Relaciones entre caudales mensuales en ríos de Colombia y las

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Meteorología Colombiana
N7
pp. 37–52
Marzo, 2003
Bogotá D.C.
ISSN-0124-6984
RELACIONES ENTRE CAUDALES MENSUALES EN RÍOS DE COLOMBIA Y LAS
TEMPERATURAS SUPERFICIALES DEL MAR EN LA ZONA TROPICAL
RELATIONSHIP BETWEEN MONTHLY DISCHARGES IN COLOMBIAN RIVERS AND SEA
SURFACE TEMPERATURE IN TROPICAL ZONE
JOSÉ LINO JURADO MONTAÑO
ISAGEN, S.A. - Medellín, Colombia
[email protected]
BRANT LIEBMANN
Climate Diagnostics Center- University of Colorado -Boulder, Colorado
[email protected]
Jurado, J. & B. Liebmann. 2003: Relaciones entre caudales mensuales en ríos de Colombia y las temperaturas superficiales del mar en la zona tropical Meteorol. Colomb. 7:37-52. ISSN 0124-6984. Bogotá, D.C. – Colombia.
RESUMEN
Se presentan relaciones lineales simples para entender las anomalías mensuales de los caudales
afluentes a los embalses usados para generación en Colombia (conocidos como ríos del sistema
interconectado nacional) y localizados en los Andes colombianos. Se usó el promedio bimensual
de la temperatura superficial del mar (abreviada en este trabajo como TSM) como única variable
independiente para determinar las relaciones con los caudales que se presentan después de dos
meses. Las mejores relaciones se encuentran con la TSM en el Océano Pacífico central ecuatorial, centrado levemente al oeste de la región Niño 3.4, lo que es claramente evocador de la señal
asociada al Niño. Una anomalía fría de TSM se asocia a crecientes, lo que es consistente con
muchos estudios anteriores. La mayoría de los ríos analizados, no muestran relaciones fuertes
con la TSM, aunque casi todos muestran relaciones débiles. En general, las mejores relaciones
entre el caudal y la TSM corresponden a los meses de invierno del hemisferio norte, para los ríos
localizados en el suroeste de Colombia, mientras que los ríos de la Cordillera Oriental muestran
relaciones más débiles. Durante estos meses, la correlación simultánea entre diversos ríos es
también la mejor, sugiriendo que antes o durante estos meses, la circulación de gran escala ejerce la mayor influencia en la precipitación. Pocos ríos muestran relaciones fuertes con la TSM del
océano Atlántico, generalmente durante el verano del hemisferio norte. Este documento da criterios para desarrollar modelos de predicción basados en regresiones lineales, quizás los más simples de aplicar para propósitos operacionales entre los usuarios del sector eléctrico, en comparación con modelos de múltiples variables, u otros modelos que consideran la no-linealidad evidente del sistema acoplado atmósfera-océano.
Palabras clave: Temperatura superficial del mar, El Niño, ríos colombianos, predicción hidrológica y operación de embalses.
ABSTRACT
Simple linear regression relationships are developed to understand monthly flow anomalies into
the reservoirs used by hydroelectric generators in Colombia (known as national interconnected
system), using antecedent (an average of 2 months prior to the predicted month) sea surface
temperature (SST) as a unique independent variable. The best and most consistent relationships
are found with SST in the equatorial central Pacific Ocean, centered slightly west of the Niño 3.4
38
METEOROLOGÍA COLOMBIANA N°7, MARZO 2003
region, but clearly reminiscent of the signal associated with El Niño. Anomalously cold SST is associated with increased flow, consistent with many previous studies. The stations are located in
the Colombian Andes range and most of them, however, do not show strong, consistent relationships with SST, although almost all do show weak relationships. In general, the best relationships
with Pacific SST are found for predicted flow during Northern Hemisphere winter months. During
these months, the simultaneous correlation between flow in different rivers is also best, suggesting that during (or prior to) these months the large-scale circulation exerts the most influence on
rainfall. The best and most consistent relationships with SST are found in the southwest of Colombia, and the weakest are found in the east. A few rivers show strong relationships with Atlantic
Ocean SST, usually for flow during Northern Hemisphere summer months. This document gives
criteria to develop selective prediction models based on linear regression, perhaps the simplest to
apply for operational purposes among the users of electricity market, compared with other models
already developed taking into account additional variables and non-linearity which is evident in the
coupled atmosphere-ocean system.
Keywords: Tropical sea surface temperatures, El Niño, hydrological prediction, Colombian rivers,
reservoir operation.
1.
INTRODUCCIÓN
Una fracción grande de la electricidad en Sudamérica, se
produce mediante recursos hídricos. Colombia usa un
65.4 % de su capacidad efectiva total de (13,168 MW en
enero 2002) a partir de hidroelectricidad. El trabajo descrito en este documento se motivó por una necesidad de
la industria de la electricidad, de disponer de predicciones
mejores de los caudales de los ríos que abastecen embalses en Colombia. La necesidad de incluir índices
climáticos en pronósticos de caudales a largo plazo llegó
a ser obvia durante los eventos Niño 1982/83, 1991/92 y
1997/98. Especialmente los dos primeros ocasionaron
sequía severa y el de 1991/92, causó racionamiento de
energía en todo el país. Esté último evento extremo
mostró, que las afluencias a las plantas hidroeléctricas
importantes de Colombia durante mayo de 1992, era
apenas 47.5 % de la histórica (Jurado & García, 1998).
Las afluencias a los embalses con propósitos de generación en Colombia, se pronostican usando métodos autoregresivos, basados en modelos estocásticos y complementados con el conocimiento de expertos sobre las
expectativas a corto plazo de las condiciones climáticas
recientes. La información sobre el estado futuro del clima
no se considera explícitamente por esos modelos, aunque el Subcomité hidrológico y de plantas hidráulicas del
sector eléctrico regularmente incorpora la información del
clima en sus pronósticos, con el apoyo del IDEAM, hasta
un horizonte de un año. Este documento examina las
relaciones de las anomalías mensuales de ríos afluentes
a los embalses principales del sistema interconectado
con las temperaturas superficiales del mar en los océanos Pacífico y Atlántico, agrupando las estaciones para
análisis regional. Además de las relaciones encontradas,
son igualmente importantes los pronósticos mejorados en
otras escalas que se extienden desde lo sinóptico a lo
temporal. El objetivo buscado en este trabajo fue encontrar las mejores correlaciones entre TSM y los caudales.
