UNIVERSIDAD CENTROAMERICANA “JOSÉ SIMEÓN CAÑAS” EL PROYECTO DE NACIÓN MASFERRERIANO Y SU RECEPCIÓN EN LA PRESIDENCIA DE MAXIMILIANO HERNÁNDEZ MARTÍNEZ TESIS PREPARADA PARA LA FACULTAD DE POSTGRADOS PARA OPTAR AL GRADO DE DOCTOR EN FILOSOFÍA IBEROAMERICANA POR OTTO GERMAN MEJÍA BURGOS MAYO DE 2014 ANTIGUO CUSCATLÁN, EL SALVADOR, C.A. 1 Rector Andreu Oliva de la Esperanza, S.J. Secretaria General Silvia Azucena de Fernández Decana de la Facultad de Postgrados Nelly Arely Chévez Reynosa Director del Doctorado en Filosofía Iberoamericana Luis Edgar Alvarenga Vásquez Director de Tesis: Luis Edgar Alvarenga Vásquez 2 A mis padres por su apoyo incondicional y a todas aquellas personas anónimas que de alguna u otra forma me ayudaron a recorrer el camino… 3 ÍNDICE: Introducción I. II. Introducción……………………………………………………........9-13 Influencias doctrinales de Alberto Masferrer y marco teórico conceptual…………………………………………………………13-37 III. Critica a la modernidad a) Desde la perspectiva de Friedrich Nietzsche…………………………...37-42 b) Desde la perspectiva de José Ortega y Gasset………………………….42-47 c) Desde la perspectiva de Oswald Spengler……………………………...47-51 d) Desde la perspectiva de José Vasconcelos……………………………..51-57 IV. Estado de la cuestión, justificación, objetivos e hipótesis de la investigación……………………………………………………….57-71 Capítulo I Alberto Masferrer, principal impulsor del proyecto de Nación vitalistateosófico en El Salvador y Centroamérica 1- Introducción…………………………………………………………..72-74 2- Pensamiento vitalista de Alberto Masferrer y algunas implicaciones prácticas……………………………………………………………….74-75 2.1. Crítica y aproximación del vitalismo al sistema capitalista…………75-79 2.2- Puntos esenciales del Mínimum Vital 2.2.1- Vivienda………………………………………………………...79-82 2.2.2- Alimentación……………………………………………………82-85 2.2.3- Trabajo……………………………………………………….....86-89 2.2.4- Energía Eléctrica………………………………………………..89-90 2.2.5- Agua………………………………………………………….....91-93 2.2.6- Educación……………………………………………………....93-98 2.3- Economía del Mínimum Vital y su función antiimperialista……...98-106 2.4- Institucionalización del Mínimum Vital………………………...106-109 2.5- Repercusiones internacionales del Mínimum Vital……………...109-112 2.6- Diferencias y similitudes entre el vitalismo y el marxismo………112-118 2.7- La influencia del vitalismo en Salarrué……………………...…...118-124 2.8- Relaciones entre el vitalismo y el indigenismo…………………..124-134 2.9- Implicaciones del vitalismo durante la presidencia de Pio Romero Bosque……………………………………………………………....134-137 2.10- Implicaciones del vitalismo durante la presidencia de Arturo Araujo…………………………………………………………….....137-144 3- Pensamiento teosófico de Alberto Masferrer y la relevancia en su producción intelectual 3.1- Pensamiento espiritualista de Alberto Masferrer………………...144-154 4 3.2- Reacción de la Iglesia Católica frente al pensamiento teosófico de Alberto Masferrer…………………………………………………...154-157 Capítulo II: Análisis conceptual de la teosofía y primera gira de Jinarajadasa a El Salvador 1) Introducción………………………………………………………..158-160 2) Primera gira de Jinarajadasa a América Latina y su visita a El Salvador (1929) 2.1- Algunas consideraciones previas: 2.1.1) Breve biografía de Jinarajadasa……………………………….160-162 2.1.2) Qué es la teosofía, según Jinarajadasa…………………………162-175 2.1.3) Principios esenciales de la teosofía según Jinarajadasa 2.1.3.1) Una sola causa de todo lo existente…………………..175-178 2.1.3.2) Ley de evolución…………………………………………178 2.1.3.3) Ley rigurosa de causa y efecto………………………..178-180 2.1.3.4) Ley de supervivencia o eternidad del espíritu………...180-181 2.1.3.5) Principio de vibración……………………………......181-185 2.1.3.6) Principio de libertad y tolerancia religiosa……………185-186 2.1.4) Valoración crítica a los principios teosóficos………………......186-188 2.1.5) Análisis de la relación entre teosofía y nacionalsocialismo…………………………………………………………...188-193 2.1.6) El feminismo teosófico y la importancia de Annie Besant en el movimiento teosófico mundial……………………………………....193-199 2.1.7) Recibimiento de Jinarajadasa en El Salvador………………….199-205 2.2- Análisis de las conferencias de Jinarajadasa dictadas en El Salvador: 2.2.1) Los dioses encadenados………………………………….........205-206 2.2.2) El idealismo de la teosofía…………………………………….206-208 2.2.3) Las enseñanzas de Krishnamurti (La visión de Alberto Masferrer)….…………………………………………………….......208-214 2.2.4) Desarmemos la guerra………………………………………...215-217 2.2.5) La ciudad perfecta del hombre y de Dios……………………..217-220 2.2.6) Mensaje final de la primera gira latinoamericana…………………..220 Capítulo III: El Grupo Masferrer como impulsor del proyecto de Nación martinista y la oficialización de la doctrina masferreriana 1) Introducción……………………………………………………......221-223 2) El fallecimiento de Masferrer y algunas repercusiones sociales……...224-238 3) El Grupo Masferrer y el indigenismo, hacia la búsqueda de una identidad nacional 5 3.13.23.345678- Día del indio…………………………………………………238-259 Juegos Florales Centroamericanos…………………………...260-262 Relación entre el indigenismo y el vitalismo en el contexto de la presidencia de Hernández Martínez…………………………262-267 Labor cultural del Grupo Masferrer, hacia una reconstitución social………………………………………………………………..267-287 El Grupo Masferrer y el ideal unionista.................................................287- 290 El Grupo Masferrer y su función vitalista…………………………....290-299 El Grupo Masferrer y la reivindicación de la mujer……………….....299-305 El Grupo Masferrer y la reivindicación de los intelectuales….……....306-312 Capítulo IV: Aplicación del Mínimum Vital como política de mejoramiento social del Estado 1) Introducción………………………………………………………...313-315 2) Pensamiento vitalista de Maximiliano Hernández Martínez y su contexto histórico…….............................................................................................315-326 3) El reformismo vitalista durante la presidencia de Maximiliano Hernández Martínez 3.1) Vivienda .…………………………...………………………..326-340 3.2) Reforma agraria, hacia una transformación del sistema de tenencia de la tierra...……………………………………………………..341-360 3.3) La presidencia de Martínez y la propuesta teórica de Henry George, (algunas reflexiones)…………………………………………360-363 3.3.1) La economía en el gobierno……………………………………………..363 3.3.2) La falta de educación o falta de inteligencia……………............................363 3.3.3) La coalición de los trabajadores…………………………………….363-364 3.3.4) El cooperativismo………………………………………………………364 3.3.5) La dirección o intervención gubernamental……………………………..364 3.3.6) El reparto de tierras en forma general………………………………364-366 3.4) Trabajo digno y salario justo…………………..........................366-375 3.5) Agua buena y bastante, ampliación y mejoramiento del servicio de agua potable como elemento fundamental de vida…................376-382 3.6) Campañas sanitarias, regulación de precios y alimentación buena, bastante y variada………………………………………….....383-392 4) Valoración crítica de las políticas reformistas del Estado………….....392-395 6 Capítulo V: La influencia del pensamiento de Krishnamurti y Jinarajadasa durante la presidencia de Hernández Martínez 1) Introducción…………………………………………………….396-397 2) Influencia del pensamiento de Krishnamurti en figuras políticas e intelectuales de El Salvador y su difusión en periódicos salvadoreños 2.1. Presencia del pensamiento de Krishnamurti en medios escritos salvadoreños ante su posible llegada a Centroamérica durante la presidencia de Hernández Martínez……………………………...398-403 2.2. Krishnamurti ante el problema de la existencia de Dios……..403-404 2.3. Krishnamurti ante el problema económico………………….404-408 2.4. Influencia de Krishnamurti sobre Salarrué…………………..408-410 2.5. Influencia de Krishnamurti sobre Juan Felipe Toruño………410-412 2.6. Influencia de Krishnamurti sobre Maximiliano Hernández Martínez…………………………………………………….........412-414 3) Segunda gira de Jinarajadasa a América Latina, su visita a El Salvador y difusión de su pensamiento en medios oficiales y otros periódicos centroamericanos, (1938)………………………………………...414-418 3.1) Vinculación entre teosofía y masonería y debate entre teosofíamasonería e Iglesia Católica……………………………....418-430 3.2) Actividades de los medios escritos salvadoreños previo a la visita de Jinarajadasa al país…………………………………….430-437 3.3) El intuicionismo como fundamento pedagógico de la teosofía…………………………………………………..437-438 3.4) Análisis de las conferencias dictadas por Jinarajadasa en El Salvador y publicadas en medios escritos oficiales del régimen y otros periódicos privados………………………………...........439 3.4.1) Hacia la nueva humanidad de la intuición………………...439-442 3.4.2) La teosofía y el destino de la humanidad…………………442-444 3.4.3) El trabajo de Cristo en el mundo de hoy…………………444-447 3.4.4) Los niños agentes de Dios………………………………..447-450 3.4.5) El crecimiento del alma a través del proceso de reencarnación…………………………………………….450-454 3.4.6) Lo que “es” y lo que debe “ser” a Platón y a Plotino……..454-456 3.4.7) Un mundo angustiado (conferencia teosófica mundial, 1932)……………………………………………………..456-459 3.4.8) Partida de Jinarajadasa de El Salvador y su recepción en Guatemala……………………………………………….459-460 7 Capítulo VI: Visión teosófica del Estado del Presidente Hernández Martínez y difusión de las ideas teosóficas durante el régimen 1) Introducción………………………………………………………...461-463 2) Personalidad y pensamiento teosófico del Presidente Maximiliano Hernández Martínez, sus discursos oficiales: 2.1- Personalidad teosófico-masónica del Presidente Martínez…....463-469 2.2- El principio del Uno ontológico en el pensamiento de Martínez……………………………………………………..469-471 2.3- El neoplatonismo en el pensamiento de Martínez…………....471-473 2.4- La teosofía y su relación con el psicoanálisis en el pensamiento de Martínez……………………………………………………..474-476 2.5- Concepto y función del Estado en el pensamiento de Martínez y algunas repercusiones sociales………………………………..476-482 2.6- Principios de evolución e intuición como conductores de la historia en el pensamiento de Martínez………………………………482-489 2.7- La teosofía como estudio comparado entre religión, filosofía y ciencia en el ámbito de la dictadura………………………………….489-493 2.8- Crítica a la modernidad en el pensamiento de Martínez y función vitalista de la filosofía………………………………………...493-498 2.9- Difusión de la teosofía en el ámbito educativo……………….498-503 2.10- Valoración crítica de la concepción teosófica del Estado del Presidente Martínez………………………………………….504-512 3) Sociedades y órganos de difusión teosófica en El Salvador durante la presidencia de Hernández Martínez…………………………………512-523 Conclusiones…………………………………………....524-538 Anexos....................................................................................539-541 Bibliografía……………………………………………...542-555 8 I- Introducción: A través de la revisión de algunos periódicos y revistas que circularon durante la presidencia de Maximiliano Hernández Martínez1 (1932-1944) entre los que se encuentran el suplemento del Diario Oficial La República,2 Diario Nuevo, La Prensa, El Diario de hoy, Diario Latino, El Gran Diario y Patria entre otros, puede irse descubriendo la construcción de un nuevo proyecto de Nación que estuvo caracterizado por ciertos elementos sui generis como la conformación de redes intelectuales, la búsqueda de nuevas formas de hacer cultura y la emergencia de nuevos actores sociales antes invisivilizados como el obrero, el campesino, la mujer y el indígena; fenómenos que deben ser entendidos a la luz de una doctrina hibrida, que es a la vez filosófica, política y sociológica: el Vitalismo Teosófico de Alberto Masferrer. Desde esta perspectiva, la red intelectual fundamental que apoyó dicho proyecto fue el Grupo Masferrer, el cual se analizara a profundidad en el capítulo III, en lo que respecta a sus fines, integrantes, ideología y acciones, pero del cual Luis Lovo Castelar, Biografía del General Maximiliano Hernández Martínez, Ediciones Rescate, Segunda Edición, 1999, págs. 3, 4, 6, 7, 8, 27, 35. Maximiliano Hernández Martínez nació el 29 de octubre de 1878, en el pueblo de San Matías, jurisdicción de San Juan Opico, La Libertad. Estudió la carrera militar en la Escuela Politécnica de Guatemala y fue compañero de Jorge Ubico quien después llegaría a ser presidente de Guatemala. Las fechas de sus ascensos fueron: subteniente, 14 de septiembre de 1900; teniente, 17 de noviembre de 1903; capitán, el 13 de junio de 1906; capitán mayor, el 23 de agosto de 1906; teniente coronel, el 8 de mayo de 1909; coronel, el 12 de junio de 1914 y general de brigada el 27 de junio de 1919. Se inscribió en la facultad de derecho pero no se graduó de abogado por seguir la carrera militar. Fue vicepresidente en el gobierno de Arturo Araujo en 1930. Se desempeñó como Presidente de la República en 3 períodos: (1931-1935), (1935-1939) y (1939-1944). Fernando Antonio Llanes sostiene que Martínez, obligado por la huelga de brazos caídos, renunció al cargo de Presidente de la República, el 8 de mayo de 1944. Salió al exilio el 9 de mayo por la noche en forma secreta, porque dijo que su salida iba ser por avión, pero fue por carro hacia Guatemala. Luego radicó en Honduras, específicamente en la Hacienda “Jamastran” donde dio trabajo a muchos salvadoreños. Su última visita a El Salvador fue en julio de 1955 invitado por el Presidente Coronel Oscar Osorio y luego salió para Nueva York a realizarse una operación quirúrgica. Murió el 15 de mayo de 1966 de 17 puñaladas. El homicidio se le atribuye al salvadoreño José Cipriano Morales aunque el motivo queda oscuro, su cuerpo fue repatriado a El Salvador y en sepelio el cuerpo iba envuelto en el pabellón nacional, por todos sus servicios a la patria. También se le rindieron honores militares. Ver: Diario El Mundo de lunes 27 y martes 28 de marzo de 1978. 1 El Diario El Día en un pequeño artículo publicado el 24 de noviembre de 1932 vio con beneplácito la reforma de la que había sido objeto el Diario Oficial manifestando: “Es grato que se haya agregado un suplemento titulado La República suplemento dedicado a dar toda clase de informaciones, pero especialmente a defender las diversas líneas de política del gobierno”. Con esto se intentaba quitar la aridez del órgano oficial. Reproducido en el Diario Oficial, Suplemento La República, el viernes 26 de noviembre de 1932, pág. 4. año I. 2 9 habría que decir desde ya, se propuso construir el proyecto de Nación étnicocultural propuesto por Masferrer en base a las ideas de Renán quien hacia énfasis en la necesidad de mantener y aumentar la herencia racial de los pueblos. Dicha asociación pretendía evitar que cada intelectual se quedara encerrado intrascendente en su propio mundo interior y es por eso que promovió el mayor intercambio de ideas entre sus componentes. El intelectual, en este esquema tenía que cumplir con una nueva misión social, la cual era colocarse al frente del rumbo de la Nación, pero ya no mediante iniciativas débiles y aisladas sino mediante un mismo esfuerzo unificado. Marta Casaús en el libro de Eduardo Devés-Valdés Redes Intelectuales en América Latina sostiene que una red intelectual es una estructura generadora de discursos y de poder político, pero además que es creadora de pensamiento y de identidad nacional y regional. En armonía a esto Devés-Valdés define red intelectual como “el conjunto de personas ocupadas en los quehaceres del intelecto que se contactan, que se conocen, intercambian trabajos, se escriben, elaboran proyectos comunes, mejoran los canales de comunicación y, sobre todo, establecen lazos de confianza recíproca”.3 Todo lo cual es perfectamente reconocible en el Grupo Masferrer y otros de sus colegas intelectuales contemporáneos tanto a nivel nacional como internacional. Aunque en este trabajo no se expone de manera específica el tema de las redes intelectuales, va desarrollado en él de manera implícita, ya que es innegable que tanto en la década de los veinte como durante la presidencia de Martínez se dio la competencia de un complejo sistema de tendencias yuxtapuestas que intentaban imponer su determinado tipo de hegemonía política-cultural sobre otras tendencias rivales.4 En este sentido, podríamos hablar de una lucha por predominar en el medio entre los intelectuales del vitalismo-teosófico, del marxismo, del positivismo, del catolicismo, entre muchas otras redes diversas aunque también habría que decir que hubo redes sub-alternas, complementarias o simplemente afines a otras. Eduardo Devés Valdés, Redes Intelectuales en América Latina, hacia la constitución de una comunidad intelectual, Colección Idea, Primera Edición, Instituto de Estudios Avanzados, Universidad de Santiago de Chile, 2007, págs. 21 y 22. 3 4 Ídem. 10 Durante la presidencia de Martínez, sobre todo al principio, como ya se dijo es notorio que existió una red intelectual a través de los miembros del Grupo Masferrer y sus principales allegados, ya que tal y como lo establece Devés-Valdés hubo una alianza entre una serie de individuos que, a pesar de sus diferencias sociales, económicas, profesionales o raciales, se solidarizaron entre sí para alcanzar los mismos objetivos o metas, habiendo una profundización en los intercambios ideológicos,5 a través de la realización de distintos encuentros culturales tanto a nivel privado por medio de sus tertulias, como a nivel público a través de la publicación de artículos en distintos periódicos o mediante sus conferencias dirigidas a la ciudadanía en general en donde se aglutinaban algunos de ellos. Esta red intelectual estuvo fundamentada en lazos de amistad, reciprocidad en las ideas, respeto mutuo y conocimiento y crítica de la obra del otro, pero también habría que decir que otra forma de red intelectual que predominó fuertemente durante el mandato de Martínez, fueron las Sociedades Teosóficas,6 a las cuales pertenecían muchos de los intelectuales que se movían en el ámbito cultural, por lo que es claro que en un medio concreto siempre hay una correlación de redes que se influencian mutuamente. Además, habría que tomar en cuenta que gran número de teósofos también fueron masones y es así como especialmente durante la década de los veinte y treinta se fue complejizando el sistema de redes. Tal y como lo establece Marta Casaús hubo muchos elementos unificadores de estas redes, pero entre los más importantes están: la búsqueda de identidad nacional y regional, la lucha por la libertad de pensamiento y la libertad religiosa, la unión de los países del istmo, la denuncia hacia las injusticias sociales y un fuerte movimiento antiimperialista que se desarrolló en todo el continente americano a partir de la intervención de Estados Unidos en Nicaragua y de Inglaterra en la India. En este sentido, no debemos pasar por alto que la teosofía tiene un fuerte componente hinduista y que Sandino se vio muy influenciado por la teosofía. 5 Ibídem, págs. 22 y 23. 6 Ídem. 11 En este contexto, otro de los aspectos fundamentales durante la presidencia de Martínez, fue implementar el pensamiento social de Alberto Masferrer,7 el cual se encuentra contenido en el Mínimum Vital y otras obras dispersas, que hasta cierto punto se adoptaron como programa de mejoramiento social durante su gobierno. Este proyecto fue llevado a cabo mediante la implementación de una serie de reformas que pretendían darle solución a los graves problemas sociales de la época, especialmente los de realizar una reforma agraria y aprovisionar de viviendas a la población.8 Por otro lado, el plan político de Martínez, también se caracterizó por la continuidad y apropiación de las ideas teosóficas de Masferrer así como también de las de otros personajes del mundo teosófico a nivel internacional, las cuales fueron adquiriendo una gran relevancia durante la década de los veinte y que durante las décadas de los treinta y cuarenta, fueron determinantes para modelar a la Nación, específicamente, en los sucesivos periodos presidenciales de Martínez donde fue muy extensa la publicación de artículos referentes a estos temas en los diferentes medios escritos del país. Entre algunos de estos estudios podríamos mencionar: “La filosofía de Krishnamurti”9 de Davidge, “La reorientación del pensamiento”10 y “El amor Alberto Masferrer nació en Alegría el 24 de julio de 1868 y murió el 4 de septiembre de 1932. Maestro, periodista, filósofo, ensayista, orador. Ejerció la docencia en Honduras, Guatemala y Nicaragua. Dirigió el Diario Oficial en 1892. Fue cónsul de El Salvador en Costa Rica, Chile y Bélgica. En Chile colaboró con los diarios El Chileno y El Mercurio y fundó el diario Patria en 1928. Fue diputado en 1931. “Doctor honoris causa” de la Universidad de El Salvador. Entre sus obras se encuentran: La siete cuerdas de la lira, Leer y escribir, El dinero maldito, niñerías, El Mínimum Vital, ¿Qué debemos saber? Entre otras. 7 Jorge Tapia, “Neo-militarismo y fascismo”, revista Nueva Sociedad, No. 50, septiembre y octubre de 1980, Instituto de Estudios Latinoamericanos de Estocolmo, Suecia, págs. 156, 157, 158, 159 y 160. Habría que decir que la presidencia de Martínez más allá de haberse apropiado del pensamiento masferreriano también adquirió ciertas características que pueden encontrarse en varios proyectos de modernización autoritario de presidentes militares que han gobernado a través del tiempo en América Latina en países como Brasil, Argentina, Chile y Uruguay y cuyos elementos en común han sido la represión social, el establecimiento de un partido único, la instauración de un corporativismo político que protege los intereses económicos de una minoría, el ejercicio de la violencia y la supeditación del poder civil al militar, además de llevar a cabo un reformismo que respondería a un reajuste de la superestructura de dominación que permitiría la subsistencia de una economía capitalista.8 8 J. L Davidge “La filosofía de Krishnamurti”, Diario Oficial, Suplemento La República, miércoles 12 de septiembre de 1934, No. 523, pág. 2, año I. 9 12 fundamento esencial de la educación”11 de Krishnamurti y algunos otros como: “¿Qué es la teosofía?”, “La teosofía y el destino de la humanidad”, “La ciudad perfecta”, “El crecimiento del alma a través del proceso de reencarnación”, “Hacia una nueva humanidad: la intuitiva” y “La religión y la filantropía de la masonería”12 entre muchos otros. Estos últimos, del teósofo indio Jinarajadasa de quien profundizaremos en el transcurso de este trabajo. La conexión cronológica e intelectual entre Masferrer y Hernández Martínez, viene dada porque las vertientes del vitalismo y la teosofía, fueron las que conformaron, de forma integral, el pensamiento maduro de Alberto Masferrer y fueron, precisamente, las que definieron la visión del Estado durante el gobierno de Martínez para oponerse a corrientes como el positivismo y el marxismo, visión que habría que matizar también con ciertos elementos francmasónicos, pero en lo que se separan, es en los resultados. Masferrer modela un pensamiento anarcosocialistateosófico-cristiano y Hernández Martínez desemboca en un “modernismo reaccionario” categoría que explicaremos más adelante. Es muy importante dejar bien establecido que fueron muchos y muy diversos los autores que influyeron en la concepción masferreriana, por lo que es necesario hacer un abordaje previo de algunas ideas o planteamientos realizados por algunos académicos que ya han abordado su pensamiento para después poder determinar el grado de coherencia entre sus conceptos y la masa de hechos que nos hemos propuesto estudiar. II- Influencias doctrinales de Alberto Masferrer y marco teórico conceptual: En este apartado trataremos de desarrollar, en primer lugar, un pequeño marco conceptual a través del cual pretendemos definir de forma clara lo que entenderemos por vitalismo y teosofía desde un punto de vista académico. “La reorientación del pensamiento (El filósofo que nos visitara) J. Krishnamurti”, Diario Nuevo, 12 de abril de 1935, viernes 12 de abril de 1935, No. 428, pág. 3, año II. 10 Jiddu Krishnamurti “El amor fundamento esencial de la educación”, Diario Nuevo, miércoles 10 de agosto de 1938, miércoles 10 de agosto de 1938, No. 1,442, pág. 3, año V 11 Esta serie de artículos teosóficos fueron publicados en el suplemento del Diario Oficial: La República en varias entregas desde el año 1932 hasta el año 1942. 12 13 Analizaremos, el primer concepto, tal como lo afirma Marta Casaús no en un sentido biológico o filosófico de autores como Nietzsche u Ortega y Gasset con su “raciovitalismo” sino como una reivindicación de las condiciones indispensables para lograr una vida digna, lo que se aproxima mucho al espíritu de la actual Declaración Universal de los Derechos Humanos.13 Aunque como afirma Marta Casaús, el vitalismo de Nietzsche y Masferrer no son la misma cosa, debemos aclarar que este último sí tomó la idea de Nietzsche sobre que el “hombre era algo que tenía que ser superado” y adoptó su teoría de “invertir” o “transmutar” los valores en la vida, el trabajo, la escuela y la constitución de los pueblos, es decir, Masferrer pensó que la sociedad debía ser profundamente transformada hacia formas más justas; al igual que el filósofo alemán pone como centro de su doctrina al hombre para transformarlo en mente y corazón desde una nueva “fe” que trata de humanizar al hombre mismo.14 Desde otro ángulo, el vitalismo masferreriano también es biológico porque atiende a las necesidades fisiológicas del ser humano, cuestión que el mismo Masferrer dilucida en su artículo “El vino nuevo en odres nuevas”, en el que establece que el hombre es “una realidad biológica y no un ente”, pero sin limitarse al aspecto puramente naturalista del término, sino que lo inserta desde un ámbito cultural y social.15 El vitalismo como trataremos de demostrar en esta tesis, aunque pretende ser concreto y tangible, es una doctrina que hibrida corrientes místicas con pensamientos filosóficos de una gran diversidad de autores, por lo que puede y debe tratarse filosóficamente, ya que su contenido ideológico social, va referido a una voluntad de praxis que parte del concepto de “vida”, en un ámbito dominado por la oligarquía cafetalera y los grandes terratenientes que surgieron a partir de las dictaduras liberales centroamericanas, o sea, hay en él un espíritu de mutación, pero Marta Csaús, El Vitalismo de Alberto Masferrer y su impacto en el pensamiento de América Central, Revista Cultura, No. 102, enero-julio 2010, pág. 93. 13 Alberto Masferrer, “Carta a un amigo”, AGN, Fondo: AM, serie 11: recortes de periódicos, Caja 1, Exp. 12, folio único, sábado 15 de diciembre de 1928. 14 Alberto Masferrer, “El vino nuevo en odres nuevos”, AGN, Fondo: AM, serie 11: recortes de periódicos, Caja 1, Exp 2, folio único, lunes 10 de diciembre de 1928. 15 14 no en base a la lucha de clases sino que en razón de una serie de reformas sociales apegadas a la legalidad formal. Tal y como lo establece Sajid Herrera en su ensayo La Universidad frente a la modernidad: esencia, función y misión de la Universidad en El Salvador ante el fracaso del proyecto liberal a finales del siglo XIX y principios del XX se fue produciendo una ruptura contra la corriente positivista y sus perjudiciales efectos sociales a través de diferentes corrientes de pensamiento que se entrecruzaron para formar una sola respuesta reaccionaria, entre las cuales podemos mencionar: el hinduismo, el neoplatonismo, el espiritualismo, la teosofía y el vitalismo que evidentemente recorrerán toda esta tesis.16 En este sentido, uno de los aspectos más importantes a la hora de analizar a Masferrer, es conocer las fuentes a partir de las cuales éste construyó su propio pensamiento ecléctico. Rafael Guidos Véjar menciona que Alejandro Dagoberto Marroquín en su libro Estudio sobre la crisis de los años treinta en El Salvador, expresa cuáles, según él, fueron estas vertientes: a) Una orientación marcadamente anarcosocialista, con gran influencia de Tolstói17, George18, Kropotkin y Marx; b) una proyección misticopanteísta en la que se adivina la presencia del pensamiento de Tagore, Vivekananda, Rama Krishna y otros teósofos importantes; c) un nacionalismo muy marcado que trataba de desarrollar una conciencia nacional junto a una nación armónica y próspera; d) una profunda vocación por la reforma social que lo lleva a plantear críticas profundas al sistema social y a proponer reformas que son combatidas por los terratenientes, por un lado y, por otro la “izquierda extrema”; los primeros lo acusan de “bolchevique peligroso”, de “agitador criminal” mientras que los segundos lo combaten por Agueda Rodríguez Cruz, (et. al) Pensadores y forjadores de la universidad latinoamericana, colección Intramuros, serie académica, Universidad Central de Venezuela, Edición por Carmen García Guadilla, CENDES, IESALC-UNESCO, bid&co. Editor, 2008, pág. 655. 16 Marta Casaús, “El binomio degeneración-regeneración en las élites intelectuales espiritualistas de principios del siglo XX en Centroamérica”, Revista Complutense de historia en América, 2009, Vol. 35, pág. 114., El vitalismo de Tolstói se fundamenta en vivir de manera humilde, sin lujos y en paz consigo mismo y en la colectividad, supone un nuevo aporte al espiritualismo: “Para Tolstói como para el resto de los espiritualistas y teósofos, los tres elementos básicos que deben regir la vida humana son: la verdad, el bien y la belleza. Para realizar estos principios es necesario realizarlos colectivamente, en las comunidades, empezar por “la familia, luego la comunidad, luego el estado, luego la humanidad, luego todo lo vivo, luego el Universo como Dios”. 17 Ídem., En el caso de George, Casaús, afirma, que la principal influencia sobre Masferrer fue el reparto de tierras. Además, en su libro Progreso y Miseria, que titula “Ley del progreso” refutó el darwinismo vulgar y su aplicación a las sociedades a través de Spencer. 18 15 “socialista de derecha”, “demagogo”, “socialista utópico”, carente de toda base científica”, “derechista disfrazado de apariencias izquierdistas”, etc.19 A partir de lo que establece Marroquín, quisiéramos profundizar un poco más en el impacto que produjo el anarquismo socialista en Masferrer, ya que es un punto muy complejo de desentrañar y de no entenderlo bien podría llevarnos a múltiples confusiones. En primer lugar, el término “anarquismo” es bastante difuso y entre los mismos autores de izquierda no hay una manera univoca de entenderlo, pero para nuestra mejor comprensión hemos de decir que hay anarquismos pacíficos y violentos. Para entender los de la primera clase, quizás convendría remitirnos al trabajo de Lenin, Las divergencias en el movimiento obrero europeo en el cual trata el concepto de anarquismo, anarcosocialismo y anarcosindicalismo como sinónimos.20 Lenin concibe al anarcosocialismo como una desviación de la teoría y táctica marxistas. El ruso se basa en las conclusiones a las que llega el también marxista holandés Anton Pannekoek en su obra Las divergencias tácticas en el movimiento obrero (1909), para decir que el anarcosocialismo es un resabio de una concepción democrático-burguesa-liberal, que no comprende a exactitud al marxismo al cual acusa de azuzar malignamente a una clase contra otra. En síntesis, el anarcosocialismo sería un movimiento obrero pacifico cuyo objetivo sería realizar reformas estructurales.21 Para Lenin, al anarcosocialismo es un tipo de revisionismo que se basa en la implementación de reformas que vendrían a constituir una realización parcial del socialismo, por lo que, claramente habría un distanciamiento entre éste y el marxismo puro que promulga la lucha de clases y la vía revolucionaria violenta. Lenin lo percibe como un viraje de los estados liberales a un concesionismo social al cual llama “reformismo burgués” y un oportunismo del movimiento obrero.22 Con 19 Rafael Guidos Véjar, “El ascenso del militarismo en El Salvador”, 1980, UCA editores, pág. 21. Vladimir Ilianov Lenin, Las divergencias en el movimiento obrero en Europa, Zviezdá No. 1, 16, 2010, obras completas t. XVI., pág. 2. 20 21 Ibídem, págs. 2 y 3. 22 Ibídem, pág. 3. 16 esto lo que logra, según él, la burguesía liberal, es desorientar al movimiento obrero, crear su escisión y frenarlo en sus luchas reivindicativas. 23 Lenin establece que el liberalismo, en muchas ocasiones, logra sus objetivos mediante la implementación de estas estrategias que considera muy astutas. Para él, el capitalismo engaña a los obreros a través de aparentes concesiones cuyo objetivo es hacer renunciar al obrero a la lucha de clases induciéndolo a pensar que es un método obsoleto, anticuado e irracional, lo que en la vida real llevó en muchas ocasiones a que surgieran discrepancias en el seno de los movimientos obreros de diferentes países de Europa y América.24 El Salvador no fue la excepción. En este último punto es que Masferrer, a nuestro criterio, retoma el anarquismo pacifista de León Tolstói en la última fase de su pensamiento, es decir, después haber escrito su obra Anna Karenina. El anarquismo tolstoiano consiste en oponerse a todo tipo de violencia para alcanzar fines humanitarios. Era una postura socio-política ligada a aspectos religiosos, espirituales y panteístas que aspiraba a obtener una conversión de todo el elemento social para solucionar los graves problemas de la época en Rusia.25 De hecho, el tolstoismo se convirtió en anatema del movimiento comunista, ya que aparte de la abolición de la propiedad privada de la tierra, no tenía nada que ver con la vía revolucionaria. El comunismo rápidamente desechó la postura de Tolstói por considerarla inútil para el avance del obrerismo, quizás por esto mismo es que Rosa Luxemburgo la calificó como un “socialismo utópico” que trataba de hacer reflexionar a los comunistas sobre los efectos negativos que producía su concepto de “guerra justa”, el cual debía ser sustituido por el de un pacifismo revolucionario que abogara por el perfeccionamiento moral de todos los pueblos en base a principios como los de amor y fraternidad.26 23 Ídem. 24 Ibídem, pág. 4. Antrazyt, Pensamiento pacifista: Henry D. Thoreau, León Tolstói, Gandhi, Albert Einstein, Virginia Woolf, Hannah Arendt, Martín Luter King, E. P. Thompson, Edición Enric Prat, Icaria editorial, Barcelona, España, 2004, págs. 34, 39, 40, 46 y 47. 25 26 Ibídem, págs. 48 y 49. 17 Otros autores anarcosocialistas que inspiraron a Masferrer fueron el francés Pierre Joseph Proudhon y el ruso Piotr Kropotkin. En el primer capítulo trataremos más a fondo como ambos filósofos influyeron en su obra. Por el momento, habría que decir que los académicos aún no se ponen de acuerdo sobre las influencias masferrerianas y creemos que es debido, en gran parte, a que no se tiene suficientemente claro cuáles son las similitudes y diferencias entre el vitalismo, el anarquismo y marxismo, por ejemplo, si tomamos la opinión de Thomas R. Anderson encontraremos algunas discrepancias y ampliaciones con respecto a la de Dagoberto Marroquín: Aunque sus enemigos políticos, generalmente lo tildaban de comunista, en realidad difícilmente se le podría considerar siquiera socialista. Algunos lo han llamado “anarco-socialista”, pero la verdad es que sus doctrinas, hasta donde se pueden desentrañar, eran las de un reformador abogando por la libre empresa y el Estado benefactor. Por lo mismo Masferrer se consideraba a sí mismo un discípulo de Henry George, pero no siguió las ideas de George de modo consistente. Su vitalismo se refería a un “mínimum vital” que todos deberían tener para poder vivir una vida humana decente (…) La principal diferencia entre Marx y Masferrer era que este último no creía en la lucha de clases como un medio para alcanzar sus objetivos. Esperaba optimistamente, que se pudiera convencer a los ricos de que pagaran tantos impuestos como fueran necesarios para que el Estado pudiera comprar parte de la tierra y dársela a los pobres.27 Si tomamos algunos elementos del párrafo anterior, a nuestro juicio tendríamos que decir que tanto el vitalismo, como el marxismo y el anarquismo son distintos tipos de socialismo en su sentido más genérico. Ahora bien, es cierto que Masferrer fue influenciado por el anarcosocialismo, pero en ciertos puntos se alejó de él o por lo menos, no fue consecuente con todas sus posturas, por ejemplo, la supresión del Estado, la eliminación de los partidos políticos y la derogación completa de la Constitución. Por otro lado, el anarquismo de Proudhon es esencialmente reformista, lo que sucede es que, en este caso, no debe entenderse anarquismo como sinónimo de terrorismo o violencia, por el contrario es pacifista y es uno de los elementos esenciales que lo diferencian del marxismo, incluso, Tolstói, bebió del pacifismo de Proudhon,28 el cual a su vez influyó en Masferrer. Thomas R. Anderson, El Salvador, 1932: Los sucesos políticos, Dirección de publicaciones e Impresos, 3º edición, 2001, pág. 131. 27 Pierre Joseph Proudhon, Propiedad y Federación, (notas y comentarios de Carlos Díaz), Editorial Narcea, S.A., edición no definida, Madrid, España, 1972, págs. 13, 18, 19, 25 y 27. Proudhon 28 18 Lo que hace propiamente anarquista el pensamiento de Proudhon, es su rechazo a todo tipo de gobierno, fuera del tipo que fuera, por considerarlos a todos, en esencia, opresores. Proudhon no recurre a la violencia sino que pretende educar a la gente para que ésta haga valer sus derechos, pero sin soliviantarla y es en este sentido que Marx lo criticó como un “académico del espíritu”, a lo cual Proudhon le contestó calificando su doctrina como “dictatorial”. En realidad, Marx intentó conversar con Proudhon sobre sus puntos de vista, pero Proudhon no se unió a la causa marxista porque rechazaba, en absoluto, toda clase de centralismo políticopartidista, en este caso, el Partido Comunista. Esto fue lo que provocó su enemistad irreconciliable, pero ya Marx en La sagrada familia había dedicado algunas palabras a la obra de Proudhon ¿Qué es la propiedad?, lo cual indica que por lo menos en –algún tiempo– valoró sus ideas.29 Según Matilde E. López,30 lo que tienen en común el marxismo y el vitalismo, es que ambos toman la radicalidad del problema social, es decir, la explotación del hombre por el sistema capitalista y es por eso “que el humanismo de Masferrer parte del concepto de que lo más valioso en el hombre, es la vida” y por tanto tiene una vocación de realización, pero López critica que éste en vida no pudo encontrar los medios o procedimientos adecuados para su ejecución. 31 La ensayista establece que el vitalismo de Masferrer sólo señala ciertas medidas que consisten, principalmente, en la distribución de tierras al campesino, propugnaba por la abolición del Estado porque creía que éste era el instrumento de opresión sobre la clase pobre. 29 Ibídem, págs. 27 y 28. Matilde Elena López: nació en San Salvador en 1917 y murió en San Salvador el 11 de marzo de 2010. Fue poetiza, dramaturga y Doctora en Filosofía y Letras. Es autora de múltiples ensayos sobre todo de Masferrer y es considerada como una de las integrantes de la “Generación del 44”, año en el que salió exiliada por apoyar el movimiento que intentó derrocar al Presidente Hernández Martínez hasta 1957 que regresó a El Salvador. Fue la ganadora en poesía de los Juegos Florales de Chiquimula en 1951, Primer Premio de Ensayo por “15 de Septiembre” del Certamen de Ciencias, Letras y Bellas Artes de Guatemala en 1962 entre otros muchos premios incluyendo Premio Nacional de Cultura en 2005. Fue catedrática universitaria durante muchos años e ingresó en 1997 a la Academia Salvadoreña de la Lengua. Entre sus obras se encuentran: La balada de Anastasio Aquino (1976), Alberto Masferrer alto pensador de Centroamérica, Interpretación social del arte, Cartas a Groza, Estudios sobre poesía, El momento perdido (1976), Cinco grandes mitos del arte en la edad moderna entre otras. Ver: Roxana Beatriz López Serrano, Cien escritores salvadoreños, Editorial Clásicos Roxsil, 1997, pág. 51. 30 Matilde Elena López, Pensamiento Social de Masferrer, San Salvador, Imprenta Nacional, sin datos de publicación, págs. 82 y 84. 31 19 introducción de agua potable y luz eléctrica a las poblaciones de la República; así como también el reconocimiento de la jornada de ocho horas de trabajo y otras demandas populares como podrían ser: aprovisionamiento de aperos de labranza, fácil acceso a créditos agrícolas y asistencia técnica aunque ve ciertos inconvenientes a la hora de llevarlas a la vida.32 En esta misma dirección, otra gran influencia sobre Masferrer, sin lugar a dudas, fue el economista estadounidense Henry George (1839-1897), lo cual puede observarse en una compleja discusión que éste entabló con el naturalista y filósofo positivista Herbert Spencer (1820-1903), quien defendía el derecho a la propiedad individual y que plasmó en un libro titulado Un filósofo perplejo,33 en el cual puede verse como George se adhería a una especie de iusnaturalismo jurídico-vitalista, en el cual defendía el derecho a que todo ser humano tenía de usar libremente los agentes naturales:34 Algunas cosas son, por su propia naturaleza, incapaces de apropiación, de modo que no pueden caer bajo el dominio de nadie. Estas cosas se llaman res communes en la ley romana; y eran definidas como cosas cuya propiedad no pertenecía a nadie y el uso a todos. Así la luz, el aire, el agua corriente, etc. Son tan necesarias al uso común del género humano que ningún individuo puede adquirir la propiedad de ellas, o privar a los demás de su uso.35 Bajo esta misma categoría general es que Henry George comprendía que el bien por excelencia que no era sujeto de apropiación era la superficie de la tierra. Henry George consideraba que la ley debía de garantizar la igualdad de su uso para todos los habitantes, ya que al existir una absoluta apropiación de la misma, se hacían impracticables todas las actividades del hombre tendientes a mantener su 32 Ibídem, pág. 21. Henry George, Un filósofo perplejo, (examen de varias opiniones de Herbet Spencer sobre el problema de la tierra, con algunas referencias incidentales sobre su filosofía sintética), Librería española y extranjera, Francisco Beltrán Editor, Madrid, España, edición y publicación no definida, pág. 2. Otras obras del autor son: Progreso y miseria, La cuestión de la tierra, Problemas sociales, La condición del trabajo, El crimen de la miseria, ¿Protección o libre cambio?, El problema del trabajo y Ciencia de la economía política. 33 34 Ibídem, pág. 151 35 Ídem. 20 vida.36 Como veremos más adelante estos mismos planteamientos fueron vertidos por Masferrer en su doctrina del “Mínimum Vital”. Álvaro Dario Lara por su parte, cree –como efectivamente ha ocurrido– que la gran mayoría de comentaristas de Alberto Masferrer, a excepción de Marta Casaús, han centrado su atención en el pensamiento sociopolítico del maestro, minusvalorando o en el mejor de los casos ignorando su producción espiritualista, lo cual es una grave equivocación, ya que como se intentará probar en esta tesis están íntimamente imbricados. Dentro de la producción teosófica de Masferrer encontramos las siguientes obras: Las siete cuerdas de la lira, Helios, Ensayo sobre el destino, La religión universal, Estudios y figuraciones sobre la vida de Jesús, Caminos de paz, El rosal deshojado entre otras publicaciones dispersas.37 En la siguiente reseña pueden observarse más específicamente sus influencias esotéricas y la unidad de su pensamiento: Un Masferrer que bebía intensamente de los Grandes Maestros de la humanidad, como también de los teósofos de su época: H.P. Blavatsky, Annie Besant38, Krishnamurti, Jinarajadasa y otros. Pero la huella inspiradora de su esoterismo no sólo debemos buscarla en estos escritos, sino en toda la obra masferreriana, ya que representa la columna vertebral desde donde se articula su pensamiento. Por ello la realidad social, el problema agrario (tan álgido en las primeras décadas del siglo XX) el drama de miles de salvadoreños que carecen de alimento, agua, educación, vivienda digna, trabajo justamente remunerado, son vistos por don Alberto, desde todas las fuentes filosóficas y espirituales, antiguas y contemporáneas, que fundamentan su esoterismo.39 Esta afirmación podría parecer exagerada, en la medida que difícilmente Masferrer hubiera podido dominar todas y cada una de las doctrinas filosóficas 36 Ibídem, pág. 152. Álvaro Darío Lara, “El esoterismo de Don Alberto Masferrer”, Diario Co-Latino, jueves 8 de septiembre de 2011, No. 4,762, pág. 17, año CXX. 37 Marta Elena Casaús Arzú, “El binomio degeneración-regeneración en las élites intelectuales espiritualistas de principios del siglo XX en Centroamérica”, Revista Complutense de historia en América, 2009, Vol. 35, págs. 115 y 116. Casaús afirma que Besant influyó mucho en Masferrer en el sentido de crear un plano de unidad e igualdad entre todos los seres humanos. En su libro The problem of the color denunció la supuesta superioridad de la raza blanca para dominar otras culturas ancestrales como la India. Además, Besant consideró que “el acceso a la educación y al trabajo eran la clave para alcanzar la igualdad social y para lograr buenos ciudadanos/as”. 38 Álvaro Darío Lara, “El esoterismo de Don Alberto Masferrer”, Diario Co-Latino, jueves 8 de septiembre de 2011, No. 4,762, pág. 17, año CXX. 39 21 antiguas y modernas. A lo que se refiere el autor, es a que simple y sencillamente dominaba la teosofía porque como se verá más adelante, el concepto que los mismos teósofos proponen de ésta, es ser una síntesis de todas las filosofías y religiones antiguas y contemporáneas a la época. Carlos Gregorio López en esta misma línea de ideas, cree como ya hemos mencionado, que el proyecto de Nación planteado por Masferrer se opuso al proyecto de Nación liberal decimonónico que fue socialmente excluyente, aunque sin caer por eso en una ruptura completa y abrupta sino más bien, en una transición más o menos armoniosa, más o menos conflictiva. Masferrer se caracterizó por hacer una profunda crítica a los valores materialistas propios de los pueblos anglosajones, lo cual se reflejaría en su fuerte actitud antiimperialista que constituyó uno de los estandartes en revistas como El Ariel de José Enrique Rodo. Como parte de esta crítica, Gregorio López considera que muchos intelectuales volvieron sus ojos hacia las culturas orientales y que la filosofía india se puso de moda en oposición el excesivo racionalismo positivista. En este contexto, fue que se trató de reinsertar nuevamente al indígena en la sociedad. Como ya lo hemos insinuado, el académico cree que el pensamiento de Masferrer estuvo influenciado por el arielismo y por las ideas de José Vasconcelos, pero además advierte que su vitalismo se fundamentó en una fuerte tendencia espiritualista:40 El vitalismo era básicamente un llamado a la buena voluntad de los hombres y propugnaba por una conversión moral, tanto de los ricos, como de los pobres, para lo cual se apoyaba en los grandes místicos como Moisés, Jesús, Bhuda, Zoroastro, Gandhi y Francisco de Asís.41 Marta Casaús en definitiva, cree que Masferrer fue un autodidacta y un librepensador y que su doctrina fue el fruto de una densa hibridación que se originó de corrientes muy dispares entre sí, pero que tenían como factor en común que todas pretendían salvar a la humanidad en distintas maneras.42 Además, como ya lo Carlos Gregorio López, “Alberto Masferrer y Augusto César Sandino: Espiritualismo y utopía en los años veinte”, Humanidades, Revista de la Facultad de Ciencias y Humanidades de la Universidad de El Salvador, IV Época, No. 2, Enero-Febrero-Marzo, 2003, pág. 34. 40 41 Ídem. Marta Casaús, “El binomio degeneración-regeneración en las élites intelectuales espiritualistas de principios del siglo XX en Centroamérica”, Revista Complutense de historia en América, 2009, Vol. 35, pág. 120. 42 22 hemos atisbado, cree que fue muy influenciado por el anarquismo y el socialismo libertario de autores como Kropotkin y Proudhon, de filósofos de la antigüedad como Pitágoras, Confucio, San Pablo, Lao-tse y Platón y de escritores como Rubén Dario, Manuel Ugarte,43 Gabriela Mistral, Haya de la Torre,44 Máximo Soto Hall45 y aunque ella no lo menciona Leopoldo Lugones, 46 que eran teósofos o estaban vinculados de alguna manera a los círculos teosóficos.47 La académica ha formulado varios conceptos de vitalismo. El primero es muy sencillo y se asemeja mucho al de Carlos Gregorio López: “Quiso moralizar la sociedad, a fin de que fuera más justa y equitativa y buscó para ello aquellos Manuel Baldomero Ugarte: nació en Buenos Aires el 27 de febrero de 1875 y falleció en Niza, Francia el 3 de diciembre de 1951. Perteneciente al movimiento modernista, sostuvo una postura antiimperialista. En 1901 escribió los artículos “El imperialismo yanqui” y “Defensa Latina”. En 1903 se vinculó al Partido Socialista, especialmente a José Ingenieros, Leopoldo Lugones y Alfredo Palacios. Ugarte vino a El Salvador, durante la presidencia de Arturo Araujo y aunque quiso ser censurado, impartió la conferencia titulada: “América Latina ante el imperialismo”. Manuel Ugarte también le dirigió al Presidente Woodrow Wilson una “Carta abierta al Presidente de Los Estados Unidos”, que, en esencia, es un manifiesto de oposición al imperialismo. En 1915 dirigió el periódico La Patria, fue allegado a José Carlos Mariategui y expresó su apoyo al General Sandino. 43 Víctor Haya de la Torre: nació en Trujillo el 22 de enero de 1895 y murió en Lima el 2 de agosto de 1979. Pensador y político peruano, estudió economía y antropología, última de la cual fue Profesor. Fundador de la Alianza Popular Revolucionaria Americana y líder del Partido Aprista. En 1919 fue elegido Presidente de la federación de Estudiantes del Perú, abogó por los derechos indígenas del continente americano y aunque en un principio estuvo ligado al marxismo, se desligó de él por considerar al comunismo una ideología totalitaria. Obtuvo una gran popularidad por sus planteamientos antiimperialistas. 44 Máximo Soto Hall: nació en Guatemala el 5 de julio de 1871 y murió en Buenos Aires, Argentina el 31 de diciembre de 1944. Escritor, diplomático y político. Escribió sobre política, cultura y literatura, sobre todo novela y poesía. Colaboró de forma habitual con escritos en el Repertorio Americano. Algunas de sus obras son: Notas Broncíneas, Un vistazo sobre Costa Rica en el siglo XIX: 1901, Revoluciones íntimas de Rubén Darío 1925, El jardín de la leyenda 1927, Nicaragua y el Imperialismo Norteamericano 1928 y Los Mayas, entre muchas otras. 45 Leopoldo Lugones: nació en Córdoba, Argentina el 13 de junio de 1874 y murió en Buenos Aires, Argentina el 18 de febrero de 1938. Poeta, ensayista, periodista y político argentino. Colaboró con el periódico El pensamiento libre, el cual era ateo y anarquista y se unió al movimiento socialista encabezado por José Ingenieros. Publicó mucha poesía con el pseudónimo Gil Paz y es considerado se inserta dentro de la corriente modernista. En 1915 fue Director de la Biblioteca Nacional de Maestros, cargo que desempeñó hasta su muerte. En 1926 recibió el Premio Nacional de Literatura y en 1928 presidió la Sociedad Argentina de Escritores. Entre algunas de sus obras están: Piedras liminares 1910, Prometeo un proscripto del sol 1910, Historia de Sarmiento 1911, El problema feminista 1916, Mi beligerancia 1917, entre muchas otras. 46 Marta Casaús, “El binomio degeneración-regeneración en las élites intelectuales espiritualistas de principios del siglo XX en Centroamérica”, Revista Complutense de historia en América, 2009, Vol. 35,, págs. 114, 120, 122. 47 23 derechos y deberes que permitieran al conjunto de sus individuos satisfacer las necesidades básicas, lo que llamó MÍNIMUM VITAL”. 48 Un segundo concepto es más estructural y en franco parafraseo de Alberto Masferrer: La teoría del Mínimum Vital fue una creación del filósofo y pedagogo salvadoreño, Masferrer, basado en nueve mandamientos laicos: trabajo higiénico, alimentación suficiente, vivienda, agua buena y abundante, vestido, asistencia sanitaria, justicia, educación y descanso. Considera que si el Estado no asegura estos bienes básicos a sus ciudadanos, toda la existencia es un fracaso porque, “toda criatura humana degenera y se bestializa”.49 De hecho, es muy interesante que Casaús mencione como influencias a Rubén Darío,50 ya que éste fue iniciado en la teosofía de la mano de Jorge Castro Fernández, hijo del embajador de Costa Rica, José María Castro. Castro Fernández perteneció a varias logias teosóficas de las muchas que existieron en Europa, aparentemente, Darío sintió interés en la teosofía a partir de una revista parisina titulada Revue des hautes études theósophiques, pero a pesar de su afinidad hacia ella, no hay pruebas que haya pertenecido a alguna sociedad 51, no así Lugones de quien hay evidencia que perteneció a la cofradía ocultista denominada “Rama Luz” anexa a la Marta Casaús, “La disputa por los espacios públicos en Centroamérica de las redes unionistas y teosóficas en la década de 1920: la figura de Alberto Masferrer”, Humanidades, Revista de la Facultad de Ciencias y Humanidades de la Universidad de El Salvador, IV Época, No. 2, Enero-FebreroMarzo, 2003, pág. 51. 48 Marta Casaús, “El binomio degeneración-regeneración en las élites intelectuales espiritualistas de principios del siglo XX en Centroamérica”, Revista Complutense de historia en América, 2009, Vol. 35, pág. 117. 49 Rubén Darío: nació en Metagalpa, Nicaragua el 18 de enero de 1867 y murió en León el 6 de febrero de 1916. Poeta, considerado como el padre del modernismo y el que ha tenido mayor influencia en el ámbito hispanoamericano del siglo XX. En El Salvador, fue protegido del Presidente Rafael Zaldívar y conoció a Francisco Gavidia. Durante la Presidencia de José Santos Zelaya fue embajador en Madrid. Algunos de los temas centrales de su poesía era el simbolismo, el erotismo, el exotismo y el ocultismo, principalmente, el pitagorismo y la teosofía. Algunas de sus obras son: Los raros 1906, España contemporánea 1901, Letras 1911, Todo al vuelo 1912, La isla de oro 1915, entre otras. 50 Aníbal Salazar Anglada, “Modernismo y teosofía: la visión poética de Lugones a la luz de nuestras ideas estéticas”, Anuario de estudios americanos, tomo LVII, 2, 2000, área de literatura hispanoamericana, Universidad de Sevilla., págs. 604 y 605. 51 24 Sociedad Teosófica Argentina, de la cual incluso llegó a ser secretario.52 La teosofía influyó mucho en la producción estética de ambos poetas.53 Otro modernista quien, según la crítica literaria, también se vio muy influenciado por la teosofía fue Amado Nervo 54 en obras como Tú (panteísmo), La acción (principio de vibración) y Transmigración (reencarnación).55 Asimismo, no debemos olvidar al estilista cubano José Martí56 quien en sus escritos sostenía una especie de “naturalismo trascendental”, es decir, identificaba a Dios con la naturaleza. José Martí se sintió atraído por la visión ética y espiritualista de las religiones orientales como el hinduismo y el budismo y son innumerables en sus escritos las referencias a las ideas de la reencarnación y el karma, las cuales estaban ligadas a su concepción del universo.57 Martí coincidía con la teosofía sobre la concepción de una gran unión de credos dentro de un nuevo tipo de iglesia a la cual llamó la “iglesia nueva” y sobre que era necesario restablecer un conocimiento unitario a través de la fusión entre razón, ciencia y Dios, incluso en 1891 redactó una carta titulada: La oradora humanitaria, Annie Besant en la cual literalmente expresó:58 52 Ibídem., pág. 602. 53 Ibídem., pág. 605. Amado Nervo: nació en México el 27 de agosto de 1870 y murió en Montevideo, Uruguay el 24 de mayo de 1919. Poeta y prosista mexicano, perteneciente al movimiento modernista. En su obra estuvo muy presente el misticismo. Colaboró en la Revista Azul de Manuel Gutiérrez Nájera y se relacionó con Rubén Darío. Trabajó para el periódico El Imparcial y algunas de sus obras son: Místicas 1898, Los jardines interiores 1905, Mis filosofías 1912, Elevación 1916, Plenitud 1918 y Los balcones 1922, entre otras. 54 Gerardo Mora Burgos, “Roberto Brenes Mesén: mito y realidad”, Revista de filosofía de la Universidad de Costa Rica, XXXVII (93), 1999, pág. 414. 55 José Martí: nació en la Habana, Cuba, el 28 de enero de 1853 y murió en Dos ríos, Cuba, el 19 de mayo de 1895. Político republicano, filósofo y poeta. Fundador del Partido Revolucionario Cubano y fundador de la “Guerra del 95”. Perteneció al movimiento literario modernista. Su visión política era liberal y democrática y fue el principal modelador de la nacionalidad cubana. Existen recopilaciones de las obras completas de Martí. 56 Santiago Juan Navarro, Memoria histórica, género e interdisciplinariedad: los estudios culturales hispánicos en el siglo XXI, Editorial biblioteca nueva, Madrid, 2007, págs. 37, 38, 39 y 43. 57 58 Ibídem, págs. 36, 40 y 43. 25 Annie Besant ha venido de Inglaterra, (a Estados Unidos) con su elocuencia ardiente y sus canas jóvenes, a mantener los dogmas teosóficos: el espíritu es una mina de hechos: hay que descubrir y clasificar los hechos del espíritu: hechos del espíritu, científicos como cualquiera otros, son todos los del hipnotismo y el mesmerismo, los sueños y la clarividencia, el genio y el poder de transferir el pensamiento, todo lo que está en los libros de Sínnett y en la Doctrina Secreta de la gran sacerdotisa que se les acaba de morir, la rusa Blavatsky.59 Es importante hacer una breve observación en este sentido y es que la mayor parte de los miembros del Grupo Masferrer que se formó durante la presidencia de Martínez eran poetas, esto se dio como el resultado, según deducimos, de la búsqueda de unidad a través de la emoción estética: “el estilo”, que sólo podía entenderse en el contexto de la crisis espiritual causada por el positivismo, en la cual la poesía jugó el papel de un posible refugio o salida:60 En este estado de deterioro espiritual, provocado en buena medida por el positivismo filosófico-político y la consecuente laicización de la sociedad, el poeta encuentra en el idealismo de las milenarias filosofías orientales de base pitagórica, rescatadas ya desde el romanticismo inconformista61, una forma de dialogo consigo mismo y en ese otro mundo que está fuera de él y que ve a lo lejos un extraño: el Universo.62 Esta apreciación está en correspondencia con la visión de Ricardo Roque Baldovinos quien plantea que el tema del “modernismo” se volvió problemático. Tal aseveración se asimila en la medida que Roque Baldovinos explica que el proceso de modernización entendido como “progreso” sobre todo científico y material ya no fue tan seguro y claro. Lo “estético” empezó a jugar un nuevo y desconocido rol, es José Martí, Obras completas, Vol. 69. Carta al partido liberal, New York, 7 de diciembre de 1891, La Habana, Editorial Trópico, 1946, pág. 188-190. 59 Aníbal Salazar Anglada, “Modernismo y teosofía: la visión poética de Lugones a la luz de nuestras ideas estéticas”, Anuario de estudios americanos, tomo LVII, 2, 2000, área de literatura hispanoamericana, Universidad de Sevilla., págs. 604, 605 y 609. 60 José Ricardo Chávez, “Sueño y analogía en la filosofía romántica”, Acta Poética 21, seminario de poética, Universidad Autónoma de México, año 2000, pág. 300. “Uno de estos filósofos es Gotthilf Heinrich Shubert (1780-1860), cuya principal obra, Simbólica del sueño, tiene la indudable virtud de sintetizar algunos de los temas de reflexión que apasionaron, no sólo a Shubert en particular, sino también a muchos de sus colegas de la corriente de “filosofía de la naturaleza”: el inconsciente, el sueño, la poesía, la religión, el mito teosófico, la profecía, la naturaleza, los experimentos de magnetismo y galvanismo, que tanto entusiasmo despertaron en aquella época. Este libro junto con El alma del mundo, de Shelling, son quizá las dos obras teóricas más conocidas del romanticismo alemán”. 61 62 Ibídem., pág. 610. 26 decir, empezó a tener puntos de contacto con la vida. A partir de la cultura se buscaron nuevas posibilidades de transformar la realidad social. 63 Estas nuevas ideas permearon en la intelectualidad salvadoreña en cuanto a exigir un cambio en el rumbo social y tal como lo asevera el autor: “No es una casualidad entonces que sea un literato, Alberto Masferrer, quien comience a diseñar las bases de un proyecto de nación alternativo”. 64 Geovanni Galeas añade: “Si Gavidia65 se constituyó en el fundador de nuestras letras, Masferrer se erigió en voz y conciencia moral de la nación”.66 Ahora bien, hemos tocado dos conceptos difíciles de desentrañar: positivismo y modernismo. Por el primero entenderemos aquella doctrina filosófica que, unida al ideario liberal, introdujo en su reforma educativa el postulado de que “los hechos comprobables son el objeto principal del conocimiento humano”, rechazando de esta forma a la metafísica y a la religión, frente a las cuales propondría “una acción política fundada en el previo conocimiento científico de la realidad social”.67 Con respecto al segundo, Gerardo Mora Burgos expresa que uno de los trabajos que mejor ha abordado el tema del ocultismo en el modernismo, es el de Ricardo Gullón titulado: Pitagorismo y modernismo mediante el cual trata de darle un nuevo significado a este concepto desde este nuevo horizonte: Geovanni Galeas, “Cultura contemporánea”, El Salvador, La República, tomo II, Fomento Cultural Banco Agrícola, año 2000, pág. 360. 63 64 Ídem. Francisco Gavidia: nació en San Miguel el 29 de diciembre de 1863 y falleció en San Salvador el 24 de septiembre de 1955. Fundador del teatro, del cuento, de la historia, de asuntos indígenas, filológicos, filosóficos, investigador de cultura, ciencias y toda clase de conocimientos. Al lado de Rubén Bario es uno de los fundadores del modernismo literario. Publicó sus poemas y discursos en diferentes periódicos de circulación nacional. Se le atribuyen 204 obras incluyendo sus discursos. Entre algunas de ellas se encuentran: Versos (1879), El libro de los azahares, Júpiter, Cuentos y narraciones, Discursos, estudios y conferencias, La princesa Citalá, Héspero, Cuento de marinos, Sóteer o Tierra de preseas y La torre de marfil. Ver: Roxana Beatriz López Serrano, Cien escritores salvadoreños, Editorial Clásicos Roxsil, 1997, pág. 35. 65 Geovanni Galeas, “Cultura contemporánea”, El Salvador, La República, tomo II, Fomento Cultural Banco Agrícola, año 2000, pág. 361. 66 Gerardo Mora Burgos, “Roberto Brenes Mesén: mito y realidad”, Revista de filosofía de la Universidad de Costa Rica, XXXVII (93), 1999, pág. 413. 67 27 Una de las características del modernismo es la mezcla de ingredientes ideológicos de procedencias diversas (…) misticismo cristiano, orientalismo, iluminismo, teosofía, magia, hermetismo, ocultismo, cabalismo, alquimia (…) la inquietud moderna buscó por todas partes caminos de perfección diferentes de los impuestos por las ortodoxias predominantes.68 También es indispensable dejar bien establecido lo que entenderemos por teosofía desde un punto de vista académico desde el cual desarrollaremos las ideas de este capítulo y de la tesis en general, por lo que presentamos la siguiente conceptualización de la reconocida investigadora Marta Casaús: La teosofía parte de ciertos supuestos neoplatónicos e hinduistas, según las distintas corrientes. Surge en franca oposición al positivismo y al materialismo decimonónico, pretende ser un saber superior que permite el acceso directo al conocimiento de la sabiduría divina desde cualquier religión. Uno de sus principales objetivos es la moralización del individuo y de la sociedad69, «mediante la formación de hombres y mujeres libres intelectual y moralmente», de ahí la importancia que confiere a la educación de los niños y de los jóvenes. Posee un cierto carácter esotérico, orientalista y espiritista. 70 Los principios básicos de las Sociedades teosóficas son similares a los de la masonería71 y se resumen en el establecimiento de un núcleo de fraternidad y solidaridad universal, sin distinciones de raza, credo o 68 Ibídem, pág. 414. “Las ideas del General Martínez”, Diario Oficial, Suplemento La República, sábado 19 de septiembre de 1942, No. 2,810, pág. 1, año X. “Las pláticas semanales del General Martínez son sumamente interesantes y tienen un noble fin como es el de despertar la conciencia del pueblo salvadoreño hacia el cumplimiento del deber. Cada plática está integrada por ideas generosas (…) ideas de moralidad y de amor, que al encontrar tierra propicia germinan rápidamente”. 69 Luis A. Urbina, “El espiritismo”, Diario Nuevo, miércoles, 3 de agosto de 1938, No. 1,438, pág. 3, año V. “El Espiritismo a mi humilde modo de pensar no es un arte diabólico, ni mucho menos una superchería como lo creen los incrédulos. Sus fenómenos son sorprendentes y hasta cierto punto inexplicables bajo el punto de vista científico (…) el espiritismo ha sido objeto de admiración de los sabios en todos los tiempos y países. En la Sorbona por ejemplo los sabios hacen evocaciones de espíritus superiores y experimentos psíquicos muy convincentes que asombran al mundo civilizado”. 70 Roberto Armando Valdés Valle, Masones, Liberales y Ultramontanos Salvadoreños: Debate Político y Constitucional en algunas publicaciones impresas, durante la etapa final del proceso de secularización del Estado Salvadoreño (1885-1886). Tesis para optar al grado de Doctor en Filosofía Iberoamericana, UCA, 2010, págs. 3 y 4. “Se puede definir a la masonería como una “sociabilidad” moderna, es decir, una fraternidad, una especie de club moderno al que se podía pertenecer si se tenían las cualidades personales necesarias, pero que no eran heredables como se heredaban los títulos nobiliarios o la pertenencia a un gremio medieval; en fin, podemos considerar a la sociabilidad masónica como un espacio de encuentro para realizar ciertos rituales y prácticas, y para recibir una formación que buscaba convertir a sus miembros en mejores seres humanos y ciudadanos de acuerdo con los principios ideológicos y utópicos propios de la sociedad”. 71 28 género, un estudio comparado de las religiones y una explicación de las leyes de la naturaleza para un mejor conocimiento del ser humano.72 A partir de este concepto, y no porque Casaús cometa el error, sino porque creemos que podría incurrirse en él, es necesario hacer la misma aclaración que hace el filósofo español José Luis Abellán S.J. en su Historia critica del pensamiento español sobre que, aunque parezcan muy similares, no hay que confundir “teosofía” y “espiritismo”, ya que la primera sólo sería un conjunto de saberes de tradiciones y tendencias muy diversas que no se preocupa de forma determinante por llevar a la práctica aquellos fenómenos que podrían considerarse como “sobrenaturales”, mientras que la segunda se centra en la evocación inmediata y tangible de los “espíritus” que, en teoría, provocarían hechos como golpes inexplicables, mesas giratorias o manifestaciones fantasmagóricas, etc. En ese sentido, la teosofía, según el español, sólo se movería en el ámbito de la observación mientras que el espiritismo en el de la experimentación y la observación provocada. 73 A pesar de esta distinción, Abellán considera que la teosofía sí se vio muy influenciada por el espiritismo y que incluso Madame Blavatsky creía ser un “médium” asistiendo a las reuniones espiritistas de Chittenden en la ciudad de Vermont, Estados Unidos.74 De hecho, Arturo Conan Doyle quien fuera Presidente Honorario de la Federación Espiritista Internacional, Presidente de la Alianza Espiritista de Londres y Presidente del Colegio de Ciencia Psíquica en su obra El espiritismo confirma el interés de Blavatsky por lo espiritista: Enrique Slade, el célebre médium que descolló en los fenómenos de escritura directa, se exhibió ante el público americano por espacio de quince años, después de los cuales paso a Inglaterra el 13 de julio de 1876. El coronel Olcott, más tarde presidente de la Sociedad Teosófica, dice que a él y a la señora Blavatsky debióse la visita de Slade a Inglaterra. Parece que el gran Duque Constantino de Rusia, deseoso de llevar a cabo una investigación acerca del espiritismo dio el consiguiente encargo a una comisión de profesores de la Universidad Imperial de San Petersburgo, que a su vez rogo al Coronel Olcott y a la señora Blavatsky que Marta Casaús, “Las redes teosóficas de mujeres en Guatemala: la Sociedad Gabriela Mistral, 1920-1940”, Revista Complutense de Historia de América, No. 27, 2001, pág. 246. 72 José Luis Abellán, Historia crítica del pensamiento español, Tomo V/I, (la crisis contemporánea, 18751936), Editorial Espasa-Calpe S.A., Madrid, España, 1989, pág. 430. 73 74 Ibídem, pág. 432. 29 escogieran entre los mejores médiums americanos uno con quien pudiesen realizar los experimentos.75 Francisco García Bazán en Aspectos inusuales de lo sagrado coloca tanto a la teosofía como al espiritismo dentro de los denominados movimientos pseudoespirituales. El académico sostiene que el espiritismo fue una corriente progresista, racionalista y anticatólica fundada a mediados del XIX en Estados Unidos y que su principal teórico fue el francés Allen Kardec (1804-1869).76 La reacción del catolicismo hacía dicha tendencia, obviamente fue muy fuerte y se dio a través de obras como El espiritismo ante la ciencia de C.M. Heredia S.J. en la cual se trató de deslegitimar todo tipo de fenómeno espiritista aún aquel que aparentemente gozaba de cierto respaldo científico. Además, García Bazán, al igual que Casaús y Abellán, cree que la teosofía estuvo próxima al espiritismo, entendiendo a ambos como especies de esoterismo:77 Este tipo de esoterismo popularizado y rival del cristianismo se difunde a través de conocidos personajes: E. Schuré Los grandes iniciados, 1889, Papus, Estanislao de Guaita, etc., y se renueva, fortalece y organiza con la creación de la Sociedad Teosófica (…) Madame Blavatsky hace confluir en el movimiento teosófico doctrinas hindúes, rosacrucianas y espiritistas, pero distinguiendo su creación personal de todas estas doctrinas particulares.78 Ahora bien, habría que decir que los filósofos positivistas centroamericanos también reaccionaron ante posturas como la teosofía y el espiritismo, por ejemplo, en Costa Rica, Carlos Gagini dijo que: “el método experimental disciplinó la ciencia” –y que– “el progreso humano ha continuado su desarrollo ascendente y triunfal, Arturo Conan Doyle, El espiritismo, su historia, sus doctrinas, sus hechos, sin edición definida, Biblioteca del más allá, Madrid, España, 1927, pág. 212. 75 Francisco García Bazán, Aspectos inusuales de lo sagrado, Editorial Trotta, S.A., Edición no definida, Colección Paradigmas, Madrid, España, 2000, págs. 198 y 199. 76 Ibídem, págs. 103 y 104. García Bazán en su ya citada obra también explica el concepto de “esotérico”, que significa literalmente “más adentro” o “interior” y que tanto Clemente de Alejandría como Aristóteles tuvieron obras acromáticas, es decir, sólo para cierto círculo de estudiantes. Explica que los pitagóricos de forma similar diferenciaron entre los saberes acusmáticos (para todos) y los matemáticos (para unos cuantos) y que ambos tipos de conocimiento, de ningún modo deben concebirse como opuestos sino como complementarios, incluso, hasta en el mismo cristianismo primitivo habría existido tal diferencia, ya que Jesús discriminaba entre el circulo de sus discípulos íntimos y el de los demás: “No les habla sin parábolas; pero a sus propios discípulos se los explicaba todo en privado. (Marcos 4:34). 77 78 Ídem. 30 arrollando a su paso la ignorancia, la superstición y el charlatanismo”. Además, aseguró que el “misticismo” no era más que viejos resabios de la antigüedad enseñados a partir de un déficit en la educación.79 Aunque Marta Casaús postula acertadamente que la teosofía surgió en contraposición a los valores positivistas, también hubo una especie de conciliación entre ésta y el positivismo y he aquí una de las paradojas de la teosofía que emergió como una forma de modernismo reaccionario, es decir, critica a la modernidad pero sin salirse de ella, ya que la teosofía pretende ser una síntesis entre religión, filosofía y ciencia. En el régimen nazi se dio algo muy similar al querer fusionar cultura con tecnología. El nazismo partía de una inserción de los avances tecnológicos modernos en expansión, sobre todo con fines armamentísticos al mismo tiempo que rechazaba profundamente a la razón ilustrada y sus postulados fundamentales, paradoja que sería combinada con un anticapitalismo romántico de derecha y una intención de que lo político predominara por sobre la económico, a lo cual Jeffrey Herf llamó “romanticismo de acero”. Para combatir al racionalismo moderno, el nazismo recurrió a lo estético y a lo cultural para tratar de demostrar que el espíritu y la voluntad eran superiores a la razón.80 El modernismo reaccionario, en esencia, es una nueva categoría de análisis social acuñada por Jeffrey Herf para justificar dicha vinculación y surge como una alternativa a las explicaciones marxistas y a las de los teóricos tradicionales de la modernidad como Max Horkheimer y Theodor Adorno quienes coincidían en explicar la causa del nazismo como una postura política ligada a la ilustración desde Kant y Hegel en la cual existía una íntima relación entre razón, mito y dominación. El modernismo reaccionario es: “una conciliación entre las ideas antimodernistas, románticas e irracionales del nacionalsocialismo alemán y la manifestación más Arnoldo Mora Rodríguez, “En los albores de la filosofía costarricense: el debate entre Roberto Brenes Mesén, Carlos Gagini y Moises Vincenzi (1916-1919), Revista de filosofía de la universidad de Costa Rica, XXXVII (93), 1999, pág. 425. 79 Miguel Ángel Rossi, “La filosofía política frente al primado del sujeto y la pura fragmentación, “Red de bibliotecas virtuales de ciencias sociales de América Latina y el Caribe de la red CLACSO, Consejo Nacional de Estudios Sociales de Buenos Aires, Argentina”, 2003, disponible en: http://bibliotecavirtual.clacso.org.ar/ar/libros/teoría3/rossi.pdf., pág. 309. 80 31 obvia de la modernidad de medios y fines, es decir, la tecnología moderna”.81 Para entender lo afirmado iluminan mucho los siguientes conceptos: Al positivismo, que se creía que había llegado a un excesivo espíritu analítico y a un peligroso dogmatismo racionalista de incierto futuro, se le pretendía dar un rostro más humano e idealista. Incluso algunos defendían la integración de ciencias positivas e ideas espirituales, sin menospreciar para nada los avances científicos y las buenas aportaciones que había ofrecido y estaba ofreciendo el positivismo en aquellos momentos. Uno de los movimientos que a finales de siglo más se distinguió por defender esta complementariedad de razón y espiritualidad, siempre dentro del marco del nuevo humanismo, fue el teosofismo. Éste reivindicaba la tradición filosófica de la Grecia clásica –sobre todo de Pitágoras y Platón– del misticismo medieval de Ramón Llull, del humanismo renacentista del siglo XVI y del idealismo y romanticismo europeo de finales del siglo XVIII y principios del XIX.82 Debemos aclarar que el “modernismo reaccionario” no fue la única forma de entender la modernidad, Peter L. Berger y Thomas Luckman en su ensayo Modernidad, pluralismo y crisis de sentido explican que ésta tuvo diversas manifestaciones. La idea consiste en que la crítica a la modernidad no sólo fue en una única dirección. Estos teóricos explican que la complejidad de la modernidad consiste en su pluralismo ideológico, de lo que se infiere que hay una gran gama de discursos, sistemas de valores y de sentidos coexistiendo.83 Muchos sistemas compiten abiertamente entre sí, por lo que las interpretaciones de la realidad se vuelven meras hipótesis de las cuales hay que elegir una, pero para que pueda darse esta multiplicidad de visiones deben existir, en teoría, ciertas condiciones como: tolerancia y democracia política. En esta dirección, las doctrinas, sujetos e instituciones funcionan como orientadoras de sentido en la medida que el hombre moderno está entrando constantemente en crisis.84 Lilia Puig de Stubrin, “El modernismo reaccionario: una nueva categoría en el análisis social”, revista de Estudios Sociales No. 5, Universidad Nacional del Litoral, Argentina, 1993, pág. 174. 81 Jordi Pomés Vives, “Diálogo Oriente-Occidente en la España de finales de Siglo XIX. El primer teosofismo español (1888-1906): un movimiento religioso heterodoxo bien integrado en los movimientos sociales de su época”, Revista HMiC, No. IV, 2006, pág. 56. 82 Peter L. Berger, et al, “Modernidad, pluralismo y crisis de sentido”, Estudios públicos No. 63, Centro de Estudios Públicos, 1996, pág. 1. Disponible en: PL Berger, T Luckmann, J Estruch 1997 - courseware.url.edu.gt. 83 84 Ibídem, pág. 2. 32 El positivismo, por ejemplo, nació a partir de la crisis del sistema eclesiástico dogmático que se volvió insuficiente para explicar la realidad en base a una ruptura dual de sentido, pero de todos modos, los autores piensan que los distintos imaginarios se van acumulando en una compleja estructura de sentidos en donde todos permanecen ahí, aunque estos sean imperceptibles o se vean borrosos.85 Debemos decir que la polémica anti-positivista no nació en América, sino que se vino trasladando desde Europa a finales del siglo XIX y principios del XX ante las limitaciones del método científico para proveer de ciertas respuestas más humanas y sociales que parecían escapársele a la “rigurosidad” y la “tecnicidad”, en ese contexto, fue que tomaron auge, como ya hemos establecido, las tendencias espiritualistas, aunque con cierta aspiración a no seguir en la disyuntiva entre espíritu y materia, sino que tratando de alcanzar una unidad armónica. 86 Masferrer para superar esta dicotomía propuso un nuevo horizonte más radical, que era el de la vida, entendida en su doble dimensión: material y espiritual.87 Marta Casaús explica que este fenómeno no se dio sólo a través de Masferrer en El Salvador sino que fue el resultado “de un complejo entramado de redes sociales vinculadas a nuevas corrientes espiritualistas, espiritistas y teosóficas”, que pretendían romper con el positivismo creando una cierta tendencia anti-moderna. A esta tendencia, Lara-Martínez la denomina utópica: “ideas pre-marxistas, religiosas, teosóficas y metafísicas fundaron la utopía, una idea del socialismo y del feminismo. Esta hibridación, es a la que el antropólogo llama: socialismo utópico. 88 Para Lara-Martínez, estas ideas fueron radicalizadas en el Mínimum Vital de Masferrer, que consistía en la realización de los derechos fundamentales a “toda 85 Ibídem, págs. 3 y 5. Juan Antonio Pacheco Peraza, La doctrina de Alberto Masferrer: un vitalismo revolucionario, Tesis presentada para obtener el grado de Licenciado en letras y filosofía, Universidad Rafael Landívar de Guatemala, 1990, pág. 26. 86 87 Ídem. Rafael Lara-Martínez, “En las manos un pequeño país. Política y poética en El Salvador (18842004)”, Revista Electrónica de las Sedes Regionales de la Universidad de Costa Rica, Vol. IV, (62003), págs. 17 y 18. 88 Disponible en: www.revistas.ucr.ac.cr/index.php/intersedes/article/download/834/895. 33 criatura por el hecho de nacer y existir” y que derivaba su nombre del derecho sin el cual son inconcebibles todos los demás: la vida. No sólo mediante la condena del aborto, sino que también mediante la erradicación de la pena de muerte y la supresión de toda guerra, en este sentido el Presidente Martínez al hacer ejecuciones masivas en la insurrección del 32, contradijo sus propias creencias, pero es interesante observar cómo esto también se convirtió en una paradoja cuando LaraMartínez establece: “Las figuras más relevantes son Alberto Masferrer y Salarrué. 89 Paradójicamente, al correr de los años, ambas obras las recuperan las dictaduras militares que impusieron una modernidad desde arriba; así legitimaban su propio proyecto”.90 A raíz de esto, es que según Luis Melgar Brizuela, Roque Dalton escribió su poema “Viejumierda” en donde su intención era criticar la sacralización y oficialización que de Masferrer hicieron las dictaduras militares. Dalton intenta desentrañar como a partir de su figura se hizo cultura oficial.91 Política de la cultura que sería complementada con un programa material de corte reformista, que teóricamente vendría a quitar banderas ideológicas al comunismo92 y es por eso que Melgar concluye: “Así el masferrerismo deviene aún más anti-marxista que el anti- Salvador Salazar Arrué conocido como Salarrué: Nació en Sonsonate el 22 de octubre de 1899 y murió el 27 de noviembre de 1975 en Los Planes de Renderos. Sus primeros cuentos fueron publicados por El Diario del Salvador cuando él tenía 10 años. Fue cuentista y novelista, poeta, escultor, pintor, dibujante y fotógrafo y escritor de más de cien canciones que se encuentran inéditas. Expuso su obra en diferentes galerías de arte en El Salvador, Guatemala, Costa Rica, New York y New Orleans. Fundó y dirigió las revista Amatl y Espiral. También fue colaborador del periódico Patria, antes y después de la muerte de Masferrer.89 Entre sus obras más representativas encontramos: El Cristo negro, O`Yarkandal, Eso y más, Remontando el Uluán, Trasmallo, La espada y otras Narraciones, El señor de la burbuja, Catleya luna, El libro desnudo, entre otras. Ver: Roxana Beatriz López Serrano, Cien escritores salvadoreños, Editorial Clásicos Roxsil, 1997, pág. 69. 89 Rafael Lara Martínez, “En las manos un pequeño país. Política y poética en El Salvador (18842004)”, Revista Electrónica de las Sedes Regionales de la Universidad de Costa Rica, Vol. IV, (62003), págs. 17 y 18. 90 Luis Melgar Brizuela, “De cómo y por qué Roque Dalton llamó “viejuemierda” a don Alberto Masferrer” Humanidades, Revista de la Facultad de Ciencias y Humanidades de la Universidad de El Salvador, IV Época, No. 2, Enero-Febrero-Marzo, 2003. pág. 10. 91 92 Ibídem, pág. 12. 34 bolchevismo de Gavidia, de donde se explica la virulencia con que Roque Dalton lo confrontó”.93 Sin embargo, el mismo Rafael Lara-Martínez, en su obra El bicentenario un enfoque alternativo sostiene que los masferrerianos hasta la actualidad han tratado de implementar el ideario del maestro, no obstante se han olvidado de los hechos violentos y de las víctimas del pasado que él tanto defendió. Además, reconoce que ha habido una supresión de lo indígena y de su lengua. Considera que hasta el momento, ha predominado la idea de que nunca ha habido una identidad afrosalvadoreña. Para el académico, no se pueden olvidar las montañas de cadáveres que la historia nacional anhela olvidar.94 Aunque estas reflexiones son vertidas a partir de las confrontaciones independentistas habría que decir que la masacre de 1932, la cual también fue denunciada por Masferrer, trató de justificar un sistema de libertades en donde toda revolución de izquierda se percibía como un síntoma de “minoridad”. Siguiendo la línea del discurso de Lara-Martínez, la presidencia de Martínez sería la consolidación de un nuevo gobierno despótico que se divide en: ejército, clero y pueblo. No habría una ruptura entre el monarquismo absolutista y la presunta y defraudada democracia electoral. El lingüista, de forma similar a Patricia Alvarenga, sostiene que todo esto fue producto de un legado violento, que caracteriza como “la tiranía suavizándose por la influencia de la cultura”.95 El contrasentido radica en que durante la presidencia de Martínez, aunque hubo una política de la cultura de corte indigenista con fuerte base masferreriana, se exterminó a gran parte de las comunidades indígenas del occidente del país, pero habría que remitirnos a antes de la masacre y preguntarnos por qué Masferrer creía que el indígena era un sector susceptible de regenerarse. Marta Casaús considera que, evidentemente, Masferrer inició un nuevo intento de “regenerar” a la Nación desde el punto de vista vitalista-teosófico, del cual habría que buscar sus raíces, en 93 Ibídem, pág. 20. Rafael Lara-Martínez, El bicentenario: un enfoque alternativo, Editorial Universidad Don Bosco, 1ª Ed., 2011, págs. 1 y 2. 94 95 Ibídem, págs. 37, 40. 35 pensadores como Rousseau a partir de su obra El Emilio y posteriormente en pensadores como: Roman Rolland, Henri Barbusse y Henry George, quienes retomaron el término:96 La tercera entrada al concepto de regeneración la encontramos en las corrientes del regeneracionismo espiritualista y vitalista 97 que, parten del supuesto de igualdad del género humano, de la idea roussoniana de que el hombre como ser natural es puro y es en la sociedad en donde se degenera, por lo que hay que aplicar una serie de medidas correctoras en la sociedad y en El Estado para evitar dicha degeneración, negando que esta proceda de la raza, sino más bien de la ausencia de derechos inalienables a todo ciudadano por el simple hecho de existir.98 Asimismo, para poder comprender la adopción del programa material de Alberto Masferrer por parte del gobierno de Martínez, hay que analizar las circunstancias en que el primero se desenvolvió. En primer lugar, Carlos Gregorio López señala que la mayor parte de la población de esa época, producto de la crisis del café, migró hacia la urbe lo que trajo como consecuencia que se agravara el problema de la falta de vivienda. El historiador lo describe así: “los mesones proliferaron; en 1924 se registraban 312; hacia 1929 habían subido a 526. En la mayoría de ellos, el hacinamiento y la falta de condiciones higiénicas atentaban contra la salud de los inquilinos”.99 Más adelante, en el capítulo IV, veremos cómo durante el mandato de Martínez estas cifras se incrementaron considerablemente. Marta Casaús, “El binomio degeneración-regeneración en las élites intelectuales espiritualistas de principios del siglo XX en Centroamérica”, Revista Complutense de historia en América, 2009, Vol. 35, pág. 113. 96 Marta Casaús, “De la incógnita del indio al indio como sombra: el debate de la antropología guatemalteca en torno al indio y la Nación” Revista de Indias, Vol. XLV. No. 234, Universidad Autónoma de Madrid, 2005, pág. 378. El concepto que Casaús proporciona de “regeneración” desde el punto de vista vitalista teosófico es el siguiente: “se iba a dispersar como una palabra mágica, como una idea fuerza, como un vocablo aglutinador de los anhelos, esperanzas y deseos de una ciudadanía que buscaba espacios públicos más amplios y una mayor representación social y política. En la medida en que intentaba oponerse o romper con el materialismo y el positivismo, buscó nuevas fuentes de inspiración en las raíces de lo latinoamericano frente a lo foráneo, retornó a un cierto hispanismo, revalorizó las raíces indígenas y, en algunos casos, buscó nuevos rasgos de identidad nacional no necesariamente homogéneos —como la fusión de lo español y lo indígena— sino respetuosos con la pluralidad cultural de los pueblos americanos, sentando las bases del indigenismo y del indianismo posteriores”. 97 Marta Casaús, “El binomio degeneración-regeneración en las élites intelectuales espiritualistas de principios del siglo XX en Centroamérica”, Revista Complutense de historia en América, 2009, Vol. 35, 112 y 113. 98 Carlos Gregorio López, “Años de bonanza y crisis; de ilusiones y desencantos”, El Salvador, La República, tomo II, Fomento Cultural Banco Agrícola, año 2000, pág. 376. 99 36 Los problemas del alcoholismo y la prostitución también se intensificaron. Las Juntas de Conciliación establecidas por la dinastía Meléndez Quiñones para regular las relaciones laborales no funcionaron, aunque cabe destacar que dichas instituciones fueron revividas por el gobierno de Martínez trayendo ciertos resultados positivos. En 1928, los periódicos dieron a conocer que debido a la gran carestía de granos básicos, los acaparadores se enriquecieron en base a la especulación. Fue en este contexto que Alberto Masferrer denunció públicamente que la carestía de cereales era debido a la concentración de la tierra y el monocultivismo del país.100 Ante estos problemas, Martínez inició una reforma agraria y creó oficinas de abastecimiento alimentario. Hasta aquí llega el desarrollo del marco teórico conceptual a partir del cual navegará la investigación, pero también es necesario dar cuenta de las distintas problematicidades a las que responde, principalmente, desde una perspectiva filosófica. En este sentido, a continuación pasamos a hacer una aproximación del mismo, a partir de cuatro autores que consideramos fundamentales por guardar cierta similitud o relación, en la manera de abordar determinadas problematicidades: Nietzsche por su crítica a la racionalidad, Ortega y Gasset por su plan de nación fundamentado en la pedagogía y su crítica al especialísimo positivista, Spengler por su crítica al eurocentrismo y sus posturas antimodernas y Vasconcelos por haber tenido contacto con la teosofía y por haber influenciado de forma directa a Masferrer. III- Critica a la modernidad: a) Desde la perspectiva de Friedrich Nietzsche: Algunas ideas de la teosofía guardan gran similitud con algunos puntos de la filosofía de Nietzsche, lo cual indica que son reflexiones que ya han preocupado a la filosofía en su sentido tradicional. En primer lugar, habría que decir que en Nietzsche ya hay una preocupación por haber llegado a una etapa de la historia 100 Ibídem, pág. 382. 37 donde la cultura se ha mal-logrado, es decir, ha llegado a un punto donde el moderno racionalismo ha comenzado a barbarizar a la misma civilización. 101 Desde esta óptica, Nietzsche construye una visión dionisíaca del mundo, en donde hay una preferencia por lo “creativo” que podría expresarse en el arte, la literatura, la música y en general en todas aquellas expresiones del espíritu mediante las cuales rechazará lo apolíneo, que es, en esencia, todo lo racional, o sea, hay en Nietzsche como en la teosofía, una postura irracional crítica. Nietzsche “repudia el concepto, lucha contra el racionalismo, se opone a la violación de la realidad por el pensamiento”.102 Esta postura “artístico-irracional” podría explicarse debido a que Nietzsche antes de su ruptura con Schopenhauer, se vio muy influenciado por el proceso de deslegitimación que éste había iniciado en contra de la razón científico-técnica, que había imperado en la filosofía a partir de Descartes y la ilustración. Schopenhauer, al igual que los teósofos bebió de las fuentes del pensamiento oriental, principalmente, de los Vedas, los Puranas y los Upanishads, últimos de los cuales expresó: “No hay en el mundo estudio tan enaltecedor y beneficioso como el de los Upanishads. Ha sido el solaz de mi vida y lo será de mi muerte”.103 Además, Schopenhauer fue muy influenciado por la teoría de las ideas de Platón y el intuicionismo de Kant, que le ayudaron a moldear su concepción metafísica que precisamente era la del Uno ontológico, elementos todos que también encontramos en la teosofía que trataba de demostrar el fracaso del proyecto de la razón aplicada al Friedrich Nietzsche, Schopenhauer como educador, edición, traducción y notas, Jacobo Muñoz, Editorial Biblioteca Nueva, S. L., Madrid, 2009, pág. 14. 101 Eugen Fink, La filosofía de Nietzsche, 1966, pág. 1, Disponible en: www.olimon.org/uan/finknietzsche.pdf 102 Miscellaneous, El espíritu de los Upanishads, Antonio Roch Editor, Barcelona, España, año de publicación no definido, págs. 8 y 20. “La palabra sánscrita Upanishad significa lección esotérica, es decir, una explicación de índole puramente espiritual. En los Upanishads se resumen los conceptos que de Dios, el universo y el hombre sustentan todas las religiones y filosofías de la India, que a pesar de la diversidad de sectas y escuelas coinciden en los puntos fundamentales de sus enseñanzas”. 103 38 cual intentó sustituir por medio de la expresión estética, lo inconsciente y lo literario.104 Otro aspecto muy insistente en la teosofía y que también encontramos en Nietzsche, es la crítica a esa perversión de la academia sobre hacer de la filosofía un mero negocio, incapaz de renovarse a sí misma. Evidentemente hay en ambas posturas una actitud de rechazo ante los convencionalismos rígidos del mundo académico.105 En este punto, Krishnamurti, más cercano a Nietzsche que a la teosofía, enfatiza que la función de la filosofía debe ser crear hombres “libres” y “fuertes” y no funcionarios de la filosofía, es decir, ambos perciben una perversión de la filosofía occidental en crear meros eruditos y sabios académicos. Esta es la misma crítica que encontramos en los discursos del Presidente Martínez, cuando éste establece que se ha despojado a la filosofía de su función vital, pero más en el fondo, es una crítica a la razón moderna oficial, decorativa y ajena a la realidad misma. Esto es lo que ya Schopenhauer había vislumbrado como la tragedia de la cultura moderna106 y es por eso que Nietzsche da inició a lo que se conoce como el irracionalismo filosófico moderno.107 Otro aspecto que encontramos tanto en los planteamientos de Nietzsche como en los de Krishnamurti, es esa voluntad de liberación del hombre por sí mismo, esa conciencia que le dice que tiene que dejar de seguir “maestros” y opiniones ajenas y encontrar su propia verdad. Al no hacerlo, según el filósofo alemán, se vivía una existencia encadenada, falsa y sin sentido porque se había asesinado al genio. En estas posturas queda planteado el problema del “filósofo académico” como un Luis Ángel Barreto Acevedo, “Arthur Schopenhauer: voluntad, inconsciente, estética y literatura en la cultura occidental del siglo XX”, Revista de arte y humanidades UNICA, vol. 6, No. 12, eneroabril, 2005, Universidad Católica Cecilio Acosta, Venezuela, págs. 142, 143, 144 y 147. 104 Friedrich Nietzsche, Schopenhauer como educador, edición, traducción y notas, Jacobo Muñoz, Editorial Biblioteca Nueva, S. L., Madrid, 2009, págs. 16 y 17. 105 4 Ibídem, pág. 22 y 23. Miguel Ángel Rossi, “La filosofía política frente al primado del sujeto y la pura fragmentación, “Red de bibliotecas virtuales de ciencias sociales de América Latina y el Caribe de la red CLACSO, Consejo Nacional de Estudios Sociales de Buenos Aires, Argentina”, 2003, disponible en: http://bibliotecavirtual.clacso.org.ar/ar/libros/teoría3/rossi.pdf., pág. 307. 107 39 seudopensador,108 pero además, Nietzsche concuerda con la teosofía en oponerse a la cultura de Occidente que constantemente está sistematizando el pensamiento. El mismo Nietzsche, se declaraba antisistema y es por eso que algunas de sus más importantes producciones no se presentaron en forma de ensayo. 109 Con esto no queremos decir que la obra nietzscheana no guarda una coherencia interna entre sí, sino que simplemente y de forma intencional, en algunas ocasiones, no la formuló a través de un lenguaje lógico-discursivo y es por eso, que representa una crítica a la racionalidad, porque no pretendía engarzar argumentos que desembocaran en conclusiones firmes sino que son conceptos vertidos en metáforas abiertas que dan siempre pie a interpretaciones diferentes, quizás, por esto, es que Nietzsche ha sido uno de los filósofos más mal interpretados y tergiversados en la historia de la filosofía, es decir, apela a la intuición de su lector, y por lo mismo, no podemos apegarnos al sentido literal de sus palabras, porque el alemán se valió de un lenguaje lleno de aforismos, parábolas, imágenes, símbolos, máximas e ironías. Tenemos que decir que a nuestro criterio, en lo que se distancia radicalmente, el vitalismo de Nietzsche de la teosofía, es en el neoplatonismo, porque para Nietzsche, Platón, fue el gran corruptor de la humanidad al maquinar un mundo supra-terrenal; la teosofía, en cambio, usa el neoplatonismo a la inversa, es decir, como crítica a las posturas materialistas de su tiempo, en este sentido, son contrarias, acercándose, quizás, más con el vitalismo de Krishnamurti quien piensa que creer o no creer en Dios no tiene la menor importancia porque es algo que no tiene nada que ver con la vida, es decir, en ambos hay una preocupación por el aquí y el ahora vital.110 Dentro de la literatura teosófica, también aparece mucho la figura del “Superhombre”. En este sentido, hay que aclarar que sus significaciones con respecto a la filosofía de Nietzsche son completamente distintas y nos atreveríamos Friedrich Nietzsche, Schopenhauer como educador, edición, traducción y notas, Jacobo Muñoz, Editorial Biblioteca Nueva, S. L., Madrid, 2009, pág. 26. 108 Friedrich Nietzsche, Así hablaba Zaratustra, Editorial Jurídica Salvadoreña, 2ª Edición, colección pensamiento, 2008, pág. 4. 109 Domingo López Morales, “Krishnamurti”, Reconstrucción Social, domingo 16 de junio de 1935, No. 73, pág. 4, año III. 110 40 a decir hasta opuestas ¿Por qué? Porque cuando Nietzsche dice en su obra Así habló Zaratustra: “Dios ha muerto, viva el Superhombre”, está tratando de destruir toda la metafísica anterior a él, principalmente, la cristiana que está fundamentada en Platón. Nietzsche como maestro de la sospecha trata de destruir el dominio del dogma idealista.111 El “Superhombre” de la teosofía, por el contrario alude a que todos los hombres llevamos en nuestra esencia una parte de Dios, porque provenimos y nos originamos de Él, pero esto no es nada más que una extensión de las doctrinas de Platón, que fueron sistematizadas por Plotino y que también comparte el cristianismo, aunque no en un sentido panteísta y es por eso, que la teosofía toma a Jesucristo como el Superhombre por excelencia, ya que en su existencia terrenal, fue hombre-dios y se volvió a unir con el Uno (padre). Entonces dicho concepto, en ambas doctrinas siguen direcciones contrarias. La similitud que podemos encontrar entre el “Superhombre” de Nietzsche y el de la teosofía, desde nuestra perspectiva, es en la imagen de un “redentor” que la teosofía fundamentalista y mística visualizó en Krishnamurti como un gran maestro de la moral al que había que seguir. El caso de Zaratustra, es el mismo de Krishnamurti: “todos necesitamos de maestros y guías, en todos nosotros habita el alma de esclavo”. Las respuestas de Krishnamurti y Zaratustra, fueron idénticas: revelarse contra la autoridad de los maestros: Ahora os ordeno que me perdáis (Zaratustra) y que os encontréis a vosotros.112 Aquí ambos autores invitan al descubrimiento del verdadero “yo”. En realidad, está de trasfondo el problema de la libertad humana que consiste en nuestra capacidad de elegir, es encontrar nuestro propio camino en función de la verdad, es vivir una vida autentica en nosotros mismos para después poder reconocer al otro.113 Friedrich Nietzsche, Así hablaba Zaratustra, prólogo de Dolores Castrillo Mirat, Editorial Edaf, S.L., Edición 31, Madrid, 2008, pág. 8. 111 112 Ibídem, pág. 11. Diego Llontop Céspedes, “José Antonio Russo Delgado”, Revista de filosofía en el Perú Pensamiento e ideas, año I, No. I, abril-2012, págs. 70, 71. 113 41 Finalmente, queremos abordar el tema de la “transvaloración de los valores” porque es algo a lo que Masferrer alude expresamente. Masferrer realiza una interpretación propia de esta teoría y la adapta a su vitalismo, debemos decir de manera deformada ¿Por qué? Porque cuando Masferrer dice que hay que superar al hombre se está refiriendo al explotador, al egoísta y al especulador, es decir, quiere que este hombre se humanice, y que todos esos valores negativos que lo caracterizan sean transmutados por valores positivos como: cooperativismo, fraternidad, justicia, solidaridad, etc. En cambio, Nietzsche se refiere a que hay que transmutar los valores de rebaño, principalmente, del cristianismo (débil) a los de un hombre aristocrático (fuerte). Desde nuestro punto de vista, que tampoco es en el sentido original que lo planteó Nietzsche, la teosofía, efectivamente, intenta una “transvaloración” de los valores, pero desde otra dimensión, trata de transformar los valores materialistas, cientificistas, mercantilistas y racionalistas por valores espiritualistas, místicos, altruistas y artísticos, es decir, presiente que ha habido una crisis en los valores imperantes y se dispone a cambiarlos. Desde esta óptica, Masferrer sí tenía razón, porque él quiso transmutar los valores, tanto en el sentido social como en el espiritual, aunque claramente se aleja de la concepción nietzscheana en sentido estricto. b) Desde la perspectiva de José Ortega y Gasset: Un problema fundamental en la filosofía de la historia, según Ortega, es saber cuál el papel que deben jugar los intelectuales para la correcta vertebración del Estado-Nación. Para comenzar a responder esta interrogante, el español, parte de una premisa básica que podría ser incomoda e inaceptable para los ortodoxos del marxismo y aun de la democracia y que algunos, podrían tildar, incluso, de fascista: “no todos somos iguales”. Para Ortega, es un problema grave que haya imperado “el falso supuesto de la igualdad entre los hombres”. Para él, la jerarquización debe ser el estado natural de la sociabilización.114 Ignacio Sánchez Cámara, La teoría de la minoría selecta en el pensamiento de Ortega y Gasset, Editorial Tecnos, S.A., Madrid, 1986, págs. 11 y 37. 114 42 Ortega y Gasset no está hablando de la dominación de una clase hegemónica sobre otra débil, en base a la lucha de clases, ya que el hombre masa podía pertenecer a cualquier clase social, ni de una desigualdad física, jurídica o política, sino que intelectual y moral. Esta relación, no es de opresión sino por el contrario, de liberación. Las masas se deben dejar influenciar dócilmente por los mejores y la minoría selecta tiene la obligación de educar a las masas: “masa y minoría son más bien funciones sociales” como muy bien lo señaló Julián Marías: “Las minorías son grupos especialmente calificados”.115 Ahora bien, la conexión que nosotros hacemos entre la teoría orteguiana y la presidencia de Martínez, es que el grupo de intelectuales que se unificó bajo el nombre de Masferrer constituyó una autentica minoría calificada que se impuso exigencias y aspiraciones comunes, es decir, pusieron sus vidas y sus cualidades al servicio de un fin noble y trascendente, el cual era devolverle al pueblo su identidad y culturizarlo. Eran hombres y mujeres que respetaban la normatividad social. 116 Quizás de forma particular, se guiaron implícitamente por la idea de Rousseau sobre rescatar al “buen salvaje” (indio) e incorporarlo al proceso civilizatorio, es decir, integrarlo al mundo de la norma cultural que trascendía lo meramente natural, pero en lo que se alejan de la teoría rousseauniana, en nuestra opinión, es que tampoco buscaron despojarlo totalmente de su naturaleza salvaje, por el contrario, estimularon su imaginario, lo que prueba que trataron de armonizar el mundo occidental y la cultura aborigen a la cual idealizaron bajo el manto de la raza que proveía a la Nación de una genuina personalidad, o sea, trataron de crear un equilibrio que suprimía la tensión entre civilización y barbarie. Desde esta visión, entendemos al hombre-masa como el hombre inculto, aquel que Masferrer quería alfabetizar, desalcoholizar y regenerar, aquel que era incapaz de sacarse a sí mismo de su estado de postración, aquel hombre que ya no se estimaba a sí mismo, aquel hombre que carecía de un proyecto definido y que vivía a la deriva y en la inercia del ambiente.117 Hacemos tal aseveración bajo el 115 Ibídem, págs. 38 y 49. 116 Ibídem, págs. 50 y 51. 117 Ibídem, pág. 61. 43 concepto que el mismo Ortega tenía del hombre-masa “como el conjunto de personas no especialmente cualificadas”.118 Esto es muy importante, ya que es algo a lo que Masferrer y Salarrué se referían constantemente en sus discursos, debido a que creían que la Nación no tenía un proyecto de vida. El peligro de no realizar tal misión de dirección como se podrá observar en algunos discursos del Grupo Masferrer era el advenimiento de las masas incultas y violentas, es decir, el dominio de las masas sobre el hombre selecto. La solución que propuso Ortega y Gasset también fue propuesta por el Grupo Masferrer, la cual era la de llevar a cabo una pedagogía social como programa político. Parafraseando a Ortega con su España, El Salvador, no existía como Nación, había que construir a la Nación,119 ese era el gran problema y había que trabajar por resolver el problema, los intelectuales tenían que ser activos, era llegar a adquirir un sentido como “patria” pero no como algo pasado sino como algo que todavía no existía, algo que tenía que ser construido por todos: minoría y masa. Era moldear al hombre-masa mediante una serie de virtudes que habían faltado: lo que no se era, pero que había que llegar a ser.120 Luis Alonso Aparicio piensa que Masferrer desde sus inicios intelectuales en 1893 era un pedagogo-político al estilo de Ortega y Gasset, ya que ambos buscaron un cambio en la constitución de la Nación para llevarla a un progreso similar al de países más avanzados.121 Al analizar a Masferrer desde la perspectiva de Ortega, su misión fue la de orientar al pueblo para configurar una polis más digna y culta, similar al concepto aristotélico de “convivencia del hombre con sus congéneres en un tipo de asociación concreta…” Aparicio compara a Masferrer con Ortega y José Ortega y Gasset, La rebelión de las masas, colección pensamiento, Editorial jurídica salvadoreña, 2ª edición, 2007, pág. 47. 118 José Ortega y Gasset, Vieja y nueva política y otros escritos programáticos, Edición de Pedro Cerezo Galán, Editorial Biblioteca Nueva, S.L., Madrid, 2007, pág. 235. 119 120 Ibídem, pág. 237. Luis Alonso Aparicio, Alberto Masferrer, pedagogo-político, 1ª Ed. Universidad Pedagógica de El Salvador, 2007, pág. 7. 121 44 Gasset cuando dice: “Masferrer luchó por una gran reforma, equivalente casi a la inauguración de un pueblo”.122 El Grupo Masferrer como se verá en el capítulo III manifestó que tomaron la idea de implementar esta pedagogía colectiva de los griegos, pero, ¿quiénes eran para los griegos los pedagogos de su época? Eran las personas que conducían a los niños a sus centros de aprendizaje, desde esta perspectiva, Ortega y Gasset quiso ser el guía que condujera a España a la modernidad, de ese mismo modo, Masferrer combatió los resabios coloniales y los moldes conservadores, pero en lo que ambos autores criticaron a la modernidad, fue en el excesivo cientificismo en el que derivó, o sea, en el predominio del modelo positivista que había barbarizado a la cultura occidental a través de la especialización. Ortega y Gasset en La rebelión de las masas estableció que la técnica moderna europea, fue la única en el mundo en tener sus raíces en la ciencia, lo que le habría abierto la posibilidad a crear un progreso ilimitado a través de la mecanización. Esto conllevó, según él, a que en el siglo XIX se creara la imagen de que el hombre de ciencia: ingenieros, médicos, químicos, etc., se consideraran a sí mismos y por los demás, como la cima de la humanidad, la cuestión fue que para hacer avanzar cada vez más a la ciencia había que crear hombres cada vez más especializados, a los cuales llamó “barbaros modernos” o “sabios ignorantes”, es decir, especialistas que navegaron cada vez más en campos más estrechos de conocimiento, que por consecuencia, desconocían las causas de todo lo demás.123 Masferrer, de forma similar, también hizo una fuerte crítica a la ciencia oficial en Estudios y figuraciones sobre la vida de Jesús, al expresar que ésta era muy sabía en algunas cosas, pero muy ignorante en muchas otras. Pensaba que la razón había dado pasos hacia atrás debido a la excesiva “especialización”124 que la había 122 Ibídem, págs. 8, 11 y 14. José Ortega y Gasset, La rebelión de las masas, colección pensamiento, editorial jurídica salvadoreña, 2ª edición, 2007, págs. 122, 123, 124 y 125. 123 Daniel de la Vega, “Sabiduría Antigua”, El Día, lunes 26 de febrero de 1923, pág. 2, año I. En 1923 Masferrer dirigía el periódico El Día de El Salvador, por lo que no puede pasar inadvertida la publicación de otro artículo titulado: Sabiduría Antigua, del poeta, dramaturgo y novelista chileno Daniel de la Vega, quien fue muy influenciado por la teosofía. En el siguiente fragmentó sale a relucir la misma crítica hacia la especialización que Masferrer había planteado en su ensayo sobre Jesús: “La mayoría de individuos ilustrados no poseen una concepción armónica de la vida, sino 124 45 estupidizado. Citando al fabianista Bernard Shaw dijo: “el especialista perfecto es el perfecto idiota”.125 Masferrer en este tratado consideraba que no era “sabio” el que conocía muchos fenómenos particulares sino que el que conocía las causas generales que resolvían el mayor número de fenómenos. El saber desde esta nueva perspectiva, ya no era erudición sino comprensión.126 Por otro lado, Masferrer y Ortega como pedagogos-políticos señalaron los defectos de las sociedades de su tiempo y se dispusieron a aportar soluciones de cambio para transformar sus realidades respectivas. El vitalismo masferreriano, por ejemplo, surgió como un ideario que respondía a los problemas nacionales concretos, ya que el medio social era caótico y desorganizado. El filósofo no tenía el lujo de divagar en meras abstracciones conceptuales. Se trataba de corregir la política fiscal, proveer de salud al enfermo, crear una universidad del pueblo, forjar una biblioteca mínima, crear mejores leyes, etc. Era el problema de transformar la realidad circundante, de donde nace la famosa frase: “yo soy yo y mis circunstancias”. La mejor forma de lograr esto como lo dijo Ortega era mediante la educación.127 Por la educación, según Ortega se tenía que lograr que un individuo imperfecto se convirtiera en un hombre virtuoso. Era lograr que el hombre-masa se superara a sí mismo utilizando la pedagogía como método para modificar el carácter integral del hombre.128 El deber de la minoría salvadoreña, en base a estas ideas, era el de proveer los parámetros intelectuales, morales y estéticos a los que el pueblo se que de cada cosa poseen un conocimiento asilado de los demás. Todos estos conocimientos chocan entre sí, en una forma lamentable. Son piezas sueltas de una máquina aún no armada. Cuando se arma esta máquina, cuando cada pieza está relacionada con todas las demás, cuando todas las partes juntas forman una maravillosa individualidad, entonces nace el pensador y echa a andar hacia el misterio (…) Como todo es lo uno y lo mismo, no nos hemos separado un punto”. Alberto Masferrer, Estudios sobre la vida y la doctrina de Jesús, (ciencia y sabiduría, III), El Día, viernes 20 de julio de 1923, No. 173, pág. 1, año I. 125 126 Ídem. José Ortega y Gasset, Vieja y nueva política y otros escritos programáticos, Edición de Pedro Cerezo Galán, Editorial Biblioteca Nueva, S.L., Madrid, 2007, pág. 239. 127 128 Ibídem, pág. 241 46 tenía que adherir, es decir, anticiparse a lo que el hombre de su tiempo debía ser y después buscar los medios para que el hombre llegara a ser.129 Todo esto que Ortega plantea podría resumirse en el artículo que apareció publicado en La Prensa de El Salvador en diciembre de 1933, titulado “El pueblo no puede gobernarse a sí mismo, necesita de directores”, del filósofo ruso exmarxista Nicolás Berdiaeff, en el que sostenía que tanto el fascismo italiano como el comunismo soviético atestiguaban la crisis y el fracaso de los viejos gobiernos que habían colocado al mundo en una nueva edad media. En este artículo, el ruso hizo alusión a lo que el mismo Ortega y Gasset había proclamado en su teoría de la minoría selecta: “que la jerarquía natural de la vida debía tomar de nuevo sus derechos”. Aunque el pensamiento del ruso va enfocado más que todo al aspecto político, la idea es la misma: la estructura del poder o de la sociedad siempre es jerárquica. Él sostenía que ni aún en las repúblicas democráticas, la mayoría es quien gobierna sino una minoría de jefes de partidos políticos (de izquierda o de derecha), de banqueros, de periodistas, de intelectuales, etc. El problema central que había que solucionar en ese momento, tanto en el mundo como en El Salvador, era, encontrar una solución al círculo sangriento de las revoluciones y de las respectivas reacciones que daban oportunidad a construir un “nuevo orden” o “proyecto social”. Se trataba de construir un nuevo futuro, quizás, como él mismo lo dice al final, buscando en vertientes más espiritualistas en las que los intelectuales debían jugar su papel. 130 c) Desde la perspectiva de Oswald Spengler: A mediados de 1920, en diferentes culturas de mundo occidental empezó a emerger un nuevo discurso en ciertos círculos intelectuales a consecuencia de una crisis en los valores occidentales a partir de la Primera Guerra Mundial, lo cual significó una desestabilización en el modelo cultural hegemónico de Occidente y es en este contexto, que La decadencia de Occidente de Oswald Spengler tuvo su impacto. 129 Ibídem, pág. 242. Nicolás Berdiaeff, “El pueblo no puede gobernarse a sí mismo, necesita de directores”, La Prensa, sábado 30 de diciembre de 1933, No. 6,930, pág. 7, año XXI. 130 47 El discurso latinoamericano se fue transformando, se empezó a impulsar un americanismo imbricado a un fuerte antiimperialismo, el cual estaba ligado comúnmente a corrientes espiritualistas y orientales, es a lo que Martín Bergel llama un caso de orientalismo invertido.131 El orientalismo fue un movimiento que desdeñó las luces de la civilización, pero que al mismo tiempo aportó nuevos recursos teóricos para replantear la modernidad desde un ángulo distinto al eurocéntrico. Éste hacía una crítica al logos occidental y a algunas de sus posturas racistas que percibían a las culturas india, china y africana como inferiores, por considerarlas irrelevantes, ingenuas o prelógicas, de lo que se deduce que existía la concepción de que todo lo que no era occidental era bárbaro o atrasado.132 Hacer una interpretación de un proyecto de Nación en un período determinado desde las ideas de Spengler, en nuestra opinión, es fundamental, ya que éste observa que todo imaginario cultural tiene un origen, una juventud y una decrepitud. En ese sentido, nos parece que en El Salvador, precisamente, durante las décadas de los veinte y los treinta, el imaginario positivista empezó a colapsar, a entrar en crisis para dar paso a otros imaginarios que empezaron a tomar fuerza, que sí bien es cierto no desechó completamente el modelo anterior, adoptó sus propias características que lo llevaron a un nuevo modo de interpretar la realidad en un sentido holístico. La decadencia de Occidente, según su autor, representa a dos continentes: Europa y América, en un intento por adivinar el ciclo vital de lo que desde hace mucho tiempo hemos dado en llamar “civilización moderna”,133 en este sentido, cuando la civilización cree haber llegado a un estadio “non plus ultra” de desarrollo mediante el avance de la técnica, empieza a sentirse un malestar, una inconformidad que hace girar la mirada hacia las culturas orientales que aparecen en el panorama como algo Martín Bergel, “Un caso de orientalismo invertido: la revista de Oriente (1925-1926) y los modos de relevo de la civilización occidental”, Revista Prismas, revista de historia intelectual, Universidad de Buenos Aires, No. 10, 2006, pág. 99. 131 132 Ibídem, pág. 100. Oswald Spengler, La decadencia de Occidente: bosquejo de una morfología de la historia universal, traducción Manuel G. Morente, (prólogo de José Ortega y Gasset), transcripción para formato web por David Carpio, pág. 1. 133 48 aparentemente ahistórico y amorfo, lo que revelaría el deseo de una buena parte del alma colectiva de oponer resistencia a ese progreso desenfrenado que había destruido el alma, la humanidad solidaria e incluso la posibilidad, por imaginaria que pareciera, de una trascendencia en el más allá. Todo sustituido por el logos utilitario llevado al extremo134 que desde esta nueva perspectiva espiritualista, sería lo transitorio, lo vano y lo corruptor. Ante esta racionalidad que arrasaba con todo a su paso, se empieza a recuperar lo más básico que surge casi que con el aparecimiento del hombre mismo: los mitos, que van desde la metafísica platónica de las “ideas” pasando por el complejo sistema idealista construido por Plotino hasta llegar a la teoría de la reencarnación que ha predominado en la mayoría de religiones orientales, elementos que posteriormente fueron recogidos por las doctrinas teosóficas. En el Salvador, un ejemplo concreto sería Salarrué quien empieza a construir un pensamiento mágico y místico que era incomprensible para su ambiente, que surge como una forma de protesta y substracción ante esa realidad materialista que se imponía aplastante. El objetivo era claro: luchar contra el mito del progreso, pero, ¿Cómo? Obviamente desde otros mitos que, principalmente, provenían de estas culturas orientales irreconocidas, pero que en algunas ocasiones, se asemejaban o confluían con los mitos occidentales. La teosofía, entonces, se presenta como un hibrido de logos alterno y una perspectiva de progreso más integral que abarca aspectos espirituales, materiales y culturales, sin abandonar de forma definitiva el aspecto científico, es decir, no rompe de forma absoluta con la idea de progreso, lo que la convertiría como ya lo hemos establecido, en una tendencia modernista reaccionaria. El modernismo reaccionario, al cual alude Herf, además de ser una postura irracional, también se caracterizó por el gran desarrollo tecnológico que intensificó la industrialización capitalista. Esta tendencia sería inspirada en Alemania por autores como: Hans Freyer, Ernst Jungüer, Carl Smith, Wemer Sombart y precisamente el filósofo que ahora nos ocupa, Oswald Spengler.135 En esta 134 Ibídem, pág. 14. Darío de Benedetti, Ludendorff, la teoría militar entre Kriegsideologie y el modernismo reaccionario, Revista Cuadernos de Marte, año I, 2010, pág. 147. 135 49 dirección, Eduardo Devés-Valdés opina que el pensamiento teosófico aún con todo su despliegue de humanitarismo y buenas intenciones se hizo sospechoso luego de la Segunda Guerra Mundial por su asociación con las ideas del nazismo. 136 Spengler de forma semejante a la teosofía, crítica que la historia universal se halla hecho girar en torno a Occidente como si éste fuera su centro, China, India y las grandes culturas americanas pre-hispánicas, según él, han sido sin más ni más ignoradas dentro de la gran tradición narrativa e incluso filosófica de Occidente, proceso al cual denomina sistema “tolemaico” de la historia. El gran descubrimiento “copernicano” que el alemán propone en su obra maestra es, entonces, des-encubrir y revalorizar el gran abanico de culturas de las que se ha nutrido Occidente tales como: la india, la babilónica, la china, la egipcia, de la antigüedad clásica y de las culturas árabe, judía y azteca sin que ninguna este por encima de la otra. 137 Al hacer una interpretación de la teoría de Spengler, podríamos establecer que en el proyecto de Nación que nos hemos propuesto analizar es innegable la participación y fusión de todas las culturas a las cuales alude el alemán en un intento por reconstruir una cultura propiamente americana y más específicamente salvadoreña, que sin complejos intentó emerger ante líneas duras de pensamiento propiamente occidentalistas como podrían ser el marxismo, el positivismo y el imperialismo expansionista yanqui. Para Spengler, lo que está en juego es el reconocimiento del otro, de otras culturas, de otros pueblos, de otras verdades y otras falsedades, de otras filosofías y de otros dioses. Es el problema de la prepotencia de Occidente de no querer reconocer que hay muchas artes, muchas cosmovisiones y muchas físicas, cada una profunda en su esencia y distinta a las demás. Para Spengler, es una cuestión de un mero tacto científico decidir cuál de los fenómenos históricos se toma con seriedad y cuál no. Quizás ya sea hora de estudiar con seriedad a la teosofía y sus múltiples consecuencias, aunque eso implique deshacernos de muchos de nuestros prejuicios Marta Casaús, El libro de la vida de Alberto Masferrer y otros escritos vitalistas, Edición crítica de la obra teosófico-vitalista (1927-1932), FyG editores, 1ª Edición, 2012, prólogo IX. 136 Oswald Spengler, La decadencia de Occidente: bosquejo de una morfología de la historia universal, traducción Manuel G. Morente, (prólogo de José Ortega y Gasset), transcripción para formato web por David Carpio, pág. 18. 137 50 occidentales, aceptando que es una doctrina que surgió, floreció y posiblemente hoy en día esté agonizando, pero que tuvo su valor histórico específico. d) Desde la perspectiva de José Vasconcelos: José Vasconcelos se preocupó mucho por el problema de la posibilidad de construir una filosofía propiamente latinoamericana. Desde nuestra perspectiva, esta idea dio frutos modestos en Masferrer, porque Masferrer aunque bastante relegado por la tradición marxista y aunque irreconocido en ciertos ambientes académicos por no haber sido un intelectual formado en una universidad, fue el primero en construir si bien es cierto no un sistema filosófico en el sentido formal del término, sí un cuerpo coherente de ideas digno de ser analizado académicamente tal y como lo han hecho Matilde Elena López y Marta Casaús. Uno de los aspectos que, quizás, más le llamaron la atención a nuestro autor con respecto al filósofo mexicano, fue el programa socio-político mediante el cual éste pretendía alcanzar la presidencia de su país. Tal afirmación la hacemos en el entendido de que dicho programa fue publicado en el periódico Patria bajo el subtítulo “Cómo busca el poder un hombre honrado”. El Mínimum Vital probablemente tomó algunos aspectos esenciales del plan de gobierno de Vasconcelos, ya que éste hacia énfasis en el trabajo, sobre todo en el aspecto de mejorar las condiciones materiales de los trabajadores rurales y de la ciudad a través de una legislación laboral integral, que evitara la competencia desleal y la destrucción de la unidad económica del país. Vasconcelos aspiraba a establecer una estructura social y jurídica que proveyera de una mejor organización al trabajo, despolitizando los sindicatos y creando centros de mediación y arbitraje para la resolución eficaz de los conflictos entre trabajadores y patronos, muy similar a lo que en El Salvador serían las Juntas de Conciliación durante la administración de Martínez.138 Masferrer también propuso crear en El Salvador oficinas proveedoras de trabajo, medida que se asemejaba mucho a lo propuesto por Vasconcelos en su programa político mediante la creación de bolsas de trabajo. La idea era crear una mejor 138 “El programa de Vasconcelos”, Patria, martes 3 de septiembre de 1929, No. 403, pág. 1, año II. 51 distribución de la fuerza productiva obrera. Otro punto muy importante, era la previsión social, es decir, Vasconcelos sugirió la creación de un Instituto Nacional del Seguro Social, que ayudara a cubrir los gastos de enfermedades y accidentes de los trabajadores.139 Probablemente a Masferrer también le interesó la propuesta de Vasconcelos sobre crear una mejor política de recaudación fiscal, cuando este último estableció en su proyecto, que de llegar a la presidencia, no crearía más impuestos que recayeran sobre los sectores más vulnerables de la sociedad, problema que según el filósofo mexicano, deterioraba aún más la ya frágil economía de ese país. Los tributos debían estar organizados de forma directa, en proporción a la renta neta de cada trabajador, con el objeto de que el que ganara más pagara más. 140 En el periódico Patria, también apareció un editorial que establecía que el propósito de publicar dicho programa, era el de dar a conocer una propuesta de como en El Salvador se necesitaba implementar una gran reforma estructural, que creara un “bienestar colectivo” con énfasis a tratar de evitar la revuelta social. En síntesis, lo que el vitalismo pretendía retomar del partido antireeleccionista de Vasconcelos, era poner en primer lugar las necesidades e intereses nacionales antes que en la política partidaria. Siguiendo el ejemplo de Vasconcelos en México, en El Salvador, se tenía que buscar un buen gobernante que llevara a cabo una serie de reformas integrales.141 Según Marta Casaús, Vasconcelos y Masferrer tenían en común que eran intelectuales comprometidos con sus realidades concretas y por la necesidad de construir, cada uno en sus respectivos países, una nacionalidad propia. 142 En este sentido, otro de los objetivos de retomar la obra vasconceliana es analizar principalmente la teoría de su ensayo La raza cósmica, que tuvo una clara inspiración mística o teosófica, ya que es una idea que encontramos en el volumen III de la 139 Ídem. 140 Ídem. 141 M. F. Ch. “La nueva política”, Patria, miércoles 4 de septiembre de 1929, No. 404, pág. 1, año II. Marta Casaús, “De la incógnita del indio al indio como sombra: el debate de la antropología guatemalteca en torno al indio y la Nación” Revista de Indias, Vol. XLV. No. 234, Universidad Autónoma de Madrid, 2005, pág. 379. 142 52 voluminosa obra de Madame Blavatsky La doctrina secreta, en la cual la rusa preconizaba el supuesto aparecimiento de una nueva raza a la cual Vasconcelos llamó: “la quinta raza o raza cósmica”.143 Pero ¿Quiénes conformaban la quinta raza para Vasconcelos? Es una hipótesis que proviene de un mito griego, según el cual existió un continente ahora perdido, conocido como la Atlántida. Los pueblos originarios de América como los aztecas y los incas, según esta teoría ocultista, serían descendientes directos de los atlantes. Según Vasconcelos, esta era la raza raíz de la cual se habían originado muchas otras razas posteriores, que habrían venido a cumplir con una misión específica en el planeta: la blanca, la negra, la roja y la amarilla.144 La quinta raza sería una raza hibrida y universal. En el ensayo que lo hizo famoso, el mexicano propone un integracionismo intercontinental a través de la fusión de todas las culturas y de todos los pueblos del mundo. El argumento también constituye una enérgica crítica al credo anglosajón de querer conservarse como una raza “pura”, más bien, Vasconcelos establece que la raza blanca debía abrir la puerta hacia el mestizaje. En esencia, plantea que se debía fundir étnica y espiritualmente a las gentes. Vasconcelos habló de la fusión de la sangre como un iberoamericanismo y también sostuvo que producto de este cruce entre todos los pueblos del mundo, habría un retorno hacia la atlántida como raza definitiva o “síntesis” de todas las demás. Aquí puede observarse como la concepción vasconceliana se aproxima mucho al principio de la fraternidad universal teosófico.145 Esta quinta raza, según el mexicano estaría mucho más capacitada que las anteriores al nutrirse de las experiencias y conocimientos de todas las sub-razas por las que estaría compuesta. El indio, entonces, era un puente del mestizaje. Vasconcelos ve como injustificables todos los tipos de racismo, pero especialmente el que se ejerce en contra del negro.146 Es preciso señalar que Jinarajadasa en sus 143 José Vasconcelos, La raza cósmica, Agencia Mundial de Librería, Barcelona, 1926, prologo I. 144 Ibídem, págs. 1, 4 y 40. 145 Ibídem, págs. 5, 6, 13, 15, 16 y 17. 146 Ibídem, págs. 24, 25 y 32. 53 conferencias por América Latina, también hizo mención de esta teoría, aunque con ciertas variaciones. En el cuerpo de la tesis, veremos cómo el término “ario” jugó un papel muy importante en todo este imaginario, debido a que fue retomado por el nazismo esotérico, lo cual explicaría porque los nazis creían provenir de una raza pura o aria y porque se suele vincular a la teosofía con el nazismo, así como porque a la presidencia de Martínez se le percibe con inspiraciones fascistas. Otro punto de proximidad entre Vasconcelos y el proyecto de Nación a estudiar, es la crítica que el mexicano hizo al positivismo entendiéndolo como el método mediante el cual todo el conocimiento debía estar fundamentado en la experiencia y en la validación rigurosa de la prueba. Para Vasconcelos, el positivismo trató de implementar una educación y una organización social basada en las matemáticas y la física social147 (sociología) relegando de esta forma a la filosofía por considerarla de nula importancia práctica. Lo cultural en todo caso, tenía que ser sustituido por la probeta de laboratorio.148 Es importante destacar que Vasconcelos en la primera fase de su pensamiento fue positivista, reconoce que el mérito de este sistema, fue liberar a la humanidad de la escolástica, pero posteriormente abogó por un sistema integracionista de la educación que abarcaba tanto las ciencias fácticas como las humanísticas en un proyecto muy similar al que proponía la teosofía y que podríamos denominar “científico-humanista”. Lo que el nuevo filósofo debía adoptar de la ciencia era su apego a la realidad.149 El enfoque educativo propuesto por Vasconcelos, fue seguido Augusto Comte, La física social, Aguilar s. a. de ediciones, 1ª edición, Madrid, España, 1981, págs. 12, 13, 16, 17, 18 y 29. Augusto Comte establece que las nociones de orden y progreso son fundamentales e indivisibles en el esquema de la física social y es por eso que el filósofo francés está en contra de todo tipo de doctrina anarquista. Todas las sociedades europeas pero especialmente la francesa debían estar organizadas a la luz de estas ideas. Comte concebía a la sociedad como un organismo social vivo el cual tenía que ser dirigido por una filosofía práctica. El objetivo era que lo social estuviera contralado por un poder político regulador que fuera más allá del poder religioso, que era precisamente el que causaba su atraso por ser irracional. Se necesitaba de una reorganización intelectual de la sociedad para causar una armonía real y duradera, que tampoco podía ser brindada por la escuela metafísica que era una continuación del estado de infancia intelectual sino que sólo por la escuela positiva a través de la sociología. 147 Alberto Saladino García, Humanismo mexicano del siglo XX, tomo I, 1ª Ed. 2004, Universidad Autónoma de México, págs. 137 y 138. 