MEDICINA TRADICIONAL MAYA INFORME FINAL PRESENTADO .J POR : RICARDO WLCZADZKI PARA ACREDITAR SERVICIO SOCIAL LISCHINSKY SU 1/VIII/82 AL ALUMNO DE LA UNIVERSIDAD AüTONOMA 31/1/83 METROPOLITANA INVESTIGACION REALIZADA EN EL INIREB (YUCATAN) t/ BAJO LA TüTORIA DE: M.EN C. DANIEL ZIZUMBO Y M.EN C. PATRICIA COLUNGA, INVESTIGADORES DE DICHA INSTITUCION. INTRODUCCION Inevitablemente, e l hecho más r e l e v a n t e para l a e s p e c i a l atención d e l i n v e s t i g a d o r hacia l a medicina t r a d i c i o n a l , es que l a sociedad a mexicana moderna crece y se d e s a r r o l l a a pasos agigantados, y en c= da uno de estos pasos i n t e g r a a l i n d i o y a l a s comunidades campesinas aisladas. Esta i n t e g r a c i ó n se presenta en todos l o s planos - c u l t u r a l , económico, s o c i a l y p o l i t i c o -. - S i n embargo, e s t e desa- r r o l l o desmedido plantea problemáticas p a r t i c u l a r e s en cada región; aunque l a más generalizada en e l plano s o c i a l es, indudablemente, - l a a s i s t e n c i a médica y l a salubridad de l a población. E l estado n e c e s i t a , pues, un progreso i n t e g r a l de l a sociedad y - para e l l o i n v i e r t e c a p i t a l en l a s zonas deprimidas y marginadas pa- ra que p a r t i c i p e n de l a producción Nacional y abandonen e l sistema de economia de autosubsistencia. Sin embargo, para l o g r a r é s t o también n e c e s i t a brindar s e r v i c i o s adecuados, ya que tanto producción como s e r v i c i o s son espejos d e l - avance económico, c u l t u r a l y s o c i a l de una población. Uno de los problemas &s importantes que enfrentan los s e r v i c i o s estatales de salud en e l medio r u r a l es su poca e f e c t i v i d a d y acept a c i ó n p.or p a r t e de l a población, debido a que es un sistema calca& de un modelo t r a d i c i o n a l en medicina moderna; con una gran i n v e g siÓn de c a p i t a l en i n f r a e s t r u c t u r a , con un personal que no solo no resuelve los problemas de salud de la población sino que se limita a vivir de ellos, y dirigido a usuarios que practican otro tipo de medicina. h la población rural hay enfermedades y hay muerte, por eso debe haber medicina moderna; para resolver el problema. El médico no reduce ni la enfermedad ni la muerte porque la mortalidad infantil depende fundamentalmente del nivel de vida y en segun do lugar de la atención médica. Se ve claramente que la disponibi- dad de atención médica no tiene un nivel correlativo en las tasas de mortalidad general, infantil y preescolar. (Collado ArdÓn, Rolando , 1978) Todo parece indicar que la salud no depende de la atención médica sino del nivel de nutrición, de vivienda, ropa, calzado y disponibi- lidad de servicios higiénicos. Pero suponiendo que se pudiera sanear facilmente el nivel de vida, disminuirfan considerablemente las tasas de morbilidad y mortalidad por enfermedades infecciosas (especialmente en zonas tropicales), y las asociadas a la desnutrición. Suprimirfamos las enfermedades del subdesarrollo; lo que no significa que desaparezcan las enfermedades en general. c 7 -3- La población campesina está más enferma crónicamente que la pobla- ción urbana en cuanto a la enfermedad más evidente, es decir, la prg dominantemente orgánica, como las infecciones y parasitarias, las a@ nemias y shdromes nutricionales. No se puede decir lo mismo respec to a la enfermedad psicoemocional, que dependeda, no del nivel de - vida, sino de la calidad de vida de esa población. - El desarrollo plantea sus propias enfermedades degenerativas, Úlceras, hipertensión, farmacodependencia, suicidio,etc. El nivel de vida, determina as€, un tipo de enfermedades y causas de muerte de una población. La calidad de vida determina otras en-- fermedades radicalmente diferentes. Cabe la aclaración de que tanto calidad como nivel de vida, son cg racteristicas de las C J condiciones de vida a0 de una población; es dg cir, son las condiciones a las que está expuesto todo ente biológico y que dependen de su propia evolución y de su entorno. Siempre va a haber causa de enfermedad y de muerte, pero las causas están dadas en función de las condiciones de vida. Seria iluso pensar que la población rural no necesita de los servicios de la medicina moderna, ya que de hecho la utilizan cuando ven necesitados. se - Entonces se ve claramente que es un problema de la forma de introducción e implementación de esta medicina, que denota una concepción superficial del sistema médico tradicional, de las practicas terapég ticas y de sus alcances, mostrando rechazo y desprecio hacia sus prac ticantes; hecho tal, que hace percibirse como una agresión la práctL ca misma de los servicios médicos. A pesar de ello, la consecuencia directa es el desuso y la desapa- Hecho -- que se trasluce al ver la edad de los practicantes de la medicina - rición del conocimiento tradicional de la flora medicinal. tradicional, al ver la modernización en la forma de vida de las comunidades, la mayor instrucción en la población, el manejo del capital, el menor contacto con el medio rural y el cambio social en su ' conjunto que implica forzosamente un cambio cultural con reemplazo - de valores. Sus consecuencias son el empobrecimiento de su conocimiento sobre el recurso vegetal y sus posibilidades, dependencia a las medicinas de patente y la desaparición de las formas de organización interna. Indudablemente, el gran desarrollo que ha alcanzado la medicina -- tradicional, se debe al estrecho contacto que ha tenido el indflgena con su medio natural, conociendo, desarrollando y explotando los recursos que su ambiente le ha brindado. Hoy dia vemos que esta situación se ha revertido y las consecuencias son obvias. - Hace algunos pocos años el Estado Mexicano, a travez del convenio IMSS-COPLAMAR se ha planteado la necesidad de brindar atención médica rural y en todas las cabeceras municipales y comunidades 6 s importantes ha instalado Unidades Médicas Rurales (UMR). Los esfuerzos son -- loables; sin embargo, la problemática de salud persiste irremediable. Un médico .recién egresado, que desarrolla su servicio social, arma& de un cuadro básico de 108 medicamentos no podrá combatir la enfer- medad rural, que como vimos depende del nivel de vida. La integración del indigena a la vida nacional es un hecho inminente I y necesario para el desarrollo económico, social y politico del pais; está en nuestras manos, el querer captar su cultura y conocimientos - técnicos, que ha venido desarrollando a través de siglos, para respetar su práctica y para comprender el aprovechamiento de estos recursos naturales. La problemática de salud en el medio rural tiene la alternativa de - una resolución en conjunto de ambas medicinas, ya que ambas tienen el mismo fin. <.