De acuerdo con las mejores correlaciones, regresiones
lineales, se podrían utilizar para predecir anomalías mensuales de caudal en función de valores mensuales recientes de TSM. En la formulación de cualquier modelo,
se ha recomendado evaluar su desempeño, seleccionando una “parte dependiente” del registro total de datos
(período de entrenamiento) y una “parte independiente”
como período de verificación. Ambas partes deben estar
estrictamente separadas dice Hastenrath (2000), que es
deseable disponer por lo menos de 30 años de registro
dependiente y 20 de registro independiente, extensión de
datos difícilmente encontrados en el sector eléctrico.
Muchas estaciones hidrológicas de Colombia, se han
utilizado en estudios de predicción, mostrando altas relaciones con otras variables, por ejemplo IOS, temperatura
(González, 1994), así como también diversos métodos
de la predicción (Carvajal et al., 1994; Poveda & Mesa,
1996; Poveda et al., 2001).
Una cantidad apreciable de trabajos previos indican que
las desviaciones de las temperaturas superficiales del
mar en el trópico con respecto a sus medias, pueden
ejercer cambios drásticos en el clima global. Se cree
generalmente que una TSM excepcionalmente caliente
en las zonas tropicales, está asociado a una fuerte convección sobre ellas (Bjerknes, 1966). Así mismo los
trenes de ondas Rossby que provienen de una fuente de
divergencia de alto nivel (Hoskins & Karoly, 1981), pueden influenciar los patrones de la circulación, y por lo
tanto la precipitación alrededor del globo. Aún los patrones tropicales de precipitación indican asociaciones más
robustas con las anomalías tropicales de TSM.
Buena parte de la investigación que involucra relaciones
entre TSM y las anomalías de la precipitación (o de caudales), se ha centrado en las anomalías de TSM asociadas a El Niño / fenómeno meridional de la oscilación sur
(ENSO) (Kiladis & Díaz,1989; Ropelewski & Halpert,
1987).
Este fenómeno, que es la causa más grande de la variabilidad de TSM interanuales y de la circulación atmosférica en la zona tropical, presenta la amplitud más grande
en el océano Pacífico. El Niño ocurre cuando las TSM
llegan a ser anómalamente calientes desde el centro
hasta el oriente del Pacífico, desplazando la convección
hacia el este, desde su localización normal en el Pacífico
Occidental.
Las asociaciones simultáneas de datos de un número
limitado de estaciones en Suramérica tropical y de varios
índices del Niño, indican que una amplia zona, incluyen-
JURADO & LIEBMANN: RELACIONES CAUDALES MENSUALES RÍOS COLOMBIA TEMPERATURAS MAR
do Colombia, tiende a ser más seca durante un Niño (o
durante períodos con un índice meridional negativo de la
oscilación sur (IOS), que se define como la diferencia
entre la presión estandarizada en Darwin, Australia menos la de Tahití). Una excepción importante es la costa
oeste ecuatorial del continente, que recibe una precipitación copiosa durante el Niño. Pulwarty & Díaz (1993)
determinaron que durante la fase caliente del ENSO a
partir de diciembre - febrero, el centroide de la convección cambia de su posición normal en la Amazonía colombiana hacia el suroeste en Ecuador. Para más detalles sobre las asociaciones entre ENSO y precipitación o
caudales, ver los trabajos de Hastenrath (1978), Horel &
Cornejo-Garrido (1986), Aceituno (1988), Rogers
(1988), Rao & Hada (1990), Marengo (1992), Poveda &
Mesa (1997).
En Colombia y en la mayor parte de Suramérica tropical,
la precipitación disminuye durante un evento Niño y aumenta durante La Niña. Poveda & Mesa (1997), observaron una señal más fuerte durante la Niña, y al igual que
las anomalías de la precipitación están retrasadas con
respecto al IOS, cuando se avanza hacia el este (Gil,
39
Quiceno & Poveda, 1998), encontraron relaciones más
fuertes entre los caudales y TSM durante septiembre febrero. También desarrollaron regresiones múltiples
para predecir con anticipación de 3 meses, anomalías de
caudal, incluyendo el nivel del Río Negro en Manaus,
Brasil, la oscilación del Atlántico Norte, y caudales precedentes. Poveda & Mesa (1996), también encontraron
una influencia fuerte del IOS y la TSM del océano de
Indo-Pacífico en la hidrología colombiana, con algunas
ideas para la predicción, debido a las altas relaciones en
el período diciembre-febrero. La costa oeste ecuatorial de
Colombia también muestra menos precipitación durante
El Niño, coherente también con un debilitamiento de la
corriente de bajo nivel del Chocó (occidente de Colombia)
sobre la franja extrema oriental del Pacífico tropical durante El Niño en comparación con los eventos fríos, (Poveda & Mesa, 2000).
Este trabajo llega a la misma conclusión básica, las anomalías del caudal están relacionadas a menudo con las
de TSM en el océano Pacífico ecuatorial central, de tal
forma que anomalías positivas de TSM conducen a anomalías negativas de caudales.
Tabla 1. Regiones y características de los ríos analizados
Región
Suroeste
Este
Central
Noroeste
Nombre del río /
Embalse
Alto Anchicayá
Calima
Digua
Cauca/ Salvajina
Batá / Chivor
Chuza
Guavio
Magdalena / Betania
Prado
Miel 1
Bogotá
Guatapé / Playas
Nare / El Peñol
San Lorenzo / Jaguas
San Carlos / Punchiná
Porce 2
Guadalupe
Grande 2
Urrá
2.
Estación
No.