148 149 Ídem. 54 por Gabriela Mistral con quién sostuvo comunicación privada mediante una serie de cartas,150 logrando establecer un fuerte vínculo por la afinidad de ambos a la teosofía.151 También trabajaron juntos en la misión de transformar la pedagogía de sus respectivos países mediante el establecimiento de bibliotecas y la intensificación de la lectura.152 La influencia de la teosofía en Vasconcelos no fue algo aislado, por el contrario retomó las concepciones morales, dogmáticas y estéticas de la India en muchas de sus obras como: Estudios indostánicos (1920), Indología (1927) y Pitágoras, una teoría del ritmo (1916), las cuales fueron combinadas desde un ángulo político con un fuerte anticomunismo y una tardía admiración por al nazismo,153 aunque su obra cumbre como ya hemos podido observar, es considerada aún en la actualidad, como una de las más fuertes críticas dirigidas hacia el racismo anglosajón y europeo, que pretendía someter a América Latina. Vasconcelos, imitando a los teósofos, y en contraposición a las reformas positivistas que se estaban implementando en México, decidió buscar nuevas formas de entender los problemas sociales a partir de las fuentes eternas del mundo griego, específicamente, de autores como Plotino, Porfirio y Jámblico.154 Grecia se convirtió en el nuevo modelo a seguir debido a que la cultura clásica fue desdeñada por la generación intelectual positivista y se sintió identificado con el pacifismo hindú sobre todo el de Gandhi y Tagore. También participó en sesiones espiritistas y experimentos ocultistas desarrollados por la institución teosófica mexicana. Sus Álvaro Valenzuela Fuenzalida, “Gabriela Mistral y la reforma educacional de José Vasconcelos”, revista Reencuentro, septiembre, No. 34, Universidad Autónoma Metropolitana, Xochimilco, México, 2002, pág. 14 150 151 Ibídem, pág. 15 152 Ibídem, pág. 18. Héctor Orestes Aguilar, “Ese olvidado nazi mexicano de nombre José Vasconcelos”, Revista Coincidencia y divergencias, págs. 149 Disponible en: HO Aguilar - 2007 - istor.cide.edu. En 1940 José Vasconcelos dirigió la publicación de una revista titulada Timón en donde escribían un grupo de intelectuales que admiraban a Hitler. La revista fue un medio de propaganda favorable al III Reich en América Latina. Vasconcelos también prologó el libro Derrota mundial de Salvador Borrego aparecido en 1953, el cual es de carácter pronazi. 153 Hernán G. H. Taboada, Oriente y mundo clásico en José Vasconcelos, Anuario de filosofía argentina y americana No. 24, 2007, pág. 104. 154 55 influencias indostánicas fueron: Max Müller y Oldenberg y directamente teosóficas Madame Blatvasky y Annie Besant.155 Todo esto le sirvió para construir una filosofía anti-occidentalista. Es muy importante destacar que la teoría del mestizaje construida por Vasconcelos, aunque tiene mucha relación, no se originó en estudios propiamente americanistas sino que en indostánicos. Sus estudios sobre Oriente, respondieron al cansancio del pensamiento europeo y la necesidad de renovación, al igual que los teósofos se interesó mucho por los mitos y el simbolismo. Vasconcelos también navegó mucho en el misticismo indígena americano sobre todo del mundo maya. En esta misma dirección y de forma similar, Masferrer entremezcló teosofía con reivindicaciones americanistas a las que también iba aparejada una nueva visión estética de base indigenista, que en Vasconcelos, finalmente, desembocó en un hispanismo o un hispanoamericanismo.156 Masferrer en su obra La misión de América sostenía que una de las principales preocupaciones en ese momento, era el de la defensa de la raza. Dos de sus principales abanderados según él eran, precisamente, José Vasconcelos y Gabriela Mistral. Por otro lado, consideraba que en Centroamérica la revista Repertorio Americano de García Monge157 era la principal propulsora del tema. Para Masferrer, lo que todos estos autores tenían en común, era que creían que defender a la raza era oponerse a los Estados Unidos con lo cual él no se mostraba totalmente de acuerdo ya que consideraba que, aunque con mucha resistencia, ese país había hecho una integración de múltiples razas.158 155 Ibídem, págs., 105, 106 y 107. 156 Ibídem, pág. 111, 112, 113 y 116. Joaquín García Monge: nació en San José, Costa Rica, el 20 de enero de 1881y murió en el mismo lugar, el 31 de octubre de 1958. Escritor y pedagogo, en 1919 comenzó a publicar su revista Repertorio Americano la cual circuló durante cuarenta años, dirigió la Biblioteca Nacional durante 16 años hasta que fue destituido por el gobierno de León Cortés Castro. En 1929 formó junto a Carmen Lira, el Partido Alianza de Obreros, Campesinos e Intelectuales, que se disolvió en 1931 para darle paso al Partido Comunista Costarricense. 157 Alberto Masferrer, La misión de América, páginas escogidas, Colección Trigueros de León, Vol. 12, 1ª Ed., CONCULTURA, 2012, pág. 84. 158 56 Para Masferrer, la palabra “raza” no tenía un sentido real, por lo que había que sustituirla por la de “cultura”, según Masferrer había que crear una cultura propia, original y elevada y no seguir copiando costumbres de otros países, que a nuestro criterio fue el principal objetivo que se impuso el Grupo Masferrer a inicios de la presidencia de Martínez, es decir, se debía conservar el pasado porque Masferrer creía que lo que realmente existía era un indohispanismo, lo cual quería decir que en la población americana predominada el elemento indígena, aunque aceptaba que en ciertos países de Suramérica ya estaba predominado el elemento hispano.159 Para Masferrer, mediante el concepto de raza no se podían resolver los problemas concretos de cada uno de los países latinoamericanos. Para proveer de unidad a la Nación había que construir una cultura propia. Masferrer consideraba que la mejor forma de lograr esto, era dejar de embrutecer y oprimir al indio. La raza tendría que forjarse a través de la cultura y por supuesto, debía de tener directores. A pesar de que Masferrer propuso sustituir el concepto de raza por el de cultura no abandonó la idea vasconceliana de la “raza cósmica”, la cual según él, era una mezcla entre blancos, negros, indios y asiáticos en una sola raza que habría de tener una conciencia continental. Edificar esta raza, era la misión de América. 160 En el siguiente apartado, se enumeran algunos de los trabajos más importantes que han antecedido a la presente investigación, desarrollando una pequeña síntesis de cada uno de ellos, para finalmente establecer lo que a nuestro juicio serían algunos puntos pendientes o que podrían seguirse enriqueciendo, es decir, lo que constituye el estado de la cuestión. IV- Estado de la cuestión, justificación, objetivos e hipótesis de la investigación: Desde el punto de vista filosófico no existen trabajos que aborden la temática de la implementación de la doctrina vitalista teosófica durante la presidencia de Hernández Martínez. Los estudios que hasta el momento existen y que más se aproximan a nuestra propuesta de investigación son: 159 Ibídem, págs. 86, 87 y 89. 160 Ibídem, págs. 90, 91, 92, 93, 97, 102 y 103. 57 Marta Casaús en su obra Redes intelectuales centroamericanas: un siglo de imaginarios nacionales (1820-1920), establece que durante los inicios del siglo XX existió la emergencia de un nuevo grupo social irreconocido, el de los “intelectuales”. Según la autora, estos intelectuales íntimamente relacionados entre sí empezaron a proponer un nuevo discurso estructurado encaminado a la construcción de una nueva identidad nacional, que iría modificando la forma de concebir a la Nación en un sentido étnico-cultural. Aunque esta propuesta es muy similar a la planteada en este proyecto de investigación, se ubica espacio-temporalmente en la década de los veinte.161 Es importante resaltar que cuando Marta Casaús habla de “intelectuales”, el término queda un poco ambiguo. Desde nuestra perspectiva, lo que trata de decir es que los intelectuales adheridos al proyecto positivista desplazaron a los intelectuales de vocación estética y humanista, principalmente, poetas y es por eso que Octavio Paz afirma: “Desde su origen la poesía moderna ha sido una reacción frente, hacia y contra la modernidad: la ilustración, la razón crítica, el liberalismo, el positivismo y el marxismo”.162 Es más, el premio Nobel de literatura establece que los poetas en disputa abierta contra el racionalismo moderno recurrieron a las sociedades y corrientes herméticas y ocultistas que tuvieron una gran relevancia desde el siglo XVI hasta el XX y como muy bien lo apunta Casaús, tuvieron su apogeo a finales del XIX y principios del XX. Es por esta razón, que Octavio Paz sostiene que la literatura en este periodo pasó del romanticismo al vanguardismo de las revoluciones modernizantes.163 De hecho, Winston Morales Chavarro en su tesis Poéticas del ocultismo en las escrituras de José Antonio Ramos Sucre, Carlos Obregón, César Dávila Andrade y Jaime Sáenz, explica como en la obra de estos cuatro poetas andinos estuvo presente la metempsicosis, el ocultismo, la alquimia, el esoterismo, el rosacrucismo, el hermetismo, la filosofía indostánica y la búsqueda por lo inmaterial y lo intuitivo. Marta Casaús, “Redes Intelectuales Centroamericanas: un siglo de imaginarios nacionales (18201920)” (contraportada). Disponible en: www.fygeditores.com/fgredes.htm 161 Octavio Paz, Los hijos del Limo, (Del romanticismo a la vanguardia), Editorial Seix Barral, 3ª Ed., México, 1981, págs. 10 y 11. 162 163 Ídem. 58 Para él, esto fue el resultado de que en la poesía está inherente todo el saber filosófico, ya que mediante ella se puede hacer una aproximación a lo absoluto y a lo verdadero, pero además es una expresión artística y una forma de razonamiento que se escapa a la forma tradicional de hacer conocimiento científico lógico-conceptual mediante la construcción de una realidad imaginativa.164 Según José Luis Abellán algo similar sucedió en España a través de Benito Pérez Galdós, quien realizó algunas obras de tipo espiritualista, Juan Valera y por su puesto José Ramón del Valle-Inclán a través de su credo estético La lámpara maravillosa (1916).165 Además, en el campo propiamente de la filosofía establece que cuando Bonilla y San Martín publicaron su Plan para un estudio de la filosofía española (1904), incluyeron un capítulo donde trataban exclusivamente el tema de la teosofía y su expansión en España. Asimismo, lo hizo Mario Méndez Bejarano en su Historia de la filosofía española (1926), quien incluyó dos capítulos que trataban uno específicamente sobre el espiritismo y otro sobre la teosofía.166 Marta Casaús en su ensayo El teosofismo vitalista en América Central proporciona elementos teóricos, sin duda, de gran profundidad para entender la doctrina híbrida que nos ocupa. La ensayista describe como ésta alcanzó una dimensión regional a partir de las redes intelectuales utilizadas por Alberto Masferrer, pero sobre el gobierno de Maximiliano Hernández Martínez ha hecho un análisis muy somero y generalizado limitándose a decir que este impuso la teosofía a todo su gobierno y que desarrolló experimentos agrícolas basados en esta ideología. También asegura que Winston Morales Chavarro, Poéticas del ocultismo en las escrituras de José Antonio Ramos Sucre, Carlos Obregón, César Dávila Andrade y Jaime Sáenz, Tesis presentada en la Universidad Andina Simón Bolívar de Ecuador, para obtener el grado de Magister en Estudios de la Cultura, mención en Literatura Hispanoamericana, 2004, págs. 4, 5, 11, 12 y 117. 164 José Luis Abellán, “España-América Latina, (1900-1940): la consolidación de una solidaridad”, Universidad Complutense de España. pág. 3, Disponible en: JL Abellán - 2008 cervantesvirtual.com. 165 José Luis Abellán, Historia critica del pensamiento español, Tomo V/I, (La crisis contemporánea, 1875-1936), Editorial Espasa-Calpe, S.A., Madrid, España, 1988, págs. 422 y 423. 166 59 Martínez introdujo algunas nociones de budismo y teosofía en los programas de enseñanza.167 Con respecto a la relación entre Alberto Masferrer y Hernández Martínez, Casaús se limitará a decir que Masferrer fue uno de sus primeros aliados y luego su enemigo acérrimo a causa de la masacre campesina de 1932, por la que Martínez fue expulsado de la sociedad teosófica local,168 lo cual es inexacto si tomamos en cuenta que el mismo año de la masacre, específicamente, en el mes de septiembre Martínez impartió una conferencia en la logia Teotl titulada: “La evolución de la vida y de la forma”.169 Por otra parte, como se demostrará en el transcurso de esta tesis, Martínez lejos de trabar enemistad con los miembros de las logias teosóficas salvadoreñas, siempre estuvo muy vinculado a ellas. Marta Casaús en su trabajo La disputa por los espacios públicos en Centroamérica de las redes unionistas y teosóficas en la década de 1920: La figura de Alberto Masferrer , expone que efectivamente existió una red social de intelectuales que se inspiró en la figura de Masferrer, la cual generó un gran debate entre su generación y las generaciones hegemonías del positivismo y el marxismo, pero decanta su análisis una vez más hacia la década de los veinte y a observar cómo la teosofía alcanzó una dimensión internacional, cuya propuesta desembocaría en un unionismo regional. 170 En el libro El lenguaje de los “ismos”. Ensayo de historia conceptual en América Latina, siglos XIX y XX, Casaús hace un análisis enmarcado en el método de la historia de las ideas mediante el cual rastrea y redescubre aquellos conceptos que contienen el sufijo “ismo” y que suelen estar vinculados a imaginarios políticos, sociales, filosóficos y artísticos de toda sociedad occidental posterior al siglo XIX. Tales conceptos son: ateísmo, materialismo, vitalismo, modernismo, surrealismo, Marta Casaús “El vitalismo teosófico como discurso alternativo de las elites intelectuales centroamericanas en la década de 1920 y 1930. Principales difusores: Porfirio Barba Jacob, Carlos Wyld Ospina y Alberto Masferrer”, REHMLAC, Vol. 3, No. 1, mayo-noviembre, 2011, pág. 91. 167 168 Ídem. “Interesante sesión en la Logia Teotl”, La Prensa, viernes 23 de septiembre de 1932, No. 6,521, págs. 1 y 7, año XX. 169 Marta Casaús, “La disputa por los espacios públicos en Centroamérica de las redes unionistas y teosóficas en la década de 1920: La figura de Alberto Masferrer”, Revista Humanidades IV época, año 2003, No. 2, enero, febrero, marzo, págs. 57 y 58. 170 60 comunismo, imperialismo, positivismo y liberalismo; que como es muy lógico suponer hilvanan y entretejen la modernidad, aceptando que han sufrido y seguirán sufriendo variaciones y que no hay una manera univoca de entenderlos.171 Desde esta perspectiva, consideramos que esta obra más que agotar el presente trabajo constituye una fuente inagotable de consulta para enriquecerlo, ya que contiene en su mayoría conceptos que se ventilan en cada uno de los capítulos que a continuación de este apartado se desarrollaran. Finalmente, en su publicación más reciente El libro de la vida de Alberto Masferrer y otras escritos vitalistas, edición crítica de la obra teosófico-vitalista (1927-1932), la académica en colaboración de Regina Fuentes Oliva nos presenta, según sus mismas palabras, una reedición de la obra de Masferrer, la cual ha sido reorganizada a partir de una carta-testamento escrita por el mismo Masferrer en donde éste expresa su deseo de que se reestructure su disperso legado intelectual de una forma más apegada a su voluntad.172 Por otro lado, esta edición comentada transcribe algunas de las más importantes cartas privadas que Masferrer envió a sus familiares e intelectuales más cercanos, mismas, que también se analizan en este trabajo. Además, contiene muchos artículos que a juicio de las autoras son inéditos o poco conocidos, publicados en Patria de El Salvador y en otros periódicos, principalmente, de Guatemala. Prácticamente, Casaús y su colaboradora pasan a hacer comentarios de fuentes primarias que se encuentran en archivos públicos y privados de ambos países con el afán de que sean conocidos por el mundo académico y no académico, pero que en el fondo siguen siendo fuentes primarias sujetas a diversos análisis e interpretaciones. Desde la perspectiva de esta investigación, se han recogido y analizado las mismas fuentes a las que ha recurrido Marta Casaús sólo que no en función de organizarlas como lo quería Masferrer sino en función de que se observe claramente la adopción del proyecto de Nación masferreriano por parte del gobierno de Martínez; eso por un lado y por el otro, este trabajo no se ha reducido a plantear Marta Casaús, El lenguaje de los ismos: algunos conceptos de la modernidad en América Latina, F&G Editores, 1ª Edición, 2010, pág. 3. 171 Marta Casaús, El libro de la vida de Alberto Masferrer y otras escritos vitalistas, edición crítica de la obra teosófico-vitalista (1927-1932), F&G Editores, 1ª Edición, 2012, págs. 21, 22 y 23. 172 61 exclusivamente las posturas eidéticas de Masferrer sino que también entra en contacto con otros actores sociales que tuvieron alguna relevancia para él y para su obra, sin dejar de lado, por supuesto, el contexto histórico en el que vivió Masferrer y también el posterior a él, para hacer más inteligible y funcional su obra. En síntesis, en la extensa obra de Marta Casaús puede percibirse una omisión casi sistemática de la estrecha relación que existió entre la obra completa de Masferrer y la administración martinista, aunque cabe destacar que en una de las últimas entrevistas que concedió, habló de las relaciones entre Masferrer y el poder, dijo que sí el pensamiento de Masferrer hubiese calado en los gobiernos de su tiempo se hubiese podido evitar el Estado autoritario impuesto por Martínez y la matanza de 1932.173 El profesor Rafael Lara-Martínez, en su libro La política de la cultura del martinato y una serie de artículos dispersos ha venido ventilando el tema propuesto desde la perspectiva planteada aquí; se ha aproximado al tema de la aplicación del Mínimum Vital por parte del gobierno de Martínez sobre la base de una ausencia de estudios sobre fuentes primarias de la época. Establece además que ha faltado rigor historiográfico, al hacerse interpretaciones que tienden a alejarse de la realidad, en la medida que no contrastan con la prueba documental oficial y no oficial de la época, lo cual conlleva a que las percepciones del gobierno de Martínez que se tienen hasta la fecha estén cargadas de falsedades, errores e inexactitudes que obviamente han predominado en el imaginario nacional. El aporte que pretendemos realizar desde nuestra investigación radica en la revisión de algunas fuentes no tratadas o tratadas superficialmente por LaraMartínez, como los fondo: Maximiliano Hernández Martínez y Alberto Masferrer del Archivo General de la Nación de El Salvador (AGN), documentación privada de Salarrué encontrada en el Museo de la Palabra y la Imagen (MUPI) y el importantísimo periódico Patria desde el cual Masferrer dio a conocer su pensamiento. Además, este trabajo hace un extenso recorrido por el Diario Nuevo y periódicos privados como la Prensa que revelan muchos datos que quizá vendrán a enriquecer el análisis y discusión sobre la gestión de Martínez. Fuentes que 173 Entrevista a Marta Casaús. Disponible en: http://www.elfaro.net/es/201212/el_agora/10343/. 62 pretendemos poner en conversación con múltiples fuentes secundarias, sobre todo de libros y artículos académicos que abren nuevas vías de interpretación, lo que constituiría la metodología de investigación a implementar. Por lo demás, la literatura escrita sobre el régimen de Martínez es extensa, pero demasiado focalizada sobre hechos muy concretos como la masacre de 1932 o la insurrección de brazos caídos en 1944, que son expuestos desde una predominante visión política, encubriendo lo actuado por el gobierno de Martínez en sus sucesivos períodos presidenciales, pero queremos ser enfáticos en aclarar que esta investigación, contrario sensu, tampoco pretende ocultar tales hechos, que a todas luces son condenables, especialmente el de 1932, donde se ejecutaron a miles de personas, sin tomar en cuenta las más mínimas nociones de derechos humanos fundamentales, comenzando por el derecho a que toda persona tiene de ser oída y vencida en un juicio justo. Ahora, si bien es cierto no tocamos a profundidad los hechos del 32, es debido a que analizar tal evento no responde a ninguno de los objetivos e hipótesis planteados en nuestro anteproyecto de tesis, los cuales son los siguientes: Capítulo I: Explicar el concepto de Mínimum Vital desde la misma obra masferreriana haciendo una reflexión de cada uno de sus elementos, así como realizar un estudio de las distintas obras de carácter teosófico de Alberto Masferrer (objetivo), ya que creemos resultaría muy difícil poder comprobar de forma rigurosa la presencia de dichas doctrinas durante la presidencia de Martínez sí antes no se cuenta con un conocimiento previo de ambos conceptos en el pensamiento de Masferrer, es decir, no habría un punto de comparación entre ambos proyectos (hipótesis). Capítulo II: Realizar un breve análisis histórico del origen de la teosofía y de sus principales postulados doctrinarios para después desarrollar las ideas más importantes vertidas por Jinarajadasa en su primera gira latinoamericana, pero principalmente en El Salvador (objetivo), ya que creemos que a partir de este capítulo se podría comprobar que entre el plan de Nación de Masferrer y el de Martínez existe un estrecho vínculo en base a la teosofía y al mismo tiempo probar que el plan de Nación teosófico de Martínez no surgió de la nada sino que ya se venía perfilando desde antes de su llegada al poder (hipótesis). 63 Capítulo III: Analizar cómo dentro de la presidencia de Martínez se oficializó el pensamiento de Masferrer, para luego explicar cómo se desarrolló una política de la cultura en base a su ideario, haciendo un abordaje de los principales autores que le ayudaron a llevar a cabo dicho programa (Grupo Masferrer) y revisar cuáles fueron sus principales aportes en el campo indigenista, cultural, vitalista, unionista, feminista y de dirección social (objetivo), ya que creemos que un verdadero plan de Nación siempre debe contar con la conjunción de distintos sectores sociales que, precisamente se unifican para alcanzar ciertos ideales en común, tal y como ocurrió en la presidencia de Martínez (hipótesis). Capítulo IV: Demostrar que durante la presidencia de Martínez uno de los objetivos principales del Estado consistió en elaborar un discurso mínimum vitalista que, en la práctica, se llevó a cabo a través de la implementación de una serie de reformas estructurales destinadas a solventar los graves problemas sociales de la época tales como vivienda, reforma agraria, agua y trabajo (objetivo), ya que creemos que sí bien es cierto Martínez colaboró desde las páginas de Patria con el ideal del Mínimum Vital, cuando llegó al poder dicha doctrina le sirvió de base para crear su propio Estado de Bienestar (hipótesis). Capítulo V: Probar que aunque no haya sido su intención, autores teosóficos de la talla mundial como Krishnamurti y Jinarajadasa, inconscientemente, apoyaron la visión teosófica del Estado del Presidente Martínez y además colaboraron para que se diera una fuerte difusión de la teosofía no solamente en el país, sino a nivel de todo el continente americano (objetivo), ya que creemos que dichos autores llegaron a influir en importantes teósofos de la época como: Masferrer, Toruño, Salarrué, Gabriela Mistral, Sandino174 y el mismo Presidente Martínez, transformando de esta manera el paradigma social que se quería alcanzar en los distintos países de la región (hipótesis). Capítulo VI: Demostrar que en los distintos discursos teosóficos oficiales del Presidente Martínez hay un rechazo hacía los postulados epistemológicos y Augusto César Sandino: nació en 1895 y murió en 1934. Líder de la resistencia nicaragüense contra la ocupación norteamericana en Nicaragua. Logró que las fuerzas norteamericanas salieran del país y creó la Guardia Nacional, poniendo al frente de la misma al General Anastasio Somoza, quien a traición lo mandó a capturar y asesinar. Bajo su nombre su fundó el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN). Se le tiende a ligar con ideologías de izquierda por haber tenido nexos con Farabundo Martí, pero, en realidad, su ideología era el liberalismo y la teosofía. 174 64 sociológicos del positivismo, a partir de una nueva forma de sensibilidad espiritual que se opuso a los sistemas materialistas, la cual decantó en una especie de crítica hacia la modernidad caracterizada por su excesiva fe en la razón y en la ciencia (objetivo), por lo que los teósofos se propusieron implementar nuevos métodos de conocimiento como la intuición, que sustituía a la razón por la imaginación, a lo comprobable por lo inexplicable y a lo objetivo por lo subjetivo (hipótesis). Ahora bien, el objetivo general u objeto de estudio que se pretende alcanzar por medio de este trabajo es analizar como en el gobierno del Presidente Hernández Martínez se desarrolló un proyecto de nación vitalista-teosófico que contó con la colaboración del Estado y de redes intelectuales culturales interdisciplinarias, teosóficas y feministas, que buscaron la participación ciudadana para resolver los principales problemas socio-económicos y culturales del país tales como vivienda, alimentación, educación, trabajo e identidad nacional mediante la influencia del pensamiento filosófico y figura de Alberto Masferrer principalmente mediante la aplicación de la doctrina del Mínimum Vital y otras obras de Masferrer. Este trabajo viene justificado por el hecho de que la principal crítica que se le ha formulado hasta el momento al Mínimum Vital es que simplemente fue una doctrina idealista, utópica e ingenua que de ningún modo tuvo relevancia real como filosofía social, ya que incluso en trabajos académicos recientes se expresa que el vitalismo nunca ha tenido una realización práctica y que por lo tanto es algo pendiente por cumplir. La presente investigación demostrará el grado de influencia que tuvo dicha teoría en los discursos de Maximiliano Hernández Martínez para resolver muchos de los problemas sociales y económicos de antes y durante su presidencia al grado de convertirla en su política de mejoramiento social. El origen de la idea de un vitalismo retórico y bien intencionado es el resultado de haber hecho un análisis aislado de la obra de Masferrer sin hacer referencia a los hechos históricos determinados y gobiernos donde sí tuvo cierta trascendencia, pero principalmente en el de Hernández Martínez y esta es una de las grandes ventajas de trabajar en la línea de la historia de las ideas en donde el investigador ya no solo navega en meras abstracciones que aparecen como desconectadas en el tiempo y en el espacio sino que tiene la oportunidad de analizar como las ideas influyen en los distintos procesos históricos concretos. 65 Por lo antes expuesto consideramos que la insurrección de 1932, es un tema que por su misma complejidad ameritaría un estudio por aparte, aunque en este apartado creemos relevante comentar dos visiones: 1º) la del mismo Alberto Masferrer y 2º) la de Miguel Mármol a través de Roque Dalton. Hasta ahí limitaremos nuestro análisis, ya que ampliarnos más podría llevarnos a realizar otra tesis completamente distinta. Cuando Masferrer tuvo conocimiento de los hechos de 1932, se autoexilió en Guatemala, pero fue casi inmediatamente expulsado por el gobierno del Presidente Ubico, presumimos, por considerarlo con tendencias filocomunistas, ya que éste pretendía dictar una conferencia sobre asuntos sociales y el gobierno de Ubico se lo impidió. La noticia que el periódico La Prensa publicó fue la siguiente: Penoso fue el incidente ocurrido hace poco a don Alberto Masferrer en la capital de Guatemala. Es el caso nos informan que tenía dispuesta una conferencia sobre temas filosófico-sociales y con motivo del brote comunista que se registró recientemente en aquella ciudad la policía que tenía orden de no permitir ninguna reunión impidió que se efectuara dicha conferencia cerrando el local e invitando a don Alberto Masferrer a que abandonara el país.175 Por lo anteriormente expuesto, Masferrer tuvo que buscar refugio en San Pedro Sula, Honduras, en donde escribió una carta a su hermana Teresa con fecha 2 de febrero de 1932, en la cual le vertía su opinión sobre la matanza de campesinos efectuada en El Salvador. Masferrer creía que el etnocidio no había sido obra, exclusivamente, de Martínez y de los militares sino que de varios sectores sociales entre los que se encontraban la Iglesia Católica, los terratenientes, los banqueros y en general todos aquellos gremios sometidos al poder capitalista. 176 Para Masferrer, las ejecuciones masivas fueron algo “horrendo”, que según sus mismas palabras, le despertaban el deseo de no volver nunca jamás al país. Escribió que se consideraba desterrado por mucho tiempo, quizás para siempre y estableció que no reingresaría al país porque sentía temor de las represalias de los Masferrer es invitado a salir de Guatemala, La Prensa, martes 26 de enero de 1932, No. 6,291, pág. 1, año XXI. 175 Alberto Masferrer, AGN, Fondo: AM, serie 01: correspondencia a familiares, sub-serie: carta a familiares, Caja 4, Exp. 288, folio 2, San Pedro Sula, Honduras, martes 2 de febrero de 1932. 176 66 asesinos (refiriéndose a los sectores antes señalados) y recalcó que mucho antes de que se dieran los acontecimientos anunció lo que iba a pasar, pero que su palabra fue desoída debido al egoísmo de los capitalistas que no querían compartir de forma justa su riqueza. Dijo: “tendrán que hacerlo ahora (…) ya es por miedo. Solo el miedo convence a los cobardes y a los mezquinos”.177 En otra carta que Masferrer escribió en San Pedro Sula a Hortensia con fecha 1º de mayo de 1932, se evidencia el dolor, la tristeza y el rechazo que éste sintió ante las matanzas –al expresarle– que no comía y que no dormía a causa del horror inmenso que le producía sólo pensar en los hechos:178 En realidad, desde que vine a este país, mi afán ha sido olvidar no pensar en nada. Quizá tendría yo alguna noticia de las matanzas de El Salvador. De ocho a diez mil campesinos asesinados, bajo el pretexto de comunistas, y sacrificados al odio y la codicia de los ricos…179 Masferrer en la referida carta manifestaba que la burguesía, los militares, la ortodoxia católica e incluso algunos estudiantes eran responsables todos, de forma conjunta, del asesinato de ocho mil desdichados quienes venían de año y medio de aguantar hambre. Masferrer creía que la matanza se había hecho en nombre de la defensa del orden y le preguntaba a Hortensia sobre el número de muertos, ya que le informaban podía llegar a un número mayor al que él manejaba. Decía que sus amigos en El Salvador le escribían cartas aterrorizados, pero que no le decían nada en concreto. Masferrer calificó a los sectores represivos como “vampiros” y asesinos que habían sumido al país en la sangre y el temor.180 Masferrer dijo que sentía grandes deseos de tomar la pluma y denunciarlos, pero que sin embargo se callaba porque no quería que le quitaran el pan a su mujer, a su madre y a Albertina y que para él, eso era un trago amargo.181 Lo que es una paradoja del destino es que Martínez haya utilizado sus ideas para iniciar un nuevo 177 Ídem. Alberto Masferrer, AGN, Fondo: AM, serie 01: correspondencia, sub-serie: cartas a familiares, Caja 4, Exp. 292, folio. 1, San Pedro Sula, Honduras, domingo 1º de mayo de 1932. 178 179 Ídem. 180 Ibídem, pág. 3. 181 Ídem. 67 proyecto de Nación. La pregunta que quedara en el aire es ¿Habría estado de acuerdo Masferrer con qué se implementaran sus programas después de la matanza? He ahí la gran contradicción entre el Masferrer pacifista y la presidencia de Martínez llena de violencia y autoritarismo. Por otro lado, es interesante rescatar el testimonio de Miguel Mármol a través de Roque Dalton, quien establece que antes de 1932 se difundían en el país varios tipos de socialismos como el anarcosocialismo, el reformismo pacifista de la II internacional, el masferrerismo y por supuesto el comunismo, el cual empezó a predominar sobre los demás. Asegura que uno de sus principales inspiradores era Lenin y que para una mejor preparación ideológica vinieron comunistas de diferentes países como: México, Venezuela y Perú, que los ayudaron a asumir la lucha de clases de forma científica.182 El núcleo de obreros que se consideraban comunistas o que aspiraban a serlo, trataron de insertar en sus filas una educación política eminentemente comunista, por lo que le solicitaron a algunos intelectuales que les impartieran conferencias doctrinales como a Francisco Luarca, quien les habló de Vasconcelos y de Rodo, pero Mármol establece que Luarca en el fondo no era marxista sino vitalista, asegura que Alfonso Rochac183 también les habló de Vasconcelos, y que Francisco Morán fue quien finalmente les habló sobre los soviets y la revolución bolchevique, pero que tampoco era comunista. Lo que los comunistas pretendían era robarle la atención a los reformistas y a los anarcosocialistas. 184 Los salvadoreños que pretendían ser comunistas empezaron a asistir a congresos de Partidos Comunistas Latinoamericanos e iniciaron trabajo doctrinal en Roque Dalton, Miguel Mármol, los sucesos de 1932 en El Salvador, colección testigos de la historia, volumen 7, UCA Editores, 1ª Edición, 1993, págs. 131, 132, 133. 182 Alfonso Rochac: nació en Ízalco el 4 de julio de 1907 y murió en 1996. Su tesis doctoral titulada La deuda pública en El Salvador le valió mención honorifica. Fue ministro de economía en dos ocasiones. Elaboró proyectos de ley para la creación de varias instituciones financieras como: La federación de las cajas de crédito, Administración de Bienestar Campesino (ABC) que posteriormente se convirtió en el Banco de Fomento Agropecuario (BFA). Durante la administración de Martínez realizó estudios para la fundación del Banco Hipotecario (BH) y el Banco Central de Reserva (BCR). 183 Roque Dalton, Miguel Mármol, los sucesos de 1932 en El Salvador, colección testigos de la historia, volumen 7, UCA Editores, 1ª Edición, 1993, págs. 134 y 137. 184 68 el campo y en las zonas sub-urbanas. En 1930 se fundó con unas 35 personas el Partido Comunista Salvadoreño (PCS) constituido originalmente por obreros y luego por pequeño-burgueses. Posteriormente el PCS echó a andar la sección salvadoreña del Socorro Rojo Internacional (SRI) para ayudar aún más a la organización del proletariado, Agustín Farabundo Martí185 fue su líder y representante, quien junto a Alfonso Luna y Mario Zapata también pertenecientes al PCS dirigieron la insurrección del 32.186 Estos dos últimos habían recibido asesoría en la Unión Soviética para realizar trabajo de adoctrinamiento. Mármol cuenta que hubo mítines secretos nocturnos que se realizaban en los barrancos, es decir, se inició una labor secreta de organización y agitación en varios sitios de San Salvador. El gobierno de Pio Romero Bosque empezó a detectar estos movimientos y expulsó a todos los comunistas extranjeros que habían venido a adoctrinar. Luego los comunistas salvadoreños se volvieron a reagrupar, intensificaron la propaganda y aumentaron el tiraje del periódico La estrella roja. Ya para ese tiempo, tenían equipos bien organizados de agitadores.187 El PCS solicitó una audiencia al Presidente Martínez con el objeto de detener la insurrección a cambio de un cese a la represión, ya que creían que el gobierno y los terratenientes eran los responsables directos de la violencia, pero Martínez no quiso negociar con ellos, aparentemente, por ser una organización clandestina. Después de la reunión fallida, Mármol asegura que él fue uno de los partidarios de proceder a la insurrección popular argumentado que debía ser encabezada por el PC, Farabundo Martí apoyó la moción. La decisión se confirmó en una reunión llevada entre el 7 o Agustín Farabundo Martí: nació en Teotepeque el 5 de mayo de 1883 y murió en San Salvador, el 1 de febrero de 1932, ejecutado por órdenes de Maximiliano Hernández Martínez). Político comunista. Participó en la Fundación del Partido Comunista Centroamericano. Fue delegado del Socorro Rojo Internacional y delegado de la internacional comunista. Fue uno de los fundadores del Partido Comunista Salvadoreño. Su figura ha sido retomada por la izquierda salvadoreña al nombrar al Frente unido de organizaciones guerrilleras como Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), ahora transformado en partido político. 185 Roque Dalton, Miguel Mármol, los sucesos de 1932 en El Salvador, colección testigos de la historia, volumen 7, UCA Editores, 1ª Edición, 1993,, págs. 139, 142, 143 y 212. 186 187 Ibídem, págs. 212, 215, 217, 237 y 238. 69 8 de enero de 1932. Mármol afirma que los hechos fueron completamente planificados y no algo espontaneo.188 El Comité Central dirigió la organización militar y Martí se encargó de recolectar armas y bombas. Además, se procedió a la elaboración del manifiesto de la insurrección que contenía veinticinco puntos y el cual es transcrito por Roque Dalton de la página 303 a la 306 de la obra en comento. Se procedió al nombramiento de los comandantes rojos y el golpe se aplazó hasta el 22 de enero debido a que se proyectó la incorporación de sectores burgueses y militares, pero para ese entonces, el gobierno de Martínez ya tenía mucha información sobre el plan, por lo que éste procedió a la neutralización de los altos mandos.189 Martí, Luna y Zapata fueron capturados aunque la insurrección continuó. El Gral. Tomas Calderón dirigió la represión. Mármol manifiesta que se asesinaron alrededor de 30,000 campesinos, la mayor parte de origen indígena, con el pretexto de evitar más crímenes comunistas, la mayoría inocentes del trabajo revolucionario y que desde entonces se ha construido una leyenda negra acerca del comunismo. Es importante aclarar que las matanzas también fueron realizadas por las guardias cívicas y el movimiento revolucionario, según Mármol falló, en parte por la imposición del terror fascista del gobierno de Martínez. 190 En general habría que decir que hay una gran cantidad de obras que tratan el tema del 32 entre las cuales podríamos mencionar: 1932, Rebelión en la oscuridad de Jeffrey L. Gould y Aldo Lauria Santiago (2008), El Salvador, 1932 (los sucesos políticos) de Thomas R. Anderson (2001), El ascenso del militarismo de Rafael Guidos Véjar (1980), Las masacres, la matanza y el martinato en El Salvador de Erick Ching (2007), Balsamera bajo la guerra fría. El Salvador, 1932. Historia intelectual de un etnocidio de Rafael Lara Martínez (2009), La verdad sobre el comunismo, contribución a la defensa social de Alfredo Schlesinger (1932), Breve reseña histórica del comunismo en El Salvador de José Tomas Calderón (1942), Revolución comunista. Guatemala en peligro…? de Jorge Schlesinger (1946), Sangre de hermanos de Rodolfo Buezo (1946), Historia militar de El 188 Ibídem, págs. 242, 243, 245 y 246. 189 Ibídem, págs. 246, 248. 190 Ibídem, págs. 249, 253, 307 y 326. 70 Salvador de Gregorio Bustamente (1951) y la que hemos comentado aquí Miguel Mármol, los sucesos de 1932 en El Salvador de Roque Dalton sólo para mencionar algunas. Ahora bien, para finalizar con el estado de la cuestión habría que decir que entre las obras que tratan el derrocamiento de Martínez están: Maximiliano Hernández Martínez, ascenso y caída del General, (Abordaje periodístico) de Alfredo Parada (2007), Insurección no violenta en El Salvador (La caída de Maximiliano Hernández Martínez) de Patricia Parkman (2003), Inquietudes de un año memorable, 1944 de Fortín Magaña (1945), Las Jornadas cívicas de abril y mayo de 1944 de Francisco Morán (1979), Aurora del 2 de Abril de 1944 de Tiburcio Santos Dueñas (1944), entre otras. Otro gran grupo de estudios están fundamentados en la represión militar y en las luchas populares contra la dictadura como: La función política del ejército salvadoreño en el presente siglo de Mariano Castro Moran (1989), Relámpagos de libertad de Mariano Castro Morán (2000), El ascenso del militarismo en El Salvador de Rafael Guidos Véjar (1980), El fascismo en un país dependiente, la dictadura del General Maximiliano Hernández Martínez, de Raúl Padilla Vela (1987), Cultura y ética de la violencia en El Salvador: 18801932 de Patricia Alvarenga (1996), El general Martínez, un patriarcal presidente dictador (vívidos relatos históricos con comentarios de actualidad, de algunos destacados y auténticos sucesos políticos, sociales y económicos, ocurridos en una época en la República de El Salvador en Centroamérica de Alberto Peña Kampy, (1973), entre otros. Ahora bien, una vez desarrollados todos los elementos que componen la parte introductoria de la tesis, en seguida entramos al análisis del pensamiento, obra y vida de Alberto Masferrer, ya que consideramos que sí vamos a estudiar su influencia durante la jefatura de Martínez, lo lógico es realizar al menos un capítulo en el que se aborde su doctrina de una forma estructural y concatenada a los hechos históricos. Este precisamente constituirá el punto de partida de nuestro estudio. 71 CAPÍTULO I: ALBERTO MASFERRER, PRINCIPAL IMPULSOR DEL PROYECTO DE NACIÓN VITALISTA-TEOSÓFICO EN EL SALVADOR Y CENTROAMÉRICA Porque sí era altivo al fustigar los máximos errores de los poderosos, cuando corregía las debilidades de la masa anónima, su acento cobraba una gran piedad fraternal; sus cóleras eran hechas de ternuras y de la amargura de sus reproches manaba la miel de los panales en plenitud. Por eso su palabra cayendo como rocío vivificador en la constancia de los oprimidos, los despertaba infundiéndoles extraños impulsos para ir tras su doctrina (…) que no era otra cosa que la conquista de los derechos individuales (…) sólo hay un hombre capaz de dar la libertad: aquel que la ha conquistado para sí, tal fue Alberto Masferrer191 1- Introducción El presente capítulo está dividido en dos partes. La primera pretende analizar algunos de los diferentes aspectos que componen la doctrina vitalista de Alberto Masferrer tales como: economía, raza, educación, autonomía de los pueblos, finanzas públicas, condiciones sociales, etc. Además, trata de establecer las diferencias y similitudes ideológicas que existen, primero, entre el Mínimum Vital y el capitalismo y luego entre el Mínimum Vital y el comunismo, ya que como veremos en el transcurso del mismo, la doctrina social de Masferrer pretendía convertirse en una tercera vía que retomara lo mejor de ambos sistemas antagónicos. Masferrer criticó varios aspectos del sistema capitalista, sobre todo lo que se refería a la explotación a la que tenía sometida a la mayor parte de la población obrera y campesina del país mediante la imposición de largas jornadas de trabajo, trato inhumano, salarios ínfimos y condiciones insalubres, es por eso que le interesaba que al pobre se le proveyera de ciertos elementos indispensables para la Pedro T. Motiño, “Alberto Masferrer”, La Tribuna, Jucuapa, lunes 13 de septiembre de 1937, No. 1,203, págs. 1 y 4, año X. 191 72 vida, ya que en ese momento, ni siquiera podía aspirar a formar una familia. Masferrer pretendía concientizar tanto a ricos como a pobres para que estos fuesen agentes de su propio cambio sin recurrir a la violencia.192 Para lograr estas reivindicaciones, Masferrer también creía que era importante incursionar en el campo de la política electoral mediante la fundación de un partido político, el cual finalmente desembocaría en una Unión Vitalista y otras ligas vitalistas a nivel nacional e internacional a través de las cuales quiso llevar a la práctica sus ideales. Además, en este capítulo también se analizaran algunas de las repercusiones más importantes que tuvo el Mínimum Vital en dos gobiernos en particular: el de Pio Romero Bosque y el breve de Arturo Araujo. Tal y como lo plantea Marta Casaús, parece ser que todo el cuerpo del Mínimum Vital está muy influenciado por el anarquismo socialista de Kropotkin193 en lo que respecta, específicamente a crear un estado de bienestar, lo cual se reflejaría en la adopción de su apotegma: “afuera la caridad y la filantropía y arriba la justicia”. 194 El centro del Mínimum Vital basado en el autor ruso, era implementar un sistema de producción económico que no respondiera exclusivamente al fin de crear plusvalía sino que prioritariamente al de satisfacer las necesidades del conglomerado.195 Masferrer al igual que Kropotkin, no estaba en contra del progreso, sino que ambos concluían que debía alcanzarse una dimensión más humana del sistema, 196 Carlos G. Duran, “El obrero no puede aspirar a la fundación de un hogar medianamente modesto”, Patria, martes 19 de noviembre de 1929, No. 469, pág. 1, año II. 192 Marta Casaús, El libro de la vida de Alberto Masferrer y otras escritos vitalistas, edición crítica de la obra teosófico-vitalista (1927-1932), F&G Editores, 1ª Edición, 2012, pág. 15. 193 Alfonso Rochac, “El vitalismo y los telegrafistas”, Patria, viernes 25 de octubre de 1929, No. 448, pág. 1, año II. 194 Jesús Civit, “La revolución en Kropotkin (estudio desde la sociología fenomenológica)”, Tesis para obtener el grado de Doctor en Sociología de la Universidad Católica Andrés Bello, Caracas, Venezuela, 2006., págs. 191y 192. 195 Ídem. Kropotkin pensaba que para la economía política era mucho más importante estudiar la producción que el consumo ya que el primer deber de ésta era garantizar el consumo de todos: vivienda, alimento, vestido. Para lograr este objetivo se tenía que erradicar todo tipo de monopolio, principalmente el de la tierra, Kropotkin citando a Robespierre sostenía: “Los alimentos necesarios al pueblo son tan sagrados como la vida misma”, pág. 191. 196 73 obviamente dotándolo de ciertas dosis de comunismo, lo cual se refleja en la frase de Kropotkin: “a cada quien según sus necesidades”.197 Al final del capítulo, se aborda el carácter esotérico de la obra masferreriana, que como naturalmente es obvio advertir, está impregnada de teosofía, aunque éste en algunas ocasiones no lo haya hecho explícito y por último, se observa la reacción de la Iglesia Católica frente al pensamiento teosófico del maestro. 2- Pensamiento vitalista de implicaciones prácticas: Alberto Masferrer y algunas Alberto Masferrer en El Mínimum Vital, hizo una severa crítica tanto al comunismo como al capitalismo. A los que defendían el primer sistema, los acusó de tener una envidia que los devoraba por dentro, la cual disfrazaban y encubrían mediante discursos reivindicativos. Para él, el comunismo era una postura extrema pseudosalvadora que sólo conducía al odio de clases y al rencor de unos contra otros. A los que defendían el segundo, los acusó de acaparadores y de santificar las ganancias.198 Masferrer sostenía que de triunfar el comunismo sólo cambiarían los papeles, es decir, los que ahora eran oprimidos mañana serían los nuevos opresores. Los roles de “señor” y “esclavo” sólo se invertirían, es por eso que el Mínimum Vital buscaba el progreso del pobre, pero no mediante la concesión de ciertas dadivas sino mediante una moral del trabajo, previo reconocimiento de ciertos derechos absolutos e inalienables que debían de ser garantizados por el mismo sistema, principalmente, el acceso a la tierra. Masferrer buscaba que el capitalista limitara sus ambiciones y su sed de atesorar, con el objeto de que el campesino y el obrero pudieran disfrutar del merecido fruto de su trabajo. El Mínimum Vital en ese sentido, podría entenderse como la satisfacción de aquellas necesidades vitales sin Pedro Kropotkin, La conquista del pan, colección de libros escogidos, La España moderna, Madrid, sin fecha de publicación, pág. 40. 197 Alberto Masferrer, El Mínimum Vital, Ensayos, Biblioteca de literatura salvadoreña, 1ª Edición, CONCULTURA, 1996, pág. 61. 198 74 las cuales el hombre degenera,199 lo cual conlleva a una proclama de derechos y deberes: El Mínimum Vital significa: “la satisfacción constante y segura de nuestras necesidades primordiales”. He allí el postulado. Este se desenvuelve en dos direcciones. Como un derecho para el necesitado y como un deber para el poderoso. Derecho a vivir para el primero. Límite de atesorar para el segundo. Todo sin amarguras, sin resentimiento sin encono.200 Masferrer en su sociología tomó posturas muy similares a las de Proudhon quien estaba en contra de la competencia desigual entre productores. El filósofo francés consideraba que ésta debía ser más solidaria, pero Carlos Díaz le critica que su visión sigue estando dentro del sistema económico tradicional burgués, lo cual también podría decirse de Masferrer. Proudhon parece haber influenciado en Masferrer, sobre todo, en su idea de buscar una economía mixta que retomara tanto elementos socialistas como pequeño burgueses, pero Díaz establece que esta es la razón de porque todo buen burgués es mal socialista, es decir, sólo tratan de suavizar el sistema sin suprimirlo y es por eso que tanto Proudhon como Masferrer son considerados autores utópicos.201 Como puede imaginarse, Masferrer, al igual que Proudhon, al tomar posturas intermedias que buscan conciliar capitalismo y trabajo y economía política y comunismo se ganaron enemigos de ambos bandos ideológicos,202 ya que sus críticas iban dirigidas tanto contra las izquierdas como contra las derechas. Ahora bien, es determinante saber qué es lo que Masferrer entendía por capitalismo, en qué puntos estaba de acuerdo con él y en qué aspectos fue que se distanció de él. 2.1- Crítica y aproximación del vitalismo al sistema capitalista: Al parecer, Masferrer tomó algunas de sus concepciones sobre capitalismo del economista norteamericano Edwin A. Seligman quien lo estudió desde el punto de 199 Ibídem, pág. 61, 62 y 63. José Salvador Guandique, “Alberto Masferrer: pensador, Francisco Gavidia: humanista, Juan Cotto: poeta, Diario Latino, sábado 20 de noviembre de 1943, No. 16,974, pág. 1, año LIV. 200 Pierre Joseph Proudhon, Propiedad y federación, (notas y comentarios de texto por Carlos Díaz), Editorial Narcea, S.A., Edición no definida, Madrid, España, 1972, págs. 35, 36 y 37. 201 202 Ibídem, pág. 45. 75 vista de su forma, sus relaciones y su espíritu. Seligman creía que cotidianamente se definía al capitalismo por el uso impresionante que éste había hecho de la técnica como la “era de la máquina”, lo cual era parcialmente cierto, ya que para él, el proceso de producción iba más allá de lo meramente mecánico, por ejemplo, en el campo del consumo, también se apoyaba en ciertas estrategias de mercado. Él lo definía como “un sistema de producción indirecto o desviado, en el cual las fuerzas de la naturaleza son usadas en un grado creciente para suplantar el esfuerzo de los seres humanos”. Y desde el punto de vista técnico, como: “un economizador de trabajo por excelencia.203 Seligman establecía que mediante el uso de la técnica se había desarrollado la industria, o sea, la producción en masa y estandarizada de los productos. En el sistema capitalista, la división del trabajo alcanzó un grado de especialización que eficientizó el proceso y disminuyó los costos, lo cual trajo como consecuencia que se elevara el consumo que, en teoría, significaba más riqueza y más bienestar para todos. El problema fue que esto conllevó a que la economía se concentrara en pocas manos aunque la riqueza fuese mucha.204 Como es obvio concluir, al que antes fue pequeño productor, sólo le quedó para poder subsistir, convertirse en empleado del gran capitalista, lo que trajo la distinción entre obrero y patrono. El trabajador quedó divorciado de los medios de producción, de tal modo que el capital y el trabajo se visualizaron de maneras separadas y contrapuestas, es por esto que el autor norteamericano concluye que sin capitalismo jamás hubiese existido socialismo, en ese sentido, los gremios de trabajadores empezaron a tomar conciencia de su situación desventajosa. 205 El capitalismo moderno pone como valor supremo el individualismo, el cual tiene que ser acompañado de libertad política y social y de un sistema jurídico que le garantice la propiedad privada. El espíritu del capitalismo consiste en el afán de ganancia y acumulación y es desde este ángulo que Masferrer lo combatió, ya que Edwin A. Seligman, “El capitalismo”, Patria, miércoles 11 de diciembre de 1929, No. 488, pág. 3, año II. 203 204 Ídem. 205 Ídem. 76 para él, la acumulación de la riqueza a costa del sustento de los demás era ilegítima. En el campo, se daba la misma situación entre el propietario feudal y el labriego. El terrateniente explotaba la tierra y al trabajador de la tierra, pero sin aportar ningún tipo de esfuerzo, sino que simplemente se adueñaba de la riqueza que ambos producían, por el solo hecho de ser el dueño del terruño.206 En este sentido, Seligman, de forma similar a Marx, quien es considerado como el máximo crítico del sistema capitalista, en su obra cumbre El capital establece que el empleo capitalista de las máquinas tendió a disminuir el precio de las mercancías y a aumentar las horas de trabajo del obrero en función de la máquina, de hecho, afirma que la producción mecánica fue el punto de partida de la revolución industrial, la cual transformó el papel del hombre al de un simple motor y vigilante de la máquina. Luego explica que el maquinismo trajo un efecto contraproducente, ya que se trató de sustituir al hombre-motor, por fuerzas naturales como el caballo, el agua o el viento, ejemplo de ello fue la máquina de vapor de Watt.207 El industrialismo, entonces, empezó a sustituir al hombre por la combinación de distintas máquinas tal como ocurrió en la hilatura textilera, aunque esto no se logró en todos los rubros de la industria donde el trabajador seguía siendo sobreexplotado. Marx establece que una vez que se crearon medidas legales para reducir las horas de trabajo, el capital recurrió a la intensificación del mismo, lo cual conllevó a un gasto superior de la fuerza vital del hombre. El obrero se convirtió en un utensilio y se volvió autómata fraccionario en el proceso productivo. El fabricante por su parte, se convirtió en su amo y dueño de su vida y es aquí donde según Marx tuvo origen la lucha entre el capitalista y el asalariado, pero considera que el obrero no debe atacar a la maquina como tal sino que al modo social de explotación. El hombre sólo vende su fuerza de trabajo como mercancía, pero en cuanto su función pueda 206 Ídem. Karl Marx, El capital, Editorial Jurídica Salvadoreña, 1ª Ed., Colección pensamiento, 2004, págs. 114, 115, 116 y 122. 207 77 ser realizada por otra máquina éste pierde su utilidad, se contratan menos obreros y se reducen los salarios.208 Desde esta perspectiva, quizás, el artículo donde Masferrer atacó de forma más directa al capitalismo fue en Máquinas y hombres en el cual establecía que no había que hacer ídolo de la máquina, es decir, para él, no se debía de sacrificar al hombre por la máquina, el progreso o la civilización. Las máquinas tenían que ser sólo un medio y no un fin, éstas tenían que estar al servicio del hombre y no a la inversa, porque el mismo hombre había sido el creador de la máquina. A los consumidores, también les hizo un llamado a no caer en la idolatría de los objetos.209 Es por eso que Masferrer retomó el mandamiento bíblico: “No harás ídolo ni figura alguna delante de mí” (Deuteronomio 5, 6-9). El principio absoluto del capitalismo de hacer dinero tenía que ser sustituido por el de generar la vida de todos y cada uno de los hombres de la Nación, la vida tenía que ser el nuevo ídolo, desde la del más humilde zapatero hasta la del más millonario accionista, desde la del más laborioso peón hasta la del más desalmado terrateniente y aún la del mendigo y la del ladrón para quienes la vida seguía siendo el bien supremo. Para Masferrer, el mal no radicaba en la maquina sino que en el hombre mismo que la había convertido en Dios:210 La máquina, endiosada, se está volviendo en la sociedad actual el diente y la garra de la fiera. Las vidas de los hombres, hasta de los niños, le son sacrificadas, ni más ni menos que lo fueran en los brazos candentes de Moloch. Que vuele el automóvil, aunque todos los días haya un niño o un anciano apachurrado; que la fábrica arroje a millones los productos, aunque los obreros sean despedidos sin aviso, sin indemnización, sin cuidado ninguno de lo que les espera, que la Singer se agite día y noche abaratando las prendas de vestir, mientras que a la par abarata la tuberculosis; que las mujeres y los niños se agoten en las hilaturas, y perezcan antes de tiempo, con tal que se abarate el producto.211 Esto es en lo que Masferrer criticó al capitalismo, ahora bien, habría que ver en qué fue en lo que se aproximó a él, y desde nuestra perspectiva, fue en que pensaba 208 Ibídem, págs. 124, 126, 127 y 128. Alberto Masferrer, “Maquinas y hombres”, Obras escogidas, tomo segundo, selección y prólogo de Matilde Elena López, 1ª Ed., editorial universitaria de El Salvador, 1971, pág. 226. 209 210 Ibídem pág. 227. 211 Ibídem pág. 228. 78 que las cosas tampoco tenían que ser regaladas, es decir, no abogó por una abolición completa del sistema sino que como hemos dicho antes, quería su humanización. No quería que los ricos siguieran arrojándoles las migajas a sus trabajadores, quería que tomaran con seriedad las quejas de hambre del pueblo y que tomaran conciencia de que el dinero no lo podía comprar todo, por lo que les pedía que fueran más racionales, bondadosos y prudentes con su codicia.212 Pero para Masferrer, tampoco había que confundir al Mínimum Vital con vulgar beneficencia; para él, era: “derecho primario y absoluto”, lo definió textualmente como “la Nación organizada como una gran familia, en la que se atiende a la función CAPITAL, PRIMARIA de procurar vida a todos sus miembros”.213 Al margen de abstracciones nacionalistas era procurarles la vida a los hombres concretos. Desde este punto de vista, era alimento, salud, habitación, educación y vestido para todos,214 por lo que a continuación analizamos algunos de estos aspectos: 2.2- Puntos esenciales del Mínimum Vital: 2.2.1) Vivienda Una de las grandes propuestas prácticas que se vislumbró en las páginas de Patria fue la erradicación de los mesones inhabitables de San Salvador, pero para aquellos en los cuales todavía era posible vivir, se solicitó mediante el Partido Vitalista, la aprobación de una ley que prohibiera el aumento inmoderado de la renta de las habitaciones. Este proyecto de ley pretendía frenar la excesiva ambición de los mesoneros que al cobrar precios demasiado altos, quitaban el alimento de las mesas de las familias obreras.215 Esta iniciativa ya había dado resultado en países como Alberto Masferrer, “comentario”, Obras escogidas, tomo segundo, selección y prólogo de Matilde Elena López, 1ª Ed., , editorial universitaria de El Salvador, 1971, págs. 250 y 251. 212 Alberto Masferrer, “El vino nuevo en odres nuevos”, Patria, (artículos recopilados por Pedro Geoffroy), Editorial Universitaria, colección popular, vol. 1, 1ª Ed. 1960, pág. 167. 213 “El vino nuevo en odres nuevos”, AGN, Fondo: AM, serie 11: recortes de periódicos, Caja 1, Exp. 12, folio único, lunes 10 de diciembre de 1928. 214 Casimiro Salgado, “Se pide una ley contra el alza de alquileres de casa”, Patria, jueves 3 de octubre de 1929, No. 429, pág. 6, año II. 215 79 México durante el gobierno del Gral. Calles quien decretó una ley donde se fijaba el máximum de renta.216 El problema de la vivienda no pudo ser solventando por el gobierno de Pio Romero Bosque, ya que no contaba con un plan administrativo para alojar a los habitantes de los mesones que, en teoría, iban a ser demolidos, por lo que la disposición ministerial se volvió “letra muerta”, en ese sentido, fue Napoleón Viera Altamirano217 junto a Masferrer y otros ciudadanos, quienes fundaron la “Cooperativa de Casas Baratas” e incluso se proyectó fundar la “Cooperativa Constructora de Casas Baratas”, cuestión que fue un triunfo modesto del Mínimum Vital. La cooperativa contó con el apoyo de numerosos técnicos en la construcción de tales viviendas. En el diario Patria, se publicaron cupones para hacer un sondeo de las personas que deseaban adherirse a dicha cooperativa y se hizo un llamado especialmente a los capitalistas para que hicieran sus aportaciones al mejoramiento social.218 El proyecto fracasó prematuramente debido a la falta de confianza entre los asociados y se devolvieron las sumas aportadas por los accionistas entre los que estaban Napoleón V. Altamirano y José Bernal, fundador junto a Masferrer del periódico Patria.219 Habiendo en la ciudad capital una impresionante escasez de vivienda se instó a los capitalistas del país a la creación de una industria constructora, es decir, era un problema que no podía ser resuelto sólo por el Estado, sino que a través de la unificación de las fuerzas sociales, políticas y económicas de la Nación. Esta industria había tenido mucho éxito en países como Estados Unidos en donde se Es necesario fomentar la industria de construcciones”, Excelsior, sábado 23 de febrero de 1929, No. 37, pág. 1, año I. 216 Napoleón Viera Altamirano: nació en la Unión el 22 de junio de 1893 y murió en San Salvador el 8 de agosto de 1977. Periodista, fundó el Diario de hoy en 1936. En 1914 fundó en San Miguel el rotativo La Noticia. Estudio ingeniera en Estados Unidos y escribió muchos artículos de carácter económico. Altamirano abogó por la integración centroamericana y en 1930 contrajo nupcias con Mercedes Madriz (familia de Masferrer). Existe un libro de obras escogidas publicado en 1998 por Carlos Sandoval. 217 “El problema de la vivienda: hacía su solución”, Patria, domingo 24 de noviembre de 1929, No. 474, pág. 1, año II. 218 219 “La cooperativa de casas baratas”, Patria, sábado 15 de marzo de 1930, No. 567, pág. 1, año II. 80 consideraba resuelto en gran parte el problema, pues muchas empresas construyeron casas en abundancia, de tal modo que una vivienda era más barata en Los Ángeles que en nuestro país. También Guatemala había dictado un decreto que permitía al Estado construir un determinado número de casas con el objetivo de paliar la crisis habitacional.220 En ese sentido, ante la Asamblea Legislativa también se propusieron varias medidas como: 1) permitir la entrada al país de materiales de construcción exentos del pago de derechos aduanales, 2) iniciar la urbanización de ciertas fincas, tal como lo hizo el gobierno de Martínez, 3) que se gravara fuertemente todos los predios urbanos baldíos y 4) que se proveyera de una mejor legislación en esta materia para beneficiar a las clases bajas y medias que eran el motor de la economía, ya que mientras la gran masa siguiera viviendo en mesones jamás podría salir de su estado de incultura.221 Otra medida alternativa para descongestionar la superpoblación de la vivienda, fue desplazarse hasta las zonas rurales más cercanas, en donde la habitación era más barata y viajar hasta los centros de trabajo, pero no todos los trabajadores lo podían hacer y el problema de los mesones se siguió agravando. La necesidad de fomentar la casa propia conllevaba muchos otros aspectos como: arraigo, estabilidad, sentimiento de seguridad y posesión, pero nunca se logró resolver, porque todas las iniciativas se quedaban en buenas intenciones.222 Un problema fundamental en este aspecto, era que los propietarios de los mesones no querían poner su capital al servicio de la comunidad y renunciar a las altas ganancias que obtenían. Otros invertían en ámbitos más conocidos como agricultura o comercio y existía una gran desconfianza entre ellos mismos para invertir en un mismo proyecto común.223 Masferrer para exigir el derecho a la 220 Ídem. 221 Ídem. “La vivienda primer problema nuestro”, Excelsior, sábado 18 de enero de 1930, No. 84, pág. 7, año II. 222 223 “El problema de la vivienda”, Patria, miércoles 20 de noviembre de 1929, No. 470, pág. 1, año II. 81 vivienda retomó la frase de Jesús: “los pájaros tienen un nido y las raposas una guarida; sólo el hombre no tiene dónde reclinar su cabeza…”224 Este problema también fue tratado por Kropotkin cuando estableció que todo trabajador con o sin revolución tenía derecho al refugio, es decir, a un alojamiento higiénico del cual no pudiera ser expulsado. Además, creía que el obrero no debía ser acosado constantemente por el pago de una renta. Para él, la habitación gratuita era un derecho abiertamente reconocido por el pueblo, por lo cual creía correcto que éste expropiara por sus propios medios, la vivienda y los terrenos urbanos pertenecientes a la clase pudiente. Kropotkin consideraba que estas expropiaciones no debían hacerse de forma burocrática por el Estado, ya que lo consideraba como la máxima expresión de opresión del sistema.225 Masferrer de forma similar, aunque sin hacer alusión directa a la expropiación, abogaba por cuatro paredes y un techo que protegiera a las personas de la intemperie y la indigencia, que les devolviera la dignidad y la privacidad. Consideraba que el obrero al estar desprovisto de un hogar, le era imposible realizarse como ser humano, en el sentido de que, efectivamente, al alimentarse y respirar satisfacía sus necesidades animales, pero para ser verdaderamente humano necesitaba de una habitación digna, no sucios y estrechos cuartos de mesón en los cuales nunca habría hombres sanos y es por eso que otro punto importante en su doctrina, fue la desmonopolización de los terrenos urbanos para la construcción de colonias de casas baratas.226 Ahora bien, si las casas tenían que ser patrimonio de todos los hombres también lo tenían que ser los víveres. 2.2.2) Alimentación Masferrer creía que era indispensable que el país produjera los bienes de consumo diario más esenciales, aquellos sin los cuales era imposible la vida. Entre ellos estaban: el maíz, el frijol, el trigo y todos los derivados de la ganadería. Para él, el sustento diario debía ser nacional, por lo que había la necesidad de intensificar los 224 “La vivienda”, Patria, jueves 9 de mayo de 1929, No. 307, pág. 1, año II. Pedro Kropotkin, La conquista del pan, Colección de libros escogidos, La España moderna, Madrid, sin fecha de publicación, págs. 109, 110, 111, 113 y 114. 225 226 La vivienda”, Patria, jueves 9 de mayo de 1929, No. 307, pág. 1, año II. 82 cultivos para reducir las importaciones.227 Masferrer también pretendía que no se elevaran los precios del pan, por lo que realizó en su periódico una enérgica campaña a favor del abaratamiento de la harina, en su tiempo se logró un acuerdo de rebaja de 17 colones por un saco de 150 libras. La idea era que el panificador vendiera al consumidor final el mismo pan que antes le costaba 50 centavos en 35 o 40 centavos a lo sumo.228 Masferrer en este aspecto, parecía estar profundamente influenciado por el comunismo anarquista de Kropotkin quien precisamente escribió un libro titulado La conquista del pan en el cual describe que en Francia eran los ayuntamientos los que se preocupaban por proporcionar una ínfima cantidad de trigo para cada ciudadano. A los acaparadores se les ahorcaba o se les guillotinaba. Kropotkin consideraba que la revolución francesa de 1871 tuvo éxito en decretar la separación entre el Estado y la Iglesia, pero falló rotundamente en no asegurar el pan para todos y es por eso que escribió: “¡Pan, la revolución necesita pan!”229 Kropotkin se veía a sí mismo como un utopista y consideraba que la revolución debía garantizar primero el alojamiento, el pan y el vestido. La única forma de asegurar el pan a la población, según él, era mediante el trabajo y el salario fijo, lo cual conllevaba a una reorganización de la producción en base a principios más solidarios, pero lo principal era que el pueblo tomara posesión inmediata de todos los víveres que debían estar rigurosamente inventariados, para evitar derroches y robos y que en tiempos de crisis, pudieran alimentar a la población. También recomendó el cultivo de huertos.230 El vitalismo en este sentido, procuraba el perfeccionamiento material mediante la ingesta de arroz, legumbres, frutas, tortillas, leche y otros alimentos indispensables para la conservación de la buena salud, sobre todo del obrero y del 227 “El gran problema”, Patria, jueves 6 de febrero de 1930, No. 535, pág. 1, año II. “Hay que exigir el abaratamiento del pan de harina”, Patria, domingo 10 de noviembre de 1929, No. 462, pág. 1, año II. 228 Pedro Kropotkin, La conquista del pan, Colección de libros escogidos, La España moderna, Madrid, sin fecha de publicación, págs. 73, 74, 75. 229 230 Ibídem, págs. 76, 77, 78, 79, 80. 83 peón de hacienda.231 Para cumplir con este fin, Masferrer, en 1928 fundó el Comité de Subsistencias.232 Otro aspecto íntimamente ligado a la alimentación para él, era el desempeño de un trabajo como medio de ingresos constante, es por eso que hizo mucho énfasis en que el trabajador debía contar con un salario mínimo o vitalista, tal y como lo veremos más adelante en el capítulo IV, esto también fue sostenido por Maximiliano Hernández Martínez en sus discursos vitalistas. Ambos creían que el salario debía estar en relación con el costo de la vida y es por eso que Masferrer quería que como medida complementaria, se protegiera al trabajador contra despidos injustificados.233 Masferrer creía que los cereales, los granos básicos, las pastas, la harina y en general todo tipo de víveres que no se produjeran en el país de forma suficiente debían estar exentos de gravámenes de importación. En esa misma situación debían de estar las herramientas, semillas y abonos para el cultivo. Se debían de decomisar los productos y castigar penalmente a los acaparadores y adulteradores de víveres así como también a todos aquellos que especulasen con su encarecimiento. Todas estas medidas debían ser complementadas con la creación de una Escuela de Agricultura.234 El Mínimum Vital pretendía que se implementara una política proteccionista de la industria y de la agricultura, mediante derechos prohibitivos contra artículos similares de importación extranjera. Uno de estos artículos era el azúcar. En ese momento, el país tenía invertidos, entre maquinaria y cultivos, alrededor de diez millones de dólares. Además, este rubro había proveído de trabajo a miles de “Ética y estética del comer V”, AGN, Fondo: AM, serie 11: recortes de periódicos, Caja 1, Exp. 10, folio único, lunes 22 de octubre de 1928. 231 “Sobre el Mínimum Vital”, AGN, Fondo: AM, serie 11: recortes de periódicos, Caja 1, Exp. 11, folio único, viernes 16 de noviembre de 1928. 232 Alberto Masferrer, La doctrina del Mínimum Vital, Universidad Autónoma de El Salvador Biblioteca Universitaria, Vol. XI, Tomo I, 1948, pág. 189. 233 234 Ídem. 84 salvadoreños. De lo que se trataba, era de proteger las inversiones a mediana y gran escala.235 Se podría pensar que el Mínimum Vital era contradictorio, porque algunas veces pedía prohibir y en otras facilitar la entrada de productos extranjeros al país, lo que sucede es que éste trabajada con una realidad cambiante en donde las variaciones del mercado y la agricultura ameritaban tomar distintas estrategias. Otros sectores que se quería proteger eran el lechero y el tabacalero, ya que estaban obteniendo ínfimas ganancias.236 El Mínimum Vital desde esta dimensión realista era inútil si las leyes no se hacían cumplir con eficacia, si los políticos al ocupar altos puestos de trabajo sólo llegaban a satisfacer sus propias ambiciones personales y a enriquecerse en detrimento del país mediante la aplicación de grandes sueldos y sobresueldos, en ese sentido, a pesar del marcado antiimperialismo que existía en la época, había que imitar a potencias como Estados Unidos o Inglaterra en donde los funcionarios cumplían con sus obligaciones legislativas y administrativas. Como puede observarse en el Mínimum Vital ya está presente la crítica –fruto de la indignación de los pueblos– en contra de esos políticos “larvas” o “parásitos”, que sólo reducen el presupuesto del Estado sin producir ningún beneficio real para la población. 237 En este aspecto propiamente alimentario como hemos apuntado se advierte la influencia de Kropotkin: Kropotkin considera esas previsiones: “La organización de la industria sobre nuevas bases no se hará en unos cuantos días, y el proletariado no podrá poner años de miseria al servicio de los teóricos del salario. Para atravesar el período de las dificultades, reclamará lo que siempre ha reclamado en tales ocurrencias: la comunidad de los víveres, el racionamiento.238 Luis L. Bustamante, “Mínimum Vital”, El Día, martes 12 de febrero de 1929, No. 2,826, pág. 4, año IX. 235 236 Ídem. 237 Ídem. Jesús Civit, “La revolución en Kropotkin (Estudio desde la sociología fenomenológica)”, Tesis para optar al grado de Doctor en Sociología de la Universidad Católica Andrés Bello, Venezuela, 2006, pág. 198 238 85 2.2.3) Trabajo: Masferrer para dar a conocer sus doctrinas dictó algunas conferencias. Uno de sus postulados principales era que el hombre tenía derecho a la vida, pero que debía trabajar para no convertirse en un parásito social. Además, creía que las relaciones económicas no debían de regularse mediante la ley de la oferta y la demanda, porque esto sólo provocaba una fiera especulación inhumana, por ejemplo, el indígena que producía hamacas al no tener demanda tenía que vender sus mercancías lo más barato posible o al costo, lo cual no compensaba todo su esfuerzo ni alcanzaba a cubrir las necesidades primordiales de su familia. 239 Aquí también citó a Jesús: “…el obrero es digno de su alimento” (S.MATEO 10, 10). Luis Saenz, un ciudadano común, que dirigió una carta a Masferrer, la cual éste publicó en su periódico Patria pensaba que la política económica del sistema era inadecuada, por lo que se necesitaba un cambio de paradigma que le asegurare el alimento a todos los trabajadores: agricultores, inventores, policías, poetas, maestros, etc. Por tanto, el que no trabajaba no tenía derecho a comer, era un “parásito”, refiriéndose a los dueños de expendios, viciosos, usureros y explotadores tanto de las fincas como de las fábricas.240 Por el contrario, decía que se debía sostener y proteger al infante, al anciano y al enfermo que no estaba en capacidad de trabajar. El trabajador debía tener víveres, vivienda, vestido, calzado resistente, asistencia médica, entre otros derechos fundamentales.241 En este sentido, el movimiento vitalista pretendió fundar oficinas proveedoras de trabajo, las cuales serían consideradas como hechos tangibles de la doctrina. El vitalismo entendió que vivir era “el desarrollo armónico del individuo humano en la satisfacción íntegra de todas sus necesidades, es decir: físicas, morales, “Nuestra vida no solo es un gran dolor sino una gran vergüenza”, Patria, martes 8 de octubre de 1929, No. 433, pág. 1, año II. 239 Luis Saenz, “Zánganos y obreras”, Patria, sábado 20 de abril de 1929, No. 291, pág. 5, año I. Masferrer tomaba metáforas de la naturaleza para demostrar una organización social injusta; en este artículo se explica cómo los vividores quieren acceder al poder para defender sus intereses de clase y como son protegidos por el gobierno de turno en detrimento de los derechos de los trabajadores. “Zánganos” o “parásitos” son los señoritos consentidos que aspiran a ser los únicos amos de la colmena sin que intervenga ningún esfuerzo de su parte. 240 241 Ídem. 86 intelectuales y afectivas”. En esa dirección, su lema fue: “vivir y hacer vivir”. Para esta doctrina, el no tener trabajo significaba la mayor expresión de injusticia social, por lo que estas oficinas proveedoras funcionarían como dependencias del Partido Vitalista. En el diario Patria, el vitalista Mario Vargas Moran242 publicó la propuesta de decreto ante la Asamblea Legislativa, que incluyó los estatutos, normativas y objetivos de la primera oficina de este tipo.243 La Unión Vitalista efectivamente creó la Oficina Proveedora de Trabajo en noviembre de 1929 como parte de su política de mejoramiento social. Su actividad estuvo dirigida, principalmente, a obreros y campesinos desempleados a los que se les buscó trabajo. El servicio no fue gratuito, ya que la institución fue autofinanciable y fungió como agente intermediario entre trabajadores y patronos a los que se les aplicó cuotas diferenciadas.244 La oficina proveedora de trabajo se dio cuenta de que había mesones en los que todos los jefes de familia carecían de trabajo y que otros que habían sido despedidos no habían podido encontrar trabajo desde entonces. La oficina de trabajo logró colocar a algunas personas en diferentes áreas y para el remanente se propuso crear diversos talleres con la ayuda de las municipalidades y el Estado.245 En esta materialización del vitalismo fue muy clara la influencia de Sidney y Beatrice Webb y del socialismo fabiano, ya que los Webb consideraban que la solución a la pobreza no era la mera beneficencia sino “transformar radicalmente los estándares de educación de los pobres, condiciones sanitarias y sus posibilidades de acceso a viviendas dignas”. Masferrer, incluso, adoptó los métodos fabianos para Mario Vargas Moran: fue un ciudadano mexicano que en febrero de 1934 dirigió y organizó un complot contra el gobierno del Gral. Martínez pero antes de ser capturado se suicidó. El complot fue planificado junto a Arrieta Gallegos, Kriete y Trombetta y consistía en provocar un incendio para después secuestrar al Mandatario. Según el dictamen pericial de la Fiscalía Militar los conspiradores poseían sustancias explosivas de gran potencia destructora. Ver: “Las abrumadoras declaraciones sobre el complot terrorista”, Diario Nuevo, jueves 15 de febrero de 1934, No. 69, págs. 1 y 5, año I 242 243 “Oficina proveedora de trabajo”, Patria, martes 8 de octubre de 1929, No. 433, pág. 1, año II. “La Unión Vitalista creó la oficina proveedora de trabajo”, Patria, domingo 3 de noviembre de 1929, No. 456, págs. 1 y 5, año II. 244 Es pavoroso el problema de la falta de trabajo en San Salvador”, Patria, jueves 19 de diciembre de 1929, No. 495, pág. 1, año II. 245 87 hacer su propia propaganda social, es decir, difundió su pensamiento a través de artículos, conferencias, folletos e instituciones e intentó educar, agitar y organizar no a las masas sino que a una pequeña minoría capacitada que las hiciera realidad. 246 Es bastante probable que Masferrer haya tomado hasta el nombre de su teoría económico-social del movimiento fabiano, ya que los Webb llevaron a cabo: …el establecimiento de oficinas de empleo a lo largo y ancho de toda Gran Bretaña –con objeto de lograr un uso eficiente y coordinado de los recursos laborales del país–, y la mejora de servicios esenciales tales como educación y salud. A este respecto, planteaban establecer el llamado “estándar mínimo de vida”, esto es, un mínimo nacional en salud, vivienda, ingreso, ocio y educación.247 Para Masferrer, en El Salvador había 3 clases de personas sin trabajo: 1) los que no querían trabajar, no sólo por pereza sino por estar mermados por alguna enfermedad como el paludismo, 2) los que querían trabajar pero no sabían, por existir en el país una educación inadecuada que los volvía inaptos para desarrollar un trabajo calificado, por ejemplo, eran muy pocos los obreros que conocían su oficio con profesionalidad y 3) los que querían y sabían trabajar, pero no encontraban trabajo. Para estos últimos es que se creó la oficina de trabajo. Para los primeros 2 sectores se necesitaba que la sociedad estuviera mejor organizada.248 Masferrer también tomó la idea del periódico El Sol de Tegucigalpa, sobre que había que organizar mejor el trabajo en todos sus aspectos, para incrementar la productividad del país. El primer paso, era que todos los capacitados tanto física como intelectualmente fueran enrolados al trabajo activo e instó a que tanto los trabajadores intelectuales como los manuales se vieran como hermanos, sin discriminaciones, para que pudieran complementarse en el objetivo primordial de reconstruir a la Nación.249 En consonancia a esto, la revista Excelsior estableció que el país estaba totalmente desorganizado: los servicios públicos eran deficientes, los medios de José Luis Ramos Gorostiza, “Beatrice Webb y el socialismo fabiano”, págs. 3, 10. Disponible en: JL Ramos Gorostiza - Documentos de trabajo de la Facultad de …, 2001 - dialnet.unirioja.es. 246 247 Ibídem, pág. 15. Alberto Masferrer, “El problema de los sin trabajo”, Patria, martes 21 de enero de 1930, No. 521, págs. 1 y 5, año II. 248 249 “El ejército de productores”, Patria, viernes 27 de diciembre de 1929, No. 501, pág. 1, año II. 88 transporte, rudimentarios y el Ministerio de Hacienda, incapaz, ya que para solucionar las grandes necesidades sociales sólo creaba e imponía más impuestos con lo que terminaba de asfixiar a los trabajadores. No había escuelas y el 70% de la población era analfabeta. Además, se legislaban leyes injustas que no creaban ningún beneficio. Es en este sentido que Masferrer buscó siempre una mejor forma de organización que atacara los problemas de forma estructural.250 El problema del trabajo fue paradójico, ya que algunos pensaban que no era que hubiera una carestía del mismo, sino que lo que existía realmente era una mala organización territorial, por ejemplo, en 1931 en la zona de occidente, 40 haciendas de Santa Ana, Chalchuapa, Coatepeque y Ahuachapán demandaban brazos para levantar las cosechas y debido a que el personal era insuficiente muchas se perdieron. Es por eso que, en 1932 se planteó la posibilidad de desplazar parte de la población del país hacia esa zona.251 En este contexto, debemos decir que si el hombre tiene casa, alimento y trabajo, también necesita de ciertos servicios de consumo indispensables para su desarrollo como energía eléctrica y agua. 2.2.4) Energía eléctrica En tiempos de Masferrer hubo importantes protestas de habitantes de San Salvador, Santa Ana, Ízalco, Armenia, Chalchuapa y otras poblaciones importantes del país, debido al alto cobro de las tarifas eléctricas, como consecuencia de que algunas empresas habían monopolizado el servicio. Otro aspecto que agravó la situación fue que las empresas prestaban el servicio de forma deficiente. En este sentido, el vitalismo de Masferrer exigía 2 cosas: 1) el abaratamiento de la luz eléctrica y 2) la regularidad en el servicio.252 El programa minimumvitalista consistía en llevar a los sectores más vulnerables, todos aquellos servicios públicos indispensables para la vida. Entre ellos 250 “El nuestro es un país desorganizado”, Excelsior, sábado 5 de enero de 1929, No. 30, pág. 1, año I. “No hay escasez de trabajo en El Salvador, El Tiempo, lunes 28 de diciembre de 1921, No. 760, pág. 1, año III. 251 “En varias ciudades del país el público protesta por el servicio de alumbrado eléctrico”, Patria, jueves 27 de febrero de 1930, No. 558, pág. 1, año II. 252 89 se encontraba la luz eléctrica. El periódico Patria sirvió como intermediario entre la compañía de alumbrado eléctrico y el pueblo para negociar un nuevo contrato que se acoplara más a las necesidades del público, sobre todo lo que respecta a la extensión del servicio a todos aquellos barrios de San Salvador que no lo tenían y los que lo tenían, pero que hacían un uso muy limitado de él por ser demasiado caro.253 Para obtener tal fin, era necesario lograr una mejor política hidroeléctrica, tanto en el sentido técnico como financiero, pero Napoleón Viera Altamirano muy ligado al principio con el Mínimum Vital de Masferrer y con quien después tomó distancia, aparentemente, por motivos ideológicos,254 sostenía que no se tenían que contratar empresas norteamericanas porque eso abriría la puerta en el país a la expansión del imperialismo yanqui. Para él, era mejor contratar a empresas europeas, que siempre debían estar bajo la supervisión del gobierno salvadoreño. Se trataba de desarrollar un sistema de electrificación eficiente y previsor para los tiempos de sequía. Para revolver este problema se debía pasar por 2 fases: 1º) que el Estado controlara y regulara a estas empresas y 2º) cuando el Estado fuera lo suficientemente eficiente, debía nacionalizar el servicio eléctrico para el ingreso de más utilidades públicas. Otra responsabilidad que le correspondía al Estado era el montaje de plantas hidroeléctricas en los ríos del país, principalmente en el Lempa:255 Mientras tanto recordemos que la energía eléctrica del país será algo de que habrá extrema urgencia, honda necesidad, (…) algo sin lo cual nuestra agricultura y nuestra industria no crecerán con vigor; algo que todos los salvadoreños necesitamos para VIVIR (…) mientras el gobierno sigue actuando sin política conocida y definida en la cuestión eléctrica, esos mismos intereses continuaran adquiriendo el control…256 253 “El precio de la luz eléctrica”, Patria, miércoles 8 de mayo de 1929, No. 306, pág. 1, año II. Marta Casaús, El libro de la vida de Alberto Masferrer y otros escritos vitalistas, Edición crítica de la obra teosófico-vitalista (1927-1932), F&G Editores, 1ª Edición, 2012, pág. 308. Masferrer pensaba que Napoleón Viera Altamirano era un burgués y que por lo mismo, podía dañar su obra. Aseguró que sus percepciones sobre las cosas eran diferentes, aunque parece que este distanciamiento también se habría dado por factores personales. 254 Napoleón Viera Altamirano, “Nueva política hidroeléctrica”, Patria, viernes 10 de mayo de 1929, No. 308, págs. 1 y 5, año II. 255 256 Ídem. 90 2.2.5) Agua Teresa Masferrer de Miranda en colaboración con su hermano, sostenía que el agua era un elemento fundamental diario sin el cual no era posible la vida. Además, sostenía que era indispensable para el aseo en general. Esta debía ser potable y en cantidad suficiente para todos los miembros de la comunidad, tanto para su consumo como para la limpieza, ya que un pueblo que vivía en la inmundicia y en la suciedad, jamás podía llegar a ser considerado como “culto”. Ahora bien, ¿Que entendía el vitalismo por cultura? Era algo mucho más básico de lo que cualquiera se pudiera imaginar: era limpiar la piel y la ropa de las personas y tratar de erradicar las enfermedades intestinales de los niños para que tuvieran un mejor desarrollo. Era forzar a la población a que viviera en contacto directo con el agua y que aprendiera a apreciarla como elemento indispensable de civilización. 257 El agua potable en esa época era un privilegio de ricos, los pobres tomaban y utilizaban lodo para satisfacer sus necesidades, por lo que contraían muchas enfermedades gastrointestinales. Por una parte, era un problema de salud pública, pero por otra, de administración pública, ya que correspondía al Estado y a las municipalidades proveer del vital líquido. En este sentido, muchas empresas privadas valiéndose de la urgente necesidad, vendían pequeños depósitos de agua a precios muy altos, pero esto era para el consumo, ya que para cocer los alimentos y hacer la limpieza se debían poseer al menos diez galones diarios que las familias pobres no podían comprar, por tanto, era indispensable la introducción del agua potable en todos los hogares.258 El vitalismo proponía que el agua, incluso la que se utilizaba para el baño y la ropa tuviera que pasar por un riguroso examen químico y bacteriológico, complementado por un cambio en las costumbres higiénicas del pueblo, lo que resolvía el problema de la calidad,259 pero para resolver el problema de la cantidad, había que incorporar en el presupuesto de la Nación una ración suficiente de fondos Teresa Masferrer de Miranda, “El agua y la cultura”, Patria, lunes 15 de julio de 1929, No. 363, pág. 5, año II. 257 258 Ídem. 259 “La cuestión del agua en Guatemala”, Patria, martes 2 de abril de 1929, No. 275, pág. 5, año I. 91 para ir llevando poco a poco el servicio a todo el territorio nacional. En este sentido creemos que el vitalismo proponía un cierto higienismo social, ya que relacionaba el fenómeno salud-enfermedad con los aspectos político, social y económico: 260 Es claro! no hay en San Salvador, que es la capital (…), ni todavía la mayor parte de las pequeñas poblaciones de este El Salvador sin salvación (…) El Salvador es un país inadaptado; porque no hay nada de agua en Ataco, ni en Cojutepeque, ni en cien villas y ciudades más (…) sin agua no hay cultura estimados Señores Doctores (…) debajo de esos ocho colones por luneta, y debajo de la calle pavimentada y debajo del diploma de doctor y debajo de todo subsiste la barbarie.261 Masferrer creía que el agua era lo más importante para alcanzar la cultura de un pueblo; criticó a la sociedad de su tiempo por ser fabrica masiva de “doctores”, incluso Carlos Blanco, en la revista Excelsior le dedicó un artículo titulado El país de los doctores en donde sarcásticamente describía que El Salvador era un lugar en donde sí una persona no poseía un título de doctor, no era digno de tomársele en cuenta, ni se le respetaba, pero a pesar de que todos los funcionarios eran doctores, existía un país desorganizado y vicioso, porque no daban soluciones prácticas sino sólo teoría, doctores que al final se convertían en sirvientes de los extranjeros que amasaban dinero a su costa. La crítica era que aun habiendo tanta sabiduría, la vida del país seguía igual, sin satisfacer sus necesidades primarias.262 Benjamín Rivaya en su ensayo Anarquismo y derecho sustenta que en el anarquismo socialista existe una crítica explicita a la forma de organización social basada en el derecho positivo, por considerar que éste no garantiza de forma suficiente los derechos fundamentales, es decir, los que tiene el ser humano por el sólo hecho de existir, que es la visión del iusnaturalismo jurídico que sostiene que bienes como el aire, el agua o el sol son de todos y por tanto, no susceptibles a que se establezca ningún tipo de restricción artificial sobre ellos, quizás, Masferrer tomó Mario Daniel Ernesto Oliva Mancia, Ciudadanía e higienismo social en El Salvador, 1880-1932, Tesis para optar al grado de Doctor en Filosofía Iberoamericana de la Universidad José Simeón Cañas, 2011, pág. 80. 260 Alberto Masferrer, “No hay agua en Ataco”, AGN, Fondo: AM, serie 11: recortes de periódico, Caja 1, Exp. 6, folio único, lunes 7 de mayo de 1928. 261 Carlos Blanco, “El país de los doctores”, (Dedicado a Alberto Masferrer), Excelsior, sábado 6 de octubre de 1928, No. 17, pág. 3, año I. 262 92 algunas nociones de esta doctrina para defender este derecho.263 Ahora bien, hemos desarrollado el aspecto material del Mínimum Vital, por lo que a continuación revisamos su aspecto cultural. 2.2.6) Educación En el sentido cultural el vitalismo pretendía realizar una reforma educativa en la que la escuela estuviera más adaptada a las necesidades sociales, pero primero era indispensable crear escuelas. El sustento venía dado por las ideas del pedagogo Thomas Jesse Jones264 que se basaba en 4 puntos fundamentales: 1) protección a la salud, 2) protección a la familia, 3) aprovechamiento del medio y 4) recreo. El objetivo era arraigar más íntimamente la instrucción con la vida desde el kindergarten hasta la universidad y en esto consistía la concepción vitalista de la vida y la sociedad.265 En este sentido, Francisco Morán,266 quien pertenecía al Consejo de Educación en 1928 le solicitó a Masferrer que hiciera una revisión de los principios fundamentales del proyecto de la Ley Orgánica de Educación Pública que se quería implementar en ese momento.267 Masferrer creía que había que educar para la vida real, haciendo una fuerte crítica al academicismo improductivo. Pensaba que las escuelas públicas del país Benjamín Rivaya, “Anarquismo y derecho”, Revista de Estudios Políticos Nueva Época, No. 112, abril-junio, 2001, pág. 87. 263 “Un libro de Thomas Jesse Jones”, Patria, martes 4 de junio de 1929, No. 329, pág. 3, año II. El Dr. Jones creía que la educación era una función de la política. Sostenía que la educación debía ser una preparación para la vida fundamentada en los siguientes puntos: 1) salud del cuerpo y de la mente, 2) trabajo honrado y honorable, 3) comunión con Dios y todos los hombres y 4) descanso. El autor creía que mediante la educación se tenía que lograr el bienestar de toda la comunidad. 264 Francisco Morán, “La escuela no responde a las necesidades sociales”, Patria, miércoles 30 de octubre de 1929, No. 452, págs. 1 y 8, año II. 265 . Francisco Moran: fue un profesor de primaria y miembro del partido vitalista. Su adhesión fue publicada en el periódico Patria en el tablero vitalista el sábado 17 de agosto de 1929. Cuando Alberto Masferrer propuso que se debía constituir una Unión Vitalista, Francisco Moran actuó como Jefe de Organización. Durante el mandato de Martínez formó parte del Grupo Masferrer. (No fue posible encontrar fecha de nacimiento y muerte). Ver: “La Unión Vitalista quedo ya definitivamente constituida”, Patria, lunes 21 de octubre de 1929, No. 444, pág. 1, año II. 266 Francisco Morán, “Proyecto de ley orgánica de educación”, AGN, Fondo: AM, serie 01: correspondencia, sub-serie: cartas de políticos e intelectuales, Caja 1, Exp. 34, folio único, jueves12 de julio de 1928. 267 93 estaban fabricando “parásitos”, que al final resultaban una carga para sus familias y el Estado, debido a que los titulados no salían a desempeñar una ocupación real, útil y honesta, sino que sólo se dedicaban al falso comercio de la enseñanza a costa del erario público. La educación vitalista intentaba capacitar al hombre del mañana, pero de verdad, no en apariencia o como simulacro.268 Masferrer también, basado en las ideas de Graesel, proveyó de un perfil de cómo debía ser el bibliotecario profesional, el cual debía estar dotado de 3 características principales: orden, laboriosidad y amabilidad. Masferrer creía que por la relevancia de su función científica, debía tener una preparación especial, debiendo organizarse en el país como en Europa conferencias teóricas, cursos especiales y prácticas de bibliografía y biblioteconomía.269 Masferrer en 1923 tomó medidas prácticas para la fundación de bibliotecas. El periódico Excelsior de Guatemala publicó que en El Salvador se formó una sociedad editorial con fines culturales y un servicio de bibliotecas públicas en todo el país bajo la dirección de Alberto Masferrer. Estas fueron financiadas mediante la contribución de ciudadanos particulares y a este proyecto fue al que se le conoció como “Universidad Popular”, el cual también se quiso impulsar en el vecino país.270 Masferrer, en realidad, aspiraba a un sistema de bibliotecas infantiles como las que existían en Inglaterra, que contaban con una habitación grande, amplias mesas y pupitres individuales y que además estaban provistas de revistas y libros de todas las materias para que los niños escogieran los de su predilección. 271 Como puede observarse el tema bibliotecario preocupó mucho a Masferrer y es por eso que durante la presidencia de Martínez se fundaron varias bibliotecas con su nombre. Alberto Masferrer, “Fabricando parásitos”, AGN, Fondo: AM, , serie 11: recortes de periódicos, Caja 1, Exp. 13, folio único, lunes 21 de enero de 1929. 268 Alberto Masferrer, “Cómo debe ser el bibliotecario”, El Día, jueves 9 de octubre de 1924, No. 1545, pág. 1, año V. 269 270 “Labor cultural de El Salvador”, El Día, lunes 9 de abril de 1923, No. 84, pág. 1, año I. Alberto Masferrer, “Bibliotecas infantiles en Inglaterra”, El Día, sábado 4 de octubre de 1924, No. 1542, pág. 1, año V. 271 94 Sobre este punto en específico, ya el Presidente de Guatemala, General Lázaro Chacón había dispuesto mandar a imprimir en la tipografía nacional de ese país una edición que comprendía de 10,000 ejemplares del opúsculo de Masferrer: Leer y escribir y La cultura por medio del libro. El gobierno de Honduras por su parte, había hecho con anterioridad una edición de 5,000 ejemplares de las referidas obras. Éstas circularon con mucha fuerza en Guatemala, incluso el prólogo de la edición guatemalteca fue una carta que el mismo Masferrer le envió al Presidente Lázaro Chacón.272 El proyecto de nación consistía, pues, en homogenizar culturalmente al pueblo, forjando en su imaginario vínculos de identidad, que obviamente tenían un punto neurálgico en la raza, pero también en crear una conciencia colectiva bajo el principio de que todos debían colaborar para el beneficio de todos. Se intentaba implementar una especie de “renacimiento” basado en “hacer cultura por medio del libro”:273 Lo más importante, lo que ha querido el autor, y pide, por sí sola, su obra, es que la lean y la comprendan los que dirigen el pueblo: presidentes, ministros, jefes políticos, maestros de escuela, alcaldes y también los escritores, los periodistas, los profesionales (…) su misión entera –vocativa, virtual, efectiva– consiste en enseñar: vale decir, guiar, iniciar.274 El mismo Francisco Morán, ya en el contexto de la presidencia de Martínez habló de la importancia que representaba para el país la campaña desanalfabetizadora iniciada por Masferrer y que en la praxis fue continuada por sus discípulos. El gobierno de Martínez abrió más escuelas rurales, trató de erradicar el ausentismo escolar y llevó a cabo campañas de lecto-escritura como gestionar la reapertura de las bibliotecas en los barrios populosos.275 Martínez también impulsó Carlos Wyld Ospina, “A propósito de la obra de Don Alberto Masferrer”, Diario del Salvador, miércoles 16 de agosto de 1933, No. 12,252, pág. 1 año XLVI. (Tomado del diario El Imparcial de Guatemala). 272 El Diario Nuevo, el miércoles 24 de enero de 1934, No. 50, pág. 3, año I, publicó un pequeño trozo de la obra la cultura por medio del libro en donde Alberto Masferrer incita a toda la población que no puede asistir a la Universidad a que se autoeduque por medio de la lectura. 273 Carlos Wyld Ospina, “A propósito de la obra de Don Alberto Masferrer”, Diario del Salvador, miércoles 16 de agosto de 1933, No. 12,252, pág. 6, año XLVI. 274 “Salas de lectura con el nombre de Masferrer”, La Prensa, jueves 24 de agosto de 1933, No. 6,822, pág. 1, año XXI. En algunas poblaciones departamentales se organizaron salas de lectura que 275 95 una novedosa reforma educativa mediante el título de “escuelas de la vida y para la vida” dirigida por Saúl Flores,276 la cual tenía como objetivo principal re-fundar una educación más acorde con las necesidades reales del país y no tan teórica. El funcionario también propuso la aprobación de un nuevo código de educación. Salvador Merlos por su parte, manifestó que la obra Leer y escribir había trazado el camino de la “liberación” moral e intelectual del pueblo.277 De hecho, la Sub-Secretaria de Instrucción Pública compró 500 ejemplares de su método de lectura titulado Quiero aprender, los cuales fueron repartidos entre los maestros de escuelas públicas y alcaldías.278 Francisco Espinoza279 presentó a la Subsecretaría de Instrucción Pública su libro titulado Lecturas salvadoreñas dirigido a los niños de los últimos grados de la escuela primaria con el objetivo de que fuera editado por cuenta del Estado y ayudar al conocimiento de las fuentes literarias salvadoreñas. 280 El Ministerio de Educación también editó el libro de lectura de Saúl Flores titulado casi homonimamente al de llevaron el nombre de “Alberto Masferrer” siendo la primera en inaugurarse la de Opico, departamento de La Libertad; también en la mayor parte de bibliotecas del país se organizaron tramos donde se presentaron colecciones de la obra del maestro. Saúl Flores: nació en Zacatecoluca el 16 de agosto de 1889 y murió en San Salvador en 1980. Fue un profesor de Escuela primaria, filósofo y escritor. Trabajó como profesor en varias escuelas del país. Fue condecorado por su labor magisterial con la medalla Bernardo O Higgings por el gobierno de Chile, la condecoración Orden de Mayo por el gobierno de Argentina en 1966. Colaborador del diario El Día y otros periódicos. Entre sus obras se encuentran: Esta es mi tierra, Escuelas y maestros de El Salvador, Temas vivos sobre educación, etc. Ver: Roxana Beatriz López Serrano, Cien escritores salvadoreños, Editorial Clásicos Roxsil, 1ª Ed., 1997, pág. 141. 276 “Actos en homenaje a Masferrer”, La Prensa, martes 5 de septiembre de 1933, No. 6,831, págs. 1 y 4, año XXI. 277 “La Sub-secretaria de Instrucción Pública comprará quinientos ejemplares del libro del doctor Merlos”, La Prensa, martes 4 de septiembre de 1934, No. 7,325, pág. 1, año XXI. 278 Francisco Espinoza: nació en Tonacatepeque el 17 de septiembre de 1898 y murió en San Salvador el 10 de marzo de 1967. Tuvo diversos cargos oficiales en el Ministerio de Educación. Fue catedrático de castellano, literatura universal, española e infantil. Fue Director del Liceo Cuscatlán y profesor en distintas escuelas nacionales del país. Fue colaborador de El Diario de hoy y de la revista Cultura, Director de La Tribuna, y fundador del Diario Nuevo en 1933. Entre sus principales obras tenemos: El analfabetismo en El Salvador (1923), Cantos de Cuna (1932), Letras Griegas y Romanas (1942), Folklore Salvadoreño (1946), Noventa días entre Maestros (1947), Melodías Regionales (1949), Cuzcatlán (1959), entre otras. 279 Interesante libro de lectura de Francisco Espinoza, La Prensa, miércoles 22 de noviembre de 1933, No. 6,898, pág. 5, año XXI. 280 96 Espinoza, Lecturas nacionales de El Salvador que sirvió como texto para las escuelas y colegios del país, mismo que fue enviado a una exposición internacional del libro en Bogotá, Colombia, en representación de El Salvador.281 Además, se llevó a cabo un censo en el que se estableció que la gran mayoría de niños que asistían a escuelas oficiales no disponían de los recursos económicos para poder comprar todos los útiles escolares, por lo que con el fin de apoyar lo más posible su aprendizaje, el Poder Ejecutivo, a iniciativa del Sub-Secretario de Instrucción Pública mandó a tirar a los talleres de la Imprenta Nacional 100,000 libretas de escritura que se distribuyeron en todas las escuelas primarias que sostenía el Gobierno.282 La Secretaría de Justicia también intensificó su campaña alfabetizadora en los respectivos centros penales, ya que la enseñanza primaria se hizo obligatoria en todos los recintos del país. Según estadísticas de la época, un 90% de los privados de libertad no sabían leer, ni escribir. También se asignó profesores especiales que dedicaban una parte del día a alfabetizar y otra a la enseñanza de un oficio o profesión para que cuando los recluidos recuperaran su libertad pudieran reintegrarse a la sociedad. En todas las cárceles del país se abrieron bibliotecas y salas de lectura, así como también en muchos lugares donde fueron solicitadas:283 Efectivamente, la misión educativa no se cumple sólo dentro de la casa de la escuela va más allá: al campo donde está el hombre que labra la tierra; al taller donde está el obrero abnegado y heroico; a la biblioteca284 y a las salas de lectura que son el abrevadero espiritual del pueblo.285 “El libro de lectura de Saúl Flores está para editarse”, Diario Nuevo, viernes 20 de mayo de 1938, No. 1,374, pág. 1, año V. 281 “Cien mil libretas de escritura para las escuelas primarias”, El Día, martes 22 de agosto de 1933, No. 4,175, pág. 1, año XIII. 282 “Obra de desanalfabetización en dos centros penitenciarios”, La Prensa, martes 14 de noviembre de 1933, No. 6,891, pág. 1, año XXI. 283 “Fundaran la biblioteca Alberto Masferrer”, Diario Nuevo, viernes 27 de agosto de 1937, No. 1,153, pág. 1, año IV. En el quinto año de haber desaparecido el maestro, se inauguró la biblioteca para obreros y campesinos “Alberto Masferrer” situada en la casa de la madre del ilustre escritor que se encontraba en la calle entre Mejicanos y Cuscatancingo. 284 “La Biblioteca y el maestro” Diario Oficial, Suplemento La República, martes 28 de marzo de 1933, No. 107, pág. 1, año I. 285 97 Pedro de Alba, en su artículo “La educación vitalista de Alberto Masferrer”, establece que la educación no puede estar desligada de ningún modo a los problemas económicos, políticos o sociales de un país, es decir, no puede ser estrictamente erudita y desconectada de las realidades vitales. Masferrer en este sentido, quería transformar a la escuela de su tiempo desde una nueva filosofía que hiciera énfasis en los problemas cotidianos, para que la escuela dejara de ser una mera fábrica de académicos que a la hora de enfrentar la realidad no servían para nada.286 Ahora bien, hemos hablado de la importancia que tenía la educación para Masferrer, en seguida, pasamos a profundizar sobre la importancia que le concedía al aspecto económico. 2.3- Economía del Mínimum Vital y su función antiimperialista: El Mínimum Vital es una doctrina que abarca múltiples aspectos; uno de los más fundamentales es la correcta organización del presupuesto de la Nación, ya que este es la base económica para el desarrollo de toda la maquinaria administrativa. Debe ser utilizado con honestidad, recortando todos aquellos fondos innecesarios o que sirvan para crear privilegios burocráticos, debiéndose redirigir los recursos en áreas esenciales y sectores socialmente vulnerables. En otras palabras, el vitalismo ataca frontalmente la corrupción de los dineros públicos, mal tan típico que consume a las ya débiles economías de la mayoría de los países latinoamericanos actuales.287 Si el Estado desea obtener una buena recaudación, debe contar con una eficiente política fiscal, la cual requiere de otro aspecto esencial, el cual es que el ciudadano antes de ser contribuyente debe ser trabajador. En ese momento, los vitalistas calculaban que solo el jefe de familia era contribuyente de entre un grupo de cinco o seis personas, por lo que se hacían cálculos y proyecciones erróneas a la Pedro de Alba, et al, En torno a Masferrer, Ministerio de Cultura de El Salvador, Departamento Editorial, 1956, págs. 51, 52 y 53. 286 “El nuevo presupuesto según el Mínimum Vital”, Patria, jueves 4 de abril de 1929, No. 277, pág. 1, año I 287 98 hora de organizar el presupuesto y darle solución a los problemas nacionales. Esto indicaba que se debía organizar el presupuesto en base a cifras reales. 288 Esto es importante, porque el presupuesto del país debe cubrir necesidades primordiales y legítimas a través de la prestación de servicios públicos, que en su asignación, han de estar justificados por un marco legal y no al arbitrio de una persona o partidos políticos; en este contexto los gastos ordinarios no deben ser excesivos. Para Masferrer, el problema de las finanzas públicas es cultural, ya que con el desorden siempre se suelen beneficiar unos pocos. Para evitar tal situación, es que el mismo Estado debe contar con una eficiente auditoría interna y el ciudadano debe estar educado para ejercer una correcta contraloría social.289 El Mínimum Vital aspira a una mejor organización de la vida colectiva.290 Pretende provocar un proteccionismo moderado sobre la industria, a la vez que quiere que se mejoren los salarios, es evidente que el proteccionismo lo pagan los consumidores, pero en esto consiste la cooperación entre los asociados para crear una mayor y mejor circulación del dinero líquido en beneficio de todos sin tratar de evadir impuestos. Otro punto importante es crear más fuentes de trabajo y también es indispensable elevar el nivel cultural del pueblo para aumentar la capacidad productora y consumidora.291 Pareciera que el vitalismo se acerca mucho a las concepciones del capitalismo, con la salvedad, que éste denuncia los excesos del mismo y su ley fundamental, la cual es “todo se puede comprar con dinero”. El vitalismo denuncia el hecho que mediante el dinero se produce el monopolio de los bienes que al estar respaldado por un sistema jurídico, se sobrepone y vulnera las necesidades vitales de los desposeídos que subsisten bajo condiciones francamente limitadas. Esto trae como consecuencia la degeneración multiforme: prostitución, migración, criminalidad, etc., y es por eso que Masferrer combate todo tipo de acaparamiento, 288 “Los verdaderos contribuyentes”, Patria, jueves 11 de abril de 1929, No. 283, pág. 1, año I. 289 “Los vicios del presupuesto”, Patria, miércoles 17 de abril de 1929, No. 288, pág. 1, año I. Alberto Masferrer, “La verdad es lo que es”, Patria, jueves 18 de abril de 1929, No. 289, pág. 1, año I. 290 Pedro S. Fonseca, “El mínimum vital y el proteccionismo”, Patria, jueves 2 de mayo de 1929, No. 301, pág. 1, año II. 291 99 en este sentido, denunció específicamente a Pierpont Morgan y a la Wall Street,292 a la que consideraba la mayor acaparadora de dinero en el mundo:293 Así, cuando protestamos contra el Imperialismo Yanqui, lo hacemos con motivo, en cuanto al Negocio de los banqueros neoyorkinos se efectúa a costa de nuestra autonomía, de nuestra dignidad, de nuestra sangre y de nuestra hambre 294 (…) nosotros alzamos y proclamamos, con la Doctrina del Mínimum Vital, frente a la deificación del dinero, la deificación de la vida (…) no abstracta, no filosófica, ni moviéndose en no sé qué regiones nebulosas de la metafísica, sino animal, concreta…295 Esta misma crítica que el vitalismo realizó a la economía política del sistema capitalista, ya la habían realizado Marx y Engels en sus Escritos económico-filosóficos de 1884, en los cuales Engels establecía que ante la expansión del comercio tanto interno como externo de los países, surgió la ciencia del enriquecimiento: la economía.296 Para éste, la economía capitalista se basaba en generar el máximo de riquezas a costa de las masas, en donde cada competidor, monopolizaba para sí mismo en menoscabo de los demás. Esta, según él, era la ética del capitalismo que colocaba en primer lugar las ganancias antes que las necesidades de la mayoría. 297 Masferrer, aunque no compartía las soluciones violentas del marxismo, compartió con él, la necesidad de frenar el expansionismo mercantilista de las naciones poderosas, que se basaba en extraer de las periferias todo el dinero que Alberto Guerra Trigueros, “El Salvador y la moral de Epícteto: hacía un mínimum vital de independencia”, Patria, viernes 19 de abril de 1929, No. 290, pág. 1, año I. En este artículo puede observarse como existió una tendencia libertaría en el país frente una posible conquista de Centroamérica por parte de los Estados Unidos y más específicamente de la Wall Street (que Trigueros preveía ocurriría en unos 15 años). Frente a esta amenaza se trató de formar un bloque orgánico al interior de la región. 292 293 “La vida frente al dinero”, Patria, lunes 13 de mayo de 1929, No. 310, págs. 1 y 5, año II. Marta Casaús, La representación del indio en la generación literaria del 20 en Guatemala: Carlos Wyld Ospina y Carlos Samayoa Chinchilla, Revista Cultura, Revista de la Secretaria de Cultura de la Presidencia, No. 105, enero-marzo 2011, págs. 159 y 160. Carlos Wyld Ospina en base a la teosofía se planteó las soluciones a los graves problemas de la Nación guatemalteca e hizo un llamado de unidad para luchar en contra de la amenaza extranjera yanqui. Junto a autores como Rodó, Masferrer y Unamuno propuso un “hispanismo”. 294 Alberto Masferrer, “La vida frente al dinero”, Patria, lunes 13 de mayo de 1929, No. 310, págs. 1 y 5, año II. 295 296 Karl Marx, Escritos económico-filosóficos de 1884, Editorial Colohue, 1ª Ed., 2006, pág. 3. 297 Ibídem, pág. 23. 100 fuera posible,298 aunque debemos resaltar que en la teosofía también existió cierta postura antiimperialista con la cual probablemente hibridó su pensamiento social. Es en este sentido como debe analizarse el fuerte movimiento antiimperialista que surgió en la región durante la época, sobre todo, durante las décadas de los veinte y los treinta: Entre los pensadores centroamericanos la defensa de la nación y el antiimperialismo estuvieron muy presentes, sobre todo en la primera mitad del Siglo XX. Expresiones de esa posición fueron el guatemalteco Luis Cardoza y Aragón (Flor y Misterio de la danza, 1942) el costarricense Vicente Sáenz (Rompiendo cadenas) el hondureño Froilán Turcios (Ariel) el salvadoreño Alberto Masferrer (El mínimum vital) y el también costarricense Joaquín García Monge (Repertorio Americano 19201939).299 En el aspecto antiimperialista habría que decir que Masferrer apoyó la revista Ariel dirigida por quien fue el secretario personal de Augusto C. Sandino, Froylán Turcios. Masferrer le envió al poeta hondureño un lote de sus principales obras teosóficas cuyo detalle fue el siguiente: 5 ejemplares de Estudios y figuraciones sobre la vida de Jesús, 5 ejemplares de Las siete cuerdas de la lira, 15 ejemplares de Ensayo sobre el destino y 10 ejemplares de La religión universal, todas con el objetivo de que se vendieran en la librería Hispanoamérica y que el producto se aplicara a la difusión de la revista apuntada a la cual, Masferrer, visualizaba como el órgano de la independencia de hispanoamericana:300 Estoy encantado, querido poeta de ver con que fervor aceptó usted la misión de servir con todas sus fuerzas en la empresa del General Sandino que es en estos momentos la más noble y la más alta, después de la que dirige Mahatma Gandhi en la India contra Inglaterra, el otro imperio rapaz y voraz de raja anglosajona que oprime y absorbe al Asia, así como el de aquí oprime y absorbe a nuestra América.301 298 Ibídem, pág. 5. Daniel Camacho Monge, Treinta y cinco años de evolución de la teoría del desarrollo en las ciencias sociales en América Latina, (1974-2009), Revista Reflexiones, vol. 89, Universidad de San José, Costa Rica No. 1, 2010, pág. 151. 299 Alberto Masferrer, “A mi querido amigo don Foylán Turcios de Tegucigalpa”, AGN, Fondo: AM, Serie: 01, correspondencia enviada, subserie: cartas a políticos e intelectuales, caja 1, Exp. 4, folios 1 y 2, San Salvador, domingo 22 de abril de 1928. 300 301 Ídem. 101 Al parecer, la relación entre Masferrer y Froylán Turcios era muy estrecha y se debía a que ambos apoyaban la causa antiimperialista de Sandino. En el Archivo General de la Nación de El Salvador también se encuentra una carta donde Froylán Turcios le agradece a Masferrer, por su gran apoyo a la revista Ariel:302 Fue clara impresión de fuerte optimismo, la que me dejó su bella carta del 24 de abril. La necesitaba mi yo arcano, obscurecido por tanta cosa absurda que se agita alrededor de mis visiones de Libertad y Soberanía (…) No encuentro frases para agradecerle su delicadísimo obsequio en pro de la campaña de Ariel. Usted es siempre el mismo generoso espíritu cuyo peso deja una marca de luz imperecedera. Sus frases sobre el libertador Sandino son nobles y definitivas.303 Masferrer se sentía preocupado por la intervención norteamericana en Nicaragua. En una de sus cartas dirigida a sus hijas Sara y Mercedes, les aseveraba que toda Centroamérica estaba en peligro de caer bajo el dominio yanqui y que era urgente que todos los pueblos de la región se unieran para evitarlo. Masferrer creía que Estados Unidos quería expandir su capitalismo hacia todos los países de América Latina y que era un deber patriótico impedirlo a través del desarrollo del socialismo y de una política de bloqueo económico o de no ingreso a los productos norteamericanos a la región:304 Ahora y aquí en América, con mucha mayor evidencia y concentración que durante la Guerra Mundial, lucharan el Capitalismo, contra el Socialismo, aunque no lo adviertan aun sus combatientes. El capitalismo, a cuyo servicio están los Estados Unidos, no podrá ser derribado sino por el Socialismo, que es su antítesis. Las mujeres de América tienen en esta contienda un gran rol que jugar no de gritos ni de literatura, sino de vida, de actos. Y deberían comenzar creo yo, por declarar el boicot, prolongándolo sin descanso, contra todo artículo, moda, costumbre o uso de fabricación, origen o procedencia norteamericanos, y no cesar en él, mientras los Estados Unidos no abandonen absolutamente su empresa conquistadora, y no se retiren de lo ya conquistado.305 En este apartado es muy importante explicar que aunque Martínez al principio de su mandato tuvo una tensa relación diplomática con Estados Unidos Froylán Turcios, “A mi querido Masferrer: en respuesta a la carta enviada por él”, Fondo: AM Serie 01: Correspondencia recibida, sub-serie: cartas a políticos e intelectuales”, Caja 1, Exp. 31, folio único, Tegucigalpa, Honduras, sábado 19 de mayo de 1928. 302 303 Ídem. Alberto Masferrer, “A sor clarita de la luz”, AGN, Fondo: AM Serie 01, Correspondencia enviada, sub-serie: cartas a familiares, caja 1, Exp. 11, Folios 2 y 3, San Vicente, viernes 21 de enero de 1927. 304 305 Ídem. 102 por el irreconocimiento de su presidencia, posteriormente limó asperezas con el gran vecino del Norte, cuestión que puede comprobarse con las declaraciones que el mismo Martínez proporcionó en una entrevista realizada por el corresponsal en el país de la United Press en enero de 1934, aclarando que, aunque Martínez lo niega, es un hecho que se habían rotó las relaciones entre ambas naciones, principalmente por la violación de los tratados de Washington: El pueblo salvadoreño siempre ha considerado como un amigo al pueblo de Estados Unidos. La falta de reconocimiento del gobierno de los Estados Unidos para el gobierno de El Salvador, no ha cambiado en manera alguna aquellas simpatías. Tampoco ha sido un obstáculo para el desarrollo de las relaciones comerciales entre ambos países. Hoy que el gobierno de los Estados Unidos como una demostración de su política de buen vecino, reconoce la legalidad del gobierno que presido y le otorga su reconocimiento, se inicia una era de mayor cordialidad entre ambas naciones.306 Esto parece haber sido sólo una estrategia de Martínez para legitimarse internacionalmente en el poder, ya que siempre conservó una actitud antiimperialista, lo cual queda demostrado cuando Gregorio Sandino, padre de los generales Augusto Cesar Sandino y Sócrates Sandino quienes habían sido ametrallados por la Guardia Nacional de Nicaragua el 21 de febrero de 1934, agradeció a Martínez por haber enviado a Nicaragua una Misión Diplomática integrada por Antonio Álvarez Vidaurre y los militares Merino y Huezo que dio como resultado que el Presidente Sacasa disolviera mediante decreto dicha guardia. Este acto para Gregorio Sandino significó la restitución de la soberanía nacional del pueblo nicaragüense, ya consideraba que dicho cuerpo militar sólo había sido un instrumento de las fuerzas de ocupación norteamericana y al mismo tiempo puede comprobarse de forma indirecta, al menos, que existía en vínculo antiimperialista entre Masferrer, Sandino y Martínez:307 Con la oportuna cooperación de El Salvador, un nuevo plan de acción fortifica en nosotros la esperanza de mejores días para la Patria; y puedo decir, con sentimiento de gratitud y con orgullo de padre, que es a El Salvador al que se debe que, después de la trágica muerte de mi hijo Augusto, se cumplieran las nobles aspiraciones suyas que lucharon por establecer en todo su imperio el orden constitucional “Declaraciones del General Martínez”, Diario Nuevo, sábado 27 de enero de 1934, No. 53, pág. 1, año I. 306 “Sensacionales declaraciones del padre del General Sandino”, Diario Nuevo, viernes 9 de marzo de 1934, No. 90, págs. 1 y 5, año I. 307 103 interrumpido por el funcionamiento imperfecto de aquella Guardia (…) El Gobierno del general Hernández Martínez ha demostrado prácticamente su devoción por la causa de la justicia...308 Martínez, antes de este incidente ya había dado muestras de su antiimperialismo en la revista El Ateneo de El Salvador cuando dicho órgano publicó un manifiesto estableciendo que la intervención norteamericana en Nicaragua constituía una grave vulneración a todas las soberanías latinoamericanas y que por lo tanto, dicha institución cultural daba todo su apoyo moral a ese país para que recobrara su independencia. El desembarque de flotas de guerra norteamericanas en los puertos nicaragüenses fue interpretado por estos intelectuales como una grave violación al derecho internacional y al territorio de Nicaragua. La firma de Martínez puede observarse al pie de dicho documento:309 Firman: Lázaro Mendoza, presidente; Rosalío Acosta Carrillo, vicepresidente; Hermógenes Alvarado H., vocal; Max H. Martínez, vocal; Saturnino Cortés Durán, tesorero; R. A. Funes, síndico; Juan Felipe Toruño,310 Alfonso Espino…311 Ahora bien, según Masferrer, la economía era un conjunto de órganos cuyas funciones y relaciones debían estar destinadas a garantizar la vida integra: moral, física, mental y espiritualmente. Dichos órganos eran: la familia, las municipalidades, la nación y la humanidad que debían estar al servicio de la colectividad. Para 308 Ídem. “El ateneo de El Salvador lanza su protesta ante el mundo civilizado por la conducta arbitraria e inhumana de Los Estados Unidos”, Revista del Ateneo de El Salvador, Órgano del instituto del mismo nombre, dirigida por el Dr. Francisco A. Funes, enero, febrero y marzo de 1927, Nos. 116, 117 y 118, pág. 4,571, año III, El Salvador, C.A. 309 Juan Felipe Toruño: nació en León, Nicaragua el 1 de mayo de 1898 y murió en San Salvador, El Salvador el 31 de agosto de 1980. Poeta, periodista, novelista e historiador de la literatura nicaragüense, que radicó la mayor parte de su vida en El Salvador. Fundó la revista Darío y fue director de la revista Eco Nacional. Además, fue miembro del Ateneo Nacional de El Salvador del cual llegó a ser Presidente en 1940 y también fue miembro de la Logia Masónica de El Salvador de la cual llegó a ser venerable maestro, colaboró con el Diario Latino y entre algunas de sus obras donde puede percibirse cierta influencia teosófica están: Senderos Espirituales, 1922, Ritmos de vida, 1924, Tríptico de vida, 1935, Hacia El Sol, Vaso Espiritual, Gavidia entre raras fuerzas étnicas de su obra y de su vida, 1969. 310 “El ateneo de El Salvador lanza su protesta ante el mundo civilizado por la conducta arbitraria e inhumana de Los Estados Unidos”, Revista del Ateneo de El Salvador, Órgano del instituto del mismo nombre, dirigida por el Dr. Francisco A. Funes, enero, febrero y marzo de 1927, Nos. 116, 117 y 118, pág. 4,571, año III, El Salvador, C.A. 311 104 Masferrer, toda economía debía realizarse en cooperación, de lo contrario se producía la injusticia social:312 La economía vitalista es, pues, el conjunto de leyes, normas, instituciones y procedimientos, que asegurarán a cada uno, la vida íntegra reducida a su mínimum; a ese grado por debajo del cual ya no hay sino deficiencia, ruina, disolución o muerte.313 Para Masferrer, esto no era una utopía sino un ideal modesto que tenía que realizarse dentro de los límites de lo posible mediante la reforma de las instituciones del Estado, al que le exigía una correcta administración de los fondos públicos que tenían que dirigirse a la satisfacción de los tres elementos fundamentales del vitalismo: alimento, vivienda y trabajo. Propuso suprimir los impuestos a la importación de medicinas, re-orientar las funciones del ejército a la ejecución de obras públicas, establecer un impuesto para el soltero que no fuera padre de familia, fomentar la educación fundando “Patronatos Escolares” con desayuno incluido y retornar a la tierra. El mejoramiento de cada uno de estos elementos conducía al de los demás.314 Para Masferrer, los resortes primarios de la economía vitalista eran: “la comuna, la tierra, el presupuesto, el ejército, la escuela, la sanidad, la justicia, el trabajo y la asistencia pública”. La alcaldía debía trabajar según sus recursos: territorio, agua, comunicaciones, clima, etc., y debía eficientizar los servicios que prestaba administrando lo mejor posible su presupuesto. La tierra era la base máxima de toda forma de organización y debía procurarse que fuera de tipo comunal o familiar, similar al huerto familiar implementado por Martínez.315 Masferrer también creía en un ejército vitalista que estuviera en contacto con las necesidades de la población mediante la reconstrucción de caminos vecinales, repoblación de bosques, erradicación de plagas agrícolas y ayuda en toda clase de Alberto Masferrer, “Economía del Mínimum Vital”, Patria, miércoles 12 de junio de 1929, No. 336, pág. 3, año II. 312 313 Ídem. “No es utópico ni irrealizable el ideal de la doctrina vitalista”, Patria, miércoles 23 de octubre de 1929, No. 446, pág. 1, año II. 314 Alberto Masferrer, “Economía del Mínimum Vital”, Patria, miércoles 12 de junio de 1929, No. 336, pág. 3, año II. 315 105 calamidades públicas. La escuela debía ser el taller donde se formara adecuadamente al trabajador o sea un hombre perfectamente capacitado para ganarse la vida. La salud pública debía ser ante todo de carácter preventiva, se debía buscar el abaratamiento de los medicamentos y, en la medida de lo posible, debía proporcionarse una asistencia médica gratuita. La justicia debía ser pronta y el trabajo debía ser garantizado, bien remunerado y suponía un descanso. 316 En el aspecto bancario, el vitalismo proponía que debía existir un banco central y regulador del Estado, que proporcionara capital con intereses bajos, plazos adaptados a las capacidades reales del campesino y que financiara la agricultura, las industrias y el comercio. En esa época, la banca privada y los usureros particulares no tenían ninguna regulación que les impidiera cobrar excesivos intereses. Además, los que existían no alcanzaban a fomentar todas estas actividades.317 Ahora veremos cómo Masferrer pretendió llevar a la vida su doctrina. 2.4- Institucionalización del Mínimum Vital: Masferrer siempre quiso implementar sus ideales mediante instituciones concretas. Es así como a finales de 1929 valoraba la posibilidad de fundar legalmente un Partido Vitalista para lo cual necesitaba de la firma de al menos 10,000 personas, número que habría sobrepasado con creces en toda la República. 318 Uno de los puntos de discusión entre los vitalistas era si este partido debía participar electoralmente para lograr sus objetivos, y aunque muchos se opusieron, Masferrer consideró que era necesario, estableciendo que los vitalistas debían ser militantes del mismo, ya que su doctrina era de vocación práctica:319 He ahí mis planes, (…) que van a cristalizar en un Partido Social, con un mínimum de aspiraciones y exigencias a favor de los obreros, campesinos, maestros de escuela, sirvientes. Lo que he llamado en Patria el Mínimum Vital sería el resumen y 316 Ídem. “Se necesita un banco central y regulador I”, Patria, martes 18 de febrero de 1930, No. 545, pág. 1, año II. 317 El departamento de Chalatenango está en lamentable abandono, Patria, viernes 4 de octubre de 1929, No. 430, pág. 1, año II. 318 319 Ídem. 106 esbozo de sus aspiraciones y yo seré el inspirador, el orientador, por medio de un núcleo pequeño y escogido de oyentes.320 Masferrer creía que primero se debía de obtener el poder político y luego que los miembros del Partido Vitalista ocuparan cargos públicos. Este proyecto lo visualizó de forma internacional, de tal modo que hubiese partidos vitalistas en todas las naciones.321 Debemos ser muy enfáticos al decir que Masferrer, al principio, no tenía muy claro cómo quería llevar a la práctica su vitalismo, ya que en Patria a veces se hablaba de un “partido” y a veces de una “unión”.322 Cuando Masferrer aún visualizaba su proyecto como un “partido” dictó una conferencia donde estableció sus ideales, los cuales pueden resumirse así: 1) que el Estado garantice a todos los habitantes de la República sus necesidades primordiales, 2) que tal objetivo debe alcanzarse por medios legales, sin el uso de la fuerza y sin lastimar a otro, 3) que tales necesidades deben de cubrirse en la medida de lo posible de forma gratuita: agua, alimentación, vestido, habitación, etc., 4) que no es trabajo ninguna forma de actividad que explote a otro.323 El 10 de octubre de 1929 apareció publicada la noticia en el periódico Patria que el Vitalismo, no era, ni nunca había sido un “partido” sino una “Unión”. Al parecer los vitalistas llegaron a la conclusión que el movimiento aún tenía que tomar más fuerza y que no podían arriesgase a sufrir una derrota electoral, entendiéndose que al interior de la misma se fundaría un partido, ya que en sus estatutos se reservaban el derecho a constituir partidos políticos. La “Unión Vitalista” efectivamente se abstuvo de participar y a moción de Alberto Masferrer se Alberto Masferrer, “Fundación de un partido social en base a lo que he llamado en Patria el Mínimum Vital”, AGN, fondo: AM, serie: 01: correspondencia, sub-serie: cartas a familiares, Caja No. 2, Exp. 90, folio 1, miércoles 1º de agosto de 1928. 320 321 Ídem. La institución de la “Unión” es algo mucho más general que un partido. El diccionario del uso del español, 2ª Ed., Editorial Gredos S.A., Madrid, España, 1998 de María Moliner explica que el término “Unión” se aplica en algunos casos a una asociación de personas o entidades para fines o intereses comunes: Unión de padres de familia, Unión de cooperativistas, etc., y no necesariamente hace referencia a que el carácter de dicha asociación debe ser político. Un “Partido”, según el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, Vigésima segunda Edición, 2001, tomo II, es un “Conjunto de personas que siguen o defienden una misma opinión o causa. 