www.buscadlabelleza.org Lo que no conviene olvidar el 20-N “La gran fiesta de los demócratas; La cita de la democracia; Una fecha para ejercer nuestros derechos...” Tópicos y frases hechas que abundan en los días previos a la convocatoria electoral, en la que los candidatos de todos los partidos se afanan por convencer a los ciudadanos de que participen en el referéndum, pero votándoles a ellos, claro. Sin embargo, en las elecciones del próximo 20-N tú y yo podemos hacer algo más que calibrar el bien mayor o el mal menor, introduciendo nuestro voto en la urna. En septiembre de 2010, el secretario general del partido socialista de Madrid, don Tomás Gómez, criticaba que el Gobierno presidido por doña Esperanza Aguirre había hecho gala “de posiciones muy extremas en lo educativo”, al favorecer la creación de colegios “del Opus Dei, Comunión y Liberación, y Legionarios de Cristo”, y avisaba de que “eso se iba a modificar” si ellos llegan a gobernar. No podemos por tanto, perder de vista antes de introducir nuestra papeleta en la urna, aspectos esenciales como el de la calidad del sistema educativo español, deteriorada progresivamente desde la implantación en 1990 de la Logse, y tan alejada en la actualidad, de los países de nuestro entorno. O la de garantizar que la enseñanza no sea un medio de adoctrinamiento ideológico ni moral de los alumnos. Y aunque ciertos líderes se afanen por pregonar su supuesta cercanía al ciudadano, los políticos no siempre se hacen eco de los problemas de la gente (salvo durante la campaña electoral). Así, a pesar de que la familia se ha revelado como un colchón fundamental para paliar los efectos de la crisis, los partidos apenas crean cultura de la familia, y la mayoría de los candidatos hablan más de paro y de mercados que de economía doméstica. Y los apoyos a las familias numerosas, o las medidas de conciliación familiar y laboral, son prácticamente inexistentes. Urge por tanto, que el partido que gobierne reconozca, sin doblez, el papel que la familia fundada en el matrimonio (entendido como la unión entre un hombre y una mujer) desempeña en la sociedad. Y eso por no hablar de asuntos fundamentales como el del respeto y protección del derecho a la vida, sobre el que tenemos reciente recuerdo por la tristemente famosa “Ley Aido” y los graves daños ocasionados a este derecho a cuenta de ampliar la ya gravosa ley del aborto de 1985. Recientemente hemos podido escuchar a don Mariano Rajoy, pronunciarse por primera vez en un mitin sobre el aborto. Ha sido en Pamplona, donde ha dicho que se compromete "con las víctimas del terrorismo y con la vida, la libertad y los derechos humanos. Todo eso no es negociable y no nos los puede quitar ni un Estado, ni un gobernante del partido que sea, ni una organización terrorista". Por ello no todo está perdido, hay posibilidades de derogar la vigente Ley del aborto, garantizando una información clara a la mujer sobre el desarrollo embrionario y fetal, e impulsar programas de ayuda a la mujer embarazada y a la maternidad. Sin dejarnos otros aspectos no menos importantes, como la prohibición de investigar con www.buscadlabelleza.org embriones o con células madre; o la garantía del derecho a la vida hasta una muerte natural. Otros asuntos no menos importantes, como la garantía de una libertad religiosa y de conciencia, la presencia pública de símbolos religiosos, y la protección de nuestras fiestas religiosas, también deben estar presentes en nuestra mente mientras tomamos partido por una u otra idea política. No obstante lo anterior, debemos de tener claro que nuestra participación ante unas elecciones no se agota en el análisis crítico de los programas electorales, o en el hecho de introducir la papeleta en la urna. Sobre todo y como se ha dicho, porque hay cuestiones de vital importancia que no se mencionan en los debates televisados, ni en las promesas de futuro. Algunas medidas que podemos adoptar para conocer qué piensan sobre temas cruciales quienes aspiran a representarnos, bien podrían ser las siguientes: - Analizar qué promesas hizo quien nos gobierna, para ver qué ha cumplido y qué no; y qué posibles alternativas ofrece la oposición. La honradez y la fidelidad a la palabra dada son un buen punto de partida. - Como partidos y políticos en visperas de elecciones, se muestran mucho más cercanos a los ciudadanos, es posible escribir un e-mail para preguntar qué piensan hacer los candidatos para defender la familia, cuándo creen que empieza la vida, qué modelo educativo quieren desarrollar... Y presionar e insistir hasta obtener una respuesta concreta. - Hay palabras clave que obligan a definirse hasta al político más escurridizo: aborto, “Educación para la ciudadanía”, eutanasia, “matrimonio gay”, Educación sexual, colegios concertados, Dios, ¿Estado aconfesional, o Estado laico?, ¿búsqueda del bien común, o del interés general?, etc. - Desde luego si coincidiéramos con un candidato en un acto público, entre periodistas, no habría mejor ocasión para preguntarle sobre un tema relevante, intentando buscar un compromiso en su respuesta. - El hecho de pertenecer a una asociación (vecinal, de padres de alumnos, cultural, Ong,...), podría facilitarnos el acceso de propuestas a los candidatos, así como la reclamación de una posible respuesta; ésta podría hacerse pública a través de la misma asociación o incluso a través de un medio de comunicación (cartas al director de un periódico, Internet, etc.) Es cierto que nos encontramos en un momento delicado en la Unión Europea, desde el punto de vista económico, que la lacra del paro causa estragos en la sociedad y entre las familias, y que cada unos de nosotros podría añadir decenas de cuestiones sobre, multitud de asuntos importantes como sanidad, desempleo, inmigración... Pero estoy convencido de que lo más importante es exigir que nuestros candidatos respondan y se comprometan. Así podremos votar al bien mayor, y no sólo al mal menor. Porque lo que está en juego el 20-N es mucho más que meter un voto en la urna. Finalmente os dejo un link, en el que se recopila, la respuesta de los principales partidos políticos a las preguntas fundamentales que se ha ido planteando a lo largo de este artículo, en base a los programas electorales así como a las propias respuestas de los candidatos. Guia_de_voto [email protected]