101
105
108
115
102
106
112
103
114
134
104
111
113
117
116
133
110
109
132
3
Caudal medio m /s
Inicio del registro
Area de drenaje km
55
14
26
141
81
12
72
428
54
84
26
32
49
41
28
109
22
33
340
1975
1946
1975
1946
1956
1967
1963
1961
1955
1963
1934
1959
1955
1955
1964
1955
1937
1942
1960
385
287
336
3952
2420
57
1350
12572
1724
770
4720
294
1250
428
300
3023
396
1056
4600
DATOS
Los caudales utilizados en este estudio son estimaciones
de los aportes hidrológicos naturales a 19 embalses de
generación hidroeléctrica en Colombia, es decir sin transferencias de cuencas vecinas y se obtienen por lo general mediante balances hídricos o por extrapolación de
caudales medidos directamente en estaciones de aforo.
Las áreas de drenaje de las cuencas son independientes.
La Tabla 1, lista los embalses y ríos analizados, con otros
parámetros relevantes. La Fig.1, muestra la ubicación de
las estaciones. Para este estudio, Colombia se divide en
4 regiones geográficas, de acuerdo a los distintos patrones hidrológicos intranuales de los ríos. La región Suro-
2
este, incluye embalses al oeste de la cordillera central de
los Andes y al sur de 5N, incluyendo el Valle del Cauca.
La región Este incluye los embalses o ríos localizados en
la cordillera oriental. La región Central comprende el valle
sur del río Magdalena, entre las cordilleras central y
oriental, al sur de 8N. El río Bogotá, a pesar de estar en
la cordillera oriental, se agrupó con los ríos de la región
central, debido a la similitud en el patrón hidrológico intranual. La región Noroeste comprende 8 embalses localizados en la cordillera central, al norte de 5N. Las medias mensuales de TSM, se obtuvieron de los datos de
reanálisis de NCEP/NCAR (Kalnay et al., 1996) de 1958
a mayo de 1999, que a su vez vienen del reanálisis de
Reynolds a partir de 1982. La Oficina Meteorológica de
40
METEOROLOGÍA COLOMBIANA N°7, MARZO 2003
Reino Unido, suministró la base de datos globales de la
temperatura superficial del mar y de zonas heladas, los
cuales se codificaron en una malla Gaussiana de 192
longitud y 94 de latitud.
Figura 1. Localización de estaciones y las regiones analizadas
3.
ASPECTOS METODOLÓGICOS
Con base en estudios anteriores de Poveda & Mesa
(1997), se considera la TSM como una opción razonable
a explorar como posible predictor del caudal. También se
cree que esta variable puede forzar las anomalías de
circulación atmosférica, causando anomalías de precipitación y consecuentemente variaciones de caudal. Tiene
sentido físico la existencia de un retraso entre anomalías
de la TSM y las de caudal. Como primer paso para identificar patrones potenciales, los promedios mensuales de
TSM, se correlacionaron con los caudales mensuales
observados para cada mes. El caudal mensual esperado,
que se denomina en adelante “caudal objetivo”, se correlacionó con TSM previas (0 a 5 meses). Estas correlaciones espaciales, se dibujan como isopletas y mediante
apreciación visual se examinan aquellas que indiquen
patrones físicamente realistas, es decir que durante varios meses se correlacionen con valores relativamente
altos. El paso siguiente fue construir un promedio de dos
meses consecutivos de TSM, considerando el segundo y
tercer mes precedente al mes del caudal objetivo, mes
para el cual se desea examinar la relación o eventualmente proponer un modelo de predicción. El propósito de
este promedio es desarrollar un estadístico que pueda
ser más estable que un dato mensual de TSM, así como
también proporcionar una perspectiva cualitativa con
varios meses de anticipación. Para aplicar este método,
los valores medios mensuales consecutivos de la TSM
para cada mes se promedian, en lugar de promediar
anomalías o normalizar anomalías cada mes. Las observaciones mensuales de TSM, no se obtienen sino hasta
mediados del mes siguiente.
En este trabajo, las TSM no se utilizan para el mes antes
del caudal objetivo (p. ej., la TSM de julio no se utiliza
para predecir caudal de un río de agosto). En la práctica
sectorial, cuando las TSM están disponibles en mediados
de mes, se utilizan para pronosticar, con sentido común,
el caudal para el mes actual y el próximo, asumiendo
alguna persistencia.
Los mapas de estos promedios bimensuales muestran un
patrón similar a los de meses individuales, pero generalmente algo más suaves. La confiabilidad estadística de
estos patrones se estima de un estadístico estándar tstudent y correlacionando cada mitad del registro independientemente. Si el modelo se juzga estadísticamente
confiable, se construye un índice específico de la TSM
haciendo un promedio de varios puntos dentro de la
región de alta correlación. Con base en este índice, se
desarrollan regresiones para predecir la magnitud del
caudal del río debido a variaciones en la TSM.
JURADO & LIEBMANN: RELACIONES CAUDALES MENSUALES RÍOS COLOMBIA TEMPERATURAS MAR
a)
c)
41
b)
d)
Figura 2. Radiación de onda larga saliente (OLR) por trimestres en W/m . Promedios entre enero/79-mayo/99.
Fuente:NOAA-CIRES, Climate Diagnostics Center, Boulder, Colorado
2
4.
ANÁLISIS Y DISCUSIÓN DE
RESULTADOS
La climatología colombiana es compleja, debido a sus
características de relieve, posición geográfica y exposición a diversos eventos de mesoescala. La cadena de los
Andes, va desde la dirección sur-suroeste hacia al nortenoreste y cubre el tercio occidental del país, se divide en
tres estribaciones distintas en el sur del país, formando
valles interandinos. Los picos más altos, aproximadamente 5000 m s.n.m, están en la Cordillera Central. Las cordilleras occidental y central comienzan a disminuir en altura
cerca de 5N, y casi desaparecen en los 8N. Hay tres
vertientes, la oriental descarga a los ríos Orinoco y Amazonas, la central entre las cordilleras oriental y central al
río Magdalena, y la occidental entre las Cordilleras Occidental y Central al río de Cauca, a su vez afluente del río
Magdalena (Fig.1). Esta delimitación de cuencas entre
las cadenas montañosas, imprime además características hidrológicas regionales que determinan la clasificación hidrológica regional definida en este trabajo.
4.1.