322 Alberto Masferrer, “En acatamiento a la justicia”, AGN, Fondo: AM, serie 10: conferencias y artículos, Caja 1, Exp. 10, folio 1, s/f. 323 107 determinó que dicha institución no podía participar en política militante hasta después de 2 años a partir de su fundación. En ese lapso se escogerían a los hombres más capacitados para una futura contienda.324 En sesión celebrada el 18 de octubre de 1929 quedo constituida de forma definitiva la “Unión Vitalista” de San Salvador procediéndose a elegir a sus funcionarios.325 El jefe de la misma fue Francisco Morán, quien expresó que el ideal vitalista consistía en “la reconstrucción de la sociedad sobre bases más humanas y justas”. Para él, el vitalismo pretendía lograr mejores condiciones de vida para las clases desheredadas, pero con un nuevo y diferente punto de vista al de la lucha de clases, ya que en vez de a la violencia, apelaba al “convencimiento” y a la readaptación del sistema. Otro ejemplo de institucionalización de dicha doctrina, lo encontramos en la Escuela de Comercio de Santiago de María, Usulután, la cual se unió en todo su conjunto a la causa vitalista. Además, al interior del país se conformaron nuevos y numerosos grupos vitalistas.326 Esta idea de un reformismo conciliador con la que nació la Unión Vitalista, ya era muy antigua en Masferrer y se demostraba en artículos como Concordia y pan en el cual les hacía un llamado a los ricos y al Estado a que tomaran conciencia de que al no haber pan en los hogares se acababa la concordia. La idea era que el Estado debía tener una capacidad administrativa de satisfacer necesidades básicas del pueblo. Esto era fundamental para evitar las irrupciones violentas promovidas por el bolchevismo, que caían en la revuelta, el motín, el asesinato y la desesperación. Además, Masferrer pensaba que este proceso de satisfacción de las necesidades animales era anterior a todo proceso civilizatorio, que obviamente era complementario.327 “El vitalismo declara que no es ni será un partido político”, Patria, jueves 10 de octubre de 1929, No. 435, pág. 1, año I. 324 “La Unión Vitalista quedo ya definitivamente constituida”, Patria, lunes 21 de octubre de 1929, No. 444, pág. 1, año II. 325 Francisco Morán, “No es por el odio ni por la lucha como se alcanzara el ideal vitalista”, Patria, domingo 27 de octubre de 1929, No. 450, págs. 1 y 8, año II. 326 327 Alberto Masferrer, “Concordia y pan”, El Día, miércoles 27 de marzo de 1923, No. pág. 1, año I. 108 Aquí, quizás es conveniente delimitar lo que se entendió en esa época por bolchevismo, ya que cuando a Masferrer se le acusó en repetidas ocasiones de bolchevique, éste siempre lo refutó. El bolchevismo fue una doctrina inspirada en las teorías políticas formuladas por Marx y Engels a mediados del siglo XIX. Los bolcheviques fundaron el Partido Social-demócrata de Rusia, el cual fue liderado por Lenin quien con la ayuda de Troski llevó a cabo en 1917 con sentido clasista e internacionalista la denominada revolución bolchevique.328 El objetivo de la revolución fue implementar el programa bolchevique que incluía el control del pueblo y del Consejo Superior de Economía, así como la nacionalización de fábricas, talleres, minas, ferrocarriles y demás medios de producción y de transporte. También se expropiaron todos los establecimientos industriales y se decretaron leyes para abolir la propiedad terrateniente. En fin, se despojó a la clase burguesa del poder político y a los empresarios del poder económico. Todo esto obviamente haciendo ejercicio de la violencia,329 pero sí hemos abordado la forma institucional que quiso adoptar el Mínimum Vital, a continuación veremos su trascendencia en el extranjero. 2.5- Repercusiones internacionales del Mínimum Vital: El movimiento vitalista tuvo algunas repercusiones de carácter internacional, por ejemplo, en Guatemala surgió un grupo denominado “Sociedad Vitalista de Guatemala” que contó con 40 socios fundadores y gran número de adhesiones; su presidenta fue Teresa Masferrer de Miranda330 quien informaba a Masferrer331 de los avances del vitalismo en aquel país.332 Luis Alonso Chica hizo trabajo de difusión Arthur Rosenberg, Historia del bolchevismo, Colección 70, ediciones de pasado y presente, Siglo XXI editores, 1ª Ed., 1977, México, págs. 95, 96 y 97. 328 329 Ibídem, págs. 100 y 101. “Actualidades centroamericanas”, Patria, miércoles 16 de octubre de 1929, No. 440, pág. 7, año II. El reconocido teósofo salvadoreño Emilio Narváez García y Adolfo Pérez Menéndez dictaron conferencias sobre el mínimum vital en casa de doña María Teresa de Miranda. 330 331 “El vitalismo en Guatemala”, Patria, lunes 7 de octubre de 1929, No. 432, pág. 1, año II. “El comité de subsistencias”, Patria, miércoles 30 de octubre de 1929, No. 452, págs. 1 y 8, año II. En Guatemala incluso se quiso organizar un comité de subsistencias de víveres en el caso de que los temporales copiosos arruinaran futuras cosechas o en caso de pérdidas por plaga. 332 109 doctrinaria en Honduras, principalmente, en los sectores proletario y magisterial de la zona norte donde las condiciones de vida eran muy precarias y donde había un gran número de salvadoreños. El Dr. Barrientos fue el encargado de difundir el vitalismo al interior de ese país,333 es más, el Presidente Mejía Colindres de Honduras solicitó su autorización a Masferrer para editar su obra El dinero maldito.334 Sobre el impacto del vitalismo en Guatemala, Masferrer escribió: En uno y otro campo la cosecha es magnífica: el Vitalismo ha nacido aquí con vigor extraordinario, y si está destinado a vivir, será por el impulso recibido aquí. Me solicitan conferencias aquí, en Mazatenango y en Quetzaltenango. Los diarios, hasta Nuestro Diario del señor Hernández de León, me han tratado muy bien. El Tiempo reprodujo todo el “Dinero Maldito” (…) Estoy acabando de corregir las pruebas de “Leer y Escribir” y “La cultura por medio del libro”. Serán diez mil ejemplares. Mis tres conferencias han sido bien taquigrafiadas y dos de ellas serán publicadas en folleto.335 Sobre la labor de Adolfo Pérez Menéndez336 quien colaboró mucho con la difusión del vitalismo en Guatemala reconoció: El Dr. Pérez es un héroe del vitalismo: ha trabajado día y noche con el entusiasmo más fervoroso; ha dado bastante dinero; ha escrito; ha catequizado personalmente a hombres de importancia; hasta ha pasado largas horas de la noche, rotulando él mismo paquetes del Mínimum e invitando a las conferencias.337 “El aniquilamiento de nuestra raza sobrevendrá en cincuenta años”, Patria, lunes 7 de octubre de 1929, No. 439, págs. 1 y 5, año II. 333 “Se editará en Honduras el libro El dinero maldito de Alberto Masferrer” Patria, miércoles 13 de noviembre de 1929, No. 464, pág. 1, año II. 334 Alberto Masferrer, AGN, Fondo: AM, “Le solicitan conferencias y más ejemplares de sus obras”, serie: 01 correspondencia, sub-serie: cartas a familiares, Caja 4, Exp. 224, folio 1, Guatemala, jueves 16 de mayo de 1929. 335 Adolfo Pérez Menéndez: conoció personalmente a Masferrer y fue uno de los impulsores del vitalismo en Guatemala, incluso el mismo Alberto Masferrer le escribió una carta en agradecimiento por su apoyo a la doctrina vitalista, la cual fue publicada en el periódico Patria el sábado 17 de agosto de 1929. Durante la administración de Martínez fungió como Jefe de la Sección Consular y en el aspecto educativo fue impulsor de la reforma universitaria en base a ideas pedagógicas de autores como Ortega y Gasset y Giner de los Ríos. Fue uno de los fundadores y redactores del Diario Nuevo en 1933. El periódico El Día llegó a considerarlo junto al Suplemento La República como los dos órganos oficiales que defendían las posturas gubernamentales de Martínez. Ver: “El Diario Nuevo saldrá este día”, El Día, sábado 25 de noviembre de 1933, No. 4,251, pág. 1, año XIII. 336 Alberto Masferrer, AGN, Fondo: AM, “Le solicitan conferencias y más ejemplares de sus obras”, serie: 01 correspondencia, sub-serie: cartas a familiares, caja 4, Exp. 224, folio 3, Guatemala, jueves 16 de mayo de 1929. 337 110 Para sus adeptos, el vitalismo debía convertirse en una “religión continental”, en este sentido, Masferrer, se proyectó la fundación de una “Unión Vitalista Hispanoamericana”, cuyo fin sería crear en los pueblos de la unión, una conciencia vitalista de destino común, procurando la satisfacción de las necesidades primordiales de los países suscriptores, según las definía el Mínimum Vital, reformando las leyes y cambiando las costumbres. Otras aspiraciones eran crear una economía cooperativa, modificar el régimen de tenencia de la tierra y establecer un salario mínimo. Todo a nivel regional. Masferrer llegó a redactar un borrador de los estatutos de dicha institución.338 En realidad, Masferrer aspiraba a un unionismo regional mediante la figura jurídica del federalismo para conformar una especie de República Federal Centroamericana, aunque sabía muy bien que históricamente, salvo algunas excepciones, esta moción nunca había gozado de mucho apoyo por parte de las elites gobernantes del istmo o se quedaban en meros conatos:339 De tal guisa, si alcanzamos a forjar la Federación, ésta será una realidad; un concierto de pensamientos y de voluntades consistente, durable, con largas proyecciones en el espacio y en el tiempo. Si no se forja, se verá manifiestamente que nuestro destino es la vida de rincón; se irá cada uno a su casa, atrancará su puerta, echara un cerco al frente, como buen indio, y soltará su chucho bravo para que no se acerque el vecino. Pero no nos habremos puesto en ridículo una vez más, y nos quedará la satisfacción de haber acordado y consumado el Separatismo…340 En este sentido, Gabriela Mistral341 también apoyó a Masferrer sobre su proyecto de aprobar una “Constitución Vitalista Hispanoamericana”, tema que expuso en Guatemala. La poetisa chilena abordó, específicamente, el problema de la libertad de prensa y defendió la idea de Masferrer sobre que en América había que Alberto Masferrer, “Unión Vitalista Hispanoamericana”, AGN, fondo: AM, serie: 07, Caja 1, Exp. 1, folio 1, fecha probable: entre el 16 y el 24 de octubre de 1931. 338 Alberto Masferrer, “Más vale así”, AGN, fondo: AM, serie: 10: artículos y conferencias, Caja 1, Exp. 1, folio 2, octubre de 1917. 339 340 Ídem. Gabriela Mistral: su nombre verdadero era Lucila Godoy, nació en Vicuña, Chile el 7 de abril de 1889 y murió en Nueva York el 10 de enero de 1957. Poetiza, diplomática, feminista y pedagoga. Fue la primera latinoamericana en ganar el Premio Nobel en Literatura en 1945 y también ganó el Premio Nacional de Literatura en Chile en 1951. Entre algunas de sus obras están: Desolación, 1922, Lectura para mujeres 1923, Ternura 1924, Tala 1938, Los sonetos de la muerte y otros sonetos elegíacos 1952. Gabriela Mistral visitó El Salvador en 1931 e incluso escribió un artículo sobre el país el cual apareció en varios periódicos durante la presidencia de Hernández Martínez. 341 111 luchar por los pocos espacios de libre expresión que existían, incluso, Masferrer en 1932 autoexiliado en San Pedro Sula, le escribió una carta en agradecimiento. 342 Gabriela Mistral en su correspondencia privada llamaba “amigo” a Masferrer, lo cual demostraba que existía una estrecha relación personal e intelectual entre ellos. Este último, le había hecho llegar algunos ejemplares del Mínimum Vital y acordó con ella reproducir en Patria uno o dos artículos mensuales de su producción.343 Esta afinidad vitalista-teosófica, ya venía desde antes y queda demostrado en el hecho de que cuando Mistral se encontraba en Villa Saint Lois, Francia en 1929, le comunicó a Masferrer que se adhería de forma rotunda al Mínimum Vital: Quería decirle que me llenó de complacencia su trabajo leído en el REPERTORIO, sobre el MÍNIMUN VITAL. La doctrina es sabia y limpia de violencia; su exposición es elevada y clara; el partido que de allí salga tendría un carácter moral, extraño a casi todos los partidos que infectan nuestra pobre América. Advirtiéndole que he evitado toda mi vida sumarme a partidos, le digo que si usted organiza una colectividad en torno de esa doctrina puede anotarme como adherente, y activa si usted los necesita.344 En este párrafo observamos como Gabriela Mistral acotó que el Mínimum Vital era una doctrina libre de violencia, lo cual nos da pie a entrar a un tema por demás interesante, el cual es dilucidar cuál fue la aproximación y distanciamiento que tuvo el vitalismo respecto al marxismo-comunismo. 2.6- Diferencias y similitudes entre el vitalismo y el marxismo: Es muy interesante observar que muchas personas que se adherían al vitalismo decían ser socialistas “verdaderos”, con un socialismo alto y noble y no como “las manifestaciones bárbaras del bolchevismo rojo”. Consideraban como justas las demandas vitalistas que trataban de establecer un equilibrio social en el Alberto Masferrer, “Palabras definitivas a Gabriela Mistral”, AGN, Fondo: AM, serie 01: correspondencia enviada, sub-serie: cartas a políticos e intelectuales, Caja 1, Exp. 7, folios 1 y 2, domingo 15 de mayo de 1932. 342 Alberto Masferrer, “Sobre el envío de ejemplares a Gabriela Mistral”, AGN, Fondo: AM, serie 01: correspondencia, sub-serie: cartas a familiares Caja 4, Exp. 239, folio 3, domingo 8 de septiembre de 1929. 343 Gabriela Mistral, “Adhesión al partido vitalista”, AGN, fondo: AM, serie 01: correspondencia recibida, sub-serie: cartas a políticos e intelectuales, Caja 1, Exp. 46, folio 1, martes 11 de junio de 1929. 344 112 país. Los simpatizantes de Masferrer le hacían llegar cartas en las que lo animaban a continuar con su labor reivindicativa y a que no se preocupara de aquellos que lo tildaban de “comunista”.345 De hecho, el comunismo se veía como una doctrina llena de promesas utópicas y demagógicas a diferencia del vitalismo que, según sus mismos simpatizantes, era una vía más lógica y razonable de aplicar al medio como un derecho de gentes. El vitalismo no pretendía caridad sino igualdad 346 y concientización, por ejemplo, en el departamento de La Paz, los terratenientes alquilaban muy caro a los campesinos los suelos para la siembra de maíz y cereales obteniendo éstos ínfimas ganancias.347 El vitalismo vendría, en consecuencia, a armonizar las relaciones entre el capital y el proletariado: El MÍNIMUM VITAL, como un pararrayos oportuno, será capaz de poner término a la desmedida ambición de los unos y a los rencores de los otros, y como corolario lógico la sociedad entera se librará del doloroso cuadro que le prepara la lucha titánica de clases hacia tendencias opuestas, en las que la armonía huye para dar paso a la sinrazón y al egoísmo (…) ser vitalista es ser patriota y hombre de bien.348 Es importante resaltar que para Matilde Elena López, el vitalismo también tuvo una influencia del socialismo utópico británico, que en muchos aspectos concuerda con el marxismo: También podríamos comparar a Masferrer (…) con Owen, el primer representante del socialismo utópico inglés, por su magnífica crítica al sistema capitalista (…) Owen destaca las contradicciones engendradas por la revolución industrial: El mundo –dice– rebasa las riquezas pero la miseria impera por doquier. Los golpes de su crítica caen sobre la propiedad privada que engendra la desigualdad social.349 Alfredo Castillo, “El vitalismo es la concordia y la salud”, Patria, viernes 11 de octubre de 1929, No. 436, pág. 1, año II. 345 Bartolomé Colleoni, “Los sin trabajo”, Patria, miércoles 16 de octubre de 1929, No. 440, pág. 1, año II. 346 347 Ídem. Joaquín Meléndez, “El vitalismo en la costa Norte” Patria, lunes 18 de octubre de 1929, No. 442, pág. 1, año II. 348 Matilde Elena López, “¿Masferrer socialista utópico, reformista o revolucionario?”, Revista Humanidades, IV Época, No. 2, enero-febrero-marzo, Universidad de El Salvador, 2003, pág. 83. 349 113 En el contexto de la administración de Martínez, fue el Diario Nuevo quien se preocupó por hacer una clara distinción entre el vitalismo masferreriano y el comunismo. Doctrinas que aún en la actualidad, ya sea por ignorancia o por malicia, se siguen confundiendo. El periódico en mención publicó un estudio comparativo, en el cual se establecía que el gran problema que Masferrer siempre quiso resolver, fue el de la democracia en Centroamérica, pero no en un sentido “político” sino “social”. Los medios idóneos para alcanzar este objetivo, tal y como los masferrerianos de ese momento lo hacían eran: la cátedra, la tribuna, la prensa y el libro.350 El vitalismo según este editorial, en esencia, ataca el sistema económicosocial basado en un agresivo “feudalismo”, el cual debía ser contrarrestado mediante acciones concretas que debían irse alcanzando gradualmente, sin utilizar medios violentos, sino por medio de las “ideas” que impulsarían estas reivindicaciones sociales. Desde esta nueva arista, las ideas de Masferrer son, en un sentido no marxista, “revolucionarias”,351 incluso, Masferrer escribió un artículo sobre la necesidad de restablecer los “ejidos” abolidos por Rafael Zaldívar mediante la Ley de extinción de “comuneros” de 1881 y la Ley de extinción de “ejidos” de 1882, 352 por considerar que este era el primer paso para obtener la liberación de la tierra353 y lograr la paz social en el proyecto del Mínimum Vital.354 “Alegato con el que se pretende probar que Masferrer no fue un comunista”, Diario Nuevo, sábado 4 de septiembre de 1937, No. 1,160, pág. 3, año IV. 350 351 Ídem. Matilde Elena López, Pensamiento Social de Alberto Masferrer, Imprenta Nacional, sin datos de publicación, pág. 57. 352 “El reparto de tierras y el impuesto único”, El Día, lunes 7 de enero de 1929, No. 2,798, pág. 2, año IX. Masferrer recibió duras críticas en este punto, ya que en su artículo “La tierra que tenemos” dijo que su aspiración era que “la tercera parte de las familias salvadoreñas tuviera su tierra propia: es decir, sus treinta manzanas cada una” y por otra parte estableció que había que retornar al sistema ejidal, por tanto, si se cumplía la primera aspiración no existirían tierras para formar los ejidos. Esto fue percibido como una grave contradicción en su pensamiento social. 353 Alberto Masferrer, “Necesidad de restablecer los ejidos”, AGN, fondo: AM, serie 01: correspondencia, sub-serie: cartas a familiares, Caja 3, Exp. 173, folio 1, miércoles 19 de diciembre de 1928. 354 114 Fue desde este ángulo que Masferrer se consideraba a sí mismo un revolucionario del pensamiento. En el artículo del Diario Nuevo, se especificó que había dos tipos de “revolucionarios”: el primero, democrático, que combatía el feudalismo, la intolerancia de la iglesia y la monarquía o la supervivencia de los mismos y el segundo, comunista, que atacaba al capitalismo y a todos sus aliados de la clase que fueren. La primera revolución perseguía reivindicaciones de tipo “minimalistas” mientras que la segunda de tipo “maximalistas”. 355 La primera revolución pretendía transformar la propiedad “feudal” en propiedad “capitalistica”, mientras que la segunda se afanaba por convertir la propiedad privada, feudal y capitalistica en socialista, es decir, de todos. La revolución democrática masferreriana no tenía nada que ver con la revolución comunista, ya que esta última se burlaba y hasta cierto punto se consideraba enemiga de ella.356 En este sentido, no es raro que Roque Dalton años más tarde, en su famoso poema en contra del autor, haya escrito con tono burlesco las siguientes líneas: Al principio todo el mundo se moría de la risa frente a la ira impotente de unos cuatro pelones, sus discípulos. Luego, los que más se morían de la risa con las bayuncadas de don Alberto, seguro de que sus diatribas lo único que les hacían era cosquillas, (…) don Alberto Masferrer fue un utopista típico, aunque de medio pelo, subdesarrollado, por falta de poder imaginativo.357 En el texto de dicho poema, Dalton da a entender que con las palabras nunca se lograría nada, y acusa a Masferrer de robarles a los jóvenes su rebeldía. En este sentido, se puede entender la diferencia y aproximación entre ambas visiones. La diferencia, es en cuanto al modo y en el grado como se van a combatir los problemas sociales, y la aproximación se da en coincidir en que efectivamente existen ciertos problemas sociales que deben ser resueltos. 355 Ídem. 356 Ídem. Roque Dalton, Las historias prohibidas del pulgarcito, UCA Editores 2004, 10ª reimpresión 2004, págs. 104 y 105. 357 115 La revolución que los masferrerianos querían llevar a cabo, entonces, era la democrática de tipo “evolucionista” o “reformista” y era la que anhelaban para toda América Latina. Esta pretendía cambiar los grandes latifundios en un sistema de pequeños propietarios estructurado en beneficio de la “industria moderna” en donde agricultores, ganaderos, industriales, comerciantes y banqueros trabajaran en conjunto para lograr el bienestar del pueblo, ya que entendían tal como lo hace la teoría marxista, que la base económica influye de forma determinante en la transformación de las estructuras superiores:358 El feudalismo centroamericano, herido, vuelto una fiera, lo acusó de comunista. Cuando Alberto Masferrer estaba a millares de leguas del comunismo. Cuando Alberto Masferrer no era más que un patriota que quería el engrandecimiento de Cuscatlán y seguidamente de toda Centroamérica. Los llamados discípulos de Masferrer en lugar de artículos sentimentales deberían “definir” la ideología del maestro, para que de una vez la calumnia de sus enemigos y en lugar de ella, se levante airoso su prestigio de republicano autentico.359 Masferrer, en el artículo titulado “Estamos en revolución”, dijo que con el vitalismo se había iniciado una nueva “revolución”, que consistía en un cambio en las ideas y en los hábitos colectivos, impulsados por una “voluntad de cambio”, difiriendo con la “revolución” marxista en que no era subversiva, ni abrupta sino progresiva y lenta, que aspiraba a convertirse en una realidad tangible. 360 Esta “revolución”, según él, no se estaba impulsando sólo en El Salvador, sino que también en toda América Latina y consistía en la reivindicación de los derechos del hombre-animal para después convertirlo en el hombre-dios:361 Alberto Masferrer, “Necesidad de restablecer los ejidos”, AGN, Fondo: AM, serie 01: correspondencia, sub-serie: cartas a familiares, Caja 3, Exp. 173, folio 1, miércoles 19 de diciembre de 1928. 358 359 Ídem. Alberto Masferrer, “Estamos en revolución”, Patria, sábado 14 de diciembre de 1929, No. 491, pág. 1, año II. 360 Los términos “subversivo” y “abrupto” son nuestros, entendemos el primero en el sentido de que el marxismo intenta cambiar el orden capitalista vigente y sustituirlo por el sistema socialista mediante el uso de la violencia, ya que cuando se habla de una revolución generalmente se entiende como sinónimo de insurrección, rebelión o sublevación, lo cual necesariamente implica un trastorno social. Con el segundo, simplemente nos referimos a que es algo violento, no algo gradual. Utilizamos estos términos en contraposición a como Masferrer concibe su doctrina, en el artículo en comento, quien textualmente dice: “Solo que las grandes renovaciones son plantas que germinan despacio y en silencio…” 361 116 Democracia era la palabra mentirosa bajo la cual vivían, corrompiéndolo todo, el cumulo de mentiras que llamábamos “nuestras libertades”; pero, también era la promesa de que esas mentiras alcanzarían alguna vez a ser verdades. Y para que lo fueran, se derramó aquí tanta sangre y se padeció tanta prisión y tanto destierro y se sufrieron penalidades innúmeras de toda clase. En verdad, hemos llevado una vida heroica. Desde 1821 no hemos hecho otra cosa que emanciparnos.362 En 1929 la Unión Vitalista emitió un importante manifiesto oficial en el cual establecía que la lucha de clases debía finalizar en el país. Esto como consecuencia de que el gobierno de Pio Romero Bosque capturó a unos obreros en Santa Tecla que estaban agitando a las masas con consignas comunistas, pero al mismo tiempo expresó que los reos debían ser liberados, porque estaban realizando una legitima protesta de sus derechos y que con encarcelarlos se les estaba coartando su libertad de expresión, aunque como ya hemos analizado la postura vitalista difiere de la comunista en que busca el mejoramiento social bajo la armonía de clases, porque para el vitalismo, la violencia sólo genera más violencia. 363 De hecho, Masferrer en su ensayo La misión del hombre en la tierra, retomó el pacifismo de León Tolstói, quien consideraba que toda forma de guerra era bárbara. Para el maestro, resolver los problemas mediante la lucha entre hombres-hermanos, era uno de los mayores fracasos de la civilización moderna, con toda su literatura, filosofía, ciencia y religión, ya que los mismos hombres desconocían lo fundamental, que es que todos somos hijos del mismo padre, por tanto, no debemos oprimirnos sino que ayudarnos los unos a los otros.364 Por otro lado, mucho se ha tratado de querer clasificar o encasillar el pensamiento de Masferrer; cuando a éste se le criticó que su doctrina del “Mínimum Vital” era utópica, éste lo aceptó en la medida que creía que todas las demás doctrinas que se han interesado por las cuestiones sociales, especialmente, por la pobreza, también lo han sido, es decir, tanto el budismo, el judaísmo, el protestantismo, la teosofía, la revolución francesa como la revolución rusa, han sido 362 Ídem. “Debe concluir ya la lucha de clases dice la Unión Vitalista”, Patria, viernes 13 de diciembre de 1929, No. 490, págs. 1 y 4, año II. 363 Alberto Masferrer, “La misión del hombre en la tierra: el fracaso de la cultura I”, El Día, sábado 24 de marzo de 1923, No. 70, pág. 1, año I. 364 117 “utópicas”, ya que ni aun en el presunto paraíso de la Unión Soviética se le pudo dar a cada quien su mínimo de vida:365 El señor Alberto Masferrer, de San Salvador, ha escrito un opúsculo exponiendo y defendiendo lo que él llama “Doctrina del Mínimum Vital”. No es el señor Masferrer un revolucionario, un socialista, un radical, y, mucho menos un comunista o un anarquista. Es un pensador noble elevado, altruista, humanitario, condolido de la actual miseria social, a la que se halla sujeta el mayor número. 366 2.7- La influencia del vitalismo en Salarrué Después de haber hecho un análisis comparativo entre el vitalismo y el marxismo, creemos muy importante destacar la afinidad intelectual que existió entre Masferrer y Salarrué, obviamente en el aspecto teosófico, pero principalmente en el aspecto vitalista. En cuanto a la primera afinidad, habría que decir que cuando Salarrué leyó Las siete cuerdas de la lira expresó que en Masferrer había un semidiós oculto, puesto que, para él, ese libro sólo podía haber sido escrito por un ser sobrenatural. Además, defendió la concepción masferreriana de Dios, en la cual no encontraba ninguna contradicción como se le criticaba, ya que Masferrer hibridó una serie de creencias religiosas que difícilmente se podían conciliar, cuestión que abordaremos en la segunda parte de este capítulo.367 En 1934 Salarrué escribió que la figura de Masferrer fue para él más que la de un padre la de un hermano y condiscípulo.368 Ahora bien, la influencia del vitalismo en Salarrué era menos conocida –por lo menos hasta antes de la publicación de la reedición del Libro de la vida que ha hecho Marta Casaús– lo cual ha quedado demostrado a partir de las cartas que Masferrer le dirigió a Salarrué cuando éste le comunicó su decisión de no adherirse al partido vitalista, hecho que no debe interpretarse como un rechazo de Salarrué hacia el vitalismo sino sólo como una Gastón Mora, “Crítica del Mínimum vital”, Patria, viernes 14 de febrero de 1930, No. 542, pág. 3, año II. 365 366 Ídem. Salarrué, “A mi querido y admirado amigo”, AGN, Fondo: AM, serie 01: correspondencia recibida, sub-serie: cartas de políticos e intelectuales, Caja 1, Exp. 6, folio único martes 3 de agosto de 1926. 367 Salarrué, “De un condiscípulo”, Diario Nuevo, viernes 7 de Septiembre de 1934, No. 243, pág. 3, año I. 368 118 actitud de independencia. Lo cierto es que Salarrué sí se adhirió al vitalismo desde un punto de vista doctrinario, lo cual puede comprobarse en las siguientes palabras del mismo Masferrer: Nuestra propaganda va muy bien (…) se adhieren nuevos simpatizantes, algunos muy importantes: Rochac, Salazar, Pavón, y ahora Salarrué son ya de los nuestros.369 Salarrué contribuyó con el ideal vitalista al expresar que con el trabajo de todo el tejido social, por insignificante que pareciera se hacía Nación. Además, consideró que si una persona se ayudaba a sí misma, ayudaba a los demás. Creía que todos los trabajos eran importantes: barrendero, secretaria, mozo, oficinista, etc. El punto era que cada quien en su trabajo era tan importante como su amo. Además, habló de la necesidad de incorporar al indio en este proyecto, de reconocerle su valía al intelectual y de concientizar al rico para que dejara de simular que trabajaba y trabajara sin apropiarse del trabajo de los demás.370 Salarrué creía que un “patriota” no podía hacer discriminaciones de nacionalidad o de raza, sino que debía ayudar a sus connacionales a la reproducción de sus propias vidas y es por eso que para él, en los países no existían muchos patriotas. Sostenía que para hacer “patria” el primer paso era educar, culturizar, es decir, sacar al pueblo de su costra de barbarie. 371 De ahí que haya participado activamente en la política cultural indigenista impulsada por Martínez mediante la cual desde estos conceptos hizo “patria”. Salarrué le escribió una carta a Masferrer donde le reconoció su inmensa labor en el campo de las ideas y la forma como estaba organizando su Mínimum Vital para alcanzar una sociedad más justa, de modo que hubiese deseado ayudarle más, pero que carecía de ese espíritu pragmático que Masferrer tanto pregonaba. Salarrué admiraba el vitalismo porque iba encaminado hacia la acción, le insinuó a Masferrer que él podía dar su aporte al vitalismo, pero desde el arte, ya que su oficio Alberto Masferrer, “Algunos intelectuales y Salarrué se unen al proyecto del Mínimum Vital”, AGN, Fondo: AM, serie 01: correspondencia, sub-serie: cartas a familiares, Caja 4, Exp. 240, folio 2 sábado 14 y domingo 15 de septiembre de 1929. 369 Salarrué, “Construyendo un pueblo”, Patria, martes 26 de noviembre de 1929, No. 475, págs. 1 y 4, año II. 370 371 Ibídem, viernes 29 de noviembre de 1929, No. 478, pág. 1, año II. 119 era el de cuentista, escritor y poeta y que sí consideraba que esto era útil para la vida, lo podía ayudar. Salarrué elogió a Masferrer por decir la “verdad” aunque fuera incomprendido y por su capacidad de liderazgo.372 Para efectos prácticos, podría decirse que Salarrué y los demás intelectuales desarrollaron predominantemente la línea artística del Mínimum Vital, muestra de ello es que Salarrué dijo que la vida no sólo era trabajar y descansar, sino también cantar y que esto era lo que proveía de emoción a la Nación. Para él, un pueblo que no cantaba era “desgraciado”, porque mediante el canto expresaba sus alegrías y sus dolores. Para Salarrué, el arte sacaba al pueblo de su apatía, de su temor y de su agobio, entonces, lo que los intelectuales se propusieron como se verá más adelante, era contagiar al pueblo de esa alegría y de ese arte para hacerlo más vital. 373 Salarrué, le fue muy honesto a Masferrer, al decirle que él, por su condición de artista e intelectual, que gustaba de trabajar en privado y por tener un espíritu antigregario, no podía pertenecer a ningún grupo, secta o partido y que esa era la única razón por la cual no se unía a su partido, pero le aclaró que entendía la magnitud de la doctrina, la cual consideraba “bella” y “verdadera” y que más que una doctrina social, a él le parecía una “religión”. Como puede observarse, Salarrué, siempre se inclinaba por el lado de lo místico. Al final, se comprometió con la causa vitalista, pero a su manera, sin ninguna ligadura formal: 374 Escribo a usted esta carta, porque quiero decirle que ayudaré al movimiento vitalista en lo que pueda, dentro de mi propio circulo de vida y entendimiento, por de pronto, escribiendo artículos de carácter vitalista. Además sé que esta carta dará a Ud. una oportunidad para expresar su opinión y su consejo a cerca de aquellos que como yo quieren sin atreverse.375 Masferrer contestó a Salarrué con una serie de cartas donde le decía que, ciertamente, el vitalismo era una nueva “religión”, ya que trataba de unir lo que estaba desunido, refiriéndose a la organización social. El aspecto religioso del 372 Salarrué, “El vitalismo y el arte”, Patria, sábado 14 de septiembre de 1929, No. 413, pág. 1, año II. 373 Salarrué, “Cantar es vivir”, Patria, miércoles 25 de diciembre de 1929, No. 500, pág. 3, año II. 374 Salarrué, “El vitalismo y el arte”, Patria, sábado 14 de septiembre de 1929, No. 413, pág. 1, año II. 375 Ídem. 120 vitalismo consistía en eliminar los egoísmos individuales y suprimir la idea de que en la sociedad, todo: el arte, las leyes, las costumbres, la industria, etc., tiene que ser una lucha constante en donde unos tienen que triunfar por encima de otros, entonces, había que vivir y dejar vivir.376 Masferrer sostenía que el canibalismo de las clases pudientes consistía en absorber la vida de los campesinos y trabajadores hasta exprimirles la última gota de su trabajo, dejándolos casi en condición de “bestias” que no podían gozar de los derechos inherentes a su existencia, en ese sentido el Mínimum Vital aspiraba a ser una nueva conciencia de liberación mucho antes que la teología o la filosofía de la liberación sólo que en base a determinados profetas espirituales como: Ramakrishna, Gandhi y Tolstói y por el lado del pensamiento materialista, obviamente había leído a Marx. Masferrer en estas cartas, entremezcló vitalismo y teosofía, al establecer que la vida era una y que esta verdad se encontraba en las enseñanzas de todas las grandes religiones y filosofías. Se encontraba en la fábula de “El buda y el tigre”, en las enseñanzas pitagóricas que hablaban del respeto a la vida de los animales, en el “Zend avesta” que hablaba de la reencarnación de la vida, en el Antiguo Testamento cuando Moisés estableció “el día de descanso”, en San Francisco de Asís cuando éste habló de los animales como sus hermanos, pero consideró que quien más había entendido la unidad de la vida fue Jesucristo cuando afirmó: “Dios es padre, Dios es mi padre, Dios es nuestro Padre”. (Isaías 64:8; Juan 14:1-4). Entonces, para Masferrer la vida era una,377 porque todos la habían recibido del mismo Padre o Principio.378 Masferrer pensaba que donde Jesús hizo palpable este principio, fue en el “Padre Nuestro”, pues era la forma verbal de comunicación con el Padre, este Alberto Masferrer, “El vitalismo es una religión I, (conversando con Salarrué)”, Patria, lunes 16 de septiembre de 1929, No. 414, pág. 1, año II. 376 Es muy importante destacar que el Gral. Martínez profesaba la misma metafísica del Uno ontológico que Masferrer, la cual explica, incluso en términos muy similares, cuestión que se ventila en los discursos presidenciales de esta tesis. 377 Alberto Masferrer, “El vitalismo es una religión II, (conversando con Salarrué)”, Patria, martes 17 de septiembre de 1929, No. 415, págs. 1 y 5, año II. 378 121 Padre, que era principio de toda criatura y de toda cosa inanimada y que además era una oración colectiva y vitalista, ya que mandaba a que todos los hombres se vieran como hermanos, o sea, la unión de todos los “seres” que emanaban del mismo origen, por tanto, Masferrer concluyó que el vitalismo emanaba de todas la religiones, pero, especialmente de la de Jesús con claro tono teosófico integracionista:379 Si Dios es el Autor de la vida y el Manantial de toda vida; sí él está por esencia, presencia y potencia en todas las formas animadas; si como lo establece San Pablo, y lo confirma Rama Krishna “En Él vivimos, nos movemos y somos,” (…) esto se llama vitalismo, y su fórmula religiosa, definida y clara, es VIVIR Y HACER VIVIR.380 Masferrer sostenía que el Mínimum Vital se originaba del vitalismo en el sentido de que todas las religiones proclamaban el mismo principio de la vida. Ahora bien, el mecanismo o la forma de realizar este principio era el “Mínimum Vital”, aunque él mismo Masferrer lo utilizó indiferentemente en algunas ocasiones en sentido estricto, “Vitalismo” y “Mínimum Vital”, no eran la misma cosa. Ahora bien, con estas explicaciones Masferrer, sin quererlo, desde nuestra perspectiva nos dio la clave para entender porque su doctrina puede denominarse: “VitalismoTeosófico”.381 El Mínimum Vital era el camino para alcanzar la justicia y la gracia divina frente al egoísmo humano. Era metafóricamente como realizar una parte del evangelio aquí en la Tierra: Podríamos decir que el VITALISMO es el árbol, el árbol inmenso de LA VIDA UNA, visto y sentido a través del cristal religioso, por nuestro anhelo por ser UNOS con Dios. Y el MÍNIMUM VITAL, una rama pequeña de ese árbol: manejable proporcional a nuestras fuerzas, laborable, susceptible de ser convertida en una palanca de máxima eficacia, que nos servirá –si le encontramos un punto de apoyo suficiente– para desplazar la vieja, oscura y podrida torre del régimen social que nos agota…382 379 Ídem 380 Ídem. Alberto Masferrer, “Vitalismo y Mínimum Vital, (conversando con Salarrué)”, Patria, jueves 19 de septiembre de 1929, No. 417, pág. 1, año II. 381 382 Ídem. 122 En este último pensamiento Masferrer, explícita la imagen arquetipal del árbol del mundo, que constituye un mito fundacional que ha aparecido en las diferentes culturas de la humanidad. Se encuentra en la mitología germana (yggdrasil), en Mesopotamia (árbol de la vida y la juventud), en el Antiguo Testamento (árbol de la ciencia y de la vida), y en las culturas asiáticas e hindúes (árbol de la juventud).383 Mircea Eliade explica esta representación simbólica de la siguiente manera: El árbol representa en el sentido más amplio, la vida del cosmos, su densidad, crecimiento, proliferación, generación y regeneración. El cosmos se puede percibir como un árbol gigante, es decir, como un organismo vivo que se renueva periódicamente, como si fuera una planta. Por ello, la imagen del árbol simboliza el cosmos, la vida, la sabiduría y, por su puesto la inmortalidad.384 Finalmente, Masferrer estableció que el Mínimum Vital se haría realidad a través de su “Partido” o “Unión Vitalista”, ya que aspiraba a ser una doctrina que transformaría en un sentido real, el sistema económico injusto mediante una multiplicidad de medidas encaminadas a garantizar la vida integra e inmediata, por tanto, le contestó a Salarrué que podía realizar el Mínimum Vital desde su arte, ya que otra forma de realizar el vitalismo, era a través de la inteligencia y la cultura y es por eso que los intelectuales eran tan importantes en este nuevo proyecto emancipador.385 La cultura para Masferrer, era importante y especialmente la lectura, ya que a través de ella se difundían y afirmaban los sentimientos e ideas que edificaban la vida colectiva. Los cuentos, las leyendas y en general la literatura constituían un vínculo para él, pero sólo en la medida que también lo eran para los lectores, por tanto, este era el rol que debía desempeñar el arte, como dotando a la Nación de cierto sentido de identidad.386 María Luisa López Díaz-Ufano, Estudio de la revista “Sophia” (1893-1913), desde la perspectiva arquetipal, Tesis presentada para obtener el grado de doctora en medicina por la Universidad Complutense de Madrid, Madrid, 2011, pág. 183. 383 384 Ídem. Alberto Masferrer, “El Mínimum Vital y el Partido Vitalista”, Patria, sábado 21 de septiembre de 1929, No. 419, pág. 1, año II. 385 Alberto Masferrer, “Arte, ciencia y religión”, AGN, fondo: AM, serie 10: conferencias y artículos, Caja 1, Exp. 14, folio 1, s/f. 386 123 Otros que formaron parte del grupo vitalista, que fue disuelto por causas políticas, según lo expresó el mismo Masferrer, fueron: Rosa Ochoa387 y Amparo Casamalhuapa388 que continuaron siendo fieles a la doctrina,389pero como hemos dicho antes tanto Salarrué como los otros discípulos de Masferrer, durante administración de Martínez, desarrollaron un vitalismo con énfasis en la cultura indígena, por lo que en este momento se hace indispensable examinar tal relación. 2.8- Relaciones entre el vitalismo y el indigenismo: Masferrer creía que las organizaciones sociales indígenas eran más justas, por ejemplo, la inca, en la cual los impuestos y las leyes relativas a la propiedad eran más equitativas, ya que se asignaban parcelas de tierras a todos los estratos de la comunidad: religiosos, nobleza y pueblo en proporción directa a sus necesidades vitales. Entre el pueblo, la tierra se repartía: “per cápita” por partes iguales. A determinada edad, se obligaba al inca a que se casara y se le proporcionaba una casa dotándolo de una pequeña parcela según el número de los hijos.390 Ana Rosa Ochoa: fue una impulsora del movimiento feminista durante el gobierno de Martínez, de hecho, cuando se le otorgó el voto a la mujer en la Constitución de 1938 escribió un artículo titulado: “A propósito del voto femenino” en el cual establecía que la educación en las mujeres era casi nulo por lo que había existido en ellas una degeneración moral. Esto, según ella, era lo que había producido el fracaso de la nación. Cuando hablaba de degeneración se refería a que había que sacar a las mujeres de los prostíbulos e implementar programas de educación sexual. Dijo que la concesión del derecho al sufragio femenino constituyó un gran éxito para las feministas, pero que también fue el fruto de la evolución intelectual de los hombres que estaban cambiando sus conceptos sobre la mujer. También abogó por el apoyo legal a la mujer, sobre todo, para prevenir la corrupción de menores y en lo intelectual creía que se debían de eliminar todo tipo de prejuicios de género. Ver: Ana Rosa Ochoa, “A propósito del voto femenino”, Diario Nuevo, jueves 8 de diciembre de 1938. No. 1,545, año VI. (página editorial, segunda sección). Se ignoran datos personales. 387 Amparo Casamahualpa de Marroquín: nació en Nejapa el 9 de mayo de 1910 y murió en 1971. En 1938 publicó su obra Joven sembrador. Estuvo vinculada al movimiento feminista salvadoreño y fue discípula y admiradora de Alberto Masferrer. Se involucró en la lucha para derrocar la dictadura del Gral. Maximiliano Hernández Martínez. En 1939 pronunció un discurso en el cual denunció la ausencia de libertades por lo que tuvo que salir exiliada del país hacia Honduras. En 1971, publicó una novela con tintes autobiográficos titulada En el angosto sendero. 388 Alberto Masferrer, “Rosita Ochoa y Amparito Casamalhuapa amigas fieles del grupo vitalista”, AGN, folio 2, serie 01: correspondencia, sub-serie: cartas a familiares, Fondo: AM, Caja 4, Exp. 259, martes 26 de agosto de 1930. 389 “El Mínimum Vital en el imperio de los incas I”, Patria, martes 23 de abril de 1929, No. 293, pág. 1, año I. 390 124 Es en base a estos principios, Masferrer quería proponer una nueva ley agraria más eficaz, en donde al pequeño poseedor se le inhibiera de enajenar la tierra durante algún tiempo y al grande, se le impusiera la obligación de no adquirir más inmuebles. Además, Masferrer creía que el indio, al ser propietario permanente se interesaba más por mejorar la tierra, pero que ante la conquista de los españoles y ante el despojo de sus tierras, éste fue esclavizado por los foráneos. 391 Otro aspecto que Masferrer apreciaba de los incas, era que habían organizado un comercio interno en base a la manufactura, especialmente fuerte por su producción de lana, la cual se resguardaba en almacenes públicos para posteriormente ser distribuida entre las familias, según sus necesidades y más específicamente, a las mujeres que habían desarrollado muy bien el arte del hilado y el tejido. Todos los habitantes contaban con la ropa necesaria y el ocio era catalogado como un crimen según su ley, por el contrario, la laboriosidad se retribuía con premios. Los recursos naturales, como las minas, pertenecían a todo el pueblo inca.392 En este aspecto, Masferrer probablemente tuvo alguna influencia de Carlos Mariátegui, quien en su ensayo El problema de la tierra sostenía que el problema del indio, era un problema fundamentalmente económico-social y no pedagógico, étnico o moral. Lo principal a su criterio, era reivindicar el derecho a la tierra. Para el marxista peruano, el mayor problema que enfrentaba su país, era la conservación del sistema feudal encubierto en una burguesía republicana que se había fortalecido a partir de la Constitución liberal que protegía y defendía el latifundio y la servidumbre como instituciones legales y legitimas de producción.393 En realidad, habría que analizar si Masferrer cayó en una contradicción, ya que en ocasiones habló de constituir tierras comunales o ejidales y en ocasiones de repartir pequeñas parcelas de tierra. En el artículo “La tierra que tenemos” 391 Ídem. “El Mínimum Vital en el imperio de los Incas II”, Patria, miércoles 24 de abril de 1929, No. 294, págs. 1 y 7, año I. 392 Carlos Mariátegui, El problema de la tierra, biblioteca virtual universal, 2003, págs. 1, 2. Disponible en: JC Mariátegui - Realidad Nacional. Primer Tomo. Lima: Peisa, 1974 - biblioteca.org.ar. 393 125 estableció que las tierras cultivables en El Salvador, para esa época eran de 30,000 Km² equivalentes a 30 millones de manzanas de 100 mts² cada una. Estas tierras según él, eran las que se tenían que repartir entre los habitantes de la República, que según sus cálculos, eran aproximadamente de 1,700,000. Masferrer sostenía que se tenían que repartir 30 manzanas por cada diez o siete habitantes. 394 Ahora bien, de estos diez o siete habitantes –aseguraba– no todos estaban facultados para cultivar, por lo que proponía repartir la tierra por familias, asignándole a cada una, un poco menos de diez manzanas. Masferrer dice: “Nosotros nos contentaríamos con que la tercera parte de las familias salvadoreñas tuviera su propia tierra; es decir, sus treinta manzanas cada una” 395, pero en su artículo “La crisis del maíz. Hay que volver a los ejidos” expresó lo siguiente: Si se restablece a cada municipio su tierra comunal, sus ejidos, volverán los tiempos en que el maíz no era un problema; en que todo hombre de buena voluntad se iba al ejido, y sembraba el grano bienhechor, o el arroz, o el frijol casero, prometedores de vida y de paz.396 Tal contradicción fue señalada muy enfáticamente en una cartilla de “Juan sin tierra”, pseudónimo que utilizó Carlos Menéndez Castro para confrontarlo. La cartilla apareció publicada en varios periódicos de circulación nacional como: El Diario de Santa Ana, El Diario de Ahuachapán y El Día en enero de 1929: Otra cosa que desorienta respecto a Masferrer, es la contradicción de sus doctrinas. En el artículo LA TIERRA QUE TENEMOS, dice que su aspiración es que “la tercera parte de las familias salvadoreñas tuviera su tierra propia: es decir, sus treinta manzanas cada una”. Y, por otra parte, aspira a que regresemos al sistema ejidal. Si se cumpliera la primera aspiración ¿Dónde quedarían los ejidos: con qué tierras se formarían? Y si volvemos al sistema ejidal ¿Cómo se lograría el reparto de toda nuestra tierra entre la tercera parte de las familias salvadoreñas? ¿Pudiera Don Alberto decirnos cómo armonizara las dos ideas, para que al realizarse puedan satisfacer las dos aspiraciones?397 Alberto Masferrer, “La tierra que tenemos”, Diario de Ahuachapán, miércoles 9 de enero de 1929, No. 989, págs. 3 y 5, año IV. 394 395 Ídem. Carlos Gregorio López, “Alberto Masferrer y Augusto César Sandino: espiritualismo y utopía en los años veinte”, revista Humanidades, Universidad de El Salvador, IV época, enero-febrero-marzo 2003, No. 2, pág. 38. 396 “El reparto de tierras y el impuesto único”, El Día, sábado 7 de enero de 1929, No. 2,798, pág. 2, año IX. 397 126 Menéndez Castro en el desarrollo de esta polémica, manifestó que no existía la manzana métrica, es decir, que tuviera por base el metro cuadrado y que la manzana no equivalía a 100 mts.², sino que en el sistema métrico decimal, esto constituía un área. Le aclaró que la manzana tenía 100 varas lineales y 10,000 varas cuadradas de superficie.398 Masferrer a su vez le respondió con el artículo “Tracemos bien el derrotero”, en el cual le aclaró que él llamaba manzana métrica a la que tenía 10,000 mts.² de extensión superficial, o sea, 100 metros por lado y le reafirmó que el país constaba de tres millones de manzanas métricas de tierra. También le esclareció que él no quería implementar la doctrina de Henry George al pie de la letra sino que solamente sus fundamentos filosóficos.399 El mismo Masferrer afirmó que se inspiraba en varios autores para construir su propia teoría y es por eso que probablemente también se interesó por los sistemas indígenas de producción. Masferrer se defendió diciendo que maneras de organizar el aspecto económico del Mínimum Vital había muchas y que podían variar según los lugares y las épocas, ya que en algunos pueblos resultaba más eficaz aplicar ciertas medidas mientras que en otros, era más factible aplicar otras. De lo que se trataba es que hubiera una mejor distribución de las riquezas, no sólo de la tierra, sino que también del agua, del aire, de la luz, de los animales y en general de todos los elementos de la naturaleza. Todas estas eran sustancias comunes que tenían que ser transformadas por el trabajador para asegurarse a sí mismo la vida. Las formas de cómo se podía lograr podían variar según el maestro y por tanto, no había contradicción alguna sólo eran propuestas que podían implementarse en determinadas circunstancias. 400 Luego Masferrer respondió con otro artículo titulado “Juan sin tierra” en el que acusaba a Menéndez Castro de ser un “terrateniente” que poseía más de 50 caballerías de tierra y que sus ataques eran producto de que él sería uno de los perjudicados si se implementaban sus propuestas. El maestro –rebatió– que en un Carlos Menéndez Castro, “El impuesto territorial: a don Alberto Masferrer”, Diario de Ahuachapán, viernes 11 de enero de 1929, No. 991, págs. 3 y 5, año IV. 398 Alberto Masferrer, “Tracemos bien el derrotero”, Diario de Ahuachapán, sábado 12 de enero de 1929, No. 992, págs. 3 y 5, año IV. 399 400 Ídem. 127 país tan pequeño como El Salvador había señores feudales que poseían tierras de más de 10,000 manzanas, las cuales estaban baldías en su mayor parte y que podían servir a la población.401 Menéndez Castro afirma que Masferrer también argumentó de forma irónica lo siguiente: “Unos burlándose –dice don Alberto– otros seriamente…nos achacan numerosas contradicciones y una confusión perenne en la propaganda del Mínimum Vital”. “A creerles –continúa– nosotros estamos hablando de cosas que no entendemos; barajamos y mezclamos ideas dispares; decimos hoy lo contrario de ayer, y nos enfrascamos cada vez más en un berenjenal en que dejaremos al salir, si salimos, la buena opinión de cordura lógica y claridad que había logrado conquistar nuestra pluma. Y…en fin…quizá habría que creerles, si no fuera que las contradicciones y berenjenales han sido buscados a propósito para conservar la Idea Matriz y hacer pensar en ella”.402 La interpretación que hizo Menéndez Castro de dichas respuestas fue que, Masferrer hacia alusiones a doctrinas ajenas a las del Mínimum Vital para enfatizar ciertos problemas, con lo cual peligrosamente conseguía que se entremezclaran y confundieran: “con tal que la idea matriz venciera la indiferencia de unos y la enemistad de otros (…)” Para él, esto fue sólo una forma de justificar sus contradicciones sin tener realmente argumentos sólidos. El detractor de Masferrer, replicó que de ser ciertas estas palabras, expusiera su verdadero modo de pensar y dejara de teorizar contradiciéndose sólo por ver. 403 Ahora bien, Mariátegui, en lo que al reparto de tierras se refiere, se distanció diametralmente en un sentido doctrinario de Masferrer, porque creía que el fraccionamiento de latifundios en pequeñas propiedades no era algo revolucionario, utópico, herético o bolchevique sino más bien algo descaradamente ortodoxo, constitucional, democrático, capitalista y por tanto burgués.404 Por el contrario, Mariátegui consideraba que la organización de minifundios fue una medida que los países capitalistas europeos adoptaron en contra de la Rusia Alberto Masferrer, “Juan sin tierra”, Diario de Ahuachapán, sábado 19 de enero de 1929, No. 997, págs. 3 y 5, año IV. 401 “El Mínimum Vital: la segunda jornada”, El Día, jueves 14 de febrero de 1929, No. 2,828, págs. 1 y 4, año IX. (Los puntos suspensivos no son míos). 402 403 Ídem. Carlos Mariátegui, El problema de la tierra, biblioteca virtual universal, 2003, págs. 1, 2. Disponible en: JC Mariátegui - Realidad Nacional. Primer Tomo. Lima: Peisa, 1974 - biblioteca.org.ar. 404 128 Soviética. La única solución viable para él, era volver al comunismo incaico o comunismo agrario, aunque el mismo Mariátegui reconoció que el sistema de tenencia de la tierra incaico no era totalmente “colectivo”, ya que efectivamente estaba dividido en parcelas.405 Como puede observarse las formas de organizar la tierra –como en este caso– pueden ser muy engañosas, ya que no se distingue desde un punto de vista doctrinario hasta donde llega la una y la otra. Ahora bien, con el que sí existe realmente una diferencia consustancial, es con el marxismo-comunismo moderno en donde nadie puede llegar a ser dueño de nada, porque todos son dueños de todo. Queremos decir que entre el comunismo inca, según Mariátegui y el marxista, hay ciertas variaciones, ya que por ejemplo, en el primero hubo apropiación individual de cosechas y frutos.406 Abelardo Villegas llega a una conclusión muy similar cuando establece que en el pensamiento de Mariátegui existe una discrepancia entre su marxismo teórico y su marxismo aplicado a los problemas concretos del Perú.407 Esto no quiere decir que Mariátegui cayera en una ingenuidad. Por el contrario, Villegas afirma que el filósofo peruano conocía muy bien la diferencia entre el comunismo moderno y el incaico, ya que el primero fue de tipo agrario y el de Marx y Sorel se dio dentro de una civilización industrializada. La diferencia era que en el primer sistema, el hombre se sometió a la naturaleza mientras que en el segundo, la naturaleza se sometió al hombre. Basado en esto, Villegas sostiene que tratar de comparar ambos comunismos resulta más que problemático, de suerte que sólo guardan cierta semejanza en lo esencial, ya que, en realidad, en el Perú de esa época no podían aplicarse ciertas categorías clásicas marxistas como las de “proletariado”.408 Lo cierto es que, independientemente de los métodos y las formas, ambos admiraban el sistema de producción indígena inca, ya que estos hacían estudios 405 Ibídem, pág. 3. 406 Ídem. Abelardo Villegas, Reformismo y revolución en el pensamiento latinoamericano, Siglo XXI editores, 1ª Ed., México, 1972, pág. 149. 407 408 Ibídem, pág. 160 y 163. 129 sobre la clase de las tierras y su fertilidad, tanto en el aspecto agrícola como minero. En base a estas estadísticas distribuían el trabajo entre las diferentes provincias sin someter a los trabajadores a jornadas agobiantes. El gobierno proporcionaba los insumos indispensables, por lo que el sistema de distribución era casi perfecto. El gobierno, incluso velaba por la salud de los trabajadores y con respecto a la alimentación, crearon almacenes de depósito esparcidos por todo el país dispuestos a nutrir al pueblo en caso de escases y los impuestos siempre volvían al pueblo en forma de beneficio.409 Lo que Masferrer trató de retomar de este sistema, fue que si bien es cierto ningún peruano podía llegar a ser rico, tampoco ninguno podía llegar a ser pobre, no existían lujos ni despilfarros de los recursos, nadie especulaba con los artículos de primera necesidad y no existía la indigencia. Todos los incas vivían con lo indispensable y se aseguraba la vida sólo por el hecho de la existencia, sistema ante el cual los primeros españoles que llegaron –manifestaron– era el más adecuado a la naturaleza de los pueblos americanos primitivos.410 En el contexto salvadoreño fue Manuel Francisco Chavarría, quien expuso en una conferencia vitalista titulada “La economía de los ízalcos” la forma de organización de la tierra de los indígenas del Occidente del país. Según él, el latifundio criollo en esta etnia era casi desconocido. Los ízalcos trabajaban la tierra mediante una extensa serie de pequeños lotes delimitados por setos vivos y sus cultivos esenciales eran: cereales, frutas y maderas de construcción. El hombre – explicó– básicamente se dedicaba a las faenas del campo y la mujer cocinaba, lavaba y vendía sus productos en la plaza. Estableció que el indio tenía un sentido más social de la propiedad privada, con servidumbres411 vitales para los demás y el agua “El Mínimum Vital en el imperio de los Incas II”, Patria, miércoles 24 de abril de 1929, No. 294, págs. 1 y 7, año I. 409 410 Ídem. Se refiere a las servidumbres de tránsito, que es un derecho real que consiste en una franja de terreno que recae sobre un predio sirviente (pasivo) en favor de otro u otros (activo). 411 130 era de todos. Sobre la industria de Nahuízalco dijo: “cada vivienda es una pequeña fábrica y la mujer una excelente manufacturera”.412 Según él, con el tule, los indígenas hacían petates, del carrizo elaboraban tombillas, del morro entretejían huacales y jícaras y del barro fabricaban cántaros, porras, ollas y tazas. En síntesis, Chavarría consideraba que los indios eran muy hábiles con las manos, y –para él– estos trabajos indígenas eran vitales dentro de su cultura. Afirmaba que los ízalcos también tenían muchos conocimientos meteorológicos, por ejemplo, sabían utilizar las fases de la luna y predecir las lluvias para obtener mejores cosechas.413 Para Masferrer, cuando se despojó a los indios de sus tierras estos degeneraron, es decir, fueron sometidos a la más cruel explotación, cayeron en la ignorancia y se fueron corrompiendo por los vicios. Pensaba que era la misma sociedad la que había construido una imagen negativa de la personalidad del indio, caracterizándolo como “haragán”, “incivilizado” y reacio al “progreso”. En las haciendas de los terratenientes continuaba siendo sometido a la esclavitud a la que los redujeron los españoles desde hacía siglos atrás. Masferrer intuyó que socialmente había una gran desidia por mejorarlos en sus condiciones y lo que es más, observa la aspiración por la erradicación del indio en el continente. Es en este sentido que Masferrer pedía justicia para el indio.414 Marta Casaús establece que Masferrer, formuló un proyecto de Nación étnico-cultural y social que podría analizarse desde 3 vertientes: 1) como República, 2) como región centroamericana ubicada dentro del continente y 3) como una actitud de búsqueda hacia una identidad nacional genuina con expresiones culturales en arte y literatura estrechamente ligadas a la concepción de raza.415 Desde esta perspectiva, podría decirse que las tres influyeron en el Grupo Masferrer del cual “Conferencia de Alfonso Rochac en San Pedro Sula”, Patria, miércoles 9 de octubre de 1929, No. 434, pág. 3, año II. 412 413 Ídem. Alberto Masferrer, La doctrina del Mínimum Vital, Tomo I, Biblioteca Universitaria, Volumen XI, Universidad Autónoma de El Salvador, 1948, pág. 197. 414 Marta Casaús, El vitalismo de Alberto Masferrer y su impacto en el pensamiento de América Central, Revista Cultura, No. 102, enero-julio 2010, pág. 87. 415 131 hablaremos a profundidad en el capítulo III y después de su disolución, principalmente, en artistas criollos como: Salarrué o María de Baratta, 416 pero quizás por el talante artístico y literario de sus discípulos, fue más marcada esta última línea:417 Así pues la nacionalidad positiva para Wyld Ospina, como para otros autores del espiritualismo nacionalista. Asturias Morales, Juárez Muñoz, y Masferrer pasaba indefectiblemente por la adquisición de la ciudadanía plena y diferenciada, por el reparto de la tierra y de la riqueza y por el pleno reconocimiento de los derechos individuales, socioeconómicos y culturales de todos los grupos sociales que habitan la nación y la adquisición de derechos sociales.418 De hecho, María de Baratta en 1930 publicó su obra Cuscatlán Típico, la cual presentó en el concurso de música regional salvadoreña, organizado por el Secretario de Instrucción Pública, Sarbelio Navarrete,419 obteniendo el primer lugar con mención honorifica. La etnomusicóloga manifestó que como “criolla” quería recuperar el arte autóctono de diferentes épocas. Dentro de su repertorio estaban: María Mendoza de Baratta: nació en San Salvador en 1890 y murió en San Salvador en 1978. Fue una etnomusicóloga muy reconocida a nivel internacional. Es conocida por sus investigaciones sobre música autóctona de El Salvador, entre sus principales obras se encuentran: Los tecomatillos, Con Calagüi Tunal, Ofrenda elegida, La campana llora, Nahualismo, Danza del incienso, Bacanal indígena, Collar de dientes, entre otras. Colaboró con Masferrer en la recuperación de la identidad nacional y durante el gobierno de Martínez formó parte del Grupo Masferrer. También en este periodo realizó sus más importantes descubrimientos referentes a la cultura autóctona. Ver: Gilberto Aguilar Avilés, et al, Humanistas de El Salvador, Colegio de humanistas de El Salvador, 1ª Edición, sin fecha, págs. 123 y 124. 416 Marta Casaús, El vitalismo de Alberto Masferrer y su impacto en el pensamiento de América Central, Revista Cultura, No. 102, enero-julio 2010, pág. 90. 417 Marta Casaús, La representación del indio en la generación literaria del 20 en Guatemala: Carlos Wild Ospina y Carlos Samayoa Chinchilla, Revista Cultura, Revista de la Secretaria de Cultura de la Presidencia, No. 105, enero-marzo 2011, pág. 165. 418 Sarbelio Navarrete: nació en San Vicente en 1879 y murió en San Salvador en 1952. Abogado. Su tesis doctoral se tituló El Estado Centroamericano, aplicando la doctrina del materialismo histórico de Marx. Fue Ministro de Instrucción Pública, Ministro General de Hacienda, Rector de la Universidad de El Salvador (1936) y miembro de la Academia Salvadoreña de la Lengua. Viajo por Suramérica y conoció personalmente a José Ingenieros. Su obra fundamental es En los jardines de Academo de donde se extraen: Ante la estatua de Goethe, Bajo el signo de Descartes, Panegírico de la ciudad de San Vicente entre otras.419 Fue amigo de Alberto Masferrer, incluso, en algunas ocasiones entablaron discusiones intelectuales públicas lo cual puede comprobarse en artículos como “La toma de la Bastilla” de Navarrete y su respectiva respuesta “La toma de la Bastilla” de Masferrer en el cual llegó a reconocer la capacidad intelectual del vicentino.419 Formó parte del Grupo Masferrer y fue homenajeado en vida por el gobierno de Martínez. Ver: Roxana Beatriz López Serrano, Cien escritores salvadoreños, Editorial Clásicos Roxsil, 1997, pág. 103 y Sarbelio Navarrete, En los jardines de Academo, Colección Eterna, Editorial Universitaria, 2ª Ed., 1977, págs. 259-263. 419 132 “La yegüita”, “El torito pinto”, “Tunco del monte”, “El venadito”, entre otras que trataban de recuperar la cultura de los centros indígenas del país como: Chirilagua, Cacaopera, Panchimalco y Nahuízalco.420 De la época colonial estaban: “El son del medio real” y “El Barreño”. Escribió también otras piezas musicales como: “Siguápil” (muchacha), “El mango”, “Me quiero casar”, “Llamando a vísperas”, “Canto de cuna” y “Honores a los chivos”. Todas con el propósito de recuperar el folklore salvadoreño.421 En Guatemala fue Arévalo Martínez quien impulsó el regeneracionismo del indio, estableciendo que de ningún modo era una raza inferior; por el contrario, sostenía que moralmente eran muy superiores al hombre occidental y estaban dotados de una gran inteligencia, por lo que sólo se necesitaba educarlos y desalcoholizarlos.422 Masferrer por su parte, opinaba que la novela Madre Maya, de Elisa Hall de Asturias, también era vitalista, ya que describía la degeneración de la raza a través del alcohol. Es muy interesante observar como mucho literato estuvo ligado al vitalismo, y como desde el campo de la literatura se dibujaron los problemas reales. Es preciso decir que esta escritora estuvo ligada a la Unión Vitalista guatemalteca.423 Masferrer creía que había que fundar más escuelas rurales, en las cuales se debía contemplar el doble componente del indio, es decir, el cultural y el económico. Debían de contar con un plan práctico enfocado en la agricultura y al mismo tiempo, incorporar al indio a la civilización. Se trataba de crear nuevas posibilidades para el indio, lo más importante era enseñarles mejores técnicas de cultivo. Este proyecto se empezó a implementar en Guatemala, 424 pero ahora que hemos desarrollado los diferentes componentes teóricos del Mínimum Vital, haciendo “La música regional de doña María de Baratta es un hermoso triunfo para el arte criollo”, viernes 14 de diciembre de 1930, José Dutriz y el Diario La Prensa, colección “orígenes”, vol. 12, 1ª Edición, CONCULTURA, 2002, págs. 256-258. 420 421 Ídem. 422 R. Arévalo Martínez, “El indio”, Patria, jueves 13 de febrero de 1930, No. 541, pág. 3, año II. 423 “Madre Maya”, Patria, lunes 26 de agosto de 1929, No. 396, pág. 3, año II. 424 “Justicia para el indio”, Patria, miércoles 24 de julio de 1929, No. 371, pág. 5, año II. 133 alusión a algunas implicaciones prácticas, a continuación veremos como influyó en los dos periodos presidenciales anteriores a la gestión de Martínez. 2.9- Implicaciones del vitalismo durante la Presidencia de Pio Romero Bosque: En 1928 le hicieron saber a Masferrer, eufemísticamente a manera de súplica, que debía suavizar su campaña socialista, ya que los cafetaleros y banqueros estaban haciendo mucha presión en el gobierno de Pio Romero Bosque para acallarlo. Masferrer creía que querían silenciarlo permanentemente por su campaña reivindicativa a favor del pueblo. Como medida defensiva pensó en seguir difundiendo su doctrina entre los obreros organizados que se lo solicitarán y se rehusó a abandonar su lucha a pesar de la censura a la que lo querían someter,425 ya que en los periódicos siguió publicando constantemente. El gobierno de Romero Bosque realizó algunas muestras de querer resolver el problema de la vivienda; en la Asamblea Nacional se discutió mucho la necesidad de aprobar una ley reguladora de los precios de las habitaciones. El Alcalde de San Salvador, Manuel Antonio Zamora, nombró una junta de vecinos para que acuerparan la moción impulsada por Alberto Masferrer y Napoleón Viera Altamirano.426 En el aspecto propiamente cultural y a instancias de Alberto Masferrer, el Ejecutivo, queriendo intensificar la educación pública inició una política de alfabetización que consistió en promover la lectura por medio de obras didácticas de todas las disciplinas posibles y acordó declarar completamente libre, sin gravámenes aduanales o impuestos fiscales la importación por cualquier vía de libros, revistas o artículos impresos ya fueren de carácter cultural, artístico o científico. 427 Durante la presidencia de Romero Bosque, el Ministerio de Hacienda, elaboró un proyecto de ley para la creación del Banco Hipotecario de El Salvador y Alberto Masferrer, “Llamado de atención a suavizar su campaña socialista”, AGN, fondo: AM, serie 01: correspondencia enviada, sub-serie: cartas a familiares, Caja 2, Exp. 83, folios 1 y 2, miércoles 30 de julio de 1930. 425 “Se estudia el problema de la vivienda barata”, Diario Latino, jueves 31 de octubre de 1929, No. 11,589, pág. 1, año XXXVIII. 426 427 “Abaratamiento del libro”, Patria, martes 24 de diciembre de 1929, No. 499, pág. 1, año II. 134 para someterlo a consideración de la Asamblea Nacional se formó una comisión integrada por algunos miembros del gabinete con el objeto de estudiarla y llevarla a justa aprobación. La comisión estuvo integrada por: Francisco A. Lima, Emeterio Oscar Salazar, Napoleón Viera Altamirano y W. W. Renwick,428 pero como es sabido, dicha institución no fue creada, sino hasta en tiempos de Hernández Martínez. Lo que es cierto, es que el mismo Masferrer elogió la buena administración de Romero Bosque, diciendo que éste no le tenía miedo a las ideas progresistas y que con su gestión había contribuido a forjar el ideal vitalista: 429 El doctor Romero Bosque se ha demostrado como hábil administrador. La situación fiscal era delicada. Recibió pesadas y duras cargas. Sin embargo, va saliendo de esa difícil situación con relativa facilidad. El sesenta por ciento de los derechos de importación que constituyen una de las entradas principales del fisco, está destinado al empréstito. El servicio de este no ha sido interrumpido un solo momento, afirmándose así el crédito de El Salvador. Los demás servicios públicos tampoco han sufrido la menor interrupción (…) El señor Romero Bosque no se asusta ante ninguna idea y permite su discusión doctrinaria. El resultado que esto da? Pues es bien sencillo, la gimnasia de la intelectualidad que se despierta y se aviva en la preocupación de estudiar los problemas fundamentales de la vida. Es así como la serenidad del Presidente está operando una verdadera transformación en el pensamiento salvadoreño, hoy libremente expresado y no se le puede ni se le debe negar mérito que por ello le corresponde.430 Ahora bien, aparentemente Pio Romero Bosque no quería que un candidato militar gobernara el país, incluso emitió un importante comunicado manifestando que según la Constitución Política, al ejército sólo le correspondía: cumplir la ley, guardar el orden público, hacer cumplir las garantías constitucionales y especialmente velar por la paz interna y externa del país, por tanto, les solicitó a los candidatos militares que se abstuvieran de participar en política partidaria bajo la consigna de que perderían su neutralidad.431 “Comisión estudiara el proyecto de ley del Banco Hipotecario”, Patria, viernes 21 de febrero de 1930, No. 548, pág. 1, año II. 428 “El presidente Dr. Romero Bosque se muestra como un hábil administrador”, La Prensa, sábado 28 de mayo de 1929, No. 5,289, pág. 1, año XVII. 429 430 Ídem. “La nota saliente del mensaje presidencial”, Patria, sábado 22 de febrero de 1930, No. 549, pág. 1, año II. 431 135 La solución que adoptó Martínez fue muy astuta, pidió la baja del ejército y participó como un ciudadano civil, pero lo interesante del caso es que sus seguidores, entre ellos Benjamín Orozco, Guillermo Herrador Tejada y Humberto A. Fischnaler que formaron el “Partido Nacional Republicano” lo motivaron a incursionar en el campo de la política desde un discurso eminentemente vitalista, que era muy acorde con los artículos escritos por Martínez en el periódico Patria y que analizaremos en el capítulo IV: Usted desea que mejore la administración pública, que mejore la enseñanza, la agricultura, el comercio y la industria, que se abarate la vida y la vivienda, que el derecho al voto sea efectivo, pero si nada hace porque todo mejore en su patria, no verá usted que las cosas se hagan por sí mismas. Su participación en política es el remedio para todos los males nacionales.432 En el manifiesto doctrinario que lanzó dicha institución política antes que Martínez decidiera fusionarse con el partido de Arturo Araujo, expresaba que uno de sus objetivos, era buscar el mejoramiento social y lograr el engrandecimiento de la Patria. Entre sus principios ideológicos estaban: 1) velar por la autonomía e integridad de la Nación; 2) buscar la armonía entre las clases sociales a través de los principios de libertad, igualdad y justicia, 3) propiciar e impulsar el mejoramiento intelectual y moral del obrero y del campesino, por medios prácticos y eficaces, 4) sustituir la renta de agua ardiente por otros impuestos y 5) velar por la autonomía universitaria.433 El programa político del partido que apoyó a Martínez se vio influenciado por el vitalismo de Masferrer, inclusive, éste publicó el referido manifiesto en su periódico Patria, ya que hacía referencia a cómo superar el problema de la carestía de la vida, estableciendo que los suelos estaban agotados y que las cosechas eran insuficientes para la alimentación del pueblo y que debido a este déficit, el país tenía que importar los productos de primera necesidad. También retomaron el discurso de Martínez, al establecer que el Estado debía proporcionar abonos y trataron como 432 “Escriben los martinistas”, Patria, jueves 27 de febrero de 1930, No. 558, pág. 1, año II. Manifiesto del Partido Republicano conteniendo su credo, (hoja suelta), San Salvador, jueves 29 de agosto de 1929. 433 136 punto esencial, la generación de empleo para el obrero.434 Ahora bien, si el vitalismo tuvo algunas repercusiones en el gobierno de Romero Bosque habría que decir que Masferrer fue uno de los principales factores para que Arturo Araujo alcanzara la presidencia. 2.10- Implicaciones del vitalismo durante la Presidencia de Arturo Araujo: Cuando Masferrer hizo público su apoyo a la candidatura de Arturo Araujo, fue severamente criticado por los redactores del periódico capitalino La Barra,435 quienes reconocieron que durante muchos meses en el diario Patria, Masferrer, había sostenido una labor de un autentico apóstol, propagando a los cuatro vientos su doctrina del Mínimum Vital, pero que ésta al final, sólo resultó ser una mera maniobra para catapultar sus aspiraciones políticas. Esta hipótesis la fortalecerían al decir que fue por esta razón que Masferrer renunció súbitamente a la dirección del mismo a mediados de 1930.436 Lo acusaron de “politiquero” y de haber traicionado a la población por predominar en su actitud, más el aspecto político que el social, aún más, establecieron que traicionó a todos los que habían puesto su fe en él, ya que el vitalismo comenzó de forma muy débil al principio, pero después cobró mucha fuerza con personalidades muy renombradas a las cuales –pensaban– había abandonado:437 El Mínimum Vital vive ahora sin su Apóstol. Los vitalistas de corazón y cerebro siguen siendo vitalistas; los vitalistas de estómago y bolsillo, se replegaron, naturalmente, al ismo que abrazará don Alberto el pequeño. Si Masferrer, desde “Programa del Partido Nacional Republicano”, Patria, viernes 28 de marzo de 1930, No. 678, pág. 5, año II. 434 La Barra fue un periódico de opinión pública y crítica nacido en San Salvador en septiembre de 1930. Pretendía superar a todos los periódicos de la época que, según su programa inicial, sólo daban una visión parcial de los problemas nacionales, aunque no se menciona quien fue su director y redactores. Aparentemente no tuvo director ya que tampoco consta en las páginas principales. Su lema fue “Un periódico para todos”. Algunos colaboradores fueron Jacinto Castellano Rivas y Alfonso Rochac. En realidad, no se cuentan con muchos datos del mismo, debido a que en esta investigación sólo se encontraron unos pocos números. 435 “Masferrer, el apóstol y don Masferrer el político”, La Barra, jueves 25 de septiembre de 1930, No. 1, págs. 3 y 5, año I. 436 437 Ídem. 137 un principio, sabía hacia donde caminaba y por qué camino conducía al vitalismo, engañó; si obro de buena fe y las circunstancias o las conveniencias le hicieron torcer el rumbo, traicionó.438 El periódico El Día atribuyó el triunfo del Partido Laborista, principalmente a Alberto Masferrer quien durante la breve presidencia de Araujo, se convirtió en diputado de la Asamblea Legislativa, hecho por el cual también fue muy duramente criticado, ya que cuando fue director del periódico Patria instó a los diputados como parte de su Mínimum Vital a que renunciaran a sus medias dietas, cosa que hicieron algunos como Gabino Mata y a que se redujeran sus salarios para invertir los fondos en otras cuestiones más importantes, pero veían de mala manera que él iba a gozar de una pensión más su sueldo de diputado.439 El Día no sólo lo criticó, sino que también fue tajante en reconocer que sin la participación de Masferrer, Araujo no hubiera llegado a la presidencia: En primer lugar, salta a la vista la labor de don Alberto Masferrer. Como jefe del departamento de organización y control del araujismo, realizó una obra de verdadero empuje, que luego completó como escritor y como orador, definiéndose como el primer ideólogo del partido triunfante en las últimas elecciones.440 Todos los sectores sociales esperaban que Arturo Araujo cumpliera con sus promesas de campaña, especialmente lo que atañía a la doctrina de Masferrer sobre distribuir calzado barato y buen vestido a los sectores más vulnerables, desalcoholizar a la sociedad aminorando su distribución y más importante, se esperaba que implementara una buena reorganización de las fuerzas de producción.441 El programa de gobierno que propuso Arturo Araujo y en el que se nota la mano de Masferrer, estaba basado en los siguientes puntos: 1) reducir a 6 horas diarias la venta de licores, 2) mejorar y ampliar la educación de los militares para que 438 Ídem. “Las intemperancias de Masferrer”, El Día, sábado 7 de mayo de 1931, No. 3,448, pág. 1, año XI. 439 “El triunfo de don Arturo Araujo”, El Día, sábado 31 de enero de 1931, No. 3,418, pág. 7, año XI. 440 “Don Arturo Araujo presidente electo”, El Día, viernes 13 de febrero de 1931, No. 3,429, pág. 1, año XI. 441 138 ayudaran en actividades de tipo económico, 3) llevar agua buena y bastante a todas las poblaciones del país, 4) fomentar la autonomía de las municipalidades y hacerlas más eficientes, 5) capacitar a todo el sector obrero del país,442 6) reorientar la escuela primaria para preparar mejor a los trabajadores, 7) proteger a la mujer proletaria, 8) construir la Universidad de El Salvador entre otras.443 La participación activa de Masferrer en el proselitismo de Araujo fue clara: El candidato Araujo acompañado de sus familiares y de algunos partidarios suyos, presenció la manifestación desde el segundo piso de su residencia en donde tomó la palabra don Alberto Masferrer (…) esta manifestación, la más numerosa hasta hoy en la actual contienda cívica, estaba integrada por señoritas, obreros y campesinos…444 Cuando a Arturo Araujo se le acusó de “comunista” y se dijo que el laborismo, el comunismo y el vitalismo eran la misma cosa, Masferrer salió en su defensa publicando un artículo en el periódico El Espectador titulado “La psicología del araujismo”, en donde de manera enfática expresó que tal afirmación era un disparate que sólo podía provenir de personas ignorantes que no conocían la esencia de cada ideología, pero periódicos como El Día insistieron erróneamente en seguirlos llamando a ambos bolcheviques.445 Masferrer dijo que el Mínimum Vital no tenía nada que ver con lo que él llamó “una doctrina de dislocación y trastorno, de un plagio inútil y nocivo de las ideas rusas, de una floración más del comunismo que tendían al rebajamiento, al desorden y al despojo”. Masferrer les contestó a los que lo tildaban de comunista que tenían que informarse más, leyendo su folleto del Mínimum Vital y sus más de 200 artículos explicativos en Patria. También los exhortó a que pusieran más atención a sus conferencias.446 Arturo Araujo, “Mi programa de gobierno”, El Día, viernes 26 de septiembre de 1930, No. 3,313, pág. 7, año X. 442 443 Ibíd., 27 de septiembre de 1930. No. 3,314, pág. 2, año X. “La manifestación araujista de ayer en la tarde”, El Día, lunes 6 de octubre de 1930, No. 3,321, pág. 1, año X. 444 445 “Tiene razón don Alberto”, El Día, martes 25 de noviembre de 1930, No. 3,364, pág. 1, año X. Luis Alonso Aparicio, Alberto Masferrer, Pedagogo-político, 1ª Ed. Universidad Pedagógica de El Salvador, 2007, pág. 52. 446 139 El acercamiento de Masferrer al laborismo de Araujo, probablemente vino por el lado del socialismo fabiano, que de forma alterna a los enunciados marxistas y revolucionarios pretendía sentar las bases de un socialismo democrático y moderado,447 mismo del cual también adoptó su tendencia cooperativista. 448 El socialismo fabiano era una vertiente del socialismo utópico de Robert Owen en Gran Bretaña.449 En el siguiente capítulo veremos como la teósofa Annie Besant, en una etapa temprana de su vida, también estuvo vinculada a este movimiento y ahondaremos un poco más en el tema. Desde esta perspectiva, Masferrer trató de impulsar un proyecto socialdemócrata que ha funcionado en teoría.450 Ahora bien, esto, desde una visión de izquierda, ha constituido una victoria del ala de derecha del Partido Laborista, en el sentido de que sólo hace ajustes al modelo capitalista para desbarbarizarlo. Este reformismo ha venido a garantizar la viabilidad y continuidad del sistema capitalista.451 Es por eso que Araujo, durante su corto período presidencial hizo algunas gestiones para conseguir tierras con el objeto de fraccionarlas entre los agricultores pobres y de esta manera, multiplicar el minifundio que era considerado como la base de la justicia social de los pueblos. De esta forma, su gobierno pretendía paulatinamente ir adquiriendo parcelas para repartirlas dentro de un marco constitucional y no como se había hecho en México, mediante la expropiación de “facto”. La idea despertó alguna simpatía entre los terratenientes que le aseguraron José Luis Ramos Gorostiza, Beatrice Webb y el socialismo fabiano, pág. 1, disponible en: eprints.ucm.es/6735/1/0113.pdf 447 Luis Alonso Aparicio, Alberto Masferrer, Pedagogo-político, 1ª Ed. Universidad Pedagógica de El Salvador, 2007, pág. 5. 448 449 Ibídem, pág. 8. Decimos “en teoría” porque en la realidad por lo menos en nuestro país el vitalismo fue muy utilizado por las dictaduras militares. 450 Rafael Rodríguez Prieto, Democracia y neocapitalismo en la década de los ochenta. Las dos izquierdas frente a la gobernabilidad, Revista Polis, Universidad Bolivariana, Santiago de Chile, 2005, vol. 4, No. 10, pág. 3. 451 140 estar dispuestos a entregar varias extensiones de sus latifundios para el proyecto apuntado,452 el cual posteriormente se vio frustrado: La bandera de la reforma agraria, realmente tan de justicia social en El Salvador, atrajo a los miles y miles de colonos y peones jornaleros de occidente. Era la vieja ulcera de la tenencia de la tierra en pocas manos, de la propaganda del ilustre Masferrer. La doctrina del autor del “Mínimum Vital” fue un rayo de esperanza que deslumbró al campesino indígena pipil.453 Un pequeño éxito en este sentido, fue el fraccionamiento de la Hacienda “Santa Rosa”, propiedad nacional que fue repartida a moción del diputado Alberto Masferrer. Esta hacienda sería la primera de una serie de latifundios que el gobierno de Araujo pretendía adquirir, pero el reparto falló debido a que el número de parcelas era muy ínfimo en comparación a las solicitudes presentadas, de tal modo que se estableció una relación de 200 candidatos por parcela, lo cual en lugar de conciliar trajo más inconformidad por parte de los campesinos excluidos.454 Fue un caso concreto donde Masferrer aplicó sus ideas, pero lastimosamente la hacienda no daba para tanto.455 Otro punto de la agenda vitalista que Araujo quiso implementar fue la construcción de casas baratas para obreros y campesinos, incluso, mando a construir una casa modelo que pretendía alcanzar las mejores dimensiones y confort por el más mínimo precio. La casa era de cemento armado, constaba de sala, dos habitaciones, cocina, baño y un pequeño patiecito y su precio no pasaba de 2,000 colones. El proyecto piloto era construir 50 casas más de las mismas características e incentivar al capital a seguir el ejemplo.456 La construcción de estas casas baratas vendría a paliar en teoría el grave problema de los mesones que eran focos de infección de tifus y tuberculosis. 452 “Tierras para agricultores pobres”, El Tiempo, sábado 4 de julio de 1931, No. 620, pág. 1, año III. Luis Lovo Castelar, Biografía del General Maximiliano Hernández Martínez, (1887-1966), Ediciones Rescate, Ateneo de El Salvador, 2ª Ed. 1999, págs. 16 y 17. 453 454 Mariano Castro Morán, Relámpagos de libertad, Editorial Lis, 2ª Edición, 2000, pág. 14. “La parcelación de la hacienda Santa Rosa y los ratos de la Asamblea”, El Día, sábado 18 de abril de 1931, No. 3,478, pág. 1, año XI. 455 “La construcción de casas baratas para obreros”, El Tiempo, lunes 6 de julio de 1931, No. 622, pág. 1, año III. 456 141 Además los mesones eran verdaderos tugurios sin luz, sin aire y con estrechos corredores.457 Según la baratura del mesón así era su clase, los de mayor precio eran habitables, los de cuota reducida que, eran la mayoría, eran antihigiénicos y existía un gran hacinamiento.458 Muchos mesones por su antigüedad, tenían muros desnivelados y grandes grietas por lo que el gobierno de Araujo instó a los propietarios a revisar sus casas de alquiler, declarando inútiles y fuera de servicio aquellos que no presentaran suficiente garantía a favor de la vida de los inquilinos. Donde se proyectó desarrollar inicialmente esta campaña fue en el municipio de Santa Ana por haber en gran número mesones ruinosos.459 Con el fin de construir estas casas baratas para obreros, José Sebastián Manzano, donó al gobierno un terreno en la colonia Manzano, situada por el Zapote, el mismo Arturo Araujo mediante carta le agradeció el gesto y el abogado Luis Felipe Recinos redactó las respectivas escrituras,460 pero estas disposiciones se quedaron cortas frente a la gran dimensión de los problemas. En julio de 1931 Masferrer le escribió una carta a Hortensia en donde le decía que la situación económica del país era crítica y que su ruptura con el gobierno de Araujo era un hecho, se sentía tan desesperado que se quería ir a Guatemala con el salario del último mes que se le debía en la Asamblea. Masferrer le describió que muchas personas necesitaban ropa, medicinas, zapatos y que una gran masa de personas no tenía trabajo.461 El mismo Masferrer dijo que lo mejor que Araujo podía hacer era renunciar a su presidencia y vio como otro grave error de su parte 457 “El mesón vergüenza nacional II”, El Tiempo, 18 de agosto de 1931, No. 651, pág. 1, año III. “El mesón vergüenza nacional III”, El Tiempo, jueves 27 de agosto de 1931, No. 659, pág. 1, año III. 458 “En Santa Ana se procederá al cierre de todos los mesones”, El tiempo, jueves 15 de octubre de 1931, No. 701, pág. 1, año III. 459 “Un terreno obsequiado para casas de obreros”, El Día, miércoles 28 de octubre de 1931, No. 3,628, pág. 1, año XI. 460 Alberto Masferrer, “Mi situación en el país se ha vuelto abominable”, AGN, Fondo: AM, serie 01: correspondencia enviada, sub-serie: cartas a familiares, Caja 4, Exp. 270, folios 1, 2 y 6, sábado 11 de julio de 1931. 461 142 recurrir al gobierno de Washington para que lo reinstalara después del golpe de Estado: No se necesita ser un político para adivinar las causas de lo sucedido, ni para comprender la verdadera e irremediable situación del señor Araujo. La palabra debacle, deshielo violento, encierra la explicación del drama. Eso es lo que hay en sólo nueve meses, el Presidente Araujo perdió la grandísima popularidad de que gozaba (…) la decepción profunda que ocasionó al país con su sistema y su criterio de gobierno, y el consiguiente y fuerte anhelo de quitarse de él (…) el país no le quiere ya y lo ha despedido como un servidor inútil y estorboso.462 El diario el Día justificó el derrocamiento de Arturo Araujo, –al expresar– que fue debido al incumplimiento de sus promesas, sobre todo, del repartimiento de tierras.463 El mismo Alberto Masferrer en otra carta a Hortensia le manifestó que en su calidad de diputado, se estaba desempeñando como Presidente de la Comisión de Presupuesto de la Asamblea y que sabía de primera mano que el país sufría de una grave crisis económica debido a la falta de empleo y que en los subsiguientes días se haría una rebaja a todos los empleados del gobierno, incluido él, en cien colones, por lo que la capacidad adquisitiva de la población también se deterioró mucho.464 Araujo dijo al Diario de Costa Rica, que el golpe había sido perpetrado por un movimiento comunista que se quería expandir por toda Centroamérica y que había instrumentalizado a los jóvenes militares.465 En la actualidad aún se discute si Hernández Martínez tuvo participación en el hecho. Knut Walter y Philip J. Williams, opinan que los militares que llevaron a la presidencia a Martínez en octubre de 1931 derrocaron a Arturo Araujo por su incapacidad de controlar las Alberto Masferrer, “Contra a Arturo Araujo”, AGN, Fondo: AM, caja 1, serie 10: conferencias y artículos, Exp. 9, folios 2, 7 y 10, s/f. 462 Federico Charlaix B., “Los falsos ofrecimientos de don Arturo”, El Día, jueves 31 de diciembre de 1931, No. 3,680, pág. 2, año XI. 463 Alberto Masferrer, “Carta a Hortensia comunicando cada cuanto le escribirá, serie 01 correspondencia, sub-serie: cartas a familiares, AGN, Fondo: AM, Caja 4, Exp. 267, folio 1 reverso, viernes 22 de mayo de 1931. 464 “El ex presidente Araujo hace sensacionales declaraciones a un periódico de Costa Rica”, El Día, martes 29 de diciembre de 1931, No. 3,678, pág. 1, año XI. 465 143 fuerzas políticas detractoras a su gobierno y por su falta de visión para hacerle frente a la crisis financiera.466 Hasta aquí llegamos con el análisis de la doctrina vitalista de Masferrer, para pasar a otra faceta de su pensamiento que ha sido menos estudiada, obviamente, por ser considerada irrelevante o no digna de tratarse académicamente, pero que indiscutiblemente está muy relacionada con su pensamiento social. Nos referimos a su pensamiento teosófico. 3- Pensamiento teosófico de Alberto Masferrer y la relevancia en su producción intelectual: 3.1- Pensamiento espiritualista de Alberto Masferrer: Masferrer consideraba que la teosofía a pesar de lo abstracto de sus concepciones, era vitalista en el sentido de que abogaba por una vida íntegra e independiente de los explotadores externos de las naciones débiles y porque estaba preocupada por crear industrias nacionales fuertes. Masferrer consideraba que desde una perspectiva netamente pragmática las religiones orientales, eran las únicas que partían de una concepción racional y moral del hombre y es por eso que todas estaban interrelacionadas, formando un solo sistema, que se regía bajo la ley de la conservación de la vida: vegetarianismo, pacifismo, budismo, naturopatismo, etc. Este último que trataba de ser un método de curación natural alterno a la medicina facultativa positivista. De estas mismas concepciones es que Masferrer aceptaría haber creado su tratado: El fundamento de la moral.467 Otro punto esencial, en esta parte, consiste en analizar cuál era su concepción de Dios y del Universo, en este sentido, Matilde Elena López piensa que Masferrer concebía al Universo como una sola substancia que se desenvolvía mediante un mismo plan, es decir, se descomponía mediante distintas manifestaciones del “ser”, por lo que su panteísmo era acorde con el sistema Knut Walter y Philip J. Williams, “El papel político del ejército salvadoreño”, El Salvador: Historia Mínima, Editorial Universitaria, 2011, pág. 73. 466 Alberto Masferrer, “El Estado debe satisfacer las necesidades primarias de los hombres”, Patria, martes 15 de octubre de 1929, No. 439, pág. 1, año II. 467 144 idealista hegeliano.468 En cuanto a su concepción de Dios, nos dice que para Masferrer la deidad era “lo Absoluto, la Causa Suprema, la Causa Primera aristotélica, la Idea Absoluta, lo inefable hegeliano y como los antiguos incas y mayas adoraba al sol”.469 Al parecer, Masferrer siempre estuvo formulando y reformulando su idea de Dios; en una de sus cartas escribió que uno de los mayores errores que cometió en uno de sus ensayos, fue establecer que existía un Dios personal como una proyección ideal del hombre bueno, lo cual sólo era una creación de la mente humana misma en búsqueda de consuelo.470 Por el contrario, desde una nueva perspectiva, estableció que existía una deidad al estilo del logos estoico,471 al cual describió como: “un orden tremendo, irrestricto, inalterable, que no hace ni admite excepciones. Es un orden que abarca el bien y el mal, la compasión y la crueldad, y que revela no precisamente una Inteligencia Suprema, sino una Voluntad Suprema”, sin corazón (ley de causalidad).472 Además, Masferrer creía que en cada ser humano existía “un dios o Cristo latente”, preso por la naturaleza exterior. Pensaba que había una divinidad que no reconocía límites entre lo interno y lo externo, es decir, se encontraba presente en todo lo existente, pero según él, esta divinidad sólo se manifestaba mediante –el ser humano– cuando éste actuaba, ya que nunca se había podido comprobar la existencia de un Dios externo a nosotros y es por eso que consideraba que Buda y Matilde Elena López, Pensamiento Social de Alberto Masferrer, San Salvador, Imprenta Nacional, sin datos de publicación, pág. 41. 468 469 Ibídem, pág. 45. La idea de un Dios personal aparece en Estudios y figuraciones sobre la vida de Jesús, Biblioteca Popular, vol. 14, 4ª Ed., Dirección de Cultura del Ministerio de Educación, 1972, pág. 52. 470 José Molina, Teología y racionalidad en la filosofía estoica, Anuario del Centro de Estudios Clásicos, Nova Tellus, No. 19,2. 2001, págs. 109-153. El Dios o (logos estoico) es el principio hegemónico del universo y se encuentra presente en todo él. La teología estoica demuestra la existencia de un Dios basada en que en el universo hay un orden racional y teleológico del mundo. Podría clasificarse como un monismo materialista: Dios y el mundo se confunden como un todo continuo, orgánico y racional. 471 Alberto Masferrer, “Carta comunicando una depresión de espíritu y cuerpo”, AGN, fondo: AM, caja 1, Exp. 25, folios 3 y 4, serie 01: correspondencia enviada, sub-serie: cartas a familiares, lunes 26 de diciembre de 1927. 472 145 otros profetas crearon religiones sin Dios. Masferrer adoptó el principio teosófico de que todo tenía una misma causa, a la cual si se quería, podía llamársele “Dios”.473 También sostenía que la idea de Dios era algo imposible de capturar por medio de la razón humana, por lo que ésta sólo era viable en el ámbito de la fe, en consecuencia, la ética no debía radicar en algo que no era posible conocer. Además, combatió la idea de un Dios providencial que, según él, podía ser incluso hasta perjudicial, ya que el hombre se podía volver pasivo por estar esperando cosas de Dios que podían venir de él. Masferrer creía que la responsabilidad de todos los males sociales no recaía sobre Dios sino sobre los hombres, y es por eso que los hombres debían ser sus propios redentores.474 En la concepción masferreriana, la religiosidad, era la conciencia de la unidad entre Dios y todas las demás formas de vida, que según su grado de desarrollo, eran propensas a religarse con él.475 En consecuencia, la tarea humana debía ser esforzarse por realizar esa unidad en la constitución de la familia, la comunidad, la nación, la federación de naciones, etc., así como en sus relaciones con los animales y las plantas.476 Desde esta perspectiva, las ideas teosóficas de Masferrer ayudaron a moldear su pensamiento social: Si la propiedad colectiva de la tierra como elemento cósmico de la vida, como sustancia esencial de la comunidad del Estado, es la condición indispensable, la base, la necesidad absoluta de un orden social justo, armónico, que dé al hombre la posibilidad de elevarse, de realizar cada uno en sí, la idea de la Verdad Suprema (la unidad). El Mínimum Vital, es la organización aplicada a la Sociedad, de las fuerzas primarias, elementales, vitales de la tierra.477 Tal y como puede observarse en este párrafo, es clara la íntima relación que existió entre su pensamiento social y el esotérico.478 Esto también puede verificarse 473 Ibídem, folios 4 y 5. 474 Ibídem, folio 6. Alberto Masferrer, “Escribiendo el libro la “Verdad Suprema”, AGN, Fondo: AM, serie 01: correspondencia enviada, sub-serie: cartas a familiares, Caja 2, Exp. 102, folios 4 y 5 domingo 9 de septiembre de 1928. 475 476 Ibídem, folio 7. 477 Ibídem, folio 10. Marta Elena Casaús Arzú, El Vitalismo de Alberto Masferrer y su impacto en el pensamiento de América Central, Revista Cultura, No. 102, enero-julio 2010, pág. 78. Masferrer también fue apoyado por 478 146 en sus lecturas habituales que, precisamente, eran una mezcla de ambas cosas y que generalmente fundía en una sola.479 En una de sus cartas familiares, le escribió Hortensia lo siguiente: Estoy leyendo cuatro conferencias de Henry Georges, que compré ayer. Es algo maravilloso que nos dará mucha luz sobre la cuestión de la tierra. Mañana leeremos juntos una de ellas y un capítulo de Mahatma Gandhi. Con Josecito te envié “Magia Blanca y Negra” para que se lo pases a Bertita.480 La influencia del pensamiento teosófico de Masferrer durante presidencia de Martínez también fue muy marcada. Los intelectuales, especialmente, sintieron una admiración por su concepto de la vida que estaba acoplado a cierto estoicismo y también los cautivó su pensamiento espiritualista, que consistía en una especie de “naturalismo” que caía en un “panteísmo”, en el cual se podía encontrar el alma de las cosas y un raro y sutil sentido de la vida:481 Nuestra incipiente ideología nos capacita para decir a que escuela puede pertenecer este ilustre publicista salvadoreño; fue un iniciado en la teogonía brahmánicobudista y no le fueron desconocidas las doctrinas teosóficas. De las enseñanzas de Jesús y de Buda formó, en sus libros y artículos, una especie de “eclecticismo”, que en algunos casos sería muy difícil, mejor dicho imposible sostener en buena filosofía.482 La anterior aseveración se hizo en el sentido de que como ya hemos podido observar, el pensamiento esotérico de Masferrer tuvo múltiples contradicciones, por ejemplo, la doctrina de Jesús era profundamente individualista y propendía a la conservación del “yo”, aún más allá de la muerte, mientras que en la concepción teósofos y unionistas centroamericanos como: Salvador Mendieta, Alberto Velásquez y Joaquín Rodas: “Este círculo estaba dominando por algunas sociedades teosóficas guatemaltecas, hondureñas y nicaragüenses a las que pertenecían intelectuales como Flavio Guillén, Carlos Wild Ospina, Tácito Molina Izquierdo y José Miranda y especialmente el grupo de teósofos unionistas quezaltecos…” Alberto Masferrer, “Lectura del libro karma-yoga”, AGN, Fondo: AM, serie 01: correspondencia enviada, sub-serie: cartas a familiares, Caja 1, Exp. 23, folio 1, sábado 26 de noviembre de 1927. Masferrer estaba profundamente influenciado por el libro Karma-yoga de Swami Vivekananda, el cual –según sus mismas palabras– leyó en varias ocasiones por estar lleno de una gran sabiduría. 479 Alberto Masferrer, “Carta a Hortencia”, AGN, fondo: AM, , serie 01: correspondencia enviada, sub-serie: cartas a familiares, Caja. 3, Exp. 142, folio 2miércoles 14 de noviembre de 1928. 480 “Homenaje a Alberto Masferrer, el más grande filósofo, maestro y estilista salvadoreño”, Diario Nuevo, sábado 3 de septiembre de 1938, No. 1,463, pág. 3, año V. 481 482 Ídem. 147 búdica, el individuo desaparecía y su alma se confundía con la especie (nirvana) “como la gota de agua en el océano”. Sus admiradores, honestamente, en ese momento, admitían no entender a cabalidad su “sincretismo” y pensaban que sí éste estuviera vivo les diría al igual que Pierre Loti: “nuestra filosofía comienza donde termina la vuestra”.483 . Marta Casaús por su parte, cree que obras como Helios, Estudios y figuraciones sobre la vida de Jesús y La religión universal han sido mal interpretadas, en razón del desconocimiento de sus cartas privadas, como retornos de Masferrer al catolicismo o a la heliosofía, lo cual, según ella, no era su intención, sino más bien oponerse al ultramontanismo del clero a través del libre pensamiento. 484 En realidad, a nuestro criterio, la libertad de pensamiento de Masferrer era algo mucho más amplio, ya que trataba de contrarrestar a todos aquellos sectores que pretendían poseer verdades absolutas y estáticas, lo cual quedó demostrado en su artículo “El hombre culto”: El hombre culto se caracteriza por su tolerancia, curiosidad mental, serenidad, respeto y desinterés en presencia de la verdad nueva. Se caracteriza por el recelo de vivir en el error, y por su fervorosa disposición a cambiar de ideas, en presencia de una verdad superior, una verdad superior es, necesariamente, de mayor amplitud e integralidad que aquella verdad a quien supera (…) un hombre culto es, necesariamente y en la máxima expresión de la palabra, UN LIBRE PENSADOR. Un libre pensador se mantiene siempre en actitud independiente de las ideas reinantes, costumbres, credos políticos, sociales y religiosos (…) se mantiene libre, sobre todo, respecto de sí mismo, y dispuesto a tirar por la borda el contenido íntegro de su mente, si una luz más clara le hace ver que ese contenido es de calidad inferior.485 Para Casaús, todas las obras teosóficas de Masferrer, pero principalmente La religión universal tienen una aspiración regeneracionista y utópica, ya que pretenden forjar un hombre nuevo infundiendo en él, valores positivos a manera de un catecismo laico.486 Desde nuestro punto de vista, independientemente de lo que haya dicho Masferrer en sus cartas, La religión universal fue la adopción explicita e 483 Ídem. Marta Casaús, El libro de la vida de Alberto Masferrer y otros escritos vitalistas (Edición crítica de la obra teosófico-vitalista (1927-1932), F&G Editores, 1ª Ed., 2012, págs. 250 y 251. 484 Alberto Masferrer, “El hombre culto”, Patria, martes 5 de noviembre de 1929, No. 457, pág. 1, año II. 485 Marta Casaús, El libro de la vida de Alberto Masferrer y otros escritos vitalistas (Edición crítica de la obra teosófico-vitalista (1927-1932), F&G Editores, 1ª Ed., 2012, pág. 254. 486 148 hibrida de dos de los objetivos fundamentales que promueve toda Sociedad Teosófica: 1) formar una fraternidad universal y 2) ser un estudio comparado entre diversas religiones, objetivos que Masferrer hizo suyos integrando ciertos principios éticos de diferentes religiones.487 El centro del pensamiento ético de Masferrer, como hemos dicho antes, era el hombre y para moralizarlo, recurrió a diferentes credos, por ejemplo, conservar la vida de todos los seres era un principio budista. Además, esta religión consideraba que el hombre no tenía que ser opresor, ni ejercer la violencia contra nadie. De las religiones, Masferrer también recogió el postulado de que no había que acaparar la tierra, ni el agua, ni el aire, ni la luz, que eran elementos que pertenecían a todos.488 La esencia de toda religión para Masferrer, era ser compasivo con todo el que sufría. En La religión universal también hizo alusión a la ley del karma cuando dijo: “lo que siembras cosecharas”. También equiparó los conceptos de Sol, Dios y Orden, cuyas potencias eran: verdad, justicia y amor y abordó la ley de la reencarnación y otros principios teosóficos como el de fraternidad. Al igual que en Estudios y figuraciones sobre la vida de Jesús aseveró que vendría un mesías que realizaría una familia universal.489 Masferrer en Estudios y figuraciones sobre la vida de Jesús –de forma central– aborda el tema bíblico de la anunciación mariana, es decir, cuando María anunció que iba a dar a luz al salvador del mundo. Masferrer visualizaba a Jesús como un libertador, sobre todo, del pueblo de Israel, que a través de la historia ha tenido diferentes dominadores: persas, griegos, romanos, etc. Establecía que Jesús proclamó un “Reino Universal” que tendría por cabeza a Jerusalén y que esto ya había sido anunciado por profetas como Juan quien creía en la venida de un mesías. En esta dirección, Masferrer narra la historia bíblica de cuando Herodes mandó a 487 Ibídem, pág. 268. Alberto Masferrer, La religión universal, Ministerio de Educación, Dirección General de Cultura, 2ª Ed., 1968, págs. 6, 7, 8 y 10. 488 489 Ibídem, págs. 12, 13, 14, 16, 19 y 20. 149 hacer una matanza de niños para evitar la llegada del rey de los judíos, el cual como estaba escrito, los libertaría.490 En esta obra, también abordó ideas propiamente teosóficas, como la que ya hemos mencionado, sobre la deificación del hombre, lo cual él comprobaba mediante frases del mismo Jesús, quien afirmó: “Sed perfectos como vuestro Padre que está en los cielos” (Mateo 5, 48). Aunque como ya hemos explicado al principio de esta tesis, el superhombre de Nietzsche y el de la teosofía no son lo mismo, Masferrer los llegó a equiparar, ya que concebía a Jesús como el Superhombre de Nietzsche. Masferrer entendía al Superhombre como un hombre “ideal” o “modelo”. También en este ensayo, se encuentran presentes las ideas de fraternidad universal y del Uno ontológico cuando Masferrer expresa que Cristo intentó hacer una sola familia bajo una paternidad celestial única. Masferrer visualizaba a Jesús como un ser extrahumano, fruto del espíritu santo, que había encarnado en la pureza más sublime, haciendo alusión a la ley del karma. 491 Para Masferrer, debido al karma puro de Jesús, éste nunca sufrió de enfermedades, ya que éstas eran formas de castigos físicos del espíritu, lo cual comprobaría su credo en la reencarnación e hizo una hibridación entre ideas teosóficas y cristianismo. Además, Masferrer establece que Jesús fue un revolucionario de las ideas, porque rompió con todas las creencias establecidas antes a él, quizás, también esté hablando de sí mismo cuando dice que habría de llegar un reformador o un salvador de hombres, porque el nuevo redentor al igual que Jesús no sería violento ni guerrero, sino un hombre espiritual.492 De hecho, Transito Huezo a este respecto dice: “Fue un visionario que se adelantó a su época, un ferviente imitador de Jesús que se desarrolló similar a Tagore, y un paladín de la justicia”.493 Alberto Masferrer, Estudios y figuraciones sobre la vida de Jesús, Biblioteca Popular, vol. 14, 4ª Ed., Dirección de Cultura del Ministerio de Educación, 1972, págs. 13, 14, 16, 17 y 27. 490 491 Ibídem, págs. 32, 34, 35 y 36. 492 Ibídem, págs. 38, 63 y 68. Tránsito Huezo Cordova, “Alberto Masferrer”, La Prensa Gráfica, martes 3 de septiembre de 1940, No. 9,514, pág. 11, año XXVI. 493 150 Masferrer, en esta obra, también especuló sobre que Jesús visitó las ciudades de Tiro, Sidón y Damasco donde perfeccionó su griego y aprendió las doctrinas de Pitágoras y Platón. En éstas también conocería a hombres que le hablarían de las doctrinas de Buda, Lao-Tsé y Zoroastro, por lo que Jesús pretendería formar una sola familia sin castas, clases o diferenciaciones de razas. Masferrer, al igual que Maximiliano Hernández Martínez, como veremos más adelante, pensaba que todos los seres eran espíritu y que el espíritu formaba la materia. 494 Masferrer sostenía que Jesús fue el único que predicó el verdadero comunismo de dar al que no tenía, ya que era un comunismo libre de teorías, sin retoricas, sin doctrinas económicas, sin apelaciones a la ciencia y sin interpretaciones de la historia. Para él, Jesús predicó sencillamente el derecho a que tenía todo hombre de comer y vestirse, reafirmando su esoterismo cuando establece que Jesús fue un conocedor de la “gnosis”, lo cual quería decir que fue un “iniciado”:495 La gnosis, que es a un tiempo ciencia y religión, ley moral y ley física, síntesis que explica cuanto es capaz el hombre de comprender sobre el origen y la vida del Universo, se halla esparcida y fragmentada en el espiritismo, en la teosofía, en la alquimia, en la astrología, en la masonería, en las visiones de Swedemborg, en la kabala, en la religión de Moisés y de Mahoma, en la católica, en Pitágoras, en Platón, en Plotino.496 Según Masferrer, estos conocimientos habían permanecido ocultos para evitar interpretaciones torpes. Para entenderlas a cabalidad había que ser un iniciado, es por eso que Juan el bautista inició a Jesús mediante el sacramento del agua, que era el primer grado de iniciación, el segundo, era la comunión con el pan y el tercero, la comunión con el Espíritu Santo, es decir, Masferrer percibía a Jesús y a Juan como dos iniciados en las doctrinas secretas y aseguraba que el primero diseminó la doctrina del verbo enseñada por Platón.497 Ahora bien, Masferrer en Las siete cuerdas de la lira, realiza una cosmogonía en la cual establece que antes de la materia existía la nada y que de la nada surgió todo. Alberto Masferrer, Estudios y figuraciones sobre la vida de Jesús, Biblioteca Popular, vol. 14, 4ª Ed., Dirección de Cultura del Ministerio de Educación, 1972,, págs. 79, 80, 86 y 107. 494 495 Ibídem, págs. 112 y 113. 496 Ibídem, pág. 130. 497 Ibídem, págs. 130, 132 y 141. 151 Este todo, que era la materia, que estaba en caos, luego se armonizó y formó esferas. La substancia única evolucionó y formó la luz que es a lo que él llamó “éter”. Según Masferrer, en el mundo existían siete ritmos o vibraciones que determinaban todas las escalas de la vida.498 Estos siete fluidos eran distintos modos de la materia: la tierra (lo solido), el agua (lo liquido), el aire (lo gaseoso), el fuego (lo que dilata y transforma), la energía (lo que da vida y movimiento), la atracción (lo que unifica) y la luz (lo que hace ver y comprender). De los siete fluidos combinados surgía una diversidad infinita de mundos. Estos siete fluidos eran las siete cuerdas de la lira. De estos siete elementos surgía todo lo existente y se transformaban unos en otros, por ejemplo, el agua podía convertirse en aire, el aire en fuego y el fuego en luz, es decir, la materia sólo se transformaba.499 Los estados no estaban contrapuestos sino compenetrados unos en otros. Los hombres también eran manifestaciones hibridas de estos siete fluidos, porque para Masferrer, el ser humano era esencialmente energía que había sido moldeado mediante un ritmo que lo constituía. Los estados de la materia corporizaban los elementos, pero no alteraban su naturaleza esencial. Las personas también estaban constituidas por el cuerpo o sustancia material, el alma o sustancia anímica y el espíritu, que organizaba o modelaba la forma. La energía, en el alma humana, se manifestaba mediante la voluntad, la persistencia y la obstinación.500 Para Masferrer, los fluidos siempre estaban en constante transformación, los distintos estados no eran más que maneras de vibrar, sólo que siempre había predominio de un fluido que caracterizaba cada forma. Uno de los fluidos más intangibles para Masferrer, era la ley de atracción. En un fluido líquido siempre estaba latente un fluido sólido y viceversa. Los fluidos no eran nada más que distintas vibraciones del éter. Para Masferrer, las formas eran concentraciones de fluidos, puso ejemplos como el agua, la tierra, el fuego y la luz que, según él, Alberto Masferrer, Las siete cuerdas de la lira, páginas escogidas, Colección Trigueros de León, vol. 12, 1ª Ed., Dirección de Publicaciones e Impresos CONCULTURA, 2002, págs. 13, 14 y 15. 498 499 Ibídem, págs. 16 y 18. 500 Ibídem, págs. 19, 21, 23, 25 y 37. 152 constituían distintas combinaciones de elementos. Todo “ser” era un esquema del Universo.501 Hemos dicho que Las siete cuerdas de la lira es esencialmente una cosmogonía, una cosmogonía es una especie particular de mito, un mito de los comienzos. Mircea Eliade explica que los mitos son importantes porque proporcionan modelos de conducta humana y proveen de sentido a la existencia, generalmente, se entienden como meras ficciones, pero son ficciones que siempre van dirigidas a hechos o sucesos reales, por ejemplo, todas las religiones están fundamentadas en mitos y estos constituyen la verdad para sus feligreses. Todas las sociedades conservan ciertos mitos y son a los que Eliade llama “mitos vivos”.502 Mediante una cosmogonía el hombre establece su relación con el eterno retorno, o sea, mediante la actualización que realiza de dicho mito se está religando constantemente. Además, las cosmogonías de las diferentes culturas y etnias proporcionan distintos relatos de porque los hombres y el mundo han llegado a ser como son, la cosmogonía de Masferrer no es la excepción, ya que abarca todo lo existente. Ahora bien, habría que preguntarnos por qué Masferrer escribió una nueva cosmogonía en plena modernidad. Eliade nos dice que el hombre moderno ya no se siente obligado a reconocer los mitos, los ve como relatos mágicos irrelevantes que deberían de haberse superado hace mucho tiempo, desde su mentalidad racionalista ya no le significan nada,503 quizás, ahí radique la respuesta: Tal fue el pensamiento cosmológico griego antes de que Sócrates, al descubrir la razón, cambiara mediante su humanismo crítico el giro de la mentalidad helénica. Masferrer se coloca ante las cosas con intentos exhaustivos y para ello emprende la marcha hacia el principio cronológicamente inevitable (…) La exposición anterior nos recuerda de relieve a los cosmólogos cuyas doctrinas sintetizó magistralmente Empédocles al ofrecer la teoría de los 4 elementos. (Tales de Mileto: agua, Heráclito: fuego, Anaxímenes: aire, Jenófanes: tierra) Las fuerzas vital y unitaria remontan trasuntos mecanicistas antiguos. Elementismo y mecanicismo parecen ser los rasgos de la Cosmogonía masferreriana.504 501 Ibídem, págs. 27, 28, 31, 39 y 40. 502 Mircea Eliade, Mito y realidad, Ediciones Guadarrama, 2ª Ed., S.A., Madrid, 1973, págs. 14 y 16. 503 Ibídem, págs. 18, 20, 23, 24 y 25. José Salvador Guandique, Alberto Masferrer: pensador, Francisco Gavidia: humanista, Juan Cotto: poeta, Diario Latino, sábado 20 de noviembre de 1943, No. 16,974, pág. 1, año LIV. 504 153 En este sentido, Juan Antonio Estrada sostiene que la filosofía surgió del mito y que ésta siempre se ha movido en un contexto mitológico, cree que aunque la reflexión crítica rechaza de forma global al mito, éste ha sido su punto de partida e inspiración. Desde su perspectiva, no es que el mito sea irracional sino que posee una racionalidad simbólica que, precisamente, da en que pensar. Además, cree que los mitos son una forma legítima de conocimiento y de acceso a la realidad en los cuales está inserto el propio proyecto existencial de la humanidad,505 y es por eso que Masferrer, en este relato, pasa de inmediato de su cosmogonía a su antropología: Masferrer al tratar temas de antropología concluye lo que ha iniciado. Su antropología remata su Cosmogonía. Y, además cumple un urgente imperativo histórico ya que existe una enorme preocupación contemporánea por los problemas relativos al hombre. Casos relevantes abundan. Unamuno apoyándose en la repetida tragedia de lo vivido. Scheler desde la posición esencialista. Kierkegaard con su problema teológico. Todos quieren explicarnos al ser humano…506 Ahora veremos la postura de la Iglesia Católica respecto a estos imaginarios, ya que, en ese tiempo, se consideraba como la única institución autorizada para abordar asuntos teológicos y espirituales. 3.2- Reacción de la Iglesia Católica frente al pensamiento teosófico de Masferrer: El periódico católico El Tiempo, fue, quizás, el que más criticó el pensamiento teosófico de Masferrer, ya que lo acusaban de anticientífico y antifilosófico, debido a que Helena Blatvasky en La Doctrina Secreta, específicamente en el volumen II, atacó la ciencia moderna y por tanto, al positivismo y al darwinismo. Esta crítica, según el redactor católico Vicente Martínez Lemus, fue retomada por Masferrer en Las siete cuerdas de la lira, obra que acabamos de analizar (pág. 92). Además, dicho autor arremete en contra de Masferrer por sostener, según él, lo que era una cosmovisión animista del mundo, (pág. 87, ibíd.,) y una metafísica que se basaba en el principio único panteísta. La Iglesia, en general, creía que todo este imaginario provenía de Juan Antonio Estrada, La imposible teodicea, (la crisis de la fe en Dios), Editorial Trotta, S.A., 1ª Ed., Madrid, 1997, págs. 43 y 45. 505 José Salvador Guandique, Alberto Masferrer: pensador, Francisco Gavidia: humanista, Juan Cotto: poeta, Diario Latino, sábado 20 de noviembre de 1943, No. 16,974, pág. 1, año LIV. 506 154 Annie Besant y su visión de los siete planos astrales,507 teósofa, de quien nos encargaremos más detalladamente en el siguiente capítulo. Asimismo, la Iglesia a través de este periódico, deslegitimó la antropología teosófica que se fundamentaba en siete principios, según lo expresó el mismo Masferrer en la ya varias veces citada obra (pág. 176): “materia, forma, vitalidad, animalidad, mentalidad, espiritualidad y divinidad”, de lo que se concluía que el hombre era un “animal divino”. Atacaron fuertemente su idea del cuerpo “astral” o “sutil”, que era un estado intermedio entre lo etéreo y lo material –que aseguraban– ya existía antes de Platón en el Ka egipcio, en el Manas de los Veda y en la Linga Sharira de los sankias prebúdicos. El clero concluía que era una concepción “salvaje”, porque de ella se derivaba el culto a los muertos y antepasados y por tanto, también condenaban el espiritismo.508 Otro punto fundamental que refutaban de la teosofía, era la idea de la reencarnación bajo el supuesto de que el “ser perfecto” estaba compuesto por el cuerpo y por el alma, los cuales coexistían sin que pudiera vivir el uno sin el otro, sino sólo simultáneamente, es decir, negaban rotundamente la teoría de la preexistencia de las almas y de la reminiscencia, basados en obras como las de P. Romero Benedet, S.J. La plaga del espiritismo moderno, Cap. IV. Entonces, para los católicos, Dios creaba las almas en el momento de ser “infundidas” en los cuerpos y se desintegraban en el momento de la muerte:509 Anduvo, por consiguiente, muy errado don Alberto Masferrer, cuando escribió en su Ensayo sobre el Destino (pág. 132): “Así pues, la muerte no cambia en nosotros nada esencial.” ¡Cómo! ¿Qué no cambia en nosotros nada esencial? Desintegra por completo la naturaleza humana, destruye al hombre, en cuanto tal; puesto que separa sus constitutivos esenciales, cuerpo y alma.510 Vicente Martínez Lemus, “El mundo teosófico”, El Tiempo, miércoles 8 de enero de 1930, No. 206, págs. 1 y 8, año I. 507 Vicente Martínez Lemus, “El cuerpo sutil de los teósofos y el astral de los espiritistas” El Tiempo, sábado 18 de enero de 1930, No. 215, págs. 1 y 8, año I. 508 Vicente Martínez Lemus, “La pluralidad teosófica de vidas”, El Tiempo, sábado 25 de enero de 1930, No. 224, págs. 1 y 7, año II. 509 510 Ídem. 155 Masferrer defendió la idea de la reencarnación en su Ensayo sobre el destino (pág. 131) –al decir– que la actual vida física era precedida por muchas otras mediante el proceso de la transmigración de las almas, es decir, el traslado del espíritu en diferentes cuerpos, en donde el espíritu creaba la nueva forma o cuerpo en el que habría de reencarnar para entrar de nuevo a la vida (págs. 128 y 129). A esta idea venía unida la ley del karma, mediante la cual el hombre reencarnaba dependiendo de sus acciones en la vida anterior, que era como una especie de retribución. Frente a estas posturas la Iglesia Católica aceptaba, obviamente la creencia en el infierno cristiano como castigo511 y la teoría de la resurrección de los cuerpos:512 Pero dígame Ud., Don Alberto, ¿Quién ha dado al alma o espíritu, separado de su cuerpo propio, el poder de formarse un nuevo cuerpo? ¿Los teósofos acaso? Pero ¿quiénes son los teósofos para disponer a su talante y voluntad de un poder, que pertenece exclusivamente, a la divina Omnipotencia? Porque Dios solo es el creador y organizador de la materia; Dios solo, el que puede reintegrar la humana naturaleza, desintegrada por aquélla: como lo hará, sin duda, el día de la resurrección de la carne.513 Estos enfrentamientos entre la teosofía y la Iglesia Católica no fueron exclusivos en El Salvador, según Esteban Rodríguez Dobles, en su ensayo Conflicto en torno a las representaciones sociales del alma y los milagros. La confrontación entre la Iglesia Católica y la Sociedad Teosófica de Costa Rica (1904-1917), también desataron grandes controversias en aquel país, aunque establece que en otros casos, incluso, llegaron a hibridarse. Rodríguez Dobles expresa que la Sociedad Teosófica costarricense tuvo fuertes vínculos con la masonería y que las acusaciones que la Iglesia Católica lanzó en contra de ésta, también fueron utilizadas para atacar a la teosofía, aunque aclara que en ambas instituciones había marcadas diferencias.514 Vicente Martínez Lemus, “El karma teosófico y el infierno cristiano”, El Tiempo, sábado 8 de febrero de 1930, No. 236, pág. 1, año II. 511 Vicente Martínez Lemus, “Las reencarnaciones teosóficas”, El Tiempo, sábado 1º de febrero de 1930, No. 230, págs. 1 y 8, año II. 512 513 Ídem. Esteban Rodríguez Dobles, Conflicto en torno a las representaciones sociales del alma y los milagros. La confrontación entre la Iglesia Católica y la Sociedad Teosófica de Costa Rica (1904-1917) Revista REHMLAC Vol. 2, No. 2, diciembre 2010, abril, 2011, págs. 88 y 90. 514 156 El académico establece que estos conflictos surgieron como consecuencia de que estas nuevas representaciones o imaginarios constituían un peligro para el ejercicio del poder eclesial. Desde la psicología de Nietzsche, diríamos que la teosofía constituyó una afrenta a la “voluntad de poder” de la Iglesia mediante la cual pretendía establecer un predominio de sus representaciones. Las representaciones son creencias u opiniones de ciertos individuos o grupos, que tratan de hacerse prevalecer en un medio social concreto. 515 Las representaciones teosóficas fueron confrontadas y desacreditadas por la Iglesia en sus distintos órganos oficiales, en Costa Rica, por ejemplo, mediante los periódicos La Patria y La Época, en los cuales se publicaban ataques sistemáticos a los teósofos, generalmente se les acusaba de cometer fraudes en distintos sentidos: que se movían por intereses puramente especulativos con el afán de obtener dinero, de constituir una seudo-religión, de construir una sincretismo ilógico y de plagiar ciertos credos de la religión cristiana, incluso, en 1913 dicha confrontación llegó a extremos insospechados cuando un sacerdote católico le prendió fuego al recientemente construido Templo Teosófico en aquel país.516 En la parte final de este capítulo hemos demostrado como el pensamiento social de Masferrer se vio muy influenciado por sus creencias teosóficas. En el siguiente, se abordará la visita de una importante figura teosófica a nivel mundial, quien llegó por primera vez al país en 1929, observando claro está, los vínculos intelectuales que se establecieron entre dicho personaje, Alberto Masferrer y Maximiliano Hernández Martínez antes de ser Presidente. 515 Ibídem, págs. 91, 92. 516 Ibídem, págs. 101 y 104. 157 CAPÍTULO II: ANÁLISIS CONCEPTUAL DE LA TEOSOFÍA Y PRIMERA GIRA DE JINARAJADASA A AMÉRICA LATINA Etimológicamente, teosofía significa “sabiduría divina”. Se designa con este término oculto el conocimiento básico existente en todas las religiones y sistemas filosóficos desde la más remota antigüedad. Se dice que la teosofía surgió en todas las épocas como un sistema ecléctico de pensamiento, que pretende analizar y exponer espiritualmente la naturaleza del macrocosmos (Dios) y del microcosmos (hombre), así como sus estrechas relaciones (...) Además del conocimiento considerado exotérico, está subyacente el conocimiento esotérico y trascendental; este último es la razón de ser de la teosofía.517 1. Introducción Este capítulo se divide en dos grandes segmentos. En el primero abordaremos algunos aspectos generales como quién fue Jinarajadasa, cuál fue su concepto de teosofía y cuáles fueron los principios esenciales de la misma desde su perspectiva. También hemos incluido una visión crítica y un aparatado que trata exclusivamente sobre la relación entre teosofía y nazismo, así como algunos aspectos interesantes de la influencia que ejerció la teosofía sobre el feminismo internacional. En la parte última, veremos como fue el recibimiento de Jinarajadasa en El Salvador. Debemos aclarar que en esta primera parte hemos hecho uso de conceptos que aparecieron después de que Masferrer había muerto y que fueron publicados tanto en el Diario Oficial Suplemento La Republica como en el Diario Nuevo durante presidencia de Martínez. Nuestro objetivo con esto es presentar la teosofía de una forma más metodológica y sistemática, ya que es muy difícil entender las pláticas que Jinarajadasa dictó en 1929 si antes no tenemos nociones fundamentales de la Ramiro Calle, Historia de las Sociedades Secretas, (el enigmático origen de templarios, masones, rosacruces y otras sectas ocultas, Editorial Sirio S.A., edición no definida, 2010, Málaga, España, pág. 249. 517 158 teosofía. Además, de forma colateral demostramos como ambos periodos estuvieron íntimamente interconectados por dicha doctrina. En el segundo segmento, se analizan propiamente las conferencias dictadas por Jinarajadasa durante su primera visita al país, dentro de las cuales causó singular interés la referida al supuesto nuevo mesías espiritual del mundo, Jiddu Krishnamurti (1895-1986), quien ciertamente reflexionó sobre ciertos temas filosóficos, pero no desde una perspectiva académica inserta en la tradición analítica, ya que como veremos a continuación, uno de los fundamentos de su postura era no proponer una nueva teoría que sustituyera a las demás que es, en esencia, de lo que trata la filosofía académica.518 Krishnamurti simplemente exhortaba al cuestionamiento crítico de las creencias propias de cada persona, es decir, no exponía una doctrina sistemática sino que sólo un “mirar crítico”, a lo cual él llamaba “un darse cuenta no selectivo”, que era un empezar de nuevo y un despojarse de todo lo acumulado.519 Krishnamurti, al margen de que no hizo filosofía académica en el sentido tradicional, podría ser muy interesante, debido a que enseña a cuestionar muchas cosas que ésta, en algunas ocasiones, pasa por alto y que quizás también deberían de ser superadas, pero que apuntan a una dimensión más implícita de la filosofía como podrían ser: ¿Será correcto aferrarme a un determinado sistema, escuela o academia? ¿Sólo ahí está la verdad? ¿Podría estar equivocado?520 Ahora bien, habría que decir que desde el ámbito académico también han habido algunas posturas que se han planteado estas mismas interrogantes como es el caso del escepticismo antiguo521 y del posmodernismo crítico-filosófico, sobre todo de Krishnamurti Fundación de América, Krishnamurti, Reflexiones sobre el yo, EDITORIAL EDAF, 6ª Edición, 2006, pág. 11. 518 519 Ibídem, pág. 16. 520 Ídem. Carlos Gutiérrez Rueda, “El escepticismo filosófico antiguo y el problema de la justificación epistémica”, Revista Elementos: ciencia y cultura, septiembre-noviembre, vol. 10, No. 51, Universidad Autónoma de Puebla, México, 2010 págs. 44 y 45. El Escepticismo filosófico es la postura que niega que el ser humano pueda conocer. Se reconocen dos tipos de escepticismo, uno que acepta que se puede encontrar alguna respuesta (relativo) y otro que establece que no es posible encontrar una respuesta (absoluto). En la búsqueda de la verdad algunos filósofos han aceptado que la han 521 159 pensadores como Jean-Francois Lyotard quien proveyó de ciertas tesis fundamentales para criticar los grandes metarrelatos filosóficos tradicionales como: 1) la desconfianza en los macrosaberes comprendedores del todo, 2) la propuesta de formas débiles de racionalidad y 3) la llegada de una nueva ética del pluralismo y la tolerancia.522 Quizás dentro de la filosofía tradicional estas corrientes son generalmente olvidadas o marginadas, porque obviamente implican un doloroso proceso de desafección o relativización de las propias ideas, que no todos están dispuestos a hacer. 2- Primera gira de Jinarajadasa a América Latina y su visita a El Salvador, (1929): 2.1- Algunas acotaciones previas: 2.1.1) Breve biografía de Jinarajadasa: Antes de conocer el pensamiento de Curuppumullage Jinarajadasa (18751953) es indispensable realizar una breve semblanza de su personalidad. En primer lugar, fue un teósofo originario de Ceylán perteneciente a la India inglesa, fue educado en las mejores universidades de la India, Inglaterra (Cambridge y Oxford), Italia (Pavia) y Francia.523 Además, fue un escritor prolijo cuyas obras se editaron en distintos países y en diversos idiomas.524 Es muy importante aclarar que su nombre verdadero es como consta en el párrafo anterior, pero como es obvio advertir estos nombres indios son muy difíciles de pronunciar en idioma castellano, por lo que presumimos en el medio social se le conocía con el nombre de “Carlos”, para hacerlo más asequible a nuestros países. Nosotros en ese mismo afán, en el transcurso de la tesis, lo llamaremos “Carlos”, tal y como lo hacían los periódicos de la época. encontrado, dogmaticos como: Aristóteles, Epicuro y los Estoicos, pero otros como Clitómaco y Carnéades consideran que no han encontrado la verdad, siguen buscando. Lyotard, Qué es lo posmoderno, Zona Erógena, No. 12, 1992, págs. 2, 6 y 10. Disponible en: analisisdeldiscursoute.files.wordpress.com/.../lyotard-jean-francois-qu... 522 Emilio Narváez García, “El Doctor Jinarajadasa: breve semblanza de su personalidad” Diario Nuevo, martes 20 de septiembre de 1938, No. 1,477, pág. 3 año V. 523 524 Ídem. 160 Dentro de su obra publicada hasta 1934 estaban: En su nombre y otros trabajos notables (1908); El Cristo y el Buddha (1910); Cristo y el lago (1913); Flores y jardines (1914); La teosofía y el pensamiento moderno en la herencia histórica y el arte y Lo que enseñamos (1915) Yo prometo, Como recordamos nuestras vidas pasadas y El mensaje del futuro (1917); La naturaleza del misticismo (1918); Teosofía practica y La herencia de nuestros padres (1920); El arte y las emociones y Fe que es vida (1921); La unión del Oriente y del Occidente; Primeros rudimentos de la teosofía (traducido en cinco idiomas), Las primeras enseñanzas de los maestros y El reinado de ley (1923); La ley de Cristo; Fundamentos de teosofía (Obra premiada y traducida a ocho idiomas en Europa, Asia y América (1924); El libro de Oro de la S.T. (1925); El mediador y El arte como voluntad e idea (1928); El factor espiritual en la vida nacional; Ofrecimiento y La visión divina (1929); Apuntes de conferencias; La personalidad de H. P. Blavatsky (1930); La llama de la juventud y El maestro (Meditaciones en verso) (1931); Una biografía corta de Annie Bensant; Agotamiento del karma y Ensayos teosóficos sobre el arte (1932) y otros estudios publicados en 1934.525 Jinarajadasa comenzó su carrera como conferencista internacional en 1904. También era considerado un pedagogo especializado en psicología y hablaba once idiomas dentro de los cuales, principalmente, dominaba: el antiguo sanscrito, el inglés, el francés, el italiano, el portugués y el castellano.526 Jinarajadasa ingresó en la Sociedad Teosófica Mundial con sede en la ciudad de Adyar, India, el 14 de marzo de 1893, dirigió su obra intelectual al cumplimiento de sus objetivos y llegó a convertirse en Vicepresidente de la misma de 1921 a 1928.527 Después de la muerte del teósofo y masón inglés George Arundale fue Presidente desde 1945 hasta su muerte. Para la década de los treinta junto a 525 Ídem. 526 Ídem. “Mañana llegará a Tegucigalpa el filósofo C. Jinarajadasa”, La Época, Tegucigalpa, Honduras, sábado 15 de octubre de 1938, No. 1,589, pág. 1, año VI. “A los catorce años bajo los auspicios de C. W. Ledbeater, salió para cursar en Inglaterra las materias de instrucción superior…regresó a su patria para aceptar el puesto de sub-director del Colegio Budista “Ananda,” en Colombo pero dieciocho meses después presentó la dimisión de su cargo, por haber rehusado a renunciar a la ideología teosófica en su didáctica, según lo exigía la ortodoxia budista de la directiva del plantel. En 1912 paso nuevamente a Londres, esta vez para hacerse cargo de la instrucción secundaria de Krishnamurti”. 527 161 Vivekananda528 y Ramacharaka formaba la trilogía sobre la cual descansaba la teosofía, que insistía en tener por líder y mesías a Krishnamurti. 