MERCADOS Los envases y embalajes del futuro Convenience. Las soluciones que permitan cocinar y comer en el propio envase están en alza. ENVASES Y EMBALAJES 4 tendencias de éxito ¿Qué tipo de envases se verán próximamente en los lineales de los supermercados? ¿Qué materiales son los más apropiados para atender las nuevas necesidades del consumidor, con las exigencias de sostenibilidad y con los costes logísticos y de producción? Hoy los envases son el factor diferencial para muchos productos y, en muchos casos, el argumento de compra. Por ello, buscar la solución más eficiente y satisfactoria será garantía de éxito para las empresas del sector. RUTH JOVANÍ ABRIL TÉCNICO INVESTIGADOR DE ITENE El envase, como cualquier producto de consumo, ha sufrido una evolución en su forma y material, pero también en su función, marcada por las tendencias de consumo. Rol clave. En alimentación el envase tiene una importancia crucial, porque el alimento y el envase son una pareja indivisible. 76 Históricamente, el envase ha desempeñado un papel auxiliar o secundario en los productos de consumo. No obstante, este elemento ha ido adquiriendo cada día más relevancia hasta convertirse en un factor decisivo en la estrategia de venta. Hoy día, el envase es en cualquier mercado el elemento diferencial, por lo que en el caso de productos muy similares, esta diferenciación es clave frente a su competencia. En muchos casos, puede convertirse en la única razón por la que se elige una marca comercial concreta. En este contexto, en el sector de gran consumo, y especialmente en alimentación, el rol del envase tiene una importancia crucial, porque el alimento y el envase son una pareja indivisible. Incluso en una situación económica complicada como la actual, el mercado de envases alimentarios no se ha visto afectado, ya que la alimentación es una necesidad primaria y, por lo tanto, el consumo de este tipo de bienes no decrece, más bien se modifica. Así, en este momento de cambio, el mercado de la alimentación tiene que apostar por nuevos productos que cubran y se adapten a las necesidades actuales. Las tecnologías aplicadas a este tipo de envase son y serán una parte muy importante para la industria del sector. Envases dirigidos al consumidor Los nuevos hábitos de consumo de la sociedad actual exigen diseños que se adapten a sus necesidades. El ritmo de vida reduce tanto la disponibilidad como la frecuencia con la que se realizan las compras, motivo que exige fórmulas que conserven el producto durante un periodo mayor de tiempo. Asimismo, los consumidores disponen de poco tiempo para preparar platos elaborados y comer, por lo que los envases que permitan cocinar y comer en el propio envase cómodamente se confirman LAS CLAVES Los envases en alimentación se han convertido en un factor decisivo en la estrategia de venta. Hoy el envase es el elemento de diferenciación clave frente a la competencia. Prolongar la vida útil del producto, proporcionar información adicional sobre su estado, y potenciar el poder de venta en el propio envase emergen como las estrategias de crecimiento para este sector. Las exigencias de los nuevos mercados y la necesidad de cumplir con la legislación vigente relacionada con la sostenibilidad suponen nuevos retos para el diseño del envase. La creación de nuevos envases que se adapten a las necesidades de los consumidores y de los envasadores supone nuevos desafíos que se convierten, a su vez, en nuevas líneas de investigación. 77 MERCADOS DEFINICIÓN DEL CONCEPTO ENVASE Según la definición que presenta la Ley 11/1997 de envases y residuos de envases, un envase es un sistema diseñado para contener, proteger, manipular, distribuir y presentar mercancías, desde materias primas hasta artículos acabados. Además, un envase puede aparecer en cualquier fase de la cadena de fabricación, distribución y consumo, pudiendo ser el mismo desde el inicio al final del ciclo de vida del producto, o ser sustituido a lo largo de las fases . Ley 11/1997 de 24 de abril de Envases y residuos de envases. BOE nº 99 como soluciones en alza. A esta cuestión se le suma la