guia para la descripción e interpretación del perfil de suelo

Anuncio
GUIA PARA LA DESCRIPCIÓN E
INTERPRETACIÓN DEL PERFIL
DE SUELO
2011
Ing. Agr. Abraham Kaplán
Ing. Agr. Sergio Labella
Ing. Agr. Laura Rucks
Ing. Agr. Artigas Durán
Ing. Agr. Álvaro Califra
PARTE 1 GUIA PARA LA DESCRIPCIÓN DEL PERFIL
INTERPRETACIÓN DEL PERFILDE SUELO
INTRODUCCIÓN
Esta guía tiene como objetivo ayudar a describir
interpretar el perfil de suelo con fines agronómicos.
e
Forma parte de un conjunto de documentos que viene
elaborando
el
Departamento
de
Suelos
para
facilitar
el
acceso a materiales de enseñanza.
Esta es una actualización de la publicación “Manual
para la descripción e interpretación del perfil del suelo”,
elaborada
por
los
Ingenieros
Agrónomos:
Abraham
Kaplán,
Sergio Labella, Laura Rucks y Artigas Durán.
Su propósito es el mismo, el original. Sin embargo,
luego
de
última
edición
(2005),
se
entiende
necesario
realizarle
ajustes
y
aportes
tendientes
a
mejorar
e
incrementar su utilidad. De esta forma se realiza una breve
introducción sintética, abordando: definiciones, factores y
procesos, expresión espacial y cartografía o relevamiento de
suelos. Existen otras publicaciones que tratan los temas
mencionados en forma más exhaustiva o completa, por lo que
se recomienda su lectura complementaria.
DEFINICIONES DE SUELO
Las definiciones de suelo han ido variando en el tiempo;
aquí se sintetizan algunas de ellas que van creciendo en
precisión y complejidad conforme se exponen.
•
El
suelo es
un
cuerpo natural
fundamentalmente en forma horizontal,
más
superficial de la tierra.
•
Es el medio en el que crecen y
plantas superiores a la intemperie.
•
un cuerpo que forma parte del paisaje y cubre gran parte
de la superficie continental de la tierra.
•
el producto de alteración de sustancias minerales y
orgánicas, por la acción de agentes climáticos durante
un período prolongado.
•
una colección de cuerpos naturales, que poseen una
morfología, estructura, características
y propiedades
que reflejan las condiciones en las cuales se formaron.
se
que
se
extiende
formando la capa
desarrollan
las
FACTORES DE FORMACIÓN DEL SUELO
De acuerdo a uno de los modelos de formación del suelo
más utilizados, por su aporte conceptual, una propiedad dada
del suelo es función de la siguiente expresión:
p(S): F(clima, geología, relieve, organismos vivos y tiempo)
siendo ,
p: una propiedad del suelo,
S: suelo y
F: función.
Más recientemente se ha sugerido agregar la acción del
hombre como factor de formación del suelo.
FACTOR CLIMA
La influencia de este factor, tanto a través de su
incidencia pretérita como actual, es de magnitud tal, ya que
hasta no hace mucho tiempo se explicaba y refería a los
grandes
tipos
de
suelos
del
mundo.
En
el
pasado,
los
distintos tipos de Clima dieron lugar a términos y tipos de
vegetación a veces utilizados indistintamente con Tipos de
suelo a pequeña escala.
FACTOR MATERIAL PARENTAL O “ROCA MADRE”
La
diferente
composición
de
las
rocas,
su
edad
relativa, resistencia ante la acción del clima y organismos
inciden en
la composición, tiempo de formación, paisaje y
profundidad
de
los
suelos;
así
como
en
propiedades
mineralógicas, físicas y químicas de los mismos.
FACTOR RELIEVE
Condiciona la profundización de la formación del suelo:
• gobernando
agua,
la
relación
escurrimiento:
infiltración
del
• Modificando la mayor o menor incidencia del viento o la
insolación.
• Controla una mayor o menor influencia de la humedad de
napas temporarias o permanentes en la formación del
suelo.
ORGANISMOS VIVOS:
La flora y la fauna de una determinada región,
algún modo, son consecuencia del clima reinante o pasado.
de
Por lo común, en equilibrio con un determinado clima
se encuentra asociada un tipo de vegetación y de ésta última
depende la supervivencia de los animales que viven en ella.
La incorporación de los restos de la flora y fauna al
suelo es un proceso de suma importancia.
La cantidad y calidad de “humus” de un
altamente dependiente del tipo de vegetación y
equilibrio con éste.
suelo
fauna
es
en
Como consecuencia son diferentes las formas en que sus
restos ingresan, se descomponen e integran al suelo en
formas más o menos estables.
FACTOR TIEMPO
Los
factores
de
formación
de
suelo
mencionados
previamente pueden haber actuado por períodos muy variables:
desde relativamente breves a muy largos (decenas a miles de
años).
El paisaje-suelo que conocemos hoy, es consecuencia de
procesos y fenómenos que han operado reiteradamente.
La combinación de factores de formación da lugar a una
serie de procesos simples o generales de formación
(comunes
a todo tipo de suelo), que contribuyen a modelar el paisaje
y los suelos asociados al mismo.
PROCESOS SIMPLES O GENERALES DE FORMACIÓN DEL SUELO
Los procesos que contribuyen a modelar y formar el
paisaje – suelo son múltiples e interaccionan resultando
muchas veces difícil su aislamiento y tipificación. Varios
autores han intentado agruparlos en algunas pocas clases.
Una de ellas es la que se presenta a continuación.
•
•
•
•
•
Descomposición y alteración de rocas hasta formar nuevos
minerales secundarios.
Acumulación de materia orgánica.
Pérdida de elementos, sustancias y partículas a través
del “Lavado” o erosión fuera el perfil,
Translocación (trasladación) de sales, sustancias
minerales y orgánicas dentro del perfil.
Diferenciación del “perfil” en capas u horizontes y
desarrollo de la estructura.
De forma aún más sintética, aún puede decirse que en todos
se experimentan:
1.
2.
3.
4.
transformaciones,
ganancias,
pérdidas y
translocaciones (trasladaciones).
En la naturaleza los grados de intensidad en que se
manifiestan
cada
uno
de
los
procesos
simples
son
innumerables; como consecuencia
sus combinaciones posibles
resultan infinitas. Por lo cual las propiedades resultantes
de
los
suelos
son
mayormente
cuantitativas
y
no
cualitativas.
COMPOSICIÓN
La mayoría de de los suelos que cubren la superficie
continental son minerales; es decir cuantitativamente su
mayor
componente
son
minerales
que
provienen
de
la
alteración
de
las
rocas.
La
composición
ideal
de
los
primeros centímetros es la siguiente:
COMPOSICIÓN PROMEDIO IDEAL DE LOS PRIMEROS cm de SUELO (% en
peso)
Materia mineral
Materia orgánica
Organismos vivos
95
4 – 5
< 1
%
%
%
COMPOSICIÓN PROMEDIO DEL SUELO (% en volumen)
Materia Orgánica
Materia Mineral
Agua
Aire
12%
38%
25%
25%
Los dos últimos componentes son muy dinámicos, varían en
períodos breves; considérense las variaciones que podrían
darse luego de una lluvia.
En la naturaleza, a lo largo y ancho del paisaje, los
grados de intensidad en que se manifiestan cada uno de los
procesos simples son innumerables; como consecuencia
las
combinaciones posibles resultan infinitas. Las propiedades
resultantes en composición y propiedades son de carácter
cuantitativo
y no cualitativo. De esta forma, de
trecho en
trecho van resultando diferentes estratos o capas, más o
menos distinguibles entre sí por: color, estructura, textura
y otras propiedades. Al conjunto de esas capas u horizontes
se le denomina “perfil” del suelo” y es posible observarlo
en un pozo, en la banquina de un camino o en alguna zanja.
El material al partir del cual se forman los suelos, por
lo común es un sustrato geológico de naturaleza mineral. De
manera que los componentes minerales del suelo tienen una
apreciable semejanza con el de aquella roca a partir de la
cual se forman o diferencian. Por su parte los componentes
orgánicos
del
suelo,
en
su
mayoría
provienen
de
la
vegetación bajo la cual se formaron, con un grado variable
de transformación por los organismos (macro y micro fauna)
que habita en ese medio. A su vez los compuestos solubles y
coloidales se pueden desplazar dentro del perfil de suelo,
de manera que algunas partes se empobrecen relativamente y
otras se enriquecen.
El
conjunto
de
estos
procesos
conduce
a
una
diferenciación progresiva de distintos horizontes y capas y
constituye el desarrollo del perfil. Los horizontes son
sucesivamente más distinguibles a medida que el perfil es
más evolucionado. Las diferencias dentro del perfil son más
apreciables conforme varía la distancia entre las partes
observadas.
Por lo general el estudio del perfil de suelo se
inscribe dentro de una actividad que se desarrolla con el
objetivo de conocer la distribución espacial de diferentes
tipos de suelo con un determinado propósito.
El más común es establecer las diferencias de suelos y
su
respectiva
evaluación,
para
ordenar,
planificar
un
territorio
determinado:
país,
región,
división
administrativa, establecimientos empresariales agropecuarios
o forestales.
Otras
veces
es
para
contribuir
a
tomar
decisiones
políticas
de
promoción,
desarrollo,
impositivas
o
para
planificar obras públicas y privadas de ingeniería como
planificación
y
desarrollo
vial,
ferroviario,
represas,
preservación del ambiente y conservación de sitios que por
singularidad,
historia
o
valor
estético
se
considere
conveniente.
A la metodología para cumplir con esos objetivos se le
conoce como relevamiento de suelos y evaluación de tierras.
Esta se describe en otra publicación: Relevamiento de
suelos.
La
actividad
de
campo
más
importante
de
esa
metodología
implica
la
descripción
de
características
asociadas y morfológicas de los paisajes-suelos. Entre sus
resultados esta actividad arroja un resultado gráfico o
carta o mapa, compuesta por unidades cartográficas
de
suelos.
Para
conocer
la
composición
de
las
unidades
cartográficas es necesario describir perfiles de suelo. Lo
cual
se
logra
realizando
estratégicamente
en
diferentes
ubicaciones del paisaje perforaciones con herramientas como
taladros o bien en pozos o “calicatas”.
Otto Spaargaren (2006) resume los ámbitos y propósitos u
objetivos de la descripción como los siguientes:
1. En los relevamientos: como ejemplo típico de la unidad
cartográfica de suelos o de uno de sus componentes.
2. En la investigación: como registro de referencia para
ilustrar el valor del medio ambiente y las relaciones
entre los atributos del suelo y el comportamiento,
rendimiento de diferentes
plantas, cultivos y usos en
general.
3. En la planificación del desarrollo: aportando datos
básicos en la construcción de sistemas información de
tierras y ambiente geo-referenciados.
DESCRIPCIÓN DEL SUELO
En el ordenamiento de los conceptos y tratamiento de las
diferentes características y propiedades que involucra la
descripción de los suelos, se realiza una subdivisión de las
propiedades; pero se debe tener presente que estas actúan
como
un
todo
en
forma
interrelacionada
y
no
en
forma
aislada. Tal subdivisión da lugar a propiedades:
a) Asociadas, b) morfológicas simples,
analíticas y d) propiedades complejas.
c)
propiedades
PROPIEDADES ASOCIADAS (AL PAISAJE):
geomorfología,
relieve,
ubicación-posición,
rocosidad,
pedregosidad,
erosión actual,
drenaje natural,
inundaciones,
vegetación.
Algunas geoformas:
La geomorfología es una ciencia que contribuye a explicar
la génesis del paisaje y los suelos que se asocian al mismo.
Las geoformas resultan de la interacción de la geología,
vegetación, actividades humanas y climas pasados y presentes
hasta modelar el paisaje presente.
Planicie media
Lomadas
Lomadas fuertes“alcalinas”
Colinas
Colinas “alcalinas”
Lomadas fuertes
El término “alcalino” que aparece en las figuras o esquemas, podría ser más
específico; pretende adjetivar algunas tierras que presentan áreas de poca
extensión de suelos un contenido de sodio intercambiable mayor a 15% en
alguna parte del perfil, acompañados o no de una acidez potencio-métrica
mayor a 7.