529 El periodista Rigoberto García Parada,530 ante su segunda visita a América sostuvo que Jinarajadasa era para los teósofos un verdadero “Sophos”, ya que en sus discursos siempre hablaba sobre distintas disciplinas: ciencia, moral, misticismo, educación, entre otras. En esa ocasión, García Parada lo defendió de todos aquellos que lo acusaban de ser un difusor de meros dogmatismos de sectas corruptas, creía más bien que sus ideas estaban basadas en las leyes de la razón y que dichas acusaciones eran infundadas,531 pero ahora que conocemos someramente quién era Jinarajadasa a continuación hablaremos de sus ideas. 2.1.2) Qué es la teosofía, según Jinarajadasa: Jinarajadasa expuso que la Sociedad Teosófica Mundial, para el momento en el que dio las declaraciones, tenía un poco más de setenta años de existencia, pero que a pesar de ese poco tiempo, contaba con más de cincuenta secciones nacionales distribuidas en toda la India y más de 150,000 miembros diseminados en todo el mundo. Durante las décadas de los veinte y los treinta, según él, la teosofía tuvo un incremento considerable. R. Arévalo Martínez, “Tres bellos libros de Román Rolland”, La Prensa, sábado 1º de diciembre de 1934, No. 7472, pág. 7, año XXI. En la década de los treinta salieron a la luz tres volúmenes de una obra de Romain Rolland titulada Vivekananda, Ramakrishna y El Evangelio Universal en donde Rolland explica que Vivekananda declaró que las tres grandes formas de religión eran: el trabajo, la lealtad y la justicia, que constituían caminos para llegar a Dios; para el filósofo hindú todas las religiones buscan al mismo señor, todo el que marcha por alguna de ellas encuentra la salvación, según las enseñanzas “yoguis”. Establece que todo es Dios y que cada uno debe olvidarse de sí mismo para servir a los demás argumentando que el único Dios que se debe adorar es el hombre que sufre y que se muere de hambre. 528 “Pronto llegará el filósofo Jinarajadasa”, Novedades, Managua, Nicaragua, miércoles 21 de septiembre de 1938, No. 861, pág. 1, año II. 529 Rigoberto García Parada, “C. Jinarajadasa”, Diario Latino, martes 13 de septiembre de 1938, No. 14,458, pág. 3, año XLVII. “Jinarajadasa es artista. En sus obras, aún en las que aborda tópicos áridos, científicos se subliman los hechos, el amor se infiltra en las frases y campea estéticamente haciendo amable el pavoroso Anamké (…) por ser artista habla siempre de arte aún sin quererlo (…) Jinarajadasa estima que el ejercicio de cualquier arte es disciplina indiscutible en eficacia para dar expansión a las facultades latentes del ser humano”. 530 Rigoberto García Parada, “¿Quién es Jinarajadasa?”, Cronos, Quetzaltenango, Guatemala, miércoles 12 de octubre de 1938, No. 1,902, pág. 2, año VII. 531 162 Jinarajadasa explica que la parte esotérica de toda enseñanza, sea esta religiosa, filosófica o científica,532 ha sido reservada en todo tiempo, para quienes deseen adquirir el conocimiento directo de la Divinidad,533 como el místico y el filósofo (de sus propósitos) y el científico (de sus procedimientos). Esta enseñanza, según él, se conoció en Occidente en el Siglo III con el nombre de teosofía: 534 Históricamente la palabra “teosofía” denota un cuerpo de verdades o de hechos concernientes a la divinidad (religión), a la conciencia y a la evolución (filosofía) y a la constitución del Universo y del hombre (ciencia).535 En consonancia con esta visión, José Florentín Rosales Rodas definió el espiritismo centroamericano como “la doctrina filosófica, científica y moral, que basándose en una rica y variada fenomenología probaría la existencia del alma, del mundo espiritual y la inmortalidad del espíritu.536 Quisiéramos recalcar el hecho de que esta fusión pareciera que también es propia del modernismo reaccionario, ya que Jeffrey Herf analiza como en la Alemania nazi hubo un intento por integrar tecnología y cultura, para proveer a la Nación de cierta identidad antimaterialista, que era propia de un Estado totalitario. He aquí la clave, según él, para encontrar un nexo entre el irracionalismo filosófico y Esteban Cortijo Parralejo, Vida y obra de Mario Roso de Luna, Tesis presentada para obtener el grado de Doctor en Filosofía, Universidad Complutense de Madrid, 1991, págs. 184 y 185. Para Roso, el teósofo en todo tiempo a tratado de responder a las preguntas clásicas de la metafísica apoyado por la ciencia convencional. En su obra, religión, ciencia y filosofía constituyen una concepción integral del hombre y del mundo: ¿Quiénes somos?; ¿De dónde venimos?; ¿Adónde vamos? 532 “El Señor Presidente Martínez habló sobre la educación y la instrucción”, Diario Nuevo, jueves 28 de octubre de 1943, No. 3,041, pág. 3, año X. “La instrucción pertenece al dominio de la ciencia; la educación a la de la conciencia (…) al examinar las materias de discusión, conviene atender a su aspecto filosófico. La filosofía puede aplicarse por igual a las ciencias, el arte y la moralidad. Sin una filosofía humana la ciencia no conduce al bien ni a la justicia. Porque hay lo que podríamos llamar filosofía de las matemáticas como la de Pitágoras que penetró en la esencia de las cosas y dijo que Dios es el ser que crea y anima todas las formas. Dios es la vida. La Física conduce al materialismo y al espiritualismo, según se le estudie. Cuando comprendemos que toda materia se transforma en energía, vamos en camino de reconocer la causa única”. 533 “Pronto nos visitara el Dr. Jinarajadasa”, Cronos, Quetzaltenango, Guatemala, 15 de octubre de 1938, No. 1,905, pág. 3, año VII. 534 535 Ídem. Marta Casus, “El vitalismo teosófico como discurso alternativo de las élites intelectuales centroamericanas en la década de 1920 y 1930. Principales difusores: Alberto Masferrer, Carlos Wild Ospina y Porfirio Barba Jacob”, REMHLAC, Vol. 3, Nº1, mayo 2011-noviembre 2011, pág. 89. 536 163 la tecnología. Precisamente durante este régimen se publicó de 1909 a 1937 la revista Tecnología y cultura dirigida por ingenieros universitarios que pretendían crear una “filosofía de la ingeniería” mediante la reproducción de artículos de autores que querían escapar a la ciencia, el positivismo y la racionalidad.537 Ahora bien, Jinarajadasa también expresó que la teosofía era un conocimiento verdadero que intentaba ganar adeptos y difundir lo que él denominaba “el evangelio de la vida”, en clara oposición a sus detractores que la calificaban de ser una doctrina falsa y vacía. El problema radical para aquellos que la profesaban, según el hindú, era que históricamente desde su fundación se había mal interpretado, por lo que había una gran intolerancia, que partía del desconocimiento, el fanatismo y la tergiversación de algunos sectores, pero principalmente de la Iglesia Católica.538 Este enfrentamiento entre católicos y teósofos puede observarse claramente en las palabras del teósofo Remy Roger ante la segunda visita de Jinarajadasa a Honduras, quien expresó que en los medios locales se publicaron una serie de afirmaciones ridículas, que la hacían pasar por hechicería o brujería, 539 hecho, que evidenciaba la conflictividad que existía entre dos cosmovisiones que, en ciertos aspectos, como veremos más adelante son muy similares. Jinarajadasa dentro de este mismo análisis aseguró que uno de los errores más comunes al querer conocer la teosofía, es pensar que se trata de una nueva religión, lo cual él negó rotundamente. Esta primera observación es muy importante, ya que la teosofía no funciona como el catolicismo o el protestantismo cristianos de una forma institucional, jerárquica, estructurada y con autoridades establecidas sino que más bien funciona de forma similar a las logias masónicas y se aproxima mucho a lo que podría denominarse un “espiritualismo laico”, aunque Jinarajadasa aclaró que la teosofía sí toma ciertos elementos de las distintas religiones tradicionales: Lilia Puig de Stubrin, “El modernismo reaccionario: una nueva categoría en el análisis social”, revista de Estudios Sociales No. 5, Universidad Nacional de Litoral, Argentina, 1993, pág. 175 y 176. 537 C. Jinarajadasa, “Que es la teosofía”, Diario Nuevo, miércoles 26 de octubre de 1938, No. 1,508, pág. 5, año V. 538 Remy Roger “Concepto errado que de la teosofía tienen algunos” El Cronista, Tegucigalpa, Honduras, lunes 31 de octubre de 1938, No. 7,292, pág. 7, año XXVII. 539 164 La teosofía no es una nueva religión, contiene verdades que se encuentran en todas las religiones, pero no es un nuevo culto, con nuevo credo, nuevos sacerdotes y nueva promesa de salvación. Es más bien, una filosofía científica de la vida, basada en el descubrimiento de hechos relativos a la vida misma.540 Desde esta óptica, la teosofía busca legitimarse a través de la ciencia, es decir, intencionalmente intenta abrogarse un poco del prestigio que sabe que gozan las ciencias fácticas-verificables, pero sin reducirse a sólo ser ciencia; nos da la impresión que los teósofos aunque surgieron en contraposición al positivismo, no podían ponerse de espaldas a la ciencia, ya que podían ser catalogados de dogmáticos e ignorantes y a pesar de que buscaron fundamentar sus dogmas en algunas teorías científicas, esto no impidió que dichos improperios fueran lanzados en su contra de todas maneras: En todos los órdenes, los progresos de la civilización deben mucho a la ciencia moderna. La ciencia moderna es grande porque observa primero hechos, sin teoría preconcebida, después del estudio de los hechos deduce ciertas conclusiones generales. Nosotros hemos encontrado que el método científico nos permite descubrir en lo que concierne a la naturaleza del hombre, verdades que las teologías no nos habían revelado.541 Jinarajadasa, inclusive, llega a establecer que existe un mismo estatus epistemológico entre ciencia y teosofía, en razón de que la primera ha realizado los más grandes descubrimientos hechos por los sabios modernos y la segunda, constituye el enunciado de hechos descubiertos no solamente por los sabios modernos sino que también de las civilizaciones antiguas.542 Desde nuestro punto de vista, esta postura es exagerada en el afán de querer legitimar la teosofía, porque de haber tenido el mismo rango que la ciencia, no hubiese perdido la relevancia y aceptación que tuvo en esa época, pero si refleja al menos, el papel decisivo que se le quiso adjudicar frente a la visión reduccionista del positivismo. Según Horacio González, un ejemplo de esto fue el médico y filósofo argentino José Ingenieros, quien cuestionaba el monopolio que de la verdad habían hecho los “sabios” de la ciencia oficial. Ingenieros, según González, defendía la C. Jinarajadasa, “Que es la teosofía”, Diario Nuevo, miércoles 26 de octubre de 1938, No. 1,508, pág. 5, año V. 540 541 Ídem. 542 Ídem. 165 posición de que el ocultismo y la teosofía se introdujeran como estudios de indiscutible veracidad dentro del campo científico.543 Habría que ser cauteloso con esta afirmación ya que, en realidad, Ingenieros jamás dejó de ser un pensador positivista en el sentido estricto de la palabra e incluso como veremos más adelante, fue muy crítico de los movimientos místicos y espiritualistas de la época, pero habría que decir que en su obra Las direcciones filosóficas de la cultura argentina sí reconoció el impacto que tuvo la teosofía en el ámbito de la filosofía argentina aún más allá de autores de la academia tradicional como Kant o Hegel: El contradictorio sistema de Kant y el panteísmo ideologista de Hegel no tuvieron aquí discípulos en el siglo XIX. No alcanzaron hondo arraigo los eclécticos franceses, ensayados en algún momento como una transición cómoda entre la escolástica y el naturalismo científico, ni tuvo partidarios conocidos el neocriticismo francés, no obstante ser, como el eclecticismo, una fórmula transitiva entre lo viejo que ya no se cree y lo nuevo que no puede creerse todavía. Los eclécticos del resurgimiento italiano fueron absolutamente desconocidos, lo mismo que los krausistas españoles. En nuestro ambiente pedagógico encontró acogida entusiasta el positivismo de Augusto Comte. Alguna difusión han tenido en el país las corrientes sociológicas que parten de Marx y Bakounine, el espiritismo, la teología protestante y los estudios teosóficos.544 Ahora bien, autores que creían que se debían conciliar ciencias objetivas con espiritualismo eran: William Crookes en Inglaterra, Lombroso en Italia y Carlos Richet545 en Francia, este último quien tenía un doctorado en medicina (1869) y otro en ciencias (1878). La académica Soledad Quereilhac, incluso, asevera que dentro de los miembros de la Sociedad Teosófica Argentina, figuraron prominentes Horacio González, Historia crítica de la sociología argentina: los raros, los clásicos, los científicos, los discrepantes, ediciones Colihue, S.R.L, 2000, Argentina, pág. 17. 543 José Ingenieros, Las direcciones filosóficas de la cultura argentina, Eudeba editorial Universitaria de Buenos Aires, Argentina, 2ª Edición, 1963, págs. 90 y 91. 544 Charles Richet: Fue profesor de la cátedra de fisiología en la universidad de Paris desde 1887. Durante 24 años, desde 1878 a 1902 fue editor de la Revista Científica y desde 1917, co-editor del Journal de Fisiología y Patología General. Publicó artículos sobre fisiología, química, patología experimental, fisiología normal y patológica y numerosas investigaciones realizadas en el Laboratorio de Fisiología de la Facultad de Medicina de Paris. Murió en Paris, el 4 de diciembre de 1935. Ver: “Descubriendo la anafilaxia: biografía de Charles Richet”, Revista Otorrinolaringol cir cabcuello, No. 62, 2002, pág. 308. 545 166 positivistas como el ingeniero Rodolfo Moreno y la médica Margarita Práxedes Muñoz directora de la revista La filosofía positiva.546 El académico español Jordi Pomés Vives asegura que el mismo inventor norteamericano Thomas Edison fundó junto a Blavatsky la Sociedad Teosófica. Einstein también simpatizó con la teosofía y se la recomendó a su colega alemán Heisenberg. Otros científicos que simpatizaron con dicho movimiento fueron el astrónomo francés Nicolás-Camile Flammarion, los físicos norteamericanos Robert Millikan y Robert Oppenheimer y el naturalista inglés Alfred Russel Wallace. Algunos filósofos importantes sobre quienes también influyó fueron el estadounidense William James, más conocido por su obra Pragmatismo, y el alemán Franz Hartmann, cuya obra es esencialmente teosófica.547 José Ramón Ayllón, en su libro En torno al hombre: introducción a la filosofía, explica que este fenómeno pudo haberse dado porque: …la metafísica se ocupa de los problemas que aparecen en el límite de la investigación física. A lo largo de la historia, ambas tareas han sido frecuentemente unidas en las mismas personas, aunque con diverso éxito (piénsese en Pitágoras, Tales, Aristóteles, Alberto Magno, Descartes, Leibniz, Pascal, Newton, Einstein…). La razón es ésta: los grandes hombres de ciencia, deseando encontrar más allá de la ciencia las respuestas a los últimos porqués, continuaron la búsqueda de la verdad por el camino de la filosofía, pues “todo verdadero investigador –dice Einstein– es una especie de metafísico oculto, por muy positivista que se crea”. 548 Aun en el mundo occidental actual es difícil asimilar esta conjunción o hibridación entre filosofía, religión y ciencia, porque son campos que comúnmente aparecen de forma separada e inclusive en ocasiones –para explicar determinados fenómenos– están en franca oposición, prevaleciendo de manera contundente la Soledad Quereilhac, “Sociedades espiritualistas en el pasaje de siglos: entre el cenáculo y las promesas de una ciencia futura”, (1880-1910), revista de historia intelectual Prismas No. 16, 2012, pág. 185. 546 Jordi Pomés Vives, “Dialogo Oriente-Occidente en la España de finales del siglo XIX. El primer teosofismo español (1888-1906) un movimiento religioso heterodoxo bien integrado en los movimientos sociales de la época”, Universitat Autónoma de Barcelona, Revista Historia Moderna i Contemporánea, No. IV, 2006, pág. 58. Dentro de las obras de Hartman se encuentran: Magia blanca y magia negra (1886), Una aventura en la mansión de los adeptos rosacruces (1887), Los elementales (1887), Símbolos secretos rosacruces (1888), Principios de geometría astrológica (1889), En el pronaos del templo de la sabiduría (1890), Ciencia oculta en la medicina (1893) y Entre los gnomos (1895). 547 José Ramón Ayllón, En torno al hombre: introducción a la filosofía, Ediciones Rialp, 8ª Ed., 2001, pág. 18. 548 167 ciencia, que se impone ante los dogmas religiosos y las metafísicas especulativas de la filosofía. Obviamente esta última aseveración que hemos realizado, ha sido desde el punto de vista del positivismo clásico, que ha predominado en nuestros países latinoamericanos desde finales del siglo XIX, en los cuales se propusieron proyectos de nación en base a dicha doctrina, tal y como lo afirma Gerardo Mora-Burgos en su libro La filosofía en América Central en el siglo XX cuando dice: Hilario Vallejo sostiene que “los hispanoamericanos pensaron utópicamente que con el positivismo su mundo estaría arreglado. Los mexicanos creyeron superar la larga anarquía que los aquejaba. Los argentinos lo consideraron como un remedio eficaz para curar las mentes absolutistas y tiránicas que padecían. Los chilenos, por su parte, se adhirieron al positivismo con la finalidad de utilizarlo como medio para implementar los ideales del liberalismo. En el Uruguay se lo consideró como la doctrina moral capaz de neutralizar la larga era de cuartelazos y corrupciones. Perú y Bolivia lo tomaron como consolación de su fracaso con Chile. Los cubanos lo asumieron como la bandera de su independencia de España”. Desde esta perspectiva, el positivismo en Hispanoamérica surge como una panacea no sólo en el plano filosófico, sino también social, político y pedagógico, aunque también adquiere sus propios rasgos en cada país. Leopoldo Zea afirma que se puede hablar de un positivismo hispanoamericano; pero también, con el mismo derecho, de un positivismo mexicano, argentino, uruguayo, chileno, peruano, boliviano o cubano.549 La teosofía, entonces, surge en contraposición a esta gran tendencia positivista sin hacer discriminaciones o exclusiones hacia la religión o la filosofía, mediante el enunciado de que la “inteligencia humana” es solo una y que el fin último de la misma, es descubrir la “verdad” sin hacer divisiones cognoscitivas. Además, Jinarajadasa establece que la ciencia en muchos aspectos ha sido impulsada por la teología y la filosofía y que el desarrollo de la ciencia, escasamente ha tenido lugar hace unos cuantos siglos atrás, pero al mismo tiempo, expresa que la ciencia es indispensable para ir rectificando los distintos errores del pasado.550 Jinarajadasa pone como ejemplos los descubrimientos realizados en esa época por la biología y la zoología, que demostraban que la civilización humana era mucho más antigua de lo que afirmaba la historia. Por otra parte, expresa que sociedades antiguas como las de Egipto, Babilonia y la Atlántida, tuvieron sabios tan Gerardo Mora-Burgos, La filosofía en la América Central en el siglo XX, Editorial Cátedra, Madrid, España, 2009, pág. 4. 549 C. Jinarajadasa, “Qué es la teosofía”, Diario Nuevo, miércoles 26 de octubre de 1938, No. 1,508, pág. 5, año V. 550 168 versados en el arte de la observación como los científicos contemporáneos y que también realizaron descubrimientos verdaderamente relevantes para la humanidad en campos como astrología y matemáticas. Descubrimientos que en muchos sentidos, estaban vinculados a sus creencias filosóficas y teológicas. 551 En definitiva, el concepto que Jinarajadasa nos ofrece de teosofía552 es el siguiente: “Es una exposición de hechos referentes al hombre, a la naturaleza y a Dios, descubiertos por los sabios de las generaciones pasadas y presentes por medio del método científico”.553 De esta definición se derivan algunas interrogantes como: ¿Quiénes eran esos sabios antiguos? y ¿quiénes son en la actualidad? Los primeros, según el hindú, fueron aquellos que los teósofos llaman “maestros de la sabiduría”; calificativo con el que designan a hombres con un tipo más elevado de conciencia cuyo intelecto ha sido desarrollado más a plenitud. Son hombres con emociones purificadas en su grado máximo y representan el más alto escaño en la evolución del espíritu humano, es decir, son seres más perfeccionados en todas sus dimensiones, por lo que se distinguen del resto de la humanidad. Estos hombres superiores regresan de tiempo en tiempo en otro cuerpo físico, mediante el proceso de la re-encarnación con el objetivo de proseguir con sus enseñanzas: Los maestros de sabiduría son perfectos santos por su naturaleza sensible; más por sus facultades intelectuales, son sabios profundos. Esto quiere decir que han adquirido su saber escrutando los misterios del Universo, con ayuda de todas sus facultades.554 551 Ídem. “Pronto nos visitará el Dr. Jinarajadasa: algunas de sus ideas acerca de la teosofía”, Cronos, Quetzaltenango, Guatemala, sábado 15 de octubre de 1938, No. 1,905, pág. 3, año VII “Históricamente la palabra “teosofía” denota un cuerpo de verdades o de hechos concernientes a la Divinidad (religión), a la Conciencia y la Evolución (filosofía) y a la constitución del Universo y del hombre (ciencia)”. 552 Ibíd., lunes 17 de octubre de 1938, No. 1,906, pág. 3, año VII. “La teosofía difiere con la ciencia moderna en que, bajo la denominación de ciencia, incluye la investigación en los mundos suprafísicos pero sus métodos son iguales; investigación mediante la observación de los fenómenos objetivos; razonamiento a base de dicha observación y formulación de hipótesis para descubrir las leyes naturales”. 553 C. Jinarajadasa, “Qué es la teosofía”, Diario Nuevo, miércoles 26 de octubre de 1938, No. 1,508, pág. 5, año V. 554 169 Según Jinarajadasa, la teosofía ha existido desde los inicios de la humanidad en forma de “especulaciones” que los pueblos antiguos hicieron por medio de su conciencia superior, encontrándose su rastro en los Upánishads, los Puranas y en Las seis dársanas o sistemas de filosofía hindúes, en el taoísmo y en los clásicos de la pureza de los chinos, en El libro de los muertos de los egipcios, en el Gathás y otras escrituras persas, en la Cábala y el Talmud de los hebreos, en Pitágoras y Platón y en las escrituras cristianas de los primitivos.555 También establece que fue Ammonio de Sacca y los neoplatónicos quienes fundaron el sistema filosófico conocido como “Teosofismo Ecléctico”, el cual era un sistema ético que conllevaba una fe fundamentada en tres principios universales: 1) la creencia en un Dios, esencia infinita o raíz de la physis (naturaleza), 2) la creencia en la inmortalidad del hombre cuya esencia es idéntica al alma universal y 3) la teúrgia u obra divina. Para el hindú, los neoplatónicos como Plotino y Porfirio fueron los primeros en estudiar de forma sistemática la teosofía e inclusive afirma que el mismo Jámblico556 escribió una obra titulada Misteriis.557 En su opinión, la teosofía también se encontraría en los padres gnósticos de la Iglesia como Valentino, Basílides, Orígenes, Clemente y Athenágoras, en los Teugistas, en los doctores del Islam y con los estudiantes rosacruces de la alquimia como Paracelso y Bruno y otros que añade José Luis Abellán como Cornelio Agripa y Jean Baptista van Helmont, quienes fueron seguidos por Jacob Böhme y Swedenborg.558 Finalmente, Jinarajadasa cree que puede descubrirse en el judaísmo, C. Jinarajadasa, “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, martes 25 de agosto de 1942, No. 2,789, pág. 3, año X. 555 Giovanni Reale y Dario Antíseri, Historia de la filosofía, tomo I: filosofía pagana antigua, Editorial San Pablo, 2007, pág. 566. Jámblico fue mucho más allá pues desdobló el Uno en un primero y un segundo Uno. Además, sub-dividió la hipóstasis plotoniana del espíritu a un plano de lo intangible subdividido en una “tríada” y un plano intelectual, diferenciado de manera “tríadica” y en una de esas tríadas identificó la hipóstasis (sustancia) del alma. 556 C. Jinarajadasa, “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, martes 25 de agosto de 1942, No. 2,789, pág. 3, año X. 557 José Luis Abellán, Historia critica del pensamiento español, (La crisis contemporánea, 1875-1936), Tomo V/I, Editorial Espasa-Calpe S.A., edición no definida, pág. 430. 558 170 sobre todo, a través de los rabinos ilustrados de las sinagogas. 559 Desde su perspectiva, su renacimiento se debía a la Sociedad Teosófica Mundial fundada en New York en 1875 por Helena Petrovna Blatvasky y Henry Steel Olcott:560 La teosofía como sistema para desarrollar este conjunto de enseñanzas principió a usarse, según Diógenes Laercio, en los primeros tiempos de la dinastía Ptolomaica. Este sistema es de origen copto y el primero que la uso para designar la Sabiduría Divina fue el sacerdote egipcio llamado Post-Amun (dios de la sabiduría). Esta sabiduría nos vino a través de los filósofos alejandrinos llamados “Filaleteos o amantes de la verdad.561 Xavier Zubiri por su parte, sostiene que tanto en los primeros filósofos griegos como en los antiguos himnos védicos, Brahmanas y Upanishads más antiguos, está presente la idea de la totalidad y de la nada. El filósofo español explica que estas escrituras sagradas entienden al Universo como lo Absoluto (Brahman) y que el indio se dirige hacia este Universo, ya sea para evadirlo o para sumergirse en él, como la raíz de su divinidad y que esto es lo que históricamente le ha provisto de sentido a su existencia:562 Es la identidad del Atman y del Brahman. El hombre se siente parte de un todo absoluto, y a él revierte. La sabiduría del Veda tiene, ante todo, un carácter operativo. Es verdad que en algún día pretenderá pasar por etapas que pueden parecerse a un conocimiento casi especulativo. Pero este conocimiento es siempre una acción cognoscitiva, orientada hacia el Absoluto, es una comunión con él. En lugar de fisiología jónica, tenemos la teosofía y la teúrgia brahmánicas.563 Esteban Cortijo Parralejo en su tesis doctoral titulada Vida y obra del Dr. Mario Roso de Luna, (1872-1931), científico, abogado y escritor manifiesta que los objetivos con los que nació la Sociedad Teosófica fueron tres: 1) fomentar un núcleo de fraternidad universal, sin distinciones de raza, color, credo o sexo; 2) fomentar el estudio de las escrituras sagradas y ciencias del mundo y reivindicar la importancia C. Jinarajadasa, “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, martes 25 de agosto de 1942, No. 2,789, pág. 3, año X 559 “Pronto nos visitará el Dr. Jinarajadasa: algunas de sus ideas acerca de la teosofía”, Cronos, Quetzaltenango, Guatemala, sábado 15 de octubre de 1938, No. 1,905, pág. 3, año VII. 560 C. Jinarajadasa, “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, martes 25 de agosto de 1942, No. 2,789, pág. 3, año X. 561 Xavier Zubiri, Naturaleza, historia y Dios, Alianza Editorial S.A., Fundación Xavier Zubiri, Madrid, España, 2004, pág. 207. 562 563 Ídem. 171 de la antigua literatura asiática y principalmente de las filosofías brahmánica, budista y zoroastriana y 3) Investigar los misterios ocultos de la naturaleza bajo todos los aspectos posibles y los poderes psíquicos y espirituales latentes, especialmente, en el hombre.564 Desde esta ángulo, lo que ha hecho la teosofía a través de la historia humana, según Jinarajadasa, es tomar todas aquellas consideradas como “verdades eternas” que se encuentran en todas las religiones para ir construyendo así una filosofía propia, ya que los teósofos consideran que éstas no pueden estimarse como posesión exclusiva de cada una de ellas.565 Jinarajadasa, incluso, establece que el apóstol Santiago se refirió a la teosofía cuando hizo una distinción entre “sabiduría humana, demoníaca o de abajo” y la “sabiduría de arriba” o la que viene del “anciano de los días”.566 Por otra parte, sostiene que la teosofía es un cuerpo de enseñanzas que ha permanecido oculto entre los diferentes templos e instituciones iniciáticas, 567 que actualmente conocemos como logias o sociedades secretas. Estas verdades también habrían tenido una gran trascendencia en las religiones tradicionales a través de los Esteban Cortijo Parralejo, Vida y obra del Dr. Mario Roso de Luna, 1872-1931), científico, abogado y escritor, Tesis presentada para obtener el grado de Doctor en Filosofía, Universidad Complutense de Madrid, 1991, págs. 139 y 140. 564 “Pronto nos visitará el Dr. Jinarajadasa: algunas de sus ideas acerca de la teosofía”, Cronos, Quetzaltenango, Guatemala, martes 18 de octubre de 1938, No. 1,907, pág. 3, año VII “Todo lo más espiritualmente refinado, lo más sublime de las Escrituras Sagradas de todo el mundo; lo más ennoblecedor e inspirador en los escritos de filósofos y moralistas, forma la ética de la teosofía: el teósofo se esfuerza por vivir de acuerdo con el espíritu de Cristo y Buda más bien que a código penal o social alguno”. 565 566 Ídem. G. Oliva N., “Éxtasis e introspección”, Diario de Oriente, San Miguel, miércoles 23 de marzo de 1938, No. 12,796, pág. 3, año XXXII. Es interesante este ritualismo iniciático de la teosofía, en donde el candidato a convertirse en teósofo debe leer algunas obras que le proporcionaran un conocimiento básico de las doctrinas esotéricas dentro de las cuales están: La doctrina secreta, La voz del silencio e Isis sin Velo de Madame Blatvasky; El Bhagavad Gita, El sendero de la iniciación, Hacia el templo, Leyes de la vida superior, Los tres senderos de la perfección y Doctrina del corazón de Annie Bessant; Clarividencia y Clauriaudiencia de Leadbeter, Filosofía yoga de Vivekananda; Magia blanca y magia negra de Hartman; Flores y jardines de Jinarajadasa y A los pies del Maestro de Krishnamurti. 567 172 “misterios” que revelan, pero que normalmente no son suficientemente comprendidos.568 Ahora bien, cabe preguntarse por qué si los teósofos son una sociedad secreta, entonces, por qué se dan a conocer públicamente y por qué hacen públicas sus doctrinas hasta en periódicos de circulación corriente. La respuesta a esta interesante pregunta nos la da el filósofo francés Serge Hutin en su obra Sociedades Secretas en la cual establece que no es lo mismo hablar de “Sociedades Secretas Iniciáticas” que de “Sociedades Secretas Políticas”. Las primeras no buscan en absoluto ocultar su existencia (salvo cuando son perseguidas), su historia, sus instituciones, sus doctrinas y sus miembros generalmente son muy conocidos.569 Sociedades iniciáticas como la teosofía sólo guardan en secreto algunas de sus ceremonias y rituales de los cuales no pueden participar personas profanas y son iniciáticas, porque sus afiliados pasan por un proceso de iniciación. Cabría agregar que a veces también realizan conferencias restringidas al público. En cambio, las Sociedades Secretas Políticas sí ocultan sus objetivos y la identidad de sus miembros, ya que, en ocasiones, tales objetivos implican luchas en contra del poder establecido.570 A nuestro juicio, tal y como veremos más adelante en la misma presidencia de Martínez y lo cual fue radicalizado en la Alemania nazi, no es que la teosofía no juegue un papel político importante sino que, en la mayoría de los casos y de forma normal, el aspecto político no es la esencia de sus objetivos sino que lo espiritual y lo metafísico. Lo que sucede es que Hutin cree que es muy difícil distinguir entre ambas, ya que, en realidad, algunas sociedades que nacen con un carácter iniciático, posteriormente derivan a objetivos políticos.571 C. Jinarajadasa, “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, martes 25 de agosto de 1942, No. 2,789, pág. 3, año X. 568 Serge Hutin, Las sociedades secretas, Biblioteca de ensayo siruela, Ediciones Siruelas S.A., Madrid, España, 2008, págs. 24 y 25. 569 570 Ídem. 571 Ídem. 173 Ahora bien, si hemos dicho que la teosofía persigue fines espirituales habría que decir que a pesar de los ataques que realiza la Iglesia Católica en su contra, 572 ésta trata de conciliar sus postulados con el cristianismo. Esto puede comprobarse cuando Jinarajadasa establece que, aunque sabe que la Iglesia Católica moderna la condena, a través del tiempo, también han habido algunos esfuerzos por conciliar ambas doctrinas mediante obras como: Transacciones de la Sociedad de Filadelfia publicada por feligreses católicos en 1697, Introducción a la teosofía vista como los misterios de Cristo, obra dirigida específicamente a estudiantes de universidades, colegios y escuelas cristianas y Misceláneas teosóficas y guía de lo espiritual, publicada en 1675 por el sacerdote católico Miguel de Molinos. Todas con el ánimo de aprovechar las ideas teosóficas por la religión cristiana.573 En esta misma línea de ideas, Annie Besant consideraba que la Iglesia Católica en los actos importantes siempre utilizaba el latín como una especie de “mantra” que actuaba, no como una lengua muerta, sino como una especie de fuerza vibratoria entre este mundo y los mundos invisibles. Estas vibraciones producían sonidos que a su vez constituían “palabras de poder” que afectaban los mundos suprafísicos, especialmente, durante la misa. Estos “mantras” eran parte esencial de todo sacramento,574 de hecho, Besant escribió un libro titulado El cristianismo esotérico, los misterios de Jesús de Nazareth, cuyo objetivo era reafirmar las profundas verdades del cristianismo, que generalmente eran desatendidas e incluso negadas por los materialismos.575 Pero ahora que hemos hablado un poco sobre la historia de la teosofía, presentado su concepto e imaginarios y visto algunas de sus relaciones y José María Caro, ¿Qué es la teosofía?, mayo de 1942, pág. 15 “Los teósofos no temen sostener que el hombre es Dios, que fuera de Él no hay ni puede haber nada. Si tratáis de averiguar a qué clase de panteísmo pertenece, no llegaréis a descubrirlo, porque unas veces se os dará a entender el panteísmo materialista inmanente, otras el emanantista transeúnte, otras el panteísmo idealista. En todo caso se os afirma perentoriamente la unidad de todo ser con el Absoluto o con Dios. La refutación del panteísmo la tenéis en cualquier texto de filosofía”. 572 C. Jinarajadasa, “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, martes 25 de agosto de 1942, No. 2,789, pág. 3, año X. 573 Annie Besant, “Cristianismo esotérico o los misterios menores” La Prensa, sábado 23 de octubre de 1933, No. 6877, pág. 3, año XXI. 574 575 Disponible en: www.consciouslivingfoundation.org/.../Annie%20Besant%20-... pág. 1 174 discrepancias con respecto al cristianismo y al positivismo, creemos conveniente desarrollar sus principios fundamentales, sin los cuales es imposible comprenderla. 2.1.3) Principios esenciales de la teosofía según Jinarajadasa: 2.1.3.1) Una sola causa de todo lo existente:576 este principio sostiene que todo lo creado tiene un solo origen, (hermandad-panteísmo) llámesele Dios, Padre o como quiera llamársele577, el ejemplo clásico al cual hace referencia la teosofía es al de San Francisco de Asís, quien llamaba a los animales sus hermanos, con la aclaración que estos hermanos están en un grado inferior en el proceso de evolución, pero hay también otros seres que están en un grado superior a la humanidad y son los llamados maestros, iluminados, santos o gurús. Esto es lo que la teosofía conoce como “jerarquía de los seres.578” Según Jinarajadasa, además del Uno existen legiones de logos secundarios, que rigen distintas congregaciones de sistemas solares, por lo que habrían innumerables huestes de inteligencias espirituales, que precisamente son los devas, arcángeles y ángeles de las religiones tradicionales, así como distintas graduaciones de espíritus que residen en los cuerpos humanos hasta llegar a las inteligencias sub-humanas y las que aún no han despertado.579 Esta Causa Primera estaría inmanente en todas las causas secundarias,580 por lo tanto, en todas las cosas. Los filósofos herméticos, según Jinarajadasa, formularon C. Jinarajadasa, “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, jueves 27 de agosto de 1942, No. 2,791, pág. 3, año X. 576 “Discurso de bienvenida del Presidente Martínez a las delegaciones asistentes a la celebración del Primer Centenario de la Universidad de El Salvador”, Diario Oficial, Suplemento La República, jueves 20 de febrero de 1941, No. 2,357, pág. 2, año IX. “Por la síntesis filosófica (teosofía) los sabios de todas las épocas descubrieron la energía universal que se manifiesta en el mundo material, emocional, mental y espiritual, porque no hay más que “una” energía, la de Dios, el creador”. 577 Pronto nos visitará el Dr. Jinarajadasa: algunas de sus ideas acerca de la teosofía”, Cronos, Quetzaltenango, Guatemala, lunes 17 de octubre de 1938, No. 1,907, pág. 3, año VII. 578 579 Ídem. “Interesante plática del Sr. Presidente Martínez en el Pro-patria”, Diario Nuevo, jueves 25 de febrero de 1943, No. 2,836, pág. 3, año X. “El hombre no es como afirma Haeckel, un producto ciego de la evolución natural. Por el hecho de llevar dentro de sí una conciencia que lo guíe en el sendero de la vida, proviene de un origen superior. Es chispa divina, animada por la aspiración de volver a la fuente de donde procede”. 580 175 esta verdad: “mientras que todas las cosas están en el todo es igualmente cierto que todo está en todo. Para Jinarajadasa, este principio también fue sustentando por el cristianismo cuando Pablo dijo: “…Porque en Él (Dios) vivimos y nos movemos y somos”. (Hechos XVII, 28). ¿No sabes que eres el templo de Dios y que Dios mora en ti? (1ª Corintios III, 16). Jinarajadasa también cita al sacerdote jesuita Gerónimo Ripaldi quien se cuestiona ¿Dónde está nuestro Dios, Señor y Padre? en todo lugar por esencia, presencia y potencia. (Catecismo páginas 51 y 52, edición de 1927). 581 Para Jinarajadasa, esta Primera Causa Absoluta estaba fuera de la comprensión de todo conocimiento humano en el sentido de que era un Dios desconocido, sin nombre, inmanifestado, que sólo era posible conocer a través de su actividad: amor, sabiduría y voluntad, que en todas las religiones se había expresado en una naturaleza trina. En el Cristianismo, a través del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, en Egipto, mediante Isis, Osiris y Horus, en los hindúes, por medio de Nara, Nari y Viradj, en los Persas en Agni, Vayú y Surya. Estos tres sujetos han siso intrínsecamente inseparables, pero, según el hindú, en ocasiones prima uno de ellos y es lo que los antiguos filósofos llamaban “medidas divinas”, que era una manifestación de la actividad cósmica.582 El Dios que describe Jinarajadasa se asemeja mucho al de Feuerbach para quien Dios es sólo una atribución de las cualidades humanas. El filósofo alemán, en este mismo sentido, desenreda la creencia de en un Dios inmanente en tres, que surge, según él, a partir de que Dios es una entidad autárquica, lo cual quiere decir que se basta a sí mismo, pero el problema para la teología viene dado en el hecho de C. Jinarajadasa, “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, jueves 27 de agosto de 1942, No. 2,791, pág. 3, año X. 581 “Pronto nos visitará el Dr. Jinarajadasa: algunas de sus ideas acerca de la teosofía”, Cronos, Quetzaltenango, Guatemala, sábado 15 de octubre de 1938, No. 1,905, pág. 3, año VII. “La segunda grande y universal verdad religiosa de la teosofía es la trinidad de un logos al manifestarse. Adopta este término la teosofía tomándolo de Platón, de Filo y del cuarto evangelio…procediendo de las profundidades de la existencia “Una” que sobrepasa toda comprensión y todo lenguaje, un logos, imponiéndose a sí mismo un límite y circunscribiendo voluntariamente su propia área de acción, deviene un “Dios manifestado” y crea un universo. Esta Deidad auto-creadora se desenvuelve en triple forma: voluntad: que exhala de sí y aspira dentro de sí los mundos, sabiduría: manifestando los dos aspectos de vida y forma entre los cuales ha de tejerse la contextura del universo y la mente universal fuente creadora de todas las formas arquetípicas que han de ser producidas y elaboradas en la materia durante la evolución del universo, es actividad”. 582 176 que este Dios desde su solipsismo se ve imposibilitado a practicar el amor,583 del cual habla Jinarajadasa. Para poder amar, Dios necesita de otro diferente a él en cuanto a su individualidad aunque no en cuanto a su esencia y es así como surge el Hijo. Del amor unido a la inteligencia surge el Espíritu Santo que representa la unión o lazo fraternal entre las dos divinas personas. En otras palabras, para Feuerbach, el misterio de la trinidad es una simple proyección humana de la necesidad social que representa la unión entre Dios y el hombre. 584 En base a esta relación podría explicarse porque es un credo que aparece arquetípicamente en las religiones más importantes del mundo. Feuerbach explica que el Espíritu Santo funciona como un ente femenino (erótico) a manera de madre para constituir así la sagrada familia. El filósofo alemán coincide hasta cierto punto con el positivismo en establecer que las religiones son la esencia infantil de la humanidad. Desde su perspectiva, el misterio de la trinidad es una contradicción entre monoteísmo y politeísmo, la cual se explica por el solo hecho de ser una mera invención humana.585 En este punto consideramos que la teosofía de forma similar a la filosofía religiosa especulativa, trata de conservar el misterio de la trinidad contra la inteligencia atea. En un sentido religioso, Dios está manifiesto en todas las cosas siendo su “vida divina” el espíritu que anima la creación. Jinarajadasa nos dice que cada filósofo o fundador de una religión ha representado de una forma diferente a la Causa Primera. Para Vyasa fue el sol, para Hermes la luz, para Zoroastro el fuego y para Orfeo la armonía, todas diferentes formas de visualizar a la misma verdad Ludwig Feuerbach, La esencia del cristianismo, Editorial Claridad, S.A., 2ª Ed., Buenos Aires, Argentina, 2006, págs. 83. 583 584 Ídem. 585 Ibídem, págs. 26, 84, 257. 177 única.586 En su opinión, no se puede ser un verdadero teósofo mientras no se haya tenido un conocimiento personal de Dios.587 2.1.3.2) Ley de evolución: Es la base fundamental en el proceso de toda manifestación, ya sea de fenómenos que pueden ser percibidos por los sentidos o no. La teosofía no reconoce el estancamiento absoluto, ni estados o penas perpetuas sino que cree que todo “ser” tiene una ruta evolutiva ascendente. En los individuos que están más evolucionados, Dios se manifiesta con mayor amplitud y es por eso que Jesús le dijo a los judíos: “Vosotros sois dioses, e hijos todos vosotros del Altísimo”. (Salmo 82, 6).588 Según Jinarajadasa, en general, las religiones han acelerado el proceso de evolución de la raza humana mediante la enseñanza de las verdades fundamentales relativas al “ser” y sus relaciones con la Causa Primera de acuerdo con el nivel de evolución alcanzado en cada época concreta. Lo que sucede es que estas verdades se han sabido adaptar a los tiempos.589 2.1.3.3) Ley rigurosa de causa y efecto: Es el principio que establece que todo permanece en movimiento eterno hasta llegar a la Causa Primera o Arquetipo que le dio origen a todo. (Muy similar a la concepción del motor inmóvil aristotélico que mueve sin ser movido). Según esta ley, no existe la fortuna, la suerte, las casualidades o designios caprichosos de un Dios creador, por lo que todo está sujeto al principio natural de causación.590 Jinarajadasa pone el ejemplo bíblico de Gálatas C. Jinarajadasa, “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, viernes 28 de agosto de 1942, No. 2,792, pág. 3, año X. 586 “De las enseñanzas del Dr. C. Jinarajadasa”, La Prensa, lunes 24 de octubre de 1938, No. 8,795, pág. 3, año XXIV. 587 C. Jinarajadasa, “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, miércoles 26 de agosto de 1942, No. 2,790, pág. 3, año X. 588 589 Ibídem, martes 25 de agosto de 1942, No. 2,789, pág. 3, año X. “Plática filosófica del General Don Maximiliano Hernández Martínez”, Diario Oficial, Suplemento La República, viernes 18 de septiembre de 1942, No. 2,809, pág. 4, año X. “Acudamos a La Biblia en nuestro apoyo. En uno de su versículos dice un texto sagrado: El mal que haces lo pagarás y con una cuarta más. Muy sabios eran los que escribieron aquella obra y grande era el conocimiento que tenían de las cosas del alma. No solamente los actos que ejecutamos en perjuicio de los demás se cobra en forma de dolor, sino también las ociosas palabras que decimos y los malos pensamientos que formamos”. 590 178 VI, 7, cuando San Pablo dijo: “No te engañes. Dios no puede ser burlado: que todo lo que el hombre siembra eso también cosechará”. En las religiones orientales este principio fue conocido como “karma”, denominación que permanece en la literatura teosófica:591 Mientras que existen muchos individuos que creen que pueden asesinar, robar, calumniar y cometer otras tropelías burlando la justicia humana o ser perdonados mediante doctrinas torcidas diciendo misas o arrodillándose ante santos (…) el verdadero teósofo cree en cambio que sólo las buenas acciones son las que pueden redimir al ser humano y que el que obra mal tiene que ser castigado, sin que valgan arrepentimientos, ni oraciones para eludir el justo castigo. Esa ley es la de compensación, karma o renacimiento.592 El filósofo hindú Kapila también expresó: “el efecto es la causa reproducida en otra forma, el efecto nunca es esencialmente diferente de la causa: es la causa limitándose a tomar forma”. Jinarajadasa para darse a entender más contemporáneamente, tomó un ejemplo de la alquimia: “el ácido sulfúrico al actuar en el sodio da origen al sulfato de sodio, sal muy diferente de sus componentes. El ácido sulfúrico que produce esa sal está inmanente en el sulfato de sodio. En cualquier momento mediante un procedimiento adecuado se puede separar el sodio de la sal y aparece el ácido sulfúrico”. De esta misma forma, en todos los cuerpos químicos compuestos habría una inmanencia de los elementos que los componen como es el caso del hidrogeno en el agua y también se aplica en la electricidad, el magnetismo y en todos los agentes activos de la naturaleza.593 Este principio también habría sido sostenido por Santo Tomás de Aquino cuando en la Summa Teológica, 1ª parte, cuestión IV, artículo 2 dijo: Todo lo que hay de perfección en el efecto se ha de encontrar en la causa efectiva. Luego es claro y evidente que el efecto preexiste en la causa agente (…) luego siendo C. Jinarajadasa, “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, miércoles 26 de agosto de 1942, No. 2,790. pág. 3, año X. 591 Remy Roger, “Concepto errado que de la teosofía tienen algunos”, El Cronista, Tegucigalpa, Honduras, lunes 31 de octubre de 1938, No. 7,292, pág. 7, año XXVII. 592 C. Jinarajadasa, “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, miércoles 26 de agosto de 1942, No. 2,790. pág. 3, año X. 593 179 Dios la primera causa efectiva de todas las cosas, las perfecciones y el ser por lo tanto de todas ellas han de preexistir en Él de un modo eminentísimo.594 2.1.3.4) Ley de supervivencia o de eternidad del espíritu: Consiste en que ninguna manifestación física puede ser destruida en los procesos de la naturaleza, sólo existe la transmutación o cambio, pero nunca la aniquilación. 595 En este sentido, los seres humanos al morir sólo experimentan una transformación tal como dijo Pablo: “todos seremos transformados” (1ª de Corintios XV-51), pero además Jinarajadasa también puso el ejemplo científico del átomo más diminuto de la materia que no puede ser destruido sólo cambiar en su forma, conservando la esencia.596 Jinarajadasa establece que este principio, en el ámbito religioso, se cumple a través de la reencarnación, creencia597 que sabe no es aceptada mayoritariamente en el mundo occidental, pero afirma que ha habido autores occidentales como David Hume que han afirmado que es la única forma posible de inmortalidad del alma, inclusive, expresó que esto también fue sostenido por Cristo cuando dijo: “y si le quieres recibir, Él es aquel que Elías dijo que debía de venir” (Mateo XI, 14). 598 En todas estas explicaciones es muy evidente como Jinarajadasa trata de hibridar religión, filosofía y ciencia. Swami Vivekananda, Conferencias Teosóficas, (prólogo del traductor), Antonio Roch Editor, Barcelona, España, sin fecha de publicación, pág. 11. 594 A. G. Tavel, “Teosofía”, El Cronista, Tegucigalpa, Honduras, sábado, 15 de octubre de 1938, No. 7,282, págs. 1 y 8, año XVII. “Como las chispas vuelven a las llamas y se funden en ellas, así dicen que nosotros volvemos a nuestra fuente original, esto lógica y racionalmente no es inmortalidad, es tesis materialista ni más, ni menos. Cuando el ser humano muere, muere su cuerpo y se ve dispersado y disuelto en los elementos que sirvieron a su construcción.” El Dr. A. G Tavel fue director de la escuela filosófica trascendental “El Nuevo Pensamiento” y del Instituto Bíblico de Honduras. El Cronista le brindó algunos renglones para aclarar ciertas dudas sobre teosofía. 595 C. Jinarajadasa, “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, miércoles 26 de agosto de 1942, No. 2,790. pág. 3, año X. 596 “Pronto nos visitará el Dr. Jinarajadasa: algunas de sus ideas acerca de la teosofía”, Cronos, Quetzaltenango, Guatemala, lunes 17 de octubre de 1938, No. 1,906, pág. 3, año VII. “La inmortalidad del alma es parte integrante de la filosofía teosófica como deducción inevitable de la identidad de naturalezas del ser humano y del Ser Universal. La continuidad de conciencia es igualmente inevitable puesto que el “yo” es consciente y eterno en el devenir de todas sus experiencias inspeccionándose sucesivamente a sí misma en sus memorias o recuerdos”. 597 C. Jinarajadasa, “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, miércoles 26 de agosto de 1942, No. 2,790. pág. 3, año X. 598 180 En realidad, Hume no dice que cree en la reencarnación sino que literalmente dice: “la metempsicosis es, por tanto, el único sistema en favor de la inmortalidad del alma al que la filosofía puede prestar alguna atención”. Hume sólo establece que dicha teoría merece ser estudiada, pero nunca asumida. Por el contrario, el filósofo escocés trata de destruir toda prueba moral, metafísica o física que sirva para respaldar dicha teoría en base a la razón natural y la observación empírica: 599 La muerte es el fin inevitable. Y, sin embargo, la naturaleza no nos hubiese inspirado una aversión natural a ese fin. Debe sospecharse de toda doctrina que es favorecida por nuestras pasiones y las esperanzas y miedos que han favorecido la doctrina de la inmortalidad son sobremanera obvios.600 2.1.3.5) Principio de vibración:601 Nada se conserva en reposo, todo está en movimiento, todas las cosas vibran aún la materia más densa. Aquellas cosas que aparentemente son estáticas, en realidad, están en vibración constante. 602 Salarrué sobre este tema pensaba que la materia y el espíritu sólo eran los dos extremos de una misma cuerda acondicionados en base a vibración. 603 Para Martínez, todo era vibración y toda vibración se transformaba en sonido y todo sonido se transformaba en luz. Algunos seres humanos, según él, estaban más capacitados que otros para oír ciertas vibraciones sutilísimas de la energía y algunos también podían ver cómo estas vibraciones se transformaban en luz.604 David Hume, Sobre el suicidio y otros ensayos, Alianza Editorial, sin edición definida, Madrid, España, 1988, págs. 18, 145. 599 600 Ibídem, pág. 146. “Plática del General Martínez versó sobre el dominio de la mente y las emociones”, Diario Oficial, Suplemento La República, jueves, 3 de diciembre de 1942, No. 2,868, pág. 4, año XI. “Las vibraciones mentales que engendran aquellas dos emociones (amor y odio) ejercen una influencia marcada sobre nuestra contextura física. Se diría que el cuerpo humano adquiere un ritmo semejante al de las emociones que dominan en determinado instante el “yo” espiritual”. 601 C. Jinarajadasa, “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, miércoles 26 de agosto de 1942, No. 2,790. pág. 3, año X. 602 Espectroscopio, una columna de Salarrué: acotaciones, comentarios y especulaciones en La Metafísica, sin fecha, bajo clasificación: SV-MUP1-I (1.2-F20.1) en el Museo de la Palabra y la Imagen. 603 Maximiliano Hernández Martínez, “La imperfección del ser humano”, AGN, sección: familiares y personales, fondo: MHM, serie: 05, pláticas doctrinales, Caja 2. Exp. 52, folio 1, martes 1º de diciembre de 1942. 604 181 La base filosófica de este principio está en Orfeo quien predicó la naturaleza divina de la armonía. Estableció que la armonía del universo radicaba en lo interno del hombre, que lo único que éste tenía que hacer era vibrar al mismo nivel de lo creado, es decir, entrar en comunión con todo lo creado y con la Causa Única 605 y también en Pitágoras para quien el cosmos era un orden perfecto, una armonía universal. El ser humano podía interpretar y transmitir las ondas de la existencia que emanaban permanentemente del Sol, el músico Supremo, el Creador.606 Al referirse a este principio, el teólogo y químico español Enrique Miret Magdalena expresó: La filosofía venida de Oriente ha sostenido que todo el mundo es vibración. Y, efectivamente, la nueva química y la nueva física descubren, siglos después de esa olvidada y antiquísima afirmación hindú, que las moléculas vibran dando 20 millones de oscilaciones por segundo, y los electrones mucho más: 6 billones por segundo.607 Otra sostenedora de este principio ya dentro del mundo occidental, es María Zambrano, discípula de Ortega y Gasset y Xavier Zubiri, quien se identificaba profundamente con la ética de Spinoza y las Enéadas de Plotino. Zambrano se interesó mucho por los planteamientos pitagóricos, los cuales se encuentran presentes en su pensamiento musical.608 En realidad, toda la estructura de su filosofía, a excepción de lo que le aportan los connotados autores occidentales ya mencionados, es muy semejante a la teosofía. Zambrano creía que Plotino era la universalidad de una religión de la luz que atravesaba todo su pensamiento hasta descender a su poesía, la cual creía se había originado en el Libro de los muertos de los egipcios. También sostuvo una visión irracionalista y antipositivista de la filosofía y se interesó mucho por la idea de la reencarnación en base a los escritos póstumos de Max Scheler Ordo Amoris y Muerte y supervivencia y al igual que los teósofos concebía al hombre como un trozo del 605 Ídem. Patricia Caniff, Pitágoras, grandes iniciados, Ediciones y distribuciones Mateos, Madrid, España, 1998, pág. 69. 606 Enrique Miret Magdalena, Occidente mira a Oriente, (su mensaje de sabiduría y desarrollo humano), plaza y janés editores S.A., 1ª Ed., 1999, Barcelona, España, pág. 162. 607 María Zambrano, Hacia un saber sobre el alma, Alianza Editorial S.A., Fundación María Zambrano, 5ª Edición, Madrid, España, 2001, págs. 11 y 12. 608 182 cosmos. Zambrano sentía mucho aprecio por la filosofía oriental, conoció los ritos órficos y sintió simpatía por el culto a Dionysios. La teoría del ritmo pitagórica, sin duda, fue muy importante para la filósofa española:609 Tal vez la vencida tradición del pitagorismo fuese la portadora de este saber del ritmo del pensamiento, en sus formas vivientes y eficaces. Como tantas otras tradiciones de saber oscurecidas por el aristotelismo reinante, no se llegó a extinguir. Prosiguió su vida heterodoxa en forma de saber secreto, propio para los iniciados, en los linderos o dentro ya de la teosofía. Pero de estos saberes inextinguibles, brota un día la inspiración que parece infiltrarse o revivir dentro de las formas más ortodoxas de saber triunfante.610 José Vasconcelos por su parte, también creía que la actividad estética obedecía a ritmos y regularidades específicos y que la conciencia humana estaba dotada de una capacidad mental o espiritual “a priori” independiente de la lógica, lo cual tampoco significaba caer en un simple sensualismo estético-empírico. Para el filósofo mexicano, pensar en algo hermoso, producía una relación melódica rítmica que complacía a la existencia del espíritu, según él, los intelectualistas veían al espíritu como una operación lógica, pero los místicos lo ubicaban como una operación rítmico-estética a través de la poesía, la música, la plástica o la pintura. La gran diferencia entre el intelectualista y el artista, era que el primero trabajaba con ideas y el segundo con imágenes:611 El ritmo del músico va adquiriendo entonces caracteres por definición de nuestro ritmo interior y sus posibilidades (…) ordena el ritmo, en la línea simple del tiempo, dos sonidos heterogéneos o varios sonidos heterogéneos y los repite a intervalos constantes. Sin quererlo, ha medido el tiempo, pero no le interesa la medida, sino el efecto de ésta, o sea realizar una especie de solución vital de la existencia de los seres de sonido en el campo de la conciencia. La medida depende de la fisiología, pero el arreglo es astucia del alma.612 Este concepto de la armonía universal, finalmente lo encontramos en Leibniz, para quien la armonía no era simplemente el mero acuerdo entre unas cosas y otras, sino que la máxima exigencia de inteligibilidad de la realidad y de la esencia de las cosas mismas. Para Leibniz, había una armonía entre materia, tiempo y 609 Ibídem, págs. 13, 24, 25, 26, 30, 31, 46. 610 Ibídem, pág. 55. José Vasconcelos, Estética, Antología de Gerardo González Macgregor, Serie Pensamiento de América, Ediciones Oasis S.A., 2ª Edición, volumen 10, págs. 191 y 194. 611 612 Ibídem, pág. 207. 183 movimiento y consideraba que existía una unidad de la substancia. Leibniz, según Bernardino Orio de Miguel, se vio muy influenciado por la teosofía, ya que su familia era amiga del famoso teósofo belga Francisco Mercurio van Helmont. Leibniz aceptaba la existencia de un átomo metafísico, que era el Uno y la ley de causalidad:613 No se abría pues para Leibniz, en el horizonte conceptual de su tiempo, más que la vieja tradición espiritual teosófica, alquímica y cabalística, en la que de joven se había iniciado y que nunca abandonó, pero que ahora, con las nuevas herramientas conceptuales proporcionadas por la matemáticas y la dinámica, ofrecía a sus ojos la base más amplia de la anhelada Philosophia Perennis, a cuya construcción él podía aportar justamente el armazón racional que necesitaba. Si Dios es espíritu, decía la tradición teosófica, toda substancia creada ha de serlo. El espíritu gobierna al mundo; el espíritu es vida y la vida.614 El espiritualismo de la tradición teosófica era vitalista o pampsiquista, por tanto La monadología de Leibniz también lo era. Leibniz creía que todas las substancias individuales se relacionaban, ya que estaban concatenadas en una armonía originaría y preestablecida del Cosmos y su principio de analogía consistía, precisamente, en que una substancia se expresaba en otra, ya que todo era una concentración del Universo en armonía. Según Bernardino Orio de Miguel, en la Hypothesis physica nova de 1671 recogió la concepción teosófica del macro y del microcosmos y la idea de los mundos incluidos en otros mundos. Leibniz, de forma muy similar a Vasconcelos también creía que había una continuidad rítmica entre las obras de la naturaleza y las obras de arte.615 La filósofa española Cinta Canterla González también reconoce la influencia de la tradición teosófica en Leibniz y Newton: Y es que tanto Newton como Leibniz habían recibido influencias de la tradición neoplatónica. Newton en concreto las había recibido de la alquimia, la mística, la teosofía (por la que su heterodoxia religiosa le hizo interesarse) y el neoplatonismo de Cambridge, al menos el de la filosofía de Moore. Leibniz, del neoplatonismo y de la logosmistik alemana. La concepción vitalista de los componentes de la materia (en su versión física) y de la realidad (en la filosófica) se encuentran en la Edad Bernardino Orio de Miguel, El principio de analogía en Leibniz, revista Enrahonar, No. 14, 1988, págs. 34, 35, 36, 55. 613 614 Ibídem, pág. 38. 615 Ibídem, págs. 43, 45, 50, 51, 52. 184 Media tanto en la alquimia como en filosofías y teosofías tales las de Nicolás de Cusa, G. Bruno, Eckart, y más tarde Böhme.616 2.1.3.6) Principio de libertad y tolerancia religiosa: Así como los seres humanos se encuentran en diferentes grados evolutivos, también hay algunas religiones que están más adaptadas al desarrollo espiritual que otras, por lo tanto, estas últimas son las que más conviene seguir.617 Todas las religiones son una unidad, todas son raíces del mismo árbol, que en el transcurso del tiempo dan su fruto, porque todas se encuentran amparadas ante la misma “sabiduría divina”. La teosofía pretende ser una explicación armónica de todas sus verdades parciales, como una especie de síntesis de todas sus visiones.618 Jinarajadasa explica que los mahometanos crecieron en condiciones materiales muy precarias, en terrenos estériles y desiertos, por lo que se tornaron violentos. Ante esto, su maestro Mahoma les enseñó el principio de resignación a la voluntad divina y el monoteísmo: “sólo existe un solo Dios y Mahoma es su profeta”. En el Judaísmo, el principio fundamental es la rectitud divina y como derivación de éste vino el cristianismo con Jesús quien trajo su mensaje de amor a la humanidad. Jinarajadasa reconoce que el cristianismo es la religión que ha predominado en Occidente, según el teósofo, Cristo invitó a encontrar nuestro propio Cristo interno: “De cierto os digo que el que crea en mí, las obras que yo hago él también las hará (San Juan XIV, 12).619 Cristo enseñó el ideal de servicio y el amor muto, mandó a todos a verse como hermanos. Lo que Jinarajadasa concluye, en definitiva, es que cada religión ha formado un sistema y ha cumplido su misión en el tiempo que le ha tocado Cinta Canterla González, “Neoplatonismo, filosofía natural y misticismo fuentes ocultas del romanticismo en el Kant precrítico”, Cuadernos de Ilustración y romanticismo, No.1, 1991, pág. 166. 616 “Plática del Sr. Presidente Martínez sobre la carta atlántica”, Diario Nuevo, jueves 1º de abril de 1943, No. 2,866, pág. 3, año X. “La libertad de elegir religión es básica para el hombre. Cada uno de nuestros semejantes se encuentra en un grado de evolución. De acuerdo con él escoge la fe que mejor se acomode a sus tendencias y modalidades. Busca a Dios en el plano de espiritualidad en que se encuentra. De allí que no se puedan imponer credos.” 617 C. Jinarajadasa “¿Qué es la teosofía?”, Diario Oficial, Suplemento La República, viernes 28 de agosto de 1942, No. 2,792, pág. 3. año X. 618 619 Ídem. 185 propagar la forma de verdad que ha tenido que ser dada al mundo, pero que con el paso del tiempo, pierden su vigencia y en el afán de cada una de prevalecer sobre las demás, es que se han desatado las grandes guerras religiosas que tanto han dañado a la humanidad. Es importante aclarar que para los teósofos, las verdades enseñadas por sus líderes no son de su invención, sino que éstas ya se encuentran en los libros sagrados llámense: Vedas, el Corán o la Biblia.620 Además, mediante la exposición de estos principios la teosofía pretende ser un conocimiento que es superior a toda sabiduría humana.621 2.1.4) Valoración crítica de los principios teosóficos: Al hacer una valoración crítica de estos principios, puede establecerse que sostienen una doctrina que desde el punto de vista académico es una pseudoreligión, una pseudo-filosofía y una pseudo-ciencia, ya que, en realidad, en ninguno de estos campos es reconocida como tal, incluso, el tradicionalista René Guénon escribió una obra monográfica titulada El teosofismo, historia de una pseudoreligión (1921).622 Hume, además establece que una de las ventajas de la verdadera filosofía es que procura ser un antídoto contra las más burdas supersticiones y la falsa religión, las cuales están basadas a su vez en falsas opiniones. Hume dice que la filosofía no debe dejarse embaucar por la sofistería y que el argumento de la Causa Suprema es un recurso que debería excluirse para siempre de la filosofía.623 En su Tratado de la naturaleza humana establece que, en realidad, el principio de la causa y efecto no explica nada. Sostiene que un objeto puede ser contiguo y anterior a otro sin ser su causa, en otras palabras, la cualidad de un objeto no depende de la relación causa y Salvador Moncada, “Vendrá el Dr. Jinarajadasa”, El Cronista, Tegucigalpa, Honduras, jueves 25 de agosto de 1938, No. 7,239, pág. 6, año XXVII. 620 621 “El conocimiento superior”, Diario Nuevo, martes 15 de enero de 1935, No. 352, pág. 3, año II. 622 Disponible en: R Guénon – 1996 – xa.yimg.com David Hume, Sobre el suicidio y otros ensayos, Alianza Editorial, sin edición definida, Madrid, España, 1988, págs. 122 y 138. 623 186 efecto, no necesariamente siempre existe una conexión entre dos fenómenos distintos.624 Para Hume, no existen pruebas racionales, empíricas o si quiera intuitivas de una Causa Primera como principio autoproductivo y productor de todo lo existente. La idea de la necesidad de una causa es falsa, porque decir que algo se autoproduce es decir que algo ya existía antes de su existencia. Para Hume, muchas de estas causas son meros actos de fe.625 La académica Dolores López por su parte, manifiesta que la teosofía surgió como una nueva filosofía que trataba de probar la entidad del alma y dotar de un nuevo sentido a la vida, que aunque para sus adeptos constituía un conocimiento legítimo, para sus detractores no fue más que una pseudo-ciencia, aludiendo a que Helena Blavatsky fundó en 1875 la Sociedad de Investigaciones Espiritistas, con cuyos credos simpatizaron multitud de intelectuales y artistas, pero que estaban basados en fraudes.626 Según ella, dichos fenómenos, en realidad, fueron una amalgama de supersticiones que incluían la telequinesia y la metempsicosis que pudieron haber sido el producto de sugestiones mentales, que los teósofos hibridaron con doctrinas asiáticas y el neoplatonismo. 627 Todo este imaginario también se trató de plasmar en literatura mágica y fabulosa, que combinó elementos naturales con sobrenaturales,628 en el caso de El Salvador, como la de Salarrué. La difusión de la teosofía y este tipo de narrativas mágicas reflejarían una tensión entre ciencia, para-ciencia, progreso, arte y trascendentalismo, precedido de una época donde predominó el escepticismo y la demostración experimental, es decir, la actitud positivista de ir desmitificándolo David Hume, Tratado de la naturaleza humana, tomo I, Ediciones Gernika S.A., 1ª Edición, México, 1992, págs. 105, 106. 624 625 Ibídem, págs. 109, 110, 111 y 128. Dolores López Martín, “El espiritismo, la parasicología y el cuento fantástico hispanoamericano del siglo XIX”, revista Arrabal, No. 5-6, año 2007, Editorial Universitat de Lleida, Asociación Española de Estudios Literarios Hispanoamericanos, págs. 39-44. 626 627 Ídem. 628 Ídem. 187 todo, aunque las dudas ontológicas de fenómenos como la muerte no estuvieran completamente resueltas.629 Desde esta perspectiva, podríamos decir que la teosofía y la literatura fantástica, nacieron como un “ansia” o “angustia” de trascender lo empíricamente demostrable, aquello inalcanzable para el entendimiento humano y asequible sólo por la “sensibilidad” que quiso presentarse intencionalmente como lo irracional debido a su condición de alteridad,630 pero al mismo tiempo cayó en falacias e inventos que muchas veces llegaron a la charlatanería, incluso, el mismo Krishnamurti llegó a aceptar que todas las experiencias místicas que vivió durante su etapa teosófica y los supuestos instructores con los que habló fueron irreales. 631 A continuación veremos, sin duda, el aspecto más negativo de la teosofía, el cual fue su vinculación al nacional socialismo alemán haciendo un poco de referencia al contexto salvadoreño. 2.1.5) Análisis de la relación entre teosofía y nacional-socialismo: En mayo de 1929 Hugo Rinker asistió a la “Gran Convención Teosófica” celebrada en San José de Costa Rica como delegado de las logias teosóficas de El Salvador en la que precisamente disertó Jinarajadasa y a la cual concurrió una gran cantidad de público centroamericano.632 Como antesala de la visita del teósofo a El Salvador el periódico La Prensa publicó un artículo en el que se dio a conocer que Jinarajadasa era doctor en ciencias y letras y que se había especializado en leyes y lenguas modernas, que era casado y que en ese momento, no tenía hijos.633 Jinarajadasa conoció a Krishnamurti desde muy joven y fue amigo de Leadbeater y de todos los miembros dirigentes del 629 Ídem. 630 Ídem. Pedro López Anadón, Krishnamurti, vida y obra, serie Sendas, Editorial Oberon, Grupo Anaya, S.A., Madrid, España, 2003, pág. 198. 631 “Conferenciante teosófico vendrá pronto”, La Prensa, miércoles 22 de mayo de 1929, No. 5293, pág. 1, año XVII. 632 “El progreso del feminismo conviene a la humanidad”, La Prensa, lunes 27 de mayo de 1929, No. 5299, pág. 1, año XVII. 633 188 movimiento teosófico. Durante su estadía en Costa Rica declaró a un periodista lo siguiente: En todos los países de América del Sur que he visitado –Brasil, Uruguay, Paraguay, Argentina, Chile, Bolivia y Perú– se nota el mismo entusiasmo por las doctrinas espiritualistas. Hay una verdadera inquietud por ampliar el horizonte de los conocimientos, hacia el lado del espíritu. Hay una manifiesta inconformidad con lo poco consoladoras explicaciones que sobre el hombre y el universo ofrecen las teorías materialistas.634 Jinarajadasa también dijo que estaba surgiendo una nueva “fe” y que esto, obedecía al despertar de una “nueva raza” en el continente americano, que describió como la “séptima sub-raza” de la gran rama “aria” que se diferenciaba de una sexta sub-raza que estaba apareciendo en Estados Unidos y Australia.635 La teosofía creía que la humanidad se encontraba dividida en siete ramas sucesivas, siendo la que prevalecía en ese momento, la quinta, todas las cuales se habían originado en la India, a la cual también llamaban Ariavarta.636 Según esta teoría mística en Latinoamérica hubo muchas variantes de estas supuestas sub-razas, pero Jinarajadasa creía que la séptima podía ser identificada por el desarrollo avanzado que había en ella de la intuición, además de su simpatía por las enseñanzas espirituales.637 Hipotéticamente esta raza tendría habilidades que se desarrollarían con el tiempo, pero que fenotípicamente era imposible reconocer, aunque aclaró que era el resultado de diferentes mezclas, es decir, no era una raza “pura” y estaba dotada de cierta hermosura tanto en hombres como en mujeres. Esto concuerda hasta cierto punto con la teoría vasconceliana de la “raza cósmica” que también consiste en el surgimiento de una nueva raza hibrida de origen “ario” aunque el filósofo mexicano hacía referencia más bien a una “quinta”. Ahora bien, actualmente cuando se menciona la palabra “ario” inmediatamente se piensa en el nazismo y su mito de la 634 Ídem. 635 Ídem. Pedro López Anadón, Krishnamurti, vida y obra, Editorial Oberon, Grupo Anaya S. A., Madrid, España, 2003, pág. 39. 636 “El progreso del feminismo conviene a la humanidad”, La Prensa, lunes 27 de mayo de 1929, No. 5299, pág. 1, año XVII. 637 189 raza pura. Esta contrariedad de la idea del “ario” como raza hibrida o pura parece ser explicada por el mismo José Vasconcelos: Los arios primitivos del Indostán ensayaron precisamente este sistema inglés, (matrimonios sólo dentro de la misma estirpe) para defenderse de la mezcla con las razas de color, pero como esas razas oscuras poseían una sabiduría necesaria para completar la de los invasores rubios, la verdadera cultura indostánica no se produjo sino después de que los siglos consumaron la mezcla, a pesar de todas las prohibiciones escritas.638 A esta supuesta raza indostánica, pura, sin mezclas, es a las que creemos se refería el Nacional Socialismo Alemán, es decir, que los nazis esotéricos creían que el alemán puro se originaba de esa raza antigua, que a su vez se derivaría de la Atlántida. Philippe Lacoue-Labarthe en su libro El mito nazi asevera que los mitos son un elemento de los que el fascismo o por lo menos, las extremas derechas, siempre se han valido, por lo que Martínez además de implementar un proyecto de Nación reformista y espiritualista, también desarrolló ciertos rasgos fascistas desde el punto de vista político-mitológico, lo cual lo acercaría a un modernismo reaccionario que intentaba reactivar ciertos mitos antiguos ligados estrechamente al concepto de nacionalidad.639 Esto también parece estar en concordancia con lo que manifestó el filósofo español José Gaos: Hay religiones o teogonías que postulan la chute (religiones occidentales); o la decadencia: para la Teosofía, la civilización actual, con sus instituciones e ideologías, sólo representaría residuos más o menos desnaturalizados de humanidad o prehumanidad anteriores. Y hay filosofías también en base a decadencia. Y alguna tendencia científica (por ejemplo, cierto transformismo por decadencia biológica). 640 Nosotros interpretamos que dentro del régimen nazi esta teoría científica pudo haber sido la eugenesia, que intentaba contrarrestar la decadencia de la raza aria alemana y por consecuencia, de su sociedad. Saulo Villatoro en su obra El árbol que Dios plantó asegura que Hitler pertenecía a la Sociedad Thule que se fundamentaba en el mito de la Atlántida en donde existieron siete razas distintas. 638 José Vasconcelos, La raza cósmica, Agencia Mundial de Librería, Barcelona, Espana, 1926, pág. 24. Philippe Lacoue-Labarthe, et al, El mito nazi, Antrophos Editorial, 1ª Edición, España, 2002, pág. 11. 639 José Gaos, Obras Completas V, El pensamiento hispanoamericano, Antología del pensamiento de la lengua española en la edad contemporánea, Nueva Biblioteca Mexicana, Universidad Nacional Autónoma de México, D.F., 1ª Ed., 1993, pág. 1077. 640 190 Explica que el nazismo estuvo fuertemente vinculado al esoterismo y al ocultismo y que los principales miembros del partido nazi creían en la superioridad de la raza aria de la cual Hitler era su mesías.641 Afirma que el nazismo habría bebido de las doctrinas teosóficas tomando el símbolo de la esvástica, y que Madame Blavatsky incluso fundó en Austria y Alemania una sociedad llamada “La doctrina oculta de los arianos”.642 Esto parece ser confirmado por un artículo que apareció publicado en La Prensa Gráfica en 1941, titulado “Adolfo Hitler y la doctrina de los rosacruces” de Alfredo Castillo, el cual hacía referencia al libro de Magnus Incógnito La doctrina secreta de los Rosacruces, donde el autor afirma que la esvástica que usaban los rosacruces y los nazis, era un símbolo que representaba una cruz en movimiento que giraba tan rápido que parecía como sí un círculo la circunscribía y que para los rosacruces, además, representaba la actividad universal de la creación y el misterio de la generación de la existencia:643 ¿De dónde ese celo cuasi-místico de iluminado que se abroga Adolfo Hitler, como si el destino hubiese puesto en sus manos la espada de la venganza o la depuración? Habría que buscar y sondear pacientemente entre las numerosas religiones o creencias, la de Hitler, porque su actuación ya traspasaba los linderos del plan político ordenado, para convertirse en los actos de un extraño creyente, que no titubeaba en llevar al campo de la política la certidumbre de sus creencias (…) también predominan los rosacruces en los centros filosóficos y científicos, y ALGUNOS OCUPAN ELEVADAS POSICIONES EN LA POLITICA, en los negocios, EN EL MOVIMIENTO SOCIALISTA y otras actividades, en las iglesias confesionales, en la masonería y otras sociedades secretas, donde ejercen una poderosa influencia.644 Ricardo García Nieto en su libro La solución imaginaria también describe la vinculación que podría existir entre teosofía y nazismo, aunque asevera que muchos historiadores tradicionales, se abstienen de entrar en tal polémica, debido a que Saulo Villatoro, El árbol que Dios plantó, CBH books, Cambridge Brick house, 1ª Edición, 2009, pág. 125. 641 642 Ibídem, pág. 126. Alfredo Castillo, “Adolfo Hitler y la doctrina de los Rosacruces”, La Prensa Gráfica, martes 29 de abril de 1941, No. 9,714, págs. 5 y 6, año XXVI. 643 Ídem. Debemos aclarar que en el artículo del periódico se suprimió una parte de la frase completa, que a todas luces, nos da la posibilidad de creer que la doctrina de los rosacruces pudo haber influenciado en la teosofía cuando habla de “otras sociedades secretas”, por lo que nosotros la hemos agregado a partir de una versión moderna de dicha obra. 644 191 creen, podrían ser meras especulaciones que podrían afectar sus imágenes de investigadores serios: De la teosofía surgió la ariosofía, y de ésta, en un siniestro efecto dominó, la Orden de los Germanos, la Sociedad Thule, el Partido Obrero Alemán, y de éste, el Partido Nacional Socialista: los nazis. En otras palabras los nazis eran, en esencia, ariósofos; y los ariósofos eran, en su origen, teósofos.645 Según Pablo Jiménez Cores, en su libro La estrategia de Hitler: las raíces ocultas del nacionalsocialismo, Hitler se vio muy influenciado en su etapa de formación por el francmasón y espiritualista austriaco Rudolf Stainer (1861-1925), quien era licenciado en filosofía por la Universidad de Viena y quien en 1893 fundó “La Sociedad General Antroposófica”, que fue una escisión de la Sociedad Teosófica, cuyo objetivo era enseñar un conocimiento verdadero de la naturaleza humana.646 El filósofo habría conocido a profundidad las doctrinas de Blavatsky, las filosofías orientalistas y las obras de Annie Besant. Aparentemente pronunció cientos de conferencias a teósofos reconocidos de Europa. Entre sus principales obras se encuentran: Teosofía, La ciencia oculta y La iniciación que habrían influido grandemente en las concepciones de Hitler.647 Jiménez sostiene que Stainer pensó que su obra fue tergiversada y sacada de contexto por los nazis, y que de haber sabido que la iban a asumir de una forma aberrante, jamás la hubiera escrito. La teosofía también habría influido en importantes líderes del movimiento nazi como: Rudolf Hess, Dietrich Eckart, Adam Alfred entre otros.648 Todos pertenecientes a la ya citada sociedad secreta Thule, en la cual se tenía como ideal la eliminación de todo aquel elemento que impidiera la superación de la raza blanca: judíos, gitanos, comunistas y burócratas. 649 Ricardo García Nieto, La solución imaginaria, Editorial Regional de Murcia, España, 1ª Edición, 2005, pág. 223. 645 Mario Roso de Luna, El árbol de las hespérides, cuentos teosóficos españoles, Colección El árbol sagrado, circulo latino S.L., Editorial, Barcelona, España, 2006, pág. 14. 646 Pablo Jiménez Cores, La estrategia de Hitler: las raíces ocultas del nacionalsocialismo, Ediciones Nowtilus, 2ª Edición, Madrid, España, 2004, pág. 85. 647 648 Ibídem, pág. 92. 649 Ibídem, pág. 93. 192 Arthur Herman en La idea de la decadencia en la historia occidental asevera que cuando Hitler regresó de la Primera Guerra Mundial conoció a Alfred Rosemberg y a Eckart, quienes fueron los que lo introdujeron a las doctrinas raciales arianistas. Es importante aclarar que “ario” en sanscrito significa “hombre de honor”. En este sentido, Herman sostiene que el filósofo Friedrich Schlegel fue otra importante figura del orientalismo y el arianismo, quien incluso estudió filosofía india en Francia y propuso que el sanscrito fuera declarado como lengua originaria de todas las demás.650 Estas ideas son muy similares a las que Georg Lukács sostiene en su libro El asalto a la razón, la trayectoria del irracionalismo desde Schelling hasta Hitler, pero que por motivos de contenido hemos decidido utilizar en la critica que realizamos al pensamiento teosófico de Hernández Martínez en el capítulo VI. En esta dirección, Martínez ejerció un control autoritario de tipo militarista que se consolidó con un etnocidio y a principios de su mandato tuvo muy buenas relaciones diplomáticas con Alemania e Italia, incluso, tuvo a su servicio algunos funcionarios alemanes. Ahora bien, después de este breve análisis entre teosofía y nazismo, procederemos a revisar algunas ideas que la teosofía tenía sobre el feminismo. 2.1.6) El feminismo teosófico y la importancia de Annie Besant en el movimiento teosófico mundial: Jinarajadasa sostenía que el feminismo era un movimiento que estaba en boga y que podía sintetizarse bajo el principio de que el hombre y la mujer como seres espirituales tenían el mismo valor y que aunque en sus funciones eran diferentes, sus finalidades eran idénticas.651 La esposa de Jinarajadasa, Dorothy M. Graham, fue una de las inglesas que encabezó el movimiento feminista de la India, involucrándose en muchas actividades políticas relacionadas con la emancipación de la mujer en ese país, incluso, llegó a fundar junto a Annie Besant la “Women´s Indian Association” (WIA) en Adyar en 1917. Al parecer, fue una teósofa muy Arthur Herman, La idea de la decadencia en la historia occidental, Editorial Andrés Bello, Barcelona, España, 1998, págs. 65, 66, 81 y 82. 650 “El progreso del feminismo conviene a la humanidad”, La Prensa, lunes 27 de mayo de 1929, No. 5299, pág. 1, año XVII. 651 193 importante al grado que llegó a convertirse en la Vicepresidenta de la Sociedad Teosófica Mundial por un periodo de siete años mientras Annie Besant era la Presidenta.652 Besant ejerció dicho cargo durante 26 años a partir de 1907. 653 Annie Besant654 fue una teósofa y masona grado 33, que incluso llegó a ser Vicepresidenta del Consejo Supremo de la Co-masonería.655 Hija de padres irlandeses, nació en Londres en 1847 y falleció en Adyar, India, en octubre de 1933 a la edad de 87 años.656 Besant de forma mística sostenía que su peregrinación por el mundo material había iniciado hacía unos 12,000 años atrás de ese momento en el Perú, por lo que sus colegas teósofos al morir dijeron que su alma se estaba acercando a la liberación a través del nirvana, hecho que sólo acontecía cuando las sucesivas formas de vida en la tierra se habían limpiado de todo mal. 657 Annie Besant658 desde muy joven se involucró en actividades sociales en Londres. Las mujeres de esa localidad llegaron a considerarla como una “divinidad”, atraída inicialmente por la filosofía cínica ingresó a la Sociedad Fabiana donde 652 Ídem. María Luisa López Díaz Ufano, Estudio de la revista “Sophia” (1893-1913), desde la perspectiva arquetipal, tesis para optar al grado de doctora en medicina por la Universidad Complutense de Madrid, 2011. 653 “En torno a la muerte de Annie Besant”, La Prensa, lunes 9 de octubre de 1933, No. 6,860, pág. 3, año XXI. 654 Alexandra Heidle, Women´s and rituals in mixed and female masonic orders, Koninkijke Brill, NV, Leiden, Netherlands, 2008, pág. 359. 655 “Viviré otra vez, último artículo de Annie Besant”, La Prensa, viernes 13 de octubre de 1933, No. 6,864, pág. 8, año XXI. “La reencarnación era la ley del desarrollo individual, como la evolución era la ley del desarrollo colectivo. Permitidme que os diga en tres o cuatro frases en qué consiste la teoría de la reencarnación: En cada hombre hay un espíritu que vive; él es parte de la vida del Ser Supremo; él es el vástago de la divinidad, como las chispas brotan del fuego, así brota la del espíritu divino. Viene a este mundo a aprender. Todos son igualmente ignorantes cuando se sumergen en la vida humana. La ignorancia es el único pecado original y no es criminal sino inevitable. Cuando los poderes de la divinidad se desdoblan dentro de él, crece, hasta adquirir la estatura de hombre perfecto. La reencarnación significa que el hombre puede tornarse en lo que le plazca”. 656 “En torno a la muerte de Annie Besant”, La Prensa, lunes 9 de octubre de 1933, No. 6,860, pág. 3, año XXI. 657 Marta Casaús, “Las redes intelectuales Centroamericanas: un siglo de imaginarios nacionales (1820-1920)”…, pág. 80. “En Centroamérica fue Annie Besant una de las pensadoras más influyentes, si consideramos las referencias bibliográficas de las revistas, las lecturas recomendadas y la presencia de su obra en las bibliotecas particulares”. 658 194 conoció e intimó con el premio Novel de literatura Georg Bernard Shaw (18561950) y con el líder del Partido Laborista en 1914 y dos veces Primer Ministro del Reino Unido Ramsay Mac Donald (1866-1937), quienes la llevaron a entrar en acción directa con el socialismo militante. Durante toda esa época escribió en diarios y revistas sobre ateísmo y cuestiones sociales. Además, dirigió una huelga de obreras de una fábrica de fósforos en 1888, que fue la primera en realizarse en Inglaterra por mujeres.659 La Sociedad Fabiana se constituyó en 1884 y no nació con un programa bien definido, más bien su objetivo general era lograr una sociedad más justa mediante reformas sociales concretas. Fue hasta 1889 que la mencionada sociedad publicó un programa ideológico titulado Los ensayos fabianos en los cuales se desarrollaba un socialismo sui-generis, que muy poco tenía que ver con las concepciones marxianas, aunque si tenían en común, la crítica al capitalismo y a la propiedad privada como fuentes de todas las injusticias sociales. En lo que se diferenciaban radicalmente con el marxismo era en la solución, al igual que el vitalismo masferreriano proponían reformas sociales graduales y no la revolución.660 Sidney y Beatrice Webb fueron los impulsores intelectuales de dicha sociedad. Enfocaron sus esfuerzos en lograr una correcta organización del sindicalismo, su tendencia ideológica era un socialismo comunitario. Creían que el sindicalismo de su tiempo debía lograr la nacionalización o municipalización de la industria o transformarla en Cooperativas de Consumo. Esto pretendía eliminar la figura del empresario capitalista director.661 Este sistema colectivista permitiría eliminar el afán de lucro de todos los trabajadores tanto manuales como intelectuales y sustituirlo por un sistema de distribución más equitativo. También pretendían que se nacionalizaran todas las minas y servicios públicos. El proyecto de fundar Cooperativas de Consumo tal y En torno a la muerte de Annie Besant”, La Prensa, lunes 9 de octubre de 1933, No. 6,860, pág. 3, año XXI. 659 José Luis Ramos Gorostiza, Beatrice Webb y el socialismo fabiano, pág. 9, disponible en: eprints.ucm.es/6735/1/0113.pdf 660 Sidney y Beatrice Webb, Historia del sindicalismo, Colección Clásicos No. 10, publicado por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social de España, 1990, pág. 621. 661 195 como lo quería Masferrer era para suprimir la costumbre de vender los bienes de consumo a precios inaccesibles para el trabajador. Además, los Webb querían eliminar el sistema de competencia capitalista y crear leyes de protección al consumidor.662 Este nuevo laborismo pretendía eliminar, pues, todos los intereses sectoriales de la industria capitalista, y la forma política de desarrollarlo fue a través del “Partido Laborista” fundado en 1900, como derivación del Comité de Representación del Trabajo que luchó por combatir todas las políticas liberales de la época. 663 La vida de Annie Besant cambió radicalmente cuando conoció a Helena Petrovna Blavatsky, de quien aprendió especulaciones místicas que constituían una filosofía del Universo y una mezcla de hinduismo y panteísmo; finalmente abandonó su ateísmo y socialismo y se fue a vivir a la India donde fundó el Colegio Central Hindú que después se convertiría en la universidad de la ciudad de Benarés. A la muerte de Blavatsky, Besant tomó la dirección de la Sociedad Teosófica y fundó el movimiento nacionalista después seguido por Gandhi, incluso, el mismo Gandhi dijo que su nombre sería recordado mientras existiera la India. 664 Besant a finales del siglo XX, publicó un artículo titulado “England, India and Afganistán” en el cual criticaba la política colonialista e imperialista del Primer Ministro Benjamin Disraeli. Besant estaba a favor de la emancipación de todas las colonias inglesas, incluyendo Irlanda. También fundó un periódico progresista llamado National Reformer (1870) en el cual publicaba artículos sobre educación y derechos sociales como, por ejemplo, el de concederle el voto a las mujeres. En 1914 publicó How India wrought for fredoom que era un trabajo que trataba sobre la historia del Congreso Nacional Indio de ideal independista.665 662 Ibídem, págs. 622 y 623. 663 Ibídem, págs. 662 y 663. En torno a la muerte de Annie Besant”, La Prensa, lunes 9 de octubre de 1933, No. 6,860, pág. 3, año XXI. 664 Alejandra Val Cubero, “Burguesas, misioneras, reformistas y alguna aventurera: la presencia femenina británica en la India durante la época colonial” Revista de Investigaciones Políticas y Sociológicas, RIPS, vol. 8, No. 1, sin mes, 2009, pág. 149. 665 196 En 1915 escribió Indian: a nation en el que denunciaba que la economía de la India estaba siendo expoliada por Gran Bretaña y que la supuesta educación británica no era nada más que una forma de convertir al cristianismo a los hindúes. Annie Besant fue elegida Presidenta del Congreso Nacional Indio en 1917 a la edad de 70 años.666 En realidad, Gandhi se vio muy influenciado por los teósofos al punto que declaró públicamente que había estudiado los libros de Vivekananda, de quien existe una obra titulada Conferencias teosóficas. Además, escribió una introducción para la edición inglesa de la Vida de Ramakrishna. También presidió en muchas ocasiones las fiestas de aniversario de la misión Ramakrishna y sostenía que era seguidor de Vivekananda a tal grado que en algunas de sus asambleas difundió su doctrina.667 Es importante destacar que Besant adoptó a Krishnamurti y lo educó en la universidad de Oxford. Posteriormente Krishnamurti realizó muchas giras de predicación y conferencias en Europa y América; lo interesante de todo esto es que, al mismo tiempo que se anunció la muerte de Besant, paradójicamente también se publicó la probable visita de Krishnamurti a San Salvador. Krishnamurti 668 en ese momento, residía en Inglaterra y por mucho tiempo había sido considerado la reencarnación de Jesucristo669, lo cual podemos comprobar en la siguiente frase: Todo indica pues, que de edad en edad tiene que venir a este mundo, algún Mesías o enviado, algún instructor o maestro y como todo el mundo ve que actualmente la virtud desmaya y toma bríos gigantescos y espantables la iniquidad con los armamentos o preparación para la destrucción y la guerra es natural que hasta los más legos predigan que se acerca un cataclismo humano o fin del mundo moral actual (…) ¿Ha nacido, pues, de nuevo el mesías? Bien puede ser (…) se ha creído que uno de esos instructores es Krishnamurti; pero no se sabe. Otros dicen que es Mahatma Gandhi…670 666 Ídem. Romain Rolland, “Los maestros de la india”, Diario de Santa Ana, lunes 5 de junio de 1939, No. 5,065, pág. 3, año XVIII. 667 “Krishnamurti no pretende ser el mesías, ni lo niega”, La Prensa, lunes 16 de octubre de 1933, No. 6,966, pág. 9, año XXI. 668 “Un hindú en quién se dice Jesucristo ha reencarnado”, La Prensa, domingo 12 de mayo de 1929, No. 5,283, pág. 1, año XVII. “El nuevo mesías como le llaman, habla varios idiomas, juega tenis, viste a la moderna y viaja y vive en medio del mayor confort que pueda uno imaginarse”. 669 J. M. Cáceres, “¿Ha nacido el nuevo mesías?”, Diario del Salvador, viernes 6 de enero de 1933, No. 12,082, pág. 3, año XLVI. 670 197 Ahora bien, Jinarajadasa estableció que entre más progresara el feminismo más progresaría la humanidad. Puso el ejemplo de que en la India, la mujer podía votar y que la Vicepresidenta de la Cámara de Diputados en Madrás era una mujer, una doctora en medicina, aunque no mencionó su nombre. Finalmente concluyó que era necesario fomentar el matrimonio como vínculo sagrado de la familia.671 A este respecto, el académico español Joseba Louzao Villar observa: Igualmente, las dos líderes más importantes de la historia de la Sociedad habían sido mujeres, madame Blavatsky y Annie Besant, lo que demuestra su posicionamiento con respecto al movimiento feminista, del que la propia Besant sería activa defensora. Tal y como se defendía en un texto publicado en la revista Zanoni, los teósofos creyeron que había llegado el momento de que la mujer colabore con el hombre en la pacificación de los espíritus y las enseñanzas de la nueva era. A pesar de ello, la presencia femenina en la teosofía española fue más minoritaria, aunque también existen ejemplos de mujeres muy activas en la propaganda y organización del teosofismo español como Céline Guyard o Esther Nicolau.672 Nos parece interesante esta posición de la teosofía de querer incluir a la mujer en el ámbito político y social ya que en la Constitución de El Salvador de 1939, en el artículo 17 específicamente se le concedió la calidad de ciudadana: “Son salvadoreños todos los ciudadanos mayores de 18 años” 673 y en el artículo 21 se estableció a iniciativa de Hernández Martínez el derecho al voto femenino así: “El ejercicio del derecho al sufragio de las mujeres será reglamentado en la Ley Electoral”, aunque debemos aclarar desde ya que, como trataremos en el siguiente “El progreso del feminismo conviene a la humanidad”, La Prensa, lunes 27 de mayo de 1929, No. 5299, pág. 1, año XVII. 671 Joseba Louzao Villar, “Los idealistas de la fraternidad universal. Una aproximación al movimiento teosófico español (C. 1890-1939)” Revista Historia Contemporánea, 37, 2008, pág. 522. 672 Desde mediados del siglo XIX se iniciaron en ciertos países de Latinoamérica las primeras luchas a favor de la ciudadanía femenina. Según Edelberto Torres Rivas, la constitución liberal de 1886 le otorgó la calidad de ciudadana a la mujer salvadoreña. El artículo 51 establece: “Son ciudadanos los mayores de dieciocho años, los casados y los que hayan obtenido algún título literario, aunque no hubiesen llegado a esa edad”. Ver el artículo de Patricia Galeana titulado La lucha de mujeres latinoamericanas, democracia y derechos humanos, Revista Latinoamérica No. 38, (2004/1) UNAM, pág. 211. La novedad en la constitución de 1939 no radicaba tanto en el otorgamiento de la calidad de ciudadana a la mujer sino la concesión del sufragio aunque sea de forma limitada. En 1930 Prudencia Ayala se lanzó como candidata a la presidencia de El Salvador. Este hecho según las especialistas abrio el camino para la conquista de los derechos femeninos en el país, que curiosamente describen no fue en 1939 sino en 1950. Ver artículo Su vida y su historia: Prudencia Ayala. Disponible en: imuelsalvador.org/wp.../01/boletina-sabias-y-oranizadas-No.8-.pdf. 673 198 capítulo, el feminismo salvadoreño tuvo importantes avances gracias a sociedades feministas que hicieron presión al gobierno de Martínez para que éste les concediera el voto. Lo que sí es importante destacar es que Martínez no tenía una política contraria al desarrollo de la mujer, por ejemplo, en el suplemento La República aparecieron artículos con títulos como: “Exaltación de la mujer salvadoreña” 674 y “Hay que estimular a la mujer virtuosa”.675 Sobre este aspecto Jorge Cáceres Prendes opina: Uno de los más interesantes indicios de cambios culturales en la sociedad fue la obtención del voto femenino en 1939. Este hecho es prácticamente ignorado por la literatura martinista, y mucho menos ha sido objeto de análisis e interpretaciones. Todas las referencias del voto femenino se concentran en la constitución de 1950 que ciertamente tuvo la virtud de establecer el voto universal sin cortapisa alguna (en 1939 se concedió con algunas limitaciones relativas a la edad y la educación de las mujeres) (…) ausentes de un estudio más a fondo sobre el particular, nos queda especular que la reforma se dio en la circunstancia de una posible reelección de Martínez (sería la 2da.) con la perspectiva de contar con los votos femeninos. También puede suponerse aunque pendiente de comprobación, que hubo presiones provenientes de grupos organizados, que hicieron posible el cambio. Pero lo indudable es que la sociedad política mostraba estar preparada para una apertura de corte modernizante, en los demás países centroamericanos, tendría que esperar todavía varios años para darse.676 2.1.7) Recibimiento de Jinarajadasa en El Salvador: Ahora que hemos desarrollado ciertos principios y aspectos históricos indispensables para tener un mejor panorama de la teosofía, entraremos al análisis de ciertos conceptos filosóficos que tuvieron una gran trascendencia en la misma, además de observar cómo fue recibido Jinarajadasa en Centroamérica. Lo primero que tenemos que decir es que durante su estadía en el Istmo, el Repertorio Americano de Joaquín García Monge677 publicó una extensa crónica sobre el teósofo, la cual “Exaltación a la mujer salvadoreña”, Diario Oficial, Suplemento La República, miércoles 11 de agosto de 1937, No. 1,349, pág. 1, año V. 674 “Hay que estimular a la mujer virtuosa”, Diario Oficial, Suplemento La República, lunes 17 de julio de 1939, No. 1,896, pág. 1, año VII. 675 Jorge Cáceres Prendes, “El patriarcado martinista y el voto femenino”, Identidades Nacionales y estado moderno en Centroamérica, compiladores Arturo Taracena Arriola y Jean Piel, Colección Istmo, FLACCO, San Salvador, Editorial de la Universidad de Costa Rica, 1ª Edición, 1995, pág. 271. 676 Joaquín García Monge: (1881-1958), nació en Costa Rica, fue profesor y escritor. Impulsor de la integración americana. Fundó y sostuvo la revista Repertorio Americano, a la cual Mariátegui llamó 677 199 también fue reproducida en Patria. En la misma, se establecía que el número de personas que deseaba escucharlo era tan grande que, en ocasiones, se quedaba mucha gente afuera de los teatros. Jinarajadasa fue introducido en sus conferencias de Costa Rica por el diplomático mexicano acreditado en ese país, Antonio Mediz Bolio. En su primera charla habló sobre temas educacionales cuyos postulados eran muy similares a los planteados por Omar Dengo 678 y Roberto Brenes Mesén,679 quienes fueron considerados como los filósofos de la educación en aquella Nación.680 El primero murió prematuramente, pero su pedagogía espiritualista fue continuada por su hija María Eugenia Dengo Obregón y el segundo fue quien diseño los programas de educación para primaria. De hecho, toda la obra poética y filosófica de Brenes Mesén está impregnada de teosofía y hermetismo, el experimento era crear una educación más humanística y más acorde con las necesidades de ese momento, haciendo énfasis en el niño. 681 Así lo establece Luis Ferrero cuando habla del movimiento renovador de la Escuela Normal de Costa Rica: Toda la febril ocupación no impedía que los alumnos dedicasen momentos para la meditación, por lo que los enemigos se burlaban en caricaturas del “tono místico”. “egregia tribuna del pensamiento continental”. Ver: José Carlos Mariátegui, El biblioteca Amauta, Lima, Perú, 4ª Ed., 1970, pág. 226. alma matinal, Omar Dengo Guerrero: nació en San José, Costa Rica el 9 de marzo de 1888 y murió en la ciudad de Heredia el 18 de noviembre de 1928. Abogado graduado en 1911. Fue profesor del Liceo de Costa Rica, maestro rural y educador de obreros en el Centro Germinal. En 1919 fue nombrado director de la Escuela Normal. Se interesó por la sociología y el periodismo a través de la Revista de Educación de la Escuela Normal, fue director de la Revista Obra y colaboró con García Monge en la difusión de la revista Repertorio Americano. Fue declarado Benemérito de la patria por acuerdo Nº 973 de 6 de octubre de 1969. 678 Roberto Brenes Mesén: nació en San José, Costa Rica el 6 de junio de 1874 y murió en el mismo lugar el 19 de mayo de 1947. Fue Ministro de Instrucción Pública durante la presidencia de Federico Tinoco Granados, junto a Omar Dengo y Joaquín García Monge, en 1919, formó el Centro de Estudios Sociales Germinal, fue profesor de la Universidad de Columbia en Nueva York, de la Universidad de Nuevo México y de la de Syracuse en Nueva York. Formó junto a otros intelectuales costarricenses la Liga Civil, que era un grupo comprometido con los derechos de los trabajadores y obreros. Brenes Mesen fue miembro de la Sociedad Teosófica de Costa Rica y de la masonería. 679 680 “Conferencia sobre educación”, Patria, martes 4 de junio de 1929, No. 329, pág. 7, año II. 681 Ídem. 200 En efecto, las meditaciones iban encaminadas al conocimiento y al perfeccionamiento espiritual y el transparentar vocaciones. En muchos escritos de Brenes Mesén, García Monge y Dengo, se relievan principios filosóficos que contrastan con la separación establecida por los textos bíblicos de Naturaleza y ser humano. No en vano, este ambiente coincidía con la expansión de la teosofía en Costa Rica.682 La llegada de Jinarajadasa a El Salvador fue el 8 de junio de 1929. El teósofo hindú llegó por barco al Puerto de la Unión, ciudad en la que impartió una primera conferencia, luego el día 9 tomó el tren de las 5:30 p.m., que lo condujo hasta San Salvador en donde varios miembros de las sociedades teosóficas capitalinas lo recibieron. Los nombres de dichas logias eran: Teotl, Alétheia y Balún Votán. Ramón Avilés miembro de la logia Teotl, fue a encontrarlo hasta Amapala, municipio del departamento de Valle, Honduras y a la ciudad de Cojutepeque fueron a encontrarlo los siguientes teósofos:683 Don Hugo Rinker, Presidente de la Logia “Teotl”; General Max. H. Martínez, Presidente de la Logia “Alétheia”; doña Lydia Rinker viuda de Téllez, don Felipe Viaud, profesor don Albelardo Molina, don Ángel Valle, don Ignacio Arrieta, don Federico Rinker, doctor Nasario Soriano, señorita Ofelia Montalvo, doctor Juan Elías Fermán, señoritas Avilés, hijas de don Ramón Avilés y don Absalón Baldovinos…684 El periódico La Prensa también envió un representante a darle la bienvenida a Cojutepeque. Según este rotativo fue numeroso el grupo de personas que lo acompañó entre quienes se encontraban Juan Orozco y Lisandro V. Montiel, aparentemente figuras sociales importantes de la época. Jinarajadasa durante su estadía en El Salvador se hospedó en casa de Rafael Mónico ubicada en el barrio María Auxiliadora, en donde fue muy visitado por sus admiradores.685 El Día lo anunció como: “un héroe mundial del espíritu” que traía un mensaje para todos sin excepción, porque la teosofía abarcaba “todos los sistemas filosóficos”, “todas las Luis Ferrero, Explosión creadora, tres ácratas costarricenses, Editorial Fundación UNA, Universidad Nacional, Centro de Estudios Generales, 1995, pág. 104. 682 Jinarajadasa llegó a San Salvador, La Prensa, lunes 10 de junio de 1929, No. 5,312, págs. 1 y 8, año XVII. 683 684 Ídem. 685 Ídem. 201 religiones” y “todos los ramos de la ciencia”.686 El siguiente párrafo demuestra la activa participación que Hernández Martínez tuvo en la organización de sus conferencias: En los diarios de la capital se indicará la hora y día de las conferencias. A los que deseen concurrir se les suplica solicitar invitación al General Maximiliano H. Martínez, a don Hugo Rinker o a cualquiera de los miembros de las sociedades teosóficas.687 Complementario a este párrafo el que se presenta a continuación demuestra la percepción pública que se empezó a proyectar sobre la relación entre Jinarajadasa y el futuro Presidente de El Salvador, quien como veremos en capítulo V de este mismo trabajo, efectivamente implementó una visión teosófica de Estado. El comentario surgió cuando Jinarajadasa estaba en Nicaragua y se dio cuenta de que entre liberales y conservadores existía un odio recíproco, considerando que la única forma de armonizar sus relaciones era convirtiéndolos a todos a la teosofía. También habría que decir que estas declaraciones fueron publicadas en el contexto de la candidatura a la presidencia de Martínez:688 Por lo visto, el teosofismo de Jinarajadasa es una panacea que cura todos los males hasta el mal de la política que con tanta furia se apodera del corazón de los hombres. De modo que magnífica idea sería llamar al sabio teósofo para que en esta hora política viniera a El Salvador para poner paz entre los numerosos candidatos a la Presidencia de la República y sus apasionados adeptos que ya empiezan a tirarse los trastos a la cara. Seguramente que el General Martínez no habría de ver con malos ojos la presencia de su correligionario como mediador en este conflicto que pasa de castaño a oscuro. Pero no habrían de pensar lo mismo los demás presidenciables, ya que por muy imparcial que fuera, Jinarajadasa habría de inclinar la balanza de sus simpatías al lado del general, ya que lógica consecuencia de la tesis que sustenta don Carlos (Jinarajadasa), Martínez sería el llamado a gobernar el Estado teosófico soñado por el ilustre hindú.689 Antes de continuar con el análisis de las conferencias de Jinarajadasa, nos gustaría hacer un paréntesis para reflexionar sobre el nombre que adoptó la “Probablemente pasado mañana llegue al país el doctor Jinarajadasa”, El Día, jueves 6 de junio de 1929, No. 2923, pág. 1, año IX. 686 687 Ídem. “Al través de los lentes de Jinarajadasa”, El Tiempo, martes 15 de abril de 1930, No. 290, pág. 1, año II. 688 689 Ídem. 202 Sociedad Teosófica de la cual Martínez fue presidente, ya que es muy importante dentro del imaginario teosófico irracionalista. Alétheia es un concepto filosófico que se refiere a la verdad y que fue utilizado por Heidegger para oponerse al racionalismo. Manuel Sacristán Luzón en lo que fue su tesis doctoral Las ideas gnoseológicas de Heidegger690 nos explica que para el filósofo alemán, la verdad era desvelamiento –como estado de descubierto– o “patentia del ente”. Heidegger estaba en contra del concepto de verdad de la cultura europea, entendida como una correspondencia entre el “ser” y el “pensar” y es a lo que George Lukács llamó un proceso de “destrucción de la razón”, que también fue seguido por filósofos como Henri Bergson y Karl Jaspers.691 Para comenzar, Heidegger sostenía que el problema de la verdad no le correspondía a la teoría de conocimiento sino que a la ontología, porque el “ser” era previo a la proposición, el “ser” real que ya es y existe. En ese sentido, la verdad debía ser entendida como un “ser” descubridor, lo que constituiría una apertura del “estar”, que al estar también es, es “estar siendo”. Lo único que trataría de probar la verdad desde la perspectiva heideggeriana, es la existencia. En todo caso, el que enunciaba la proposición debía ser libre para enunciarla, es por eso que, la verdad sólo se daba en libertad a partir de las distintas posibilidades, pero para Heidegger su Víctor Farías, Heidegger y el nazismo, Akal Ediciones, 2ª Edición aumentada, Fondo de Cultura Económica, Chile, 1998, págs. 18, 19, 22, 23. La vinculación de Heidegger al nazismo ha causado una gran polémica entre distintos filósofos a nivel mundial, unos atacándolo y otros defendiéndolo. Ernst Nolte argumentó, por ejemplo, que dicha vinculación era la única respuesta ante el avance estratégico del comunismo, mientras que J. F. Lyotard expresó que el choque entre Heidegger y el judaísmo se debió al irreconocimiento del otro, es decir, con el no alemán, ya que el Dios de los judíos es la trascendencia de lo absoluto, lo absolutamente otro mientras que el Dios germano fáustico es un Dios de conquista. El nazismo de Heidegger para Lyotard constituye la aniquilación radical de lo judío en el ámbito silencioso de la filosofía, pero es interesante observar que también ha habido judíos como Hanna Arendt que han defendido al filósofo alemán bajo el argumento de que sólo los alemanes vulgares fueron parte del nazismo y que éste estuvo vinculado a algunas alumnas judías, defensa a la que Víctor Farías llama un antisemitismo judío. Se dice que el propio Martín Heidegger en los años cincuenta adulteró su lección Introducción de la metafísica (1935) en que hacía una apología del nazismo y que sus discípulos han continuado esta tarea de encubrimiento. Tanto en la filosofía heideggeriana como en el III Reich hubo una clara influencia de Nietzsche. En este mismo sentido se considera que H. G. Gadamer reelaboró la filosofía de Platón para hacerla afín con el nazismo militarista. Guido Schneenberger establece la adhesión plena y completa de Martín Heidegger al nacionalsocialismo entre 1933 y 1934. 690 Manuel Sacristán Luzón, Las ideas gnoseológicas de Heidegger, Editorial Crítica Grigalbo Mondadori, 1ª Edición, S.A., Barcelona, España, 1995, págs. 9 y 11. 691 203 teoría no caía en un subjetivismo porque la verdad ya estaba en ella. 692 Desde nuestra perspectiva, la no-verdad –en libertad– sería el no desvelamiento de la esencia del “ser” o el encubrimiento del “ser” por el concepto. En realidad, para Luzón ésta teoría era sólo una profundización de Ser y tiempo. El misterio se daba cuando el “ser” no se dejaba capturar en su esencia o más correctamente dicho des-encubrir, por lo que su esencia permanecía encubierta, tapada u olvidada, y en esto radicaba el problema de la compresión del “ser” para Heidegger. Esta postura conllevaba una actitud irracionalista, porque no trataba de encontrar una verdad conceptual sino esencial, los conceptos en este ámbito trascendental, tenían un valor nulo, en cambio, la pintura y la escultura eran verdades esenciales.693 De alguna forma –consideramos– éstas serían las posiciones que la teosofía pretendió tomar con respecto al problema de la verdad, no sabríamos decir si directamente de Heidegger, pero habría que aclarar que Heidegger sólo retomó el problema, ya que alétheia era un concepto que provenía del mundo griego. Esto puede comprobarse cuando Matilde Elena López reconoce la influencia que Platón ejerció sobre Masferrer: “Platón dice que los hombres son dioses pero que se han olvidado de serlo, hay que recuperar la memoria del estado primitivo para reconocer la verdad –ALÉTHEIA– el no olvido.694 Lo anterior puede ser mejor asimilado a través del último gran neoplatónico, Plotino, quien consideraba que el alma tenía la obligación de mantener un equilibrio entre lo inteligible y lo sensible y aunque esta alma estaba llamada a unirse con un cuerpo específico sensible, nunca debía romper su lazo con el Uno, pero había almas que se separaban y abandonan al Uno, por olvido del Padre o por el irreconocimiento de su parte 692 Ibídem, págs. 103, 105 y 107. 693 Ibídem, págs. 108 y 109. Matilde Elena López, El pensamiento social de Alberto Masferrer, Imprenta Nacional, sin datos de publicación, pág. 36. 694 204 divina.695 Explicados estos conceptos ahora nos ocuparemos de las conferencias de Jinarajadasa. 2.2- Análisis de las conferencias dictadas por Jinarajadasa en El Salvador (1929): 2.2.1) Los dioses encadenados: Es importante destacar que la primera conferencia pública que Jinarajadasa dictó en el país, fue a las 8.00 p.m., el día 10 de junio en el local de la Sociedad Confederada de Obreros a la cual asistieron más de 600 oyentes. Su enseñanza principal fue, precisamente, esta última idea neoplatónica que acabamos de comentar. En ésta el hindú hizo referencia a que no existía un Dios separado de los “seres”, sino que todos eran parte de Él, emanaciones de Él y que los humanos estaban en este mundo de forma transitoria para realizar numerosas experiencias hasta llegar de nuevo al origen.696 La idea consistía en que el ser humano no sólo debía preocuparse por lo transitorio como las riquezas, el poder o adherirse a religiones que nunca podrían brindarle una respuesta satisfactoria de su existencia, porque desconocían lo fundamental, que era que Dios no estaba a un lado de su creación sino presente en toda ella. Es más, Dios, similar al Gran Arquitecto masónico se encargaba de mantener el orden en el mundo.697 En esta misma dirección, la alétheia conlleva al planteamiento de las preguntas metafísicas últimas: En filosofía, podemos estudiar, en cualquier universidad, todos los sistemas filosóficos de la India, de China, y de Grecia, así como los de la Europa medieval y moderna (…) Y sin embargo, el hombre aún busca conocimiento. No estamos satisfechos con lo que otros han descubierto; necesitamos descubrir nosotros mismos. Pero ¿por qué, nosotros que somos menos competentes que los investigadores entrenados en la sabiduría, deseamos descubrir? ¿Por qué no nos satisfacen los conocimientos acumulados por ellos? La respuesta es, que el conocimiento acumulado por otros, solo resuelve en parte, el problema capital que tenemos que enfrentar. Y el problema es: ¿Qué soy yo? ¿De dónde vengo? Pablo García Castillo, Plotino (204/5-270), biblioteca filosófica 119, colección filósofos y textos, Ediciones del Orto, 1ª Ed., Madrid, España, 2001, pág. 57. 695 “La primera conferencia del teósofo hindú Carlos Jinarajadasa” El Día, miércoles 12 de junio de 1929, No. 2928, pág. 1, año IX. 696 697 Ídem. 205 ¿Adónde voy? ¿Soy acaso un simple producto de fuerzas físicas, o tengo un alma inmortal?”.698 En esta conferencia, Jinarajadasa se opuso enérgicamente al materialismo imperante por considerar que destruía el “genuino” sentido de la vida, es decir, creía que el materialismo positivista había provocado una especie de “nihilismo” espiritual, refiriéndose más específicamente a la teoría de la evolución mediante la cual se pretendía negar la existencia de Dios, pero expresó que todavía existía gente que era creyente.699 Además, contradijo la concepción científica de la vida como “un encuentro mecánico de las fuerzas naturales”.700 Los redactores del periódico Patria opinaron que esta primera conferencia fue todo un éxito a pesar de las voces de fanatismo que habían intentado sabotearla.701 Los otros temas que Jinarajadasa desarrolló en el país fueron: “El idealismo de la teosofía”, “Las enseñanzas de Krishnamurti”, “Desarmemos la guerra” y “La ciudad perfecta del hombre y de Dios”, esta última reproducida en el Diario Oficial, Suplemento La República en 1937 un año antes de su segunda visita al país. 702 A continuación entramos al análisis de ellas haciendo relación al contexto histórico salvadoreño y desde ya especificamos que no mencionamos la hora y día exactos en que fueron realizadas, ya que no aparecen en las fuentes a las que tuvimos acceso. 2.2.2) El idealismo de la teosofía: En “El idealismo de la teosofía” Jinarajadasa planteó su concepción de hombre, la cual era la de un animal “racional” 703, el único capacitado en la naturaleza 698 C. Jinarajadasa, Los Dioses encadenados, biblioteca Upasika, colección “Teosofía 900”, 1929, pág. 8. 699 Ibídem, págs. 9 y 10. 700 Ibídem, pág. 11. 701 “Los dioses encadenados”, Patria, miércoles 12 de junio de 1929, No. 336, pág. 5, año II. “Las últimas conferencias de Jinarajadasa”, El Día, jueves 13 de junio de 1929, No. 2929, pág. 1, año IX. 702 José Ramón Ayllón, En torno al hombre: introducción a la filosofía, 8º Ed., Ediciones Rialp, 2001, pág. 58. Obviamente la idea del hombre como un animal-racional no es descubrimiento de Jinarajadasa, ya Sócrates sostenía que el hombre no era un simple animal. Sócrates entendía por alma la razón. La razón era para él, la sede de toda actividad pensante y ética, es decir, la conciencia intelectual y moral. Era lo que diferenciaba al hombre de todas las demás cosas. 703 206 para proveer de un sentido a su vida y hacerse preguntas profundas.704 En realidad, este concepto pertenece a Aristóteles, quien explica que el hombre es un ser “viviente-animal-racional”, ya que nace, se alimenta, crece, reproduce, envejece y muere (viviente), siente, apetece y se desplaza (animal), e intelige y habla (racional).705 Jinarajadasa dice que el hombre como animal-racional una vez satisfechas sus necesidades básicas, siente la necesidad superior de “liberarse”, pero en un sentido que va más allá de los placeres sensuales. Sostiene que el hombre siempre está en una constante lucha con los demás, porque aún conserva su instinto de dominación animal, sólo que en la vida moderna es un proceso que se da de forma más sutil como obteniendo títulos académicos o acumulando bienes materiales y en general, siendo o teniendo cualquier otra cosa que el otro no tiene, para demostrar que existe una superioridad.706 Esta “liberación” según el teósofo, consistía en que el hombre sentía la angustia existencial de conocer la “verdad pura” o al menos una pequeña porción de ella y era de esta forma como se producía un insaciable deseo de comprender más y más aunque fuera de forma lenta, esto conllevaba a que el hombre como en un círculo, se formulara constantemente las preguntas que le inquietaban y que lo alejaban de su esencia animal, ayudándole a acercarse más a su hermano, especialmente, mediante la pregunta ¿Subsiste el hombre después de la muerte?707 Masferrer también desarrolló esta idea en su artículo Del animal al hombre en el cual explica que un hombre deja de ser animal en la medida que adquiere derechos y tiene y hace historia. Para él, el hombre supera la animalidad cuando va más allá de sus funciones instintivas como: nutrirse, reproducirse, adquirir, gozar, conservarse y predominar. Para Masferrer, la mayor parte de los hombres viven la mayor parte de sus vidas en función animal, es decir, viviendo de forma egoísta. El maestro explica 704 Jinarajadasa, Los dioses encadenados, Biblioteca Upasika, colección “Teosofía 900”, 1929, pág. 22. Aristóteles, Acerca del alma, (introducción y notas Tomas Calvo Martínez), Biblioteca Clásica Gredos, 14, Editorial Gredos, S.A., 3ª Edición, Madrid, España, 1998, pág. 108. 705 706 Ibídem, pág. 23. 707 Ibídem, pág. 25. 207 que para llegar a ser Dios hay que estar al servicio de la “idea” más allá de lo tangible. La “idea” es un Dios que no se puede ver, ni tocar. En este sentido, para él, el hombre es Dios cuando se vuelve unidad.708 Al referirse a la conferencia del hindú, el periódico Patria publicó el artículo “Las Enseñanzas de Jinarajadasa sobre el poder del idealismo” en el cual se utilizaron ciertas alegorías para explicar que todo hombre, mujer o niño era capaz de crear algo, ya fuere un pensamiento, una obra de arte o un acto, sin necesidad de haber cursado largos estudios o haber aprendido una técnica en específico. Aquí se revela siempre una crítica hacia la racionalidad, para dar paso a una capacidad más “creativa” que es la que le da al hombre su condición de “Dios”, es decir, no sólo Dios puede crear.709 Otro de los temas que apuntalaron, fue las reflexiones de Jinarajadasa sobre el “psicoanálisis”, específicamente, sobre el “Tanna” que es el equivalente de la libido o deseo sexual. La idea es que el hombre nunca podrá encontrar la felicidad y la liberación mientras se encuentre atado y obedezca a sus deseos y pasiones carnales que son impulsos que las religiones tradicionales como el budismo enseñan a controlar. Aquí está presente de forma clara la concepción platónica sobre que la materia es “mala” y las ideas “buenas”. 710 Ahora veremos el concepto que Jinarajadasa tenía sobre Krishnamurti y algunas impresiones que vertió Masferrer sobre dicho tópico. 2.2.3) Las enseñanzas de Krishnamurti (La visión de Alberto Masferrer) Aparentemente Masferrer pudo conversar en persona con Jinarajadasa y dijo que la mejor lección que había podido recibir de él, era que era dueño de su tiempo y de su vida, es decir, tenía un proyecto de vida, el cual no existía en el país, por no tener Alberto Masferrer, “Del animal al hombre”, El Día, miércoles 11 de abril de 1928, No. 2,576, pág. 1, año VIII. 708 “Enseñanza de Jinarajadasa sobre el poder del idealismo”, Patria, sábado 8 de junio de 1929, No. 333, pág. 3, año II. 709 710 Ídem. 208 un orden o plan definido.711 Algo curioso es que en Patria apareció publicado un artículo haciendo algunas reflexiones sobre la conferencia de Jinarajadasa “Las enseñanzas de Krishnamurti”, a la cual asistieron un gran número de mujeres y contra la cual, Masferrer, abiertamente admitió no estar de acuerdo, por considerar que: Las enseñanzas de Krishnamurti no sólo nos parecen no estar a la altura de las de Cristo, de Budha, de Pitágoras o Zoroastro, sino que las creemos muy inferiores a las de muchos otros filósofos y maestros del ocultismo y de la Sabiduría india. Suami Vivekananda, la Blavatsky o Mario Roso de Luna, son indiscutiblemente superiores a Krishnamurti (…) una conferencia del mismo doctor Jinarajadasa nos atrae, nos arrebata y nos satisface más que cualquiera de los libritos de Krishnamurti. 712 Masferrer lanzó este exabrupto porque Jinarajadasa en su conferencia dijo que Annie Besant había designado desde hacía algún tiempo a Krishnamurti como el futuro “Gran Instructor Mundial” que traía un nuevo mensaje redentor.713 Krishnamurti como se verá más adelante negó todo esto, disolvió la Orden de la Estrella y se despojó de sus bienes materiales, pero a pesar de tal divergencia, Masferrer se expresó muy bien de Jinarajadasa y en el periódico Patria hasta se le atribuyó cierta afinidad al Mínimum Vital: Jinarajadasa –que es un valor innegable–, no le hemos considerado aquí sino COMO HOMBRE DE ACCIÓN; como educador, como soldado del movimiento de reforma social, más o menos conexo con el MOVIMIENTO VITALISTA, que es nuestro credo, o más bien la Órbita bien circunscrita en que nosotros encendemos premeditadamente nuestras actividades sociales. Nada que no tienda visible y directamente al mejoramiento de la Vida, de la vida DE CADA UNO atrae nuestro interés.714 Esta afirmación se hizo en el sentido de que lo meramente “contemplativo” o “filosófico” no era de su interés, por estar alejado de la vida misma, inmediata. Alberto Masferrer, “La mejor lección de Jinarajadasa”, Patria, sábado 15 de junio de 1929, No. 339, pág. 1, año II. 711 712 “Jinarajadasa habló sobre Krishnamurti”, Patria, lunes 17 de junio de 1929, No. 340, pág. 1, año II. 713 Jinarajadasa, Los dioses encadenados, Biblioteca Upasika, colección “Teosofía 900”, 1929, pág. 36. 714 “Krishnamurtismo”, Patria, jueves 20 de junio de 1929, No. 343, págs. 1 y 5, año II. 209 Además, Patria criticó la creencia de que Krishnamurti era un “mesías” terrenal, incluso, lo negaron rotundamente al considerar que un verdadero redentor no viviría en un mundo lleno de comodidades y lujos, ya que su misión debía ser vitalista, es decir, debía estar al lado de los pobres para liberarlos de la mugre, los andrajos y la miseria.715 Nos da la impresión que estos ataques iníciales de Patria fueron en contra de la imagen de Krishnamurti “el mesías” y no en sí de su persona. Posteriormente Alberto Masferrer escribió un artículo con el solo propósito de aclarar estos ataques y desde una perspectiva más conciliadora dijo que el gesto más grande que pudo haber realizado Krishnamurti era disolver la Orden de la Estrella, porque creía que se había establecido una nueva religión en torno a él y se le hizo creer (a Krishnamurti) en base a sugestiones –las cuales éste después rechazó– que era el mesías. Masferrer admiró profundamente la nueva actitud de Krishnamurti sobre enseñarles a los demás a buscar la verdad por sí mismos, la cual estimaba como vitalista, tal y como puede observarse en las siguientes palabras del mismo Krishnamurti, en donde Patria acentuó sus referencias a la vida: Mas comprender la Verdad, es VIVIRLA. Y si vosotros no la VIVIS, como la podéis comprender ¡La verdad!...muy contados son capaces de comprenderla, y esos la llevan en sí mismos, y no necesitan de organización ninguna (…) dejadme libre id en paz...716 Masferrer pensó que por esta honestidad, Krishnamurti podía ser considerado un “maestro”, sólo que desde una dimensión más humana, fraternal y liberadora, al igual que Gandhi, Tagore o Vivekananda, porque daba enseñanzas que dirigían los horizontes de la vida individual. Además, compartía su opinión de no adherirse a “ordenes” o “religiones”.717 Personas afines a la teosofía atacaron a Masferrer bajo la aclaración de que “La Orden de la Estrella” nunca fue una religión, sino que, nada más, una organización intercesora entre Krishnamurti y el 715 Ídem. Alberto Masferrer, “La verdad de Krishnamurti I: ahora sí creo en Krishnamurti”, Patria, sábado 7 de septiembre de 1929, No. 407, pág. 1, año II. 716 Alberto Masferrer, “La verdad de Krishnamurti II” Patria, lunes 9 de septiembre de 1929, No. 408, pág. 1, año II. 717 210 mundo; en lo que coincidieron fue en admirar su libertad de pensamiento y que para Krishnamurti, lo más importante era la vida en su máxima plenitud.718 Las opiniones de los distintos sectores fueron variadas. El periódico católico salvadoreño El Tiempo, también publicó una nota sobre una conferencia que Krishnamurti impartió en el Simphony Hall de Boston donde aseguraban –que éste afirmó– que nunca profesó de forma devota la teosofía, a pesar del respeto que sentía por ciertos teósofos y que consideraba que la teosofía no podía tomarse como un sistema serio de filosofía, sino más bien como una mezcla de sofismas orientales.719 Ciertamente Krishnamurti tomó distancia de la teosofía, pero como ya hemos dicho, la Iglesia Católica a través de sus órganos oficiales, siempre la atacó sistemáticamente al igual que lo hizo con el comunismo, la masonería e incluso el protestantismo frente a los cuales mostró una postura bastante intolerante. Cuando a Jinarajadasa se le interrogó sobre esta posición de la Iglesia, expresó: En América florecerá la religión del futuro, en sus jardines –cultivados por hombres libres y robustos– se levantará el Templo de una raza potente. –Mire Ud., en Tegucigalpa, Honduras– cuando dictaba mi conferencia, el obispo de aquella ciudad excomulgó a los que asistieran a mi plática y, cosa bella, esa noche concurrió lo más granado de la población. El Señor Presidente de la República, tendiéndome la mano, me dijo: quiero ser el primer excomulgado del país y me ofreció su ayuda hasta que hube pisado las playas salvadoreñas.720 Según un editorial aparecido en Patria, titulado “Krishnamurti y su mensaje” de Arturo Montesano, el hindú, era el filósofo que más llamaba la atención en todo el mundo y su obra la que más despertaba el interés, debido a que llevaba un mensaje de carácter universal, aunque no mesiánico que estaba embebido de las enseñanzas de Patañjali, Protágoras, Aristipo, Epicuro, Amonio Sacas, Dante, Bruno y Spinoza, Jorge Ramírez D., “La orden de la estrella y Krishnamurti”, Patria, lunes 16 de septiembre de 1929, No. 414, pág. 3, año II. 718 “Krishnamurti no cree en su mesianidad”, El Tiempo, lunes 16 de junio de 1930, No. 338, pág. 3, año II. 719 Antonio J. Arango, “Jinarajadasa, El Maestro”, La Nación, San Miguel, miércoles 12 de junio de 1929, No. 1627, pág. 1, año VI, tomo VI. 720 211 que tenía como base: resolver los problemas prácticos de la vida, liberando al hombre de temores y poniendo en sus manos su destino.721 Masferrer también publicó en el periódico Patria, un artículo titulado “¿Quién trae la verdad? En el cual hablaba de como Krishnamurti proponía una nueva “rebeldía” de no aceptar lo que los otros imponían como “verdad” y como éste invitaba a pensar por uno mismo, muy similar a la frase con la que Kant promovía el ideal ilustrado de la modernidad: “atrévete a pensar”. Esta nueva actitud pirrónica establecía que se debía de escuchar, comprender y luego formar las propias ideas con total libertad, porque la verdad era una cuestión individual y jamás colectiva.722 El objetivo de su doctrina era, pues, despertar el deseo en los otros de buscar la verdad de forma independiente y a no estar subyugado ni en lo político, ni en lo religioso. Además, estableció que todos podían tener ciertas creencias, las que fueren, y que era una decisión personal sostenerlas, pero lo que consideraba un error, era tratar de imponer esas ideas a los demás y que por tal motivo, había tantos títeres en el mundo, porque tenían la mente y la voluntad quebrantada.723 Krishnamurti también enseñaba a que se debe tener una actitud de humildad intelectual, ya que de cualquier persona o cosa se puede aprender, la verdad puede venir de cualquier parte y en múltiples formas, por tanto, no se debe venerar o respetar a “autoridades” sino que a la verdad misma, cuando se hace lo contrario, es que, según él, se empiezan a crear los grandes sistemas filosóficos y las religiones, es decir, a construirse castillos en el aire. Para Krishnamurti, al dogmatizarse las personas se vuelven prisioneras.724 Krishnamurti entiende que el hombre por su misma naturaleza cuando deja de creer ciegamente en ciertas ideas, de inmediato pasa a edificar otras y este proceso, Arturo Montesano Delchi, “Krishnamurti y su mensaje”, Patria, jueves 13 de marzo de 1930, No. 565, págs. 3 y 6, año II. 721 Krishnamurti, “¿Quién trae la verdad? I” Patria, sábado 14 de septiembre de 1929, No. 413, págs. 3 y 7, año II. 722 723 Ídem. Krishnamurti, “¿Quién trae la verdad? II”, Patria, lunes 16 de septiembre de 1929, No. 414, pág. 3, año II. 724 212 según él, se ha venido dando a través de la historia, por lo que el hombre nunca es totalmente libre.725 Krishnamurti pensaba que las religiones y la política han sustituido al hombre “filosófico” por el hombre “crédulo”, y que este hombre crédulo ha sustituido la comprensión y la creatividad por la fe. Se ha creado un sistema para que el hombre sea “algo” o pertenezca a “algo”. La supuesta “libertad” sólo radica en escoger éste o aquél bando o ponerse tal o cual etiqueta. El hombre se ha convertido, según él, en un mero seguidor de modelos preconcebidos.726 Las religiones son opresoras porque fuerzan creencias que enfrentan al sexo con la espiritualidad e inducen al miedo desde sus propios discursos escatológicosalvíficos. En política, también ha habido una visión absolutista tanto del marxismo como del capitalismo, ya que ambos proyectan una visión idílica del mundo, es decir, son sistemas que ofrecen finales felices utópicos sempiternos. 