Diferencias salariales, características del puesto de trabajo y

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Presupuesto y Gasto Público 67/2012: 195-212
Secretaría de Estado de Presupuestos y Gastos
© 2012, Instituto de Estudios Fiscales
Diferencias salariales, características del puesto de trabajo
y cualificación: un análisis para el período 2005-2010*
JOSÉ MARÍA ARRANZ
CARLOS GARCÍA-SERRANO
Universidad de Alcalá
Recibido: Abril 2012
Aceptado: Junio 2012
Resumen
El presente trabajo analiza la evolución de los diferenciales salariales según diversas variables relacionadas con el
capital humano y las cualificaciones en España en el período 2005-2010. A partir de los datos de la Muestra Conti­
nua de Vidas Laborales, se estiman modelos por Mínimos Cuadrados Ordinarios y por Regresiones Cuantílicas, lo
que permite examinar la evolución del efecto de dichas variables tanto en la media como en diferentes puntos de la
distribución salarial una vez que se controla un conjunto de características personales, del puesto de trabajo y de la
empresa. Los resultados indican que la dispersión salarial ha aumentado durante la etapa recesiva y que los rendi­
mientos marginales de tener más estudios/cualificaciones han aumentado para las decilas más altas como consecuen­
cia del impacto de la crisis económica.
Palabras clave: diferencias salariales, niveles de cualificación, registros administrativos.
Clasificación JEL: H24, J31, J60.
Abstract
This paper analyses the evolution of wage differentials according to diverse variables related to human capital and
skills in Spain in the period 2005-2010. Using administrative data from the Continuous Work History Sample, we
estimate Ordinary Least Square and Quantile Regression models in order to examine the evolution of the effect of
such variables either on the mean or on different points of the wage distribution once a set of personal, job and
workplace attributes are taken into account. Among other things, we find that the wage dispersion has risen during
downturn years and that the incremental returns to having higher education/qualifications have increased for the top
deciles as a consequence of the impact of the economic crisis.
1.
Introducción
La educación desempeña un papel central en los mercados laborales modernos. Una
gran cantidad de estudios referidos a diferentes períodos de tiempo y países confirman que
* Los autores agradecen la financiacion del Instituto de Estudios Fiscales y la disponibilidad de los datos de la
Muestra Continua de Vidas Laborales por parte de la Seguridad Social.
196
José María Arranz y Carlos García-Serrano
las personas con niveles educativos mayores obtienen salarios más elevados, sufren menos
desempleo y trabajan en ocupaciones más valoradas socialmente en comparación con las
personas con niveles educativos menores.
El interés de los economistas por la relación entre la educación y la posición en el
mercado de trabajo, en general, y entre la educación y los salarios, en particular, se acrecen­
tó a finales de la década de los 1950 gracias a los ejercicios de contabilidad del crecimiento
que encontraron que los niveles crecientes de educación podían explicar una parte sustancial
del aumento de la productividad (Griliches, 1970). Durante esa década también se comenza­
ron a examinar las diferencias y los cambios en los salarios por ocupaciones y sectores de
actividad (Slichter, 1950; Cullen, 1956; aunque hay algunos trabajos pioneros en años ante­
riores, como Douglas, 1930, y Ober, 1948).
La revolución de la teoría del capital humano y la mayor disponibilidad de grandes
bases de datos microeconómicos durante la década de 1960 llevaron a un desarrollo de la
investigación sobre educación e ingresos, pero el énfasis se trasladó a las diferencias salaria­
les por niveles educativos y edades (o experiencia laboral potencial). Los modelos de capital
humano de los ingresos a lo largo del ciclo vital generados por las inversiones en educación
y formación en el puesto de trabajo (Becker, 1962; Ben-Porath, 1967; Mincer, 1974) ofre­
cían una explicación coherente de los aspectos cualitativos que se iban encontrando en mul­
titud de análisis empíricos: los ingresos de los trabajadores con más estudios son más eleva­
dos y los perfiles de ingresos por edades exhiben una pendiente creciente y son cóncavos.
Sin embargo, los aspectos cuantitativos de la estructura salarial diferían substancial­
mente a lo largo del tiempo y entre países, un hallazgo que han puesto de manifiesto los
numerosos trabajos realizados en los últimos treinta años que se han centrado en la investi­
gación de los cambios de la estructura salarial y de la desigualdad de ingresos (principal­
mente en países de la OCDE). Las estructuras salariales de los países se han modificado
considerablemente en las últimas décadas. Las diferencias salariales por niveles educativos
y grupos ocupacionales se redujeron de forma importante en casi todos los países desarrolla­
dos durante la década de 1970, pero desde entonces se han producido patrones divergentes
en la evolución de las estructuras salariales, con diferencias crecientes en los Estados Unidos
de América y en el Reino Unido desde finales de aquella década. Aumentos más moderados
en la desigualdad total y en las diferencias salariales por cualificación se han producido en
la mayoría de los países de la OCDE (pero no en todos) en las décadas siguientes. Estos
cambios han generado un gran esfuerzo para intentar comprender por qué se producen, de­
bido a que una estructura salarial más desigual implica un ensanchamiento de la desigualdad
en la renta y el consumo de individuos y familias, una mayor desigualdad en su bienestar
material y posiblemente un agravamiento de los problemas sociales.