Climatología
La actividad convectiva de gran escala en América tropical es más activa en el verano del hemisferio norte (Horel
& Cornejo-Garrido, 1989). La Fig. 2, muestra la variación climatológica de la radiación saliente de onda larga
trimestral (OLR del acrónimo en inglés). En las zonas
tropicales, los valores más bajos de OLR son indicativos
de convección profunda y de precipitación abundante.
Durante el verano meridional (diciembre-febrero; Fig.2a),
la convección se centra sobre la cuenca Amazónica, pero
se extiende hacia el noroeste, mostrando el sur de Co-2
lombia con convección activa (OLR < 230 Wm ). Sin
embargo, ésta aparenta ser la temporada más seca,
principalmente en las regiones central y este, pero la
región sur muestra lluvias durante este período. Para los
meses de marzo-mayo (Fig.2b), los valores bajos de OLR
se extienden sobre Colombia, como parte del paso anual
de la Zona de Confluencia Intertropical (ZCIT) hacia el
hemisferio norte, la cual facilita la convección, aunque la
Amazonía es menos activa que los 3 meses precedentes.
42
METEOROLOGÍA COLOMBIANA N°7, MARZO 2003
La Fig.2c, muestra la ubicación de la convección de la
costa norte del Pacífico colombiano durante el verano del
hemisferio norte (junio-agosto), invirtiéndose el gradiente
de OLR con referencia a los seis meses anteriores. Durante los meses septiembre-noviembre (Fig.2d), donde se
observan valores más bajos en el noroeste y sureste,
pues la convección está migrando hacia el hemisferio
meridional. En general la OLR es un parámetro consistente con la precipitación; por lo que estos mapas muestran lo complicado del ciclo anual de la precipitación
sobre Colombia, así como la influencia de ambos solsticios.
El ciclo anual de caudales es algo difícil de entender con
los mapas de OLR, aunque se espera un retardo entre la
mínima OLR y el flujo máximo. La Fig.3, muestra el ciclo
anual por regiones de cada una de las estaciones usadas
en este estudio. En todos, excepto los del este, hay dos
picos. En el suroeste (Fig.3a), los caudales máximos
ocurren en mayo y noviembre (a excepción de Salvajina,
que presenta un segundo máximo en diciembre). Los ríos
del este (Fig.3b), muestran un sólo pico en julio. Durante
este período, la vertiente oriental está influenciada por los
vientos Alisios provenientes del sureste, que causan la
precipitación de tipo orográfico (el aire húmedo choca
contra la vertiente este de la cordillera oriental de los
Andes colombianos). Los ríos de la región central
(Fig.3c), no están tan agrupados como en las otras regiones. El caudal más alto sucede en el río MagdalenaBetania, con un pico primario en julio y otro secundario
en octubre.
La precipitación aguas arriba de Betania está influenciada
también por Alisios, aunque en un grado menor que los
ríos en la región este. En dos tributarios aguas abajo de
Betania, el pico secundario es en Abril o Mayo. El río
Bogotá muestra un ciclo similar a Betania, pero su cuenca está intervenida por otros usos que hacen difícil medir
el caudal. Los caudales máximos en el Noroeste (Fig.3d),
ocurren en mayo y octubre. En Urrá, río más bien aislado
de los otros, el máximo ocurre en julio.
4.2.
Variabilidad Interanual
En este subcapítulo, se muestran los mapas de correlación de los ríos con relaciones interesantes con la TSM
antecedente. Las regresiones se desarrollan en los casos
donde se espera que sean útiles en predecir anomalías
del caudal. Para muchos ríos, las correlaciones con la
TSM antecedente son mayores que las correlaciones
simultáneas con ríos próximos, aunque, en general, las
mejores correlaciones corresponden a la TSM, pero desfasadas un mes atrás. La Tabla 2, muestra la correlación
simultánea entre todos los ríos y para todos los meses,
calculadas después de remover las medias mensuales.
Aunque las correlaciones son generalmente mayores
entre las estaciones próximas, es raro que la varianza de
una estación sea explicada por otra en más de un 50%.
En la región central, sin embargo, los ríos se correlacionan mal entre sí, y están más correlacionados los ríos del
noroeste. En la Tabla 2, se ilustran las pequeñas escalas
en las cuales las anomalías climáticas varían regional-
mente en una topografía tan compleja como la de Colombia.
La correlación media mensual se muestra en la Fig.4,
(todos los coeficientes son significativos en el nivel 95%,
usando la prueba “t”). Un ciclo anual variable es evidente,
con una correlación máxima en febrero y un mínimo en
junio.
Las relaciones entre los ríos cambian mensualmente,
sugiriendo que el régimen hidrológico en Colombia está
afectado principalmente por una circulación de gran escala en el período noviembre-abril. Un aspecto importante
es ver si las regresiones desarrolladas más adelante
describen una relación o si ocurren por casualidad.
Parte de la dificultad en la determinación de la robustez
de las relaciones observadas implica la determinación de
los grados de libertad temporales. Si se calcula la autocorrelation de un mes de retraso de promedios trimestrales
de la TSM año tras año y a lo largo del océano Pacífico
ecuatorial, casi en todas partes es menos de 0.3 (donde
se encuentran la mayoría de las correlaciones altas con
los caudales). Así, una estimación independiente cada 2
años parece ser una estimación conservativa. Por lo
tanto, para 20 puntos independientes (18 grados de libertad), un t-estadístico (Spiegel, 1988), predice que una
correlación de 0.45, ocurrirá por casualidad en menos
que 5% de las muestras. Aunque no se hace ninguna
prueba formal para considerar grados de libertad espaciales (Livezey & Chen, 1983), la extensión de las altas
correlaciones espaciales mostradas más adelante son
buenas para el umbral requerido para la significancia.
