El Gaucho a través de los años. El Negro y su Prenda. (1885) Los primeros esclavos negros entraron al virreinato con permiso del rey entre los años 1595 y 1600. Esta introducción, como respuesta a los insistentes y dramáticos reclamos de las colonias americanas para solucionar su aguda escasez de mano de obra, sufre diversas alternativas que, paulatinamente, van apuntando hacia la total libertad de tráfico, resuelta por la corona en 1789 y extendida al Virreinato del Plata en 1791. Sin embargo, poca incidencia tienen los negros esclavos en los trabajos realizados en el ámbito rural. Un esclavo era, podríamos decir caro, o por lo menos oneroso. No solamente había que comprarlo, sino que alimentarlo, curarlo cuando se enfermaba, vestirlo, etc.; además la habilidad de estos negros no pasaba por ser grandes jinetes y ni siquiera, se decía en la época, poseían la valentía del gaucho. Y como hemos visto el trabajo del campo, vaquerías, encierre de yeguarizos, arreos de mulas eran todas tareas donde la vida estaba en permanente peligro y un dueño de esclavos no arriesgaría ese capital pudiendo contar con el gaucho para esas tareas y que ante un traspié de la muerte de alguno se lo enterraba en el campo y listo; sabiendo de antemano que nadie haría reclamo alguno. Entonces esos negros eran usados mayoritariamente en las labores domésticas, como valet, ayudantes, cocineros, mucamos, panaderos y también para trabajar en el primer cordón suburbano donde cantidad de huertas o quintas1 proveían los vegetales necesarios para la ciudad. Solían, asimismo, ser alquilados como jornaleros por sus amos a quienes lo requiriesen en cualquier tipo de trabajo, aumentando con el pago obtenido los ingresos de sus propietarios. También, pero en menor número formaron parte de las tropas coloniales y de diversos servicios públicos. La sociedad en su primer tiempo estaba formada, como consecuencia de la presencia de sectores étnicos bien diferenciados como eran el blanco, el indio y el negro y debido a los distintos cruzamientos que ocurrían, por un mosaico muy variado. a) Blancos, integrado por los españoles europeos y por los españoles americanos (criollos). Había pocos blancos de otras nacionalidades, cosa que cambiará luego de la Revolución de Mayo y se acentuará en las décadas posteriores. b) Indígenas. c) Mestizos (cruza de indio y blanco) d) Negros. e) Mulatos (fusión de blanco y negro). f) Zambos (mezcla de indio y negro). 1 La denominación de quintas surge de que quien trabajaba la tierra se llevaba una quinta parte de lo producido, mientras que el propietario de la misma, quien también aportaba las herramientas y resto de los insumos se quedaba con el resto. Por supuesto, esto no ocurría con la mano de obra esclava. Nota N° 25 Por Carlos Ernesto Pieske El cruzamiento de las mezclas (mulatos, mestizos y zambos) dio origen a infinidad de subtipos con nombres realmente extravagantes como: coyotes, chamizos, ahí te estás, tente en el aire, y otras. La libertad de vientre aprobada por la Asamblea del año XIII, hace que, con el correr del tiempo cantidad de mulatos busquen la pampa y se acoplen a los trabajos rurales, pues esa “libertad” otorgada no se condecía con el trato que los mismos recibían en la ciudad, y estos mulatos, genéticamente llevaban las habilidades que para esas tareas habían heredado de su parte blanca. Además, herencia de su sangre negra, llevarían la música en el alma y muchos se convertirían en payadores y guitarreros de pulpería. Precisamente José Hernández en su Martín Fierro en varias oportunidades hace aparecer negros o mulatos en distintas circunstancias y en diferentes situaciones que corroboran esta presencia de ellos en el ámbito rural; y es con un negro con quien mantiene esa célebre payada. El Negro y su Prenda Este moreno viste chambergo, pañuelo de golilla, camisa, chaleco, chiripá, calzoncillo de puño, medias y alpargatas. Monta un mestizo con cabezada y fiador. Luce un recado de bastos “cortito” con estribos de argolla, en su derecha, un rebenque de argolla. En las ancas, bien agarrada está la prenda de sus amores.