Respecto a la POSICIÓN DE TRABAJO, ésta tiene
que ser lo más estable y equilibrada posible. La alternancia en la posición de pie y sentado es la que ofrece
mayor flexibilidad y por lo tanto la que proporciona
mayor confort postural.
La altura del PLANO DE TRABAJO, ya sea en posición sentado o de pie, es muy importante. En general,
ésta será correcta cuando permita mantener el tronco
erguido y el antebrazo en posición horizontal o ligera-
mente inclinado hacia abajo.
La configuración del ASIENTO es también un factor
importante a tener en cuenta en el diseño de los puestos de trabajo. Temas como el espacio reservado a las
piernas y el diseño ergonómico han de ser objeto de
atención.
4.6.b. La carga física del trabajo
El efecto principal de la carga física del trabajo es
la FATIGA CORPORAL o muscular, entre cuyos síntomas se encuentran:
• Sensación de cansancio y malestar.
• Dolores y lesiones de espalda, como consecuencia de la manipulación manual de cargas.
• Movimientos torpes e inseguros.
• Reducción del ritmo de actividad y de la productividad.
• Sensación de insatisfacción y hastío que incide
negativamente en la calidad del trabajo.
Para evitar o atenuar la fatiga física es necesario
adoptar medidas preventivas como:
• Introducir pausas y descansos que permitan la recuperación del organismo. La fatiga física es
siempre reversible o temporal, esto es, se repara
con el reposo, el descanso o el sueño.
• Utilización de herramientas adecuadas en peso y
con mango de agarre.
• Diseño postural del puesto de trabajo para evitar
fatigas innecesarias.
• Mantener un nivel de ruido aceptable y un am-
57
M A N UA L P R Á C T I C O
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
biente térmico adecuado a las exigencias de las
tareas a realizar.
• Seguir reglas adecuadas sobre el modo de levantar y transportar cargas.
4.6.c. Carga mental del trabajo
El efecto más importante de la carga mental del trabajo es la FATIGA MENTAL la cual puede ser ocasional o crónica.
La fatiga mental ocasional conlleva un descenso en
el nivel de atención y en el rendimiento pero permite
que el organismo se recupere a través de pausas y descansos o, simplemente, cambiando de actividad.
La fatiga mental crónica no permite al trabajador
recuperar su ritmo habitual mediante el descanso o el
sueño. Ante una fatiga crónica no hay más que dos alternativas: proporcionar al trabajador otras tareas o
modificar las condiciones del puesto de trabajo. Conlleva un aumento del nivel de absentismo y de bajas
de incapacidad temporal.
Las medidas de prevención de la fatiga mental han
de ir orientadas al tratamiento de la información y a la
organización del trabajo mediante el diseño del puesto
de trabajo y las acciones sobre el proceso de información.
58
4.6.d. El estrés laboral
El estrés afecta negativamente a la salud del trabajador y a la buena marcha de la empresa. No solamente produce estrés la carga mental del trabajo. Existen
diferentes factores estresantes que podríamos clasificar
de la siguiente manera:
- Relativos al AMBIENTE de TRABAJO
Iluminación inadecuada o insuficiente, altos niveles de ruido, temperaturas extremas y ambientes contaminados.
- Relativos a la TAREA
Carga mental del trabajo, subempleo o subcarga
del trabajo y falta de autonomía en el trabajo.
- Relativos a la ORGANIZACIÓN del TRABAJO
Deficiente configuración de tareas, jornada de trabajo excesiva y agotadora (incluido el trabajo a turnos
y nocturno), conflictos entre los miembros de un mismo grupo de trabajo, falta de control sobre el propio
trabajo, imposibilidad de hacer carrera profesional o
promoción.
Las consecuencias del estrés también son numerosas y pueden ser:
• Físicas
Trastornos gastrointestinales, cardiovasculares, respiratorios, musculares, etc.
• Psicológicas
Ansiedad, depresión, pérdida de memoria, deterioro de la capacidad de pensar y razonar, reacciones
agresivas, falta de participación, etc.
• Sociales o de empresa
Costes de bajas y absentismo, descenso de la pro-
ductividad y de la calidad, disminución del rendimiento debido a la rotación de puestos y creación de condiciones favorables a la producción de accidentes e incidentes.
4.6.e. Pantallas de visualización de
datos
Es una equivocación pensar que el trabajo con ordenadores o equipos de pantallas de visualización de
datos (PVD) está libre de riesgos. Estudios efectuados
hasta la fecha demuestran que el absentismo producido por enfermedades de media y corta duración en
trabajadores que operan con pantallas de visualización
se ha debido a problemas de irritación de ojos, dolor
de espalda, nuca, cabeza y articulaciones, malestar
por el ruido o vibraciones e irritabilidad o depresiones. Estos riesgos pueden tener diferentes causas: individuales, de diseño del puesto y del equipo, del entorno o de la organización del trabajo.
Las alteraciones más frecuentes sufridas por los
operadores de PVD se pueden agrupar en tres grandes
apartados: FATIGA VISUAL, FATIGA FÍSICA y trastornos posturales y FATIGA MENTAL o psicológica, que
puede derivar en estrés. A veces para liberar tensiones
y relajarse, el cuerpo hace una descarga automática a
través del suspiro, otras veces el cuerpo pide estirar
fuertemente los músculos y después relajarlos; estas
actuaciones son esporádicas y solucionan o distienden
momentáneamente una situación de tensión.
Desde el punto de vista preventivo, siempre que la
naturaleza de las tareas lo permita, podrían organizarse las actividades de manera que los trabajadores tengan un margen de autonomía suficiente para poder seguir su propio ritmo de trabajo y hacer pequeñas pausas discrecionales para prevenir las fatigas física,
visual y mental.
ALTERACIONES SUFRIDAS POR LOS OPERARIOS
CARGA FÍSICA
✔ Posturas incorrectas
✔ Posturas estáticas
✔ Esfuerzos
ORGANIZACIÓN
✔ Trabajo sin contenido
✔ Trabajo monótono
✔ Tiempo de trabajo
✔ Excesivo control
✔ Mala información
AMBIENTE FÍSICO
✔ Temperatura
✔ Ruido
✔ Iluminación
✔ Otras radiaciones
FATIGA
✔ General
✔ Visual
✔ Muscular
✔ Mental
CARGA NERVIOSA
✔ Control de la persona
✔ Operaciones mentales
✔ Nivel de atención
OTRAS CAUSAS
✔ Malas cond. de vida
✔ Incapacidades
✔ Enfermedad
✔ Sentimientos
✔ Miedos
RECUPERACIÓN
DESCANSOS
✔ Pausas momentáneas
✔ Pausas programadas
✔ Cambios de actividad
OBLIGACIONES GENERALES DEL EMPRESARIO
El empresario debe adoptar las medidas necesarias
para eliminar o atenuar, en su caso, los riesgos inherentes a la utilización de equipos con pantallas de visualización. Tiene que EVALUAR los RIESGOS toman-
59
M A N UA L P R Á C T I C O
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
do en cuenta los posibles peligros para la vista, los
problemas físicos y la carga mental. Esta evaluación se
realiza en función de las características del puesto de
trabajo, las exigencias de la tarea a realizar y especialmente:
• El tiempo promedio de la utilización diaria del
equipo.
• El tiempo máximo de atención continua a la pantalla requerido por la tarea habitual.
• El grado de atención que exija dicha tarea.
Una vez analizados los resultados de la evaluación, si se apreciara que la utilización de equipos con
pantallas de visualización genera riesgos contra la salud y seguridad, el empresario debe reducir la duración máxima del trabajo continuado en pantalla, bien
organizando la actividad diaria de forma que esta tarea se alterne con otras, o bien estableciendo las PAUSAS necesarias cuando la ALTERNANCIA de TAREAS
no sea posible o sea insuficiente para disminuir el riesgo. Estas medidas pueden pactarse en los convenios
colectivos.
El empresario está también obligado a garantizar el
derecho de los trabajadores a la VIGILANCIA de la SALUD frente a los riesgos para la vista, los problemas físicos y la carga mental, así como el efecto combinado
de los mismos y la eventual patología acompañante.
La vigilancia de la salud debe proporcionarse en los siguientes supuestos:
• Al iniciar los trabajos con pantallas de visualización.
• Periódicamente, de acuerdo con el juicio del médico responsable.
60
• Cuando aparezcan trastornos o lesiones.
El empresario debe proporcionar a sus trabajadores
dispositivos correctores especiales (gafas) para la protección de la vista, si así fuera necesario. Igualmente
debe proporcionar:
• Formación e información sobre los riesgos y las
medidas que deban adoptarse.
• Formación adecuada sobre las modalidades de
uso de los equipos con pantallas al iniciar el trabajo y cuando se modifiquen las condiciones organizativas del puesto de trabajo.
• Ofertar consulta y requerir participación de los
trabajadores y sus representantes.
La utilización en sí misma de un equipo con pantallas de visualización de datos no debe ser una fuente
de riesgo para los trabajadores y por eso se establecen
unos requisitos mínimos a los que deben ajustarse dichos equipos, los cuales se aplican en la medida en
que los componentes específicos a los que se hace referencia, están presentes en el puesto de trabajo en
cuestión:
• La imagen de la PANTALLA debe ser estable, sin
destellos o centelleos. Los caracteres deben estar
bien definidos, claramente configurados y tener
una dimensión suficiente. La pantalla debe ser
inclinable y orientable, pudiéndose desplazar horizontal y verticalmente. No debe tener reflejos
ni reverberaciones.
• El TECLADO debe ser inclinable e independiente
de la pantalla y no se tiene que deslizar en la
mesa al teclear. Tiene que haber espacio suficiente delante de él para que el usuario pueda apoyar
los brazos y las manos. La superficie del mismo
debe ser mate para evitar reflejos, y los símbolos
de las teclas deben resaltar suficientemente y ser
legibles desde la posición normal de trabajo.
• La MESA o superficie de trabajo debe ser poco
reflectante, tener dimensiones suficientes para
permitir a los trabajadores una posición cómoda
y una colocación flexible de la pantalla, del teclado, de los documentos y del material accesorio. Deben evitarse las mesas bajas y las que tengan esquinas o aristas agudas.
• El PORTADOCUMENTOS o atril debe ser estable
y regulable en altura, inclinación y distancia y
estará colocado de tal modo que se reduzcan al
mínimo los movimientos incómodos de la cabeza
y los ojos.
• El REPOSAPIES será imprescindible cuando los
pies no apoyen bien el suelo y serán preferentemente regulables en altura e inclinación. La superficie de apoyo será amplia y antideslizante.