727 Salarrué al reflexionar sobre estas ideas que en ese momento se percibían como revolucionarias dijo: Por consecuencia, hay una fuerte presión en el espíritu juvenil, que lucha por moldes más amplios, moldes adecuados a su concepto de vida (…) El ambiente está recargado de prohibiciones, la vida está encarcelada, maniatada y para romper esas ligaduras está aquí, por fin, Krishnamurti. Para evitar falsas interpretaciones y para no dar explicaciones que sería necio dar, diré que llamo Krishnamurti a una fuerza incontenible de juvenecimiento, a un chorro de alegría y belleza que actualmente percibo vibrante en mí y en torno mío y que no es otra cosa que el florecer incontenible de la moralidad que corresponde a la época.728 Es importante aclarar que Krishnamurti antes de morir manifestó que no dejaba representantes ni sucesores de ningún tipo, lo cual incluía las fundaciones que él mismo había creado, las cuales eran: 1) la Krishnamurti Foundation India (KFI) con sede en la India, 2) la Krishnamurti Foundation Trust (KFT) con sede en Inglaterra, 3) la Krishnamurti Foundation of América (KFA) con sede en Estados Unidos, 4) la Fundación Krishnamurti Latinoamérica (KFL) que nació en Puerto 725 Ídem. Pedro López Anadón, Krishnamurti, vida y obra, Editorial Oberon, Grupo Anaya, S. A., Madrid, España, 2003, pág. 147. 726 727 Ibídem, págs. 152, 173 y 179. 728 Salarrué, “juvenecer”, Patria, miércoles 15 de enero de 1930, No. 516, pág. 3, año II. 213 Rico, pero que después se trasladó a España y 5) la Fundación de Canadá. 729 El objetivo con el que surgieron estas instituciones fue simplemente dar a conocer el pensamiento de Krishnamurti sin tomar posiciones, creando foros y conservando su obra. También se encargaron de velar por la correcta traducción de la misma en los distintos idiomas.730 Para finalizar con esta parte, habría que decir que uno de los aspectos menos conocidos y quizá más interesantes sobre Krishnamurti es la amistad que trabó con el filósofo y novelista inglés Aldous Huxley731 quien incluso llegó a prologar su libro La libertad primera y última (1954). También a instancias de Huxley escribió su libro Comentarios sobre el vivir.732 Huxley de forma similar a Krishnamurti creía que el hombre debía despojarse de todas sus creencias, el hombre dogmático, según él, era la crisis de la época. Huxley rechazaba todo tipo de formulismo intelectual y creía que el sistema tradicional sólo conducía al qué pensar y no al cómo pensar, el culto a las ideas era lo que, según él, había predominado, pero las ideas eran, precisamente, los condicionamientos de los que hablaba Krishnamurti.733 Ahora veremos como la teosofía propuso una salida pacífica a los problemas sociales frente al belicismo de posturas como el marxismo-leninismo. Pedro López Anadón, Krishnamurti, vida y obra, Editorial Oberon, Grupo Anaya, S.A., Madrid, España, 2003, págs. 12 y 13. 729 730 Ibídem, pág. 195. Aldous Huxley, Sobre la divinidad, (introducción de Huston Smith), Editorial Kairós, 1ª Ed., Barcelona, España, 2000, págs. 7, 8 y 9. Huxley aunque oficialmente se declaró “agnóstico”, se vio muy influenciado por el misticismo espiritual, preponderando lo intuitivo por sobre lo racional. Su obra La filosofía perenne (1944) era una antología de escritos sobre misticismo donde se resaltaba el monismo, retomando la doctrina de Plotino: Dios es Uno. Colaboró con la revista Vedanta and the west entre 1941 y 1960 y perteneció a la Vedanta Society of California dirigida por Swami Prabhavananda quien a su vez pertenecía a la orden ramakrihna de la India. 731 Pedro López Anadón, Krishnamurti, vida y obra, Editorial Oberon, Grupo Anaya, S.A., Madrid, España, 2003, págs. 90, 92, 109. 732 733 Ibídem, págs. 14 y 15. 214 2.2.4) Desarmemos la guerra: La teosofía también influyó en el ambiente académico del país. En el periódico Opinión Estudiantil órgano oficial de los estudiantes universitarios dirigido en ese momento por el también vitalista Alfonso Rochac, publicó la conferencia “Desarmemos la guerra” en donde Jinarajadasa hizo referencia a que se debía de fomentar la paz. Para él, en todos los hombres era innato el sentimiento de bondad aunque, en ocasiones, predominara el instinto animal egoísta, por lo que el hombre era un ser dual. En este sentido, había que hacer pensar a la mente lo que nosotros deseábamos que pensara, es decir, direccionarla, pero el problema era que ésta, en ocasiones, se nublaba, por lo que Freud, Jung, Adler y otros psicoanalistas llamaron: “la mente inconsciente”.734 Lo que Jinarajadasa trató de enfatizar es que el ser humano deja que el “inconsciente colectivo” invada su mente individual, por lo que éste comienza a pensar cómo piensa la masa, lo que Jung llamó: “instinto de la muchedumbre”. Este inconsciente colectivo es el cumulo de conocimientos que ha producido la humanidad a través del tiempo y por consiguiente, que guarda en su memoria. Según Jinarajadasa, uno de estos ejemplos es la resolución de conflictos mediante la lucha y la guerra: “Este inconsciente colectivo de la humanidad es el que arrastra a las naciones a la guerra. Todos somos afectados por las fuertes corrientes de la actividad del inconsciente”.735 En los períodos de guerra, para Jinarajadasa, se sub-vierten los valores, el discernimiento, la prudencia, la moderación y la generosidad son vistos como signos de debilidad, la religión también es instrumentalizada, de lo que se trata, entonces, es de suprimir el instinto guerrero mediante la profilaxis moral y es por eso que Jinarajadasa se adhería a instituciones como la Liga de las Naciones, la cual reconocía tenía muchos defectos y en el campo político era muy débil, pero que en la dimensión del bienestar social, en coordinación con muchas naciones, había 734 C. Jinarajadasa, “Desarmemos la guerra”, Opinión Estudiantil, julio de 1929, No. 1, pág. 5, tomo I. 735 Ídem. 215 logrado abolir la explotación industrial infantil y femenina. 736 También había luchado por la erradicación de ciertas epidemias. Jinarajadasa creía que, en ese momento, era una de las pocas instituciones que estaba luchando por la fraternidad mundial: Si tuviéramos el poder de la clarividencia y pudiéramos mirar al corazón de todos los hombres de San Salvador, ¿qué veríamos? Veríamos una lucha de mente a mente, de corazón a corazón. Veríamos que todos aquellos que componen el mundo de los negocios han aceptado sin el más mínimo examen, el principio dominante en la naturaleza salvaje, esto es, la supervivencia del más fuerte. 737 Jinarajadasa pensaba que los hombres de negocios luchaban unos contra otros por acrecentar sus ganancias y lograr el respeto de sus conciudadanos, por lo que el resultado era la guerra a muerte, lo mismo pasaba con las naciones, las grandes potencias con cerebro y capital, pero sin ninguna noción de la caridad, utilizaban a las masas como simples peones en un tablero de ajedrez. El obrero en este esquema, era como una “máquina viva sin alma”, que era utilizada para conquistar los mercados. Tal y como pensaba Henry George, Jinarajadasa creía que algunos ricos habían producido la enorme miseria del mundo.738 Esto traía como consecuencia la amargura y el odio del pobre hacia el rico, del fracasado contra el triunfador, lo cual iba creando un gran sentimiento potencial de guerra que, llegado el momento, estallaría en una revolución o en una guerra de nación contra nación. En definitiva, para Jinarajadasa, la guerra eran “los negocios llevados a cabo mediante otros medios” y sus causas eran: “la pobreza, la enfermedad, el disimulo y la codicia”.739 Resulta casi profético que el hindú hubiese pronunciado estas palabras antes de la insurrección de 1932 que se desató, en gran parte, debido a las intransigencias de la clase adinerada frente a las necesidades de la masa campesina empobrecida. En el párrafo anterior, Jinarajadasa parece estar parafraseando al militar prusiano Clausewitz, quien en su tratado De la guerra escribió una frase muy similar 736 Ídem. 737 Ibídem., págs. 6 y 7. 738 Ídem. 739 Ídem. 216 aunque no igual: “la guerra es una mera continuación de la política por otros medios”. Para el alemán, la guerra era un instrumento político, “una realización de ésta por otros medios”. La política planteaba los objetivos y la guerra era el medio.740 Resulta curioso que el primer hombre de Estado que puso en práctica las ideas de Clausewitz fue Lenin, sin embargo, en muchos aspectos se distanció de él.741 En su ensayo El socialismo y la guerra, Lenin estableció que la política para él, era la lucha de clases, es decir, la guerra de clases, cuyo enemigo absoluto era la burguesía o el Estado burgués con sus respectivos aparatos opresores que respaldaban el sistema económico capitalista. A su criterio, el proletariado y la burguesía eran enemigos irreconciliables enfrascados en la guerra total. Para el ruso, la política era sólo una preparación para la guerra y creía que sólo mediante la violencia extrema se podía llegar a la eliminación del Estado, por tanto, Lenin modificó la fórmula de Clausewitz –al decir– que la guerra sólo era la continuación de la lucha de clases.742 Jinarajadasa por su parte, no creía en la violencia. El teósofo sostenía que los países debían de tratar de evitar la guerra por todos los medios posibles, mediante mecanismos como: reformar el sistema bancario, regular las finanzas internacionales, cambiar el sistema de propiedad de la tierra y que el Estado interviniera como agente activo en los negocios de los particulares para evitar las explotaciones artificiales. Este reformismo incluía un buen sistema educativo y de salubridad, el desarrollo cultural y en general, todo lo que significara bienestar colectivo.743 2.2.5) La ciudad perfecta del hombre y de Dios: Aquí Jinarajadasa hizo referencia a la ciudad griega de Atenas, en “donde cada cosa de la vida, cualquier objeto y cualquier actividad del hombre debía aparecer 740 Karl von Clausewitz, De la guerra, editado por Librodot.com, 2012, págs. 19 y 20. Aníbal Romero, Lenin y la militarización del marxismo, 1983, pág. 1. Disponible en: anibalromero.net/Lenin.y.la.militarizacion.del.marxismo.pdf 741 742 Ibídem, págs. 3 y 4. 743 C. Jinarajadasa, “Desarmemos la guerra”, Opinión Estudiantil, julio de 1929, No. 1, pág. 5, tomo I. 217 bajo un aspecto noble”. Jinarajadasa pensaba que Atenas aún en ese tiempo, era vista como la ciudad en donde la humanidad alcanzó su más alta cumbre cultural y seguía percibiéndose como el modelo para construir buenos ciudadanos. Esto se debía precisamente a que Jinarajadasa pensaba que los atenienses fueron “idealistas”, es decir, persiguieron lo bueno, lo verdadero y lo bello, trinidad que debía ser cultivada en todos los individuos.744 Para el teósofo, había que borrar de la mente del hombre que estaba marcado por el “pecado original”, ya que, por el contrario, la virtud era innata en él. También estableció que se debían de trascender las limitaciones del materialismo científico, sobre todo en cuanto a su “determinismo”, por ejemplo, dijo que la genética podía probar la herencia de los caracteres, pero que la herencia no determinaba completamente el carácter del niño, ya que también intervenía en él, el aspecto cultural del ambiente.745 De forma semejante a Jinarajadasa, Karl Popper llamó a esta excesiva fe en la ciencia: “materialismo promisorio o seudocientífico”.746 Uno de los mejores ejemplos de esta concepción positivista y determinista de la realidad, fue José Ingenieros quien creía que en las sociedades humanas se debía de aplicar la sociología como si se tratase de una ciencia natural. Ingenieros también creía que la economía y la psicología estaban regidas por las leyes de la biología y tal y como lo reclama Jinarajadasa, llegó a proponer que el método de la sociología debía ser la genética:747 En la filogenia social se estudiarán las variaciones de organización y mentalidad de las sociedades humanas, partiendo de los pueblos primitivos hasta llegar a las sociedades civilizadas. Será una historia de las instituciones y creencias, de las razas y de los pueblos, considerados como eslabones de una serie continua, que es la evolución natural de la especie. (Sociología General). En la ontogenia social se observará aisladamente la formación natural de cada grupo o agregado: familia, tribu, nación, etc. (…) El estudio comparativo entre la filogenia y la ontogenia sociales permitirá C. Jinarajadasa, “La ciudad perfecta”, Diario Oficial, Suplemento La República, martes 2 de febrero de 1937, No. 1,128, pág. 2, año V. 744 745 Ídem. José Ramón Ayllón, En torno al hombre: introducción a la filosofía, ediciones Rialp, 8ª Ed., Madrid, 2001, pág. 23. 746 José Ingenieros, Antiimperialismo y nación, Siglo XXI, editores, S.A., 1ª Edición, México, 1979, págs. 259, 263, 265 y 269. 747 218 confirmar –en general– la ley de correlación biogenética que rige en toda la evolución biológica.748 Ahora bien, Jinarajadasa trabajó con la idea platónica del “Estado Perfecto” y la teoría de las ideas “perfectas” que residían innatas en todos los niños, por ejemplo, la virtud. También hizo alusión a la teoría de la reminiscencia, ya que sostenía que el alma al habitar en un cuerpo físico al ver una flor, recordaba la belleza del mundo invisible que abandonó al bajar a la tierra, o sea, el alma recordaba el hogar lleno de belleza y de virtud: Si aceptamos esa teoría de Platón, comprenderemos fácilmente porque una bella ciudad hace buenos ciudadanos, y una ciudad fea los hace malos. Cuando nosotros rodeamos al ciudadano de belleza –belleza en el hogar, en las calles, en las plazas y en los parques– nosotros apelamos a él, a contribuir con su nobleza al bienestar de la ciudad.749 Jinarajadasa creía que el niño era propenso a ideas malsanas y que eso desviaba su alma, por ejemplo, a actos de criminalidad. En esta línea de ideas, crear la “ciudad perfecta” era formar al “ciudadano perfecto”, aún desde antes de su nacimiento creando en la madre condiciones armónicas.750 El enfoque era que el Estado debía invertir mucho en educación creando Ministerios de Cultura y revalorizando la función de los maestros, ya que estos eran los principales responsables de forjar a la Nación.751 Jinarajadasa también dijo que se tenía que cambiar el concepto de la mujer, que era un poco más que el de una sirvienta que hacia el trabajo de la casa y satisfacía la sensualidad del hombre. Es más, creía que los hombres que veían a la mujer como un ser inferior no habían salido de su niñez. A la mujer, la incitó a desarrollar su propia personalidad femenina para sí misma y no en función del hombre. Por tanto, otro elemento para crear la “ciudad perfecta” utópica, era que el hombre y la mujer vivieran en igualdad: 748 Ibídem, pág. 270. C. Jinarajadasa, “La ciudad perfecta”, Diario Oficial, Suplemento La República, martes 2 de febrero de 1937, No. 1,128, pág. 2, año V. 749 750 Ibíd., miércoles 3 de febrero de 1937, No. 1,129, pág. 2, año V. 751 Ídem. 219 Este tiempo sólo vendrá cuando la mujer se liberte de la capa sexual, en la que los hombres la han envuelto y cuando ella reclame su derecho de vivir para sí misma, y trabaje al lado del hombre como una igual y como una compañera divina.752 2.2.6) Mensaje final de la gira latinoamericana: En octubre de 1929, Jinarajadasa se encontraba en Santo Domingo, República Dominicana, a punto de finalizar su gira por América Latina, la cual duró más de un año, sólo restándole visitar la Habana para después partir a Europa. Su mensaje final para estos pueblos fue que cada uno tenía que dar su contribución particular para llevar a cabo el plan divino. Jinarajadasa pensaba que ninguna cultura era superior o más necesaria que otra, sino que cada cual debía desarrollar su propio papel. Ahora bien, estableció que la cultura de los pueblos hispanos provenía de la cultura griega y romana que había venido a nuestros antepasados indígenas a través de España, Portugal, Italia y Francia y que ésta debía ser conservada. 753 Jinarajadasa también reconoció que estos pueblos sufrían una gran presión económica de los Estados Unidos que estaba construyendo una gran producción de bienes materiales de consumo cimentando una filosofía del individualismo. Para Jinarajadasa, este país trataba que su “evangelio del desarrollo” se implementara en todo el continente mediante una organización social materialista que evidentemente conllevaba un estado de bienestar que hasta cierto punto era bueno, pero que se equivocaba en crear un ambiente excesivamente mercantilista, es decir, para Jinarajadasa el desarrollo era bueno y digno de imitar siempre y cuando no se olvidara que:754 En la vida hay algo más que los negocios. No se vive sólo de pan; el hombre es un alma que siempre clama por manifestarse en creaciones artísticas. En modo muy especial vosotros los teósofos latinoamericanos, debéis predicar e intensificar el evangelio de la belleza, porque este lado creador del carácter que se desarrolla con las artes es muy importante…755 752 Ibíd., jueves 11 de febrero de 1937, No. 1,134, pág. 2, año V. “El sabio C. Jinarajadasa envía un mensaje a América Latina”, Patria, viernes 13 de diciembre de 1929, No. 490, pág. 6, año II. 753 754 Ídem. 755 Ídem. 220 CAPÍTULO III: EL GRUPO MASFERRER COMO IMPULSOR DEL PROYECTO DE NACIÓN MARTINISTA Y LA OFICIALIZACIÓN DE LA DOCTRINA MASFERRERIANA Su pensamiento, aún en los vuelos más altos, nunca olvida la razón humana de la fuerza que lo genera y por eso, quizá, es que en cada una de sus páginas palpita el evangelio de la vida, recomendando salud, alegría y protección, no sólo para la condición vital del hombre, sino para todos los seres, grandes y pequeños, que gestan sobre el mundo… 756 …porque es llegada la hora de que él comience, de verdad a vivir (refiriéndose a Alberto Masferrer), a vivir la vida radiosa y plena de los grandes, la vida que por una paradoja inexplicable, sólo puede iniciarse con el advenimiento de la muerte757 1. Introducción: En este capítulo puede observarse como una vez fallecido Masferrer, su amigo, Alberto Guerra Trigueros758 tomó el timonel del periódico Patria para continuar la difusión de las ideas vitalistas, ya en plena dictadura martinista hasta 1938. 759 Además, muestra el debate que se generó entre él y otros masferrerianos de la época, algunos de ellos alineados al régimen, especialmente, Adolfo Pérez Menéndez, por la utilización del legado intelectual de Masferrer que impulsaría el nuevo proyecto material y espiritual de Nación. Remy Roger “Concepto errado que de la teosofía tienen algunos” El Cronista, Honduras, lunes 31 de octubre de 1938, No. 7,292, pág. 7, año XXVII. “El verdadero teósofo ama por igual a todos los seres de la creación; ama no sólo al prójimo sino también a todos los seres ínfimos del mundo, a los seres irracionales, en quienes reconoce que existe un alma embrionaria, alma con funciones instintivas que espera su proceso evolutivo, la existencia de la cual no niega, como tampoco les niega el derecho a vivir”. 756 “La apoteosis de Masferrer”, Diario Oficial, Suplemento La República, lunes 4 de septiembre de 1933, No. 228, pág. 1, año I. 757 Alberto Guerra Trigueros: nació en Nicaragua en 1898 y murió en El Salvador en 1950. Periodista, escritor y continuador de las ideas vitalistas de Masferrer. Dirigió el periódico Patria hasta 1938. Entre algunas de sus obras están: Poema póstumo 1963, El surtidor de estrellas 1969, Minuto de silencio 1951, El libro, el hombre y la cultura 1948, entre otras. 758 Marta Elena Casaús Arzú, El Vitalismo de Alberto Masferrer y su impacto en el pensamiento de América Central, Revista Cultura, No. 102, enero-julio 2010, pág. 76. 759 221 También expone cómo un grupo de intelectuales, entre ellos, algunos canonizados por la actualidad se unificaron alrededor del gobierno de Martínez para lograr la regeneración del pueblo, especialmente, en lo que se refiere a la construcción de una identidad propiamente salvadoreña, que tomaría muchos elementos de la cultura indígena y que sería proyectada, principalmente a través del arte en sus diferentes manifestaciones: literatura, música, pintura, grabados, etc. Desde esta perspectiva, se desarrollan también algunas de las diversas actividades culturales efectuadas por el Grupo Masferrer, el cual fue constituido en San Salvador el lunes 9 de octubre de 1933, y que esencialmente fue una asociación cultural con fines artísticos, literarios y científicos que estuvo integrada por elementos jóvenes y entusiastas pertenecientes a la intelectualidad, el periodismo, el profesorado y los gremios artísticos, especialmente, los musicales. Las juntas previas a su constitución se celebraron dos veces por semana en casa de María de Baratta; desde su formación dicha asociación adoptó de forma cohesionada un programa mínimo susceptible de posteriores aplicaciones y ampliaciones, pero que tenía como base fundamental la realización práctica de los postulados de las doctrinas sociales y humanitarias de Alberto Masferrer.760 Conformaron esta asociación cultural: María de Baratta, Mercedes Viaud Rochac, Ana Rosa Ochoa, Amparo Casamalhuapa, Marta Alegría, Emma Posada, Serafín Quiteño, Joaquín Castro Canizáles conocido como Quino Caso, Adolfo Pérez Menéndez, Raúl Andino, Sarbelio Navarrete, Miguel Ángel Espino, Manuel Andino, Francisco Morán, Augusto Baratta, Francisco Espinosa, Arístides R. Salazar, Julio César Escobar, Arturo R. Castro, Jacinto Castellano Rivas y Manuel Barba Salinas.761 Es de resaltar que Salvador Salazar Arrué, Francisco Gavidia y Claudia Lars (ver anexo 1) también apoyaron de forma autónoma los objetivos de dicha agrupación. Posteriormente muchos otros valiosos elementos pertenecientes a la intelectualidad y a los gremios artísticos y docentes fueron invitados a integrarse al “Ha quedado constituido el Grupo Masferrer”, La Prensa, lunes 9 de octubre de 1933, No. 6,860, pág. 1, año XXI 760 761 Ídem. 222 grupo. Los requisitos eran desarrollar alguna actividad cultural, que se tuviera gusto por lo estético y que se aportaran buenas ideas para alcanzar el mejoramiento social de la población.762 El Grupo Masferrer, al momento de su constitución no contó con estatutos, ni junta directiva, sólo con un secretario que fue nombrado posteriormente: Adolfo Pérez Menéndez. Una de sus primeras actividades fue la celebración del Día del indio a desarrollarse el 12 de diciembre de ese mismo año. En ciertas ocasiones, se han intercalado las actividades del Grupo Masferrer, con algunos sucesos artísticos, arqueológicos y literarios posteriores a su disolución –que fue aparentemente a inicios de 1934– con el único propósito de establecer los nexos conceptuales y cronológicos entre los fines con los que nació dicha asociación y sus ulteriores realizaciones, las cuales fueron auspiciadas por el Supremo Gobierno. En el capítulo, también es palpable el efectivo apoyo de la prensa del país hacía dicho grupo. Además, se revelan algunos detalles no conocidos hasta ahora sobre la íntima relación que se estableció entre Martínez y los intelectuales, mediante los cuales se podrían aclarar o replantear algunas de las interrogantes o siempre acaloradas discusiones surgidas a partir de la investigación efectuada por el lingüista y antropólogo salvadoreño Rafael Lara-Martínez, en su obra Política de la cultura del martinato, sobre todo, el hecho de que, de ningún modo, los intelectuales fueron manipulados o coaccionados por Martínez, sino que dicha “alianza” fue el producto de una relación voluntaria, la cual está documentada a través del intercambio de un par de cartas, una reunión efectuada en casa presidencial y diversas interacciones entre lo oficial y lo particular. Finalmente, puede observarse como los intelectuales trataron de impulsar los distintos aspectos del “Mínimum Vital”, tales como: feminismo, unionismo y reformismo y es evidente apreciar como las redes intelectuales masferrerianas continuaron funcionando enérgicamente aún después de la muerte de Alberto Masferrer. “Ha quedado constituido el Grupo Masferrer”, La Prensa, lunes 9 de octubre de 1933, No. 6,860, pág. 1, año XXI 762 223 2. El fallecimiento de Masferrer y algunas repercusiones sociales: Alberto Masferrer falleció unos minutos antes de las diez de la noche, en una casa del barrio San Jacinto cercana a El Zapote el 4 de septiembre de 1932, lo cual fue interpretado por los redactores del periódico El Día, del cual Masferrer fue el primer director, no sólo como una pérdida irreparable para el país, sino para el continente hispanoamericano como uno de los más grandes filósofos idealistas y forjadores de las ideas americanistas, quien en vida desarrolló una sensibilidad social fuera de lo común. Masferrer –pensaban– sería reconocido como uno de los intelectuales más genuinos de la historia salvadoreña 763 por existir una gran congruencia entre su pensamiento y su vida.764 Su obra para ese entonces ya era muy reconocida, por lo menos en los círculos intelectuales y valorada como de “muy altos quilates”765; es por eso que dicho periódico escribió766: La juventud se hará presente en el duelo, los rotativos echarán a la calle ediciones extraordinarias, el cable transmitirá la infausta nueva al mundo, las escuelas oficiales desfilaran frente al féretro, el gobierno se hará representar en sus funerales, el Ateneo de El Salvador pondrá cortinajes negros en su pórtico… “Anoche murió don Alberto Masferrer”, La Prensa, lunes 5 de septiembre de 1932, No. 6,508, pág. 1, año XX, “Como escritor Masferrer pasó de la mediocridad; pero no llego a la cumbre. Su ideología como tal aún no está definida. Cultivó el estilo sin llegar a ser un verdadero estilista. Como hombre social, como líder como héroe en la gran batalla que se libra ahora, tuvo generosos propósitos, buena intención, coraje de decir ciertas verdades que la valieron odios más siempre anduvo un poco desorientado.” 763 “La muerte de Masferrer” El Día, lunes 5 de septiembre de 1932, No. 3,915, págs. 1 y 4, año XII. 764 G. Alemán Bolaños, “Alberto Masferrer y su paso por la vida”, El Día, jueves 22 de septiembre de 1932, No. 3,932, pág. 3, año XII “Debe importar poco lo que anden diciendo por allí de Masferrer, cuando se sabe por convicción que fue un hombre superior en esta mediatizada América Central. Por su mentalidad, por su amor a lo que no podrá haber nunca, por su vida de trabajador laborioso y porque recorrió el mismo camino de los procuradores de redención”. Además Bolaños expresó que Masferrer rechazó el sistema de viviendas para gente pobre denominado: mesón, luchando vehementemente por su eliminación”. 765 El Boletín de la Biblioteca Nacional, publicó el martes 1º de noviembre de 1932, en su número 5, Época II, páginas 1 y 2 una breve biografía de Masferrer en la que se expresó que los primeros treinta años de su vida, fueron de autoformación, ya que este no asistió a ninguna Universidad, pero conoció múltiples doctrinas de las cuales construyó una propia. Además agrego que su obra no fue “grande” en cantidad, sino en calidad y que muerto florecería eternamente. 766 224 Por su parte, La Prensa informó que durante las últimas horas de vida de Masferrer, su casa fue visitada por centenares de personas de todas las clases sociales que llegaban a despedirse de él, sociedades culturales y literarias, lo mismo que la Cámara de Comerciantes en Pequeño, quienes le habían preparado una imponente manifestación de duelo767. Alberto Masferrer era considerado como un gran artífice de la palabra y un gran luchador social, amado por unos y aborrecido por otros; sus seguidores salieron en su defensa cuando en su lecho de muerte, el ambiente le reclamaba. Masferrer, según Alfonso Rochac, fue un hombre sincero con sus sugerencias y leal en sus ideas, ya que vivió una noble pobreza y enseñó que una manera de ser invencible era “no desear” lo del prójimo, para evitar dejar crecer en el corazón de las personas el odio de clases. Rochac consideraba que Masferrer tuvo algunos errores, pero también grandes virtudes:768 No es posible que las gentes del “gobierno” permitan que se vaya a la eternidad este hombre, sin compensarle sus afanes, sus anhelos y esa su porfía de querer ser lo que nunca pudo por la resistencia y la indolencia y la estulticia de un pueblo que se está pudriendo en el desánimo y de incivilidad. Si hasta el delincuente que arrastra cadena merece la protección de los hombres, ¿Por qué? no ha de tener su ratito de quietud el hombre quién por vivir pensando en los demás no tuvo tiempo de repletarse de oro los bolsillos (…) morirá Masferrer quizás sin decir su defensa pero quedará un supremo argumento que nadie podrá desvirtuarle: su pobreza (…) si Prometeo esta encadenado no quieran los salvadoreños aumentar el número de los buitres.769 Al funeral de Masferrer acudieron alrededor de mil personas. Las palabras en nombre del gobierno las pronunció Adolfo Pérez Menéndez, quien manifestó la responsabilidad que tenía el Estado de rendir homenaje a quien fue un alto exponente de la mentalidad salvadoreña. También hablaron Amparo Casamalhuapa, “A las nueve de la mañana de hoy aún vivía Masferrer”, La Prensa, jueves 1º de septiembre de 1932, No. 6,504, pág. 1, año XX 767 Alfonso Rochac, “Prometeo encadenado: la agonía de Alberto Masferrer”, La Prensa, jueves 1º de septiembre de 1932, No. 6,504, pág. 1, año XX 768 769 Ídem. 225 Julio Enrique Ávila,770 Gilberto González y Contreras, Francisco Moran y el obrero Manuel Pineda. Numerosas ofrendas florales fueron dedicadas al fallecido.771 El Presidente Martínez se interesó personalmente 772 porque se estableciera mediante decreto No. 1778 de fecha 10 de mayo de 1933 773 publicado en el Diario Oficial, una pensión de doscientos colones mensuales a favor de su viuda, la cual fue otorgada para que ésta no quedase en desamparo económico y además por el renombre que Masferrer alcanzó en el istmo centroamericano como maestro, escritor y periodista, y por su desempeño en altos cargos para el Estado en el magisterio y en el servicio consular: Al interesarse directamente el Presidente Martínez por la suerte de la señora de Masferrer, ha probado que no es como lo han creído sus adversarios y enemigos – un hombre de sable– exclusivamente, sino que también un gobernante de clara visión, de espíritu justiciero y de corazón generoso, que sabe, puede y quiere comprender y enaltecer las nobles tareas de los hombres de espíritu y de pensamiento, a quienes otros gobernantes torpes y estultos les volvieron desdeñosamente las espaldas o los trataron a puntapiés.774 Además, el tributo del Presidente Martínez se interpretó como un buen augurio en el cambio de mentalidad de las esferas oficiales,775 con respecto al Julio Enrique Ávila: nació en San Miguel en 1892 y murió en San Salvador en 1968. Doctor en Química y Farmacia y poeta. Fue Secretario de Instrucción Pública, Secretario de la Universidad Nacional, Decano de la Facultad de Humanidades desde 1948 hasta 1950 y Ministro de Relaciones Exteriores. Fue miembro de la Real Academia Salvadoreña de La Lengua. Su estilo está catalogado como modernista. Algunas de sus obras son: Fuentes del alma (1917), El poeta egoísta (1922), El vigía sin luz (1927), El himno sin patria (1936) entre otras. Ver: Roxana Beatriz López Serrano, Cien escritores salvadoreños, Editorial Clásicos Roxsil, 1ª Ed., 1997, pág. 129. 770 “Los funerales de don Alberto Masferrer”, La Prensa, martes 6 de septiembre de 1932, No. 6,509, págs. 1y 8, año XX. 771 “Un noble gesto del presidente Martínez”, El Día, martes 27 de septiembre de 1932, No. 3,937, pág. 3, año XII. 772 “La voz oficial y la pensión a la viuda de Masferrer”, La Prensa, lunes 15 de mayo de 1933, No. 6,738, págs. 1 y 5, año XXI. 773 “Un noble gesto del presidente Martínez”, El Día, martes 27 de septiembre de 1932, No. 3,937, pág. 3, año XII. 774 En el Boletín de la Biblioteca Nacional del 1º de noviembre de 1932, No. 5, época II, págs. 1 y 2, se hizo oficial la intención de impulsar un nuevo proyecto de Nación en base al pensamiento de Masferrer: “Masferrer a gritado en El Salvador. Toda su producción es casi desconocida. La Escuela Nacional importa la lectura de sus estudiantes. Los maestros aún no sospechan en los libros del gran escritor y estilista la gestación de una República sana y justa, fuerte y luminosa porque no los leen. En nuestras bibliotecas ni el lector solicita sus libros, ni el bibliotecario les hace la propaganda 775 226 fomento de la cultura y como un primer acercamiento del mandatario a los que, en ese momento, se hacían llamar “intelectuales” y que más tarde serían sus aliados para implementar un renovado proyecto de Nación inspirado en Masferrer. El Diario Oficial, por ejemplo, publicó el siguiente editorial: A las 21 horas y 55 minutos del día de ayer, dejó de existir en esta capital, el prominente ciudadano don Alberto Masferrer. El fallecimiento del señor Masferrer, que ocurre después de una agonía prolongada y penosa, ha causado profundo y justificado dolor en el seno de la sociedad salvadoreña. El apreciable extinto estaba considerado como uno de los cerebros más fecundos del país; su obra literaria es de aquellas que dejan huella imborrable en la conciencia de los pueblos y su fama de pensador ilustre ha tenido ya hondas resonancias más allá de las fronteras de la patria. La Nación debe a él muy significados servicios (…) El Supremo Gobierno, al deplorar la irreparable pérdida que para los valores mentales que para el país significa la muerte del señor Masferrer, presenta a su estimable familia sus condolencias.776 Aparentemente en algunas biografías de Masferrer, se ha hecho constar que éste murió en el exilio, en Honduras. En esta investigación, a partir de la documentación encontrada, hemos podido establecer que murió en San Salvador y su regreso al país parece ser confirmado por José R. Castro quien en un artículo titulado “Las siete cuerdas de la lira, libro de Masferrer” expresó lo siguiente: Falleció el 4 de septiembre de 1932 en la República de El Salvador (…) San Pedro Sula, la ciudad noble e hidalga, donde pasó los últimos días de su vida el maestro, para regresar a San Salvador a pagar su tributo a la naturaleza, después de una vida de sesenta y cuatro años (…) después enfermó el maestro a consecuencias de penas del orden moral, y a bordo de un avión quiso llegar a su patria antes de morir. La desgracia lo siguió, pues un accidente aéreo provocó aterrizaje forzoso en forma tan violenta, que causó malestar profundo en el sistema nervioso de Masferrer. Llegó a la capital salvadoreña, y a pocos días en todo el continente hispano se recibía con profundo dolor la noticia de la muerte del más ilustre de los salvadoreños…777 Hecha esta aclaración, habría que decir que ya para 1933, en ocasión de la celebración del primer aniversario de su muerte, Francisco Morán elaboró una carta dirigida a los directores de los periódicos más importantes del país, con el fin de que todos dedicaran el 4 de septiembre ediciones especiales en su memoria. Su objetivo que merecen. Bien venidos sean los libros de La Europa que no conocemos, bienvenida sea la lectura exótica y enfermiza que descoyuntara y enerva”. “Condolencias del Gobierno por la muerte de Masferrer”, La Prensa, martes 6 de septiembre de 1932, No. 6,509, pág. 1, año XX. 776 José R. Castro, “Las siete cuerdas de la lira, libro de Masferrer”, La Prensa, jueves 19 de septiembre de 1935, No. 7,847, págs. 3 y 4, año XXI. 777 227 fue literalmente difundir en el país la ideología del maestro, por lo cual la misión de la prensa era recoger el legado masferreriano fragmentado y disperso. Éste debía presentarse de forma orgánica para que pudiese ser asimilado por el pueblo y así cumplir su misión de mejoramiento social.778 En esta misma dirección, se presentó una solicitud firmada por varios intelectuales ante Asamblea Nacional, pidiendo que como un homenaje a Masferrer, la obra de éste fuera impresa por cuenta del Estado en los talleres de la Imprenta Nacional. Los diputados de forma unánime acordaron recopilar los libros y artículos publicados en periódicos y revistas del país779, de Centroamérica y de Europa,780 aunque no hemos encontrado ninguna prueba material o periodística de que esto se halla efectuado. Ahora bien, a los intelectuales salvadoreños también se unieron los miembros de la junta directiva de la “Asociación Vitalista de San Vicente”, que fue fundada por el mismo Masferrer en vida, con el objeto de llevar a la práctica los ideales contenidos en el “Mínimum Vital”. Dicha asociación acordó efectuar una colecta entre los obreros para tributársela a la madre de Masferrer y elevar una solicitud al Presidente de la República para que el monumento a Masferrer fuera elaborado por el escultor Valentín Estrada, anulándose el contrato hecho con un artista extranjero: No dudamos señor director (del periódico El Día) que su cooperación en este sentido será favorable y hará propaganda en su importante diario, a fin de que todo el obrerismo salvadoreño se una a nuestra solicitud que presentaremos al señor presidente General Martínez para al ser posible, dar una demostración de unión nacionalista; que el Maestro Masferrer siempre deseó para nuestro engrandecimiento.781 “El Día hará una edición especial consagrada a la memoria de Masferrer”, El Día, miércoles 9 de agosto de 1933, No. 4,164, págs. 1 y 4, año XIII. 778 “Comisiones que realizaran el homenaje a la memoria de Masferrer”, La Prensa, sábado 22 de julio de 1933, No. 6,797, pág. 1, año XXI. La comisión compiladora de la obra de Masferrer quedo conformada por: Sarbelio Navarrete, Miguel Ángel García, Julio César Escobar, Berta Bondonza y Miguel Ángel Espino como secretario. 779 “El Estado publicará obras de Masferrer” El Día, viernes 21 de julio de 1933, No. 4,153, pág. 1, año XIII. 780 “La asociación vitalista de San Vicente está preparando un homenaje a don Alberto Masferrer, El Día, lunes 14 de agosto de 1933, No. 4,168, págs. 1 y 4, año XIII. 781 228 Otro de los indicios del anhelo de aplicar el “Mínimum Vital” de Masferrer durante la dictadura martinista, fue el Manifiesto que el comité pro-homenaje dirigió como “hoja suelta” al pueblo salvadoreño. En éste se hacia la excitativa a que todo el conglomerado social debía prestar su valiosa colaboración a fin de realizar el sencillo programa espiritual y material que encerraba dicha doctrina y que de paso pretendía acallar la crítica que argumentaba que sólo era una teoría bondadosa pero irrealizable. El vitalismo, según este documento era una preocupación por forjar una patria más justa en la cual nadie debía quedar excluido.782 Los masferrerianos creían que sí la obra del maestro era interpretada con lealtad y honradez constituía la “mejor doctrina” frente a otras vías, para realizar el tan urgente “reajuste” moral y material783 del país que el pensador siempre consideró inadaptado a las exigencias modernas.784 La ideología de Masferrer, entonces, fue tomada como directriz para encauzar la opinión pública, que intentaba sentar las bases de una nueva organización que incluyera a todo el tejido social.785 Esto era debido a que Masferrer fue muy integral al abordar casi todos los problemas trascendentales de la sociedad y es por eso que su doctrina constituía un cuerpo de ideas susceptibles de ser legisladas, es decir, el “Manifiesto al pueblo salvadoreño”, El Día, sábado 2 de septiembre de 1933, No. 4,185, págs. 1 y 4, año XIII. 782 Marta Casaús y Teresa García Giráldez, Las redes intelectuales centroamericanas: un siglo de imaginarios nacionales (1820-1920), Edición no definida, 2005, pág. 93. “En la doctrina vitalista, en su variante centroamericana, adquirió especial relevancia la regeneración moral del individuo y de la sociedad con el fin de crear una nueva conciencia continental que fundara “el hombre nuevo”. Este proceso que iba del individuo a la sociedad, se plasmó en un programa político de carácter social, cuya finalidad era la emancipación del conjunto de la sociedad”. 783 “Manifiesto al pueblo salvadoreño”, El Día, sábado 2 de septiembre de 1933, No. 4,185, págs. 1 y 4, año XIII. 784 “En Chalatenango se hará un magnifico homenaje al insigne pensador Masferrer”, Diario del Salvador, miércoles 25 de agosto de 1933, No. 12,258, pág. 1, año XLVI. La Sociedad de Artesanos “La Unión Fraternal” representada por el Coronel Federico Cáceres Alfaro, desarrolló un programa cultural en honor a Masferrer en el que don Gabriel Alvarenga dio a conocer una biografía del ilustre desaparecido, Rosa Loucel recitó su poema “me llamaría Juan” y Miguel Zepeda realizó breves apreciaciones sobre la obra literaria del autor. 785 229 objetivo era convertir sus enseñanzas en leyes concretas.786 La propuesta de un nuevo proyecto de nación quedo claramente evidenciada en el referido manifiesto: Masferrer, nuestro pensador máximo representa el ideal de una patria fuerte y justa. Es obligación de los salvadoreños “verificar” sus programas generosos, inspirados en el deseo de crear una sociedad libre de los conflictos violentos que actualmente amenazan con destruir la paz social. “La salvación nacional está en Masferrer”. El pueblo salvadoreño debe patentizar la obra del eminente publicista (…) el maestro aparece vivo en la eternidad del espíritu, y comienza su batalla de reconstrucción. Masferrer triunfará.787 El caso es que, sus seguidores, pensaban que a Masferrer en su propio país no se le daba el mismo valor y dimensión que en el extranjero, por ser muy refractario aún a las cosas del espíritu, a excepción de una minoría de intelectuales que intentaba rehabilitar su obra y pensamiento, lo cual era una grave ingratitud, ya que mientras en esos países se le admiraba, aquí se le vilipendiaba vulgarmente. 788 En este sentido, con el objetivo de homenajear a Masferrer se organizó un ciclo de conferencias denominado “Semana de Masferrer” el cual fue auspiciado por el Gobierno. Las disertaciones fueron transmitidas por la radio nacional en el siguiente orden: Alfonso Rochac desarrolló el tema “El ideario de Masferrer”. La segunda conferencia la llevó a cabo Manuel Barba Salinas: “El patriotismo doliente de Masferrer”. “Masferrer como poeta”, fue la conferencia pronunciada por Carlos Bustamante.789 La cuarta se tituló “Lo que Masferrer representa para El Salvador” escrita por Mario Vargas Morán. El tema “Los ideales sociales de Masferrer” fue “Manifiesto al pueblo salvadoreño”, El Día, sábado 2 de septiembre de 1933, No. 4,185, págs. 1 y 4, año XIII. 786 787 Ídem. “Los actos celebrados ayer y hoy en homenaje a Alberto Masferrer”, La Prensa, lunes 4 de septiembre de 1933, No. 6,830, pág. 5, año XXI, Alberto Masferrer sin ninguna exageración alcanzo renombre intelectual fuera de las fronteras salvadoreñas: en Honduras Graciela Bográn en la revista que dirigía público una edición especial sobre él; en Nicaragua se realizaron actos públicos y se editaron algunas páginas especiales en algunos periódicos; en Costa Rica, García Monge realizó una edición especial dedicada al maestro en su revista Repertorio Americano; en México Juan Ramón Uriarte dicto la conferencia “La personalidad múltiple de Alberto Masferrer” y en Guatemala hubo minutos de silencio en toda la república. 788 Carlos Bustamante: nació en San Salvador en 1980 y murió en 1952. Primero fue un poeta modernista y luego se inclinó por la tendencia neorromántica. Obtuvo varios premios en certámenes poéticos nacionales. En 1920 fundó la revista Cénit. Su obra más destacada se titula Amerhispalia. Ver: Roxana Beatriz López Serrano, Cien escritores salvadoreños, Editorial Clásicos Roxsil, 1ª Ed., 1997, pág. 123. 789 230 expuesto por Adolfo Pérez Menéndez. Raúl Andino disertó sobre “La personalidad de Masferrer como periodista”790 y Francisco Morán abordó el tema “Masferrer y los niños”.791 Es muy interesante destacar que la Universidad Nacional también se unió al homenaje, José María Peralta Lagos,792 dictó la conferencia titulada: “Masferrer humorista” y José Llerena793 profirió algunas palabras sobre el tema: “Masferrer, académico honorario de la Universidad de El Salvador”, ambas publicadas en el órgano universitario como símbolo de reconocimiento.794 En el Boletín de la Biblioteca Nacional también apareció la disertación de Mario Vargas Morán “La personalidad de Masferrer”.795 La Prensa en homenaje presentó la leyenda: “A pesar de todo y de todos, la figura de Masferrer sigue en pie y sus ideales están en marcha”; El Día escribió “el recuerdo de Masferrer796 vivirá siempre entre nosotros y que todas nuestras ansias se concreten a expresarnos tan bellamente como él. Así nos guiará siempre”, el Suplemento del Diario Oficial publicó “Nosotros, que conocimos bastante al maestro, “Masferrer, periodista”, La Prensa, lunes 4 de septiembre de 1933, No. 6,830, pág. 1, año XXI. “Masferrer no conceptuaba los periódicos como empresas comerciales o políticas de publicidad, que es lo que en realidad son en su mayoría, sino “tribunas” para difundir las elevadas y generosas doctrinas humanitarias, en favor de las clases indigentes oprimidas, principalmente de campesinos y obreros.” 790 “La semana masferreriana por radio”, El Día, lunes 14 de agosto de 1933, No. 4,168, pág. 1, año XIII. 791 José María Peralta Lagos: nació en Nueva San Salvador en 1875 y murió en la ciudad de Guatemala en 1944. Fue Ingeniero y General. Fue Ministro de Obras Públicas y Ministro de Guerra. Dentro de sus obras se encuentran: Burla, burlando (1923), Brochazos (1925), Candidato (1931), La muerte de la tórtola (1933). También publicó algunos folletos como: El sabio valle y Algunas ideas sobre la educación superior en Centroamérica. Ver: José María Cándido Raúl, Valores de la literatura salvadoreña, 1ª Ed., 1999, pág. 32. 792 José Llerena: nació en 1875 y murió en 1943. Poeta y dramaturgo. Trabajo en el diario El Día. Dentro de sus obras teatrales están: El corazón de los hombres (1921), Los tatuados (1922), La miseria alegre (1925) entre otras. Dentro de sus obras poéticas están: La raza nueva y Manantial. Ver: Roxana Beatriz López Serrano, Cien escritores salvadoreños, Editorial Clásicos Roxsil, 1ª Ed., 1997, pág. 85. 793 Revista La Universidad, Órgano del Instituto del mismo nombre, serie XVIII, viernes 30 de junio de 1933, No. 1, págs. 251-273 y 278-287 respectivamente. 794 795 Ver: Boletín de la Biblioteca Nacional, Época 11, noviembre de 1933, No. 11, págs. 7-10 796 “Masferrer”, El Día, lunes 4 de septiembre de 1932, No. 4,186, pág. 3, año XIII. 231 que escuchamos mucho su voz y que practicamos sus doctrinas en los aspectos más útiles y ciertos, en lo que tienen ellas de reparador alivio para las muchedumbres tristes y desamparadas queremos hacer un llamado para que se le rinda un unánime tributo de respeto797”. Finalmente El Diario del Salvador publicó la frase: “su ideal de redención social comienza a vivir”. El gobierno de Martínez estuvo muy complacido de la actitud dignificante que la intelectualidad salvadoreña tributó a Masferrer, estableciendo que era un referente de orientación bibliográfica y cultural para el país y que su obra constituía una verdadera manifestación de un “estadista”, ya que respondía a las urgentes e indispensables soluciones de los graves problemas económicos, sociales y culturales de ese momento. Eran, según palabras del Suplemento del Diario Oficial, La República, libros serenos llamados a orientar con sabiduría el movimiento de “evolución social”798 salvadoreña.799 La República en su editorial “El homenaje al maestro Alberto Masferrer” también hizo ver la necesidad de realizar la obra masferreriana al expresar que era una doctrina que tenía que vivir para el cumplimiento de su elevada misión social de armonización y reconstrucción nacional, ya que ésta estaba envestida de un espíritu justiciero que formaría parte del desarrollo futuro del país y además hizo énfasis en que se promovería la “penetración” de sus altos ideales dentro del pueblo salvadoreño,800 es decir, la aplicación de ciertos rasgos de la obra de Masferrer servirían fácticamente como medida anticomunista al solventar muchos de los problemas que el comunismo señalaba: Los poderes públicos están procediendo, –y así lo creen con justa razón– en armonía con un principio de alto patriotismo, al dar su contribución “oficial” en el sentido de difundir y perpetuar las nobles doctrinas del maestro insigne (…) la obra de Masferrer “La apoteosis de Masferrer”, Diario Oficial, Suplemento La República, lunes 4 de septiembre de 1933, No. 228, pág. 1, año I. 797 “Asomos de evolución cultural”, Diario Oficial, Suplemento La República, sábado 7 de octubre de 1933, No. 255, pág. 1, año I. El gobierno desde 1931, apoyo toda iniciativa de cultura que se le presentó, organizo un plan de acción bien definido y buscó la unificación de los intelectuales. 798 “El homenaje al maestro Alberto Masferrer”, Diario Oficial, Suplemento La República, lunes 14 de agosto de 1933, No. 212, pág. 1, año I. 799 800 Ídem. 232 merece conservarse como un tesoro de la Nación para que en ella, como un ejemplo, se inspire la juventud y sirva de estímulo para la forja del porvenir.801 La República argumentó que, incluso, si no se hubiese hecho la petición por parte del comité de publicar las obras completas de Masferrer, Martínez, la hubiese hecho suya.802 La Prensa, por su parte estableció que Masferrer fue un paladín y defensor de las clases desheredadas del país, por las cuales nunca nadie se interesó y que en su clarividencia de apóstol previo, quiso evitar con admoniciones y advertencias la catástrofe social de enero y febrero de 1932, las cuales lastimosamente fueron desatendidas.803 Bajo esta misma línea de acción, el comité pro-homenaje de Masferrer adquirió una buena cantidad de ejemplares del folleto del “Mínimum Vital” para repartirlo gratuitamente entre la población y de esta forma difundir ampliamente la doctrina social del maestro. Esta disposición fue interpretada por la Prensa como éticamente correcta para provocar la reunificación nacional, ya que sí era cierto que se quería realizar a Masferrer el primer paso era divulgar sus mejores ideales.804 Sobre este punto, en específico, los miembros del comité, pero, especialmente, Adolfo Pérez Menéndez tuvieron una fuerte y acalorada discusión con Alberto Guerra Trigueros (Director de Patria en ese momento), ya que éste no estuvo de acuerdo con que se repartiesen, entre la multitud, dichas hojas sueltas. Pérez Menéndez acusó a Trigueros de querer acaparar las ideas del maestro, y le manifestó que Masferrer no tenía dueño y que por lo tanto podían distribuirlas.805 801 Ídem. 802 Ídem. “En el primer aniversario de la muerte de Masferrer”, La Prensa, lunes 4 de septiembre de 1933, No. 6,830, pág. 1, año XXI. 803 “Folletos del Mínimum Vital serán repartidos”, La Prensa, lunes 4 de septiembre de 1933, No. 6,830, pág. 1, año XXI. 804 Adolfo Pérez Menéndez, “Masferrer multitudinario o elusino”, La Prensa, jueves 7 de septiembre de 1933, No. 6,833, págs. 1 y 6, año XXI. 805 233 En consecuencia, Guerra Trigueros,806 publicó un editorial titulado “Un manantial que fluye”, el cual no nos fue posible encontrar, pero que sabemos existió por el artículo de Pérez Menéndez titulado “Masferrer multitudinario o elusino” en el cual defendió a los miembros del comité que, aparentemente, fueron agredidos con palabras groseras e hirientes de Trigueros. Por su parte, estos le contestaron que él no tenía la administración exclusiva del legado de Masferrer.807 En este contexto, Salarrué le manifestó a Pérez Menéndez que este juicio no debía tomarse en “serio” viniendo de quién venía y en donde había aparecido. Salarrué le decía que Trigueros al publicar dicho artículo sólo se había desacreditado a sí mismo y al diario en el que escribía,808 que era precisamente Patria el periódico donde Masferrer desarrolló su doctrina vitalista. Este debate a primera vista parece extraño y hasta fuera de lugar, ya que todos eran discípulos de Masferrer, pero era debido a que según Pérez Menéndez, Guerra Trigueros, afirmaba que el homenaje a Masferrer le había parecido demasiado oficial, cuestión que queda claramente establecida en las siguientes palabras de Castellanos Rivas: “con insistencia que parece maliciosa, Guerra Trigueros, en su desdichado editorial tantas veces referido subraya mucho que el homenaje a Masferrer fue oficial, muy oficial y no sé cuántas veces oficial”. Castellanos Rivas aclaró que desde su punto de vista esto no era cierto, en lo que estrictamente se entendía por “oficial”, ya que consideró que la participación del gobierno se redujo a conceder una banda militar de música y la orquesta sinfónica de los Supremos Poderes, el vuelo de un avión y franquicia postal ilimitada a favor Adolfo Pérez Menéndez, “Carta inofensiva a Salarrué: los puntos sobre las jotas” La Prensa, martes 12 de septiembre de 1933, No. 6,837, págs. 1 y 8, año XXI. Guerra Trigueros fue un poeta y empresario nicaragüense, propietario del periódico Patria, quien según las propias palabras del comité consideró que Pérez Menéndez, Vargas Morán y otros intelectuales que formaron posteriormente el “Grupo Masferrer” no eran “dignos” de tomar parte del homenaje a Masferrer a lo que este grupo le contestó que él lo único que quería era monopolizar la obra de Masferrer como sí se tratara de un coto cerrado para su uso “exclusivo” y “excluyente”, como sí se tratara de un bien inmueble al que se debía explotar. 806 Mario Vargas Morán, “Elogio de una vida inútil” (respuesta a Guerra Trigueros), viernes 8 de septiembre de 1933, No. 6,834, pág. 3, año XXI. Morán critico a los detractores de Masferrer por tener una envidia malsana, incapaces, de poder admitir la nobleza, inteligencia, y lealtad en el maestro. 807 Jacinto Castellanos Rivas, “El homenaje a Masferrer y Guerra Trigueros” La Prensa, lunes 11 de septiembre de 1933, No. 6,836, págs. 1 y 8, año XXI. 808 234 del comité para que sus miembros pudieran realizar sus labores, todo enfatizó, a solicitud del mismo comité, con que, cualquiera que hubiese sido la intención de recalcar lo de “oficial” había sido aclarada.809 Como puede observarse hasta aquí, la cuestión se complejiza para determinar quién tenía la razón, porque, en realidad, el gobierno de Martínez apoyó mucho a los seguidores de Masferrer, pero hay que decir que las actividades de corte masferreriano tal y como se verá en el transcurso de este capítulo, fueron llevadas a cabo en intima cooperación entre el Estado y los intelectuales, lo que nos lleva a concluir que ambos tienen cierta parte de razón, en el sentido de que el gobierno de Martínez apoyó indiscutiblemente muchas políticas vitalistas-teosóficas de forma oficializada, pero, en muchas ocasiones, las iniciativas surgieron desde los intelectuales mismos. Sostenemos, además, que esto de ningún modo derriba nuestra tesis de que hubo una “oficialización” de Masferrer, sino que prueba que hubo un verdadero proyecto de Nación en donde interactuaron muchas fuerzas sociales que se pusieron a trabajar de forma conjunta para alcanzar objetivos comunes en torno a la figura de Masferrer, pero que hasta cierto punto podían ser desacreditadas por ser auspiciadas por el régimen, cuestión, que definitivamente empezó a marcar tendencias, ya que algunos de ellos, incluso, pertenecían a las filas del gobierno810 y otros simplemente eran afines. Pero también hay que decir, en honor a la verdad, que Martínez siempre fue un gran admirador de Masferrer e incluso llegó a ser, como veremos en el capítulo IV, su colaborador en el periódico Patria. Para los intelectuales, en definitiva, la obra de Masferrer no era apropiable ni registrable por nadie, pertenecía al pueblo entero de la Nación y el hecho de que 809 Ídem. Adolfo Pérez Menéndez, “Carta inofensiva a Salarrué: los puntos sobre las jotas” La Prensa, martes 12 de septiembre de 1933, No. 6,837, págs. 1 y 8, año XXI. “Uno de los pecados más graves que yo encuentro en Guerra Trigueros es su feroz intolerancia de Santo Blanco. Alberto nunca ha pecado y se mantiene albo y puro como un cordero pascual, lo cual equivale a decir que es un hombre sin conexión con la vida (…) Alberto necesita unas nalgadas espirituales, lo más enérgicas que se puedan, para que salga definitivamente de su camarín de San Luis Gonzaga y venga a salpicarse un poco con el fango de la vida, para que trate de dejar pedacitos de su piel ascética en las zarzas del mundo. Porque no se vive de ninguna manera con solo conjugar el verbo “vivir”, y escribirlo con mayúsculas, sino única y esencialmente, mezclándose a los dolores de la muchitanga”. 810 235 Trigueros hubiese comprado la empresa y talleres tipográficos de Patria no significaba que había comprado por el mismo precio el espíritu de Masferrer. Además, le recordaron que la doctrina del maestro establecía que tenía que hacerse un reparto equitativo de la riqueza y que los propietarios de empresas comerciales e industriales como él tenían el deber de sustituir la explotación a la cual tenían sometida a la población, por la búsqueda de su mejoramiento social: 811 El Señor Guerra Trigueros, “propietario” en grande, acaparador de dinero, detentador de riqueza inútil, puesto que tiene más de lo que necesita, que ha traspasado el “límite” que señaló en su doctrina del “mínimum vital” el maestro, que pertenece, atado a ellas con los indestructibles lazos de la traición y la herencia, a las familias ricas y poderosas que forman la plutocracia salvadoreña (…) es la “negación viva” de la doctrina de Masferrer (…) ¿En dónde están las obras realizadas por ese masferreriano puro?812 Los ataques a los intelectuales y a Masferrer fueron diversos, los homenajes, incluso, quisieron ser saboteados por elementos aparentemente “ultramontanos”, por lo que Pérez Menéndez publicó un manifiesto titulado: “Un reto a los enemigos embozados de don Alberto Masferrer”, mediante el cual los invitaba a que se debatieran públicamente sus ideas y que se abstuvieran de seguir difamando al maestro. Incluso, se hizo circular un anónimo el cual constituyó una respuesta a dicho manifiesto, en el que se cuestionaba la calidad de “intelectuales” de los masferrerianos, ya que, el mismo, sostenía que ellos se la habían adjudicado, y que no tenían por escribir uno que otro artículo en los periódicos 813 El documento, además establecía que Masferrer de ningún modo fue un guía o un apóstol, que además de insigne literato, no fue nada y que todo lo que escribió, lo hizo sólo para ganar reconocimiento personal, contradiciéndose en muchas ocasiones. En el aspecto político-social, se le acusaba de haber propagado un solapado comunismo que sólo había traído consigo, muerte, sangre y fuego y que su obra no fue más que una música literaria que arruinó a la patria.814 “Masferrer, Guerra Trigueros y nosotros”, La Prensa. miércoles 13 de septiembre de 1933, No. 6,838, págs. 1 y 5, año XXI. 811 812 Ídem. “Continua la perversa labor de zapa contra Alberto Masferrer”, Diario del Salvador, domingo 20 de agosto de 1933, No. 12,256, pág. 1 y año XLVI. 813 814 Ibíd., lunes 21 de agosto de 1933, No. 12,257, pág. 2, año XLVI. 236 Las discusiones fueron muy acaloradas, Pérez Menéndez, en respuesta escribió un artículo titulado: “¡Un momento!, señor sociólogo”, en el que aludía a una conversación que tuvo con Victorino Ayala, en la que éste, en hipótesis, le habría manifestado de forma despectiva que no creía en las ideas de Masferrer por estar calcadas de las doctrinas de la India que comulgaban con el comunismo. Ayala, en su afán de aclarar, dijo que él no fue el autor del ya referido anónimo y afirmó lo siguiente:815 Tratando de la ideología del señor Masferrer dije, más o menos al licenciado Menéndez: (…) el vitalismo del señor Masferrer tiene tendencias al comunismo absoluto (…) en ese programa vi la cláusula tendiente a combatir la propiedad particular (…) realmente me atreví a decirle que juzgaba exagerados los elogios que se hacía del escritor.816 Pérez Menéndez calificó la actitud del jurista como de intolerante y tendiente a confundir el criterio de los lectores, ya que sus opiniones provenían de una ignorancia enciclopédica a tal grado que confundía el comunismo con la filosofía india, a lo que él replicó con la frase: “¡Mucho cuidado con calumniar la teosofía señor sociólogo!”817 A pesar de los diversos ataques, el espíritu masferreriano perduró durante presidencia de Martínez. En el tercer aniversario de su muerte, La Prensa expresó que existía una posición dicotómica de los intelectuales salvadoreños frente a su figura, unos elevándolo a la categoría de héroe mitológico del pensamiento y otros que le negaban tal calidad de forma excesivamente apasionada. La Prensa lanzó una crítica a sus seguidores estableciendo que ellos, aunque de forma bien intencionada, le habían hecho mucho daño al llamarlo “apóstol”, al tratar de convertirlo en un icono sagrado.818 Ellos creían que a un “ídolo” no se le podían perdonar las caídas y “Carta del Dr. Ayala”, Diario del Salvador, miércoles 23 de agosto de 1933, No. 12,258, págs. 1 y 5, año XLVI. 815 816 Ídem. “El Dr. Pérez Menéndez le contesta al Dr. Ayala”, Diario del Salvador, jueves 24 de agosto de 1933, No. 12,257, págs. 1 y 6, año XLVI. 817 Francisco Lara, “Mi oración a Alberto Masferrer”, Prisma, Santiago de María, Usulután, jueves 4 de septiembre de 1938, No. 78, pág. 3, año II. La opinión sobre que existió una verdadera deificación de la figura de Masferrer no es exagerada, incluso, en la celebración del octavo centenario de su muerte se publicó un editorial titulado: “Mi oración a Alberto Masferrer” en donde 818 237 las rectificaciones propias de un ser humano y que Masferrer si bien es cierto que luchó desinteresadamente por los intereses del pueblo, también rectificó y hasta fracasó en algunos aspectos.819 Uno de los más grandes logros que le atribuyeron es que fue un civilizador incansable, ya que creía que la cultura no debía ser un privilegio de pocos, ni mucho menos un entretenimiento para eruditos desocupados, sino un factor de desarrollo al servicio de la sociedad, ya que de lo contario, la cultura, sólo sería una forma de sibaratismo infecundo de intelectuales decorativos, a los cuales combatió con su apotegma lapidario: “saber es hacer; el que no hace no sabe”. 820 Al mismo tiempo, criticó a los detractores de Masferrer llamándoles “inquisidores” e “intolerantes”, que desacreditaban al país. La respuesta correcta era, pues, entender a Masferrer en su exacta magnitud de hombre que luchó por redimir espiritualmente al país. 821 3- El Grupo Masferrer y el indigenismo, hacia la búsqueda de una identidad nacional 3.1- Día del indio: El Grupo Masferrer procuró estrechar las relaciones entre los intelectuales hispanoamericanos,822 construyendo así lazos de amistad con otras personalidades su autor manifestaba que fue un iluminado que sentó los principios de una nueva época cultural. Además consideraba que su obra no había sido dimensionada en su verdadero merito creador y redentor. A continuación reproduzco un párrafo de dicha oración: “Tu excelso espíritu tiene el poder de la ubicuidad, y cada nuevo corazón que vaya sabiendo de tu obra, de tu bondad inquebrantable e indiscutida, sentirá que tu ser dilecto se encarnara en él. Moriste para llegar al corazón humano de nobles sentimientos. Ante este luminoso altar me arrodillo humildemente, y te invoco con esta mi oración”. “El tercer aniversario de la muerte de Masferrer”, La Prensa, miércoles 4 de septiembre de 1935, No. 7,824, pág. 3, año XXI. 819 Quizás habría que matizar este pensamiento con lo que dice José Martí en su ensayo Nuestra América, Edición electrónica Rincón Castellano, 1997-2011, pág. 3: “Resolver el problema después de conocer sus elementos, es más fácil que resolver el problema sin conocerlos (…) conocer es resolver”. 820 “El tercer aniversario de la muerte de Masferrer”, La Prensa, miércoles 4 de septiembre de 1935, No. 7,824, pág. 3, año XXI. 821 “El Grupo Masferrer”, Diario Oficial, Suplemento La República, sábado 14 de octubre de 1933, No. 260, pág. 1, año I. 822 238 del continente; se forjaron el ideal de levantar las agobiadas banderas del arte nacional y revalorizar el folklore salvadoreño, ya que una de sus misiones era liberar al pueblo de la alienación de culturas exóticas, es decir, buscó la construcción de una nueva identidad nacional en base a elementos indígenas que, paradójicamente, estaba complementada en muchos aspectos por una ideología foránea como lo fue la teosofía. Por su parte, la postura del gobierno de Martínez ante la formación de la referida institución, fue hacer votos para que perdurara en sus tendencias.823 La iniciativa de celebrar el Día del indio fue percibida por el periodismo del país, como socialmente noble y patriótica, ya que exaltar los valores autóctonos del pueblo era considerado como una tarea que todos los países cultos de la Tierra estaban obligados a realizar para reconstruir su propia personalidad, es decir, su pasado histórico, sus orígenes, sus idiosincrasias y sus características particulares. El objetivo que perseguía el Grupo Masferrer era, pues, rescatar del olvido todo lo que ya parecía extinguido por las posteriores civilizaciones que al superponerse a la autóctona, habían ocultado, por lo cual era imperativo rescatar esos gloriosos vestigios indígenas que aún se percibían en países como México y Perú, civilizaciones que se consideraban tan avanzadas como las de Europa y Asia. 824 La celebración del Día del indio coincidió con las celebraciones que en México y otras poblaciones de América se realizan en conmemoración a la Virgen Morena de Tepeyac. La Virgen de Tepeyac, según la tradición mística, impulsó a los mexicanos a la realización de su independencia. Toma su nombre del mito que relata su aparición al indio Juan Diego en una colina llamada Tepeyac, ésta es considerada como un símbolo de la identidad nacional mexicana bajo la figura de una madre que unió a dos castas, la indígena y la española en una sola, la mestiza. Los indígenas mexicanos la veneran devotamente, porque consideran intercedió por ellos en la liberación de sus opresores.825 823 Ídem. “La próxima celebración del día del indio”, La Prensa, martes 10 de octubre de 1933, No. 6,869, pág. 3, año XXI. 824 Jorge E. Traslosheros, “Señora de la historia, madre mestiza, reina de México. La coronación de la virgen de Guadalupe y su actualización como mito fundacional de la patria, 1985”, Revista Signos históricos, enero-junio, No. 7, Universidad Autónoma – Iztapalapa, México, 2002, págs. 115, 117. 825 239 Por esta razón era que a juicio del Grupo Masferrer, era la época más propicia para su realización. Se coordinó que para la ocasión bellas señoritas de San Salvador lucieran bonitos atavíos típicos de las indígenas con el propósito de enaltecer el traje de los primitivos moradores,826 incluso, la esposa de Adolfo Pérez Menéndez, Margot de Pérez y una miembro del grupo, Otilia Paz Pinto, participaron en el evento. Las participantes lucieron trajes compuestos de una falda rallada y blusas de distintos estilos multicolores, también llevaron sus cabellos trenzados a la usanza indígena y utilizaron accesorios autóctonos como aretes, pulseras y collares:827 Porque el indio, ese infatigable generador de riqueza para el terrateniente, para el administrador de fincas y en general para la gente adinerada, no conoce todavía el sabor del aprecio, ni el matiz del estímulo; porque duro y triste, es reconocerlo contrariamente a lo instituido por nuestra administración política, hay entre nosotros numerosas conciencias todavía, sobre las cuales se proyecta hondamente la sombra absolutista del “feudalismo”. Se trata, nada menos, de que las clases pobres, trabajadoras, que entre nosotros representan la gran mayoría aborigen, tengan la porción de bienestar, de educación y de contento, que en justicia le corresponde.828 Para exaltar aún más dicho evento, llegó al país una caravana de señoritas guatemaltecas,829 las cuales vistieron trajes autóctonos de distintas regiones de aquella República y para una mejor organización se contó con la ayuda de una de las personas más competentes en asuntos indígenas, la norteamericana Lilly Jongh de Osborne, quien en esa época, era considerada por otros especialistas en la materia, como una autoridad en la idiosincrasia de los pueblos indígenas. Cabe mencionar “La señora de Osborne autoridad en temas indígenas opina sobre el día del indio”, La Prensa, jueves 26 de octubre de 1933, No. 6,875, pág. 1, año XXI. 826 “Celebración del día del indio”, La Prensa, lunes 30 de octubre de 1933, No. 6,879, pág. 5, año XXI. 827 “En el día del indio”, Diario Oficial, Suplemento La República, martes 12 de diciembre de 1933, No. 310, pág. 1, año II. 828 “Día del indio”, La Prensa, miércoles 12 de diciembre de 1933, No. 6,915, pág. 5, año XXI. “En Guatemala se está generalizando la costumbre de asistir a muchas fiestas llevando trajes típicos, cosa que da una magnífica impresión en el colorido y aumenta el interés por lo regional. Después de las diversas festividades celebradas acertadamente por el “Grupo Masferrer” estamos seguros que nuestras bellas mujeres darán siempre la preferencia a los trajes indígenas para asistir a los actos sociales, a los paseos y a todos los lugares públicos, donde podrá ser admirada su incomparable gracia”. 829 240 que conocía del tema, porque poseía una variada colección de trajes típicos de toda Centroamérica.830 Los colaboradores del periódico La Prensa, aseguraron que la folklorista hacía más de veinte años venía trabajando en la elaboración de temas que se relacionaban con la vida precortesiana de los pueblos de la región. Sus trabajos eran muy bien valorados por revistas técnicas de seriedad y se le consideraba como la persona más enterada de temas americanistas que en esa época, tenían muy pocos seguidores, incluso, dentro de las llamadas gentes “cultas”.831 Su casa estaba decorada con muchos objetos indígenas llamativos, sin caer por eso en extravagancias de modernismos o ultraísmos precolombinos. En ese momento, la señora de Osborne se encontraba finalizando un extenso estudio para la revista Archeology de Washington, que versaba precisamente sobre trajes indígenas de Centroamérica, principalmente los de Guatemala, pero además conocía todo lo que tenía nexos con los indios y su civilización.832 Lilly Jongh de Osborne conoció a profundidad las culturas guatemalteca y salvadoreña, muestra de ello, es que publicó varias producciones referentes a ambas naciones como por ejemplo: Four keys to Guatemala (1939), Folklore, supersticiones y leyendas de Guatemala (1965), Así es Guatemala (1960), Breves apuntes de la indumentaria indígena en Guatemala (1964), Indian costumes of Guatemala (1966) y Four keys to El Salvador (1956), la cual podría traducirse como Cuatro claves para El Salvador. En el prefacio del libro, la autora comenta que vivió nueve años en El Salvador y que la intención de escribir dicho libro, era que el pueblo estadounidense conociera la cultura salvadoreña.833 En la obra, la autora denota un gran conocimiento de la cultura indígena salvadoreña así como de la historia general de El Salvador en diversas épocas. En la “La señora de Osborne autoridad en temas indígenas opina sobre el día del indio”, La Prensa, jueves 26 de octubre de 1933, No. 6,875, pág. 1, año XXI. 830 831 Ídem. 832 Ídem. Lilly de Jongh Osborne, The four keys to El Salvador, Funk and Wagnalls Company, USA, 1956, preface, V. 833 241 introducción se refiere al país como Cuscatlán y proporciona sus datos generales como población, ubicación, extensión, configuración volcánica, etc. La estructura capitular de la obra evidencia su competencia referente a los elementos constitutivos de la identidad nacional, por ejemplo, en el capítulo I aborda la época precolombina y la historia de los ancestros indígenas, sobre todo, de los mayas y los lencas. Además, explica cómo se dieron las primeras migraciones mexicanas al país y cuáles fueron sus primeros artefactos. La norteamericana hizo una importante aproximación a la vida de los pueblos indígenas e incluso habló de su mezcla con la raza negra, en fin, tocó diversos tópicos referentes al indigenismo –sobre los que es imposible profundizar en este trabajo,– pero que tienen que ver con sus costumbres, textiles, comercio, cerámicas, bailes, música, arte, pintura, literatura, etc. También abordó aspectos de la conquista y colonización de los antiguos aborígenes. En el siguiente párrafo nos explica el significado de la palabra Cuscatlán: The name Cuzcatlán is derived from the Indian, meaning “Lands of precious things”. The Indian name of this valley is Quetzalcoatitán, meaning “Place of the plumes serpent”, but the Spaniards calle it Valle de las Hamacas, and town, Villa de San Salvador.834 El pintor regionalista Miguel Ortiz Villacorta835 por su parte, aseveró con preocupación que los trajes indígenas en el país habían caído casi en el desuso con excepción de algunos pueblos originarios. Además, criticó que no existieran en ese momento, instituciones que velaran por la conservación y difusión de la cultura indígena y que debido a ello sitios como: Acalhuaca, San Sebastián, Cuscatancingo y Mejicanos ya no usaban sus vestidos. Parte del problema, según él, era el influjo de la occidentalización. Asimismo, creía que los trajes más vistosos que quedaban eran 834 Ibídem, pág. 25. Miguel Ortiz Villacorta: nació en San Salvador en 1887. Fue hijo adoptivo del también pintor Mauricio Villacorta. Fundó y dirigió una Academia de Bellas Artes en San Salvador. Estudio arte en Europa junto a Carlos Alberto Imery, específicamente, estudió pintura en la Real Academia de Roma (Italia) y en Paris. En 1923 abrió una Academia de Artes en Santa Ana. De 1929 a 1930 se desempeñó como Director de la Escuela Nacional de Bellas Artes. En 1936 obtuvo un premio en la categoría de retrato en la Exposición Mundial de Pintura en Sevilla, España. Su línea de pintura eran los retratos y los paisajes fue llamado “ladrón del sol” y “gran dominador de la luz y el color” por la calidad de su trabajo académico y clásico. 835 242 los de Panchimalco y que el traje indio salvadoreño era único en Centroamérica, es decir, no se parecía a los de los demás países de la región.836 Ortiz Villacorta también dijo que aunque no era indígena ni español un traje que caracterizaba la salvadoreñidad, era el de “mengala” que en el pasado utilizaban las mujeres de alta sociedad en los bailes y creía que debía velarse porque la música indígena no se adulterara con otros ritmos ajenos:837 Por eso el movimiento de los masferreristas entraña mucha importancia y debe verse con simpatía entre todos los que anhelamos reivindicar lo nativo en sus distintas manifestaciones (…) los trajes de las indígenas cercanas a San Salvador se hunden en el olvido…838 Miguel Ángel Espino también aseguró a los editorialistas de La Prensa que la pianista Mercedes Viaud Rochac era experta en música nativa. Al ser entrevistada por dicho periódico, ella explicó que en sus investigaciones había presenciado y hasta analizado algunas danzas autóctonas, llegando a elaborar una clasificación propia según sus regiones.839 Según la folklorista, los tres bailes más importantes del país eran los de Ízalco, Jayaque y Comasagua, cada uno con características especiales que los diferenciaban entre sí.840 Viaud Rochac explicó que el de Ízalco era un movimiento asimétrico de “saltitos” parecido al fado de los brasileiros841 y que su más sobresaliente “son” era “Traje indio salvadoreño no se parece al de otros países de Centroamérica”, La Prensa, miércoles 1º de noviembre de 1933, págs. 1 y 3, año XXI. 836 837 Ídem. 838 Ídem. Sobre la producción etnomusical de Mercedes Viaud Rochac no hemos podido encontrar ninguna documentación física e ignoramos de su existencia, sólo hemos contado con la entrevista aparecida en el periódico La Prensa. 839 “Nuestros bailes típicos son tres: el de Ízalco, el de Juayua y el de Comasagua”, La Prensa, jueves 2 de noviembre de 1933, No. 6,881, pág. 3, año XXI. 840 El Fado es el género musical más conocido a nivel internacional de Portugal. Es un canto donde se expresan experiencias nostálgicas o de fatalismo. Muy probablemente aunque no podemos asegurarlo, Viaud Rochac se refirió al fado como brasileño, debido a que este país fue conquistado y colonizado por Portugal y su música también ha sido integrada como parte del acervo cultural de los brasileños o quizás se quiso referir a un género musical propiamente brasileño utilizando incorrectamente el término. Sobre su origen ver “La cultura en la enseñanza del portugués, lengua extranjera: Análisis y propuestas de investigación”, Anuario de Estudios Filológicos, vol. XXV, 2002, pág. 128. 841 243 el de las mazorcas que ejecutaban, precisamente, a finales de año en un rogón en medio de la noche. La dinámica era que giraban alrededor de la fogata con una mazorca en la mano que, representativamente hablando, realizaban como un tributo a la diosa de la fecundidad cuando las cosechas estaban casi por finalizar. Todo el ritualismo era puro, sin influencias extrañas, aseguró. 842 Sobre la danza de Jayaque, al compararla con la de Ízalco, dijo que era más rítmica y elegante, los movimientos estaban salpicados con un “valse” y el baile no era en ronda, sino que en pareja, de forma tranquila. Este baile se efectuaba en enero. Sobre las melodías de Comasagua, expresó que contenían remembranzas de las luchas entre los moros y los cristianos, que evocaban, por supuesto, las contiendas y el sometimiento de su raza a la de los conquistadores. Viaud Rochac había coleccionado todos estos “sones” y los había interpretado en piano. Desde su punto de vista, María de Baratta era una de las mejores expositoras del “nahualismo” que consistía en una especie de leyenda donde todo se narraba melódicamente:843 La señorita Viaud Rochac está de acuerdo con el Grupo Masferrer. Estima que es indispensable que se organice el festival indígena, a fin de conservar lo nuestro. Desde hacía tiempo se imponían tales actos, pero quizá por ausencia de un impulso bien orientado, las tendencias vagas se pierden en el espacio o en la inercia del medio.844 Efectivamente, María de Baratta junto a Jesús Castillo845 de Guatemala, eran los principales recuperadores del folklorismo musical maya en ese momento. La “Nuestros bailes típicos son tres: el de Ízalco, el de Juayua y el de Comasagua”, La Prensa, jueves 2 de noviembre de 1933, No. 6,881, pág. 3, año XXI. 842 843 Ídem. 844 Ídem. Jesús Castillo: fue un etnomusicólogo guatemalteco nacido en la villa de San Juan Ostuncalco en 1877. Desde niño tuvo una especial inclinación por la música, su profesor de violín fue Francisco Morales, sus profesores de piano fueron el mexicano Fernando Soria, Miguel Espinoza y Rafael Guzmán. Profundizó sus estudios en música vernácula y fue fundador de la Opera Quiché Vinak. El gobierno de Francia le otorgó la condecoración “Las palmas académicas” en 1925 y la banda del Ejercito de los Estados Unidos ejecutó su música en 62 conciertos realizados en Europa. Su música fue propagada en México por el Grupo Ariel, en Alemania por la mexicana Ángela García Peña, Rodríguez Beteta la dio a conocer en España e incluso el “Instituto de Cooperación Intelectual” le solicitó su música. Entre sus obras se encuentran la ópera Nicté y el Minueto maya. Ver: periódico Cronos de Quetzaltenango 26 y 27 de febrero y 2 y 3 de marzo de 1936, pág. 3 845 244 pregunta central que los redactores de La Prensa le formularon a la etnomusicóloga fue ¿Existe realmente una música indígena? Baratta, les contestó que creía que no solamente música sino también arquitectura, escultura y danza. También les aseguró que en esos momentos se estaba tratando de resucitar su arqueología. Todo esto implicaba un novedoso movimiento cultural que trataba de rescatar la cultura indígena en sus múltiples facetas, por ejemplo, en el campo de la antropología cultural se estaba tratando de reconstruír sus ceremonias religiosas y costumbres.846 María de Baratta había desarrollado una teoría propia de la música indígena mediante la recolección de instrumentos indígenas antiguos y al parecer uno de sus mayores descubrimientos fue la escala tetrafónica. Sin entrar en mayores detalles dijo que la música indígena había atravesado por tres períodos: 1) el precortesiano, 2) el de interpolaciones y 3) el moderno. El primero, era el período musical desarrollado antes de la conquista de los españoles, el segundo, era el que se revelaba en diversos pasajes de la historia, en donde se combinaban hechos de la vida española e indígena y el moderno, era el que se estaba desarrollando en ese momento, marcado por un profundo ritualismo y misticismo indígena.847 Jesús Castillo por su parte, había realizado un trabajo muy similar en Guatemala. El etnomusicólogo creía que la música indígena de su país se encontraba dividida así: 1) la música quiché tetrafónica, ejecutada principalmente en flautas de caña, chirimías y marimbas, que era un tipo de música que tenía un tono melancólico y misterioso y que era propia de lugares como: Nahualá, Chichicastenango y Momostenango, 2) La música del reino Cachiquel, la cual tenía una predominancia en el espíritu de guerra de los pueblos de la región, tales como: Tecpán, Rabinal y Sololá. Castillo había descubierto que en la música cachiquel había una característica especial y era que poseía una escala trunca mayor y 3) era la música de cinco notas de modalidad mayor, a la cual faltaban los grados 6º y 7º para “La música india en su evolución ha pasado por tres períodos”, La Prensa, domingo 5 de noviembre de 1933, No. 6,883, pág. 3, año XXI. 846 847 Ídem. 245 poder formar una escala completa y era ejecutada por la raza “Mam”. El maestro Castillo tenía otras clasificaciones, pero ésta era considerada la más importante. 848 Ahora bien, Rafael Lara-Martínez y Rick MacCallister en un extenso trabajo titulado El legado náhuat-pipil de María de Baratta señalan que la folklorista realizó sus más grandes hallazgos en el contexto de la presidencia de Martínez en un intento de crear una identidad nacional homogénea, es decir, en donde blancos e indígenas se vieran como iguales.849 En Guatemala también fueron muy bien recibidas las políticas indigenistas desarrolladas durante la presidencia de Martínez, por ejemplo, El Liberal Progresista850 publicó un interesante artículo denominado “Día del indio” en el cual Mirón Álvarez expresó que el Grupo Masferrer había organizado un concurso sobre literatura vernácula con fines marcadamente exáltativos:851 Cuando leí el telegrama que daba cuenta de tal determinación de la juventud intelectual de aquel hermano país, no deje de sentir una extraña sensación, mezcla de alegría, de entusiasmo y de enternecimiento (…) después de cuatro siglos de explotación y látigo agravado por el desprecio de las clases que se llamarón a sí mismas “superiores” y por ciertas alusiones literarias esporádicas que involucraban sentimientos aguados a la sombra de la gran desgracia de la raza, resulta casi una reivindicación este festejo.852 Esta celebración para el periodista guatemalteco, significaba una verdadera recuperación de la identidad indígena que le cantaba a los campos y a las montañas donde caminaba el indio –hijo legítimo de las tierras– a las cuales se encontraba profundamente vinculado y que se expresaba en las últimas obras literarias que se venían realizando en Centroamérica por autores como Salarrué y Alfredo Espino. F. Javier Ralón, “La personalidad del maestro Jesús Castillo”, Cronos, Quetzaltenango, Guatemala, viernes 28 de febrero de 1936, No. 1114, pág. 3, año IV. 848 Rafael Lara-Martínez, et. al, El legado náhuat pipil de María de Baratta, Edición fundación Acces Arte, 1ª Ed. El Salvador, 2012, pág. 10. 849 “Llega música india de Guatemala”, La Prensa, martes 31 de octubre de 1933, No. 6,879, pág. 1, año XXI. Adolfo Pérez Menéndez, recibió desde Guatemala, la mayor parte de la obra musical del maestro Jesús Castillo la cual, fue ejecutada al mismo tiempo que otras producciones autóctonas de compositores salvadoreños que habían desarrollado la tendencia indigenista. 850 “Es acogida con simpatía en Guatemala una iniciativa del Grupo Masferrer”, La Prensa, sábado 28 de octubre de 1933, No. 6,877, pág. 1, año XXI. 851 852 Ídem. 246 En base a esta tendencia surgió una nueva “generación literaria” convencida de que el porvenir artístico del istmo se encontraba en las tierras,853 por ejemplo, la poesía de Alfredo Espino que se encontraba contenida principalmente en Jícaras Tristes fue visualizada durante la presidencia de Martínez como símbolo de reivindicación del paisaje típico olvidado y de la raza morena. El Diario Nuevo, en 1936, publicó algunos de los versos de Espino tales como: “Arromas de tierruca”, “El retorno”, “El río”, “El ojo de los bueyes”, “Bajo el tamarindo” y “El árbol”, que cumplirían con esta inclinación literaria.854 Otro trabajo que encaja a la perfección con este criterio es el libro de Amparo Casamalhuapa El joven sembrador. Cuando Claudia Lars hizo una crítica sobre él sostuvo que tenía una íntima relación con en el Mínimum Vital de Masferrer: Con vestido humilde, como el hombre del campo que aguanta míseras y se ocupa de trabajos rudos y cotidianos, así nos llega este libro de dolor y de esperanza escrito por la mano valiente de una mujer (…) Amparo Casamalhuapa conoce esta amarga realidad mejor que muchos porque sus ojos la han visto de cerca y sus manos la han palpado (…) y entonces su voz, su recia voz de verdades eternas, le grita al cuerpo débil que vaciló un instante: “Es tiempo de vivir construyendo la vida”.855 Sobre la expropiación de la tierra a los indígenas, Helio Gallardo cree que en países como Perú, El Salvador y Guatemala, el problema de la tierra ha tenido siempre un doble origen: 1º) a partir de la conquista y colonización cristiano-católica mediante la cual un señor español ejerció un pleno derecho sobre las tierras, las cuales declaró sin dueño, porque consideró al indio como una no-persona y 2º) a partir del sistema burgués liberal, en donde el indio es reducido a peón agrícola y es visualizado como enemigo del progreso. Ambos constituirían ideologías de dominación mediante las cuales se legitimaría la desposesión856 y aunque la presidencia de Martínez, podría enmarcarse en esta última tendencia, en el siguiente 853 Ídem. Ver Diario Nuevo, “El genuino cantor del paisaje de Cuscatlán”, (página de antología), lunes 15 de abril 1935, pág. 3 854 Ver Diario Nuevo, Claudia Lars “El joven sembrador” (página editorial), sábado 7 de mayo de 1938, pág. 3 855 Helio Gallardo, 500 años fenomenología del mestizo, (violencia y resistencia), colección análisis, Departamento Ecuménico de Investigaciones, 1ª Ed., Costa Rica, 1993, págs. 31 y 32. 856 247 capítulo veremos cómo estratégicamente efectuó una reforma agraria para tratar de prevenir el colapso de sistema. Ahora bien, en el campo de la literatura esto explicaría por qué se desarrolló una línea “feudo-racialista”857 que intentó posesionarse como crítica hacia el criterio occidental de superioridad de la raza blanca y es por eso que aunque pudiera parecer paradójico, se hibridó a la perfección con la teosofía de base oriental, incluso, en algunas de las logias y revistas esotéricas del país de esa época, podemos encontrar denominaciones estrictamente indígenas.858 Lo que se trataba de derribar, en definitiva, era el concepto mercantilista e inhumano de que el indio no era más que una bestia de carga, al que hipócrita o ingenuamente se le lloraba por poetas y escritores, pero que, en la vida real, estaba abandonado a su triste destino de raza inferior, por lo que la actividad del Grupo Masferrer constituyó una oportunidad para conocer a los escritores centroamericanos nacionalistas. 859 Estas expresiones vernáculas se volvieron una inclinación durante la presidencia de Martínez, cuestión que queda demostrada vigorosamente en la producción realizada hasta 1935. Bajo esta tendencia, por ejemplo, la revista El Salvador, Órgano Oficial de la Junta Nacional de Turismo publicó algunas reseñas sobre celebraciones netamente indígenas como las fiestas de Santiago en Acalhuaca. María de Baratta recopiló la pastorela indígena en lengua náhuatl de los ízalco en 1933. Salarrué asistió al concurso pictórico de Costa Rica en 1935, incluso, LaraMartínez expresa que esta política continuó hasta en los últimos años de la presidencia de Martínez, ya que en 1941 se creó el Comité de Investigación del Rafael Lara-Martínez, et. al, El legado náhuat pipil de María de Baratta, Edición fundación Acces Arte, 2012, 1ª Ed. El Salvador, págs. 11 y 30. Los temas de la literatura indígena eran variados, uno de sus componentes esenciales fue el “campo”, su hábitat natural, por ejemplo: la sombra de los amates, el bálsamo o narraciones sobre animales como el tacuazín o el tunco de monte, Lo racial significa que la temática aborda principalmente la idiosincrasia del pueblo indígena Lara-Martínez incluso piensa que se construyó una “cuzcatlanología” 857 Marta Casaús, Las redes intelectuales centroaméricanas: un siglo de imaginarios nacionales (1820-1920), pág. 106. “Esta interpretación de la fortaleza y vitalidad del pueblo maya y su descendencia directa del pueblo ario, como raza raíz que lo equiparaba a los pueblos de la India y como tales eran los llamados a transformar la humanidad, era una de las ideas compartidas por esta red de pensadores latinoamericanos de la década de 1920 y 1930 influidos por la teosofía”. 858 “Es acogida con simpatía en Guatemala una iniciativa del Grupo Masferrer”, La Prensa, sábado 28 de octubre de 1933, No. 6,877, pág. 1, año XXI. 859 248 Folklore Nacional, lo cual demostraba el innegable interés del gobierno de Martínez por las cuestiones indigenistas.860 El mismo Martínez en una ocasión manifestó: La América es joven y pujante heredera de una grandiosa civilización de sus antepasados. Debemos hacer honor a nuestra cultura ya muerta y extraer de sus cenizas las gemas preciosas para la nueva cultura de nuestros pueblos. El Perú de los Incas, el Popul Vuh de Centroamérica hablan muy alto de aquella cultura que no cede en grandeza a la mejor de los pueblos de la Tierra.861 Es así como en 1941 también se fundó la revista Tzunpame, Órgano Oficial del Museo Nacional de El Salvador, cuyo director fue Tomás Fidias Jiménez.862 La palabra “Tzunpame” es una voz náhuatl-pipil que significa “cumbres”. Es importante mencionar que dicha revista fue financiada por el gobierno de Hernández Martínez.863 De 1941 a 1944 aparecieron publicados diferentes artículos de invaluable importancia para el conocimiento de la cultura indígena, como “Historia del lenguaje primitivo en El Salvador” del mismo Fidias Jiménez, en donde explicó que los habitantes primitivos de El Salvador provenían de los toltecas y que el idioma que predominó originariamente en El Salvador fue el náhuatl, aunque también confluyó con otros idiomas, que permanecían con menos influencia hasta ese momento, como el Lenca, el Ulúa y el Kacchikel, entre otros. En el Rafael Lara-Martínez, et. al, El legado náhuat pipil de María de Baratta, Edición fundación Acces Arte, 2012, 1ª Ed. El Salvador, págs. 17, 22, 89. 860 “Texto pronunciado por el Señor Presidente de la República”, La Nación, San Miguel, jueves 16 de febrero de 1939, No. 4,386, pág. 3, año XVIII. 861 Tomás Fidias Jiménez: nació el 29 de diciembre de 1906 en Ahuachapán, El Salvador. Historiador salvadoreño, realizó muchos y muy variados trabajos sobre arqueología y antropología. Fue miembro de la Comisión de Historia del Instituto Panamericano de Geografía e Historia, Tacubaya, México; Vicepresidente vitalicio de la Academia de la Lengua Azteca, Xochimilco, México. Entre sus obras están: Toponimia Arcaica de El Salvador; Idioma Pipil y Nahuat de Cuscatlán y Tunalán; Nueva Geografía de El Salvador; Apuntes de Mineralogía; Monografía de la Ciudad de Ahuachapán; Monografía de la Ciudad de Santa Ana; Monografía de la Villa de Ataco; Las Piedras Tacitas; El Monolito de Casablanca de Chalchuapa; El Monolito de Cayaguanca; La Estela de Tatzumal; El Dialecto Lenca y sus Relaciones con el Idioma Pipil en El Salvador; Un Punto sobre Ciencia Hierática de los Pipiles; Quetzalcoat; Peregrinación, Fundación y Nominación de la Villa de San Salvador, entre otras. 862 Tomas Fidias Jiménez, “A los lectores”, Revista Tzunpame, Órgano de publicidad del Museo Nacional de El Salvador, (Publicaciones del Ministerio de Instrucción Pública), septiembre de 1941, No. 1, págs. 3 y 4, año I. 863 249 mismo, incluyó un abecedario de la lengua pipil y explicó el uso correcto del acento en dicha lengua.864 De dicho autor, también apareció el artículo “Nomenclatura indígena de algunas especies zoológicas en El Salvador” en donde explicó los diferentes nombres que los indígenas les daban a los animales.865 En 1942 apareció publicado el artículo “Hacia las ruinas de “Campana San Andrés” de Jorge Hurtarte Monzón (Director del Museo en ese año), en el que describió las pirámides de las ruinas de San Andrés y explicó como a través de distintas excavaciones realizadas en dicho lugar, se encontraron diversos objetos como vasos mayas, incenciarios ornamentales de piedra, esculturas de cerámica zoomórficas, tumbas de caciques, etc. Todo lo cual se utilizó para reconstruir sus ceremonias religiosas y estilo de vida.866 En el artículo “Tazumal.–Pampe.–Casa Blanca.–El Trapiche.–Cuzcachapa”, Jorge Larde,867 explicó el carácter arqueológico de la región de Chalchuapa868 y en su artículo “El juego indiano de pelota” explicó como los indios para entretenerse jugaban con pelotas de caucho y que en ese momento todavía existían en varios Tomas Fidias Jiménez, “Historia del lenguaje primitivo en El Salvador”, Revista Tzunpame, Órgano de publicidad del Museo Nacional de El Salvador, (Publicaciones del Ministerio de Instrucción Pública), septiembre de 1941, No. 1, págs. 23, 25 y 31, año I. 864 Tomas Fidias Jiménez, “Nomenclatura indígena de algunas especies zoológicas en El Salvador”, Revista Tzunpame, Órgano de publicidad del Museo Nacional de El Salvador, (Publicaciones del Ministerio de Instrucción Pública), septiembre de 1941, No. 1, págs. 157, 158 y 159, año I. 865 Jorge Hurtarte Monzón, “Hacia las ruinas de “Campana San Andrés”, Revista Tzunpame, Órgano de publicidad del Museo Nacional de El Salvador, (Publicaciones del Ministerio de Instrucción Pública), abril de 1942, No.1, págs. 9 y 10, año II. 866 Jorge Larde y Larín: nació en Santa Ana, El Salvador el 31 de diciembre de 1920 y murió en San Salvador, El Salvador el 8 de mayo de 2001. Historiador, docente y periodista salvadoreño de origen francés. Fue redactor del Diario de hoy en el cual publicó de 1937 a 1993 una serie de artículos muy variados que trataban sobre: historia, lingüística, geología, arqueología y regionalismos salvadoreños y centroamericanos. Entre sus numerosas obras se encuentran: El Salvador, historia de sus pueblos, vías y ciudades 1957, Toponimia autóctona de El Salvador (3 volúmenes) 1975-1977, Orígenes de la fuerza armada de El Salvador 1977 y Paleontología salvadoreña, entre muchas otras. 867 Jorge Larde, “Tazumal.–Pampe.–Casa Blanca.–El Trapiche.–Cuzcachapa”, Revista Tzunpame, Órgano de publicidad del Museo Nacional de El Salvador, (Publicaciones del Ministerio de Instrucción Pública), abril de 1942, No.1, págs. 12-23, año II. 868 250 lugares del país, patios donde se practicó dicho juego, que fue muy parecido al juego de pelota tolteca.869 En 1943 Stanley H. Boggs publicó el artículo “Notas sobre las excavaciones en la Hacienda San Andrés, departamento de La libertad”, en el que explicó que las estructuras encontradas eran de adobe y cemento, las cuales fueron construidas en distintos períodos del pueblo indígena de esa región y además, describió la forma de los distintos montículos encontrados, incluso, presentó varios planos a escala. También se pueden apreciar a través de fotos, algunos objetos de piedra labrada, encontrados en la Plaza Meridional con sus respectivas medidas en centímetros y otros artículos de cerámica como vasijas y ollas. En sus notas finales escribió: 870 El permiso para practicar excavaciones fue amablemente concedido por el Gobierno del General Maximiliano H. Martínez, Presidente de la República. Los miembros de la expedición quedan profundamente agradecidos al Sr. Don Francisco Dueñas D., no sólo por haber dado su permiso para la exploración de las ruinas San Andrés, sino por su ayuda constante e interés en las excavaciones.871 Otro artículo de dicho autor se denominó “Observaciones de la importancia de Tazumal en la prehistoria salvadoreña”, en el cual especificó que en dicho sitio arqueológico se habían llevado a cabo hasta ese momento dos excavaciones, una apoyada por el Instituto de Estudios Andinos y la otra, por el Museo Nacional de El Salvador. Los objetivos de las mismas fueron: 1) recuperar objetos arqueológicos de la zona y clasificarlos según su época que, en términos generales, eran de antes de la conquista, 2) Investigar el nivel cultural de la población indígena que se asentó en dicho lugar y 3) Llevar a cabo una conservación hasta donde fuese posible de las estructuras y artefactos descubiertos para futuros estudios y el turismo en general.872 Jorge Larde, “El juego indiano de pelota”, Revista Tzunpame, Órgano de publicidad del Museo Nacional de El Salvador, (Publicaciones del Ministerio de Instrucción Pública), abril de 1942, No.1, pág. 195, año II. 869 Stanley H. Boggs, “Notas sobre las excavaciones en la Hacienda San Andrés, departamento de La libertad”, Revista Tzunpame, Órgano de publicidad del Museo Nacional de El Salvador, (Publicaciones del Ministerio de Instrucción Pública), octubre de 1943, No. 1, págs. 104-126, año III. 870 871 Ibídem, pág. 124. Stanley H. Boggs, “Observaciones de la importancia de Tazumal en la prehistoria salvadoreña”, Revista Tzunpame, Órgano de publicidad del Museo Nacional de El Salvador, (Publicaciones del Ministerio de Instrucción Pública), octubre de 1943, No. 1, pág. 127, año III. 872 251 Augusto Baratta, quien se desempeñó como Director del Museo Nacional en 1943, también hizo algunos estudios referentes a la cultura indígena, 873 por ejemplo, escribió un artículo titulado “La unidad de medida en nuestra raza aborigen”, en el cual describió, en base a un pasaje del libro Chilám Balám de Chumayel, que los indígenas mayas utilizaban como medidas algunas partes de su cuerpo, sobre todo, en sus trabajos agrícolas para delimitar la tierra y en los cálculos que realizaban sobre los astros. Las medidas eran: el pie, el antebrazo y la palma. Baratta explicó que para medir la tierra, específicamente, utilizaban el pie y los pasos, cuestión que pudo comprobar a partir de las excavaciones hechas en el “Tazumal” por el ya referido arqueólogo Stanley G. Boggs en 1943, al hacer observaciones directas sobre las escaleras y las plantas de los templos.874 En la revista Tzunpame también consta como el gobierno de Hernández Martínez mediante acuerdo No. 1555 de fecha 21 de octubre de 1941, decretó el pago de $300 correspondientes a El Salvador, para el sostenimiento del Instituto Indigenista Interamericano con sede en México875 y complementario a esto también habría que decir que en 1937 el periódico gobiernista Diario Nuevo publicó algunos conceptos del libro El pipil de los Izalcos de Próspero Arauz en el cual el lingüista explicó el significado de algunas palabras indígenas como: Cuscatlán que significa “collar de dientes”, Tepuztlán, que significa “diente de cobre”, Tepuztepec, que significa “cerro del hierro”, maxtle, que significa “taparrabo” o “delantalillo” entre otras palabras indígenas de uso más corriente como tarro o tecomal.876 Alfonso Rochac hizo un trabajo muy similar en su artículo “Ízalco” en el cual expresó que el indio de esa ciudad tenía un traje y una lengua propia. En el mismo Augusto Baratta, “Frases previas por el director”, Revista Tzunpame, Edición dedicada al establecimiento de dicha institución, (Publicaciones del Ministerio de Instrucción Pública), octubre de 1943, No. I, pág. 9, año III. 873 Augusto Baratta, “La unidad de medida en nuestra raza aborigen”, Revista Tzunpame, Órgano de publicidad del Museo Nacional de El Salvador, (Publicaciones del Ministerio de Instrucción Pública), octubre de 1943, No. 1, págs. 89-103, año III. 874 “Acuerdo por medio del cual se manda pagar al Instituto Indigenista Interamericano”, Revista Tzunpame, Órgano de publicidad del Museo Nacional de El Salvador, (Publicaciones del Ministerio de Instrucción Pública), abril de 1942, No.1, pág. 237, año II. 875 Próspero Arauz, “El pipil de los Ízalcos”, Diario Nuevo, sábado 9 de marzo de 1937, No. 962, pág. 3, año IV. 876 252 hizo la traducción al castellano de algunas palabras náhuatl como item que significa boca, ish, que significa ojo, nácas, que significa oreja, iyae, que significa nariz, máhcul, que significa brazo, teguáhea, que significa pierna, igshi, que significa pie, tal, que significa tierra, etc.877 En definitiva, lo que se trató de hacer durante la presidencia de Martínez fue una aproximación a todo tipo de expresión indígena en literatura, música878, pintura,879 arquitectura y hasta en la naciente danza que marcaban un retorno a lo autóctono como una inconfundible orientación estética fundamental para crear los cimientos de un gran movimiento regionalista. La literatura indigenista llegó a considerarse por los intelectuales de ese momento como una disciplina en construcción y arquetípica de la identidad centroamericana, pero es muy importante aclarar que esta tendencia no nació en la presidencia de Martínez sino que ya venía desde antes: Los trabajos de intelectuales como Miguel Ángel Espino, María de Baratta, Juan Ramón Uriarte, Jorge Lardé, Arturo Ambrogi y otros, muestran los cambios del discurso nacional en la década de 1920. Sus obras tienen como denominador común la revalorización del pasado indígena, de la vida en el campo y de los atributos culturales que podrían definir al salvadoreño.880 Durante la gestión de Martínez, desarrollaron esta tendencia autores como: Salarrué, Francisco Espinoza, José Mejía Vides,881 Alfredo Cáceres Madrid882 y Ortiz 877 Alfonso Rochac, “Ízalco”, Diario Nuevo, miércoles 8 de abril de 1936, año III “Doña María de Baratta va a Guatemala”, Diario de Occidente, jueves 7 de abril de 1938, No. 8108, pág. 1, año XVIII. La sociedad de geografía e historia de Guatemala invitó a María de Baratta a ofrecer recitales y danzas de música indígena, lo que le permitió conocer los círculos artísticos de ese país y aprovechó su estancia para estudiar la obra de algunos autores chapines. 878 “La casa del arte debe fundarse en San Salvador”, La Prensa, sábado 9 de noviembre de 1935, No. 7,890, pág. 1, año XXI. Los pintores salvadoreños representaron al país en una exposición pictórica realizada en Panamá por medio del Ministerio de Instrucción Pública que envió los cuadros selectos de los compatriotas. 879 Además, estos artistas a iniciativa de Mejía Vides quién había obtenido el primer premio en la exposición centroamericana de artes plásticas realizada en Costa Rica se propusieron la organización de la “Casa del Arte” que tendría como objetivo la presentación de exposiciones de arte vernáculo y la posterior incorporación de músicos y compositores. 879 Carlos Gregorio López, “La historia cultural en El Salvador: un campo de estudio en ciernes”, Diálogos, Revista Eléctronica de historia, agosto/febrero, año 2006/vol. 06, No. 002, pág. 104. 880 José Mejía Vides: nació en San Salvador el 19 de marzo de 1903, murió a los 90 años el 21 de agosto de 1993, fue pintor, artista plástico y grabador, como pintor trató de alejarse de las influencias europeizantes y francesas, vivió en Panchimalco, dejo de pintar por algún tiempo 881 253 Villacorta, autores que habían dominado el panorama pictórico. Mejía Vides, creía que era necesario más apoyo al pintor salvadoreño, ya que durante la década de los veinte casi siempre se le dio más importancia a la obra importada. Además, consideraba que no existían en El Salvador muchos locales adecuados para montar exposiciones y que a este problema se enfrentó su maestro Alberto Imery después de su regreso de Europa, quien, incluso, ante el vacío de la educación artística en el país, fundó la Escuela de Artes Gráficas a la que asistió el mismo Mejía Vides.883 Mejía Vides sostenía que Masferrer también fue un muy buen dibujante y que era una cualidad que muy pocos conocían. El pintor estableció que en tiempos de Martínez fue apresado por diez minutos, porque les pareció sospechoso a las autoridades por pintar en la calle y manifestó que lo mismo les paso a Salarrué y a Miguel Ortiz Villacorta, o sea, fueron tiempos donde había un estricto control de la ciudadanía al tratar de detectar elementos subversivos, pero que a pesar de esto, los inicios de los treinta fue una de sus etapas más productivas y que su obra estuvo enfocada en la cultura autóctona, la cual desarrolló principalmente en Panchimalco.884 De hecho, uno de los cuadros más representativos de Mejía Vides se titula “Mujer de Panchimalco”, en el cual aparece una mujer indígena con su vestimenta tradicional y un bonito paisaje campestre de fondo. Es importante señalar que porque sufrió de glaucoma, una dolencia de los ojos que le quitó gran parte de la visión. Estudio en la Escuela Nacional de Artes Gráficas “Carlos Alberto Imery”, realizó estudios de arte en México y fue muy influenciado por el movimiento muralista de ese país. Fue profesor y director de la Escuela Nacional de Artes Gráficas y fue Jefe del Departamento de Artes Plásticas de la Dirección General de Bellas Artes. Obtuvo muchos galardones por su trabajo incluido el Premio Nacional de Cultura en 1976. Mejía Vides y su padre José Mejía, fueron muy amigos de Masferrer. Este último era un obrero y zapatero y según comenta el mismo Mejía Vides, fue en él en quien se inspiró Masferrer para escribir su obra Que debemos saber, que fue, precisamente la respuesta a una carta que le envió José Mejía donde le hacía la interrogante ¿Qué debe saber un obrero para ser instruido? Luis Alfredo Cáceres Madrid: nació en 1908 en el Barrio El Calvario de San Salvador y murió en el Barrio de Acalhuca (Ciudad Delgado) en 1952, a los 44 años. Pintor, estudio en la Escuela de Artes Gráficas y llegó a convertirse en su Director. Se considera como uno de los pioneros de la pintura indigenista salvadoreña y al igual que Mejía Vides fue influenciado por el muralismo mexicano. Los temas de sus pinturas eran la naturaleza y la cultura autóctona, siempre exaltando lo popular. Sus pinturas han sido expuestas en El Salvador por el Museo de Arte (MARTE). 882 Alfredo Parada, hijo, “José Mejía Vides: un artista auténtico”, Revista Reportajes, No. 26, págs. 11 y 12, año III, 1968. 883 884 Ibídem, págs. 13 y 14. 254 durante la presidencia de Martínez, José Mejía Vides, obtuvo el Primer Premio de Pinturas en la Primera Exposición Centroamericana de Artes Plásticas celebrada en San José de Costa Rica en octubre de 1935, a la cual como ya hemos mencionado también asistió Salarrué.885 En este mismo contexto artístico, María de Baratta 886 se puso al frente de un importante movimiento musical con expresiones indigenistas compuesto por importantes personajes de la época entre los cuales podríamos mencionar a Rubén Arauz, Alejandro Muñoz Ciudad Real y a el maestro Humberto Pacas, de hecho, esta tendencia se vio fortalecida cuando en julio de 1933 llegó al país el guitarrista paraguayo de origen indígena Mangoré, quien fue recibido personalmente por Jacinto Castellanos Rivas, Secretario de la Presidencia.887 El guitarrista ejecutó en el país algunos conciertos introduciendo a su repertorio el himno nacional y los valses del artista salvadoreño Felipe Soto; dijo que en toda América se estaba produciendo un espíritu “nativista” en pintura, literatura, escultura y música y que en nuestro país, la representante de esta última tendencia era María de Baratta. María Loucel también escribió un poema dedicado a Mangoré quien a su partida agradeció las atenciones recibidas por parte del Presidente Martínez.888 Efectivamente, María de Baratta pensaba que en Centroamérica existía un gran caudal de manuscritos, códigos, ritos, minas, templos, monumentos y artesanías que constituían la historia viva latente de los pueblos autóctonos de esta región, que, según ella, eran lo que fuimos y lo que somos y es por eso que, para ella, era algo que no se podía dejar morir, dijo: “Pueblo sin modalidad propia no es 885 Saúl Flores, Lecturas Nacionales, 5ª Edición, 1950, San Salvador, El Salvador, pág. 29 Claudia Lars, “Sobre música popular”, Diario Nuevo, sábado 8 de febrero 1936, No. 680, pág. 3, año III. Lars, pensaba que la música popular era la mejor llave para interpretar y conocer los anhelos y dolores de una raza, la mejor intérprete de ese lenguaje, en ese momento, para ella, era, María de Baratta, quien la había estilizado y revalorado, realizando composiciones de gran calidad como: Cancalagui Tunal y los Tecomatillos. 886 Consejo Nacional para la Cultura y el arte, José Dutriz y el Diario La Prensa, 1915-1934, Colección Orígenes volumen No. 12, Dirección de publicaciones e impresos CONCULTURA, 2002, págs. 270 a 274. 887 888 Ídem. 255 pueblo, pueblo sin característica, vive de prestado”. María de Baratta, en base al filósofo francés Jean-Marie Guyau sostenía que la religión era el sociomorfismo de las civilizaciones tolteca, maya e inca, es decir, a través de ella, se podía conocer sus organizaciones y jerarquías sociales.889 La etnomusicóloga también creía que la música, la danza, la arquitectura, la poesía, la cerámica y los tejidos estaban supeditados al fenómeno religioso. Creía que todo esto era subestimado por falta de conocimiento de los pueblos precolombinos de América tales como los aymaras, los quichuas, los mayas, los chibchas, los tupi-guaranies, los taramauras y los lacandones entre otros. Para Baratta, los países del continente tenían que configurar sus nacionalidades y hacer cultura en base a ellas, y es por eso que afirmó: “la música es la expresión suprema del significado profundo y esotérico de estas ciudades milenarias”. Baratta sostenía como uno de sus más grandes descubrimientos que la escala pentatónica fue arquetípica en todas las culturas indígenas pre-hispánicas y sin duda alguna, el estudio de la música para ella, era algo fundamental a la hora de forjar la identidad nacional: 890 Las rutas y los campos de la música autóctona hasta hace pocos años en la América, permanecieron vírgenes, inexplorados. Pero vino el momento de la revelación, vino el momento en que el ancestro palpitó y vibró, latentizando un imperativo anhelo de encontrarse a sí mismo, de manifestarse en todas las expresiones con los delineamientos propios de la herencia racial.891 El pintor Francisco Espinoza en esta misma línea indigenista sostenía que se tenía que recoger todo el material folklórico disperso en el país. El objetivo era construir la auténtica personalidad salvadoreña y en ese sentido, consideraba que había que investigar a los principales pueblos indígenas “in situ”, antes de que perdieran totalmente sus costumbres y además creía que esto se tenía que realizar de forma sistemática y no como una esporádica iniciativa. Entre estos pueblos, según él, estaban: Nahuízalco, Santiago Texacuangos, San Pedro Perulapán entre otros. El María de Baratta, “Ensayo sobre música autóctona y sus relaciones con las artes indígenas”, El diario de hoy, domingo 1 de mayo de 1938, No. 601, págs. 9 y 10, año II. 889 890 Ídem. 891 Ídem. 256 programa que propuso Espinoza para llevar a cabo este buceo comprendía: narraciones, tradiciones, costumbres pasadas y actuales, lenguaje popular, supersticiones, música, poesía popular y de forma general, todo lo que implicara arte indígena:892 Del mérito que hay en nuestro folklore hablan los sones recogidos por doña María de Baratta, algunos cuadros de Cáceres y los deliciosos cuentos de Salarrué (…) como un estímulo para los encargados de recoger el material folklórico salvadoreño se instituirían premios a favor de aquellos que presenten los mejores trabajos a juicio de un comité especialmente organizado para el caso. Los premios serían en efectivo y honoríficos. La recopilación pasaría a ser propiedad nacional.893 Es en este sentido como el apoyo oficial que recibió Grupo Masferrer para la celebración del Día del indio fue muy notorio. La Junta Nacional de Turismo mediante su presidente Joaquín Leiva, accediendo a los deseos de los masferrerianos presentó una solicitud a los empresarios de la Pan American Airways y Taca a efectos de que éstos realizaran una rebaja en los pasajes de ida y vuelta de los triunfadores de otros países.894 Por gestiones de la misma Junta, The Salvador Railway Limited concedió pasajes gratis de ida y regreso a veintidós indios que llegaron de Nahuízalco para tomar parte en las celebraciones, hecho que aumentó mucho el interés de las festividades. Igualmente, Rafael Andreu organizó dos grandes excursiones, una procedente de Santa Ana y otra de Sonsonate con el objeto de facilitar el viaje a las personas de ambos departamentos que desearán presenciar el desarrollo de las fiestas típicas: En el caso de que alguna persona residente en otros países de Centro América obtenga, el premio, El Grupo Masferrer desea que el agraciado asista personalmente al acto en que serán leídos los trabajos y a la fiesta que se dará en honor de los triunfadores. Siendo esos actos de cultura por su índole, factores importantes en la civilización de los pueblos siempre se llevan a cabo por contribución ciudadana: de ahí que el Grupo Masferrer solicite las mayores facilidades para el éxito en sus propósitos culturales. 895 Francisco Espinoza, “Debemos recoger nuestro folklore”, Diario Nuevo, jueves 29 de noviembre de 1934, No. 314, pág. 3, año II. 892 893 Ídem. “La Junta Nacional de turismo presenta eficaz cooperación”, La Prensa, lunes 4 de diciembre de 1933, No. 6,908, pág. 1, año XXI. 894 895 Ídem. 257 Es interesante analizar con respecto a este tema, la opinión de una persona quien escribió un artículo bajo el pseudónimo “El indio Juan”896 quien expresó que el día de la “Virgen de Guadalupe” era entre la raza indígena, un verdadero día de fiesta nacional al igual que el 3 de mayo “Día de la cruz y de los árboles”. En el día de Guadalupe, dijo todas las personas de todos los estratos sociales llevan a sus niños a la procesión vestidos con trajes indígenas en el que podía advertirse claramente el sincretismo de las solemnidades que retomaban elementos tanto del cristianismo como del paganismo.897 Participar en la procesión para los indígenas significaba lograr la indulgencia de la Virgen María, pero lo más revelador de su opinión, era que aconsejaba al Grupo Masferrer que si iba a participar de esta fiesta, era oportuno glorificar a Fray Bartolomé de las Casas, “el bueno y amoroso hermano del indio”, ya que había una ignorancia muy grande sobre la vida y obra del que ellos consideraban su “libertador”. El Grupo Masferrer tomó a bien está recomendación y fue Manuel Barba Salinas el encargado de dirigir algunas palabras sobre la lucha de de las Casas en la emancipación del indio en Centroamérica y México. Salinas aclaró que tales conceptos, ya habían sido vertidos en un trabajo de Gabriela Mistral.898 El 11 de diciembre se celebró en el parque Dueñas un interesante acto artístico escolar en ocasión a los festejos iníciales del Día del indio, tomando parte en él, los alumnos de la escuela rural de Ízalco que estaba bajo la dirección del Coronel Marcelino Galdámez. En dicho acto se ejecutaron danzas indígenas y canciones típicas. Las artistas llegaron vestidas con el “refajo” indígena azul y blusas blancas. Además, se cantó la marsellesa al trabajo y algunas canciones autóctonas americanas como: “La chaparrita”; “Por aquí pasó la pava” y el “Tecolote”. Cabe destacar que Ramírez Chulo, profesor de dicha institución, habló sobre la labor El indio Juan, “A propósito de la celebración del día del indio”, La Prensa, sábado 11 de noviembre de 1933, No. 6,889, pág. 3, año XXI. 896 897 Ídem. “Homenaje público de Fray Bartolomé de las Casas ayer” La Prensa, miércoles 13 de diciembre de 1933, No. 6,916, pág. 1, año XXI. 898 258 educativa dirigida a los niños de ese lugar que habían surgido en un ambiente turbulento y agresivo.899 El Grupo Masferrer llevó a cabo por primera vez en el país la celebración del Día del indio, acto que tuvo un éxito resonante a nivel internacional, pero el periódico La Prensa hizo constar que la iniciativa de realizar dicha manifestación de reconocimiento a la raza autóctona, había sido hecha por José Quetglas, en ese momento, Jefe de Redacción del referido diario, quien en el periódico El Nacionalista de Quino Caso publicó el 24 de junio de 1933 un artículo titulado: “El Día típico”, en el cual propuso que se debía celebrar un día especial en el que se vendieran artículos indígenas de materiales fabricados en el país por obreros salvadoreños.900 Esta celebración fue el principio de una serie de actos posteriores similares, por ejemplo, cuando el 3 de agosto de 1937, le tocó organizar el Día típico a María de Baratta en el Campo Marte, desfilaron ante 30,000 personas, sesenta carretas, simbolizando cada una un tópico indígena diferente. En la noche de ese mismo día se efectuó en el Estadio Nacional “La danza del incienso”, en donde Liliam Meneghelli actuó como solista y las otras cantantes fueron las vestales. María de Baratta dijo que “por su estilo moderno y por ser un poema sinfónico”, su mejor obra durante esa época fue Nahualismo.901 También habría que decir que María de Baratta en 1934 ganó el primer lugar en un concurso indígena realizado en México, específicamente, en la ciudad de Coahuila, por sus composiciones “Ofrenda de la elegida” y “Bacanal indígena”. En los Juegos Florales de Santa Ana de 1939 obtuvo la medalla de oro por su composición en prosa: “Collar de dientes”, que como explicamos antes es el significado de la palabra Cuscatlán.902 “Simpático evento en el parque Dueñas”, La Prensa, martes 12 de diciembre de 1933, No. 6,915, pág. 1, año XXI. 899 “A quién pertenece en realidad la iniciativa para un homenaje”, La Prensa, miércoles 13 de diciembre de 1933, No. 6,916, págs. 1 y 7, año XXI. 900 Entrevista realizada por Mercedes Durand a María de Baratta publicada en el Diario Latino el día sábado 20 de mayo de 1967, pág. 5, bajo clasificación: SV/MUPI/ct009/001, F2.33 del Museo de la Palabra y la Imagen. 901 “Datos biográficos de María de Baratta”, Diario Latino, lunes 5 de mayo de 1975, pág. 13, bajo clasificación SV/MUPI/ct009/001, RP F2.28 del Museo de la Palabra y la Imagen. 902 259 3.2. Juegos Florales Centroamericanos: Otra actividad que se complementó con el Día del indio fueron los Juegos Florales Centroamericanos a realizarse por primera vez en El Salvador que, en esencia, fue un concurso sobre literatura indígena regionalista y un desfile de trajes típicos.903 El jurado calificador quedó integrado por Sarbelio Navarrete, Pérez Menéndez y Raúl Andino. El Grupo Masferrer se proyectó la participación de los mejores poetas y escritores de Centroamérica.904 El interés social que despertaron los Juegos Florales fue muy intenso, inclusive, el comité organizador informó a los medios que el Presidente de la República, Maximiliano Hernández Martínez, había ofrecido contribuir con el evento aportando uno de los premios, pues había querido participar personalmente en esta justa en donde artistas y escritores de los cinco países del istmo tomarían parte. El Grupo Masferrer a través de este concurso además de crear identidad, pretendía cimentar en el pueblo, el sentimiento de autonomía centroamericana frente a la injerencia del norte:905 Al mismo tiempo que el Señor Presidente de la República ha ofrecido obsequiar un premio, sabemos que estas distinguidas personas de relieve en el mundo de la banca y el comercio se aprestan a participar en ese torneo, haciendo entrega a los vencedores de objetos que recuerden ese acontecimiento que es un timbre de orgullo para el Grupo Masferrer.906 “Un bello vestido indígena”, La Prensa, lunes 11 de diciembre de 1933, No. 6,914, pág. 1, año XXI. Inclusive se encargó a las fábricas indígenas de Xelajú, Guatemala, un suntuoso traje de india, vestido con el cual se presentaría la Reina de los Juegos Florales el día que se entregara al poeta laureado la flor natural. El traje fue mandado a hacer, según, indicaciones de la comisión indígena del “Grupo Masferrer” que había analizado los códices para tratar de imitar los mantos reales de las antiguas princesas. El traje fastuoso que llevó la reina, según, Miguel Ángel Espino costó cerca de seiscientos colones. 903 “Los Juegos Florales del Grupo Masferrer”, La Prensa, jueves 9 de noviembre de 1933, No. 6,887, pág. 1, año XXI. El Grupo Masferrer tomando en cuenta lo solicitado por algunos intelectuales, en el sentido de posponer el termino señalado para la entrega de los trabajos de los juegos florales que se celebrarían el 12 de diciembre, dispusieron ampliar el tiempo de recibo hasta el último día del mes de noviembre. Se recibió una buena cantidad de trabajos de los países de Centro América a excepción de Costa Rica, aunque la mayoría provino principalmente de Guatemala. 904 “Hay gran interés por los próximos juegos florales”, La Prensa, martes 28 de noviembre de 1933, No. 6,903, pág. 1, año XXI. 905 906 Ídem. 260 Al final, el ganador de dicho concurso fue Arturo Romero Castro con el poema titulado “Poema de las cinco parábolas del heroísmo”.907 El primer premio accésit, fue obtenido por el guatemalteco Francisco Méndez por su poema “Jade de sol” y el segundo premio accésit, fue otorgado al nicaragüense Mariano Valle Quintero. Agenor Argüello908 ganó el premio del soneto al indio con el trabajo titulado: “Bronce indio”, el cual había firmado bajo el pseudónimo “Cipactly” y el guatemalteco Carlos Samayoa Chinchilla obtuvo el primer premio en cuento por su leyenda “La profecía de los Channes”.909 A efectos de aprovechar la colaboración ofrecida por el gobierno, existió una comisión nacida en el seno del Grupo Masferrer que entabló gestiones con el Presidente de la República a fin de solicitar los servicios de un avión que debía traer a dos de los poetas premiados en el concurso, Francisco Méndez, quien se encontraba en el departamento de Quiché, Guatemala y Mariano Valle Quintero quien se encontraba en Managua, Nicaragua. También se tuvo el proyecto de realizar recepciones a los trovadores que tomaron parte en los números que se efectuaron en los Juegos Florales Centroamericanos, 910 pero al final a los guatemaltecos se les entregó el premio en su país a través del diplomático Álvarez “Quino Caso hace aclaraciones sobre fallo del jurado”, La Prensa, lunes 11 de diciembre de 1933, No. 6,914, pág. 1, año XXI. Quino Caso, para evitar controversias explicó que Julio Enrique Ávila y él, se habían decantado en un primer momento por el poema del escritor guatemalteco, pero que los otros tres miembros del jurado lo criticaron por ser de estilo vanguardista haciendo énfasis en algunos defectos y destacando la superioridad del otro, escrito con más reposo y más documentado, que en ese sentido se adhirieron a los otros elementos del jurado: “La consonancia del poema Las cinco parábolas es perfecta, pertenece a la escuela modernista y está sujeto a las leyes de la retórica, en tanto que el otro está escrito en verso libre y tiene por lo mismo más belleza. No ha habido mala intención de ninguno de los miembros del jurado calificador”. 907 Agenor Argüello: Nació en León, Nicaragua en 1902 y murió en el mismo lugar en 1962. Sus primeros escritos se publicaron en el Eco Nacional. Residió en El Salvador donde ejerció el periodismo y la enseñanza. Vivió en Ahuachapán durante 23 años relacionándose con intelectuales tanto salvadoreños como nicaragüenses. Fue director del periódico Novedades y Jefe de Redacción del Liberal Nacionalista órgano oficial del Partido Liberal Nacionalista del Presidente Anastasio Somoza García. Entre sus obras están: Cantos de otoño en primavera 1923, Luminarias sombrías 1931, Tierra conmovida 1948, El jardín de Liliana 1961, La cobra 1958, La guerra yanqui 1934. 909 “Arturo Castro ganó la flor natural de los Juegos Florales”, El Día, martes 5 de diciembre de 1933, No. 4,200, pág. 1, año XIII. 908 “Solicítese al gobierno un aeroplano”, La Prensa, jueves 7 de diciembre de 1933, No. 6,911, pág. 1, año XXI. 910 261 Vidaurre por encargo de Miguel Ángel Espino en una ceremonia a la que asistieron altas personalidades de la intelectualidad guatemalteca. 911 El mejor vestido indígena también fue galardonado, lo cual es evidenciado en el siguiente párrafo: El premio ofrecido a la señorita que llevara el mejor traje indígena, lo obtuvo la señorita Martínez de Ízalco (…) La fiesta de anoche que deja un imborrable recuerdo, y que seguramente será el ejemplo para otras idénticas que se celebren en el futuro, terminó a las cuatro de la mañana de hoy (…) por lo que significa para nuestro país una fiesta de esta naturaleza, la idea de su organización por el Grupo Masferrer merecía todo el apoyo posible, y ahora que ella ha constituido un éxito, felicitémonos todos por ello: anoche se ha visto que El Salvador todavía tiene alma y tiene corazón.912 3.3. Relación entre el indigenismo y el vitalismo en el contexto de la presidencia de Hernández Martínez: Después de haberse hecho un desarrollo del arte indigenista a principios y durante toda la gestión de Martínez, el lector podría preguntarse por qué hacer tanto énfasis en este aspecto si lo que se trata de probar –al final– es un proyecto de Nación vitalista, precisamente, según Marta Casaús, esto es lo que le da ese carácter de vitalista, ya que Masferrer fundamentándose en las connotaciones conceptuales de Ernest Renán buscó resucitar el “alma de la Nación” a través de ciertos rasgos culturales y morales en los que hablaba de forjar a la Nación como una comunidad de cultura basada en el concepto de raza, pero que de ningún modo debía ser jerárquico o excluyente:913 Consideraba que la unidad de la Nación debía fraguarse en el ámbito cultural y social, basado en un proyecto de vida que definía como “mínimum vital”. En este sentido va a ser uno de los precursores de la construcción de la Nación étnicocultural en Centroamérica.914 La construcción del Estado-Nación fue uno de los problemas más importantes dentro de la modernidad. En primer lugar, es importante señalar que “Entrega de premios a literatos chapines”, La Prensa, martes 30 de enero de 1934, No. 6,980, pág. 1, año XXI. 911 “Fue un completo éxito el baile típico de anoche”, La Prensa, miércoles 13 de diciembre de 1933, No. 6,916, págs. 1 y 7, año XXI. 912 Marta Casaús, Las redes intelectuales centroamericanas: un siglo de imaginarios nacionales (1820-1920), págs. 94 y 95. 913 914 Ídem. 262 Ernest Renán estaba en contra de la lucha de clases y de la lucha de razas. Para él, la Nación tenía que construirse en base a las propias particularidades, es decir, no se podían copiar modelos foráneos. Elementos como la raza, la lengua, los intereses comunes, la afinidad religiosa y la geografía, sin lugar a dudas, eran elementos muy importantes a la hora de configurar a la Nación, pero, según él, eran insuficientes en sí mismos, se necesitaba de algo más: el deseo de vivir juntos.915 Para Renán, la Nación no era algo improvisado, era un proceso a largo plazo y la forma más legitima de realizarlo era mediante el culto a los antepasados, porque los antepasados hacen lo que somos: “Somos lo que vosotros fuisteis; seremos lo que vosotros sois”. Para Renán, una Nación era tener una herencia común y en el presente, tener un programa para conservarla y continuarla.916 Sobre este punto en específico, quizás, fue el pintor José Mejía Vides quien más se preocupó por establecer de una forma clara, la relación entre indigenismo y vitalismo aludiendo a que hubo un movimiento literario que, definitivamente se apropió del término, pero que además, era un movimiento de regeneración social que consistía en despiojar, desparasitar, vestir y calzar a los indígenas. El pintor creía que los indígenas habían sido un sector del pueblo socialmente relegado y abandonado, por lo tanto, la idea era adaptarlo al proceso civilizador, tanto en el campo como en la ciudad, lo cual no deja de ser hasta cierto punto racista, ya que era forzar la occidentalización del indígena.917 Para el artista, regenerar al indio consistía en equipararlo en derechos y dignidad a la raza blanca, así como también reconocerlo intelectualmente. Era elevar su nivel de vida extremadamente precario918 que se revelaba en una severa Ernest Renan, ¿Qué es una nación?, cartas a Strauss, Alianza Editorial, S.A., Madrid, 1987, págs. 16, 63, 82 915 916 Ídem. José Mejía Vides “En defensa de la clase indígena”, El Diario de hoy, domingo 26 de noviembre de 1939, No. 1,070, pág. 5, año IV. 917 Jeffrey L. Gould y Aldo Lauria Santiago, 1932, Rebelión en la oscuridad, Editor Museo de la palabra y la imagen, s/f, pág. 309. “Las políticas pro-indígenas incluyeron escuelas especiales para huérfanos de las masacres, apoyo para los indígenas en las disputas por tierra y agua, y un reconocimiento oficial de la jerarquía cívico-religiosa que los ladinos locales intentaron abolir. El teniente Alfonso Muñoz, quién se convirtió en el director de una de las escuelas para huérfanos intentó intervenir a favor de los indígenas al denunciar cuanto se les cobraba por electricidad, cuando no tenían acceso 918 263 desnutrición, enfermedades y falta de educación, fenómenos que eran el resultado de no tener los medios de subsistencia mínimos y que, según él, podía observarse en pueblos como Panchimalco919 en donde eran pocos los que tenían su propia parcela de cultivo. Además, no vivían en casas sino que en ranchos donde había una gran promiscuidad, por ser terrenos de unos cinco o seis metros cuadrados a lo sumo. En estos pequeños terrenos vivían hasta seis y ocho personas sin tener acceso a servicio de aguas negras ni tren de aseo. Al respecto dijo:920 Al nivel de vida bárbaramente bajo y la ausencia total de una escuela activa, que antes de enseñar a leer y escribir, enseñe el alfabeto masferreriano del agua, jabón y escoba. Ízalco, Nahuízalco, Paleca –¡ahí no más en nuestras narices, señor!