172-APE-2013AC CAMARA ESPECIALIZADA DE LO PENAL, San

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172-APE-2013AC
CAMARA ESPECIALIZADA DE LO PENAL, San Salvador, a las ocho horas y doce minutos
del día treinta y uno de octubre del año dos mil trece.
Por recibido en la Secretaría de esta Cámara, a las catorce horas y treinta minutos del día
dieciocho de abril del año dos mil trece, el oficio número 1603, con fecha quince de ese mismo
mes y año, procedente del Juzgado de Sentencia Especializado con sede en la ciudad de San
Miguel, escritos de fechas cinco y diez del mes de abril del presente año y dos autos emitidos por
el referido juzgado, el primero de ellos de las siete horas con cuarenta y cinco minutos del día
ocho de abril y el segundo de las doce horas del día doce de abril, ambas fechas del presente año.
Asimismo, se recibió en esta misma Secretaría, a las doce horas y treinta minutos del día
cinco de abril del presente año, el oficio número 1376, de fecha dos de ese mismo mes y año,
procedente del Juzgado de Sentencia Especializado con sede en la ciudad de San Miguel y por
medio del cual se remite constando de 241 folios útiles, el proceso penal marcado con la
referencia de origen 05(06)/13, el cual se instruye en contra de los imputados FAUSTO
NELSON R. C. y otros, a quienes se les atribuye la comisión de los ilícitos penales de
HOMICIDIO AGRAVADO y HOMICIDIO AGRAVADO TENTADO, en perjuicio de la vida
del señor MAYCOL JIMMI M. R. y de la víctima denominada con la clave “SILVER”. Se hace
constar que el folio 191 del referido expediente tiene la esquina del lado superior derecho
cortada. Aunado a ello, se recibe un sobre de manila cerrado con cinta adhesiva y grapa, el cual
se rotulo con la leyenda “EDA 05-13”.
Tales remisiones tiene como objeto que este Tribunal se pronuncie por los recursos de
apelación siguientes: 1) El presentado por el licenciado José Pedro Guzmán Vigil, en su calidad
de defensor particular del imputado FRANKLIN ANTONIO D. V., en contra de la
SENTENCIA DEFINITIVA CONDENATORIA, de treinta años de prisión emitida por la
comisión de los ilícitos penales antes referidos; 2) El recurso de apelación presentado por el
licenciado José Humberto Galán Cárcamo, en su calidad de defensor particular del imputado
DANIEL O. O., en contra de la SENTENCIA DEFINITIVA CONDENATORIA, de treinta años
de prisión emitida por la comisión de los ilícitos penales antes referidos y 3) El recurso de
apelación presentado por la fiscal, licenciada Maritza Xiomara Rivera de Romero, en contra de
la SENTENCIA DEFINITIVA ABSOLUTORIA, tanto penal como civil, emitida a favor de
imputado FAUSTO NELSON R. C., por la comisión de los referidos delitos.
DATOS DE LOS IMPUTADOS.
FRANKLIN ANTONIO D. V., […].
DANIEL O. O., […].
FAUSTO NELSON R. C., […].
JUSTIFICACIÓN DEL PLAZO.
Esta Cámara determina que el presente recurso se está resolviendo fuera del plazo de los
treinta días que señala la ley, sin embargo, tal situación obedece a la excesiva carga laboral que
ostenta esta Cámara.
Ello deviene del hecho que somos el único Tribunal de segunda instancia, con
competencia a nivel nacional para conocer y resolver todos los recursos de apelación que se
interponen en esta competencia especializada, la cual valga decir, de manera generalizada está
saturada de trabajo.
Aunado a ello, se han visto incrementados los aspectos cualitativos de los procesos que
llegan a conocimiento de esta Cámara, pues nos enfrentamos a causas extensas, con numerosas
partes, pluralidad de imputados y víctimas, así como una diversa cantidad de delitos, lo cual
complica más la situación, en cuanto al tiempo que cada proceso requiere.
La Sala de lo Constitucional ha considerado que para estar en presencia de una dilación
indebida, el Tribunal que conoce la causa tuvo que haber creado los denominados “plazos
muertos”, es decir haber dejado transcurrir el tiempo permaneciendo inactivo sin realizar
diligencias dentro del referido proceso injustificadamente; esta ha sido la línea jurisprudencial –
que también esta Cámara comparte– específicamente en la sentencia provista en el proceso
Hábeas Corpus 49-2000, de fecha veintidós de marzo de dos mil, en la cual se señala: "Es
necesario que un proceso se tramite en un plazo razonable o sin dilaciones indebidas. Son tres
los elementos que habrán de tenerse en consideración para calificar el concepto de plazo
razonable o dilación indebida. 1) el Tribunal ha de tener en cuenta la complejidad del asunto: la
complejidad fáctica del litigio, es decir, la necesidad de realizar las distintas pruebas; la
jurídica o las propias deficiencias técnicas del ordenamiento pueden ocasionar el transcurso de
plazos legales previstos en el ordenamiento; sin embargo, tales dilaciones no merecerán el
carácter de indebidas, 2) el comportamiento del recurrente; tampoco puede merecer el carácter
de indebida una dilación que ha sido provocada por el propio litigante, cuando por ejemplo
haya ejercitado los medios de impugnación que le asisten conforme al ordenamiento, y menos es
indebida cuando ésta ha suspendido el curso del proceso cuando de una forma dolosa plantea
cuestiones incidentales o suspensiones injustificadas, o que su conducta adolezca de la falta de
diligencia para la rápida tramitación del proceso, 3) finalmente, la actitud del órgano judicial,
deberá determinarse si las dilaciones en el proceso obedecen a la inactividad del órgano
judicial, que sin causa de justificación alguna, dejó transcurrir el tiempo sin impulsar de oficio
el procedimiento, sin emitir su resolución de fondo, u omitió adoptar medidas adecuadas para
conceder la satisfacción real y práctica de las pretensiones de las partes".
De este pronunciamiento jurisprudencial se desprende que para determinar si ha ocurrido
una dilación indebida, es necesario analizar conforme a los aspectos apuntados, si existe o no
causal justificante para que el proceso no se instruya en los plazos previamente establecidos en la
ley, siendo aún más explícita la honorable Sala en la sentencia antes relacionada cuando dijo
que: “no obstante, a la vez se advierte que el Tribunal hizo constar que tal circunstancia
respondía a la carga de trabajo; motivo por el cual no puede colegirse que se haya originado
una dilación indebida, pues la circunstancia de no fijar la fecha para llevar a cabo la vista
pública en los plazos previstos en la ley, no ha sido provocada por negligencia o ilegalidad del
juez de la causa, sino por razones ajenas a éste y pertenecientes a las propias deficiencias
técnicas del sistema jurídico, como lo es el exceso de trabajo en los tribunales”. Tal criterio
también se retomó en la sentencia de hábeas corpus con referencia 231-2001 de fecha veintidós
de abril de dos mil dos.
Como podemos ver esta abundante jurisprudencia del máximo Tribunal Constitucional
nos da la pauta para motivar que los treinta días que establece la ley para resolver este tipo de
recursos, no han sido suficientes para poder resolver, dada la excesiva carga de trabajo que tiene
este Cámara, por tales motivos, el resolver la presente causa fuera del plazo establecido se
encuentra justificado.
RESOLUCIÓN OBJETO DE ALZADA.
En el caso de autos, consta que el señor Juez de Sentencia Especializado con sede en la
ciudad de San Miguel, celebró el día once de febrero del año en curso, audiencia de vista
pública, emitiendo en virtud de ello la sentencia correspondiente a las siete horas con cuarenta y
cinco minutos del día veintiocho de febrero de este mismo año, en la cual expuso: “…LA
REPRESENTACIÓN FISCAL…ACUSÓ POR LOS DELITOS DE HOMICIDO AGRAVADO y
HOMICIDO AGRAVADO EN GRADO DE TENTATIVA…hechos que éste juzgador tiene por
acreditados, con el agravante del numeral 3°, esto, con lo dicho por el testigo y víctima clave
"SILVER", y la prueba documental y pericial vertida a través del desfile probatorio…EN
CUANTO A LA RESPONSABILIDAD PENAL DE LOS IMPUTADOS DANIEL O. O. O DANY
O. PORTILLO, alias [...] y FRANKLIN ANTONIO D. V., alias [...]…fue acreditada por el
testigo clave "SILVER" por medio de su declaración rendida como acto urgente de
comprobación, misma que fue introducida a juicio como prueba documental, en la que el testigo
especifica de manera clara y puntual las acciones que los acusados realizaron en la comisión
del delito, siendo estas, en el caso del imputado DANIEL O. O. O DANY O. PORTILLO, alias
[...], la de permanecer escondido en el interior del servicio sanitario y al escuchar la detonación
del arma de fuego, salir con un arma corto contundente, específicamente un machete y
efectuarle heridas en cabeza y cuello a la víctima Jimmy M.…en cuanto a las acciones del
imputado FRANKLIN ANTONIO D. V., alias [...], estas consisten en tomar por el cabello al
testigo clave "Silver", forcejear con él, y al estar el testigo y víctima en el suelo, intentar atentar
contra su vida y la de una tercera persona, por lo que al ver que el testigo cubre a dicha persona
le realiza heridas con un arma corto contundente en la cabeza. Información proporcionada por
la misma víctima y que es congruente con la información descrita en el acta de inspección
ocular…y con el álbum fotográfico…0La información proporcionada por "Silver" también es
congruente con la Certificación de Protocolo de Autopsia…en cuanto al Homicidio Agravado en
Grado de Tentativa, las lesiones que el testigo clave "Silver" manifiesta haber recibido
coinciden con lo que establece el Reconocimiento Médico de Sangre…el cual al relacionarlo
con el Reconocimiento Médico de Sanidad, el cual establece que dichas lesiones sanaron en un
periodo de cuarenta y cinco días…siendo a mi criterio veraz en cuanto a la forma en que se
ejecutó el hecho y los responsables del mismo, en razón que existen elementos de prueba
documental y pericial que son congruentes con su dicho, excepto respecto de la Responsabilidad
Penal del imputado FAUSTO NELSON R. C., sobre quien efectuare valoración
posteriormente…Ante tales circunstancias corresponde emitir una sentencia de reproche contra
los imputados DANIEL O. O. O DANY O. P., alias [...] y FRANKLIN ANTONIO D. V., alias
[...], por ser COAUTORES de los delitos de HOMICIDIO AGRAVADO y HOMICIDIO
AGRAVADO EN GRADO DE TENTATIVA…cometidos con abuso de superioridad, pues estos
atacaron a las víctimas en horas de la noche sin cederles oportunidad de defenderse, utilizando
para ello un arma de fuego, y armas corto contundentes, instrumentos idóneos para quitarles la
vida, ejecutando los procesados el hecho de forma conjunta, no dejando lugar a duda que estos
tenían el codominio final del hecho…respecto de la individualización del imputado Daniel O. O.