Como ya se ha mencionado también son objeto de
control todos aquellos riesgos que tienen su causa en
el entorno de trabajo y que se derivan de la iluminación, el ruido, la humedad, el calor y las radiaciones:
• La ILUMINACIÓN artificial debe ubicarse de manera que evite deslumbramientos y reflejos molestos en la pantalla. Por la misma razón deben
tenerse en cuenta las fuentes de luz, tales como
ventanas o paredes, a la hora de instalar un puesto de trabajo.
• El RUIDO está principalmente relacionado con el
uso de la impresora. En ningún caso el nivel sonoro de ésta será superior a 55dB(A).
• La SILLA o asiento de trabajo debe ser estable,
con asientos y respaldo regulables por separado
en altura e inclinación, con buen apoyo de la zona lumbar en el respaldo, debiendo evitarse los
respaldos basculantes. La profundidad del asiento también debe ser regulable, de tal forma que
el usuario pueda utilizar el respaldo sin que el
borde del asiento le presione las piernas. Debe
proporcionar libertad de movimientos al usuario.
Los apoyabrazos son aconsejables en tareas de
diálogo. Se recomienda la utilización de sillas
dotadas de cinco apoyos o ruedas.
61
M A N UA L P R Á C T I C O
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
CONDICIONES DE ILUMINACIÓN Y UBICACIÓN
4.6.f. Transporte manual de cargas
La manipulación manual de cargas origina muchos
de los accidentes laborales. Así lo demuestra la IV Encuesta Nacional de Condiciones de Trabajo publicada
por el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el
Trabajo, según la cual los esfuerzos o posturas forzadas han sido la segunda causa más frecuente de los
62
accidentes de trabajo ocurridos en los dos últimos
años (24,6%). Esta misma fuente revela que del total
de motivos de consulta médica relacionadas con problemas de salud derivados del trabajo, el más frecuente ha sido el dolor de espalda (20,4%).
Algunas medidas de prevención a adoptar al respecto son, en primer lugar, las encaminadas a evitar o
disminuir la manipulación de cargas, tales como automatizar procesos (MEDIDAS TÉCNICAS) o estudiar los
procesos productivos con el fin de lograr que los recorridos de los trabajadores con cargas sean lo más cortos posibles (MEDIDAS ORGANIZATIVAS). Antes de
que el empresario tome alguna de estas medidas es necesario EVALUAR el RIESGO para determinar si es o
no tolerable. Si el resultado es un riesgo tolerable no
es necesario mejorar la acción preventiva en esas tareas aunque se pueden buscar soluciones más rentables
o mejoras que no supongan un gran coste económico.
Pero si la manipulación manual no se puede evitar y el
resultado de la evaluación es que existe un riesgo no
tolerable las tareas deben ser modificadas de manera
que el riesgo se reduzca a un nivel tolerable.
Por otro lado, el empresario ha de proporcionar a
los trabajadores una adecuada formación e información acerca de cómo se han de manejar los diversos tipos de cargas y sobre los posibles riesgos, en particular dorsolumbares, que se corren en caso de mover las
cargas de forma inadecuada.
REGLAS PARA LA MANIPULACIÓN DE CARGAS
DE FORMA SEGURA
POSICIÓN DE LA ESPALDA
• Meter la barbilla con el objeto de que el cuello y
la cabeza se alínien con el plano de la espalda y
mantengan derecha y firme la columna vertebral.
• Orientar los pies en la dirección que se va a tomar, no sólo para mantener el equilibrio, sino
también para no realizar giros de la columna vertebral que pueden resultar peligrosos.
• Agarrar firmemente el objeto para levantarlo y
transportarlo; el objeto ha de ser cogido con la
palma de la mano y la base de los dedos, así la
superficie de agarre es mayor con lo que se reduce el esfuerzo y la fatiga.
AGARRE CORRECTO
• Flexionar las piernas doblando las rodillas (el
muslo y la pantorrilla deben formar un ángulo de
más de 90º)
• Mantener la espalda recta al ponerse en cuclillas;
una espalda recta mantiene la columna, los músculos de la espalda y los órganos del cuerpo bien
alineados.
63
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
• Aproximarse a la carga para evitar esfuerzos innecesarios. Cuanto más largo es el brazo de palanca menos kilos se pueden levantar. La fuerza
que se precisa para levantar una carga aumenta
cuanto más alejada esté de nosotros (hasta cinco
veces con los brazos extendidos) y, además, resulta más difícil mantener el equilibrio.
RELACIÓN ESFUERZO-CARGA
POSICIÓN HOMBRE-CARGA
64
• Espirar en el momento de iniciar el esfuerzo, disminuyendo así la presión visceral que puede ser
causa de hernias.
• Debe utilizarse en primer lugar la fuerza de las
piernas, ya que sus músculos son los más potentes del cuerpo. Además se han de contraer los
músculos abdominales y glúteos para estabilizar
la pelvis antes de mover un objeto.
• Mantener la carga próxima al cuerpo y con los
brazos y los codos pegados a los lados. Ha de
mantenerse el peso del cuerpo directamente sobre los pies.
• El descenso de la carga se llevará a cabo de la
misma manera que su ascenso: separar los pies,
flexionar las piernas, meter la barbilla, espirar y
contraer los músculos abdominales y los glúteos.
• Evitar la elevación de cargas a alturas por encima
de los hombros y la cabeza, ya que a esta altura
resulta más difícil controlar las cargas y se produce un esfuerzo mayor en la columna vertebral.
• Evitar la torsión de la columna vertebral. Es preferible moverse a girar, ya que doblarse y girar de forma
simultánea, supone reducir la carga máxima admisible en un 30% respecto de la posición erguida.
• Cuando el objeto a levantar sea muy voluminoso o
pesado es necesario recurrir a dos o más personas.
• El transporte de una carga en una sola mano representa un esfuerzo adicional por lo que es
aconsejable dividir la carga entre las dos manos.
RECOMENDACIONES SOBRE EL ESPACIO
DE TRABAJO
• Antes de iniciar el transporte se debe comprobar
que el itinerario esté libre de obstáculos y que
haya suficiente espacio “vertical” libre para el
ejercicio de la actividad a desarrollar.
• El suelo debe ser estable y estar en buen estado y
limpio.
• Las rampas no deben ser superiores al 15% de
pendiente.
• No debe existir exceso de polvo en el ambiente
ni exceso de ruido o agua. Igualmente la temperatura, iluminación, humedad o circulación del
aire también debe ser la adecuada.
PATOLOGÍAS ASOCIADAS A LA MANIPULACIÓN
DE CARGAS
Las lesiones pueden ser de dos tipos: agudas, como
consecuencia de un elevado esfuerzo realizado de forma repentina, o crónicas, por un esfuerzo prolongado
aunque de menor intensidad.
En condiciones de seguridad, cuando la elevación
o el transporte de cargas no se realiza de forma adecuada, se dan con frecuencia tres tipos de lesiones:
hundimiento o fractura de las vértebras de la columna,
hernias discales o lumbago. Estas lesiones, aunque no
son mortales, pueden tener larga y difícil curación, y
en muchos casos requieren un largo período de rehabilitación, originando grandes costes económicos y
humanos, ya que el trabajador queda muchas veces in-
capacitado para realizar su trabajo habitual y su calidad de vida puede quedar deteriorada.
VALORES RECOMENDADOS DE LA CARGA
MÁXIMA A MANEJAR
El peso de la carga es uno de los principales factores a la hora de evaluar el riesgo en la manipulación
manual.
Se considera que la manipulación manual de toda
carga que pese más de 3 kgs. puede entrañar un potencial riesgo dorsolumbar no tolerable. A pesar de ser
una carga bastante ligera, si se manipula en unas condiciones ergonómicas o ambientales desfavorables
(alejada del cuerpo, con posturas inadecuadas, con
suelos inestables, etc.) puede generar riesgos.
A modo de indicación general, el peso máximo
que se recomienda no sobrepasar, en condiciones seguras de manipulación, es de 25 kgs. No obstante, si
quienes manejan la carga son mujeres o trabajadores
jóvenes o mayores no se debería superar los 15 kgs.
En circunstancias especiales, trabajadores sanos y
entrenados físicamente podrían manipular cargas de
hasta 40 kgs, siempre que la tarea se realice de forma
esporádica y en condiciones seguras, pero no se deberían exceder los 40 kgs bajo ninguna circunstancia.
Debido a que los puestos de trabajo deben ser accesibles para cualquier trabajador, exceder el límite de
25 kgs debe ser considerado como una excepción.
65
M A N UA L P R Á C T I C O
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
Estos son los valores máximos de peso en condiciones seguras; ahora bien, si no se dan estas condiciones, estos límites de peso se reducirán.
Cuando se sobrepasen estos valores de peso, se deberán tomar medidas preventivas de forma que el trabajador no manipule las cargas, o se consiga que el
peso manipulado sea menor.
cuando en zonas concretas se requieran niveles de iluminación elevados.
La medición del nivel de iluminación se realizará a
la altura donde se realice la tarea: en zonas de uso general a 85 cm del suelo y en el de las vías de circulación a nivel del suelo.
Los niveles mínimos de iluminación de los lugares
de trabajo serán:
4.7. Lugares de trabajo
ZONA O PARTE DEL LUGAR DE TRABAJO
4.7.a. La iluminación
Las condiciones inadecuadas de iluminación en los lugares de trabajo pueden tener consecuencias negativas
para la seguridad y la salud de los trabajadores así como
para la productividad. La disminución de la eficacia visual
puede aumentar el número de errores y accidentes así como la carga visual y la fatiga durante la ejecución de las
tareas. También se pueden producir accidentes como consecuencia de una iluminación deficiente en las vías de
circulación, escaleras y otros lugares de paso.
La iluminación se adaptará a la actividad que se
desarrolle, teniendo en cuenta los riesgos dependientes de las condiciones de visibilidad y las exigencias
visuales de la tarea. A ser posible se dispondrá de iluminación natural, que deberá ser complementada, si
es necesario, con iluminación artificial. En tales casos,
se utilizará preferentemente la iluminación artificial
general, complementada a su vez con una localizada
66
NIVEL MÍNIMO
DE ILUMINACIÓN (LUX)
Zona donde se ejecuten tareas con:
1º Bajas exigencias visuales
100
2º Exigencias visuales moderadas
200
3º Exigencias visuales altas
(Pantallas de ordenador)
500
4º Exigencias visuales muy altas
1.000
Areas o locales de uso ocasional
50
Areas o locales de uso habitual
100
Vías de circulación de uso ocasional
25
Vías de circulación de uso habitual
50
Estos niveles mínimos deben duplicarse:
• Cuando exista riesgo apreciable de caída, choques u otros accidentes
• Cuando ante la posibilidad de un error de apre-
ciación visual se generen peligros para el trabajador o para terceros.