RELIEVE
En cada una de las geoformas puede o es conveniente
explicitar el porcentaje y largo de las pendientes. A manera
de ejemplo en nuestro ámbito se utilizan las siguientes
pautas.
Sin
perjuicio
de
ello
se
recomienda
leer
“El
relevamiento de Reconocimiento de suelos 1:100.000 en el
Uruguay – Metodología y Pautas de Sganga, J.C. y Puentes, R.
(1982), MGAP, DSA.
Símbolo
% de pendiente
A
B
C
D
E
0
1
3
6
12
–
–
–
–
–
1
3
6
12
24
Denominación
Casi plano
Suave
Moderada
Fuerte
Escarpada
UBICACIÓN-POSICIÓN
Todo
muestreo
merecería
ser
ubicado
en
términos
de
coordenadas
geográficas.
Esto
permitiría
comparar
los
resultados del análisis obtenido en ese sitio consigo mismo
a lo largo del tiempo – seguimiento o monitoreo – y a la vez
la reunión de datos con cierta densidad espacial facilitaría
la
comparación
y
agrupamiento
de
resultados
semejantes
colaborando
a
la
formulación
de
clases
de
información:
parámetros
climáticos
a
nivel
del
terreno,
vegetación,
geología, suelos, etc. Por tal motivo se recomienda utilizar
un
dispositivo
que
brinde
las
coordenadas
del
sitio
a
describir
y/o
muestrear,
tal
como
un
receptor
de
Geoposicionamiento Global (GPS).
Además de ubicarlo, se debe proporcionar la posición que
ocupa en el paisaje. O es lo mismo que el sitio a describir
se encuentre en: a) la línea divisoria de aguas, b) la
ladera en su porción más alta, c) la ladera en su parte
media, d) la ladera en su porción más baja o pié de ladera,
e) un plano inundable f) próximo al cauce de una vía de
drenaje permanente como un arroyo o un río.
a
b
c
d
e
f
ROCOSIDAD
Las piedras de más de 25 cm., de diámetro, así como los
afloramientos rocosos no se consideran parte de la masa del
suelo
a
los
fines
del
establecimiento
de
las
clases
texturales. Sin embargo, tienen importancia en el uso porque
interfieren
en
las
labores
con
maquinaria
agrícola.
La
Pedregosidad y Rocosidad son criterios que distinguen en
muchos lugares los suelos “arables” de los “no arables”.
En el presente, dada la creciente popularización de
técnicas que evitan o minimizan el laboreo de la tierra con
herramientas
convencionales
(arado
de
rejas
u
otras
de
similar grado de intervención), limitan la utilidad de los
criterios que se proponen a continuación. Aunque en algunas
circunstancias mantienen total vigencia.
Muchas veces se han cometido errores por no haberse
establecido
detalladamente
este
factor
en
los
reconocimientos de suelos.
En los parágrafos siguientes se dan sugerencias para
distinguir piedras sueltas y piedras fijas, y se establecen
los siguientes grados. Las definiciones de dichos grados se
basan en las diferentes condiciones que presentan los suelos
en
pedregosidad
o
rocosidad
en
cuanto
a
la
labranza
convencional.
Grados de rocosidad
Por rocosidad se entiende el porcentaje de manto rocosos
expuesto tanto en lo que se refiere a afloramientos de roca
firme, cuanto a manchones de suelo somero, con una roca
demasiado cerca de la superficie para poder aprovecharlo. En
general se usa “rocoso” para suelos que poseen roca firme y
“pedregoso”
para los que tienen grandes fragmentos sueltos
de roca desprendida.
Al igual que con la pedregosidad, la rocosidad se usa
como criterio para distinguir fases y puede ser un criterio
para distinguir series. En una misma unidad cartográfica se
pueden combinar dos o más grados de rocosidad. En las
leyendas descriptivas y en los informes de reconocimiento,
dentro de cada serie se deben definir específicamente las
fases rocosas.
Los grados de rocosidad son los siguientes:
Grado 0 – No hay afloramientos del estrato rocoso o son tan escasos que no
pueden interferir la labranza. Menos del 2% de la superficie del suelo está
constituido por roca firme.
Grado 1 – La roca firme está tan expuesta que puede interferir la labranza,
pero no hace impracticables los cultivos de escarda. Los afloramientos están
distanciados aproximadamente entre 30 y 100 metros entres sí y cubren del 1 al
10 % de la superficie, lo que depende de cómo se vea afectado el cultivo, por
la forma de presentarse el afloramiento.
Grado 2 – La roca aflora de una manera que hace impracticables los cultivos de
escarda, pero el suelo puede trabajarse para forrajes o con pasturas mejoradas;
siempre que las demás características del suelo sean favorables. Los
afloramientos están distanciados entre sí de 10 a 30 m aproximadamente y cubren
alrededor del 10 al 25 % de la superficie, dependiendo de la forma en que se
presenten.
Grado 3 – Afloramientos de roca firme suficientes como para hacer impracticable
todo uso de maquinaria liviana y siempre que las demás características del
suelo sean especialmente favorables para pasturas mejoradas. Pueden tener
cierto uso para pasturas naturales o bosques, dependiendo de ello de las demás
características. Las rocas (o manchones de suelo somero entre rocas), están
distanciados aproximadamente entre 3 – 10 m y cubren alrededor del 25 al 50% de
la superficie dependiendo ello de la forma como se presenten.
Grado 4 – Afloramientos de roca firme en tal proporción que hacen impracticable
el uso de cualquier tipo de maquinaria. La tierra puede tener algún valor solo
para pasturas pobres o forestación. Los afloramientos rocosos se hallan a
distancias de sólo 3 m o menos uno de otro y cubren del 50 al 90 % del área.
Grado 5 – Tierras en las cuales más del 90% de la superficie está constituido
por afloramientos de roca firme.
PEDREGOSIDAD
Los grados de Pedregosidad son los siguientes:
Grado 1: - Suficiente cantidad de piedras como para interferir la labranza,
pero que no hagan impracticable el cultivo de escarda. (Cuando las piedras
tienen unos 30 cm de diámetro y están distanciadas unos 10 a 30 m entre sí,
ocupan alrededor de 0,01 – 0,1 % de la superficie y habrá alrededor de 0,3 –
3,0 m3 de piedras por ha en los primeros 30 cm de suelo.
Grado 2: - Suficiente cantidad de piedras como para hacer impracticables las
labores y los cultivos de escarda, pero el suelo se puede trabajar en cultivos
de forrajes o en pasturas mejoradas siempre que las demás características del
suelo serán favorables. (Cuando las piedras tienen unos 30 cm. de diámetro y
están distanciadas entre sí de 2 a 10 m, ocupan alrededor del 0,1 – 3% de la
superficie y habrá alrededor de 3 – 90 m3 de piedras por ha en los primeros 30
cm de suelo).
Grado 3: - Suficiente cantidad de piedras como para hacer impracticable todo el
uso de maquinaria, excepto la maquinaria muy liviana o instrumentos manuales y
mientras las demás características del suelo sean especialmente favorables para
pasturas mejoradas. Los suelos con este grado de pedregosidad pueden tener
algún uso en pasturas naturales o bosques, dependiendo ello de las demás
características del suelo. (Cuando distanciadas de 1 a 2 m entre sí, ocupan
alrededor de 3 a 15% de la superficie y habrá entre 90 a 450 m3 de piedras por
ha en los primeros 30 cm de suelo.
Grado 4: - Suficiente cantidad de piedras como para hacer impracticable el uso
de cualquier maquinaria agrícola: la tierra sólo puede tener algún valor para
pasturas pobres o para forestación. (Cuando las piedras tienen 30 cm de
diámetro y están distanciadas menos de 1 m entre sí, ocuparán alrededor del 15
– al 90 % de la superficie y habrá más de 450 m3 de piedras por ha en los
primeros 30 cm del suelo).
Grado 5: - Tierras prácticamente pavimentadas con piedras que ocupan más del
90% de la superficie expuesta.
Hay que hacer notar que estos grados son de aplicación
general en las descripciones de suelos, pero una unidad de
mapeo se puede definir por la combinación de varios grados
de pedregosidad. Es así que se puede usar en el nombre de de
una fase pedregosa términos tales como: “pedregosos”, “muy
pedregosos” o “extremadamente pedregosos”.
EROSIÓN ACTUAL
Erosión Ligera: El suelo ha perdido menos del diez por ciento (10%) del
horizonte A. Sólo se observan muy escasos síntomas de arrastre como ser
pequeños canalículos.
Erosión moderada: El fue erosionado entre el 25 – 75 % del horizonte
superficial, de manera que en la generalidad de los casos, los implementos de
laboreo sólo interesan el horizonte A o bien sólo la parte superior del
horizonte B. Dentro de este grado de erosión es dable encontrar lugares en que
la capa arable consiste exclusivamente de horizonte A, alternándose con otros
donde se roturan los horizontes subyacentes. Puede haber cárcavas de poca
profundidad.
Erosión severa: Es suelo fuer erosionado al extremo que todo o prácticamente
todo el horizonte A fue removido. La capa arable consiste esencialmente de
materiales correspondientes al horizonte B u otro horizonte sub-superficial,
aunque puedan haber lugares donde la capa arable es una mezcla de horizonte A y
B, más del 75% del espesor original del horizonte A y parte del horizonte B han
sido erosionados. Cárcavas superficiales y algunas profundas, son comunes en
este grado de erosión.
Erosión muy severa: La superficie del suelo presenta un padrón intrincado de
cárcavas moderadamente profundas y profundas. El solum ha desparecido, excepto
en pequeñas áreas comprendidas entre cárcavas. En estas condiciones es
absolutamente impracticable todo laboreo.
INUNDACIONES
Las pautas respecto a este fenómeno que afecta a tierras
y suelos asociados a vías de drenaje natural de diferente
importancia relativa son las siguientes:
Clase 1 – Inundaciones raras o de corta duración o en años excepcionales.
Algunos daños ocasionalmente o retardo en la época de siembra.
Clase 2 – Se pueden esperar algunas inundaciones ya sea en ciertos meses o, en
cualquier período con condiciones meteorológicas excepcionales, que pueden
destruir cultivos o impedir el uso del suelo en ciertos años.
Clase 3 – Frecuentes inundaciones que ocurren en forma regular en ciertos meses
del año, por lo que el suelo puede usarse únicamente en determinada época.
Clase 4 – Inundaciones frecuentes o irregulares, a veces de larga duración, de
modo que el uso para cultivos se hace muy inseguro y casi impracticable.
VEGETACIÓN, USO O COBERTURA
En éste tópico debe suministrarse todo dato que pueda
servir para que el lector de la descripción se imagine de
qué paisaje general se trata. Es decir si la vegetación es
natural o artificial, si la tierra del área se destina a
cultivos, ganadería, forestación, recreación y conservación
de flora y fauna o con fines urbanos. En el caso de
cultivos: cuáles son, en qué época se desarrollan, si son
perennes, de secano o irrigados, etc.
Un ejemplo de categorías utilizadas
Petraglia. C
y D’ellaqua, M (200?).
Cobertura
Plantación de Pino
Plantación de Eucalipto Grandes
Plantación de Eucalipto Globulus
Plantación otros Eucaliptos
Plantación de Salicáceas
Monte Nativo %
Parques
Bosque costero
Plantación de Citrus
Cultivos de Verano
Praderas artificiales-cultivos
Arroz
Arroz-Caña
Caña de Azúcar
Chacras de Tabaco 0.05%
Horti-fruti-viticultura
Rastrojos de Cultivos de Verano
Rastrojos de Arroz
Rastrojo de Arroz-Caña
Rastrojo de Caña de Azúcar
Rastrojos de Horti-fruti-cultura
Campo Natural o Regenerado
Dunas y Suelos desnudos
Bañados y otros Humedales
Cuerpos de Agua
Has.