*--I m- -6- En los foros internacionales como OMS y UNICEF se ha considerado la posibilifiad de incorporar la medicina tradicional en los servicios primarios de salud, planificación familiar y partos; e incluc sive describe la posibilidad de emplear la farmacopea tradicional para el tratamiento moderno. Se hace necesario pues , transformar esta situación, proponer for mas concretas de reforzamiento en el uso y manejo del recurso &di co vegetal, planteando mecanismos para la conservación del recurso en las condiciones culturales y socioeconómicas objetivas y reales. Debido a todo ésto es que se ha venido trabajando en varias inst& tuciones del pafs, la idea de formar huertos experimentales de plan tas medicinales en diferentes comunidades. Teóricamente, la construcción de dichos huertos en las clfnicas - rurales darfan una participación al conjunto de la población en la casa de salud; permitirfa reforzar el uso, conocimiento y manejo de la flora medicinal, atenuarla el choque cultural y principalmente pennitiria valorar la práctica médica. campo en torno a la construcción de dos huertos experimentales de -Este trabajo describe la experiencia de seis meses de labor de __.-- -7- plantas medicinales y precende analizar l a viabilidad de este tipo de proyectos para satisfacer e l cuestionamiento general de cuál se desprende: Puede conbirlarse o coordinarse e l personal y los procedimientos de atención de l a salud tradicionales y modernos para 12 grar una atención más completa?. MARCO TEORICO Según l a Constitución de l a OMS, ,,l a salud es un estado de comple- to bienestar f í s i c o , mental y social, y no solamente afecciones o enfermedades l a ausencia de ,, . E l hombre a l o largo de l a historia, ha luchado por mantener l a i n tegridad fxsica y mental, para l o cual u t i l i z ó armas cientfficas, te& r i c a s , empxricas, mágicas y r e l i g i o s a s . Esta integridad f x s i c a y mental se traduce en un estado de equili-b r i o llamado salud; en contraposición de un estado apartado del equil i b r i o llamado enfermedad. Todas l a s culturas conocidas tienen explicaciones acerca de l a s cag sas de l a enfermedad, asf como de l a s formas para curarlas. Un anál& s i s de cómo l a s sociedades toman una multitud de procedimientos para l a prevención y l a curación de l a s enfermedades, establece l a subya-cente concepción de l a enfermedad. E l diagnóstico constituye e l primer paso hacia l a posible recuperación de un enfermo y comprende tres dimensiones (Olavarrieta Marenco, 1977): a). -La evidencia, manifestaciones tomadas como indicadoras empxricas de l a presencia de l a enfermedad (sfntomas). b).-El proceso, l o que ocurre dentro del organismo y hace revelar l a evidencia. c cO.-La causa, que desató e l proceso patologico. ~ -9- Para l a medicina occidental moderna, e l proceso patológico es de interés fundamental, y l a patologia constituye e l fundamento de su sistema de dosificación de l a s enfermedades. @ E l estudio cientxfico l e ha revelado a l hombre blanco que l a administración de determinadas drogas para cada patologia en particular, logra combatir l a evidencia a los sintomas aparecidos en e l enfermo, sin importar su cag sa. Los sistemas tradicionales, en cambio, dejan de lado esta dimensión y otorgan especial atención a l a causa de l a enfermedad, que por l o general se adjudica a l a adición o a l a substracción de una parte - v i t a l o de un cuerpo extraño, a l a integridad humana que resulta a l terado o enfermo. E l conocimiento emphico de determinadas prácticas terapéuticas y e l componente mágico religioso, son los que combatie- ron a una determindad enfermedad. A l a vez, l a medicina c i e n t l f i c a tiende a tomar un enfoque redu-ccionista en vez de una posición holfstica, revelando una preocupación por los eventos biolÓgicos y bioqufmicos. Asf, las causas de l a enfermedad se dan a nivel individual y representa e l desequilibrio de los componentes d e l cuerpo, e l cual tiene una naturaleza similar a l a de Una máquina. Estos conceptos sirven para disolver e l ambieg te económico y p o l l t i c o como factores causantes de l a enfermedad, porque culpan a l individuo. Estos hechos llevan a la impersonalización del trato médico-paciente; la profesionalización del médico, su largo entrenamiento y preparaciÓn,conllevan un lenguaje y una forma de vestir diferentes de los del paciente. A su vez, la medicina privada se ha convertido en una mercancia, con un valor muy alto. Por el contraste, la medicina tradicional considera ai enfermo como un ser integro y total, y coloca a la enfermedad en un contexto social. Con frecuencia, la enfermedad, la preservación de la salud, la religión y las relaciones sociales son fenómenos íntimamente vinculados. Aunque esto resulta tan cierto en la cultura occidental como en otras culturas, esta es una realidad ignorada a menudo por la medicina cientifica occidental. Los terapeutas en la medicina tradicional tienden a ser gente que ha . llegado a su profesión por medio de un llamado sobrenatural o mediante el aprendizaje empirico a traves de un pariente. A s i el terapeuta y sus pacientes generalmente viven en el mismo ambiente social; el prime ro conoce personalmente a sus enfermos, a sus familias, y sus actividg des en la comunidad. Tanto el paciente como el terapeuta comparten una misma ideologia so bre la enfermedad y se expresan en un mismo vocabulario inteligible p a ra ambos. 1 ! Son varias las diferencias y contradicciones existentes entre el sistema inpersonal de la medicina oficial hacia el ser biológico, y la medicina tradicional, holfstica personal , que coloca al enfermo y a las enfermedades dentro de un sistema social. Quizá la dife-- rencia más profunda sea que la medicina moderna tiene un corte ne tamente cientificista, mientras que la medicina tradicional se mueve dentro de un mundo mágico, en contacto con la ciencia y la religión; practicando ceremonias y rituales, y revelando conocimientos técnicos de alta efectividad en cuanto a las plantas medicinales.(Olavarrieta Marenco, 1977). En México y en Xesoamérica en general, desde los tiempos de la colonia hasta nuestros dlas han coexistido dos culturas. rentes, con reaiidades aparte. más válida que l a otra. Las dos di- Ninguna por sobre la otra. Ninguna Dos culturas que no siguen un misma curso, poque la cultura indlgena no evolucionaria jamás a lo que es la sociedad capitalista. Porque la evolución social no es finalista y pox que el modo de producción primitivo no es el indicador de que smos &s que ellos; porque de hecho todo el desarrollo que en todos los - campos que impuisa el capitalismo y la sociedad moderna son respues- tas a intereses y necesidades propios de la sociedad y no del bien, de Dios o del proweso humano. ! I La medicina moderna atiende la problemática del hombre moderno, (ni mal, ni bien, igual que otras culturas y sociedades, de acuerdo a ig tereses y necesidades). c c La medicina tradicional atiende a su manera el problema de salud de comunidades primitivas o de autosubsistencia. Cuál es mejor? ninguna. Cuál es más efectiva desde el punto de vista terapeutico? No se sabe, principalmente porque atienden realidades diferentes y enfermedades prg pias de cada sistema social; y aqui hay que recalcar algo importante para el que le gusta comparar culturas y sacar conclusiones. LO único que es cuantificable es la efectividad en la atención médica que reben los usuarios, porque para eso existe la medicina; y en este sentido la medicina tradicional cumple bien su función. La medicina moderna respondiendo a otra realidad socio-cultural, y adelantos “cient~f& i Pero cómo llega a los usuarios?En el aspecto pÚbl& i congruente con ello ha elaborado invenciones y cos inigualables. co o . I , institucional y en el privado o liberal. Los derechohabientes en la medicina pública son obreros sindicaliza dos y burócratas, ya que esta atención va dirigida a la protección y ! I ! I reproducción d e l recurso humano productivo d e l pals. (Ryesky Diana, 1979: La medicina o f i c i a l y tradicional: algunas contradicciones). Hecho tan evidente es e s t e que a veces se hace grotesco v e r cómo l a gente no s a l e curada, sino emparchada de los hospitales, para que se r e i n t e g r e a l a producción. t a o e s anormal; - Porque e l que no produce, mol- (ancianos, l i c i a d o s , enfermos mentales, e t c ) . No importa que e l sistema s o c i a l sea e l que produce estos marginados. 