• Cuando el contraste de luminancias o de color
entre el objeto a visualizar y el fondo sobre el
que se encuentra sea muy débil.
Algunas de las medidas que deben adoptarse para
un buen confort visual son:
• La distribución de los niveles de iluminación será
lo más uniforme posible.
• Evitar los deslumbramientos ya sean de origen directo, producidos por la luz solar o por fuentes
de luz de alta luminancia, o indirecto, producidos por superficies reflectantes situados en la zona de operación o sus proximidades, mediante
una correcta ubicación de las fuentes de luz y de
los puestos de trabajo. Lo más recomendable es
que la luz incida lateralmente sobre el plano de
trabajo.
• Evitar sombras excesivas mediante una apropiada
colocación de las lámparas.
• Seleccionar el color adecuado para crear entornos habitables y agradables. Luz blanca para locales de trabajo y luz blanca azulada para niveles de iluminación elevados.
• Adecuado mantenimiento de la instalación de
iluminación y limpieza de las luminarias.
• Instalar alumbrado de emergencia de evacuación
y de seguridad en los lugares en los que un fallo
del alumbrado normal suponga riesgo para la seguridad.
• Los sistemas de iluminación utilizados no deben
originar riesgos eléctricos, de incendio o de explosión.
4.7.b. Condiciones ambientales
Las condiciones ambientales de los lugares de trabajo no deben suponer un riesgo para la seguridad y la
salud de los trabajadores, ni tampoco constituir una
incomodidad o molestia. Se evitarán las temperaturas
y humedades extremas, los cambios bruscos de temperatura, las corrientes de aire molestas, los olores desagradables, la irradiación excesiva y la radiación solar a
través de ventanas, luces o tabiques acristalados.
En los locales cerrados deberán cumplirse las siguientes condiciones de temperatura y humedad:
• La TEMPERATURA en trabajos sedentarios, propios de oficinas o similares, estará comprendida
entre 17 y 27ºC. En locales con trabajos ligeros
estará comprendida entre 14 y 25ºC.
• La HUMEDAD RELATIVA estará comprendida entre el 30% y el 70%, excepto en los locales donde existan riesgos por electricidad estática en los
que el límite inferior será el 50%.
4.7.c. Características físicas de los
lugares de trabajo
Las dimensiones de los locales de trabajo deben
reunir las siguientes condiciones mínimas:
• 3 metros de altura del piso al techo. Por excepción, en locales comerciales, de servicios, oficinas y despachos, la altura puede reducirse a 2,5
metros.
• 2 m2 de superficie libre por trabajador.
• 10 m3 de volumen, no ocupados por máquinas,
aparatos o instalaciones, por trabajador.
67
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
4.7.d. Orden, limpieza y mantenimiento
Los centros de trabajo deben estar ordenados; sobre todo, las zonas de paso, salidas y vías de circulación y, en especial, aquellas previstas para la evacuación en casos de emergencia.
Tanto los lugares de trabajo como los equipos e
instalaciones han de ser objeto de limpieza periódica
para mantener unas condiciones higiénicas adecuadas.
4.7.e. Material de primeros auxilios
Todo lugar de trabajo dispondrá de material para
primeros auxilios en caso de accidente que constará
como MÍNIMO de un BOTIQUÍN PORTÁTIL que contenga desinfectantes y antisépticos autorizados, gasas
estériles, algodón hidrófilo, venda, esparadrapo, apósitos adhesivos, tijeras, pinzas y guantes desechables.
Este material debe ser revisado periódicamente, repuesto puntualmente y estar claramente señalizado.
4.8. Señalización en el trabajo
La señalización es el último eslabón en la cadena
de medidas de prevención. Se instituye como única
medida cuando no se puede evitar el riesgo en el proyecto ni se puede proteger la máquina o el individuo.
68
Sin embargo, es un buen COMPLEMENTO de otras
técnicas de seguridad y una alternativa provisional de
prevención de seguridad hasta implantar las medidas
necesarias. La señalización por sí misma NUNCA ELIMINA NI REDUCE EL RIESGO, solamente lo indica.
La señalización puede ser: óptica (en forma de panel y/o luminosa), acústica, verbal, gestual, olfativa y
táctil, siendo la primera, sin duda, la de mayor utilización.
Todo empresario tiene que adoptar las medidas de
control más adecuadas para que en los lugares de trabajo exista una señalización de seguridad y salud que
identifique los riesgos y evite accidentes. La necesidad
de señalización surge ante la imposibilidad de eliminar o reducir suficientemente el riesgo mediante medidas técnicas y organizativas de protección y tras haber
formado e informado debidamente a los trabajadores.
En estas circunstancias, el empresario debe advertir, a
los que estén expuestos, de la existencia de determinados riesgos, además de orientarles sobre las pautas de
comportamiento a seguir ante cada situación de riesgo
(obligando, prohibiendo, informando..) y facilitarles la
localización e identificación de los medios o instalaciones de protección, evacuación, emergencia o primeros auxilios.
El empresario está obligado a:
• Informar sobre las medidas adoptadas respecto a
la señalización.
• Formar a los trabajadores sobre el significado de
las señales, mensajes verbales y gestuales y los
comportamientos generales o específicos. Esta
formación se debe realizar no sólo inicialmente,
cuando se implante la señalización por primera
vez sino también periódicamente, cuando se proceda a implantar nuevas señales o cuando se incorporen a la empresa nuevos trabajadores.
• Solicitar opinión y permitir la participación de
los trabajadores y sus representantes en las cuestiones que se susciten sobre señalización.
La señalización óptica consiste en la determinación
de señales de prohibición, obligación, advertencia e
información (lucha contra incendios y salvamento o
socorro) por el conjunto de colores, formas y símbolos
(ver anexo 4.8.1. a anexo 4.8.5.)
• Las características de la señal.
• Los riesgos, elementos o circunstancias que hayan de señalizarse.
• La extensión de la zona a cubrir.
• El número de trabajadores afectados.
La eficacia de las señales no debe quedar disminuida por la concurrencia de señales o por otras circunstancias que dificulten su percepción o comprensión.
La señalización debe ser bien visible, permanecer
en tanto persista la situación que la motiva y mante-
RELACIÓN ENTRE EL TIPO DE SEÑAL, SU FORMA GEOMÉTRICA Y COLORES UTILIZADOS
COLOR
TIPO DE SEÑAL
DE SEGURIDAD
FORMA
GEOMÉTRICA
PICTOGRAMA
FONDO
BORDE
BANDA
Advertencia
Triangular
Negro
Amarillo
Negro
–
Prohibición
Redonda
Negro
Blanco
Rojo
Rojo
Obligación
Redonda
Blanco
Azul
Blanco o azul
–
Lucha contra
incendios
Rectangular o
cuadrada
Blanco
Rojo
–
–
Salvamento o
Socorro
Rectangular o
cuadrada
Blanco
Verde
Blanco o verde
–
La elección del tipo, del número y del emplazamiento de las señales ha de llevarse a cabo de la forma más eficaz posible en función de:
nerse siempre en perfecto estado, por lo que será objeto de la correspondiente limpieza y mantenimiento.
69
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
Entre otras, se deben señalizar las siguientes situaciones:
• El acceso a todas aquellas zonas o locales para
cuya actividad se requiera la utilización de equipos de protección individual. Dicha obligación
no solamente afecta a la persona que realiza la
actividad, sino a cualquiera que acceda durante
la ejecución de la misma.
• Las zonas o locales donde debido a la actividad
que se realiza en los mismos o bien por el equipo o instalación que contienen se permite el acceso sólo a personal autorizado.
• Señalización en todo el centro de trabajo, que
permita conocer a todos sus trabajadores las situaciones de emergencias e instrucciones de protección en su caso.
• La ubicación de los equipos de lucha contra incendios, las salidas y recorridos de evacuación y
el botiquín de primeros auxilios.
• Cualquier otra situación que, como consecuencia
de la evaluación de riesgos y las medidas implantadas, o la no existencia de las mismas, así
lo requiera.
■ Anexo 4.8.1. Señales de advertencia
■ Anexo 4.8.2. Señales de prohibición
■ Anexo 4.8.3. Señales de obligación
70
■ Anexo 4.8.4. Señales de lucha contra
incendios
■ Anexo 4.8.5. Señales de socorro y
salvamento
4.9. Documentación en materia
de prevención
El empresario debe elaborar, conservar y mantener
a disposición de la Autoridad Laboral la siguiente documentación sobre seguridad, salud laboral y prevención de riesgos en la empresa:
• La evaluación de los riesgos para la seguridad y
salud en el trabajo y la planificación de la acción
preventiva. (Ver apartado 2.4.)
• Las medidas de protección y prevención a adoptar y, en su caso, el material de protección tanto
individual como colectivo que deba utilizarse.
(Ver apartado 4.2.)
• Los resultados de los controles e inspecciones
periódicas de las condiciones de trabajo y de la
actividad de los trabajadores.
• Los resultados de los reconocimientos médicos y
controles de salud. (Ver apartado 4.4.)
• La relación de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales que hayan causado al trabajador una incapacidad laboral superior a un día
de trabajo. (Ver apartado 3.1.)
En estos casos el empresario debe realizar, además,
la notificación por escrito a la Autoridad Laboral, mediante el Parte de Accidentes, de los daños para la salud de los trabajadores a su servicio que se hubieran
producido con motivo del desarrollo de su trabajo.
Toda esta documentación debe remitirse a la Autoridad Laboral en el momento en que la empresa cese
su actividad. Por lo tanto, no hay un plazo marcado y
debe guardarse siempre un registro documental de to-
71
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
das las actividades relativas a la prevención de riesgos,
que estará en todo momento a disposición de las personas u organismos con las competencias y autorizaciones necesarias para su consulta. Estas personas u
organismos son:
• El empresario.
• La Autoridad Laboral.
• Las Autoridades Sanitarias, a fin de que éstas
puedan cumplir con la Ley General de Sanidad.
• La Inspección de Trabajo y Seguridad Social.
• Los Delegados de Prevención.
• El Comité de Seguridad y Salud.
• Los representantes de los trabajadores.
• El Servicio de Prevención o los trabajadores designados para ocuparse de la prevención de riesgos.
4.9.a. Otros registros documentales
relativos al empresario
El empresario está obligado a consultar a los trabajadores o a sus representantes sobre distintos aspectos
relativos a los métodos de evaluación de las condiciones de trabajo, la planificación de la prevención, introducción de nuevos métodos de trabajo, elección de
equipos de trabajo y de protección, establecimiento de
controles periódicos, designación de trabajadores encargados de las actividades de prevención (ver anexo
4.9.1 y anexo 4.9.4.), designación de un servicio de
prevención externo (ver anexo 4.9.2.), designación de
los trabajadores encargados de las medidas de emergencia (ver anexo 4.9.3. y anexo 4.9.5), etc.