94,560
112,320
68,572
110,636
677
415,205
554
1,823
16,944
560,773
5,267
58,189
2,257
5,808
4,448
11,661
292,737
63,249
3,136
4,247
21,269
6,460,357
2,639
33,053
204,751
(%)
1.04%
1.24%
0.75%
1.22%
0.01%
4.57
0.01%
0.02%
0.19%
6.17%
0.06%
0.64%
0.02%
0.06%
0.05%
0.13%
3.22%
0.70%
0.03%
0.05%
0.23%
71.13%
0.03%
0.36%
2.25%
es
el
trabajo
de
Suelos con escasa vegetación
Centros poblados y construcciones
Total
507,761
19,863
9,708,756
5.59%
0.22%
100.0%
Este es un ejemplo de una clasificación del uso de la tierra en varias imágenes
satelitales que cubren casi la tercera parte del territorio nacional. La leyenda puede ser
más específica y detallada cuando también se aborda una escala más detallada.
PROPIEDADES MOFOLÓGICAS
IDENTIFICACIÓN Y NOMENCLATURA DE LOS HORIZONTES DEL Y CAPAS DEL
SUELO
La descripción de un perfil forma parte de la descripción
del completa del suelo, complementándose con la descripción
de las propiedades asociadas, vistas recientemente. Consiste
principalmente en la descripción de sus varios horizontes y
capas.
Un horizonte se puede definir como una capa de suelo
aproximadamente paralela a la superficie del suelo, y que
posee propiedades producidas por los procesos formadores del
suelo, pero distintas de las de las capas adyacentes. Las
variaciones en las propiedades de las capas más o menos
paralelas a la superficie, suelen darse fundamentalmente en
el sentido vertical más que en el horizontal.
Las capas se distinguen de los horizontes por su origen
más
que
por
la
forma.
Las
capas
son
el
producto
de
crecientes
de
ríos,
avalanchas,
erupciones
volcánicas
y
grandes
tormentas
de
viento
más
que
por
procesos
de
formación de suelo. lo general un horizonte se diferencia de
sus adyacentes, al menos parcialmente, por características
que pueden ser vistas o medidas en el campo, tales como
color,
estructura,
textura,
consistencia,
y
presencia
o
ausencia
de
carbonatos.
A
estas
capas
se
les
llama
“horizontes”
y
sus
variaciones
pueden
ser
desde
muy
aparentes a corta distancia o difícilmente advertidas.
De acuerdo con el criterio que usamos, los horizontes se
identifican en parte por su morfología, y en parte por las
propiedades de los horizontes sub y supra-yacentes a él. No
obstante generalmente se requiere el complemento de datos de
laboratorio
para
la
identificación
y
designación
de
horizontes,
así
como
también,
para
su
caracterización
detallada.
Perfil
El perfil del suelo, incluye el conjunto de todos los
horizontes
genéticos,
las
capas
orgánicas
sobre
la
superficie, y el material madre u otras capas debajo del
“solum”, que influyen en la génesis y en el comportamiento
del suelo.
Aparte de los horizontes genéticos, muchos suelos tienen
capas heredadas de un material madre estratificado; tal es
el caso de perfiles que tienen características debidas no
sólo a los procesos de formación del suelo, sino heredados
de un material madre estratificado, como es el caso de una
terraza aluvial, o incluso debidas en parte a procesos
geológicos que acompañan la formación del suelo. Así, un
suelo
con
un
perfil
bien
desarrollado,
puede
ser
gradualmente cubierto con ceniza volcánica, loess, arena
transportada por viento, por ejemplo, sin afectar seriamente
la vegetación; el horizonte superficial se va engrosando y
la parte inferior del perfil va quedando gradualmente fuera
del alcance de los procesos activos de formación del suelo.
DESIGNACIÓN DE LOS HORIZONTES Y CAPAS
No es absolutamente necesario designar los horizontes
para
lograr
una
buena
descripción
de
un
perfil.
No
obstante,
la
utilidad
de
las
descripciones
se
ve
incrementada
por
el
uso
adecuado
de
las
designaciones
genéticas tales como A, E, B y C. Tales interpretaciones
muestran las relaciones genéticas entre los horizontes de un
perfil, mientras que números como 1, 2, 3, etc. o letras
indefinidas, no nos dicen nada, excepto la secuencia en
profundidad.
Las
designaciones
genéticas
permiten
las
comparaciones entre suelos.
Se acepta que cada designación de horizonte o capa no es
más que un símbolo que indica a juicio de quien describa el
suelo, la magnitud de diferenciación del horizonte respecto
del material original a partir del cual se formó, incluyendo
el grado de diferenciación, como en el caso de los estratos
R y de algunos C. Esto implica que cada símbolo indica
meramente
un
hecho
estimado,
no
provocado,
implica
que
cuando leemos un símbolo debemos reconstruir mentalmente el
carácter del material madre, pues esto es lo que se hizo
cuando
se
le
asignó
una
denominación.
Implica
que
los
procesos
que
han
provocado
el
cambio
no
necesitan
ser
conocidos. También implica que una morfología particular no
necesita ser estricta de perfil a perfil, y que el criterio
para dar un juicio es más bien la morfología en relación con
un determinado material original.
Como base para la comparación se utiliza el material
madre del horizonte en cuestión, y no el material del
horizonte o capa designado por el símbolo C. La morfología
se interpreta en relación con este material madre presumido,
y no en términos de valores absolutos de las propiedades.
CONVENCIONES QUE
GOBIERNAN EL USO DE SÍMBOLOS
Los símbolos usados en la designación de los
del suelo son los indicados a continuación.
horizontes
Las letras mayúsculas: H, O, A, E, B, C y R indican
horizontes principales o clases dominantes de diferenciación
de lo que se supone fue el material parental. Estrictamente,
C y R no deberían llamarse "horizontes del suelo, sino
"capas", ya que sus características no fueron producidas por
los factores de formación del suelo. No obstante se les
incluye aquí con los horizontes principales (o mayores) como
elementos
importantes
del
perfil
del
suelo.
Para
los
horizontes
transicionales
se
emplea
una
combinación
de
letras mayúsculas.
Las
letras
minúsculas
se
emplean
como
sufijos
para
calificar a los horizontes principales en términos de la
clase
de
diferenciación
sufrida
a
partir
del
material
parental
supuesto.
Las
letras
minúsculas
siguen
inmediatamente a la letra mayúscula. Pueden emplearse dos
letras minúsculas para indicar dos caracteres distintivos
concurrentes.
Los números arábigos se emplean como sufijos para indicar
la subdivisión
vertical de un horizonte del suelo. Para los
horizontes A y B la cifra sufijo está siempre
precedida por
una letra minúscula sufija.
Los números arábigos se usan también como prefijos para
marcar discontinuidades litológicas.
HORIZONTES PRINCIPALES o MAYORES
Los horizontes principales o mayores se pueden subdividir
en aquellos de composición predominantemente orgánica de los
minerales.
Horizontes orgánicos
H: horizontes orgánico formado o en formación a partir
de material orgánico depositado sobre la superficie, que
está saturado con agua durante períodos prolongados, excepto
si fue drenado artificialmente, y que contiene 18 por ciento
de carbono orgánico o más si la fracción mineral contiene
más de 60 por ciento de arcilla, 12 por ciento de carbono
orgánico o más si la fracción mineral no contiene arcilla, o
proporciones intermedias de carbono orgánico para contenidos
intermedios de arcilla.
Los horizontes H se forman en la superficie de suelos
anegados, sea como capas espesas acumuladas en los suelos
orgánicos o como capas delgadas de turba, más o menos
descompuesta, sobre los suelos minerales.
Aun cuando sea arado el suelo superficial conserva un
contenido elevado de materia orgánica después de mezclada la
turba con el material mineral. La formación del horizonte H
se relaciona a un anegamiento prolongado, salvo que los
suelos hayan sido drenados artificialmente. Los horizontes H
pueden estar enterrados de bajo de la superficie.
O: depósito orgánico formado o en formación a partir de
acumulaciones
de
material
orgánico
depositado
sobre
la
superficie, que no está saturado con agua por más de unos
pocos días al año y que contiene 20 por ciento o más de
materia orgánica o 15% de Carbono orgánico.
Los horizontes O son los horizontes orgánicos que se
desarrollan encima de algunos suelos minerales, por ejemplo
el tapiz de "humus bruto" que cubre ciertos suelos ácidos.
El material orgánico de los horizontes O está por lo general
pobremente descompuesto y ocurre en condiciones de buen
drenaje.
Esta
designación
no
incluye
a
los
horizontes
formados por una trama de raíces en descomposición debajo de
la superficie del suelo mineral que es característica de los
horizontes
A.
Los
horizontes
O
pueden
estar
enterrados
debajo de la superficie.
Horizontes minerales
En general tienen menos de 15% de Carbono orgánico
de 20% de materia orgánica.
A:
o menos
horizonte
mineral
/formado
o
en
formación
adyacente a la superficie y que, o bien:
a) presenta
una
acumulación
de
materia
humificada, íntimamente asociada con la
mineral, o
en
o
orgánica
fracción
b) tiene una morfología adquirida por formación de
suelo
pero
carece
de
las
propiedades
de
los
horizontes E y B (definidos más adelante).
La materia orgánica en los horizontes A, está bien
descompuesta y está distribuida como partículas finas o está
presente como revestimientos sobre las partículas minerales.
Como resultado, los horizontes A son normalmente más oscuros
que los horizontes adyacentes inmediatamente por debajo. El
material orgánico deriva de restos de plantas y animales
incorporados al suelo por actividad biológica más que por
desplazamiento
(lavado).
En
climas
cálidos
áridos
donde
solamente hay una acumulación ligera o virtualmente nula de
materia orgánica, los horizontes superficiales pueden ser
menos oscuros que los horizontes adyacentes situados por
debajo. Si el horizonte superficial tiene una morfología
distinta de la del presunto material parental y carece de
los rasgos característicos de los horizontes E y B, se le
designa como horizonte A en base a su ubicación superficial.
E: horizonte mineral que presenta una concentración de
fracciones arena y limo ricas en minerales resistentes,
resultante de una pérdida de arcillas de silicatadas, hierro
y aluminio o alguna combinación de ellos. El concepto general
es que se trata de un horizonte empobrecido de arcilla y
otros componentes.
Los horizontes E son generalmente horizontes eluviales
que subyacen a un horizonte H, O u A del cual se diferencian
por un contenido menor de materia orgánica y por un color
más claro.
Un horizonte E se diferencia de un horizonte B subyacente
por colores de intensidad mayor o pureza menor, o por una
textura más gruesa, o por ambas.
B: horizonte mineral en el cual la estructura de roca
está destruida o es apenas evidente, y que se caracteriza
por uno o más de los rasgos distintivos siguientes:
a.
una concentración iluvial de arcilla
hierro, aluminio o materia orgánica,
combinación;
silicatada,
solos o en
b.
una
concentración
residual
de
sesquióxidos
relación a. los materiales originales,
c.
una
alteración
del
material
con
relación
a
su
condición original en un grado tal que se han
formado
arcillas
silicatadas,
se
han
liberado
óxidos, o ambas cosas, o se ha formado estructura
granular, de bloques o prismática.
con
Nota El término "horizonte mineral" se emplea aquí para indicar
que
los
contenidos
de
materia
orgánica
son
menores
que
los
correspondientes
a
los
horizontes
orgánicos
definidos
anteriormente como H y O.
Los horizontes “B” pueden diferir significativamente.
Generalmente se necesita establecer la relación entre los
horizontes supra-yacentes y los subyacentes y estimar cómo
se
ha
formado
un
horizonte
B
antes
de
que
pueda
identificársele.
En
consecuencia,
los
horizontes
“B”
necesitan generalmente calificarse con un sufijo para que
tengan connotación suficiente en una descripción de perfil.
Un horizonte “B” de acumulación de humus se designa Bh,
un “B” de hierro como “Bs”, un "B textural" como “Bt”, un “B
de
colores”
como
“Bw”.
Debe
enfatizarse
aquí
que
las
designaciones
de
horizontes
son
solamente
descripciones
cualitativas. No se definen en los términos cuantitativos
requeridos con propósito diagnóstico. Los horizontes “B”
pueden presentar acumulaciones de carbonatos, de yeso o de
otras sales más solubles. Tales acumulaciones, sin embargo,
no distinguen por sí mismas a un horizonte B.
C: horizonte (o capa) mineral de material no consolidado
a partir del cual se presume que se haya formado el solum y
que
no
muestra
propiedades
diagnósticas
de
ningún
otro
horizonte principal.