o Dany O. P., este fue identificado plenamente en Reconocimiento en fila de Personas realizado
como acto urgente de comprobación, el cual arrojó resultado positivo, y el imputado Franklin
Antonio D. V. también fue plenamente identificado por el testigo y víctima clave "Silver" por su
nombre y apellido, por lo que no me queda duda alguna sobre la responsabilidad penal de los
acusados en calidad de coautores en los delitos en comento…EN CUANTO A LA
RESPONSABILIDAD PENAL DEL IMPUTADO FAUSTO NELSON R. C.…el testigo clave
"Silver" manifiesta que las acciones realizadas por Fausto Nelson R. C., fueron las de
esconderse acurrucado por el servicio sanitario cuando el ahora occiso…se aproximaba a
efectuar sus necesidades fisiológicas, y que luego éste se levanta y le apunta en dirección del
rostro con un arma de fuego y procede a realizarle un disparo a la altura de la boca. Además de
efectuar posteriormente golpes con los pies a "Silver" cuando éste yacía herido en el suelo. El
relato del testigo aunado a la prueba documental y pericial sería suficiente para emitir una
sentencia condenatoria contra el imputado ya relacionado, no obstante haberse incorporado a
juicio las declaraciones de testigos de descargo que lo ubican fuera de la escena del delito…en
lo relativo a Fausto Nelson R., se incorporó además, como prueba pericial en común…análisis
relacional de las bitácoras de llamadas de los números telefónicos […], y […], ambos abonados
a […], testigo de descargo a favor del procesado, siendo que el primero de los números lo
portaba el testigo ya relacionado, y el segundo, lo portaba el imputado…del cual se logra
determinar que existió comunicación telefónica entre ambas personas. Siendo la tesis de la
defensa que Fausto R. no puedo ejecutar el hecho porque se encontraba en la ciudad de San
Miguel al momento de la comisión del ilícito, lo cual pretendieron acreditar con el análisis en
mención, y el que dentro de sus conclusiones establece que efectivamente hubo relación de
llamadas entrantes y salientes entre ambos números telefónicos el día veintinueve de julio de
dos mil doce, desde las doce horas hasta las veintiún horas del día, tal como lo refirió […] en su
declaración, con la particularidad que únicamente se logra determinar cómo antena de
activación del número […], “El Capulín” [número que portaba […]], respecto del número […],
[número que portaba Fausto R.] no se logra determinar antena de activación de llamadas
entrantes o salientes, siendo esta INDETERMINADA. Ante tal circunstancia dicho elemento de
prueba pericial aunado a lo dicho por el testigo […]…y lo dicho por el testigo […]…y lo dicho
por […]…me generan DUDA RAZONABLE respecto de sí Fausto Nelson R. se encontraba en
el lugar del hecho o en algún otro lugar de San Miguel como lo refirieron los testigos antes
citados, en razón que las bitácoras de llamadas refieren que la antena de activación de las
llamadas efectuadas en día veintinueve de julio de dos mil doce fue en San Miguel, sin
determinar lugar exacto, por lo que Fausto pudo estar tanto en El Capulín, como Quelepa o en
algún otro municipio de San Miguel, lo cual no me queda claro y consiguientemente no me
permite llegar al estado de certeza positiva sobre la responsabilidad penal de éste en calidad de
coautor en ambos delitos. La tesis Fiscal señalaba que Fausto R. es responsable pues según
"Silver" éste llegó con anterioridad en un vehículo automotor a la vivienda de las víctimas y
profirió amenazas contra una de estas, circunstancia que no tuve por acreditada…en razón que
no existe ningún otro elemento de prueba que la robustezca, sino solo lo dicho por "Silver",
como sí ocurrió con el resto de lo declarado por el mismo testigo…al haberse tenido por
acreditada tal circunstancia me hubiese llevado a pensar con base a la sana critica, que Silver
al momento de presenciar y sufrir el ataque, probablemente logró identificar a todos los sujetos
y además incluyó dentro de estos, a quien ya había amenazado a Jimmy M. de muerte, quien
pudo no haber estado presente en el hecho y haber ordenado la ejecución del mismo,
circunstancias que tampoco fueron acreditadas. En tal sentido y siendo que la ley no exige que
sobre lo declarado por un testigo deba creérsele el "todo" o "la nada", pero nunca "sólo en
parte" de lo que expresa, pues este se encuentra inmerso en su subjetividad y más cuando es
víctima, que lo podría llevar a pretender incorporar a juico elementos que no son contundentes,
como en el caso en comento, al existir otros elementos de prueba que debilitan la tesis fiscal y
que consecuentemente generan duda sobre la verdad real de los hechos en cuanto al grado de
responsabilidad penal del acusado…he de emitir una sentencia ABSOLUTORIA a favor de
FAUSTO NELSON R. C., por los delitos de HOMICIDIO AGRAVADO y HOMICIDIO
AGRAVADO EN GRADO DE TENTATIVA, el primero en perjuicio de MAYCOL JIMMY M. R.,
y el segundo en perjuicio de la víctima clave "SILVER", con base al artículo 7 del Código
Procesal Penal, el cual regula que en caso de DUDA se resolverá lo más FAVORABLE para el
imputado…VALORACION DE LA PRUEBA DE DESCARGO A FAVOR DEL IMPUTADO
DANIEL O. O. o DANY O. P.…consistente en: Declaración del señor […]…a mi criterio este
testigo no merece credibilidad alguna debido a que en vista pública tal como consta en la
grabación de audiencia, al momento que la Defensa Particular pretenda identificarlo
preguntándole al testigo que si el imputado se encontraba presente, estando aproximadamente a
tres metros de distancia del imputado le fue difícil identificarlo debido a problemas en su visión,
siendo lógico pensar que resultaría imposible que lo observara con claridad a una distancia
mayor…En cuanto al testimonio del señor […]…dicha declaración tampoco me genera
credibilidad alguna pues en ningún momento se estableció si el testigo tuvo a la vista al
imputado en todo momento, quien por residir cerca del lugar del hecho pudo desplazarse con
facilidad de su lugar de habitación hasta el lugar del hecho, o desde el lugar del hecho hasta
donde sus familiares con el objeto de generar una coartada…VALORACION DE LA PRUEBA
DE DESCARGO A FAVOR DEL IMPUTADO FRANKLIN ANTONIO D. V.…testimonio de
la señora […]…establece que el imputado llegaba a Tangolona y se quedaba allí de lunes a
viernes a cuidar a su padre porque estaba enfermo de los riñones, y que el fin de semana
regresaba al Cantón El Capulín, algo que parece ser irrelevante…debido a que el delito fue
cometido un día domingo por la noche, y el imputado efectivamente pudo haber tenido
participación en el mismo…En cuanto a la declaración de […], quien tiene una relación
sentimental con el imputado…manifestó que ese día…Franklin llego a eso de las doce del
mediodía a su casa…y que se fue, pero que regresó a las seis y media, siete de la noche y no
volvió a salir y que se quedó a dormir en su casa y no salió hasta el siguiente día…este
testimonio no me merece credibilidad alguna ya que como la misma testigo manifestó tiene una
relación amorosa con el imputado, y con su relato es evidente que pretende sacarlo de la escena
del delito…al no existir otro elemento de prueba directo o indirecto que robustezca dicha
declaración, o que desvirtué o debilite la tesis fiscal, no es posible siquiera de generar duda
sobre la responsabilidad penal del imputado…puedo decir que DANIEL O. O. o DANI O. P.,
alias [...] FRANKLIN ANTONIO D. V., alias [...], querían matar a las víctimas y cuando les
provocan heridas con las armas que utilizaron, sabían que les producirían la muerte,
aprovechándose del estado de superioridad sobre las víctimas, sin dar oportunidad a la defensa,
concurriendo una de las Agravantes, reguladas en el numeral tercero del artículo ciento
veintinueve del Código Penal, como es "el abuso de superioridad"…CONSECUENCIAS
JURIDICAS PENALES Y CIVILES. VI. FUNDAMENTOS SOBRE LA DETERMINACION DE
LA PENA…Este juzgador estima que efectivamente se dio el abuso de superioridad, por ello
impondré la pena de VEINTE AÑOS DE PRISIÓN a DANIEL O. O. o DANI O. P., alias [...] y
FRANKLIN ANTONIO D. V., alias [...], a cada uno, por el delito de Homicidio Agravado, en
perjuicio de la víctima Maycol Jimmy M. R., y la pena de DIEZ AÑOS DE PRISION, por el
delito de Homicidio Agravado en Grado de Tentativa, en perjuicio de la víctima clave "Silver",
cometido también con abuso de superioridad…CONSECUENCIAS CIVILES…éste Juzgador
considera que es procedente condenar a los imputados DANIEL O. O. o DANI O. P., alias [...],
y FRANKLIN ANTONIO D. V., alias [...], a pagar la cantidad de MIL DOLARES…cada uno, a
quien acredite tener calidad de víctima, por el delito de HOMICIDIO AGRAVADO, en perjuicio
de MAYCOL JIMMY M. R., y a pagar la cantidad de MIL DOLARES de los Estados Unidos de
América, cada uno, a la víctima clave "SILVER”, por el delito de HOMICIDIO AGRAVADO, en
su contra…FALLO…CONDENASE PENALMENTE a DANIEL O. O. o DANI O. P., alias
[...], y a FRANKLIN ANTONIO D. V., alias [...], como COAUTORES del delito HOMICIDIO
AGRAVADO…en perjuicio de MAYCOL JIMMY M. A. a cumplir la pena de VEINTE AÑOS DE
PRISIÓN, cada uno…CONDENASE PENALMENTE a DANIEL O. O. o DANI O. P., alias [...],
y a FRANKLIN ANTONIO D. V., alias [...], como COAUTORES del delito HOMICIDIO
AGRAVADO EN GRADO DE TENTATIVA…en perjuicio de la víctima clave "SILVER", a
cumplir la pena de DIEZ AÑOS DE PRISIÓN, cada uno…CONDENASE CIVILMENTE a
DANIEL O. O. o DANI O. P., alias [...], FRANKLIN ANTONIO D. V., alias [...], por los delitos
de HOMICIDIO AGRAVADO y HOMICIDIO AGRAVADO EN GRADO DE TENTATIVA…a
pagar la cantidad de Mil Dólares de los Estados Unidos de América, cada uno, a quien
acredite tener calidad de víctima en el delito de Homicidio Agravado consumado y a la víctima
clave "SILVER"…ABSUÉLVASE PENALMENTE a FAUSTO NELSON R. C., como responsable
de los delitos HOMICIDIO AGRAVADO y HOMICIDIO AGRAVADO EN GRADO DE
TENTATIVA…ABSUÉLVASE CIVILMENTE a FAUSTO NELSON R. C., como responsable de
los delitos de HOMICIDIO AGRAVADO y HOMICIDIO AGRAVADO EN GRADO DE
TENTATIVA…”
RECURSOS DE APELACIÓN INTERPUESTOS.
PRIMER RECURSO.
El licenciado JOSE PEDRO GUZMAN VIGIL, quien actúa en su calidad de defensor
particular del imputado FRANKLIN ANTONIO D. V., presentó recurso de apelación en contra
de la sentencia condenatoria de veinte años de prisión dictada en contra de su patrocinado,
inconformidad que expuso en los términos siguientes: “…PRIMER MOTIVO. QUE EL
IMPUTADO NO ESTE SUFICIENTEMENTE IDENTIFICADO, ART.400 NUMERAL 1
PrPn…de conformidad a lo establecido en el artículo 83 Pr.PN., establece que la identificación
del imputado se practicará por sus datos personales, impresiones digitales, señas particulares o
a través de cualquier otro medio...es decir no basta que se señale nominalmente, pues los
nombres no son exclusivos de una persona, y por ello debe haber certeza que quien la mencione
o alude efectivamente la conoce o la ha visto…nuestro Código Procesal Penal en su artículo
253 ha establecido el Reconocimiento de personas, Diligencia que no practicó la
representación fiscal para acreditar con certeza que FRANKLIN ANTONIO D. V., es la persona
a la que hace referencia la víctima "SILVER" como el que le ocasionó machetazos…el
Honorable Tribunal Sentenciador, al referirse a FRANKLIN ANTONIO D. V., expresa en su
sentencia "que este fue identificado por la víctima "SILVER" por su nombre y apellido, no
quedándole duda sobre su responsabilidad" valoración que el suscrito considera es errónea,
pues la víctima y testigo, jamás en esa declaración ha especificado otras características que den
certeza…SEGUNDO MOTIVO: CUANDO NO SE HAN OBSERVADO LAS REGLAS DE LA
SANA CRITICA, CON RESPECTO A MEDIOS O ELEMETOS PROBATORIOS DECISIVOS"
Art. 400 N°5 Pr Pn…¿Cual o que acción u omisión de matar realizó el condenado FRANKLIN
ANTONIO D. V.? Obviamente según lo declarado por el Testigo "SILVER" ninguna, la calidad
de coautoría no se acredito por ningún medio legal de prueba como lo es que haya habido un
acuerdo previo, que ayude al cometimiento del ilícito y que haya tenido dominio del hecho, de
ello nada consta en el proceso, y por ello considero que hubo una errónea valoración conforme
a las reglas de la sana critica con respecto a la declaración de "SILVER" única en el proceso
sobre cómo ocurrieron los hechos…Otro aspecto…al mediar la prueba y confrontar lo dicho por
el testigo "SILVER" se demostró que este no merece credibilidad y se demostró técnicamente,
pues con mucha frecuencia en su declaración señalaba a uno de los imputados como uno de los
hechores quien probó que no estuvo en ese lugar a la hora y fecha en que ocurrieron los hechos,
habiendo la defensa demostrado la no credibilidad del testigo. En la sentencia, la valoración
que hace el juzgador, lo justifica diciendo “en tal sentido y siendo que la ley no exige que sobre
lo declarado por un testigo deba creérsele el “todo” o “nada”, pero nunca "solo en parte” de lo
que expresa”…tal razonamiento violenta el razonamiento lógico, pues quién miente en lo poco,
miente en todo, y ante la duda de su credibilidad siempre trae un beneficio al procesado…en el
presente proceso, operó al contrario, la duda se convirtió en certeza que culmina con una
sentencia condenatoria…SOLUCION QUE SE PRETENDE…sentencia que debe ser revocada y
en su defecto que se absuelva de toda responsabilidad penal y civil, tal como lo establece el
artículo 475 inc 2°del Código Procesal Penal…”
SEGUNDO RECURSO.
Por su parte, el licenciado JOSE HUMBERTO GALÁN CARCAMO, en su calidad de
defensor particular del imputado DANIEL O. O., presentó recurso de apelación en los términos
siguientes: “…vengo…a interponer el Recurso Ordinario de Apelación, en contra de la
sentencia condenatoria que condena a mi representado a la pena de prisión de treinta años de
prisión, por el delito de HOMICIDIO AGRAVADO, previsto y sancionado en el Art. 128 en
relación con el Art. 129 N° 3 del Código Penal; en perjuicio de la víctima MAYCOL YIMMI M.