– …pero día llegará en que el indio será estimulado, vitalizado, redimido, en una palabra y para entonces su colaboración dentro de la vida noble y activa de la Nación será destacada.921 El pintor vertió estas palabras en contra de un editorialista del Diario de hoy que afirmaba que los pueblos indígenas eran sucios y atrasados, pero aunque en ningún momento se mencionó su nombre, éste le respondió que el indigenismo, también llamado “indianismo” fue entendido como una especie de clima psicológico propio de los países que habían hibridado armónicamente costumbres indígenas con españolas o portuguesas y se habían opuesto a los valores anglosajones. En este sistema, el indio era una valiosa fuerza social a la que había que “higienizar” y mejorar en sus costumbres aún en estado rudimentario:922 Cuando Alberto Masferrer inventó el alfabeto del agua, el peine, el cepillo de dientes, el jabón, el pañuelo, etcétera (que dicho de paso ya había sido inventado), lo hizo con vistas a todas las cosas desagradables que son comunes en nuestros a la misma (…) Esta alianza ejerció una fuerte influencia en las memorias de los sobrevivientes, y muchos pobladores ancianos de Ízalco y de otros lugares tienen recuerdos favorables del régimen de Martínez”. “Exposición de pintura de José Mejía Vides”, El Gran Diario, domingo 6 de agosto de 1939, No. 39, pág. 3, año I. En este sentido, cuando Mejía Vides, montó una exposición pictórica en San Salvador, donó la taquilla completa para los niños pobres de Panchimalco, pueblo indígena, que aún conservaba, una fuerte personalidad y costumbrismo autóctono. 919 José Mejía Vides, “En defensa de la clase indígena”, El Diario de hoy, domingo 26 de noviembre de 1939, No. 1070, pág. 5, año IV. 920 921 Ídem. “El indigenismo, no ya el indio”, El Diario de hoy, martes 28 de noviembre de 1939, No. 1,072, pág. 9, año IV. 922 264 países y que atañen por igual al indio, al blanco, al mestizo y al zambo. Lo hizo con vistas a lo que nosotros llamamos indianismo…923 Esta discusión se torna interesante para realizar algunos matices. Sofía Reding924 establece que en primer lugar cuando se acepta que hay una raza inferior, por mucho discurso que se haga, significa que hay segregación y cuando se habla de homogenizar, es porque hay una inclinación a suprimir identidades culturales alternas, tal como hemos visto en la última opinión cuando se habla de hibridar. Hibridación que, según la autora, en ningún momento ha sido armónica sino violenta y forzada a partir del antiguo sistema colonial esclavista lusitano y español hasta la actualidad. Lo correcto para Reding, es, que en vez de querer llevar al indio a cierto grado de progreso en un sentido occidental, se respete su personalidad propiamente indígena.925 Por otro lado, Reding establece que tradicionalmente a nivel de América Latina, a las minorías se les ha culpado de ser factores de atraso y pobreza y por tanto en el discurso nacionalista de países como México, Colombia y Perú ha prevalecido la promoción del mestizaje. El Grupo Masferrer, como hemos podido establecer, no abogó por el mestizaje sistematizado sino que por el contrario promovió el indigenismo en sus distintas expresiones, sin embargo, socialmente el indio era percibido como atrasado. Es más, la autora establece que el racismo es propio en los estados autoritarios.926 Según la académica, los factores económicos constituyen un punto determinante para establecer el status racial de las personas, de lo que se concluye que si el indio salvadoreño vivía en la miseria, era a consecuencia del mismo sistema 923 Ídem. La Dra. Sofía Reding Blase es licenciada en antropología social por la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), ha realizado posgrados de maestría y doctorado en estudios latinoamericanos por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y actualmente se desempeña como investigadora en el Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe (CIALC) de la UNAM donde desarrolla el proyecto de investigación “Ética e interculturalidad en América Latina”. 924 Sofía Reding, “Diversidad y racismo en América Latina”, revista Latinoamérica No. 44, México, 2007/1, págs. 158, 159 y 171. 925 926 Ibídem, pág. 160. 265 capitalista que le había negado su mejoramiento material. El racismo como señaló Mejía Vides tenía mucho que ver con el acceso a la tierra y a la vivienda, entonces, la inferioridad racial del indio, era consecuencia de su inferioridad económica ocasionada por el mismo modelo de producción.927 Lo que sucede es que en estos discursos siempre está presente –de forma inconsciente– el ideal inalcanzable de progreso y de adaptación al sistema como única solución para superar el atraso. Por otro lado, el indio siempre ha sido ligado a la idea de ignorante e incapaz, de ahí que se hablará de que estaba en un nivel cultural rudimentario.928 Otro punto que podríamos criticar es que la celebración del Día del indio y en general toda la política indigenista de Martínez, fue algo artificial, preparado desde arriba hacia abajo por el blanco y el mestizo, no se dejó en libertad al alma indígena para que demostrara por sí misma si aún estaba ligada a su pasado. Helio Gallardo en este sentido, cree que históricamente en América Latina, ha existido un “indigenismo” que ha sido llevado a cabo por los actores de la dominación en función de la reproducción del sistema, es decir, el “indígena” es representado como un individuo económica y socialmente débil, al cual el Estado debe ir incorporando de forma gradual, procurando conservar aquellos aspectos de su cultura que considere “positivos” y suprimir aquellos que considere “negativos”.929 Según este autor, lo que pretende este tipo de indigenismo es afiliar a un Estado-Nación universal-falso, un indio desindianizado, o sea, que no lo reconoce como sujeto activo de su propia redención, que es a lo que él llama una incorporación “hacia el indio y no desde el indio”. Además, este indigenismo se caracterizaría por representar a un indio pintoresco, turístico y como expresión de un pasado romántico.930 927 Ibídem, pág. 162. 928 Ibídem, págs. 164 y 173. Helio Gallardo, 500 años: fenomenología del mestizo (violencia y resistencia), Colección análisis, Departamento Ecuménico de Investigaciones, 1ª Ed., 1993, pág. 68. 929 930 Ibídem. 266 La crítica que queremos dejar marcada en este apartado, es el error de muchos países latinoamericanos de querer llevar al indio a la “modernidad” desde los criterios blancos y mestizos.931 Ahora bien, parece ser que Miguel Ángel Espino previó esta crítica sobre el hecho de que al indio había que dejarlo expresarse por sí mismo y es uno de los aspectos que abordaremos a continuación en la función cultural del Grupo Masferrer, que siempre estuvo ligada al aspecto indigenista. 4- Labor cultural del Grupo Masferrer, hacia una reconstitución social: El Grupo Masferrer llevó a cabo varias veladas culturales,932 las cuales tenían como objetivo estrechar aún más las relaciones entre sus elementos y dar paso a una especie de convivio espiritual que revitalizaría a la Nación.933 La primera de estas sesiones se realizó en casa de Adolfo Pérez Menéndez, en la misma, Alberto Guerra Trigueros y Arturo Romero Castro declamaron algunos de sus poemas inéditos y las mujeres asistieron vestidas con trajes indígenas.934 Las actividades de la segunda tenida artística del Grupo Masferrer celebrada en casa de Mercedes Viaud Rochac fueron ejecuciones de música regional, recitación de versos inéditos y lectura de composiciones en prosa. Además, se hizo pública la adherencia de otros intelectuales como: Otilia Paz Pinto, Rafael Alegría y Joaquín E. Granillo. La música regional fue tocada al piano por Viaud Rochac, Carlos Bustamante recitó uno de sus mejores poemas y Quino Caso leyó su composición dramática titulada “El encuentro”.935 “Día del indio en el Perú”, El Diario de hoy, miércoles 2 de agosto de 1939, No. 970, pág. 9, año IV. La fiesta del día del indio en el Perú se celebra los 24 de junio y es organizada y realizada por la misma comunidad indígena. 931 “El Grupo Masferrer da un homenaje a Castellanos Rivas”, Diario Oficial, Suplemento La República, jueves 19 de octubre de 1933, No. 264, pág. 4, año I. El Ejecutivo estuvo muy al tanto de estas tenidas: “Una de las formas adecuadas que está poniendo en efecto el Grupo Masferrer, para hacer labor de acercamiento y de comprensión entre sus distinguidos componentes, es la de dar fiestas íntimas a sus miembros, dando oportunidad para que así cada uno revele su obra”. 932 “La interesante reunión de artistas e intelectuales, anoche”, La Prensa, domingo 10 de octubre de 1933, No. 6,861, pág. 2, año XXI. 933 934 Ídem. “La tenida literaria de anoche”, La Prensa, sábado 17 de octubre de 1933, No. 6,867, pág. 1, año XXI. 935 267 La tercera tenida se desarrolló en casa de Marta Alegría. En esta sesión hubo cantos, lecturas y recitaciones. Carlos Recinos y Carlos Baca deleitaron a los asistentes con canciones populares a dúo acompañados de guitarras.936 Quino Caso recitó tres composiciones en verso, pertenecientes a poetas salvadoreños, una de ellas de José Valdés, otra de Alfredo Espino y la última de Ovidio Cerna Sandoval titulada “Amada Alegría”. Castellanos Rivas recitó otros versos de Alfredo Espino, Francisco Espinosa leyó varias bombas de su colección folklórica 937 y Romero Castro dio lectura a un cuento de barro de Salarrué, quien también se encontraba presente en la reunión.938 El Grupo Masferrer para realizar estos convivios también se apoyó en periódicos privados. José Dutriz (padre) organizó una cuarta reunión. En esta ocasión fueron invitadas algunas personalidades como Saúl Flores, el sacerdote católico y poeta nicaragüense Azarías Pallais y José Dutriz (hijo). Quino Caso, Romero Castro, Mercedes Viaud Rochac, Pallais y Salazar declamaron poemas originales. Morán leyó un artículo sobre Masferrer y cantó junto a Carlos Baca y Carlos Recinos. Saúl Flores recitó los versos de un poeta chileno.939 El Padre Pallais había sido invitado a El Salvador para declamar su poesía. En sus presentaciones, fue acompañado por María de Baratta y el Maestro Jesús Castillo940 quienes ejecutaron piezas musicales autóctonas. Estas actividades “La reunión literaria de anoche en casa de Marta Alegría”, La Prensa, jueves 26 de octubre de 1933, No. 6,875, pág. 1, año XXI. 936 Adhemar Gehain, Director General de Instrucción Pública de La Paz, Bolivia, escribió a manera de prólogo del libro folklórico “Bombas” de Francisco Espinoza un artículo titulado: “La importancia del Folklore” el cual fue publicado en el Boletín de la Biblioteca Nacional, Época II, noviembre de 1933, No. 11, págs. 22 y 23. 937 Amparo Casamalhuapa, escribió un pequeño artículo titulado: “Un pueblo que cabe en una mano” en el que manifestó que Cuentos de Barro de Salarrué representaba la idiosincrasia del proletariado salvadoreño: inculto, sencillo. Para ella, esta obra recogía con elementos mágicos el costumbrismo nacional, que en definitiva, trataba de recuperar la identidad indígena. Publicado en el Boletín de la Biblioteca Nacional, Época II, noviembre de 1933, No. 11, pág. 21. 938 “Reunión literaria anoche en los salones de La Prensa”, La Prensa, sábado 4 de noviembre de 1933, No. 6,882, pág. 7, año XXI. 939 “Un legítimo y merecido triunfo de doña María de Baratta”, La Prensa, sábado 4 de noviembre de 1933, No. 6,883, pág. 1, año XXI. Mediante noticias recibidas desde Guatemala se informó a los redactores de La Prensa que el 30 de octubre de 1933, se llevó a cabo en la ciudad de 940 268 abrieron el camino a la regeneración social del país, ya que además de los fines puramente culturales, también buscaban alejar al pueblo de los garitos, los estancos y los prostíbulos que tanto embrutecían y corrompían a las masas. Azarías Pallais al respecto expresó:941 Cualquiera diría que esta noche no estamos en San Salvador, sino en la Antigua Alejandría, la maravillosa Alejandría de Ptolomeo Filadelfo, protector de Teócrito de Siracusa, de Calímaco, de Euclides de Aristarco de Samos y de Zoilo, donde en los pórticos de los palacios y de los templos, los poetas, los sabios y los filósofos de todas las escuelas y de todas las tendencias le hablaban en su propia lengua a la cosmopolita muchedumbre.942 Es preciso decir que el Grupo Masferrer apoyó decididamente los recitales y conferencias de Pallais, lo cual queda evidenciado en la invitación que hicieron al público en general: El padre Azarías H. Pallais, con Gabriela Mistral, son los dos más altos mensajeros de la verdad y la belleza, llegados a El Salvador últimamente. Es preciso aprovechar en toda su grandeza y amplitud, cada una de las ofrendas que el insigne poeta y sacerdote nos hace (…) venga usted a escuchar al padre Pallais, que, con ello, contribuye directa y esencialmente a la redención espiritual de usted mismo y a la mejoración de la cultura de la Patria (…) venga usted y su familia; convenza a sus amigos…943 En la noche del último recital de Pallais en el país, en el cual abordó el tema: “El problema social del rico y el pobre”, éste dijo que el Grupo Masferrer estaba llamado a ejercer una enorme influencia tanto a nivel nacional como internacional. El Grupo Masferrer por su parte, una vez finalizado el evento, dispuso llevarle serenata a su residencia en Mejicanos, la cual llegó alrededor de las dos de la mañana Quetzaltenango un gran concierto de orquesta, en la que se ejecutó, música indígena, escrita por María de Baratta. La dirección de la orquesta estuvo a cargo de Jesús Castillo considerado en ese momento, uno de los mejores músicos de Centro América y a quién se le consideraba una autoridad en la materia. Castillo antes de dirigir el concierto dictó una conferencia sobre la personalidad artística María de Baratta y sobre la importancia de su obra. Con esto no queremos decir que el pueblo fue completamente regenerado, pero fueron algunas acciones concretas que intentaron provocar la salud mental y física de los habitantes. Debemos tomar en cuenta que ningún proyecto social es perfecto y sus autores siempre obtienen fracasos y éxitos parciales. 941 “¿Estamos en San Salvador o la antigua Alejandría?”, La Prensa, martes 3 de octubre de 1933, No. 6,855, pág. 3, año XXI. 942 “El recital del padre Pallais esta noche”, La Prensa, viernes 27 de octubre de 1933, No. 6,861, año XXI. 943 269 del día siguiente. Además, recibió calurosas palabras de despedida de Miguel Ángel Espino.944 Paulatinamente, el Grupo Masferrer llegó a tener mucha aceptación en el medio al grado de llegar a contar con más de treinta socios.945 En una quinta reunión Miguel Ángel Espino presentó al folklorista Higinio Vásquez Santana (1886-1960), quien anunció dictaría en el país una serie de conferencias sobre temas referentes a la identidad mexicana.946 Efectivamente, las pláticas fueron impartidas en el paraninfo de la Universidad Nacional, una versó sobre la canción mexicana y la otra sobre el desarrollo y consecuencias de la Revolución Mexicana. Santana era autor de más de treinta obras históricas, geográficas y culturales, entre las que destacaban: Hombres ilustres nacionales, Canciones, cantares y corridos mexicanos, Hombres ilustres de América, entre otras.947 Ricardo Pérez Monfort en su libro Expresiones populares y estereotipos culturales en México, siglos XIX y XX establece que para Higinio Vásquez Santana el jarabe tapatío era una modalidad estereotípica de la nacionalidad mexicana. 948 Vásquez Santana dedicó su vida al folklorismo nacional de su país: Hacía 1924, Vásquez Santana publicó la primera colección de canciones a la que añadiría otra en 1925, y otras más bajo el rubro de historia en 1931. Escribió sobre el carnaval, la charrería, la canción y las fiestas mexicanas. Esbozó biografías de mexicanos y otras de michoacanos en los veintes y treintas. Oveja anticlerical durante el cardenismo, volvió al redil y se ordenó sacerdote en 1940. Falleció en Honduras mientras realizaba giras de divulgación folklórica.949 “Pallais dijo anoche muchas verdades en el Palacio Nacional”, La Prensa, martes 31 de octubre de 1933, No. 6,879, pág. 1, año XXI. 944 “Importante sesión celebró anoche el Grupo Masferrer” La Prensa, miércoles 22 de noviembre de 1933, No. 6,898, pág. 1, año XXI. 945 “Distinguido profesor mexicano nos visitó ayer por la mañana”, La Prensa, miércoles 22 de noviembre de 1933, No. 6,898, pág. 1, año XXI 946 947 Ídem. Ricardo Pérez Monfort, Expresiones populares y estereotipos culturales en México, siglos XIX y XX: diez ensayos, Centro de investigaciones y estudios superiores en antropología social, México D.F., primera edición 2007, pág. 22 948 Álvaro Ochoa Serrano, Cancionero michoacano 1830-1940, Colegio de Michoacán, México, 2000, pág. 32. 949 270 Como puede observarse el problema de la identidad latinoamericana y más particularmente, la salvadoreña, era fundamental al interior del Grupo Masferrer. Es lógico pensar que cada país configura su identidad desde su propia idiosincrasia y características habiendo marcadas diferencias entre la cultura mexicana y la salvadoreña, pero sin duda alguna, el objetivo era el mismo recuperar el folklore autóctono de nuestros países. El Grupo Masferrer adoptó el criterio indigenista debido a que como explica Andrea Díaz Genis en La construcción de la identidad latinoamericana, ser indio o descendiente de indígenas o tener la piel oscura implicaba ser menos, entonces, hubo una negación del otro desde los parámetros hegemónicos occidentales, discriminación que también incluía el aspecto cultural, pero la filósofa uruguaya sostiene –contrario lo que pudiera pensarse– que la identidad no es algo que siempre estuvo ahí y que solamente hay que descubrir.950 Para la autora, la identidad es algo que se construye o se inventa, es decir, si bien es cierto se toman algunos elementos del pasado o del medio social concreto, esto sólo sirve como material básico para explicarnos a nosotros mismos lo que somos desde una narración o en otras palabras, nos contamos un cuento de lo que creemos ser. La búsqueda de la identidad no sólo implicaría “singularidad”, sino que también “autenticidad”, 951 de ahí que el Grupo Masferrer buscara que su objeto cultural fuera puro. Esta conservación de la identidad –en teoría– evitaría ser absorbido por otra cultura. La idea es que no sólo recurrimos al pasado de forma neutra como meros descubridores sino que tenemos un proyecto a partir de él, lo cual nos impelería a renovar esos mismos valores en el presente. En base a esto y con la intención de exaltar el acervo musical salvadoreño, en la sexta junta del Grupo Masferrer, se conformó una comisión ejecutiva integrada por Augusto Baratta, Adolfo Pérez Menéndez, Raúl Andino, Mercedes Viaud y Francisco Morán. En esta ocación Joaquín E. Granillo invitó al evento al grupo Andrea Díaz Genis, La construcción de la identidad en América Latina, Editorial NordanComunidad, 1ª Ed., Uruguay, 2004, págs. 20 y 21. 950 951 Ibídem, págs. 21, 22, 26. 271 musical “Los Cheros”, quien desarrolló un concierto con un selecto repertorio en homenaje a los discípulos de Masferrer.952 Tal y como hemos venido manifestando la música era un factor muy importante de desbarbarización, y es por eso que el Grupo Masferrer apoyó decididamente la presentación de la Escuela de Música de Humberto Pacas. Dicha institución llevó a cabo un concierto en el Teatro Nacional con la intención de que más galas de este tipo se siguieran efectuando con más regularidad y dar a conocer los auténticos valores salvadoreños:953 En ediciones anteriores hemos informado ampliamente sobre la importancia que revestirá el acto de esta noche, para el cual el Grupo Masferrer, deseoso de patrocinar fiestas de verdadero arte, invita atentamente a la sociedad en general para que asista a la presentación del Orfeón Santaneco…954 Los intelectuales que formaron el Grupo Masferrer, como es evidente advertir, intentarían rescatar el pasado indígena a través del arte, por lo que durante 1935 siguieron efectuando tertulias artísticas en casa de María de Baratta.955 Quienes generalmente asistían además de la convidante eran: Claudia Lars, Alberto Guerra Trigueros, Salarrué, Jacinto Castellanos Rivas, Alejandro Muñoz, José Mejía Vides, Luis Alfredo Cáceres Madrid, Abel Ciudad Real este último quien era un tipógrafo que trabajaba en artes gráficas y el pintor Francisco Espinoza, quienes a iniciativa de Alberto Guerra Trigueros fundaron la Sociedad del Arte de El Salvador, la cual patrocinó ocho exposiciones pictóricas de artistas nacionales y promovió diferentes actos culturales, conferencias y recitales. Fueron apoyados financieramente por el Coronel José Ascencio Menéndez entre otras personas que sentían gusto por el arte. María de Baratta sobre los sínodos en su casa manifestó:956 “Importante sesión celebró anoche el Grupo Masferrer”, La Prensa, miércoles 22 de noviembre de 1933, No. 6,898, pág. 1, año XXI. 952 “Brillante acto artístico esta noche”, La Prensa, miércoles 27 de diciembre de 1933, No. 6,927, pág. 1, año XXI. 953 954 Ídem. Entrevista realizada por Mercedes Durand a María de Baratta publicada en el Diario Latino el día sábado 20 de mayo de 1967, pág. 5. Bajo clasificación: SV/MUPI/ct009/001, F2: 33 del Museo de la Palabra y la Imagen. 955 956 Ídem. 272 Claudia Lars decía un poema, Alberto Guerra Trigueros sacaba de su bolsillo su más reciente obra poética, Salarrué leía un cuento, yo me sentaba al piano y les interpretaba algún fragmente de mis obras. En fin, eran horas de sumo provecho para todos…957 El Grupo Masferrer definitivamente apareció en el ambiente como un impulsor de los asuntos culturales958 que se oponían a los más burdos planteamientos materialistas de ese momento, no sólo del marxismo sino también del incipiente mercantilismo capitalista, que fruto de las ideas fascistas que se estaban desarrollando en Europa en ese momento, un admirador del grupo, llamado Arturo Acevedo Aguilar atribuyó al “judaísmo”. A estos sistemas se les adjudicaba la responsabilidad de causar la grave crisis de cultura en el país:959 En conversaciones de todo elemento social priman los temas de la moneda, cambio, precio, cotizaciones. Pareciera vivimos en un extenso campo comercial bolsista, notándose al mismo tiempo el fenómeno ridículo que somos en la mayoría un pueblo de paupérrimos esperanzados a lo que buenamente nos da la tierra tropical fecundante en varias cosechas por año (…) afortunadamente empieza a cambiar el aspecto. El aniversario de Masferrer comprendido y glorificado, la palabra redentora de Pallais 960, la fundación del Grupo Masferrer y la apoteosis a Gavidia son signos precursores de un renacimiento de la cultura y el arte.961 Habría que decir que la opinión de Acevedo Aguilar concuerda con la de los conservadores alemanes y la de otros países fascistas, sobre su visión de lo que en la Alemania nazi se conoció como “Volk”, es decir, un antisemitismo de base 957 Ídem. “La misión de las juventudes”, Diario Oficial, Suplemento La República, sábado 20 de septiembre de 1933, No. 244, pág. 1, año I. La voz oficial pensaba que en El Salvador existían dos cumbres del pensamiento y la armonía: Alberto Masferrer y Francisco Gavidia. De Masferrer admiraban su doctrina humanitaria y de Gavidia, el cultivo de la historia, la filosofía, y la poesía autóctona. De forma muy sugerente y como prediciendo la futura constitución del Grupo Masferrer hicieron un llamado a la intelectualidad a unir esfuerzos para rescatar su legado: “Falta pues nada más, la agrupación del elemento y el desarrollo de la empresa, la revelación doctrinaria y el impulso organizado que debe llevarla a la conciencia de las clases, para reproducir la resurrección de la belleza”. 958 Arturo Acevedo Aguilar, “El Grupo Masferrer”, La Prensa, jueves 26 de octubre de 1933, No. 6,875, pág. 3, año XXI. 959 “Se dará el título de Doctor Honoris Causa a Pallais”, La Prensa, viernes 27 de octubre de 1933, No. 6,876, pág. 1, año XXI. “El Consejo Universitario de la Universidad de El Salvador decidió otorgar a Pallais tan distinguido reconocimiento por favorecer la cultura del país. 960 Arturo Acevedo Aguilar, “El Grupo Masferrer”, La Prensa, jueves 26 de octubre de 1933, No. 6,875, pág. 3, año XXI. 961 273 anticapitalista que percibía al judío como la materialización de lo comercial, mercantilismo que, según ellos, destruía la unidad de la nación. En el régimen nazi había un malestar en contra de lo que ellos llamaban la “época materialista judaizante”, la cual pretendía ser superada desde ciertos parámetros más culturizantes.962 Con esto no queremos decir, de ninguna manera, que el Grupo Masferrer fuera protonazista, pero sí que se movieron en un ambiente social donde ya estaban teniendo influencia los imaginarios fascistas y racistas, es más, Aguilar también afirmó que aparte de los prostíbulos, los casinos y el alcohol, la música negra era otro factor que estaba asfixiando la cultura salvadoreña. 963 Por otro lado, también es evidente que el Grupo Masferrer rechazaba el comunismo, ya que le manifestaron a Martínez que no harían “politiquería”, refiriéndose a que no difundirían ideas subversivas o disolventes sino que, por el contrario, harían campañas culturales y científicas. 964 Lo que el Grupo Masferrer pretendía era rehabilitar la doctrina de Masferrer, pero consideraban que muchos de forma maliciosa, la confundían con el comunismo965 al cual consideraban como una doctrina que estaba basada en una retórica antagónica pseudocientífica y en un materialismo vulgar. Los intelectuales dieron por sentado que su labor al igual que la de su mentor iba ser incomprendida, pero expresaban que no importaba, porque iban a gritar lo que ellos consideraran como “verdad”, concibiéndose a sí mismos como intelectuales de avanzada.966 Lilia Puig de Stubrin, “El modernismo reaccionario: una nueva categoría en el análisis social”, revista de Estudios Sociales No. 5, Universidad Nacional de Litoral, Argentina, 1993, págs. 174 y 175. 962 Arturo Acevedo Aguilar, “El Grupo Masferrer”, La Prensa, jueves 26 de octubre de 1933, No. 6,875, pág. 3, año XXI. 963 “Organización de la Universidad del aire”, La Prensa, jueves 12 de octubre de 1933, No. 6,863, pág. 3, año XXI. 964 “Hombres símbolos, consejo a los discípulos de Masferrer”, Diario Nuevo, jueves 9 de septiembre de 1937, No. 1,190, pág. 2, año IV. Los intelectuales se propusieron a demostrar que Masferrer no fue un comunista, por el contrario, consideraron que fue un patriota a la manera de los “próceres”, sin que sus ideas, tuvieran algo que ver con lo que ellos llamaban “ácidos comunistas” que tendían a disolver a la sociedad. Consideraron que Masferrer, quería que se hiciera justicia social y se alcanzará el bienestar material, pero dentro de un contexto democrático por lo que le hicieron un llamado a sus seguidores para que aclararan su doctrina, en lugar, des estar haciendo “cursi” poesía. 965 “Ya está circulando Germinal periódico del Grupo Masferrer”, La Prensa, viernes 10 de noviembre de 1933, No. 6,888, págs. 1 y 5, año XXI”. 966 274 En este sentido, es preciso decir que a partir de la reciente investigación de Rafael Lara-Martínez: Política de la cultura del martinato, en la actualidad resulta muy difícil asimilar como intelectuales de la talla de Salarrué y Gavidia apoyaron a Martínez, sobre todo, después del etnocidio de 1932, Miguel Huezo Mixco, incluso, ha escrito un artículo titulado “¿Perdonamos al General?” en el que se hace preguntas como: “¿Fue en aras de reconciliar a la sociedad salvadoreña que mentes lúcidas como las de Salarrué y Gavidia pusieron por aparte los excesos de Martínez? ¿Debiéramos también nosotros perdonar al general?”967 Quizás esta declaración emitida por el mismo Grupo Masferrer podría iluminar al menos la primera interrogante: No queremos ninguna complicidad con el pasado de errores y de crímenes. Somos enemigos irreconciliables de él, porque él no ha sido otra cosa que el cómplice de una gavilla de individuos que en esas épocas pretéritas hizo de este país un feudo medieval en donde cuatro señores insolentes hacían y deshacían esclavizando a millares de siervos e ilotas. Nuestra confianza está en el futuro. Nuestro patriotismo es esencialmente futurista. A eso venimos a “cumplir el programa” generoso que un gran poeta señaló para las juventudes de América y que está sintetizado en estas palabras: “forzar el tiempo, actualizar el porvenir”.968 Ahora bien, el Grupo Masferrer como parte de su misión cultural llevó a cabo un programa de pedagogía social que materializó en distintas formas. En primer lugar, organizó la “universidad del aire”, que comprendía de dos aspectos: 1) el desarrollo de conferencias referentes a temas artísticos y literarios así como la correcta formación del ciudadano por medio de la radio nacional y 2) la realización de cátedras colectivas en las instalaciones del Teatro Nacional. Dentro de los tópicos sobre los que versarían estas pláticas estaban: filosofía, problemas docentes, cuestiones sociales, estética, literatura y otras cosas del pensamiento. Ambos medios fueron solicitados al Presidente Martínez mediante carta con fecha 10 de octubre de 1933.969 967 Ídem. 968 Ídem. “El Grupo Masferrer va organizar la universidad del aire,” La Prensa, miércoles 11 de octubre de 1933, No. 6,862, pág. 1, año XXI. 969 275 En dicha misiva le expresaron a Martínez que reconocían que él desde su puesto de Jefe Supremo había sido uno de los salvadoreños que más se había distinguido por su empeño en redimir al país mediante la organización de una campaña pedagógica, es decir, el Grupo Masferrer vino a apoyar la política de la cultura, ya iniciada desde antes por el Presidente. Además, consideraban a Martínez como un hombre ilustrado y se evidenciarían de forma contundente sus intenciones de llevar a cabo un nuevo plan de Nación –al expresarle– que la educación moderna no le apostaba al individuo sino que se basaba en la real estructura del conglomerado, en las leyes inconmovibles que regían la física social y en obtener la “regeneración” de los individuos por medio de una intensa y extensa campaña de pedagogía colectiva. 970 Nótese como al utilizar el término “física social” hay cierto resabio de positivismo que concebía a la sociología como la única ciencia que resolvería todos los problemas nacionales. No obstante tales términos positivistas, le afirmaron que este procedimiento lo habían retomado de los griegos, que vieron en la plaza pública la cátedra más eficaz para elevar el nivel cultural de sus habitantes. El proyecto consistía, pues, en divulgar ideas dirigidas a construir una identidad propia y a formar un ciudadano más ético y civilizado.971 Los intelectuales creían que primero era necesario cambiar la conciencia nacional mediante la cultura, para después llevar al país a un nivel de desarrollo más Marta Casaús, Las Redes Intelectuales Centroamericanas…pág. 214. “Las diferentes concepciones del término regeneración alteraron los distintos enfoques sobre la idea de cultura, civilización, progreso, moral, y en particular, las diferentes estrategias de inclusión, integración o incorporación de las clases sub-alternas a la ciudadanía”. Este concepto, según la autora, no ha sido lo suficientemente estudiado por filósofos e historiadores centroamericanos, cuestión grave, ya que a partir del vitalismo y la teosofía, se reencauzó para romper el paradigma positivista y el proyecto liberal. 970 “El Grupo Masferrer va organizar la universidad del aire,” La Prensa, miércoles 11 de octubre de 1933, No. 6,862, pág. 1, año XXI. El Grupo Masferrer le solicitó al presidente Martínez las instalaciones del Palacio Nacional para realizar las conferencias de intelectuales invitados y para organizar la “Universidad del Aire” mediante el aprovechamiento de la Radiodifusora Nacional en la cual se escucharían dos breves disertaciones a la semana encaminadas a guiar a la población en la solución de sus problemas fundamentales, aclarándole expresamente que no cometerían el mismo error que los intelectuales de la generación anterior a quienes acusarían de ser los directamente responsables del atraso mental salvadoreño: “politiquear”. 971 276 avanzado. El elemento de discriminación racial contrario al positivismo y a lo que manifestó su admirador Acevedo Aguilar, no estaba presente en la configuración de sus ideales: No creemos en razas superiores, ni en razas inferiores sino sólo en elementos humanos susceptibles de engrandecerse a fuerza de insuflarles con afán el ideal de la solidaridad humana que actualmente se agita en todos los pueblos del orbe.972 El 17 de octubre de 1933, el Presidente Martínez a través de su secretario particular, Castellanos Rivas, invitó a los miembros de dicha agrupación para que se reunieran con él, con el único objetivo de intercambiar impresiones, lo que terminó de sellar de manera definitiva las buenas relaciones entre el Ejecutivo y los intelectuales:973 Cumplo órdenes del Señor Presidente de La República rogando a usted se sirva aceptar la invitación suya para cenar con él mañana miércoles 18, a las 7:00 p.m. en esta Casa Presidencial. El Sr. Presidente que tiene en gran estima a grandes artistas e intelectuales y aplaude con patriótico entusiasmo los propósitos y esfuerzos del Grupo Masferrer, con esta invitación se propone reunir en el número posible a tales distinguidos elementos con el único objeto de cambiar impresiones amistosamente.974 En dicha reunión el Presidente Martínez les concedió la radiodifusora nacional975 para desarrollar “la universidad del aire976”, la cual quedaron autorizados a utilizar en determinados días y horas de la semana conforme a un plan cultural que se elaboró posteriormente y para llevar a cabo los recitales públicos similares a los El Grupo Masferrer va organizar la universidad del aire,” La Prensa, miércoles 11 de octubre de 1933, No. 6,862, pág. 1, año XXI. 972 “El Presidente Martínez y el Grupo Masferrer”, La Prensa, miércoles, 18 de octubre de 1933, No. 6,868, pág. 1, año XXI. 973 974 Ídem. “La escuela del aire, sugestión de las masas”, Diario Nuevo, sábado 8 de mayo de 1937, No. 1,061, pág. 1, año IV. “El fracaso de la Universidad del aire, en fecha no muy lejana, había producido una especie de desaliento en los elementos que habían lanzado la iniciativa de aprovechar el moderno vehículo para intensificar la propaganda de cultura. Pero un examen sereno de las circunstancias en que se realizó aquel ensayo, por demás generoso y bien intencionado acabará por extirpar los residuos pesimistas y por hacer renacer el fervor en los círculos emparentados con aquel movimiento (…) por el hecho de contar con una planta poderosa ahora se podrá con facilidad suma, verificar una verdadera obra de pedagogía social, llevando el elemento idealista a las masas salvadoreñas. 975 “Comienza sus labores la universidad del aire”, La Prensa, lunes 21 de octubre de 1933, No. 6,872, pág. 1, año XXI. 976 277 del Padre Pallais977, les concedió el Palacio Nacional. A la referida reunión asistieron el Presidente Martínez y su esposa Concha de Martínez, Jacinto Castellanos Rivas, Adolfo Pérez Menéndez, Miguel Ángel Espino, Francisco Morán, Raúl Andino, Mercedes Viaud Rochac y Marta Alegría. El intercambio de impresiones se enfocó en la ideología que sostenía el Grupo Masferrer y los propósitos que pretendían alcanzar. La tertulia Ejecutivo-intelectuales fue prácticamente de filiación y coordinación:978 El Señor Presidente de La República quedó satisfecho del cambio de impresiones sobre los propósitos y tendencias culturales del grupo y los que asistieron a la cena se retiraron muy complacidos de las atenciones recibidas y de la gentileza del Primer Mandatario al colaborar en la forma indicada, en los fines que persigue la organización.979 El Grupo Masferrer solicitó la radio a Martínez porque, en ese momento, era considerada como el elemento tecnológico de punta para lograr el éxito en toda clase de actividades educativas dirigidas a la sociedad. Para ese entonces, sólo un grupo muy reducido de personas era considerado “culto” y no necesariamente era la clase adinerada.980 Salvador Cañas al referirse al proyecto de implementar un programa cultural por medio de la radio dijo que Fernando de los Ríos, ex ministro de instrucción pública en España, sostenía que ante la deficiente educación que se recibía en las “Militares e intelectuales”, La Prensa, lunes 16 de octubre de 1933, No. 6,966, págs. 1 y 3, año XXI. El Presidente Martínez, varios miembros de su gabinete e intelectuales se reunieron en el Círculo Militar, con objetivos puramente culturales, el Padre Pallais, pronuncio la conferencia titulada: Militares e intelectuales, en la cual hizo una reseña de la historia de la guerra desde los faraones hasta las luchas libertarias de Bolívar, de Napoleón, habló, en términos justicieros y de Grecia, además vertió conceptos originales: “Algo pasa en América dijo en una parte de su conferencia (…) veo aquí en unión fraterna a los militares, comerciantes e intelectuales (refiriéndose a Salarrué, Pérez Menéndez, Espino y Moran.) El Salvador en estos momentos puede ser un símbolo de concordia”. 977 “Es un hecho la universidad del aire: la cordial cena de anoche en casa presidencial”, La Prensa, jueves 19 de octubre de 1933, No. 6,869, pág. 1, año XXI. 978 979 Ídem. “Organización de la Universidad del aire”, La Prensa, jueves 12 de octubre de 1933, No. 6,863, pág. 3, año XXI. 980 278 aulas de ese país, dicho gobierno implementó este recurso.981 La radio en ese momento era vista como un elemento eficaz de extensión cultural.982 Cañas expresó que cuando Julio Enrique Ávila ocupó el mismo cargo, tuvo el proyecto de hacer algo parecido. Hubo, entonces, un consenso nacional de la necesidad urgente de adquirir dichos aparatos para levantar el nivel intelectual de las masas, sobre todo, el de las zonas rurales.983 Pero ahora que hemos podido comprobar de forma contundente la ligazón entre el Grupo Masferrer y el Presidente Martínez y antes de continuar con los medios de difusión cultural que dicha organización utilizó, creemos pertinente analizar dicha relación a la luz de la ideas de Antonio Gramsci, ya que para este pensador, en toda sociedad concreta existe un nexo entre intelectuales y Estado. Para el filósofo italiano, ya en el contexto de un sistema capitalista, ambos constituyen de forma conjunta, un aparato hegemónico de clase que se expresa en múltiples articulaciones y subsistemas.984 Esto tiene mucha relación con el apartado que estamos desarrollando, ya que Gramsci, precisamente establece que dos de estos sub-sistemas son: 1º) el cultural: teatros, bibliotecas, museos, etc., y 2º) el informativo: periódicos, revistas o cualquier otro medio escrito. Este aparataje le serviría al Estado para mantener el sistema “quo” burgués. Gramsci, a intelectuales como los del Grupo Masferrer los define “Un plan educativo por radio”, Diario Nuevo, miércoles 12 de junio de 1935, No. 477, pág. 3, año II. En 1935 hubo una reorganización de la Estación Radiodifusora Nacional conforme a un programa de acción artística dirigido por el Secretario Presidencial Castellanos Rivas, esté solicito la colaboración de un grupo de intelectuales y periodistas, para proponer en común un programa de trabajo coordinado por destacadas figuras del mundo artístico. Música y literatura serían las bases para culturizar a las masas humildes”. 981 “Las transmisiones por radio”, El Día, sábado 9 de diciembre de 1933, No. 4,262, pág. 1, año XIII. “Como se estudia en estos momentos, la instalación de una radiodifusora que nos ponga en contacto con todos los pueblos de la tierra, queremos decir algunas palabras que sobre las transmisiones que una vez instalada, dicha difusora ha de hacer para el prestigio del país (…) hablar de nuestro arte nacional, ya es necesario tomar nuestro folklore desde sus verdaderos puntos de vista, es decir, el folklore en su estado primitivo tal como lo expresa el pueblo, claro que no es arte pero constituye un elemento para hacer ese arte”. 982 Salvador Cañas, “Consideraciones a una plática de Francisco Morán”, La Prensa, martes 31 de octubre de 1933, No. 6,879, pág. 3, año XXI. 983 Christine Buci-Glucksmann, Gramsci y el Estado (hacia una teoría materialista de la filosofía), Biblioteca del pensamiento socialista, Siglo Veintiuno de España Editores, S.A., segunda edición en español, 1978, pág. 34. 984 279 como intelectuales tradicionales, que fungen como intercesores para acercar a las masas campesinas, terratenientes y el Estado. Esto desde su perspectiva, sería porque desean conservar sus privilegios de clase como pequeños o medianos terratenientes o simplemente como pequeño burgueses.985 Para él, ésta es una verdadera arquitectura reaccionaria del sistema. A estos intelectuales son a los que él llama “orgánicos” y efectivamente desempeñan una función política en la medida que el filósofo italiano sostiene que no hay intelectuales que hagan cultura pura, todo conocimiento es el resultado de una práctica y por tanto, ideológico, incluso, Gramsci llega a rechazar al intelectual pequeño burgués de izquierda, un ejemplo de éste sería George Lukács que sólo se reduciría a ser un continuador del intelectual burgués –claro está, en sentido opuesto,– ya que éste sólo se dedica a contradecir a los filósofos burgueses. Para Gramsci, toda filosofía del sistema anterior debe desaparecer y la única función del intelectual de izquierda debe ser concientizar y transformar el pensamiento del proletariado para lograr una verdadera transformación social.986 Hugues Portelli por su parte, sostiene que la clase dirigente, incluso en un sistema hegemónico no dirige a toda la sociedad sino solamente a las clases auxiliares y aliadas y que la clase opositora simplemente es coaccionada, es decir, en el Estado reaccionario siempre existen pequeñas cisuras. En el caso de Martínez, creemos que más que coaccionar a la oposición la reprimió, persiguió o exilió, por lo que en muchos casos debió reunirse subrepticiamente o sencillamente bajó el perfil para mostrarse como no contraria al sistema. Con el Grupo Masferrer, aunque parecería hubo una uniformidad absoluta, Portelli dice que la hegemonía nunca es total y que los intelectuales orgánicos que sirven a un régimen son simultáneamente dirigentes y dominantes.987 Son dominantes en el sentido que constituyen un grupo social que domina sobre otros grupos adversarios. En el contexto de la presidencia de Martínez, el 985 Ibídem, pág. 40. 986 Ibídem, pág. 42, 44, 45, 47. Hugues Portelli, Gramsci y el bloque histórico, Siglo XXI editores, 1ª edición en español 1973-22ª edición en español, 2003, 1998, pág. 75. 987 280 grupo dominado sería el conformado, principalmente, por los intelectuales marxistas y son dirigentes, porque dirigen a sus aliados con la ayuda del poder gubernativo. A este fenómeno es a lo que Gramsci llama “revolución pasiva”, o sea, la toma del poder por parte de la burguesía intelectual que decide identificarse con las capas populares en contra de la aristocracia económica a fin de neutralizar las otras capas sociales. Además, en este mismo esquema se trata de separar a las clases subalternas de sus representantes, que pertenecen a su misma clase. 988 En el caso de Martínez, es obvio que esto se dio mediante el ajusticiamiento de los líderes comunistas. Una vez explicado el enfoque gramsciano de los intelectuales habría que decir que el Grupo Masferrer ya contaba con la radio y el Teatro Nacional, pero necesitaba de otro medio de comunicación para complementar su pedagogía colectiva. Este era un periódico propio, mediante el cual sus miembros podrían analizar, discutir y proponer soluciones prácticas a todos los problemas socioeconómicos que aquejaban al Estado y a la ciudadanía, es decir, necesitaban de un órgano que, según ellos, serviría como un instrumento de discusión ecuánime,989 aunque como ya hemos explicado, desde el punto de vista de Gramsci, éste sólo sería otro instrumento ideológico de la clase hegemónica para mantener el sistema en coordinación con el Estado. Es en este sentido como mediante una reunión realizada en casa de María de Baratta el día martes 10 de octubre de 1933 se tomó el acuerdo de publicar un semanario cuyo director y redactores, serían los mismos miembros del grupo.990 De acuerdo con el plan organizativo, el periódico en referencia, constaría de varias secciones entre las cuales estaban la artística, la científica, la pedagógica y la meramente informativa. El periódico fue financiado por el mismo grupo 991 y 988 Ibídem, pág. 76. “Tendrá un periódico el Grupo Masferrer”, La Prensa, viernes 13 de octubre de 1933, No. 6,864, pág. 1, año XXI. El equipo de redacción de dicho rotativo quedo integrado por el Dr. Raúl Andino (Director) y los redactores: Adolfo Pérez Menéndez, Francisco Morán, Miguel Ángel Espino y Mercedes Viaud Rochac; don Francisco Espinoza fungió como secretario y don Joaquín Granillo fue el administrador. 989 990 Ídem. Raúl Padilla Vela, El fascismo en un país dependiente, la dictadura del General Maximiliano Hernández Martínez, cuadernos universitarios No. 2, Editorial Universitaria, Universidad de El Salvador, 1987, 991 281 algunos simpatizantes y su precio fue relativamente bajo, para que el pueblo pudiera disponer de él.992 El Semanario comenzó a circular con la denominación Germinal en las primeras semanas de noviembre de 1933 y fue impreso con nitidez en los talleres “Funes y Ungo”. La mayor parte de los trabajos que publicaba eran inéditos. En la primera edición aparecieron, por ejemplo, los siguientes artículos: “El libro de José Leiva” por Adolfo Pérez Menéndez, “La fiesta del indio” por Miguel Ángel Espino y “La inmortalidad infantil en El Salvador” por Francisco Espinoza”. El ideario programático inicial que apareció fue el siguiente:993 El Semanario Germinal, órgano del Grupo Masferrer nace a la vida pública con un programa ideológico que divulgar. El hecho que sirva de vocero al grupo de intelectuales, artistas y profesores que han enarbolado el nombre del maestro Masferrer como un luminoso “oriflourd,” está indicando con claridad que venimos a luchar denodadamente, con toda la fuerza de nuestros entusiasmos y de nuestra inteligencia, por realizar el programa “minimunvitalista” y civilizador que el encarnecido apóstol cuscatleco preconizó contra una serie interminable de lacras que han convertido al país en un organismo miserable.994 pág. 53. Tenemos que aclarar que el Grupo Masferrer no fue la única asociación cultural que existió durante la presidencia de Martínez, ya con anterioridad venía funcionando el Grupo Cactus, que también contó con su propio periódico y nació con objetivos muy similares, incluso, con integrantes en común: Los escritores y poetas formaron un grupo al que denominaron CACTUS, y estaba integrado por Salvador Cañas, Emma Posada, Mercedes Viaud Rochac, Serafín Quiteño, José Mejía Vides, Luis Mejía Vides, Rodolfo Jiménez Barrios, Salvador Escobar Ballesteros, Juan Miguel Contreras, Salarrué, Alberto Guerra Trigueros, José Quiteño, Jacinto Castellanos Rivas, Francisco Luarca, Mercedes Maiti de Luarca, María Luisa de Guirola, Ramón Hernández Quintanilla. Este grupo funcionó a los años subsiguientes de la matanza, y su año más activo fue 1933. Tendrá un periódico el Grupo Masferrer”, La Prensa, viernes 13 de octubre de 1933, No. 6,864, pág. 1, año XXI. 992 “Intensifica sus actividades el Grupo Masferrer”, jueves 16 de noviembre de 1933, No. 6,893 pág. 1, año XXI. “En estos días circulará el segundo número de Germinal órgano de dicho grupo. Pronto tendrá también un pequeño volumen con una selección de los valientes artículos de Masferrer sobre los problemas sociales salvadoreños. En reciente sesión quedaron nombradas las secretarías y comisiones del mencionado grupo en la forma siguiente: Secretaría del interior: Mercedes Viaud Rochac, Emma Posada y Arístides Salazar; Secretaría del exterior: Miguel Ángel Espino, Arturo Castro y Francisco Morán; Comisión de cultura indígena: Señora de Osborne, María de Baratta y Augusto Baratta; Comisión de exposiciones: Marta Alegría, Amada Alegría señorita Suay y Quino Caso, Comisión de prensa: Raúl Andino, Pérez Menéndez, Manuel Andino, Francisco Espinoza y Joaquín Méndez; Comisión de conferencias: Alfonso Rochac, Juan José Vaquero, Julio Cesar Escobar y Rafael González Sol y Comisión musical: Abe Ayala, Alejandro Muñoz, Carlos Baca, Carlos Recinos y Miguel Peralta”. 993 “Ya está circulando Germinal periódico del Grupo Masferrer”, La Prensa, viernes 10 de noviembre de 1933, No. 6,888, págs. 1 y 5, año XXI”. 994 282 En su artículo “La fiesta del indio”, Miguel Ángel Espino, expresó que había que cambiar la forma de concebir al indio. Sostenía que había que dejar de representarlo bajo la imagen melancólica de un ser sufrido desde la conquista y más bien reconstruir su herencia cultural, es decir, exaltar todo lo que el indio significaba como raza: “poderío físico, sentido religioso, instinto artístico, etc.” La idea era que se debían de dejar de hacer fiestas indias para el regocijo y satisfacción de los ladinos. El poeta, consideraba que se tenían que organizar las fiestas –por los indios y para los indios– y dejar que ellos mismos expresaran libremente su arte. 995 Espino, creía que a una verdadera exaltación indígena debían asistir caravanas repletas de indios a cantar, a danzar y a tocar sus instrumentos. Tenían que darse encuentro los alfareros de Ilobasco, los tejedores de Ízalco y los fabricantes de instrumentos musicales de los principales centros indígenas del país y por tanto, el indio, no tenía que ir más a los Juegos Florales del ladino sino que el ladino debía llegar a los Juegos Florales del indio y conocer su música, sus cuentos, sus leyendas, su mitología e incluso su hábitat natural, porque sólo a través de ellos se podía conocer su idiosincrasia viva:996 Somos una patria formándose. El fenómeno colonial está rectificándose, recortándose, reduciéndose. No hay razas privilegiadas, para regarlas como ejemplares por todas las tierras. Todas las tierras arrullan sus propias razas, y en la cuna prolífica toman la savia de su destino, su grado biológico y su trayectoria espiritual.997 Otro punto importante en el aspecto cultural fue que en octubre de 1933, la Asamblea Nacional nombró hijo meritísimo de El Salvador a Francisco Gavidia 998, Miguel Ángel Espino, “La fiesta del indio”, La Nación, San Miguel, domingo 31 de julio de 1938, No. 4,229, pág. 3, año XVII. (reproducido originalmente en el semanario Germinal, noviembre de 1933). 995 996 Ídem. 997 Ídem. “Los tres poderes del Estado van a estar en el homenaje a Gavidia”, La Prensa, miércoles 11 de octubre de 1933, No. 6,862, pág. 1, año XXI. La Asamblea Nacional, por medio de su secretaria nombró una comisión integrada por distinguidas personalidades que recibirían a Francisco Gavidia en el Salón Azul en donde se le entregaría el Decreto en virtud del cual se le otorgaba el título de “Salvadoreño Meritísimo.” Integraron dicha comisión: el Doctor Emeterio Oscar Salazar, el Doctor Enrique Córdova, el Doctor Héctor David Castro, el General José María Peralta Lagos, el General José Tomás Calderón, el General Andrés I. Menéndez y don Carlos Bustamante. 998 283 celebración de la cual el Grupo Masferrer también formó parte por considerarlo el “patriarca de las letras salvadoreñas”. 999 Adolfo Pérez Menéndez en homenaje al poeta dijo que en su composición Estancias, Gavidia exaltaba a los más grandes caciques indígenas, a los más grandes libertadores de América y a la gran figura de Francisco Morazán, a la cual llamó “el héroe de la cruzada nacionalista”. Pérez Menéndez, en este sentido manifestó que Gavidia era un taumaturgo de la evolución histórica de El Salvador, pero consideraba que donde daba más muestras de su grandeza como poeta, era en su obra Oda a Centroamérica donde podía observarse el agudo sentido sociológico de Gavidia a la hora de analizar los males de la región y por tanto, era un poema que debía darse a conocer en toda Centroamérica:1000 A un hombre de los quilates mentales de quien inicio al mago Rubén (Darío) en los secretos del ritmo, sólo se le hace justicia aquilatando su personalidad y divulgando su obra (…) Francisco Gavidia no es el poeta de El Salvador, es el poeta del Istmo. Cuando se reconstruya la nacionalidad centroamericana, es decir, cuando estos pueblos comiencen a vivir la vida del espíritu y comprendan con claridad sus grandes destinos, las generaciones del porvenir, mil veces más justicieros que nosotros, consagrarán a Gavidia al magno visionario, uno de los monumentos más altos e inconmovibles.1001 Pérez Menéndez consideraba que Gavidia había sido uno de los grandes investigadores y pensadores del siglo XIX, por lo que también expresó: “Don Francisco Gavidia es una universidad”. Otro de los homenajes del Grupo Masferrer a Gavidia fue plantearle a Martínez que, por cuenta del Estado, se le asignase una casa, la cual Gavidia rechazaría posteriormente, pero con el objetivo de que tal disposición no quedará en el olvido se celebró una importante junta con el solo objeto de discutir la forma en la que se debía actuar para adquirir los fondos para la compra de dicha casa. Se expusieron varias estrategias e incluso se organizó al interior del mismo grupo, un comité integrado por personas que pertenecían a la banca y profesionales universitarios entre los cuales cabe destacar como presidentes “También el Grupo Masferrer glorificara al maestro Gavidia”, La Prensa, jueves 12 de octubre de 1933, No. 6,863, pág. 1, año XXI. 999 Adolfo Pérez Menéndez, “Francisco Gavidia nuestro máximo poeta”, Diario Nuevo, sábado 6 de junio de 1936, No. 783, pág. 14, año III. 1000 1001 Ídem. 284 honorarios a Francisco Dueñas, Ángel Guirola y Benjamín Bloom. 1002 En su honor, también se fundó la biblioteca “Francisco Gavidia” cuyo objetivo fue hacer difusión de cultura en el país.1003 Hasta aquí hemos establecido que el Grupo Masferrer realizó una función cultural, pero no hemos determinado qué es lo que entendemos por “cultura”. Esto, precisamente, nos servirá para hacer algunas reflexiones finales en este apartado. Gustavo Bueno, en su ensayo La idea de cultura, establece que el concepto de cultura siempre es temporal y contextual y que jamás será unívoco, porque hay múltiples criterios para definir el fenómeno cultural, por ejemplo, a veces se habla de cultura como una totalidad: la cultura humana y a veces como una particularidad: cultura maya, cultura tolteca o cultura chichimeca.1004 Tratar de definir la palabra “cultura” para él, desborba los distintos ámbitos categoriales-conceptuales, ya que por ejemplo, no se puede hablar de la cultura azteca como algo fijo o acabado, porque ésta ha atravesado por varios períodos y se sigue transformando. Es por eso que cree que el concepto de cultura generalmente se emplea en forma indeterminada y abarca innumerables dimensiones. Otro ejemplo que cita es el del estudio de las diversas mitologías o de una ideología determinada, las cuales, según él, entrarían como fenómenos de estudio dentro de la filosofía de la cultura, pero lo que es importante destacar aquí es que los distintos criterios para formular los conceptos no se excluyen sino que pueden combinarse.1005 Jacinto Choza por su parte, cree que la cultura es algo mucho más radical que la razón, porque hablar de filosofía o ciencia es también hablar de cultura al estilo totalizador de Tylor, es decir, la cultura entendida como un todo complejo. 1006 “Quedo conformado el Comité pro-casa Gavidia”, La Prensa, jueves 28 de octubre de 1933, No. 6,877, pág. 1, año XXI. 1002 “La biblioteca Francisco Gavidia recibe un valioso donativo”, Diario de Ahuachapán, sábado 17 de septiembre de 1938, No. 4,657, pág. 1, año XV. 1003 Gustavo Bueno et al., Ensayos de filosofía de la cultura, Joan B. Llinares-Nicolas Sánchez Durá Editores, Biblioteca Nueva, S.L. Madrid, España, 2002, págs. 13, 14, 19. 1004 1005 Ibídem., pág. 18, 20 y 33. 1006 Ibídem., págs. 31 y 41. 285 Ahora bien, desde nuestra perspectiva, que se circunscribe en el contexto de la modernidad, creemos que la cultura del arte desarrollada por estos intelectuales masferrerianos se opuso a la cultura de la razón cienficista y de la razón ilustrada imperante en su medio, pues, los seguidores de Masferrer se presentaron predominantemente como intelectuales antiintelectualistas, según lo entendería la tradición crítico-analítica occidental. Este modelo de Nación, en base al arte, también puede encontrarse en los planteamientos de José Vasconcelos y Rodó, quienes buscaron construir un pensamiento sobre la cultura de su tiempo que debía oponerse a la excesiva dependencia de la tradición hispánica por un lado y al positivismo llevado al extremo por otro. Cuando en 1921 el Presidente de México, Álvaro Obregón, designó Secretario de Educación Pública a Vasconcelos, éste buscó una forma de humanizar al país a través de la elevación del nivel cultural de las mayorías a través del arte, es por eso que dijo: “El arte es la única salvación de México”. 1007 El programa de Vasconcelos, según Carlos Monsiváis, incluyó alfabetización, periodismo cultural, difusión y promoción artística y fomento de las artesanías. También le dio impulso a la literatura y promovió la creación de la Escuela Mexicana de Pintura, de la cual surgió un movimiento muralista, que posteriormente fue encabezado por el pintor Diego Rivera. Las artes invadieron todos los espacios públicos y se pretendió hacer un reformismo espiritual por vías pacíficas. El escritor Miguel Ángel Espino, por ejemplo, se vio muy influenciado por este movimiento estético cuando estuvo en México.1008 La crítica que podríamos realizar a estos proyectos culturales, es que se crearon visiones idealizadas del mundo indígena. Además, lo indígena fue utilizado como fundamento de identidad por las elites criollas y desde una óptica que se aleja a la visión orgánica de Gramsci, creemos que otra posibilidad podría haber sido que los masferrerianos pudieron haber caído en una ingenuidad política, por querer llevar a la práctica estos nobles ideales, pero indirectamente y al mismo tiempo, Miguel Ángel Espino, Obra Narrativa, Colección Orígenes, Vol. No. 24, 1º Ed., Dirección de Publicaciones e impresos CONCULTURA, 2007, págs. 16 y 19. 1007 1008 Ibídem, págs. 19 y 20. 286 legitimar la presidencia irregular de Martínez.1009 Ahora bien, parece ser que la manera de ver el arte de Miguel Ángel Espino, fue la que predominó en los intelectuales del Grupo Masferrer: Tradición, pedagogía, filosofía y cultura: tales los componentes de ese ambicioso proyecto intelectual. La pedagogía es importante en esa paidea que propone Espino. Habría, pues, que desterrar el pensamiento positivista –que le da validez científica a lo cuantificable y mensurable– de la educación. Sería una pedagogía que estimule el amor al arte, a la estética y a la imaginación. Los positivistas dirá son “matadores de almas, asesinos del sentimiento y del ideal”. Urge romper con la dictadura del racionalismo, contranatural a la imaginación de los niños y de los pueblos como los nuestros (…) Concebir esa paidea iberoamericana pasa por asumir nuestras raíces prehispánicas.1010 5- El Grupo Masferrer y el ideal unionista: Azarías Pallais al partir de El Salvador, se convirtió en el vocero internacional del Grupo Masferrer, llevó su mensaje y objetivos a los intelectuales de Honduras y Nicaragua a quienes les expresó que en El Salvador se había iniciado una labor titánica de civismo encaminada a la salvación del alma nacional que por tanto tiempo había permanecido estancada en el letargo de la rutina del ambiente. 1011 Para Pallais, el Grupo Masferrer trataba de difundir convincentemente la esencia de la cultura salvadoreña1012 a partir de la cual se orientaría mejor la evolución social y moral del pueblo, promoviendo una agitación saludable en la conciencia colectiva y forjando la idea de “patria” desde un punto de vista idealista como una institución espiritual sin fronteras materiales, donde los elementos afines 1009 Ibídem, pág. 23. 1010 Ibídem, pág. 40. “Mensaje del Grupo Masferrer a los intelectuales de Honduras y Nicaragua”, La Prensa, miércoles 1º de noviembre de 1933, No. 6,880, pág. 1, año XXI. 1011 “La asociación cívica y la cultura”, Diario Oficial, Suplemento La República, sábado 21 de octubre de 1933, No. 266, pág. 1, año I. Es interesante observar cómo además del “Grupo Masferrer” surgieron otras agrupaciones similares con fines semejantes: “Hay iniciativas que por sí solas se manifiestan como el más alto reflejo del espíritu (…) hoy nos referimos al proyecto que, sobre la fundación de una escuela pública en esta capital, tiene en miras la Asociación Cívica Salvadoreña”. Otro ejemplo de esto fue La Sociedad pro-Grupo Escolar respaldada por el Gobierno. 1012 287 del territorio americano se ayudarían, comprenderían y trabajarían juntos hacia un mismo fin, el cual era crear una unidad fraterna entre los países:1013 El Grupo Masferrer, nacido al calor de las inminentes realidades de orden retardatario, que nos rodean con mayoría inquietante, ha desenvuelto su bandera y comenzado a agitar noblemente las doctrinas más generosas, llenas de savia vitalizante y renovadora, para despertar en el alma de las mayorías atrasadas, un interés ferviente por el mejoramiento social y el ideal clásico de la democracia perdurable.1014 La idea era que cada grupo de intelectuales en la región trabajara por los mismos ideales en sus respectivos países, construyendo así una nueva nacionalidad centroamericana. El Grupo Masferrer por su parte, confió en la buena interpretación que Pallais había hecho de los postulados masferrerianos, los cuales le encargaron, transmitiera donde quiera que fuera: Al saludar a las juventudes luchadoras de los dos Repúblicas hermanas (Honduras y Nicaragua) que visitará el padre Pallais, el Grupo Masferrer hace votos férvidos porque la victoria en las nobles lides que nos hemos impuesto, corone los anhelos de la intelectualidad centroamericana.1015 En este sentido, los intelectuales salvadoreños también trabaron muy buenas relaciones con los guatemaltecos, ya que consideraban eran países con muchas similitudes; se produjo un acercamiento a través del intercambio “regular” y “creciente” de obras como: libros, revistas, periódicos, folletos, etc. El Gobierno también participó en esta interrelación, envió el Diario Oficial y el boletín institucional, ejemplares del Ateneo, el boletín de la Junta Nacional Antianalfabeta y el Mínimum Vital de Alberto Masferrer entre otros.1016 Aprovechando el viaje de Jacinto Castellanos Rivas a la República del Uruguay, el Grupo Masferrer, también lo designó en junta general, para que llevase su representación ante los miembros de la intelectualidad de aquel país; extendiéndole la respectiva credencial que fue suscrita por Adolfo Pérez Menéndez, “Mensaje del Grupo Masferrer a los intelectuales de Honduras y Nicaragua”, La Prensa, miércoles 1º de noviembre de 1933, No. 6,880, pág. 1, año XXI. 1013 1014 Ídem. 1015 Ídem. “El intercambio intelectual guatemalteco-salvadoreño”, La Prensa, jueves 7 de diciembre de 1933, No. 6, 911, pág. 5, año XXI. 1016 288 Carlos Bustamante, Manuel Andino y Miguel Ángel Espino. El objetivo fue hacer propaganda multiforme de las nuevas ideas que estaban surgiendo en América. Dentro del texto de la misma se hacía hincapié en la necesidad urgente de acercar de forma eficaz a las vanguardias espirituales de todos los pueblos del continente, con el objetivo de construir una doctrina de acción conjunta que pudiera precisar las bases de un programa difusivo.1017 El Grupo Masferrer1018 creía que el continente americano de ese momento se encontraba dislocado en cuanto a su identidad común, ya que a través de la historia, todos sus pueblos se habían dividido fruto de las diferentes visiones políticas que habían prevalecido en cada uno de ellos, relegando los aspectos regionales, por lo que creyeron indispensable iniciar un proceso que trajera de vuelta la idiosincrasia continental, haciendo énfasis más en sus semejanzas que en sus diferencias, iniciativa que podría aproximarse al ideario de lo hispanoamericano. 1019 En realidad, en el Grupo Masferrer subsistía el ideal unionista que habían trazado Masferrer y Salvador Mendieta. En este sentido, Adolfo Pérez Menéndez en el prólogo a una conferencia de Mendieta, dejó sentir su apoyo a la causa unionista de ambos autores: Por eso no debe de sorprendernos que a hombres como Mendieta, como Masferrer y otros raros, que han consagrado su vida a la consecución de los más generosos ideales regeneradores, que han vivido ideas más amplias se les juzgue como utopistas o lunáticos (…) la vida de Salvador Mendieta será considerada como un noble paradigma para las generaciones futuras, pues nadie como él ha sabido consagrarse en cuerpo y alma a la realización de una idea excelsa, como es y será siempre la de constituir de estos cinco municipios centroamericanos una nacionalidad más digna de tal nombre.1020 “Representación del Grupo Masferrer ante los intelectuales del Uruguay”, La Prensa, lunes 24 de octubre de 1933, No. 6,873, pág. 1, año XXI. 1017 “Nuevos elementos en el Grupo Masferrer”, La Prensa, jueves 3 de noviembre de 1933, No. 6,881, pág. 5, año XXI. Se integraron al grupo: Matilde Suay, Francisco Aguilar Villacorta, Mauricio Gallardo, Roberto Álvarez, Luis Contreras y el Dr. José Leiva. 1018 “Representación del Grupo Masferrer ante los intelectuales del Uruguay”, La Prensa, lunes 24 de octubre de 1933, No. 6,873, pág. 1, año XXI. 1019 Adolfo Pérez Menéndez, “Prólogo a la primera conferencia del Dr. Salvador Mendieta”, Diario Nuevo, viernes 14 de diciembre de 1934, No. 327, pág. 7, año II. 1020 289 Salvador Mendieta conoció a Adolfo Pérez Menéndez en una de sus cruzadas unionistas por Guatemala en 1929 y apoyó la reforma universitaria que Pérez Menéndez intentó llevar a cabo en El Salvador, ya que para Mendieta dicha reforma ayudaría a unir a los pueblos de Centroamérica que, según el nicaragüense, se encontraban separados y aislados, existiendo entre ellos, inclusive, hasta un recelo hostil. Mendieta creía que sí los cinco países del istmo se unían, Centroamérica saldría de su anonimia internacional y de su impotencia económica, de ahí que el unionismo estaba íntimamente ligado al antiimperialismo ya que se buscaba que Estados Unidos ya no interviniera en la economía regional: 1021 ¿Continuaremos siendo un pueblo descoyuntado que cultiva en el interior un localismo cavernario y suicida con nombre falso de nacionalismo; y se somete en el exterior con mansedumbre de siervo a la explotación extranjera? ¿No existe por consiguiente un pueblo centroamericano, de indestructible solidaridad sino que existen cinco pueblos distintos entre sí, capaces de vivir y prosperar separadamente y de tendencias heterogéneas, opuestas e irreductibles? Todas esas no contestadas interrogaciones van contenidas en la inquietud juvenil salvadoreña, como van contenidas en la inquietud juvenil de Costa Rica, de Nicaragua, de Honduras y de Guatemala.1022 6- El Grupo Masferrer y su función vitalista Hemos visto como el Grupo Masferrer conservó el ideal unionista, ahora veremos cómo difundió el Mínimum Vital a través de una serie de conferencias dentro de la cual “La patria del porvenir” fue la primera. En ésta Raúl Andino expuso los ideales de la entidad a la cual pertenecía, en relación con sus trabajos económicos, educativos y morales dirigidos al engrandecimiento de la Nación, en sus diversas manifestaciones de progreso. Andino, habló sobre los esfuerzos que habían que realizarse para alcanzar un mayor grado de bienestar social, en el que se reconocieran los derechos de las clases trabajadoras para de este modo, impedir la intemperancia violenta de las masas, (seguramente haciendo alusión a la insurrección campesina de enero de 1932) y que también precisaba que los trabajadores Salvador Mendieta, “Inquietud juvenil salvadoreña”, La Prensa, martes 11 de diciembre de 1934, No. 7,493, págs. 1 y 3, año XXI. 1021 1022 Ídem. 290 reconocieran sus deberes y derechos dentro de la sociedad y el Estado 1023, es decir, el Grupo Masferrer propuso una nueva reconciliación nacional en base a nuevas relaciones sociales armónicas.1024 Andino manifestó que el Grupo Masferrer no era un núcleo de personas con propósitos individualistas e interesados con miras a la obtención de altos puestos en la administración del Presidente Martínez, sino que era una institución cultural que anhelaba llevar adelante un programa ideológico fundamentado en Alberto Masferrer, el cual también estaba en consonancia con las graves necesidades de la época.1025 La segunda conferencia fue dictada por Francisco Morán, e iba en la misma dirección vitalista que la de Andino, la cual fue titulada: “La necesidad de valorizar el trabajo de los humildes”. En dicha plática, Moran describió la difícil situación económica de los comerciantes capitalinos como la de las vendedoras de frutas quienes viajaban desde los pueblos a la ciudad bajo un sol implacable con pesadas cargas, por las cuales obtenían míseros ingresos al vender sus productos, que apenas les alcanzaba para el mantenimiento de sus familias:1026 La dueña de la tienda no toma en cuenta que la pobre indita ha caminado leguas, soportado sol, lluvia, o polvo. Que en la casa le esperan tres o cuatro hijitos a quienes llevará alimentos o medicinas. Nada de esto le importa a la dueña de las tiendas. Precisamente, su negocio consiste en comprar barato y vender caro, aunque sacrifique miserables vidas de gentes sin amparo.1027 Esta fue la dura y verídica realidad que Morán expuso en su conferencia, señalando la actitud inhumana de los comerciantes de engañar a los indígenas, rebajando los precios de sus mercancías hasta cantidades ínfimas risibles, por lo que se consideraban “listos”, engaños que también realizaban con los vendedores de “Anoche con la conferencia de Andino quedo inaugurada la universidad del aire”, La Prensa, miércoles 25 de octubre de 1933, No. 6,874, pág. 1, año XXI. 1023 1024 Ídem. Ídem. El profesor Francisco Morán pronunció unas bellas palabras iníciales referentes a las actividades desarrolladas por el Grupo Masferrer. 1025 “La interesante conferencia del Profesor Moran”, La Prensa, sábado 28 de octubre de 1933, No. 6,877 pág. 1, año XXI 1026 1027 Ídem. 291 leña. En cuanto a los obreros, Morán dijo que, por ejemplo, el carpintero ofrecía el juego de muebles a un precio determinado, pero que al comprar las maderas y contratar la mano de obra, en ocasiones, perdía debido a los excesivos gastos no previstos, lo cual no le importaba al dueño de la obra quien más bien regodeaba y alardeaba de estas pérdidas. Ante todos estos casos, Morán veía la necesidad de humanizar más a la sociedad:1028 Quitarnos esta costra de barbarie, que no es otra cosa que el no saber valorizar el trabajo de los humildes, por malicia y zanganada. El día que exista una legislación inteligente y justa que vele por el trabajo de las masas y haya autoridades capaces de hacerla cumplir, estos salvajismos desaparecerán de nuestro país.1029 Por este motivo de legislar leyes justas, fue que el Grupo Masferrer quiso incursionar en la vida política para la elección de diputados de San Salvador a celebrarse en el mes de enero de 1934. 1030 Se disputaban las plazas de tres diputados propietarios y dos suplentes. Su intención era crear iniciativas de ley que trajeran mayores beneficios para las clases trabajadoras, tal como lo hizo Masferrer en su momento. La candidatura realizada por los masferrerianos estuvo integrada por: Francisco Morán, Manuel Barba Salinas y Joaquín Castro Canizáles. 1031 Salvador Cañas calificó la plática de Morán, como de muy bien intencionada, pero añadió que era necesario llevarla a la práctica desde dos ángulos, primero mediante la concientización de los acaparadores y especuladores –a quienes estas palabras generalmente les resbalaban– y segundo, mediante una reestructuración social más humana, cimentada sobre bases efectivas, es decir, no solamente era necesario analizar estas cuestiones sociales, económicas y políticas a la luz de las ideas de Masferrer sino que también era necesario llevar a cabo planes concretos de 1028 Ídem. 1029 Ídem. “Las elecciones de diputados”, La Prensa, lunes 15 de enero de 1934, No. 6,953, pág. 1, año XXI. Al parecer en el campo político los masferrerianos no tuvieron mucho éxito, ya que según una noticia de La Prensa los diputados propietarios electos fueron: José Gregorio Saravia, Ricardo Fuentes M. y Rafael Antonio Jarquín y los suplentes fueron Manuel Atilio López y Eusebio Argueta. Lo que sí es innegable, es que trataron de seguir los pasos de Masferrer en todas sus dimensiones. 1030 “El Grupo Masferrer lanza su candidatura para diputados”, La Prensa, lunes 8 de enero de 1934, No. 6,952, págs. 1 y 4, año XXI. La Prensa incluso prometió publicar el programa que los diputados del “Grupo Masferrer” defenderían en caso de ser electos. 1031 292 reorganización social que fueran produciendo paulatinamente un mayor grado de bienestar para las clases humildes del país.1032 La crítica que Cañas le hizo a Morán es la que siempre se le ha hecho a Masferrer sobre ser una doctrina “utópica” que tiene el defecto de que mientras persistan las injusticias del sistema, siempre va a ser irrealizable. 1033 Para Cañas, los grandes agitadores de la época no desconocían esto, por lo que se adherían a posturas un tanto más radicales como la de Carlos Mariátegui quien tenía una postura de lucha con más énfasis en las cuestiones meramente económicas. Cañas tal vez hizo tal afirmación, porque Mariátegui en su ensayo El problema de la tierra sostenía que el problema del indio, era un problema fundamentalmente económico-social y no pedagógico, étnico o moral. 1034 Esto lo reafirma en su ensayo El problema del indio cuando sostiene que la teoría socialista descubre el problema del indio en la economía y no en lo administrativo, jurídico, eclesiástico o en las condiciones culturales o morales del medio.1035 Pero, claro, esto no debe mal interpretarse, ya que no es que el filósofo peruano no considerará importante todos los demás aspectos sino que como muy bien lo señala Cañas consideraba –obviamente influenciado por la teoría marxista– que lo más importante a la hora de tratar el problema del indio, era lo económico y la tenencia de la tierra, específicamente, atacaba el sistema feudal, incluso sus ensayos fueron publicados en el orden de importancia que el mismo Mariátegui les concedió: Esquema de la evolución económica, El problema del indio y El problema de la tierra.1036 Ahora bien, el pensamiento de Mariátegui fue muy variado al igual que el de Masferrer. El ensayista trató toda la gama de problemas que afectaban al indio y a la 1032 Ídem. Salvador Cañas, “Consideraciones a una plática de Francisco Morán”, La Prensa, martes 31 de octubre de 1933, No. 6,879, pág. 3, año XXI. 1033 Carlos Mariátegui, El problema de la tierra, biblioteca virtual universal, 2003, págs. 1, 2. Disponible en: JC Mariátegui - Realidad Nacional. Primer Tomo. Lima: Peisa, 1974 - biblioteca.org.ar. 1034 José Carlos Mariátegui, Siete ensayos de interpretación de la realidad peruana, Colección literatura Latinoamericana, casa de las Américas, La Habana, Cuba, 1978, pág. 27. 1035 1036 Ibídem, págs. XV, 1, 27 y 45. 293 sociedad peruana en general: educación, imperialismo, literatura, trabajo, vivienda, religión, reforma universitaria etc.1037 Si nos remitimos a su obra de Ensayos escogidos el abanico se amplía aún más: arte, feminismo, política, unionismo, filosofía moderna, marxismo, fascismo etc. Probablemente lo que Cañas no compartía con Mariátegui es que éste tenía un enfoque de interpretación de la realidad predominantemente marxista,1038 pero es innegable que su indigenismo influyó en el vitalismo masferreriano. Muestra de lo antes dicho, es que, Alfonso Rochac en una conferencia titulada La cultura india dictada en 1929 en San Pedro Sula y publicada en Patria el mismo año, mencionó que en América estaba tomando impulso un nuevo movimiento en favor del indio y que sus principales precursores eran: José Mariátegui, Luis Barcárcel, Guevara y otros en el Perú que hacían sus luchas a través de revistas como: Amauta, La sierra y el boletín Titikaka.1039 Al final de su crítica, Cañas mencionó que Morán estaba en lo correcto al querer promover más los derechos de los sirvientes, lavanderas y empleados a quienes sólo se les exigían obligaciones, pero a quienes se les tenía muy desmejorados en sus condiciones laborales, como sueldo, que variaba entre 5 y 12 colones, que prácticamente eran las sobras del patrón. La denuncia también iba dirigida a que los sirvientes generalmente eran tratados de forma grosera y despectiva.1040 Morán incluso se refirió a la actitud antiética de los patronos de descontar los gastos médicos del mismo sueldo mísero del trabajador, lo cual agravaba aún más su precaria situación. Además, explicó que recibían una muy mala alimentación y cotidianamente eran objeto de despedidos injustificados sin que estos pudieran quejarse con nadie, pero por sí todo esto fuera poco, también eran sometidos a 1037 Ibídem, págs. XVI, 115, 91, 107, 180, 181, 182, 300. José Carlos Mariátegui, Ensayos escogidos, Perú, Editorial Universo S.A., 2ª Ed., 1974, págs. 2, 3, 4, 48, 77. 1038 “Conferencia de Alfonso Rochac en San Pedro Sula, Patria, miércoles 9 de octubre de 1929, No. 434, pág. 3, año II. 1039 Salvador Cañas, “Consideraciones a una plática de Francisco Morán”, La Prensa, martes 31 de octubre de 1933, No. 6,879, pág. 3, año XXI. 1040 294 extensas jornadas de trabajo que iban desde las 7:30 a.m. a 12.00 del mediodía y de 1:30 p.m. a la 5:00 o 6:00 p.m., por lo que también se hacía necesario delimitar los períodos laborales:1041 Sí, Francisco Morán, justicia y no caridad. Como dijiste muy bien: “En nombre de la caridad se han levantado estatuas.” Yo agrego: “Y encubierto muchas picardías”. Debemos pedir justicia. No habrá paz, mientras no conquistemos justicia. Haremos bella literatura con el tema de la paz; pero, cuando menos lo sintamos y pensemos, nos pedirán justicia.1042 Pérez Menéndez por su parte, consideró que el Grupo Masferrer no tenía ni tres meses de haberse formado y sin embargo a pesar de que no estaba muy bien compactado, todos sus elementos estaban de acuerdo en seguir el Mínimum Vital que se basaba en un sentimiento de responsabilidad frente las urgentes necesidades colectivas.1043 Según su visión, en El Salvador todavía se estaba en la “medianoche” de la que hablaba Máximo Jerez, refiriéndose a que había personas que ejercían una influencia decisiva en los destinos colectivos de la Nación debido a su posición económica, política o social, pero que eran indiferentes a que la misma permaneciera estancada, es decir, sólo se preocupaban por garantizar sus propios intereses: Estamos en pleno siglo XX a más de cien años de la fecha de la independencia, y todavía nuestras castas privilegiadas no han logrado comprender, o hacen como que no comprenden, que las ideas únicamente se combaten con ideas mejores, y que un pueblo no puede subsistir si no está organizado a la luz de la justicia. 1044 Lo anterior se interpretaba como que no sólo era necesaria la “libertad” sino que también “el pan” en las mesas, tal y como lo creía Masferrer al decir: “no sólo de pan vive el hombre, pero es lo primero que necesita para vivir”, por lo que La Prensa también se unió a la misión espiritual de reivindicar al gran ensayista en contra 1041 Ídem. 1042 Ídem. Adolfo Pérez Menéndez, “Labores del Grupo Masferrer”, La Prensa, sábado 16 de diciembre de 1933, No. 6,919, pág. 16, año XXI. 1043 1044 Ídem. 295 de la opinión de sus detractores. Curiosamente parafrasearon a Martínez en uno de sus discursos:1045 Venimos a combatir el comunismo, pero no con las armas contraproducentes de la violencia, de la incomprensión, sino que con las de la justicia. Pensamos en nuestro actual mandatario: “no son las ametralladoras que conjurarán el peligro de la catástrofe social inminente sino una organización social más humana”. 1046 Bajo esta misma línea de ideas, el Diario Nuevo nunca perdió su espíritu vitalista, incluso un año antes del derrocamiento de Martínez, en su sección de “filosofía, arte y letras” publicó el artículo “Alberto Masferrer y los problemas sociales”, el cual fue escrito por Alberto Quinteros y verificado en la estación de radiodifusión nacional el jueves 4 de septiembre de 1941. El mismo hacía énfasis en que no se debía separar nunca el pensamiento de la acción. Quinteros reconocía que existen dos tipos de acciones: una inmediata y otra a largo plazo y que el hombre de pensamiento debe fincar sus esperanzas tanto en la una como en la otra.1047 Para el autor, hacer pensamiento por el pensamiento mismo era algo inútil, apelaba a la unión entre obreros manuales e intelectuales quienes, según él, habían llegado a desconfiar tanto el uno del otro debido a la teoría marxista y porque los intelectuales absortos en sus abstracciones filosóficas y artísticas abandonaron su responsabilidad social, creyendo que los problemas sociales, eran algo que no les correspondía resolver a ellos.1048 “No sólo de pan vive el hombre”, La Prensa, viernes 29 de septiembre de 1933, No. 6,852, pág. 1, año XXI. “La culpa de ese innoble prosaísmo de la vida salvadoreña no hay que atribuirla solamente al analfabetismo de nuestras masas proletarias, que no son responsables de su incultura, sino que a la indiferencia punible de nuestras clases letradas o semiletradas, a su egoísmo y a su espíritu mercantilista, que son las características de lo que aquí se llama la “sociedad” que solo es sociable cuando se trata de bailar o juerguear; pero que nada tiene de social en el alto y verdadero sentido; porque la sociabilidad es cooperación, ayuda y solidaridad (…) tiempo es ya de reaccionar contra ese concepto positivista y materialista de la existencia que tienen la gran mayoría de los salvadoreños, porque en la vida no solo el hartazgo, los placeres materiales y la saciedad de los bajos apetitos de la carne cuentan, sino que también hay que atender a las elevadas necesidades de la inteligencia y del espíritu que nos diferencian y nos ponen por encima de las bestias”. 1045 “Labores del Grupo Masferrer” La Prensa, sábado 16 de diciembre de 1933, No. 6,919, pág. 16, año XXI. 1046 Alberto Quinteros, “Masferrer y los problemas sociales”, Diario Nuevo,, sábado 4 de septiembre de 1943, No. 2,990, págs. 3 y 7, año X 1047 1048 Ídem. 296 Era necesario hacer comprender que el trabajo del intelectual tenía que estar en estrecha relación con los ideales del obrero, que, precisamente fue lo que enseñó Masferrer a través de su obra. Para Quinteros, la doctrina del Mínimum Vital seguiría vigente en el país mientras existieran miserias que erradicar y por tanto, no había que perder de vista jamás la dura realidad de las condiciones de vida no sólo en El Salvador sino que en todos aquellos países donde hubiera hambre y enfermedades:1049 Alberto Masferrer fue diáfano y sencillo y siempre sostuvo la tesis de que la obra del intelectual, del científico, del artista, como toda obra humana es el resultado del esfuerzo colectivo de muchos.1050 El artículo defendió la idea de que los hombres no pueden vivir aislados unos de otros y que es importante reconocer el valor del trabajo de todos, ya que aunque no se perciba, todos contribuyen al progreso de la Nación, aún las labores que creemos irrelevantes como: cocinar, lavar, planchar, cortar el césped, recoger leña, fabricar jabón, fabricar calzado, etc. Todo es un trabajo interrelacionado sin el cual el intelectual tampoco puede subsistir, por tanto, había que inculcar el noble valor de la “colaboración” para que el país pudiera obtener un sentido como Nación. 1051 Para él, parafraseando a Masferrer, el Mínimum Vital era: Una fe, una manera nueva, sencilla y justa de comprender y de sentir las relaciones humanas: es un concepto nuevo de la vida; una nueva manera de hablar a la conciencia y de traducir en hechos e instituciones las sílabas de esa nueva palabra.1052 En ese sentido era: 1º Trabajo higiénico, perenne, honesto y remunerado en justicia; 2º Alimentación suficiente, variada, nutritiva y saludable; 3º Habitación amplia, sana, soleada y aireada; 4º Agua buena y bastante; 5º Vestido limpio, correcto y buen abrigo; 6º Asistencia médica y sanitaria; 7º Justicia pronta, fácil e igualmente accesible a todos; 1049 Ídem. 1050 Ídem. 1051 Ídem. 1052 Ídem. 297 8º Educación primaria y secundaria eficaz, que forme hombres cordiales, trabajadores expertos, y jefes de familia conscientes; 9º Descanso y recreo suficientes y adecuados para restaurar las fuerzas del cuerpo y del ánimo.1053 La disertación finalizó con una observación sobremanera importante, estableciendo que Masferrer no quedó derrotado si se juzgaban los resultados con mirada amplia, pero que todavía había mucho por hacer. Al parecer, Masferrer siguió siendo la brújula ideológica de los intelectuales hasta en los últimos días de la gestión de Martínez y probablemente después.1054 Esto parece ser confirmado por el artículo de Salvador Cañas publicado en La Prensa Gráfica en 1942, titulado “Alberto Masferrer, guía inmortal”: Nadie puede regatearle a Masferrer el mérito de haber sido el precursor de grandes ideas edificantes. Abrió los caminos para que otros continuaran la obra (…) Por doquier se examinan la acción y el pensamiento de este pueblo, se encuentra la huella del maestro. Si se inicia una labor plausible, o se repara una injusticia, o si perdura el error nefasto, por ignorancia o propósito deliberado, vemos siempre a Masferrer, atalayante, sereno o violento, señalando rutas. 1055 Finalmente, otro artículo donde está presente el espíritu vitalista a finales de la gestión de Martínez, es el titulado “Alberto Masferrer y los derechos proclamados por Roosevelt”, también de Alberto Quinteros, en el cual el autor hizo una comparación entre el “Plan Social” enviado por Roosevelt al Congreso de su país en 1942 y el Mínimum Vital, ya que ambos contenían nueve puntos esenciales, que abarcaban todos los aspectos para realizar una renovación integral de las condiciones materiales existentes en todos los países del mundo. En el mismo, expresó que era necesario llevar a cabo la erradicación de todos los monopolios que subsistieran ilegalmente y crear una nueva forma de organización social:1056 Las doctrinas económico-sociales de Alberto Masferrer en su mínimum vital han recibido, pues, una corroboración que es, al mismo tiempo su triunfo (…) Tarde o temprano habrá la humanidad de aceptar esos derechos que modifican las 1053 Ídem. 1054 Ídem. Salvador Cañas, “A. Masferrer, guía inmortal”, La Prensa Gráfica, miércoles 28 de enero de 1942, No. 9,949, pág. 5, año XXVI. 1055 Alberto Quinteros h., “Alberto Masferrer y los derechos proclamados por Roosevelt”, La Prensa Gráfica, miércoles 4 de marzo de 1942, No. 9979, pág. 5, año XXVII. 1056 298 instituciones y costumbres existentes, para entrar con amplitud en el sendero de la paz, la justicia y el progreso. Nuestro Masferrer llegará a ser entonces, como ya se vislumbra, uno de los precursores del verdadero nuevo orden.1057 7- El Grupo Masferrer y la reivindicación de la mujer: En el último apartado hemos estudiado la función vitalista del Grupo Masferrer, a continuación analizaremos su lucha por la reivindicación de la dignidad de la mujer. El 12 de noviembre de 1933 el Grupo Masferrer organizó un certamen pictórico infantil en la escuela primaria Francisco W. Cisneros a cargo de José Braulio Rivera. El suceso fue coordinado por los pintores José Mejía Vides y Alfredo Cáceres Madrid, quienes lograron con el apoyo de sus discípulos pintar cuadros y ejecutar grabados en linóleum usando para ello su libre albedrío y propia inspiración. Las pinturas elaboradas por Mejía Vides y Cáceres Madrid fueron donadas desinteresadamente a la referida escuela. 1058 Esta exposición se realizó con motivo del cumplimiento de los 101 años de la muerte del prócer salvadoreño José Matías Delgado. Entre pinturas y grabados se llegó a una colección de más de 400 trabajos, los cuales fueron seleccionados rigurosamente por Salarrué dentro de un número mayor. Según la percepción de expertos de la época, fue la primera exposición de este género en el país, tanto por el número de los trabajos como por su calidad.1059 El acto fue presidido por el Ministro de Relaciones Exteriores, Miguel Ángel Araujo y por el Subsecretario de Instrucción Pública, Cortez Reales. Algunas temáticas de las pinturas fueron: la vida capitalina y campesina salvadoreña así como paisajes tropicales. En dicho evento, quedo evidenciado claramente el objetivo del Grupo Masferrer de reivindicar a la mujer salvadoreña:1060 A continuación el licenciado Adolfo Pérez Menéndez, leyó un elocuente discurso – a nombre del Grupo Masferrer, por ser esta sociedad cultural quién patrocina la 1057 Ídem. “Los acontecimientos culturales del domingo”, Diario Oficial, Suplemento La República, lunes 13 de noviembre de 1933, No. 285, pág. 4, año I. 1058 “Pronto se abrirá una exposición de grabados y pinturas escolares”, La Prensa, jueves 9 de noviembre de 1933, No. 6,887, pág. 4, año XXI. 1059 “La primera exposición de pinturas escolares”, La Prensa, lunes13 de noviembre de 1933, No. 6,890, pág. 3, año XXI. 1060 299 exposición en referencia– en el que habló de la misión de la juventud intelectual y artística salvadoreña, especialmente en la parte a la que corresponde a la mujer, que entre nosotros tiene representativas de incuestionable prestigio, y que es ya de impostergable urgencia para todos tomar parte actuante en la difusión de la cultura en todos sus aspectos.1061 Muestra de ello fue que la sociedad de los masferrerianos, apoyó decididamente las exposiciones pictóricas de la artista salvadoreña Rosa Ortiz Villacorta, hija del también pintor Miguel Ortiz Villacorta, quien llegó a ser muy reconocida y apreciada entre sus colegas guatemaltecos quienes la llamaban “Zipaltoval”. En este sentido, Francisco Morán recalcó la importancia de superar los prejuicios sociales que habían impedido el avance progresista de la mujer salvadoreña en el campo del arte y la cultura.1062 En las exposiciones pictóricas que Zipaltoval realizó en Guatemala, fue muy notorio el apoyo que ésta recibió tanto de los artistas guatemaltecos como de los salvadoreños. En dicho país, fue acompañada por la marimba de los hermanos Betancourt quienes interpretaban música indígena de Jesús Castillo y María de Baratta.1063 Entre sus oleos más representativos se encontraban: 1) Indio Tecpán, Guatemala, 2) India de Aculhuaca, El Salvador, 3) India de Panchimalco, El Salvador, 4) retrato de María de Baratta, artista salvadoreña, 5) retrato de Alberto Ferracutti, escultor italiano, 6) Jacinto Castellanos Rivas, escultor salvadoreño, 7) Zipaltoval, autorretrato, entre otros.1064 Sus exposiciones también fueron “Los acontecimientos culturales del domingo”, Diario Oficial, Suplemento La República, lunes 13 de noviembre de 1933, No. 285, pág. 4, año I. 1061 “Exposición de cuadros de Rosa Ortiz Villacorta”, La Prensa, lunes 27 de noviembre de 1933, No. 6,902, pág. 1, año XXI. 1062 “Interesante exposición de cuadros de la artista cuscatleca”, Cronos, Quetzaltenango, Guatemala, martes 7 de mayo de 1935, No. 869, pág. 1, año III. 1063 “Cuadros que expondrá Zipaltoval”, Cronos, Quetzaltenango, Guatemala, miércoles 8 de mayo de 1935, No. 870, pág. 1, año III. 1064 300 complementadas con danzas indígenas, que ella misma organizaba tales1065 como: “Bronces Aborígenes” de Ramón de Nufio y “Marimba” de Figueroa. 1066 En esta dirección, la mujer fue tomando un protagonismo muy interesante en el campo artístico, intelectual e incluso político que la elevaban por encima de su reducido campo de acción que iba de los quehaceres del hogar a la iglesia. Se formaron varias asociaciones feministas que impulsaron el voto femenino, por ejemplo en 1933 se fundó un grupo feminista en San Salvador con el objeto de conquistar los derechos de la mujer. Su primera moción fue pedirle a la Asamblea Legislativa –definiera– la situación política de la mujer en la Constitución de la República. Esta asociación estuvo integrada por María de Chacón quien era la Presidenta, María Luisa González quien fungió como Vicepresidenta y Carmen Eméstica, Mercedes Martínez, Jesús Valencia v. de Morales, María Luisa Montoya, Natalia Pérez, Lydia Rodríguez, Lucila Guzmán, quienes actuaron como vocales. La moción de las féminas seguramente contribuyó a que en la Constitución de 1939 se le concediera a la mujer su derecho a ejercer el sufragio.1067 Otra asociación que hizo presión en este sentido, fue el “Grupo Compactación Fraternidad Femenino de San Salvador” apoyado por el Gral. E. Avelar.1068 El movimiento feminista durante la gestión de Martínez, sin duda fue muy importante, incluso el periódico el Cronista de Honduras informó que en El Salvador se estaba trabajando para fundar el “Partido Feminista” que había instalado comisiones en todos los departamentos de la República y que contaba “Mañana será la velada de la artista Zipaltoval”, Cronos, Quetzaltenango, Guatemala, martes 28 de mayo de 1935, No. 887, págs. 1 y 8, año III. 1065 “Palabras de agradecimiento de la artista Zipaltoval”, Cronos, Quetzaltenango, Guatemala, jueves 30 de mayo de 1935, No. 889, págs. 1 y 8, año III. 1066 “Señoras y señoritas organizan un grupo feminista en esta capital”, La Prensa, miércoles 25 de octubre de 1933, No. 6,874, pág. 1, año XXI. 1067 “Actividades de un grupo femenino”, La Prensa, miércoles 29 de noviembre de 1933, No. 6,907, pág. 1, año XXI. 1068 301 aproximadamente con unos 50,000 afiliados. Entre sus objetivos estaban que se le concediera el voto a la mujer y que se crearan leyes para su protección. 1069 Hernández Martínez estuvo a favor de concederle el voto a la mujer, dijo que la participación de la mujer en política era indispensable para superar muchos de los problemas de la humanidad, sobre todo, para prevenir las guerras, combatir la ignorancia de los pueblos y sanar los cuerpos y las almas de los hombres. Martínez creía que la mujer suavizaba los malos instintos de los hombres,1070 aunque debemos aclarar que el voto no se hizo efectivo porque en 1939, período en el que inició su 3º período presidencial, Martínez, no convocó a elecciones sino que se prolongó ilegalmente por medio de una reforma constitucional, pero habría que decir que en el campo cultural el feminismo sí tuvo ciertos resultados positivos. En 1937, el gobierno de Martínez colaboró con la fundación del “Grupo Salvadoreño de la Liga Femenina de Confraternidad Americana” encabezado por María Loucel y María de Baratta.1071 Además, en algunos periódicos se publicaron secciones eminentemente feministas como es el caso de la sección “Charlando con ellas” del Diario Nuevo, escrita por Matilde Elena López en donde la lírica abordaba diferentes temas referidos a la mujer. También puede afirmarse que hubo una clara red intelectual femenina, sobre todo de poetizas conformada por Claudia Lars, Matilde Elena López, Amparo Casamalhuapa, Marta Alegría, Elisa Huezo Paredes, Lilian Serpas, Alice Lardé, María Loucel entre otras.1072 (Ver anexo 2). Es más, a la intelectualidad femenina salvadoreña de forma cohesionada se le reconoció cierto liderazgo a nivel internacional cuando la escritora mexicana Catalina D’ Erzell le rindió un homenaje desde la radiodifusora del Partido Nacional “En torno del movimiento feminista salvadoreño”, La Prensa, miércoles 16 de enero de 1935, No. 7,548, pág. 1, año XXI. 1069 “Los derechos cívicos de la mujer”, Diario Nuevo, miércoles 23 de noviembre de 1938, No. 1,532, pág. 5, año V. 1070 “Quedó organizado el grupo femenino de confraternidad”, Diario Oficial, Suplemento La República, sábado 20 de febrero de 1937, No. 1,142, pág. 2, año V. 1071 Elisa Huezo Paredes, “Transformación de la vida cultural de la mujer en Centroamérica” La Prensa, sábado 15 de septiembre de 1934, No. 7,350, pág. 5, año XXI. 1072 302 Revolucionario de México (PNR), que fue el nombre con el que nació el actual Partido Revolucionario Institucional de México (PRI).1073 En la transmisión, dio a conocer a las mujeres mexicanas parte de la obra poética de las salvadoreñas. La mexicana había visitado recientemente el país y recitó poemas de Lilian Serpas y Claudia Lars. Asimismo, dio a conocer la obra de Alice Lardé y María Loucel, está última que en ese momento se encontraba en la nación azteca. Otro punto importante fue que colaboró para que en la misma difusora se transmitiera un concierto de música autóctona salvadoreña proporcionada por Maximiliano Patricio Brannon:1074 Mientras aquí en San Salvador, en esta casa de La Prensa, se verificaba anoche una reunión de intelectuales y artistas pertenecientes al Grupo Masferrer, en la capital de la República Mexicana, la conocida escritora Catalina D’ Erzell 1075 hacia objeto a las poetizas salvadoreñas de un hermoso homenaje.1076 Catalina D’ Erzell realizó su obra de reivindicación femenina, al mismo tiempo que se regeneraba al indio mexicano, ya que en el porfiriato, –similar como en El Salvador– con las reformas liberales decimonónicas, se le había despojado de sus tierras y los ejidos fueron absorbidos por los latifundios. D’ Erzell tenía el objetivo de construir una imagen de la mujer “nacionalista” y “moderna”. Su literatura incluso fue clasificada por algunos críticos como “feminista” y “comprometida” con las cuestiones sociales. Su estilo era revolucionario y llegó a ser considerada desde finales del siglo XIX como una de las pioneras en la introducción del tema de género en el plan de nación mexicano, que, en realidad, constituyó una Luis Javier Garrido, El partido de la revolución institucionalizada, (la formación del nuevo estado en México, 1928-1945), Siglo XXI Editores, undécima edición, 2005, pág. 11. 1073 “Catalina D’ Erzell rindió anoche homenaje a las poetizas salvadoreñas”, La Prensa, sábado 4 de noviembre de 1933, No. 6,882, pág. 7, año XXI. 1074 Catalina D´Erzell: fue una escritora y periodista que durante los años veinte escribió numerosas obras de teatro, ensayos, artículos y poemas cuyo eje principal eran las relaciones familiares y el papel de la mujer en la familia y en la sociedad en general. Ver: Apen Ruíz Martínez, “Nación y género en el México revolucionario: la india bonita y Manuel Gamio”, Revista Signos históricos, enero-junio, No. 5, Universidad Autónoma Metropolitana- Iztapalapa, México, 2001, pág. 14. 1075 1076 Ídem. 303 tendencia alterna a un México revolucionario que había luchado por derrocar a Porfirio Díaz y que se caracterizaba por un profundo machismo. 1077 Desde esta perspectiva, Masferrer siempre pensó que la mujer debía liberarse mediante un feminismo bien entendido, es decir, no de competencia sino de complementariedad y equiparación de oportunidades que obviamente abarcaba el aspecto intelectual.1078 Quizá este ideal se proyectó cuando Olga Paz, María Baratta Mendoza e Ibe Aguilar obtuvieron su grado de “Tenedor de Libros” en el College de Jeunes Filles Saint Jeanne de Arte de San Salvador. María Baratta hizo su tesis sobre El arte y artesanías indígenas y la tesis de Ibe Aguilar versó sobre La influencia y participación de la mujer en la literatura salvadoreña. A las presentaciones solemnes asistieron numerosos elementos del Grupo Masferrer y miembros del gabinete de Martínez.1079 María Baratta en su investigación estableció que las artes y artesanías indígenas, –las cuales por mucho tiempo habían sido despreciadas como inferiores– debían ser consideradas como el arte popular de la raza y que por tanto, había que recuperarlas para forjar una verdadera cultura nacional desde tres aspectos esenciales: desde su industria, desde su literatura y desde su música. En el primer aspecto estaban comprendidos sus adornos, figuras simbólicas y dioses. El pueblo más representativo en este sentido –según ella– era Ilobasco mediante la fabricación de muñecas y otros artículos de barro y quizás, en un segundo lugar se encontraba el pueblo de Tenancingo que se caracterizaba por la fabricación de cantaros.1080 A continuación explicó que los materiales más utilizados por los indígenas según sus zonas eran: el morro (Ízalco, Nahuizalco, San Miguel), el tule (Nahuizalco), la palma para hacer sombreros (Tenancingo) y el mescal para hacer hamacas. También las telas e indumentarias indígenas eran muy importantes en este 1077 Ibídem, pág. 80. Ver artículos: “Liberación de la mujer I y II”, Patria, (Artículos recopilados por Pedro Geoffroy Rivas), Editorial Universitaria, Colección Popular, Volumen I, 1960, págs. 161-166. 1078 “Distinguidas señoritas graduadas”, La Prensa, sábado 11 de noviembre de 1933, No. 6,888, pág. 7, año XXI. 1079 María Baratta Mendoza, “Artes y artesanías indígenas”, La Prensa, sábado 2 de diciembre de 1933, No. 6,967, págs. 3 y 10, año XXI. 1080 304 rubro. En el segundo aspecto, estableció que los indígenas tenían una gran riqueza de bombas, pantomimas, cancioneros y poemas como el Vukub-Kakix, el Popol Vuh o manuscrito de Chichicastenango, el drama Rabinal-Achi, el libro sagrado Chilam Balam y el memorial de Tecpan Atitlán entre muchos otros.1081 En el ámbito de la música y la danza, dilucidó que el arte indígena era profundamente panteísta, lo cual a nuestro criterio fue otro nexo que permitió hibridar indigenismo y teosofía. María Baratta explicó que los instrumentos musicales propiamente indígenas eran: el tambor, la sambumba, el tepanalhuaste, el pito, la ocarina, la marimba entre muchos otros. Entre los sones y danzas precortesianas mencionó el Cujtan-Cuyamet, El venadito, El torito pinto, etc. Entre los sones coloniales hizo especial mención del baile melodramático titulado “La historia de los moros y los cristianos”. En el estudio de Baratta, quedó demostrado como durante la gestión de Martínez hubo una estrecha relación entre indigenismo, feminismo, misticismo y arte. Todo conjuntado con el objetivo de crear una identidad nacional propia.1082 Ibe Aguilar por su parte, sostuvo que las mujeres a través de distintos períodos de la historia nacional habían sido una fuente de inspiración para poetas, novelistas y pensadores y que en El Salvador había contribuido a incrementar considerablemente el caudal literario, ya fuere como autoras o inspiradoras, pero que su misión iba más allá de ser inspiración lírica, teniéndosele que reconocer su valor en todas sus dimensiones como madres, esposas, y compañeras. Consideraba que la mujer salvadoreña era trabajadora y heroica y por tanto, muy importante dentro del entramado social. Algunos poetas salvadoreños que consideraba le habían cantado a la musa eran: Francisco Gavidia, Pedro Geoffroy Rivas, Julio Enrique Ávila, Alfredo Espino entre otros,1083 pero si el Grupo Masferrer intentó revalorizar a la mujer también intentó revalorizar a los intelectuales. 1081 Ídem. 1082 Ídem. Ibe Aguilar, “Influencia y participación de la mujer en la literatura salvadoreña”, La Prensa, sábado 18 de noviembre de 1933, No. 6,895, pág. 10, año XXI. 1083 305 8- El Grupo Masferrer y la reivindicación de los intelectuales: El movimiento literario1084 en El Salvador hasta ese momento era considerado muy pobre1085 a tal punto que se reducía al realizado por el Grupo Masferrer, en efecto, no se patentizaba en libros, revistas o periódicos, lo que significaba un mal síntoma de atraso y de incultura que reflejaba a su vez, el bajo nivel intelectual del país. Esto quería decir que la minoría selecta no estaba cumpliendo con su deber de educar a las masas puesto que el título de “intelectual” imponía deberes sagrados e ineludibles que eran precisamente los de “dirigir” y propiciar por todos los medios posibles manifestaciones de cultura. 1086 Dentro de estas expresiones creativas, estaban las obras literarias y pictóricas que debían de servir como instrumento de cambio en el devenir de la cultura autóctona que se consideraba estaba estancada desde los años 1,900, ya que los intelectuales –en ese entonces– eran prácticamente desconocidos y un reducido grupo de personas se dedicaba a las artes y a las letras, por vivir en un ambiente superficial, en el cual no se conocía casi nada sobre los grandes clásicos de la lengua castellana.1087 El Grupo Masferrer apoyaba la idea de construir una nueva sociedad dirigida por una minoría selecta, que debía reconfigurar el panorama cultural, es decir, el proyecto era pasar de la barbarie a la cultura, educando a las masas mediante “Exponente del movimiento literario”, La Prensa, viernes 11 de mayo de 1934, No. 7,437, pág. 1, año XXI. El Estado, también impulsó el movimiento literario del país a través del Boletín de la Biblioteca Nacional periódico que constituyó una verdadera revista literaria; el director de la Biblioteca Nacional de Guatemala, Arévalo Martínez. Incluso, dijo que ni siquiera en ese país existía una revista periódica de este tipo. 1084 “El Salvador sigue siendo una llanura intelectual”, La Prensa, viernes 29 de diciembre de 1933, No. 6,929, págs. 1 y 5, año XXI. 1085 José F. Figeac, “Que vale el talento entre nosotros”, La Prensa, sábado 23 de octubre de 1933, No. 6,887, pág. 11, año XXI. Se esperaba que el “Grupo Masferrer tuviera frutos similares a los de la revista La Juventud publicada en las postrimerías del siglo XIX, es decir, “el triunfo del espíritu sobre la materia”. 1086 “La exposición del libro”, Diario Oficial, Suplemento La República, martes 14 de noviembre de 1933, No. 286, pág. 1, año I. 1087 306 “llamamientos” y “exhortaciones” que también debían de contar con la cooperación del gobierno:1088 Ya lo está haciendo el Grupo Masferrer, influir poderosa y eficientemente sobre las masas a fin de insuflarles el amor y la afición por todas las manifestaciones intelectuales, artísticas o culturales (…) que se encaminen a la elevación del nivel cultural de nuestro pueblo, que necesita, tanto de abrigo como de pan (vitalismo) como del “mínimum de cultura” que preconizó tantas veces el insigne maestro Masferrer, cuya obra redentora y humanitaria es uno de los tesoros intelectuales de que puede enorgullecerse El Salvador, como se enorgullece Cuba con su Martí o el Uruguay con José Enrique Rodo.1089 Para generar más debate sobre el tema de la aridez intelectual, el militar y escritor José María Peralta Lagos, publicó dos cartas en el periódico La Prensa bajo el seudónimo que ocupaba habitualmente en sus trabajos: T. P. Mechín, en los cuales casi parafraseando a Ortega y Gasset, determinó que era cierto que en El Salvador había pseudo-intelectuales, pero que también existía “una minoría de elite” reconocida por un reducido número de lectores que los apreciaba, entre ellos figuraban: Arturo Ambrogi y Francisco Gavidia.1090 Las iniciativas de cambio, en un principio, fueron percibidas como muy débiles, ya que los periódicos o revistas que nacían con este objetivo eran de vida muy efímera. En los mismos se publicaban breves trabajos literarios, artículos, cuentos, crónicas y algunos versos sueltos, pero nunca se realizaban trabajos verdaderamente serios, que fueran sólidos y durables. Además, existía la agravante que, por lo general, carecían de originalidad.1091 La opinión pública expresaba que era momento de revalorizar el talento de los intelectuales, cuestión que no se hacía debido a diferentes causas: 1º) falta de estímulo al científico y al artista, 2º) creación de una pseudo intelectualidad a través de una popularidad insuflada, 3º) falta de interés del capitalista por lo cultural que se “Dos sobresalientes actos de cultura”, La Prensa, lunes13 de noviembre de 1933, No. 6,890, pág. 3, año XXI. 1088 1089 Ídem. “Contestando a T. P. Mechín I”, La Prensa, miércoles 3 de enero de 1934, No. 6,936, págs. 1 y 2, año XXI. 1090 José F. Figeac, “Que vale el talento entre nosotros”, La Prensa, sábado 23 de octubre de 1933, No. 6,887, pág. 11, año XXI. 1091 307 regía por el adagio popular “tanto tienes, tanto vales”, actitud frente a la cual se trataba de demostrar que el que realmente valía, era el hombre inteligente y 4º) por reducir a una poquedad asfixiante el poder intelectivo. Se hacía indispensable, entonces, distinguir entre lo que valía esencialmente y lo que valía accidental y relativamente:1092 El Grupo Masferrer que vaga en este mar oscurantista y paupérrimo, con la esperanza de arribar al seguro puerto del mejoramiento social, debe luchar en pro de la reconquista del poder y valer de la clase intelectual. A los hermanos Andino, a Pérez Menéndez y a Espino nos dirigimos atentamente, para que ellos auspicien esta idea adentro del grupo a que pertenecen. La iniciativa expuesta anteriormente, es noble y realizable. Todo su éxito depende del ahincó con que los masferrerianos se conduzcan en la cruzada.1093 La generación de intelectuales por la que estuvo constituida el Grupo Masferrer, sólo era comparable a la que había surgido a mediados del siglo XIX con Francisco Gavidia, Calixto Velado, Rubén Darío, Rafael Reyes, Santiago I. Barberena, Hidelbrando Martí, Imendía, Barriere y Joaquín Méndez, entre otros que lograron crear un ambiente cultural en el que los intelectuales se sopesaban en su justo valor, pero que lastimosamente había decaído:1094 Pero, felizmente la postergación del espíritu no ha de ser indefinida; y si el Grupo Masferrer se empeña en sacar de su momentáneo marasmo ese gran poder de la inteligencia, ha de obtener, como efectivamente lo obtuvieron los colaboradores de la revista La Juventud en las postrimerías del siglo XIX, el triunfo del espíritu sobre la materia. Señores del Grupo Masferrer manos a la obra y que Minerva los proteja en este intento.1095 Ante las esperanzas que se habían depositado en el Grupo Masferrer, éste se propuso la fundación de un Centro Editorial por medio de la constitución de una Sociedad Anónima que tenía el objetivo de abaratar y facilitar la producción de libros en el país. El Diario Nuevo creía que los pocos intelectuales que existían en el medio escribían muy poco y que de lo poco que escribían casi nada se publicaba. 1096 1092 Ídem. 1093 Ídem. 1094 Ídem. 1095 Ídem. “El premio nacional de literatura”, Diario Nuevo, miércoles 10 de enero de 1934, No. 38, pág. 3, año I. 1096 308 Al parecer, uno de los resortes para la fundación de tal sociedad, fueron las cartas de Peralta Lagos, en donde éste establecía que la causa de que no se publicaran muchos libros ya acabados, era la falta de imprentas en el país y que, por lo general, los verdaderos intelectuales eran tan pobres, que no podían financiar sus propias publicaciones. Otro problema grave era la indiferencia del público hacia las producciones culturales, pero Peralta Lagos creía que también la minoría selecta tenía cierta responsabilidad en tal desidia.1097 Mediante la creación de este instituto, tendrían la oportunidad de editar sus obras a un bajo costo todos aquellos intelectuales que aspiraban al florecimiento de su obra posterior, en otras palabras, debían de ser “pioneros”. Peralta Lagos creía que era una misión social concientizar a todas las clases económicas: superiores, medias y bajas para devolverle su estima al intelectual. Este era el prototipo de hombre superior, el que provocaba la renovación del medio. Lagos dijo textualmente que la misión del intelectual debía ser “educar y orientar a las masas” mediante la obra artística y literaria de alta calidad, una proyección de esto1098 fue que el Grupo Masferrer acordó celebrar un homenaje a Rubén Darío en los primeros días de febrero de 1934.1099 En realidad, no encontramos ninguna noticia posterior confirmando la fundación de dicha Sociedad, pero si esta aclaración: Para realizar el propósito de fundar un Centro Editorial independiente aunque modesto, el Grupo Masferrer va primero a desarrollar una intensa y bien organizada propaganda en toda la República, a fin de que formen parte de él todos los que en El Salvador escriben, enseñan o se dedican a cualquier actividad cultural, lo mismo que todas las personas de buena voluntad que quieran prestarle su concurso suscribiendo acciones de la sociedad anónima que se va a constituir. Si el proyecto fracasa como fracasan tantas tentativas generosas en este pobre país tan reacio a la cultura y tan ajeno a los nobles afanes de la inteligencia y del espíritu, no será por falta de diligencia sino porque será materialmente imposible realizarlo, pero el ensayo se hará, cueste lo que cueste contra viento y marea. 1100 “Contestando a T. P. Mechín I”, La Prensa, miércoles 3 de enero de 1934, No. 6,936, págs. 1 y 2, año XXI. 1097 1098 Ídem. “El Grupo Masferrer va a lanzar su manifiesto al país”, La Prensa, jueves 4 de enero de 1934, No. 6,937, pág. 1, año XXI. 1099 “Contestación a T. P. Mechín II”, La Prensa, viernes 5 de enero de 1934, No. 6,938, pág. 1, año XXI. 1100 309 El Diario Nuevo fue más allá de la propuesta de Peralta Lagos, le propuso a la Secretaría de Instrucción Pública que creara el “Premio Nacional de Literatura”, el cual podría denominarse: “Francisco Gavidia” o “Alberto Masferrer”. La propuesta pretendía premiar a la mejor obra literaria de un autor salvadoreño que se publicara en un año, previo fallo de un jurado calificador nombrado por el mismo Ministerio y que dicho premio fuera acompañado de trescientos colones en efectivo.1101 Los redactores del periódico, opinaban que estos premios habían dado mucho resultado en países como Francia que era el referente de cultura en ese momento mediante distinciones como: “Goncourt” o “Fémina” que habían hecho destacar a muchos escritores que prácticamente eran desconocidos en aquel país y que efectos similares se podrían obtener en El Salvador en la medida de las posibilidades. Aunado a esto, le hicieron la excitativa al Señor Presidente de la República para que apoyara este tipo de iniciativas que venían a robustecer la salud de la Nación.1102 En realidad, todos los países latinoamericanos que se querían insertar en el proceso de civilización estaban tomando estos lineamientos, por ejemplo, México, en ese mismo mes de enero de 1934 fundó los premios nacionales de literatura, teatro, investigación científica y labor periodística, todos con el fin de dar impulso a las letras mexicanas, los cuales venían acompañados de 2000 pesos cada uno, algo semejante se quería hacer aquí.1103 Esta actitud reinvindicativa se desarrolló durante todo la gestión de Martínez, principalmente, por los redactores del Diario Nuevo, quienes insistían en la necesidad de que la intelectualidad salvadoreña aceptara su misión de realizar en un medio lento y vicioso los ideales sociales en contra del punto de vista utilitario que predominaba y que hacía que los intelectuales se volvieran pesimistas o se prostituyeran a las leyes de la “oferta y la demanda” y es por eso que ellos acuñaron “El premio nacional de literatura”, Diario Nuevo, miércoles 10 de enero de 1934, No. 38, pág. 3, año I. 1101 1102 Ídem. “Impulso a las letras mexicanas”, La Prensa, lunes 29 de enero de 1934, No. 6,979, pág. 1, año XXI. 1103 310 el lema: “la vida como sacrificio”, entendiendo esto, como una revisión a los valores morales en donde todos tenían que dar algo sin pedir nada: 1104 No es posible que la lección de Alberto Masferrer, siempre inconforme y laborioso, nada diga a los trabajadores del pensamiento. No es posible que el intelectual siga repitiendo el tipo del hombre que sirve para todo porque no sirve para nada, al servicio de las pasiones y traiciones del ambiente, sin un plan propio, sin un programa colectivo, sin un anhelo dinámico.1105 Pérez Menéndez, pensaba que también era necesario proporcionar una mejor remuneración al intelectual, ya que según la percepción de ese momento, ser hombre de letras en el país, significaba ser algo así como un vago, es decir, sujeto a quien no había que remunerar, sino que cuando mucho limosnear como a un pordiosero. Pérez Menéndez puso el ejemplo concreto del Padre Pallais consagrado por la crítica internacional como uno de los líricos más eminentes de la poesía americana de ese momento, de quien nadie se preocupó por sus gastos de viaje y estadía.1106 El masferreriano creía que no sólo eran necesarios elogios y aplausos para aquellas personas que mediante sus actividades culturales, desbarbarizaban a la sociedad, sino que también era indispensable una justa remuneración1107 en un ambiente que era dado a gastar en muchas otras cosas sin beneficio como el casino, la tertulia privada o la cantina, pero en el que se era incapaz de comprar cultura: 1108 “La misión de nuestros intelectuales”, Diario Nuevo, martes 5 de abril de 1938, No. 1,339, pág. 3, año V. 1104 1105 Ídem. Adolfo Pérez Menéndez, “La remuneración de los intelectuales en El Salvador”, La Prensa, viernes 24 de noviembre de 1933, No. 6,900, pág. 5, año XXI. 1106 J. Marín Cañas, “Protección a los artistas salvadoreños”, Diario Nuevo, martes 9 de abril de 1935, No. 425, pág. 3, año II. “El Gral. Martínez, es un hombre que se ha significado siempre por su sincero culto a las cosas del espíritu al grado que su ideología toda, la que ha puesto de manifiesto en todos sus actos de hombre y de gobernante es fundamentalmente espiritualista (…) en estos momentos en que un grupo de juventudes entusiastas se ha convertido en abanderadas de los derechos del espíritu, nada sería acogido con mayor simpatía que un estímulo efectivo que el gobierno y el pueblo salvadoreño dieran a sus grandes artistas y a sus hombres de letras. Es hora de que el país se conozca por sus grandes representativos espirituales. Que la obra de Gavidia, Masferrer, Salarrué, Miguel Ángel Espino, Ambrogi y otros intelectuales selectos sean como los señores embajadores de la Nación Salvadoreña”. 1107 1108 Ídem. 311 Sin embargo, el Grupo Masferrer que se ha dispuesto a hacer cosas absurdas, como las de espiritualizar y humanizar este pedregal humano que se llama El Salvador, ha iniciado una suscripción para recompensar en parte la vasta labor que desarrolló entre nosotros el egregio poeta nicaragüense.1109 González Sol pensaba que el salvadoreño de ese momento tenía muchos defectos, a los cuales él llamaba “guanacadas”, que redundaban en perjuicio de sí mismo. En primer lugar, pensaba que desconocía los auténticos valores intelectuales por desidia y menosprecio, en el mejor de los casos, ya que lo cotidiano era que los calumniara.1110 Este era el movimiento de renovación intelectual que quería alcanzar el Grupo Masferrer y aunque en ningún periódico de los consultados en esta investigación se establece la fecha o motivos de la extinción de la citada asociación, lo que sí podemos manifestar es que la última referencia a él, la encontramos el 4 de septiembre de 1935 cuando la Prensa ante el tercer homenaje del fallecimiento de Masferrer publicó:1111 Y ahora en nombre del Grupo Masferrer, reproducimos el homenaje que para él escribimos en su primer aniversario el 4 de septiembre de 1933: “su obra humanitaria es transparente y como el mar cuanto más se la mira más profundo se encuentra. Don Alberto antes que poeta fue un humanista notable (…) hombre humilde que estableció el verdadero concepto nacional de “patria” y reclamo justa remuneración para el hermano trabajador (…) hombre superior que vivió pidiendo escuela, agua cristalina y techo para los poblados.1112 En este capítulo hemos desarrollado el aspecto cultural masferreriano de la gestión de Martínez, en el siguiente hablaremos de la aplicación de la doctrina del Mínimum Vital en el ámbito del mejoramiento social, ya que ambas dimensiones eran complementarias en el nuevo proyecto de Nación que se quería implementar. 1109 Ídem. R. González Sol, “Adolfo Pérez Menéndez”, La Prensa, viernes 12 de enero de 1934, No. 6,954, pág. 4 año XXI. 1110 1111 “Masferrer”, La Prensa, martes 10 de septiembre de 1935, No. 7839, pág. 3, año XXI. 1112 Ídem. 312 CAPÍTULO IV: APLICACIÓN DEL MÍNIMUM VITAL COMO POLITICA DE MEJORAMIENTO SOCIAL DEL ESTADO El Salvador también ha dado su contribución a la cultura filosófica. Casi todas las obras de Alberto Masferrer están impregnadas de una santa filosofía: el mejoramiento de los hombres.1113 Dentro de un periodista debe haber un líder, un orientador, un conductor. En Valle había esta substancia. En Masferrer lo mismo. Por consiguiente, si no existe una fuerza exterior que cree y empuje, es inútil hablar palabras vacías.1114 1- Introducción Este capítulo se desarrolla en dos partes. En la primera se analizan las conferencias y artículos vitalistas de Maximiliano Hernández Martínez, los cuales fueron publicados o anunciados en el periódico Patria entre 1929 y 1930. Nuestra intención es demostrar que entre Martínez y Masferrer hubo una clara afinidad intelectual por la doctrina del Mínimum Vital mucho tiempo antes de que Martínez llegara a ser Presidente. En la segunda se desarrolla, precisamente, la coherencia que existió entre el programa de mejoramiento social implementado por su gobierno y el ideario del “Mínimum Vital”, en su orden: vivienda, reparto de tierras, trabajo, agua buena y bastante y alimentación. Quisiéramos aclarar que después de exponer el aspecto tocante a la reforma agraria, hemos realizado un pequeño apartado referido al pensamiento de Henry George, ya que a pesar de que en los periódicos apareciera que dicha reforma respondía a la doctrina georgista, al cotejarse, se observa que entre ambos existe una diferencia sustancial, pero que no por eso deja de ser masferreriana. Saúl Flores, “Del origen y de la perennidad de la filosofía”, Revista La Universidad, Órgano de la Universidad Autónoma de El Salvador, viernes 24 de septiembre de 1937, pág. 114. 1113 “Lo que debemos hacer en América”, Diario de hoy, martes 4 de abril de 1939, No. 871, pág. 11, año III. 1114 313 De forma complementaria, el capítulo demuestra que durante la presidencia de Martínez fueron Alberto Guerra Trigueros y Adolfo Pérez Menéndez, quienes, desde sus respectivos periódicos Patria y Diario Nuevo, fueron los que más lucharon por difundir el “Mínimum Vital” doctrinario que pretendía convertirse en un “Mínimum Vital” tangible y real. Hacemos la aclaración que aunque todos los elementos contenidos en la doctrina en estudio son importantes, hemos tratado de hacer énfasis en dos en específico, por la misma situación económico-social que se vivía en ese momento y que los hacían mucho más apremiantes: vivienda y reparto de tierras. Guerra Trigueros, por ejemplo, pensaba que al hablar de la vivienda, se había planteado un problema filosófico más de fondo, que era la necesidad de crear una organización de la propiedad mucho más justa, es decir, no se trataba solamente de proveer al pueblo de casas, sino que había que proveerle de un hogar “propio” que le diera calor y protección a la familia.1115 La falta de un hogar traía como consecuencia la disgregación y degeneración de la Nación, por lo que era necesario crear un muro mínimo contra el viento, o sea, “una casa y un terreno mínimo como extensión del cuerpo de cada hombre”, una propiedad privada mínima, para que esa base mínima de la sociedad que es la familia, pudiera no solamente subsistir sino subsistir dignamente.1116 Para el periodista vitalista, habían dos elementos que no se podían desasociar: el suelo y la casa, porque ambos daban al pueblo el sentido de “Patria”1117 y era por esto que era fundamental la construcción de casas baratas emprendidas por el gobierno de Martínez, ya que de lo que se trataba era de evitar que el tejido social se Alberto Guerra Trigueros, “Propiedad: el fuego”, Patria, jueves 27 de enero de 1938, No. 9,812, pág. 8, año IX. 1115 Alberto Guerra Trigueros, “Propiedad: la casa”, Patria, viernes 28 de enero de 1938, No. 9813, pág. 9, año IX. 1116 Alberto Guerra Trigueros, “Propiedad e impropiedad”, Patria, sábado 5 de febrero de 1938, No. 9,820, pág. 8, año IX. “Todavía resulta demasiada abstracta, demasiado fría y lejana la concepción de “patria” cuando ésta no va ligada a la idea de territorio; o por mejor decir, al sentimiento del terruño pero este apego, este amor a la Madre Tierra –apego fisiológico, podríamos decir, apego casi umbilical– solo puede nacer en el hombre por la posesión directa e indisputada de una parcela cualquiera de terreno (…) la sola idea abstracta de “patria” sin conexión inmediata con la propiedad y la dependencia humana del terruño, es insuficiente para engendrar en el hombre un acendrado y firme patriotismo”. 1117 314 siguiera corrompiendo en el mesón.1118 Tal y como se sostendrá en este capítulo, Guerra Trigueros, pensaba que lo importante no era hacer mero lirismo intelectual con estas ideas sino “lograr algo en concreto”, tal como lo afirmó Masferrer: “transformar radicalmente la vida material de nuestro pueblo”. Se trataba, entonces, de erradicar la opresión ajena y lograr la liberación propia.1119 Sobre el problema de la tierra, Guerra Trigueros creía que el gobierno de Martínez a través de la lotificación y el reparto de tierras se había propuesto lograr una mayor estabilidad social, en base a un criterio evolucionista y pacifico que sustituyera los latifundios por pequeñas propiedades que se pondrían a disposición de campesinos empobrecidos. Esta política de reforma agraria, vale decir, también contó con un amplio apoyo social porque de lo que se trataba, en suma, era de crear una conciencia en la clase pudiente de que se debía de devolver la tierra a aquel que de verdad la hacía producir, entonces, re-vincular al campesino con la tierra, se volvió una necesidad impostergable como medio de defensa en contra del capitalismo y en contra del comunismo.1120 Al final del capítulo se hace una valoración crítica de dicho reformismo. 2- Pensamiento vitalista de Hernández Martínez y su contexto histórico: Quizás uno de los aspectos menos conocidos o ignorados por la historiografía nacional es la activa colaboración intelectual de Hernández Martínez en el periódico Patria y específicamente, su apoyo decidido a la causa vitalista de Masferrer. La participación de Martínez consistió en aportar soluciones viables para alcanzar el mejoramiento de las masas que en ese momento atravesaban por una de las coyunturas más críticas en la historia de la humanidad, la dramática depresión económica mundial de 1929. Alberto Guerra Trigueros, “Impropiedad: el enemigo común”, Patria, domingo 6 de febrero de 1938, No. 9,821, pág. 8, año IX. 1118 Alberto Guerra Trigueros”, “Vamos a lograr algo: impropiedad”, Patria, martes 8 de febrero de 1938, No. 9,822, pág. 8, año IX. 1119 Alberto Guerra Trigueros, “Debe mantenerse un principio, el del reparto en pequeño”, Patria, miércoles 5 de enero de 1938, No. 9,873, pág. 8, año IX. 1120 315 Los editoriales vitalistas de Martínez llevaron por título “Abaratemos la vida”. En primer lugar, el militar hizo referencia a que para que una familia promedio en el país pudiera aspirar a tener una vida regular, equilibrada y digna desde el punto de vista material, era necesario que sus ingresos fuesen suficientes, es decir, Martínez planteó la relación directa que debía existir entre el salario y el costo real de la vida, de tal modo que el trabajador y su familia pudiesen cubrir todas sus necesidades básicas. El problema que se enfrentaba en ese momento, era que el pago de la vivienda absorbía la mayor parte de los recursos, por lo que Martínez pensaba que había que abaratar la vida a tal grado que dicho egreso no sobrepasase una quinta, o a lo sumo, una cuarta parte de las entradas totales.1121 Si esta condición no se cumplía, según Martínez, la familia caía en una condición casi de indigencia, porque ya ni siquiera podía comprar sus alimentos y mucho menos obtener una educación adecuada; no había posibilidades para vestir decentemente a la familia y por ende, era imposible presupuestar algún tipo de ahorro para ciertas eventualidades, como alguna enfermedad. Martínez efectivamente describió que en algunas ciudades del país, los obreros utilizaban más de una cuarta parte de su mísero salario en el arrendamiento de una pieza de mesón, por lo que la vitalidad del pueblo era precaria.1122 Abaratar el costo de la vivienda, según él, era muy difícil, ya que los materiales de construcción eran muy costosos, había una gran escasez de madera y la mano de obra también era onerosa.1123 Incluso, el mismo Masferrer en una ocasión declaró: Alguna maldición muy remota y enconosa pesa sobre el hombre, para que en esta hora, después de tanta filosofía y tanta ciencia, y tanto legislar y tanto dar su sangre para hacer su vida tolerable, aun esté con la incertidumbre y la zozobra de no hallar un techo que le abrigue.1124 Maximiliano Hernández Martínez, “Abaratemos la vida I”, Patria, viernes 1º de noviembre de 1929, No. 454, pág. 1, año II. 1121 1122 Ídem 1123 Ídem. Alberto Masferrer, La doctrina del Mínimum Vital, Universidad Autónoma de El Salvador, Biblioteca Universitaria, Vol. XI, Tomo I, 1948, pág. 133. 1124 316 Ante esta imposibilidad, Martínez pensaba que lo que sí era posible abaratar, eran los artículos agrícolas de producción nacional, tales como: cereales, verduras, leche, carne, etc. Además, creía que las cosechas de maíz, arroz y frijoles en los años anteriores a 1929 habían sido insatisfactorias para cubrir la demanda debido a una mala política agraria, por lo que el gobierno obligadamente adoptó la medida de importar artículos de primera necesidad del extranjero, lo cual elevó sus precios. Para revertir dicho proceso, según él, era indispensable dictar medidas administrativas que incrementaran la producción nacional de modo que se pudieran crear reservas en tiempos de crisis.1125 Martínez creía que para lograr este fin, era necesario practicar la rotación de los cultivos. Además de los productos tradicionales recomendó que se introdujera el cacahuate. La rotación de los cultivos traía la ventaja de que los suelos no se infertilizaban, por ejemplo, creía que, en ese momento, la cosecha de maíz había sido muy buena porque se sustituyó por algodón y viceversa, los que habían sido cultivados por algodón y se sustituyeron con maíz o arroz también fueron muy buenas. Como medida complementaria aconsejó abstenerse de practicar la agricultura intensiva pues los terrenos arados debían dejarse descansar entre uno y dos años para evitar su improductividad.1126 Todo esto era muy acorde con la importancia que Henry George la adjudicaba a la tierra: Sin la tierra el hombre no puede cumplir sus funciones, no puede desarrollar sus fuerzas, ni física, ni moral, ni intelectualmente, porque todas las cosas que sirven para esos fines, provienen directa o indirectamente de la tierra (…) es una fuente de vida que Él (Dios) nos ha dado para que, mediante nuestro trabajo, obtengamos de ella todos los bienes materiales.1127 Martínez sabía esto, por lo que estableció que para mejorar la calidad de las tierras aradas era necesario introducir “semillas de plantas forrajeras fijadoras de nitrógeno”, sistema el cual consideraba era más rentable, ya que también podía ser Maximiliano Hernández Martínez, “Abaratemos la vida I”, Patria, viernes 1º de noviembre de 1929, No. 454, pág. 1, año II. 1125 1126 Ídem. Alberto Masferrer, La doctrina del Mínimum Vital, Universidad Autónoma de El Salvador, Biblioteca Universitaria, Vol. XI, Tomo I, 1948, pág. 43. 