simbad, el niño - Anaya Infantil y Juvenil

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SIMBAD,
EL NIÑO
Miquel
Rayó
i Ferrer
Ilustraciones de
Alicia Cañas
Cortázar
© Grupo Anaya, S. A., Madrid, 2000
Juan Ignacio Luca de Tena, 15. 28027 Madrid
Proyecto realizado por: Rosana Moreno e Isabel Morueco
Director editorial: Antonio Ventura
www.anayainfantilyjuvenil.com
SIMBAD EL NIÑO
Simbad el niño
Miquel Rayó i Ferrer
Ilustraciones de Alicia Cañas Cortázar
1A
por los mares. Junto a él siempre está su
cuervo, desde que él mismo lo sacó del
nido siendo muy niño. Todo esto intriga
a Simbad; le fascina escuchar las historias de su amigo, y se reafirma en su idea
de querer ser marino.
Cuando el anciano desaparece, le deja
a Simbad el cuervo de recuerdo. Simbad
llora la pérdida de su amigo, pero, gracias al apoyo de su madre, sigue siendo
un niño alegre e imaginativo.
Un día, Simbad descubre que lo que
más le gusta a su maestro, Fadil, es escribir, y le pregunta si él podría escribir por
él la historia de su amigo. El maestro accede y la escribe.
RGUMENTO
Simbad es un niño que vive en la ciudad
de Bagdad en una gran casa con sus padres, Naguib y Fátima. La suya es una
familia de mercaderes ricos, por lo que
tienen criados a su servicio. Naguib está
preocupado por el futuro de su hijo Simbad; este siempre le dice que quiere ser
marino y él no lo puede entender.
Simbad se divierte saltando, corriendo,
jugando; también está mimado y consentido. Hace muchas travesuras e incluso llega
a entorpecer el trabajo de los demás, por
lo que en ocasiones le castigan.
Guarda celosamente un secreto: tiene
un amigo al que va a visitar cada atardecer. Se trata de un anciano que se llama
como él, Simbad, y ha sido marino.
Fuma una pipa de agua y se dedica a
contar al niño las peripecias de sus viajes
1
SIMBAD EL NIÑO
2
3P
Miquel Rayó
Simbad el niño
Es orientador en un Instituto de Formación Profesional. Es profesor mercantil y
Licenciado en Ciencias de la Educación.
Colabora en publicaciones y eventos de
carácter educativo y/o cultural. Es profesor colaborador de la Universitat de les
Illes Balears. Participa en el asociacionismo ecologista en las Baleares.
Ha recibido, en el ámbito de la literatura infantil y juvenil los siguientes premios:
Guillem Cifre de Colonya, 1982, Premio
de la Generalitat de Catalunya, 1986, segundo premio «El vaixell de vapor»,
1987, y el premio «Josep Maria Folch i
Torres», 1987.
Es travieso, con una gran imaginación y
curiosidad sin límites. Aparentemente
solo piensa en divertirse, pero no tardamos en descubrir que es un niño que tiene sentimientos: trata con respeto a su
amigo, el anciano Simbad, a quien admira, y lamenta su pérdida.
Siempre despeinado, con el pelo revuelto, habla a voces y pregunta dudas
constantemente.
Sin embargo, también hay que decir
que es muy estudioso. Su gran ilusión es
ser marino de mayor.
AUTOR
ERSONAJES
E ILUSTRADORA
Simbad, el anciano
Alicia Cañas
Ha sido marino. Ahora vive sin más
compañía que su cuervo y disfruta cuando Simbad lo visita para escuchar sus
historias.
Se encuentra cansado y débil. Siente un
gran cariño por Simbad, y lo considera
su amigo.
Nació en Cirueña (Rioja). Es una de las
ilustradoras de más prestigio en España.
Según sus propias palabras, ilustrar un
libro tan hermoso como este le ha supuesto un reto y un placer, por su calidad literaria y su sugerente plasticidad.