R., y el delito de HOMCIDIO AGRAVADO EN GRADO DE TENTATIVA, previsto y sancionado
en el Art. 128 en relación con el Art. 129 N° 3 relacionado con el Art. 24 del Código Penal, en
perjuicio
de
la
FUNDAMENTACION,
Víctima…clave
ES
SILVER…LA
INSUFICIENTE
Y
SENTENCIA
CONTRADICTORIA,
ADOLECE
ART.400
DE
N°
4
C.Pr.Pn…Para la defensa no existe fundamentación en las situaciones legales siguientes,
atendiendo especialmente ál Art. 7 del C.Pr.Pn., que establece el principio de la duda, lo cual no
ha sido manifestado en la sentencia, de la manera siguiente…en la respectiva Entrevista
proporcionada por…"SILVER", y en Diligencia de Acto urgente de Comprobación, consistente
en Declaración anticipada del Testigo clave "Silver"…se encuentran una serie de
incongruencias…siendo…las siguientes…ella manifiesta que los hechos sucedieron a las siete
horas con cuarenta minutos, del día veintinueve de julio del año dos mil doce, mientras que en la
Diligencia de Acto Urgente de consistente en la Declaración Anticipada…manifiesta que los
hechos sucedieron a las siete horas del día veintinueve de julio del año dos mil doce…en la
respectiva entrevista…dicha víctima y testigo…manifiesta que ella se hizo la muerta y que
cuando ya no escucho ruido se levantó, y se arrastró hasta donde estaba MAYCOL, quien ya
estaba muerto, por lo que continuo arrastrándose hasta la puerta de la casa…y comenzó a pedir
ayuda…en la diligencia de…declaración anticipada…manifiesta que se dirigió hacia la celosía
y que desde ahí vio que mi defendido…y los otros sujetos se suben a un vehículo Toyota…y que
quien maneja el vehículo era NELSON R.…que después se dirigió hasta donde se encontraba
MAYCOL…por lo cual comenzó a pedir ayuda, notándose una serie de incongruencias entre lo
relatado en la entrevista como en el anticipo de declaración…cómo es posible que la víctima y
testigo…puede identificar a mi patrocinado de nombre DANIEL O. O. quien dice el aludido
testigo que se encontraba en el interior del servicio, ¿Cómo ES POSIBLE QUE DICHA
VICTIMA Y TESTIGO…PUDO IDENTIFICAR A DANIEL O. O., SI DICE…QUE SE
ENCONTRABA EN EL INTERIOR DEL SERVICIO?...También la víctima y testigo…manifiesta
en la entrevista que trato de agarrarse de la celosía de la casa, mientras que en el anticipo de
prueba de declaración dijo que estaba pegada a la celosía…La víctima y testigo…en ningún
momento de entrevista
y anticipo de prueba de declaración…ha mencionado que mi
defendido….haya atentado contra su vida…no hace enunciación de heridas o lesiones que le
haya provocado para quitarle la vida, debiéndose de efectuarse la pregunta siguiente: ¿AL
CASO MI DEFENDIDO…ES RESPOSABLE DE HOMICIDIO AGRAVADO EN GRADO DE
TENTATIVA, EN PERJUICIO DE LA VICTIMA Y TESTIGO…CON CLAVE SILVER?...los
testigos de descargo…declararon que DANIEL O. O., el día que se dice que ocurrieron los
hechos o sea a eso de las siete y treinta de la noche del día veintinueve de julio del año dos mil
doce, venía de ver televisión de donde un hermano de él…¿COMO ES POSIBLE QUE SE
INCRIMINE A ALGUIEN, ESTANDO EN UN LUGAR DISTINTO DE LOS HECHOS? ¿AL
CASO PUEDE UNA PERSONA ESTAR EN DOS LUGARES AL MISMO TIEMPO?...existiendo
unas claras contradicciones de la víctima y testigo…y por otro lado contar con las
declaraciones de los testigos de descargo…lo anteriormente relacionado…genera dudas
concretas, ya que las contradicciones expuestas no han sido valoradas por el Tribunal, al igual
que tampoco fueron valoradas por el Tribunal las declaraciones de los testigos de descargo
señores […] Y […]., además que la declaración de este último testigo no fue tomada en cuenta
al momento de ser valorizada la prueba, por lo cual se establece lo que manifiesta el Art. 400 N°
4o del C Pr Pn…ll) "QUE HAYA INOBSERVANCIA A LAS REGLAS DE LA SANA CRITICA,
CON RESPECTO A LOS MEDIOS PROBATORIOS DE VALOR DESISIVO" ART.400 INC. 1o,
N° 5o C.PR.PN….en la sentencia se manifiesta que DANIEL O. O. es responsable penalmente de
los
ilícitos
penales…habiéndosele
dado
credibilidad
solamente
a
la
víctima
y
testigo…parcialmente se tomó en cuenta el beneficio de la DUDA…ya que una de las personas
procesadas fue absuelta…no habiéndose tomado en cuenta ni mucho menos valorizado por el
Juez Sentenciador de que existía DUDA, esto en base a las declaraciones testimoniales de los
señores […] Y […]…POR LO TANTO EXISTE LA DUDA…CON EL DECIR DE LA VÍCTIMA Y
TESTIGO…CON LO DICHO POR LOS TESTIGOS…nos encontramos ante la inexistencia del
ilícito penal de HOMICIDIO AGRAVADO EN GRADO DE TENTATIVA…ya que tanto en
entrevista como anticipo de prueba de declaración…ella en ningún momento manifiesta que
clase o tipo de lesiones le son ocasionadas para quitarle la vida, por parte del imputado
DANIEL O. O.…SOLUCION QUE SE PRETENDE…solicito como solución se aplique el Art.
475 inc. 2° del C. Pr.Pn. para efectos que se revoque o se anule la sentencia…”
TERCER RECURSO.
Por su parte, consta que la licenciada MARITZA XIOMARA RIVERA DE ROMERO,
actuando en su calidad de Agente Auxiliar del Fiscal General de la República, interpuso recurso
de apelación únicamente en contra de la SENTENCIA DEFINITIVA ABSOLUTORIA, dictada
a favor del señor FAUSTO NELSON R. C., exponiendo su inconformidad en los términos
siguientes: “…MOTIVOS ALEGADOS. A) VICIOS DE FORMA…en la fundamentación no se
han observado las reglas de la sana critica…artículo 400 Procesal Penal numeral 5…otro
vicio…es la falta de enunciación de los hechos objeto de juicio y la determinación circunstancial
que el tribunal estimo para acreditarlo, específicamente en cuanto a la responsabilidad civil,
artículo 400 numeral 2…En lo que respecta al primer motivo…el Juez A-quo…cuando se refiere
a la responsabilidad penal de FAUSTO NELSON R. C., la cual era común la prueba vertida
para los demás coautores…en la cual se establece dentro de la misma la declaración que rinde
el testigo único y presencial del hecho…el juez…no establece porque…le resta credibilidad al
testigo, máxime…cuando refiere…el relato del testigo aunado a la prueba documental y pericial
sería suficiente para emitir una sentencia condenatoria contra el imputado ya relacionado…sin
embargo, excluye ese elemento de juicio y da mérito y credibilidad a las declaraciones de los
testigos de descargo que lo ubican fuera de la escena del delito y es que no puede dejar a un
lado y tener por sentado con una prueba pericial en común, pues también fue ofertada por la
representación fiscal, como lo es el análisis relacionar de bitácoras de llamadas de los números
telefónicos […] y […], ambos abonados a […], testigo de descargo…porque es un elemento
subjetivo que se diga que ese número lo portaba en el momento del hecho el imputado…porque
ese es un elemento indiciario que no se debe ver como única prueba si no que relacionado con
toda en su conjunto porque se logra determinar que existió comunicación telefónica entre ambas
personas, siendo la tesis de la defensa que Fausto R. no puedo ejecutar el hecho porque se
encontraba en la ciudad de San Miguel…lo cual pretendieron acreditar con el análisis en
cuestión, pero en base no se logra determinar antena de activación de llamadas entrantes y
salientes…la antena de activación de las llamadas…fue en San Miguel, sin determinar lugar
exacto, lo cual expresa el juzgado no me queda claro y consiguientemente no me permite llegar
al estado de certeza positiva, sobre la responsabilidad penal de este…la hipótesis fiscal
señalaba que Fausto R. es responsable porque se contaba con la entrevista…de “Silver”, quien
refirió que este llego con anterioridad en un vehículo automotor a la vivienda de las víctimas y
profirió amenazas contra el ahora occiso…circunstancia…que no tuvo por acreditada en el
apartado “acreditación de hechos”…el juzgado hace una exclusión ilegitima y retoma una
posición fuera de sentido porque fundamenta su resolución en que al contrario al haberse tenido
por acreditada tal circunstancia lo hubiese llegado a pensar…el juez…incurre en el vicio de no
observar las reglas de la sana critica…que le obliga a realizar una valoración en conjunto de
las pruebas licitas, pertinentes, útiles…el análisis que…realizó a los elementos de
prueba…especialmente la declaración de…“SILVER”…no fue confrontada con el resto de
elementos probatorios reproducidos en la audiencia del juicio…le dio valor a lo dicho por los
testigos de descargo sin embargo no expone por qué excluye los demás elementos…y este alega
el in dubio pro reo…dando un valor probatorio a testigos de la defensa contradictorios entre
sí…hay un elemento que no puede obviar, excluir y sobre todo valor y en su caso el expresar
porque no le merece fe el testigo “silver”…de no realizarlo de esa manera sería una exclusión
ilegitima del testo de elementos…no existe un sustento probatorio y el juez ha dado un salto al
vacío y la sentencia adolece de un vicio en cuanto que en la misma no se encuentra la
fundamentación…el sentenciador erró al dejar de valorar los elementos de prueba de carácter
decisivo en la sentencia…en lo referente al segundo vicio…el juez sentenciador arriba a la
siguiente conclusión absolver de responsabilidad civil al acusado, sin exponer…el fundamento
preciso de los motivos de hecho y de derecho en que basa la decisión…dicha decisión…es nulo
ya que existía sustento probatorio ofertado, admitido y reproducido en juicio vinculado a la
determinación de la responsabilidad civil…SOLUCIÓN PROPUESTA…revocar al sentencia
emitida…se proceda a REVOCAR las partes de la sentencia que adolece de vicios y proceda
resolver
directamente
pronunciando
sentencia
que
de
acuerdo
a
las
prueba
producidas…corresponden a condenar al justiciado FAUSTO NELSON R. C.…con una pesa de
veinte años de prisión por el delito de HOMICIDIO AGRAVADO…y diez años por el delito de
HOMICIDIO AGRAVADO EN GRADO DE TENTATIVA…y en cuanto a la responsabilidad civil
se condene a la cantidad de UN MIL DOLARES…”
CONTESTACION DE FISCALÍA.
La licenciada Martiza Xiomara Rivera de Romero, actuando en su calidad de agente
auxiliar del señor Fiscal General de la República, contestó los recursos de apelación interpuestos
por la defensa técnica, lo cual lo hizo en los términos siguientes: “…Es de hacer notar que los
argumentos expresados por el Licenciado Galán Cárcamo, son vagos, incoherentes y falaces,
atacando sin fundamento alguno el criterio del juzgador y la obtención de la prueba testifical,
haciendo un errónea interpretación de la sentencia, retomando puntos de su interés meramente
personal, dejando de lado la fundamentación de hecho y de derecho que estableció el Juez A
quo, donde hizo un análisis racional de todos los elementos de prueba…en cuanto a la prueba
testimonial de descargo…a criterio del Juez Sentenciador, no le mereció credibilidad alguna
debido a que en vista pública…la defensa particular le dijo a dicho testigo si el imputado Daniel
O. se encontraba presente en esa sala…estando dicho testigo a escasos tres metros de
distancia…le fue difícil identificarlo debido a problemas en su visión…el testimonio de […], al
Juez…no le mereció credibilidad alguno…pues en ningún momento se estableció si el testigo
tuvo a la vista al imputado en todo momento…el imputado…fue procesado en calidad de
COAUTOR…estuvo en el escenario del delito antes, durante y después de la comisión del hecho,
existió una planificación previa, un abuso de superioridad y alevosía por parte del
imputado…esta representación…no encuentra en ninguna parte de la sentencia la
INCONGRUENCIA O CONTRADICCIÓN de la cual la defensa particular aduce existió en el
presente caso. En cuanto al segundo escrito de Recurso…interpuesto por el licenciado JOSE
PEDRO GUZMAN VIGIL…no se ha percatado o pretende ocultar que en el acto de
comprobación consistente en declaración anticipada…fue bien claro en expresar nominalmente
y en reiteradas veces la participación directa en calidad de COAUTOR del imputado
FRANKLIN ANTONIO D. V.…por lo tanto la sentencia definitiva esta emitida conforme a
derecho…el motivo argumentado es inexistente…su autoridad analiza y valora en forma
individual y en su conjunto todos los medios de prueba documental, pericial y testimonial
mediante la sana critica, hacen la descripción y análisis de cada uno de los medios del elenco
probatorio, lo que crea una convicción jurídica de la participación del imputado…PIDO:
Confirme la Sentencia Definitiva decretada…por estar conforme a derecho y se declare no ha
lugar a apelar la sentencia definitiva…”
ADMISIBILIDAD DE LOS RECURSOS INTERPUESTOS.
Es así que tomando en consideración los requisitos de admisibilidad de los recursos de
apelación contra las sentencias definitivas contenidos en los artículos 468 y siguientes del
Código Procesal Penal, se debe realizar un examen preliminar de naturaleza formal, cuyo fin es
determinar si al momento de la interposición de la alzada, se han observado los presupuestos que
habilitan su admisibilidad.
Específicamente, los artículos 452, 453 y 470 del Código Procesal Penal, establecen
como requisitos formales de los recursos de apelación, los siguientes: a) Que sea interpuesto por
escrito, dentro de los diez días hábiles después de la notificación de la sentencia; b) Que el
recurso esté expresamente señalado por la ley; c) Que el recurrente esté facultado para impugnar
la resolución, d) Que se citen de manera expresa cuales son las disposiciones legales que se
consideran inobservadas o erróneamente aplicadas; e) Que se exprese concreta y separadamente
cada motivo con sus respectivos fundamentos; f) que la resolución haya causado un perjuicio o
agravio al recurrente; y g) Que se plantee la solución que se pretende.
En cuanto al recurso planteado por el licenciado José Pedro Guzmán Vigil.
Al analizar los elementos de admisibilidad del referido recurso se tiene que la audiencia
de vista pública se celebró el día once de febrero del presente año, emitiéndose la sentencia
definitiva correspondiente, a las siete horas con cuarenta y cinco minutos del día veintiocho de
febrero de ese mismo año, siendo notificada según la convocatoria realizada en vista pública, a
las quince horas de ese mismo día, tal como consta a folio 216 del expediente remitido y por su
parte, el recurso de apelación fue presentado de manera escrita por el licenciado José Pedro
Guzmán Vigil, el día once de marzo del año dos mil trece, por lo que el mismo fue interpuesto
en tiempo bajo el cómputo de los diez días hábiles que establece el artículo 470 del Código
Procesal Penal.
Así mismo, la sentencia definitiva en la que condenó al imputado Franklin Antonio D. V.,
es apelable según lo regulan los Arts. 468 y 469 del Código Procesal Penal, en relación con el
Art. 19 de la Ley Contra el Crimen Organizado y Delitos de Realización Compleja.
Aunado a ello, es importante establecer que la defensa técnica del encartado, de acuerdo a
lo establecido en el artículo 452 del Código Procesal Penal en relación con el referido artículo 19
de la Ley Contra el Crimen Organizado y Delitos de Realización Compleja, está facultada para
recurrir en el presente proceso.
Por otra parte, se tiene que el legislador exige que los recurrentes citen de manera expresa
cuales son las disposiciones legales que se consideran inobservadas o erróneamente aplicadas,
señalando para el caso en concreto, el defensor del encartado que en el caso de autos se ha dado
una inobservancia de los preceptos legales contenidos en los artículos 400 numeral 1 y 5 del
Código Procesal Penal.
