TEMA 6: LA REFORMA CATÓLICA

Anuncio
TEMA 6: LA REFORMA CATÓLICA1
Jesucristo está presente en la Eucaristía de modo único e incomparable. Está presente en efecto, de
modo verdadero, real y sustancial, con su Cuerpo y con su Sangre, con su alma y con su Divinidad.
Cristo, todo entero, Dios y hombre, está presente en ella de manera sacramental, es decir, bajo las
especies eucarísticas del pan y del vino.
La ruptura de la unidad de la Iglesia en el s. XVI supuso para las nuevas iglesias separadas la
pérdida de la presencia real de Jesucristo en la Eucaristía. La reforma que continuó en el seno de la Madre
Iglesia mantuvo los siete sacramentos instituidos por Cristo y buscó en los santos y en el arte el trato con
Jesús Sacramentado. El Concilio de Trento con sus definiciones dogmáticas, los grandes místicos del s.
XVI, o la exaltación barroca de la Presencia divina en la Eucaristía mediante autos sacramentales,
templos y música son prueba de ello.
Para ti se deriva una enseñanza: la comunión con el Cuerpo de Cristo que es la Iglesia se alimenta
de la Comunión sacramental. De ahí la importancia de que acudas los domingos a Misa.
1. EL CONCILIO DE TRENTO Y LA REFORMA CATÓLICA
a) Convocatoria del Concilio.
La reforma protestante produjo verdaderas heridas en la Iglesia y ésta respondió con la
convocatoria del Concilio de Trento (1545-1563), que fue urgido y apoyado por el emperador Carlos V.
Entre los teólogos destacaron los españoles de la Escuela de Salamanca (Dominicos) y los de la
recién fundada Compañía de Jesús.
b) Disposiciones disciplinarias del Concilio.
El Concilio decretó algunas reformas en la vida y disciplina de la Iglesia. Destacan:
1.- Creación de seminarios para la formación de los llamados al sacerdocio.
2.- Deber de residencia de los párrocos y de los obispos en sus parroquias y diócesis.
3.- Fortalecimiento de la autoridad de los obispos.
4.- Reforma de la moralidad del clero.
1
Apuntes elaborados a partir de los libros de texto de religión católica de la editorial Casalsen sus distintas ediciones. Esta
redistribución de temas y contenidos se hace para facilitar el trabajo en el aula y optimizar los recursos. Se ha usado también
el Catecismo YouCat.
5.- Especificación de la disciplina de los sacramentos.
6.- Fijar como texto oficial de la Biblia la traducción latina llamada “Vulgata” de S.Jerónimo.
7.- Emplear la lengua latina como oficial para el culto católico.
8.- Mantener el celibato de los sacerdotes.
c) Definiciones dogmáticas del Concilio.
Frente a las ideas protestantes el Concilio:
1.- Definió el valor dela Tradición para interpretar la Sagrada Escritura, como oposición
al libre examen.
2.- Estableció el Canon de la escritura, es decir, la lista de los 73 libros inspirados por el
Espíritu Santo, que constituyen la Biblia.
3.- Definió la doctrina sobre el pecado, el pecado original, la gracia, la salvación, los 7
sacramentos, el purgatorio, el culto a los santos...
d) Medios que empleó el Concilio para llevar a cabo la Reforma.
El Concilio estableció una comisión de seguimiento: la Sagrada Congregación del Concilio. Todos
los obispos del mundo tenían que enviar informes cada pocos años exponiendo el estado de sus diócesis y
cómo se cumplían en ellas los decretos conciliares.
En 1566 se publicó el Catecismo Romano, que serviría para que los párrocos tuviesen
instrucción suficiente y se pudiese dar catequesis a los niños. También se publicó el Breviario para la
oración de sacerdotes y religiosos. En 1570 se hizo pública la nueva versión del Misal Romano.
e) Frutos del Concilio.
Desde el Concilio hubo:
1.- Mejor cumplimiento de los deberes pastorales por parte de los obispos.
2.- Mejor selección de los candidatos para los cargos pastorales inferiores.
3.- Más interés por la formación espiritual y académica del clero.
4.- Mayor insistencia en que los párrocos enseñaran bien la doctrina cristiana y la predicaran.
5.- Más orden en las comunidades religiosas.
6.- Un gran impulso al arte cristiano.
7.- Mayor devoción a Jesús Eucaristía. La gran fiesta católica fue la celebración del Corpus
Christi.
8.- Se dio gran importancia a la Pasión del Señor. Comenzaron las procesiones de Semana Santa.