Muchos trabajos (Juhn et al., 1993; Katz y Autor, 1999; Atkinson, 2008; Lemieux,
2008) señalan una serie de factores (el aumento de la competencia extranjera en los merca­
dos de bienes y servicios, la feminización del mercado de trabajo, la mayor terciarización
del empleo, el aumento del nivel educativo de la población y el incremento de los flujos de
inmigración) que junto a cambios tecnológicos (que han provocado un cambio en la deman­
da de mano de obra favoreciendo a los trabajadores más cualificados frente a los menos
cualificados) han dado lugar a modificaciones en la estructura salarial. Estos cambios en la
Diferencias salariales, características del puestro de trabajo y cualificación: un análisis para el período 2005-2010
197
distribución salarial pueden descomponerse en diferencias salariales entre-grupos (normal­
mente definidos por categorías demográficas o de cualificaciones) y diferencias salariales
intra-grupos (desigualdad salarial residual). La metodología utilizada en gran parte de la li­
teratura ha consistido en «explicar» los cambios en los salarios (y el empleo) relativos entre
diferentes grupos mediante cambios en la oferta y la demanda y en las instituciones del
mercado de trabajo, mientras que los cambios en la desigualdad salarial intra-grupos pueden
reflejar los cambios en los rendimientos de las cualificaciones producidos por las fuerzas del
mercado o como consecuencia de las instituciones laborales.
Así, ha surgido una explicación basada en la oferta, la demanda y las instituciones que
se ha utilizado en relación con el origen de la desigualdad salarial, sus cambios a lo largo del
tiempo y las diferencias internacionales. Este modelo tiene tres partes (Freeman y Katz, 1994;
Blau y Kahn, 1996, 1999; Katz y Autor, 1999). La primera es el supuesto de que los diferen­
tes grupos demográficos y de cualificación son sustitutos imperfectos en la producción. Esto
significa que los desplazamientos de la oferta y de la demanda de cualificaciones laborales
pueden alterar los resultados salariales y de empleo. La segunda parte es que las mismas
perturbaciones de la oferta y la demanda pueden tener efectos distintos en los salarios y el
empleo relativos dependiendo de las diferencias en las instituciones del mercado de trabajo.
La tercera tiene que ver con los cambios institucionales, como la desregulación de los merca­
dos de bienes y servicios y los cambios en el grado de centralización o de coordinación de la
negociación colectiva, que también pueden alterar la estructura salarial directamente.
Todos estos factores han estado sujetos a cambios relevantes en España en los últimos
treinta años. Sin embargo, este artículo no trata de explicar estas transformaciones y sus
efectos sobre el mercado de trabajo español. El objetivo (más modesto) es analizar la rela­
ción que existe entre ciertas variables que aproximan el capital humano y los niveles de
cualificación de los trabajadores (la experiencia laboral, la antigüedad en el empleo y el
grupo ocupacional) y la evolución de los salarios en España durante un período de tiempo
relativamente corto pero que ha estado sujeto a cambios drásticos en las condiciones econó­
micas y de empleo (los años 2005 a 2010). Aunque el estudio de la dispersión salarial y sus
determinantes ha sido objeto de muchos estudios en las últimas décadas en la mayoría de los
países de la OCDE, no es muy numeroso con datos españoles 1. Aun así, España parece un
país interesante para este tipo de análisis porque es uno de los pocos países desarrollados en
el cual la dispersión salarial ha caído entre mediados de los 1990 y mediados de la década
siguiente, a pesar de que presenta un nivel de dispersión intermedio en comparación con
otros países de la Unión Europea (OCDE, 2007).
En este sentido, la contribución del artículo es doble. En primer lugar, se analiza cuál
es el nivel de las diferencias salariales existentes entre los distintos grupos de cualificación
y la dispersión salarial que se da dentro de cada uno de ellos. En segundo lugar, se estudia
la evolución de las diferencias salariales entre grupos y dentro de los grupos en el período
2005-2010, de modo que se investiga el impacto que ha tenido el ciclo económico y, en
particular, el paso de una etapa expansiva a otra recesiva, sobre las diferencias salariales.
Para llevar a cabo este análisis se caracteriza la distribución de los salarios no sólo en la
media (mediante regresiones por Mínimos Cuadrados Ordinarios, MCO) sino también por
decilas (utilizando Regresiones Cuantílicas, RC) para cada grupo de cualificación.
198
José María Arranz y Carlos García-Serrano
La base de datos que se utiliza es la Muestra Continua de Vidas Laborales (MCVL),
cuyos microdatos (en particular, el módulo fiscal) ofrecen información salarial junto a una
gran cantidad de características personales, del puesto y de la empresa en que está ocupado
el trabajador. Desgraciadamente, el uso de la variable de educación no es recomendable
dado que procede del Padrón Municipal y no se encuentra actualizada en muchos casos 2.
El artículo se organiza de la siguiente manera. La sección 2 presenta brevemente las
características de la fuente estadística utilizada en este estudio y una breve descripción de
los datos básicos. La sección 3 contiene los resultados de las estimaciones por MCO y RC
referidas a los años 2005 y 2010 con las que se analiza tanto el nivel como el cambio de la
desigualdad salarial inter- e intra-grupos en relación con diferentes grupos de cualificación.
La sección 4 contiene las conclusiones del trabajo.
2.
2.1.
Los datos y algunos descriptivos
Los datos: la Muestra Continua de Vida Laborales
La MCVL proporciona información procedente de los registros informatizados de la
Seguridad Social, del Padrón Municipal Continuo y, dependiendo de la versión, de los datos
fiscales de la Agencia Tributaria. A partir de 2004, esta base de datos ofrece información anual
de más de un millón de personas que han tenido algún tipo de relación laboral con la Seguridad
Social cada año, cualquiera que fuera la duración de la relación y cualquiera que fuera el tipo
de relación. La población de referencia está formada por los trabajadores que están de alta la­
boral en la Seguridad Social así como por los perceptores de pensiones y de prestaciones por
desempleo contributivas y no contributivas, no disponiéndose de datos de los trabajadores que
no tienen relación con la Seguridad Social o que tienen un sistema de previsión social distinto
(como los funcionarios de Clases Pasivas). Para confeccionar las muestras, se selecciona el 4%
de todas esas personas mediante un sistema de muestreo aleatorio simple 3.