Además el legislador exige que se expresen concreta y separadamente cada motivo con
sus respectivos fundamentos, siendo el recurrente claro al señalar el porqué de cada una de sus
inconformidades, la cual se sustenta principalmente en tres motivos: 1) Se debió practicar el
reconocimiento de personas en el señor Franklin Antonio D. V., pues no era suficiente el
señalamiento que realizó la víctima y testigo denominada con la clave “Silver”, 2) No se ha
acreditado la coautoría de su patrocinado, pues no se logró establecer probatoriamente la
existencia de un acuerdo previo, el dominio del hecho o la ayuda al cometimiento del ilícito y 3)
El testigo “Silver” no merece credibilidad, pues este señalaba de forma recurrente a uno de los
imputados como ejecutor de los hechos y se demostró técnicamente que este no estuvo en el
lugar de los hechos.
En cuanto al requisito relacionado con la existencia del agravio, el licenciado Guzmán
Vigil expresa: “…Lo resuelto por el Honorable Juez Sentenciador, causa agravio a mi
defendido por cuanto se le condenó por el homicidio de Maycol Yimmi M. R., sin haber ejercido
o realizado acción u omisión alguna tendientes a quitarle la vida; del mismo modo, habiéndose
acreditado duda en el testimonio del testigo "SILVER" el juzgador le dio credibilidad en parte y
ello genera duda y no obstante a ello, se le condenó de su libertad, limitando al procesado a uno
de los principales derechos Constitucionales como lo es el de Libertad ambulatoria…” por lo
que se tiene por cumplido este requisito.
Y finalmente se tiene que dicho defensor, en cuanto a la solución que pretenden expone
que se revoque la resolución emitida por el señor Juez de Sentencia Especializado con sede en la
ciudad de San Miguel y se pronuncie la absolución de su patrocinado.
En ese orden de ideas y según los Arts. 452, 453, 468, 469 y 470 todos del Código
Procesal Penal, es procedente declarar en el fallo respectivo, la ADMISIBILIDAD del recurso
por haberse presentado en tiempo y forma.
En cuanto al recurso presentado por el licenciado José Humberto Galán Cárcamo.
Tal como se señaló previamente, en el caso de autos, la audiencia de vista pública se
celebró el día once de febrero del presente año y la sentencia definitiva fue notificada el día
veintiocho de febrero de dos mil trece.
Asimismo, consta que el recurso de apelación fue presentado de manera escrita por el
licenciado José Humberto Galán Cárcamo, el día catorce de marzo del año dos mil trece, por
lo que el mismo fue interpuesto en tiempo.
Así mismo, la sentencia definitiva emitida en contra del señor Daniel O. O., es apelable
según lo regulan los Arts. 468 y 469 del Código Procesal Penal, en relación con el Art. 19 de la
Ley Contra el Crimen Organizado y Delitos de Realización Compleja.
A su vez, la defensa técnica del encartado, de acuerdo a lo establecido en el artículo 452
del Código Procesal Penal en relación con el referido artículo 19 de la Ley Contra el Crimen
Organizado y Delitos de Realización Compleja, está facultada para recurrir en el presente
proceso.
Por otra parte, el defensor del encartado en el caso de autos alega que se han inobservado
los preceptos legales de los artículos 400 numeral 4 en relación con el artículo 144 y artículo 400
numerales 1 y 5 del Código Procesal Penal.
En cuantos a los motivos estos son: 1) Existencia de contradicciones entre la
declaración anticipada de la víctima y testigo clave “silver” y la “entrevista” rendida por
esta misma persona en el inicio del proceso penal; 2) No consta que su patrocinado haya
realizado alguna acción tendiente a atentar en contra de la víctima y testigo “Silver”, por lo cual,
no existe razón para la imputación que pesa sobre su patrocinado, 3) El juzgador no valoró las
declaraciones de los testigos de descargo que desfilaron en vista pública a favor del encartado,
4) El juzgador no valoró a favor de su patrocinado la duda generada entre el dicho de “Silver” y
los testigos de descargo antes mencionados.
En cuanto al requisito relacionado con la existencia del agravio, el defensor expresa:
“…en este caso en especial…la sentencia de la cual apelo su fallo es condenatorio de treinta
años de prisión, con lo cual dicha resolución a juicio del apelante no es justa ni legal, porque
dicha sentencia no se apega a derecho y contiene los vicios y defectos que habilitan al recurso
ordinario de apelación: Esto según el Art. 400 inc. 1o numerales 2, 3,4 y 5, del C.Pr.Pn.”, por lo
que se tiene por cumplido este requisito.
Y finalmente se tiene que la defensa técnica propone como solución a las inobservancias
señaladas que se resuelva ya sea anulando o revocando la sentencia condenatoria emitida por el
señor Juez de Sentencia Especializado con sede en la ciudad de San Miguel, dadas los motivos
planteados.
En ese orden de ideas y según los Arts. 452, 453, 468, 469 y 470 todos del Código
Procesal Penal, es procedente declarar en el fallo respectivo, la ADMISIBILIDAD del recurso
por haberse presentado en tiempo y forma.
En cuanto al recurso de apelación presentado por la fiscal licenciada Maritza
Xiomara Rivera de Romero.
En este mismo caso, la sentencia definitiva se notificó el día veintiocho de febrero de dos
mil trece y consta que el recurso de apelación fue presentado de manera escrita por la licenciada
Maritza Xiomara Rivera de Romero, el día catorce de marzo del año dos mil trece, por lo que
el mismo fue interpuesto en tiempo.
Así mismo, la sentencia definitiva absolutoria emitida a favor del señor Fausto Nelson R.
C., es apelable según lo regulan los Arts. 468 y 469 del Código Procesal Penal, en relación con el
Art. 19 de la Ley Contra el Crimen Organizado y Delitos de Realización Compleja.
A su vez, la representación fiscal acreditada a la presente causa, de acuerdo a lo
establecido en el artículo 452 del Código Procesal Penal en relación con el referido artículo 19
de la Ley Contra el Crimen Organizado y Delitos de Realización Compleja, está facultada para
recurrir en el presente proceso.
Para el caso en concreto, la representación fiscal alega la inobservancia en la sentencia
definitiva de los artículos 400 numeral 2, y 5 del Código Procesal Penal.
En cuanto a los “motivos” expone que son: 1) El juzgador le restó credibilidad al dicho
del testigo presencial y víctima denominado con la clave “Silver”, únicamente para el caso de
señor R. C. y le dio valor para condenar a los demás imputados y 2) El Juzgador no expuso los
motivos de hecho y de derecho en los cuales basó para absolver de responsabilidad civil al señor
Fausto Nelson R. C., por lo que los motivos se tienen por fundamentados.
En cuanto al requisito relacionado con la existencia del agravio, fiscalía manifiesta: “…la
sentencia emitida por el Juez Sentenciador, causa agravio al legítimo ejercicio que facultan al
Ministerio Público Fiscal el desarrollo de la acusación formal y la prosecución del resultado
peticionado…ha perjudicado al expectativa procesal y porque en caso de quedar firme dicha
resolución se consumaría un ilegalidad, arbitrariedad y violación frontal a la ley, al no
enmendarse el error cometido por el sentenciador, al haber inobservado las reglas de la sana
crítica, con respecto a medios o elementos de valor decisivo, así como también la base de la
absolución sustentada por el juzgador con los mismos elementos probatorios que fueron
legalmente incorporados al juicio y con el cual condenó a dos imputados que participaron en el
mismo hecho…”, por lo que se tiene por cumplido este requisito.
Y finalmente se tiene que la representación fiscal propone como solución en el caso de
autos, que se revoque la sentencia absolutoria, a favor del señor Fausto Nelson R. C., en virtud
de las inobservancias planteadas.
En ese orden de ideas y según los Arts. 452, 453, 468, 469 y 470 todos del Código
Procesal Penal, es procedente declarar en el fallo respectivo, la ADMISIBILIDAD del recurso
por haberse presentado en tiempo y forma.
FUNDAMENTACIÓN DESCRIPTIVA.
PRUEBA DOCUMENTAL.
Primeramente se tiene la declaración anticipada de “Silver”, realizada ante el Juez de
Instrucción Especializado con sede en la ciudad de San Miguel, a las once horas con cinco
minutos del día once de diciembre del año dos mil doce, en la cual expuso: “...el día veintinueve
de julio de este año, a las siete de la noche, se encontraba en la casa de Maycol…ubicada en
Cantón el Capulín de Chirilagua…Maycol le dijo que fueran al baño, que ese baño está situado
en el patio de la casa, entonces se fue con él para el baño, que eran las siete de la noche, que
estando en el baño, Maycol caminaba adelante y luego él iba atrás con su niña…Maycol se
agarró de la pared del servicio y de repente se levantó Nelson R., que Nelson R. se encontraba
afuera del servicio…estaba acurrucado y luego se levantó y apuntó a Maycol con un arma, y le
apuntó en la cara a Maycol y le disparó hacia la boca, que luego salió Dany O. y le dejó ir un
machetazo en el cuello, que Dani O. se encontraba en el interior del servicio, que los
machetazos se los ocasiona en el cuello, que luego se le fue encima y le dejó ir otros en la
cabeza, que en ese acto Maycol cayó al suelo; que ella sólo se quedó parada; después llegó […],
que este se encontraba en la pared de la casa de Maycol, que […] le dejó ir un machetazo en el
brazo a la declarante, que luego después de eso se le acercó […], que le llama Walter M., y le
deja ir dos machetazos en el hombro, que el declarante cuando se encontraba lesionada trató
de correr con la niña a una distancia de menos de un metro, luego […] la agarró del pelo, el
cual se llama Franklin Antonio D. V.…y comenzó a pelear con él, luego la soltó y trató de correr
hacia la puerta de la casa de Maycol…en ese momento le dispararon por detrás, que la
lesionaron en la nalga y en la pierna, después…cubre a la niña y luego le dio vuelta para
arriba, en eso llegó […] y le dijo que iba a matar a la niña y ella le dijo que no…[...] dejó ir un
machetazo a la niña y la cual agarró de la cintura y la aventó al suelo, luego sintió machetazos
pero no reconoce cuantos fueron…se los ocasionaron en la cabeza…después se le acercaron los
cinco…le dijeron que le querían dar vuelta para matar a la niña…quien le dijo eso fue el [...],
después le dijo Nelson que de todas maneras estaba muerta y que ella misma iba a matar a la
niña…después…la agarraron a patadas y después se tiraron el muro…y se dirigieron a un
vehículo Toyota, doble cabina, color ocre, vidrios oscuros, que quien manejaba ese vehículo era
Nelson R.…después de eso se fue hacia donde Maycol…observa que estaba muerto…se dirigió
hacia la esquina de las celosías a pedir ayuda…le pidió ayuda a Fide…tío del Maycol…vive
cerca de la casa…llegó a la casa con Munda…una vecina…estas dos personas le agarraron la
niña y se fueron….después llegó Bartolo y Carmela…unos amigos…como a la hora llegó la
Policía y la trasladaron hacia el Hospital…tres semanas antes, Nelson llegó un día…andaba un
carro Toyota vidrios oscuros, color ocre, que primero ella salió y él pitaba, que Nelson se
estaciona en frente de la casa, que cuando lo ve, ella le fue a decir a Maycol que lo buscaba
Nelson, y Maycol le dijo que no eran amigos, que ella le dijo que saliera…Maycol salió…Nelson
le dijo que la deban ganas de matarlo y Maycol le dijo que lo matara y le dijo Nelson que
después se iban a ver las caras y disparó tres diparos al aire y se fue…después de toda esta
situación, […] le llamó un día…[…] es primo de Nelson…le llama para decirle que retire la
denuncia…entre Maycol y la persona que había mencionado como el [...] no existía algún
problema personal…tiene tres años de conocer a Daniel O. O.…Daniel…y Maycol son
familiares…no sabe si había algún problema entre Maycol y Daniel O. O.…Daniel salió del
interior del baño, le pegó en el cuello a Maycol y Maycol cae al suelo…ella recibió golpes de
parte de Daniel con los pies…vio la marca del vehículo porque ella se arrastró a la celosilla que
está muy cerca de la carretera, se paró y vio un carro, que estaba a una distancia de un
metro…no escuchó el ruido del carro cuando se parqueó porque prendió la grabadora y no
sintió…era normal acompañar a Maycol al baño…porque la niña siempre se iba detrás de él…”
Asimismo consta se incorporó el acta de inspección ocular y levantamiento de cadáver,
practicada a las veintidós horas y treinta minutos del día veintinueve de julio del dos mil doce, al
interior del patio de la casa sin número ubicada en carretera litoral Cantón Capulín a la altura del
primer chorro público, Jurisdicción de Chirilagua, en donde se ubicó el cuerpo sin vida de una
persona del sexo masculino, quien en vida respondía al nombre de Maycol Yimmi M. R.,
asimismo se hizo constar que personal de la Policía Técnica y Científica de la Policía Nacional
Civil toman fotografías y método de fijación del lugar del hecho y recolectaron como evidencias
manchas al parecer sangre y un fragmento de proyectil de arma de fuego ubicado sobre el suelo
al costado nor oriente del cadáver, asimismo se hizo constar que se ubicó un impacto producido
por proyectil disparado con arma de fuego ubicado en la parte inferior de la pared costado sur de
la casa, posteriormente consta en dicha acta que se procedió al levantamiento del cadáver de la
referida víctima, determinando que esta presentaba las lesiones siguientes: 1) orifico de dos
punto cinco en región mentonaina, 2) herida de quince centímetros en región sub mentoniana, 3)
herida de quince centímetros en región anterior del cuello, 4) herida de diez centímetros en
región, anterior del hombro derecho y 5) herida de quince centímetros en región parietal derecha.
Se incorporó a la vista pública además, “LA ENTREVISTA” de la víctima y testigo
denominada con la clave “Silver”, rendida a las nueve horas y cincuenta y seis minutos del día
quince de agosto del año dos mil doce, que corre agregada a folio 9 y siguientes del expediente
remitido.
Se tiene a su vez, el álbum fotográfico elaborado por técnico de la División Policía
Técnica y Científica fotógrafo […], donde se ilustra el espacio físico y geográfico donde se dio
el hecho y las evidencias de trauma que presentaba la víctima Maycol Yimmi M. R.