Tradicionalmente, C ha sido la designación del material
parental. Con lo cual no es posible asegurar que el material
subyacente a los horizontes A, E y B, y a partir del cual
supuestamente
se
han
desarrollado
éstos,
permanezca
incambiado. La designación de C se aplica por lo tanto al
material no consolidado que subyace al solum y que no
satisface los requisitos que definen a los horizontes A, E o
B. E1 material puede, sin embargo, haber sido alterado por
meteorización química debajo del suelo y puede incluso estar
altamente meteorizado o pre-meteorizado.
Pueden incluirse en los horizontes C acumulaciones de
carbonatos, de yeso o de sales más solubles si el material,
aparte de ello está poco afectado por los procesos que
contribuyeron
a
la
formación
de
estas
capas
interestratificadas.
Cuando un horizonte C consiste principalmente de rocas
sedimentarias
tales
como
esquistos,
margas
(roca
sedimentaria arcillosa y calcárea), y siltitos o lutitas,
areniscas, que son suficientemente densas y coherentes como
para permitir poca penetración de las raíces de las plantas
pero que pueden no obstante ser excavadas con
una pala, el
horizonte C se
califica con
el sufijo m por compactación.
R: capa de roca dura continua. La roca de las capas R
es suficientemente coherente cuando húmeda como para tornar
impracticable su excavación a mano con una pala. La roca
puede contener fisuras pero éstas son muy escasas y muy
pequeñas como para permitir un desarrollo significativo de
raíces .
El material gravilloso y pedregoso que permite
desarrollo de raíces se considera como horizonte C.
el
HORIZONTES TRANS1CIONALES
Los horizontes transicionales en los que se mezclan las
propiedades Je dos horizontes principales se indican por la
combinación de dos letras mayúsculas (por ejemplo: AE, EB,
BE, BC, CB, AB, BA, AC y CA. La primera letra identifica el
horizonte principal al que más se asemeja el horizonte
transicional.
Los
horizontes
mixtos
que
consisten
de
partes
entremezcladas de cada una de las cuales son asimilables a
horizontes
principales
diferentes,
se
designan
con
dos
letras mayúsculas separadas por una barra ( por ejemplo E/B,
B/C). La primera letra identifica el horizonte principal
dominante .
Como se aprecia, los
identifican
por
sufijos
anteriormente.
horizontes transicionales
numéricos,
como
era
no se
usual
Además de las citadas, pueden darse otras capas que no
se han formado por un proceso dentro del suelo. Por tal
motivo se dice que no son genéticas. Éstas son capas que se
han acumulado por el arrastre de agua de arroyos y ríos,
sedimentos de origen eólico que se depositan repentinamente
sobre el suelo o cenizas y derrames de lavas volcánicas.
La denominación de estas capas consiste en números. Los
más
bajos
se
encuentran
cercanos
o
en
la
superficie,
mientras que los más altos están en las profundidades del
perfil .
LETRAS SUFIJO
Con el propósito de calificar al horizonte principal
puede utilizarse una letra minúscula como sufijo. Pueden
combinarse más de una letra sufijo para indicar propiedades
que se presentan concurrentemente en el mismo horizonte
principal
(por
ejemplo
Ahz,
Bzg,
Cck).
Normalmente
no
deberían emplearse más de dos sufijos en combinación. En los
horizontes transicionales no se hace uso de sufijos que
califiquen solamente a una de las letras mayúsculas. Puede,
sin embargo, emplearse un sufijo cuando él se aplica al
horizonte transicional como un todo (por ejemplo BCk, ABg).
Las
letras
sufijo
empleadas
para
horizontes principales son las siguientes:
calificar
a
los
b. Para un horizonte enterrado o bi-secuencial,(por ejemplo,
Btb.
c.
Acumulación
en
forma
concrecionaría;
este
sufijo
se
emplea generalmente en combinación con otro que indica la
naturaleza del material concrecionarlo (por ejemplo Bck,
Ccs).
g. Moteado que refleja variaciones en oxidación y reducción
(por ejemplo, Bg, Btg
h.
Acumulación de materia orgánica en horizontes minerales
(por ejemplo Ah, Bh); para el horizonte A, el sufijo h se
aplica solamente cuando no ha habido perturbación o mezcla
por labranza, pastoreo u otras actividades humanas (los
sufijos h y p son así mutuamente excluyentes).
i. Ocurrencia de permafrost.
j.
Ocurrencia
potasio).
de
jarosita
(sulfato
hidratado
de
hierro
y
k. Acumulación de carbonato de calcio.
m.
Fuertemente
cementado,
consolidado,
endurecido;
este
sufijo se emplea generalmente en combinación con otro que
indica el material cementante (por ejemplo, Cmk para un
horizonte petrocálcico dentro de un horizonte C, Bms para
un ferripan - para de hierro - dentro de un horizonte B)
n. Acumulación de sodio(por ejemplo, Btn).
p. Perturbado por labranza
u otras
prácticas
agrícolas (por
ejemplo, Ap).
q Acumulación de
sílice (Cmq, indicación
de
una capa de
silcreta en un horizonte C).
r. Reducción fuerte como resultado de la influencia de la
napa freática (por ejemplo Cr).
s. Acumulación de sesquióxidos (por ejemplo: Bs).
t. Acumulación
W.
de
arcilla
(por ejemplo, Bt).
Alteración
in
situ
reflejada
por
el
contenido
arcilla, el color, la estructura (por ejemplo, Bw).
X. Ocurrencia de
de
fragipan (por ejemplo Btx).
y. Acumulación de yeso
z. Acumulación de
ejemplo, Az o Ahz)
(por ejemplo, Cy).
sales
más
solubles
que
el
yeso
(por
SUFIJOS NUMÉRICOS
Los horizontes designados por una combinación simple de
símbolos-letras pueden subdividirse verticalmente numerando
cada subdivisión consecutivamente, comenzando por la parte
superior del horizonte (por ejemplo Btl - Bt2 - Bt3 - Bt4).
El
sufijo
numérico
siempre
va
a
continuación
de
los
símbolos literales. La secuencia numérica se aplica a un
símbolo solamente, de manera que la secuencia se reinicia
en caso de que cambie el símbolo (por ejemplo, Bt l - Bt 2 Btx l - Btx 2 ). Una secuencia no se interrumpe, no obstante,
por una discontinuidad litológica (por ejemplo, Bt l - Bt 2 2Bt 3 ).
Las subdivisiones numéricas también pueden aplicarse a
los horizontes transicionales (por ejemplo, AB l - AB 2 ), en
cuyo caso debe entenderse que el sufijo se aplica al
horizonte entero y no a la última letra mayúscula.
Las subdivisiones numéricas también pueden aplicarse a
los horizontes transicionales (por ejemplo, AB l - AB 2 ), en
cuyo caso debe entenderse que el sufijo se aplica al
horizonte entero y no a la última letra mayúscula.
PREFIJOS NUMÉRICOS
Cuando
es
necesario
distinguir
discontinuidades
litológicas, se agregan números arábigos como prefijos a
las
designaciones
de
horizontes
que
lo
requieran (por
ejemplo, cuando el horizonte C es diferente del material en
el cual se presume que se ha formado el suelo, podría
obtenerse la secuencia de horizontes siguiente: A - B - 2C.
Capas fuertemente contrastantes dentro del material del
horizonte C pueden indicarse como una secuencia A-B-C-2C3C…).
Puede apreciarse que en esta nomenclatura los números
arábigos reemplazan a los números romanos que se empleaban
anteriormente (1 en lugar de I, 2 en lugar -de II, etc.).
CONSIDERACIONES SOBRE LAS REGLAS DE NOMENCLATURA DE HORIZONTES DEL
SUELO
La nomenclatura
precedentemente
es
de horizontes del suelo
de
aplicación
bastante
desarrollada
reciente
y
sustituye a la empleada anteriormente. Fue elaborada, en un
primer borrador, por un grupo de expertos internacionales
bajo el auspicio de FAO en 2006. La versión presentada en
este texto, y considerada por ahora como definitiva, es sin
embargo de difusión mucho más reciente y no generalizada
aún suficientemente en el seno de la comunidad científica
nacional. En Uruguay, carece de difusión en la actualidad;
se prevé que será alcanzada gradualmente como es habitual
en circunstancias de esta naturaleza.
Por
lo
indicado
precedentemente
y
porque
las
nomenclaturas
previas
(o
"tradicionales")
son
todavía
frecuentemente
citadas
y
utilizada
en
la
bibliografía
técnica a continuación se realiza una correlación entre los
sistemas de designación de horizontes del suelo.
Designación o Nomenclatura de los Principales Horizontes
Naturaleza
Orgánica
Mineral
Capas
Nomenclatura/Proceso o
condición
H: húmedo
O: seco
A:ganancia,enriquecimien
to en material orgánico
E: pérdida lavado o
eluviación)
Horizontes
transicionales – poco
diferenciables
B: ganancia o
acumulación
Horizontes
transicionales – poco
diferenciables
C: material parental
transformado no
consolidado
Horizontes donde se
aprecian los límites
entre los diferentes
materiales que los
componen pero por su
forma son de difícil
descripción (quebrada u
ondulante)
R: material parental
consolidado
I: de hielo, orgánicas o
minerales claramente
separables
L: Sedimento depositado
en un cuerpo de agua
compuesto por materiales
orgánicos e inorgánicos,
también llamado material
límnico
W: capa o napa de agua
en los suelos o agua
sumergiendo suelos, ya
sea permanentemente o en
forma cíclica dentro de
un período de 24 horas
1968
Antes
1968
H
O
A
O
A1
E
A2
AB
BA
A3
B1
B
B2
BC
CB
AC
CA
C
B3
B3
AC
AC
C
A/B
B/A
AyB
ByA
R
R
1,2,
3 …
,etc
.
I,
II,
III,
etc.
-
-
Nuevos
2006:
símbolos
para
horizontes
mayores,
anexados
en
Capa I: lentes de hielo y bordes que contienen como
mínimo 75% de hielo (en volumen) y materiales orgánicos o
minerales claramente separables en el suelo.
Capa
L:
Sedimento
depositado
en
compuesto por materiales orgánicos e
llamado material límnico.
un
cuerpo
de
agua
inorgánicos, también
Capa W: capa o napa de agua en los suelos o agua
sumergiendo
suelos,
ya
sea
permanentemente
o
en
forma
cíclica dentro de un período de 24 horas.
Debe tenerse presente que las correlaciones expuestas
son en algunos casos solamente aproximadas ya que las
nuevas designaciones no son solamente formales, en algunos
casos,
sino
también
conceptuales.
Esto
es
válido
particularmente para varias letras empleadas como sufijos.
En
términos
generales,
la
nueva
nomenclatura
es
esencialmente descriptiva y objetiva tanto que la anterior
incluía interpretaciones de naturaleza edafogenética. Por
ejemplo, un horizonte designado Bir anteriormente suponía
necesariamente una acumulación de hierro de origen iluvial.
En
la
presente
nomenclatura,
una
acumulación
de
sesquióxidos
de
hierro
puede
ser
de
origen
iluvial
o
residual (horizonte Bs y Bws
respectivamente).
Tal vez uno de los cambios conceptuales más radicales en
el sistema de nomenclatura de horizontes es el relativo al
empleo de los sufijos numéricos que en el sistema anterior
poseía claras connotaciones genéticas, mientras que ahora
solamente indica una subdivisión vertical consecutiva que
refleja
cambios
cuantitativos
menores
pero
no
cambios
cualitativos. Estos se designan en cambio mediante los
sufijos literales, aunque su connotación genética es de
todas maneras bastante limitada según ya se indicó.