La MCVL es una base de datos administrativa con mucha información. Por un lado, hay
información personal procedente del Padrón Municipal Continuo en relación con característi­
cas de las personas como el género, la fecha de nacimiento, la provincia de nacimiento, el país
de nacimiento, el nivel educativo 4, la comunidad autónoma de residencia y la nacionalidad.
Por otro lado, la Seguridad Social, a través de los datos de afiliación, proporciona información
de la situación laboral del trabajador y del empleador: con respecto al trabajador, se ofrece el
identificador personal, el régimen de cotización, el grupo de cotización, el tipo de contrato, la
fecha de alta y baja de la relación laboral, la causa de baja y el tipo de relación laboral, entre
otras; en cuanto al empleador, se aporta el identificador, la rama de actividad, el número de
trabajadores, el tipo de empleador y el domicilio, entre otras variables. Finalmente, la Agencia
Tributaria aporta el fichero de datos fiscales (conocido como módulo fiscal) que contiene la
información existente en el modelo 190, que es un resumen correspondiente a cada ejercicio
anual de la totalidad de las retenciones e ingresos a cuenta del IRPF sobre rendimientos del
trabajo, determinadas actividades económicas, premios e imputaciones de renta de las perso­
nas físicas y jurídicas, es decir, la información de los ingresos percibidos por los asalariados,
los no asalariados, los perceptores de prestaciones por desempleo y los pensionistas 5.
Diferencias salariales, características del puestro de trabajo y cualificación: un análisis para el período 2005-2010
199
Los ficheros personales, de afiliados y fiscales disponen de un identificador personal
que permite realizar el enlace de los tres. No obstante, este enlace no es tan sencillo como
puede parecer. El fichero de los datos fiscales de cualquier año contiene tantos registros
(filas) como pagadores o tipos de percepciones tenga el individuo. Esto significa que un
mismo individuo puede tener varias filas de información debido a que ha tenido varios pa­
gadores (correspondientes a varios episodios de empleo por cuenta ajena) o a que ha recibi­
do diversos tipos de percepciones (salarios, prestaciones por desempleo, pensiones, rendi­
mientos de actividades económicas) durante el ejercicio económico. En el fichero de afiliados
hay tantos registros (filas) como altas y bajas laborales tenga el trabajador cada año. Esto
significa que un mismo individuo puede tener varias filas correspondientes a varios episo­
dios de empleo por cuenta ajena, de empleo por cuenta propia o de percepción de prestacio­
nes por desempleo cada año.
Arranz y García-Serrano (2011) describen minuciosamente cómo debe realizarse el
enlace del fichero fiscal (que contiene una muestra expandida de pagadores y claves de per­
cepción diferentes para cada pagador) y del fichero de afiliados (que contiene una muestra
expandida de afiliaciones de los trabajadores). Estos autores muestran las ventajas de este
panel con información personal-fiscal-de afiliación. Entre ellas se encuentra que refleja ade­
cuadamente la información aportada por otras fuentes. Por ejemplo, los datos del panel en­
lazado correctamente son comparables a los ofrecidos por la Encuesta Trimestral de Coste
Laboral en el caso de los salarios y por las estadísticas laborales publicadas por el Servicio
Público de Empleo en el caso de la cuantía reconocida a los beneficiarios de prestaciones
por desempleo. El presente artículo explota su base de datos perfectamente enlazada tal
como describen dichos autores.
En esta base de datos se puede construir una variable de salario diario puesto que se
dispone de la información de los ingresos salariales de los trabajadores dentro del año y de
la información de la longitud de los períodos de empleo de dichos trabajadores. La base de
datos, lamentablemente, no contiene información sobre el número de horas trabajadas. Si
esta información estuviera disponible, podría calcularse el salario por hora de los individuos.
No obstante, muchos autores prefieren utilizar salarios mensuales o diarios en lugar de sala­
rios por hora para evitar el error de medida asociado con las horas de trabajo. En cualquier
caso, es necesario decir que usar salarios diarios genera un tipo de distorsión debido a la
diferencia de horas de trabajo ofrecidas por los individuos: el salario diario puede diferir
entre dos trabajadores que son idénticos porque uno de ellos trabaja más horas que el otro.
Sin embargo, la pequeña proporción de empleo a tiempo parcial (inferior al 15 por ciento)
en el mercado laboral español en comparación con otros países europeos y el hecho de que
la base de datos proporciona una variable que contiene el «grado de parcialidad» del contra­
to laboral (para aquellos trabajadores a tiempo parcial) que se utilizará en las estimaciones
econométricas hacen que el problema se minimice.
En nuestro análisis utilizaremos una muestra de trabajadores asalariados registrados en
el Régimen General de la Seguridad Social, con edades comprendidas entre los 16 y los 59
años de edad (para evitar problemas asociados con las jubilaciones anticipadas) y que están
ocupados en la industria, la construcción o los servicios (se excluye el sector primario). El
panel depurado contiene 3.740.893 observaciones para el período comprendido entre 2005 y
200
José María Arranz y Carlos García-Serrano
2010. Para el estudio utilizaremos principalmente el año 2005 (524.959 personas) y el año
2010 (523.435 personas). Estos años se han elegido como representativos de dos períodos
radicalmente distintos: el 2005 como característico del largo período de expansión económi­
ca que comenzó a mediados de los noventa del siglo pasado y se extendió hasta 2007, año
en que la tasa de paro se situó por debajo del 8%; y el 2010 como característico de la rece­
sión que comenzó en 2008 y que ha llevado la tasa de paro a superar el 20%.