Asimismo, se incorporó en vista pública, las bitácoras de llamadas entrantes y
salientes de los teléfonos 7534-6949 y 7272-7332, de fecha veintinueve al treinta de julio del
año dos mil doce, además del análisis relacional de dichos números, el cual fue practicado por el
agente […], en el cual se concluyó que ambos números aparecen abonados al señor […] y que el
día de los hechos se registraron tres llamadas entrantes y tres llamadas salientes del número […],
esto entre las doce y las veintiún horas, con antena de activación en el cantón El Capulín,
asimismo se expuso que: “…según bitácora de llamadas…del número…[…]…el día 29/07/12, le
aparecen 03 llamadas entrante salientes al número […], para un total de 06 llamadas…en las
cuales el lugar de activación de la antena NO se encuentra determinado, ya que la bitácora no
lo específica, apareciendo en la bitácora el mensaje “SECTOR IN (NULL)”, es decir, el sector
de activación es NULO, por lo que no se logra establecer el lugar exacto de activación de la
antena al momento de hacer y recibir las llamadas…”
Se tiene además las “entrevistas” de los señores […] y […], la primera en calidad de tía
del ahora occiso y vecina inmediata al lugar donde sucedió el hecho, que constan en el
expediente a folios 110 y 111.
A su vez, se incorporó copia de la factura de los gastos funerales proporcionada por
Funerales El Buen Samaritano, de la cantidad de ochocientos treinta y seis dólares.
Por otra parte, consta la diligencia de reconocimiento de personas en el imputado Dany
O. P., alias [...], con la intervención del testigo y víctima clave “Silver” y del cual se obtuvo un
resultado positivo.
PRUEBA PERICIAL.
Se incorporó, el acta de levantamiento de cadáver de la víctima, en el cual el médico
forense, doctor […], determinó como evidencia externa de trauma: 1) orificio de dos punto cinco
en región mentoniana, 2) herida de quince centímetros en región sub mentoniana, 3) herida de
quince centímetros en región anterior del cuello, 4) herida de diez centímetros en región anterior
del hombro derecho y 5) herida de quince centímetros en región parietal derecha.
Asimismo, se tiene el dictamen de autopsia practicada a la víctima por el doctor […],
quien determinó que el señor Maycol Jimmy M. R. presentaba como evidencia externa de
trauma: 1) Orificio de entrada y salida en mentón y labio inferior de dos por dos centímetros, 2)
dos heridas por arma corto contundente en cuello, 3) herida constante en región parietooccipital
derecha, 4) herida contusa de dos centímetros en ceja derecha. Aunado a ello se estableció que la
causa de muerte fue producto de un trauma cráneo encefálico más hemorragia, más lesión
vascular de cuello por arma corto contundente y arma de fuego.
Por otra parte se incorporó el reconocimiento médico de sangre, de la víctima clave
"Silver", practicado por el doctor […], estableciendo dicho profesional que las evidencias
externas de trauma que presentaba la víctima eran: Lesiones de arma blanca en región parietal
derecha, región parietal izquierda y región de cuello posterior tercio superior, heridas por arma
blanca en hombro derecho y hombro izquierdo, heridas por arma de fuego en cadera posterior
derecha y en área superior a región inguinal derecha, herida de dreno en flanco derecho, herida
por arma de fuego en tercio medio distal cara amero medial y herida por arma de fuego en
cara posterior tercio medio distal del muslo derecho, estableciendo consecuentemente que
dichas lesiones sanarían en un período de cuarenta y cinco días con tratamiento médico de
especialista, salvo complicaciones.
Asimismo y en consonancia con el referido medio de prueba, se incorporó el
reconocimiento médico de sanidad realizado a la víctima “Silver”, por el doctor […],
concluyéndose que efectivamente las lesiones que presentaba dicha víctima sanaron en un
período de cuarenta y cinco días, dejando como complicaciones ulceras que están en proceso
de resolución a nivel del cráneo, además de manchas y cicatrices permanentes, visibles y
deformantes a nivel de cráneo, hombro derecho, región escapular izquierda, región
abdominal, pelvis y muslo derecho, además el dolor y la dificultad a la de ambulación.
Y finalmente el análisis toxicológico realizado a la víctima, Maycol Jimmy M. R., en el
cual se concluyó que no presentaba ningún grado de alcohol o droga en su sangre.
PRUEBA TESTIMONIAL.
Se tiene la declaración de la señora […], quien expuso en vista pública que: “…es tía del
joven Maycol Yimmi M. R.…el día veintinueve de julio de dos mil doce, como a eso de las siete
de la noche, estaba en su casa de habitación, en el cantón el Capulín, jurisdicción de
Chirilagua, que Maycol residía solo, el patio de su casa los dividía a la de él…escuchó disparos
como a las diez de la noche…como cinco…después escucho como a los diez minutos que gritaba
la muchacha, pedía auxilio…estaba herida de los golpes que le habían pegado…cuando escuchó
los gritos como a las siete y diez minutos, que solo se llevó la niña y la bañó porque estaba llena
de sangre, que Maycol Jimmy estaba herido muerto…la muchacha estaba pegada a un palo de
laurel topada a la celosía…luego llamaron a la mamá de […] y la mamá de Maycol…está en
Estados Unidos…le dijimos que al muchacho lo habían matado…sólo estaba Bartolo y su
esposa….él fue a dar parte al Delirio al Puesto de Policía para que la llevaran al hospital a la
muchacha que estaba herida…”
Asimismo como prueba de descargo se tiene el dicho del señor […] quien manifestó:
“…conoce a Maycol Jimmi M. R., que era su hermano, que son de diferente papá, que el día
veintinueve de julio de dos mil doce, en horas de la noche estaba en su casa en Caserío el
Capulín…que Maycol Jimmy ese día estaba en su casa, que él le llamó a las siete y diecinueve,
que le preguntó por la muchacha que andaba con él, que le dijo que la muchacha no estaba en
su casa, que lo mataron…llegó como a los tres minutos que le avisaron…como no lo dejaron ver
a su hermano, le llamó a Nelson su primo…como a las ocho ocho y tres…le dijo que si podía
llegar porque se sentía mal, que le llamó del […]…no recuerda a que número llamó, que el
teléfono está a nombre de él y el de Nelson también...este le dijo que no podía llegar porque
estaba tomando…el siguiente día no llegó Nelson a la velación…por problemas con la gente,
que no lo pueden ver por envidias…”
Por su parte el testigo de descargo, señor […] expuso: “…el día veintinueve de julio de
dos mil doce, se encontraba en su casa, que es vecino de Nelson R.…estaba trabajando haciendo
tubos de cemento…empezó a las cuatro de la tarde…llegó hasta las once de la noche…su
vecino es Nelson R.…lo vio ese día en su casa, desde las cuatro de la tarde, que se retiró a las
doce y allí estaban ellos en su casa…en una fiesta familiar…”
Y finalmente el testigo ofrecido también por la defensa, […] expuso: “…el día
veintinueve de julio de dos mil doce, en horas de la tarde estaba en la casa de Nelson R.…que le
lleva agua a su mamá…se fue a dejar el agua…llegó donde Nelson a las tres de la tarde…lo fue
a visitar, que permaneció allí hasta la una de la mañana, ellos habían preparado comida y lo
habían invitado…se refiere a Nelson y a su compañera de vida, ese día tomaron cerveza, que se
retiró a la una de la mañana…Nelson permaneció en su casa desde las tres de la tarde hasta la
una de la mañana…”
FUNDAMENTACIÓN INTELECTIVA.
Esta Cámara procederá a resolver en primer lugar el recurso de Fiscalía, pues algunos de
los argumentos relacionados en los escritos de apelación presentados por la defensa técnica,
guardan íntima relación con el fundamento del juzgador para emitir un fallo absolutorio a favor
del señor Fausto Nelson R. C., por lo cual corresponderá determinar si la misma se encuentra o
no apegada a derecho.
RESPECTO DEL RECURSO DE APELACIÓN INTERPUESTO POR FISCALÍA.
Al analizar el recurso interpuesto por la licenciada Maritza Xiomara Rivera de Romero,
esta Cámara detecta que la inconformidad con la sentencia absolutoria emitida a favor del
imputado Fausto Nelson R. C., se sustenta en dos motivos esenciales, los cuales se procederán a
resolver uno a uno.
PRIMER CONSIDERANDO.
Este argumento hace referencia a la inobservancia de las reglas de la sana crítica y tiene
su fundamento en el hecho que el juzgador le restó credibilidad al dicho del testigo presencial
y víctima denominado con la clave “Silver”.
Ello es así pues el juzgador al momento de emitir su decisión respecto del señor Fausto
Nelson R. le da mérito y credibilidad a las declaraciones de los testigos de descargo, quienes lo
ubican fuera de la escena del delito.
Tal es el caso del testigo […], quien expresó en su declaración que el día de los hechos le
llamó al imputado desde su número de celular […], como a las ocho horas con tres minutos, pues
se sentía mal, sin embargo este le manifestó que no podía llegar a su casa pues estaba tomando.
Es igualmente importante señalar que dicho declarante era medio hermano de la víctima
Maycol Jimmy M. R. y a su vez es primo del imputado por el cual estamos conociendo.
Asimismo, el testigo de descargo […] expuso que el día domingo veintinueve de julio del
año dos mil doce, él se encontraba trabajando en su casa de habitación, siendo vecino del
imputado Nelson R., por lo que pudo observar que dicho encartado se encontró en su vivienda
desde las cuatro de las tarde hasta las doce de la noche, pues tenía una fiesta familiar en dicho
lugar, asimismo señaló que él nunca lo vio salir en tal lapso de tiempo.
Y finalmente el testigo […] expuso que él estuvo departiendo el día veintinueve de julio
del año dos mil doce, con el imputado desde las tres de la tarde hasta la una de la mañana, en la
casa de habitación de dicho encartado, la cual se ubica en el cantón El Capulín.
Dichas declaraciones a consideración del juez sentenciador al cotejarse con el análisis
relacional de bitácoras de llamadas entre los números […] le generan una duda razonable en la
participación del imputado Fausto Nelson R. C..
Sobre dicho análisis esta Cámara considera necesario hacer referencia a ciertos puntos,
pues la víctima y testigo denominada con la clave “Silver” ha sido el medio de prueba directo y
esencial sobre el cual descansa la imputación de los hechos en contra de ahora los procesados.
Siendo a su vez relevante señalar que dicho testigo es una fuente presencial del hecho,
pues estuvo en el lugar y a la hora en que se ejecutaron las acciones delictivas, algunas de las
cuales fueron realizadas en su perjuicio.
En virtud de ello, es que detecta esta Cámara que el señor Juez de Sentencia
Especializado con sede en la ciudad de San Miguel, en su sentencia, le da credibilidad al dicho
de “Silver” y por lo tanto, procede a emitir un fallo de carácter condenatorio en contra Daniel
O. O. y Franklin Antonio D. V..
Incluso el mismo juzgador reconoce al momento de pronunciarse sobre la participación
del imputado Fausto Nelson R. C. que el relato del testigo, aunado a la prueba pericial y
documental presentada “sería suficiente para emitir una sentencia condenatoria en contra de
dicho encartado”, tal como se constata que lo dijo en su sentencia.
Sin embargo y tal como se hizo constar previamente, al valorar el dicho de los testigos de
descargo y el análisis relacional de bitácoras de llamadas, concluye a su vez que a su
consideración existe “duda” en la presencia o no del imputado en el lugar de los hechos
conforme a lo narrado por “Silver”.
Es este punto en particular el que llama la atención a este Tribunal, pues tal actuar viene a
constituirse como una incongruencia en la valoración del juzgador, violentando el principio
lógico de razón suficiente, sobre el cual la Sala de lo Penal en su resolución con referencia 376CAS-2008 de las once horas y treinta y cinco minutos del día veinte de marzo del año dos mil
nueve expone: “…El principio lógico de derivación o razón suficiente, por el que todo juicio,
para ser realmente verdadero, necesita de una razón suficiente, que justifique lo que en el juicio
se afirma o niega con pretensión de verdad. Es decir, que la motivación de la sentencia al ser
derivada, respeta el principio en mención, siendo que el razonamiento debe estar constituido por
inferencias razonables deducidas de las pruebas que desfilaron durante el juicio, por lo que
existe una razón suficiente que justifica el razonamiento del juez sentenciador…”
Ello es así, pues al hablar de “duda” en la presencia del imputado en el lugar de los
hechos, ello por sí mismo implica un quebrantamiento a la credibilidad del testigo y víctima
“Silver” y consecuentemente lleva a determinar que el análisis de los elementos probatorios
realizado por el juzgador es incongruente, ya que sin explicación clara está diciendo que al
mismo tiempo le cree y no le cree a la víctima “Silver” fraccionando la declaración de dicho
testigo, dándole validez a esta para emitir una sentencia condenatoria en contra de unos
imputados y luego sorpresivamente le resta credibilidad y de forma especulativa da a entender
que “Silver” podría estar confundida o haberse equivocado en su señalamiento respecto al señor
Fausto Nelson R. C., sin decir porqué llega a tal conclusión.
Tal resolución atenta contra las reglas de la sana crítica, pues no es lógico creerle y no
creerle a la vez sobre un mismo hecho, por lo que se reitera que al ser dicho medio probatorio
uno mismo, es bajo esa perspectiva de unidad que debe valorarse.
En el mismo sentido, se debe señalar que el juzgador no valoró el señalamiento realizado
en audiencia de vista pública por la víctima y testigo clave “Silver”, respecto al hecho que el
imputado ya había amenazado de muerte al señor Maycol Jimmy M. A., ello pese a que este
es un dato relevante que se produjo en vista pública y sobre el cual no se hizo de manera
injustificada mención alguna, violentando el artículo 394 inciso 1° del Código Procesal Penal, el
cual regula: “El Tribunal apreciará las pruebas producidas durante la vista pública de un modo
integral y según las reglas de la sana crítica”.
A su vez, es necesario referirnos a ciertos aspectos que tampoco fueron valorados por
el juzgador sobre lo declarado por el testigo de descargo […], pues es necesario señalar
primeramente que en ningún momento se analizó si este testigo de descargo guarda o no una
relación de parentesco con otro de los imputados que fue señalado por “Silver” como ejecutor de
los delitos que se están conociendo, específicamente con el señor […], quien era menor de edad
al momento de la comisión del hecho, señalamiento que se realiza en virtud de la coincidencia de
apellidos entre dicho sujeto y el testigo antes referido.
