El corazón, una máquina perfecta

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El corazón, una máquina perfecta
Este trazado verde que veis en la pantalla, eso que habéis visto en televisión o en los monitores
que hay en los hospitales es un trazado determinado por una actividad eléctrica, la actividad
eléctrica del corazón.
El corazón es una máquina que tiene un sistema eléctrico propio que genera actividad eléctrica.
Cada vez que veis que esto sube, representa la estimulación del músculo cardíaco para que se
contraiga. Entonces podríamos decir que cada una de estas subidas es más o menos un latido
del corazón o bien está seguido de un latido del corazón.
En reposo, el corazón va a unas 60 pulsaciones por minuto, y podemos ir a 110, 120, 130, según
la edad incluso a 150 en el caso de la gente joven durante el ejercicio. Es una máquina que sigue
latiendo, toda la vida sin parar desde que nacemos. Pensad un momento en esto, porque no
notamos el corazón cuando late. Lo podemos notar a veces o lo podemos notar si nos ponemos
la mano en el cuello y notamos la carótida pero normalmente no lo notamos, por lo tanto, nos
tenemos que imaginar que el corazón está latiendo y lo hace día y noche sin necesitar
enchufarnos cada noche. Además, el corazón es una máquina impresionante debido a otro factor
y es que además se adapta.
Esta es Emma Roca, campeona del mundo de ultra trails, que entrena cada día. Llega un
momento en que el corazón dice: "hombre, si tienes que entrenar cada día y me tienes que
obligar a hacer este sobreesfuerzo todos los días, deja que sea un poco más eficiente". Y del
mismo modo que si levantamos pesas, los bíceps empiezan a crecer, el corazón, que es un
músculo, también crece con el ejercicio continuado. El corazón de Emma Roca o de cualquier
deportista de élite es un corazón un poco más grande, así puede tener más volumen de sangre,
por lo tanto, recibe más sangre. También es un corazón un poco más lento, para tener tiempo
de llenarse y es un poco más grueso para que cuando lata, cuando se contraiga, pueda impulsar
toda esta sangre. Más grande, más lento y más grueso; es un corazón más eficiente, de manera
que Emma Roca, con 60 latidos impulsa tanta sangre como una persona que no hace deporte
con 80 latidos.
El corazón almacena energía, es capaz de adaptarse y eso lo convierte, prácticamente, en la
máquina perfecta. Y digo prácticamente porque a veces, el corazón falla. Aquí vemos un corazón
que iba muy rápido, el latido viene de la parte inferior del corazón, un hecho que denominamos
taquicardia ventricular y llega un momento en que este corazón que va a 300, en este punto de
aquí, en lugar de latir a 300, que es un ritmo muy poco eficiente, tiembla. Ahora imaginad una
botella de agua de plástico: si la cojo y la comprimo, el agua saldrá. Si la hago agitarse, el agua
se mueve pero no sale. Pues el corazón hace exactamente lo mismo. En este momento el
corazón está salpicando, agitando, temblando, y la sangre no sale. Por lo tanto la sangre no llega
al cerebro, la persona pierde el conocimiento y tenemos diez minutos para actuar. Nos quedan
diez minutos de vida. Si no hacemos un reset a esta persona, si no hacemos que su corazón
vaya a un ritmo normal, esta persona morirá.
Estos diez minutos son lo que se denomina muerte súbita cardíaca, tenemos diez minutos para
actuar. Ya veréis cuáles son las estrategias que utilizamos actualmente para intentar revertir este
proceso.
Os he comentado antes que el corazón tiene un sistema eléctrico. Fijaos en que la actividad
eléctrica comienza aquí arriba, en el nodo sinusal, situado en la aurícula derecha. Esto es la
aurícula derecha, esto es el ventrículo derecho, aurícula izquierda, ventrículo izquierdo... y aquí
empieza la actividad eléctrica. La actividad eléctrica va hasta aquí, el nodo auriculoventricular,
que es un nodo que hay justo entre las aurículas y los ventrículos, y aquí el latido se para un
momento, la actividad eléctrica se para unos milisegundos, el tiempo justo para que los
ventrículos se llenen. Y cuando los ventrículos se han llenado, se libera la actividad eléctrica y
todo el corazón se acalambra para contraerse y que la sangre salga impulsada hacia todo el
cuerpo. Estamos hablando de un sistema eléctrico autónomo que está funcionando toda una
vida, exactamente igual que aquí. Esto va a unos 60 por minuto más o menos, imaginad que
siempre está funcionando así.