disminución del poder adquisitivo medio, lo que provoca que comer fuera de casa se haya convertido en un problema para muchos consumidores. Este sector de la población está acostumbrado a un plato recién cocinado, de una calidad que hasta el momento era difícil de alcanzar con los platos precocinados, debido, en muchos casos, a la estructura o material del envase, que no ayuda a mantener las propiedades que caracterizan al producto. En otros casos, la causa es un envase que no se adapta al método de cocinado del alimento. Por ello, los nuevos envases que incluyan una fuente de alimentación independiente o sistemas para poder calentar o enfriar una bebida o que inhiben la oxidación durante un periodo de tiempo mayor, -alargando la calidad del alimento durante más tiempo, evitando pérdidas de producto y reduciendo desperdicios,- se erigen como una verdadera oportunidad. Envases adaptados a la producción y la logística La necesidad de cambio no viene exigida únicamente por los consu- midores. Los propios envasadores y fabricantes de envases necesitan conocer los cambios y nuevas tendencias en el sistema productivo y logístico para ofrecer valores tangibles a un precio competitivo. Uno de los objetivos de muchos envasadores es reducir el coste unitario. Este objetivo se podrá alcanzar si la tecnología aplicada para desarrollar este envase permite la reducción de material, la aplicación de otros materiales o la optimización mediante un nuevo diseño. Asimismo, aumentar el alcance de la cadena de distribución permite la extensión de mercados. Este cambio exige estudiar los riesgos de la distribución: vibración, compresión dinámica, humedad y temperatura. Las exigencias de los nuevos mercados y la necesidad de cumplir con la legislación vigente relacionada con la sostenibilidad suponen nuevos retos para el diseño del envase. Las últimas tendencias La línea de trabajo de estos últimos años se ha focalizado en mejorar los envases de productos de alimentación. Dentro de esta tipología de productos, el sector de los platos preparados destaca como uno de los más prometedores en España. Innovación. Envases activos, inteligentes, autocalentables o microondables abren todo un mundo de opciones a los productos de alimentación. 78 En especial, los dos grupos con mayor mercado son: Los platos refrigerados, un segmento que genera alrededor de 700 millones de euros anuales, con volúmenes de venta en torno a las 150.000 toneladas. Los platos congelados, con un nivel de ventas de en torno a 144.000 toneladas anuales, según el estudio “Consumo y gasto de platos preparados en España”, del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Por lo tanto, en este sector surge la oportunidad de mejorar los sistemas actuales, resolviendo las carencias detectadas en el consumidor y de envasador. A continuación se analizan las principales características que deben ofrecer los envases para alimentación. 1 Contener el producto Inicialmente, la función de contener un producto alimentario terminaba en el momento en el que el producto se cocinaba y se consumía. Su función era meramente de contener el producto a temperatura ambiente o refrigerada. Ahora, contener el producto puede significar en algunos casos someter al producto a temperaturas extremas, como las que soportan los productos precocinados en el microondas o en el horno, sin que esto provoque una alteración del envase que pueda afectar al producto. Una vez cocinado aparece una nueva función: contener el producto mientras se consume ejerciendo de plato. En muchos casos la solución está en la combinación de diferentes materiales que consiga las propiedades deseadas. Lo materiales indicados son: Materiales esterilizables. Del mismo modo que el vidrio permitía la esterilización en el propio envase, las empresas de envases de plástico cuentan, años después, con la combinación de materiales poliméricos, que permite realizar los tratamientos térmicos en el propio envase. Un ejemplo de este tipo de material es un compuesto laminado de PP/ EVOH/PP. Envases microondeables. Los nuevos materiales multicapa permiten que el