2.2.
Descriptivos básicos
El cuadro 1 contiene la evolución del salario diario medio y de la distribución salarial
por decilas entre 2005 y 2010. Un primer vistazo a los datos permite apreciar que, de acuer­
do con los datos de la MCVL, los salarios reales crecieron en España un 6,6% entre dichos
años. El salario promedio fue de 58 euros/día en 2005 y cerca de 62 euros/día en 2010. Sin
embargo, este incremento esconde una evolución muy diferente a lo largo de la distribución
salarial: mientras los salarios reales disminuyeron en la parte más baja de la distribución (en
la primera y la segunda decilas un 4,2% y un 0,6%, respectivamente), aumentaron en el
resto de la misma (un 2% en la tercera decila, un 5,6% en la mediana y en torno a un 7% en
las decilas superiores a la mediana, con un incremento de casi el 10% en la última decila).
Cuadro 1
Evolución del salario real diario promedio y de la distribución por decilas (euros en términos reales de 2006) e indicadores de dispersión salarial
2005-2010
Salario diario real
Decilas (euros)
d10
d20
d30
d40
d50
d60
d70
d80
d90
d100
Dispersión
d90/d10
d90/d50
d50/d10
d70/d30
d100/d10
Media
Desv.
típica
61,1
15,0
26,5
33,2
37,9
42,3
47,5
54,6
65,4
83,8
204,7
2005
2010
Media
Desv.
típica
Variación
porcentual
(2005-2010)
221,8
61,8
270,5
6,6
5,1
2,3
1,5
1,2
1,2
1,6
2,4
3,9
6,7
685,8
14,2
25,8
33,1
38,4
43,3
48,9
56,3
67,4
86,3
204,4
5,1
2,6
1,7
1,4
1,5
1,8
2,5
4,1
7,3
839,9
–4,2
–0,6
2,1
4,0
5,6
6,8
7,1
6,6
6,5
9,7
Media
Desv.
típica
319,4
58,0
5,2
2,4
1,6
1,3
1,3
1,7
2,4
4,0
7,1
996,8
14,8
26,0
32,4
36,9
41,0
45,8
52,6
63,2
81,0
186,3
5,60
1,98
2,83
1,65
13,68
Fuente: MCVL, 2005-2010. Cálculos de los autores.
5,46
1,98
2,76
1,62
12,55
6,07
1,99
3,05
1,70
14,38
Diferencias salariales, características del puestro de trabajo y cualificación: un análisis para el período 2005-2010
201
El cuadro también proporciona algunos indicadores de la dispersión salarial construi­
dos a partir del cociente entre varias decilas. De acuerdo con el indicador más habitual (el
cociente d90/d10), la dispersión salarial creció en España al pasar de 5,46 en 2005 a 6,07 en
2010. Este resultado referido a una etapa recesiva coincide con el comportamiento contrací­
clico observado en las últimas tres décadas (Hidalgo, 2010), lo que hace que el caso español
se asemeje al de Estados Unidos de América o el Reino Unido (Dimelis y Alexandra, 1999).
Este incremento se localizó en la parte inferior de la distribución, como muestra el hecho de
que el ratio d90/d50 se mantuviera constante, el indicador d70/d30 creciese sólo ligeramen­
te y el ratio d50/d10 aumentase de 2,76 a 3,05. Sin embargo, también se observa un incre­
mento muy relevante del cociente d100/d10, lo que es un reflejo del elevado crecimiento
salarial de la decila más alta y de la disminución salarial de la decila más baja.
Tanto el salario medio como el incremento salarial medio identificados anteriormente
ocultan una gran heterogeneidad entre grupos de población, siendo muy diferentes según la
categoría de cualificación a la que pertenezca el trabajador. Aquí vamos a considerar tres
variables que determinan el grupo de cualificación: la categoría profesional (ocupación), la
experiencia laboral potencial y la antigüedad en el empleo. Con respecto a la categoría pro­
fesional, la MCVL proporciona el grupo de cotización del trabajador, que es una definición
administrativa del tipo de ocupación, variable que aproxima el nivel de cualificación reque­
rido por el puesto de trabajo y poseído por el individuo. Esta variable se ha agrupado en seis
categorías de acuerdo con las características y las tareas vinculadas al puesto de trabajo y el
nivel educativo del trabajador 6. También se han agrupado en varias categorías las otras dos
variables relacionadas con el capital humano del trabajador: la experiencia laboral potencial
(calculada como el tiempo desde que la base de datos tiene registrado el primer contrato del
individuo) y la antigüedad en el empleo (calculada como el tiempo que el trabajador lleva de
alta con su contrato en la empresa).
El cuadro 2 ofrece la evolución del salario real diario medio entre 2005 y 2010 para
distintos colectivos de trabajadores clasificados según las tres variables que se acaban de
mencionar. Como puede verse, el incremento salarial es desigual cuando se distingue entre
puestos manuales y no manuales y por niveles de cualificación: las ocupaciones no manua­
les están mejor remuneradas que las manuales y dentro de cada categoría las más cualifica­
das reciben un mayor salario diario. Específicamente, los trabajadores no manuales de cua­
lificación alta (NMCA) reciben en promedio 106 euros por día en 2005 y 110 euros en 2010
frente a los 50 euros y 53 euros, respectivamente, de los trabajadores no manuales de cuali­
ficación baja (NMCB). Y los trabajadores manuales de cualificación alta (MCA) reciben en
promedio 49 euros por día en 2005 y 51 euros en 2010 frente a unos 38 euros de los traba­
jadores manuales de cualificación baja (MCB).