8 La medicina moderna debe preservar l a estructura y para e l l o tag b i é n e s necesario impulsar s e r v i c i o s de salud preventivos, que son l o s Únicos s e r v i c i o s aplicados a grandes sectores. Pero e l Último g r i t o d e l adelanto cientifico-médico es a d q u i r i b l e en e l o t r o aspecto de l a medicina o f i c i a l - l a medicina privada - que va d i r i g i d a más bien a l a s c l a s e s medias y a l t a , que tienen suf i c i e n t e s recursos económicos para u t i i i z a r sus s e r v i c i o s . En México, hay e n t r e 20 y 30 millones de habitantes que no tienen acceso a l a medicina o f i c i a l . De e s t a población, una f r a c c i ó n co-- rresponde a grupos s o c i a l e s marginados de l a sociedad moderna y que los contactos e n t r e ambos son escasos. Estas culturas se han perpg tuado desde tiempos a n t e r i o r e s a l a colonia. I - 141m --- S~VICIOS (ril-iHic DOCUMENTAUS IZTAPWA Pero e l grueso de l o s habitantes que practican l a medicina popular, másallá de l a herencia c u l t u r a l , indigena y espafiola, responde a que no laboran en asuntos de importancia para e l sistema, no estan organ& zados para que e l sistema l e s ayude con l a reproducción de su fuerza de t r a b a j o y no t i e n e n acceso a l a medicina o f i c i a l , aunque quisieran. (Medicina O f i c i a l y Tradicional: algunas contradicciones. Diana Ryeski 1979). g Esta estructura socioeconómica d e l p a i s , hace que tanto medicina m derna como t r a d i c i o n a l subsistan una junto a l a otra. Por un lado, e l mundo moderno de l a c i e n c i a s e debate e n t r e dos f-i, damentales disyuntivos que parten de actitudes p o l x t i c a s y f i l o s ó f i - cas opuestas; planteamientos t e ó r i c o s que intentan r e s o l v e r l o s enormes problemas que ha creado a l a humanidad e l progreso de l a tecnologia. .c En nuestra sociedad, l a competencia productiva, en cuanto a medicina y farmacologia, constituyen una evidencia aterradora: s e cu- ra a l o s heridos de l o s canpos de b a t a l l a , a l o s que caen en e l traba f I I j o , a l o s que r e c i b e n e l g o l p e de un i n f a r t o por problemas de negoc i o s , a los que se enferman de g a s t r o e n t e r i t i e s por contaminación de aguas, a los que adquieren enfermedades pulmonares p o r e l smog, a aq u e l l o s individuos que e l sistema ha creado y d e f i n i d o como consumi- dores y productores, l o s dos encarnados en una persona; como s i l a ve2 dad de l a v i d a f u e r a producir y consumir para l a reproducción de l o establecido e. (Beytelman, 1977) 1 1 I -15- W ' P o r o t r a p a r t e , e l sistema médico t r a d i c i o n a l , perfectamente integrado en su propio esquema, muestra una coherencia admirable e n t r e una v i s i ó n d e l mundo, una i n t e r p r e t a c i ó n f i l o s ó f i c a de c él, un aparato e x p l i c a t i v o que da a l proceso salud-enfermedad una v a l o r cósmico y una s e r i e de p o s i b i l i d a d e s terapéuticas derivadas de l o a a n t e r i o r . - No l e i n t e r e - sa e l método de i n v e s t i g a c i ó n experimental, pero, en cambio, dan un va- l o r d e f i n i t i v o a l a observación conductora de redescubrimiento d e l sa-b e r olvidado y a l a experiencia c l f n i c a que l o v a l i d a . (Holland, 1963) Experiencia c l h i c a que no t i e n e p a r a l e l o en l a medicina c i e n t f f i c a ya que e s t a Última depende totalmente de l a industria farmacoiógica. Industria que pertenece a 4 Ó 5 trasnacionales y que dan de comer a algunos c i e n t o s de ** z tecnicos d e l saber p r á c t i c o .. (Sartre, 1968). --Que les f a s c i n a r f a ver a toda l a farmacopea t r a d i c i o n a l hecha jarabe, g r a g g as, p a s t i l l a s y demás; para que e l gerente de ventas v i a j e a l a s zonas marginadas o s i es más rentable e l mercado occidental a vender e l e x t r a 1 viado ginseng, o algún otro e x t r a c t o adulterado con propiedades maravillosas. e* E l hombre en su v e r t i g i n o s a carrera contra e l tiempo, ha modificado e l medio ambiente o r i g i n a l a t a l grado, que hoy d f a s u f r e ya l a s consecuencias de una desbocada lucha por arrancar de l a naturaleza l o s más profundos secretos de su origen. A los males vencidos por l a c i e n c i a - ; I I -16- hemos agregado los males de contaminación, de las derrotadas enfeymedades del desarrollo, de la transformación quhica de todo lo que - nos rodea, han surgido los materiales indestructibles por el tiempo y que se acumulan alrededor del hombre moderno como amenazantes monta-5as artificaiales de su propia invención # # (Beytelman, 1977). Todo esto por el incustionable modelo de estructuración socio-econ; mico-politico de nuestra sociedad . Entonces es cuando se hace trans parente la relación entre medicina y entidad pública y entre ciencia y sociedad. Qué pretendemos, pues, del estudio de la medicina tradicional? -Integrar sus conocimientos técnicos a la medicina occidental. -Erradicarla con la introducción de la medicina oficial. -Entenderla, para aportar a las comunidades marginadas un servicio médico que ellos no cubren. -0 integrarla a la sociedad rescatando su valioso acervo cultural, respetando y entendiendo su práctica. Quizá, el objeto del investigador es ubicarse en el mismo plano que el usuario del servicio al que debe ayudar, porque es con él que debe encontrar las respuestas a las necesidades que no son las tradicionalmente reconocidas por la medicina moderna. OBJETIVOS I) Recopilar información a traves del trabajo de campo para la diagramación y construcción de huertos experimentales de plantas medicinales (en las clfnicas rurales de las comunidades cercanas a la Ciudad de - Peto, Yuc.) con el fin de analizar su posible papel en la integración de la medicina tradicional y m d e r na . 11) Sensibilizar a las autoridades municipales, institu- ciones de salud, y a las comunidades en general, par a que apoyen y cooperen en la construcción de dichos huertos. I !I METODOLOGIA I) Contactar a l o s agentes tradicionales de salud más reconocidos popularmente, as: como también a l o s k c - médicos de l a s instituciones de salud que operan en l a zona de Peto, Tzucacab, D z i e Ichmul, Yucatan. 