consumidor introduzca el envase en el microondas sin que se produzca una migración desde el envase hacia el producto. Ejemplos de estructuras utilizadas para este tipo de envases son PP/ EVOH/PP o PET/Al/PP 1 El PP suele utilizarse porque 1 PP: polipropileno, EVOH: copolímero etileno alcohol vinílico, PET: poliéster, Al: Aluminio MERCADOS Envases inteligentes. Protegen el contenido y además ofrecen información adicional a través de sistemas como el RFID. presenta ciertas características deseables, como resistencia a la sorción de la grasa (término utilizado para describir la asociación de compuestos químicos en forma disuelta o gaseosa), o si es esterilizable y microondeable. Envases horneables. No solamente la introducción del envase en el microondas ha sido un avance. Generar materiales que soporten las temperaturas del horno manteniendo las propiedades del envase o, incluso, permitir su cocción en ambos, ha sido y sigue siendo un reto para los fabricantes de packaging . El principal objetivo de estos envases, flexibles o rígidos, es resistir altas temperaturas durante un tiempo determinado. Actualmente existen algunas soluciones comerciales, no sólo para platos precocinados, sino también para productos de panificación. 2 Conservar y proteger la calidad e integridad del producto Inicialmente, la protección del producto se remitía a cumplir funciones más generales, como evitar el derrame del producto durante el transporte, impedir el intercambio de gases entre el interior y el exterior del envase o soportar los posibles riesgos derivados del ciclo de distribución. Actualmente, estas propiedades se consideran cubiertas por cualquier sistema de embalaje, por lo que el reto está en la participación activa del envase en la protección del producto. Las últimas tendencias en protección de productos son los envases activos. Estos tienen como función prolongar la vida útil o mejorar el estado de los alimentos envasados, mediante la incorporación de sustancias con ciertas propiedades beneficiosas o la eliminación de otras que pueden presentar problemas para la conservación. La base de estos mecanismos es un transporte de masas que incluye una regulación de la permeación de gases en el espacio cabeza y una retención de sustancias por sorción2. Este sector pronostica un incremento en su volumen de ventas, que se verá reflejado sobre todo en los absorbedores de humedad, secuestradores de O2 y CO2 y envases microondeables3 : a) Envases activos o envases barrera: La oxidación del alimento es una reacción iniciada por radicales libres. Este tipo de reacciones, una vez iniciadas progresan muy rápidamente, dificultando cada vez más su control y deteriorando el alimento. Para el control de la oxidación se puede actuar de dos modos: 2 Reglamento (CE) No 450/2009 de la Comisión de 29 de mayo de 2009 sobre materiales y objetos activos e inteligentes destinados a entrar en contacto con alimentos. 3 Pira international Ltd (2009) The Future of Packaging: Long-term Scenarios to 2020. Actuando sobre el O2 o sobre las especies que pueden reaccionar con él. El control del primero se consigue eliminando el O2 residual del espacio cabeza del envase o evitando la entrada de O2 desde el exterior. Por otra parte, el control de las especies reactivas frente al O2 se puede alcanzar con la adición de antioxidantes en alguno de los elementos del sistema producto-envase. El uso de materiales barrera evita la entrada del O2 . Habitualmente para actuar como barrera se elige un laminado multicapa. Con éste se consigue una baja permeabilidad a los diferentes gases y una resistencia mecánica alta para evitar una posible punción. Dos laminados multicapa comunes, que actúan como barrera son PA/PVdC/ PE4 y PA/EVOH/PP. La capa de PA permite la impresión, la central actúa como barrera, y la interior debe permitir la termosoldadura. Las barquetas de comida precocinada y sobres para productos deshidratados, son ejemplos de envases que utilizan este material multicapa. Secuestradores de O 2 . Este sistema reduce la cantidad de O 2 en la cabeza de los envases. Algunos ejemplos de