Hay que señalar que el salario real diario crece para todas las categorías de cualifica­
ción en el conjunto del período considerado, excepto para los trabajadores no manuales de
cualificación media, cuyo salario real disminuye cerca de medio punto porcentual. En el
caso de las ocupaciones manuales, los crecimientos son mayores cuanto más elevado es el
nivel de cualificación. En el caso de las ocupaciones no manuales, sin embargo, los mayores
aumentos corresponden a los trabajadores en puestos de baja cualificación seguidos por los
de cualificaciones elevadas. De esta forma, el diferencial salarial según cualificación respec­
202
José María Arranz y Carlos García-Serrano
Cuadro 2
Evolución del salario real diario promedio según variables relacionadas con el nivel
de cualificación de los trabajadores (euros en términos reales de 2006)
Período 2005­
2010
2005
2010
Variación
porcentual
(2005-2010)
Media
Desv.
típica
Media
Desv.
típica
Gap
(%)
Media
Desv.
típica
Gap
(%)
111,1
95,4
52,7
50,9
43,3
38,5
471,7
565,8
270,9
185,6
176,6
196,6
106,4
94,3
49,9
49,0
41,6
37,4
274,5
451,5
179,9
162,7
127,1
128,2
184,4
152,1
33,3
31,1
11,3
—
110,1
94,0
53,7
51,3
42,7
38,0
281,3
520,7
254,6
189,1
134,2
201,6
189,9
147,5
41,4
35,1
12,4
—
3,5
–0,4
7,7
4,7
2,5
1,5
43,3
53,4
69,2
287,9
268,8
347,1
41,8
50,4
66,2
255,2
159,9
235,9
—
20,7
58,6
41,2
52,1
69,5
223,6
271,6
277,1
—
26,4
68,6
–1,4
3,3
4,9
52,2
53,3
58,9
67,8
82,3
423,8
298,0
101,2
227,1
275,8
47,8
48,9
59,8
67,5
80,8
306,3
50,8
75,7
240,3
88,7
—
2,2
25,1
41,0
68,8
52,3
55,9
59,6
63,9
80,3
411,0
87,8
173,7
74,7
117,3
—
7,0
13,9
22,3
53,6
9,3
14,4
–0,5
–5,3
–0,6
Categoría profes.
NMCA
NMCM
NMCB
MCA
MCM
MCB
Exper. laboral
<4 años
4-10 años
>10 años
Antigüedad
< 6 meses
≥6 meses y <1 año
≥1 años y <3 años
≥3 años y <6 años
≥6 años
Fuente: véase cuadro 1.
Nota: Ocupación no manual de cualificación alta (NMCA); Ocupación no manual de cualificación media (NMCM); Ocupación no manual de cualificación baja (NMCB); Ocupación manual de cualificación alta (MCA); Ocupación manual de cualificación media (MCM); Ocupación manual de cualificación baja (MCB).
to a los trabajadores manuales no cualificados ha aumentado de forma notable para quienes
ocupan puestos no manuales y manuales muy cualificados y, especialmente, no manuales
poco cualificados 7.
En cuanto a la experiencia laboral y la antigüedad en el empleo, los datos muestran que
cuanto más prolongado es el tiempo que se lleva en el mercado de trabajo y en el puesto de
trabajo más elevado es el salario. Lo que resulta interesante es la evolución salarial de las
distintas categorías entre 2005 y 2010: mientras que en el caso de la antigüedad los incre­
mentos del salario real se han concentrado en las categorías correspondientes a las duracio­
nes más cortas, en el caso de la experiencia laboral se han producido en las categorías de
duraciones más prolongadas. Como consecuencia de ello, las diferencias salariales entre
grupos se han reducido en el primer caso y se han ensanchado en el segundo caso.
Diferencias salariales, características del puestro de trabajo y cualificación: un análisis para el período 2005-2010
3.
203
Resultados empíricos
En esta sección se estima una ecuación de salarios extendida (Mincer, 1974) en la que
la variable dependiente es el logaritmo natural del salario diario y las variables independien­
tes incluyen características del trabajador, del puesto de trabajo y del empleador. Las varia­
bles explicativas consideradas son las siguientes: el género, la nacionalidad (según país de
nacimiento), la experiencia laboral, la antigüedad en el empleo, la categoría profesional, el
tipo de contrato, la jornada laboral, la rama de actividad, el tamaño de la empresa y el tipo
de empresa. El modelo se estima por MCO y por RC (véase Koenker y Basset, 1978). Los
parámetros estimados utilizando el segundo método de estimación permiten apreciar el efec­
to de cada variable sobre los salarios en varios puntos de la distribución y no solo en la
media. En este sentido, la combinación de las estimaciones por MCO y por RC permite va­
lorar el impacto de un conjunto de atributos personales, del puesto y del lugar de trabajo
sobre la desigualdad salarial inter- e intra-grupos (Buchinsky, 1994; Budría y Pereira, 2011):
mientras que los estimadores por MCO miden el diferencial salarial entre grupos (condicio­
nado en las características observadas), las diferencias de los coeficientes cuantílicos repre­
sentan el diferencial salarial interno inducido por cada atributo entre individuos que están en
el mismo grupo pero situados en cuantiles diferentes.
Los resultados completos de las estimaciones para el período 2005-2010 no se ofrecen
en el artículo por cuestiones de espacio (pueden solicitarse a los autores). Para facilitar la
interpretación de los resultados referidos a las variables que tienen que ver con el nivel de
cualificación de los trabajadores y el capital humano, éstos de presentan en forma gráfica en
los siguientes apartados (la categoría de referencia es una persona con una antigüedad en el
empleo inferior a 6 meses, con menos de 4 años de experiencia laboral y en una ocupación
manual de baja cualificación).