Conviene dejar constancia documental de forma
72
clara y sistematizada de todas las consultas realizadas
y de las respuestas emitidas con las fechas correspondientes para poder justificar esta obligación.
El empresario también está obligado a informar por
escrito a los trabajadores de los riesgos, generales y específicos, para la seguridad y salud que existan en el
trabajo, las medidas y actividades de protección y prevención aplicables a los mismos y las medidas de
emergencia adoptadas.
Debe indicarse de forma clara la información dada,
y las personas que la recibieron, con fecha y firma de
estas últimas.
Igualmente está obligado a informar a los trabajadores designados para ocuparse de las actividades de
prevención y protección de la incorporación de trabajadores contratados por empresas de trabajo temporal
(ver anexo 4.9.6.).
En cuanto al empleo de equipos de trabajo y otros
medios de protección se reflejará por escrito las normas de seguridad que regulan su utilización, mantenimiento y reparación. Esta documentación se entregará
a todos los trabajadores.
La formación de los trabajadores en materia de seguridad e higiene es una obligación empresarial que
también debe ser recogida documentalmente.
Esta documentación debe recopilar aspectos como
los contenidos impartidos, la metodología, el horario
de impartición, la duración total de la acción formativa y un registro de asistentes con fecha y firma.
■ Anexo 4.9.1. Escrito solicitando consulta sobre la designación de los trabajadores
encargados de la actividad preventiva
Sr. D. .....(Trabajadores).........
En ...................., a ......... de .......................... de ......
Muy Sres. Nuestros:
De acuerdo con lo dispuesto en el artículo 33.1.b) de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, con la debida
antelación se eleva consulta sobre la propuesta relativa a la designación de los trabajadores encargados de la actividad preventiva.
Los trabajadores que se han previsto para tal cometido en atención a su capacidad y preparación son los siguientes:
Sr. D. ......(Nombre, Apellidos y Cargo en la Empresa)....
Sr. D. ......(Nombre, Apellidos y Cargo en la Empresa)....
Sr. D. ......(Nombre, Apellidos y Cargo en la Empresa)....
Se ruega que si tuviesen alguna observación al respecto, emitan el informe correspondiente, antes del plazo de
15 días, al efecto de adoptar una decisión definitiva.
Atentamente,
Por la empresa
Por los trabajadores
Fdo....................................
Fdo...................................
Fecha:
73
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
■ Anexo 4.9.2. Escrito solicitando consulta sobre el recurso a un servicio de
prevención externo
Sr. D. .....(Trabajadores).........
En ...................., a ......... de .......................... de ......
Muy Sres. Nuestros:
De acuerdo con lo dispuesto en el artículo 33.1.b) de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, con la debida
antelación se eleva consulta sobre la propuesta que se adjunta (1), relativa al recurso de un servicio de prevención
externo para llevar a cabo la actividad preventiva.
Se ruega que si tuviesen alguna observación al respecto, emitan el informe correspondiente, antes del plazo de
15 días, al efecto de adoptar una decisión definitiva.
Atentamente,
Por la empresa
Por los trabajadores
Fdo....................................
Fdo...................................
Fecha
(1) En la propuesta debe constar la denominación del servicio/s de prevención externo/s, las actividades preventivas encomendadas y el correspondiente proyecto de protocolo/s.
74
■ Anexo 4.9.3. Escrito solicitando consulta sobre la designación de los trabajadores
encargados de las medidas de emergencia
Sr. D. .....(Trabajadores).........
En ...................., a ......... de .......................... de ......
Muy Sres. Nuestros:
De acuerdo con lo dispuesto en el artículo 33.1.c) de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, con la debida
antelación se eleva consulta sobre la propuesta relativa a la designación de los trabajadores encargados de las medidas de emergencia.
Los trabajadores que se han previsto para la realización de tal cometido en atención a su capacidad y preparación son los siguientes:
Sr. D. ......(Nombre, Apellidos y Cargo en la Empresa)....
Sr. D. ......(Nombre, Apellidos y Cargo en la Empresa)....
Sr. D. ......(Nombre, Apellidos y Cargo en la Empresa)....
Se ruega que si tuviesen alguna observación al respecto, emitan el informe correspondiente, antes del plazo de
15 días, al efecto de adoptar una decisión definitiva.
Atentamente,
Por la empresa
Por los trabajadores
Fdo....................................
Fdo...................................
Fecha
75
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
■ Anexo 4.9.4. Designación de los trabajadores encargados de la actividad preventiva
Sr. D. .....(Trabajador).........
En ...................., a ......... de .......................... de ......
Muy Sr. Nuestro:
Por la presente le comunico que, en cumplimiento del artículo 30.1. de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, ha sido usted designado trabajador encargado de la actividad preventiva en el ámbito de la empresa, previa
consulta efectuada a lso representantes de los trabajadores.
Las funciones a desempeñar, en consonancia con su capacidad, los medios disponibles y el tiempo necesario
para ello, de acuerdo con las previsiones del artículo 10 y siguientes del Reglamento de los Servicios de Prevención, son las siguientes:
• .....................................................................................................................................
• .....................................................................................................................................
• .....................................................................................................................................
Atentamente,
Por la empresa
Por el trabajador designado
Fdo....................................
Fdo...................................
Fecha
76
■ Anexo 4.9.5. Designación de los trabajadores encargados de las medidas de
emergencia
Sr. D. .....(Trabajador).........
En ...................., a ......... de .......................... de ......
Muy Sr. Nuestro:
Por la presente le comunico que, en cumplimiento de lo dispuesto en el artículo 20 de la Ley de Prevención de
Riesgos Laborales, ha sido usted designado como trabajador encargado de las medidas de emergencia, previa consulta a los representantes de los trabajadores.
En un futuro próximo se le proporcionará más formación e información al respecto, así como el material adecuado.
Atentamente,
Por la empresa
Por el trabajador designado
Fdo....................................
Fdo...................................
Fecha
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
■ Anexo 4.9.6. Informe dirigido a los trabajadores designados, delegados de
prevención o representantes de los trabajadores sobre la adscripción de
trabajadores puestos a disposición por empresas de trabajo temporal
En ...................., a ......... de .......................... de ......
Muy Sres. Nuestros:
En cumplimiento de lo indicado en el artículo 28 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales y el concordante artículo 4 del Real Decreto 216/1999 sobre disposiciones mínimas de seguridad y salud en el trabajo en el ámbito de las empresas de trabajo temporal, les comunicamos que con fecha ........................... se incorporarán ..(1)..
trabajadores de la empresa de trabajo temporal ......(2)....... a nuestras instalaciones. El trabajador/es cedidos y los
puestos de trabajo que va a desempeñar cada uno son los siguientes:
Sr. D. ......(Nombre, Apellidos y Puesto de trabajo)....
Sr. D. ......(Nombre, Apellidos y Puesto de trabajo)....
Sr. D. ......(Nombre, Apellidos y Puesto de trabajo)....
Con el ruego de que se acuse recibo de este escrito,
Atentamente,
Por la empresa
Trabajadores designados
Delegados de Prevención
Representantes de los trabajadores
Fdo....................................
(1) Indicar el número de trabajadores que se incorporan
(2) Indicar la razón social de la empresa de trabajo temporal
78
Fdo...................................
Fecha
■ Anexo 4.9.7. Entrega de equipos de protección individual
Sr. D. .....(Trabajador).........
En ...................., a ......... de .......................... de ......
Muy Sr. Nuestro:
Con la presente le hago entrega, en cumplimiento del artículo 3.c) del Real Decreto sobre disposiciones mínimas de seguridad y salud relativas a la utilización por los trabajadores de equipos de protección individual, de los
siguientes equipos de protección individual, y de sus correspondientes Manuales de Instrucciones, necesarios para
el desempeño en condiciones mínimas de seguridad de su puesto de trabajo:
1.
2.
3.
4.
.....................................................................................................................................
.....................................................................................................................................
.....................................................................................................................................
.....................................................................................................................................
Estos equipos se encuentran en buen estado de conservación y disponen del marcado CE de conformidad según
indica el sello que aparece en ellos de forma visible.
Igualmente le comunico que queda Ud. obligado a la utilización y cuidado de los mismos, debiendo informar
a su superior o encargado en caso de pérdida o deterioro.
Atentamente,
Por la empresa
Por el trabajador
Fdo....................................
Fdo...................................
Fecha
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PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
4.10. Comunicación y promoción
La comunicación interna de las empresas es un factor muy importante dentro de su estructura organizativa, debido a que muchos problemas se generan por
falta de comunicación o por una comunicación ineficaz que puede provocar falsos rumores, información
poco transparente, malos entendidos, falsas expectativas, etc. La Dirección de la empresa debe definir un
proceso de comunicación acorde con las necesidades
existentes y que transmita los valores y la política de
la organización. Con el objetivo de desarrollar un sistema de gestión de la prevención se requiere una comunicación efectiva y eficaz entre todos los agentes
que intervienen y, sobretodo transmitir toda la información relativa a la seguridad y salud ya que, para
conseguir un alto grado de participación, es necesario
que los agentes estén informados previamente. La interacción que puede crearse entre los diferentes agentes
puede provocar una sinergia positiva en la empresa
porque demuestra el grado de transparencia y confianza depositados entre ellos.
En prevención de riesgos laborales disponemos de
diversos emisores de información que, a su vez, son
receptores de la misma:
EMISORES
■
■
■
■
■
■
80
Dirección
Mandos
CANALES
Operarios
Servicio de Prevención
Comité de S y S
Delegados de Prevención
RECEPTORES
■
■
■
■
■
■
Delegados de Prevención
Comité de S y S
Servicio de Prevención
Operarios
Mandos
Dirección
Para hacer efectivo el proceso de comunicación, y
además poder promocionar la seguridad y salud en el
trabajo, existen diversos canales al alcance de una empresa que ésta puede adoptar en función de sus necesidades. Algunos son:
• Reuniones de grupo, con el objetivo de intercambiar información, analizar situaciones y proponer
mejoras.
• Comunicados de Riesgo, como mecanismo de
prevención accidentes.
• Entrevistas personales.
• Charlas informales, reuniones, entrevistas, etc.
• Tablones de anuncios, los cuales deben ponerse
siempre en una posición estratégica, es decir, en
aquellos lugares donde los trabajadores puedan
detenerse a leer (máquina de café, entrada y salida de la empresa, el taller o los vestuarios). La
información reflejada en los tablones debe ser
cambiada con cierta frecuencia para llamar la
atención de su público. No debemos convertir el
tablón en un paisaje habitual.
• E-mails.
