Unas 2,5 millones de cabezas de ganado están en riesgo debido a

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LOS DEPARTAMENTOS DE LA PAZ, ORURO, POTOSÍ Y TARIJA DEMANDAN LA DECLARATORIA DE
EMERGENCIA PARA LA PROVISIÓN DE RECURSOS ECONÓMICOS ADICIONALES
Unas 2,5 millones de cabezas de
ganado están en riesgo debido a la
sequía en el Chaco y altiplano
Actualizado 06/11/2009
Problemas: un lote de sembradíos en el altiplano paceño, en la localidad de Achacachi, en inmediaciones del
lago Titicaca, muestra un déficit de lluvias
El fenómeno El Niño se deja sentir en el país. Las regiones del Chaco y del altiplano de seis
departamentos están con déficit de lluvias desde agosto. Son 48 los municipios de esas regiones
los que demandan atención de emergencia por la pérdida de ganado y de forraje. El Conarade se
reúne hoy para analizar la situación y para sugerir un decreto para la provisión de recursos
adicionales.
Unas 2,5 millones de cabezas de ganado, principalmente vacuno, corren el riesgo de
perderse debido a la sequía que asola el altiplano y el Chaco boliviano.
Los datos corresponden al viceministro de Desarrollo Rural y Agropecuario, Víctor
Hugo Vásquez, quien anunció que su despacho ha solicitado al Ministerio de Hacienda
la dotación excepcional de 26 millones de bolivianos para atender esta emergencia.
Para hoy está previsto una reunión del Consejo Nacional para la Reducción de
Riesgos y Atención de Emergencias y Desastres (Conarade), con la participación de
18 municipios y cuatro prefecturas en instalaciones de la Corporación de las Fuerzas
Armadas para el Desarrollo Nacional (Cofadena).
Allí se analizará la situación de la sequía y los requerimientos para la atención de los
problemas, con el objetivo de ver la necesidad de emitir un decreto de declaratoria
de emergencia a las regiones afectadas por el fenómeno de El Niño.
Por el momento, los departamentos de Oruro, Potosí, La Paz y Tarija anunciaron que
solicitarán la entrega de recursos adicionales. El secretario general de la Prefectura
de Tarija, Manuel Lea Plaza, pidió la ayuda debido a la falta de lluvias, que afecta
principalmente a las provincias chaqueñas de O’Connor y Gran Chaco.
Pablo Ramos, prefecto paceño, anunció que La Paz, Oruro y Potosí demandarán la
declaratoria de emergencia debido a la sequía, que ya ha ocasionado problemas en
esas regiones. Por ejemplo, en el departamento paceño se ha calculado un daño
económico de 2,3 millones de bolivianos.
También las regiones chaqueñas de los departamentos de Chuquisaca y Santa Cruz
sufren la merma del ganado y los recortes de agua potable debido a la falta de
lluvias.
Por ejemplo, en el municipio de Charagua, en el departamento cruceño, algunas
familias abandonaron sus comunidades y se fueron a vivir a los caminos en espera de
los camiones cisternas que les proveen del líquido vital.
El calor
El panorama no es alentador, pues el Servicio Nacional de Meteorología (Senamhi)
explicó que el déficit de lluvias continuará hasta la primera quincena de diciembre,
cuando se prevé que se recuperen los niveles normales.
El jefe de pronósticos de esa institución, Félix Trujillo, explicó que la falta de
precipitaciones en el altiplano, valles y Chaco se presenta desde agosto. En octubre
llovió un poco, pero no fue suficiente para alcanzar los niveles habituales.
La autoridad de Meteorología explicó que la falta de lluvias en las regiones afectadas
es consecuencia del fenómeno de El Niño, que son corrientes de aire caliente que
llegan desde el océano Pacífico, debido a que la masa de agua ha subido su
temperatura en unos dos grados centígrados.
Una consecuencia de esta situación es un posible desabastecimiento de alimentos
para la siguiente gestión, según admitió el ministro de Defensa, Walker San Miguel,
quien aseguró, sin embargo, que por el momento no existe ningún problema en este
rubro.
La autoridad se sumó al ministro de Aguas, René Orellana, y al director de la
Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (EPSAS) de La Paz, Víctor Hugo Rico,
en su pedido a la población que racione su consumo de agua para evitar posibles
desabastecimientos, como ya ocurre en el Chaco cruceño.