11) Conocer cuáles son l a s enfermedades más comunmente curadas con l a f l o r a medicinal. 111) Conocer cuáles son l a s plantas medicinales más fre- cuentemente utilizadas, as:- como también su proceso de preparación. IV) Reconocer qué tipo de atención busca l a comundiad en ambas medicinas. V) Observación y caracterización de problemas agronÚmicos para e l uso y manejo de l a s plantas en los huertos. VI) Pláticas y reuniones con médicos tradicionales, occidentales y en general con l a comunidad para entender l a s contradicciones entre ambas medicinas. 1 VII) Reuniones con el comité de salud de las comunidades para programar actividades en torno al huerto. VIII) Juntas con agentes tradicionales de salud para la discución de las enfermedades que curan y las plantas que utilizan. IX) Colecta de material botánico y hierbas comerciales en el Estado de Yucath. X) De acuerdo al análisis de los puntos anteriores se diseñará un huerto experimental adecuado al área de estudio, determinando cuántas y cuáles plantas se utilizarán, sus limitaciones y su potencialidad. -20- ACTIVIDADES DESARROLLADAS Se hace d i f i c i l enumerar l a s actividades desarrolladas en e l traba- j o de campo, ya que e l trabajo en sf, e s t á muy relacionado con l a v i da c o t i d i a n a que uno r e a l i z a en l a comunidad bajo estudio; y e l grado de i n s e r c i ó n y aceptación que s e t i e n e determinará en p a r t e l a Cali-dad de l a información recabada. A l comenzar e l servicio s e presentó un proyecto de estudios, e l que constantemente f u e reorientándose y modificándose en función de l a s - amplitudes y l i m i t a n t e s d e l objeto de estudio. I La a m a de trabajo, Peto, Yucatán y dos comunidades cercanas, Dzi e , Ichmul f u e escogida de acuerdo a dos p a r h e t r o s : de Yucatán guarda a& 1)el sur d e l Estado tradiciones c u l t u r a l e s mayas que no se encuentran con f a c i l i d a d en o t r a s regiones; y 2) l a s f a c i l i d a d e s que brindó e l I n s t i t u t o Nacional I n d i g e n i s t a d e l área de Peto, en cuestiones de alojamiento, transporte, etc. Los primeros esfuerzos a l comenzar e l trabajo s e concentraron en l a apertura de canales para l a obtención de información con médicos trad i c i o n a l e s y modernos, realizando juntas y reuniones p e r i ó d i c a s con - agentes t r a d i c i o n a l e s de salud y con autoridades municipales e i n s t i tuciones de salud. I Esta primera etapa del trabajo, se desarrolló en el primer mes de estancia en el área de estudios,,a partir de ese momento se contaba con la localización de l o s médicos y el trabajo se dividió fundameg talmente en dos partes. i E L La primera, la constituyó la sensibilización de autoridades municipales, médicos tradicionales y modernos y población en genral, en dos comunidades (Dzi e Ichmul), para la construcciÓn de huertos experimentales de plantas medicinales mediante trabajo comunitario no remunerado. La segunda parte del trabajo se enfocaba a la recabación de infox mación para la construcción de dichos huertos, como ser: plantas mg dicinales más frecuentemente utilizadas, vias de administración y ’ - forma de uso, enfermedades más comunmente curadas con la flora m e 0 cinal, conocimiento agronómico de la población para el manejo de -- las plantas medicinales, revisión de indices de mortalidad y morbilidad, condiciones de salud, etc. LQS primeros objetivos se cubrieron realizando pláticas con auto- ridades del Instituto Nacional Indigenista, médicos de las Unidades Médicas Rurales del IMSS, autoridades Municipales y comités de salud de las cdmunidades, con la comunidad en genral y participando en la organización del trabajo y en la construcción de los huertos. La segunda p a r t e de l o s o b j e t i v o s se cubrió manteniendo v i s i t a s y salidas de campo con médicos t r a d i c i o n a l e s , p a r t i c i p a c i ó n en ceremonias y r i t u a l e s r e l i g i o s o s y / o terapéuticos, juntas periódicas con agentes t r a d i c i o n a l e s de salud para l a discusión de problemas r e l a t i v o s a l a medicina moderna y t r a d i c i o n a l , plantas y recetas - de uso, e t c . Se r e a l i z a r o n c o l e c t a s de material botánico en s a l i d a s de campo con yerbateros y se colectaron también l a s plantas medicinales con I I v a l o r comercial en e l Estado de Yucatgn, En apoyo a l trabajo, se r e a l i z ó una v i s i t a a San C r i s t o b a l de l a s . i Casas, Chiapas y a comunidades cercanas donde e l INI y e l IMSS están llevando a cabo programas similares a l Proyecto de Huertos de Plantas Medicinales, con e l f i n de evaluar l a metodologia que emplearon y reconocer los alcances logrados. Por Último, cabe mencionar también que se ha hecho una r e v i s i ó n b i b l i o g r á f i c a de investigaciones antropológicas acerca de l a medicina maya para l a comprensión de l a cosmovisión médica y l a concepción salud-enfermedad, as€ como también de l a s investigaciones botánicas acerca de plantas medicinales mayas y trabajos etnobotánicos sobre plantas medicinales. También se ha r e a l i z a d o un entrenamiento técnico en taxonomfa vege- tal. I RESULTADOS. A) AGENTES TRADICIONALES DE SALUD. Desde e l comienzo d e l trabajo de campo se planteó conocer l a realidad que vive l a medicina tradicional en e l área de estudios. Esto condujo necesariamente a un ecercamiento tanto con los yerbate-ros como con l a s plantas medicinales. Pero para l l e g a r a l a s plantas - medicinales, que serfan objeto de estudio, se viÓ l a necesidad de enta-I b l a r relaciÚn con l o s yerbateros desde una perspectiva humanista y entablando una relación suj eto-sujeto y no l a tradicionalmente acostumbrada relación sujeto-objeto de estudio. 1 1 Esta concepción ha permitido un aceg camiento rápido y estrecho, que a l a vez planteaba cuestiones metodológicas concretas; no se utilizaron cámaras, n i grabaciones y se trataba de apuntar l o mfnirno indispensable durante l a s entrevistas. Se trataba espedficamente de conocer l a realidad, penetrando en e l l a y no impresionando a los agentes tradicionales de salud, con toda una iz fraestructura montada, que perturbarga, a l a larga, l a validez de l a s iz formaciones. Los agentes tradicionales de salud no fueron tratados como joyas ar-queológicas de l a medicina maya sino como personas que t e d a n una función muy especifica , dentro de l a s categorfas sociales establecidas. Sin embargo, muchos de l o s informantes no tenian una especialidad médica, -- -2'4- sino que eran personas adultas que conocian e l tema de estudio por h a ber tenido un estrecho contacto con é l , en l a vida cotidiana, pasada y presente (cultura popular). @ Se ha hecho muy d i f i c i l distinguir l a s categorias de los diferentes agentes de salud, debido, fundamentalmente, a que su práctica muchas - veces no era cotidiana y conthua, sino esporádica; pero todos e l l o s - encuadraban por lo general en l a s definiciones de