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SIMBAD EL NIÑO
4V
Naguib, padre de Simbad
ALORES
Es un próspero mercader de la calle principal de Bagdad; un hombre realista, serio,
cansado por su trabajo, pero con sentido
del humor. Preocupado por el futuro de su
hijo, Naguib confía en Fadil, quien también había sido su maestro, para que le enseñe a Simbad a leer y a contar. No le importa que Simbad escuche historias que
fomenten su imaginación, pero le pide que
se esfuerce en aprender las letras y el cálculo, para llegar a ser un buen comerciante.
❑ Respeto a los ancianos
Simbad, aunque es un niño travieso, admira al anciano Simbad, gusta de escucharle, y esta actitud favorece en el lector
el respeto a los mayores.
❑ La comunicación
Desde el principio observamos que entre
Simbad y sus padres existe diálogo. Continuamente su padre le pregunta qué quiere ser de mayor y se muestra preocupado
por su futuro. En las conversaciones con
su madre, Simbad da rienda suelta a su
imaginación. También Fadil, su maestro,
se presta al diálogo, y las respuestas a sus
preguntas sirven para enriquecer a Simbad y contribuir a su formación.
Fátima, madre de Simbad
Es cariñosa, tierna y comprensiva. Siempre
disculpa a su hijo. Es ella quien le consuela
y le da ánimos para que tenga esperanza.
Fadil
Es maestro de Simbad, un hombre mayor,
sabio, trabajador y comprensivo. Mientras
los niños hacen sus trabajos, él piensa en
sus cosas. Le gusta escribir y aprovecha
todo el tiempo que puede para hacerlo.
❑ La lectura y la escritura, y el afán de
superación
Fadil, el maestro, le dice a Simbad que
todo está en los libros y que cuando sepa
leer más que ahora, lo conocerá. Simbad
dice a su maestro que si él aprendiera a
escribir, sí podría escribir en un libro lo
que viera en sus viajes como marino. El
niño se da cuenta de lo importante que
es saber leer y escribir, y por eso quiere
aprender bien.
Otros personajes
Los criados y las criadas de la casa de
Simbad, aunque están cansados de las
travesuras del pequeño, en general, se
muestran comprensivos.
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SIMBAD EL NIÑO
❑ Solidaridad y ayuda
❑ Amistad
Cuando Simbad llora desconsolado al recibir el regalo de su amigo, el anciano
Simbad, todos, sus padres, los criados y
las criadas, quedan conmovidos. Es su
madre, la que, enternecida, lo consuela.
Cuando Simbad comprende que no volverá a ver a su amigo, le embarga un
gran dolor, tristeza y añoranza. Como
recuerdo de su amigo, se queda con su
cuervo y, con gran ilusión, le dictará su
historia a su maestro.
❑ Comprensión
Fátima y la cocinera se muestran comprensivas con Simbad. Así como Fadil, el
maestro, quien se muestra muy comprensivo cuando Simbad le cuenta la historia
de su amigo y le pide que la escriba.
❑ Interculturalidad
La lectura de otros modos de vida, en
este caso, de la cultura oriental, permitirá a los niños conocer y comprender que
hay otras formas culturales distintas de
la nuestra, igualmente válidas.
❑ Reconocimiento de los errores
Fadil pide perdón a Simbad al darse
cuenta de que se olvidó de que estaba
castigado.
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SIMBAD EL NIÑO
A C T I V I D A D E S
ANTES
A continuación, se ofrecen
unas actividades de animación
para realizar antes de leer
el libro, y así suscitar el interés
por su lectura, y después
de leerlo, para recrear los
distintos aspectos de su
contenido y fomentar la
creatividad de los lectores.
DE LA LECTURA
CUANDO SEA MAYOR...
—Vamos a ver, hijo mío, ¿qué quieres
ser de mayor? A partir de esta cita del libro, los alumnos comentarán qué les
gustaría ser de mayores. Es una buena
oportunidad para hablar de diferentes tipos de profesiones. Se puede aprovechar
la ocasión para invitar a algún padre o
madre al colegio y que hable a los alumnos de su trabajo.
