METABOLISMO. El metabolismo es un conjunto de procesos y

METABOLISMO.
El metabolismo es un conjunto de procesos y reacciones físicas-químicas que ocurren en
una célula, y son la base de la vida a nivel molecular. Es un proceso constante que
empieza en el momento de la concepción y termina con la muerte. Transforma la energía
que contienen los alimentos que ingerimos en el combustible que necesitamos para todo
lo que hacemos, para que nuestro cuerpo crezca, se reproduzca, mantenga su estructura y
se proteja del entorno.
En nuestro cuerpo tienen lugar miles de reacciones metabólicas simultáneamente,
todas ellas reguladas por el organismo, que hacen posible que nuestras células estén
sanas y funcionen correctamente.
El mantenimiento de la vida requiere de un cambio continuo de sustancias y una
constante transformación de la energía, y para que ocurran estos cambios se deben
cumplir las tres fases del metabolismo.
El metabolismo se divide en dos procesos: el catabolismo y el anabolismo.
El catabolismo es el proceso en el cual se produce la energía necesaria para todas las
actividades. En este proceso, las células descomponen moléculas de gran tamaño,
como hidratos de carbono y grasas, para obtener la energía. La energía producida, aparte
de ser el combustible necesario para los procesos anabólicos, permite calentar el cuerpo,
moverlo y contraer los músculos. Cuando descomponen compuestos químicos en
sustancias más simples, los productos de desecho liberados en el proceso son eliminados
al exterior a través de la piel, los riñones, los pulmones y los intestinos.
Un ejemplo de catabolismo es el de la glucólisis.
El anabolismo consiste en fabricar y almacenar: es la base del crecimiento de nuevas
células, el mantenimiento de los tejidos corporales y la creación de reservas de energía
para uso futuro. Durante el anabolismo, moléculas simples y de tamaño reducido se
modifican para construir moléculas de hidratos de carbono, proteínas y grasas más
complejas y de mayor tamaño.
El catabolismo y el anabolismo son procesos que hacen al metabolismo, ya que son
independientes uno del otro.
Para poder realizar todo lo que hacemos, para poder movernos, pensar, crecer,
reproducirnos, mantener una estructura y protegernos, necesitamos nutrirnos,
alimentarnos. La nutrición hace referencia a los nutrientes que componen los alimentos y
comprende un conjunto de fenómenos involuntarios que suceden tras la ingestión de los
alimentos, es decir, la digestión, la absorción o paso a la sangre desde el tubo digestivo de
sus componentes o nutrientes, su metabolismo o transformaciones químicas en las células
y excreción o eliminación del organismo. La nutrición es la ciencia que examina la relación
entre dieta y salud.
Una persona esta bien nutrida cuando se alimenta bien. Esta alientación consiste en
consumir nutrientes como los hidratos de cabono, Proteínas, Grasas, vitaminas,
Minerales y sal para que el cuerpo funcione bien.
Muchos de los nutrientes que vimos anteriormente pueden causar riesgos cardícos. Lo
ideal para una dieta sana es la ingesta de estos nutrientes pero moderadamente. Por
ejemplo, cuando se consume mucha sal, aumenta la presión arterial y los riesgos
cardíacos. En general, se aconseja limitar el consumo de sodio a 2.400 mg por día, el
contenido aproximado de una cucharadita de sal. Sin embargo este valor es variativo,
dependiendo de cada persona.
Controlar nuestra alimentación es una de las mejores maneras de reducir el riesgo
cardiovascular. Una alimentación sana ayudará a adelgazar y nos aportará más energía.
Consejos para reducir el consumo de sal.
Generalmente, la pérdida de peso se basa en las calorías que ingerimos a través de la
comida, y las que quemamos a través del ejercicio. Por lo tanto si ingerimos más calorías
de las que quemamos, engordamos. Sin embargo no siempre es asi, ya que existen
quienes comen poco y hacen ejercicio y sin embargo, engordan o por el contrario, existen
quienes comen mucho y no engordan, esto sucede por el metabolismo de cada persona.
Un metabolismo saludable nos mantiene saludables, y con una apariencia juvenil y
delgada. En el metabolismo intervienen varias hormonas y si lo que ingerimos no es lo
adecuado, entonces provocaremos un efecto rebote. Por lo tanto comer poco y hacer
ejercicio no es lo correcto, ya que al hacer esto el cuerpo se defiende. La glucosa en lugar
de ser quemada como energía es almacenada como grasa por el organismo al sentirse
amenazado y la guarda para su supervivencia. Esto ocurre cuando no le damos al cuerpo
los carbohidratos, proteínas, nutrientes esenciales que el cuerpo no produce por si mismo
y grasas buenas que necesita para tener una buena digestión y establecer un metabolismo
normal. Tener un metabolismo lento puede ser causa de no tener una buena
alimentación. No desayunar o no cenar para bajar de peso puede traer consecuencias
contrarias. Lo mejor para tener un peso adecuado, es mantener un metabolismo normal,
consumiendo cantidades óptimas de los minerales, vitaminas y nutrientes esenciales que
activan el metabolismo a través de las enzimas.
En conclusión, comer menos calorías que las que el cuerpo necesita, causa metabolismo
lento, acumulación de grasa y pérdida de músculo.
Al producirse esto, muchas personas decaen en enfermedades como la anorexia y la
bulimia. Estas enfermedades se producen generalmente en adolescentes de 12 a 20 años,
y es una enfermedad producida por la presión que el individuo siente por ser delgado y
atractivo. El problema se centra, entonces, en una baja autoestima.
Hay diversos tratamientos para la cura de la anorexia, las alternativas son: psicoterapia,
terapia comportamental, terapia medicamentosa, familiar, etc. Los objetivos de estos
tratamientos es regularizar la alimentación en el individuo y tratar que el entorno familiar
solucione sus disfunciones ya que el papel de la familia es fundamental para la
recuperación. Se recomienda en el caso de los padres del afectado que traten de hacer
encontrar a su hijo los valores perdidos, fomentar su iniciativa, independencia y
autoestima. Ayudarlo a manejar su ansiedad, si se manifiestan actitudes sospechosas no
hay que encubrirlas sino pedir ayuda profesional rápidamente, no imponer comida: que el
tema de la alimentación no se convierta en una discusión.
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