secuestradores son los metales y óxidos metálicos, el ácido ascórbico o las enzimas. Estos compuestos tienden a oxidarse con mayor facilidad que el alimento contenido, y por tanto utilizan el O 2 existente, evitando que quede disponible. El principal problema es que la mayoría de los secuestradores de O 2 no pueden entrar en contacto directo con el alimento. Por lo tanto, es función del diseño del envase separar físicamente este elemento del producto, pero al mismo tiempo, permitir la interacción del secuestrador con el O 2 existente en el espacio cabeza. Los envases activos con agentes antioxidantes pueden ejercer una acción de protección sobre alimento contenido, reduciendo las especies reactivas del O 2 . Un ejemplo de antioxidante aplicado al material de envase es la vitamina E, que ayuda a reducir los efectos de la oxidación. b) Envases activos para el control del CO 2 . Muchos de los alimentos que se comercializan envasados generan CO 2 , como es el caso de las frutas y hortalizas. Lo mismo sucede con los productos tostados, como el café, que una vez envasados siguen desprendiendo CO 2 . Para controlar esta emisión se utilizan sustancias como el hidróxido de calcio. Por otra parte, existe otra gama de productos que, por su elevada humedad una vez envasados, requieren el uso de CO 2 , como los fungicidas. Asimismo, los productos horneados, la carne fresca o los quesos, son algunos de los productos que requieren de emisores de CO 2 para controlar el crecimiento microbiano. Ejemplos de compuestos emisores de CO 2 son el bicarbonato cálcico y el ácidoascórbico. 4 PVdC: policloruro de vinilideno. Strive for More LOGÍSTICA SOSTENIBLE NUESTROS EQUIPOS SE ADAPTAN A SUS NECESIDADES Y DESAPARECEN CUANDO NO LOS NECESITA REDUCIMOS LOS COSTES LOGÍSTICOS, OPTIMIZAMOS LA MANIPULACIÓN A LO LARGO DE TODA LA CADENA LOGÍSTICA Y REALZAMOS LA IMAGEN DE SUS PRODUCTOS EN LA SALA DE VENTA. NUESTRA AMPLIA GAMA DE EQUIPOS SON EXCELENTES ENVASES EN PRODUCCIÓN, CIRCUITOS INTERNOS, IMPORT-EXPORT Y EXPOSITORES EN TIENDA. 100% REUSABLE READY PACKAGING PLATAFORMA BAJA PARCELA B3.3 MERCAMADRID (T) 91 507 94 67 ESPAÑA I ITALIA I REINO UNIDO I IRLANDA I HOLANDA I BÉLGICA I LUXEMBURGO I FRANCIA I ALEMANIA I POLONIA I RUSIA I EEUU I ISRAEL I www.polymerlogistics.com 80 81 Factor decisivo. El envase puede convertirse en la única razón por la que se elige un producto en concreto. MERCADOS Los envases autocalentables en las bebidas calientes utilizan un sistema que se basa en mantener separados los reactivos hasta el momento en el que se va a consumir el producto. 3 Presentar e identificar el producto Esta función engloba poder informar y vender el producto. Los sistemas para informar a cualquier miembro de la cadena de distribución sobre el estado del producto, basados en nuevas tecnologías, como las etiquetas RFID o los indicadores, son algunos de elementos incluidos dentro de la definición de envases inteligentes. a) Envases inteligentes. Un envase inteligente es aquel que no solamente protege el contenido, sino que interacciona con él, permitiendo al consumidor obtener información del producto o de su entorno. Un buen ejemplo son los indicadores de frescura, que revelan la calidad del producto envasado a través de su respuesta frente a alguno de los cambios que se suceden en el alimento. Este pequeño sensor reacciona con los gases generados por el producto durante la reacción de oxidación, y cambia su estado inicial (generalmente cambia de color) para informar del cambio en el producto. Indicadores termocrómicos o de humedad son otras de las posibilidades que ofrecen los envases inteligentes. Por otra parte, presentar y vender 82 el producto significa adaptar los productos al gusto del consumidor, que cada vez más exige nuevas funciones que consigan un producto listo para consumir. Quizás, esta es una de las funciones más complejas dentro de la definición de envase, y seguramente una de las que va a marcar tendencias de mercado y retos de investigación durante los próximos años. b) Envases con susceptores de microondas. El concepto de susceptor para microondas no es