Tenemos dos fases, seguramente ya lo habréis visto en biología, lo comento solo como
recordatorio. Una fase de llenado, denominada diástole, que es cuando la sangre llega a los
ventrículos, a las válvulas ventriculares, las válvulas entre aurículas y ventrículos se abren, la
sangre sale de las aurículas y entra en los ventrículos y una fase que llamamos sístole, que es
la contracción del corazón, en la que la sangre sale hacia la arteria aorta y la arteria pulmonar
que impulsan la sangre fuera del corazón.
Un concepto clave es que esta bomba, que es como una bomba de agua, no hay mucha
diferencia; la única diferencia es que la bomba de agua se tiene que enchufar. Esta bomba
necesita unas tuberías para transportar el líquido, en este caso la sangre, por todo el cuerpo y
tenemos unas tuberías que salen del corazón, denominadas arterias, y unas tuberías que
devuelven la sangre al cuerpo, llamadas venas.
Las arterias son mucho más valientes, son elásticas, son más fuertes. Y son más fuertes
simplemente porque tienen que recibir toda la presión del impulso de la sangre cuando sale del
corazón. El corazón impulsa con mucha presión y por lo tanto estos vasos tienen que ser
valientes y elásticos. Las arterias son más elásticas y las venas, como devuelven la sangre por
impulso mecánico y reciben muy poca presión, no necesitan contraerse demasiado y por eso
pueden ser más finas, son mucho más débiles.
Una vena, la podéis ver en la mano, veis que es una cosa muy sencilla que se puede comprimir
sin dificultad y aquí tenéis la arteria, en este caso la radial, donde podéis notar el impulso y que
es un vaso un poco más valiente, exactamente igual que la carótida, son vasos más valientes,
fuertes y elásticos y tienen más capas precisamente para aguantar esta presión.
Y después tenemos un sistema de válvulas que hace que la sangre siempre vaya en la misma
dirección. La sangre siempre circula en la misma dirección y nunca va hacia atrás cuando todo
funciona bien. Estas válvulas están en el corazón, entre aurículas y ventrículos, entre los
ventrículos y las arterias y en las venas.
No sé si alguna vez habéis pensado en cómo sube la sangre desde las piernas. En las venas
hay unas válvulas que solo permiten que la sangre vaya hacia adelante. La sangre se va
comprimiendo gracias a la actividad muscular. Cuando caminamos, los músculos se contraen y
eso comprime las venas que, al comprimirse, hacen que la sangre suba porque la sangre solo
puede ir hacia adelante. Pensad en las personas que tienen que estar de pie mucho tiempo, por
ejemplo, antes, que había que hacer la mili y te podías pasar de pie dos horas bajo el sol, en un
desfile militar, sin poder moverte. Mucha gente perdía el conocimiento y caían. Perdían el
conocimiento porque como no movían las piernas, la sangre se iba acumulando, les bajaba la
presión y perdían el conocimiento. No eran muchos, pero lo veíamos a menudo. Eso simplemente
significa que el movimiento de las piernas es imprescindible para que la sangre circule.
Como resumen: tenemos un sistema circulatorio unidireccional, fijaos en que no son dos
sistemas, y que en el corazón se vuelve a mezclar toda la sangre. Tenemos un sistema que
denominamos sistema circulatorio mayor, que sale del ventrículo izquierdo, pasa por la aorta,
llega a todo el cuerpo y luego, a través de las venas cava, llega a la aurícula y al ventrículo
derecho, de aquí a la arteria pulmonar, donde se oxigena la sangre, y después, a través de las
venas pulmonares llega a la aurícula izquierda, pasa al ventrículo izquierdo y vuelta a empezar.
Es un sistema en forma de ocho que siempre está conectado Eso permite que la sangre vaya
circulando, oxigenando y nutriendo todo el cuerpo.
El corazón también es un músculo y como tal tiene que recibir nutrientes. Eso significa que se
tiene que alimentar. Aquí tenemos unas arterias que salen de la arteria aorta, justo al principio
de la arteria aorta, llamadas arterias coronarias. Estas arterias coronarias son unas arterias muy
pequeñas que alimentan el tejido del corazón, el músculo cardíaco. Cuando os dicen que el
abuelo tiene las coronarias mal, se refieren a esto.
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