Suroeste
Hay 4 estaciones disponibles del sistema interconectado
en el suroeste de Colombia, y de éstas, el caudal del
medio del río Cauca, embalse Salvajina, tiene un orden
de magnitud mayor que dos de ellos, y más del doble del
otro. Las correlaciones entre la TSM promedia de noviembre y diciembre y el caudal en febrero en Salvajina,
se presentan en la Fig.5a. La autocorrelation retrasada
un mes en Salvajina para febrero es –0.18. El caudal en
el río Cauca en este punto está fuertemente influenciado
por la TSM, indicando que la TSM cálida está asociada a
anomalías negativas del caudal. No parece obvio una
correlación negativa, si se observa la vecindad a la línea
ecuatorial, donde El Niño se manifiesta con precipitación
torrencial (Horel & Cornejo-Garrido, 1986). El clima
local (humedad, precipitación y evaporación) y condiciones del suelo de las cuencas de montaña afectan también el patrón de caudal intranual. Las Figs.5b-5c, muestran las correlaciones para la primera y segunda mitad de
un período de 41 años. Hay áreas grandes, donde al
parecer el estadístico de las correlaciones es relevante
para la primera mitad del registro y no así durante la
segunda mitad. En el Pacífico ecuatorial central hay un
área con correlaciones altas en ambas partes del registro. De acuerdo con estos mapas, se forma un índice
promediando los 56 puntos de la zona comprendida entre
174.4W - 150.0W y 2.9N, - 2.9S. La correlación entre
este índice de la TSM de noviembre-diciembre y caudal
JURADO & LIEBMANN: RELACIONES CAUDALES MENSUALES RÍOS COLOMBIA TEMPERATURAS MAR
del río es –0.76, indicando que 58% de la varianza del
caudal del río durante febrero es explicada por el índice
de la TSM. Para estimar los cambios en el caudal del río,
asociados a los cambios en la TSM, se encontró la siguiente ecuación:
Caudal = A  TSM
(1)
43
Donde Caudal es la desviación del caudal del medio y
TSM es la desviación de la temperatura media multianual. Si se aplica al río Cauca, con media en febrero del
3
período 1959-1998 de 144.0 m /s, y la TSM es la temperatura media de noviembre-diciembre,27.7C (
=1.15C).
Figura 3. Caudales medios mensuales de los ríos indicados en la Tabla 1. Los caudales del río Magdalena en Betania en la Fig.3c y el de Urrá (132) en la Fig.3d se dividieron por 10. Fuente: Series del sector eléctrico a mayo/99
De acuerdo con la Tabla 3, por cada aumento de 1C en
la media de TSM, el caudal del río disminuirá en 41.7
3
m /s (factor A).
La región sobre la cual se construye el índice es más
pequeña que la región Niño 3.4 (170W - 120W, 5N 5S) y desplazada al oeste. TSM 3.4 es un índice
comúnmente utilizado para juzgar el estado del ENSO. Si
se substituyen las temperaturas Niño 3.4 (obtenidas del
Website de los centros nacionales para la predicción
ambiental de Estados Unidos) para ese índice, la correla-
ción R es –0.73, que explica 5% menos varianza que el
índice determinado.
En la Tabla 3, se observa que los coeficientes de la regresión para la correlación con Niño 3.4 son algo diferentes que los del índice. Las mejores correlaciones con la
TSM, se encontraron correlacionando índices de diversas
regiones con las anomalías del caudal. Para evitar la
incertidumbre estadística agregada de buscar la región
que mejor se correlaciona con la TSM, el mismo índice se
utiliza a través de este estudio. Además, en algunos
44
METEOROLOGÍA COLOMBIANA N°7, MARZO 2003
casos se obtienen mejores correlaciones promediando
más meses de la TSM, pero para ser consistentes se
utilizaron sólo dos meses.
Este
De tres ríos en la región Este, Guavio y Batá se localizan
en la vertiente este de la cordillera oriental. Ninguno de
ellos muestra relaciones fuertes con la TSM ya sean del
Pacífico o del Atlántico, considerando cualquier mes.
Esto es algo llamativo, puesto que la cuenca Amazónica
experimenta condiciones secas durante El Niño, conforme a los resultados de otros estudios en estaciones de la
Amazonía brasileña, (Aceituno, 1988).
El caudal del río Cauca en Salvajina se correlaciona bien
con la TSM del este del Pacífico, para determinar caudales de enero a marzo. Mesa Poveda & Carvajal (1997),
encontraron correlaciones simultáneas de caudal en
estaciones del río Cauca, abajo del embalse Salvajina.
Los estudios anteriores también de Mesa et al. (1995),
mostraron R = 0.63 cuando los caudales en Salvajina
eran dependientes de la TSM en la región de Niño 4, con
un mes de anticipación.
Estos embalses, sin embargo, muestran relaciones débiles con la TSM en varios meses. Esto es coherente con
los hallazgos de Poveda & Mesa (1997), que mostraron
que la influencia de ENSO se retrasa progresivamente
hacia el este, las relaciones son más fuertes para retrasos de varios meses. Como poca varianza se explica por
correlaciones, no tiene sentido desarrollar las ecuaciones
de regresión para esta región.
El caudal de diciembre en Calima se correlaciona bien
con la TSM antecedente. Éstas y otras regresiones se
muestran en la Tabla 3. Registros menos extensos como
Digua y Alto Anchicayá (que comienzan en 1975) tienen
correlaciones fuertes para los meses objetivo de julio a
abril, excepto octubre y noviembre (aunque las correlaciones son más grandes cerca a la costa), y de julio a
febrero, excepto noviembre. En la región suroeste, durante la primavera del hemisferio norte, las mejores correlaciones se presentan en áreas cercanas a la costa (al este
de 120W). Ambos ríos muestran correlaciones espectaculares con la TSM del Atlántico durante algunos meses,
como los correspondientes al verano del norte. La Fig.6,
muestra la TSM de mayo - junio correlacionada con el
caudal de agosto de Digua. Las correlaciones en el Atlántico ecuatorial son tan grandes como las del este del
Pacífico ecuatorial. No se desarrollaron regresiones para
esas zonas.
Central
De los 4 embalses en esta región, solamente Betania,
localizado más al sur y con las mayores afluencias, tiene
relación notable pero no fuerte, consistente con el ENSO
(para cada mitad del registro), solamente para febrero. La
relación para marzo es fuerte, pero principalmente para la
primera mitad del registro, por lo que su regresión no se
muestra.
Como las estaciones del Este, mayoría de las estaciones
en esta región muestran relaciones débiles con el ENSO.
Tabla 2. Correlación simultánea de anomalías entre los ríos, para todos los meses empezando en 1958. Se removió
la media histórica antes de hacer las correlaciones en el período común. Valores menores que 0.40 se ajustaron a 0.