Características subordinadas a los Horizontes Mayores
NOMENCLATURA
Actual(2006)
a: material altamente
descompuesto
b: horizonte genético enterrado
c: en horizontes minerales
concreciones o nódulos; en
materiales límnicos (L) material.
coprógeno (deyecciones).
d:capas densas, en suelos
minerales(L) tierra de
diatomeas,en materiales límnicos
e: material orgánico
moderadamente descompuesto.
f: suelo congelado (permafrost).
g: condiciones stágnicas
(estancamiento, óxido reducción)
h: acumulación de materia
orgánica.
i: en suelos minerales, caras de
presión o deslizamiento; en
suelos orgánicos material
orgánico ligeramente
descompuesto.
j: moteado de jarosita (sulfato
de hierro y potasio hidratado de
color amarillo).
k: acumulación pedogenética de
1968
Previa
1968
b
c
b
cn
h
H
i
g
g
k
ca
-
-
j
-
ca
ca
CaCO 3.
i: moteado en franjas capilares.
i (ocurrencia
de
permafrost)
-
m: en suelos minerales
endurecimiento o cementación; en
material límnico (L) acumulación
de sodio.
n:acumulación
de sodio
o: acumulación residual de
sesquióxidos
-
-
p: perturbación por arado u otro
tipo de herramienta
q: acumulación de sílice.
r: fuerte reducción.
s: acumulación iluvial de
sequióxidos
t: acumulación de arcilla
silicatada
p
p
q
r
s
g
ir
t
t
u: sin
significado
específico,
utilizado
para designar
subdivisiones
necesarias a
juicio del
autor de la
descripción
sin
significado
específico,
utilizado
para designar
subdivisiones
necesarias a
juicio del
autor de la
descripción
No
existía
U: materiales urbanos u otros
fabricados por el hombre.
v:ocurrencia de plintita
d: desarrollo de color o
estructura
x: carácter fragipan
y: acumulación de yeso.
z: acumulación de sales más
solubles que el
yeso
@: evidencia de crioturbación
W: alteración
in situ
manifiesta a
través de un
incremento en
el contenido
de
arcilla,alteración de
minerales
primarios o
desarrollo de
estructura.
x
y
cs
sa
La última versión del manual para la descripción del
perfil de suelo de la FAO 2006–recomienda la utilización de
la siguiente nomenclatura:
Designación o Nomenclatura de los Principales Horizontes
Horizontes Orgánicos: O u H
O seco
H húmedo
Horizontes Minerales:
Horizonte A (material orgánico),
E
B
C
R
(eluviación)
(iluviación)
(material parental no consolidado).
(material parental consolidado
A estos símbolos utilizados por un período significativo
se le suman algunos nuevos. Sin embargo se prevé una muy
baja frecuencia de utilización en los suelos de nuestro
país.
Características subordinadas a los Horizontes Mayores
a: material altamente descompuesto
b: horizonte genético enterrado
c: en horizontes minerales concreciones o nódulos; en
materiales
límnicos
(L)
material
coprógeno
(deyecciones).
d:capas
densas,
en
suelos
minerales(L)
tierra
de
diatomeas,en materiales límnicos
e: material orgánico moderadamente descompuesto.
f: suelo congelado.
g: condiciones stágnicas (estancamiento.)
h: acumulación de materia orgánica.
i: en suelos minerales, caras de presión o deslizamiento;
en
suelos
orgánicos
material
orgánico
ligeramente
descompuesto.
j: moteado de jarosita (sulfato de hierro y potasio
hidratado de color amarillo).
k: acumulación pedogenética de CaCO 3.
I: moteado en franjas capilares.
m: en suelos minerales endurecimiento o cementación; en
material límnico (L) acumulación de sodio.
o: acumulación residual de sesquióxidos
p: perturbación por arado u otro tipo de herramienta
q: acumulación de sílice.
r: fuerte reducción.
s: acumulación iluvial de sesquióxidos
t: acumulación de arcilla silicatada
NOMENCLATURA DE HORIZONTES EN URUGUAY
Tanto la nomenclatura de horizontes actual como las
anteriores fueron diseñadas en una perspectiva mundial, por
lo cual es evidente que en un medio geográfico reducido
como el Uruguay, con escasa diversidad climática y biótica,
muchos de los horizontes definidos arriba no ocurren en el
país. Ello se debe a que no se dan en él las condiciones
ambientales que promueven los procesos de formación del
suelo que dan origen a esos horizontes.
Los horizontes A,E,B,C, y R y sus combinaciones o las
transiciones entre ellos (horizontes transicionales) son
frecuentes en el Uruguay, en tanto que el horizonte H está
muy
limitado
a
áreas
pantanosas
muy
reducidas
y
el
horizonte O solo ocurría en algunas plantaciones de pinos
en dunas costeras. En el presente las áreas forestadas con
Eucaliptos y pinos vienen
aparición de horizontes O.
extendiéndose
y
con
ellas
la
Los horizontes calificados con los sufijos g,h,k,n,p,r o
t, son frecuentes o muy frecuentes en Uruguay, en tanto que
otros definidos por los sufijos e, i,j,m,q,s,w, x, y z, son
inexistentes
o
de
ocurrencia
muy
excepcional
y
muy
localizada.
Secuencia teórica de horizontes en un perfil de suelo. No todos los suelos
presentan una misma secuencia de horizontes, sea la indicada en la figura u otra. No
todos los horizontes aparecen representados en la figura.
Generalmente ausente en los suelos de pradera
Horizontes de máxima
Actividad biológica y
Lixiviación
- Horizonte orgánico constituido por restos vegetales
parcial o totalmente descompuestos no saturado con agua.
- Horizonte oscuro de composición orgánica-mineral
- Horizontes claro, de máxima lixiviación
- Horizonte de transición más similar al A que al B
SOLUM
Suelo formado
por procesos
genéticos
Horizontes de máxima
acumulación o
alteración del
material parental
- Horizonte de transición más similar al B
que al A
- Horizonte de máxima iluviación de arcilla, hierro o
humus o bien de máximo desarrollo de estructura.
-Horizonte de
transición más
similar al B que al C
Material parental
Material parental (por lo común roca alterada por
agentes climáticos o biológicos).
Sustrato de roca
consolidada
Roca inalterada
COLOR
Casi todos los perfiles consisten en varios horizontes que
difieren por su color. Cada perfil de suelo examinado y descripto
en el campo, debe presentar un cuadro completo de los colores de
todos sus horizontes. El color de un horizonte puede ser uniforme
o presentarse rayado, manchado, abigarrado, o moteado en distintas
formas.
DETERMINACIÓN DEL COLOR
La forma más conveniente de medir un color es mediante la
comparación con una carta de colores estándar. La que se usa
generalmente para los suelos es una modificación de la carta de
colores de Munsell e incluye alrededor de en 175 cuadros coloreados sistemáticamente montados por matiz, pureza e intensidad,
las tres variables simples que se combinan para dar todos los
colores. El matiz es el color
dominante del espectro y está
relacionado con la longitud de onda dominante de la luz. La pureza
se refiere a la relativa iluminación del color y es función
(aproximadamente la raíz cuadrada) de la cantidad total de luz.
La intensidad (a veces llamada también "saturación") es la pureza
relativa o intensidad del color del espectro y aumenta con la
disminución del agrisado.
En la tabla de Munsell, los colores de cada tarjeta tienen el
mismo matiz el que se designa mediante un símbolo en el ángulo
superior derecho de la hoja correspondiente. Dentro de cada matiz
encontramos variaciones tanto en pureza como en intensidad.
Los colores en cada hoja entonces, están dispuestos verticalmente
según saltos visualmente iguales, y son sucesivamente más claros hacia
arriba; su pureza aumenta en ese sentido.
Matiz
Pureza
Intensidad
La intensidad se incrementa horizontalmente hacia la derecha; los
colores son menos grises hacia ese lado (o sea, obviamente, más grises
hacia la izquierda).
La nomenclatura de un color de suelo consiste en: a) el nombre
del color y b) la notación Munsell o símbolo del color.
El primero se usa para las publicaciones generales. En
descripciones
oficiales,
correlaciones,
comparaciones
internacionales, etc. se debe usar la notación Munsell acompañada
del nombre del color. Nombres
extravagantes
como
“pardo
herrumbre”, “tostado”, “gris ratón”, “amarillo limón”, “pardo
chocolate” no deben usarse jamás en las descripciones de suelo.
La notación Munsell consiste en notaciones distintas que
combinadas forman el símbolo del color. Este se forma con la
notación del matiz, luego la pureza y finalmente la intensidad. El
símbolo del matiz es una abreviatura del color del espectro (R de
Red, rojo; YR de yellow-red, amarillo-rojo; Y de yellow,
(amarillo) precedido de un número entre 0 y 10. Dentro de cada
rango (Y, YR, y R) es el más amarillo y menos rojo a medida que el
número crece. La mitad del rango es 5, el = de un rango coincide
con el 10 del matiz más rojo que le sigue , de modo que por
ejemplo 5YR está en el medio del matiz amarillo rojo, que se
extiende desde 10R (0YR) hasta 10YR (o sea 0Y).
0R
0YR
0Y
2,5YR
5YR
7,5YR
10YR
La no tación de la pur eza co nsiste de un numero
e ntr e O (e l ne gro absoluto hasta 10 (para el blanco),
aumentando hacia arriba. Se indica con la numeración d e
una fracción (qu ebrado).
La inte nsidad se anota con un denominador, es decir,
después de la barra. Consiste en un número que comienza
con 0 para los colores neutros (negros, grises, blanco)
y au menta a inter valos reg ulares ha cia la derecha
alrededor de 20, aunque intensidades tan altas no
existen en suelo s.
Ejemplo:
Pureza
7
6
5
4
3
2
0
2
4
6
8
Intensidad
Los colores acromáticos absolutos grises, blancos y
negros puros) tienen Intensidad y no tienen matiz. Para ellos se
usa como símbolo inicial la letra N (neutro). Para los gley
existe una cartilla especial confeccionada con Y - G - B.
La notación de un color se escribe correctamente comenzando por
el símbolo del matiz y luego, dejando un espacio, la pureza y la
intensidad separadas por una barra de quebrado. Ejemplo, si el color
tiene un matiz de 5 YR, una pureza de 5 y intensidad de 6, la
notación del color será 5 YR 5/6.
Pueden existir colores con valores intermedios por
ejemplo, entre el 5 YR 5/6 y el 5 YR 6/6 tendríamos el 5 YR 5,5/6.
Lo mismo puede suceder con la intensidad, por ejemplo,
entre el 5 YR 5/2 y el 5 YR 5/3, tendríamos el 5 YR 5/2,5.
Pueden variar ambos a la vez, por ejemplo: 5 YR 5,5/2,5.
Los colores con matices intermedios también se pueden
usar: entre 2,5 YR 5/6 y 5 YR 6/8, tendríamos 3,75 YR 5, 5/7. En
este ejemplo se han interpolado las tres notaciones. Por lo común
solo es necesario anotar valores intermedios de pureza e
intensidad.
A los efectos de la determinación práctica, se toma una
porción de suelo, se coloca detrás de la tabla y a través de los
orificios se le compara con los distintos cuadros. Las
determinaciones en el campo deben hacerse en lo posible con día
despejado y con la máxima intensidad de luz solar. La luz debe
incidir directamente sobre la tabla.
Si bien es difícil que la muestra sea absolutamente igual
en color a alguno de la tabla, con la práctica se llega a hallar
rápidamente el color más cercano al de la muestra.
Color en seco y en húmedo
El color del suelo cambia con el contenido de humedad, en
algunos mucho, y en otros suelos comparativamente poco. Los colores
en húmedo son por lo común son más oscuros, desde un medio hasta
tres unidades en pureza y pueden cambiar desde 1/2 hasta 2 unidades
en intensidad. Pocas veces difieren en matiz. Las mayores
diferenciasen la pureza se observan en los horizontes con
contenidos moderados de materia orgánica.
Las
al aire y
humedece la
humedad haya
mediciones del color del suelo se obtienen: a) seco
b) a la capacidad de campo. Para esta última se
muestra y se lee el color en cuanto la película de
desaparecido.
En general se prefiere dar el color en húmedo, pero es
conveniente, toda vez que sea posible, dar los colores en las dos
condiciones. El color en seco se tomará de superficies recién
rotas de la muestra seca al aire.
Al darse la notación Munsell y el nombre del color
correspondiente (que trae la misma tabla, al dorso de la hoja),
pueden hacerse las abreviaturas que simplifiquen la exposición.
Ejemplo; " pardo rojizo" (5 YR 4/4 (S); ¾ en húmedo (H).En este
ejemplo el suelo presenta el mismo matiz tanto en seco como en
húmedo, y sólo ha variado la pureza en una unidad.