yerbateros, curanderos, parteros, chamanes y se ha conocido solamente una huesera. Nin- guno de e l l o s , se dedicaba exclusivamente a l a medicina, sino que era una dedicación, aparte de sus tareas cotidianas o de los trabajos rem2 nerados que realizaban. Se ha notado en varios casos que l o s chamanes se dedican eventualmen t e a l a medicina de hierbas o que los famosos yerbateros comienzan a - ejercer l a s tareas de los chamanes. Los chamanes adquieren por su práctica un status diferencial dentro de l a estructura social. Muchas veces llegan a tener una autoridad I - r a l , aunque no muy diferente a l a de otros ancianos, dentro de l a c o e nidad. Sin embargo, l a autoridad moral se debe a que son profundos conocedores de l a tradición cultural de su pueble. En cambio e l yerbatero - puede no tener autoridad moral, aunque es un personaje carismático, rg deado de un velo de respeto. -2.5- Tanto el yerbatero como el médico moderno han tenido a su modo un entrenamiento técnico intensivo en cuestiones relativas a la medicina. Los mismos ojos esperanzados, penitentes y deshauciados del enfermo son los que colocan el velo de respeto a uno como a otro médico. ES una cuestión relativa a la sociedad y al hombre, y no a la estructura social. .~. . ! Cabe mencionar también que no todos los agentes tradicionales de sg I I lud reconocen las mismas plantas medicinales, y en un número repetido de ocasiones se reconocian a las mismas plantas bajo nombres diferentes. 1 I Sin embargo, es notable que si bien no se manejan conocimientos profundos de cada planta, si se dominan conocimientos de recetas con propiedg Por consiguiente, cuanto más efectiva es - BU acción terapéutica, más se eleva el status social y se comienzan a - des terapéuticas efectivas. entablar relaciones comerciales bien definidas. I Michos de los agentes tradicionales tienen clientelas fijas que son necesariamente de su misma comunidad, sino que hay algunos que atienden enfermos provenientes de lugares m y distantes y que no pertenecen a su mundo y su cultura, sino que son deshauciados de la medicina moderna, - cosa que hace encarecer las relaciones comerciales establecidas. Por lo general, las curaciones tienen un costo de 5 a 25 pesos aun- que hay venta de remedios preparados a 100 y 200 pesos. -62- ." Los remedios se preparan normalmente cuando e l enfermo s e prsenta... Notablemente son pocas l a s pltantas medicinales cultivadas en l a s casas y cada yerbatero t i e n e su propia p r e d i l e c c i ó n hacia e l l a s . La mayo r i a de l a s veces se l a s va a buscar a l monte, o a l a s c a l l e s , y l a s que no abundan por e l l u g a r s e conservan secas. Todos e l l o s mencionan l a - p o l a r i d a d f r i o - c a l i e n t e para e x p l i c a r e l proceso salud-enfermedad. I E l H 'men tiene una d i s t i n c i ó n e s p e c i a l debido a que ofrece ceremonias i I r e l i g i o s a s , bendice, santigua (hace limpias) y cura. remonias son 'X?i"hAK (para e l d i o s de l a l l u v i a ) , mientos p o r l a producción de l a milpa), PRIMICIAS (agradeci-- HETZ-LUM (bendición de un pueblo), LO (bendición de lugares de producción o vivienda), una persona), Las p r i n c i p a l e s cg LO KEX (bendición de WAICOD y WAICNEN, todas l a s bendiciones s e r e a l i z a n s a c r i - ficando animales. También o f r e c e Novenas (rezos), cura e l mal de ojo, e l cancer, e l ombligo, e l v i e n t o , etc. Para todas l a s enfermedades sobrenaturales o por c a s t i g o de los dio- ses, se r e a l i z a n r e z o s , se santigua y principaiemente l a curación s e rg a l i z a l o s d f a s martes y v i e r n e s . Se da mucha importancia a l o s puntos c a r d i n a l e s y e l v i e n t o del oeste es temido. Para l a cura d e l viento s e punza con e l colmillo de cascabel o b i e n con l a espina de l a ACCACU CORNIFERA. Se hecha l a suerte con l o s granos de 6 f z ; y s e descubre qué t i p o de enfermedad t i e n e e l i n d i v i d u o mediante l a observación d e l e4 sastum ,- e. p i e d r a semejante a una canica, l a cual l a encuentra e l chaman en e l j ' / camino de su vida. En e l embarazo e s muy importante l a acción de l a s parteras, l a s cua- l e s acostumbran a sobar todos l o s meses a l a s pacientes. 4 = I E l t r a b a j o fue r e a l i z a d o básicamente en t r e s d i f e r e n t e s lugares; l a ciudad de P e t o y dos comunidades cercanas, Dzi e Ichmul. En cada una i de e l l a s s e observó r e a l i d a d e s d i f e r e n t e s , y l a forma de encarar e l trg b a j o fue de acuerdo a l a s c a r a c t e r i s t i c a s d e l lugar. En Dzi (500 hab.), comunidad muy cercana a l pueblo de Tzucacab, no hay, de hecho, ningún yerbatero, s a l v o un h 'men, un curandero y cuatro parteras, una de e l l a s e s también huesera. Luego de haber hecho v i s i t a s personales a sus casas, s e r e c o r r i e r o n ' las casas de l a s personas ancianas y a todos s e l e s i n v i t ó a p a r t i c i p a r de reuniones de discusión en l a Unidad M6dica Rural d e l IMSS, para l a construcción de un huerto experimental de plantas medicinales en ese mi& mo lugar. Las sesiones tuvieron una duración de t r e s meses, una vez por semana, con una duración aproximada de 2 Ó 3 horas y s e r e a l i z a r o n en espaaol y en maya, Habfa una concurrencia de 10 personas e s t a b l e s y l a s discusio- nes giraban en t o m o a m a t e r i a l botánico t r a i d o por e l l o s mismos o por e l i n v e s t i g a d o r , a l a s enfermedades que e l l o s curan más frecuentemente, a experiencias y a problemas r e l a t i v o s a l a medicina moderna y t r a d i c i o - nal. c I -28- Se viÓ l a necesidad de s o c i a l i z a r l o s conocimientos y s e transformó en s i t i o de aprndizaje y ensefianza. La espontaneidad de l a gente y e l i n t e r é s demostrado fue mayor d e l esperado. Los p a r t i c i p a n t e s fueron: Serapia Darsa, Gregorio Chuc, Esiquia Xix, Francisca Mucul , F l o r a Chi (partera) Carmela Sosa (partera) tera), , Nicolás , EspiridiÓn Torres (curandero) Herrera, Arsenio Xix, Macit O r t i z (par- Dofia J u l i a , Dofia Amira, Dofia C l o t i l d a (partera huesera) Chuc (h 'men), , , Hilario Timotea Yam, b a l d o Ya, CocepciÓn Herrera, E d i l b e r t o Xix, y Ambrosio Chuc. Todos e l l o s creen e l medicina de patente, siempre y cuando no se encuentre cura con l a s hierbas. En l a Ciudad de P e t o hay aproximadamente ochoagentes t r a d i c i o n a l e s ' de salud. Todos e l l o s fueron entrevistados, aunque e l t r a b a j o s e real& zÓ solamente con t r e s de e l l o s . ro), Juan Mo bero), (yerbero) , Don Don Dai (curandero), Amalio Mo' (h'men) Sus nombres son: A g u i l a Negra (curande- T e Ó f i l o (yerbero) E l A l i c a t e (h'men), , Santiago C a s t i l l o (yer- N i c o l á s Dlas (Men) y . E l hecho de v i v i r en l a ciudad, hace que e x i s t a e n t r e e l l o s y f r e n t e a l o s médicos modernos, una gran competencia económica y en cuanto a l prestigio. i ' ".