Los códigos de los ríos se mencionan en la Tabla 1
101
105
108
115
102
106
112
104
114
134
103
109
110
111
113
116
117
133
132
101
1
.58
.75
.47
0
0
0
0
0
0
0
.51
0
0
.47
0
0
.42
0
105 108 115 102 106 112 104 114 134 103 109 110 111 113
116 117 133
1
.50
.67
0
0
0
0
.41
.59
.4
.65
.41
0
.60
0
.50
.54
.40
1
0
.41
0
1
.43
0
0
0
0
0
0
0
.42
0
0
.43
0
0
0
0
1
0
0
0
.52
.51
.51
.58
.62
0
0
.54
0
.40
.48
0
1
.52
.60
.65
0
0
.41
0
0
0
0
0
0
0
0
1
.74
.52
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
.58
0
0
.42
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
.52
.47
0
0
.47
0
0
0
0
1
0
0
.46
0
0
.44
0
0
0
0
1
0
.52
0
0
.51
0
0
.46
0
1
.41
0
0
0
0
0
0
0
1
.71
.46
.85
.42
.69
.76
.46
1
.41
.62
0
.55
.60
0
1
.52
.65
.46
.43
0
1
.52
.65
.76
0
1
.59
0
1
0
JURADO & LIEBMANN: RELACIONES CAUDALES MENSUALES RÍOS COLOMBIA TEMPERATURAS MAR
45
Figura 4. Promedio mensual de correlaciones simultáneas entre cada uno de los ríos utilizados en el estudio
Tabla 3. Parámetros de regresión entre la TSM y el caudal. Las longitudes están en grados oeste. “Índice” se define
como la región 2.9S-2.9N, 174.4W-150.0W. El predictor es la TSM del segundo y tercer mes antes del mes objetivo. (p.ej., la TSM de septiembre-octubre se usa para predecir el caudal de diciembre). Las regresiones de la TSM Niño 3.4 están sombreadas
Estación
(Embalse)
Mes objetivo
Región del
predictor
R
Salvajina
”
”
”
”
”
Calima
”
Betania
”
San Lorenzo
”
Nare
”
Río Grande 2
”
”
”
”
”
Guatapé
Febrero
”
Enero
”
Marzo
”
Diciembre
”
Febrero
”
Febrero
”
Diciembre
”
Septiembre
”
Diciembre
”
Febrero
”
Agosto
Índice
Niño 3.4
Índice
Niño 3.4
Índice
Niño 3.4
Índice
Niño 3.4
Índice
Niño 3.4
Índice
Niño 3.4
Índice
Niño 3.4
Índice
Niño 3.4
Índice
Niño 3.4
Índice
Niño 3.4
18.1S-12.4S
33.8W 15.0W
-0.76
-0.73
-0.72
-0.70
-0.74
-.69
-.68
-.65
-0.68
-0.61
-0.65
-0.68
-0.66
-0.68
-0.72
-0.69
-0.68
-0.67
-0.73
-0.70
0.67
Noroeste
Las relaciones entre la TSM y los ríos en esta región
varían considerablemente, a pesar de la proximidad cercana de los 7 embalses (Urrá está algo aislado al norte).
Los embalses San Carlos, Guadalupe, Porce 2, y Urrá
muestran poca relación con la TSM. San Lorenzo mues-
Media
de la
TSM
C
27.7
26.6
27.8
26.6
27.5
26.6
27.8
26.6
27.7
26.6
26.1
26.6
27.8
26.6
28.2
27.4
27.8
26.6
27.7
26.6
26.3
Caudal
medio
3
m /s
A
144.0
144.0
161.8
161.8
132.6
132.6
14.4
14.4
302.7
302.7
22.0
22.0
46.9
46.9
37.3
37.3
32.4
32.4
22.1
22.1
27.7
-41.7
-39.4
-43.3
-42.6
-36.8
-38.0
-3.8
-3.7
-75.0
-66.9
-4.0
-4.1
-9.1
-0.73
-12.1
-11.3
-6.5
-5.0
-5.2
-5.0
12.9

Caudal
3
m /s

TSM
C
62.6
62.6
64.2
64.2
56.9
56.9
5.2
5.2
129.7
129.7
7.0
7.0
12.6
12.6
11.0
11.0
8.6
8.6
8.2
8.2
8.2
1.15
1.16
1.07
1.06
1.15
1.17
0.91
0.91
1.2
1.2
1.15
1.16
0.91
0.91
0.66
0.67
0.91
0.91
1.15
1.16
0.43
tra una relación moderada del ENSO para febrero
(Fig.7a), y relaciones más débiles por meses adyacentes.
El primer quinto del registro (Fig.7b), no tiene ninguna
relación con la TSM del Pacífico, pero sí durante el resto
del registro (Fig.7c). La correlación simultánea entre San
Lorenzo y Nare, sin embargo, es mejor en la primera
mitad del registro que en la segunda. La Tabla 3, indica
las regresiones para los registros completos.
46
METEOROLOGÍA COLOMBIANA N°7, MARZO 2003
Figura 5. Isopletas de correlación entre los promedios de temperaturas superficiales del mar (SST) de noviembre a
diciembre y el caudal de febrero del río Cauca (embalse Salvajina). a) Registro completo b) Primera mitad del registro c) Segunda mitad del registro
Nare se correlaciona bien con el Pacífico ecuatorial para
los meses de diciembre y septiembre. Diciembre revela
correlaciones con la TSM en la Costa del Oeste de América Central (~14N-16N, 116W-105W) y es similar
para cada mitad del registro (no mostrada). La desviación
estándar la TSM en esta región es pequeña (~0.35C),
posiblemente debido a error de medida, por lo que la
regresión se desarrolló para la región ecuatorial. El embalse Río Grande 2 indica relaciones fuertes con la TSM
para septiembre, diciembre, y febrero (para meses adyacentes las relaciones son más débiles).