1127 317 aprovechado para pastar al ganado.1128 Otro punto fundamental era seleccionar la semilla de mejor calidad posible, ya que si se contaba con una buena semilla, incluso, se podía obtener el doble de producción. Martínez afirmaba esto porque él mismo lo puso en práctica. De un viaje que realizó a Estados Unidos, trajo consigo semillas de Los Ángeles, específicamente la conocida como “Mexican June”, la cual sembró sin abono y con el cuidado corriente. El resultado fue doble cosecha de maíz a la obtenida mediante la semilla de mala calidad del país.1129 Este método para Martínez, se tenía que implementar regionalmente mediante la venta a los campesinos de semilla mejorada, pensaba que había que educar al agricultor sobre cómo utilizar poco abono, ya fuere éste verde o de nitratos, porque las tierras del país aún eran muy fértiles. Otro grave problema que había que solucionar era, según él, el de crear agencias donde el campesino pudiera adquirir el abono a un precio razonable.1130 La asistencia técnica como se conoce hoy en día, entonces, no debía de faltar. Se debía de enseñar al campesino la adecuada utilización del abono. Martínez sugirió que se mostrara su aplicación en la parcela de algún campesino para que los demás de la zona pudieran observar. Estas medidas ayudarían a paliar la crisis económica en el país. Según la visión de Martínez, el cafetalero, el azucarero y el cañero que había logrado aplicar correctamente el abono había logrado buenas cosechas:1131 Debemos levantar las cosechas de los artículos de primera necesidad, adoptando la misma solución del gran propietario: abonar los terrenos (…) no es difícil que el comercio se entienda con algunas personas para colocar este implemento agrícola entre los cultivadores, pero es necesario que el artículo se ofrezca en las zonas de cultivo. Con arado de media águila se hará mejorar la tierra y en la mitad del tiempo. 1132 Martínez insistió mucho en la popularización del cultivo de cacahuate. Explicó, que esta leguminosa se estaba cultivando desde hacía tiempo en África, Maximiliano Hernández Martínez, “Abaratemos la vida I”, Patria, viernes 1º de noviembre de 1929, No. 454, pág. 1, año II. 1128 1129 Ibídem, pág. 4. 1130 Ídem. 1131 Ídem. 1132 Ídem. 318 Asia y Estados Unidos, país último donde se estaba desarrollando en grandes proporciones en apertura a otros cultivos tradicionales como el maíz y el frijol, con el beneficio que éste mejoraba la tierra y disminuía la plaga del picudo.1133 Martínez recomendaba la introducción del cacahuete, porque según él, era una fuente extraordinaria de muchos derivados como: mantequilla, aceite de cocina y jabón y se podía emplear como pasta para alimentar al ganado, especialmente vacuno y porcino y a las aves de corral. Además, del cacahuate se podía hacer harina para la industria lechera siendo incluso más proteínica que la semilla de algodón, en fin, creía que era otro artículo de primera necesidad con el que había que incursionar para satisfacer las necesidades alimenticias del pueblo.1134 A partir de lo expuesto, puede verse como una reforma agraria era un punto fundamental en el proyecto vitalista, ya que la tierra es y siempre será la fuente fundamental de alimentación del pueblo. Ahora bien, la solución que Martínez propuso para evitar la crisis agroexportadora, fue reemplazar aunque fuera de forma parcial el café por algodón con ayuda del Estado, pero hizo énfasis en que había que erradicar con eficacia sus plagas: el gusano y el picudo. Para su erradicación aconsejó que los campos fueran fumigados con veneno desde aeroplanos. Esto era fundamental, ya que la plaga en el algodón se esparce rápidamente: Podemos exportar unos cuantos miles de pacas que nos darán unos cuantos millones de dólares para pagar nuestra importación, que tendrá que ser muy limitada en los primeros años (…) si los agricultores siembran algodón el próximo año, obtendrían buenas cosechas, ya que no tendrían la plaga del picudo. Las plantaciones de algodón este año no han sido atacadas por el picudo (han sembrado Dn. Mauricio Meardi, don Rodolfo Duke, don Fernando García Prieto, y un poco el que escribe estos renglones).1135 Para este fin, Martínez le aconsejó al Presidente Pio Romero Bosque que proporcionara algunos aviones y que los agricultores construyeran un campo de Maximiliano Hernández Martínez, “Abaratemos la vida II”, Patria, domingo 10 de noviembre de 1929, No. 462, pág. 1, año II. 1133 1134 Ídem. Maximiliano Hernández Martínez, “Abaratemos la vida III”, Patria, domingo 22 de diciembre de 1929, No. 498, pág. 1, año II. 1135 319 aterrizaje si era necesario. Tenía conocimiento exacto de que existían tres aparatos estándar en muy buenas condiciones para realizar tal labor. 1136 Además, Martínez creía que había que importar la maquinaria para hilar y tejer el algodón en el país. El Estado debía ayudar realizando trabajos de riego desde los principales ríos: el Lempa, el San Miguel, el Ceniza, el Jiboa, entre otros. Martínez también sostenía que había que aprovechar las estaciones secas en las cuales no había gusano ni picudo, ya que el sol mataba la plaga. Martínez pensaba siempre referido al tema agrario que era indispensable contar con una buena política de generación de energía eléctrica:1137 El sistema de regadíos puede combinarse con un buen sistema de electrificación con el fin de abaratar la energía. La futura industria del país necesita energía barata. Con el valor actual de la energía eléctrica no se pueden desarrollar las industrias. Si el Estado implantara el sistema de riegos, los agricultores intensificarían sus cultivos, en principal el algodón, y en pocos años tendríamos una industria floreciente de artículos de algodón manufacturados. Pensemos en salvar al país de la crisis económica que se inicia.1138 Todas estas iniciativas de Martínez como ya hemos mencionado no sólo se quedaron en los discursos, sino que se las propuso a Pio Romero Bosque, quien según sus mismas palabras, estaba muy interesado en abaratar los artículos de consumo.1139 Martínez afirmó que el Presidente Bosque, le prometió que en las siguientes cosechas asistiría a los campesinos con abonos y arados para que incrementasen su productividad. Martínez incluso le aconsejó invertir unos 200,000 colones para la adquisición de 20,000 quintales de abono y 5,000 arados. Martínez dijo: “Con esta ayuda que el Estado prestara al campesino, podrían obtenerse más de dos millones de medios almudes de cereales y leguminosas. Este aumento de la producción se obtendría sin aumentar el área de los cultivos”. Para Martínez, la producción 1136 Ídem. 1137 Ídem. 1138 Ídem. Maximiliano Hernández Martínez, “Abaratemos la vida IV”, Patria, viernes 27 de diciembre de 1929, No. 501, pág. 1, año II. 1139 320 excedente debía de exportarse para que las ganancias pudieran ser utilizadas a su vez para importar otros productos que en el país no se daban.1140 Ante estos discursos vitalistas de Martínez, los redactores del periódico Patria publicaron un pequeño comentario y es que, consideraban que el militar estaba omitiendo algo que era fundamental, lo cual era que se debía de fomentar como acto inicial de la reforma, la adquisición de tierras, ya que todas estas medidas planteadas por él, eran inútiles en la medida que el pequeño agricultor no tenía donde cultivar. El proceso, entonces, debía ser a la inversa: primero se debía de proporcionar la respectiva tierra al campesinado y luego facilitarle los abonos y los arados: 1141 Y abaratar la tierra es muy fácil, sobre todo ahora que bajará de precio por la caída del café. Basta que la Asamblea próxima grave con un cinco por ciento anual sobre su valor actual, cualesquiera porciones de TIERRA BALDÍA que hubiere ya sea urbana o rural. Nadie tiene derecho a poseer tierra para no cultivarla. Consentirlo, es totalmente absurdo; es un atentado contra la vida de los demás. Si se grava fuertemente la tierra baldía, sus actuales poseedores la venderán inmediatamente, o la cultivaran con beneficio de todos. Por ahí debemos comenzar.1142 Con estos discursos, Patria dio a conocer su propuesta de reforma agraria que, contenía como hemos podido observar múltiples aspectos, pero que, en lo esencial, debía practicarse mediante el reparto de tierras ociosas que eran poseídas por los grandes terratenientes de la época. 1143 De hecho, la reforma agraria de Martínez como veremos más adelante, en este mismo capítulo, siguió al pie de la letra la idea de Masferrer sobre comprar terrenos rústicos cultivados o incultos (haciendas) siempre y cuando fuesen ofrecidos a precios moderados, los cuales serían repartidos a las familias bajo el sistema de lotificación en razón de dos o tres manzanas por persona. Lo que sucede es que Masferrer pensaba que en ese 1140 Ídem. “Nota de Patria (a los artículos del Gral. Martínez)”, Patria, viernes 27 de diciembre de 1929, No. 501, pág. 1, año II. 1141 1142 Ídem. Arístides R. Salazar, “La Unión Vitalista”, Patria, viernes 17 de enero de 1930, No. 518, pág. 1, año II. Arístides R. Salazar, quien fungió como secretario de la Unión Vitalista y posteriormente en tiempos de Martínez como Director del Suplemento La República agradeció de parte de la institución que representaba a don Víctor Viaud por la donación de 50 manzanas de tierra de su propiedad, para que pudieran ser habitadas y labradas por familias campesinas, de conformidad con el ideal del Mínimum Vital. 1143 321 momento el país se encontraba en el A B C de la agricultura, por lo que era fundamental que se dieran a conocer dentro del proyecto vitalista los métodos modernos de cultivo que Martínez aparentemente dominaba muy bien. 1144 Es muy importante señalar que antes de la publicación de estos artículos en el periódico Patria, Martínez ya había desarrollado esta idea de abaratar la vida en el periódico El Día. Para Martínez, en concordancia con el proyecto de reforma agraria que posteriormente intentaría llevar a cabo Masferrer, otros de los grandes factores del elevado precio de los artículos de primera necesidad, a los cuales había que atacar eran: el alto costo del arrendamiento de la tierra, los deficientes procedimientos agrícolas, la mala calidad del ganado vacuno y del de tracción y las malas condiciones de las gallinas ponedoras.1145 Pero además de todo esto consideraba que para abaratar la vida era necesario construir mejores vías de comunicación, porque a través de ellas se podrían hacer llegar a las ciudades, reduciendo los costos, los productos agrícolas más importantes y al mismo tiempo de las ciudades se harían llegar, al campo, para su consumo y a los puertos, para su exportación, los productos manufacturados, es decir, el comercio interno y externo del país se agilizaría. Martínez pensaba que por la pobre red vial y por la débil industria en Latinoamérica, la mayor parte de nuestros países no podía adquirir artículos de primera necesidad como pan blanco, leche y carne, es por eso que Martínez pensaba que el ejército también debía ayudar a la construcción y mantenimiento de carreteras, lo cual se acerca mucho a la visión del ejército vitalista de Masferrer1146 quien en su artículo “El ejército que necesitamos” expresó: Para ello nosotros entendemos que el Ejército ha de asumir las funciones y responsabilidades que comporta la defensa de la Nación, ramificada en las actividades siguientes: 1º Defensa contra la agresión exterior, o función guerrera propiamente dicha, 2ª Defensa contra la incomunicación, o sea apertura y mantenimiento de las carreteras… 1147 Alberto Masferrer, Universidad Autónoma de El Salvador, la doctrina del Mínimum Vital, Biblioteca Universitaria, Vol. XI, Tomo I, 1948, pág. 45. 1144 Maximiliano Hernández Martínez, “Abaratemos la vida: construyamos vías de comunicación”, El Día, lunes 14 de noviembre de 1927, No. 2457, pág. 2, año VIII. 1145 1146 Ídem Alberto Masferrer, “El ejército que necesitamos II”, Patria, lunes 14 de octubre de 1929, No. 438, pág. 1, año II. 1147 322 En este sentido, es claro que el pensamiento social de Martínez al igual que el de Masferrer giraba en torno a la vida: Para constituir a los hombres del mañana en forma adecuada, para que el cuerpo soporte el esfuerzo físico, intelectual y moral del fututo hombre, debemos alimentarle su cuerpo para que pueda formar el músculo y el cerebro, y la formación del hombre comienza en el vientre de la madre, tanto en lo relativo a lo físico como a lo moral. Se impone pues una vida barata e higiénica, una vida intelectual y espiritual. La vida barata requiere de buenas vías de comunicación.1148 Ahora bien, debemos resaltar que Martínez no sólo colaboró con Masferrer como redactor de Patria sino que también fue difusor de las ideas vitalistas mediante una serie de conferencias que se anunciaron con antelación en el referido periódico para que el público en general pudiera asistir. En este caso relacionado con el proyecto de reforma agraria: El próximo domingo (9:00 de la mañana), auspiciado por la Unión Vitalista Salvadoreña, dará una conferencia en la Confederación de Obreros de El Salvador, el General Max. H. Martínez. La plática versará sobre “Las Cooperativas de Consumo”, tema que el General Martínez ha estudiado detenidamente, para exponerlo en forma que sea entendido por todos sus oyentes. Es del caso recordar a los vitalistas y simpatizadores de la doctrina propagada por el maestro Masferrer, que la Unión Vitalista Salvadoreña, celebra sesiones los martes y los viernes de cada semana.1149 La Unión Vitalista trató de fomentar las “Cooperativas de Consumo” para lograr el abaratamiento de las subsistencias. En ese tiempo, los productos de consumo eran caros y generalmente adulterados, sobre todo los víveres y la leche. Las cooperativas al excluir a los comerciantes del proceso de comercialización creaban un abaratamiento de los víveres, ya que el público podía comprarlos directamente del productor, la idea era contrarrestar las excesivas ganancias de los comerciantes y fundar pulperías vitalistas en todo el país mediante el sistema cooperativo de abastecimiento.1150 Maximiliano Hernández Martínez, “Abaratemos la vida: construyamos vías de comunicación”, El Día, lunes 14 de noviembre de 1927, No. 2457, pág. 2, año VIII. 1148 “Conferencia vitalista pronunciará el General Martínez”, Patria, viernes 31 de enero de 1930, No. 530, pág. 1, año II. 1149 “La Unión Vitalista difundirá y fomentará el cooperativismo”, Patria, jueves 28 de noviembre de 1929, No. 477, pág. 1, año II. 1150 323 El vitalismo además, trató de fomentar el cooperativismo de producción para que los campesinos se unieran en pro de sus intereses y tuvieran una mejor oportunidad de realizar sus aspiraciones, que si lo hacían de forma individual. 1151 También al fundar instituciones cooperativas se pretendía establecer una mejor explotación de la tierra, procurando que el campesino no permaneciera ocioso y se cambiara el sistema de contratación de jornal, en el cual se le pagaba, según el antojo del patrono, es decir, se buscaba un acuerdo por un salario más justo, una ración de comida mínima, habitación saludable en el caso de los colonos e iguales condiciones de trabajo para todos, sin faltar por supuesto los aspectos de carácter técnico.1152 A propósito de la reorganización de minifundios y el racismo, Martínez expresó: Porque los pueblos, los verdaderos pueblos, jamás serán partidarios de carnicerías de las que eternamente salen perdidosos. Ni las luchas de razas son justificables. El mundo es muy extenso y los expertos han calculado que para producir los elementos necesarios para la vida de un hombre basta una porción de tierra muy pequeña, si se cultiva con método científico (…) lo que se necesita para que la Humanidad sea feliz es la supresión de las ambiciones de los hombres. Que todos seamos hermanos a pesar de las diferencias de colores y lenguas.1153 Otra de las pláticas vitalistas de Martínez se anunció de la siguiente forma: “Mañana a la hora de costumbre, pronunciará una conferencia en la Sociedad Confederada de Obreros el General Max. H. Martínez. La plática del General Martínez versará sobre el antialcoholismo y será auspiciada por la Unión Vitalista Salvadoreña”.1154 Luego fue Alfonso Rochac, futuro miembro del gabinete de Martínez quien abordó el tema del alcoholismo diciendo que de 1896 a 1913 se “Se piensa unificar a la clase trabajadora”, El Día, miércoles 18 de octubre de 1933, No. 4,220, pág. 1, año XIII. Durante la presidencia de Martínez para lograr este objetivo se organizaron cooperativas obreras con vistas a la fundación de la Federación de Obreros de El Salvador. Con esto el gobierno pretendía resolver el problema económico del proletariado, sujeto potencial y principal de la revolución marxista. El fundamento económico, político y social era sustituir el “comunismo” por el “cooperativismo”. 1151 1152 “Asociaciones agrícolas”, Patria, miércoles 20 de noviembre de 1929, No. 470, pág. 1, año II. José Gómez Campos, “Max. H. Martínez”, Boletín de la Biblioteca Nacional, Época II, junio, julio, agosto de 1934, Nos. 15, 16 y 17, pág. 6. (tomado del libro: Semblanzas Salvadoreñas, 1930). 1153 “Conferencias Vitalistas: Campaña Antialcohólica”, Patria, sábado 15 de marzo de 1930, No. 567, pág. 1, año II. 1154 324 habían consumido 57 millones de botellas de guaro, por lo que el pueblo se estaba degenerando y existía la necesidad imperiosa de suprimir tan dañino vicio. 1155 Amparo Casamalhuapa, también participó en esta campaña, desarrollando la conferencia: “La participación de la mujer en la lucha antialcohólica”. El manifiesto antialcohólico de Masferrer conllevó los siguientes puntos: 1) reducir a 7 horas al día la venta de alcohol, 2) prohibir la presencia de mujeres en los garitos, 3) fundar clínicas y sanatorios antialcohólicos,1156 4) impartir pláticas educativas a las clases populares y 5) difundir por cuenta del Estado, su obra El dinero maldito.1157 Para recaudar fondos para esta campaña, se llevó a cabo una velada vitalista en la que María Mendoza de Baratta ejecutó algunas piezas musicales indígenas en la Escuela de Prácticas Escénicas.1158 Para 1929 se creía que la principal causa de delincuencia en el país era el alcoholismo; un 90% de los delitos se cometían bajo los efectos del alcohol. Su expendio dejaba al Estado ingresos que representaban el 20% del presupuesto total. El ministro José E. Suay también inició una campaña antialcohólica para tratar de disminuir la ola de homicidios y lesiones. Masferrer ya había expresado su opinión sobre que el Estado debía de obtener sus ingresos por otros rubros distintos al alcohol en su artículo “El Estado Corruptor”. La esposa de Pio Romero Bosque por su parte, impulsó la fundación de Ligas Femeninas Antialcohólicas.1159 Masferrer en El dinero maldito describió como en cada cuadra había cantinas en las que los jornaleros y obreros dejaban todo su dinero. Masferrer pensaba que el “El alcohol es la única vida de la mayoría de los labriegos”, Patria, miércoles 18 de diciembre de 1929, No. 494, pág. 1, año II. 1155 “Se funda un sanatorio antialcohólico”, Patria, martes 18 de marzo de 1930, No. 569, pág. 1, año II. De hecho esta propuesta cobro vida mediante la fundación de un sanatorio antialcohólico, situado en la ciudad de San Salvador, en donde se desintoxicaba al interesado por un precio convencional. Su secretario fue Salvador Vaquero. 1156 “Por la regeneración nacional se inicia campaña antialcohólica”, Patria, martes 4 de marzo de 1930, No. 557, pág. 1, año II. 1157 “A principios de abril habrá notable velada en el teatro Colón”, Patria, sábado 15 de marzo de 1930, No. 567, pág. 1, año II. 1158 Carlos W. Moreno, La pena de muerte y la persecución de vagos en las políticas antidelincuenciales de El Salvador, 1928-1946, Revista de Ciencias Sociales y humanidades Identidades, No. 3, año 2, julio/diciembre 2011, págs. 128 y 129. 1159 325 alcohol estaba degenerando a la gente, ya que destruía su memoria, su atención, su juicio y su discernimiento, es decir, el alcohol estaba convirtiendo al hombre en bestia. Era común que en los estancos hubiera riñas que llegaban hasta las heridas y el asesinato. Para Masferrer, el alcohólico bebía por el dolor y la tristeza de su vida diaria y generalmente acababa en dos lugares: en el hospital o en la penitenciaria. 1160 Para Masferrer, era ilegitimo que del expendio del alcohol, el Estado, prestara los servicios públicos. Los pobres campesinos gastaban en agua ardiente, lo que les llevaba años de trabajo ahorrar mientras golpeaba a su mujer y a sus hijos. Masferrer exhortaba a los cantineros a que no se dedicaran a envenenar a la gente y que buscaran un trabajo digno y honesto. Masferrer pensaba que alguien que no bebía era ecuánime, dueño de sus pensamientos y de sus actos, lo que evitaba los delitos y la degeneración, según él, beber conducía a practicar todos los pecados mortales, por lo que uno de los mandamientos de Buda era no ingerir bebidas embriagantes y había que cumplirlo al pie de la letra.1161 Ahora que conocemos la calidad vitalista de Martínez a continuación analizaremos como aplicó dicha doctrina en su gobierno. 3- El vitalismo reformista durante la Presidencia de Hernández Martínez: 3.1- Vivienda En enero de 1933 se hicieron los últimos arreglos entre el gobierno y el representante de los talleres metalúrgicos de Amberes, Bélgica para la construcción de las primeras mil casas baratas que serían ocupadas por obreros y empleados pobres.1162 Se tenía la intención que el 90% de los trabajadores que se emplearan para la construcción de las mismas fueran salvadoreños. 1163 Los pagos que hizo el Alberto Masferrer, El dinero maldito, Colección Cuadernos, Dirección de Publicaciones e impresos, 13ª Ed., Ministerio de Educación, CONCULTURA, 1995, págs. 15, 16, 17, 18 y 19. 1160 1161 Ibídem., págs. 20, 22, 25, 34, 36 y 37. “Últimos arreglos para construir las casas baratas”, La Prensa, martes 3 de enero de 1933, No. 6,621, pág. 1, año XX. 1162 “Es un hecho la construcción de casas baratas”, La Prensa, viernes 27 de enero de 1933, No. 6,646, pág. 1, año XX. 1163 326 gobierno se solventaron con el 60% de los impuestos del “Fondo de Mejoramiento Social” según decreto legislativo número 48, del 24 de octubre de 1932.1164 Aparentemente, el proyecto consistía en que las viviendas fueran entregadas en lotes de 200 y se planificó que el primer grupo se construyera en el parque “Atlacatl”, ya que contaba con vías pavimentadas y además, porque al Estado se le hacía muy difícil seguir comprando terrenos de particulares, por lo que decidió aprovechar terrenos nacionales.1165 La maquinaria y los materiales de construcción fueron desembarcados en el Puerto de Acajutla y supervisados por el Director General de Sanidad.1166 En este sentido, el comité pro-homenaje a Masferrer, le solicitó al Presidente Martínez, que el primer lote de casas que se estaba construyendo llevara el nombre de “Alberto Masferrer”, dicha petición se la hicieron por escrito mediante carta con fecha 10 de agosto de 1933. En la misma, le expresaban su reconocimiento por el gran interés que había mostrado por que se llevaran a cabo los proyectos de Masferrer y que además, aceptaban que su obra reformista tenía una clara influencia de la teoría vitalista:1167 …hoy, precisamente que usted mismo trata de introducir una transformación saludable y hacer obra de salvamento social en la existencia de las clases agobiadas por más de una centuria de intemperancias opresoras. Alberto Masferrer, aquel abnegado predicador de la armonía espiritual, del bienestar social y la compenetración mutua de clases, que luchó, vivió y sufrió intensamente, hasta consumirse en la propia llama de su idealismo, por llevar a una realidad perdurable, la fórmula por él soñada para construir la felicidad ecuánime de todos, Alberto Masferrer, decimos debe comenzar a recibir el premio aunque póstumo, pero no por eso menos justo, de la iniciación de sus postulados dentro de la vida real: ninguna recompensa más alta anheló él en los años de sus luchas vitalistas.1168 “Texto de la contrata celebrada entre el gobierno y Les Ateliers Metallurgiques para la construcción de casas baratas”, La Prensa, sábado 28 de enero de 1933, No. 6,647, pág. 5, año XX. 1164 “Este mes se empezarán a construir las primeras cien casas baratas”, La Prensa, martes 14 de febrero de 1933, No. 6,664, pág. 1, año XX. 1165 “Ya fueron embarcados en Bélgica la maquinaria y materiales para las 100 casas baratas que construirá el gobierno”, La Prensa, jueves 20 de abril de 1933, No. 6717, pág. 1, año XX. 1166 Arturo R. Castro, “Piden que el nuevo barrio obrero sea bautizado con el nombre de Alberto Masferrer”, La Prensa, sábado 12 de agosto de 1933, No. 6,812, pág. 3 año XX. 1167 1168 Ídem. 327 En esta dirección, vieron como de corte vitalista las actividades iniciadas por el gobierno de Martínez, específicamente, la repartición de tierras cultivables entre campesinos desposeídos, la construcción de casas baratas para obreros y empleados y en general todas aquellas medidas que se estaban adoptando para transformar el orden de vida de la población que se originaban de su clara visión de mandatario, que si bien es cierto, Masferrer hubiese estado vivo, vería como la obra restauradora que siempre soñó de otros gobernantes del pasado: Todos estos detalles, Señor Presidente, han inspirado en los miembros del Comité, la idea de presentar a usted este memorial en el cual queremos dejar consignado nuestro convencimiento de que, entre las obras de reparación social, con tanto esfuerzo y buena intención emprendidas por usted, y la doctrina del Mínimum Vital del ilustre Maestro desaparecido, existe una íntima relación que bien vale la pena ser consagrada a su memoria.1169 En acto simbólico, el primer ladrillo de la primera casa barata fue colocado por el Presidente Maximiliano Hernández Martínez, las palabras oficiales fueron brindadas por el también vitalista Adolfo Pérez Menéndez y el hecho de que haya sido un 15 de septiembre tuvo un doble significado que redundo en uno solo, el engrandecimiento del nombre de Masferrer y la recuperación del sentido de “patria”, ya que también se celebraba la independencia política de España. El reconocimiento hacia Martínez vino porque estaba aportando soluciones prácticas, eficientes y razonables. Para el periódico La Prensa de El Salvador, Martínez, era el primer presidente que cumplía con hechos y no con promesas falaces su mandato, lo caracterizaron como “dinámico, sobrio en sus palabras y ofrecimientos, pero emprendedor y laborioso”.1170 Los redactores del referido periódico, opinaban que el pueblo ya estaba harto de que se perdiera el tiempo y las energías nacionales en estériles luchas de partidos políticos y que estaban cansados de la “politiquilla de aldea y parroquia” que tanto había atrasado al país y lo había llevado al borde de la bancarrota y al desajuste social y económico. Martínez –consideraban– estaba llevando al país por la 1169 Ídem. “Obra del gobierno en pro del trabajador”, La Prensa, sábado 16 de septiembre de 1933, No. 6,841, pág. 1, año XXI. 1170 328 vía del progreso y el desarrollo evolutivo que redundaba en demostraciones de justicia y bienestar social.1171 Pérez Menéndez por su parte, dijo que este reformismo se hacía en función de aliviar las necesidades de los trabajadores, pero sin vulnerar los derechos de aquellos que habían obtenido sus bienes por medios legítimos, es decir, este vitalismo como ya lo hemos planteado en la introducción, surgió como medida efectiva contra el comunismo, éstas, definitivamente fueron medidas para evitar el choque violento entre clases antagónicas.1172 Se trataba, entonces, de re-encauzar el sistema liberal histórico entendido en su más arcaica forma, es decir, el vitalismo se convirtió en una nueva opción sociológica para el país frente al comunismo, que significa desorden interior y pérdida de la soberanía nacional, pero sin caer tampoco en un populismo anárquico:1173 En El Salvador necesitamos que las dos terceras partes de las familias proletarias tengan, en el menor tiempo posible, en que vivir y de que vivir. El día que esta meta se haya alcanzado, no tenemos por qué temer a las ideas anárquicas o comunistas que ahora mantienen en zozobra a todo el país, toda vez que habremos transformado radicalmente a los miserables y desarrapados, que son los elementos de que se sirven los agitadores para los trastornos sociales…1174 En coincidencia con esta frase, el Presidente Martínez manifestó que era necesario hacer una “revolución pacífica”, es decir, realizar un programa evolutivo con vistas a la acción. A esta nueva política económica-administrativa, es a la que el periodista nicaragüense, Gabry Rivas llamó: “la revolución de arriba para abajo”. 1175 De hecho, el teórico marxista Antonio Gramsci, ha elaborado una teoría en donde 1171 Ídem. “Es un acto trascendental la colocación de la primera piedra de las casas baratas”, La Prensa, sábado 16 de septiembre de 1933, No. 6,841, págs. 1, 3 y 4, año XXI. 1172 “Un bello discurso del Dr. Adolfo Pérez Menéndez”, Diario Oficial, Suplemento La República, sábado 16 de septiembre de 1933, No. 238, págs. 2 y 3, año I. 1173 1174 Ídem. Las cursivas son nuestras. Gabry Rivas, “La revolución de arriba para abajo”, La Prensa, jueves 19 de octubre de 1933, No. 6,869, pág. 3, año XXI. 1175 329 habla de una reorganización del sistema capitalista “desde arriba”,1176 mediante la imposición de un Estado autoritario y represivo, ligado a una penetración del mismo en los asuntos sociales y económicos.1177 Josué de la Vega Morales en su ensayo Del estado populista al estado contrarrevolucionario en América Latina establece que la instalación de un Estado contrarrevolucionario se basa en: …contener, desarticular y vencer a los sectores populares. En este sentido los regímenes militares y la democracia “limitada” son parte del mismo proyecto contrainsurgente, cuya finalidad es impedir las formaciones de organizaciones sociales y políticas democráticas y, por ende, articuladoras de demandas y constructoras de la unidad de los dominados y explotados.1178 Aunado a esto, es interesante observar que cuando el General Salvador Castaneda Castro, Ministro de Gobernación en 1933 rindió un informe sobre las condiciones de vida del campesino salvadoreño, fue casi una copia exacta del mínimum vital de Masferrer:1179 1- La población campesina carece de alimentación higiénica y suficiente, 2- Carece también de viviendas aireadas, amplias y propicias para conservar la salud, 3- No están provistos de ropa decorosa y adecuada, 4- La instrucción pública es tan deficiente que una inmensa mayoría de la población infantil en edad escolar, carece de ella; y de tal suerte se agrava en lugar de aliviarse el problema del analfabetismo, 5- el salario recibido por los campesinos es muy inferior al deseado para facilitar a los mismos la satisfacción de sus necesidades…1180 Gabry Pavón B., “Resurgimiento de El Salvador”, La Palabra, lunes 3 de diciembre de 1934, No. 5, pág. 1, año I. Gabry Pavón, señaló con gran acierto, retomando, unas breves palabras de un editorial aparecido en el Diario Oficial del día 5 de diciembre de 1931, la visión del Presidente Martínez de llevar a cabo un nuevo proyecto de Nación: “Ciudadanos salvadoreños: El edificio de la Nación está semiderruido. Vamos todos a reconstruirlo. Nosotros dirigiremos la obra. Vosotros prestareis vuestra vigorosa cooperación”. 1176 Christine Buci-Glucksmann, Gramsci y el Estado, siglo veintiuno de España Editores, 1ª Edición en español, 1978, pág. 8. 1177 Josué de la Vega Morales, Del estado populista al estado contrarrevolucionario en América Latina, pág. 1. Disponible en: http://halshs.archives-ouvertes.fr/docs/00/10/33/24/PDF/Josue_Noe_De_la_Vega.pdf 1178 “El campesino salvadoreño vive en la miseria y el dolor”, La Prensa, sábado 25 de febrero de 1933, No. 6,675, pág. 1, año XX. 1179 1180 Ídem. 330 Ante esta situación, Castaneda Castro declaró que el gobierno estaba impulsando su “doctrina de mejoramiento social”, que consistía en procurar continuamente el mayor beneficio para la mayoría de los habitantes del país y aseguró que este reformismo era de tipo “liberal”, es decir, respetaba los derechos de los individuos y regulaba los probables conflictos que pudieran suscitarse entre ellos. Además, afirmó que esto se debía a una evolución en las ideas que, paulatinamente, llevarían a un cambio en las costumbres y leyes del país. Sostuvo, que el interés del Estado, ya no radicaba en el individuo, sino en las grandes mayorías y que se estaba trabajando en nuevas leyes que se presentarían ante la Asamblea Nacional para su pronta aprobación.1181 Respecto a la creación del Fondo de Mejoramiento Social, Manuel Barba Salinas expresó que fue una de las medidas más atinadas de Martínez: El problema social incluye en su solución la de muchos otros problemas que se le relacionan, tales como el de sanidad, el del alcoholismo, el de la legislación social, educación pública, etcétera, pero lo más esencial es la procuración del mejoramiento económico del pueblo y la tendencia hacia un mayor equilibrio entre los pudientes y los desvalidos a fin de abolir en lo posible la lucha de clases que trae tan funestas consecuencias (…) el fomento de la beneficencia, la creación de botiquines, la popularización de la quinina, en fin, todo lo que signifique mejoramiento efectivo de las condiciones de vida del pueblo.1182 Bajo esta visión el gobierno de Martínez, impulsó la medida de demoler mesones que eran insalubres o que por sus malas condiciones constituían una amenaza para la vida humana, problema social, que fue fuertemente denunciado por Masferrer. 1183 Se elaboró e implementó un Código Sanitario 1184 mediante el cual se determinaba que la Dirección de Sanidad debía derribar aquellos mesones que prácticamente 1181 Ídem. Manuel Barba Salinas, “El mejoramiento popular en el programa de Martínez”, jueves 15 de noviembre de 1934, Diario Nuevo, No. 302, pág. 1, año I. 1182 “Mañana se tratara en gobernación sobre la demolición de ciertos mesones amenazantes”, La Prensa, miércoles 5 de abril de 1933, No. 6,705, pág. 1, año XX. 1183 “El problema de la vivienda”, Nosotros, domingo 9 de julio de 1939, No. 4, págs. 1 y 4, año I. Los redactores del periódico Nosotros le solicitaron a Martínez que no sólo se aplicaran medidas a los mesones ya existentes sino que se decretara una ley para la futura construcción de mesones higiénicos, con suficiente, agua y luz tomando en cuenta las posibilidades económicas de sus propietarios. 1184 331 fueran ruinas o que no pudieran resistir la fuerza de los temporales; esta ley se aplicó sin trámites burocráticos para que no pudiera ser burlada.1185 El problema de la vivienda en ese momento era muy serio, el Estado pretendía derribar los mesones porque eran “verdaderos pudrideros humanos”, focos de transmisión de muchas enfermedades, la gente realmente vivía en condiciones infrahumanas, en hacinamiento y con tendencia a la promiscuidad, las habitaciones eran muy estrechas, sin aire y sin luz, carecían de toda comodidad, con pisos de ladrillo o barro, con muros mugrosos, puertas y ventanas desvencijadas y llenos de telarañas, ratas y cucarachas debido a su absoluta falta de limpieza. 1186 Esto conllevaba a otros problemas que Masferrer señaló, ya que no contaban con agua potable suficiente, incluso, había algunos que adolecían de letrinas, albañales y desagües, los mesones que se habían identificado estaban en estas condiciones, eran los de las orillas de San Salvador y los barrios antiguos de la ciudad, como los de Candelaria, La Vega, San Jacinto y San Estaban. La carestía de agua implicaba que los ocupantes no podían hacer limpieza en sus cuartos ni en los corredores, mucho menos de los excusados o letrinas, para empeorar la situación no tenían luz eléctrica y a sus alrededores se hacían volcanes de basura, de allí la relevancia de la construcción de barrios para obreros iniciada por el Ejecutivo. 1187 Cerca de San Salvador, en la colonia San Vicente, por ejemplo, se construyeron 15 nuevas casas baratas, fueron exclusivamente para obreros que ya habían diligenciado sus solicitudes y se anunció la edificación de nuevos lotes de estas casas para dotar de viviendas higiénicas y cómodas a todos los trabajadores y empleados del país.1188 Mientras tanto, en el Diario Nuevo, aparecían noticias dramáticas sobre que algunos mesones, más bien, parecían “hospitales” a los que se enviaron brigadas de enfermeras y estudiantes de medicina para implementar el plan “Serán derribados muchos mesones por la Dirección General de Sanidad”, La Prensa, miércoles 27 de septiembre de 1933, No. 6,850, pág. 1 y 4, año XXI. 1185 Cartillas de Juan Cristóbal, “El horror de los mesones”, El Día, viernes 2 de diciembre de 1932, No. 3,979, pág. 5, año XII. 1186 1187 Ídem. “Más casas baratas para obreros”, Diario Nuevo, jueves 27 de febrero de 1936, No. 697, pág. 1, año III. 1188 332 de acción sanitario, que se llevó a cabo en los siguientes barrios: El Coro, Santa Anita, La Bolsa, El Arenal de Urbina entre otros.1189 Bajo este Código de Sanidad, se dictaminó que 558 mesones serían clausurados si sus propietarios no cumplían con el mejoramiento de las condiciones materiales de los mismos: 167 no tenían agua, 217 no tenían sanitarios y 159 estaban en mal estado.1190 En 1934, se demolieron los mesones: San Ramón, San Marcos, Santa Eugenia, Rosita y San Nicolás ubicados en el barrio San Esteban, ya que prácticamente eran ruinas que por arte de magia se sostenían en pie. 1191 En ese mismo año, se demolió otros cuatro mesones más, propiedad de personas pudientes: Manzano, Merazo, Argentina y Araujo.1192 Para 1938, en San Salvador había 1,125 mesones de los cuales el 99% se encontraban en condiciones insalubres, por lo que se solicitó que algunos fueran demolidos y se implementó un plan de concientización encaminado a que los propietarios se comprometieran a hacer las mejoras respectivas.1193 El Diario de Hoy en 1939 publicó que 7 mesones insalubres más situados en distintas zonas del departamento de San Salvador, fueron declarados inhabitables y demolidos por disposición de la Dirección General de Sanidad, a fin de proveer a los inquilinos de mejores sitios de alojamiento. Asimismo, se procedió con otros mesones que no guardaron los requisitos higiénicos.1194 Alberto Guerra Trigueros pensaba que una “casa” era un aspecto meramente material, que valía cuando albergaba a una familia concreta, convirtiéndose entonces en un “hogar”, pero que esto no podía realizarse nunca en un ambiente como el de “Más parecen hospitales que mesones”, Diario Nuevo, lunes 2 de marzo de 1936, No. 699, pág. 1, año III. 1189 1190 III “558 mesones serán clausurados”, Diario Nuevo, viernes 5 de junio de 1936, No. 782, pág. 1, año “Cinco mesones insalubres van a ser demolidos”, Diario Nuevo, martes 20 de noviembre de 1934, No. 306, pág. 1, año I. 1191 “Pedida la demolición de 4 mesones más”, Diario Nuevo, martes 30 de octubre de 1934, No. 288, pág. 1, año I. 1192 1193 “Los mesones insalubres”, Diario Nuevo, viernes 29 de abril de 1938, No. 1357, pág. 1, año V. “Por orden de sanidad se están demoliendo mesones”, El Diario de hoy, sábado 15 de abril de 1939, No. 878, pág. 5, año III. 1194 333 los mesones. Esto se debía a la ausencia de condiciones mínimas de dignidad humana, de respeto muto, de derecho humano a cierta intimidad personal y familiar, que traía como consecuencia la inestabilidad social, por estar la familia, “base de la sociedad” en una situación precaria que en ese momento, según él, era fácilmente comprobable por cualquier persona que viniera al país. 1195 Para Guerra Trigueros, en ese tiempo casi nadie tenía casa propia. En los estratos humildes, la mujer se volvía un objeto de uso común, “la esposa de todos sucesiva y simultánea”, situación que llevaba a otros problemas, como los de la paternidad irresponsable y la procreación de hijos ilegítimos.1196 Desde su perspectiva, la única vivienda verdadera era la “propia” con al menos cuatro paredes solidas que la sostuvieran y no esos lienzos de pared que constantemente estaban expuestos a un súbito derrumbe por los azares de la intemperie. Sostuvo que las casas tenían que estar hechas con materiales de buena calidad.1197 Para él, esto constituía no sólo un derecho sino también un deber que debía ser garantizado por el Estado, quién era el responsable de facilitar a cada familia la adquisición de una casa, a manera de ir suprimiendo las barracas de lámina, los ranchos de paja desprovistos de muro y los inhumanos mesones que albergaban a la mayoría de la población en ese momento. Por tanto, para que la Nación pudiera regenerarse necesitaba de cuatro elementos indispensables que atacaba el comunismo: Familia, Propiedad, Autoridad y Religión.1198 El Estado con sus recursos limitados no podía resolver solo este grave problema, necesitaba de la ayuda del capital, por ejemplo, un empresario de la época, Luis Bustamante y Guerra dijo que él podía construir casas de 2 piezas convertibles en 3, con su respectivo sanitario y cocina, cuyo precio podría rondar unos 900 colones cada una. Estableció que las paredes podían ser construidas de Alberto Guerra Trigueros, “La impropiedad: la familia en el mesón”, Patria, miércoles 9 de febrero de 1938, No. 9,823, pág. 8, año IX. 1195 1196 Ídem. Alberto Guerra Trigueros, “propiedad: los muros”, Patria, sábado 29 de enero de 1938, No. 9,814, pág. 8, año IX. 1197 1198 Ídem. 334 ladrillo de canto y las columnas de cemento y hierro, es decir, el capital también buscó contribuir, de alguna manera, con el problema de los mesones.1199 Masferrer en ¿Qué debemos saber?, cartas a un obrero, manifiesta que construir casas higiénicas, era necesario en todas las ciudades del país, pero en su momento, consideraba que a los capitalistas no les interesaba porque su negocio estaba en obtener grandes rentas alquilando covachas. También consideraba que los gobiernos de turno invertían los dineros públicos en otras cosas menos importantes como teatros o diversiones elegantes y que protegían a los grandes propietarios. Para Masferrer, los mesones eran formas de asesinato disimuladas, que subsistían en nombre de los negocios y las operaciones. Ahora bien, es interesante que Trigueros mencione lo de los vástagos, ya que desde 1935 la Dirección General de Estadística hizo estudios periódicos para observar el porcentaje de hijos ilegítimos que existían en El Salvador, determinando que el índice era de más del 50%. En la investigación se descubrió que desde ese año hasta la fecha en que se publicó el artículo, la cifra había aumentado considerablemente.1200 El Diario de hoy en consecuencia realizó una fuerte campaña en favor de la protección del niño y de la mujer que con espíritu “vitalista” fue llamada por Renato Girón: “humana”.1201 Precisamente la campaña hablaba de cómo proteger a la infancia desheredada y a la madre soltera abandonada. El primer punto era que éste no era un problema sólo de los padres irresponsables sino de la sociedad toda. Se discutió mucho la aprobación de un impuesto de soltería tal como lo planteó Masferrer en su momento, que aparte de paliar la situación, conllevaba también un poco de moralización para el pueblo, del cual, obviamente muchos estuvieron en contra y otros a favor, pero de lo que se trataba era de crear conciencia en el sector social masculino del grave problema y promover el hogar:1202 1199 “Casas para obreros”, El Gran Diario, viernes, 27 de octubre de 1939, No. 122, pág. 3, año I. “50 por ciento de hijos ilegítimos”, El Diario de hoy, viernes 27 de agosto de 1937, No. 395, pág. 4 año II. 1200 Renato Girón, “Una campaña humana”, El Diario de hoy, jueves 6 de julio de 1939, No. 948, pág. 9, año IV. 1201 1202 Ídem. 335 En esta hora de inculpaciones, hay que desencarar a quienes son delincuentes de las juventudes (…) yo que tengo la huella del ultraje social, que he vivido una existencia amarga a causa de esos errores de los hombres, que como dijera Masferrer no quieren ser humanos. Desde luego luchar por el fomento del hogar salvadoreño legítimo, es deber ineludible e impostergable de todo ciudadano que de verdad quiera ver engrandecida su Patria.1203 La palabra “mesón” en el país, era sinónimo de ignorancia, malvivir, enfermedades y promiscuidad, o sea, el mesón era el cáncer social que carcomía a la Nación, motivo por el cual no se podía construir una sociedad material y espiritualmente saludable. Aparentemente, esta forma de vivienda también había calado mucho en las costumbres y hábitos higiénicos del pueblo, el cual no era proveído de agua, pero además ya se había acostumbrado a vivir en la suciedad, sin hacer el mínimum ejercicio de limpieza:1204 De lo anterior, sería que las virtuosas aguas de esa “cultura”, cuyas tablas nos legó nuestro Masferrer, habrían de llegar inevitablemente, a esas tierras áridas y hostiles donde ahora crecen lozanas de inconsciencia esas plantas malditas que son los dueños de mesón y mesoneros sin nombre.1205 Para Guerra Trigueros, hasta la misma gente humilde tenía bien arraigado el concepto de que era normal y natural vivir en un mesón, ya que vivir en casas decentes y amplias era sólo para gente rica, –deformación– que provenía de haber estado tanto tiempo sometida. El problema era, que los mesones no podían ser destruidos de la noche a la mañana, ya que ante la escases de vivienda, se iba a dejar a una gran masa indigente en la calle, por lo que, incluso, en un momento determinado se pensó como medida alternativa, construir nuevos mesones amplios e higiénicos, pero Guerra Trigueros replicó que esto no solucionaba el problema, porque un mesón por el solo hecho de serlo era inhumano. 1206 1203 Ídem. 1204 “El mesón”, Patria, viernes 18 de febrero de 1938, No. 9,831, pág. 8, año IX. “50 por ciento de hijos ilegítimos”, El Diario de hoy, viernes 27 de agosto de 1937, No. 395, pág. 4 año II. 1205 Alberto Guerra Trigueros, “Im-propiedad, subterfugios del mesón”, Patria, sábado 12 de marzo de 1938, No. 9,849, págs. 8 y 12, año IX. 1206 336 Salvador Cañas a propósito de este tema, publicó un libro titulado El mesón, en el que planteaba que mientras el problema de la vivienda no se resolviera la Nación no evolucionaría. Cañas sostenía, que el problema era integral y que tenía que atacarse desde varias dimensiones, que iban desde la transformación del sistema económico hasta la implementación de campañas educativas. En ese sentido, creía que aunque se negara por algunos, Masferrer fue un adelantado a su tiempo sobre muchos problemas que se tenían en ese momento:1207 Los movimientos de superación multitudinaria –nadie lo duda– tienen su filosofía. Aunque el mínimum vital no encierra nuevos postulados económicos a seguir, ni señala rumbos sociales atrevidos, sí es el brote de una generosa concepción de nuestras inquietudes, sueños y dolores. Este país comprenderá cuan sincero y acertado fue el maestro al tratar las cuestiones impostergables de los salvadoreños. La vivienda tiene vinculación indisoluble con el problema de la justicia social.1208 El objetivo de su libro era analizar realísticamente tan profundo problema, describiendo las tragedias que él mismo había observado desde niño y de cómo había visto personas que truncaron sus destinos debido al mesón, esto lo decía porque se introducían al hampa o caían en vicios, hablaba de los estoicismos de las madres, de la vida de los obreros, de las miserias materiales y dolores morales de la gente. Dedicó este libro a Francisco Morán y Rubén H. Dimas, quienes en su misión vitalista también aspiraban a que desaparecieran estas terribles formas de habitación:1209 El libro de Luarca sobre el campesino, y el de Cañas sobre la vida del proletario de las urbes, son un puente tendido entre las diferentes clases sociales: conocer a los demás es el único camino para llegar a amarlos. Sólo sabiendo las necesidades de nuestros hermanos, podremos poner en la balanza de nuestro egoísmo, el interesarnos por su felicidad y bienestar.1210 Una medida que se quiso impulsar específicamente en la ciudad de San Salvador, fue la de sustituir el sistema de mesones antihigiénicos por casas de Salvador Cañas, “Prólogo del libro: Mesón”, Diario de Hoy, domingo 10 de abril de 1938, No. 586, pág. 7, año II. 1207 1208 Ídem. 1209 Ídem. Lydia Valiente, “Mesón: el libro de Salvador Cañas”, Diario de hoy, miércoles 13 de abril de 1938, No. 589, pág. 9, año II. 1210 337 apartamentos, en cuya construcción se encontraban interesados muchos dueños de terrenos, ubicados tanto en las zonas centrales de la ciudad como en las barriadas. Los interesados presentaron los planos respectivos al departamento de ingeniería sanitaria, los cuales fueron aprobados con algunas observaciones. Este proyecto se había venido discutiendo desde hacía mucho tiempo con el propósito de construir edificios habitacionales más modernos y limpios.1211 Además, en febrero de 1940 El Diario Latino y El Gran Diario anunciaron que el gobierno entregaría 600 casas baratas para igual número de familias en la ciudad de San Salvador, construidas a cargo de la Junta de Mejoramiento Social. Manifestaron que tal acto fue digno de reconocerse, ya que aliviaba, en gran parte, el problema de la vivienda para una buena parte del sector obrero capitalino. 1212 Pero no era suficiente solamente proveer de viviendas a los obreros y campesinos, era necesario protegerlos legalmente para que estos no pudieran ser despojados de ellas ante una futura deuda, es por eso que a iniciativa del Presidente de la República, se presentó al congreso el proyecto de ley para su pronta aprobación del “Bien de Familia” que volvía dichos inmuebles inembargables e intransferibles por un período determinado.1213 Esta medida fue planteada por Masferrer, en una hoja suelta titulada Ahí va la sonda, en el contexto de una posible postulación suya, a la presidencia de la República, específicamente en el punto séptimo establecía: “Que la casa familiar única y de precio medio o ínfimo, sea inembargable”. 1214 Ahora bien, el Mínimum Vital también se concretó mediante la organización de instituciones como la Junta Nacional de Defensa Social que tuvo por objeto distribuir el primer lote de casas baratas, que daba facilidades crediticias para su “Casas de apartamentos en lugar de mesones”, Diario de hoy, viernes 24 de marzo de 1939, No. 862, pág. 5, año III. 1211 “Seiscientas familias gozarán de casas higiénicas y baratas”, El Gran Diario, sábado 17 de febrero de 1940, No. 235, pág. 3, año I. 1212 “El ejecutivo y el bien de familia”, La Prensa, sábado 4 de marzo de 1933, No. 6,632, págs. 1 y 8, año XX. 1213 Luis Alonso Aparicio, Alberto Masferrer, Pedagogo-político, 1ª Ed. Universidad Pedagógica de El Salvador, 2007, pág. 58. 1214 338 obtención, y se encargó de distribuir los predios de las haciendas “El Chiquirín” y “Metalío”.1215 Así como los de la finca “El Bosque”, propiedad del gobierno aledaña a la capital e inició la construcción de una colonia de casas baratas para obreros pobres. En 1937 se prepararon los pisos y se construyeron las bases para las primeras ocho casas de ensayo. Además, a cada terreno iba adherido un lotecito destinado exclusivamente para cultivo.1216 En 1938 para justificar las actuaciones de la Junta Nacional de Defensa Social Martínez expuso: La Junta Nacional de Defensa Social, consecuente con el plan que se ha trazado de favorecer el mayor número de habitantes del país, entre empleados, obreros y campesinos, ha desarrollado una labor de encomio. Hasta hoy ha construido 138 casas en las colonias “Santa Rosa”, “San Vicente” y “El Bosque”, de esta capital, las que han sido entregadas a igual número de familias (…) además ha adquirido doce casas que se entregaron a doce familias y cuyo valor total es de 66,333.60 colones (…) estas mismas propiedades se entregaron en la forma de Bien de Familia a los desposeídos de ellas por deudas contraídas (…) tiene en construcción siete casas en la colonia “San Vicente” y treinta y cuatro en la Colonia “El Bosque” (…) Así mismo la mencionada Junta ha adquirido propiedades rústicas por el valor de 1.107,587.92 colones de las cuales se han repartido 2,099 lotes para ser cultivados por el campesinado y 735 lotes para la formación de futuras poblaciones (…) pronto serán adquiridas valiosas propiedades rústicas para dividirlas en lotes y entregarlas entre los campesinos que deseen cultivarlas. 1217 Otra política para resolver tan complejo problema, fue fomentar el ahorro obligatorio entre los obreros, por ejemplo, la Sociedad de Empleados de Comercio tomó a bien implementar esta medida, aun en contra de algunos de sus miembros, con el objetivo de crear un fondo, que les permitiera en un período determinado obtener casa propia. Esta acción contó con el apoyo personal del Presidente Hernández Martínez, pero los dineros no fueron depositados en ninguna institución del Estado sino que en las mismas cooperativas de empleados; la participación del “La Junta de Defensa Social entrara en plenas actividades”, La Prensa, martes 17 de octubre de 1933, No. 6,867, pág. 3, año XXI. 1215 “Se inició la construcción de la colonia El Bosque”, Diario Oficial, Suplemento La República, miércoles 13 de enero de 1937, No. 1,190, pág. 4, año V. 1216 Maximiliano Hernández Martínez, “Informe ante la Asamblea Legislativa”, Diario Oficial, tomo 124, lunes 14 de febrero de 1938, pág. 361. 1217 339 gobierno consistió en emitir una ley que revestía de legalidad la medida para seguridad de los mismos empleados.1218 Ahora bien, en 1941 la Capitalizadora de Ahorros S.A., la primera empresa de capitalización fundada en Centro América, inició de forma privada la construcción de casas baratas para personas de bajos recursos económicos, las cuales fueron entregadas con ventajosas facilidades de pago. En realidad, esto fue lo que siempre quiso el gobierno de Martínez, que el capital ayudara en la tarea de beneficiar al pueblo laborioso y humilde del país, mediante la construcción de viviendas que llenaran los estándares mínimos de higiene y decencia. 1219 Paulatinamente otros capitalistas estuvieron interesados en invertir en este rubro, como cuando en San Miguel se construyó un primer lote de casas para empleados y obreros. Varias personas con muy buenos recursos económicos ejecutaron dicho proyecto, vendiéndolas a precios relativamente bajos y con facilidades de pago.1220 Con estas iniciativas Estado y Capital unieron esfuerzos para el mejoramiento social. Antes de pasar al análisis de la reforma agraria del gobierno de Martínez debemos decir que cuando en los diferentes periódicos de la época, se trató de dar solución al problema de la vivienda, hacer referencia a la doctrina del “Mínimum Vital” fue recurrente: De esos agujeros donde no pasó nunca la higiene, en donde se representaba todos los días el drama maldito del hambre y de la prostitución, en los cuales recibían su lección de miseria y desesperación los hombres del mañana, de ahí salió hace algunos años la voz de la protesta, y se hizo doctrina en la pluma de Masferrer, y se hizo ensayo en las manos de algunos políticos que se atrevieron a romper con la teatralería de Administraciones payasas acostumbradas a la promesa vacía (…) pero dichosamente la compresión de los dirigentes ha cambiado (…) Ya nadie duda que las clases trabajadoras deben gozar de un mínimo de vida, que incluye la habitación sana, el alimento suficiente, la diversión tonificante…1221 “Tendrán casa propia todos los empleados”, Diario Nuevo, martes 23 de octubre de 1934, No. 282, pág. 1, año I. 1218 “La capitalizadora de ahorros construirá pronto casas baratas para familias pobres”, El Diario de hoy, jueves 13 de marzo de 1941, No. 2,070, pág. 3, año VI. 1219 “Viviendas baratas construirán pronto en la ciudad de San Miguel”, El Diario de hoy, sábado 22 de marzo de 1941, No. 2,079, pág. 3, año VI. 1220 1221 “El derecho a la vivienda sana”, El Gran Diario, sábado 22 de julio de 1939, No. 24, pág. 3, año I. 340 3.2 Reforma agraria, hacia una transformación del sistema de tenencia de la tierra La implementación de una reforma agraria en el proyecto vitalista era fundamental, ya que como Kropotkin lo había establecido, el sistema de la propiedad de la tierra en manos de las clases medias convertidas en burguesía terrateniente propietaria y rentista, protegida por los Estados capitalistas debía desmantelarse mediante el reparto de tierras. De hecho, a criterio de Kropotkin fue el gran error de las revoluciones de 1793, 1848 y 1871, preocuparse por hacer solo una revolución política sin haber realizado primero una verdadera revolución social.1222 La idea del reparto de tierras, fue una preocupación muy temprana en Masferrer, cuando fue colaborador del periódico El Día en 1924, tuvo a su cargo una sección denominada “Hombres y cosas, sucesos e ideas” en la cual reprodujo un artículo aparecido en un periódico mexicano titulado “Subdividamos la propiedad”. En el mismo, se establecía que la reforma agraria mexicana debía consistir en repartirles tierras a los indígenas para que de ahí sacaran sus propios productos de consumo, ya que estos eran los que explotaban directamente la tierra, es decir, Masferrer siempre creyó que debía de cumplirse con el apotegma socialista: “La tierra tiene que ser de quien la trabaja”, “de quien la necesita y no de quien la tiene”.1223 Un modelo a seguir desde esta perspectiva era Francia, ya que en ese momento, era considerada por numerosos sociólogos como una de las naciones del mundo donde existía uno de las más equitativas distribuciones de tierra, lo cual le permitía no tener conflictos internos y acelerar su bienestar manteniendo la unidad de la patria.1224 Jesús Civit, “La revolución en Kropotkin (Estudio desde la sociología fenomenológica)”, Tesis para optar al grado de Doctor en Sociología de la Universidad Católica Andrés Bello, Venezuela, 2006, págs. 192 y 193. 1222 1223 “Subdividamos la propiedad”, El Día, martes 16 de septiembre de 1924, No. 1,604, pág. 1, año V. 1224 Ídem. 341 En 1933 la Junta Nacional de Defensa Social solicitó al Ejecutivo autorizar el presupuesto para la compra de la propiedad denominada “Hacienda Nueva” perteneciente a los señores Ángela y Antonio Quiroz, situada en el municipio de Concepción Batres, Usulután cuya extensión superficial era de 1,800 manzanas, valorada en 130,000 colones con el objeto de lotificarla y después repartirla entre campesinos pobres de esa zona.1225 El Estado en esta misma línea en el mes de septiembre de 1933 le compró unos terrenos a la compañía IRCA de cuyo precio sólo quedo pendiente un abono de 40,000 colones.1226 Realmente es sorprendente observar como la doctrina vitalista de Masferrer tuvo efectos reales durante la presidencia de Martínez, por ejemplo, el General Alejandro Gómez donó de forma gratuita e irrevocable, el derecho de la cuarta parte de la hacienda de su propiedad denominada “Gualose” que consistía en 4 caballerías, misma que fue aceptada por el Ejecutivo con el objetivo que dicha porción fuese lotificada al igual que las haciendas “Santa Rosa” de 18 caballerías con un costo de 124,638.75 colones y “Metalío” de 64 caballerías con un costo de 96,458.37 colones para ser repartidas entre campesinos de aquella región. 1227 El gobierno agradeció el acto de altruismo y consideró que revestía una prueba palpable de que las clases adineradas del país estaban colaborando, en función de resolver los profundos problemas del campesinado.1228 La República expresó que actos como éste, tenían que ser imitados por otras personas que se encontraran en las mismas posibilidades, ya que ayudarían a equilibrar un poco la escabrosa situación económica y a solventar las grandes necesidades del conglomerado. Se trataba, entonces, de proporcionar en la mayor “El gobierno salvadoreño lotifica terreno para campesinos pobres”, Cronos, Quetzaltenango, Guatemala, jueves 15 de junio de 1939, No. 2,104, pág. 1, año VII. 1225 “El gobierno cancela el valor de unos terrenos”, La Prensa, miércoles 20 de septiembre de 1933, No. 6,844, pág. 1, año XXI. 1226 Plan de distribución de tierras de la Junta Nacional de Defensa Social, Diario Oficial, Suplemento La República, jueves 21 de enero de 1937, No. 1,197, pág. 4, año V. 1227 “La donación de tierras es una necesidad”, La Prensa, viernes 27 de enero de 1933, No. 6,646, pág. 5, año XX. 1228 342 medida de lo posible, los medios materiales esenciales a los desposeídos para la satisfacción de sus necesidades vitales.1229 En este sentido, José Bernal, primer propietario de Patria, obsequió 20 manzanas de terreno ubicadas en el cantón Chinameca, departamento de Usulután, (aunque en ese momento se consideraban jurisdicción de San Miguel) a cuatro familias de labriegos y expresó que efectuaba tal acto en memoria del defensor de los trabajadores del campo:1230 “Aun cuando es parte de mi modesta hacienda, la doy en nombre de aquel que nada tuvo (Alberto Masferrer), pero que si hubiera tenido, todo lo habría dado…”1231 En 1936, el Ministerio de Fomento envió a dos ingenieros para que efectuaran los estudios respectivos a la hacienda “La Morita” que era como se denominaba el referido inmueble, (que era considerado en ese momento como apto para varios cultivos) a efectos de que fuera lotificado y en un futuro distribuido.1232 En cuanto a la hacienda “Santa Rosa” se refiere, los lotes empezaron a ser entregados en el mes de abril de 1933 a todas aquellas personas que tuvieran el estatus de “poseedores” o presentaran contratos de arrendamiento otorgados por el gobierno con el propósito que dichas personas pudieran convertirse en propietarios y pudieran dedicarse al cultivo de la tierra.1233 Respecto a la hacienda “Metalio” la primera solicitud para que se le diera en arrendamiento una porción de dicho inmueble, la presentó un campesino de nombre Prudencio Esquivel y en ese momento el ingeniero Panameño Coto, se encontraba por iniciar los trabajos de 1229 Ídem. “El hermoso ejemplo de José Bernal”, La Prensa, miércoles 6 de septiembre de 1933, No. 6,831, pág. 1, año XXI. 1230 “Tierra para los campesinos”, Diario Oficial, Suplemento La República, viernes 8 de septiembre de 1933, No. 232, pág. 1, año I. 1231 “En homenaje al maestro Masferrer donó una hacienda para lotificarla”, Diario Nuevo, 18 de marzo de 1936, No. 717, pág. 1, año III. 1232 “Entrega de los lotes de Santa Rosa”, La Prensa, jueves 20 de abril de 1933, No. 6,716, pág. 1, año XX. 1233 343 lotificación de la hacienda denominada “El Chiquirín”, ubicada en el departamento de la Unión.1234 Ochenta familias de campesinos desheredados tomaron posesión de sus respectivas parcelas en dicha hacienda, quedando pendientes todavía muchas solicitudes de entrega. Por ser tierra de muy buena calidad, el gobierno experimentó con instaurar en ese lugar la primera “colonia agrícola” del país. Los cultivos fueron: frijoles, maíz, arroz y frutas y en esto consistió el establecimiento del “huerto familiar campesino”.1235 En el mensaje presidencial leído ante la Asamblea Nacional en 1938, el Presidente Martínez anunció, que se había establecido un premio para el pequeño agricultor que cultivara el mejor huerto en los terrenos que el gobierno había otorgado por medio de la Junta Nacional. Esto se interpretó por los redactores del diario Patria no sólo como un estímulo individual para cada agricultor sino como una ayuda efectiva para el nacimiento de una fuente nueva de riqueza agrícola en el país.1236 El objetivo era que el país incrementara su agricultura mediante el cultivo de huertos pequeños, capaces de hacer surtir por lo menos, los mercados nacionales y para dejar de importar de Guatemala productos como: cereales, frutas, legumbres y verduras que perfectamente podían ser cosechadas en el territorio salvadoreño, ya que el clima y la calidad de los terrenos era propicia. Además, traía como consecuencia el abaratamiento de todos estos bienes de consumo y aunque no lo parezca hasta esto fue interpretado como un signo de regeneración de la Nación: Aparte de este aspecto, económico y alimenticio vemos nosotros el aspecto moral y social. Las actividades agrícolas de una Nación influyen poderosamente en su desenvolvimiento social e histórico. Un pueblo inclinado al cultivo de huertos tiene que ser forzosamente un pueblo sano corporal y mentalmente. 1237 “La primera solicitud de un lote de Metalio”, La Prensa, lunes 14 de agosto de 1933, No. 6,813, pág. 1, año XX. 1234 “La colonia agrícola de chiquirín”, Diario Oficial, Suplemento La República, viernes 27 de octubre de 1933, No. 271, pág. 1, año I. 1235 1236 “El premio para el mejor huerto”, Patria, jueves 17 de febrero de 1938, No. 9,830, pág. 9, año IX. 1237 Ídem. 344 A finales de octubre de 1933, se inició el repartimiento de los lotes de la hacienda “Metalio” cada uno con una extensión superficial de 4 manzanas, entre 500 familias de la zona. En ese momento se proyectó que los campesinos cultivaran, principalmente, banano y cereales, cabe destacar que la hacienda Metalio se encuentra ubicada entre las jurisdicciones de Ahuachapán y Sonsonate, la idea era ocupar a la gente de las zonas rurales.1238 De hecho, desde 1932 el gobierno había publicado un reglamento para la adjudicación de lotes de terrenos de propiedad nacional, siendo algunos de los requisitos indispensables ser salvadoreño de nacimiento y no poseer ningún bien raíz en cualquier parte del país. 1239 Es curioso también que ante el problema de la falta de tierras, se viera como una solución alterna, la migración de campesinos salvadoreños hacia Honduras que, en teoría, ayudaría a combatir el latente problema “comunista”. 1240 Incluso, el presidente Martínez en una ocasión reunió a los terratenientes y les dijo: Es necesario que comprendamos que el comunismo, nuestro trascendental problema social, no deberá ser combatido con ametralladoras sino con la práctica de todos los procedimientos que logren mejorar las condiciones actuales de las clases trabajadoras, empeñándonos en hacerles más llevadera su vida constante de trabajo y privaciones.1241 Para 1934, año en el que el Presidente Martínez cumplió con su supuesto período presidencial y se dispuso a abandonar su envestidura de primer magistrado, el suplemento oficial publicó un editorial en donde se hacía constar la obra realizada durante su mandato. El artículo hacía referencia a que Martínez respetuoso de la ley y aspirando a la aprobación ciudadana, depositó el Poder Supremo de la Nación en “500 familias recibirán lotes de 4 manzanas en la hacienda Metalio”, La Prensa, miércoles 11 de octubre de 1933, No. 6,862, pág. 1, año XXI. 1238 “Manera de poder obtener las parcelas que dará el gobierno”, El Día, sábado 3 de diciembre de 1932, No. 3,980, pág. 1, año XII. 1239 “Una nueva medida de emergencia”, La Prensa, viernes 9 de junio de 1933, No. 6,760, pág. 1, año XX. 1240 “Las trascendentales declaraciones del Señor Presidente Martínez sobre el problema social”, La Prensa, lunes 9 de octubre de 1933, No. 6,860, pág. 3, año XXI. 1241 345 un salvadoreño prestigiado e íntegro (no menciona nombre) para dedicarse a la simple vida ciudadana:1242 Ahí está el hermoso comienzo de la ciudad obrera con sus cien casas baratas, y la adquisición de nuevos lotes para el distrito de empleados sin patrimonio; ahí están las haciendas de Metalío, Santa Rosa, Zapotitán, El Encantado, etc., donde una cuantiosa lotificación hará la felicidad de millares de familias; ahí está la pavimentación de la ciudad de Santa Ana y la construcción de cientos de kilómetros de carreteras nuevas, enriqueciendo con sus poderosas facilidades el renacimiento vital de la Nación.1243 Por una porción de 10 caballerías de la hacienda “El Encantado” la cual se encontraba situada en el departamento de la Unión, el gobierno pagó la suma de 11,000 colones a su propietaria, la señora Ester Rivera Montalván. En dichos terrenos existía una gran variedad de árboles frutales y madereros, además el suelo era propicio para el cultivo de cereales. Con la adquisición de este terreno, se pretendió favorecer a los campesinos del oriente del país, aunque también se distribuyó entre agricultores que residían en otras zonas más lejanas.1244 En cuanto a la hacienda “Zapotitán” se refiere, tenía una enorme extensión de terreno que comprendía 150 caballerías, que abarcaban tres departamentos de la República. Tenía agua abundante y una gran diversidad de climas, por lo que se podían sembrar una gran variedad de cultivos tropicales; el precio de la hacienda fue de 465,000 colones, ésta también constituyó una colonia agrícola bajo el sistema cooperativista, a fin de transformar en pequeños propietarios a los campesinos sin patrimonio. Con este proyecto se calculó que más de 3,000 familias se instalarían en dicha finca, las cuales amortizarían el valor de los lotes anualmente. 1245 Esta reforma, en el sistema de producción agrícola, como es obvio advertir, conllevó a que los productos obtenidos, fueran vendidos al más bajo precio posible mediante “estaciones de venta al menudeo” para que de esta forma, las personas “La obra que deja el General Martínez”, Diario Oficial, Suplemento La República, jueves 30 de agosto de 1934, No. 512, pág. 1, año II. 1242 1243 Ídem. “Diez caballerías más de terreno para repartirlas entre campesinos”, Diario Nuevo, jueves 18 de octubre de 1934, No. 278, pág. 1, año I. 1244 “La obra que deja el General Martínez”, Diario Oficial, Suplemento La República, jueves 30 de agosto de 1934, No. 512, pág. 1, año II. 1245 346 humildes se acercaran a los almacenes de racionamiento y evitar seguir siendo víctimas de los acaparadores de víveres, problema que se ventila en el aspecto alimenticio de este capítulo. En esto consistió la famosa frase gubernamental: “hacia la liberación del campesinado”, que era simplemente crear un “estado de bienestar”.1246 En 1935 la finca San Carlos, propiedad del señor Francisco Gallegos también fue comprada por la Junta Nacional de Defensa Social, pero el secretario de dicha institución en ese momento, Benjamín Arrieta Rossi informó que el gobierno no lotificaría dicha propiedad, como lo había hecho con las anteriores sino que la utilizaría para la construcción de un nuevo barrio obrero. Al final, cabe destacar que de este terreno se desmembraron 20 manzanas para la construcción de la actual Universidad de El Salvador.1247 Ahora bien, no sólo se trataba de repartir tierras irracionalmente, era necesario proveer de recursos a los campesinos para que no se creará un sistema de “minifundios” improductivo, la idea era que dichas tierras se explotaran agrícolamente, por lo que a la par de esta redistribución de tierras, se reorganizó el sistema crediticio del país, que creó posibilidades reales de financiamiento a los campesinos, por lo que todas estas medidas empezaron a tener un carácter integral,1248 es decir, aunque Marta Casaús afirma que Martínez realizó ciertos experimentos agrarios en base a la “teosofía”,1249 creemos, que más adecuado, es hablar de experimentos “vitalistas” o “vitalistas-teosóficos”. En cuanto al aspecto crediticio Alastair White establece: También tomó medidas (Hernández Martínez) para proporcionar crédito para operaciones agrícolas de diferentes tipos fundando el Banco Hipotecario en 1935 para las operaciones en gran escala y las Cajas de Crédito Rural en 1943 para los pequeños agricultores o campesinos.1250 1246 Ídem. 1247 “Habrá un nuevo barrio obrero”, Diario Nuevo, lunes 24 de julio de 1935, No. 487, pág. 1, año II. 1248 III. 1249 III. 1250 “La adquisición de tierras”, Diario Nuevo, miércoles 4 de marzo de 1936, No. 701, pág. 3, año “El experimento salvadoreño”, Diario Nuevo, miércoles 4 de marzo de 1936, No. 701, pág. 3, año Alastair White, El Salvador, UCA editores, Sexta Edición 2001, pág. 124. 347 Martínez fundó Cajas de Crédito para defender a la gente pobre de los altos intereses que les cobraban los usureros. Estas instituciones prestaron los dineros a tasas relativamente bajas y se tomó en garantía lo que en ese momento poseyera el solicitante, ya fuere ganado o su pequeña parcela sin la intervención de abogado para evitar que el crédito fuera oneroso.1251 Es indispensable señalar que según los autores de la tesis Alberto Masferrer humanista, la fundación del Banco Hipotecario constituyó otra materialización del pensamiento de Masferrer.1252 El periódico El Imparcial de San Salvador para 1940 valoró su desempeño de la siguiente forma: La independencia del Banco Hipotecario Salvadoreño, vino a regular de manera autónoma, la economía nacional, ofreciendo a las necesidades de los agricultores, crédito bastante para la solución de las necesidades concernientes, cuya importancia revistió trascendentes proporciones en virtud de haber sido creada dicha institución, en una época de amarga constatación procreada por los desequilibrios de la economía mundial.1253 De hecho, la fundación del Banco Hipotecario, se percibió como una de las medidas más protectoras de la economía nacional debido a la excesiva escases de numerario que repercutía en todos los ámbitos productivos: agrícola, industrial y mercantil. Las pequeñas parcelas de los campesinos no daban la suficiente cobertura como para ser sujetos de un empréstito con garantía real, además por la precaria situación económica se desvaneció el elemento “sine qua non” del otorgamiento de crédito: “la confianza”, lo que trajo como consecuencia que se agudizara la recesión. Hacemos estas aclaraciones porque no se debe olvidar que el dinero es el elemento principal de la vida material de los pueblos.1254 Para mayo de 1936, el gobierno de Martínez tenía a su disposición un aproximado de 25,000 manzanas de tierra para ser distribuidas entre campesinos pobres, cifra que correspondía a la extensión superficial de todas las haciendas 1251 Reimundo Figueroa Monge, “apología de un hombre”, sin editorial, 1971, pág. 9. 1252 Ver: pág. 46. “Homenaje de reconocimiento al Presidente de La República, en su cumpleaños”, El Imparcial, San Salvador, martes 29 de octubre de 1940, No. 132, pág. 1, año VII, 2ª Época. 1253 “Nuevas esperanzas de vida alientan al alma salvadoreña”, La Palabra, lunes 3 de diciembre de 1934, No. 5, pág. 1, año I. 1254 348 adquiridas hasta ese momento. Esta reforma logró que todas esas tierras que antes estaban en manos de unos cuantos propietarios, pasaran a formar parte de la vida productiva de las familias rurales salvadoreñas, atacando así decididamente el sistema económico “feudal” que estaba basado en la concentración de la tierra bajo el dominio de un señor:1255 Otra de las cosas que exalta más noblemente la rebeldía de Masferrer, es el monopolio de la tierra. Hace suyo el pensamiento de Carlyle. “El suelo no es sino de Dios, y de ser de alguien más, sería del trabajador que lo cultiva”. Y se afirma luego en la idea tolstoiana: “Sólo una cosa hace falta para que los trabajadores sean libres, y es destruir el acaparamiento de la tierra por los propietarios que no la trabajan”.1256 Es interesante resaltar que estas ideas de Masferrer fueron impresas como “folletones” por los redactores del Diario Nuevo, con el objetivo de que pudieran ser estudiados de forma autónoma al periódico. Pretendían recoger apuntes para construir un ensayo crítico sobre los valores intelectuales y literarios positivos y negativos de la cultura indo-española. En ese sentido, las ideas de Masferrer aportaron la predica dirigida a los trabajadores que debían de luchar por la reivindicación de sus derechos, sobre todo en lo que concernía a la injusticia que provocaba el monopolio de la tierra.1257 Según este tratado, todos los argumentos, más o menos aceptables con los que se defendía la gran “propiedad privada” aparecían como burdas excusas cuando se trataba de justificar la concentración de la tierra. Esto conllevaba a que los campesinos no tuvieran medios de subsistencia, porque estaban privados de su elemento natural, como lo afirmaba Masferrer, por lo que caían en el alcoholismo y en la degeneración moral, por lo tanto, en ese momento concreto, la re-distribución de tierras, era el ideal más urgente para lograr la emancipación de las masas, ya que se encontraban en una esclavitud disimulada.1258 “25,000 manzanas de tierras para los campesinos podres”, Diario Nuevo, martes 19 de mayo de 1936, No. 707, pág. 1, año III. 1255 “Nuestros profesores de idealismo en América”, Diario Nuevo, lunes 18 de marzo de 1935, No. 406, pág. 7, año II. 1256 1257 Ídem. 1258 Ídem. 349 La liberación de las tierras también incluía lo que en términos marxistas impropiamente utilizados aquí, son los factores de producción como: caminos libres, libre fabricación e introducción de herramientas, libre compraventa de productos agrícolas y en general todas aquellas facilidades para la obtención de los elementos y productos que servían para dedicarse al cultivo.1259 En este sentido, la Junta de Mejoramiento Social adquirió del extranjero implementos modernos para venderlos baratos a los parcelarios de las haciendas propiedad del Estado entre los que se encontraban 1000 arados y posteriormente se proyectó, según las posibilidades económicas, la adquisición de modernos tractores para intensificar la agricultura. La noticia venía acompañada del siguiente pensamiento: “Masferrer no cree en la democracia que es un órgano opresor de una clase destinada a aplastar a otras clases manteniendo la tiranía económica”.1260 El periódico Reconstrucción Social fue muy incisivo en este aspecto, le solicitó al gobierno de Martínez –mediante la Junta de Mejoramiento Social– que constituyera una “Comisión Revisora” de las propiedades del Estado, ya que –le afirmaron– tenían conocimiento de que un gran número de heredades a lo largo y ancho del país, estaban en poder de gente pudiente que no tenían sus respectivos títulos de propiedad, propiedades que habían “usurpado” ilegalmente.1261 El gobierno formó dicha comisión en junio de 1935 y elaboró un inventario de todos los bienes inmuebles que poseía hasta ese momento, ya que durante los últimos años se habían venido incrementado de manera considerable sin un registro riguroso, incluyendo algunos que estaban en manos de particulares y que habían sido valuados en varios millones de colones. El objetivo, fue llevar un mejor control y recuperar todos aquellos terrenos que habían sido apropiados indebidamente por personas ajenas al Estado.1262 1259 Ídem. “Implementos modernos para los parcelarios”, La Nación, San Miguel, viernes 4 de febrero de 1938, No. 4093, pág. 1, tomo 64, año XVII. 1260 “En oriente de la República hay una extensión de terreno que tiene alrededor de 30 caballerías que pertenecen al Estado y que puede ser aprovechada para ser lotificada entre el campesinado de aquella región”, Reconstrucción Social, domingo 16 de junio de 1935, No. 73, pág. 1, año III. 1261 “El Estado recuperará todos los inmuebles que están en poder de varios particulares”, La Prensa, jueves 6 de junio de 1935, No. 7,758, pág. 1, año XXI. 1262 350 Entre una de esas propiedades, se encontraba la valiosa hacienda “Monleos”, ubicada en el Departamento de La Unión, la cual pertenecía al Estado. De esta hacienda se podía extraer madera de construcción y era propicia para el cultivo de cereales, productos que habían sido explotados indebidamente por particulares en detrimento de las familias campesinas que habían residido en ese lugar por más de 30 años y a las cuales se les había impedido parcelar a su favor. Otro caso concreto que se denunció fue en San Alejo, con la hacienda “Los Herreras”.1263 Bajo la política de seguir adquiriendo inmuebles, en 1937 la Junta de Mejoramiento Social hizo los trámites para adquirir una extensa hacienda denominada “Rodhesia” compuesta de 57 caballerías de las mejores tierras del departamento de Sonsonate y del país, perteneciente a personas particulares. Para la compra de este inmueble hubo un gran interés, ya que ayudaría a favorecer a trabajadores y campesinos de la zona occidental, especialmente, de las zonas donde se originó la insurrección campesina de 1932: Nahuilingo, Ízalco, Caluco, Quishnahuat, Nahuízalco e Ishuatán, además de numerosos pequeños valles. Esta hacienda además, contaba con regadillos y excelente clima.1264 En este mismo año, la Junta también contaba con siete fincas que hacían un total de 3 caballerías 54 manzanas, 5000 varas cuadradas, las cuales eran: Finca San Carlos de 3 caballerías, Finca Vásquez Peralta de 6 manzanas, Finca El Bosque de 12 manzanas, Finca San Vicente de 7 manzanas, Finca San Luis de 6 manzanas, Finca Posada de 6 manzanas 5000 varas cuadradas y Finca Hospital Rosales de 17 manzanas, las cuales tenían un costo total de 524,000 colones. 1265 Las autoridades que llevaban a su cargo el registro de la producción cerealera notificaron a los periódicos que las cosechas habían sido abundantes en todo el territorio nacional, sobre todo en lo que se refería a maíz, arroz y frijoles, que eran “En oriente de la República hay una extensión de terreno que tiene alrededor de 30 caballerías que pertenecen al Estado y que puede ser aprovechada para ser lotificada entre el campesinado de aquella región”, Reconstrucción Social, domingo 16 de junio de 1935, No. 73, pág. 1, año III. 1263 “Se repartirán tierras de Rodhesia, departamento de Sonsonate”, Diario de hoy, jueves 30 de septiembre de 1937, No. 423, pág. 4, año II. 1264 “La Junta Nacional de Defensa Social posee 7 hermosas fincas”, Diario Oficial, Suplemento La República, lunes 18 de enero de 1937, No. 1,194, pág. 4, año V. 1265 351 los principales artículos alimenticios que consumía la población. Ante la excelente producción, los precios lograron disminuir y satisfacer a las clases necesitadas. 1266 Entre otras fincas que se repartieron en 1937 estaban: hacienda “San Antonio Silva” de 132 caballerías a un precio de 5,028 colones, hacienda “El Obrajuelo” de 65 caballerías, 11 manzanas a un costo de 157,068.48 colones, hacienda sucesión Gómez Zarate, “Santa Emilia” de 7 caballerías, 32 metros a un precio de 25,000 colones y hacienda “Siberia” de 30 caballerías cuyo precio era de 37,148 colones. 1267 En la zona paracentral del país, específicamente en el departamento de San Vicente, la Junta de Mejoramiento Social entregó para su cultivo 200 lotes de la hacienda nacional “Las Pampas”.1268 En la zona occidental se adquirió para su distribución la hacienda “El Castaño” situada en Caluco, departamento de Sonsonate, de la cual hasta ese momento se habían entregado 27 lotes de tres, cuatro, cinco y siete manzanas respectivamente a los arrendatarios que hacían un total de 5 caballerías. En Chilanguera, departamento de San Miguel también se lotificó un terreno para la construcción de un nuevo barrio de casas baratas,1269 en la que fue la hacienda “Chilanga” que comprendía de 2 caballerías, 50 metros a un costo de 3,893.75 colones. Los solicitantes pidieron que se destinara una regular porción de terreno en la parte más alta y saludable de la referida hacienda que aún no había sido lotificada, a fin de que ahí se estableciera el nuevo poblado.1270 En esta nueva política de mejoramiento social que revistió un carácter nacional, participaron los más diversos sectores sociales que se podría imaginar, por ejemplo, el Obispo Dueñas y Argumedo donó un terreno de inmejorable vocación “No habrá escasez de cereales este año”, La Nación, San Miguel, viernes 4 de febrero de 1938, No. 4093, pág. 5, tomo 64, año XVII. 1266 Plan de distribución de tierras de la Junta Nacional de Defensa Social, Diario Oficial, Suplemento La República, jueves 21 de enero de 1937, No. 1,197, pág. 4, año V. 1267 “Entregan lotes a campesino en Las Pampas”, Diario Latino, miércoles 13 de abril de 1938, No. 14, 332, pág. 1, año XLVII. 1268 “Entrega de lotes en la zona oriental”, Diario Latino, lunes 25 de abril de 1938, No. 14,339, pág. 1, año XLVII. 1269 “Nueva población surgirá en hacienda Chilanguera”, Diario de hoy, domingo 11 de septiembre de 1938, No. 697, pág. 5, año III. 1270 352 agrícola ubicado en la jurisdicción de Opico, departamento de La Libertad de una extensión superficial de 169.048 metros cuadrados, que quedó a disposición de la Junta de Mejoramiento Social para ser distribuido una vez fuese lotificado.1271 El 29 de septiembre de 1938, un rico terrateniente de nombre Juan Palomo Sevilla desmembró 6 caballerías de su hacienda “California” situada en el cantón las tres ceibas, jurisdicción de San Agustín, departamento de Usulután, la cual fue lotificada en pequeñas pociones y a su vez distribuida entre campesinos pobres de la zona.1272 También el inspector general de haciendas Virgilio Landaverde hizo entrega de varios lotes de la hacienda “El Zonte”, situada en la jurisdicción de Chiltiupán, departamento de La Libertad, dicho inmueble constaba de 5 caballerías y había sido adquirido recientemente por la Junta de Mejoramiento Social. La entrega benefició a 27 familias pobres que tomaron posesión de las mismas. Se consideraba que estas tierras eran excelentes para todo tipo de cultivo.1273 Ese mismo año, la Junta adquirió la hacienda “El Jocote” con la cual el número de haciendas para ser repartidas entre los campesinos salvadoreños ascendía a 20 con un gasto aproximado de un millón y medio de colones. Un calculó hecho rápidamente indicaba que el número de campesinos que habían sido favorecidos con las lotificaciones y repartos de tierras ascendía a unos dos mil nuevos pequeños propietarios, que habían incrementado la producción agropecuaria del país y por ende reactivado la economía. Este número se incrementó en los años posteriores de la presidencia de Martínez.1274 En ese mismo momento se procedió a la lotificación de un terreno municipal llamado el “Llano de El Capulín”. Esta lotificación respondió a la necesidad de “Treinta y siete lotes fueron entregados”, Diario Latino, martes 26 de abril de 1938, No. 14,340, pág. 1, año XLVII. 1271 “Rico terrateniente lotificará una hacienda entre los pobres”, Prisma, domingo 2 de octubre de 1938, No. 82, pág. 1, año II. 1272 “Entrega de lotes a los campesinos del Zonte”, Diario Nuevo, jueves 13 de octubre de 1938, No. 1,497, pág. 1, año V. 1273 “1, 500,000 colones se han invertido en las haciendas”, Diario de hoy, sábado 29 de octubre de 1938, No. 738, pág. 3, año III. 1274 353 proporcionar alojamiento a personas de escasos recursos económicos sin vivienda y además para que pudieran adquirir pequeñas parcelas con el objetico de cultivarlas. Otros de los objetivos fue ensanchar el radio urbano por el rumbo oriente de la ciudad de Metapán donde se encontraba el terreno que eran las partes más altas y con mejor clima. La zona fue poblada rápidamente por los lugareños. 1275 Para febrero de 1939, la Junta Nacional de Defensa Social (también llamada Junta de Mejoramiento Social) de la cual valga decir, Martínez fue presidente vitalicio por ser su fundador, adquirió 77 nuevas parcelas. Las primeras 17 fueron compradas a la señora Tránsito viuda de Medina e hijos para ser repartidas entre familias de los cantones San Juan y San Isidro, jurisdicción de San Pablo Tacachico, departamento de La Libertad. Las restantes 60 fueron entregadas en la Hacienda El Jocote, jurisdicción de Quezaltepeque, departamento de La Libertad. Esta política de proveer tierras fue considerada como el principio básico mediante el cual las familias rurales cimentaban sus hogares para mejorar sus condiciones de vida. Dependiendo de los diferentes avalúos lo interesados pagaron entre 2.50 a 10 colones por manzana para el plazo de 10 años.1276 También se repartió la hacienda San José de La Montaña que comprendía de 2 caballerías, 25 metros a un costo de 19,000 colones. En esta hacienda se favoreció a los arrendatarios rebajándoles los precios de sus respectivas parcelas por ser lugares pedregosos, pero que eran muy productivos en cuanto a extracción de maderas de todo tipo. El objetivo era que los colonos pagaran la deuda con el mismo producto de sus lotes.1277 Además, la Secretaría de Gobernación y Trabajo verificó que no se cobraran precios excesivos a los campesinos que alquilaban tierras para sus cultivos, cuando por sequía o plaga de chapulín obtuvieran perdidas en sus cosechas. Lo que el “Lotificación de tierras en Metapán”, Diario de hoy, miércoles 2 de noviembre de 1938, No. 741, pág. 5, año III. 1275 “Toma auge la lotificación de tierras”, Diario Latino, jueves 2 de febrero de 1939, No. 14,581, pág. 1, año XLVIII. 1276 1277 Ídem. 354 gobierno trataba de evitar, en definitiva, era ahogar financieramente a los agricultores para que éstos pudieran continuar trabajando la tierra. 1278 Al hacer una evaluación de los beneficios del repartimiento de tierras hacia aquellas personas no poseedoras, se consideró que de los réditos obtenidos de las mismas, se podía continuar con esta misma dinámica de redistribución, pero que resultaba más ventajoso que los vendedores las colocaran entre los mismos campesinos aledaños a las zonas, teniendo que desembolsar el Estado una suma de dinero menor.1279 Para beneficio de las mismas familias, el Ministerio de Gobernación ordenó como medida complementaria, suprimir al interior de todas las fincas y haciendas del país todo tipo de tiendas o establecimientos donde se les vendieran productos a los colonos, ya que al salir de las mismas no les quedaba absolutamente nada de sus jornales para cubrir sus necesidades cotidianas en el exterior.1280 Masferrer ya había denunciado tal práctica cuando estableció: Para eso la finca, previsora y fraternal, funda una pulpería, donde el jornalero se abastece de cuanto le haga falta (…) a fin de semana, cuando se hacen las cuentas, resulta casi siempre que el peón sale debiendo a la pulpería, y pasan semanas, meses y años, sin que el déficit desaparezca. Les sucede a esos peones lo mismo que a la Nación Salvadoreña: que cada día debe más.1281 El año de 1939, fue muy intenso a cuanto reparto de tierras, por ejemplo, el inspector de tierras nacionales informó que el 21 de febrero de ese año entregó a campesinos del departamento de La Libertad 140 lotes de la hacienda “Zapotitán”, los cuales fueron adquiridos por precios sumamente bajos y con grandes facilidades de pagos, mismos que fueron cultivados principalmente de cereales y algodón. 1282 “Debe haber justicia en el cobro de terrajes”, Diario Latino, miércoles 8 de febrero de 1939, No. 14,586, pág. 1, año XLVIII. 1278 “La mejor forma de reparto”, Diario Latino, martes 21 de febrero de 1939, No. 14,597, pág. 1, año XLVIII. 1279 “El Ministerio de Gobernación prohíbe tiendas en las fincas” El Gran Diario, sábado 25 de noviembre de 1939, No. 154, pág. 5, año I. 1280 Alberto Masferrer, Ensayos: Las nuevas ideas, Biblioteca básica de literatura salvadoreña, vol. 2, 1ª Edición, CONCULTURA, 1996, págs. 121 y 122. 1281 “Distribución de más lotes en Zapotitán”, Diario de hoy, miércoles 22 de febrero de 1939, No. 835, pág. 5, año III. 1282 355 El 24 de ese mismo mes, mediante reporte oficial se informó que los propietarios de la hacienda “Comalapa”, los señores Barrientos, (sucesión Leopoldo), situada en jurisdicción de Sonsonate, Caluco e Ízalco, ofrecieron en venta dicha hacienda ganadera a la Junta de Mejoramiento Social. Al hacerse el estudio previo se comprobó que era una de las más ricas de la zona occidental del país. Dicha propiedad también fue comprada por el gobierno y puesta a disposición de agricultores pobres.1283 Posteriormente, el Diario Latino fue el primero en informar sobre la lotificación de las enormes haciendas “San Juan del Gozo”, “Corral de Mulas” y “La Canoa” que antes habían estado abandonadas e ignoradas, pero que constituían un filón para la agricultura nacional. Esta fue una operación de muy bastas proporciones en la que el Estado invirtió aproximadamente un millón de colones. Esta compra benefició en gran medida a los agricultores del departamento de Usulután donde estaban situadas dichas haciendas; por la trascendencia que revistió para el país la referida transacción, el mencionado periódico entrevistó al señor Francisco Argueta Jáuregui dueño de los predios.1284 Significó ingresos de más de 22,000 colones al fisco y para los trabajos se empleó a un gran número de obreros entre albañiles, carpinteros, mecánicos e ingenieros cuyos salarios ascendieron a unos 5,000 colones, que se encargaron de reparar la estación del ferrocarril e instalaron una planta eléctrica. La primera venta de tres caballerías se le hizo a Manuel Cruz a quien se le obsequiaron 10 novillas para celebrar el acontecimiento. Además, como estímulo para los agricultores que adquirieran esas tierras se estableció un premio anual de 50 novillas como obsequio al agricultor que tuviera mejor dispuesta y cultivada su parcela. 1285 El premio se otorgó cada 25 de marzo de los sucesivos años, conmemorando la fecha en que se entregaron los primeros lotes. Otro de los aspectos que revistió una gran importancia fue la idoneidad de estos terrenos para el turismo nacional y “Favorecerá a campesinos pobres una lotificación”, Diario Latino, lunes 27 de febrero de 1939, No. 14,602, pág. 3, año XLVIII. 1283 “La lotificación de las haciendas San Juan del Gozo y Corral de Mulas es ya una realidad”, Diario Latino, miércoles 29 de marzo de 1939, No. 14,628, pág. 1, año XLVIII. 1284 1285 Ídem. 356 extranjero, ya que increíblemente, la hacienda incluía la bahía de “Jiquilisco” en la que se instaló un servicio de lanchas que realizaban recorridos turísticos. Dentro de la presidencia de Martínez, esta transacción sumada a las anteriores, constituyó uno de los más grandes pasos para lograr la desconcentración de la tierra, el mejoramiento social y la reactivación de la agricultura y la ganadería en el país. Además, quedó claramente evidenciado el deseo de cooperación y buena voluntad de los terratenientes:1286 Mientras todos los salvadoreños no tengan su pedazo de tierra, es inútil hacerles comprender lo que llamamos “Patria”; mientras no se repartan las tierras que ahora no dan frutos, el peón, el jornalero, todos los desocupados buscaran las ciudades, ávidos de vivir, ya siendo criados, pasadores de tragos en las cantinas, lustradores de zapatos o alcahuetes.1287 A partir de esta última idea, es muy interesante observar como lo cultural estuvo en íntima relación con lo material, por ejemplo, Miguel Ángel Espino fue ganador de la flor natural en 1937 en los Juegos Florales Centroamericanos fundados por el Grupo Masferrer por su poema titulado “Mensaje de una tierra dormida”, que indirecta o conscientemente hacía alusión al reparto de tierras y a la reforma agraria del Presidente Martínez. Hacemos esta observación, porque en el Diario Nuevo apareció un editorial titulado casi de la misma manera “La tierra dormida” y sub-titulado “Organización agraria” en el cual se establecía que la tierra era un elemento indispensable para la vida en un territorio tan pequeño pero tan sobrepoblado como El Salvador. El artículo demandaba la urgente rehabilitación de la industria y que debía intensificarse la relación entre los productores y la tierra, mediante la aplicación de métodos modernos de cultivo.1288 Hacía alusión también a que la forma de producción agraria de ese momento era desfasada y muy rudimentaria, basada en un monocultivismo contraproducente: café. Los campesinos no contaban con los conocimientos necesarios para hacer 1286 Ídem. 1287 José Bernal, “Reparto de tierras”, Patria, domingo 13 de marzo 1938, No. 1,950, pág. 9, año IX. “La tierra dormida: organización agraria”, Diario Nuevo, viernes 15 de enero de 1937, No. 967, pág. 1, año IV. 1288 357 producir más eficientemente la tierra, por lo tanto, desconocían el papel de los fertilizantes y el beneficio de la maquinaria moderna sin atreverse a innovar: Pero nada será posible mientras la tierra esté dormida, mientras no se sacuda de su marasmo, mientras sus poseedores no entiendan en su sentido dinámico la misión que les corresponde, en este país que debe alimentar a una masa humana relativamente pesada con los productos de un territorio pequeño…1289 Otro punto de encuentro entre el repartimiento de tierras y lo cultural fue que la Junta, en todas aquellas tierras que ya habían sido lotificadas designó maestros rurales que llevaron a cabo la enseñanza primaria en la casa principal de los cascos de las haciendas. A estos maestros permanentes también se les proveyó de un lote de cultivo. Esta medida ayudó de manera efectiva al proceso de alfabetización del campesinado combinado con la enseñanza de métodos de cultivo.1290 En mayo de 1939, la Junta de Defensa Social adquirió varias haciendas situadas en distintas partes del país por un valor total de medio millón de colones. Todas fueron lotificadas y vendidas a campesinos depauperados a precios accesibles. Algunas de las haciendas adquiridas y repartidas fueron las siguientes: “Hacienda California” de 6,300 manzanas propiedad de Joaquín Palomo, Hacienda “La Joya” de 230 manzanas propiedad de Ricardo Prieto, Hacienda “La Cantera” de 1,300 manzanas propiedad de Antonio Prieto1291 y finca “San Fidel” situada en el departamento de Cabañas, propiedad de Fidel Antonio Novoa, la cual tuvo un costo de 40,000 colones.1292 En 1940, la Junta Nacional adquirió una de las mejores propiedades del país, la cual consistía en una gran parte de la Hacienda “Cuyagualo” ubicada a inmediaciones del pueblo de Colón, departamento de La Libertad, propiedad de Winnal Dalton con un área de 3,000 manzanas a un precio de 210 colones por manzana. La propiedad fue dividida en pequeños lotes que fueron entregados a los 1289 Ídem. “Maestros rurales nombrará la Junta de Defensa Social”, Diario Latino, sábado 16 de marzo de 1940, No. 14,937, pág. 1, año XLIX. 1290 “Más de medio millón en compra de haciendas para lotificarlas”, Diario de hoy, jueves 18 de mayo de 1939, No. 906, pág. 3, año IV. 1291 “La finca “San Fidel” será luego distribuida a los campesinos por orden del Supremo Gobierno”, El Gran Diario, viernes 6 de octubre de 1939, No. 100, pág. 5, año I. 1292 358 campesinos de la zona.1293 Asimismo, en 1941 la Junta Nacional distribuyó en pequeños lotes la Hacienda Santa Rosa Obrajuelito ubicada en el departamento de La Unión.1294 Para 1942, 12,000 familias salvadoreñas habían sido beneficiadas con el reparto de tierras nacionales. En ese año, la Junta de Defensa Social adquirió las haciendas “San Andrés” y “Sitio del Niño”, situadas en jurisdicción de Opico, departamento de La Libertad, con una extensión de 1,137 hectáreas, 40 áreas que constaban de 3 tipos de suelos aptos para la plantación de cualquier especie agrícola.1295 Para concluir con este tema quisiéramos decir que el propósito de enumerar algunas de las principales haciendas repartidas por el Estado, es para que el lector pueda darse cuenta por sí mismo de la transcendencia que tuvo y tiene la tierra como fuente de vida y gran reguladora de la economía. Lo que el Estado pretendió, fue llevar a los campos a toda la gente que se encontraba desocupada en las ciudades como elemento indispensable de producción, creando leyes para que sus esfuerzos fueran justamente retribuidos y luchando frontalmente contra la carestía de víveres.1296 La opinión de Rafael Guidos Véjar, de la reforma agraria de Martínez, no obstante, es bastante negativa: En el aspecto social se aprobó el Decreto Legislativo de 3 de noviembre de 1934, en el cual se autoriza al Ejecutivo para que reparta lotes de 15 hectáreas de los terrenos nacionales en “promesa de venta”. En un período de 25 años dichos lotes no podían ser embargables o gravables. Este ensayo de “reforma agraria” o de “recampesinización” fracaso rotundamente.1297 Como parte de esta reforma agraria, el General Martínez de forma personal desde 1933 se dirigió a algunas gobernaciones departamentales para instarles a que “Tres mil manzanas de Cuyagualo compradas para ser lotificadas”, Diario Latino, sábado 2 de marzo de 1940, No. 14,925, pág. 1, año XLIX. 1293 “Otra hacienda será lotificada por la Junta de Mejoramiento Social”, Diario Latino, miércoles 15 de enero de 1941, pág. 1, sin ningún otro dato de publicación. 1294 “Por el mejoramiento del campesinado”, Diario Oficial, Suplemento La República, viernes 14 de agosto de 1942, No. 2780, pág. 1, año X. 1295 Constancio C. Vigil, “La tierra: fuente de vida”, La Nación, San Miguel, miércoles 8 de diciembre de 1937, No. 4048, pág. 3, tomo 60, año XVI. 1296 1297 Rafael Guidos Véjar, “El ascenso del militarismo en El Salvador”, UCA editores, 1980, pág. 18. 359 recopilaran un listado de hacendados propietarios, que poseyeran terrenos de humedad para que en el verano se intensificara la siembra de algodón. Martínez les informó que hubo personas interesadas en adelantar sumas de dinero para efectuar dicho cultivo, a razón de 30 colones por manzana, con la obligación que tenían que vender la cosecha a las personas que prestaran el dinero al precio que se cotizaba en ese momento en New York.1298 Antes de pasar a analizar teóricamente si la reforma agraria de Martínez tuvo una influencia del pensamiento de Henry George, al cual Masferrer le daba mucha importancia, quisiéramos decir que el objetivo de realizar la misma, fue diversificar los cultivos ante la crisis del café, reactivar la agricultura y provocar una propiedad privada en función social mediante la cual se beneficiaran un mayor número de personas: El ideario del martinato se inspira de “Leer y escribir” (1913/5) de Alberto Masferrer. Asimismo, se hace efectivo el “mínimum vital” masferreriano (1929) bajo el impulso de “viviendas baratas”, “reforma agraria”, turismo regional, cooperativismo y otras reformas que promueve el mismo gobierno (…) El mandatario pone en práctica una política de alfabetización y de aplicación del mínimum vital.1299 3.3- La presidencia de Martínez y la propuesta teórica de Henry George (algunas reflexiones) En 1933 Pérez Menéndez instó a los ricos, dueños del capital, a que prestaran su pronta colaboración con el gobierno, ya que eso iba en beneficio de ellos mismos y del pueblo. El vitalista aclaró que se debía de implementar una transformación del sistema social en base al pensamiento de Masferrer, el cual a su vez estaba inspirado en la doctrina de Henry George, que en ese momento, estaba sirviendo de freno a las revoluciones comunistas en el mundo:1300 “El presidente Martínez se interesa por el cultivo del algodón en el país”, La Prensa, sábado 9 de septiembre de 1933, No. 6,835, pág. 1, año XXI. 1298 Rafael Lara-Martínez, “Reforma educativa masferreriana del martinato, 1933”, Diario digital Contrapunto, miércoles 27 de enero de 2010, disponible en www.contrapunto.com.sv/cparchivo/?...reforma-educativa-masferreri... 1299 “La política de recuperación del actual gobierno”, La Prensa, miércoles 20 de septiembre de 1933, No. 6,844, pág. 1, año XXI. 1300 360 Alberto Masferrer fue un sociólogo eminente que vio con claridad los problemas sociales salvadoreños y señaló el medio más eficaz y humano de conjurarlos. Su doctrina social, maliciosamente interpretada por los perversos e ignorantes como doctrina disolvente, está impregnada, en sus líneas fundamentales de la filosofía georgista, que es actualmente la tabla de salvación a la que se han acogido los países previsores frente a la amenaza del sub-hombre (comunistas), ante el triunfo brutal de las masas impreparadas y violentas.1301 En este sentido, el pensamiento de Henry George influyó en la presidencia de Martínez hasta cierto punto, sobre todo, en cuanto a la iniciativa de crear leyes e instituciones concretas que específicamente protegieran a los sectores socialmente más vulnerables, como la moción de crear un impuesto territorial, tal y como lo había propuesto Masferrer en Patria, a fin de asegurar el acceso a la tierra y acabar con los predios urbanos inutilizados y predios rústicos incultos o parcialmente cultivados:1302 No somos nosotros quienes creen que los pueblos pueden hacerse por medio de leyes solamente, o mejor dicho, con solo leyes. Pero aquí tendríamos que traer a cuentas la sentencia de un gran pensador: las instituciones hacen a los pueblos. (Henry George) (…) además de esto nos veríamos precisados a gravar de un modo especial los lotes urbanos sin edificación, ya que la carestía de la vivienda es también un elemento de daño para la familia.1303 Esto parece haberse implementado, al menos tímidamente, en la ciudad de San Salvador desde el 1º de mayo de 1938 mediante la aplicación de un impuesto que gravaba los terrenos urbanos sin construcción. La medida trajo dos beneficios: 1) la comuna obtuvo más ingresos y 2) se obligó a los propietarios a que vendieran, donaran o arrendaran dichos inmuebles en un plazo limitado; debe recordarse que en muchas ocasiones, el Estado no tenía terrenos para la construcción de nuevas colonias de casas baratas mientras que en la ciudad había muchos terrenos privados sin utilizar. En esencia, se trataba de combatir la injusta distribución de la riqueza.1304 Adolfo Pérez Menéndez, “Alberto Masferrer, gran poeta”, Diario Nuevo, lunes 18 de marzo de 1935, pág. 3, año II. 1301 “Protección a la mujer y al niño salvadoreño”, Diario de hoy, viernes 12 de mayo de 1939, No. 901, pág. 9, año IV. 1302 1303 Ídem. “El nuevo impuesto sobre predios baldíos”, Patria, jueves 24 de marzo de 1938, No. 9,859, págs. 8 y 12, año IX. 1304 361 Alberto Guerra Trigueros en el periódico Patria publicó un editorial donde pedía al Gobierno que implementara esta medida, pero en todo el territorio nacional, y no sólo para los inmuebles urbanos, sino que también para los rústicos que en determinada fecha continuaran sin cultivar o utilizar de alguna manera. Guerra Trigueros estableció que eso fue por lo que siempre luchó Masferrer: el establecimiento de un impuesto territorial especialmente para los terrenos improductivos.1305 No podríamos asegurar si efectivamente se amplió el impuesto, pues no encontramos ninguna noticia al respecto. Masferrer hizo tal propuesta en 1928, específicamente, en el artículo titulado “La tierra que tenemos”, en el cual propuso que se gravara con un impuesto de diez colones cada manzana cultivable no cultivada. En el tiempo de Masferrer, eran reconocidas grandes familias pudientes como: los Hill, los Álvarez y los Díaz Palacios, quienes habían hecho un gran monopolio de la tierra, en perjuicio de las mayorías.1306 En 1939 El Gran Diario publicó el artículo titulado “Cómo pensó Henry George”, en el cual se establecía una clara interconexión entre el pensamiento del economista norteamericano y la reforma agraria de Martínez, éste, precisamente nos servirá para analizar sobre sí tal relación existió o no: No vamos a negar que a nuestro país, ese feo mal social (monopolio de la tierra) le dio en otros tiempos todas las características de una entidad de latifundios, donde el trabajador del campo no abrigaba jamás la esperanza de poseer una parcela para sus modestas labores; para redimirse haciendo su huerto familiar (…) como todos los países del mundo marcamos esa etapa dolorosa, pero gracias a la cordura del mismo pueblo –ricos y pobres– a estas horas el problema ya va despejándose, y ese abismo de que hemos hablado, está más o menos salvado.1307 En primer lugar, tenemos que decir que George en Progreso y pobreza abordó de forma general el problema de la pobreza desde la base de 6 propuestas que hasta ese momento se habían hecho para erradicarla o por lo menos para reducirla. Estas propuestas eran: a) una mayor economía en el gobierno, b) una mejor educación de 1305 Ídem. “El reparto de tierras y el impuesto único”, El Día, sábado 7 de enero de 1928, No. 2,798, pág. 2, año IX. 1306 1307 “Como pensó Henry George”, El Gran Diario, lunes 3 de agosto de 1939, No. 36, pág. 3, año I. 362 las clases trabajadoras, c) una mayor unión de los trabajadores para conseguir aumentos de salario, d) una mayor cooperación entre el trabajo y el capital, e) una buena dirección e intervención gubernamental y f) distribución de la tierra de modo general. Henry George va explicando porqué estas 6 respuestas no eran la solución al problema:1308 3.3.1) La economía en el gobierno Se argumentaba por algunos economistas que los estados gastaban excesivamente, y que si se desviaban esos recursos hacia el pueblo, la pobreza disminuiría, porque su renta aumentaría. George no estaba de acuerdo, ya que consideraba que el Estado debía de contar con los impuestos suficientes para hacerle frente a todas las necesidades sociales y que, por lo tanto, no tenía que quitarse o reducirse los impuestos, pues eso no haría que aumentaran los salarios. George estaba a favor de que se eliminaran los gastos inútiles, pero consideraba que esta medida por sí misma no era la solución total a la pobreza.1309 3.3.2) La falta de educación o falta de inteligencia tampoco era la solución al problema, ya que la educación solo sirve cuando existen las condiciones propicias para el desarrollo: la tierra. Para George, una mayor educación sólo aumentaba el salario del individuo en cuanto que éste estaba mejor preparado que los demás, pero este aumento era aislado, no colectivo. Por otro lado, la educación hacia más eficiente el proceso productivo, pero no significaba automáticamente el aumento de los salarios sino solo de la renta.1310 3.3.3) La coalición de los trabajadores sólo traía el aumento de los salarios para la liga en particular que había realizado la lucha, no para todos. La única forma de elevar los salarios para todos, era formar una sola liga, tal y como lo había propuesto la internacional socialista (no especifica cuál), que incluyera a todos los Henry George, Progreso y pobreza, (investigación sobre la causa de las crisis industriales y del aumento de la pobreza con el incremento de la riqueza. El remedio), Tomo II, Biblioteca sociológica internacional, Edición y publicación no definidas, pág. 6. 1308 1309 Ibídem, págs. 7, 8, 9. 1310 Ibídem, págs. 10, 11 y 14. 363 trabajadores y clases sociales, pero George pensaba que dicha coalición, era, en la práctica, inviable, ya que implicaba una reunificación de todo el conglomerado industrial.1311 3.3.4) El cooperativismo tampoco era la respuesta, ya que éste sólo intentaba aumentar la eficacia en el trabajo y reducir los costos. Si bien es cierto, el cooperativismo aumentaba la renta, la aumentaba sólo para el propietario de la tierra, no aumentaba el salario del trabajador de la tierra. Mientras no se desmonopolizara la tierra, este sistema sólo conllevaría la avaricia de exigir más. Sólo si la tierra era propiedad de la cooperativa, podría haber cooperación entre iguales.1312 3.3.5) La dirección o intervención gubernamental tampoco era la solución, ya que si el Estado reglamenta la industria y la acumulación de la riqueza de los particulares, por ejemplo, mediante impuestos, puede haber una tendencia a crearse impuestos exagerados así como sobornos y evasiones. Los impuestos también traen como consecuencia contraproducente disminuir el incentivo a la acumulación de la riqueza que era una de las mayores fuerzas de progreso. George concebía a la sociedad como un organismo vivo que sólo podía regenerarse a través de sus componentes.1313 3.3.6) El reparto de tierra de forma general, George creía que se debían de restringir las grandes posesiones territoriales en todo el mundo, pero especialmente en países como Gran Bretaña y Estados Unidos, en donde el número de propietarios en vez de aumentar había disminuido considerablemente como consecuencia del excesivo monopolio que aumentó la pobreza. Dicho monopolio con la introducción del maquinismo en la agricultura agudizó la crisis. En este sentido, la sub-división de la tierra no era la solución, porque el fraccionamiento limitaba la producción total. El poder del trabajo colectivo también mermaba. George consideraba que con esta forma de distribución sólo resultaba beneficiada 1311 Ibídem, págs. 19 y 20. 1312 Ibídem, págs. 22, 23 y 24. 1313 Ibídem, págs. 25 y 26. 364 cierta parte de la población y no se elevaban los salarios ni traía mejores condiciones para el trabajador.1314 Esta manera de fragmentar los latifundios y entregárselos a los agricultores pobres fue lo que hizo el gobierno de Martínez, lo cual como hemos observado no está acorde al ideario de Henry George, entonces, el único y verdadero remedio para solucionar la pobreza para George era eliminar por completo la propiedad privada como causa de todos los males y convertirla en propiedad común. Recordemos que al repartir pequeñas parcelas se fomenta la propiedad privada, lo cual es inconcebible desde la concepción georgista, ya que la propiedad privada para él, es la base de la aristocracia y los privilegios.1315 Para George, al quitarle la propiedad a los individuos, el Estado, no tenía por qué indemnizarlos, ya que la tierra siempre volvería a ellos, sólo que de forma colectiva, con la ventaja que el pueblo recibiría los beneficios en su totalidad. El Estado debía ser el dueño de todo y arrendársela a los pobres. 1316 En este proyecto, no hay propiedad sólo arrendamiento, pero hay que dejar bien claro que George no fue marxista ni revolucionario y nunca habló de lucha de clases, de hecho, estaba a favor de la libre empresa. José Luis Ramos expresa que George incluso aceptaba que los individuos pudieran quedarse formalmente con la tierra, pero que la renta debía ser confiscada por completo por el Estado.1317 En realidad, las posturas de George tienen múltiples inconsistencias y contradicciones y es por eso que a través de la historia ha sido criticado por capitalistas, comunistas y académicos, incluso, fue criticado por Lenin cuando prologó de su libro La condición de la clase trabajadora en Inglaterra (1887). Lenin le criticó precisamente que no hacía alusión a la lucha de clases, que su teoría sólo podía ser aplicada en un ámbito local y que no propugnaba por la abolición del 1314 Ibídem, págs. 27, 28 y 29. 1315 Ibídem, págs. 32 y 50. 1316 Ibídem, págs. 95 y 103. José Luis Ramos Gorostiza, “Henry George en la historia del pensamiento económico: razones para una revalorización, Revista Historia Agraria, No. 25, diciembre 2001, págs. 208, 209 y 215. 1317 365 sistema capitalista, quizás su mayor logro fue haber influenciado en socialistas fabianos como Sídney Webb y en el sindicalismo pre-marxista.1318 En conclusión, Martínez por obvias razones políticas jamás hubiese implementado un sistema de tierra comunal, al contrario defendió la propiedad privada, pero al menos intentó realizar el ideal georgista de desmonopolizar la tierra y más bien se acercó al programa planteado por Masferrer en su artículo Las ideas en el gobierno en donde establecía: “Se debe poner a disposición de las familias de escasos recursos, la tierra que necesiten para sus cultivos, compradas todas con recursos del Estado”.1319 Para Masferrer, el derecho a poseer la tierra implicaba 3 obligaciones: 1) cultivar obligatoriamente las parcelas, 2) pagar el 5% en concepto de arrendamiento y 3) no venderla por un periodo determinado.1320 Como hemos visto, lo que sí tuvo espíritu georgista dentro de la presidencia de Martínez, fue la iniciativa de Guerra Trigueros de querer impulsar el impuesto único territorial, que efectivamente era una propuesta doctrinaria de Henry George. 3.4- Trabajo digno y salario justo: Ahora que hemos analizado la reforma agraria de la presidencia de Martínez y algunos de sus fundamentos teóricos entraremos a conocer algunas de sus políticas laborales. El Presidente Martínez, le solicitó en persona al Gobernador Departamental de San Salvador le informara de la situación de las condiciones de vida de campesinos y trabajadores con el objetivo de mejorarlos en sus salarios, regular las horas que durante el día se les hacía trabajar y emplear a todos aquellos que se encontraban desocupados. La Gobernación por su parte, dirigió notas a los distintos alcaldes de los diferentes municipios a efectos de elaborar las respectivas disposiciones legales tendientes a regir dichas problemáticas. 1321 1318 Ibídem, págs. 218, 219, 227 y 228. Luis Alonso Aparicio, Alberto Masferrer Pedagogo Político, Universidad Pedagógica de El Salvador, 1ª Ed. 2007, pág. 68. 1319 1320 Ibídem, pág. 73. “Informe de la gobernación departamental sobre las necesidades de los trabajadores”, La Prensa, miércoles 6 de septiembre de 1933, No. 6,832, pág. 1, año XXI. 1321 366 La Junta Nacional de Conciliación estableció que el período laboral en las fábricas iba a ser de 36 horas máximo a la semana, ya que por ejemplo en la fábrica de camisas de los señores Molins y Co., los trabajadores estaban efectuando jornadas de entre 9 y 12 horas al día y se determinó que la mujer sólo trabajaría 6 horas, ya que se consideraba que también atendía a los hijos y las tareas del hogar.1322 En este sentido, Masferrer abogó por el derecho al descanso cuando dijo: Nos conviene el trabajo concreto y regulado, el descanso entero y hondo (…) Nuestras fuerzas son nuestro tesoro; precisamente nuestra vida. El reposo es el manantial que las alimenta y las renueva. El movimiento contenido, sobrio, equilibrado, es el que las concentra e intensifica y sereniza extrayendo de ellas la energía y la gracia, que son sus flores…1323 Enrique Molins también ofertó que pagaría 30 colones por cada manzana que se cultivará de algodón, con el propósito de incentivar a los agricultores a que diversificaran sus cultivos. Este arreglo sirvió como ejemplo para hacer lo mismo con otras compañías como la fábrica de sacos de los señores Ávila y Compañía y la fábrica de tejidos “La Estrella” entre otras.1324 Por otro lado, se inspeccionó a los hacendados de algunas zonas, ya que el teniente Alfonzo R. Muñoz denunció que en algunas jurisdicciones como Armenia se seguía pagando a los labriegos con fichas. Vicente Sol Buitrago propietario de la hacienda “Las Tres Ceibas” y de otras propiedades en el departamento de La Libertad informó que en sus fincas no se estaba realizando tal práctica, que podía garantizar que pagaba los salarios de sus trabajadores en colones y que además les daba un trato humanitario.1325 Masferrer denunció el pago con fichas cuando dijo: Algunos grandes finqueros de este país han descubierto un sistema realmente ingenioso y benéfico de pagar a sus peones. Protestando que no pueden conseguir moneda suelta (función del BCR) les cubren su jornal con fichas de madera, cobre, estaño, latón u otros materiales baratos. Cada finca, o digamos cada dominio feudal, “Jornada mínima y mejor salario”, Diario Oficial, Suplemento La República, lunes 2 de octubre de 1933, No. 251, pág. 1, año I. 1322 1323 Alberto Masferrer, “Fuerza”, Vida Nueva, sábado 26 de abril de 1941, No. 15, pág. 3, año I. “Jornada mínima y mejor salario”, Diario Oficial, Suplemento La República, lunes 2 de octubre de 1933, No. 251, pág. 1, año I. 1324 “Declaraciones de un hacendado”, sábado 15 de octubre de 1932, El Día, No. 3,939, pág. 1, año XII. 1325 367 tiene su moneda propia, sus fichas que solo corren en aquella jurisdicción (…) fuera de ahí, al otro lado de la cerca o de la zanja limítrofe, no valen nada.1326 Para que los trabajadores no fueran burlados, en 1935 se incluyó en el Código de Trabajo el establecimiento de un “salario mínimo” para trabajadores, empleados y obreros con el objetivo de evitar la explotación de las clases laborantes del país. Para el análisis de su implementación se tomó en cuenta la coyuntura económica para que fuese de efectivo cumplimiento. Este salario les aseguraría cubrir al menos las necesidades más fundamentales en la vida del hogar y mejorar las relaciones entre el capital y el trabajo.1327 Siempre en cuanto al tema del salario y ante la presencia de muchos extranjeros en el país, la Asamblea aprobó por unanimidad la moción “Gallardo” que consistía en que los patronos debían destinar obligatoriamente el 80% de los sueldos para empleados salvadoreños, aunque cabe señalar que el dictamen de la Corte de Justicia fue desfavorable por considerar que vulneraba el derecho de libre disposición de los bienes, se emitió la ley respectiva. Esta medida abarcó: talleres, fabricas, comerciales y en general a todo el sector económico por haberse concluido que algunos extranjeros tenían acaparado el sector comercio, dejando sólo la tierra como medio de vida.1328 Al parecer, posteriormente esta ley fue burlada ya que se tocó intereses sensibles del capital, se reformó en el sentido de que sólo el 70% de los sueldos serían destinados a empleados salvadoreños y no necesariamente de nacimiento, sino que también mediante nacionalización.1329 En nuestra opinión, esta ley no tenía motivaciones raciales sino que pretendía: 1) la nacionalización del pequeño comercio, 2) eliminar las prerrogativas y concesiones del Estado al sector industrial y Alberto Masferrer, Ensayos: Las nuevas ideas, Biblioteca básica de literatura salvadoreña, vol. 2, 1ª Edición, CONCULTURA, 1996, pág. 121. 1326 “Se trata de implementar el salario mínimo en el país”, La Prensa, jueves 31 de enero de 1935, No. 7,575, pág. 1, año XXI. 1327 “El ochenta por ciento de los sueldos para los empleados salvadoreños” Diario Nuevo, sábado 20 de octubre de 1934, No. 280, pág. 1, año I. 1328 1329 “Mutilada la ley Gallardo”, Diario Nuevo, sábado 27 de octubre de 1934, No. 287, pág. 1, año I. 368 3) combatir el monopolio del comercio en grande y en pequeño, que en ese momento estaba en manos de extranjeros.1330 Una empresa que recibió mucho estímulo por ser “nacional” y utilizar materias primas nacionales, fue la fábrica de sacos “Cuscatlán” propiedad de Julio Enrique Ávila, quien empleó a muchos obreros nacionales para trabajos manuales – los cuales una vez aprendieron el oficio– lo explotaron por si mismos convirtiéndose en un nuevo rubro industrial. La intención de Julio Enrique Ávila, era crear pequeñas industrias, enseñar oficios de forma gratuita y posteriormente poner las industrias en manos del pueblo haciendo énfasis en el sector femenino. Además, se proyectó la construcción de pequeñas habitaciones modernas e higiénicas para los trabajadores de su fábrica, para contribuir de ese modo, al plan de mejoramiento social impulsado por el Estado.1331 La Gobernación Departamental de San Salvador junto al inspector de trabajo acordó con los fabricantes de camisas: Roca, Buckele, Barke, Gessier, Coch y Zablah aumentar en un cien por ciento el salario de sus empleadas. Las obreras ganaban un promedio de 13 centavos por camisa fabricada. Con esta nueva disposición devengaron 25 centavos por pieza, lo que quedó establecido como el salario mínimo por considerarse más justo que si las trabajadoras ganaran C. 1.25 por día, ya que iba en razón directa de su productividad.1332 En octubre de 1943 el periódico Vida Nueva publicó el artículo titulado “Un imperativo de la hora actual es el aumento de los salarios” y subtitulado “De suprema urgencia la realización del Mínimum Vital”, en el cual se establecía que algunas casas comerciales de San Salvador habían aumentado el sueldo de sus empleados, en razón de que se había elevado el costo real de la vida, por lo cual “Bases de una campaña enérgica que desarrolla Reconstrucción Social en beneficio de las clases trabajadoras del pueblo salvadoreño”, Reconstrucción Social, domingo 28 de abril de 1935, No. 67, pág. 1, año III. 1330 “La industria henequera progresa bajo la potente maquinaria de la fábrica Cuscatlán”, Reconstrucción Social, jueves 30 de mayo de 1935, No. 71, pág. 1, año III. 1331 “Ganarán doble salario las costureras”, Diario Nuevo, miércoles 31 de octubre de 1934, No. 291, págs. 1 y 5, año I. 1332 369 hicieron un llamado a todos los demás establecimientos del país a que hicieran lo mismo.1333 En el citado artículo también se hacía referencia a la necesidad de que se decretara un salario mínimo para todos los trabajadores del campo, ya que a cambio de grandes sacrificios físicos, recibían salarios de hambre. En ese momento, los jornaleros ganaban C. 0.50 diarios más una alimentación precaria, que consistía en una ración de tortillas, frijoles y un poco de sal. Del mismo modo, hacía énfasis en que la agricultura, el comercio y la industria debían de ser desmonopolizados para lograr una mayor justicia social:1334 Es un imperativo de la hora exigir el salario mínimo, que esté acorde con las necesidades vitales. Si todo sube de precio, es de suprema urgencia que para el equilibrio debido suban los salarios (…) Nosotros que propugnamos por la realización del Mínimum Vital que proponía el maestro Masferrer esperamos que los Poderes Públicos, atendiendo al clamor general, no permitan ya más tantas y tantas ignominiosas explotaciones de parte de gentes insaciables apegadas al dinero.1335 Complementario al aumento del salario, también se realizaron inspecciones a los locales de fábricas, verificando que estos fueran amplios, aireados y con buena iluminación, la primera que se declaró en buenas condiciones fue la fábrica de hilados “El León”. Para ese momento se consideraba que eran unos 5,000 obreros sólo en la ciudad de San Salvador los que saldrían beneficiados con estas medidas – que por supuesto– contaban con la venia de los propietarios. El objetivo era que todos los trabajadores urbanos se desenvolvieran en condiciones mínimas higiénicas para garantizar su salud. Todas aquellas a las que se les hizo observaciones tuvieron que introducir las respectivas reformas.1336 Es de hacer notar que ante estos cambios hubo alguna resistencia, incluso, algunos obreros se negaron a dar información por miedo a perder sus trabajos, sobre todo en lo que se refiere a horas de trabajo y salarios, pero la Junta de “Un imperativo de la hora actual es el aumento de los salarios”, Vida Nueva, sábado 23 de octubre de 1943, No. 133, pág. 1, año III, 1333 1334 Ídem. 1335 Ídem. “Mejores condiciones de trabajo para cinco mil obreros de San Salvador”, Diario Latino, martes 24 de enero de 1939, No. 14,573, pág. 1, año XLVIII. 1336 370 Conciliación les hizo la excitativa de que sin temor brindaran dicha información, ya que vendría en beneficio de su mejoramiento.1337 Otro de los puntos interesantes en el área laboral, es que durante el gobierno de Martínez se dieron los primeros pasos para el establecimiento de lo que hoy se conoce como “seguridad ocupacional o social”. La ley de accidentes de trabajo en sus artículos 2º y 3º establecían que era obligación de los patronos cubrir los gastos de curación del obrero para lo cual se tuvo el proyecto de crear una clínica especial para que los patronos ya no enviaran a sus trabajadores al hospital Rosales. 1338 Además, se presentó el proyecto de la Ley de Protección al Trabajador. Para su aprobación, el gobierno nombró una comisión compuesta por reconocidos abogados del país que junto con miembros de la Junta Nacional de Conciliación, le dieron cuerpo al texto. También se tomó como medida complementaria, evitar que extranjeros ingresaran al país, ya que en muchas ocasiones sus estadías se volvían indefinidas y quitaban puestos de trabajo a salvadoreños. 1339 Asimismo se dictó leyes especiales que protegían a la madre obrera, fuera ésta casada o no. 1340 En el caso de la mujer obrera, es interesante observar como en la ciudad de Santa Ana se fundó la primera “Sociedad de Obreras”, compuesto por un gremio femenino de trabajadoras, tanto del campo como de la ciudad, de hecho la primera de esta índole en Centroamérica, denominada: “Sociedad Gabriela Mistral”. Su objetivo obviamente fue buscar el mejoramiento de la mujer, en sus condiciones laborales, pero además pretendía culturizarla a través de la promoción del libro y el desarrollo de actividades culturales como la fundación de una biblioteca, una escuela nocturna de letras y oficios y una sala de conferencias. En definitiva, su visión fue “Obreros y obreras se niegan a dar los datos necesarios “, Diario Latino, jueves 26 de enero de 1939, No. 14,575, pág. 1, año XLVIII. 1337 “Una clínica especial para obreros”, Diario Latino, viernes 21 de abril de 1939, No. 14,645, pág. 1, año XLVIII. 1338 “Estudiará las nuevas leyes de trabajo”, Diario Latino, sábado 29 de abril de 1939, No. 14,652, pág. 1, año XLVIII. 1339 “La obrera que es madre merece toda clase de consideraciones”, Diario Latino, lunes 8 de mayo de 1939, No. 14,659, pág. 1, año XLVIII. 1340 371 proporcionar a la mujer salvadoreña un mejor régimen de vida mediante la unidad del gremio.1341 Que se haya fundado en Santa Ana, no fue casualidad, ya que precisamente fue en esta ciudad donde Gabriela Mistral en 1931 cuando visitó el país pronunció su conferencia titulada: “El trabajo social de la mujer”, la cual inspiró a las mujeres santanecas para luchar por sus reivindicaciones. A dicha disertación, acudieron elementos de sociedades, corporaciones y público en general.1342 El Ministerio de Gobernación y Trabajo, también dirigió una extensa circular a los Alcaldes Municipales de la República, en la cual se les daba instrucciones para que en lo sucesivo se tratara de evitar los accidentes de trabajo en lugares como la molienda de caña de azúcar por medio de trapiches de hierro o madera. La nota decía a los Alcaldes que tenían que recomendar personalmente a los dueños de estos lugares de trabajo, de dotar de suficiente iluminación al trabajador. 