- En e s t e medio, se presentan aberracCones notables como que agentes t r a d i c i o n a l e s de salud recetan medicamc+ntos de patente o u t i l i c e n h i e x bas medicinales envasadas provenientes d e l centro de México. La s e l e c c i ó n de l o s agentes de salud, para l l e v a r a.cabo e l trabajo se basó justamente en escoger a l personal que no i n c u r r f a en t a l e s p r á c ticas. Con Santiago C a s t i l l o , Amalio Mo'y N i c o l á s Dfaz e x i s t i ó una r e l a c i ó n f l u i d a , habiéndose podido presenciar caremonias y r i t u a l e s r e l i g i o s o s y terapéuticos , preparación de medicinas , curaciones y s a l i d a s a l campo para c o l e c t a de m a t e r i a l botánico. riaba E l lugar y e l tiempo de trabajo va- en función de l a i n v e s t i g a c i ó n y de l a propia r e l a c i ó n personal. E l t r a b a j o r e a l i z a d o en Ichmul g i r ó en torno a e n t r e v i s t a s y salidas a l campo para l a construcción de un huerto de plantas medicinales en l a unidad médica rural d e l IMSS, en ese lugar. Don Evaristo era e l Único médica t r a d i c i o n a l , h' men y comisario municipal a l a vez. Curiosamente, todos l o s agentes t r a d i c i o n a l e s de salud con los que se entablaban r e l a c i o n e s personales y no juntas o reuniones, hablaban de l a fé para curar y adjudicaban SUS conocimientos a dotes divinos aparecidos en suefios, aunque todos e l l o s fueron confesando haber tenido p a r i e n t e s cercanos que efectuaban e l mismo o f i c i o . Cabe mencionar, por Último, que se ha notado que la edad de los agentes tradicionales de salud supera, por lo general, los sesenta c afios y que los sectores más jovenes de la población se inclinan hacia I la medicina moderna, hecho que responde indudablemente a los vertigino- II 80s cambios económicos y sociales que son objeto estas comunfdaáes. B) PLANTAS MEDICINALES. Se tuvo acceso a la información de 183 plantas medicinales diferentes, I lo que si bien no es la lista total, constituye un muestre0 al azar Sufi- 1 cientemente extenso para darse cierta idea consistente de las plantas medicinales más usadas y las enfermedades curadas por ellas. La información recabada fue sistematizada por medio de dos canales: plantas y enfermedades; con la cual fue confeccionada la siguiente lista, en la que se incluye el nombre maya y el nombre común de la planta, la enfermedad que cura, la forma de uso, la parte usada, la vis de administración y la forma biológica de la planta. .Para la forma biológica (F.B.) A arbol B bejuco R arbusto H hierba C crasicante P palma se utilizó el siguiente esquema: I I También s e incluye un i n d i c e de c o n f i a b i l i d a d de l a información (I.C.1, e l cual s e adjudicó de acuerdo a l a cantidad de menciones d i f e r e n t e s que se h i c i e r o n de cada planta y l a información r e f e r i d a a e l l a ; ya que no hay evaluación c h i c a que abale l a información recabada. Se asignaron , j t r e s v a l o r e s diferentes: 3 2 1 datos aportados y mencionados por sólo un informante 00 0 . 0 / 00 . .0 por dos informantes .4 por más de dos informantes Las plantas colectadas s e h a l l a n en proceso de i d e n t i f i c a c i ó n en e l herbario de INIREB-Yucatán (XAL-WC) . ! No se sistematizaron l a s r e c e t a s para cada caso ya que variaban, con- forme e l informante; debido a e l l o e s que no s e mencionan las mezclas, s i n o l o s usos de cada planta. Entre un número de plantas, que s i bien no tienen un v a l o r c l f n i c o I y terapeútico, ocupan un lugar muy importante dentro de l a s p r á c t i c a s r e l i g i o s a s . E l l a s son: SIBCHE' SUTUB, OXO, RAMON y , RUDA, ALBAHACA, XUL, CHINTOK, T M Y , CILANTRO. La ruda y l a albahaca s e usan para lavarse l a s manos por l o s compadres. E l xul, Chintok y tamay es usado para santiguar en e l LO' , a l i a g u a l que e l sibchel . E l f r u t o d e l sutub se u t i l i z a para que los niños comiencen a hablar. E l f r u t o d e l oxo e s usado en pulceras por l o s nifios contra e l viento. I E l ramón s e u t i l i z a para santiguar en e l LO I KEX. EL c i l a n t r o se encuentra en todas l a s mesas preparadas para f e s t e j a r l a s *# primicias . e. Hay también un número de plantas con v a l o r comercial y que s e l l e v a n de l o s lugares de producción a l mercado de Mérida. (Celestun) a Elemuy (Sucila), Sutub (en l a s milpas), Tanicasche' (Valladolid), D o r a d i l l a (Chuburna) a Canela de Cuyo (Valladolid), Cafíoto (varios lugares) y Xkanbalhaw (sur d e l Edo. de Yucatán). a E l l a s son: Chacsikin Tomatillo (en huertos) Guaco (Sucila), Balsamito (Valladolid) i ', I $1 crl I m i I I I - m II I - I I I I .. _~-~ m m -7I _. . 7 . I --4 I 4 I II j I I I I 9 I- * ! d YI I \o I +-I I I , I -. I I- QI 11 O 4 1 I I! g i H m m I .-__ I m r l 3 O- 1 M 4 1 2 8 i i .- n r l r l v I 4 ! ! I $ 3 3 U 3 E; O 4 . I i I 3H p: 8 I X 1 !. I ! 1 i .;4 h I I . . I I I 1 I h l .. ... .. . O E-r 3 2!w I Z 4 FI g;! i Y ! 3 I i N Fr) 3: m hl 1 1 I 1 O cr) 1 I I o 4 H H ._ _. . .- O _____I) n v) EHl ! 3 W <. I - O z..; I ! j .... , ....~, m ’ i . .,.. . , .,.. - ... .. I 35 X X I I rcu o o l $ I i %:! ,. , i i n o 1 3 O .. . . 4 3 4 83 . .-+ . -. I X .. ,I . .- 3 I I iFri2 I I = I i O 4f .. . 3 O hl hl 0 3 cl I hl O -. , 3 O cl , . i 3s F s i .. 3 4 c 8 O X n .,..Ii . .. . l 1 s8 - j z'w X -4 m Q) m 4 I I i 1 I l - i j I I is m h) r l I " 2 2X !! I ~I I i! I II i I_ X I 4 X i 7 I I w1 'B I 4 3 I i I t I i N F----m o d m iI3 3 ...- O ... . . . .- I 3 O I x V I 3. . i I! - . X 5 PI M 8 , i I ! t I i a-e4 I- r-. i n m . I 4 I I ! I I i o I l I I 4 X t X i i X II iI I i m d N I - 3 -1 I i I I .I I I i .i. I . I I ? R I I i X I I I I i X X .- -4 I I I ! X E! !s I i : I j i I ! ! .I - .. .. .. .. .. . ~. ~ .. ,. . -- m r l -I hlrl r l m r n 3 s Y 8 I i X X I I I ! I o N 3O r l ü X X pc I 1 Q; I In cn .- U ! H I I N N 1 i - I I N I d I I I 1 I ! I I I i X X i I _____1 I I I 1 1 ~ I I I I s I 8 1 I I N I j n I -* m W I I i i I I 1 p: i 3: ?h I X I I I I F4 I cr) O r l i o 4 VI O I I 1 d 1 I -I__ d ! Cr) i 3 3 O I r) r4 0 1 i i I , I d X X , i I t ! i i i I I I i I I f I O ¡ * I ” I - N I I 3 3 s -- ___-I O I n rr; I .. i! ! i I Él 3 ! - d d 2 d O O _ I _ - ! 1 it u PL w 3 O H @I H L X i E i i H U i I I I I I I ” I - I $9 jI 3 O cl I I I I * I ma I : I t I I X i I i f X X I I I In CQ QI N I I I O m 4> 3o 3 O 3 O . 5i R 2 mo 4I-i 22 xra Q N w o €4 I i U 5i I f& p : ji ! X i I X X -4 a i i i ! I ! I i ! 8 al B II . r l , m r l I m I i i3 t: u I s 1 N 2 . I ! X X i m i I ! i I ! i i I i i 1 r- 3 O o\ m r l i 3 d ! i ! i . i t! i i Y t O ! H IwI r l hl hl I f h l r ( hl I I -7 1.2 ~ .. I i ! I d I I I I I I I i .- 1 1 1 i f ! I 1 - I i I r I I I i n i n I4 a) i n r l l I o\ i n r l I r l 0 1I I m m d m N O 3 3 3 O O cl 3 R i3 i2 d m 8 25 X W u . I I ffl 3W 2 t: Ii o u a( ffl 8 O O FI FI w W X 2 3W 2 H d i ! X X O X i 1 i 1 In 1 I 1 I i 1 I I . I X I ! 