Lo más sobresaliente de la región Noroeste es el registro
de 40 años del río Guatapé, que muestra una correlación
fuerte entre el caudal y TSM del Atlántico suroeste tropical (Fig.8a) de agosto. En otros meses hay pocas correlaciones de la amplitud relevante. Esta aparente relación
es físicamente evidente cuando el sur del océano Atlántico tropical es anómalamente caliente, marca el inicio de
la estación de lluvias en las partes de la cuenca del Amazonas (Marengo et al., 2000).
Por lo tanto, el cambio de la convección hacia el verano
del hemisferio meridional puede ocurrir antes de lo nor-
mal, cuando el Atlántico está cálido. Debe observarse, sin
embargo, que el cambio en la convección del hemisferio
norte al sur ocurre siempre después de agosto en el
estudio de Horel, Hahmann & Geisler (1989).
Como en las correlaciones en San Lorenzo, el aspecto
más destacado es la relación evidente entre la TSM y el
caudal en Guatapé, donde se nota un aumento grande de
las correlaciones de la primera a la segunda parte del
registro (Fig.8b y 8c). El cambio en la correlación entre
estas partes de los datos se debe a los primeros 10 años.
Si se omiten estos años, los últimos 30 años así lo indican.
Una posible explicación para este cambio en la correlación con el tiempo, puede ser que en el Atlántico sur las
observaciones marítimas de la TSM eran esporádicas en
la década de los años 60 y se han incrementado con el
tiempo (Woodruff et al., 1987; S. Woodruff, comunicación personal). La tendencia de incrementar mediciones
es más obvia en la región de El Niño del Pacífico que en
el suroeste del Atlántico tropical.
JURADO & LIEBMANN: RELACIONES CAUDALES MENSUALES RÍOS COLOMBIA TEMPERATURAS MAR
47
Figura 6. Isopletas de correlación entre los promedios de temperaturas superficiales del mar (SST) de mayo a junio
y el caudal de agosto del río Digua. a) Registro completo b) Primera mitad del registro c) Segunda mitad del registro
Aunque para muchos de los ríos descritos en este estudio la relación entre el caudal y la TSM Pacífico tropical
es débil o no lineal, por lo tanto poca varianza se explica
por una regresión lineal.
región Suroeste, donde las estaciones muestran la relación lineal más consistente con la TSM, los caudales
estuvieron por debajo del promedio durante ambos Niños.
Es muy posible que el caudal (por lo menos en signo) sea
influenciado por las anomalías de la circulación asociadas a grandes eventos de El Niño y a los eventos de La
Niña. Las anomalías normalizadas del caudal para enero
1983, 1998 y 1999, fueron altas para estos eventos y se
muestran en la Fig.9. Las anomalías de la TSM fueron
mayores que una desviación estándar sobre el promedio
de junio de 1982 a mayo de 1983 y desde mayo de 1997
a marzo 1998 y fueron más de una desviación estándar
por debajo de la media desde julio de 1998 - febrero de
1999 (a excepción de septiembre de 1998).
Los ríos de las regiones Central y Noroeste también son
consistentes con la TSM, a excepción de desviaciones
negativas en Guatapé y San Carlos durante enero de
1983. Hubo desviaciones positivas en Betania y Prado
durante enero de 1998 (Fig.9b).
El caudal en todos los ríos fue mayor que el promedio
durante enero y febrero de 1999 (no mostrado). En la
En el Este, mientras que el caudal estaba por debajo del
promedio durante enero y febrero 1983, contrariamente
con otras regiones, estuvo por encima de la media en
enero y febrero 1998. Solamente con 3 ejemplos, se
ilustra que la región Este, los ríos están influenciados por
otros eventos climáticos además de la TSM en el Océano
Pacífico Central.
48
METEOROLOGÍA COLOMBIANA N°7, MARZO 2003
Figura 7. Isopletas de correlación entre los promedios de temperaturas superficiales del mar (SST) de noviembre a
diciembre y el caudal de febrero afluente al embalse San Lorenzo. a) Registro completo b) Primeros 8 años del registro c) Ultimos 33 años del registro
El modelo de relaciones estadísticas de la ecuación 1,
aplicado a los datos del río Cauca (embalse Salvajina)
mostró el R más alto con la TSM. Se utilizó este modelo
para predecir caudal con dos meses de anticipación con
base en la TSM. Para construir un modelo lineal, el registro se divide en dos períodos: uno de entrenamiento,
1951-1996 y otro de prueba 1997-2001. Los resultados
se muestran en Fig.10, donde la ecuación del caudal
2
objetivo de enero tiene R = -0,7349.
Febrero muestra resultados similares. La Fig.10c, es una
comparación entre las desviaciones observadas y pronosticadas de caudal medio en febrero.
Aplicando las ecuaciones para el período de verificación,
p.ej. 1998, que fue un año seco, con desviaciones obser-
vadas de la TSM de oct-nov/97 de 2.73C y una desvia3
ción del caudal observado de -120,9 m /s en enero de
1998. El caudal pronosticado tenía un error de 0.4%.
Para 1999 el error del modelo de predicción de Salvajina
aumentó hasta 47.4% con respecto a la desviación caudal (108 m3/s), cuando la desviación de la TSM era 1.3C, indicando una fase fría del océano.
A pesar de esta correlación alta para el período de entrenamiento, el modelo preserva el signo de la desviación
del caudal en 4 de los 5 años (incluyendo el 2001). Esto
indica que el clima local puede determinar diferentes
resultados en la magnitud del caudal pronosticado.