• Vídeos.
• Nóminas: se adjunta a la nómina de cada mes,
ya sea en su parte posterior o en una hoja distinta, un mensaje de promoción o recordatorio sobre la seguridad y salud en el trabajo.
5
Plan de emergencia
El Plan de Emergencia comprende la organización
de los medios humanos y materiales disponibles para
la prevención del riesgo de incendio o de cualquier
otro equivalente (inundaciones, etc.) y garantizar la
evacuación inmediata de las personas presentes en el
centro de trabajo.
Es un documento que debe ser elaborado por escrito por los servicios de prevención o técnicos especializados en prevención con la colaboración de la dirección de la empresa y de los trabajadores. La empresa
debe ser consciente de que un plan de emergencia no
es un documento estático, sino que debe ser actualizado periódicamente con el objetivo de adaptarlo a los
cambios de la empresa, tanto de estructura como de
personal.
Debe ser práctico y accesible porque de nada sirve
un documento técnico y extenso si quien debe interpretarlo y hacerlo funcionar no es capaz de entenderlo.
Es importante también que exista coordinación con
los servicios de la Administración y preparar la posible
intervención de los recursos y medios exteriores en caso de emergencia: bomberos, ambulancia, policía, salvamento.
El Plan de Emergencia consta de 4 partes o documentos:
• Evaluación del Riesgo
• Medios de Protección
• Plan de Emergencia
• Implantación
5.1. Evaluación del riesgo
En este documento se enuncian y valoran las condiciones de riesgo de los edificios en relación con los
medios disponibles.
Se tiene que realizar un análisis de los factores que
influyen sobre el riesgo potencial, describiendo:
• El emplazamiento del establecimiento: accesos,
ancho de las vías públicas, etc.
81
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
• La situación de los medios exteriores de protección: hidrantes, fuentes de abastecimiento, etc.
• Las características constructivas y condiciones
generales de diseño arquitectónico: vías de evacuación, sectores de incendio, resistencia al fuego, etc.
• Las actividades que se desarrollan en cada planta
del edificio, indicando ubicación y superficies
ocupadas por las mismas.
• Ubicación y características de las instalaciones y
servicios: instalación eléctrica, aire acondicionado, etc.
• El número máximo de personas a evacuar en cada área.
Posteriormente se evalúa el riesgo de incendio de
cada una de las áreas que ocupan actividades en “alto”, “medio” o “bajo”, según su riesgo intrínseco en
función de la ocupación de personas/m2, superficie de
la actividad y altura de los edificios. Se evalúan también las condiciones de evacuación de cada planta del
edificio en “adecuadas” o “inadecuadas”, según sean
acordes o no a las condiciones de evacuación que indica la Norma Básica de Edificación (NBE-CPI/96 Condiciones de protección contra incendios de los edificios).
Por último, la información recopilada y evaluada
del riesgo y condiciones de evacuación se grafía en
planos de situación y emplazamiento.
5.2. Medios de protección
En este documento se determinan los medios materiales y humanos disponibles y precisos, se definen los
equipos y sus funciones y otros datos de interés para
garantizar la prevención de riesgos y el control inicial
de las emergencias que ocurran.
Es necesario realizar un inventario de los medios
técnicos de protección de los que se disponga, describiendo las instalaciones de detección, alarma, extinción de incendios y alumbrado de emergencia, y de
los medios humanos disponibles.
Se realizan planos del edificio por plantas, donde
se localizan los distintos medios de protección, las vías de evacuación, sistemas de alarma y de detección,
almacenes de materias inflamables, otros locales de
especial peligrosidad y número de ocupantes.
Las vías y salidas de evacuación han de desembocar lo más directamente posible en el exterior o en
una zona de seguridad y no deben estar obstruidas por
ningún objeto de manera que puedan utilizarse sin trabas en cualquier momento.
Las puertas de emergencia abrirán hacia el exterior
y no deben cerrarse con llave para que cualquier persona pueda abrirlas fácil e inmediatamente. Están
prohibidas las puertas de emergencia correderas o giratorias.
Las puertas, vías y salidas específicas de evacuación deben estar convenientemente señalizadas y con-
82
tarán con la instalación de alumbrado de emergencia
que garantice una iluminación suficiente para permitir
la evacuación en caso de emergencia.
5.3. Plan de emergencia
Este documento contempla las diferentes hipótesis
de emergencias y los planes de actuación para cada
una de ellas así como las condiciones de uso y mantenimiento de las instalaciones.
Debe definir la secuencia de acciones a realizar
para el control inicial de las emergencias que puedan
producirse, planificando la organización humana con
los medios necesarios que lo posibiliten.
5.4. Implantación
Consiste en la divulgación general del Plan de
Emergencia, la formación específica del personal incorporado al mismo, la realización de simulacros y su
revisión para actualizarlo cuando proceda.
El responsable de aplicar el Plan es el titular de la
actividad o establecimiento y tanto el personal directivo, técnico y mandos intermedios como los trabajadores están obligados a participar en él.
Todas las instalaciones, tanto las de servicios como
las de protección de incendios deben someterse a las
condiciones de uso y mantenimiento establecidas en
la Norma Básica de Edificación vigente.
En los accesos del edificio, para facilitar la labor de
los servicios externos, permanecerá guardado en un
armario con el rótulo de “Uso exclusivo de bomberos”, un juego de planos del edificio y de sus plantas y
formas de entrada.
Se tienen que llevar a cabo reuniones informativas
con todos los empleados del centro de trabajo a quienes se explicará el Plan de Emergencia, entregando un
folleto con las instrucciones generales. Igualmente la
formación de los miembros y responsables de los equipos de emergencia es primordial por lo que, al menos
una vez al año, se debe organizar un curso de formación y adiestramiento dirigido a tales personas.
También se tienen que realizar simulacros de emergencia general, como mínimo una vez al año, tendentes a deducir conclusiones para mejorar el Plan.
Es necesario realizar programas que ordenen en el
tiempo las distintas actividades para lograr llevar a cabo la implantación del Plan de Emergencia y conseguir
un adecuado mantenimiento de las distintas instalaciones de detección, alarma y extinción de incendios, así
como otras instalaciones susceptibles de provocar incendio.
83
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6
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
Aspectos legales
La responsabilidad derivada de acciones u omisiones tipificadas como infracciones, así como sus consecuencias, es decir, la correspondiente sanción, se encuentra regulada en la Ley 31/1995, de 8 de noviembre, de Prevención de Riesgos Laborales, y
principalmente por el Real Decreto Legislativo 5/2000,
de 4 de agosto por el que se aprueba el Texto Refundido de la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social.
Son infracciones en materia de prevención de riesActuación
Incumplimiento administrativo
84
gos laborales las acciones u omisiones de los empresarios, las de las entidades que actúen como servicios de
prevención ajenos, las auditoras o formativas en dicha
materia, así como las de los promotores y propietarios
de la obra o los trabajadores por cuenta propia, que
incumplan las normas legales, reglamentarias y cláusulas normativas de los convenios colectivos en materia
de seguridad y salud laboral sujetas a responsabilidad
conforme a lo establecido en el Texto Refundido de la
Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social
(RD Legislativo 5/2000).
Responsable
Empresario (persona física o jurídica)
Responsabilidad
Administrativa
Infracción Civil
Persona jurídica y cualquier persona Responsabilidad Civil
física integrada en la organización
Extracontractual
empresarial
Derivada de delito.
Infracción Penal
Sólo personas físicas integradas en la Responsabilidad Penal: Delitos y/o
organización empresarial
faltas
6.1. Responsabilidades del
empresario
El incumplimiento por los empresarios de sus obligaciones en materia de prevención de riesgos laborales, da lugar a responsabilidad administrativa, así como, en su caso, a responsabilidades penales y civiles
por los daños y perjuicios que pudieran derivarse de
dichos incumplimientos, de conformidad con lo dispuesto en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales
(31/1995) y en el Texto Refundido de la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social (RD Legislativo 5/2000).
Para comprender el alcance de la normativa en la
materia, resulta imprescindible estudiar, de forma diferenciada, las diferentes responsabilidades en las que
puede incurrir el empresario como consecuencia del
incumplimiento de las obligaciones que le impone la
Ley de Prevención de Riesgos Laborales (31/1995) así
como el Texto Refundido de la Ley sobre Infracciones
y Sanciones en el Orden Social (RD Legislativo
5/2000) y demás normas de concordante y pertinente
aplicación.
6.1.a. Responsabilidad administrativa
La Administración fiscaliza y controla el cumplimiento de la normativa, el contenido de las responsabilidades y el procedimiento de éstas a los sujetos responsables.
La Ley determina quiénes son los sujetos autores de
las infracciones laborales, destacando en el campo
que nos ocupa los siguientes:
a) Empresarios.
b) Entidades que actúan como servicios de
prevención.
c) Promotores y propietarios de obras.
d) Trabajadores por cuenta propia.
a) Empresarios. El empresario está obligado a satisfacer el derecho de los trabajadores a una protección
eficaz en materia de seguridad y salud en el trabajo.
En cumplimiento del deber de protección, tiene que
garantizar el cumplimiento de lo establecido en la normativa sobre prevención de riesgos laborales (art.
14.2, art. 14.3 LPRL). Por lo tanto, podemos concluir
que es el empresario o empleador el sujeto responsable de los incumplimientos de la normativa de prevención de riesgos laborales que afectan a los trabajadores.
b) Entidades que actúan como servicios de prevención. Son sujetos responsables de las infracciones a la
normativa de prevención de riesgos laborales, las entidades creadas para la aplicación de la misma, es decir,
las entidades auditoras y las entidades formativas en
dicha materia y ajenas a las empresas.
c) Promotores y propietarios de obras. El promotor
queda específicamente calificado como sujeto responsable de infracciones en norma de rango legal, definido en el reglamento de Disposiciones Mínimas de Seguridad y Salud en las obras de construcción, como
85
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
cualquier persona física o jurídica por cuya cuenta se
realice una obra. Los propietarios de obra son sujeto
específico responsable de las obligaciones establecidas en prevención de riesgos laborales.
d) Trabajadores por cuenta propia. El trabajador
por cuenta propia o autónomo también es sujeto responsable, tras la modificación de la Ley, a partir del
año 1999.
6.1.a.1. Infracciones administrativas
No todos los incumplimientos de la normativa de
prevención de riesgos en sentido amplio, constituyen
infracción merecedora de sanción sino los ajustados a
la definición, es decir, cuando se cumplan los siguientes requisitos:
a) Tipificados como infracción en la normativa de
Prevención de Riesgos Laborales.
b) Tras la instrucción del expediente sancionador, a
propuesta de la Inspección de Trabajo y Seguridad
Social.
c) Conforme al procedimiento establecido en la
Ley de Infracciones y Sanciones en el Orden Social.
d) Sin perjuicio de las responsabilidades de otro orden que puedan concurrir.