1 ' - 4 ~d i * i I i I I _ N I 1 I i -, s m Ii O t I 4 I I 2 I a I X I ! X -. -. v> h 1' v) N i1 i i, C) ENFERMEDADES QUE SE CURAN CON LA E’LORA MEDICINAL. Como e s sabido, e l conocimiento de l a f l o r a medicinal de una r e g i ó n ha tenido una evolución propia y que depende fundamentalmente d e l arra& go c u l t u r a l y t r a d i c i o n a l que una e t n i a posee. Pero independientemente d e l a n á l i s i s c u a l i t a t i v o d e l arraigc cultuxal, podemos hacer un a n á l i s i s de l a t r a d i c i ó n medicinal, conociendo l a f l o r a más comunmente empleada y l a s enfermedades que cura. Sin embargo, nos topamos con v a r i o s problemas; e n t r e ellos, los nombres mayas que designan enfermedades, l a traducción a l espafíol y e l reconocimiento d e l cuadro c l b i c o para e s t a b l e c e r dicho p a r a l e l o con l a medicina moderna, Otro problema que representa l a e x p l i c a c i ó n de l a s enfermedades en l a i d e a que s e forma l a gente de un malestar ( cosa muy d i f e r e n t e a la cosmovisión); y é s t o constrastado con e l conocimiento ernpirico de l a s r e c e t a s que s e transmiten generacionalmente. Actualmente, s e puede d e c i r que dependiendo d e l informante, s e puede referir de una enfermedad a una planta, o de una enfermedad a un grupo de plantas. Este grupo de plantas, a su vez, puede corresponder a un nihero var i a b l e , de acuerdo a l a acción que cree, e l yerbatero, deba tener, o b i e n a niheros mágicos mayas que completan una r e c e t a para la curación (cosa que s€ s e r e f i e r e a l a cosmovisión). I -34- Por o t r a p a r t e , para determinadas enfermedades s e r e a l i z a n determinados tratamientos que varían en l a d o s i s y l a composición de l a s mez c l a s de acuerdo a l a evolución de l a enfermedad. Conforme a l a l i s t a de plantas medicinales y sus usos, hay muchas plantas que s e r e f i e r e n a una s o l a enfermedad. Así se ha elaborado una , l i s t a con l a s enfermedades que s e curan con l a f l o r a medicinal y que llg va un número que r e v e l a l a cantidad de plantas d i f e r e n t e s que curan d i cha dolencia, I Las enfermedades fueron agrupadas por l o s sistemas a los cuales atac a en : enfermedades d e l aparato d i g e s t i v o , de l a s v í a s urinarias, de l a p i e l , d e l sistema nusculoesquelético, de l a s vias r e s p i r a t o r i a s analgésicos y v a r i o s . Sin embargo, hay determinadas dolencias que son síntomas o signos de cuadros c l f n i c o s y no enfermedades en sf. caso se puede citar: , En e s t e e l catarro, l a s afecciones pulmonares, i n f e c c i o n e s en l o s ojos y oídos, granos, l l a g a s , infecciones de l a p i e l , manchas en l a p i e l , hongos e n los p i e s y e l r e s f r i a d o común. Por o t r a parte, hay plantas que se usan para diarrea, vómito y c ó l i c o s , l o que e n c i e r r a un cuadro de g a s t r o e n t e r i t i s i n f e c c i o s a . También s e da el caso de plantas que s i bien no curan l a enfermedad, a l i v i a n l a d o l e n c i a como es e l caso de l a s paperas y e l paludismo. 8 , t 1 . I_-,-_&-- - -35- La d i s e n t e r f a e s por l o general amibiana o bien por balantidium. La d i a r r e a se distingue en t r e s tipos: de ojo), @ e l a verde (presente en elmal l a amarilla (natural) y l a blanca (provocada por infección). Cabe mencionar también que hay enfermedades con terminologia propia I de l a región, para l a s cuales s e hace d i f i c i l encontrar un paraleloen T a l e s e l caso de l a l a medicina moderna. 0* blemente sea una v a g i n i t i s micótica; e l una hernia u n b i l i c a l ; e l linfáticos; e l c. ., .. .. incordio ombligo saltado .* mancha bianca cirro *# 0c que pro- que probablemente sea que sea inflamación de l o s ganglios que s e da en l o s nifíos a l no c i c a t r i - z a r bien su ombligo; y por Último l a e. fiebre intestinal .c que ataca unicamente a l o s nifios provocando calentura e hinchazón d e l v i e n t r e . ENFERMEDADES DEL APARATO DIGESTIVO diarrea 14 antiesmasmódicos vómítos 12 disenterta 6 6 d o l o r de estómago 6 vedfugas fiebre i n t e s t i n a l 5 trastornos b i l i a r e s cirro 3 2 tricocéfaios laxantes 2 tenia vomitivo 1 mal a l i e n t o 1 vermicidas empacho a f . hepáticas 2 1 antiácido 1 1 1 cálculos b i l i a r e s 1 3 3 hemorroides purgante 14 1 I I 1 ENFERMEDADES DE LAS VIAS URINARIAS cálculos, diuréticos 9 infecciones viás urinarias 8 (orina atrancada, mal de o r i n ) regula menstruacion 5 enfermedades veneras 4 acelera parto 4 mancha blanca (vaginitis micotica) 3 15 llagas 12 11 astringente (hinchazones) 8 tumores 5 lepra 3 sarna 3 picaduras 3 coagulante (hemorragia) 3 erisipela fuegos (herpes simple) 3 urtican tes 2 cicatrizantes 2 picadura de serpiente 2 caspa 1 manchas en l a p i e l 1 sabañones 1 pelagra 1 antisudoriparo 1 antivermcoso 1 desinfectante 1 pulgas 1 garrapatas 1 hongos en pies 1 e v i t a menstruación I 1 ENFERMEDADES DE LA PIEL granos i n f . en piel 2 ENFERMEDADES DEL SISTEMA MUSCULOESQUELETICO antirreumático 17 fractura 1 dolor Óseo 3 ENFERMEDADES VIAS RESPIRATORIAS catarro 11 antitusivo 10 antiasmatico 6 resfriado común (dolor corporal) 5 tuberculosis 4 expectorante 3 afec.pulmonares 1 tosferina 1 amigdalitis 1 VARIOS 7 aire,viento,mal de ojo, hechizos 9 incordio (adenopatias) 3 diabetes 3 paludismo 2 afec. al oldo 2 venenos 2 paperas 2 calambres 2 bilis 1 ombligo saltado (onfalitis) 1 antianémico antipiréticos 1 I I I I 1 tranquilizantes 1 estimulantes del SNC 1 infe.de ojos 1 sordera 1 para el habla 1 dolor de muelas 3 ANALGESICOS dolor de cabeza I 9 D) MANEJO AGRONOMIC0 DE LA FLORA MEDICINAL El conocimiento y el uso de la flora medicinal en Yucatán es patri- monio de la cultura maya, que 6Óio ha sido posible de desarrollar debi i_ do al estrecho contacto que ha tenido el indlgena con su medio natural. Las plantas medicinales han sido manejadas históricamente como un rg curso inagotable que se encontraba en el mismo medio en el que se desarrollaron las actividades de la población: el monte o la selva. ! El conocimiento empirico del ecosistema llamado, selva, su manejo, su uso y la explotación de sus recursos, son los factores desencadenantes que condujeron a que se desarrolle la tradición medicinal maya. Solamente entendida a d , podremos comprender que la flora medicinal es en realidad un subconjunto de la vegetación natural. Tal sub- conjunto tiene una cardinalidad dinámica que depende del grado de desarrollo del conocimiento y de los mecanismos de perpetuación de l a tradición cultural. Sin necesidad de darle un valor numérico, se acepta innegablemente que la tradición cultural es grande y que el conocimiento es comprobadamente desarrollado. kitonces una revista de las caracteristicas del tipo de vegetación nos dará una idea consistente de las caracteristicas de la flora medi- cinal. La zona que me ocupa, situada en l a s estribaciones de l a s i e r r i t a de T i k u l y aledafias a l a Ciudad de Peto, e s t á marcada por un t i p o de begetación t r a n s i c i o n a l e n t r e l a s s e l v a s medianas subcaducifolia y caducifolia. Miranda (1959) designó para toda l a f r a n j a de l a Penin sula en que é s t o ocurre, como un t i p o de vegetación que llamó Selva Mediana de Transición. E l hecho es que l a complejidad f l o r i s t i c a , - e s t r u c t u r a l y fisonómica de l a vegetación no guarda r e l a c i o n e s cono- I I cidas. E l nÚmero de especies v e g e t a l e s que e x i s t e n en l a zona es muy a l t o ; no e x i s t e n datos que l o formalicen, pero según un c á l c u l o informal hay e n t r e 1000 y 1500 especies de plantas superiores. La composiciÓn f l o r i s t i c a de cada región varza en forma gradual y los microambientes se suceden unos a o t r o s siguiendo una d i s t r i b u c i ó n aún no conocida, Pero de hecho, l a diversidad de formas de vida, l a densidad y l a corn petencia tienen i n d i c e s muy elevados, que aunados a l rápido r e c i c l a j e de nutrientes que presenta e l ecosistema dan como resultado complejas asociaciones vegetales. El manejo de e s t a variedad de plantas o f r e c e muchas complejidades no conocidas como por ejemplo l o s fenómenos de a l e l o p a t f a o las asoc i a c i o n e s a n i v e l de r a f c e s en e l suelo. 