3.1.
Diferencias salariales y dispersión
Los gráficos 1, 2 y 3 muestran los efectos de cada categoría de dichas variables sobre
el salario diario, tanto en la media (MCO) como en cada una de las decilas (RC), una vez
que se han controlado adecuadamente las características del trabajador, del puesto y de la
empresa. Los efectos mostrados se refieren a la estimación con los datos conjuntos del pe­
ríodo 2005-2010.
El capital humano medido como los años de experiencia laboral y los años de antigüe­
dad en el empleo se encuentran asociados con mayores ingresos laborales. Se observa que
los trabajadores con mayor antigüedad en el empleo (6 años o más) y experiencia laboral
(más de 10 años) presentan salarios más elevados (un 23% y un 18%, respectivamente, en
promedio) que los trabajadores con menor antigüedad en el empleo (menos de 6 meses) y
experiencia laboral (3 años o menos) que tienen características observadas similares.
Sin embargo, el perfil de las diferencias salariales según antigüedad difiere entre los
grupos de trabajadores: las diferencias salariales disminuyen a lo largo de la distribución
condicionada para los trabajadores que llevan menos tiempo en el empleo (entre 6 meses y
204
José María Arranz y Carlos García-Serrano
Gráfico 1
Efecto medio y perfil del efecto por decilas según grupos de trabajadores definidos
por su experiencia laboral. España (MCVL, 2005-2010)
20
18
16
14
%
12
10
8
6
4
2
0
10%
20%
30%
40%
50%
60%
Decilas
4-10 años
70%
80%
90%
MCO
>10 años
Gráfico 2
Efecto medio y perfil del efecto por decilas según grupos de trabajadores definidos por su
antigüedad en el empleo. España (MCVL, 2005-2010)
25
20
%
15
10
5
0
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
80%
90%
Decilas
>=6 meses y <1 año
>=3 años y <6 años
>=1 años y <3 años
>=6 años
MCO
Diferencias salariales, características del puestro de trabajo y cualificación: un análisis para el período 2005-2010
205
Gráfico 3
Efecto medio y perfil del efecto por decilas según grupos de trabajadores definidos por su
categoría profesional. España (MCVL, 2005-2010)
200
180
160
140
%
120
100
80
60
40
20
0
10%
20%
NMCA
30%
40%
NMCM
50%
60%
Decilas
NMCB
70%
MCA
80%
90%
MCO
MCM
un año) y aumentan para aquellos que llevan más tiempo (6 años o más). Esto implica que
la antigüedad en el empleo es más valorada en los puestos de mayor remuneración salarial,
lo que hace que la dispersión salarial intra-grupos sea más elevada para los trabajadores con
antigüedades más prolongadas y la distribución salarial menos comprimida entre grupos de
antigüedad en la parte alta que en la parte baja o media de la distribución.
En cuanto a la experiencia laboral, los patrones de las diferencias salariales son distin­
tos a los de las categorías de antigüedad, ya que es claramente decreciente para el grupo de
4-10 años y con ligera forma de U para el grupo de más de 10 años, lo que hace que la dis­
persión salarial interna sea más reducida para los trabajadores con más experiencia laboral.
Por lo que respecta al nivel de cualificación aproximado por la categoría laboral del
trabajador, el gráfico 3 muestra que los trabajadores en ocupaciones no manuales obtienen
ingresos salariales más elevados en promedio que los trabajadores en ocupaciones manuales
y dentro de estos dos colectivos los que tienen menor cualificación reciben salarios más
bajos que los más cualificados. En particular, los trabajadores no manuales de cualificación
alta y media ganan, en promedio, más de un 120% y un 60%, respectivamente, de lo que
ganan los trabajadores manuales de cualificación baja, manteniéndose el resto de los atribu­
tos observados constantes. Este diferencial salarial es menor en la parte baja de la distribu­
ción y mayor en la parte alta en todos los niveles de cualificación correspondientes a los
trabajadores no manuales pero no es así en las ocupaciones manuales, lo que hace que el
perfil de la distribución sea claramente creciente en el primer caso mientras que presenta una
forma de U (que no se aprecia bien en el gráfico) en el segundo caso. Como consecuencia,
206
José María Arranz y Carlos García-Serrano
la dispersión intra-grupos es más elevada para los trabajadores no manuales que para los
trabajadores manuales.
Puesto que la variable de categoría profesional contiene elementos relacionados con la
educación, estos resultados pueden ponerse en relación con aquellos de la literatura sobre
nivel educativo y desigualdad salarial. En primer lugar, la educación genera importantes di­
ferencias salariales entre grupos: las diferencias que nosotros encontramos entre los trabaja­
dores que ocupan puestos no manuales cualificados altos y medios, por un lado, y entre los
trabajadores que ocupan puestos no manuales cualificados altos y manuales cualificados ba­
jos, por otro lado, se asemejan al tamaño de los diferenciales salariales entre individuos con
educación superior y con educación secundaria post-obligatoria, por un lado, y entre indivi­
duos con educación superior y con estudios primarios o menos, por otro lado, que se han
encontrado para España en períodos anteriores (Hidalgo, 2010; Carrasco et al., 2011) y para
diversos países europeos —Alemania, Francia, Portugal e Italia— (Budría y Pereira, 2011).
En segundo lugar, en el caso del nivel educativo superior, la educación tiene un impacto po­
sitivo sobre la dispersión intra-grupos, puesto que los rendimientos son más elevados en los
segmentos más altos de la distribución; por tanto, la educación impacta positivamente sobre
la dispersión salarial (Machado y Mata, 2001; Budría y Pereira, 2011). Esto es lo que encon­
tramos sobre todo cuando comparamos la dispersión de los trabajadores en empleos no ma­
nuales muy cualificados (que en su mayor parte requieren educación superior).