1343 Prohibía a los patronos exponer a sus trabajadores a extenuantes jornadas de trabajo, ya que por la fatiga estas personas, en ocasiones, quedaban mutiladas en estos accidentes. Los factores de riesgo laborales eran: el sueño, el cansancio, la imprudencia, la oscuridad y la embriaguez; se trató de cumplir a cabalidad la Ley de Accidentes de Trabajo desarrollando campañas informativas a los campesinos para que éstos también tomaran las medidas pertinentes.1344 El gobierno de Martínez –contrario a los gobiernos anteriores– también adoptó la política de adelantar los salarios a los empleados de la Administración Pública que servían no sólo para cubrir sus necesidades básicas sino para reactivar la economía; esto demuestra que saneó muy eficientemente las finanzas nacionales e incluso creó reservas por casos de urgencias. Tener una economía saludable también “Fúndase en Santa Ana una sociedad de trabajadores”, Diario Nuevo, martes 17 de abril de 1934, No. 121, pág. 1, año I. 1341 “Conferencia de Gabriela Mistral esta noche”, El Tiempo, miércoles 30 de septiembre de 1931, No. 688, pág. 1, año III. 1342 “Medidas a favor del campesino”, Diario Oficial, Suplemento La República, jueves 20 de febrero de 1941, No. 2,357, pág. 1, año IX. 1343 1344 Ídem. 372 sirvió para darle sostenimiento a los servicios públicos que se desarrollan en este capítulo.1345 Esta política fue implementada por el gobierno de Martínez para evitar el agiotismo del pasado, en el sentido de que los empleados vendían sus recibos de sueldos a especuladores por cantidades irrisorias, al verse imposibilitados a cubrir sus necesidades vitales y ante la presión asfixiante que les ejercían los acreedores por no existir una liquidez en la economía. Los obreros recurrían a estos prestamistas que les cobraban intereses exorbitantes porque no tenían a tiempo sus sueldos, desvaneciéndose rápidamente en favor de los inescrupulosos.1346 Masferrer en su tiempo también criticó esta actividad, aunque reconoció que en ese mes en específico, Pio Romero Bosque había pagado a tiempo sus salarios, no así Arturo Araujo cuando se intensificó la crisis del 29: Suponemos que la compraventa de recibos es un negocio lícito, siempre que el porcentaje que cobra el comprador no sea, como ha sido casi siempre exorbitante e inhumano (…) lo único censurable que advertimos en la publicación de tales anuncios es la mala atmosfera que en el exterior pudiera hacérsele al Gobierno, donde se puede creer que el Gobierno está en bancarrota; que no paga a sus empleados puntualmente, y que estos se ven obligados a caer en manos de los usureros.1347 Otra práctica que erradicó el gobierno de Martínez, fue evitar que los dueños de haciendas de café y de caña de azúcar bajaran los sueldos a sus trabajadores con el pretexto de que la situación del café era crítica, incluso en 1937, envió al gobernador de Ahuachapán (departamento cafetalero) una circular en el que le instaba a que se preocupara por evitar esta situación, de tal forma que no se afectara a las clases trabajadoras.1348 En cuanto a descanso remunerado, el sector magisterial en sus ramos de primaria, secundaria y universitario fue muy beneficiado, ya que según la ley de “Pago de sueldos adelantados”, Diario Oficial, Suplemento La República, miércoles 11 de diciembre de 1940, pág. 1, año VIII. Por un error de impresión no tiene número de tiraje. 1345 1346 Ídem. “Los compradores de recibos no desconocen la ventajas de las propaganda”, Patria, martes 15 de octubre de 1929, No. 439, pág. 1, año II. 1347 “Importante circular del Ministro de Gobernación sobre la rebaja de los salarios”, Diario de Ahuachapán, sábado 13 de noviembre de 1937, No 4,456, pág. 1, año XIV. 1348 373 presupuesto, se dictaminó que cobrarían sus vacaciones anticipadamente al terminar sus tareas escolares, así lo dispuso por primera vez el Gobierno en la historia nacional.1349 En este mismo sentido, se introdujo en las leyes laborales el derecho de la mujer a gozar de período de descanso por alumbramiento (40 días). Además, se estableció que los empleados públicos gozarían de un período de vacaciones de 15 días anuales, especificando que en casos de enfermedad comprobada, el empleado podía faltar al trabajo con goce de sueldo:1350 Masferrer en su tiempo no consiguió gran cosa con sus ideas, y estas quedaron ahí; su pensamiento se ha ido oficializando. Es así como el reformismo del país, desde la administración del General Hernández Martínez al Coronel Arturo Armando Molina tiene una base masferreriana y esto se puede comprobar a través de las diversas leyes e instituciones.1351 Es muy importante concluir que el gobierno de Martínez se preocupó de forma real porque hubiera trabajo en abundancia en los distintos sectores del país, sobre todo en la industria y la agricultura, también se ocuparon muchos trabajadores en la construcción de la red vial y fue frecuente que en las fincas y haciendas se solicitaran muchos brazos para los cultivos agrícolas y para levantar las cosechas, ya que para el Estado el trabajo significaba vida.1352 Ahora bien, la opinión de Erick Ching con respecto a este nuevo proyecto de Nación es catalogarlo como “corporativista” y “seudofacista”, mismo que en otras ocasiones llama “populista” en el sentido de que los militares defendieron al campesino y al obrero de los abusos más notorios de las elites locales en función de un beneficio tripartito entre capitalistas, militares y obreros-agricultores. Aunque considera que los escépticos podrían desestimar el reformismo de Martínez, él piensa que no debe descalificarse a priori, ya que establece que permitieron crear un “Los profesores cobrarán vacaciones anticipadas”, Diario Nuevo, sábado 27 de octubre de 1934, No. 287, pág. 1, año I. 1349 “Las vacaciones de los empleados públicos se consideran en la ley de presupuesto”, El Diario de hoy, sábado 1 de julio de 1939, No. 944, pág. 2, año IV. 1350 María Dolores Andino de Meléndez, Et. al. Alberto Masferrer humanista, tesis presentada para obtener el título de licenciatura en letras, UCA, 1976, pág. 44. 1351 “Trabajo, significa bienestar” Diario Oficial, Suplemento La República, martes 18 de agosto de 1942, No. 2,783, pág. 1, año X. 1352 374 espacio social entre campesinos, obreros, indígenas y ladinos para negociar sus condiciones:1353 El régimen de Martínez no se identificó con las elites, excluyendo a trabajadores y campesinos. De hecho, como se mencionó en el capítulo anterior, el régimen impulsó un programa de reformas de corte populista después de la rebelión de 1932, cuyo objetivo fue la incorporación de las necesidades populares al programa de desarrollo del régimen. Este programa definió a los campesinos y obreros como socios orgánicos, si bien desiguales, de las elites terratenientes y de los militares en un solo cuerpo nacional. Los militares creían que los campesinos y los obreros proporcionaban su mano de obra, las elites contribuían con sus conocimientos y habilidades, y los militares representaban el honor y orden; y que los tres eran necesarios para el progreso de la nación. Sobre la base de esta formulación corporativista y seudofascista, los militares se propusieron a defender a los trabajadores y a los campesinos de los abusos más notorios de las elites locales.1354 Antes de abordar otro elemento fundamental del Mínimum Vital, el cual es el aprovisionamiento de agua cabe mencionar que una opinión similar se presenta en el libro titulado Recordando 1932: La matanza, Roque Dalton y la política de la memoria histórica en donde también se niega la naturaleza vitalista del reformismo de la presidencia de Martínez, caracterizándolo más bien como fascista, con el agravante de que todas las medidas benefactoras impulsadas por el régimen, según los autores, quedarían invalidadas o ilegitimadas a consecuencia del leso etnocidio producido en 1932: …como parte de un populismo de corte fascista que definía a los trabajadores como una parte orgánica, si bien inferior, de la nación. Como parte de su populismo fascista, el régimen de Martínez inició una campaña de reforma social denominada Mejoramiento Social que buscaba aliviar el sufrimiento de la población obrera. A pesar de que Mejoramiento Social fue un esfuerzo modesto e ineficaz, lo cierto es que un etnocidio habría contradicho en lo fundamental los esfuerzos del gobierno por presentarse como un aliado de los trabajadores, tanto indígenas como ladinos, después de 1932.1355 Erick Ching, et al., Las masas, la matanza y el martinato en el Salvador: Ensayos sobre 1932, UCA editores, 2007, págs. 165 y 166. 1353 1354 Ídem. Erik Ching et. al, Recordando 1932: La matanza, Roque Dalton y la política de la memoria histórica, Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, programa El Salvador, 1ª Ed., 2010, pág. 81. 1355 375 3.5- Agua buena y bastante, ampliación y mejoramiento del servicio de agua potable como elemento fundamental de vida Hemos abordado elementos fundamentales del Mínimum Vital como: vivienda, reforma agraria y trabajo. Ahora es momento de analizar como Martínez se enfrentó al problema de suministro de agua potable. En enero de 1933, la Ingeniería Municipal de San Salador elaboró un plano de la ciudad con el objetivo de mejorar y extender a los nuevos barrios y terrenos urbanizados el servicio de agua potable y se calculó como buen acto de gestión administrativa que dicha ampliación conllevaría el incremento de la renta nacional. 1356 Posteriormente, el Ejecutivo determinó que el servicio de aguas de la ciudad, ya no estaría a cargo de la municipalidad, sino de la “Junta de Fomento Departamental” dado el entusiasmo y el espíritu progresista de sus miembros. Los objetivos que se impuso dicha institución fueron: 1) arreglar o cambiar los arietes gastados o inservibles, 2) hacer el servicio regular (24 horas) y eficiente, 3) en algunas zonas de gente pobre se abrieron fuentes públicas y 4) en colaboración con la Sociedad Cooperadora de Progreso Local se llevó a cabo el saneamiento de las principales fuentes de abastecimiento como “La Mina”, “14 de Julio” y “El Chorro”. Además, se procedió a la reconstrucción de lavaderos y baños que se encontraban en pésimo estado.1357 El problema del agua también fue muy difícil de solventar, los habitantes de la ciudad de San Salvador manifestaban que la compañía que les administraba el agua la servía con “un sabor repulsivo y un olor muy desagradable” y que incluso, al hacer contacto con la piel era corrosiva debido a la excesiva concentración de cloro. El Diario Nuevo en un artículo titulado “Ennobleciendo la vida” hizo un llamado a Sanidad para que verificara tal situación, por considerar que el agua era “una “Extensión del servicio de aguas”, La Prensa, jueves 19 de enero de 1933, No. 6,638, pág. 1, año XX. 1356 “Mejoras al servicio de aguas”, La Prensa, viernes 20 de enero de 1933, No. 6,639, pág. 7, año XX. 1357 376 necesidad de primer orden, en la escala de los valores de la cultura, en clara alusión a Masferrer:1358 Hay que recordar que se trata de un servicio estrechamente ligado a la salud de los habitantes, y que sobre ese servicio pesa, por lo tanto, una inmensa responsabilidad. El primer peldaño de la cultura decía Masferrer, es el agua. Con agua corrompida no se puede ir a la civilización.1359 El llamado del Diario Nuevo tuvo eco y las autoridades determinaron que el agua era potable y que, por tanto, hacían un llamado a la población a que no se alarmara, pero lo interesante es que este periódico estaba al pendiente de los intereses generales con una clara influencia masferreriana. 1360 De hecho, su insistencia sobre este problema fue muy determinante: Y al tratar de la vivienda anacrónica en la que se pudre una parte considerable de la población capitalina, lo primero que salta como obligación es la de procurar, la de exigir agua, agua todo el día, agua para beber, agua para el aseo personal, agua para el aseo de las habitaciones. No es posible tolerar que los propietarios suministren el agua en cantidades irrisorias, porque el agua en la vida de la civilización, cualesquiera que sean las circunstancias, es un derecho.1361 El Diario Nuevo fue quizás el medio que más abogó por un buen suministro de agua, por ejemplo, denunciaron que los habitantes del puerto de La Libertad bebían lodo en lugar de agua potable, a pesar de que el lugar tenía muy buenas fuentes; le solicitaron al Estado que se dispusiera a solventar este grave problema mediante la instalación de chorros en los principales barrios de la ciudad, ya que se sabía que el vital líquido sólo era disfrutado por algunas personas pudientes. A raíz de esta situación concreta, escribieron en su editorial:1362 Este comentario nos hace recordar al gran periodista Alberto Masferrer. Decía a propósito de estos temas que los impone la realidad social a cada rato: “La escala de la cultura tiene nueve peldaños: agua, pan, justicia, orden, camino, escuela “La sanidad tiene que intervenir en el asunto del agua”, Diario Nuevo, lunes 21 de mayo de 1935, No. 458, pág. 3, año II. 1358 1359 “El agua que tenemos”, Diario Nuevo, lunes 21 de mayo de 1935, No. 458, pág. 3, año II. “Insistimos sobre el problema del agua”, Diario Nuevo, sábado 25 de mayo de 1935, No. 462, pág. 3, año II. 1360 1361 “El derecho al agua”, Diario Nuevo, sábado 9 de mayo de 1936, No. 759, pág. 3, año III. “Una penosa realidad, sin agua no puede haber cultura”, Diario Nuevo, miércoles 26 de mayo de 1937, No. 1,076, pág. 2, año IV. 1362 377 concordia, ciencia, gracia”. Partía el grande hombre de un elemento, el agua que sabe acariciar y confortar y terminaba con la flor del espíritu que es la gracia. 1363 Concluyeron su reflexión estableciendo que esta doctrina tan sublime no debía quedar como letra muerta o mera retórica, ya que el agua constituía un elemento que formaba parte de un sistema ascensional más amplio que perfeccionaba al hombre, era como decía Masferrer el primer y más básico peldaño para que el hombre pudiera realizarse plenamente, que era precisamente el que les faltaba a los habitantes del puerto de La Libertad, por lo que las posibilidades de desarrollo eran muy limitadas.1364 La solución, entonces, debía buscarse integralmente, es decir, financiera, jurídica, científica e ingenierilmente. Al solventarse el problema del agua, también se atacaba el problema sanitario como el de enfermedades infecciosas, parásitos y la adquisición de todo tipo de enfermedades que se desarrollan por la ingesta o contacto con aguas insalubres.1365 Sobre este mismo problema, existió un proyecto del Departamento de Ingeniería Sanitaria que pretendía mejorar el servicio de agua potable en todo el país, el cual consistía en la instalación de plantas purificadoras del agua en base a cloro. Para ese momento, los únicos departamentos que contaban con dicha maquinaria eran San Salvador y Santa Ana, pero la intención era que todas las poblaciones del país se beneficiaran de dichos aparatos.1366 Para resolver el problema del agua, hubo algunos gestos altruistas como el de Sarbelio Navarrete quien donó una parte del terreno de su hacienda denominada “Candelaria”, ubicada en el departamento de San Vicente en donde existía un rico asidero de agua, con el objetivo de proveer del vital líquido a los barrios de la zona “Agua: primer peldaño de cultura”, Diario Nuevo, miércoles 26 de mayo de 1937, No. 1,076, pág. 2, año IV. 1363 1364 Ídem. 1365 Ídem. “Plantas purificadoras de agua en todo el país”, Diario Latino, miércoles 11 de enero de 1939, No. 14,562, pág. 1, año XLVIII. 1366 378 occidental de dicho lugar, acto por el cual todo el pueblo vicentino, le estuvo muy agradecido.1367 Para resolver este llevado y traído problema, a finales de 1939 Alberto Guerra Trigueros empezó a discutir desde el punto de vista del vitalismo masferreriano, la posibilidad de la instalación de pajas de agua en todo el país. El argumento filosófico era que desde el hombre primitivo el abastecimiento colectivo y constante del agua, había permitido a la humanidad superar su condición de bestia, asociarse en tribus y posteriormente llegar a constituir una sociedad, siendo este recurso, incluso, más importante que el fuego y la vivienda. 1368 En la época moderna, este servicio debía estar debidamente reglamentado para impedir el enturbiamiento del agua, para gozar de ella en horas indispensables o siempre y si fuere posible para evitar desperdiciarla creando mecanismos que lograran su abaratamiento, es decir, se debía lograr su perfeccionamiento como elemento civilizador de la sociedad. Para Guerra Trigueros, en cualquier época era un servicio eminentemente social y por tanto, por ser imprescindible, debía ser gratuito, aunque entendía que esto último era muy difícil consideró que podía lograrse dependiendo del grado de evolución de cada nación:1369 …Puede el hombre vivir sin libros. Puede el hombre vivir sin carreteras. Puede el hombre vivir sin alumbrado público; sin autobuses, sin teatros, sin ciudades siquiera, y hasta sin casas. Y por descontado sin impuestos…Puede en suma vivir como animal el hombre. Pero, aún como animal, no puede subsistir sin agua. Por esto afirmaba Masferrer que es el agua el primer peldaño en la escala básica de la cultura.1370 Esta doctrina para Trigueros, debía aplicarse a la realidad de las aldeas de esa época, cuya única fuente era la pública municipal, que aunque servida a través de cañería, era insuficiente para dar abasto a todos los habitantes, porque era un único y débil chorro instalado en el parque central, por lo que la primera exigencia hacia el “Filantropía del Dr. Sarbelio Navarrete”, Nuevo Excelsior, San Vicente, 21 de mayo de 1938, No. 6, pág. 3, año I. 1367 Alberto Guerra Trigueros “Agua, vida y sociedad, I”, El Diario de hoy, viernes 29 de diciembre de 1939, No. 1097, pág. 9, año IV. 1368 1369 Ídem. 1370 Ídem. 379 gobierno, era que fuera servida a domicilio o por lo menos, en numerosas pilas bien distribuidas en cada esquina: “No debe ya ir el hombre en busca del agua, sino el agua en busca del hombre”.1371 Efectivamente, a partir de esta idea es que el Estado en coordinación con las municipalidades construyó baños y lavaderos públicos en muchas zonas del país.1372 Otro aspecto importante para Trigueros, era que este servicio jamás debía constituir un negocio ni para particulares ni para el Estado, simple y sencillamente porque era un recurso que se encontraba ligado a la vida misma del hombre, ni siquiera como ser social, sino que como ser animal. El vitalista puso como ejemplo Suecia, país europeo en donde todos los servicios eran gratuitos: agua, luz eléctrica, teléfono, gas y hasta tranvía. Guerra Trigueros explicó la doctrina vitalista desde una perspectiva muy pragmática: “Es la adquisición progresiva de un máximo de comodidad, máximamente desarrollada, para una mayoría máxima de hombres” y planteó que debía llevarse a la realidad social: 1373 El agua es una necesidad vital. Si indispensable es para la vida del intelecto, y aún del alma y del espíritu, hay que tener presente que ni si quiera puede sobrevivir el cuerpo, base y fundamento de toda la inteligencia, allí donde falte el agua (…) ideal que bien podría un gobierno salvadoreño proponerse como meta práctica y a determinado plazo: dentro de un “plan” cualquiera de ésos que se estilan; ya fuese “quincenal”, “decenal”, “veintenal”, “cuarentenal”, o…”centenal” si fuere necesario.1374 En 1940 con la perforación del primer pozo en San José de la Montaña, se consideró que el país había resuelto el problema del agua casi en su totalidad, ya que de éste se extrajeron más de 2000 pajas de agua para la ciudad de San Salvador con la utilización de un pequeño motor, lo que trajo como consecuencia que el consumo aumentara y el servicio se abaratara. Luego se trató de implementar este proyecto en Alberto Guerra Trigueros “Agua, vida y sociedad, II”, El Diario de hoy, sábado 30 de diciembre de 1939, No. 1098, pág. 10, año IV. 1371 “Se construirán los baños y lavaderos públicos aquí”, La Nación, San Miguel, martes 2 de noviembre de 1937, No. 4020, tomo 60, año XVI. 1372 Alberto Guerra Trigueros “Agua, vida y sociedad, II”, El Diario de hoy, sábado 30 de diciembre de 1939, No. 1098, pág. 10, año IV. 1373 Alberto Guerra Trigueros, “Agua”, La Nación, San Miguel, miércoles 2 de febrero de 1938, No. 4091, pág. 3, tomo 64, año XVII. 1374 380 todo el territorio nacional,1375 continuando con el Puerto de La Libertad en donde también se perforó un pozo para abastecer a los habitantes de esa ciudad, quienes como ya hemos señalado contaban con un pésimo servicio. 1376 Este mismo año, se estableció por primera vez en el país un control sanitario de aguas para constatar su calidad y verificar el cumplimiento de las leyes respectivas a este tema; esto implicaba permisos previos ante El Ejecutivo para el abastecimiento de agua, estudios técnicos sobre fuentes de captación e instalación de inodoros previo a la instalación de aguas potables. La Dirección General de Sanidad efectuó extensos estudios sobre la pureza del agua en todo el país y el Ejecutivo colaboró con la solución de los problemas hidráulicos que aún quedaban por resolver.1377 Donde no habían fuentes de captación naturales, el gobierno cavó pozos artesanales con máquinas especiales de perforación; en otras ocasiones instaló cañerías. Esto también ayudó al saneamiento de pueblos y ciudades para lo cual se constituyeron comités de ornato. Es muy importante señalar que el gobierno también realizó una intensa campaña en favor del árbol, ya que de esto dependía que se regeneraran los mantos acuíferos que habían disminuido de forma considerable.1378 En 1940, también se publicó el Decreto Legislativo número 26 del 16 de julio que establecía que el servicio de aguas en toda la República sería de carácter municipal, pero que el Poder Ejecutivo estaba en la obligación de velar porque todas las poblaciones estuvieran dotadas de tal servicio hasta donde lo permitieran las condiciones económicas. Además, establecía que el Ejecutivo podía costear total o parcialmente la introducción del servicio a cualquier población que careciera de él, o “El problema del agua en el país será solucionado”, Diario Latino, viernes 19 de abril de 1940, No. 14,963, pág. 1, año XLIX. 1375 “Se abrirá un pozo en el puerto de La Libertad”, Diario Latino, viernes 19 de abril de 1940, No. 14,963, pág. 1, año XLIX. 1376 “Control sanitario de aguas”, Diario Oficial, Suplemento La República, jueves 22 de agosto de 1940, No. 2,215, pág. 1, año VIII. 1377 1378 Ídem. 381 mejorar el servicio ya existente.1379 El Ejecutivo centralizó brevemente el servicio para mejorarlo: Sonsonate miraba con angustia agotarse las fuentes de que se abastecía; mientras, la población crecía. Pueblo sin agua es pueblo muerto. Obra difícil, aunque para los hombres como Lisandro Larín Zepeda (funcionario de Martínez) no imposible, quien, hechando el ojo a las abundantes fuentes de Santa Lucía, frescas, sanas, hasta dulces, las llevó por gravedad; tan abundantes que, según las estadísticas, Sonsonate ocupo el séptimo lugar entre los pueblos del mundo con más agua por habitante (…) esos servicios fueron centralizados con miras de mejoramiento.1380 El decreto vino a dar una regulación más integral al servicio de agua en aspectos como: construcciones, procedimientos administrativos, subsidios, financiamiento y mantenimiento de dicho servicio. El Estado veló por la calidad del vital líquido y la buena instalación de tanques de captación y distribución para evitar enfermedades o epidemias a causa de su contaminación; al incidir directamente en la prestación del servicio ayudó a las municipalidades del país, que por su pobreza, no podían hacer efectivo el abastecimiento:1381 “el agua es un factor indispensable en la vida humana (…) de allí la preocupación de las autoridades por dotar a cada población del país del servicio de agua potable, que es vida…”1382 Hubo municipalidades como la de San Vicente, en las que la introducción del servicio de agua fue todo un éxito, especialmente, en los barrios “San Juan de Dios” y “Concepción”, los cuales se habían caracterizado por la escases del vital líquido. Dicha alcaldía contó con el apoyo de los obreros lugareños y se construyeron nueve pilas más en los barrios citados bajo un costo 1.442.22 colones. 1383 Vivienda, tierras, trabajo y agua fueron complementados con una política de abastecimiento alimentario y algunas medidas de carácter sanitario, lo cual tratamos a continuación. “Nuevas disposiciones de la superioridad”, Diario Oficial, Suplemento La República, lunes 25 de noviembre de 1940, No. 2,293, pág. 1, año IX. 1379 1380 Reimundo Figueroa Monge, Apología de un hombre, sin editorial, 1971, pág. 21. “Nuevas disposiciones de la superioridad”, Diario Oficial, Suplemento La República, lunes 25 de noviembre de 1940, No. 2,293, pág. 1, año IX. 1381 1382 Ídem. “Tenemos agua en abundancia”, Interrogación, San Vicente, miércoles 5 de abril de 1939, No. 4, pág. 1, año I. 1383 382 3.6- Campañas sanitarias, regulación de precios y alimentación buena, bastante y variada: El gobierno trató de crear un abaratamiento de la vida mediante la supresión progresiva de algunos impuestos que gravaban bienes de consumo, como el que se le aplicaba a la carne de res y al ganado porcino, los que no estaban al alcance del mayor número de la población por su elevado costo. Estos se –consideraba– eran alimentos de primera necesidad que debían integrar parte de la dieta saludable de la población.1384 Adolfo Pérez Menéndez siempre con su vocación vitalista, habló sobre la importancia de meditar la tesis doctoral de Juan Antonio Fernández, ya que ésta versaba –según sus mismas palabras– sobre los problemas vitales de la nacionalidad, específicamente, hacía referencia a la alimentación del pueblo. Explicó que el doctorando llegó a la penosa y preocupante conclusión que los elementos que constituían la nacionalidad salvadoreña, campesinos y obreros tenían una nutrición tan deficiente que no alcanzaba ni a sostener el equilibrio vital de una persona que no trabajaba. Hizo un llamado a los hombres de gobierno, higienistas y educadores para que comprendieran que con una sociedad malnutrida era imposible alcanzar el desarrollo material y espiritual y que por el contrario, esta situación provocaba una degeneración inminente.1385 Pérez Menéndez denunció que ninguna campaña sanitaria podía ser efectiva sino se comenzaba por reclamar una alimentación sana y nutritiva para las clases trabajadoras y que, por tanto, era sumamente indispensable provocar el abaratamiento de los productos alimenticios, especialmente del pescado y los mariscos cuya potencia nutritiva estaba plenamente comprobada y que también era responsabilidad del gobierno implementar estas políticas y de la Universidad Nacional orientar al pueblo mediante el estudio, en sus diferentes ramas, de soluciones encaminadas a resolver este problema.1386 “Se estudia un plan para abaratar la carne, suprimiendo ciertos impuestos”, Diario Latino, sábado 25 de febrero de 1939, pág. 1, año XLVIII. 1384 Adolfo Pérez Menéndez, “La alimentación del pueblo” Diario Nuevo, martes 5 de febrero de 1935, No. 370, pág. 3, año II. 1385 1386 Ídem. 383 El gobierno de Martínez para ese momento, ya había iniciado una Campaña de Mejoramiento Rural, la cual fue implementada por el “Consejo Supremo de Salubridad” quien publicó “La cartilla sanitaria del campesino”. Esta fue distribuida entre campesinos y contenía recomendaciones de cómo podían defender y conservar su salud.1387 En el ámbito educativo, con el objeto de levantar la condición vital de los niños pobres y a iniciativa de unos maestros altruistas se impulsó la institución del “vaso de leche” como forma de procurar que los escolares desnutridos gozaran de una alimentación racional y gratuita. La moción estuvo a cargo de particulares y fue acompañada por el gobierno. 1388 El gobierno del presidente Martínez trató de abaratar los productos alimenticios de primera necesidad, por ejemplo, los cereales eran muy caros a causa de su extremada carestía producida por comerciantes inescrupulosos que los acaparaban para hacer de la crisis un instrumento de lucro, por tanto, la Asamblea Legislativa a iniciativa del Ejecutivo aprobó un decreto el cual establecía la libre introducción de maíz, frijol y maicillo, lo que significaba que estaban exentos del pago de derechos de importación, tasas de aduana, derechos consulares e impuestos municipales.1389 En octubre de 1934, el Gobierno invirtió más de 300,000 colones para la importación de más de 70,000 quintales de maíz y más de 20,000 quintales de frijoles que habían escaseado debido a la crisis económica que por momentos se agudizaba. Aunque el gobierno solventaba la necesidad momentáneamente, la economía se veía afectada, ya que ese dinero migraba al extranjero. Además, la situación era muy inestable debido a que estas carestías se producían después de meses de buenas cosechas.1390 “Campaña de mejoramiento rural”, Diario Oficial, Suplemento La República, viernes 10 de agosto de 1934, No. 495, pág. 1, año II. 1387 “El vaso de leche para escolares pobres”, Diario Oficial, Suplemento La República, jueves 6 de septiembre de 1934, No. 518, pág. 1, año II. 1388 “El Gobierno combate el alza de cereales”, Diario Nuevo, sábado 29 de septiembre de 1934, No. 262, pág. 1, año I. 1389 “Una gran suma para adquirir alimentos”, Diario Nuevo, miércoles 3 de octubre de 1934, No. 265, pág. 1, año I. 1390 384 Estas medidas podrían parecer contradictorias a lo que se quería conseguir con la reforma agraria, pero fueron necesarias para abastecer al pueblo en general de alimentos buenos y baratos y a la vez rompían el bloqueo que ocasionaban artificialmente los acaparadores de ciertos productos indispensables para la vida. 1391 Queremos dejar bien sentado, que esto es perfectamente congruente con los artículos vitalistas de Hernández Martínez publicados en Patria antes de llegar a ser presidente de la República, es más, el Diario Nuevo publicó el concepto de “víveres” de Masferrer: Víveres, son las cosas necesarias para alimento, las cosas que hacen vivir. Son el maíz, el arroz, las cebollas, los tomates, los frijoles, el maicillo, los plátanos, las yucas, las legumbres, las frutas y las verduras; todas esas cosas humildes, humildísimas, pero que hacen vivir, sin ellas no se puede vivir. Con ellas, todas las crisis se resuelven o se atenúan (…) Así, afirmamos que el gran arte de gobernar y de administrar, se asienta y descansa sobre esta previsión de los víveres.1392 En este mismo sentido, el Ministerio de Gobernación pactó con los panaderos el tamaño que tenía que tener el pan de harina de trigo (pan francés) para ser comercializado en el mercado y se fijó un precio estándar para todas las panaderías. Se firmó un acta adquiriendo el compromiso de que el que violara estas disposiciones sería sometido a sanciones que iban desde la imposición de multas hasta el cierre del establecimiento.1393 La Asociación de Ganaderos de El Salvador sirvió como intermediaria entre los productores de leche, queso y otros productos lácteos y el público consumidor, con el objetivo de garantizar la buena calidad de los productos alimenticios y estabilizar hasta donde fuera posible el precio de los mismos, es decir, se buscó adoptar precios justos que no llevarán a la quiebra al vendedor, pero que tampoco hicieran imposible su adquisición por parte de los compradores. El objetivo era que no se vendieran los productos a precios artificiales.1394 “Hacia el abaratamiento de los víveres”, Diario Oficial, Suplemento La República, miércoles 8 de octubre de 1934, No. 540, pág. 1, año II. 1391 1392 Alberto Masferrer, “víveres”, Diario Nuevo, viernes 20 de abril de 1934, No. 124, pág. 3, año I. “No podrán vender pan caro, malo y pequeño”, Diario Nuevo, lunes 19 de noviembre de 1934, No. 305, págs. 1 y 3, año II. 1393 “Productos lácteos higienizados y precios ínfimos”, Diario Nuevo, martes 26 de octubre de 1937, No. 1,204, pág. 3, año IV. 1394 385 De hecho, en el órgano oficial del gobierno, La República, se hizo un llamado a los comerciantes para que establecieran precios “fijos” en sus productos, ya que con eso darían pruebas de su honradez y seriedad. El Estado no quería que los especuladores alteraran los precios, fomentando así una cultura del “no engaño” o “no estafa” al consumidor. En realidad, muchas casas comerciales tomaron a bien implementar esta medida, por lo que incrementaron su prestigio.1395 En 1939 se fundó el “Consejo Económico Consultivo”, producto de reuniones llevadas a cabo entre el gobierno, los Ministros de Gobernación y Hacienda y representantes de la banca, el comercio y la industria salvadoreña. El objetivo de dicho instituto, fue proponer al Ejecutivo las medidas que considerara necesarias para contrarrestar los efectos perjudiciales del alza inmoderada de los precios de artículos tanto importados, como de producción interna.1396 En 1941, la Junta de Mejoramiento Social adquirió una gran cantidad de cereales que estuvieron resguardados en las bodegas de almacenamiento del Banco Hipotecario con el propósito de venderlos a la gente pobre cuando hubiese una gran escasez de granos en el país. Estas reservas no eran negociables mientras no existiera una situación de notoria calamidad alimentaria y contenía principalmente maíz, frijoles y maicillo.1397 Para la estabilización de los precios de los cereales también se fundaron cajas de ahorro y graneros municipales que distribuían los productos, – según las cosechas– dependiendo si habían sido malas o buenas, protegiendo los intereses tanto de los productores como de los consumidores.1398 Es muy importante destacar que desde 1937 y a iniciativa del Presidente Martínez, la Asamblea Legislativa decretó la ley que autorizaba el funcionamiento de los almacenes generales de depósito. En dichos almacenes se recibían toda clase de “Comerciantes salvadoreños: estableced precios fijos”, La Nación, San Miguel, domingo 13 de febrero de 1938, No. 4101, pág. 1, tomo 64, año XVII. 1395 “Se evitará el alza inmoderada de los precios”, La Nación, San Miguel, jueves 7 de septiembre de 1939, No. 4,545, pág. 1, tomo 65, año XVIII. 1396 “Enormes cantidades de cereales tiene la Junta de Mejoramiento”, El Diario de hoy, sábado 8 de marzo de 1941, No. 2,065, pág. 3, año VI. 1397 “Estabilizando los precios de los cereales”, El Diario de hoy, lunes 10 de marzo de 1941, No. 2,067, pág. 9, año VI. 1398 386 productos naturales de consumo, fuere estos internos o de importación que fueron fácilmente negociables mediante títulos valores, el objetivo fue resguardar productos alimenticios indispensables con la supervisión del Estado.1399 El Estado no sólo se quedó con “llamados de conciencia” a los comerciantes, sino que en 1942, previendo las maniobras de los acaparadores emitió un importante decreto conteniendo un reglamento de control de precios de ventas de mercaderías, impidiendo elevar injustificadamente los valores de productos, artículos o materiales de primera necesidad, a los que se impusieron “techos máximos” que nadie podía sobrepasar; estos fueron publicados en el Diario Oficial y en los boletines de la Secretaría de Hacienda.1400 Además, como medida complementaria se dispuso que fuera obligación para los comerciantes poner en lugares visibles las listas de precios.1401 Todas estas medidas fueron las que antecedieron, la creación del Instituto Regulador de Abastecimiento (I.R.A) creado en 1950 bajo la presidencia de Oscar Osorio. 1402 Desde esta perspectiva es interesante analizar la crítica hecha por el académico Álvaro Rivera que paradójicamente, responde al hecho de que los intelectuales de esa época se preocuparon más por buscar una democracia “social” (material) que una “política” (libertades) y de cómo los actuales intelectuales de izquierda deberían de trascender la presidencia de Martínez: Lo estético popular tiene que corresponder con una economía, una política y una razón sintiente donde se objetiven los intereses y las libertades populares. Arte, sí; educación, sí; empleo, sí; frijoles y arroz, sí, pero en una democracia viva (…) El martinato nació como un golpe de fuerza y se reafirmó con una masacre, pero, no nos engañemos, fue más allá e inició un proceso de legitimación con medidas económicas y “culturales” (…) Para un proyecto de izquierda, el tráfico cultural no se haya al margen de las relaciones ideológicas, políticas y productivas.1403 “Almacenes Generales de Depósito”, Heraldo de Sonsonate, martes 7 de diciembre de 1937, No. 4813, pág. 1, año XIX. 1399 “Control de precios de mercaderías”, Diario Oficial, Suplemento La República, lunes 28 de septiembre de 1942, No. 2,817, pág. 1, año X. 1400 1401 Ídem. María Dolores Andino de Meléndez, Et. Al. Alberto Masferrer humanista, tesis presentada para obtener el título de licenciatura en letras, UCA, 1976, pág. 45. 1402 Álvaro Rivera, “Alrededor del martinato”, El Faro, martes 10 de abril de 2012, disponible en: elfaro.net/es/201204/opinión/8254/ 1403 387 Ahora bien, el gobierno presidido por Martínez también construyó una colonia escolar para niños pobres en un lugar llamado “Lomas de Candelaria” y fundó el patronato escolar con el objetivo de inaugurar restaurantes y vestuarios infantiles en varias escuelas públicas; dicha institución velaba porque niños enfermos, desnutridos o sin casa fueran alimentados y albergados en dicha colonia. Esto fue llevado a cabo como parte de la política pro-infancia del gobierno.1404 Esta obra tuvo un claro espíritu masferreriano, ya que el Patronato Escolar Salvadoreño desarrolló una decidida campaña para que los niños pobres dejaran de ir a las escuelas sin desayunar y mal vestidos. Además, el Patronato realizó varias actividades en las que, incluso, participaron las hijas del Presidente Martínez para recaudar fondos provenientes de la sociedad en general, con motivo de realizar sus fines altruistas. Esta dinámica también fue parte del regeneracionismo social que se quiso implementar, porque el niño era visto como el hombre del mañana: 1405 Oíd a propósito a don Alberto Masferrer: “Sí me dicen que muchos niños de los barrios pobres y de los pueblecillos vienen a la escuela sin desayunarse, la noticia me hará reaccionar de diversas maneras, según mi desarrollo espiritual. Si soy un semisalvaje –que puedo serlo aunque vista a la moda y beba champaña– sentiré que nada me importa porque entre esos niños no está el mío. Si soy un bárbaro sentiré un impulso de protestar contra alguien a quién sentiré culpable (…) si soy un civilizado, o un culto, me daré cuenta del hecho, lo comprobaré acaso, ofreceré mi contribución en dinero o en trabajo para remediar el mal o atenuarlo, y en seguida volveré a mis quehaceres o a mis distracciones. Pero si soy humano y ultrapasé las banderas del salvajismo, de la barbarie, de la civilización y de la cultura; si entre ya en la zona superior que se llama humanización, entonces, el hecho de que los niños vayan a la escuela sin desayunarse, me presentaría en toda su extensión actual y futura, el destino nefasto de los niños, sujetos en sus años, a las enfermedades, a los vicios, y a los crímenes; y mi dolor agudo, como un remordimiento, me impulsaría ahora ese mal, que tiende, anticipadamente, a debilitar en los niños de hoy la humanidad futura.1406 “En favor de los niños pobres y con hambre”, Diario Nuevo, jueves 28 de octubre de 1937, No. 1,205, pág. 1, año IV. 1404 “Niños pobres: El Salvador del mañana”, Diario Nuevo, viernes 29 de octubre de 1937, pág. 3 año IV. 1405 “Una definición del verdadero humanismo”, Diario Nuevo, sábado 27 de noviembre de 1937, No. 1,230, pág. 3, año V. 1406 388 Ya para 1939, el Gabinete de Psicopedagogía a cargo de Carlos Monterrosa, a iniciativa del Sub-secretario de Instrucción Pública llevó a cabo la fundación de patronatos escolares en todo el territorio nacional, siempre con el objetivo de proveer alimentos a niños pobres y desnutridos en edades escolares. Bajo este plan el primer patronato que se fundó fue el de la ciudad de San Miguel y sucesivamente se fueron fundando otros en diferentes regiones del país.1407 Enfermeras del servicio del Patronato Escolar Salvadoreño recogieron a niños que asistían a diferentes escuelas de San Salvador que resultaron raquíticos y desnutridos, a fin de alojarlos permanentemente en la Colonia de Las Lomas de Candelaria para que recibieran el tratamiento de nutrición adecuado. Su estadía duraba hasta que recuperaban las energías y se mostraban saludables.1408 En el aspecto propiamente sanitario, en el país se inició una campaña antituberculosa, enfermedad que estaba en íntima relación con la pobreza de la gente y su falta de cultura para prevenirla, estaba en relación con el Mínimum Vital porque es una enfermedad que por lo general, ataca a los individuos desnutridos, faltos de alimentación y de aire y fatigados física o mentalmente, es decir, trabajadores expuestos a largas jornadas de trabajo.1409 Esta situación se veía agravada porque el trabajador sólo ganaba lo diario para su subsistencia y no podía pagar el tratamiento que era prolongado en un ambiente de tranquilidad, reposo, aire libre y buena alimentación, esto traía como consecuencia, que fuera el Estado quién tuviera que hacerse cargo de la prevención y tratamiento de la enfermedad y además diagnosticarla a tiempo, en fin, se volvía necesario impulsar una campaña antituberculosa desde proveer una mejor alimentación para el pueblo, pasando por resolver el problema del aire en el trabajo y en la vivienda, por lo que era necesario eliminar los mesones inmundos: 1410 “Fundaran patronatos en toda nuestra República”, Diario de hoy, sábado 14 de enero de 1939, No. 801, pág. 7, año III. 1407 “Niños raquíticos son enviados a colonia de las Lomas de Candelaria”, Diario de hoy, viernes 14 de abril de 1939, No. 877, pág. 5, año III. 1408 J. F. Valiente, “Tuberculosis”, Diario de hoy, viernes 9 de junio de 1939, No. 925, págs. 9 y 13, año IV. 1409 1410 Ídem. 389 Es tanto más difícil la solución del problema de la tuberculosis en un país según la relación: directa con la cultura general del pueblo e inversa con el mínimum vital medio reinante (…) alimentación y vivienda son, en nuestro caso, el mayor problema en la Campaña Antituberculosa: el gran problema de Mínimum Vital.1411 Ante el incremento de este flagelo, se creó un nuevo departamento con su partida respectiva en la Dirección General de Sanidad. Asistencia Social ante el alto número de casos que revelaron las estadísticas, hizo ver al Congreso que la tuberculosis era una de las más importantes causas de mortalidad en el país, principalmente en los estratos más bajos de la sociedad y los que vivían en los mesones debido al hacinamiento.1412 De forma paralela, el Estado también implementó una enérgica campaña anti-palúdica, ya que según los datos de la época morían un promedio de 10 personas al día por causa de dicha epidemia: También existe una campaña desarrollada por la Dirección de Sanidad que tiende a evitar la transmisión del paludismo. La lucha contra la reproducción del mosquito que transmite la enfermedad, en algunas poblaciones del país logra contener en gran parte el avance de este flagelo que está minando la vitalidad de la población laborante (…) Se trata de reducir paulatinamente todos los estragos del paludismo para devolverle a la población salvadoreña toda la vitalidad que está robándole.1413 Otro de los aspectos importantes en cuanto a salud pública se refiere, aunque desde una iniciativa privada, fue la del empresario Napoleón Viera Altamirano, quien en su periódico el Diario de hoy1414 llevó a cabo una fuerte y extensa campaña antialcohólica que fue interpretada como otro signo de regeneración e integración moral del pueblo. Es interesante observar como este tabloide presentó una serie de dibujos donde se podían observar madres con niños deformes, muertos en las cunetas, etc., imágenes que pretendían alejar a las personas de tan dañino vicio. La referida campaña también tuvo otros efectos prácticos como, fue que se clausuraran los estancos de los centros de algunas ciudades y cerca de algunas 1411 Ídem. “Oficialmente se reconoce el incremento de la tuberculosis en nuestro ambiente”, Diario de hoy, sábado 17 de junio de 1939, No. 932, pág. 3, año IV. 1412 1413 “El flagelo del paludismo”, Diario Nuevo, miércoles 4 de abril de 1934, No. 110, pág. 3, año I. Salvador Escobar, “Es completamente sincera la lucha contra el alcoholismo”, La Nación, San Miguel, miércoles 10 de noviembre de 1937, No. 4,026, pág. 3, tomo 60, año XVI. 1414 390 escuelas. En la ciudad de San Miguel, incluso, se fundó una Liga Anti-alcohólica1415 y el Diario de Santa Ana en su hoja de difusión cultural estableció que el alcoholismo era uno de los problemas más graves que sufría el país, publicando el artículo “En la casa del ebrio” de Alberto Masferrer.1416 En realidad, desde hacía muchos años la prensa de todo el país había prestado su atención a este grave problema social arraigado principalmente en la clase trabajadora, la cual se encontraba embrutecida y degenerada a consecuencia del alcohol que mermaba su cuerpo, su mente y su espíritu, es por eso que se trató de sustituir el “garito” por las bibliotecas.1417 Volviendo al asunto de la alimentación, para 1940 las cosechas habían sido abundantes, además las tierras cultivadas habían aumentado considerablemente, más de 25 haciendas y fincas habían sido lotificadas y entregadas a campesinos pobres, con lo que se había conseguido beneficiar a más de 5,000 familias, por tanto, no era justificable aumentar el precio de cereales y artículos de primera necesidad. Los especuladores para beneficiarse propagaban falsos rumores sobre la posible carestía de artículos o realmente los acaparaban, por lo que el Gobierno trató de evitar tales prácticas y emitió las leyes respectivas:1418 El Gobierno no quiere que haya miseria en el país. Si se aumenta el precio de los cereales y víveres los empleados y trabajadores dejarán de atender muchos problemas vitales de sus hogares como: educación, renta de casa, ropa, medicinas, etc., (…) porque el hecho de dificultar los alimentos a quienes sólo pueden comprarlos por medio de muchos sacrificios, es contribuir a la supresión de la salud, del bienestar y de la vida.1419 También hubo un acuerdo entre el gobierno y los terratenientes del país a fin de mejorar la alimentación del campesinado durante gran parte de la presidencia de “Se fundará en San Miguel una liga anti-alcohólica”, La Nación, San Miguel, sábado 8 de enero de 1938, pág. 5, No. 4,070, tomo 14, año XVII. 1415 “Uno de nuestros más dolorosos problemas”, Diario de Santa Ana, viernes 31 de marzo de 1939, No. 5,013, pág. 3, año XVIII. 1416 1417 “Nuestros males”, Avante, sábado 6 de mayo de 1939, No. 6, pág. 1, año I. “No debe permitirse el encarecimiento de los víveres”, Diario Oficial, Suplemento La República, lunes 28 de octubre de 1940, No. 2,271, pág. 1, año VIII. 1418 1419 Ídem. 391 Martínez. Los agricultores ensayaron distintos métodos de alimentación, en primer lugar, los terratenientes les dieron a sus trabajadores los tres tiempos completos, ya no sólo desayuno y almuerzo como se acostumbraba. La comida era abundante y variada para una mejor nutrición y se hizo énfasis en que al trabajador no sólo había que pagarle, sino que también había que proporcionarle buena alimentación y medicinas, pero, sobre todo, darle un buen trato, porque esto influía mucho anímicamente sobre él.1420 Ahora bien, antes de realizar nuestra crítica al reformismo martinista quisiéramos decir que contra la postura predominante de la historiografía existente sobre que el gobierno de Martínez se puso al servicio de la oligarquía, Ítalo López Vallecillos opina: La modernización del Estado salvadoreño se inicia con el ascenso al poder de Maximiliano Hernández Martínez…quien, con la colaboración de la pequeña burguesía de origen liberal y el apoyo de algunos cafetaleros progresistas del sector medio, logró introducir una serie de reformas de beneficio incalculable. El reformismo de Martínez (…) aunque en muchos aspectos pecó de “paternalismo” y de “mano fuerte”, es obvio que perjudicó a la gran oligarquía.1421 4- Valoración crítica de las políticas reformistas del Estado: Para hacer algunas reflexiones finales de este capítulo quisiéramos decir que Proudhon en su obra La idea de la revolución en el siglo XIX establece que todo Estado con tal de conservarse se vuelve contrarrevolucionario, es decir, siempre después que ha tenido lugar una revolución se vuelve reaccionario. El primer mecanismo que utiliza para frenar la revolución es la represión, tal y como lo hizo el gobierno de Hernández Martínez, pero luego viene la implementación de ciertas medidas para hacer más justo el sistema, entonces, la revolución se desarrolla sin motines ni trastornos, como el desenvolvimiento natural del antiguo orden de cosas.1422 Desde “Una mejor alimentación para el proletariado”, Diario Oficial, Suplemento La República, jueves 19 de noviembre de 1942, No. 2,859, pág. 1, año X. 1420 Patricia Parkman, Insurección no violenta en El Salvador: La caída de Maximiliano Hernández Martínez, Primera Edición en español, Consejo Nacional de la cultura y el arte, CONCULTURA, 2003, pág. 52. 1421 Pierre Joseph Proudhon, La idea de la revolución en el siglo XIX, Editorial Grijalbo S.A., 1ª Edición, México D.F., 1973, págs. 7, 12 y 14. 1422 392 esta perspectiva, el Mínimum Vital de Masferrer se ajustaba a los fines del Estado reaccionario de Martínez, el cual muy astutamente utilizó para llevar a cabo un reformismo de carácter anticomunista, lo cual puede comprobarse en las declaraciones que Martínez vertió al Sunday Herald Tribune de New York al hablar de la insurrección de 1932: Descubrimos documentos en posesión de los cabecillas que probaron sus relaciones con el cuartel general de los soviets en Nueva York. El movimiento estaba muy mal organizado, pero si no hubiera tomado prontas medidas, quien sabe lo que hubiera ocurrido. Los comunistas, una vez en el poder, no tienen misericordia para nadie. Usted sabe bien lo que hicieron en Rusia. En El Salvador no hay lugar para ellos. Estamos combatiendo las falsas doctrinas del comunismo con la educación y con un plan de construcción de casas baratas. Estamos repartiendo entre las familias pobres pequeñas parcelas de tierra con habitaciones y así cada ciudadano será propietario. Comparativamente hay pocas propiedades rurales grandes en El Salvador, y sin embargo, hay muchos ciudadanos no propietarios. Naturalmente, esto tomara varios años, pero una vez completo, esto será el fin del comunismo.1423 Como puede verse, la revolución encuentra sus orígenes en las necesidades del pueblo, en el pueblo que sufre y que no está contento con su suerte, de esta manera los estados reaccionarios tratan de cubrir dichas necesidades, lo cual es complementado con un discurso que lucha contra un fantasma, o sea, contra la posibilidad que se reactive el comunismo. Para Proudhon, lo que ocasionó la revolución de 1848 fue la falta de trabajo. Masferrer también alegaba esto. Proudhon considera que si no hay trabajo no hay salario y esto impulsa a las masas a la lucha desesperada y es por eso que considera que las revoluciones ocurren debido a la torpeza de los gobiernos.1424 Proudhon analiza detenidamente el fenómeno de las revoluciones, sostiene que la causa de las masacres efectuadas por todo estado reaccionario se debe a que se organiza un sistema sanitario de purga, que cauteriza sin misericordia ni gracia, es decir, trata de suprimir a toda costa el virus revolucionario. Esto es muy acorde con lo que sucedió durante la presidencia de Martínez, ya que algunos periódicos del 32 publicaron noticias que hablaban de “brotes de comunismo” como si se tratase de “El Sunday Herald Tribune, de Nueva York publica interesante entrevista con el Presidente Gral. Max. H Martínez”, Diario Nuevo, jueves 12 de abril de 1934, No. 116, pág. 3, año I. 1423 Pierre Joseph Proudhon, La idea de la revolución en el siglo XIX, Editorial Grijalbo S.A., 1ª Edición, México D.F., 1973, págs. 15, 16, 17, 19 y 22. 1424 393 una epidemia. Lo que queremos concluir es que los estados reaccionarios llevan a cabo reformas sociales, pero también meten a los países en camisas de hierro y estados de sitio sin fin. Otro mecanismo de control es el exilio de los antisociales y la imposición de estados policiales.1425 En el caso de la presidencia de Martínez, esto último se llevó a cabo a través de la emisión de varias cédulas que identificaban a los ciudadanos como “no comunistas” o “no subversivos”, de lo cual se concluye que el autoritarismo y la implementación de un humanismo reformista son dos caras de la misma moneda, ambos son formas de control social, sólo que el primero a nivel punitivo y el segundo a nivel preventivo y apaciguador. En fin, el estado reaccionario trata de hacer un reformismo con el apoyo de la opinión pública y así se asegura que la revolución se haga desde el poder. Trata de crear fuentes de trabajo para negar la lucha de clases y trata de abolir el feudalismo para crear una armonía entre propietarios y trabajadores. Todo esto constituye la esencia de la contrarrevolución.1426 Por otro lado, Avelardo Vallegas establece que todo caudillismo personalista es símbolo de dictadura, ejemplo de ello fueron los gobiernos de Porfirio Díaz y Juan Vicente Gómez.1427 Porfirio Díaz también tuvo tras de sí un grupo de intelectuales que lo justificaron con frecuencia y al igual que Martínez estableció una política patriarcal. Pareciera ser que las dictaduras latinoamericanas de finales del siglo XIX y comienzos del XX se caracterizaron por la imposición de un orden –que en teoría– conllevaría el progreso de las naciones, lo cual fue acompañado de un autoritarismo despótico proveniente del miedo y del respeto que inspiraba el dictador. Estas dictaduras también hicieron llamados a la unidad nacional para proteger los intereses hegemónicos que iban ligados al reformismo social,1428 pero hasta aquí hemos analizado el aspecto material de la presidencia de Martínez, a continuación desarrollaremos la parte relativa a la difusión de la teosofía, específicamente, en el 1425 Ibídem, págs. 24 y 25. 1426 Ibídem, págs. 41 y 42. Avelardo Villegas, Reformismo y revolución en el pensamiento latinoamericano, Siglo XXI editores, 1ª Ed., 1972, México, págs. 28. 1427 1428 Ibídem, págs. 32, 34 y 36. 394 siguiente capítulo damos cuenta de la influencia que ejercieron Krishnamurti y Jinarajadasa durante la administración de Martínez. 395 CAPÍTULO V: LA INFLUENCIA DEL PENSAMIENTO DE KRISHNAMURTI Y JINARAJADASA DURANTE LA PRESIDENCIA DE HERNÁNDEZ MARTÍNEZ La región centroamericana compartía algunos rasgos comunes y contó con una serie de redes intelectuales muy significativas, vinculadas a otros países (…) que contribuyeron a la circulación de las ideas de manera muy fluida y a dotar a los movimientos sociales de una fuerte impronta latinoamericana. Fueron muy corrientes los viajes de importantes intelectuales a Centroamérica, como José Martí, Víctor Haya de la Torre, Manuel Ugarte, Krishnamurti, Jinarajadasa, Porfirio Barba Jacob (…) quienes influyeron notablemente en la formación de estos movimientos sociales 1429 1. Introducción El presente capítulo se complementará con el siguiente, debido a la ligazón de su temática. En éste abordamos la íntima relación que se dio entre sociedades teosóficas, opinión pública, gobierno y figuras mundiales de la teosofía, sectores que más allá de las discrepancias políticas estuvieron interconectados por una misma tendencia ideológica: la teosofía. Además, intenta mostrar el debate que surgió con respecto a algunos otros sectores importantes de la época que se opusieron a dicha doctrina, tales como: positivistas, católicos y masones y observar también, cómo en algunas ocasiones, estas corrientes llegaron a convivir. La influencia de la teosofía en Centroamérica1430 y específicamente en El Salvador, tal y como pretendemos demostrar en esta tesis no terminó con la muerte de Masferrer, ni por la interrupción de las dictaduras militares en la región, por el contrario, fue fuertemente impulsada por el gobierno de Hernández Martínez, quien como veremos en el siguiente capítulo, la convirtió en la “filosofía oficial” del Marta Casaús, El lenguaje de los ismos: Ensayo de historia conceptual en América Latina, Siglos XIX y XX, pág. 5. 1429 Devés Valdés, Eduardo y Ricardo Melgar Bao, Redes teosóficas y pensadores políticos latinoamericanos, 1910-1930, cuadernos americanos, Vol. 6, Nº 78, nov.-dic. 1999, pág. 137. “De hecho entre fines del siglo XIX y 1930, pero también después, se desarrolla entre nuestros intelectuales (poetas primero, educadores y pensadores después, políticos incluso) un movimiento espiritualista donde se combinan elementos teosóficos con hinduismo, reivindicación de lo oriental y en ocasiones, creencias o practicas espiritistas. Esta sensibilidad teosófico-oriental impregnó buena parte del quehacer intelectual y político”. 1430 396 régimen a través de sus discursos, y a la sombra de figuras teosóficas importantes como: Annie Besant, Krishnamurti y Jinarajadasa. Tal y como dejamos establecido en el capítulo II de esta tesis, Krishnamurti aunque en franca ruptura con la teosofía tradicional, durante la década de los treinta siguió siendo una gran influencia para los teósofos latinoamericanos.1431 En este capítulo veremos su influjo, específicamente, sobre personajes muy importantes dentro del ámbito salvadoreño. En la primera parte, veremos como enseñaba el apego a la vida, como valor supremo y abordaremos algunas de sus impresiones respecto a los distintos credos religiosos y sistemas económicos imperantes de la época, aludiendo al hecho de que por su misma forma de ver las cosas, fue objeto de múltiples ataques por distintos sectores. Este capítulo también pretende rescatar el enorme impacto que tuvieron las doctrinas teosóficas-hinduistas, las cuales produjeron lazos de comunicación entre Oriente y Occidente a través del pensamiento de personajes tan relevantes como: Vivekananda, Mario Roso de Luna y Jinarajadasa quienes provocaron una extraña hibridez entre sus propias concepciones y el pensamiento tradicional de Europa y América,1432 que por ende, llevaron a nuevas formas regionales de concebir a la Nación. En la segunda parte, hacemos énfasis en los múltiples foros teosóficos y masónicos desarrollados por Jinarajadasa durante su segunda gira por latinoamericana, cuyos temas al igual que en la primera, fueron muy diversos. Si bien es cierto, en el capítulo II expusimos su pensamiento de forma amplia, hemos creído importante presentar este otro cúmulo de conferencias, ya que existe una diferencia radical desde el punto de vista de la historia de las ideas y es que si las primeras fueron transcritas o comentadas por el periódico Patria, estas fueron publicadas integras en el suplemento del Diario Oficial La República, lo cual comprobaría la continuidad e interconexión entre ambos proyectos, aunque los resultados hayan sido distintos desde un punto de vista político. Marta Casaús, Las redes intelectuales centroamericanas: un siglo de imaginarios nacionales (1820-1920)…, pág. 79, Los discursos publicados en 1936 por la Sociedad Teosófica hispanoamericana Sapientia, enfatizaban el nuevo cambio de valores. 1431 1432 Ibídem., pág. 4. 397 2. Influencia del pensamiento de Krishnamurti en figuras políticas e intelectuales de El Salvador y Centroamérica y su difusión en periódicos salvadoreños: 2.1- Presencia del pensamiento de Krishnamurti en medios escritos salvadoreños ante su posible llegada a Centroamérica durante la presidencia de Hernández Martínez: Desde 1933 empezaron a aparecer en distintos medios periodísticos centroamericanos como La Tribuna de Costa Rica y La Prensa de El Salvador, la posible realización de una gira de Krishnamurti por los países de América Latina, dicha comunicación fue remitida por el director de la revista La Estrella de Madrid a Ramón Avilés, secretario de una de las logias teosóficas salvadoreñas, quien fue el encargado de hacerle la invitación al hindú a efectos de que visitara el país. 1433 El organizador general de la gira latinoamericana de Krishnamurti, fue el argentino José Carbone.1434 Se especuló que el conferencista podía llegar a Centroamérica a finales de 1934, por lo que se generó una gran expectativa por parte de los miembros de las sociedades teosóficas de la región. Cabe destacar que en el istmo centroamericano, la logia de Costa Rica, fue una de las primeras en realizar actos preparativos para su recibimiento, los cuales fueron coordinados por José Monturiol.1435 Costa Rica siempre tuvo mucha importancia para Krishnamurti gracias a su amistad con la familia Povedano muy conocida en ese país e incluso existió un centro de información krishnamurtiano dirigido por Jassie Montejo de Orlich.1436 En 1933 La Prensa publicó algunas declaraciones que Krishnamurti le hizo a una periodista sobre no ser el líder de ningún movimiento oriental ni pertenecer a ninguna organización y que para aquellos que lo acusaban de haberse enriquecido a “Krishnamurti hará una gira por Sur América, es posible que visite El Salvador”, La Prensa, martes 3 de octubre de 1933, No. 6,855, pág. 7, año XXI. 1433 “Gestionan la visita de Krishnamurti al país”, Diario Nuevo, viernes 8 de septiembre de 1934, No. 243, pág. 1, año I. 1434 “Es probable que Krishnamurti visite Costa Rica a fines del próximo año”, El Día, miércoles 26 de julio de 1933, No. 4,158, pág. 1, año XIII. 1435 Pedro López Anadón, Krishnamurti, vida y obra, Editorial Oberon, Grupo Anaya S.A., Madrid, España, 2003, pág. 188. 1436 398 costa de la teosofía, les informaba que se había desprovisto de toda posesión material, aunque le aclaró que si bien es cierto, no había abandonado completamente las actividades teosóficas, le dijo que abandonó la Sociedad Teosófica porque la gente había comenzado a adorar su retrato, lo cual consideró un grave error. Krishnamurti creía que la llave única para encontrar la felicidad era la vida intelectual:1437 Está claro, pues, que no puede encontrarse alivio en los sistemas ni en los credos, sino en el íntimo y ardiente deseo de desarrollar la capacidad de “pensar y sentir creativa y profundamente”. Es el camino para todos y el único camino.1438 Según la redacción del Diario Nuevo, Krishnamurti tenía la reputación de ser el mejor maestro de ética sobre la tierra en ese momento. 1439 En 1934 este mismo periódico publicó una serie de artículos que hicieron relación a este nuevo movimiento espiritualista y teosófico que se quería implementar en El Salvador como: “Gandhi y las religiones”, “Las curaciones de Olcott” y “Lo que muere en la muerte” de José R. Villaverde, “¿Curar sin medicina?” de Ruperto H. Banderas, “Comentarios sobre un libro oriental” de Manuel Vidal, que se refería a un tratado de metafísica de Ramacharaka titulado: Catorce lecciones de filosofía yogui, y “Krishnamurti y la nueva universidad” de Guadalupe G. de Joseph, en el cual se concebía a Krishnamurti como el fundador de una nueva civilización más espiritual y dichosa de cuantas le hubiesen precedido.1440 Ante las noticias su posible llegada a El Salvador, se conformó un comité prorecibimiento presidido por Salarrué quien manifestó que el beneficio de que viniera el hindú al país, era que reavivaría el interés por los grandes y profundos problemas 1437 Ídem. E. M. Tidswell, “Boletín de noticias de Krishnamurti”, La Prensa, miércoles 14 de noviembre de 1934, No. 7,440, pág. 5, año XXI. 1438 “Gestionan la visita de Krishnamurti al país”, Diario Nuevo, viernes 8 de septiembre de 1934, No. 243, pág. 1, año I. 1439 Dichos artículos aparecieron publicados en el Diario Nuevo en el siguiente orden correlativo: “Gandhi y las religiones”, viernes 7 de septiembre de 1934, No. 243, pág. 3, año I; “¿Curar sin medicinas”, viernes 14 de septiembre de 1934, No. 249, pág. 3, año I, “Las curaciones de Olcott”, lunes 17 de septiembre de 1934, No. 251, pág. 3, año I; “Krishnamurti y la nueva Universidad”, martes 18 de septiembre de 1934, No. 252, pág. 3, año I, “Lo que realmente muere en la muerte”, jueves 20 de septiembre de 1934, No. 254, pág. 3, año I, “Comentarios sobre un libro oriental”, jueves 11 de octubre de 1934, No. 272, pág. 3, año I. 1440 399 de la filosofía y las ciencias, ya que éste se encontraba envuelto en una atmósfera de frivolidades y pasatiempos infecundos y además porque se podría conocer el movimiento intelectual hindú que venía tomando fuerza a través de autores como: Vivekananda, Chaterji, Arundale entre otros que, en ese momento, eran prácticamente desconocidos en Occidente..1441 Su visita significaba según esta misma visión, una oportunidad para conocer sus ideas y convertirlas en normas de vida que, en teoría, desarrollarían un movimiento de comprensión y fraternidad que tanto necesitaba el país y en general, todos los pueblos del mundo. La presencia de Krishnamurti traería, entonces, para el periodista Emilio Narváez García una “vibración” fecunda y poderosa que llegaría a la mente del pueblo salvadoreño, para dignificarlo y liberarlo espiritualmente: 1442 La influencia magnética, el efluvio de su “aura”, es provechosa como la de todo gran instructor espiritual, es un magnetismo bienhechor que fortifica los corazones, que estimula las emociones bondadosas y que como la brisa y la música sentimental es paz en los hogares y serenidad en el espíritu.1443 El Diario Nuevo en esta misma línea, estableció que la visita de Krishnamurti era relevante por el efecto positivo que iba causar en la conciencia de las diferentes clases sociales, que era un error tratar de querer analizar los beneficios que traían los grandes instructores siempre sólo en un sentido material. El mensaje de Krishnamurti pretendía provocar una nueva forma de ver los problemas de la humanidad como: el hambre, las enfermedades y la ignorancia, por lo que su pensamiento, era tildado en ese momento como “vanguardista”:1444 Emilio Narváez García, “Lo que aprovechará la cultura del país con la llegada de Krishnamurti”, La Prensa, miércoles 3 de octubre de 1934, No. 7,375, págs. 1 y 3, año XXI. Con respecto a estas afirmaciones de García; J. Cecilio Martínez envió una carta dirigida a Manuel Andino (Director de la Prensa) a quién veía como progresista, manifestándole su agradecimiento por promover la filosofía espiritual y al mismo tiempo le solicitó dedicará una página especial para dar a conocer sólo enseñanzas de cultivo mental que el país tanto necesitaba para erradicar vicios como el tabaco, licores, prostitución, chismografía y politiquería. “En torno del viaje de Krishnamurti a San Salvador”, La Prensa, viernes 5 de octubre de 1934, No. 7,378, pág. 1, año XXI. 1441 1442 Ídem. 1443 Ídem. Ruperto H. Banderas, “La visita de Krishnamurti”, Diario Nuevo, viernes 8 de octubre de 1934, No. pág. 3. 1444 400 Alguien ha dicho que si la religión es causa de distanciamiento entre los hombres, es mejor vivir sin ella. La misma sentencia se puede aplicar a la política (…) Platón, al decir con énfasis: “Hombres, Dioses sois y lo ignoráis”, quiso destruir la discrepancia prevaleciente al respecto.1445 Los krishnamurtianos salvadoreños realizaron una reunión el 15 de octubre en casa de Nazario Soriano, en la cual se llegó a varios acuerdos entre los cuales estaba distribuir 2000 hojas sueltas de propaganda con la silueta de Krishnamurti, las cuales contendrían un cuestionario filosófico y un título que decía: “Krishnamurti vendrá a El Salvador”.1446 La publicidad en los periódicos le correspondió a Emilio Narváez García, quien publicó una serie de artículos relacionados con el autor, entre los cuales estaban algunos de sus breves pensamientos: “Comprended los valores esenciales y en esa comprensión estará la liberación”.1447 Narváez García posteriormente publicó trabajos más amplios y sistematizados como ciertos trozos del libro El objeto de la vida en el que Krishnamurti de forma existencialista planteaba que el objeto de la vida humana era vivir de una forma “liberada”, entendiendo el término como una actitud que debía estar más allá de todas las cosas y de todas las experiencias, es decir, se trataba de aceptar todas aquellas circunstancias que causaban dolor, pero que al mismo tiempo fortalecían el espíritu.1448 Krishnamurti proponía que no se debía rechazar el dolor, porque éste era fuente de muchas otras experiencias que ayudaban a comprender el dolor en otros. Una vida plena, por lo tanto, era aquella que estaba abierta a todas las experiencias 1445 Ídem. “Organización de comités pro-viaje de Krishnamurti.”, La Prensa, martes 16 de octubre de 1934, No. 7,396, pág. 1, año XXI. Además del Comité Central de San Salvador cuyo secretario era Ramírez Dueñas, se organizaron a nivel departamental varios subcomités pro-recibimiento de Krishnamurti dentro de los cuales los más importantes se encontraban el de Santa Ana formado por Saúl Flores (presidente); José Ricardo Ortiz (secretario); Manuel Farfán Castro (tesorero) y Ricardo Vides Siguí y Carlos M. Flores como vocales, quedando muchas más personas afiliadas a dicho comité y el de Sonsonate conformado por el Dr. Abraham Rivera (presidente); Dr. Jerónimo Puente (vicepresidente); Drs. José Santos Zepeda y José María Sifontes (vocales); Alonso de León (tesorero) y Secretario Dr. Ricardo Villanova. 1446 Emilio Narváez García, “Lo que aprovechará la cultura del país con la llegada de Krishnamurti”, La Prensa, miércoles, 3 de octubre de 1934, No. 7,375, págs. 1 y 3, año XXI. 1447 “Grandes temas: La filosofía de Krishnamurti”, (tomado del libro: La vida como objetivo de Krishnamurti), La Prensa, viernes 12 de octubre de 1934, No. 7,391, pág. 6, año XXI. 1448 401 negativas y positivas de la vida, la única forma absoluta de realización, según Krishnamurti, era vivir en la verdad dolorosa, pero purificadora. 1449 Para Krishnamurti, la verdad era lo eterno y el mundo presente, las sombras en las que vivía la mayor parte de la gente, de las cuales era necesario liberarse mediante la verdad, verdad, que en este mundo permanecía limitada por los mismos hombres al crear innumerables doctrinas, incontables dioses y un sinfín de religiones que condenaban a la humanidad a tener una experiencia menos vital.1450 Alegóricamente, Krishnamurti expresaba que los credos y las religiones eran “jaulas” a las que había que destruir, porque al igual que Nietzsche, creía que el ser humano había colocado en primer lugar los credos, los dogmas y las religiones y se había alejado de la vida misma.1451 Vivir enjaulado producía el estancamiento intelectual y espiritual de las personas, porque conlleva a reconocer autoridades externas que las oprimían, según él, las religiones llevan a alejarse de la vida y alejarse de la verdad, por tanto, la vida había que encontrarla en las cosas comunes que estaban bajo nuestro propio dominio, al igual que Nietzsche criticaba severamente la ética cristiana, al decir que la verdad no debía limitarse por el temor del bien y del mal, por la estrecha moralidad o por el temor de un cielo o un infierno, ya que al producirse este temor se crea la necesidad de buscar consuelo. Lo que sucedía psicológicamente para Krishnamurti, era que todo aquél que ingresaba a una religión, era porque tenía miedo de afrontar individualmente sus limitaciones y experiencias, por lo que le tenía miedo a la vida misma. Para Krishnamurti, por esto, precisamente, era que la verdad no solía tener muchos seguidores.1452 Para poder encontrar la verdad, había que tener la mente liberada de prejuicios, ya que para Krishnamurti siempre se trataba de conciliar la verdad con las 1449 Ídem. 1450 Ídem. “Las doctrinas de Krishnamurti: la vida como objetivo”, La Prensa, lunes 15 de octubre de 1934, No. 7,934, pág. 6, año XXI. 1451 1452 Ídem. 402 creencias personales, con lo que lo único que se conseguía era deformarla y encubrirla.1453 Cuando todavía se creía que Krishnamurti podía llegar a El Salvador, ya se encontraba bastante distanciado de la teosofía, por lo que La Prensa con un sentido previsor publicó un artículo titulado: “Krishnamurti declara que no es teósofo ni cristiano”, con el objeto de que los teósofos salvadoreños no fueran a ser sorprendidos como los mexicanos, país donde declaró que no profesaba tales creencias y que tampoco era un filósofo hindú con una doctrina propia. Krishnamurti cuando estuvo en México dijo que él hablaba como un simple individuo y que las religiones, partidos políticos y sectas sólo servían para dividir a los hombres y explotarlos. En esa ocasión, el teatro Hidalgo fue abarrotado casi en su totalidad por un gran número de teósofos que al escucharlo, desilusionados opinaron que había sido prácticamente una conferencia en contra de la teosofía. 1454 Krishnamurti después de su separación con la Sociedad Teosófica adoptó una actitud casi anárquica, al decir que no creía en la institución de la familia, ni en la idea de “patria”, porque todo este sistema estaba organizado para establecer un dominio sobre el individuo. Al mismo tiempo, mencionó que tanto la división de clases sociales, como los prejuicios raciales eran una estupidez.1455 Ahora bien, una vez expuestos estos conceptos, a continuación presentamos sus reflexiones acerca de la existencia de Dios, ya que en ese momento era un tema al cual se le daba mucha relevancia. 2.2- Krishnamurti ante el problema de la existencia de Dios: Uno de los artículos más reveladores que se publicó en el Diario Nuevo fue “¿Cree usted en Dios?” Que precisamente fue la pregunta que se le formuló a Krishnamurti en una entrevista realizada por el editor del Advance Austaralia New Service. Primero explicó que una creencia era algo que no se podía comprobar sino Jiddu Krishnamurti, “La vida como objetivo”, La Prensa, viernes 19 de octubre de 1934, No. 7,403, pág. 6, año XXI. 1453 “Krishnamurti declara que no es teósofo, ni cristiano”, La Prensa, lunes 4 de noviembre de 1935, No. 7,886, pág. 3, año XXI. 1454 1455 Ídem. 403 que era una simple esperanza, una idea o un anhelo preconcebido. Para él, creer o no creer en Dios no tenía la menor importancia, ya que vivir genuinamente era estar en contacto con la realidad objetiva.1456 Krishnamurti pensaba que el hecho de que la humanidad hubiese utilizado tradicionalmente la palabra “Dios” con todas las repercusiones que esto conlleva en el ámbito intelectual, moral y sentimental, no significaba que éste realmente existiera, es decir, la mente podía liberarse de toda creencia que proviniera de la palabra, porque la palabra no era la cosa. En realidad, según Krishnamurti, cuando el hombre utiliza la palabra “Dios” no se está refiriendo a absolutamente nada, sino que sólo es una construcción eidética o imagen que él mismo se ha creado.1457 De este modo, la palabra producía una ilusión y no a un Dios, pero al eliminar esa ilusión, el hombre sólo se quedaba con lo que “es” y lo que “es”, es el miedo, la desesperanza o un goce fugaz, es decir, una realidad cambiante a la cual debe de adaptarse y es por eso que de forma similar a Heráclito sostenía: “El ser es el cambio”.1458 Para Krishnamurti, –en definitiva– la fe en Dios era una idea superficial impuesta por las condiciones y el ambiente, por miedo a la autoridad o producto de la imitación y aunque dijo que creía que había una inteligencia suprema que no podía describir, lo esencial, no era eso, sino vivir con rectitud moral para ser verdaderamente humano.1459 Ahora bien, si el tema religioso inquietaba en ese momento, también lo hacía el tema económico para el cual Krishnamurti también tenía algo que decir. 2.3- Krishnamurti ante el problema económico: En abril de 1935, el Diario Nuevo publicó un artículo de Krishnamurti titulado: “La reorientación del pensamiento” y subtitulado: “El filósofo que nos 1456 “¿Cree usted en Dios?”, Diario Nuevo, lunes 13 de octubre de 1934, No. 274, pág. 3, año I. Krishnamurti, Las enseñanzas de Krishnamurti, (recopilación de Mary Lutyens), Editorial Grijalvo S.A. de C.V., Edición no definida, México, 1996, págs. 143, 144 y 145. 1457 1458 Ídem. 1459 “¿Cree usted en Dios?”, Diario Nuevo, lunes 13 de octubre de 1934, No. 274, pág. 3, año I. 404 visitará”,1460 el cual claramente aseguraba su visita, pero al final debemos dejar bien establecido que no visitó Centroamérica sino que sólo algunos países de Suramérica entre los cuales se encontraban: Brasil, Uruguay, Argentina, Chile y Perú; de Norteamérica sólo visitó México. En Argentina tuvo una fuerte oposición de la Iglesia Católica, la cual quiso expulsarlo de ese país y en Chile, esta misma institución religiosa, quiso sabotearle sus conferencias.1461 El periódico La Prensa de El Salvador por su parte, publicó que el hindú a última hora había decidido no visitar el país y que se ignoraban sus motivos.1462 A falta de otra explicación y a manera de mera especulación que tendría que ser comprobada, pero que en todo caso, resultaría paradójica es que según uno de sus biógrafos, Pedro López Anadón, Krishnamurti, tenía como regla general no visitar países donde no hubiera un mínimo de democracia y pudiera expresar libremente sus ideas que en muchas ocasiones, eran críticas a los sistemas políticos totalitarios. En el siglo XX, la mayoría de países latinoamericanos estuvieron sometidos a regímenes dictatoriales, es por eso que, según dicho autor, no visitó España durante la dictadura franquista y fue el mismo motivo de porque sólo realizó una única gira por Latinoamérica.1463 De ser esto cierto, lo paradójico vendría por el hecho de que el mismo régimen promovía su pensamiento.1464 En el Suplemento La República se publicaron, por ejemplo, algunos de sus aspectos vitales, los cuales habían sido tomados de una “La reorientación del pensamiento (el filósofo que nos visitará) J. Krishnamurti”, Diario Nuevo, viernes 12 de abril de 1935, No. 428, pág. 3, año II. 1460 Pedro López Anadón, Krishnamurti, vida y obra, Editorial Oberon, Grupo Anaya S.A., Madrid, España, 2003, pág. 89. 1461 “Ya no llegará Krishnamurti a San Salvador”, La Prensa, martes 5 de noviembre de 1935, No. 7,886, pág. 1, año XXI. 1462 Pedro López Anadón, Krishnamurti, vida y obra, Editorial Oberon, Grupo Anaya S.A., Madrid, España, 2003, pág. 186. 1463 J. Krishnamurti, “El amor fundamento esencial de la educación”, (Tomado del libro La Educación como servicio.), Diario Nuevo, miércoles 10 de agosto de 1938, No. 1,442, pág. 3, año V. La Teosofía también tendría relevancia en el aspecto pedagógico: “Un padre inteligente debe tener presente que su hijo no es otra cosa que un “ego” que proporciona al padre la oportunidad de crear un buen karma, mediante el auxilio que le preste en su evolución. Tampoco ha de olvidar que el cuerpo joven de su hijo encierra un espíritu tan viejo como el suyo, al que debe mirar con respeto y amor”. 1464 405 entrevista realizada por un periodista de apellido Davidge. En la misma, se establecía que Krishnamurti era una persona muy agradable al conocerla en persona, que tenía una espiritualidad muy profunda y que contaba con una inteligencia notable. Además, expresaba que era muy educado y que poseía finos modales. Davidge lo describió como una persona sencilla a la cual no le gustaban los elogios.1465 A continuación, tratamos de sintetizar su pensamiento a través de una de sus más celebres frases: El hombre está cada día consultando más y más la Naturaleza; pero no comprende sus relaciones con los hombres. Y lo que impide la comprensión de sus relaciones con los demás hombres son las diversas supersticiones, las esclavitudes sociales y las explotaciones económicas del mundo.1466 Este pensamiento reflejaba, en primer lugar, que había en Krishnamurti una preocupación por encontrar una solución a las graves injusticias sociales a las que se veía sometida la humanidad en ese momento, por lo que Davidge le preguntó sobre si era necesario realizar un cambio radical en el sistema económico mundial –a lo que éste le respondió– que el primer paso era realizar “un cambio en la conciencia” de los explotadores,1467 muy similar a lo que Masferrer propuso en su doctrina del Mínimum Vital, cuando exhortaba a las clases privilegiadas del país a que mejorasen las condiciones de vida de las clases trabajadoras. Krishnamurti pensaba que esta transformación en las conciencias, era una responsabilidad tanto individual como colectiva y ofreció una solución al problema económico, desde una postura muy similar a la que tomó Salarrué en su discurso “Mi respuesta a los patriotas”. El hindú estableció que ni el capitalismo ni la vía revolucionaria eran respuestas adecuadas para solucionar la crisis: Ustedes han construido un sistema basado en la competencia y el egoísmo. Ahora deben aspirar no a la sustitución de un sistema por otro, sino a la re-orientación completa de sus mentes y sus corazones. Es de la mayor importancia que ustedes vayan hasta la raíz del problema. En el campo del pensar y el sentir, no deben ustedes depender de otros para guiarse deben estar enteramente solos, mientras que en el trabajo deben trazar sus planes juntos, colectivamente para vivir. Ahí se halla J. L Davidge, “La filosofía de Krishnamurti”, Diario Oficial, Suplemento La República, miércoles 12 de septiembre de 1934, No. 523, pág. 2, año I. 1465 1466 Ídem. 1467 Ídem. 406 el remedio. Ustedes pueden encontrar la libertad colocando la individualidad en el lugar que corresponde; y al realizar esa verdad, resolverán sus problemas sociales y económicos.1468 Krishnamurti aseguró que el nacionalismo tampoco era la respuesta al problema económico, insistía en que para poder cubrir las necesidades básicas de la humanidad, las naciones del mundo debían trabajar en equipo y formular planes de manera conjunta, olvidándose de esos sectarismos establecidos mediante fronteras ficticias que al final sólo impedían la configuración de una raza universal. Krishnamurti creía que se debían de fomentar principios filantrópicos como los de cooperación para el beneficio de todos.1469 En base a estas ideas, creemos que el gobierno de Martínez intentó implementar un regeneracionismo social y un cambio de paradigmas, no sólo del sistema económico injusto y opresor, sino también de la mentalidad de la población, en el sentido de no ser indiferentes ante los sufrimientos de los demás. Krishnamurti –aunque no lo dice expresamente– critica el sistema capitalista por crear una explotación artificial de unos sobre otros, sistema que, según él, se basa en la búsqueda inagotable de satisfacción, por lo que era necesario un cambio no sólo para una pequeña élite sino que de toda la humanidad, pero este cambio exigía también hacer reformas materiales en las condiciones de vida de los barrios pobres, en suprimir las desigualdades sociales, etc., lo cual, para Krishnamurti, era noble, pero al mismo tiempo insuficiente, ya que de esta forma sólo se atacaban los síntomas de la verdadera enfermedad.1470 Para Krishnamurti, no era suficiente realizar reformas sociales, porque al convertir a las personas en propietarios de un terreno, esta propiedad conllevaba a crear distinciones de nacionalidad, conciencia y clase, por lo que el problema volvía a comenzar. Esto según él, era el mismo caso de un religioso que sigue un dogma, que piensa que cuando todo el mundo crea como él, todo será perfecto. El problema es que todas las religiones distintas a la de él, piensan de la misma manera, J. L Davidge, “La filosofía de Krishnamurti”, Diario Oficial, Suplemento La República, miércoles 12 de septiembre de 1934, No. 523, pág. 2, año II. 1468 1469 Ídem. 1470 Ídem. 407 por tanto, algo que en teoría es un ideal ético correcto pasa a causar divisiones. La solución, entonces, no era reformar las religiones, sino ver en ellas su absurdo, porque mientras haya creencias habrá divisiones.1471 Para Krishnamurti, había que crear una nueva sociedad, un nuevo Estado y una nueva conciencia en donde no existiera la explotación y el dominio en base al afán de posesión, de lo contrario, las naciones siempre continuarían en sus luchas fratricidas tanto internas como externas.1472 Lo importante era tratar de armonizar la relación entre el interés individual y el colectivo, porque únicamente se podía actuar en relación y es por eso que sostenía: “Este yo es tanto lo colectivo como lo individual”.1473 A continuación veremos como su pensamiento influyó directamente en personajes muy importantes de la época como: Salarrué, Juan Felipe Toruño y Hernández Martínez. 2.4- Influencia de Krishnamurti sobre Salarrué: Salarrué en un pequeño estudio sin fecha reconoció la influencia que Krishnamurti ejerció sobre él. El artista salvadoreño pensaba que, para Krishnamurti, el problema del mundo era el problema del individuo y que nadie podía darnos la verdad sino que había que obtenerla por el propio esfuerzo. Salarrué expresó que la filosofía de Krishnamurti constituía el “eterno presente” o la “vida vital”. Krishnamurti a nuestro criterio, ofrecía una vía muy similar a la de Zaratustra de Nietzsche cuando dice: “yo no los incitó a estar en contra de nada o a seguirme sino a comprender la verdad, la vida misma”.1474 En la dimensión artística, Salarrué también fue profundamente influenciado por Krishnamurti, sobre todo, en el 1471 Ídem. “De una plática de Krishnamurti”, La Prensa, lunes 8 de abril de 1935, No. 7,677, pág. 5, año XXI. 1472 Krishnamurti, Las enseñanzas de Krishnamurti, (recopilación de Mary Lutyens), Editorial Grijalbo, S.A. de C.V., Edición no definida, México, 1996, págs. 247 y 248. 1473 Salvador Salazar Arrué, “Marginando ideas de Krishnamurti” 3 hojas mecanografiadas sin fecha; de la obra personal del autor, bajo la clasificación C-SAL (O1.ES.F24.2) en el museo de la palabra y la imagen. 1474 408 aspecto “creativo” y no “imitativo” del arte. Esto se demuestra en su artículo “El arte nuevo”, en el cual transcribió el siguiente pensamiento de Krishnamurti: Donde halla conformidad, imitación o seguimiento de un modelo, allí tiene que faltar naturalmente la vida creadora; y sólo en la verdadera vida creadora, es decir, en la inteligencia despierta, es donde existe el gozo y la exaltación de vivir. Con la diaria conformidad, con la continua contracción e imitación, habéis impedido o estorbado la expresión de la verdadera vida creadora. Con la expresión “vida creadora”, me refiero, no solo al producto del pensamiento como idea, que expresáis en la poesía o en un lienzo o en la acción, sino a ese impulso creador mismo que está más allá de todas las formas, ideas o expresiones.1475 Salarrué afirmó que lo que aprendió de Krishnamurti, fue simplemente a ver mejor. En base a sus ideas, hizo un símil muy interesante, dijo que el “proyecto de una vida”, podía compararse al proyecto de una escultura, a la cual cuando se le empieza a dar forma, puede ser transformada una y mil veces, pero cada vez que se le dé un golpe se le está dando una forma definitiva, por lo que había que proceder con mucha prudencia, porque aquellos detalles eran para la eternidad en la persecución de la obra más sublime y seria.1476 En este sentido, a nuestro juicio, el pensamiento de Krishnamurti introdujo en El Salvador la necesidad de llevar a cabo un nuevo proyecto de vida con repercusiones tanto en ámbito individual y como en lo social. Sin extendernos mucho sobre Salarrué, quisiéramos decir que dentro de su biblioteca personal podemos encontrar obras como Ariel de José Enrique Rodo y la Química oculta de Annie Besant, asimismo, a través de su vida desarrolló un estudio propio de la filosofía. En sus notas podemos encontrar referencias dispersas sobre sus influencias indostánicas que se combinaban con mitologías indígenas.1477 También demuestra un aprecio por la metafísica especulativa en contra del materialismo positivista, proponiendo un concepto integrador de “metafísica”, al Salvador Salazar Arrué, “El nuevo arte”, Boletín de la Biblioteca Nacional, Época 11, noviembre de 1933, No. 11, pág. 30. 1475 1476 Ídem. Ejemplos: Existe una carta sin fecha dirigida a su amiga María de Baratta con el título: “Carta de mayo, a María de Baratta y algo sobre el indio lempa, la india ulúa y la sinfónica integral, bajo clasificación SV-MUP1.I (1.2/F31.1); Vilano: Breve ensayo sobre filosofía inductiva bajo clasificación SV-MUP1.I (1.2/F37.2) o puntos de metafísica: La Evan Ilasión (maya), bajo clasificación SV-MUP1.I (1.2/F37.1) todos en el museo de la palabra y la imagen. 1477 409 decir que ésta “no es ciencia, ni arte, ni filosofía, ni una religión, por una razón muy sencilla de entender: porque es todo a la vez”. Salarrué entiende que dentro de lo “metafísico” también cabe hablar del estudio de lo normal y lo sobrenatural.1478 Además de su interés por el pensamiento de Krishnamurti y Besant, puede comprobarse como para los años treinta también tenía una estrecha amistad con la teósofa chilena Gabriela Mistral. Mistral le dedicó algunas palabras en las cuales elogiaba su prosa mística, a la cual calificó de muy original y culta y “con intuiciones estupendas de lo indígena”:1479 Los teósofos dirán, afirmados en el documento de estas historias que Salarrué hace cuando quiere “el hombre” cuando se le ocurre el gnomo soterrado cuando le acomoda, el de aquel ángel brahmánico. Extraño libro de cuentos y a pesar de lo inefable que corre por él, tan claro su esoterismo como los metales que en esta misma norma saben ser lucientes y secretos.1480 Salarrué por su parte al referirse a la futura premio nobel de literatura dijo lo siguiente: Gabriela Mistral que no ha sido nunca Lucila Godoy (nombre real de Gabriela Mistral), no es ni gorda ni flaca: es fuerte. Fuerte de cuerpo y de alma, a lo largo y a lo ancho, y en la tercera y en la cuarta dimensión (…) Toda ella es perfectamente auténtica; y, cuando uno la conoce en el sentido social de la palabra, no ha defraudado en nada (…) habla sencilla y persuasivamente, con ideas; y sus palabras están formadas con una mitad de cerebro y otra de corazón.1481 2.5- Influencia de Krishnamurti en Juan Felipe Toruño: Salarrué no era el único intelectual sobre quien Krishnamurti había ejercido alguna influencia, Juan Felipe Toruño, en el Diario Latino también publicó algunas de sus impresiones sobre él. Estableció que era un “brahmán” adorador del sol y un Salvador Salazar Arrué, “Espectroscopio”, (Una columna de Salarrué: anotaciones, comentarios y especulaciones en la Metafísica), sin fecha, bajo clasificación SV-MUP1.I (1.2/F20.1) en el museo de la palabra y la imagen. 1478 1479 “Juicio sobre Salarrué”, Diario Nuevo, viernes 14 de junio de 1935, No. 479, pág. 3, año II. 1480 Ídem. Salvador Salazar Arrué, “Gabriela Mistral (retrato)”, La Nación, San Miguel, domingo 4 de junio de 1939, No. 4,469, pág. 3, año XVIII, tomo 65. 1481 410 pensador que había revolucionado el sentido filosófico de la vida en Occidente. Además, consideraba que era un intelectual de gran formación autodidacta.1482 Toruño creía que las doctrinas y principios de Krishnamurti se escapaban al análisis racional y que su obra, en ese momento, llegaba a lo sumo a unos diez libros, los cuales para algunos eran una serie de tonterías y contradicciones, pero para otros, una filosofía muy profunda que consistía en buscar la verdad y alcanzar la felicidad, sólo que no en un sentido hedonista o materialista del término, sino que desde una visión espiritual. Toruño en oposición al positivismo, sostenía que el “nuevo hombre” debía de buscar un conocimiento que fuera más allá de lo probatorio y que dicho conocimiento era el del mundo astral, al cual los matemáticos llamaban: espacio-tiempo.1483 En realidad, a propósito de este comentario, es interesante destacar que Krishnamurti llegó a ser amigo íntimo del físico norteamericano David Bohm (1917-1992),1484 quien realizó importantes descubrimientos en el campo de la mecánica cuántica, incluso, llegaron a ser coautores del libro Más allá del tiempo, el cual surgió como una serie de diálogos que tuvieron entre ellos en Estados Unidos e Inglaterra en 1980. Se cree que Bohm superaba al positivismo por el carácter culto y filosófico de su obra.1485 Precisamente, Toruño, pensaba que para superar el positivismo el “nuevo hombre” debía estar más allá de todos los métodos, escuelas, sistemas y disciplinas, que su principal preocupación debía ser la causa que le dio origen a todo, a la que Toruño denominó “noúmeno”, manifestando que el gran problema de la humanidad, en ese momento, era el del conocimiento. Al parecer, Toruño también estaba influenciado por el “imaginismo” del francés Pellerín quien intentó anular el Juan Felipe Toruño, “Un filósofo poeta brahmán: J. Krishnamurti”, Diario Latino, sábado 10 de junio de 1939, No. 14,688, pág. 3, año XLVIII. 1482 1483 Ídem. Pedro López Anadón, Krishnamurti, vida y obra, Editorial Oberon, Grupo Anaya, S.A, Madrid, España, 2003, pág. 22. 1484 David Bohm et al, Más allá del tiempo, Editorial Kairos S.L., 1ª Ed., Barcelona, España, 2006, pág. 7. 1485 411 intelectualismo basado en el desarrollo de las ideas mediante conceptos, sustituyéndolo por la intuición.1486 Toruño también se vio muy influenciado por el irrealismo del literato irlandés James Joyce quien, según él, escribía en contra de la lógica y la expresión correcta. En este sentido, la teosofía buscaba una apertura más humanística, ética y filosófica de la humanidad, incluso, repitió algunos de los aforismos morales que Martínez daba en sus conferencias, como el de “no hagas a otro lo que no quieras que te hagan a ti” y “amaos los unos a los otros”, ya que para los teósofos de la época, en eso consistía el verdadero humanismo.1487 2.6- Influencia de Krishnamurti sobre Maximiliano Hernández Martínez: Krishnamurti también influyó de forma clara en Martínez, sobre todo, en sus concepciones sobre democracia, evolución de los pueblos y vitalismo. Martínez adoptó el principio krishnamurtiano de: “la consecución de la vida es una experiencia absoluta final”. Esta idea fue vertida por Krishnamurti en un poema titulado “El canto a la vida”, en el que establecía que el individuo debía vivir en armonía con el mundo en cuanto deseos, sentimientos y pensamientos, es decir, no debía tratar de saciar sus propios deseos en detrimento del mundo y lo mismo aplicaba para los pueblos, ya que el concepto de “democracia” estaba íntimamente ligado al movimiento antiimperialista, que luchaba por el respeto a la vida de otras naciones.1488 Este aforismo implicaba que el hombre tenía dos opciones: vivir en el reino del egoísmo o vivir en el reino del altruismo. Este último, según Martínez, era el que predicaba la teosofía. Para el militar, Krishnamurti, vivía la vida en la que no había más que una sola causa, por lo tanto, todas las demás formas de vida provenían del mismo principio que convertía a todas las manifestaciones del “ser divino” en 1486 Ídem. 1487 Ídem. Maximiliano Hernández Martínez, “Evolución de los pueblos”, AGN, sección: familiares y personales; Fondo: MHM, serie: 05, pláticas doctrinales; Caja 1, Exp. 16, folio 4, martes 25 de febrero de 1941. 1488 412 hermanas. En este mismo sentido, todo lo que se observaba en la naturaleza eran formas de la “vida divina” que iban en evolución. Para Martínez, era por esta razón que la filosofía de Krishnamurti consistía en predicar y practicar el amor universal:1489 Krishnamurti, pues, ha contemplado el dolor del mundo, lo ha sentido, le ha ocasionado dolor y lo ansía; clama, pide una vida mejor para este mundo. ¿Por qué? Porque ve que las infinitas vidas que se manifiestan en este mundo son chispazos de la misma causa y aquel pueblo y este pueblo y aquel otro están poblados por vidas que están haciendo su evolución; y esa vida infinita que Krishnamurti quiere que se perfeccione en pensamientos y sentimientos es para que un día no muy lejano esa vida infinita se manifieste entre los hombres.1490 Martínez también se interesó mucho por el pensamiento de Krishnamurti, en cuanto al tema del control de las emociones, creía que en el ser humano existía una fuerza dual entre el deseo de posesión y el de no posesión. El control consistía en la disciplina, afirmación y negación entre esta dualidad, es decir, para Martínez, el hombre vivía su vida según como él creía que era correcto vivirla, pero nunca se sentía satisfecho con nada del mundo tal y como era y es por eso que luchaba por obtener algo “mejor”. Esta dualidad se explicaba porque existía, según Martínez, una tensión entre lo que somos en la actualidad, algo “imperfecto” y lo que anhelamos ser en el futuro algo “perfecto”.1491 La solución al problema era, entonces, eliminar esta dualidad que se podía simplificar en “el bien” y “el mal” mediante la persecución de las emociones y pensamientos nobles, en esto consistía la vida, en salir triunfadores de esta lucha entre el mundo “egoísta” y el “altruista”. El primero traía como consecuencia el odio, la guerra, la codicia, la saña, el crimen, el pecado y todo lo malo del mundo, el segundo, traía el amor, la bienaventuranza y el servicio a los demás, valores que debíamos cultivar, pero de una forma experiencial y no literaria o intelectual, o en 1489 Ídem. 1490 Ibíd., folio 6. Maximiliano Hernández Martínez, “Dualidad del ser humano: análisis del artículo de la revista Darma titulado: de las enseñanzas de Krishnamurti”, AGN, sección: familiares y personales; Fondo: MHM; serie: 05, pláticas doctrinales; caja 2, Exp. 36; folios 1 y 2, jueves 8 de enero de 1942. 1491 413 otras palabras, había que transmutar el mal en bien para crear una sociedad perfecta.1492 Lo interesante de todo esto, es que a pesar de las declaraciones de Krishnamurti y que no llegó al país, muchos de sus seguidores salvadoreños y de Centroamérica continuaron considerándolo como una “autoridad” en temas filosóficos, religiosos y económicos, sólo que ya no bajo la imagen de un “mesías” o “redentor” sino que más bien de la de un simple “amigo”.1493 Ahora bien, si Krishnamurti fue importante dentro del imaginario teosófico salvadoreño, no menos lo fue su compatriota Jinarajadasa quien en 1938 visitó el país por segunda ocasión. A continuación damos cuenta de ello. 3. Segunda gira de Jinarajadasa a América Latina, su visita a El Salvador y difusión de su pensamiento en medios oficiales y otros periódicos centroamericanos, 1938: La segunda visita de Jinarajadasa a El Salvador en 1938 revistió una gran relevancia, ya que se dio en el contexto de la presidencia de su colega Hernández Martínez. Es importante señalar que aún mucho antes que Jinarajadasa realizara su primera gira latinoamericana, ya había antecedentes de viajeros teosóficos en la región, nos referimos a Mario Roso de Luna, (1872-1931) quien también fue un masón muy importante, iniciado por el Gran Oriente Español de Sevilla, el cual era vigilado por la Gran Logia Independiente Española. Roso de Luna realizó dicha gira que comprendió: Argentina, Chile, Uruguay y Brasil entre los años 1909 y 1910, de la cual publicó en dos tomos, su obra Conferencias teosóficas en América del Sur, (1911).1494 1492 Ibídem., folio 3. Arturo Montesano Delchi, “No es Krishnamurti un redentor sino un amigo”, La Prensa, sábado 22 de diciembre de 1934, No. 7,512, pág. 7, año XXI. “Krishnamurti no puede ser responsable por todo lo que se ha dicho de él, ni de cómo se le ha presentado. Él sólo se responsabiliza de sus propias afirmaciones en las que no se hallará nunca la palabra mesías, sacerdote, profeta, rey, instructor, redentor u otras similares; pero si se hallará la palabra amigo usada sin parsimonia (…) quién esté interesado en conocer a Krishnamurti que lea sus escritos, los publicados a partir del principio de agosto de 1927, y que haga un pequeño esfuerzo para comprenderlo, particularmente en lo que aparece vago e indefinido”. 1493 Mario Roso de Luna, Del árbol de las hespérides. Cuentos teosóficos españoles, Colección el árbol sagrado, Círculo Latino, S. L. Editorial, 1ª Ed., Barcelona, España, 2006, pág. 8. 1494 414 Cuando Jinarajadasa estaba próximo a venir por segunda ocasión, en el Diario Nuevo se anunció que mediante sesión extraordinaria de la Asamblea Plenaria de las Logias Teotl y Karma, ambas con sede en la ciudad de San Salvador, se conformó un comité teosófico pro-recibimiento, el cual quedó integrado por las siguientes personas: Emilio Narváez García (presidente), Rafael Coto Romero (sindico), Juan Tavalera Crespo (pro-secretario), Emilio Fuente (tesorero) y Wenceslao Villalta (secretario). 1495 Una segunda noticia sobre este mismo asunto, reveló de forma contundente la íntima relación que existía entre el Presidente Hernández Martínez y las logias teosóficas mencionadas, ya que la nota periodística, además de aclarar que se habían constituido subcomités en el seno del comité referido, los cuales eran los de recaudación, gestiones, propaganda y protocolo,1496 informó que la comisión de gestiones sería la encargada de presentarse ante dicho mandatario “con el objeto de pedirle su ayuda en todos los preparativos que se estaban realizando”.1497 En sesión celebrada el día sábado 21 de mayo de 1938 en casa de Juan Felipe Toruño, dicho comité, dio a conocer que Jinarajadasa dictaría cinco conferencias en el país, información que había sido remitida por la logia teosófica con sede en la capital de Costa Rica:1498 De conformidad con una comunicación llegada de la logia de San José de Costa Rica (sede de la Secretaria General de la Sección Centroamericana), la cual a su vez transcribe otra nota recibida de La Logia Central Internacional con asiento en 1495 “Viene Jinarajadasa”, Diario Nuevo, jueves 19 de mayo de 1938, No. 1,373, pág. 1, año V. “En agosto llegará el filósofo Jinarajadasa”, Diario Nuevo, martes 12 de julio de 1938, No. 1,419, págs. 1 y 2, año V. Las sub-comisiones quedaron conformadas de la siguiente manera: Recaudación: José Trabanino (hijo), Roberto H. Banderas, Salvador Sagastizado, Salvador Brizuela, Carlos Gil, Alicia Soriano y Ofelia Montalvo; Gestiones: Andrés Soriano, Melecio Mejía Alvarado, Hugo Rinker y Rafael Coto Romero; Propaganda: Gonzalo Moreira, César Ojeda Barrios, Guillermo Argueta Bernal, Antonio Monterrosa, Zoila de Cañas, Ernestina de Chavarría, Alicia Soriano, Rafael Salinas y Rafael Coto Romero y Protocolo: Julio Enrique Ávila, Andrés Soriano, Juan Tavalera Crespo, Manuel Basilio Escobar, Federico Rinker, Roberto Agspurg, entre otros. Esta última sería la encargada de atender a Jinarajadasa. 1496 “El viaje de Jinarajadasa, mañana celebrará sesión el comité que prepara su llegada”, Diario Nuevo, lunes 6 de junio de 1938, No. 1,388, pág. 1, año V. 1497 “Cinco conferencias dará Jinarajadasa”, Diario Nuevo, sábado 21 de mayo de 1938, No. 1,375, pág. 1, año V. 1498 415 Londres, se desprende que el filósofo hindú únicamente daría cinco conferencias en esta capital sobre temas universitarios, filosóficos y educativos.1499 Los miembros de las cuatro comisiones especiales formadas tomaron posesión de sus respectivos cargos el día 12 de agosto de 1938 y se proyectó una sesión de carácter extraordinario que se celebró el día 19 de agosto de 1938 cuyo programa fue el siguiente: 1º apertura de la sesión extraordinaria presidida por los presidentes de las logias, 2º conferencia doctrinaria sobre el tema “la fraternidad” por el miembro Juan Salvador Brizuela, 3º lectura de la nómina de los miembros que constituían las cuatro comisiones nombradas, 4º toma de protesta de los miembros nombrados por las logias, 5º entrega de diplomas a los nuevos miembros de la logia Teotl expedidos por la Secretaria General y 6º discurso de clausura por el Presidente de la Logia Teotl.1500 Las logias Teotl y Karma en otra sesión extraordinaria realizada en San Salvador el día miércoles 7 de septiembre de 1938 tomaron importantes resoluciones referentes a la recepción de Jinarajadasa en el país: 1º se dispuso que la entrega de credenciales se hiciera por la comisión de recaudación, 2º se nombró una comisión que se encargaría de gestionar ante las autoridades superiores mayores facilidades para su entrada en el país y todo lo relacionado con su alojamiento y 3º se acordó hacer una activa propaganda en todos los periódicos del país, sobre todo, lo referido a la difusión de su pensamiento.1501 Es importante destacar que tal y como lo señala Marta Casaús, los congresos internacionales funcionaron como mecanismos de ampliación y difusión de todas estas nuevas ideas que circulaban con bastante fluidez y que se querían implementar en América, Europa y Asía.1502 El nombre de las cinco conferencias fueron las 1499 Ídem. 1500 “Sesión de la logia Teotl”, Diario Nuevo, jueves 18 de agosto de 1938, No. 1,449, pág. 1 y 5, año V. “Preparativos de los teósofos para recibir al filósofo Jinarajadasa”, Diario Nuevo, jueves 8 de septiembre de 1938, No. 1,467, pág. 1, año V. 1501 Marta Casus, “El vitalismo teosófico como discurso alternativo de las élites intelectuales centroamericanas en la década de 1920 y 1930. Principales difusores: Alberto Masferrer, Carlos Wild Ospina y Porfirio Barba Jacob”, REMHLAC. Vol. 3, Nº1, mayo 2011-noviembre 2011, págs. 3 y 4. 1502 416 siguientes: 1) “La teosofía y el destino de la humanidad”, 2) “Los niños instrumentos de Dios”, 3) “La nueva humanidad de la intuición”, 4) “Principios de belleza” y 5) “La ciencia y la mente divina”.1503 Quisiéramos aclarar que estas últimas dos conferencias no aparecen publicadas en ninguno de los tabloides consultados, lo cual no quiere decir que no fueron desarrolladas, la explicación viene dada porque fueron de carácter “esotérico”, es decir, sólo se pudo asistir a ellas mediante invitación privada por tarjeta y su divulgación fue restringida al público en general.1504 Jinarajadasa además de El Salvador en octubre de 1938, 1505 también visitó Guatemala, Nicaragua, Costa Rica1506, Honduras y Panamá. El viaje inició en el puerto de La Guaira en Venezuela en donde tomó el tren que lo trajo a Centroamérica; a nivel de América Latina inició sus conferencias en Brasil después de visitar Portugal, país al cual llegó procedente de la India inglesa, en donde inició su gira el 2 de enero de ese mismo año, aunque no pudo visitar España como tenía previsto. Su estadía en Brasil fue durante el mes de febrero, según sus mismas palabras, era el país del continente que más le interesaba conocer, ya que éste era donde reencarnaría en su próxima vida.1507 El gobierno de Brasil le auspició su moderno sistema de enseñanza para niños aplicado al sistema Montessori, creado precisamente por la teósofa María Montessori que, según la noticia que encontramos, para esa época, era el más aceptado en ese país. Después de Brasil recorrió los países de Uruguay, Paraguay, Argentina, Chile, Perú, Bolivia, Colombia y Venezuela, visitando sus capitales. En 1503“El viaje de Jinarajadasa, mañana celebrará sesión el comité que prepara su llegada”, Diario Nuevo, lunes 6 de junio de 1938, No. 1,388, pág. 1, año V. “Jinarajadasa en Centroamérica” Diario Latino, sábado 1º de octubre de 1938, No. 14,475, págs. 1 y 12, año XLVII. 1504 “También visitará la República de Honduras el doctor Jinarajadasa” Diario de Occidente, sábado 20 de agosto de 1938, No. 8,243, págs. 3 y 7, año XXVII. 1505 “Jinarajadasa en Centroamérica” Diario Latino, sábado 1º de octubre de 1938, No. 14,475, págs. 1 y 12, año XLVII. Las conferencias de Jinarajadasa en Costa Rica fueron radiotransmitidas por la estación Athenea y el ciclo fue organizado por el centro de estudios teosóficos Virya primera logia teosófica fundada en Centroamérica el 1º de junio de 1904. 1506 “Vendrá a Honduras el Dr. Jinarajadasa”, El Cronista, Tegucigalpa, Honduras, miércoles 10 de agosto de 1938, No. 7,226, págs. 1 y 8, año XVII. 1507 417 un principio, no tenía pensado visitar Bolivia, Perú y Venezuela por ser países que se consideraba ignoraban la importancia de los estudios teosóficos, pero al parecer algunos estudiantes de teosofía de esos países le solicitaron su presencia, a lo cual él accedió.1508 Lo relevante de este dato, es que por este cambio en el itinerario acortó su presencia en cada república centroamericana. Después de visitar la mencionada región, partió para México, y luego visitó algunos países del Caribe dentro de los cuales se encontraban: Cuba, Jamaica, Puerto Rico, Santo Domingo y Haití, 1509 pero ahora que conocemos el largo recorrido que realizó Jinarajadasa pasaremos a explicar la relación que existió entre la teosofía y la masonería y como ambas ideologías tuvieron fricciones con la religión católica del área. 3.1- Vinculación entre teosofía y masonería1510 y debate entre teosofía-masonería e Iglesia Católica: En Honduras, Jinarajadasa dictó algunas conferencias de su gira latinoamericana, causando singular interés la denominada: “La religión y la filantropía de la Francmasonería” (para una tenida blanca), 1511 a la cual únicamente se pudo asistir mediante invitación especial, pero que fue reproducida en el Suplemento del Diario Oficial La República de El Salvador el 30 de diciembre de 1938. La Conferencia fue desarrollada1512 en el seno de la Logia Igualdad Nº 1, madre de la masonería hondureña y transmitida por la estación H.R.N. (La voz de 1508 Ídem. Osberto Wyld Ospina, “Personalidades que nos visitarán”, El Liberal Progresista, Guatemala, miércoles 26 de octubre de 1938, No. 5,668, págs. 3 y 7, año V. 1509 Esteban Cortijo Parralejo, Vida y obra de Mario Roso de Luna, Tesis presentada para obtener el grado de Doctor en Filosofía, Universidad Complutense de Madrid, 1991 pág. 180. “Para Roso la teosofía y la masonería constituían los últimos caminos que había dado la historia occidental para iniciarnos en la vida espiritual más allá de las formulaciones religiosas, integrando, por tanto, la inspiración espiritual que afirma la inmortalidad y la trascendencia en conformidad con la idea gnóstica que afirma la primicia del espíritu o inteligencia sobre cualquier otra clase de realidad material o física”. 1510 C. Jinarajadasa, “La religión y la filantropía de la masonería”, El Cronista, Tegucigalpa, Honduras, sábado 22 de octubre de 1938, No. 7,288, págs. 1 y 7, año XXVII. 1511 “La conferencia del Dr. Jinarajadasa”, El Cronista, Tegucigalpa, Honduras, lunes 17 de octubre de 1938, No. 7,283, pág. 3, año XXVII. 1512 418 Honduras).1513 La comisión para conducirlo al templo estuvo integrada por: René Sagastume, Carlos Aguilar Pinel y Salvador Moncada, demostrando la íntima relación que existía, en ese momento, en el istmo centroamericano, entre la masonería y la teosofía:1514 En Nicaragua piensan que el Dr. Jinarajadasa puede visitar además de Managua, la bella ciudad de Granada, en donde los teósofos y francmasones están listos para agasajarlo. Dudamos que tenga tiempo de hacer tal visita a Granada, aunque viaja por la vía aérea la mayoría del tiempo.1515 Las reacciones de la masonería hondureña ante la llegada de Jinarajadasa a ese país, fueron diversas, por ejemplo, Miguel Díaz Gómez, maestro de la logia masónica Estrella del Norte Nº 5, telegrafió al corresponsal del Suplemento del Diario Oficial La República, Salvador Moncada, quien cubría dicha visita, el siguiente mensaje: Deseando participar en las enseñanzas del filósofo Jinarajadasa en las conferencias que dictará en ese Oriente, la logia que represento ruega interesarnos porque sean transmitidas por radio, si no hubiera ningún inconveniente, así como procurar que venga a San Pedro Sula para tener la oportunidad de oírlo personalmente.1516 Por otra parte, el representante de la logia masónica “Miguel Paz Barahona”, Secundino López (secretario) solicitó por mandato de la misma, que Jinarajadasa dictará dos conferencias en dicha institución, una secreta y otra blanca, 1517 pero por otro lado, Moncada también dijo que otro masón de muy alta graduación, sin mencionar el nombre, lo había acusado de que lo que él escribía, era sólo una sarta de “necedades” que no eran creíbles para personas informadas como él, sino que Ángela Ochoa Velásquez “La voz del Dr. Jinarajadasa a través del micrófono”, El Cronista, Tegucigalpa, Honduras, lunes 17 de octubre de 1938, No. 7,283, pág. 6, año XXVII. El concepto que Jinarajadasa tendría de las religiones se vería en una doble composición racional-espiritual que conllevaría una búsqueda permanente de la divinidad que según la autora del artículo constituiría la esencia de la fraternidad que se promovía en los centros masónicos desde sus inicios aún en contra de las doctrinas disolventes y que esta fraternidad prevalecería al final del proceso evolutivo de la gran familia universal. 1513 Salvador Moncada, “Vendrá a Honduras el Dr. Jinarajadasa”, El Cronista, Tegucigalpa, Honduras, martes 11 de octubre de 1938, No. 7,278, pág. 3, año XXVII. 1514 1515 Ibíd., miércoles 10 de agosto de 1938, No. 7,226, págs. 1 y 8, año XXVII. 1516 Ibíd., jueves 25 de agosto de 1938, No. 7,239, pág. 6, año XXVII. 1517 Ídem. 419 eran puras mentiras de mentes hindúes atrasadísimas con respecto a los adelantos de la civilización occidental.1518 Al parecer Salvador Moncada, además de ser teósofo también era masón, lo que queda demostrado por las siguientes palabras dirigidas en su contra por el masón, a quien nos venimos refiriendo: “No deje al hermano Moncada, amigo (decía a otro masón), escribir más, porque nos estará exhibiendo a los hombres libres y de buenas costumbres”. De lo anterior, se deduce claramente que la posición de la masonería respecto a la teosofía no fue monolítica, es decir, hubo algunos masones que estuvieron en contra y otros a favor de la teosofía.1519 Jinarajadasa en dicha conferencia, tocó cuestiones intimas de la francmasonería, hizo una detallada narración de la evolución histórica de dicha institución a través de los siglos, desde su fundación en Inglaterra allá por el año 1717, cuando cuatro logias inglesas, ya existentes, constituyeron un solo organismo, aunque explicó que según la tradición, los inicios de la masonería en ese país habían sido desde la muerte del primer mártir cristiano San Albano, quien fue atormentado en el año 303 de nuestra era y que la introdujo en Inglaterra trayéndola desde Roma. 1520 Luego Jinarajadasa explicó los diferentes tipos de “libertades” que defiende la masonería, como la de tránsito, mediante el habeas corpus y la de expresión, siempre y cuando no se transgredan derechos de terceros mediante la difamación. Jinarajadasa en términos generales, expuso que la masonería defendía todos los derechos establecidos por las constituciones del mundo, ya que los masones consideran que éstos garantizan la autonomía del individuo contra las agresiones del Estado, por lo que la masonería se vería a sí misma, como defensora y promotora de los derechos de los oprimidos dentro de Estados que vulneran la libertad física o intelectual. El ejemplo clásico que mencionó fue el de la revolución francesa de 1789, la cual según los masones, constituye la cuna de la democracia moderna. En América Latina, Jinarajadasa dijo que los principales libertadores de los imperios español y portugués 1518 Ídem. 1519 Ídem. C. Jinarajadasa, “La religión y la filantropía de la masonería”, El Cronista, Tegucigalpa, Honduras, sábado 22 de octubre de 1938, No. 7,288, págs. 1 y 7, año XXVII. 1520 420 habían sido francmasones, entre los cuales estaban: Bolívar, San Martín, Santander, Miranda, O`Higgins, Belgrano, Rivadavia, entre otros. 1521 El teósofo-masón también analizó la situación político-social de la masonería en la década de los treinta, la cual ya había sido prohibida en países como: Italia, Alemania y Brasil, pese a no haber sido declarada ilegal por ninguno de ellos. Para Jinarajadasa, esto era un signo inconfundible de estados totalitarios,1522 que mantenían una gran hostilidad hacia dicha institución producto de concepciones erróneas. Además, sostenía que el otro gran enemigo de la masonería era la Iglesia Católica Romana que a través de la historia siempre la había atacado mediante dictámenes como los del Papa Clemente XII, quien en 1737 la declaró “anatema”, es decir, ser masón significaba ser blasfemo, inmoral, deshonesto y en general, todo aquello que estaba en contra de la justicia de Dios.1523 Ante los ataques de ésta última, Jinarajadasa argumentaba que la francmasonería era como una especie de religión, ya que los masones creían en un Dios, pero no al estilo de las religiones tradicionales, sino que era un Dios al cual se le daba varios nombres independientemente de la religión que cada miembro profesaba y que dependía de los diferentes grados de la masonería, siendo los principales: “Gran Arquitecto del Universo”1524 y “Gran Geómetra del Universo”, bajo los cuales todos los masones podían adorarlo como sus hijos, sin entrar en discusiones religiosas. La 1521 Ídem. “Abolición de la masonería en España”, Diario Nuevo, viernes 15 de marzo de 1940, No. 1,938, pág. 3, año VII. “La abolición de la masonería por el decreto del General Franco, se basa en ser sociedad secreta que rehúye la luz y el inscribirse como lo hacen las otras asociaciones de cualquier clase que sean; en la labor que la masonería ha realizado en España siempre de política revolucionaria y en que durante la pasada guerra apoyó totalmente al ejército rojo. El decreto establece la forma de prestar las correspondientes excusas para aquellas personas que no obstante haber sido masones no hayan incurrido en responsabilidad alguna”. 1522 C. Jinarajadasa, “La religión y la filantropía de la masonería”, El Cronista, Tegucigalpa, Honduras, sábado 22 de octubre de 1938, No. 7,288, págs. 1 y 7, año XXVII. 1523 Emilio Narváez García, “Mi oración patriótica por Centroamérica,” La Prensa, sábado 15 de septiembre de 1934, No. 7,341, pág. 3, año XXI. Es muy interesante analizar las hibridaciones que se dieron durante la década de los treinta entre las cuales podemos destacar la de Emilio Narváez García quién al igual que Martínez era vitalista, teósofo-antialcohólico y masón quién en el día de la independencia le dedico al Dr. Salvador Mendieta apóstol de la unidad centroamericana un artículo en el que expresaba: “Suprema voluntad creadora dad a Centroamérica días de esplendor y unidad…Oh Supremo Arquitecto del Universo: queremos para esta patria amada de nuestros mayores y de nuestros venerados antepasados, evolución rápida y brillante porvenir”. 1524 421 diferencia entre el Dios1525 de las religiones y el de la masonería, era que este último, no sólo había creado el mundo, sino que todavía se encontraba trabajando en él, moldeándolo hacia una forma mejor, es decir, hacia la perfección.1526 La razón que según Jinarajadasa daba la Iglesia Católica para atacarla, era que imitaba ciertas ceremonias sagradas, pero él sostenía que esto no era cierto, ya que la orden francmasónica no hacía otra cosa que reverenciar a Dios y a todas sus obras, pero lo que sí aceptaba era que en los altos grados, ciertas ceremonias eran muy similares a las de la Iglesia Católica, pero que esto no constituía un plagio, sino que eran rituales que existían en todas las religiones porque estaban basados en ciertas verdades fundamentales.1527 La acusación que hacían los gobiernos a la masonería, era que ésta era una organización política secreta dañina para los estados, pero Jinarajadasa afirmaba que la masonería jamás había sido acusada de tales hechos en Estados Unidos o Inglaterra, ya que en estos países se garantiza la libertad de los ciudadanos, inclusive, mencionó que los miembros de la familia real inglesa de esa época, eran masones. Para defenderla del clero, estableció que también había sacerdotes católicos que eran francmasones, lo cual significaba que dicha institución no estaba en contra de las enseñanzas de Cristo. Para Jinarajadasa, dentro del cristianismo, los católicos eran los únicos que atacaban a la masonería, ya que en los Estados Unidos muchos de los ministros de las iglesias protestantes también eran masones. 1528 Además, comentó que los católicos romanos tenían una orden fraternal ritualista secreta en Estados Unidos llamada “Caballeros de Colón” e incluso una orden de C. Jinarajadasa, “La religión y la filantropía de la masonería”, El Cronista, Tegucigalpa, Honduras, sábado 22 de octubre de 1938, No. 7,288, págs. 1 y 7, año XXVII. “El concepto masónico de Dios, es un Dios activo, con un grandioso plan de trabajo para poner orden en el desorden que la humanidad ha introducido en su propio plano. El permite crear el desorden porque no permite que nosotros, sus hijos seamos meramente esclavos de su voluntad pero al mismo tiempo nos permite que trabajemos con Él para crear un universo perfecto”. En esta definición de Jinarajadasa podemos observar como el Dios constructor de los masones se asimila mucho al Dios demiurgo del Platonismo que no crea la materia de la nada sino que fabrica el mundo a partir de la materia que ya existía, es decir que pone orden al desorden. 1525 1526 Ídem. 1527 Ídem. 1528 Ídem. 422 mujeres denominada “La Estrella de Oriente” bajo la supervisión de grandes logias masónicas que a pesar de que no eran masónicas, seguían una línea ritual muy similar a la masonería. Jinarajadasa admitió que estas acusaciones sólo podían haber sido ciertas en países como Francia o Italia antes del fascismo en donde algunos miembros habían utilizado la masonería para la obtención de beneficios personales en grandes negocios o con la ayuda de altos funcionarios de gobierno, además de influir en la dirección de dichos países, es decir, en algunos casos, la masonería trató de penetrar campos de acción socialmente relevantes como la economía y la política y fiscalizar secretamente las administraciones gubernamentales en función de sus propios intereses. También admitió que la masonería tuvo especial influencia en la política de los países hispanoamericanos.1529 El problema político de la masonería para Jinarajadasa, radicaba en la ausencia de principios democráticos de ciertos países, por ejemplo, dijo que en Suiza para noviembre de 1937 se llevó a cabo un plebiscito en donde se le preguntó a la población en general sobre si creían que dicha institución debía de ser suprimida por el Estado. En dicho referéndum, los ciudadanos suizos consideraron que la masonería no constituía ningún peligro y que por tanto, debía subsistir.1530 Para Jinarajadasa, la francmasonería se basaba en el precepto cristiano de que hay que amar al prójimo, por lo que una de sus misiones principales era practicar la caridad, primero con los hermanos masones y después con el resto de la humanidad; por lo que un verdadero masón era aquel que tenía ideales fraternales y caritativos y calificó a dicha doctrina, como un “evangelio de salvación colectiva”. Lo que sucedía para Jinarajadasa, era que la masonería por ser una institución humana como cualquier otra, tenía buenos y malos elementos, por tanto, no tenía que juzgarse exclusivamente por los actos de estos últimos:1531 La francmasonería nos acoge como hombres de honor, y en la rama de la francmasonería a que yo pertenezco, o sea la masonería mixta internacional, la que C. Jinarajadasa, “La religión y la filantropía de la masonería”, El Cronista, Tegucigalpa, Honduras, sábado 22 de octubre de 1938, No. 7,288, págs. 1 y 7, año XXVII. 1529 1530 Ídem. 1531 Ídem. 423 también admite mujeres1532, acoge a sus miembros mujeres como miembros de honor. Nos designa con nombres como: respetable, excelente, venerable, perfecto, nobilísimo, muy sabio, poderoso, ilustrísimo.1533 Jinarajadasa en sus conferencias combinaba masonería y teosofía, por ejemplo, explicó que la masonería, no era sólo una dramatización de esta vida, sino que también de las venideras, ya que según él, era necesario haber vivido muchas vidas sobre la tierra para poder cooperar con el trabajo que realizaba el “Gran Arquitecto” (ley de reencarnación), ya que una sola vida no era suficiente para poder construir el templo del “Gran Arquitecto”. Además añade: Cada logia masónica es un centro de influencias místicas por medio de las cuales el gran arquitecto irradia su sabiduría, fortaleza y belleza (…) mientras la humanidad continúe evolucionando hacia la perfección (ley de evolución) la masonería ha de existir para dar un mensaje de fraternidad.1534 Para contrastar estas ideas de Jinarajadasa, habría que decir que para el académico español Pedro Fernández, la interconexión entre teosofía y masonería, sólo se reduce a una afinidad de valores como: “la solidaridad, el librepensamiento y el progreso”, es decir, existe entre ambas únicamente una afinidad de objetivos como filosofías reaccionarias que abogan por un pensamiento tolerante frente a posturas autoritarias como la de la Iglesia Católica, 1535pero que tienen como principal dogma en común el de la “Fraternidad Universal”. Además, establece que ninguna de las dos constituye una religión y que de ningún modo se les puede acusar de “secretas” o “conspiradoras”. 1536 “Plática filosófica del Señor Presidente Hernández Martínez”, Diario Oficial, Suplemento La República, lunes 28 de septiembre de 1942, No. 2,817, pág. 3, año X. “Nosotros hemos deformado a la mujer, hemos hecho de ella un ser débil. A su vida le hemos dado una sola finalidad: la de ser un instrumento de placer. No hemos permitido que sus facultades espirituales, que son superiores a las nuestras se desarrollen con plenitud”. 1532 C. Jinarajadasa, “La religión y la filantropía de la masonería”, El Cronista, Tegucigalpa, Honduras, sábado 22 de octubre de 1938, No. 7,288, págs. 1 y 7, año XXVII. 1533 1534 Ídem. Pedro Víctor Fernández Fernández, Revista Azafea II, Teosofía y Masonería. Pensamiento y obra de Roso de Luna, Universidad de Salamanca, 1989, pág. 236. 1535 1536 Ibídem, pág. 245. 424 Establece que, incluso, algunos francmasones piensan que son complementarias, pero él piensa, que simplemente se asemejan en sus fines humanitarios y por las relaciones de amistad que se han dado entre sus miembros a través de la historia, pero señala que en cuanto ritos, símbolos y autoridades son muy diferentes, aunque aclara que en algunos aspectos como las juramentaciones, la teosofía a imitado a la masonería. 1537 Fernández, esencialmente, concluye que su aproximación se debe más al fondo que a la forma, es decir, se acercan más en las ideas que defienden que en cómo las defienden.1538 Jinarajadasa finalizó su locución con una antigua costumbre seguida por los francmasones de todo el mundo: circuló el cepillo de la viuda, el cual una vez despojado en Oriente, se ordenó por el serenísimo Gran Maestro de la Gran Logia de Honduras, que su producto fuera entregado a dos honorables damas presentes en el acto, para que éstas a su vez lo pusieran en manos de las directoras de la Casa del Niño como un obsequio a la masonería capitalina y recuerdo de la conferencia dictada.1539 Además, Jinarajadasa visitó las ruinas de Copán y la logia masónica de la ciudad de Santa Rosa, reunión a la cual todos los masones hondureños fueron invitados. Esta conferencia fue calificada por la prensa hondureña como “una defensa para la institución masónica”,1540 puesto que Jinarajadasa se encargó de aclarar muchos supuestos conceptos erróneos que se tenían sobre la misma, sobre todo, en cuanto a sus prácticas y rituales y a la idea de que la masonería era una enemiga irreconciliable del cristianismo.1541 El argumento era que, por el contrario, era una 1537 Ibídem, pág. 246. 1538 Ibídem, pág. 254. La Conferencia del Dr. Jinarajadasa” El Cronista, Tegucigalpa, Honduras, lunes 17 de octubre de 1938, No. 7,283, pág. 5, año XXVII 1539 1540 Ídem. “Secretos de la masonería” La Prensa, Managua, Nicaragua, sábado 3 de diciembre de 1938, No. 3,627, pág. 1, año VIII. Las ideas expresadas por Jinarajadasa sobre la masonería serían contradictorias con las ideas que predominaban en el istmo centroamericano, por ejemplo, en el referido periódico se estableció que uno de los secretos mejor guardados por los masones era que al ingresar una persona a dicha institución inmediatamente quedaba excomulgado por la Iglesia Católica y que se contaba con esta información gracias a las infidencias de algunos que habían salido de dicha asociación secreta. La ceremonia en la que se recibe un masón es muy extensa y hay 1541 425 práctica que cumplía con los preceptos cristianos y revestía un mensaje hacia los ministros y feligreses de las diferentes iglesias para que rectificaran esa visión llena de terror supersticioso que impedía la reconciliación espiritual entre masones y cristianos.1542 Es interesante contrastar el discurso de Jinarajadasa y de otros masones de la región, con el discurso de la Iglesia Católica en tiempos de la dictadura martinista, ya que para los católicos, el judaísmo internacional, la masonería y el comunismo, eran los principales enemigos a erradicar, quienes de una actitud ofensiva habían pasado a una posición interesada de paz y de peticiones de tregua. La interpretación del Santo Oficio era que el catolicismo organizado sobre la tierra, había renovado el espíritu cristiano y descubierto la actitud hipócrita de los masones que se acercaban a la feligresía mediante una actitud de “manos tendidas, pero puños cerrados”. 1543 Similar posición adoptó la Iglesia frente a la teosofía, incluso, Monseñor Belloso y Sánchez condenó a todos los teósofos y rotarios salvadoreños, determinando que era pecado inscribirse en las sociedades teosóficas, asistir a sus juntas y leer sus revistas o periódicos.1544 En la décima carta pastoral del 25 de diciembre de 1933, Monseñor Belloso y Sánchez, hizo del conocimiento de los feligreses salvadoreños que debían muchas preguntas del venerable maestro a los otros hermanos y al recipiendario… haciéndose la advertencia al postulante en su ceremonia de iniciación que ningún católico podía pertenecer a la masonería por lo que si no aceptaba dicho sacrificio se respetaría su decisión y jamás se revelaría su identidad. (Tomado del Libro: La Masonería contra España de Francisco de Luis.) “Actitud conciliadora de los enemigos de la Iglesia”, Criterio (Periódico de defensa de la fe católica), domingo 19 de septiembre de 1937, No. 265, pág. 1, año VI. También en El Salvador existen pruebas de la contradicción entre la iglesia católica y la masonería. “Consta muy seriamente en un libro escrito por el conocido masón Albert Lantoine, historiador autorizado por la masonería, miembro del Consejo Supremo de Francia, del rito masónico escocés quién se ha atrevido a dirigir una carta al Sumo Pontífice (1936) invitándole a patrocinar un armisticio entre masones y católicos. El libro ha hecho ruido “corriere de la Sera” (19 de Junio de 1937) le dedica un interesante artículo en el que el profesor Guido Manacorda denuncia las verdaderas intenciones de la masonería. La estratagema se descubre inmediatamente al comprobarse como el masón que propone la tregua no renuncia a ninguno de los principios que hacen condenable a la masonería convirtiéndola en enemiga irreconciliable de la iglesia. La tregua no sería sino para afrontar a los estados totalitarios, para luchar contra el fascismo como dicen los comunistas…” 1542 1543 Ídem. Monseñor Belloso condena a los teósofos y a los rotarios, La Prensa, miércoles 1º de febrero de 1933, No. 6,651, pág. 1, año XX 1544 426 considerarse como sospechosos para el catolicismo todos los miembros del International Rotary Club, porque se valían de medios benéficos para conseguir adeptos, también dio a conocer e