Asimismo, dicho declarante expuso que él es el propietario de las líneas telefónicas
asignadas con los números […] y […], detallando él mismo en su declaración que el primer
número era el que usaba él y el segundo por el señor Fausto Nelson R. C., quien es su primo.
No obstante ello, no consta en el proceso prueba alguna que acredite tal circunstancia más
que el dicho de tal testigo, en su calidad de familiar del encartado, sin embargo, el juzgador le
dio plena credibilidad a tal información.
Asimismo, es importante referirnos al elemento consistente en análisis relacional de
llamadas telefónicas, mismo que sirvió de fundamento al juzgador para emitir la resolución de la
cual ahora conocemos y es que él hace referencia a las conclusiones contenidas en dicho análisis,
específicamente a que efectivamente existió comunicación entre dichos números el día de los
hechos, sin embargo, respecto al número […], el cual supuestamente era portado por la víctima,
no se cuenta con el lugar de activación de la antena al momento tanto de hacer las llamadas
como de recibirlas, sin embargo, el juzgador no tomó en cuenta que en el mismo análisis,
específicamente a folios 178 del expediente judicial se relaciona la ubicación del señor […]
según bitácora de llamadas entrantes y salientes del número […] de los días 28, 29 y 30 de julio
del año dos mil doce, en la cual se relaciona el sector “Capulín”, sitio donde precisamente se
dio la comisión del hecho delictivo que ahora se conoce.
Atendiendo a los puntos antes señalados y a la falta de valoración integral de los
elementos probatorios incorporados a la vista pública, esta Cámara advierte que el actuar del
Juez Sentenciador ha generado una vulneración al principio lógico de razón suficiente.
Por lo que si hacemos uso de la teoría de inclusión mental hipotética, de los datos antes
señalados, probable que el señor Juez de Sentencia Especializado con sede en la ciudad de San
Miguel, al valorar y analizar conforme a la ley los elementos probatorios presentados, hubiese
podido emitir una decisión distinta o en su caso la misma, pero con fundamento y apego a la
totalidad del material probatorio incorporado en vista pública, pues llevó a cabo una valoración
contradictoria del testigo “Silver” y también su yerro fue realizar un análisis integral.
Por lo que al haberse inobservado las reglas de la sana critica contenidas en el artículo
179 del Código Procesal Penal, el principio de legalidad del artículo 2 y 175 del mismo cuerpo
normativo, además de haberse omitido de manera injustificada la valoración integral de los
elementos de prueba legalmente incorporados y producidos en el juicio, como lo exige el artículo
394 inciso 1° del Código Procesal Penal, es procedente en el fallo respectivo, anular
parcialmente la sentencia emitida por el señor Juez de Sentencia Especializado con sede en la
ciudad de San Miguel, únicamente en lo relativo a la sentencia absolutoria emitida a favor del
imputado Fausto Nelson R. C., por el ilícito penal de HOMICIDIO AGRAVADO Y
HOMICIDIO AGRAVADO TENTADO, en perjuicio de la vida del señor Maycol Jimmy
M. R. y de la víctima clave “Silver” debiendo conforme al artículo 475 del Código Procesal
Penal, ordenarse la reposición del juicio por otro tribunal distinto.
Con ello, la finalidad de dicho procedimiento es garantizar el respeto de la garantía de
imparcialidad del Juez, debido a la importancia de la decisión que debe emitir, pues en ella se
decide la situación jurídica del procesado de manera definitiva.
Sin embargo, es evidente que el legislador partió que dicha disposición se aplicaría a los
juzgados y tribunales de la competencia común, en donde en cada departamento, según el mapa
judicial territorial, hay un tribunal de sentencia, pudiendo perfectamente remitirse el proceso al
tribunal del departamento más próximo (al menos para los casos de los tribunales de sentencia),
no diciendo nada el legislador sobre los juzgados especializados, que únicamente tenemos uno
en Santa Ana, uno en San Miguel y dos en San Salvador, los cuales son unipersonales.
Atendiendo a ello, no hay opciones para un reenvío en toda la zona oriental, más allá de
excusar al señor Juez que conoció de la presente causa y que conozca el respectivo suplente, por
tanto, en el presente caso se enviará el juicio hacia el Juzgado Especializado de Sentencia con
sede en la ciudad de San Miguel, debiendo conocer el Juez suplente de dicha sede judicial, lo
cual así se hará constar en el fallo respectivo.
SEGUNDO CONSIDERANDO.
Respecto a este punto, la representación fiscal ha mostrado su inconformidad con la
decisión del juez de sentencia especializado con sede en la ciudad de San Miguel, para absolver
de responsabilidad civil al señor Fausto Nelson R. C., pues no expuso los motivos de hecho y
de derecho en los cuales basó tal decisión.
Al respecto, esta Cámara procedió a verificar la sentencia emitida, específicamente lo
relacionado con la determinación de la responsabilidad civil de los encartados y efectivamente se
advierte que el juzgador no emitió motivación alguna del porqué determinó absolver al
encartado, es más, ni aparece mención alguna sobre él en dicha parte de la sentencia.
Sobre dicho punto, esta Cámara determina que en casos como el presente, lo que
procedería es anular la sentencia definitiva absolutoria en materia de responsabilidad civil
emitida a favor del encartado, pues la misma carece totalmente de fundamentación, ello pese a
que es una obligación del Juzgador exponer los motivos ya sean estos favorables o desfavorables
del porque arribó a determinada conclusión, tal como lo exige el artículo 144 del Código
Procesal Penal.
A su vez, se debe señalar que la sentencia que se emita en materia civil, según el Código
Procesal Penal, artículo 45 literal 3, numeral a, se puede ver separada de la sentencia penal,
únicamente en aquellos casos en que estemos ante una sentencia penal absolutoria amparados en
la duda de la responsabilidad del imputado.
Por lo que el juzgador deberá tomar en consideración dichos señalamientos a futuro a fin
de evitar incurrir de manera reiterada en el mismo error, no obstante ello, se advierte que en el
caso en concreto de este imputado, esta Cámara ya ha declarado la nulidad absoluta parcial de la
sentencia, dejando sin efecto lo actuado por el señor Juez de Sentencia Especializado con sede en
la ciudad de San Miguel ello en el considerando previo, la cual trae como consecuencia que se
reponga el juicio por un nuevo tribunal, , debiendo consecuentemente el Juez de Sentencia
Especializado Suplente que conocerá de la sentencia en materia penal, pronunciarse también
sobre el aspecto civil, pues lo general abarca lo específico.
RESPECTO DEL RECURSO PRESENTADO POR EL LICENCIADO JOSÉ
PEDRO GUZMÁN VIGIL.
Al analizar el escrito de apelación presentado por el referido licenciado, se advierte que
este sustenta su inconformidad en dos puntos esenciales, el primero de ellos guarda relación con
la insuficiente identificación del imputado, regulada en el artículo 400 numeral 1 del Código
Procesal Penal y el segundo punto se refiere a la vulneración de las reglas de la sana critica
comprendidas en el artículo 400 numeral 5 de ese mismo cuerpo normativo.
Es así, que se procederá a analizar una a una dichas inconformidades, así como los
motivos en los cuales se sustentan las mismas a fin de determinar si la sentencia emitida en
contra del imputado Franklin Antonio D. V. adolece de los vicios señalados o si por el contrario
la misma se encuentra apegada a derecho.
PRIMER CONSIDERANDO.
Tal como se dijo previamente, el primer vicio alegado por la defensa hace referencia a lo
dispuesto en el artículo 400 numeral 1 del Código Procesal Penal, el cual se relaciona con la
identificación del encartado.
Dicho vicio tiene su fundamento en el hecho que a consideración del recurrente, en el
caso de autos, se debió practicar el reconocimiento de personas en su patrocinado, el señor
Franklin Antonio D. V., pues no era suficiente el señalamiento que realizó la víctima y testigo
denominada con la clave “Silver”.
Al respecto, conviene señalar que en declaración anticipada incorporada legalmente a la
vista pública, la referida víctima expuso que uno de los sujetos que intervino en las acciones
ilícitas en su perjuicio y en el del señor Maycol Jimmy M. R., fue el sujeto alias “[...]” a quien
dicha víctima incluso menciona con su nombre y apellido, pues refiere que se llama Franklin
Antonio D. V..
Asimismo y pese a no ser un elemento de prueba como tal, pues no se trata de los hechos,
sino de la persona a juzgar, no está demás mencionar que para que el imputado fuera procesado y
que la causa llegara hasta la fase de vista pública, se debió obtener una identificación e
individualización previa por parte del Juez Instructor.
Tal es así que al inicio, la testigo y víctima clave “Silver” manifestó que el día de los
hechos, observó a cinco sujetos conocidos en el patio de su casa de habitación, entre estos
relaciona al encartado Franklin Antonio D. V., alias “[...]”, […].
Partiendo de dicha información, se llevó a cabo la diligencia de ubicación de las
viviendas de todas las personas relacionadas con la víctima y testigo, entre ellas el señor D. V.,
por lo que posterior a ello se efectuó el correspondiente registro con prevención de
allanamiento en el interior del terreno ubicado en cantón el delirio, contiguo a gasolinera ESSO,
San Miguel.
Es así, que a partir de dichos datos, se logró en una fase inicial del proceso, la
individualización e identificación del imputado, motivo por el cual se presentó el dictamen de
acusación correspondiente en contra del señor Franklin Antonio D. V..
Por lo que en ese contexto, la practica o no de un reconocimiento de personas, no puede
ni debe verse como un elemento absoluto que por sí mismo tenga una sobre valoración para
acreditar la participación de un imputado sólo con ese medio de prueba, violentando el principio
de libertad probatoria.
Nuestro sistema de valoración permite que los hechos se puedan probar con cualquier
medio de prueba y el reconocimiento en fila de personas no es exigible para todos los casos, es
preciso que se lleve a cabo un análisis integral de toda la prueba, pues el encartado es una
persona claramente determinada, individualizada e identificada.
En consonancia con dicho razonamiento, la doctrina mayoritaria ya ha establecido que el
reconocimiento de personas no procede practicarlo para todos los casos, tal como lo expresa
el autor Carlos Climent Durán, en su obra la Prueba Penal, pág. 1108, 1109, y 1110 en las que
dice: “La diligencia de Reconocimiento en rueda de personas, no es un medio identificativo
obligatorio; no es preciso practicarla automáticamente en todos los casos…sólo debe hacerse
cuando haya dudas razonables al respecto, porque si la identificación del imputado ha quedado
suficientemente concretada a través de cualquier otro modo identificativo (reconocimiento
casual o fortuito, declaración testifical o confesión del imputado), y no hay dudas sobre la
misma, deviene en una diligencia innecesaria e inútil…si la víctima o algún testigo presencial
del hecho delictivo, conoce a su ejecutor por ser vecino suyo o por ser habitante del mismo
barrio o por cualquier otra causa, la identificación en rueda suele devenir INNECESARIA”.
Es así que en el presente caso hay una testigo presencial clave “Silver”, quien a su vez
fue víctima del delito de Homicidio Agravado Tentado, quien menciona conocer a los
imputados, llegando incluso a mencionar a cada uno de ellos por sus nombres, apellidos y
alias, hecho que por sí mismo es suficiente para establecer que el imputado Franklin
Antonio Díaz V., ha sido identificado e individualizado en el caso de autos, por lo que en ese
contexto el reconocimiento fotográfico o de personas no era vital pues los imputados son
conocidos por el testigo y víctima de los hechos.
SEGUNDO CONSIDERANDO.
Con respecto a este argumento, la defensa técnica del encartado alega que en el caso de
autos se han inobservado las reglas de la sana crítica con respecto a medios o elementos
probatorios decisivos.
Dicho señalamiento se sustenta en primer lugar en que a juicio del recurrente no se ha
acreditado la coautoría de su patrocinado, pues no se logró establecer probatoriamente la
existencia de un acuerdo previo, el dominio del hecho o la ayuda al cometimiento del ilícito.
Tal aseveración se sustenta en el hecho que el imputado no disparó o lesionó a la víctima
señor Maycol Jimmy M. R., pues la testigo y víctima clave “Silver” únicamente lo relaciona
como uno de los sujetos que la lesionan a ella, hecho que por sí mismo no puede ni debe verse
como un elemento que exime de responsabilidad al encartado, ya que nuestro sistema no sólo
sanciona al que realiza el verbo rector, como puede ser halar el gatillo del arma de fuego para
matar a una víctima.
Ello es así, pues en primer lugar, la víctima “Silver” claramente relaciona que al
momento en que sucedieron los hechos, ella reconoció a cinco sujetos, quienes se encontraban al
interior de la casa de habitación en la que vivía junto con el señor Maycol M. R..
Este hecho en sí mismo es un dato indiciario inequívoco revelador de un concierto previo,
de un reparto de roles y una planeación, pues al analizarlo conforme a las reglas de la sana
critica, podemos determinar por simple lógica que no es un aspecto casual o fortuito que cinco
sujetos ingresen a la casa de habitación de una persona alrededor de las siete de la noche y se
escondan al interior del jardín, para luego actuar de forma conjunta.
En el mismo sentido se valora el hecho que al momento en que uno de los imputados
lesiona mortalmente al señor Maycol M. R., el resto de sujetos lejos de retirarse del lugar, optan
por ayudarle a la consecución del resultado muerte.
Ello es así, pues la testigo presencial de los hechos y víctima “Silver”, relaciona que
primeramente, uno de los sujetos (Nelson R.) le da un disparo en el rostro al señor M. R. y
posteriormente otro de los imputados (Dany O.) le da machetazos al mismo, cayendo este al
suelo.
Asimismo relaciona “Silver” que ante tales acciones se quedó parada, por lo que los
sujetos Jonathan S. y Walter M. proceden a lesionarla con machetes, intentado posteriormente
huir del lugar junto con la niña, sin embargo, “[...]” (Franklin D) la agarra del pelo, por lo que se
dio un forcejeo con él y según relata la testigo, este procede a soltarla y ella corre, no obstante en
ese momento le realizan dos disparos con arma de fuego, los cuales impactan sobre ella.