6.1.a.2. Tipificación de las infracciones
El Texto Refundido de la Ley sobre Infracciones y
Sanciones en el Orden Social (RD Legislativo 5/2000)
86
califica las infracciones en leves, graves y muy graves
(art. 11 y ss.) en atención a la peligrosidad de las actividades desarrolladas en la empresa o centro de trabajo, el carácter permanente o transitorio de los riesgos,
la gravedad de los daños producidos o que puedan
producirse, el número de trabajadores afectados, el incumplimiento de advertencias y requerimientos de la
Inspección de Trabajo, las medidas de protección individual o colectiva adoptadas por el empresario y las
instrucciones impartidas por éste en materia de prevención de riesgos laborales.
No debe pasar desapercibido que en múltiples supuestos, pero no en todos, la actividad de instalación
de sistemas de telecomunicación (máxime cuando una
misma empresa desarrolla otras actividades como instalaciones eléctricas, sistemas de detección de incendios, etc.), se encuadra en el anexo I del Reglamento
de los Servicios de Prevención (RD 39/1997), y en
consecuencia, se califica como una actividad de especial peligrosidad. (Se incluyen en este anexo las actividades en obras de construcción).
Son infracciones leves:
Materias
Infracciones leves
Limpieza
-Falta de limpieza del centro de trabajo, siempre que ello no derive en riesgo grave.
Accidente de trabajo y enfermedades profesionales leves
-Falta de notificación en tiempo y forma.
Apertura, sin riesgos especiales.
-No comunicar a la Autoridad Laboral la apertura del centro de trabajo o la
reanudación de la actividad.
-Consignación inexacta de los datos que se exigen y constan en el impreso.
Obligaciones formales.
-Incumplimiento de obligaciones de carácter formal o documental, siempre
que no estén tipificadas como infracciones graves o muy graves.
Son infracciones graves:
Materias
Infracciones graves
Evaluación de la normativa.
- No efectuar evaluaciones de riesgos.
- No efectuar en su caso controles periódicos de las condiciones de trabajo.
- No tomar las medidas necesarias a la vista del resultado de las evaluaciones.
Controles de salud según
la normativa
- Incumplimiento de la obligación de hacer reconocimientos médicos y
pruebas de vigilancia periódica de la salud.
- No comunicar a los trabajadores afectados el resultado de los controles
de salud.
Accidentes de trabajo y
enfermedades profesionales graves,
muy graves y mortales
- Falta de notificación oficial en tiempo y forma.
- Falta de investigación cuando se hayan producido daños a la salud de
los trabajadores .
- Falta de investigación cuando haya indicios de que las medidas preventiva
sean insuficientes.
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88
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
Materias
Infracciones graves
Registro y archivo
- Falta de registro y archivo de los datos sobre la evaluación de los riesgos,
la vigilancia de la salud y/o las medidas de protección y prevención.
Apertura, con riesgos especiales
- No comunicar a la Autoridad Laboral la apertura del centro de trabajo
o la reanudación de la actividad.
- Consignación inexacta de los datos que se exigen y constan en el impreso.
Construcción
- Incumplimiento de la obligación de elaborar el plan específico de seguridad
e higiene en los proyectos de edificación y obras públicas.
- Incumplimiento de dicha obligación alterando el volumen de obra o el
número de trabajadores en fraude de Ley.
Puestos incompatibles.
Riesgo grave.
- La adscripción de trabajadores a determinados puestos de trabajo cuyas
condiciones son incompatibles con sus características personales, siempre
que de ello se derive riesgo grave.
- La adscripción efectuada sin tener en cuenta los estados o situaciones
transitorias de los trabajadores que no respondan a las exigencias psicofísicas
de los puestos de trabajo, siempre que de ello se derive riesgo grave.
- Destinar a trabajadores a determinadas tareas sin tomar en consideración
las capacidades profesionales de los mismos en materia de seguridad y
salud laboral, siempre que de ello se derive riesgo grave.
Formación e información
- Incumplimiento de las obligaciones de formación e información acerca
de los riesgos detectados y de las medidas preventivas aplicables.
Límites de exposición.
Riesgo grave.
- La superación de los límites de exposición a agentes nocivos que, de
acuerdo con la normativa, originen riesgo de daños graves para la salud
de los trabajadores.
- Sin adoptar las medidas preventivas adecuadas a tal caso.
Materias
Infracciones graves
Medidas de Emergencia.
- No determinar las posibles situaciones de emergencia.
- No adoptar las medidas necesarias en materia de primeros auxilios, lucha
contra incendios y evacuación de los trabajadores.
- No designar el personal encargado de poner en práctica tales medidas.
Información, consulta y
participación.
- Incumplimiento de los derechos de información, consulta y participación
reconocidos en la normativa vigente sobre prevención de riesgos laborales.
Trabajadores designados para
tareas de prevención
- No designar a los operarios encargados de realizar las tareas de prevención.
- No proporcionar la formación adecuada a los mismos.
- No proporcionar los medios adecuados para el desarrollo de sus funciones.
- No proporcionar información sobre la incorporación a la empresa de
trabajadores con contrato temporal o cedidos por empresas de trabajo
temporal.
Servicios de prevención
- No crear o concertar servicios de prevención cuando ello sea preceptivo.
- No dotar de la formación adecuada a los integrantes del servicio de
prevención autónomo.
- No facilitar los medios adecuados.
- No proporcionar información sobre la incorporación a la empresa de
trabajadores temporales o cedidos por empresas de trabajo temporal.
- No facilitar el acceso a la información y documentación sobre los riesgos
y su evaluación, las medidas de prevención y protección, las medidas de
emergencia, los resultados de los controles de las condiciones de trabajo,
los resultados de los controles de salud y relación de accidentes de trabajo
y enfermedades profesionales.
- No someter el sistema de prevención a una auditoría o evaluación externa,
cuando se haya optado por un servicio de prevención autónomo.
Coordinación
- Incumplimiento del empresario de la labor de coordinación de las
actividades preventivas cuando desarrolle tareas con otros empresarios
en un mismo centro de trabajo.
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DE
DE
RIESGOS LABORALES
Materias
Infracciones graves
Coordinación
- Incumplimiento del trabajador por cuenta propia de sus obligaciones de
cooperación y de colaboración.
Titular del centro de trabajo y/o
promotor
- No informar el empresario titular del centro de trabajo o el promotor a
otros empresarios que realizan actividades en su propio centro, acerca
de los riesgos, de las medidas de protección, prevención y emergencia.
Riesgos graves
Planificación
90
PREVENCIÓN
- Incumplimiento de la normativa sobre prevención de riesgos laborales
cuando ello cree un riesgo grave para la integridad física de los trabajadores
en materia de:
• Comunicación a la Autoridad Laboral sobre el uso de sustancias,
agentes físicos, químicos o biológicos o procesos, cuando legalmente
así se determine.
• Diseño, elección, instalación, disposición y mantenimiento de los
lugares de trabajo, herramientas, maquinaria y equipos.
• Prohibiciones y limitaciones relativas a operaciones, procesos y
agentes químicos, físicos y biológicos.
• Limitación del número de trabajadores que deben de quedar
expuestos a determinados agentes físicos, químicos y biológicos.
• Utilización de modalidades determinadas de muestreo, medición
y evaluación de resultados.
• Medidas de protección colectiva e individual.
• Señalización de seguridad y etiquetado y envasado de sustancias
peligrosas si se manipulan y emplean en el proceso productivo.
• Servicios y medidas de higiene personal.
• Registro de los niveles de exposición a agentes físicos, químicos y
biológicos, lista de trabajadores expuestos y expedientes médicos.
- Carencia de la planificación de la actividad preventiva que se derive
como necesaria de la evaluación de los riesgos.
Materias
Infracciones graves
Servicios de prevención ajenos,
auditoras y entidades formativas
- Proporcionar datos a la autoridad laboral de forma o contenido inexacto.
- La falta de comunicación a la autoridad laboral de las modificaciones en
las condiciones de acreditación o autorización.
- Restantes incumplimientos de los Servicios de Prevención ajenos, respecto
de las funciones que se deriven del correspondiente concierto.
Limpieza
- Falta de limpieza cuando sea habitual o cuando de ello se deriven riesgos
para la integridad y salud de los trabajadores.
Son infracciones muy graves:
Materias
Infracciones muy graves
Trabajadores especialmente
sensibles
- Incumplimiento de las normas específicas sobre protección de la salud
de las trabajadoras durante los periodos de embarazo y lactancia.
- Incumplimiento de las normas específicas sobre protección de la seguridad
y salud de los menores.
Paralización y suspensión de
trabajos por al Inspección de
Trabajo
- Negativa a la paralización y a la suspensión de forma inmediata de los
trabajos que se realicen contraviniendo la normativa vigente, a requerimiento
de la Inspección de Trabajo, y que a juicio de ésta impliquen riesgo grave
e inminente.
Puestos incompatibles.
Riesgo grave e inminente.
- La adscripción de trabajadores a determinados puestos de trabajo cuyas
condiciones son incompatibles con sus características personales, cuando
de ello se derive riesgo grave e inminente.
- La adscripción efectuada sin tener en cuenta estados o situaciones
transitorias que no respondan manifiestamente a las exigencias psicofísicas
de los puestos de trabajo, cuando de ello se derive riesgo grave e inminente.
- Destinar trabajadores a determinadas tareas sin tener en consideración
las capacidades de los mismos en materia de seguridad y salud laboral,
cuando de ello se derive riesgo grave e inminente.
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DE
PREVENCIÓN
Materias
Confidencialidad.
Límites de exposición.
Riesgo grave e inminente.
Paralización de la actividad por
los representantes de los
trabajadores.
92
DE
RIESGOS LABORALES
Infracciones muy graves
- Incumplimiento del deber de confidencialidad en el uso de los datos
relativos a la vigilancia de la salud.
- Superación de los límites de exposición a agentes nocivos que, de acuerdo
con la normativa vigente sobre prevención, origine riesgos para la salud,
sin adoptar las medidas preventivas adecuadas, cuando se trate de riesgo
grave e inminente.
- Obstaculizar por acción u omisión el ejercicio del derecho de los
representantes de los trabajadores para paralizar la actividad en las
situaciones de riesgo grave e inminente.
Coordinación
- Falta de colaboración y cooperación de los empresarios y los trabajadores
por cuenta propia, cuando se trate de actividades reglamentariamente
consideradas como peligrosas o con riesgos especiales.
Titular del centro de trabajo y/o
promotor.
