luchar contra LAS VARICES

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Luchar contra las
varices
La mala circulación sanguínea es una disfunción que muchas personas
desarrollan debido a una propensión genética hereditaria, pero en
cambio otras la ven aparecer a lo largo de los años debido a malos hábitos
físicos o alimenticios.
De estos trastornos circulatorios se pueden derivar infinidad de
enfermedades, pero existe una que mucha gente (y no sólo mujeres)
padece, las varices. Como veremos más adelante la mejor forma de
evitarlas es tomando medidas preventivas cuanto antes.
Existen varios tratamientos no agresivos para curar o mejorar el problema
de las venas varicosas pero en casos severos es importante consultar con
un médico especialista. Si las venas están rojizas o producen dolor se debe
buscar atención sanitaria.
POSIBLES CAUSAS
Muchas son las causas que pueden desencadenar en esta molesta patología la cual no sólo es desagradable por
antiestética, también (y es lo más importante) en lo referente a nuestra salud cardiovascular. Por ejemplo, un
exceso de peso puede generar un aumento de la presión sanguínea que sufren las piernas, evitando una buena
circulación, pues las venas de las extremidades inferiores se verán continuamente oprimidas pudiéndose debilitar,
hinchar, aparecer amoratadas y en muchos casos llegar a romperse y causar coágulos que pueden derivar en
enfermedades más graves. Las varices también pueden ser el resultado de diversos traumatismos.
Aun siendo cierto que muchas mujeres tienen mayor predisposición a sufrir varices, quizá debido a que la calidad de
sus capilares es diferente al de otras, o a que son personas propensas a tener una sangre menos fluida, para estas
mujeres es muy importante evitar la formación prematura de esta alteración circulatoria con unas sencillas medidas
de prevención, y sino evitar el problema en un 100% de los casos sí al menos aliviarlo.
Algunos anticonceptivos pueden provocar retención de líquidos y por tanto también favorecer el fallo de las válvulas
reticulares1. Muchas mujeres notan cómo los cambios hormonales a lo largo del ciclo cambian la morfología de sus
venas y muchas de ellas tienen claro que coincidiendo con la toma de anticonceptivos empiezan a desarrollar estas
alteraciones.
La falta de ejercicio es una causa directa de varices. En efecto, es muy
importante que estimulemos la circulación sanguínea y evitemos el
estancamiento por medio de hábitos de entrenamiento sanos.
PREVENCIÓN
La principal medida de prevención como hemos dicho es el ejercicio. Correr a
baja intensidad, practicar un circuito de Fitness en el gimnasio que incluya el
trabajo de piernas o caminar al menos media hora cada día, nos ayudará a
estimular la movilización sanguínea en las extremidades inferiores y a evitar
el estancamiento. ¡Pero cuidado! el exceso de actividad física (o mejor dicho
de algún tipo de actividad física) puede ser igual de perjudicial que la
inactividad, por este motivo es importante que las mujeres que tengan
trabajos en los que permanezcan de pie muchas horas seguidas descansen en
intervalos preestablecidos, así esta sobrecarga no llegará a ser también causa
de varices a medio o largo plazo.
A ser posible el descanso de las piernas tanto para las que trabajan de pie como para las que no, debe efectuarse
con las piernas en alto, de esta manera aliviarán la sobrecarga de esta parte del cuerpo. Cuando estén sentadas
recomendamos la elevación de los miembros inferiores, al menos al nivel de las caderas. Otra forma interesante de
relajar las piernas es mediante baños o duchas de agua fría en las zonas afectadas. Los vendajes con paños fríos
sobre las piernas son igualmente recomendables.
También hay que tener en cuenta la elevación de las piernas a la hora de dormir; si las mantenemos en alto
conseguiremos que circule menos sangre y que por lo tanto esta no se quede estancada. En el caso de sufrir varices,
es mejor evitar el calor prolongado en las piernas, por lo que no es nada recomendable sentarse sobre el suelo
radiante de parquet que hay en algunos hogares.