3.2.
Evolución de la desigualdad salarial
Los gráficos 4, 5 y 6 representan los efectos de cada categoría de las variables relacio­
nadas con la cualificación y el capital humano de los individuos sobre el salario diario en
2005 y en 2010, lo que permite la comparación de los impactos de ambos años.
Como se ha señalado antes, la experiencia laboral más prolongada se encuentra asocia­
da con mayores salarios y este hecho no ha cambiado mucho entre 2005 y 2010. En prome­
dio, las diferencias salariales vinculadas a la experiencia laboral apenas se alteraron, aumen­
tando solo marginalmente la desigualdad entre grupos. Lo que sí se detecta, sin embargo,
son cambios a lo largo de la distribución. Mientras que entre los trabajadores con más expe­
riencia laboral (más de 10 años) lo que sucede es que las diferencias salariales aumentan en
las decilas superiores de la distribución a partir de la mediana, entre los trabajadores con
experiencia intermedia (4-10 años) dichas diferencias disminuyen en la mitad inferior. Como
resultado, la dispersión intra-grupos aumentó para todos los grupos de trabajadores clasifi­
cados de acuerdo con su experiencia laboral. Este resultado contracíciclo y asimétrico coin­
cide con el de Hidalgo (2010) para un período más amplio.
En el caso de la antigüedad en el empleo, los resultados son casi los opuestos. Primero,
las diferencias salariales asociadas a la antigüedad han sido menores en 2010 que en 2005:
el diferencial medio aumentó para los trabajadores con menores antigüedades en el empleo
(menos de un año) y disminuyó para el resto. Pero es que además las diferencias salariales
se han reducido sustancialmente en la parte alta de la distribución para casi todas las catego­
rías de antigüedad. Esto implica que se ha producido una caída significativa del rendimiento
de la antigüedad en las decilas superiores, disminuyendo la dispersión intra-grupos.
207
Diferencias salariales, características del puestro de trabajo y cualificación: un análisis para el período 2005-2010
Gráfico 4
Evolución del efecto medio y del perfil del efecto por decilas según grupos de trabajadores definidos por su experiencia laboral. España (MCVL, 2005 y 2010)
25
20
%
15
10
5
0
10%
20%
30%
4-10 años_(2005)
40%
50%
60%
Decilas
>10 años_(2005)
70%
80%
90%
4-10 años_(2010)
MCO
>10 años_(2010)
Gráfico 5
Evolución del efecto medio y del perfil del efecto por decilas según grupos de trabajadores definidos por su antigüedad en el empleo. España (MCVL, 2005 y 2010)
30
25
%
20
15
10
5
0
10%
20%
30%
>=6 meses y <1 año_(2005)
>=6 años_(2005)
>=3 años y <6 años_(2010)
40%
50%
60%
Decilas
70%
>=1 año y <3 años_(2005)
>=6 meses y <1 año_(2010)
>=6 años_(2010)
80%
90%
MCO
>=3 años y <6 años_(2005)
>=1 año y <3 años_(2010)
208
José María Arranz y Carlos García-Serrano
Gráfico 6
Evolución del efecto medio y del perfil del efecto por decilas según grupos de trabajadores definidos por su categoría profesional. España (MCVL, 2005 y 2010)
a) Trabajadores no manuales de cualificación alta (NMCA), no manuales de cualificación media
(NMCM) y no manuales de cualificación baja (NMCB)
200
180
160
140
%
120
100
80
60
40
20
0
10%
20%
30%
40%
NMCA_2005
NMCA_2010
50%
60%
Decilas
70%
80%
90%
MCO
NMCB_2005
NMCB_2010
NMCM_2005
NMCM_2010
b) Trabajadores manuales de cualificación alta (MCA) y manuales de cualificación media (MCM)
20
18
16
14
%
12
10
8
6
4
2
0
10%
20%
30%
MCA_2005
40%
50%
MCM_2005
60%
Decilas
70%
MCA_2010
80%
90%
MCM_2010
MCO
Diferencias salariales, características del puestro de trabajo y cualificación: un análisis para el período 2005-2010
209
En cuanto a las diferencias salariales medias por grupo de cualificación/educación,
éstas han permanecido prácticamente estables para todas las categorías, si bien en el caso de
los trabajadores no manuales de cualificación media el diferencial con respecto a la catego­
ría de referencia ha disminuido —aumentando, por tanto, con respecto al grupo no manual
más cualificado— y en el caso de los trabajadores manuales de cualificación alta el diferen­
cial con respecto a la categoría de referencia ha aumentando —disminuyendo, por tanto, con
respecto al grupo no manual más cualificado—. Sin embargo, el impacto de la cualificación
sobre la distribución salarial no ha sido uniforme en el período de estudio, en particular para
los trabajadores en ocupaciones manuales: mientras las diferencias salariales se han reduci­
do en la parte baja de la distribución en comparación con los trabajadores en ocupaciones no
manuales muy cualificadas, dichas diferencias han crecido en la parte alta de la distribución.
Estos patrones de cambio han dado lugar a una reducción significativa de la dispersión intra­
grupos de aquéllos, a la vez que ha aumentado en el caso de éstos.
Estos resultados podrían interpretarse como si los rendimientos marginales de tener
educación superior hubieran aumentado para los segmentos más altos de la distribución, lo
que coincidiría con los resultados de Hidalgo (2010), que señala que los rendimientos de la
educación parecen mostrar un comportamiento contracíclico, sobre todo en la parte alta de
la distribución salarial. Machado y Mata (2001) para Portugal y Martins y Pereira (2004)
para 16 países de la OCDE encuentran que la educación y las cualificaciones generan un
impacto positivo en la dispersión intra-grupos, mientras que Budría y Pereira (2011) docu­
mentan un incremento de la dispersión de las ganancias entre los trabajadores con educación
superior para varios países europeos (Alemania, Grecia, Francia, Noruega e Italia) durante
la década de los 1990.