PAISAJES
—Quiero ser marino.
—¡Ja, ja, ja! ¿Marino? —Su padre se
reía al oír la respuesta— Pero, ¿cómo
vas a ser marino, si has nacido en medio
del desierto?
A partir de este texto, los alumnos
pensarán en las características de un paisaje marino y otro desértico. Dividiremos la pizarra en dos partes. En cada
una de ellas el profesor irá apuntando
elementos que se pueden encontrar formando parte de un paisaje desértico. Por
turnos o levantando la mano, irán diciendo lo que se les ocurra.
Después, entre todos, elaborarán dos
murales dibujando en cada uno un paisa5
SIMBAD EL NIÑO
je en el que aparezcan los elementos enumerados por los alumnos. Una vez terminados, se expondrán para decorar el
aula.
Comentaremos el fragmento con los
alumnos. Se les preguntará si son frases
muy parecidas a las que les han dicho a
ellos en ocasiones. ¿Tienen algo en común todos los padres? Comentarán qué
actitudes de sus padres les parecen efectivas y cuáles les gustaría que modificaran
y por qué.
MASCOTAS
El anciano Simbad, el marino, tenía un
cuervo en su casa.
—Este cuervo —le dijo un día al
niño— ha visto lo mismo que yo he visto, puesto que fue mi compañero en los
siete viajes que hice.
Después de leer el fragmento, preguntaremos a los niños si saben qué es una
mascota, si tienen alguna o cuál les gustaría tener. Entre toda la clase se elaborará una lista con animales que el hombre
elige para que le hagan compañía.
«DULCES DE SIMBAD»
Y dio a Simbad una última palmada cariñosa en la mejilla, no sin antes ofrecerle
un dulce de almendras tostadas con miel
que se sacó de algún lugar secreto de su
chilaba.
El maestro, Fadil, le ofrece a Simbad
unos dulces. Los alumnos podrían hacer
unos dulces de nueces. Proponemos la siguiente receta:
DESPUÉS
Ingredientes: leche condensada, trocitos de nueces peladas y cacao en polvo.
Elaboración: se mezcla la leche condensada con las nueces. Con la ayuda de
una cuchara untamos la mezcla en el cacao y le damos forma de bolitas. Después, sobre una bandeja de cartón, se meten en el frigorífico hasta que se coman.
DE LA LECTURA
REFLEXIÓN COLECTIVA
Simbad, aunque es un soñador, obedece
a su padre y estudia. Recordaremos las
siguientes palabras que Nagib le decía:
—Escucha los cuentos de tu madre, hijo
mío, pero esfuérzate en la escuela, te lo
ruego. Aprende las letras y el cálculo y
pronto serás un buen comerciante. ¿Acaso no quieres ayudarme en mis negocios?
Una vez que todos hayan leído el libro, se sentarán en círculo para comentar aspectos que les hayan gustado o llamado especialmente la atención.
Al final, se compartirán los dulces de
nueces u otros (recetas fáciles) que hayan
hecho en casa.
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ANTES
DE LA LECTURA
SIMBAD EL NIÑO
Si vivo en una isla, rodeada de mar como es natural, no puedo evitar
escribir sobre él o sobre alguno de sus ilustres viajeros. Me gustaría
imaginar que Simbad, el marino … tal vez cruza ahora mismo las olas …
Así comienza el autor de la historia que vas a leer la carta que dirige a
los lectores. Ahora piensa en tu ciudad, en tu calle, en tus amigos, haz un
dibujo en el que se pueda observar cómo es el entorno en el que vives, e
imagina sobre qué o quién podrías escribir y contar sus aventuras.
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1
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ANTES
DE LA LECTURA
SIMBAD EL NIÑO
En el texto que vas a leer hay palabras que nos indican que los personajes son de la cultura oriental. Intenta unir cada palabra con su definición.