JURADO & LIEBMANN: RELACIONES CAUDALES MENSUALES RÍOS COLOMBIA TEMPERATURAS MAR
49
Figura 8. Isopletas de correlación entre los promedios de temperaturas superficiales del mar (SST) de marzo a junio
y el caudal de agosto del río Guatapé (afluente al embalse Playas). a) Registro completo b) Primeros 10 años del
registro c) Ultimos 30 años del registro
Figura 9. Desviaciones de caudal con respecto a la media mensual, normalizadas por la desviación estándar, para
los eneros de 1983, 1998 y 1999. Los nombres de los ríos se describen en la Tabla 1
50
METEOROLOGÍA COLOMBIANA N°7, MARZO 2003
Serie Salvajina 1951-1996 - Modelo eneros
Desv Q eneros m3/s
200.0
150.0
100.0
50.0
-3.0
-2.0
0.0
-1.0-50.0 0.0
1.0
2.0
3.0
-100.0
-150.0
Desv SST 3.4
Serie Salvajina 1951-1996 - Modelo febreros
Desv Q febreros m3/s
200.0
150.0
100.0
50.0
0.0
-3.0
-1.0-50.0
1.0
3.0
-100.0
-150.0
Desv SST 3.4
Modelo 1951-1996 Q Eneros
Modelo 1951-1996 Q Febreros
R2
A: Slope
interc
R2
A: Slope
interc
-0.73498
-44.404
4.29E-13
-0.68912
-35.495
5.61E-14
Desviaciones de caudal para febreros
Serie Salvajina
Desviaciones pronosticadas
80
60
40
20
-100
-50
0
-20 0
50
100
150
200
-40
-60
-80
-100
-120
De s viacione s obs e rvadas
Figura 10. Modelos de predicción de afluencias al embalse Salvajina (río Cauca) para los meses de enero y febrero
(arriba). Verificación del modelo para los meses de febrero 1997 a 2001(abajo)
JURADO & LIEBMANN: RELACIONES CAUDALES MENSUALES RÍOS COLOMBIA TEMPERATURAS MAR
CONCLUSIONES
El propósito del trabajo descrito en este documento, era
encontrar las mejores relaciones entre los caudales
afluentes a las principales hidroeléctricas en Colombia y
la TSM. El estudio es coherente con el trabajo de otros
autores que han mostrado que la TSM en el Océano
Pacífico, se puede utilizar como predictor de caudal. Los
promedios de la TSM dentro de un área más pequeña y
desplazada ligeramente al oeste con respecto a la región
de Niño 3.4, son consistentes (excepto con dos ríos del
noroeste) para producir las relaciones ligeramente mejores que las encontradas usando el índice de la zona Niño
3.4. Además, se encontró en algunos ríos que la TSM en
el Atlántico ecuatorial se puede usar para predecir caudal, pero estas relaciones son sospechosas por la carencia de consistencia en los otros ríos, aún de la misma
región.
Las correlaciones mensuales simultáneas entre los ríos
son mejores dentro de regiones, pero solamente explican
hasta un 50% de la varianza. Hay un claro ciclo estacional en las correlaciones simultáneas entre los ríos estudiados, especialmente de diciembre a abril, con un pico
secundario débil en septiembre, sugiriendo que la circulación de gran escala tiene más influencia durante los
períodos en que las correlaciones son grandes. Las relaciones entre caudales y la TSM antecedente en el Pacífico son coherentes con esta expectativa, siendo más
grande en los meses de noviembre – abril. Los ríos en el
suroeste de Colombia están bien correlacionados con la
TSM del Pacífico. Los ríos de la región Este no se correlacionan con la TSM.
El aspecto más difícil y tedioso del estudio fue determinar
si las relaciones aparentemente evidentes son verdaderas o si ocurren por casualidad. Usando un estadístico “t”,
la hipótesis nula se rechaza fácilmente en el nivel 95%
para cualquier relación mostrada. Puesto que se examina
la relación entre cada río y la variable TSM como precursora de anomalías, es probable que algunas relaciones
exploradas en amplios períodos de datos y que aparecen
como relevantes, ocurran simplemente por casualidad.
Si existe una relación bien definida entre la TSM y el
caudal de un río, entonces cada mitad del registro se
correlaciona independientemente. Este procedimiento da
generalmente una cierta indicación de robustez en la
relación, es una prueba más débil que si las relaciones
fueran analizadas en una porción del registro, y después
probadas con el resto del registro. Incluso es posible que
si las relaciones son evidentes solamente en la parte más
reciente del registro, se pueden proponer predictores más
significativos. Siempre predomina el criterio de usar registros tan extensos como sea posible para este tipo de
análisis de eventos aperiódicos. En muchos sitios, el
número de las observaciones que entran a formar parte
del promedio de la malla de la TSM ha aumentado
dramáticamente, por lo que se presume que las estimaciones sean más exactas. En algunos casos, las estimaciones de caudal del río también han mejorado con los
años, pero otros como el río Bogotá, ha presentado dificultades en el cálculo de la serie hidrológica. La posibilidad de que las relaciones entre los campos cambian
51
realmente con el tiempo no puede ignorarse. Por ejemplo, Mooley & Paolino (1988), mostraron que las relaciones entre la precipitación sobre la India y sus predictores cambian en intervalos de 20 a 30 años.
Para muchos de los ríos, las relaciones con la TSM antecedente crece al variar el mes, alcanzando un pico (el
cual puede o no juzgarse como estadísticamente relevante), y decae luego sobre otros meses. Para algunos ríos,
sin embargo hay aparentemente fuerte relación entre la
TSM que precede el caudal en algún mes, pero en el mes
adyacente la relación es débil o insignificante, lo cual es
problemático para inferir conclusiones. El trabajo reciente
de Newman & Sardeshmukh (1998), sugiere que la
respuesta atmosférica a una anomalía dada en divergencia pueda variar en función del mes debido al cambio de
flujo de fondo. No es inconcebible, considerando la topografía complicada de Colombia, que los cambios pequeños en el estado climático puedan dar lugar a cambios
significativos en la precipitación, para las mismas condiciones de forzamiento de la TSM. Los ríos Guatapé y
Digua mostraron un grado de asociación con la TSM del
suroeste del Atlántico, pero se recomienda análisis exploratorio más detallado temporalmente sobre los efectos
hidrológicos en la región del Noroeste.
Basado en el período de verificación del modelo del río
Cauca, se percibe que cuando las desviaciones de la
TSM en la zona Niño 3.4 están + ó -2 C, al menos dos
meses consecutivos, el efecto posterior en el caudal
objetivo, es concordante con el modelo. Los errores entre
desviaciones observadas y pronosticadas (con la ecuación calculada para el período de verificación) son altos
para las desviaciones pequeñas con respecto al valor
medio de TSM mensual. Es decir, no tiene sentido realizar predicciones de caudal basadas en desviaciones
pequeñas de la TSM.
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Fecha de recepción: 18 de noviembre de 2002
Fecha de aceptación: 15 de enero de 2003
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