9.- La devoción a la Virgen se afianzó en el pueblo cristiano. Destacó la defensa del misterio de la
Inmaculada Concepción.
2. NUEVAS ÓRDENES RELIGIOSAS
a) Reforma del Carmelo por Sta. Teresa de Jesús y S. Juan de la Cruz.
Cuando Teresa de Ahumada (1515-1582) entró en el monasterio carmelita de la Encarnación no se
vivía la Regla primitiva de la Orden. Impulsada por Dios inició su reforma.
El convento de S. José en Ávila fue el primer monasterio reformado. Unía la vida eremítica con la
vida común. Como religiosas contemplativas las Carmelitas Descalzas se dedicaban y se dedican a la
oración y la penitencia, ofrecidas específicamente por la santificación de los sacerdotes.
La reforma masculina de los Carmelitas se inició en el convento de Duruelo con S. Juan de la Cruz
(1542-1591)
b) Fundación de la Compañía de Jesús por S. Ignacio de Loyola.
Iñigo de Loyola (1491-1556) fue soldado del emperador Carlos V. Herido en el sitio de Pamplona,
se convirtió al leer vidas de santos durante la convalecencia. Ya recuperado se entregó a una vida de
penitencia y oración, que trajo como fruto a la Iglesia la composición de sus famosos Ejercicios
Espirituales.
Siendo estudiante den París (1534) se le unieron otros compañeros con lo que fundó la Compañía
de Jesús. Paulo III aprobó la Orden en 1540. Su lema era “A MAYOR GLORIA DE DIOS”. Su fin
primordial consistía en la propagación de la fe católica. Escuelas, catecismos, Misiones entre infieles,
predicaciones..., todo servía a estos sacerdotes para llevar almas a su Rey y Señor, Jesucristo. Se
consideraban soldados al servicio de Dios.
c) Fundación de otras Órdenes religiosas.
S. Felipe Neri (1515-1595) fundó los Oratorios con el fin de acercar a Dios a los niños y a los
pobres. S. José de Calasanz (1556-1648) los Escolapios, dedicados a la educación de los niños pobres. S.
Juan de Dios (1495-1550) fundó los Hermanos de S. Juan de Dios, dedicados a la atención de los
enfermos. S. Vicente de Paúl (1581-1660) fundó la Hijas de la Caridad para la atención de los más
necesitados y los sacerdotes de la Misión para predicar el Evangelio. S. Francisco de Sales (1567-1622)
y Sta. Juana de Chantal fundaron la Orden de la Visitación (salesas), que son monjas contemplativas.
Sta. Juana de Lestonacc (1556-1640) fundó la Compañía de María, uniendo el espíritu monástico
contemplativo con la educación de las niñas. Sta. Ángela de Mérici fundó las Ursulinas para la
educación de las niñas.
3. GRANDES SANTOS Y MÍSTICOS ESPAÑOLES
a) Los santos de la gesta evangelizadora.
La reforma católica conllevó una mayor difusión del Evangelio por los continentes Africano,
Asiático y americano. Portugueses, franceses y españoles se lanzaron a esta gran gesta misionera.
Entre los grandes evangelizadores destacó S. Francisco Javier, jesuita navarro que fue enviado por
S. Ignacio de Loyola a las Indias orientales. Predicó en la India, Malaca y Japón. Murió a las costas de
China deseando llevar el Evangelio a aquellas tierras. Su método consistió en catequizar a los niños con
quienes cantaba en las lenguas nativas el Credo y los Mandamientos. Así desde los niños se iba
extendiendo la Verdad de Cristo a los adultos. S. Francisco Javier reclamaba de las universidades
europeas más obreros para la viña del Señor, donde los convertidos eran tantos que se le cansaban los
brazos de bautizar.
En la España Americana pronto surgieron santos nativos como Sta. Rosa de Lima (15861617), S. Martín de Porres (1579-1639) o S. Juan Diego (el indio a quien se apareció la Virgen de
Guadalupe en 1531)
b) Apogeo de la ascética y mística.
Son muchos los escritores del s. XVI español que con su santidad de vida y sus obras literarias
contribuyeron a elevar el fervor espiritual de Europa. Destacaron: S. Juan de Ávila (+ 1569) con su Audi,
filia, los Sermones de Sto. Tomás de Villanueva (+1555), los textos de S. Alonso de Orozco (+1591)...
La recién fundada Compañía de Jesús aportó los Ejercicios Espirituales de S. Ignacio, los escritos
ascéticos de S. Francisco de Borja (+1572) y otras muchas obras de jesuitas no canonizados.