EJERCICIO
Un dato importante para las mujeres que practican carrera o running; al terminar de correr es imprescindible
destinar unos minutos a bajar el ritmo cardiaco y a adaptar el cuerpo a la fase de reposo ya que si detenemos de
inmediato la actividad mantendremos las fibras musculares cargadas (congestionadas) de sangre que a la larga puede
terminar quedándose estancada y debido a la presión producir las indeseables varices, por tanto es recomendable
regresar a la normalidad a través del ejercicio de baja intensidad y los estiramientos.
ALGUNOS EJERCICIOS DE FITNESS CONTRA LAS VARICES
Además de todas las actividades de bajo impacto que puedes efectuar en tu centro deportivo estos ejercicios que
mostramos a continuación y hemos ordenado de menor a mayor dificultad pueden ser un arma muy eficaz para evitar
varices y calambres:
NIVEL 1- Acostada sobre una esterilla boca arriba, alza las piernas casi en línea vertical y realiza el clásico
movimiento de bicicleta. Repite 15 rotaciones con intervalos de descanso de medio minuto, haz tres series en total.
NIVEL 2- Extensiones para cuádriceps en máquina: puedes hacer
tres series con un peso de entre 10 y 20 kilos al principio, con intervalos
de descanso de medio a un minuto, haz series de 10 repeticiones una o
dos veces a la semana. En la posición final (foto) no llegues a bloquear del
todo las rodillas, estas deben quedar siempre ligeramente flexionadas.
NIVEL 3- En la prensa de piernas a 45 grados realiza tres series
ligeras de 10 repeticiones con intervalos de descanso de medio a un
minuto, para comenzar haz el ejercicio con las dos piernas. Tampoco
bloquees las rodillas totalmente al empujar los discos hasta arriba, este
principio es el mismo en todos los ejercicios en que trabaje la articulación
de la rodilla.
Extensión de piernas
Prensa a 45º
NIVEL 4- Sentadilla. De pie y con la espalda recta, coge unas mancuernas de 1 o 2 kilos o una barra ligera y
sitúala a la altura de tus hombros, las palmas de tus manos orientadas hacia delante. Con los pies separados dándote
estabilidad desciende flexionando las piernas hasta que estas formen un ángulo recto (muslos paralelos al suelo)
luego asciende hasta la posición inicial. Haz 3 series de 10 repeticiones.
Sentadillas con una barra ligera
NIVEL 5- Zancadas o tijeras:
Este ejercicio además de estimular la circulación moldea piernas y glúteos si se
efectúa con regularidad (al menos una vez por semana). Puedes hacerlo con unas
pesas pequeñas en tus manos o sin ellas. No necesitas más de 3 series de 8
repeticiones por cada pierna. Sitúate de pie, como si fueras a hacer la sentadilla pero
en lugar de eso avanza con un pie dando un largo paso de aproximadamente un
metro de longitud (foto de la izquierda) baja el cuerpo sin llegar a tocar con la rodilla
opuesta en el suelo, luego ponte erguida otra vez y haz la misma operación con la
otra pierna. Como podrás observar, al principio, este ejercicio requiere de una buena
dosis de equilibrio.
En términos generales recomendamos no superar las 3 series de 12 repeticiones
cuando se trabaje con cargas y descansos de 30 segundos a 1 minuto entre series ya
que algunas investigaciones han demostrado una vinculación entre un número
elevado de repeticiones y el aumento significativo de la presión sanguínea en los
grupos musculares involucrados, algo incompatible con el objetivo que nos
proponemos en este artículo.
En definitiva, cualquier movimiento de bajo impacto en el cual ejercites las piernas te ayudará a evitar las varices, te
relajará y te aportará una renovada energía. Al final de la jornada sentirás tus extremidades aliviadas y con el paso
de unas semanas una mayor resistencia física.
Como hemos dicho al principio el aspecto de la nutrición es importante para evitar y prevenir estos problemas
circulatorios. Pronto será incluido un artículo en el apartado de esta misma página “woman” “nutrición”.
1. Reticular Adj. con forma de redecilla o red.
José Mª De Antón
Entrenador nacional de Fitness y musculación con más de 20 años de experiencia.
Entrenador personal
Asesor en nutrición deportiva
Coordinador de áreas deportivas
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