Otro dato relevante, es el hecho que a la víctima, estando ya lesionada se le acerca el [...]
y le dice que iba a matar a la niña, por lo que “Silver” opta por mover a la niña siendo ella la que
recibe las lesiones en la cabeza, las cuales se las realizaron con un machete.
Finalmente, consta que según el dicho de la referida víctima, los cinco sujetos se le
acercan y el [...] dijo que la movieran para matar a la niña, sin embargo, los demás dijeron que
ella misma la mataría, por lo que proceden a golpear a “Silver”, dándole patadas y luego todos
juntos, los sujetos se retiran del lugar a bordo de un mismo vehículo.
Todas las acciones antes mencionadas, son reveladoras de un actuar bajo la figura de la
coautoría, que proyectan un dolo conjunto, siendo igualmente importante hacer alusión al
dominio funcional del hecho que este imputado tenía, dado que estaba presente en el lugar e
incluso pudo haber evitado las acciones cometidas o incluso pudo retirarse, sin embargo y por el
contrario, asumió un rol activo en dicho momento, lo cual favoreció la comisión de los delitos.
Al respecto, se tiene doctrina emitida por el autor El doctrinario Dr. Francisco Muñoz
Conde, en la obra Derecho Penal, Parte General, 4° edición, pagina 496, ha expuesto que: “…el
autor de un delito es el que domina objetiva y subjetivamente la realización de ese delito…”
Sobre este tema, también se cuenta con jurisprudencia emitida por la Sala de lo Penal, en
Sentencia de las once horas y quince minutos del día trece de febrero del año dos mil seis expone
que: “El coautor es aquel que realiza conjuntamente un delito y cuya colaboración es consciente
y voluntaria, la cual requiere para que se constituya la aplicación del criterio material del
dominio funcional del hecho, en el cual varias personas tienen el dominio del hecho y en virtud
del principio del reparto funcional de roles, asumen por igual la responsabilidad.”
Asimismo doctrinariamente se determina que para hablar de coautoría entre un grupo de
sujetos activos se requiere el cumplimiento de ciertos requisitos, entre los cuales se encuentra el
co-dominio del hecho, el plan o acuerdo previo entre los procesados y el aporte objetivo de cada
uno de los intervinientes.
En atención a los criterios antes planteados y al confrontar los mismos con los medios
probatorios que se vertieron en vista pública, se determina que según la declaración de la víctima
y testigo “Silver”, el procesado por el cual ahora se recurre, no sólo llegó con el resto de
imputados al lugar donde se ejecutaron las acciones ilícitas, sino que además ingresó armado
junto con ellos a la vivienda, siendo este un dato revelador del conocimiento de la acción
delictiva a realizar, asimismo él procesado Franklin Antonio D. es incluso mencionado por la
testigo al momento de que propone darle muerte a su menor hija, teniendo dominio de la
voluntad y del hecho delictivo que él junto con los otros sujetos ejecutó.
Es en virtud de la presencia del imputado en el instante mismo de la ejecución de los
hechos delictivos que no podemos hablar de que sus acciones son aisladas o divorciadas de los
actos que ejecutaron el resto de imputados en ese mismo lugar y en segundos previos.
Ello es así pues al procesado nadie lo obligó a estar presente en dicha escena delictiva,
por el contrario se determina que él actuó con dolo compartido, sabiendo el porqué de su
presencia en el lugar, no mostrando un comportamiento distinto para decir que no quería el
resultado.
Dicha acción es penalmente relevante, pues al margen que el encartado materialmente no
disparó ni hirió al señor Maycol Jimmy M. R., su presencia en el hecho genera que él haya
codominado física y voluntariamente tal homicidio, pues no es lo mismo que una persona mate a
otra, que entre cinco personas lo hagan, sin que sea necesario que todos tengan que disparar,
pues la naturaleza del codominio es precisamente que nadie tenga el monopolio de la acción,
sino roles distintos y entre todos ejecutan el delito.
Dicho criterio es retomado en la obra “Lecciones de Derecho Penal, Parte General” de
Ignacio Berdugo Gómez de la Torre y otros, páginas 249 y 250, en donde se analiza lo siguiente:
“Para que exista coautoría es necesario que ninguno de los intervinientes lleve a cabo todos
los elementos del tipo. Ninguno de los sujetos debe tener el dominio del hecho en su
totalidad…A alcanza a B un puñal, para que este se lo clave en el pecho a la víctima, que se
encuentra fuertemente sujetada por C; A, B, y C poseen el dominio funcional del hecho y por lo
tanto son coautores del delito de asesinato…será coautor aquel que posea el dominio funcional
del hecho, aquel que intervenga codominando el hecho…”.
Si vemos en el ejemplo citado por la doctrina, sólo “B” apuñala a la víctima, pero no por
eso “A” y “C” dejan de ser coautores, el simple hecho de “alcanzar” un puñal y dárselo al
otro, ya con ello se le tiene como “coautor”, aun cuando “A” y “C” jamás le clavaron el puñal a
la víctima.
Por lo que, atendiendo a las reglas de la sana critica, es evidente su coautoría, ya que
hubo distribución de roles a efecto de asegurar la comisión del hecho delictivo, pues los
elementos aportados nos llevan a establecer su actuar en la fase ejecutiva del delito y a inferir un
conocimiento previo del hecho delictivo y por tanto un reparto de roles, por lo cual se procederá
a declarar no ha lugar el motivo de apelación planteado por la defensa técnica del señor Franklin
Antonio D. V., lo cual así se hará constar en el fallo respectivo.
TERCER CONSIDERANDO.
Este argumento hace referencia al hecho que a consideración del recurrente el testigo
“Silver” no merece credibilidad, pues este señalaba de forma recurrente a uno de los imputados
como ejecutor de los hechos y se demostró técnicamente que este no estuvo en el lugar de los
hechos.
Tal argumento, guarda íntima relación con el primer motivo de inconformidad expuesto
por Fiscalía en su recurso de apelación y se refiere específicamente a la intervención del
imputado Fausto Nelson R. C. en los hechos.
Sobre este punto en particular, es necesario señalar que a consideración de este Tribunal y
en congruencia con lo antes expuesto por esta Cámara, no hay razones válidas para restarle
credibilidad a la testigo y víctima clave “Silver”, pues ya se establecieron sobre este punto en
particular las fallas en la valoración del juzgador, mismas que han provocado que en esta
instancia se anule parcialmente la sentencia y se ordene su reposición por otro tribunal, pues
incluso se dejaron de lado en la valoración ciertos aspectos probatorios que pueden variar la
decisión emitida y que era vital que se valoraran.
Por lo que, en el caso en particular de su patrocinado, en vista pública no se produjo
ningún elemento probatorio que realmente genere la duda en el dicho del testigo y la no
intervención del imputado en el hecho delictivo, por lo cual se procederá a declarar no ha lugar
el motivo de apelación planteado.
RESPECTO AL RECURSO DE APELACIÓN INTERPUESTO POR EL
LICENCIADO JOSE HUMBERTO GALAN CARCAMO.
PRIMER CONSIDERANDO.
El mencionado defensor del imputado Daniel O. O., presenta su recurso de apelación,
sustentando como primer punto de inconformidad en el hecho que a su consideración la
sentencia adolece de fundamentación conforme al artículo 400 numeral 4 del Código Procesal
Penal.
Ello tiene razón de ser en la existencia a juicio del recurrente de contradicciones entre la
declaración anticipada de la víctima y testigo clave “silver” y la “entrevista” rendida por esta
misma persona en la etapa inicial de la investigación del proceso penal.
Por lo que, al verificar el acta de vista pública realizada el día once de febrero del año dos
mil trece, se establece que se incorporó como prueba documental, tanto la “entrevista” de la
víctima y testigo clave “Silver”, así como la declaración anticipada de la misma persona,
siendo estos elementos a su vez objeto de “estipulaciones probatorias” por las partes, lo cual fue
avalado por el juzgador de instrucción y de sentencia.
Sobre dicho punto, es necesario señalar que nuestro Código Procesal Penal ha establecido
en el artículo 311 que las actuaciones realizadas en la instrucción carecen de todo valor, pues
sólo los medios de prueba reconocidos en dicho cuerpo normativo tienen valor para probar los
hechos en el juicio oral o vista pública.
Partiendo de ello, si analizamos detenidamente en nuestro Código Procesal Penal, el
legislador ha establecido de manera taxativa a partir del Título V, Capítulo II, cuales son los
medios probatorios válidos para ser discutidos en una vista pública.
Asimismo en el artículo 176 de tal cuerpo normativo, se ha regulado la libertad
probatoria, sin embargo, la misma se encuentra limitada a que los hechos sean probados con
cualquier medio de prueba establecido en este mismo código y en su defecto de la manera
prevista para incorporación de pruebas similares.
A la luz de ello, al verificar los medios probatorios válidos para la fase plenaria, se
determina que en ningún momento las “entrevistas” tomadas a víctimas o testigos en la etapa de
investigación de la causa son medios de prueba válidos para producirse en juicio como prueba
documental.
Ello es así pues el legislador ha establecido claramente que la prueba testimonial por
regla general se produce en juicio, a efecto que la misma sea inmediada por el juez y objeto de
controversia por las partes intervinientes.
Un caso excepcional a dicha regla lo constituyen los “anticipos de prueba” regulados en
el artículo 305 CPP., en los cuales se puede anticipar la declaración de un testigo atendiendo a
razones de necesidad y urgencia que puedan hacer desaparecer tal medio de prueba y que hagan
prácticamente imposible su producción en vista pública.
Sin embargo para la producción de dicha prueba lo único que se hace anticipar la
declaración e inmediación del juzgador, que para el caso fue el Juez Instructor, por lo que
siempre habrá un Juez que perciba con sus sentidos circunstancias del testigo tales como el tono
de voz, los gestos, las expresiones, etc., lo cual a su vez es apreciado por las partes interesadas y
además se faculta el interrogatorio y el contrainterrogatorio del mismo, principios claves de un
proceso acusatorio.
En virtud de ello, se concluye que los principios de contradicción, inmediación y oralidad
no cobran vigencia al incorporar como prueba documental la entrevista de una víctima o testigo,
pues dicha información únicamente se lee y evidentemente no puede ser objeto de ningún tipo de
cuestionamiento la fuente que la brindó, con lo cual se vulnera además el principio de oralidad
que rige en nuestro sistema penal.
Por otra parte, consta que en el artículo 372 del Código Procesal Penal, se establece
taxativamente cuales medios de prueba pueden ser incorporados por su lectura, entre estos se
encuentran los actos urgentes de comprobación, los testimonios recibidos como prueba
anticipada, las declaraciones o dictámenes producidos por comisión o informe, las declaraciones
de coimputados rebeldes o sentenciados, los reconocimientos, la denuncia y la prueba
documental o de informes realizada conforme a la ley y el último inciso del referido artículo 372
hace referencia siempre al contexto de prueba documental.
De allí que se advierta que según el espíritu del legislador, de manera excepcional la
prueba testimonial se puede incorporar por su lectura y si hubiese querido que “las entrevistas”
de una persona tuvieran la calidad de medio probatorio así lo hubiese plasmado, así como la
facultad de incorporarla por su lectura, lo cual evidentemente no está regulado de esa manera en
nuestro Código Procesal Penal.
Asimismo, merece especial importancia el hecho que las partes hayan estipulado
probatoriamente sobre dicho elemento, pues el artículo 178 del CPP., establece que las partes
pueden acordar la admisión y producción total o parcial de prueba pericial, documental y
mediante objetos, más nunca la testimonial, estableciendo a su vez una limitante a dicha
facultad y que la misma sea “en los términos establecidos en este Código”.
Partiendo de ello, tanto la defensa como fiscalía se encuentran delimitados en sus
facultades para estipular la prueba en los medios legales y permitidos por el legislador, a los
principios que rigen el proceso penal.
Por lo que a la luz de ello, se puede determinar que en el caso sub judice la representación
fiscal erró al momento de presentar su dictamen de acusación, pues en el mismo ofreció para ser
producida en vista pública como prueba documental, “la entrevista” de la víctima y a la vez
testigo clave “Silver” así como las entrevistas de los señores […] y […].
En más grave error incurrió el Juez Instructor, quien en todo caso controla la legalidad de
la prueba que las partes ofrecen al admitir tales documentos como prueba para que desfilaran en
la vista pública y a su vez, el Juez de Sentencia Especializado con sede en la ciudad de San
Miguel, por finalmente valorar y tener como medio de prueba dicho elemento, pudiendo haber
controlado tal circunstancia al momento de llevar a cabo el análisis, pues el artículo 400 numeral
3 del Código Procesal Penal, regula que uno de los defectos de la sentencia que habilitan la
apelación es que se base en medios o elementos probatorios no incorporados legalmente al
juicio.
Asimismo, consta que el recurrente para el caso del motivo que se conoce, incurre a su
vez en dicho error, pues prácticamente su motivo lo sustenta en las inconformidades que a su
consideración existen en el dicho de la víctima y testigo “Silver” al momento de rendir en un
primer momento “su entrevista” en la fase inicial de investigación del proceso y en su posterior
declaración anticipada.
Por lo que en atención a los considerandos antes expuestos, esta Cámara siendo
respetuosa de la ley y de los principios que rigen el proceso penal, no debemos hacer una
valoración conforme al planteamiento de la defensa, pues no existe material probatorio lícito y
válido con el cual confrontar el dicho de “Silver” tal como lo pretende el recurrente, a fin de
determinar la existencia de una supuesta “duda” en favor de tales contradicciones, por lo cual, en
el fallo respectivo, se procederá a declarar no ha lugar dicho motivo, teniendo únicamente como
prueba la declaración anticipada, haciendo ver que lo que si regula y posibilita la ley es que tales
entrevistas puedan ser utilizadas pero sólo para “confrontar” al testigo en los interrogatorios,
debiendo sentar las bases, pero lo que no procede es que se tengan como prueba tal cual lo regula
el artículo 212 del Código Procesal Penal.
Asimismo, alega el apelante que la falta de fundamentación a su vez concurre en virtud
de que en el caso de autos, no consta que su patrocinado haya realizado alguna acción tendiente a
atentar en contra de la víctima y testigo “Silver”, por lo cual, no existe razón para la imputación
que pesa sobre su patrocinado.