Las descripciones para uso técnico, o las de serie, deben
incluir los colores en seco y húmedo, especialmente cuando sean
significativamente diferentes.
En las fichas edafológicas basta con dar los símbolos de
Munsell en ambas condiciones de humedad, pero nunca en otros
estados (mojado).
Descripción del moteado
Horizonte "moteado"
motas de color".
significa
"manchado
con
lunares
o
El moteado se describe anotando: a) el color de la matriz
y el de las motas principales, y b) el tipo de moteado que se
observa.
El color de las motas (o color del moteado) se puede dar
al igual que el de la matriz, mediante la notación de Munsell,
pero en general suele ser suficiente emplear los términos
lingüísticos corrientes, para simplificar la descripción.
En cuanto al tipo de moteado, se describe correctamente
con tres notaciones: contraste, abundancia y tamaño de los
moteados.
Contraste
Se describe como: tenue, neto o sobresaliente
1) Tenues (t): los moteados son
indistintos y sólo se
hacen evidentes y reconocibles con un riguroso examen. La matriz
y los moteados presentan purezas o intensidades estrechamente
relacionadas.
2) Netos (n): aunque los moteados no son llamativos pero
se ven sin esfuerzo. El matiz, pureza e intensidad de la matriz
se distinguen fácilmente de los moteados y pueden variar en uno o
dos matices o en vari unidades de intensidad y pureza.
3) Sobresaliente (s): los moteados son evidentes y
constituyen uno de los rasgos destacados del horizonte. El matiz,
pureza e intensidad de la matriz suele estar separado por varias
unidades respecto del color de los moteados.
Abundancia
Se expresa por la porción relativa de la superficie que
aparece moteada por unidad de área del
horizonte expuesto.
Puede ser:
1) Poco moteados (Pc): los moteados ocupan menos del 2% de
la superficie expuesta.
2)
20% de
Moteados comunes (Cm): los moteados ocupan del 2 al
la superficie.
3) Moteados abundantes (Ab): los moteados ocupan más del
20%.
Tamaño
Se refiere a los diámetros aproximados de las motas o lunares
individuales.
1)
2)
3)
4)
5)
Muy pequeños- Moteado de 1mm. de diámetro mayor.
Pequeños - 1 - 2mm.
Moderado - 2 - 5mm.
Grandes - 5 -15mm.
Muy grandes - más de 15mm.
También se puede agregar a la descripción del moteado, si
los bordes de las motas son agudos (es decir de bordes netos),
claros (de menos de 2 mm de ancho) o difusos (de más de 2 mm.).
Cuando se quiere hacer una descripción menos detallada se
puede decir "ligeramente moteado"; "moteado" o "fuertemente
moteado" para dar una idea general de la abundancia. Del mismo
modo se puede proceder para indicar el contraste, especialmente
cuando de la notación de los colores no se aprecian claramente
dicho contraste: " débilmente moteado", "sobresalientemente
moteado", etc.
Finalmente se ha de hacer una especial advertencia cuando
se observe una relación entre color y la estructura o porosidad
del suelo e indicar el color del interior de los agregados y el
de los revestimientos o películas que los cubran.
TEXTURA
La textura del suelo se refiere a las proporciones
relativas de los varios grupos de tamaños de granos individuales
en una masa de suelo. Específicamente se refiere a las
proporciones de arcilla, limo y arenas de menos de 2 mm de
diámetro.
Las distinciones entre grupos de tamaños de partículas
son más o menos arbitrarías. Las discusiones se presentan en dos
párrafos distintos:
1) nombres
de
las
clases
texturales,
basados
sobre
proporciones de las fracciones arcilla, limo y arenas.
las
2) definición de las agrupaciones de fragmentos gruesos de
diámetro hasta 25 cm que pueden considerarse parte de la masa
del suelo y modificar la clase textural.
CLASES TEXTURALES
La textura de un horizonte es tal vez su característica
más permanente. El manejo puede modificar la estructura
rápidamente, pero no su textura. A menudo la textura de la capa
arable sufre modificación, pero no por cambios en dicha capa,
sino por mezcla de materiales con algún horizonte más inferior de
distinta textura; otras veces por incorporación de arena volada o
limo arrastrado, por el agua de riego. Los suelos que vuelan en
sequía pueden cambiar la textura por remoción de las partículas
finas.
La estructura y consistencia dependen mucho del tipo y
condición de la arcilla tanto como de su proporción, y también de
otros constituyentes del suelo, aún de su parte orgánica. La
estructura, consistencia y textura entonces deben considerarse
por separado.
No se deben asociar nombres de carácter agrícola a
condiciones de textura. Del mismo modo no se pueden aplicar a
todos los suelos de las distintas clases texturales, relaciones
fijas de fertilidad, productividad, y otras cualidades inferidas.
LAS FRACCIONES DEL SUELO
Las fracciones son los grupos de tamaños individuales de
partículas minerales. A veces se incluyen los fragmentos gruesos,
pero por lo general solo las partículas de menos de 2 mm de
diámetro se toman en cuenta como fracciones de suelo. Puesto que
muchas de las reacciones físicas y químicas del suelo ocurren
principalmente sobre la superficie de los granos, la más
importante será la parte “fina” del suelo. Sólo 4,500 gr de
arcilla seca de 0,001 mm presentan una superficie total de
alrededor de una hectárea. Esa superficie por unidad de peso
desciende rápidamente al aumentar el diámetro hasta que por
encima de 0,005 mm las diferencias son pequeñas.
Dos escalas son de uso común:
a. el sistema internacional de Atterberg.
b. el esquema usado por el U.S.D.A. que en que en esencia
es concordante con el primero, pero establece más
separaciones.
Nombre de
Fracción
Arena
gruesa
la Diámetro (mm)
Nombre
fracción
de
la Diámetro (mm)
muy 2,0 – 1,0
Arena gruesa
1,0 – 0,5
Arena media
0,5 – 0,25
2,0 – 0,2
Arena fina
0,25 – 0,10
Arena muy fina
0,10 – 0,05
0,2 -0,02
Limo
0,05 – 0,002
0,02 – 0,002
Arcilla
Menos de 0,002
Menos de 0,002
Nombre de las clases texturales
Muy raramente una muestra de suelo consiste totalmente de
una fracción. Las clases de textura se basan sobre distintas
combinaciones de arena, limo arcilla.
Dichas clases en el orden de incremento de las fracciones
finas son 12: arenoso, arenoso-franco, franco-arenoso, franco,
franco-limoso,
limoso,
franco-arci1loso-arenoso,
1/francoarci1lo-limoso, arci1lo-arenoso, arci1lo-limoso y arcilloso. 1/
Franco arcilloso.
Las clases que llevan el término "arena" o "arenoso" se
modifican además con los términos "muy fino", "fino", "grueso", y
"muy grueso". Para observar gráficamente las 12 clases texturales
básicas se puede utilizar el triángulo de texturas adjunto.
Las diferentes combinaciones de: Arena,
dan lugar a las clases texturales:
limo y arcilla
CLASE TEXTURAL
Abreviatura
Español
Ar
Arf
FAr
F
FL
FAc
FAcAr
AcAr
L
FAacL
AcL
Ac
Arenosa
Arenoso Franca
Franco Arenosa
Franca
Franco Limosa
Franco Arcillosa
Franco Arcillo Arenosa
Arcillo Arenosa
Limosa
Franco Arcillo Limosa
Arcillo Limosa
Arcillosa
Inglés
Sand
Loamy Sand
Sandy Loam
Loam
Silt Loam
Clay Loam
Sandy Clay Loam
Sandy Clay
Silt
Silty Clay Loam
Silty Clay
Clay
Agrupamiento general de las clases texturales
La necesidad de distinciones minuciosas en la textura de
los horizontes ha producido gran número de clases texturales. A
veces, sin embargo, conviene hablar en general de las texturas en
forma aproximada.
En otros tiempos se usaron términos como "suelos pesados"
o "suelos livianos" pero son confusos, ya que más bien se
referían a la energía necesaria para el laboreo, que no siempre
coincide con la verdadera composición mecánica.
Se da a continuación un esquema en términos generales que
agrupa en sólo 3 y 5 clases a las texturas básicas:
Términos Generales
Clases Texturales
Arenosos
SUELOS
Suelos de textura gruesa
ARENOSOS
Arenoso-francos
Franco - Arenosos
SUELOS
FRANCOS
Suelos de textura moderadamente
gruesa
Franco _Arenosos finos
Franco
finos
_Arenosos
muy
Franco
Suelos de textura media
Franco Limoso
Limoso
Franco arcillo arenoso
Suelos de textura moderadamente
fina
Franco arcilloso
Franco arcillo limoso
Arcillo arenoso
SUELOS
Suelos de textura fina
Arcillo limoso
ARCILLOSOS
Arcilloso
FRAGMENTOS GRUESOS
Cuando existen cantidades apreciables de fragmentos de
mayor tamaño que arena muy gruesa y de menos de 25 cm de
diámetro, se establecen modificaciones mediante un adjetivo en el
nombre de la clase textural del suelo. Estos fragmentos se
consideran parte de la masa del suelo. Tienen importancia en el
almacenamiento de humedad, en la infiltración y escurrimiento, en
el crecimiento de las raíces, en la protección de la erosión,
etc. y son removidos con la masa de suelo durante la labranza.
Nombres utilizados para los fragmentos gruesos:
Hasta 75 mm de diámetro
De 75 mm a 25 cm
De más de 25 cm
Gravilloso
Guijarroso
Pedregoso
Incluye gravas y gravillas
Incluye
guijarros, Incluye piedras y bloques
cantos
rodados
y
cascajos
Esta subdivisión se refiere a
angulosos de cualquier clase de roca.
fragmentos
redondeados
o
Gravilloso
Guijarros
Piedras
Rocas
Los adjetivos de las dos primeras columnas se agregan al
nombre textural cuando se hallan en una proporción de más de un
15% o un 29% en volumen de la masa del suelo. Si pasan de un 90%
del suelo en los 20 cm, superiores 1a tierra se clasifica del
tipo misceláneo, (clase de uso VIII).
Las
piedras
de
más
de
25
cm
de
diámetro
sí
como
los
afloramientos rocosos, no se consideran parte de la masa del
suelo a los fines del establecimiento de las clases texturales.
Sin embargo, tiene importancia desde el punto de vista del uso
del suelo. El objetivo de la tercera columna entonces se
considera separado como fase (debe aludir a la adjetivación de la
clase textural).
TÉCNICA DE CAMPO PARA ESTIMAR LA CLASE TEXTURAL
1. Se toma una muestra de suelo.
2. Se humedece sin llegar a mojarlo excesivamente.
3. Se amasa entre los dedos tratando de formar una pasta
homogénea.
4. Se toma la masa formada entre los dedos índice y
pulgar y se la presiona haciéndola deslizar sobre
el pulgar tratando de formar una cinta.
5. Se
observan
las
características
del
brillo
y
consistencia de la cinta y se trata de referirla a
clases texturales tenido en cuenta los siguientes
características:
CARACTERÍSTICAS DE LAS DIFERENTES FRACCIONES GRANULOMÉTRICAS EN
UNA DETERMINACIÓN A NIVEL DE CAMPO
Arena:
a. Tiene tacto áspero y abrasivo sobre todo las
fracciones gruesas.
b. carece de cohesión y brillo al amasarlo y
tratar de hacer la cinta; esta no se forma.
c. Hace un ruido característico al amasarla
entre
los dedos debido al razonamiento de los granos
de arena.
d. la arena muy fina se confunde con el limo.
e. probando con los dientes pueden notarse los
granos y aproximadamente su cantidad relativa y
tamaño.
Limo:
a) tiene tacto suave y talcoso.
b) la cinta formada es escamosa.
c) no presenta casi pegajosidad y
húmedo.
Arci1la:
plasticidad en
a) la cinta presenta gran cohesión y es muy brillan
b) es muy plástica en húmedo y pegajosa en mojado.
La clase textural a que pertenece una muestra de suelo se
determina usando el triángulo de texturas. La entrada al
triángulo textural se hace por arcilla.
Existe una correspondencia aproximada entre la cinta y el
porcentaje de arcilla.