- Falta de información a los otros empresarios sobre los riesgos, medidas
preventivas y de emergencia, cuando se trate de actividades
reglamentariamente consideradas como peligrosas o con riesgos especiales.
Servicios de prevención ajenos,
auditoras y entidades formativas.
- Ejercicio de la actividad sin la preceptiva autorización o acreditación.
- Mantenimiento de vinculaciones comerciales, financieras o de cualquier
otro tipo con las empresas auditadas o concertadas distintas a las que le
son propias.
- Certificar formación que no haya sido impartida por las entidades formativas.
6.1.a.3. Prescripción de las infracciones
Las infracciones leves prescriben al año, las graves
a los tres años y las muy graves a los cinco años, contados desde la fecha de la infracción.
6.1.a.4. Sanciones
Las infracciones administrativas, tipificadas conforme al Texto Refundido de la Ley sobre Infracciones y
Sanciones en el Orden Social (RD Legislativo 5/2000),
son objeto de sanción, tras la instrucción del correspondiente procedimiento sancionador.
La CUANTÍA de las SANCIONES ADMINISTRATIVAS derivadas de infracciones en materia de prevención de riesgos laborales, oscila ENTRE 30,05 euros y
601.012,10 euros. (Al margen de las responsabilidades
Infracción
Leve
Graves
Muy Graves
Grado
civiles y penales que puedan corresponder).
Además de las sanciones reflejadas en el cuadro
anterior, las empresas que incurran en infracción de la
normativa sobre prevención de riesgos laborales también pueden sufrir las siguientes sanciones:
a) Recargo de prestaciones económicas, junto con
la prohibición de contratar con la Administración.
b) Recargo en la cotización a la Seguridad Social,
así como suspensión o cierre de la actividad.
c) Abono de prestaciones por falta de reconocimientos médicos.
Sin perjuicio de lo anterior, en caso de peligro inminente para la salud o seguridad de los trabajadores,
Cuantía de la sanción (multa)
Mínimo
30,05 a 300,51 €
Medio
300,51 a 601,01 €
Máximo
601,02 a 1.502,53 €
Mínimo
1.502,54 a 6.010,12 €
Medio
6.010,13 a 15.025,30 €
Máximo
15.025,31 a 30.050,61€
Mínimo
30.050,61 a 120.202,42 €
Medio
120.202,43 a 300.506,05 €
Máximo
300.506,06 a 601.012,10 €
93
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DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
los Inspectores de Trabajo y Seguridad Social pueden
adoptar como medida cautelar, la paralización inmediata de los trabajos o tareas por inobservancia de la
normativa sobre prevención de riesgos laborales.
fiquen los hechos como delito; o penas de multa de
quince días a dos meses para el supuesto donde se califiquen como falta).
6.1.b. Responsabilidad penal
6.1.c. Responsabilidad civil
La infracción de la normativa sobre prevención de
riesgos laborales puede generar responsabilidad penal,
tal y como se expone a continuación:
Cuando se abre un procedimiento penal, lo realmente transcendente es la indemnización que el empresario se ve obligado a satisfacer como consecuencia directa del delito o de la falta.
a) El vigente Código Penal (arts. 316 y 317) dispone
que los que, cometiendo infracción de las Normas de
Prevención de Riesgos Laborales, y estando legalmente
obligados, no faciliten los medios necesarios para que
los trabajadores desempeñen su actividad con las medidas de seguridad e higiene adecuadas, de forma que
pongan en peligro grave su vida, salud o integridad física, serán castigados con penas de prisión de seis meses a tres años y multa de seis a doce meses. (En la
práctica la multa oscila entre los 216,36 euros y los
108.182,17 euros).
b) En algunos supuestos ha llegado a calificarse la
muerte de un operario como homicidio por imprudencia, siendo el empresario castigado como reo de homicidio imprudente con la pena de prisión de uno a cuatro años, pudiendo incluso llevar aparejada la pena de
inhabilitación especial para el ejercicio de la profesión, oficio o cargo, por período de tres a seis años.
c) De las lesiones que puede sufrir el operario,
también puede resultar responsable el empresario, variando la pena en atención a la gravedad de las lesiones sufridas. (Desde arresto de siete fines de semana a
prisión de dos años, para el supuesto en el que se cali-
94
Esta indemnización en algunas ocasiones alcanza
un elevado volumen económico, debiendo comprender la reparación del daño sufrido e indemnizar por
los perjuicios materiales y morales.
En este punto, se recomienda que el seguro de responsabilidad civil que la empresa instaladora de sistemas de telecomunicación está obligado a concertar
como requisito imprescindible de acceso al Registro
de Instaladores de Telecomunicación, abarque, además
de la responsabilidad civil obligatoria, la llamada responsabilidad civil patronal. Esta recomendación encuentra su justificación en que, de no ser así, los empleados de la empresa no se encontrarían encuadrados
dentro del campo de cobertura del seguro de responsabilidad civil genérico, puesto que éste exclusivamente abarca la responsabilidad civil de la empresa frente
a terceros, pero no considera a los trabajadores de la
empresa como terceras personas. Si el seguro de responsabilidad civil tiene entre sus coberturas la responsabilidad civil patronal, los trabajadores de la empresa
son considerados como terceras personas.
Además de la vía penal, el perjudicado puede optar por exigir la responsabilidad civil directamente ante la Jurisdicción Civil. (Responsabilidad contractual y
responsabilidad extracontractual).
6.1.d. Concurrencia de sanciones
Cuando determinados hechos puedan ser constitutivos de infracción administrativa y penal al mismo
tiempo, procede la abstención del procedimiento sancionador administrativo siempre y cuando no exista
pronunciamiento en materia penal; es decir, no se permite la existencia de procedimientos simultáneos en el
orden penal y administrativo.
Nuestra legislación (principio “non bis in ídem”)
prohíbe que el mismo hecho pueda ser objeto de sanción penal y administrativa en los casos en los que se
aprecie identidad de sujeto, hecho y fundamento. Ahora bien, en el caso de empresas de pequeña dimensión, como por ejemplo una Sociedad Limitada, en la
que los accionistas son marido y mujer, siendo el marido el administrador, cabe la posibilidad de que se
produzca la siguiente situación en el supuesto de infracción de la normativa de Prevención de Riesgos Laborales cuando se ha producido lesión o fallecimiento
del operario: sanción penal para la persona física responsable de la gestión y dirección de la empresa (en
este caso el administrador) y sanción administrativa
para la sociedad limitada, al margen de responsabilidades de orden civil (indemnizaciones por los daños y
perjuicios causados).
Siempre prevalece el orden penal, es decir, la apli-
cación de la normativa penal sobre la administrativa.
6.1.e. Ejemplo de responsabilidad del
empresario. (caso real)
Como consecuencia del incumplimiento de la normativa en materia de Prevención de Riesgos Laborales
(ausencia de medidas de protección adecuadas), un
operario de una empresa fallece por electrocución como consecuencia de contacto eléctrico accidental. A
la empresa a la que pertenecía el operario se le impusieron las siguientes sanciones:
a) Sanción de 33.055,67 euros. al considerarse los
hechos como infracción muy grave según acta de la
Inspección de Trabajo.
b) Sanción de 6.010,12 euros. impuesta por la Dirección General de Industria en aplicación de la Ley
General de Industria.
c) Recargo de Prestaciones a favor de la viuda e hijos de fallecido en la cuantía del 30%.
d) Multa de 1.442,43 euros. impuesta por el Juzgado de Instrucción competente, al apreciar que los hechos debían considerarse como una falta por imprudencia.
e) Indemnización a la viuda y a los dos hijos del
operario fallecido, en la cuantía de 141.237,84 euros.
La suma total que tuvo que afrontar el empresario
(una parte a título personal, es decir, sanciones que directamente recayeron sobre él como persona física responsable, y otras sobre la Sociedad Limitada de la que
era administrador) fue de 181.746,06 euros más un recargo de prestaciones del 30%.
95
M A N UA L P R Á C T I C O
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
6.2. Obligaciones de los
trabajadores
Los trabajadores también asumen obligaciones en
materia de seguridad y salud en el trabajo. Concretamente la Ley de Prevención de Riesgos laborales
(31/1995) establece que a cada trabajador le corresponde velar, según sus posibilidades y mediante el
cumplimiento de las medidas de prevención adoptadas, por su propia seguridad y salud en el trabajo y por
la de aquellas otras personas a las que pueda afectar
su actividad profesional a causa de sus actos y omisiones en el trabajo, de conformidad con su formación y
las instrucciones del empresario.
En particular, los trabajadores deberán:
a) Usar adecuadamente las máquinas, herramientas, sustancias peligrosas, equipos de transporte y,
en general, cualquier otro medio con el que desarrollen la actividad.
b) Utilizar correctamente los medios y equipos de
protección facilitados por el empresario, de acuerdo con las instrucciones recibidas de éste.
c) Utilizar correctamente y no dejar inoperativos
los dispositivos de seguridad existentes o que se
instalen en los medios relacionados con su actividad o en lo lugares de trabajo en los que ésta tenga
lugar.
d) Informar al superior jerárquico y a los trabajadores designados para realizar actividades de protección y de prevención o, en su caso, al Servicio de
Prevención, acerca de cualquier situación que, a su
juicio, y por motivos razonables, entrañe un riesgo
para la seguridad y salud de los trabajadores.
96
e) Contribuir al cumplimiento de las obligaciones
establecidas por la autoridad competente con el fin
de proteger la seguridad y la salud de los trabajadores en el lugar de trabajo.
f) Cooperar con el empresario para que éste pueda
garantizar unas condiciones de trabajo que sean
seguras y no entrañen riesgos para la seguridad y la
salud.
Como consecuencia del incumplimiento de las
normas de Seguridad y Salud Laboral, y por tanto de
las obligaciones anteriores, los trabajadores pueden
ser sancionados por la Dirección de la empresa, alegando ésta incumplimiento laboral. Igualmente pueden ser responsables desde el punto de vista penal y
patrimonial.
Sin embargo, a los trabajadores no se les puede imputar responsabilidad administrativa, así como tampoco asumen la responsabilidad de seguridad social, que
es exclusiva de la empresa.
6.2.a. Obligaciones colectivas
Los representantes de los trabajadores, a través del
delegado de personal, el comité de empresa, los representantes sindicales y, específicamente, por medio de
los delegados de prevención y el comité de seguridad
y salud, han de ejercer las siguientes funciones:
a) Una labor de vigilancia y control de las condiciones de seguridad e higiene en el desarrollo del trabajo en la empresa, lo que comprende:
- La inspección “in situ” de las condiciones de se-
guridad en los lugares de trabajo, equipos e instalaciones.
- La investigación de las circunstancias concretas
en que se han producido los accidentes de trabajo y
enfermedades profesionales.
