Cristo de San Juan de la Cruz - fraternidadfranciscanadelacruz

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Cristo de San Juan de la Cruz
Cristo de San Juan de la Cruz es un famoso cuadro del pintor español Salvador Dalí realizado en
1951. Está hecho mediante la técnica del óleo sobre lienzo, es de estilo surrealista y sus
medidas son 205 x 116 cm. Se conserva en el Museo Kelvingrove, en Glasgow, Reino Unido.
La originalidad de la perspectiva y la habilidad técnica a la hora de pintar el cuadro lo han
hecho muy popular, hasta el punto de que en los años cincuenta, un fanático realizó un acto
vandálico contra él de poca gravedad. Durante los años cincuenta, el artista volvió a recurrir
varias veces al tema de la crucifixión. Un ejemplo es el Corpus hypercubus, pintado en 1954.
Para pintar este cuadro se basó en las teorías contenidas en el Discurso sobre la forma cúbica
del arquitecto del siglo XVI, Juan de Herrera, responsable del Monasterio de San Lorenzo de El
Escorial .
Dalí tomó al famoso doble de Hollywood, Russ Saunders, como modelo para pintar a Cristo,
aunque hay quien afirma que el artista tomó como modelo en realidad al trapecista Diego
Schmiedl.
Inspiración
Dalí se inspiró de un dibujo del místico San Juan de la Cruz conservado en el monasterio de la
Encarnación de Ávila y en una imagen que decía haber soñado de un círculo dentro de un
triángulo. Esta figura, que según él era como el núcleo del átomo, era similar al dibujo del
monasterio, así que decidió usarla en el cuadro.
El paisaje en calma se inspira en Port Lligat y en un dibujo de Velázquez para la rendición de
Breda. Los pescadores están inspirados en una pintura de Le Nain.
Descripción
La pintura muestra a Jesús crucificado, tomado en perspectiva y visto desde arriba, cuya
cabeza, mirando hacia abajo, es el punto central de la obra. La parte inferior del cuadro es un
paisaje apacible, formado por la bahía de Port Lligat. Abajo a la derecha, dos pescadores se
afanan en el pequeño puerto. Ambos son en realidad pintores famosos retratados por Dalí.
Entre el crucificado y la bahía se interponen unas nubes de tonos místicos y misteriosos,
iluminadas por el resplandor que emana de la cruz y de Cristo. La obra simboliza al Cristo
Redentor. El fuerte claroscuro sirve para resaltar la figura de Jesús y provocar un efecto
dramático.
Cristo es representado de forma humana y sencilla. Tiene el pelo corto, muy distinto a las
representaciones clásicas de Jesús con el pelo largo, y tiene una posición relajada. El letrero en
la parte superior de la cruz donde se dice que se colocaron las iniciales INRI, está representado
con una hoja de papel pequeña y doblada.
Dalí utilizó un trapecista profesional como modelo para pintar a Cristo. Cabe señalar que Cristo
no está herido ni está clavado a la cruz; no hay llagas ni heridas ni mucho menos sangre.
Parece que flota junto a la cruz.
Esta es posiblemente, la obra más humana y humilde que se ha pintado sobre la Crucifixión de
Cristo.
Descripción de Dalí
En el número especial de 1952, editado por la Scottish Art Review, Dalí explica la pintura con
las siguientes palabras:
“La posición de Cristo ha provocado una de las primeras objeciones respecto a esta pintura.
Desde el punto de vista religioso, esa objeción no está fundada, pues mi cuadro fue inspirado
por los dibujos en los que el mismo San Juan de la Cruz representó la Crucifixión. En mi opinión
ese cuadro debió ser ejecutado como consecuencia de un estado de éxtasis. La primera vez que
vi ese dibujo me impresionó de tal manera que más tarde, en California, vi en sueños al Cristo
en la misma posición pero en paisaje de Port Lligat y oí voces que me de decían: "¡Dalí tienes
que pintar ese Cristo!".
Y comencé a pintarlo al día siguiente. Hasta el momento en que comencé con la composición,
tenía la intención de incluir todos los atributos de la crucifixión –clavos, corona de espinas, etc.y de transformar la sangre en claveles rojos sujetos en las manos y los pies, con tres flores de
jazmín sobresaliendo de la herida del costado. Las flores hubieran sido realizadas a la manera
ascética de Zurbarán. Pero justo antes de finalizar mi cuadro, un segundo sueño modificó todo
esto, tal vez a causa de un proverbio español que dice: A mal Cristo, demasiada sangre.
En ese segundo sueño, vi el cuadro sin los atributos anecdóticos: sólo la belleza metafísica del
Cristo-Dios. También había tenido al principio la intención de tomar como modelos para el
fondo a los pescadores de Port Lligat, pero en ese sueño, en lugar de ellos, aparecía en un bote
un campesino francés pintado por Le Nain, del cual sólo el rostro había modificado a semejanza
de un pescador de Port Lligat. Sin embargo, visto de espadas, el pescador tenía una silueta
velazqueña. Mi ambición estética en ese cuadro era la contraria a la de todos los Cristos
pintados por la mayoría de los pintores modernos, que lo interpretaron en el sentido
expresionista y contorsionista, provocando la emoción por medio de la fealdad. Mi principal
preocupación era pintar a un Cristo bello como el mismo Dios que él encarna”.
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