nuevo, ya que se viene utilizando desde los años ochenta; su función es absorber las radiaciones microondas y convertirlas en calor. Generalmente los susceptores están realizados en aluminio. Por su condición de material metálico es capaz de absorber las microondas que generan un flujo de oscilaciones dentro del material. De este modo, una fina capa de aluminio que puede laminarse junto al material de envase o ser depositada por metalización al vacío funciona como fuente de calor. Dicha fuente de calor situada en zonas estratégicas del envase, puede generar un efecto de tostado asociado generalmente al horno. La temperatura que se puede alcanzar en el interior de un envase con susceptor está alrededor de los 200ºC. ¿Y si además de permitir una cocción muy similar al horneado, el envase juega un papel activo sobre el producto? Actualmente ya existen las primeras soluciones comerciales con susceptores que cuentan con un elemento activo, que absorbe el exceso de humedad o exceso de aceite durante la cocción, sin verse afectado por la temperatura alcanzada en el envase. Este tipo de envases son: Envases microondeables con válvula para cocinar al vapor: Este sistema permite cocinar el alimento al vapor dentro del propio envase, consiguiendo una menor pérdida de humedad, que evita a la vez que se reseque el alimento y mantiene mejor las vitaminas. La tecnología utilizada es la perforación por láser o imperfección controlada de costuras, que funcionan como válvula de escape. Al llegar a una cierta presión y temperatura el vapor puede ser liberado. Este tipo de cocción se aplica actualmente a productos como pescado congelado y verduras. Envases autocalentables: Son soluciones basadas en una reacción que genera calor para aumentar la temperatura del producto, una reacción exotérmica en la que participan diferentes reactivos dependiendo del calor que se desea alcanzar. Una reacción muy utilizada es la hidratación del óxido de calcio (CaO), con agua en la que participan reactivos económicos. Además, los productos o subproductos generados son aceptables medioambientalmente. En la actualidad uno de los mercados que ha incluido esta tecnología es el de las bebidas calientes, cuyo sistema se basa en mantener separados los reactivos hasta el momento en el que se va a consumir el producto. El diseño de este tipo de envases permite mezclar de forma homogénea los dos reactivos y fuerza a que estos envuelvan el volumen ocupado por el producto. En este tipo de bebidas se consigue un aumento de la temperatura alrededor de 40ºC por encima de la inicial. 4 Facilitar el transporte y la distribución comercial Esta función ha sido estudiada durante años por diferentes centros de investigación,como Itene, que trabajan junto a las empresas para el desarrollo de nuevos sistemas de embalaje, validando también su efectividad. El problema reside en que las cadenas logísticas cada vez se amplían más y la magnitud de los riesgos en el transporte de los envases se incrementa cada vez más. La posibilidad de transportar productos sensibles (alimentos perecederos) a mayores distancias, o la legislación, que regula cada vez más las cadenas de distribución, son factores que demandan nuevos sistemas de embalaje. tario se decantan por soluciones que ejercen alguna función activa sobre el sistema envase-producto, ya que gracias a estos compuestos se reduce el volumen de alimentos frescos desechados. Las preferencias de las empresas se basan en la optimización en el ciclo de distribución. Por su parte, el consumidor se decanta cada vez más por un envase que aporte una nueva función, como la que ofrecen los sistemas autocalentables. La creación de nuevos envases que se adapten a las necesidades de los consumidores y de los envasadores supone nuevos retos que se convierten, a su vez, en nuevas líneas de investigación. Y son las empresas del sector del envase las responsables de investigar y dar respuestas tanto a las necesidades de la propia industria como a las de los consumidores. Conclusión En definitiva, las nuevas tendencias en el sector del envase alimen- © Ruth Jovaní Abril