4.
Conclusiones
El objetivo de esta investigación ha sido analizar la evolución de los diferenciales sala­
riales asociados al capital humano en España en el período 2005-2010. Para ello, se han uti­
lizado los datos fiscales de la Muestra Continua de Vidas Laborales y se han estimado mode­
los por Mínimos Cuadrados Ordinarios y por Regresiones Cuantílicas, lo que ha permitido
explorar la distribución de las rentas del trabajo de los individuos, medir las diferencias sala­
riales para un conjunto de variables y examinar la evolución del efecto de los regresores
tanto en la media como en diferentes puntos de la distribución salarial a lo largo del tiempo.
Los resultados indican que existen grandes diferencias salariales según grupos de cua­
lificación definidos de acuerdo con la ocupación, la experiencia laboral o la antigüedad y
que estas diferencias no se han mantenido constantes en un período en el que la economía
española ha pasado de experimentar un crecimiento elevado y sostenido a sufrir una rece­
sión muy intensa. Por un lado, la dispersión salarial agregada ha aumentado durante la etapa
recesiva, sobre todo en la parte baja de la distribución. Por otro lado, las diferencias salaria­
les vinculadas a la experiencia laboral aumentaron solo marginalmente la desigualdad entre
grupos, mientras que las asociadas a la antigüedad disminuyeron. A su vez, la dispersión
intra-grupos aumentó (disminuyó) para todos los grupos de trabajadores clasificados de
210
José María Arranz y Carlos García-Serrano
acuerdo con su experiencia laboral (antigüedad), de modo se ha producido una subida (una
caída) significativa del rendimiento de la antigüedad en las decilas superiores.
Finalmente, puesto que la variable de categoría profesional contiene elementos relacio­
nados con la educación poseída por el individuo y las cualificaciones requeridas por el pues­
to de trabajo, los resultados pueden relacionarse con los relativos a la literatura sobre cuali­
ficaciones educacionales y desigualdad salarial. Lo que se ha encontrado es que la educación
y las cualificaciones generan importantes diferencias salariales entre grupos así como un
impacto positivo en la dispersión intra-grupos, puesto que los rendimientos son más eleva­
dos en los segmentos altos de la distribución. Además, los rendimientos marginales de tener
más estudios o más cualificaciones han aumentado para las decilas más altas como conse­
cuencia del impacto de la crisis económica y del empleo.
Notas
1. Para los países de la OCDE, puede consultarse Atkinson (2008), Lemieux (2008) y Autor et al. (2008). En el
caso de España, véase, por ejemplo, Abadie (1997) con datos de los ochenta, Jimeno et al. (2001) y Palacio y
Simón (2004) con datos de mediados de los noventa, Izquierdo y Lacuesta (2006) y Simón (2009) con datos
de 1995 y 2002, Carrasco et al. (2011) con datos de 1995, 2002 y 2006 e Hidalgo (2010) con datos desde 1980
hasta 2000 (aunque referidos sólo a varones que son persona principal del hogar).
2. Como indica la documentación de la MCVL, la información del nivel educativo no se considera suficiente­
mente fiable. El origen de la misma procede de un formulario que rellena el interesado al empadronarse ini­
cialmente en un municipio o al revisar el Padrón. El individuo no está obligado a rellenar la información del
nivel educativo en el Padrón y su actualización depende de que él mismo la comunique.
3. Las características básicas de la muestra pueden consultarse en la página de la Seguridad Social: http://www.
seg-social.es/Internet_1/Estadistica/Est/Muestra_Continua_de_Vidas_Laborales/index.htm. Además, los ar­
tículos de Durán y Sevilla (2006), Argimón y González (2006), Durán (2007) y García Segovia y Durán (2008)
ofrecen una buena introducción a las características y el uso de la muestra. Un trabajo más específico referido
a la utilización de la muestra para el análisis de transiciones laborales es el de García-Pérez (2008). Lapuerta
(2010) y Arranz et al. (2012) son trabajos en los que se exponen con claridad las dificultades prácticas en el
manejo de los datos y los problemas que surgen para organizarlos adecuadamente, mientras que Arranz y
García-Serrano (2011) proporcionan un análisis exhaustivo de la información del módulo fiscal así como al­
gunas aplicaciones.
4. Como se ha dicho antes, la información del nivel educativo no debe utilizarse porque no se encuentra actuali­
zada para todos los individuos.
5. En la MCVL hay otros ficheros de prestaciones (pensiones) y bases de cotización que no se utilizan en el
presente trabajo.
6. La variable «categoría profesional» está creada a partir del «grupo de cotización» de la Seguridad Social agru­
pado en seis categorías: a) ocupación no manual de cualificación alta (ingenieros, licenciados, alta dirección,
ingenieros técnicos, ayudantes titulados); b) ocupación no manual de cualificación media (jefes administrati­
vos y de taller, ayudantes no titulados, oficiales administrativos); c) ocupación no manual de cualificación baja
(subalternos y auxiliares administrativos); d) ocupación manual de cualificación alta (oficiales de 1.ª y 2.ª); e)
ocupación manual de cualificación media (oficiales de 3.ª y especialistas); y f) ocupación manual de cualifica­
ción baja (peones y asimilados).
7. Los diferenciales salariales se calculan como (categoría laboral-MCB)/MCB.
Diferencias salariales, características del puestro de trabajo y cualificación: un análisis para el período 2005-2010
211
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