En la ciudad de La Paz, EPSAS negó que en el momento haya racionamiento, pese a
la baja en un 75 por ciento en el nivel de las seis represas. Pero no descartó que se
presente ese problema si continúa la falta de lluvias, principalmente en las
cabeceras de las cordilleras.
Según información del Viceministerio de Desarrollo Rural y Agropecuario, son 48 los
municipios afectados por la falta de lluvias. Entre ellos figuran: Charagua, Gutiérrez,
Lagunillas, Camiri, entre otros, en el Chaco; Achocalla, Achacachi, Comanche,
Corocoro, entre otros, en el altiplano.
El viceministro de Defensa Civil, Hernán Tuco, anunció que hasta el momento ya se
han distribuido 1.000 toneladas de alimentos y forraje en esos municipios, con la
ayuda del Programa Mundial de Alimentos (PMA). Explicó que los 26 millones de
bolivianos solicitados para la atención de la emergencia serán destinados a la
compra de cisternas, tanques plásticos, forrajes, melaza, semillas, picadoras e
insumos veterinarios. Además, en la construcción de atajados, impermeabilización
de atajados, rehabilitación de pozos de agua y la asistencia técnica productiva a los
damnificados.
El Conarade se reunirá en oficinas de Cofadena desde las 08.30. Allí, cada municipio
y Prefectura presentará un informe de evaluación de daños y análisis de
necesidades. En función a esas demandas, los técnicos del Ministerio de Defensa
elaborarán un informe dirigido al presidente Evo Morales con las recomendaciones
pertinentes, entre las que no se descarta la declaratoria de emergencia en las áreas
afectadas. Eso permitirá la dotación de mayores presupuestos.
Siete provincias paceñas son afectadas por el fenómeno de El
Niño
El prefecto de La Paz, Pablo Ramos, informó ayer que siete provincias de las 20
sufren consecuencias del fenómeno de El Niño.
Las provincias afectadas son: Camacho, Bautista Saavedra, Franz Tamayo, Loayza,
Pacajes, Murillo y Caranavi. En los que son nuevos los municipios con daños:
Mocomoco, Puerto Acosta, Charazani, Pelechuco, Sapahaqui, Calacoto, Caquiaviri,
Mecapaca y Caranavi, respectivamente.
Todos ellos sufrieron sequía y heladas. El número de familias damnificadas llega a
7.533, de los cuales la mayor cantidad están en Mocomoco, con 2.679, y Calacoto,
con 2.567 familias.
Ellos perdieron 1.700 cabezas de camélidos y 520 de ovinos. También sufrieron
mermas en su producción de papa, maíz, arroz y forraje. Perdieron 4.246 hectáreas
de papa y 946 de maíz, entre otros.
Según información de la Prefectura, el principal requerimiento de esos municipios es
la dotación de semilla, agua y forraje, para la alimentación de las personas y de sus
animales. La primera autoridad del departamento explicó, sin embargo, que éstos
son datos parciales, puesto que la evaluación de daños y análisis de necesidades
(EDAN) está en plena elaboración y que podrá estar concluido en la siguiente
semana.
Sin embargo, la autoridad se presentará con los resultados parciales en la reunión
del Consejo Nacional para la Reducción de Riesgos y Atención de Emergencias y
Desastres (Conarade), en la que solicitará la declaratoria de emergencia para el
departamento. También informó que actualmente se trabaja en la perforación de
pozos.
El domingo será un “día sin sombra” y es posible que se
marquen récords de calor
El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) anunció ayer que las
altas temperaturas continuarán al menos hasta el lunes de la siguiente semana,
porque los cielos estarán despejados hasta esa ocasión.
El director de esa institución, Félix Trujillo, anunció que el domingo 8 será el “día
sin sombra”, cuando el sol se encuentra en lo más alto del cenit y cuando se
aumenta la radiación.
Es probable que en esa jornada se rompan más récords de calor. Hasta el momento
se marcaron tres nuevos récords históricos en el país, en Villamontes, Cobija y
Bermejo.