- cinta lisa y brillante: más de 40% de arcilla.
- cinta escamosa: 21 a 40%, de arcilla.
- cinta no continúa o que no se forme: menos de 21% de
arcilla.
Arena y limo se determinan teniendo en cuenta las características
de ambas fracciones, vistas anteriormente.
Términos generales Clases de Estructura
TIPO DE ESTRUCTURA
Existen cuatro tipos primarios de estructura:
1. Laminar, con partículas dispuestas alrededor de un plano
generalmente
horizontal.
También
se
suele
llamar
"platiforme".
2. Semejando prismas, con partículas dispuestas alrededor de
un eje
vertical y limitada por superficies verticales
relativamente planas.
3. Semejando poliedros regulares, con partículas dispuestas
alrededor de un punto y limitadas por superficies planas o
redondeadas, las cuales se ven moldeadas por las caras de
los agregados que los rodean.
4. De forma esferoidal, con partículas dispuestas alrededor
de un punto y limitada por superficies curvas o muy
irregulares que no están acomodadas a la forma de los
agregados vecinos.
Cada uno de los 3 últimos tipos se subdivide en 2 subtipos:
En el tipo de estructura en forma de prismas se distingue la
estura "Prismática" en la cual los agregados en forma de prismas
tienen su cara superior plana: y la "Columnar" cuyas bases
superiores o “cabezas” son redondas.
Los subtipos en la estructura de poliedros regulares son
"bloques angulares" donde los agregados están limitados por
planos que se interceptan según ángulos relativamente agudos; y
"bloques sub-angulares" con caras mixtas redondeadas y planas, y
vértices principalmente redondeados.
La estructura esferoidal se subdivide en "granular" cuando
relativamente no es porosa, y "migajosa" cuando se presenta muy
porosa.
CLASE DE ESTRUCTURA
En cada uno de los tipos que se han definido, se reconocen
cinco “clases" por sus tamaños, cuyos nombres y límites
correspondientes se dan en la tabla y cuadros al final de este
capítulo.
GRADO DE ESTRUCTURA
El "grado de estructura" es el grado de agregación, y expresa
la cohesión dentro del agregado y la adhesión entre agregados.
La observación de un perfil expuesto mostrará muchas
veces agregados o unidades estructurales que se evidencian más o
menos claramente según sean más o menos evidentes las superficies
de disyunción que los separan. Es decir, la estructura de un
horizonte será tanto más notoria cuanto más contrastante sean la
diferencia en el grado de cohesión de las partículas elementales
del suelo dentro y entre los agregados de este horizonte.
El grado de estructura expresa ese grado de evidencia o si
se quiere, la variabilidad en el espacio del grado de cohesión de
un material de suelo: en un horizonte sin estructura esta fuerza
de cohesión es uniforme (nula o muy débil si fuera "Grano Simple"
o fuerte si fuera "masivo".
En la práctica de campo el grado de estructura se
determina
principalmente
mediante
la
apreciación
de
la
subsistencia o permanencia de los agregados, y las proporciones
de material agregado y desagregado que resultan cuando los
agregados son dislocados o comprimidos débilmente.
El grado de estructura varía con la humedad del suelo y se
describirá con el contenido de humedad más importante del
horizonte. Sin embargo, se llamará la atención sobre cualquier
importante contraste que haya en la estructura en condiciones de
humedad distintas a las que el horizonte presenta al hacerse la
descripción.
Cuando no se especifique en qué estado de humedad se ha
descripto el grado de estructura, se presumirá que el suelo
estaba casi seco o muy débilmente humedecido, pues es en ese
estado, cuando la estructura está más fuertemente expresada.
Los términos que se usan
estructura son los siguientes:
para
expresar
el
grado
de
O - Sin estructura, No existe agregación observable ni un
arreglo definido de superficie naturales de disyunción. Recibe el
nombre de masivo si es coherente y grano simple si no lo es.
1- Débi1, Agregados poco definidos, pobremente formados,
apenas observables "in situ". Cuando se lo perturbe, el material
se rompe en una mezcla de unos pocos agregados enteros, muchos
rotos, y una gran parte de material sin agregación.
2Moderada.
Agregados
precisos
y
bien
formados,
moderadamente durable y evidentes aunque no muy claros en el
suelo no perturbado. Cuando se lo per_ turba, se rompe en una
mezcla de muchos agregados enteros bien netos o precisos, algunos
rotos, y un poco de material desagregado.
3 - Fuerte. Agregados durables, totalmente evidentes en el
suelo no perturbado, que se adhieren débilmente a los demás
agregados, soportan el desplazamiento y quedan separados cuando
el suelo es desplazado. Cuando se remueve el material del perfil,
consiste casi en su totalidad de agregados enteros, o incluye
unos pocos agregados rotos y poco o nada de material desagregado.
Para formar el nombre completo de la estructura, se debe
seguir este orden: tipo, clase y grado. Así por ejemplo para
expresar una estructura en la cual los agregados están
empaquetados con flojedad, u sean redondea_ dos pero no muy
porosos predominando los de tamaño entre 1 y 2mm. de diámetro,
bien precisos, se dirá: "estructura granular fina fuerte".
Muchos
horizontes
tienen
estructura
compuesta
por
agregados de más de un tipo, en esos casos se describirá, por
ejemplo, "estructura en prismas muy gruesos moderados y granular
media moderada". Así mismo hay suelos que presen tan una
estructura cuando están en un sitio, y toman otra distinta cuando
se los remueve. Los agregados mayores entonces pueden romperse en
otros más chicos, los secundarios: así, un prisma grueso puede
romperse en bloques medios. En estos casos se puede anotar las 2
estructuras haciendo la indicación correspondiente. Por ejemplo,
"estructura en prismas gruesos moderados que rompen a “bloques
medios moderados”Si la perturbación es exagerada, cualquier agregado puede
romperse
en partículas
menores. Estos
pueden o
no
ser
"agregados", por lo tanto se cuidará de no confundir simples
fragmentos de suelo sin ningún ordenamiento estructural con
agregados de estructura secundaria. Los horizontes con estructura
masiva de ningún modo pueden romperse en seco dando agregados.
CONSISTENCIA
La consistencia del suelo comprende los atributos del
material de suelo que son expresados por el grado de cohesión y
adhesión o por la resistencia a la deformación o rotura. Conviene
recordar que cada material del
suelo tiene consistencia propia
con independencia de si la masa es grande o pequeña, en
condiciones naturales o muy alteradas, que tenga o no agregación.
La
terminología
para
consistencia
incluye
términos
separados para tipos de contenido de humedad (seco, húmedo y
mojado). Al usar el término consistencia debe anotarse las
condiciones de humedad bajo el cual se usa particularmente el
término. Así por ejemplo, para consistencia "friable" indica en
qué condiciones de humedad está el suelo en el momento que se
defina
aquella
consistencia
especificando
"friable
cuando
húmedo".
CONSISTENCIA
EN
MOJADO
La consistencia en mojado se determina con un grado de
humedad a capacidad de campo o ligeramente por encima de ese
contenido de humedad.
A) Pegajosidad - Es la cualidad de adhesión a otros objetos.
Para la evaluación en el campo de la adhesividad, el
material del suelo es presionado entre el pulgar y el índice
y se observa la adherencia. Los grados de pegajosidad son:
0
- No adhesivo, Después de soltar la presión, el suelo
prácticamente no se adhiere a los dedos.
1 - Ligeramente pegajoso. Después de la presión el suelo se
adhiere a ambos dedos pero se despega de ellos en
forma más bien limpia. No se ensancha o se alarga
apreciablemente cuando se separan los dedos.
2. - Pegajoso. Después de la presión el suelo se adhiere a
ambos dedos y tiende a alargarse un poco y romperse en
dos porciones al tratar de separar los dedos.
3 - Muy pegajoso. Después de la presión, el suelo se adhiere
fuertemente a ambos dedos y se alarga notablemente
cuando ellos se separan.
B) Plasticidad.
Es
la
aptitud
de
cambiar
de
forma
continuadamente bajo la influencia de fuerza y a retener la
forma sí no se renueva la fuerza. Para la determinación de
campo de la plasticidad se hace rodar el material entre el
pulgar y el índice observando si puede formarse u/i
filamento o fideo.
El grado de resistencia a la deformación se expresa como sigue:
0. No plástico. No puede formarse “fideo”.
1.
Ligeramente plástico. Se forma el fideo pero la masa
de suelo es fácilmente deformable.
2.
Plástico. Se forma el fideo y se requiere una
presión moderada para deformar la masa del suelo.
3. - Muy plástico. Se forma el “fideo” y se requiere
mucha presión para
la deformación de la masa de
suelo.
CONSISTENCIA EN HÚMEDO
La consistencia en húmedo se determina con un contenido
mediano de humedad, entre seco al aire y capacidad de campo. Con
este contenido de humedad muchos materiales del suelo tienen una
forma de consistencia caracterizada por (a) tendencia a romperse
en pequeñas masas algo pulverulentas, (b) alguna deformación
previa a la rotura, (c) ausencia de fragilidad y (d) aptitud del
material después de destruido para regenerarse cuando es
prensado.
La consistencia decrece con el contenido de humedad y la
exactitud de la descripción de campo de esta consistencia está
limitada por la exactitud de la estimación del contenido de
humedad. Para evaluar la consistencia en este rango de humedad se
debe probar romper en la mano una masa que parezca ligera_ mente
húmeda.
0. - Suelta. No coherente
1. - Muy friable: Material del suelo que se rompe bajo una
presión muy suave pero que se regenera cuando es prensado.
2. - Friable: Material de suelo que se rompe fácilmente bajo
presión suave a moderada y que se une al ser prensado.
3. - Firme: Material de suelo que se rompe bajo presión
moderada y .cuya resistencia es apreciablemente visible,
4. - Muy firme: Material de suelo que se rompe bajo fuerte
presión difícilmente rompible entre los dedos.
5. – Extremadamente: firme. Material de suelo solamente
rompible debajo de una presión muy fuerte. No puede ser
roto con los dedos y debe ser roto en trozos, pedazo a
cedazo.
El término compacto denota una condición de consistencia
firme y arreglo denso y comprimido de las partículas y será usado
solamente en este sentido. Los grados que suelen usarse son de
"muy" y "extremadamente".
CONSISTENCIA EN SECO
La consistencia de materiales de suelo en seco está
caracterizada por rigidez, fragilidad, máxima resistencia a la
presión, mayor o menor tendencia a romperse y formar polvo o
fragmentos con bordes agudos e in-aptitud del material roto a
unirse nuevamente cuando es prensado.
Para su evaluación se debe elegir una masa seca al aire y
se le aprieta con la mano. Los grados de comparación son:
0. Suelto: No coherente.
1. Blando: de suelo es muy débilmente coherente Se transforma
en polvo o gránulos individuales bajo una presión muy
ligera.
2. Dura: Moderadamente resistente a la presión, se rompe con
facilidad bajo la presión de los dedos.
3. Muy dura: Muy resistente a la presión. Puede ser rota con la
mano, con dificultad. Pero es difícilmente rompible con los
dedos.
4. Extremadamente dura: Extremadamente resistente a la presión;
no puede ser rota con la mano.
TIPOS Y CLASES DE ESTRUCTURA DE SUELO
Tipo y disposición de los agregados naturales (peds)
En bloques poliédricas o esferoidales con tres dimensiones del
mismo orden de tamaño, dispuestos alrededor de un punto.
En bloques o poliedros teniendo
superficies planas o curvas que se
presentan modeladas por las caras de
los contornos de los agregados
naturales.
Caras achatadas.
Caras redondas
La mayor parte de
achatadas.
los vértices
Mezcladas con
marcadamente
muchos vértices
angulares.
redondeados.
Bloques angulares
Bloques sub(1).
angulares (2).
Bloques angulares
muy finos < 5 mm
Bloques sub-
En esferas o poliedros teniendo
superficies planas o curvas que
tienen ligera o ninguna acomodación
a las caras de los agregados
naturales.
Agregados
naturales,
relativamente
porosos.
Agregados
naturales,
porosos.
