La falta de medicos en Urgencias obliga a aplazar vacaciones y

La falta de médicos en Urgencias obliga a aplazar vacaciones y
realizar más guardias
Los sindicatos reclaman mejoras laborales para que los facultativos no se vayan fuera de la
Comunitat
Los sindicatos reclaman mejoras laborales para que los facultativos no se vayan fuera de la Comunitat
OSCAR TOMASI/ VALENCIA
El “nulo” incremento de efectivos y la llegada de miles de turistas han obligado a los médicos que trabajan
en los diferentes servicios de Urgencias a aplazar sus vacaciones y realizar más guardias de hasta 24
horas, según confirmaron más de una decena de facultativos de la Comunitat consultados por LAS
PROVINCIAS.
Los sindicatos denunciaron las “malas condiciones laborales” de las que disponen actualmente, lo que
lleva a muchos a abandonar las Urgencias e irse a otro centro en cuánto les surge una nueva oferta.
Según informó el responsable del área del Sindicato Médico Independiente (CESM), Vicente Collado,
ahora mismo trabajan en toda la Comunitat “en torno a unos 270 médicos en Urgencias”, pero serían
necesarios para normalizar el servicio “más del doble, sobre los 700”.
Y no es el único que lo dice. Desde CC. OO. se informó este mismo mes de agosto de que en este área
se necesitan 300 facultativos más, no sólo para sustituir las vacaciones de verano sino para incrementar
las plantillas de forma permanente. La carencia de este tipo de profesionales se agrava con la llegada del
verano debido a que la saturación que se produce en las salas de Urgencias aumenta estos meses en los
lugares de costa, destino de miles de turistas cada año.
Todo va bien, según Sanidad
Sin embargo, la Conselleria del ramo parece no darse por enterada. Su máximo responsable, Manuel
Cervera, afirmó el jueves que el Plan de Refuerzos para el verano elaborado este año está dando
“resultados positivos”.
En él, Sanidad anunciaba la contratación de 516 profesionales (médicos, enfermeros, celadores y
administrativos) para fortalecer el servicio de cara al periodo estival, lo que supone un 20% menos de
personal que el contratado en 2006, tal y como ya publicó este periódico. Además, otros 5.500 han sido
empleados durante el verano para cubrir las vacaciones, la misma cantidad que un año antes.
El conseller reconoció veladamente que es posible que “haya algún paciente que espere más de la cuenta
para ser visto”, pero precisó que siempre se tratará de personas cuyas patologías puedan esperar y
nunca de casos graves.
Asimismo, Cervera destacó que su departamento ha gastado dos millones de euros en el área de
Urgencias, con los que “se cubre el personal que se va de vacaciones y se contrata más personal para
reforzar” el servicio, extremo que ha sido desmentido por todos los médicos consultados.
Un buen ejemplo es el del Hospital de Vinaròs, en donde se ha reducido un tercio el personal que trabaja
en esta sección pese a que se duplica el número de pacientes, según fuentes sindicales. En el centro son
doce los médicos que dan servicio durante todo el año, aunque con la llegada de julio, agosto y
septiembre se incrementa entre un 50 y un 70% la presión asistencial, lo que obliga bien a aplazar las
vacaciones, bien a realizar más guardias, que en ocasiones llegan a ser de hasta 24 horas.
Otro caso problemático es el del Hospital de Dénia, en el que UGT denunció que ‘‘sólo se ha sustituido el
40% de la plantilla. De cada cinco médicos se han sustituido dos”. De hecho, en mayo de 2006 el
personal llegó incluso a manifestarse para demandar a Conselleria la llegada de diez nuevos médicos a
Urgencias.
Arrecian las críticas
El responsable del sindicato CSI-CSIF en Alicante, Héctor García, destacó que en esta provincia los
mayores problemas se están produciendo en Elche y Santa Pola. El blanco de sus críticas fue,
precisamente, la Conselleria de Sanidad: “Vende mucho el comprar un aparato nuevo, la tecnología
punta... pero el factor humano falla”.
García incidió también en la “nula inversión” del ente autonómico en materia de infraestructuras, lo que no
hace sino agravar la situación.
“Conozco a gente que contrató un viaje con varios meses de antelación para irse de vacaciones en
agosto y conseguir un descuento, pero han tenido que cancelarlo porque nadie podía sustituirlo”, señaló.
La falta de personal está obligando a muchos a aplazar sus vacaciones para otros periodos del año con
menos pacientes. A los afortunados que, por el contrario, pueden disfrutar de éstas en verano les toca sin
embargo “cubrir el descanso de los demás repartiéndose sus horas con el resto de compañeros, por lo
que hacemos muchas más guardias”, destacó una médico que trabaja en la ciudad de Valencia y que
prefiere mantener su identidad en el anonimato.
Como ella misma reveló, las guardias que está haciendo actualmente “son de entre 17 y 24 horas. En el
primer caso me tocaría librar entre dos y tres días, y en el segundo tres días siempre. Pero ahora, a veces
sólo tenemos una jornada de descanso”. De las 7 u 8 guardias que se suelen realizar al mes, durante el
verano éstas ascienden a 10 o 12 en varios puntos de la Comunitat.
Contrato por horas
Esta situación afecta gravemente el estado de salud de los facultativos, pero también merman la calidad
asistencial del servicio. “Incluso algunos compañeros compaginan el trabajo en Urgencias con el de
centros de salud privados, por ejemplo”, subrayó.
Además, “en una guardia de todo el día la cosa tendría que estar tranquila a ciertas horas, pero con el
incremento de pacientes en verano son muy duras, porque no te permiten descansar”, resaltó Collado.
Según los datos que manejan desde el sindicato CESM, de los 270 médicos que trabajan en Urgencias
sólo un centenar dispone de contrato fijo. El resto cobra según el número de horas que trabaje a lo largo
del mes.
Collado incidió en que las horas que se cubren a los compañeros “no se cobran al mismo precio que las
guardias –en torno a los 20 euros la hora, aproximadamente–”, y recordó que la Conselleria prometió
contratar a 60 médicos más a principios de año para Urgencias “y por aquí no hemos visto a casi ninguno,
como máximo a 6 o 7”.
Las provincias.es
La saturación que se vive en las salas de
Urgencias de la Comunitat se agrava en
las zonas más turísticas durante el verano
por la falta de personal. En la imagen, un
centro repleto de pacientes esperando a
ser atendidos.
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