Babucha
Dinar
Chilaba
Sultán
Medina
Moneda árabe de oro
Príncipe musulmán
Ciudad
Zapato ligero y sin tacón
Pieza de vestir con capucha
En estas viñetas dibuja lo que representa cada una de estas palabras.
BABUCHA
CHILABA
SULTÁN
MEDINA
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DESPUÉS
DE LA LECTURA
SIMBAD EL NIÑO
Era un anciano. Arrugadito como una pasa, pequeño y de apariencia
débil, vestido pobre, pero pulcramente. Se sentaba en unos almohadones
esparcidos en el suelo. Fumaba una pipa de agua. Hablaba sin prisa.
—Hola —saludaba Simbad otra vez.
—Siéntate, hombre, siéntate —invitaba el anciano.
¿Recuerdas a qué momento de la historia corresponde este texto?
¿Dónde se encuentran los personajes?
Ahora imagina que eres mayor y has conseguido lo que siempre soñaste. Tienes un nieto como Simbad y le cuentas a qué te has dedicado y
cómo te sientes.
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1
2
DESPUÉS
DE LA LECTURA
SIMBAD EL NIÑO
Un bando de tórtolas pasó volando sobre las callejuelas de la medina.
Tórtolas, lechuzas, monos, … En el libro que has leído aparecen o son
nombrados diferentes grupos de animales. ¿Serías capaz de encontrar en
esta sopa de letras diez de ellos?
L
T
O
R
T
O
L
A
M
E
I
G
A
T
O
Q
V
B
C
U
E
R
V
O
A
M
A
H
C
I
N
L
G
P
M
O
U
F
O
L
L
O
E
D
R
Z
T
A
U
L
L
T
S
E
A
B
P
A
L
O
M
A
R
A
K
M
O
N
O
J
Ñ
C
Imagina el cuervo de Simbad y dibújalo en su jaula de oro.
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DESPUÉS
DE LA LECTURA
SIMBAD EL NIÑO
En la fábula del camello y la pulga que aparece en el libro,
hay un diálogo entre ambos animales.
En una larga jornada,
un camello muy cargado
exclamó, ya fatigado
¡Oh, que carga tan pesada!
Doña pulga, que montada
iba sobre él, al instante
se apea y dice arrogante:
—¡Del peso te libro yo!
El camello respondió:
—Gracias, señor elefante!
¿Sabes por qué el camello le llama a la pulga elefante?
Escribe otra respuesta posible del camello
Intenta recordar cómo son los personajes de la historia que has leído
y escribe F o V según sean verdaderas o falsas estas afirmaciones.
Naguib no tiene sentido del humor.
Fadil escribe para no olvidar.
Simbad quiere ser marino.
Fátima cuenta cuentos a Simbad.
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3
4
DESPUÉS
DE LA LECTURA
SIMBAD EL NIÑO
Una vez, Simbad el marino contó a Simbad el niño el cuento de
Aladino y la lámpara maravillosa.
Imagina otro de los cuentos que pudo haberle contado, en cuya
narración participes tú mismo como personaje y tus mejores amigos.
Pon un título adecuado
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SOLUCIONES
Antes de la lectura
Ficha 2
Babucha: zapato ligero y sin tacón.
Dinar: moneda árabe de oro.
Chilaba: pieza de vestir con capucha.
Medina: ciudad.
Sultán: príncipe musulmán.
Despuésde la lectura
Ficha 1
Referencia pág. 12: Simbad va a visitar al anciano.
Están en la casa de Simbad el anciano.
Ficha 2
M V A G L U P K
E B M P O L A M
I C A M E L L O
G U H O D T O N
A E C U R S M O
T R I F Z E A J
O V N O T A R Ñ
Q O L L A B A C
AQOLLABAC
Ficha 3
El camello le llama elefante en sentido figurado, irónicamente.
L
T
O
R
T
O
L
A
Naguib no tiene sentido del humor.
Fadil escribe para no olvidar.
V
Simbad quiere ser marino.
V
Fátima cuenta cuentos a Simbad. V
F
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