En la primera región, el 31 de octubre el termómetro marcó 45,5 grados centígrados,
cuando la temperatura máxima histórica se registró en 1993 con 45,3. El 1 de
noviembre, en Cobija se registró 36,2, cuando en 1988 el máximo fue de 36. Y el 2
de noviembre, en Cobija se apuntó 45,5, cuando el histórico era de 44,4 que marcó
el termómetro en 1995.
La Paz, El Alto y Oruro están cerca de los máximos históricos, pero hasta el momento
no lo rebasaron. Los topes son: en La Paz, 26,4 en 2001; en El Alto, 22,2 en 1974, y
en Oruro, 25,5 en 1973.
Trujillo destacó que las precipitaciones pluviales se normalizarán en la segunda
quincena de diciembre. La autoridad explicó que esto se debe a que en los
anteriores años se ha acortado la época de lluvias, que antes abarcaban desde
octubre hasta abril, a diciembre, enero y febrero.
Como consecuencia del fenómeno de El Niño, la región oriental sufrirá intensas
lluvias, como ya ocurrió en San Javier en Santa Cruz, y San Joaquín, Magdalena y San
Ignacio de Moxos, en el departamento del Beni. También se prevé lluvias en el norte
de La Paz.
Bolivia, entre los más vulnerables
Un especialista de Gran Bretaña, Simón Ticehurs, anunció ayer en La Paz que Bolivia
es uno de los 10 países más vulnerables a los cambios climáticos que se están
registrando en todo el mundo, por la destrucción acelerada de ecosistemas.
“Debemos tomar muy en serio este tema, es un problema que afecta a todo el
planeta y particularmente a Bolivia, porque es uno de los países más vulnerables por
el cambio climático que son y serán todavía más severos y la población pobre es la
más expuesta a este fenómeno”.
Explicó que el cambio en el clima ha provocado el deshielo de glaciares en la
cordillera Real, que han perdido su volumen entre 1975 y 2006.
“Este deshielo amenaza con la falta de energía eléctrica y agua”. También aseguró
que los incendios forestales se originan a causa de sequías, además de la expansión
de plagas, enfermedades y la pérdida de cosechas.
Según informes oficiales, a principios de 2009 se reportaron más de 58.000 casos de
dengue y se registraron más muertes que en anteriores épocas.
La ministra de Desarrollo Rural y Tierras, Julia Ramos, aseguró el miércoles que se
garantizaron los recursos para combatir la sequía que afecta al menos a cinco
departamentos del país, en especial a la región del Chaco. “Al momento está todo
garantizado. Se trabaja con alimentos y riego, se ha coordinado con el Ministerio de
Aguas”.
Los damnificados
La sequía afecta a seis departamentos del país y a 48 municipios, según datos del
Ministerio de Desarrollo Rural y Agropecuario.
Entre las regiones damnificadas están: La Paz, Oruro, Potosí, Santa Cruz, Tarija y
Chuquisaca.
Los 48 municipios se distribuyen en dos regiones: Chaco y altiplano.
En la primera están: Charagua, Gutiérrez, Lagunillas, Camiri, Boyuibe, Cuevo, Entre
Ríos, Monteagudo, San Pablo de Huacareta, Villamontes, Caraparí, Yacuiba, Villa
Vaca Guamán, Macharetí y Huacaya.
En la segunda figuran: Achocalla, Achacachi, Comanche, Corocoro, Charaña,
Nazacara, Carabuco y Aucapata.
Además: Chuma, San Andrés de Machaca, Jesús de Machaca, Tahuacanacu, Guaqui,
Desaguadero, Luribay, Colquencha, Sica Sica, Ayo Ayo, Patacamaya y San Pedro de
Curahuara.
También figuran: Papel Pampa, Chararilla, Catacora, Santiago de Machaca, Laja y
Pucarani.
Los municipios del Chaco requieren de provisión de agua, alimentos para el ganado,
insumos veterinarios, infraestructura para el agua y asistencia técnica.
Los del altiplano demandan: provisión de agua, alimentos para el ganado, insumos
veterinarios, infraestructura para agua y asistencia técnica en producción pecuaria.
El Senamhi destacó que la falta de lluvias se prolongará hasta la primera quincena
de diciembre.
Son 48 los municipios que en este momento requieren la ayuda del Gobierno en
alimentos y agua.
Fuente: http://www.laprensa.com.bo/noticias/06-1109/noticias.php?nota=06_11_09_socd1.php
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