La escuela carmelitana llegó a la cumbre de la mística con los escritos de Sta. Teresa
(Autobiografía, Camino de Perfección, Las Moradas) y de S. Juan de la Cruz (Subida al Monte Carmelo,
Noche oscura del alma, Cántico espiritual, Llama de amor viva).
En general, los autores ascéticos mostraban el esfuerzo que debía hacer el hombre para llegar
hasta Dios, con ejercicios de oración y mortificación y práctica de virtudes. Los autores místicos trataban
sobre la acción de la gracia sobrenatural que eleva así la criatura humana y le hace conocer el gozo del
encuentro con la divinidad por encima de sus limitaciones.
4. EL ARTE BARROCO
El arte barroco surgió en Italia a finales del siglo XVI y se desarrolló durante todo el siglo XVII y
primera mitad del siglo XVIII. El concepto de barroco tuvo en su origen un significado despectivo, pues
se consideraba un arte desigual. Los rasgos generales del barroco son:
- Ideológicamente es un arte que encarna los contenidos de los decretos del Concilio de Trento.
- Desde el punto de vista formal, constituye un estilo muy teatral. Se pretendía lograr una
perfecta integración de arquitectura, escultura y pintura, sobre todo en el interior de los
edificios.
- Los artistas buscan imitar la naturaleza y, para ello, crean movimiento.
a) Arquitectura.
En arquitectura el Barroco sigue utilizando los mismos elementos que en el Renacimiento, pero
tratados con total libertad. Así, los entablamentos y muros se curvan, los frontones se parten y describen
curvas y contracurvas. Aparecen nuevos soportes como la columna salomónica y los elementos
decorativos (medallones, guirnaldas, etc.) se desarrollan de forma extraordinaria.
Los representantes más destacados de la arquitectura barroca son los italianos Bernini (Plaza y
baldaquino de San Pedro del Vaticano), Maderna (fachada de la basílica de San Pedro del Vaticano) y
Borromini (San Carlos de las Cuatro Fuentes). En España tuvo gran importancia la familia Churriguera
(retablo de San Esteban de Salamanca). También hay que señalar la grandiosa fachada del Obradoiro de
la catedral de Santiago de Compostela, obra de Fernando Casas y Novoa.
b) Escultura.
La temática predominante de la escultura de este estilo es la religiosa, que arranca de los decretos
del Concilio de Trento. Se representan con gran realismo a los santos, que se ampliaron con una
abundante representación española (Santa Teresa y San Ignacio de Loyola entre muchos otros). Además
fue un arte mariológico, donde abundan las Inmaculadas y se populariza la Sagrada Familia. El Primado
de Pedro, la exaltación de la Eucaristía y los temas de la Pasión también se acrecientan.
Formalmente, predomina el uso de mármoles, alabastro y bronce, salvo en España, donde el
material más usado será la madera policromada. El afán de movimiento es conseguido a través de gestos
exaltados y complicadas composiciones. Bernini es el escultor que mejor define el nuevo estilo en la
escultura (Transverberación de Santa Teresa).
En España el siglo XVII es el de la imaginería religiosa. Abunda la escultura de retablos y de
imágenes de procesión, una escultura que busca, junto con el naturalismo, los efectos de expresividad.
Para ello incluye elementos como telas, ojos de cristal o pelo natural. La extraordinaria riqueza y variedad
de la escultura barroca obliga a distinguir dos escuelas:
- La castellana, de gran dramatismo, con Gregorio Fernández. Su obra más conocida es el Cristo
yacente.
- La andaluza, más serena y elegante, con Juan Martínez Montañés (Inmaculada, Cristo de la
Clemencia), Alonso Cano (Inmaculada) y Pedro de Mena (Magdalena penitente).
c) Pintura.
La pintura barroca participa de los rasgos fundamentales de la escultura y es ella la que presenta
con más evidencia esos caracteres. Aquí también se distinguen diferentes escuelas: la italiana con
Caravaggio, la holandesa con Rembrant y la flamenca con Rubens.
La pintura alcanzó sus más altas cotas en el que ha sido llamado el “Siglo de Oro” de las artes y
las letras en España. Su calidad extraordinaria y el predominio del tema religioso son sus más importantes
características. Entre los más señalados, destacan Francisco de Ribalta (Abrazo de Cristo Crucificado a
San Bernardo), José de Ribera (Martirio de San Bartolomé), Francisco Zurbarán, el máximo pintor
religioso del Barroco de toda la cristiandad con sus centenares de cuadros religiosos en series para
retablos de Órdenes religiosas, Diego Velázquez (Cristo Crucificado) y Bartolomé Esteban Murillo,
maestro insuperable en la pintura de Inmaculadas.
Descargar