- La exigencia al empresario de tomar las medidas
correctoras pertinentes en caso necesario.
- La denuncia a los órganos administrativos competentes y, en particular, a la Inspección de Trabajo.
b) Confidencialidad y sigilo.
Sobre la información recibida en el ejercicio de sus
funciones preventivas, incluso después de haber dejado el cargo. Esta reserva se refiere tanto a los aspectos
económicos de la empresa como a los aspectos técnicos y nuevas tecnologías. Esto es consecuencia directa
del amplio derecho de información que tienen los representantes de los trabajadores.
6.3. Derechos de los
trabajadores
Los trabajadores tienen derecho a la integridad física, a una adecuada política de seguridad e higiene en
el trabajo y a una protección eficaz en esta materia,
así como el deber de observar las medidas de seguridad e higiene que se establezcan.
El empresario tiene el deber de garantizar la seguridad y la salud de los trabajadores a su servicio en todos los aspectos relacionados con el trabajo. Estos derechos y obligaciones correlativos a los deberes del
empresario se concretan en:
a) Consulta a los trabajadores.
Los trabajadores tienen derecho a ser consultados
en relación a la prevención de riesgos laborales.
Sobre este particular, cabe distinguir:
1°.- Ejercicio del derecho de consulta. Las consultas se llevan a cabo con los representantes de los trabajadores y, si esta representación no existe debe efectuarse directamente a los trabajadores. Por representación legal de los trabajadores en esta materia,
debemos considerar a los Delegados de Prevención, y
para el supuesto de que no haya representación especializada, la consulta se efectúa a la representación
unitaria y sindical, o en el caso de no existir ésta, la
consulta de efectúa directamente a los trabajadores.
2°.- Materias objeto de consulta. El empresario debe consultar a los trabajadores, con la debida antelación, cualquier acción que pueda tener efectos sustanciales sobre la seguridad y la salud de los trabajadores
y, específicamente, la adopción de las decisiones relativas a:
- La planificación y la organización del trabajo en
la empresa.
- Los riesgos que pueden presentarse por la introducción de nuevas tecnologías, la elección de equipos, la adecuación de las condiciones de trabajo y el
impacto de los factores ambientales.
- La organización y el desarrollo de las actividades
de protección y prevención.
- La designación de los trabajadores encargados de
las a actividades de prevención.
- La constitución, en su caso, del servicio de prevención propio o externo.
97
M A N UA L P R Á C T I C O
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
- La designación de los trabajadores encargados de
las medidas de emergencia.
- Los procedimientos de información y documentación relativos a los riesgos y a su evaluación, las medias correctoras, el control de las condiciones de trabajo y la vigilancia de la salud.
- El proyecto y la organización de la formación en
materia preventiva.
3°.- Forma de efectuar la consulta. Como aspectos
fundamentales cabe destacar:
- Debe ejercitarse con la debida antelación.
- Debe realizarse a través del representante legal
de los trabajadores y, en ausencia de éstos, a los trabajadores directamente.
- Aunque nada se dispone al efecto, es recomendable que tanto la petición del empresario como la respuesta de los trabajadores se documente por escrito.
- El registro debe contener la consulta que se practica, la fecha en la que se produce y la respuesta, si
existe.
b) Participación de los trabajadores.
El derecho de participación en materia de seguridad y salud en la empresa corresponde en general a
los trabajadores y, al igual que el derecho a ser consultados, se canaliza y ejercita a través de sus representantes, ya sea representación especializada o no,
quienes tienen la misión de defender los intereses de
aquellos en materia de Prevención de Riesgos Laborales.
Entre otras materias, los trabajadores pueden participar en las decisiones empresariales respecto a:
- la evaluación de riesgos.
98
- la planificación de medidas preventivas.
- la práctica de medidas de emergencia, evacuación y primeros auxilios.
También pueden presentar al empresario propuestas o medidas concretas para evitar o disminuir riesgos.
A través de la negociación colectiva es posible articular de manera diferente los instrumentos de participación de los trabajadores, incluso estableciendo ámbitos de actuación distintos a los propios del centro de
trabajo.
Respecto a las competencias, facultades y garantías
de los Delegados de Prevención y, en su caso del Comité de Seguridad y Salud, nos remitimos a cuanto se
ha expuesto con anterioridad.
7
Auditorías
Aquellas empresas que hayan optado por organizar
la actividad preventiva mediante la asunción personal
por el empresario, trabajador/es designado/s, o con un
servicio de prevención propio, están obligadas CADA
CINCO AÑOS, a someter su sistema de prevención a
una auditoría cuando, como consecuencia de la evaluación de los riesgos, tengan que desarrollar actividades preventivas para evitar o disminuir los riesgos derivados del trabajo. No hay que olvidar que la Autoridad
Laboral puede ordenar la repetición de una auditoría
cuando los datos de la siniestralidad o de otras circunstancias hagan necesaria una revisión para verificar los resultados de la misma.
Están exentas de la obligación de realizar auditorías las empresas con menos de seis trabajadores en las
que concurran todos y cada uno de los siguientes requisitos:
- Que las actividades no estén incluidas en el Anexo I del Reglamento de los Servicios de Prevención (RD 39/1997), entre las que se encuentran
las actividades en obras de construcción, con
riesgo de caída de altura y con riesgos eléctricos
en alta tensión.
- Que el empresario haya optado por la asunción
personal de las funciones preventivas o haya designado uno o más trabajadores para llevarlas a
cabo.
- Que la eficacia del sistema de prevención sea evidente por el limitado número de trabajadores y la
sencillez de las actividades preventivas.
- Que se cumplimente y se remita a la Autoridad
Laboral la notificación correspondiente (ver anexo 7).
Igualmente, existe para estas empresas una reserva
en favor de la Autoridad Laboral para requerir la realización de una auditoría en función de los datos de siniestralidad, de la peligrosidad de las actividades desarrolladas y de la inadecuación del sistema de prevención.
En cualquier caso, la auditoría debe llevarse a cabo
por una entidad externa especializada debidamente
acreditada por la Administración, sin olvidar que los
servicios de prevención ajenos no están autorizados a
realizar auditorías externas.
La finalidad de la auditoría es realizar una evaluación sistemática, documentada y objetiva del sistema
de prevención de la empresa, con un triple objetivo:
99
M A N UA L P R Á C T I C O
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
■ Anexo 7. Notificación sobre concurrencia de condiciones que no hacen necesario
recurrir a la auditoría del sistema de prevención de la empresa
Don...........................................................................................
en
calidad
de..............................................................................................................
de
la
empresa................................................... declara que cumple las condiciones establecidas en el artículo 29 del
Reglamento de Servicios de Prevención y en consecuencia, aporta junto a la presente declaración los datos que se
especifican a continuación, para su registro y consideración por la Autoridad Laboral competente:
Datos de la empresa:
De nueva creación
Ya existente
NIF:
Nombre o razón social:
CIF:
Domicilio Social:
Municipio:
Provincia:
Código Postal:
Teléfono:
Actividad económica:
Entidad gestora o colaboradora AT y EP:
Clase de centro de trabajo (taller, oficina, almacén):
Número de trabajadores:
Realizada la evaluación de riesgos con fecha:
Superficie construida (m2):
Datos relativos a la prevención de riesgos:
Riesgos existentes
Actividad preventiva procedente
(Lugar, fecha, firma y sello de la empresa)
100
• Comprobar cómo se ha realizado la evaluación
de riesgos inicial y periódica, analizar sus resultados y verificarlos en caso de duda.
• Comprobar que el tipo y planificación de las actividades preventivas se ajusta a lo dispuesto en
la normativa sobre riesgos específicos de aplicación considerando los resultados de la evaluación.
• Analizar la adecuación entre los procedimientos
y medios requeridos para realizar las actividades
preventivas y los recursos de los que dispone el
empresario.
Los resultados de la auditoría deben quedar reflejados en un informe que la empresa debe tener a disposición de la Autoridad Laboral y de los representantes
de los trabajadores.
101
M A N UA L P R Á C T I C O
8
DE
PREVENCIÓN
DE
RIESGOS LABORALES
Legislación de referencia
• Código Civil. Real Decreto de 24 de julio de
1889.
• Orden de 9 de marzo de 1971, por la que se
aprueba la Ordenanza General de Seguridad e
Higiene en el Trabajo.
• Decreto 2413/1973, de 20 de septiembre, por el
que se aprueba el Reglamento electrotécnico para baja tensión.
• Directiva del Consejo (89/391/CEE), de 12 de junio de 1989, relativa a la aplicación de medidas
para promover la mejora de la seguridad y de la
salud de los trabajadores en el trabajo.
• Ley 12/1992, de 16 de julio, de Industria.
• Real Decreto Legislativo 1/1994, de 20 de junio,
por el que se aprueba el Texto Refundido de la
Ley General de la Seguridad Social.
• Real Decreto 1/1995, de 24 de marzo, por el que
se aprueba el Texto Refundido de la Ley del Estatuto de los Trabajadores.
• Ley 31/1995, de 8 de noviembre, de Prevención
de Riesgos, Laborales.
• Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del
Código Penal.
102
• Real Decreto 39/1997, de 17 de enero, por el
que se aprueba el Reglamento de los Servicios de
Prevención.
• Real Decreto 485/1997, de 14 de abril, sobre disposiciones mínimas en materia de señalización
de seguridad y salud en el trabajo.
• Real Decreto 486/1997, de 14 de abril, por el
que se establecen las disposiciones mínimas de
seguridad y salud en los lugares de trabajo.
• Real Decreto 773/1997, de 30 de mayo, sobre
disposiciones mínimas de seguridad y salud relativas a la utilización por los trabajadores de equipos de protección individual.
• Real Decreto 1212/1997, de 18 de junio, por el
que se establecen las disposiciones mínimas de
seguridad y salud para la utilización de los equipos de trabajo.
• Real Decreto 1627/1997, de 24 de octubre, por
el que se establecen las disposiciones mínimas
de seguridad y salud en las obras de construcción.
• Ley 42/1997, de 14 de noviembre, Ordenadora
de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social.
• Real Decreto 216/1999, de 5 de febrero, sobre
disposiciones mínimas de seguridad y salud en el
trabajo en el ámbito de las empresas de trabajo
temporal.
• Orden Ministerial de 26 de Octubre de 1999, por
la que se aprueba el Reglamento Regulador de
las Infraestructuras Comunes en el interior de los
edificios y la actividad de instalación de equipos
y sistemas de telecomunicaciones, aprobado por
el Real Decreto 279/1999, de 22 de febrero.
• Real Decreto Legislativo 5/2000, de 4 de agosto,
por el que se aprueba el texto refundido de la
Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden
Social.
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