Sobre este argumento, esta Cámara ya se pronunció previamente en lo relativo al segundo
considerando del recurso de apelación planteado por el licenciado José Pedro Guzmán Vigil en
su calidad de defensor particular del señor Franklin Antonio D. V., los cuales son igualmente
aplicables para el caso del señor Daniel O. O..
Ello es así pues, el análisis que plantean ambos recurrentes sobre este mismo argumento,
desconocen totalmente el actuar bajo la figura contenida en el artículo 33 del Código Penal, en el
cual se regula lo relativo a la figura de la “coautoría”.
Se arriba a tal conclusión, pues en el caso particular, el licenciado José Humberto Galán
Cárcamo, pretende que su patrocinado sea desligado de la comisión del ilícito penal de
Homicidio Agravado Tentado en perjuicio de la víctima clave “Silver”, amparado únicamente en
que él no ejecutó materialmente lesión alguna a dicha víctima.
Esta Cámara reconoce conforme al relato de “Silver” que ello realmente es así, pues al
momento de la comisión delictiva, se le imputa al señor Daniel O. O., haber atacado a la otra
víctima, Maycol Jimmy M. R., lesionándolo con un machete a la altura del cuello, lesión mortal
que se ha corroborado mediante el álbum fotográfico realizado posterior a los hechos y con el
dictamen de autopsia incorporado en vista pública, en el que se establece que la víctima
presentaba dos heridas producidas por arma corto contundente a la altura del cuello.
Sin embargo, tal situación no lo exime de manera refleja de la responsabilidad penal por
el delito en modalidad tentada cometido en contra de “Silver”, pues no podemos dejar de lado
que el encartado por el cual ahora conocemos también llegó armado y se retiró con el resto de
intervinientes que ejecutaron los delitos del lugar de los hechos, asimismo presenció todas las
acciones delictivas que se estaban llevando a cabo, mostrando por un lado una actitud activa y
vigilante para la consecución del fin ilícito y por otro una actitud pasiva y reiterativa de las
acciones realizadas por el resto de imputados.
Tal elemento es un dato lo suficientemente robusto para desvirtuar la presunción de
inocencia y determinar el ánimo con el cual actuó el encartado, pues a partir de dicho
señalamiento se advierte un dolo compartido entre todos los ejecutores de las acciones que ahora
se conocen en esta instancia y es a la luz de compartir un mismo ánimo, que se infiere el reparto
de roles, la cual es una característica esencial al hablar de coautoría tal como se ha determinado
previamente.
Al actuar bajo dicha figura, se destaca el hecho que cada procesado previamente ha sido
designado para la comisión de una función en específico, las cuales en su conjunto favorecen la
comisión del delito y esencialmente la consecución del fin delictual, el cual era para el caso de
autos, lograr la muerte de las víctimas, mismo que se intentó conseguir en la víctima “Silver”
pero no se logró debido a causas ajenas a los mismos encartados.
Por lo tanto, al ver las acciones del señor Daniel O. O. a la luz de la figura de la
coautoría, tal como lo señaló el juzgador en su sentencia, es evidente que el mismo tiene
responsabilidad penal en ambos delitos y por lo tanto, procede declarar no ha lugar al motivo
planteado, siendo viable determinar que en este aspecto la resolución se encuentra apegada a la
normativa penal y procesal vigente y por tanto es conforme a derecho, por lo cual se procederá a
confirmar la sentencia emitida.
En cuanto al tercer motivo que sustenta la inobservancia de ley planteada por el
recurrente, es necesario hacer ver que el mismo se encuentra vinculado con el hecho que el
juzgador no valoró las declaraciones de los testigos de descargo que desfilaron en vista
pública a favor del encartado.
Dichos testigos son los señores […] y […], los cuales efectivamente declararon en vista
pública, según se advierte en el acta que para tales efectos se levantó.
Posterior a ello, consta a folio 208 vuelto de la sentencia emitida el apartado denominado
“VALORACIÓN DE LA PRUEBA DE DESCARGO A FAVOR DEL IMPUTADO DANIEL
O. O. O DANI O. P.” en el cual el señor Juez de Sentencia Especializado con sede en la ciudad
de San Miguel, determinó que en el caso del primer testigo antes mencionado, su dicho no le
merecía credibilidad, pues en la audiencia de vista pública se le preguntó si el imputado se
encontraba presente y este con dificultades a una distancia de tres metro lo logró identificar,
siendo a consideración del juez que a mayor distancia mayores probabilidades de no
identificarlo.
Asimismo y en relación al testigo […], el juzgador dijo: “dicho testigo tampoco me
merece credibilidad alguna pues en ningún momento se estableció si el testigo tuvo a la vista al
imputado en todo momento, quien por residir cerca del lugar del hecho pudo desplazarse con
facilidad de su lugar de habitación hasta el lugar del hecho, o desde el lugar del hecho hasta
donde sus familiares con el objeto de genera una coartada”
De allí entonces se advierte que no es lo mismo “no valorar” como lo señala el recurrente,
que valorar en un sentido contrario a los intereses de la defensa particular, o en todo caso
contrario a las reglas de la sana critica.
Por lo que, es evidente que en el caso de auto si existió una valoración de dicho juzgador,
misma que ha quedado establecida en la sentencia documento que obra en el proceso penal, por
lo cual, no es posible tener por acreditado el motivo de agravio al que hace referencia el defensor
particular del señor Daniel O. O. y por consiguiente no procede ni revocar ni anular la sentencia
emitida, por lo cual se confirmará la misma en el fallo respectivo.
SEGUNDO CONSIDERANDO.
Este punto de inconformidad hace referencia a la vulneración a las reglas de la sana
critica con respecto a medios probatorios de valor decisivo, fundamentando el recurrente dicha
inobservancia en el hecho que el juzgador no valoró a favor de su patrocinado “la duda”
generada entre el dicho de “Silver” y los testigos de descargo antes mencionados.
Sobre dicho argumento, el licenciado Galán Cárcamo, también hace referencia a la
absolución emitida por el señor Juez de Sentencia Especializado con sede en la ciudad de San
Miguel, a favor de uno de los encartados.
Tal referencia tiene como objetivo que se tome la existencia de la duda a la que hizo
mención el juzgador a favor de su patrocinado.
Al respecto se advierte en primer lugar que el artículo 7 del Código Procesal Penal hace
referencia a la “duda” del Juez, no de las partes; por otra parte cada caso en concreto debe ser
analizado con sus propias peculiaridades, por lo que no es procedente la aplicación de un criterio
de “duda” señalado a favor de un encartado para todos los restantes sujetos procesados.
Asimismo, en el caso en el cual se absolvió de responsabilidad a uno de los intervinientes
en los hechos que se conoce, esta Cámara ha anulado en la presente sentencia, pues existen
vacíos en el análisis de juzgador que hacen cuestionable jurídicamente la decisión emitida, por lo
tanto, tampoco se le puede dar una aplicación automática para el caso del señor Daniel O. O..
En el mismo sentido, el recurrente hace referencia al hecho que sí el juzgador hubiese
valorado el dicho de los testigos de descargo, ello le hubiera permitido arribar a un estado de
duda en favor de su defendido.
Sobre tal argumento, esta Cámara en el considerando previo ya estableció que el
sentenciador valoró el dicho de los testigos de descargo, lo cual lo hizo en un sentido negativo
pues estimó que la información vertida por los mismos no era suficiente para desvirtuar los
hechos según el relato de la víctima y testigo “Silver” y de hecho les restó credibilidad.
Tal decisión y análisis es compartida por este Tribunal, pues según consta en la sentencia
emitida, el testigo de descargo […] dice haber visto al encartado cuando estaba en la casa de
habitación de su hermano viendo televisión, sin embargo consta que al solicitarle que lo señalara,
tuvo dificultades para hacerlo, lo cual viene a debilitar el dicho de este.
Aunado a ello, el mismo testigo relacionó que el encartado es sobrino de su esposa, por lo
cual, su dicho se debe analizar con mucha cautela, pues dada la relación familiar existente, se da
una sospecha de parcialidad.
En el mismo sentido, el señor […], relacionó que vio al imputado llegar a las seis a ver
televisión y se regresó como a las siete y media, por lo cual el margen de tiempo es muy corto,
pudiendo perfectamente desplazarse de un lugar a otro, máxime tomando en cuenta que el testigo
dice haberlo visto en el Cantón El Capulín, lugar donde precisamente se suscitó el hecho
delictivo.
En cuanto al testigo […], este expresa que el procesado se encontraba visitando a su
mamá en el cantón El Capulín, viéndolo como a las siete y media de la noche del día veintinueve
de julio del año dos mil doce, relacionando a su vez que escuchó unas detonaciones como a
medio kilómetro de distancia.
Sobre tal dicho, se debe señalar que los aportes del mismo son vagos y hasta cierto punto
indeterminados, pues el testigo no aclaró si vio al procesado cuando llegaba a la casa de su
mamá o cuando se iba, siendo este un dato relevante.
Tampoco dio datos respecto a qué momento o alrededor de que horas escuchó las
detonaciones y en qué lugar estaba el imputado, pues se reitera, según su mismo dicho, la
distancia entre uno y otro lugar no es significativa y por lo tanto el procesado su pudo haber
desplazado de un sitio hacia otro en unos cuantos minutos.
Por lo tanto, a consideración del señor Juez y de este Tribunal, los elementos de descargo
aportados son insuficientes para desvirtuar los hechos que según el dicho del testigo presencial y
víctima “silver” se le imputan el encartado, pues los mismos son vagos, imprecisos y no dan
garantías de objetividad, no aportando datos suficientes para generar duda ni en el juzgador ni en
el pensamiento de esta Cámara, respecto a su intervención en las acciones ilícitas que se
ejecutaron.
Es por tal motivo, que esta Cámara procederá a tener por confirmada la sentencia emitida
por el señor Juez Especializado con sede en la ciudad de San Miguel, ya que no concurren la
inobservancia de ley a la que hace referencia el recurrente, lo cual así se hará constar en el fallo
respectivo.
POR TANTO: Con base a los argumentos vertidos, disposiciones legales citadas y
artículos 2, 11, 12 y 193 No 3 de la Constitución de la República, artículos 4, 18, 25, 33, 214
numerales 1 y 7 del Código Penal, Arts. 4 inciso 3, 20, 51 Literal A, 144, 174, 175, 176,177,
178, 179, 231 y siguientes, 250, 311, 372, 400 numeral 4, 452, 453, 468, 469, 470 y siguientes
del Código Procesal Penal, y Arts. 1, 10, 11 y 20 de la Ley Contra el Crimen Organizado y
Delitos de Realización Compleja, esta Cámara Resuelve: A) ADMITANSE los Recursos de
Apelación interpuestos por los licenciados José Pedro Guzmán Vigil y José Humberto Galán
Cárcamo, quienes actúan en sus calidades de defensores particulares, así como el recurso de
apelación presentado por la licenciada Maritza Xiomara Rivera de Romero, en su calidad de
Agente Auxiliar del señor Fiscal General de la República, en contra de la resolución emitida por
el señor Juez de Sentencia Especializado con sede en la ciudad de San Miguel, por medio de la
cual se condenó a los señores FRANKLIN ANTONIO D. V. y DANIEL O. O., a la pena de
prisión de treinta años y la que absolvió de responsabilidad penal al imputado FAUSTO
NELSON R. C., B) ANULASE la sentencia absolutoria dictada por el señor Juez de Sentencia
Especializado con sede en San Miguel a favor del señor FAUSTO NELSON R. C., a quien se le
atribuye el delito de HOMICIDIO AGRAVADO, tipificado y sancionado en los artículos 128 y
129 numeral 3 del Código Penal, en perjuicio de la vida de Maycol Jimmi M. R. y el delito de
HOMICIDIO AGRAVADO TENTADO, previsto y sancionado en los artículos 128 y 129
numeral 3 en relación con el artículo 24, del Código Penal, en perjuicio de la víctima
denominada con la clave “Silver”; C) ORDENASE el reenvío de la presente causa al Juzgado de
Sentencia Especializado con sede la ciudad de San Miguel, a fin que lleve a cabo la reposición
de la audiencia de vista pública y emita la sentencia correspondiente en el presente caso, tanto
en el ámbito de responsabilidad penal como en el de responsabilidad civil; D) ORDENASE al
Juzgado de Sentencia Especializado con sede en San Miguel que siga el trámite administrativo
correspondiente a fin de nombrar al Juez suplente respectivo para que conozca y realice la
reposición de la vista pública, para garantizar la imparcialidad como parte fundamental del
debido proceso; E) DECLARASE NO HA LUGAR, la inobservancia de los artículos 7, 144,
400 numeral 1, 2, 4, 5, señalada por los licenciados José Pedro Guzmán Vigil y José Humberto
Galán Cárcamo y que tenía como finalidad que se revocará o en su caso anulara la sentencia
definitiva emitida el día veintiocho de febrero de este mismo año; F) CONFIRMASE, la
sentencia emitida por el señor Juez de Sentencia Especializado con sede en la ciudad de San
Miguel, veintiocho de febrero de este mismo año, por medio de la cual se condenó a los
imputados señores FRANKLIN ANTONIO D. V. y DANIEL O. O., a la pena de prisión de
treinta años, por la comisión de los ilícitos penales de HOMICIDIO AGRAVADO y
HOMICIDIO AGRAVADO TENTADO, previstos y sancionados en los artículos 128 y 129
numeral 3, y el artículo 24 del Código Penal, en perjuicio de la vida del señor MAYCOL JIMMI
M. R. y de la víctima denominada con la clave “SILVER”; G) En caso de no interponerse
recurso, se emitirá auto en el cual se tendrá por ejecutoriada la presente resolución y en
consecuencia, se REMITIRA certificación de la presente al Juzgado de origen, juntamente con
el proceso principal; y H) LIBRESE el oficio correspondiente. NOTIFIQUESE.
PRONUNCIADA POR LAS SEÑORAS MAGISTRADAS QUE LA SUSCRIBEN
S. Ch / G. de Funes
172-173-174-APE-2013(4)
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