GRANULAR
MIGAJOSA
Granular muy fino
Migajosa muy
angulares muy
finos < 5 mm
fina
< 1 mm
Bloques angulares
finos 5 - 10 mm
Bloques subangulares muy
finos 5 - 10 mm
Bloque angulares
medios 10 – 20 mm
Granular fina 1 – 2
mm
Migajosa fina
1 – 2 mm
Bloques subangulares medios
10 – 20 mm
Granular media 2 5 mm
Migajosa media
2 – 5 mm
Bloque angulares
gruesos 20 – 50
mm
Bloques subangulares gruesos
20 – 50 mm
Granular gruesa 510 mm
Migajosa
gruesa 5 –
10mm
Bloque angulares
muy gruesos > 50
mm
Bloques subangulares muy
gruesos > 50 mm
Granular muy gruesa
> 10 mm
Migajosa muy
gruesa > 10mm
(1).Algunas veces llamados “Nuez” La palabra angular del nombre
puede ser omitida.
(2) Algunas veces llamados “nuciformes”. “Nuez” o “Nuez angular”,
desde que la especificación del tamaño en estos términos es causa
de confusión para muchos de ellos no es recomendado.
Aspectos prácticos de la descripción del perfil de suelo
La mayoría de los trabajos de levantamiento y clasificación
de suelos llevan a una determinación de la morfología y génesis
de los suelos. Morfología es el estudio de las propiedades del
suelo a través de la vista, el tacto y el olor. Génesis es el
conjunto de procesos que determinan la morfología y otras
características del suelo.
En el sentido estricto la morfología incluye solo aquellas
propiedades que pueden ser determinadas por los sentidos. Para
los propósitos prácticos se incluyen algunas observaciones que se
ayudan de aumentos y algunos test sencillos “de campo” como: pH,
reacción al ácido, etc.
Esas características morfológicas son las que usualmente se
determinan en las descripciones de los perfiles de suelo.
Al hacer el examen del suelo, todas las capas u horiz0ontes
distinguibles se describen separadamente, sin tener en cuenta la
génesis. Estas descripciones deben ser completamente objetivas y
claras sin tener en cuenta presunción de génesis o nomenclatura.
Las descripciones objetivas son el punto básico para la
clasificación de suelos, así
interpretación de los mismos.
también
como
para
una
correcta
Al describir el perfil, usualmente se localiza los límites
entre horizontes, se mide su profundidad y se estudia el perfil
como un todo antes de describir cada horizonte.
El perfil se describirá según las siguientes instrucciones:
•
Para hacer la descripción se hará una planilla como la que
se adjunta al final de este capítulo.
•
Para hacer la descripción se procederá primariamente a hacer
una separación de los horizontes tomando en cuenta
características que se pueden diferenciar a simple vista,
fundamentalmente color y estructura. Algunos límites son
claros y bien definidos como el que se encuentra entre el E
y B de los Planosoles. Otras veces pueden ser difusos como
entre un AS un AB de un suelo poco diferenciado
texturalmente. Estos horizontes poco claros
requieren
dedicar cierto tiempo a la comparación de pequeñas muestras
de suelo hasta que se pueda establecer los puntos medios de
cada horizonte. Una vez que todos los horizontes se han
determinado se pueden insertar pequeñas señales para
demarcar sus límites y se efectúan descripciones, mediciones
y eventualmente su correspondiente muestreo.
•
En una segunda instancia se describirán detalladamente cada
uno de esos horizontes procediendo a separar nuevos
horizontes si son texturalmente diferentes a pesar de no
serlo por color o estructura, como se aclaró antes.
•
Cuando se tienen todos los horizontes bien separados se
procede a describirlos. Se anotará el espesor indicando la
profundidad del límite superior e inferior, por ejemplo; 0 –
25, 25 – 42, 42 – 60, etc.
Luego se determinará el color mediante la tabla Munsell, en
húmedo y en seco (si es posible) y se indicará con la
notación respectiva como se explicó en el capítulo
correspondiente. Cuando existe moteado se describirá el
color de la matriz, el moteado, el tamaño y otras
características del mismo así como su abundancia. Tanto el
color de las motas como de la matriz pueden darse mediante
la notación Munsell, aunque generalmente es suficiente
emplear términos corrientes. El tipo de moteado se describe
correctamente estudiando abundancia, contraste y tamaño de
los moteados (ver tabla al final de este capítulo). Deberá
indicarse de la misma manera, si existen, el color de los
revestimientos y películas que recubren los agregados, cuyas
pautas y explicación figuran más adelante.
•
•
Posteriormente se determinará la textura de cada horizonte
Según el triángulo textural, agregando '”l” para liviano y
“p” para pesado. Un caso en el que se usa “I” y “p” es para
resaltar diferencias texturales que se observan al tacto
entre
dos horizontes que pertenecen a la misma clase
textural. Las anotaciones se harán como lo indica la tabla
adjunta.
•
Se seguirá la descripción con la determinación de la
consistencia, en lo posible en los 3 estados: seco, húmedo y
mojado. Esto es sólo posible cuando el suelo está seco, de
lo contrarío dependerá del estado de humedad que tenga el
perfil. La consistencia en húmedo se determina con un
contenido de humedad entre seco al aire y la capacidad de
campo. La consistencia en mojado se determina a la capacidad
de campo o un poco por encima y comprende adhesividad y
plasticidad.
Luego se describirá la estructura considerando por su orden:
1) Forma de los agregados, es decir el tipo de estructura.
2) La clase de estructura o tamaño de los agregados.
3) El grado de estructura o sea la evidencia de los
agregados y su modalidad para resquebrajarse.
OTRAS CARACTERÍSTICAS IMPORTANTES A CONSIDERAR EN LAS DESCRIPCIONES
1. REVESTIMIENTOS
0.
1.
2.
3.
Películas de arcilla
Películas de arcilla y materia orgánica
Arcilla más óxidos de Fe y Mn.
Superficies de deslizamiento (slickensides)
de arcilla . Las partículas de arcilla generalmente
tienen forma laminar y se depositan en el horizonte iluvial
orientadas con su eje mayor paralelo a las superficies de
deposición (poros y/o agregados). Esto provoca patinas brillantes
y lisas sobre dichas superficies que resultan fácilmente visibles
en el campo a simple vista o con ayuda de una lupa.
Películas
Es posible sin embargo que en muchas ocasiones la arcilla
aparezca orientada y no sea de origen iluvial. Por ej., las
arcillas formadas de micas o feldespatos que aparecen orientadas
según la estructura del cristal de los minerales que les dieron
origen. Sin embargo, se distinguen claramente de las arcillas
iluviales por cuanto nunca aparecen orientadas con respecto a
ningún elemento del suelo (agregados, poros) en tanto las
iluviales lo están siempre.
De todas maneras, en las descripciones de campo las pátinas de
arcilla siempre las consideramos como películas de origen
iluvial.
Deberá determinarse la abundancia, el espesor, la continuidad y
lugar en que se encuentran como indica la tabla de pautas.
Abundancia
Escasas (+) - Pequeños barnices muy dispersos en Ta
superficie de los agregados, o como
escasos revestimientos de poros.
Abundantes(++) - Barnices que cubren gran parte de los
agregados, o como revestimientos de
poros.
Muy abundantes (+++) - Barnices continuos que cubren
enteramente los agregados y el interior de poros,
grietas y canalículos.
Espesor
d - Delgadas: de espesor microscópico: bajo la lupa se
distinguen con facilidad los granos de arena
fina.
m - Medianas: los granos de arena fina son aún visibles
o
al
menos
sus
siluetas
envueltas
en
revestimientos.
g - Gruesas: los revestimientos no permiten distinguir
los granos de arena fina; hay puentes fuertes
entre los granos de arena gruesa.
mg - Muy Gruesas: No se distinguen los granos de arena
media y pueden presentar aspecto de gotas como si
fuera cera derretida.
de deslizamiento (slickensides). Son planos lustrosos y
estriados que indican movimientos diferenciales en la masa del
suelo. Estos movimientos son causados por una hinchazón o
expansión no uniforme, que provoca fricción entre los agregados
al humectarse.
Caras
Estos planos se observan en suelos con abundantes minerales de
arcilla 2:1 especialmente montmori1lonita.
La presencia de caras de deslizamiento en un suelo es una buena
característica diagnóstico, pues revela la presencia de abundante
arcilla expansiva.
2. CONCRECIONES
Las
concreciones
son
determinadas
sustancias
químicas
endurecidas en forma de nódulos o granos de diverso tamaño forma
y color.
Las
concreciones
indican
fenómenos
de
disolución
y
precipitación en el suelo debido a repetidos humedecimientos y
movimientos de agua en los perfiles, seguidos por períodos de
desecación.
Las concreciones más comunes en nuestros suelos son las de Fe
- Mn y las de CaCO3.
Las primeras semejan municiones o “chumbos”. Parecen
desarrollarse
bajo
condiciones
alternadas
de
oxidación
reducción.
Las de CaCO3 existen en formas redondeadas o con aspecto
ramificado. Los tamaños son muy variados.
El
CaCO3
puede
presentarse
en
otras
formas,
como
eflorescencias blancas o libres, detectándose por medio de HC1
que produce una reacción con efervescencia.
En la descripción de un suelo deberá anotarse, tipo, tamaño,
consistencia y cantidad de concreciones (ver tabla).
pH
Se anotará el dato que se obtenga a campo
indicadores colorimétricos u potencio métricos.
usando
los
Transiciones
Una vez hecha la descripción completa del perfil se pondrán las
transiciones y la nomenclatura de los horizontes.
El límite entre horizontes es el pasaje de un horizonte al
subyacente, y se caracteriza por dos rasgos: por la distinción
que puede establecerse entre los horizontes que separa y por la
forma del plano que lo constituye. La distinción de horizontes
depende del contraste que haya entre ellos y también en parte,
del ancho del límite mismo, es decir de la porción de perfil
dentro de la cual se establece el pasaje de un horizonte al
siguiente. Según esto último los límites entre horizontes pueden
describirse así:
1.
2.
3.
4.
Abrupto: si el ancho del límite es de menos de 2,5 cm.
Claro: si el ancho está entre 2,5 - 6,5 cm.
Gradual: si el ancho del límite es más de 12,5 cm
Difuso: si ancho está entre 6,5 - 12,5cm.
La forma del plano que constituye el límite entre horizontes
varía tanto como la distinción que hay entre éstos. Debe
recordarse sin embargo, que los límites no son bandas o líneas
horizontales, sino capas de tres dimensiones que pueden tener
bases planas o irregulares.
En este sentido los límites de horizontes pueden describirse
así:
1) Suave - Si el límite es casi un plano horizontal.
2) Ondulado - Si presenta concavidades más anchas que
profundas.
3) Irregular- Si las concavidades son más profundas que
anchas.
4) Quebrado - Si ciertas partes del límite están
interrumpidas.
Nomenclatura
Se pondrá el símbolo del horizonte de acuerdo a la
nomenclatura convencional adoptada (por ejemplo: Al-A2-Btl-Bt2-BCCk).
Horizonte
Espesor
Transición
Color
Moteado
Textura
Consi stencia
Estructura
Revestimientos
Concreciones
Reacción al
ácido
A
0-18
gradual
10YR
-
Franco
Arenoso
Friable
Bloques
subangulares
medios
Franco
Arcillo
Arenoso
Friable
Bloques
subangular-es
medios y
moderados
Arcillos
o
Friable a
firme
Bloques
angular-es
medios y
moderados
Arcillos
o
firme
Bloques
angulares
medios y
moderados
Arcillos
o
firme
Bloques
angulares a
prismática
grande a media
3,5/3
(h)
5/2 (s)
AB
18 – 30
clara
10 YR
3,5/3
(h)
BA
30 – 40
Clara
7,5 YR
4/4(s)
Bt 1
40 – 65
gradual
7,5YR
4/4(s)
Bt 2
65 - 93
gradual
5YR
5/6
(s)
7,5YR
5/8,
común,
Pequeño,
débil
-
-
-
BIBLIOGRAFÍA
1. Guidelines for soil Description (FAO).
2. Guia para la descripción e interpretación del perfil de suelo
(web.fagro.edu)
3. http://soils.usda.gov/survey/geography/ }
4. Keys to Soil Taxonomy | NRCS Soils - NRCS Soils - USDA.gov
Descargar
Colecciones de estudio