1 I - I -40- En e s p e c i a l e s t e Último fenómeno, junto a l poco suelo y e l rápido crecimiento hacen que l o s transplantes en l a mayoria de l o s casos, no sean v i a b l e s . Hecho que se comprueba con l a información recabada en l a zona, con l a gente d e l lugar. Otra forma de manejo propuesta es l a c o l e c t a de semillas para su c u l t i v o , que topará con l o s problemas no conocidos de v i a b i l i d a d , dormancia y l a t e n c i a . Todo e s t o ' h a c e pensar que e l manejo empfrico de l a f l o r a medicinal en huertos c o n l l e v a mtichas l i m i t a n t e s , s i se toma en cuenta que l a s coa d i c i o n e s deseables sean una representatividad de l a f l o r a para un serv i c i o médico e f e c t i v o . Sin embargo hay una f r a c c i ó n de l a s p l a n t a s medicinales que escapan a e s t o s condiciones generales y que podrian dar i n i c i o a un huerto experimental de plantas medicinales. Estas plantas serian por un lado l a s ya manejadas por e l hombre y que s e encuentran en d i f e r e n t e s etapas de domesticación; y por e l o t r o lado l a s arvenses y ruderales, que se caracterizan por s e r pioneras y agresivas, habituadas a v i v i r en condiciones perturbadas como ser campors de c u l t i v o s abandonados y a l a o r i l l a de l o s caminos. hace que l a manipulación d e l hombre no sea un obstáculo y s i b l e s de i n t e g r a r a un huerto. Este hecho as1 sean po- En e s t e caso s e encuentran 40 plantas de l a s 183 totales, s i n contar los á r b o l e s que e l hombre ya maneja. Este nÚmero de plantas no e s r e p r e s e n t a t i v o de l a variedad y d i v e r c c sidad de l a f l o r a medicinal, como a s i tampoco de l a s mezclas más usaI das o de l a s afecciones más comunes que padece l a gente d e l lugar. Por o t r a p a r t e , l o s huertos deberian tener condiciones deseables como s e r d i s p o n i b i l i d a d de agua y buena tierra, l o que no siempre s e cump l e en l o s terrenos adjudicados a l a s c l h i c a s r u r a l e s d e l IMSS. En e l caso de Dzi, e l suelo e r a una gran l a j a rocosa imposible de c u l t i v a r ; en e l caso de Ichmul e l agua para riego deb<a e x t r a e r s e a ma- no a 40 metros de profundidad. Estos inconvenientes hacen que l a pues- t a en marcha de e s t e t i p o de proyectos no s e pueda l l e v a r a cabo en cualq u i e r lugar. Esto s i g n i f i c a que e l huerto no siempre pueda e s t a r junto a l a ciinica. Las plantas que s e enumeran a continuación fueron seleccionadas por e l i n v e s t i g a d o r y l o s datos que l a acompafian fueron proporcionados por l a gente d e l lugar. I ; - :---r-X < x 1 I O U c) O & al E al O U a al m U m SI m 3 U 4 4 ) O rl 2Ti zu u 4 2 O z r l Ti zo G) ci r l U ! i -I o in 4 4 -I -I i u n 3 < 4 e 4 s 3 0 7 f i : I 1 ! h f !1 4 I 1 4 3 I 1 L: j' I I 7 7 \ h ' 4 4 I CONCLUSIONES Suponiendo que el proyecto de huertos de plantas medicinales conlleve la solución de las contradicciones de ambas medicinas, deberza darse entonces una relación más satisfactoria entre el médico moderno, los yer- beros y la comunidad en genral. La resultante seria la mejor salubridad de la comunidad. Sin embargo, la problemática hoy en dia está dada porque el médico occidental llega a la comunidad y entabla determinadas relaciones de poder, no le interesa'integrarse (en general), y sabe que al amo se irá de all1 a un puesto mejor donde continúe su formación o pueda hacer mejor su vida de acuerdo a la formación que ha recibido. El médico occidental se queja de +e el yerbero es charlatán, que empeora a los enfermos que éi luego curará y que son sucios y no comprenden las mxnimas normas de salubridad,que no se dejan ensemar, etc. En tanto se continúe suponiendo que el personal de salud urbano va a resolver l o s problemas de la población rural, continuará presente el paradigma urbano de salud-enfermedad-soluciones-, y el tratamiento de la población como objeto de cambio. La alternativa implica que el cambio inicial debe darse en el personal de salud, que debe aceptar que su paradigma no es el Único, que el paradigma rural está refrendado por siglos de existencia y que, antes de condenarlo, hay que conocerlo y comprenderlo integralmente. Cuando una persona ana salud, adopta e l papel édico occiklental diciendo que Hay veces que e l paciente l l e g a tiene un a i r e . e z d e l paciente sabe a quien Sin embargo, por i o taal>ién sabe cuándo recurrir a recurrir para este tipo de dolenci l a ayuda de l a s balas mágicas de cilla modegna: l o s antibióticos. 1 ' Sin embargo, pesa mucho en l a da con e l médico y e l yerbero. n e l tipo de relación que guar- Hay gente que nunca se atiende con e l yerbero, no porqpe no crea en l a medicina tradicional, sino porque :erne que e l yerbero l e haga algo malo, porque no guardan buenas relacbmes. La conclusión es sencilla, y no r q i i e r e de investigación; e l paciente reeurre a l t i p o . d e atencibn- que l e ofreee mayod confianza. .~ Las racionalizaciones burocr&t=leas no cenducen a mejor provecho. S i existe l a alternativa de l a confluenei.a de ambas xqedicinas, hay que hacerlo, cambiando l a formación d e l médic6 e investigando. l a evaluación . _._ .- c i f n i c a d e l papel terapéutico de l a s - .. - Lo . . . ~ __ . .~ ~ . lantas. . construcción de huertos exparimentales de p b n t a s medicinales con. , . . ~~ ..--. ~ l l e v a muchas aontradicciones a resolve(r; sLn embargo, l a viabilidad de este p'royecto depende d e l cambio de ouros gac,tores;&s importantes que l o mediatizan. . .. . 1 -44- RESUMEN E l t r a b a j o describe l a experiencia de s e i s meses de t r a b a j o de campo para l a diagramación y construcción de huertos experimentales de I F , -- plantas medicinales en e l sur d e l estado de Yucatán. - De acuerdo a l a n á l i s i s de l a s enfermedades más comunmente curadas con l a f l o r a medicinal, l a s plantas más frecuentemente u t i l i z a d a s , y l a s l i m i t a n t e s agronómicas , se disena un huerto experimental determinando cuántas y cuales plantas s e u t i l i z a r á n , sus limitaciones y su potencialidad. . 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